Descargar

El fracaso de una economía de "algoritmos" (página 4)

Enviado por Ricardo Lomoro


Partes: 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8, 9, 10, 11, 12, 13, 14, 15, 16, 17

"Como tras una larga batalla, Europa empieza a hacer balance del daño causado por la Gran Recesión a partir de 2008. Y entre las víctimas destacan, junto a los millones de puestos de trabajo destruidos, los parados que tardan en volver al mercado laboral y que, en los casos más dramáticos, tal vez nunca lo consigan…

El problema castiga a una buena parte del continente. De los 21 millones de parados que hay en Europa, la mitad lleva ya más de un año sin empleo, según los datos de la CE. Y de ellos, más de siete millones de personas llevan más de 24 meses sin encontrar trabajo. Unos parados de por vida que pueden convertirse en una de las herencias más dolorosas y difíciles de gestionar que dejará la crisis actual.

"El paro de larga duración se ha convertido en el principal legado dejado por la crisis en el mercado laboral", concluye un informe publicado el pasado viernes por la Fundación Bertelsmann. Y señala que ese tipo de paro ya es el dominante en España, Italia, Bélgica, Grecia, Portugal, Eslovaquia, Eslovenia y Letonia, dentro de la zona euro, además de Croacia y Bulgaria en el conjunto de la Unión Europea.

En todos esos países, el paro de larga duración supone más del 50% del total (en España, el 52,8%). En Grecia, el país que se ha convertido en el símbolo de todos los males de la zona euro, llega al 73% del total de los parados, según recoge el documento de la fundación alemana"… El paro eterno castiga a Europa (Cinco Días – 13/6/16)

– La corta lista de los trabajos que pagan bien en EEUU (The Wall Street Journal – 2/8/16) Lectura recomendada

(Por Jeffrey Sparshott) 

Durante la última década, sólo una pequeña fracción de los estadounidenses en edad productiva ha conseguido empleos que ofrecen buenos salarios y aumentos salariales significativos.

Esta es la conclusión de un nuevo estudio realizado por el sitio de búsqueda de empleo Indeed, que revela un amplio descontento económico entre muchos estadounidenses. La investigación encontró que sólo 15% de la población en edad de trabajar tiene un empleo que ofrece un alza salarial que haya al menos igualado el récord promedio de los ingresos familiares y que no haya retrocedido respecto de la inflación durante la última década.

"Hay un pequeño grupo de personas [que] tiene buenos salarios y aumentos salariales, mientras que la gran mayoría de nuestro mercado laboral está luchando por lo menos en uno de esos dos frentes", dijo Tara Sinclair, economista jefe de Indeed.

(La compañía utilizó datos de la Oficina de Estadísticas Laborales del Departamento de Trabajo de EEUU y los listados de trabajo de su sitio. El estudio se centró en las ocupaciones con un salario medio anual de al menos US$ 57.700, el ingreso familiar promedio ajustado por inflación del año 2000, muy cercano al máximo de 1999. Si bien el informe concluye formalmente con los datos de 2014, Indeed indicó que las tendencias se mantuvieron en 2015.)

No hay que perder de vista que el mercado laboral ha estado agregando constantemente puestos de trabajo durante años y los salarios empiezan a mostrar signos de aceleración. Algunos economistas prevén que el crecimiento salarial repunte en los próximos meses.

edu.red

No obstante, en todo el mercado laboral también hay evidencia de una brecha cada vez mayor entre los trabajadores con al menos un título universitario de cuatro años y los que tienen menos estudios. La desaparición de muchos puestos poco calificados pero de buenos sueldos parece estar agravando la situación de muchos estadounidenses, especialmente hombres de edad intermedia, y llevándolos a abandonar la fuerza laboral.

"Observamos un crecimiento de las ofertas de empleo en general y de los salarios en general", manifestó Sinclair. "Pero estamos viendo el mayor crecimiento en términos de salarios y remuneración, en general, en un selecto grupo muy pequeño de personas".

Indeed analizó 800 ocupaciones y halló que apenas 170 cumplen con los criterios de la investigación: ser un "empleo de oportunidad" con un salario anual de al menos US$ 57.700 y ofrecer aumentos de salarios que coincidan con la inflación por más de una década. Sólo 15% de la fuerza laboral tenía este tipo de posiciones.

– Eurostat: los datos del paro en los países de la Zona Euro (El Español5/9/16)

edu.red

1. Uno de cada cuatro parados de la eurozona es español. Rajoy ha repetido en numerosas ocasiones este año que uno de cada cuatro nuevos puestos de trabajo se crea en España, sin embargo, omite un dato muy preocupante: en el país vive uno de cada cuatro parados que hay en la Zona Euro. En julio todavía quedaban casi 4,5 millones de personas desempleadas según los datos publicados el miércoles por Eurostat, mientras que en el resto de países de la eurozona ya son menos de 12 millones (como aparece en el gráfico que encabeza la noticia). El siguiente país tras España en número de parados es Francia, que tiene casi 1,5 millones de desempleados menos.

La tasa de paro en España, esto es, el porcentaje de población que está desempleada sobre el total de personas que quieren trabajar (población activa) es la segunda más elevada de toda la zona euro. Solo en Grecia hay más proporción de la población sin trabajo. En concreto, la tasa de paro en España se situó en julio en el 19,6%, casi el doble que el resto de la eurozona, que ya está en el 10,1%.

edu.red

2. El problema del subempleo. Este concepto es muy importante para el mercado laboral que significa todos los trabajos a tiempo parcial que están ocupados por personas que les gustaría trabajar más horas. Este indicador es un buen reflejo de la calidad del trabajo en un país, ya que, si muchos empleados se tienen que conformar con trabajar menos horas de las que les gustaría significa que no encuentran un trabajo mejor a tiempo completo.

edu.red

En España hay un 8,1% de los trabajadores que querrían trabajar más horas, pero que tienen que conformarse con un submepleo, el segundo peor país de toda la eurozona. Solo Chipre está en una situación peor, con una tasa del 9,4%. En el conjunto de la región, el subempleo está en el 5%.

3. El triple de temporales que en Grecia. El problema del desempleo se manifiesta de muchas maneras y una es la baja calidad del empleo. Si a esto se une la elevada estacionalidad de algunos de los motores económicos del país (el turismo es el mejor ejemplo), la consecuencia es una: España bate todos los récords europeos de temporalidad. El 20,9% de los trabajadores tienen un contrato temporal, esto es, uno de cada cinco.

edu.red

Esta situación es impensable en la mayoría de los países de la eurozona. La media de la región de contratos temporales está en el 12,8% y en muchos países está por debajo del 10%. El porcentaje de temporales en Italia está en el 9,7%; en Grecia, en el 7,1%; o en Irlanda, en el 6,6%.

4. Parado joven, parado español. En la eurozona hay casi 3 millones de jóvenes menores de 25 años que están en el paro, según los datos de Eurostat. De todos ellos, casi un 22% son españoles. Este ha sido uno de los grandes problemas del país durante años, ya que antes del estallido de la crisis España también tenía en torno a un 20% de los parados jóvenes. En el año 2011 España llegó a tener casi un 29% de todos los desempleados menores de 25 años de toda la eurozona.

edu.red

La consecuencia es que la tasa de paro juvenil en España sigue siendo de más del doble de la europea. En concreto, de todas las personas con menos de 25 años que quieren trabajar, solo un 57% pueden hacerlo, mientras que en el resto de la eurozona, tienen trabajo el 80%.

5. Trabajo de baja cualificación. El mercado laboral español tiene que lidiar con los pobres niveles de formación que tiene el país, fruto de los problemas educativos que arrastra durante años. La consecuencia de la baja formación es la poca productividad y la dificultad para adaptarse a un mercado laboral cambiante que demanda nuevos perfiles. España es uno de los países europeos con más porcentaje de trabajadores que no tienen ni la educación secundaria con un 33% de los empleados sin formación.

edu.red

Sólo hay dos países en una situación peor: Malta, con un 41% de sus trabajadores en el nivel educativo más bajo y Portugal, con un 46,3%. La media de la eurozona de empleados que no tienen la secundaria es del 19,3%, casi 15 puntos menos de España.

6. ¿Cómo se pagarán las pensiones? De todas las personas en edad de trabajar (tomando como referencia entre 20 y 64 años), en España tienen un empleo un 62,8%. Este es un grave problema para el país y un agujero en la Seguridad Social, ya que quedan muy pocos cotizantes sobre el total de la población.

edu.red

En la eurozona tienen trabajo un 69,2% de las personas en esta franja de edad y en algunos países la tasa es superior. Por ejemplo, en Alemania trabajan un 78,2% de las personas en edad de trabajar.

7. Los beneficios de la migración. El envejecimiento de la población es uno de los mayores problemas de los países desarrollados y una de las soluciones que tiene es la llegada de extranjeros en edad de trabajar y también de concebir hijos. Una gran multitud de estudios han mostrado las ventajas de la inmigración, pero el país de acogida tiene que ser capaz de ofrecer un trabajo a las personas que llegan. Este es el gran problema de España: de todos los extranjeros en edad de trabajar, sólo lo hace el 56,1%, el tercer peor dato de la eurozona, solo superado por Grecia, con un 49,4% de los extranjeros con empleo, e Italia, con el 55,7%.

edu.red

Del resto de extranjeros en edad de trabajar, el 18,2% está en el paro y el 25,7% no están activos (no buscan empleo). Alemania, uno de los países que está recibiendo más presión migratoria, tiene al 73,3% de los extranjeros trabajando y sólo un 3,9% en el paro.

8. El abandono. Todos estos problemas conjuntos de España: la tasa de paro, la baja formación, la inmigración, la baja calidad del empleo… confluyen en el drama social del paro de larga duración. En la eurozona hay 8,3 millones de personas que llevan más de un año desempleados y que anteriormente estaban trabajando. De estos, 2,3 millones son españoles, esto es, casi uno de cada tres parados de larga duración son españoles.

edu.red

edu.red

Fracaso en la distribución de ingresos: incremento de la desigualdad

"La pobreza y la exclusión en España han aumentado "de manera alarmante" en los últimos años, con 13,4 millones de personas en riesgo de exclusión en el año 2014, esto es, el 29,2% de la población española, según concluye el informe Una economía al servicio del 1% hecha pública hoy por Oxfam Intermon.

"La distancia entre ricos y pobres ha crecido y en 2015 el 1% de la población concentró tanta riqueza como el 80% de los más desfavorecidos. La fortuna de sólo veinte personas en España alcanza un total de 115.100 millones de euros", explica el informe.

En este sentido, España es el segundo país de la Unión Europea en el que más ha crecido la distancia entre rentas altas y bajas, sólo por detrás de Estonia, y entre 2007 y 2014 el salario medio español se desplomó un 22,2%.

Además, según los datos de la OCDE, los hogares más desfavorecidos son los que han sufrido una mayor caída de los ingresos durante la crisis, y el salario de los más ricos es 18 veces superior al del 10% más pobres"… España es el país de la OCDE donde más avanzó la desigualdad durante la crisis (Expansión – 18/1/16)

"Apenas 62 personas poseen tanta riqueza como la mitad de la población mundial más pobre (3.600 millones de habitantes), cuando hace cinco años esta cifra ascendía a 388, es decir, el aumento de la desigualdad ha provocado que quienes ahora tienen tanto como medio planeta sean seis veces menos que en 2010. Además, el 1% más rico concentra ya más fortuna que el 99% restante.

Estos datos se recogen en el informe "Una economía al servicio del 1%", realizado por Oxfam (Oxfam Intermon en España) y hecho público este lunes, dos días antes de que comience la reunión anual de líderes en el Foro Económico Mundial de Davos (Suiza).

El informe señala que los ingresos de la mitad de la población mundial se han reducido en un billón de dólares (cerca de 920.000 millones de euros) desde 2010, lo que supone una caída del 41%, mientras que la riqueza de las 62 personas más pudientes del planeta ha aumentado en más de 500.000 millones de dólares (casi 460.000 millones de euros), esto es, un 44% más"… Las 62 personas más ricas tienen tanto como las 3.600 millones más pobres (servimedia.es –18/1/16)

– Viejunocracia (El Confidencial – 4/2/16) Lectura recomendada

Por primera vez en varias generaciones, los jóvenes no vivirán mejor que sus antepasados. Eso contrasta con otra generación que se ha encontrado con un futuro mejor a lo largo de toda su vida

(Por Kike Vázquez)

Soy joven, o eso quiero creer, y por tanto parte interesada de esta historia. Pero este artículo no va sobre mí, ni sobre casos de conocidos, va sobre dar voz a lo que siente una generación que se enfrenta al entorno laboral actual. Un artículo escrito el martes en Project Syndicate ("The Politics of Young and Old") me ha dado la excusa perfecta, pues analiza el choque de generaciones que se está dando a lo largo del mundo, lo que en España llamamos "viejunocracia".

¿Qué es la viejunocracia? Pues básicamente un sistema económico y social que los "no jóvenes" conocerán como gerontocracia, en donde los más ancianos son los que mantienen el control. Dicho así, puede parecer un poco exagerado, pues vivimos en una teórica democracia y en las calles no se percibe que sean los más longevos del lugar los que tengan el poder, en ocasiones todo lo contrario (desgraciadamente). Cierto es, pero no solo hay que ver la teoría, también la práctica.

Comencemos por ejemplo por el sistema de pensiones. ¿Alguien se ha fijado, por ejemplo, cómo en estas elecciones todos los partidos hablaban de subirlas? Da igual el color, todos los partidos las quieren subir y aprovechan la menor debilidad del rival para acusarlo de vaciar "la hucha". ¿Por qué? Porque los mayores de 65 años son el mayor "lobby" político que existe en nuestro país, unos 8,5 millones de personas movilizadas (vota más del 90%) y cuyas preocupaciones son muy concretas: mi pensión, mi pensión, mi pensión.

Una caricaturización de la realidad, sí, pero que en muchos casos es bastante fidedigna de lo que ocurre. Los pensionistas votan en masa y por hechos muy concretos, por contra, los jóvenes presentan una alta abstención y tienen inquietudes muy diversas. Con este panorama, no es extraño que se hagan reformas laborales, que se suban impuestos o que incluso se toque a otro todopoderoso grupo como es el de los funcionarios, con tal de no cabrear a los de más de 65 años. Ellos dan votos; los otros también, pero no tantos.

Por supuesto no estoy negando el derecho a una prestación a quien ha trabajado toda la vida para ello, faltaría más. Lo que ocurre es que mientras a la actual viejunocracia le ha resultado relativamente sencillo cumplir con sus obligaciones gracias al crecimiento económico, al crecimiento poblacional y a la baja esperanza de vida anterior, ahora todo se ha dado la vuelta. Ni crecimiento económico, ni poblacional, una esperanza de vida alta… y como hay muchas pensiones en relación a los cotizantes, más de un 25% de nuestro salario debe ir para pagarles a otros (y aun así no llega), cuando los jóvenes probablemente no tendrán derecho a nada, o casi nada.

Reformar las pensiones no es un acto de corrupción ni de latrocinio, es equilibrar un poco una balanza a punto de romperse. Y ha tenido que venir Europa para que las modificásemos mínimamente, y tendrá que venir la jubilación del "baby boom" para darnos cuenta de que algo no funciona, y no solo por el elevado desempleo. Esperemos que la solución no sea dejar de depender de las cotizaciones para financiar los déficits a través de los impuestos, lo que otorgaría un saco sin fondo a partidos con poca responsabilidad política.

No echo balones fuera. Sé que los jóvenes no somos perfectos y hemos inventado por ejemplo la "generación nini". Pero lejos de ser los más vagos de la historia, somos una generación que o no tiene trabajo (desempleo juvenil récord), o está mal pagada (precariedad récord) o cuyas condiciones laborales se saltan cualquier legalidad (explotación laboral). Si en las últimas décadas se cumplía la relación de esfuerzo-recompensa a quien sacaba una carrera o desempeñaba bien su puesto, independientemente de su formación, ahora nada parece servir, y es recurrente el término "enchufismo".

Sé que muchos de los que leeréis estas líneas estaréis pensando: ¡ganáoslo! Recordaréis cómo empezasteis con una mano delante y otra detrás, cómo os esforzasteis, cómo crecisteis… Y ahora veréis la generación del iPhone y las redes sociales atontada, sin objetivos. ¡En mis tiempos las hipotecas se hacían a doble dígito, y no se la daban a cualquiera! Pero es que no es lo mismo nadar a favor del agua que contracorriente.

España desde los años cincuenta ha vivido un "boom" económico sin precedentes, y cuando los efectos de la economía real se acababan, lo apostamos todo a una burbuja inmobiliaria que explotó. Antes no existían todas las comodidades que existen hoy, ni se vivía tan bien en casa de papi y mami, pero por contra un trabajador era dueño de su propia vida. Si estudiabas, tenías recompensa, si trabajabas, tenías recompensa, ya no. El sueño se ha esfumado como un globo que se pincha.

Si un obrero antes podía mantener una familia y comprar una vivienda, ahora la precariedad ha provocado ya no solo que eso sea racionalmente inviable, también que no puedas hacer planes de futuro, hasta el punto de replantearse un objetivo tan vital como el de formar una familia. O no tienes dinero, o no tienes estabilidad o no tienes tiempo. ¡Y aún nos preguntamos por qué cae la natalidad! Mi enhorabuena a todos los padres de este país, ¡sois unos valientes!

Unos tienen el patrimonio, y los otros o pagan un alquiler que se lleva buena parte de la renta, o se hipotecan para el resto de sus días (algo que no pasaba con las hipotecas de doble dígito). Además de pagar las pensiones, claro. Que no cobrarán, claro. Y si vivimos bien, que en muchos casos es así, es o por un Estado de bienestar ahora en decadencia, o precisamente por recibir parte de la riqueza de nuestras familias (papá, la abuela…), consolidando la desigualdad entre ricos y pobres y mermando la autoestima de una generación que lo que querría es valerse por sí misma y llevar adelante su propio plan vital.

No solo son las pensiones o la situación económica. Comenta el artículo que enlazaba al principio que también hay otros graves problemas que mi generación deberá afrontar. Una es el cambio climático. Gracias por contaminar sin pensar en las consecuencias. Afortunadamente para algunos, los cambios que se están produciendo en el mundo no se notarán en unos cuantos años, por lo que algunas generaciones habrán vivido las ventajas de contaminar sin pagar sus consecuencias. Nuestra generación sí lo pagará.

Gracias también por endeudarnos hasta el límite. Nuevamente, cuando la deuda crece se produce paralelamente crecimiento económico y sensación de prosperidad, pero cuando llega a determinados límites provoca estancamiento. Unos se han beneficiado de ella, otros pagarán las consecuencias. Consecuencias, por otra parte, que no son ni más ni menos que las que ya empezamos a ver, pues la situación laboral de este país tiene mucho que ver con ella, tanto por no usarla correctamente como por su exceso.

Y aunque el artículo enlazado originalmente habla de una situación que se repite a lo largo de numerosos países, ¿cuál es la solución a la que muchos están recurriendo en España? Irse. Porque al menos en algunos países sigue existiendo una relación entre el esfuerzo y la recompensa, y sin tener en cuenta tu apellido. Así, en España, aún habrá menos votos de jóvenes, y más poder tendrá la viejunocracia, y así una y otra vez.

Que me perdone quien se haya sentido ofendido por lo de "viejuno", solo es el término que se emplea en la calle o internet. Que me perdone también todo aquel que no ve reflejados su esfuerzo y las enormes dificultades que ha sorteado a lo largo de su vida para llegar a donde está. En realidad no quiero juzgar a nadie, ni sería posible hacerlo. Solo pretendo con estas líneas dar voz a una generación que por momentos cree que no se la está tratando de una manera ecuánime. Y eso a pesar de vivir en un país con una calidad de vida envidiable, y de ser en muchos casos unos privilegiados. Pero necesitamos sentirnos útiles, necesitamos tener el control de nuestras propias vidas y, en otras palabras, necesitamos una oportunidad que no nos han dado.

"La desigualdad de la renta en los países desarrollados es un debate que sigue ganando peso. El auge de ciertos partidos y determinados políticos que prometen reducir la desigualdad es una clara señal de que las sociedades desarrolladas son sensibles a esta cuestión. Para corregir esta brecha entre los que ingresan mucho y los que ingresan poco o nada, la renta básica parece ganar protagonismo como fórmula para paliar la situación.

Como explica Richard Reeves, miembro del think tank Brookings Institution y alma mater de la Universidad de Warwick, el mercado laboral ha cumplido un buen papel en los últimos 70 años: "Ha logrado emparejar el factor trabajo (trabajadores) y el factor capital (maquinaria, tecnología, etc.) para el buen funcionamiento de la producción. Ha impulsado el bienestar a través de una estructura aprobada socialmente. Y ha distribuido los ingresos a través de los salarios".

Aunque estos pilares se han respetado durante los últimos 70 años, ahora se está produciendo un cambio importante. "Aunque el factor trabajo se sigue emparejando con el factor capital, la distribución de los ingresos ha dejado de funcionar. Los cambios estructurales en la economía, en particular, el cambio tecnológico, están suponiendo menores salarios para los trabajadores menos productivos. Al mismo tiempo, la porción de los salarios está cayendo como parte del PIB". Por este motivo, quizá sea el momento de que se produzca un giro que ayude a compensar esta tendencia.

"Subir el salario mínimo, distribuir de otra forma los beneficios o mejorar la educación son propuestas insuficientes, sería como poner tiritas en un herida abierta y que cada vez se hace más grande", explica este experto en desigualdad económica. Por ello, Reeves cree que el momento para poner en marcha la renta básica puede ser inmejorable"… ¿Es necesaria una renta básica? El debate se extiende a EEUU, Reino Unido y más allá (El Economista – 1/3/16)

"El cambio demográfico representa uno de los mayores retos del siglo XXI, con profundas implicaciones para las economías, los mercados y la estabilidad social y geopolítica, según el Fondo Monetario Internacional (FMI), que advierte de que sin tomar medidas serán insostenibles a largo plazo los sistemas públicos de pensiones y sanidad.

"Sin reformas, los sistemas públicos de pensiones y sanidad no serán sostenibles a largo plazo", declaró la directora gerente de la institución, Christine Lagarde, durante una conferencia en el Massachusetts Institute of Technology (MIT).

"Nuestros nietos podrían tener que hacer frente a una deuda insostenible y fuertes subidas de impuestos que ahogarían el crecimiento y reducirían su bienestar económico", añadió la directora del FMI…

Entre las posibles respuestas, la directora del FMI señala que abordar el reto únicamente con endeudamiento supondría "una explosión de la deuda pública", que pasaría del 100% del PIB de media al 400% a finales de siglo, mientras buscar la solución vía impuestos podría suponer subir el IVA en unos 20 puntos porcentuales o elevar en 25 puntos porcentuales la contribución de la seguridad social.

En cuanto a la opción de llevar a cabo drásticas reformas en el régimen de derechos a estas prestaciones, los cálculos del FMI sugieren que sería necesario un recorte de las pensiones y beneficios sanitarios del orden de una tercera parte"… Pensiones y sanidad públicas serán insostenibles sin reformas, según el FMI (El Economista – 4/3/16)

– BPI achaca a la política monetaria el aumento de las desigualdades de riqueza (El Economista – 6/3/16) Lectura recomendada

El Banco de Pagos Internacionales (BPI) indica que la política monetaria aplicada por los bancos centrales ha contribuido a aumentar las desigualdades de la riqueza de los hogares de todo el mundo desde la crisis financiera.

En un artículo monográfico que aparece en el último boletín trimestral de marzo del BPI, publicado hoy, Dietrich Domanski, Michela Scatigna y Anna Zabai concluyen que "esta desigualdad probablemente ha aumentado en la mayoría de países como reflejo de la rápida recuperación de los precios de las acciones, que beneficia a los estratos más altos".

Asimismo el elevado grado de endeudamiento familiar perjudica a los estratos con menos recursos.

La recuperación de los precios de la vivienda, que habría favorecido a los estratos más bajos, ha sido más lenta.

"La expansión monetaria sin precedentes desde el inicio de la gran crisis financiera ha causado la preocupación de que la política monetaria puede haber contribuido a la desigualdad", según el estudio del BPI, cuya sede está en la ciudad suiza de Basilea.

Algunas medidas de política monetaria no convencionales tienen como objetivo los precios de activos.

La desigualdad de la riqueza ha aumentado en las economías avanzadas desde 1980, señalan los autores del estudio.

"Aunque la desigualdad se sitúa por debajo de los niveles de la segunda mitad del siglo XIX, este incremento marca el final de una tendencia de caída de la desigualdad que duró la mayor parte del siglo XX", consideran.

Asimismo la desigualdad de la riqueza ha aumentado en tándem con la desigualdad de los ingresos y a ello ha contribuido la globalización.

La globalización ha hecho que los trabajadores altamente cualificados se beneficien de las oportunidades globales, mientras que los de baja cualificación se enfrentan a una fuerte competencia de la mano de obra más barata extranjera y una pérdida de poder de negociación.

Además, el rápido crecimiento del sector financiero desde 1980 y cambios en las normas sociales han hecho que aumentaran más rápidamente los salarios más elevados en comparación con los más bajos.

"Las políticas de redistribución fiscal parecen haber reducido el nivel de desigualdad, especialmente, en las economías avanzadas pero no han cambiado tendencias a largo plazo", según los autores.

Asimismo, la desigualdad de los ingresos ha aumentado dentro de los países pero se ha reducido entre países.

En el estudio los autores han analizado datos de hogares de Alemania, España, Francia, Italia, el Reino Unido y EEUU.

Acciones y vivienda

Los precios de las acciones y de la vivienda han sido los principales desencadenantes de la desigualdad.

Desde 2010 las elevadas ganancias en las acciones han sido el principal impulso para un crecimiento más rápido de la riqueza neta en la parte alta de la distribución, según el informe.

"La recuperación de los mercados de la vivienda ha tendido a reducir la desigualdad de la riqueza en la mayoría de los países", según los autores.

El estudio también destaca que "el impacto de los precios de las acciones en la desigualdad parece ser mucho más cíclico y menos persistente que el de los precios de la vivienda, que muestra auges y colapsos de largo plazo".

Los activos de renta fija, como bonos y depósitos, han afectado a la desigualdad en la recesión entre 2009 y 2010 y después, de nuevo, en 2012.

Una excepción notable es Alemania, donde la caída de los tipos de interés sobre los depósitos, que son más de la mitad de los activos de los hogares en los estratos más bajos, ha añadido desigualdad.

El BPI también dice que los datos "no se prestan a una generalización simplista, por lo que habrá que seguir prestando atención a estos temas".

"Debido al creciente desajuste entre las bajas tasas de natalidad y una mayor longevidad, el sistema de pensiones europeo se encuentra frente a un tsunami demográfico.

La población de jubilados de Europa es la mayor del mundo, y sigue creciendo. Hay 42 personas mayores de 65 años que no trabajan por cada 100 trabajadores activos; para 2060, esta proporción se elevará a 65 por 100, según la agencia de datos de la Unión Europea. En comparación, Estados Unidos tiene 24 cesantes de 65 años o más por cada 100 trabajadores, según la Oficina de Estadísticas Laborales, que no tiene una proyección para 2060. La Comisión Económica para América Latina y El Caribe, Cepal, estima que en América Latina la cifra llegó a 11,2 jubilados sin trabajo por cada 100 trabajadores activos en 2015, lo que subiría a 24,4 por 100 para 2050.

Si bien este problema ha estado incubándose durante mucho tiempo, ahora se vuelve más urgente por las cargas de deuda -uno de los productos de la crisis de 2008- que están obligando a los gobiernos a replantearse sus prioridades. Grecia, el país europeo en mayores dificultades, ha tenido que reducir la generosidad de sus pensiones en repetidas ocasiones. Sin embargo, no es el único que está viéndose obligado a reconocer que ha hecho promesas que no puede cumplir.

"Los gobiernos europeos occidentales están cerca de la quiebra a causa de la bomba de tiempo de las pensiones", dice Roy Stockell, director de gestión de activos en Ernst & Young. Stockell agrega que demasiados baby boomers (la generación posterior a la Segunda Guerra Mundial) están llegando a la edad de jubilación con "la expectativa de que el gobierno proveerá""… La crisis de los sistemas de pensiones de Europa cobra más urgencia (The Wall Street Journal – 8/3/16)

edu.red

"Las autoridades de Ontario pondrán a prueba la renta básica universal dentro de su territorio. Según los presupuestos de la provincia más poblada del país, se pondrá en marcha un proyecto piloto para analizar el efecto que tendría dar a todos los ciudadanos una renta mínima por el simple hecho de existir.

Tal y como publica Quartz, las autoridades de la región no han ofrecido apenas datos concretos sobre la medida, simplemente han señalado que "el Gobierno trabajará junto con los investigadores y otros expertos la forma de diseñar este programa".

La idea es implantar una renta básica universal, es decir, que llegaría a todos los residentes legales de la provincia de Ontario. Aunque el Gobierno de la provincia no ha dado detalles exactos, la renta básica universal también incluye a los menores de edad, aunque la renta que perciben estos menores suele ser inferior que la de los adultos en gran parte de los proyectos presentados en otros países"… Ontario (Canadá) probará la renta básica universal dentro de su territorio (El Economista – 8/3/16)

OCDE publicaba su informe anual sobre los impuestos al trabajo, Taxing wages 2016

En este documento, el organismo analiza cuál es el peso de los tributos con respecto al coste laboral. (Libertad Digital – 28/4/16)

edu.red

edu.red

– La eterna promesa de que los salarios van a subir (y la cruda realidad) (El Español – 6/5/16) Lectura recomendada

El BCE reconoce que lleva cuatro años anticipando una inflación salarial que no termina de llegar. El ritmo de avance de los sueldos de la eurozona está en su nivel histórico más bajo.

(Por Javier G. Jorrín)

La subida de los salarios es, casi siempre, una buena noticia para todos los actores económicos (tanto trabajadores como empresas) ya que suele ser causa y consecuencia del buen ritmo de la economía. En la eurozona, los salarios llevan años languideciendo, consecuencia de una economía que no acaba de repuntar y de un mercado laboral que está viviendo una de las mayores transformaciones de toda la historia por los progresos tecnológicos y la globalización. Sin embargo, esto no era lo que esperaban los expertos, ni lo que prometían los políticos. Justo lo contrario.

El PIB ha vuelto a crecer en los últimos años, aunque todavía a tasas muy bajas, y los beneficios empresariales de muchos sectores han subido hasta marcar máximos históricos. Sin embargo, los salarios siguen sin repuntar. Los expertos del Banco Central Europeo (BCE) llevan desde el año 2012 anticipando una aceleración inminente de los sueldos que, pese a todo, se sigue retrasando y nunca llega.

El siguiente gráfico publicado por el BCE en su último informe refleja a la perfección esta situación. Las línea negra muestra cómo el crecimiento de los salarios en la eurozona se ha ido frenando en los últimos años hasta marcar su nivel más bajo desde la creación de la divisa común. Al mismo tiempo que el ritmo de crecimiento de los salarios se frenaba, los expertos del BCE esperaban un rebote inminente, cuyas previsiones se representan con las líneas grises.

edu.red

Actualmente, el BCE prevé que el crecimiento de los salarios se acelere de un día para otro hasta el punto de llegar a 2018 con las retribuciones de los trabajadores aumentando a ritmos superiores al 2% anual. La entidad reconoce que "el crecimiento de los salarios no solo ha sido reducido, sino que las proyecciones también han sobreestimado sistemáticamente su evolución". La esperanza de que los salarios vayan a volver a crecer de forma consistente sigue siendo sólo eso, una esperanza.

¿Qué pasa con los salarios?

El BCE indica que "en el cuarto trimestre de 2015, la tasa de crecimiento interanual de la remuneración por asalariado se situó en el 1,3%, una de las tasas más bajas observadas desde el inicio de la unión monetaria". La negociación colectiva tampoco ha servido para mejorar la evolución de la renta que consiguen los trabajadores. En palabras del BCE, "el avance de los salarios negociados es más vigoroso, pero también registró mínimos históricos en 2015".

¿Por qué los salarios no mejoran a pesar de la recuperación de la economía y del mercado laboral? Para el BCE la respuesta está en el paro. "La persistencia de un alto grado de holgura (exceso de mano de obra) es un factor clave de la caída de la inflación salarial", indica la entidad. El elevado nivel de desempleo significa que hay mucha oferta de trabajo en el mercado y, como ocurre en cualquier mercado, cuando hay exceso de oferta, los precios caen, en este caso, los salarios.

"Aunque el mercado de trabajo de la zona del euro esté mejorando, la alta tasa de paro sigue apuntando a la existencia de una amplia oferta de mano de obra disponible", remarca el BCE. Es importante tener en cuenta que la caída del número de parados en las listas del desempleo no es el único factor relevante para medir la corrección del exceso de oferta de trabajo en el mercado, ya que existe el subempleo. Las personas que están subempleadas son aquellas que trabajan menos horas de las que querrían porque no consiguen un contrato a tiempo completo y aquellos que tienen un trabajo de un rango inferior al que les correspondería por su formación. Estas personas no están en las listas del paro, pero sí buscan activamente otro empleo que esté acorde a lo que quieren, por lo que sí forman parte de la oferta de trabajo.

"Si las tendencias actuales persisten hasta finales de año, los hogares estadounidenses terminarán 2016 debiendo tanto como debían durante el cenit del crédito de 2008.

La deuda global ya ha superado los niveles de 2008 y sigue al alza. Es bastante asombroso que esto ocurra tan poco tiempo después de unas crisis impulsadas por la deuda en Estados Unidos y Europa y en medio de grandes preocupaciones por el exceso de endeudamiento en Japón, China y los mercados emergentes.

Pero a pesar de la ansiedad, la posibilidad de que estalle una crisis de deuda a corto plazo es baja. Tasas de interés más bajas implican pagos mucho más bajos de lo que eran antes de la última crisis. En EEUU, la deuda de los hogares es muy baja cuando se compara con la economía en general. Y en el resto del mundo, los préstamos pueden ser fácilmente refinanciados…

A finales del primer trimestre de este año, los hogares estadounidenses debían US$ 12,25 billones de dólares (millones de millones), 1,1% más de lo que debían a finales de 2015, según el informe trimestral sobre endeudamiento y crédito de los hogares del Banco de la Reserva Federal de Nueva York, publicado el martes pasado. Si el resultado del primer trimestre se repite a lo largo del año, la deuda de los hogares estadounidenses se acercará al récord de US$ 12,68 billones, que alcanzó en el tercer trimestre de 2008. Mucha gente recuerda ese trimestre porque fue cuando el sistema financiero global se cayó al precipicio…

Las bajas tasas de interés han tenido un impacto aún más dramático fuera de EEUU, donde las economías son más débiles o inestables. La deuda global, incluyendo la de hogares, empresas y gobiernos, ha aumentado del 221% del PIB global a finales de 2008 a 242% al final del primer trimestre de este año. Pero el costo del pago de intereses como porcentaje del PIB se ha reducido de un máximo de 11% a 7%, según J.P. Morgan.

Japón es el mejor ejemplo de cómo las tasas de interés bajas pueden cambiar las reglas del juego. El nivel de deuda de Japón (400% del PIB) es, por mucho, el más alto del mundo. Uno de los grandes misterios de las finanzas es por qué los inversionistas siguen prestando dinero al gobierno japonés para obtener rendimientos insignificantes o negativos, cuando parece imposible que ese país pague su deuda"… Billones en deuda, pero poca preocupación… por ahora (The Wall Street Journal – 30/5/16)

edu.red

"En Alemania se vive mejor que en muchos otros estados, puesto que las condiciones de vida en el país son más justas. Alemania se ocupa de los más débiles y le da a todo el mundo una oportunidad. Muchos creen que Alemania es así. Sin embargo, los hechos muestran otra realidad. Alemania es, en muchos aspectos, el país más desigual de Europa. Casi en ningún otro lugar de Europa los salarios, el patrimonio y las oportunidades están tan desigualmente repartidos".

Este es uno de los primeros y provocativos párrafos de "Lucha por la distribución. Por qué Alemania es cada vez más desigual", el último y reciente libro de Marcel Fratzscher, presidente del Instituto para la Investigación Económica (DIW), uno de los centros de análisis económico de referencia de la primera economía europea. En su obra, Fratzscher ofrece un análisis bastante más crítico y pesimista sobre la economía germana que la imagen de la que suele gozar la locomotora económica de la UE fuera de sus fronteras.

Alemania sigue siendo, sin duda, una potencia económica y exportadora, pero las crecientes desigualdades amenazan con acabar con lo que queda de la celebrada economía social de mercado, modelo nacido tras la Segunda Guerra Mundial y corresponsable del conocido como milagro económico germano de posguerra. Según el director del DIW, si Alemania no corrige su rumbo, la ya enorme brecha existente entre la parte más rica de la sociedad alemana y sus clases medias y pobres podría suponer en un futuro no muy lejano serios problemas para el crecimiento y la productividad del país.

Uno de los últimos informes sobre desigualdad de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) acaba con las posibles sospechas de que un marcado posicionamiento ideológico izquierdista se esconde tras la tesis del libro de Fratzscher: según el informe, Alemania se encuentra en efecto en el grupo de estados miembro de la OCDE con una mayor concentración de la riqueza: el 10% más rico de la población posee el 60% del patrimonio privado del país, mientras que el 40% más pobre prácticamente no tiene nada. Cifras que colocan a Alemania más cerca del modelo económico estadounidense que del escandinavo, pese a la situación geográfica del país.

La OCDE viene advirtiendo desde hace tiempo de que la creciente desigualdad está teniendo un caro precio para el mundo industrializado: según los autores del mencionado informe, la desigualdad, en constante aumento desde 1985, ha provocado que 19 países de la OCDE dejasen de crecer casi un 5% entre 1990 y 2010. Como apunta el propio Marcel Fratzscher, al igual que ocurre con un excesivo igualitarismo, una excesiva desigualdad también tiene un impacto negativo en el crecimiento y en la productividad de las economías. Alemania tampoco escapa a esa espiral…

Como apuntan estadísticas recientes de la Oficina Federal de Empleo, oficialmente más de tres millones y medio de personas cuenta con un subempleo, un "minijob" o cualquier otro trabajo de pocas horas a la semana y, por tanto, poco o insuficientemente remunerado. Es lo que economistas alemanes califican de "ocupación atípica"; un eufemismo que parece querer evitar el concepto de "trabajo precario". Fratzscher va incluso más allá y apunta que más de un tercio de todos los trabajos en Alemania son temporales o parciales, de forma que las cifras de ocupación atípica en la locomotora económica europea superan la media de los países industrializados"… El "milagro alemán" pierde fuelle: la desigualdad se dispara en el país (El Confidencial – 30/5/16)

"Según los datos de Eurostat, el salario medio por hora trabajada en la UE de los Veintiocho se estimó en 25,03 euros en 2015, y en 29,50 euros en la zona euro (incluyendo cotizaciones). Sin embargo, este promedio oculta diferencias significativas entre los Estados miembros de la UE, con costes laborales por hora que oscilan entre los 1,4 euros de Lituania (el país con sueldos más bajos) a los 35,6 euros de Dinamarca, el país de la UE que paga más alto a sus trabajadores.

Si se incluyen todos los costes salariales, en particular las cuotas sociales, el país más caro (sin tener en cuenta los avances en productividad) sigue siendo Dinamarca (41,3 euros a la hora), mientras que el más barato es Bulgaria, apenas 4,1 euros por cada 60 minutos de trabajo.

edu.red

Los costes no salariales, en todo caso, siguen siendo muy determinantes en la competitividad de las empresas. La mayor proporción para el conjunto de la economía estaba en Francia en 2015 (un 33,2%), Suecia (32,1%), Italia (27,9%), Bélgica, Lituania (ambos 27,8%) y la República Checa (27,1%). Los porcentajes más bajos de los costes no salariales para toda la economía se registraron en Malta (6,6%), Luxemburgo (13,5%), Irlanda (13,7%), Dinamarca (13,9%) y Croacia (14,9%).

Eurostat, igualmente, recoge información sobre la llamada cuña fiscal, que mide la carga de las contribuciones fiscales y de seguridad social en relación con los costes laborales. La cuña fiscal de la Unión Europea fue del 34,9% en 2014. Las cargas fiscales más elevadas respecto de los salarios más bajos se registraron en Bélgica, Hungría, Alemania, Francia, Austria, Italia, Letonia, Rumania y Suecia (todos por encima del 40%). Por el contrario, las cargas tributarias más reducidas se registraron en Malta, Irlanda y el Reino Unido (por debajo del 30%).

edu.red

Eurostat destina uno de sus apartados a los trabajadores de bajos salarios, una realidad cada vez más frecuente tras la crisis. Las personas de bajos salarios se definen como aquellos empleados que ganan dos tercios o menos de los ingresos brutos por hora media nacional en un país determinado.

Pues bien, según la agencia estadística, en 2010 el 16,9% de los empleados eran trabajadores de salarios bajos en la UE a Veintisiete, mientras que la proporción era del 14,7% en la zona euro. Los Estados miembros con mayores proporciones de trabajadores con salarios bajos fueron Letonia (27,8%) y Lituania (27,2%), mientras que Suecia (2,5%), Finlandia (5,9%), Francia (6,1%), Bélgica (6,4%) y Dinamarca (7,7%) tuvieron los porcentajes más bajos.

Entre 2006 y 2010, la proporción de trabajadores con salarios bajos se incrementó en mayor medida en Malta (3,9 puntos porcentuales) y Bulgaria (3,1 puntos porcentuales), mientras que los mayores descensos se registraron en Portugal (-4,6 puntos), Letonia (-3,1), Grecia (-2,9) y Hungría y Eslovenia (-2,1 puntos).

De acuerdo con el estudio de McKinsey "Education to Employment", en todo el mundo la gente joven tiene tres veces más posibilidades que sus padres de estar en el paro… Los salarios españoles se alejan de Europa: ya son un 39% más bajos (El Confidencial – 7/6/16)

– El "elefante de los ingresos": ganan pobres y ricos y pierde la clase media (El Economista – 29/6/16) Lectura recomendada

(Por Vicente Nieves)

Cada vez son más los políticos de Occidente que culpan a la globalización y al comercio internacional de los problemas internos que sufren sus países. Varios medios y expertos estudian el efecto de la globalización en los ingresos de los ciudadanos, lo que ha devuelto el protagonismo a un documento sobre desigualdad publicado en 2013 por Branko Milanovic, profesor de Economía y experto en desigualdad. En este trabajo muestra en un solo gráfico cómo han variado los ingresos de los ciudadanos desde 1988: los pobres son menos pobres, los ricos son más ricos, mientras que sólo pierde la clase media, que se queda totalmente estancada.

En este paper de mayo de 2013, Milanovic explicaba que "en este periodo se ha producido la primera caída de la desigualdad de ingresos en los ciudadanos del mundo desde la revolución industrial". Aunque dentro de los países desarrollados se ha visto un incremento de la desigualdad de ingresos, si el análisis se hace a nivel mundial, la globalización ha reducido la desigualdad tras "sacar" a cientos de millones de personas de la pobreza

Milanovic ha elaborado un gráfico en el que muestra la evolución de los ingresos reales entre 1988 y 2008 a través de los percentiles globales de renta. Es decir, se analiza cómo han cambiado los ingresos de la población mundial tras dividirla en una serie de cien grupos diferenciados por el puesto que ocupan en la escala de distribución de la renta mundial. De ese modo, se ve cómo ha evolucionado la renta de los percentiles más pobres hasta los más ricos, pasando por la clase media. 

edu.red

Esta representación ha sido denominada como el "gráfico del elefante" porque al unir todos los puntos de los percentiles seleccionados aparece una silueta que se parece a la de este paquidermo. Como explicaba Milanovic en su trabajo se puede ver que "dos grupos se pueden considerar como los grandes ganadores de las últimas dos décadas de globalización: primero los muy ricos, aquellos que se encuentran en la cima de la distribución de la renta global; segundo, la media clases de las economías emergentes, particularmente China, India, Indonesia y Brasil", explica este economista del Banco Mundial

Los más ricos

Milanovic prosigue explicando los resultados del gráfico: "El 1% (percentil 100) más rico ha visto crecer sus ingresos reales en más de un 60% en las dos últimas décadas. No obstante, el mayor incremento se ha registrado entre  los percentiles 50 y 60 de la escala global de la distribución de la renta, sus ingresos reales se han incrementado casi un 80%. En estos percentiles encontramos 200 millones de chinos, 90 millones de indios y unos 30 millones de habitantes que van desde Brasil hasta Indonesia". Las clases medias de los países emergentes y los más ricos del mundo han sido los grandes ganadores de la globalización, sentencia este economista. 

Por otro lado, el tercio más pobre de la población (más o menos entre percentil 10 y 40) también han tenido ganancias considerables, con un incremento de sus ingresos reales que va desde el 40% hasta el 60% más o menos. La única excepción es el 5% más pobre de la población, cuyos ingresos reales han crecido mucho menos que los anteriores grupos. 

Los grandes perdedores

Pero sin duda, "los mayores perdedores, o al menos los no ganadores, de la globalización ha sido los que se encontraban entre el percentil 75 y el 90 en la escala de la distribución global de los ingresos, las ganancias reales de ingresos de esas personas han sido nulas. Estas personas son consideradas como la clase media-alta del mundo incluye a varios países de América Latina con pasado comunista, así como aquellos ciudadanos de países ricos que han visto sus ingresos estancados", sostiene Branko Milanovic. 

Entre los grandes ganadores está ese 1% más rico del mundo, que está compuesto por más de 60 millones de personas de EEUU, países de la Eurozona, del Reino Unido, Japón, Brasil, Rusia y Sudáfrica. 

Los otros ganadores son aquellos ciudadanos de la clase media de los países emergentes: "En 1988, una persona con el salario mediano en China sólo era más rico que el 10% de la población del mundo. Unos veinte años después, una persona en la misma posición dentro de la distribución de los ingresos en China es más rico que el 50% de la población mundial", asegura este economista.

Aunque estos datos son reveladores, aún lo podrían ser mucho más si la serie alcanzase los años posteriores a la última crisis financiera. En los países desarrollados, la clase media ha sido castigada por mayores tasas de paro y unos ingresos reales estancados. Mientras que los países en desarrollo han seguido disfrutando hasta hace poco del súper ciclo de las materias primas y de un crecimiento económico muy superior al de occidente. Por lo que la desigualdad de ingresos entre los ciudadanos del mundo se podría haber reducido bastante más desde 2008

Noah Smith, profesor de Finanzas en Stony Brook University, escribe en Bloomberg, que estos resultados cuestionan cuanto menos las teorías que se han considerado como verdades absolutas durante mucho tiempo: "Observando la evolución de los ingresos de la clase media de los países desarrollados en el gráfico del elefante, se puede cuestionar los beneficios del comercio internacional".

– Por qué cada vez más gente pasa hambre en Estados Unidos (BBCMundo – 1/8/16) Lectura recomendada

Para ser el país más rico del mundo, Estados Unidos tiene un porcentaje sorprendentemente alto de su población que experimenta problemas para conseguir la comida que necesita para alimentarse.

Un estudio del Departamento de Agricultura de ese país estimaba que para finales de 2014, la fecha de la medición disponible más reciente, cerca de 14% de la población estadounidense enfrentaba lo que se conoce como inseguridad alimentaria: dificultades en algún momento del año para proveer la comida necesaria para todos los miembros de la familia, debido a problemas económicos.

Dicho de otra manera: no les alcanzaba siempre el sueldo para alimentarse.

Es significativo que 17 millones de hogares aseguran que no siempre tienen el dinero para poner la comida en su mesa.

Más aun, agrega el reporte, 6,9 millones de hogares tenían muy baja seguridad alimentaria.

Es decir, que "el consumo de comida de algunos miembros de la familia se redujo y los patrones normales de alimentación se vieron afectados durante el año debido a recursos limitados", según asegura el informe publicado en septiembre de 2015.

En otras palabras, experimentaron el hambre.

Los hispanos sufren más

El estudio titulado "Seguridad alimentaria en los hogares estadounidenses en 2014" puntualiza que el 9,4% de los hogares con niños se vieron en dificultades financieras para alimentarlos bien.

Y organizaciones no gubernamentales como Feeding America, especializadas en ayudar a estas comunidades vulnerables, advierten que grupos minoritarios, entre ellos los hispanos, sufren desproporcionadamente por esta situación.

Según Feeding America, la incidencia de esta falta de seguridad en cuanto a la disponibilidad de alimentos es el doble de alta entre las familias hispanas que entre sus contrapartes anglosajones.

"Más de uno de cada cuatro niños latinos viven en hogares con inseguridad alimentaria", asegura la entidad.

"La demanda de nuestra asistencia alimentaria en Estados Unidos se disparó luego de la gran recesión de 2008", le dice a BBC Mundo Ross Fraser, vocero de Feeding America.

5 millones a la semana

El representante de la entidad indica que 5 millones de personas en todo el país acuden a su organización cada semana en busca de ayuda para alimentar a su familia.

"Pero esa demanda no ha bajado desde entonces. Seguimos viendo números récord de personas acudiendo a nuestros bancos de comida", indica Fraser.

Feeding America encuentra que los factores que predicen la existencia de estos problemas incluyen vivir en comunidades con mayores niveles de pobreza y desempleo. Una situación que empeora para familias con hijos.

En general, el impacto de la crisis económica de 2008 no ha dejado de sentirse en este país, lo que encaja con otros análisis que señalan que aunque los negocios y el Producto Interno Bruto del país han mejorado desde entonces, muchas familias no han salido de la crisis y aún tienen que restringir el gasto más básico de todos, el de la comida.

El porcentaje de los estadounidenses que tiene dificultades para conseguir su comida se ha mantenido alto desde entonces comparado con lo que ocurría antes del colapso financiero. En 2006 apenas llegaba a 10% de su población.

De mal en peor

Y si todas estas malas noticias no fueran suficientes, hay quienes advierten que la situación se puede poner peor.

Según indica el medio estadounidense The Atlantic, nuevas restricciones a los programas de ayuda estatal a las personas de bajos ingresos podrían aumentar el número de personas que confrontan el riesgo de hambre en Estados Unidos.

En particular, asegura The Atlantic, varios gobiernos regionales están imponiendo nuevos requisitos para que las personas accedan a estos programas de asistencia oficiales como los llamados "food stamps", bonos que les permiten a los recipientes adquirir comida de manera gratuita.

La actual carrera presidencial estadounidense enfrenta a dos candidatos que aseguran que con ellos la situación económica mejorará para sus conciudadanos.

Una promesa que guardará particular resonancia para los millones de personas en ese país que, pese a la prosperidad que los rodea, se van a dormir con hambre en el estómago.

Hambre en Estados Unidos

14% Porcentaje de la población con problemas financieros para comprar la comida que necesitan.

6,9 millones Hogares que han cambiado sus hábitos alimenticios por falta de recursos.

Fuente: Departamento de Agricultura de EEUU

– Cuánta ayuda le da Estados Unidos a sus pobres en comparación con otros países ricos (BBCMundo – 29/8/16) Lectura recomendada

(Por Taylor Kate Brown)

Una característica de muchas de las llamadas economías desarrolladas es la existencia de programas de apoyo a los ciudadanos más débiles.

En Europa, estos planes de ayuda suelen ser englobados bajo el nombre de "estado de bienestar". Sin embargo, en Estados Unidos esa expresión se usa para señalar exclusivamente un mecanismo para dar asistencia en efectivo a las familias pobres.

Canalizada a través de la Asistencia Temporal para Familias Necesitadas (TANF, por sus siglas en inglés), esta forma de ayuda fue modificada sustancialmente hace 20 años, cuando el presidente demócrata Bill Clinton firmó una ley impulsada por el Partido Republicano sobre el tema.

Desde entonces, cuando los estadounidenses hablan de "bienestar" se refieren de forma específica a este programa que ofrece ayuda económica a los padres solteros de bajos recursos.

Pero, ¿cómo se compara esta ayuda a la que otorgan otras economías avanzadas a sus ciudadanos?

Mismos fondos que en 1996

Antes de la reforma aprobada por el gobierno de Clinton en 1996, los estados podían decidir a discreción cuánto dinero ofrecerían a los ciudadanos a través de este programa, pero los criterios para determinar quiénes podían beneficiarse y otras políticas relacionadas eran decididas por el gobierno federal.

"La mayor parte del dinero iba directamente al bolsillo de las familias", dijo a la BBC Liz Schott, investigadora del Centro sobre Presupuestos y Prioridades de Políticas.

"Ahora los estados pueden gastar los fondos de formas muy diversas", agregó.

Esto incluye programas de capacitación laboral, de cuidado de hijos menores, pero también pueden enviar recursos a programas de acogida familiar y servicios de protección de menores.

Los estados siguen recibiendo la misma cantidad de fondos que en 1996.

Para 2015, en promedio 25% de los fondos iban destinados a asistencia económica, aunque esto -como muchos otros elementos del programa cuyas políticas son fijadas por cada estado- varía mucho.

Además, ahora hay criterios más estrictos acerca de cuál es el porcentaje de los beneficiarios de la ayuda que deben estar involucrados en algún tipo de actividad laboral.

Los estados que incumplen esos objetivos son penalizados, una situación que algunos gobiernos locales evitan limitando desde el principio el número de personas que pueden acogerse al programa de bienestar.

Según Schott, el resultado de estas prácticas es "una tremenda disparidad en la red de seguridad" en el país.

El monto promedio de la ayuda que recibe una familia beneficiada por el TANF -un padre o una madre soltera con dos niños- también es fijado por cada estado. En Mississippi, por ejemplo, recibirían unos US$ 153 mensuales; pero en Alaska, el monto alcanza hasta US$ 642 al mes.

El promedio de la ayuda nacional se ubica en US$ 418 mensuales, pero sólo puede ser recibido durante un periodo máximo de 60 meses. Además, en muchos casos, se exige a los potenciales beneficiarios buscar trabajo.

En Estados Unidos también existen otros programas de ayudas sociales, incluyendo la entrega de cupones para comprar alimentos, pagos para discapacitados y programas de atención sanitaria para los pobres.

En los 20 años desde la creación del programa de TAFNF, la cantidad de gente que recibe cupones para comprar alimentos ha crecido significativamente, al tiempo que el pago de ayudas económicas directas ha caído.

Pero, ¿cómo entonces se compara el sistema de bienestar estadounidense con otras economías avanzadas?

Canadá

La asistencia económica a los más pobres en Canadá varía según cada provincia y aumenta sus beneficios si la persona sufre de algún tipo de discapacidad o tiene más de un hijo.

El programa de ayuda básico en efectivo es el más parecido al estadounidense, en comparación con el resto de países desarrollados, pero cambia mucho en los detalles.

En la misma época en la que Estados Unidos aprobó el TANF, Canadá lidiaba con un problema de déficit presupuestario. Ante esa situación, el gobierno federal redujo el dinero que entregaba a las provincias para destinar a ayuda básica, pero también les dio mayor libertad para administrar los recursos.

Los gobiernos regionales pidieron entonces que quienes iban a recibir la ayuda buscaran trabajo (si estaban en condiciones de hacerlo) e incluyeron como beneficiarios a las personas sin hijos.

A diferencia de Estados Unidos, en Canadá casi todas las exigencias federales fueron eliminadas y no existe un tiempo máximo durante el cual se pueda recibir la ayuda.

Aunque la cantidad de dinero que paga cada provincia es distinta, en general, los montos son superiores a los que se pagan en Estados Unidos, aunque sigue estando por debajo de los ingresos de una familia de bajos ingresos.

Un padre soltero con un hijo en Ontario recibiría un beneficio de unos US$ 768. Pero si alguien sufre de una discapacidad o no puede trabajar el monto sube.

Tanto en Estados Unidos como en Canadá el número de personas que reciben estos beneficios ha caído. Según los expertos, en el caso estadounidense la principal razón son las nuevas restricciones que se han aplicado.

"Reducir el número de beneficiarios se convirtió en un objetivo en sí mismo en ambos países, en lugar de buscar acabar con la pobreza. Pero, en Estados Unidos es peor", comentó Daniel Beland, profesor de Políticas Públicas de la Universidad de Saskatchewan.

Francia

Francia es conocida por su amplio sistema de bienestar social, que va mucho más allá de la entrega de ayuda económica a los pobres.

El equivalente más próximo al TANF es la Renta de Solidaridad Activa (RFA, en francés). Un programa destinado a personas mayores de 25 años de edad o, al menos, de 18 años si se trata de padres solteros o si pueden probar que han trabajado durante algún tiempo previamente.

El RFA no exige que el beneficiario tenga hijos, aunque si los tiene el beneficio de la ayuda es mayor.

Un padre soltero con dos niños puede recibir hasta unos US$ 1.190 mensuales, pero el monto se verá reducido en caso de que la persona reciba algún ingreso u otros beneficios monetarios.

Reino Unido

En Reino Unidos existe un programa de subsidio a las personas de bajos ingresos cuye edad oscile entre los 16 años y la edad de jubilación. Esto no incluye otros beneficios que pueden recibir.

Se exige que la persona no tenga ingresos o bajos ingresos, que trabaje menos de 16 horas a la semana y ahorros inferiores a US$ 20.900.

Un padre soltero con dos hijos puede recibir unos US$ 382 mensuales.

Pero, el subsidio a las personas de bajos ingresos es sólo uno de seis beneficios en Reino Unido, que incluyen una ayuda para quienes buscan empleo y descuentos fiscales por tener hijos menores, los cuales han empezado a ser sustituidos por un crédito fiscal universal.

Japón

A mediados de la década de 1990, Japón tenía apenas unos pocos residentes solicitando beneficios sociales, pero en la actualidad un 2% de los japoneses usa esa ayuda.

La mayor parte de quienes reciben asistencia económica con fondos públicos son personas mayores con pocas probabilidades de hallar empleo.

Aunque ha aumentado el número de personas de todas las edades que acceden a ayudas, el mayor incremento se ha visto en los mayores de 60 años.

Se trata de un beneficio altamente personalizado, que se calcula sobre la base de la diferencia entre el ingreso real y el costo mínimo de la vida (que incluye gastos de vivienda, educación y salud, entre otros).

Pero, la asistencia pública también está limitada por cuánta ayuda pueda ofrecer la familia cercana, dado que el Código Civil del país exige a algunos familiares que intenten dar a apoyo a quienes no pueden mantenerse a sí mismos.

Una red menos segura

Una diferencia fundamental entre Estados Unidos y países como Canadá, Francia, Reino Unido y Japón radica en que estos ofrecen beneficios adicionales para apoyar a los niños, en algunos casos con independencia del ingreso.

Estados Unidos tiene un crédito fiscal por hijos, pero básicamente lo que hace es reducir el pago de impuestos a final de año.

edu.red

"Todos ellos tiene sistemas de apoyo a la niñez, en algunos casos universales y otros dependiendo de los ingresos", señaló Jonathan Bradshaw, profesor emérito de Políticas Sociales y de Trabajo Social en la Universidad de York.

Los cambios en el sistema de bienestar en Estados Unidos hacen que "en realidad, sea menos una red de seguridad", según Bradshaw. "Ante la ausencia de beneficios de apoyo a la infancia, hay mucha más inseguridad de la que existe en otros países", concluye.

– Cómo la instalación de lavadoras en unas escuelas de Estados Unidos ayudó a reducir el ausentismo un 90% (BBCMundo – 5/9/16) Lectura recomendada

(Por Beatriz Díez)

¿Qué tendrá que ver un aparato tan cotidiano como una lavadora con un problema tan importante como la falta de asistencia de los menores a clase?

Más de lo que se puede pensar en un principio. En el caso de una serie de escuelas de varios distritos humildes de Estados Unidos, el hecho de contar con un set de lavadora y secadora en el centro educativo hizo que se redujera drásticamente el ausentismo escolar.

Y la conexión está en testimonios como el de Vanessa, una niña de 10 años. "Cuando me levanto por la mañana y veo que no tengo ropa limpia normalmente termino quedándome en casa", cuenta.

Razón para quedarse en casa

El ausentismo escolar se suele juzgar desde fuera como un síntoma de pereza o una consecuencia de falta de estructura en la familia del menor. Pero en algunos casos, la causa de ese ausentismo es algo tan sencillo y a la vez tan difícil de identificar desde fuera como la falta de ropa limpia.

Ante este panorama, la empresa de electrodomésticos Whirlpool intervino a través del Whirlpool Care Counts Program con un original proyecto: donó 17 pares de lavadoras y secadoras a distritos escolares de San Luis, Misuri, y Fairfield, California.

Las escuelas invitaron a niños con problemas de asistencia a traer su ropa para lavarla mientras están en clase y el resultado fue extraordinario: el ausentismo se redujo un 90%. "En cuanto empezamos a traer la ropa, la asistencia mejoró casi de inmediato", le dice a BBC Mundo Alison Guernsey, profesora de 7º grado (alumnos de 12-13 años) en la escuela David Weir en Fairfield, California.

La profesora californiana sintió que sus alumnos se podían ver particularmente beneficiados. "Frecuentemente estos estudiantes son responsables de levantarse por las mañanas y prepararse para venir a la escuela por su cuenta, muchos de ellos vienen caminando", explica. "Si no tienen las cosas que necesitan incluida ropa limpia simplemente no vienen a clase, así que el hecho de poder lavar la ropa en la escuela tuvo un impacto muy fuerte".

Un asunto delicado

Si se compara con factores como el desempleo, la falta de oportunidades económicas o el racismo institucional, la colada puede parecer algo insignificante en la lucha por mantener a los niños en clase.

Pero aunque ese puede ser el caso para los padres, para un niño de 10 años que ya tiene otros problemas, no tener nada limpio que vestir puede ser el factor decisivo para no querer ver a sus compañeros, o que lo vean.

Precisamente por ese componente de vergüenza que puede acompañar la falta de ropa limpia, en la escuela de Alison Guernsey trataron el tema con mucha discreción.

"Nos acercamos personalmente a los niños que tenían más problemas de asistencia y les ofrecimos la posibilidad de participar en el programa. "Nos pareció la mejor manera de manejar la situación ya que creo, especialmente como madre, que a nadie le gusta ser juzgado. Es delicado cómo se aborda", sostiene.

"Algunas familias no tienen acceso a una lavadora y secadora, a lo mejor porque viven en un apartamento y tienen que pagar extra por usarla o a veces simplemente porque no funciona. Esto les ayudó a eliminar una barrera".

Cómo funciona

La ropa la puede llevar el propio niño al colegio o la pueden entregar sus padres una vez que han empezado las clases, lo que sea más adecuado a la necesidades de cada familia.

El nivel de discreción se mantiene, según afirma Guernsey. "No tengo noticia de que otros chicos sepan lo que está pasando, lo manejamos con tanta discreción que no es algo aparente", cuenta. "Los niños no aparecen con una gran bolsa llena de ropa para lavar", aclara entre risas.

Efecto inmediato

El éxito de la iniciativa no se mide sólo por las cifras que constatan esa aguda caída del ausentismo escolar. Se refleja sobre todo en la sonrisa de los niños y en el notable cambio de actitud que notan los profesores.

"Nos dimos cuenta de que los chicos eran mucho más felices, estaban en clase, mostraban una confianza que no siempre tenían", señala Guernsey. "Estoy pensando en un par de estudiantes en particular que se veían diferentes de los otros chicos, realmente más tímidos en clase, muy poco participativos. Después de haber participado en el programa eran más abiertos, se notaba en las sonrisas de sus caras, estaban felices".

La pequeña Vanessa, que participó en el programa, lo tiene claro: "Sentí que no tenía que preocuparme de nada más que de estar en clase aprendiendo", cuenta. "Tener la lavadora y la secadora en la escuela significa que no tengo que preocuparme por la ropa sucia; me hace sentir más ilusionada y que encajo mejor".

Los padres son también bastante favorables al proyecto, están contentos de tener este recurso para ellos. Para muchos de ellos, que tienen que esforzarse día a día para alimentar a sus hijos y garantizar su salud, un viaje de dos horas a una lavandería puede ser un lujo prescindible del que ahora ya no tienen que preocuparse.

– ¿La tierra de las oportunidades? Cuáles son las ciudades más desiguales de Estados Unidos (BBCMundo – 5/9/16) Lectura recomendada

Estados Unidos está cambiando aceleradamente y una de las tendencias que más inquietud produce es que esa nación que siempre se ha autodefinido como la tierra de las oportunidades, es cada vez más desigual.

Dentro de ese extenso país, la desigualdad está afectando de manera particular a distintas ciudades. Mientras en algunas se mantiene todavía hasta cierto punto el ideal de una sociedad sin tantos extremos, con una clase media sólida y abundante, en otras urbes estadounidenses se siente cada vez más la polarización entre pobres y mega-ricos. Un problema que antes era más asociado con las naciones del llamado Tercer Mundo, pero que hoy es un mal crecientemente universal.

Según datos calculados por la Encuesta de Comunidades del Buró del Censo de Estados Unidos y citados por la agencia Bloomberg, la ciudad más desigual en Estados Unidos es Nueva Orleans.

Como en Zambia

Para medir la desigualdad, el estudio del censo utiliza el llamado Coeficiente de Gini, en donde una comunidad con desigualdad absoluta, (es decir, donde una sola persona es dueña de toda la riqueza) tendría un puntaje de 1,0, mientras que la sociedad más igualitaria tendría un puntaje cercano a cero.

De acuerdo al Censo, Nueva Orleans obtiene un coeficiente de Gini de casi 0,58, ligeramente mejor que el de Haití y similar al nivel de desigualdad de Zambia, según datos del sitio web de la CIA. Honduras, la nación más desigual de América hispanoparlante, con 0,57 tiene un puntaje mejor que el de Nueva Orleans.

Que Nueva Orleans sea la campeona de la desigualdad en Estados Unidos no sorprendería a muchos dada la compleja historia racial en esa urbe. En este país, las tensiones de clase muy frecuentemente se han expresado a través de las diferencias raciales.

Todos recuerdan las imágenes de hace una década del desastre del huracán Katrina en esa ciudad, que expresaron la desigualdad racial de una manera especialmente dramática. En muchos casos, los habitantes blancos de la ciudad pudieron huir del desastre, mientras que cientos de miles de afroestadounidenses tuvieron que quedarse en Nueva Orleans y lidiar con las consecuencias de la tormenta.

Prósperas pero desiguales

El segundo lugar en la lista de desigualdad corresponde a Atlanta, otra ciudad del sur de Estados Unidos con una compleja historia de conflicto racial.

Tras Cincinnati, el cuarto lugar es para Boston, la capital universitaria de la nación y cuna de pujantes industrias de alta tecnología.

Dallas, pujante capital petrolera, precede a la sexta ciudad, Nueva York, el epicentro económico del país.

Y el séptimo lugar es para Miami, una ciudad que busca proyectar al exterior una imagen de playas y diversión.

En muchas de estas ciudades, la desigualdad está asociada con un crecimiento explosivo de los ultra ricos. Académicos como Richard Florida, experto en urbanismo de la Universidad de Toronto, han venido mostrando cómo una serie de ciudades se han convertido en capitales de la "economía del conocimiento". Atraen a los mejores profesionales en las industrias de mayor crecimiento, como las de alta tecnología.

Boston, con su enorme concentración de universidades de alto prestigio, empezando por Harvard y MIT, es un ejemplo perfecto de estas ciudades "ganadoras". Mientras que urbes como Nueva York y Miami se han convertido en destino preferido de megamillonarios internacionales.

Son fenómenos que atraen enormes cantidades de dinero hacia estas ciudades, pero han creado problemas inesperados por la desigualdad que generan. Se han vuelto urbes cada vez más distantes para la clase media, por el encarecimiento de la vivienda y otros servicios esenciales.

Por lo que, a menos que puedan diseñar alternativas para aminorar esta tendencia, algunos ven en estas ciudades un futuro poco atractivo compuesto por edificios de ricos protegidos por extremas medidas de seguridad, rodeados por barrios de pobres viviendo en condiciones cada vez más precarias. Precisamente el escenario que deseaban evitar muchos de los grandes potentados que llegaron a estas ciudades huyendo de las tensiones sociales en sus países de origen.

Realidades fragmentadas

Los observadores también subrayan el impacto político y social que tienen estos cambios económicos que apuntan hacia una mayor desigualdad. Se habla de un país cada vez más dividido, en donde distintos grupos económicos tienen experiencias sociales y culturales cada vez más apartadas las unas de las otras.

El escritor de tendencia conservadora Charles Murray en su polémico libro "Coming apart" ("Desintegrándose") habla de ese fenómeno y presenta, medio en chiste, medio en serio, un quiz para determinar si uno hacía parte de la cultura de esta elite cada vez más aislada en la sociedad estadounidense.

Y presenta una lista de ciudades en Estados Unidos donde una porción mayor de sus habitantes se circunscribe a esta cultura de elite. Nuevamente, las grandes "capitales de la economía del conocimiento" como Nueva York y San Francisco aparecen prominentemente dentro de las zonas en las que sus habitantes tenían una cultura cada vez más distinta a la del resto "pobre" del país.

Las consecuencias de esta fragmentación económica y cultural del país son evidentes en la cada vez más radicalizada escena política. En un país donde la gente habita en mundos tan distintos, es más complejo evitar que el discurso político sea cada vez más incendiario, alimentado por la desconfianza, la rabia o simplemente el desconocimiento de cómo es la vida de muchos de sus compatriotas.

– Cuánto ahorrar hasta la jubilación para mantener el nivel de vida (Cinco Días – 9/9/16)

edu.red

Fracaso social: falta de perspectivas para los jóvenes, mayor conflictividad

"La pobreza se hereda y el mayor riesgo de exclusión social se da en las familias con hijos, según el último informe de Cáritas, que revela que ocho de cada diez personas que vivieron graves dificultades económicas en su infancia y adolescencia las están reviviendo en la actualidad como adultos.

Estas son algunas de las aportaciones del estudio "La transmisión intergeneracional de la pobreza: factores, procesos y propuestas para la intervención", de la Fundación de Fomento de Estudios Sociales y de Sociología Aplicada (Foessa), que se ha presentado hoy en Madrid.

La pobreza de los niños en el presente condiciona la pobreza en el futuro cuando sean adultos, ha señalado el secretario general de Cáritas Española, Sebastián Mora, quien ha hecho un llamamiento urgente a diseñar las políticas públicas adecuadas, con la participación de las ONG y de la sociedad civil, para revertir esta situación.

El coordinador del trabajo de investigación, Raúl Flores, ha explicado que hay una fuerte asociación entre las condiciones de vida de padres e hijos y que no es extraño que en los centros de servicios sociales y en los espacios de las entidades que trabajan en la acción social se esté atendiendo a los nietos de aquellos a los que acompañaron hace treinta años.

El nivel de estudios, la situación laboral, la ocupación y la renta son los principales factores que contribuyen a que la pobreza se herede de padres a hijos, ha detallado Flores…

La situación laboral y la ocupación de los progenitores son factores que, además de estar relacionados con el nivel educativo que permite desempeñar unas tareas u otras, también están estrechamente ligadas a la existencia o no de una fuente de ingresos y a la cuantía de la misma.

Los problemas económicos suponen un freno a la adquisición de niveles educativos más altos, ya que cuatro de cada diez adultos que vivió su adolescencia con problemas económicos muy frecuentes no consiguió terminar la educación secundaria.

El análisis pone de manifiesto que "los hogares con menores a su cargo son más sensibles a padecer situaciones de pobreza", ya que la incidencia de la pobreza es del 16 por ciento en los hogares sin menores, del 28 por ciento en los hogares con menores, del 42 por ciento en las familias monoparentales y del 44 por ciento en las familias numerosas"… La pobreza se hereda: ocho de cada diez niños pobres serán adultos pobres (El Economista – 8/4/16)

– España sufre el mayor aumento de jóvenes ni-nis sin formación de toda Europa (Libertad Digital – 13/6/16) Lectura recomendada

España registra el mayor porcentaje de jóvenes poco cualificados que ni estudian ni trabajan de Europa, sólo superado por Turquía.

(Por Javier G. Echegaray)

Partes: 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8, 9, 10, 11, 12, 13, 14, 15, 16, 17
 Página anterior Volver al principio del trabajoPágina siguiente