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Manual sobre teoría y procesos políticos contemporáneos (página 3)


Partes: 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8

Vladimir Ilich Lenin.

Elaboró la teoría del partido que fundamenta su necesidad en la construcción del socialismo y en su desarrollo ulterior, principalmente en sus obras. ¿Qué hacer? Y en Un paso adelante y dos pasos atrás. (Tomo 1/06 Página 238 P2).

Gramsci.

En su obra. De Maquiavelo a Lenin, realizó un análisis amplio sobre los partidos, como medio de luchas política, como expresión de la voluntad de acción e iniciativa de una clase, como una derivación orgánica de sus necesidades económicas, o mejor aún, como expresión eficiente de la economía. (Tomo 1/06 Página 238 P2).

Max Weber.

Los partidos políticos como una forma de socialización que descansan en el reclutamiento formal y libre, que tiene como fin proporcionar el poder a sus dirigentes, dentro de una asociación, y otorgar por ese medio a sus miembros activos determinadas probabilidades, ideales y materiales (la realización de fines, objetivos a lograr ventajas personales o ambas cosas). Clasificó los partidos en:

  • 1. Carismáticos, (cuando son sostenido por la personalidad de un jefe).

  • 2. Tradicionales, (cuando obstruyen la innovación).

  • 3. Doctrinarios, (aquellos que la ideología tiene un fuerte peso).

  • 4. Pragmáticos, (donde los intereses predominan sobre los valores) (TI/06 Páginas 239-240).

La situación actual de los partidos políticos en los países capitalistas.

Los Partidos constituyen mecanismos mediadores entre el Estado y la sociedad civil, por ello deben cumplir funciones sociales, e institucionales. (Tomo 1/02 Página. 84 P2 .Tomo 1/06 Página 240 UP).

Funciones social de los partidos.

  • 1. Socialización política

  • 2. Movilización de la opinión hacia los poderes públicos.

  • 3. Representación de intereses

  • 4. Legitimidad a partir de someter el gobierno a elecciones periódicas. (T1/06 Pág. 241 P1).

Funciones institucional de los partidos.

  • 1. Reclutamiento y selección de élites

  • 2. organización del proceso electoral.

  • 3. Composición del parlamento.

  • 4. Composición del gobierno. (Tomo 1/06 Página 241 P1).

Funciones de los partidos en los países capitalistas.

  • 1. Articular intereses: generar consenso

  • 2. Trasmitir creencias de legitimidad.

  • 3. Seleccionar y promover a la dirigencia política de la sociedad. (Tomo 1/06 Pág. 248 U P).

Los Partidos políticos en los países capitalistas.

  • 1. Se han convertido en mecanismos para conquistar el poder en todos los espacios sociales.

  • 2. No tienen un programa que los identifique con las necesidades o aspiraciones colectivas.( se alejan de sus funciones básicas; atraer afiliados y generar resultados electorales favorables, la determinación del partido al definir su delimitación y diferenciación de los demás, la agitación como base sobre la cual se lanzan las disputas para la consecución de sus reclamos políticos y la función integradora, que rige la acción de su pensamiento político y se logra la identificación con los electores.) Las cúpulas partidistas son usufructuarias del poder que para ascender necesitan del respaldo del aparato partidista.

  • 3. El reparto del poder es el factor fundamental de la unidad y disidencia dentro del partido.( Internismo)

  • 4. El partido ha perdido la utilidad para la sociedad, tiende a ser útil únicamente para quienes, lo dirigen. En el interior del partido se producen dos luchas. Una por el control del poder y la otra por alcanzar posiciones de poder en las instituciones públicas.

  • 5. Los partidos políticos se consideran los núcleos del sistema democrático del estado moderno capitalista. Razón por la que podemos concluir de que la democracia liberal actual afronta una profunda crisis. (Tomo 1/02 Página 90 Ú P. Tomo 1/06 Página 147 P1).

Factores que nos permiten hablar de crisis en los partidos políticos en los países capitalistas.

  • 1. Tienen una visión pragmática.

  • 2. Predominan los criterios electorales.

  • 3. No ofrecen estrategias para la solución de los problemas complejos de la sociedad.

  • 4. No tienen un programa general, sino varios programas: de acción, de fundamentación teórica, plataformas electorales y programas de gobierno. Los programas no están dirigidos a resolver los graves problemas de la sociedad.

  • 5. No ofrecen alternativas diferentes con propuestas novedosas que aumenten su capacidad de convocatoria y formulen soluciones desde una perspectiva de justicia social. (Tomo 1/02 Página 91 P3. Tomo 1/06 Página 248 P1).

A los partidos políticos en los países capitalistas se les plantean las siguientes limitaciones en sus funciones de mediadores entre el Estado y la sociedad civil.

  • 1. No ofrecen respuesta a los diferentes cambios y demandan que operan en la sociedad.

  • 2. No constituyen canales de participación efectiva política.

  • 3. No acercan el electorado a la participación en la toma de decisiones.

  • 4. Se incrementa la participación cada vez más activa de las élites políticas por medio de los grupos de presión en la defensa de sus intereses y en detrimento de los partidos políticos.

  • 5. Los movimientos sociales ante la fragmentación de la sociedad han pasado a desempeñar un papel muy activo en la integración de intereses.

  • 6. El desarrollo de los medios de comunicación y la globalización han limitado el papel de los partidos en la formación de opinión pública y en la socialización política.

  • 7. Cada vez resulta más costoso para los países subdesarrollados la financiación de las actividades de los partidos políticos y recurren a formas ilegales para sostenerlos, lo cual genera corrupción y le resta legitimidad a los sistemas políticos. (Tomo I/02 Página 91- 92 P1. Tomo 1/06 Página 248 P4).

Razones por las cuales es difícil definir los partidos políticos en los países capitalistas.

  • 1. Por su naturaleza(Relaciones con partidos del sistema, números ,fuerzas electoral)

  • 2. Según sus relaciones( con las distintas instituciones, sistemas políticos en su conjunto; leyes electorales, parlamentos, gobiernos)

  • 3. Según sus interacciones con el ambiente social (Base apoyo electoral, relaciones, grupos de presión y movimientos socialistas.)

  • 4. Del nivel en que se estudia: como un acto unitario e individual, interacción subordinación, unitarios entre grupos y órganos en la organización.

  • 5. Se caracterizan según el periodo históricos (Dimensión histórica de su vida y su naturaleza.) (Tomo 1/02 Página 81 P3).

Funciones común de los partidos.

La organización de la opinión pública y la comunicación de las demandas a los centros de poder y las decisiones gubernamentales.

  • 1. Articulan a sus seguidores a la comunidad en general.

  • 2. Están implicado en el reclutamiento político y en la selección de jefatura políticas en cuyas manos reside el poder y las decisiones. (Tomo 1/02 Página 88 P4).

Los partidos de cuadros.

Son aquellos en que el sistema de dirección de base se determina por designación, su política cobra vida en su proceso electoral, se le concede más importancia a la calidad de sus miembros que a sus cantidad y actúan casi siempre en sistemas electorales mayoritarios; son partidos pragmáticos, donde la ideología no tiene el peso que le conceden los partidos de masa; no posen una membresía que cotiza sino electores que solo votan por ellos; la noción de militantes en esta tipología de partido corresponde a una minoría de funcionarios que garantizan el funcionamiento de la maquinaria política.(Tomo I/06 Página 242 P 3).

Los partidos de masas.

Son aquellos en que los militantes coinciden casi siempre con la noción de los miembros del partido; asisten a las reuniones periódicas y cotizan.; sus miembros se seleccionan mediante un proceso reglamentado; tiene compromisos más elevados de lealtad política. (Tomo1/02 Página 85 U P. Tomo 1/06 Página 242 P4).

El sistema de partido.

Es el resultado de las interacciones entre las unidades partidistas que lo componen: son interacciones que resultan de la competición política electoral: El sistema de partido se caracteriza por una serie de propiedades autónomas que no son típicos o propios de las unidades partidistas, tomadas aisladamente. No es, por lo tanto, únicamente la suma de partidos que la componen, sino algo más complejo, lo cual requiere de un análisis autónomo.

Por tanto, de hecho el sistema de partidos está influido o determinado por la naturaleza de los mismos; al mismo tiempo el modelo de inserción del sistema influye en la naturaleza y en el comportamiento de sus unidades particulares. (Tomo 1/06 Página 244 P2).

M. Duverger. Formas del Sistema partidos.

  • 1. Sistema de partidos únicos

  • 2. Sistema de partidos bipartidistas.

  • 3. Sistema de partidos multipartidismo. (Tomo I/06 Página 244 P3).

Los partidos políticos en la sociedad capitalistas tienen que corregir y reformular su funcionamiento. (Tomo I/06 Página 249 P1).

Los Grupos de presión o grupos de interés en el sistema capitalista.

Para el análisis de los grupos de presión y los factores que influyen sobre la actividad de los mismos, es necesario precisar sus antecedentes teniendo en cuenta sus diferencias en los países capitalistas desarrollados y en los subdesarrollados. La existencia y funcionamiento eficaz de los grupos de presión no pueden ser entendidas fuera del marco dictaminado por los reales intereses de los círculos de poder dominantes.

Analizar las vías de acción de estos grupos y cómo se manifiesta su actividad en los principales países capitalistas, para lo cual se puede utilizar el ejemplo de la Fundación Nacional Cubano _ americana (FNCA) como grupo de presión hostil a la Revolución cubana dentro del sistema político estadounidense, caracterizando su papel.

Grupos de presión, denominados también grupos de interés, son organizaciones constituidas formalmente y que se ocupan de las estrategias de persuasión, de cabildeo y de los sistemas de relaciones públicas con el objetivo de alcanzar determinadas influencias sobre los que gobiernan en función de los intereses del grupo.(.) En otras palabras son asociaciones voluntarias de individuos que se agrupan para defender sus interés(.) Son grupos organizados que se plantean como objetivos el provocar influencia (presión) sobre diferentes institutos políticos con el fin de que estos adopten decisiones favorables a sus intereses. (Tomo 1/06 Páginas 250- 251).

Las diferencias entre los grupos de presión y partidos políticos, radica en que los primeros no se plantean como objetivo el acceso al gobierno, ni se ocupan de la promoción de candidatos. Sus objetivos políticos son más limitados que los partidos políticos, viéndose reducido al interés de lograr influencia sobre la actividad gubernamental. TI/06 Pág. 251 P3.

Diferencias de estos con los partidos políticos.

  • 1. No se plantean objetivos de acceso al gobierno.

  • 2. No realizan promoción de candidatos. (Tomo I/02 Página 94 U P. T1/06 Página 251 P3).

Sus objetivos políticos son más limitados que los de los de los partidos políticos. Y consisten en logra influencias sobre la actividad gubernamental a veces se convierten en una prolongación de los partidos políticos. (Tomo I/06 Página 251 P4).

  • Operando a través de los partidos.

  • Algunos han derivados en partidos políticos y viceversa en su ulterior desarrollo como durante las elecciones hay partidos que ven borradas su línea de dirección en relación con los grupos de presión que con los cuales actúan.

Grupos de presión.

Grupos de protección: se orientan a la defensa de un determinado sector de la sociedad como pueden ser los sindicatos, las asociaciones profesionales.

Grupos de promoción: se orientan a la promoción de una determinada causa, como pueden ser las campañas relacionadas con el mantenimiento de la paz, los grupos ecologistas, etc. (Tomo 1/06 Página 251 U P).

Antecedentes de los grupos de presión: en los sindicatos, en determinadas asociaciones comerciales, etc., data de las primeras décadas del siglo XX (entre los años 20- 30 en EEUU.)

Ejemplos de grupos de presión en EEUU.

  • 1. Grupo de presión privado carácter económico. (NAM)

  • 2.  Grupo de presión no lucrativo.(ACLV)

  • 3. Grupo de presión étnica.

  • 4. Grupo de presión de carácter religioso.

  • 5. Grupo de presión de profesionales.

  • 6. Grupo de presión institucional. (Tomo 1/02 Página 101 P 1. Tomo I/06 Página 257 P2).

Los grupos de presión representan los intereses de determinados grupos minoritarios específicos, siendo ignorados en muchos casos los intereses reales de las grandes mayorías. Imponiéndose el poder de los sectores económicos más poderosos los que en la práctica controlan y manipulan las decisiones. (Tomo 1/06 Página 259 P2).

La participación política

(TOMO 1/02 PÁG.104 TOMO 1/06 PÁG. 261-271).

Ver el concepto de participación como elemento esencial para definir el tipo de democracia que existe en una sociedad determinada.

Es importante dominar la concepción de la participación política en las teorías burguesas de la democracia, especialmente en la teoría del elitismo democrático del siglo XX. El abordaje crítico del impacto de estas teorías en la práctica política del sistema capitalista y sus limitaciones para la participación política real de las masas populares.

El enfoque de la participación política en la historia del pensamiento marxista debe estar basado en la participación cada vez más creciente y efectiva de las masas populares en la gestión estatal y socioeconómica, como criterio fundamental de perfeccionamiento del sistema político en la transición al socialismo y en etapas posteriores de este sistema.

Las funciones y las formas de participación son cuestiones medulares de esta temática y no deben dejar de tenerlas en cuenta.

Participación.

Es, junto de igualdad, la justicia social y la soberanía nacional, un elemento esencial para definir el tipo de democracia que existe en una sociedad y su comportamiento en la vida real. (TI/06 Pág.261 P1).

El estado de democracia real de un país.

Es el grado de participación efectiva de la gente en los asuntos sociales y del Estado, define el estado de democracia real de un país. (Tomo I/06 Página 261 P2).

Participación Política.

Se aplica a las actividades del pueblo en todos los elementos que conforman el sistema político de una sociedad. Sin embargo, es definida generalmente como el acto de tomar parte en la formación, aprobación o aplicación de medidas de políticas públicas, siendo esta definición aplicable a la actividad de un político, un funcionario gubernamental o un ciudadano común. (Tomo 1/02 Página 106 P 1. Tomo I/06 Página 263 P1).

Capacidad que tiene el ciudadano común para involucrarse e incidir en los procesos de toma de decisiones, lo cual tiene un momento relevante en la participación electoral aunque no se limita a ella. (Tomo I/06 Página 263 P2).

Es necesario destacar que la participación se da a través de un proceso de toma de de desiciones donde se distinguen cuatro fases, según B. Horvart. (Tomo I/06 Página 263 P3).

1ra. Agregativa, referente al momento de definición de los problemas.

2da.Convertiva, relativa al complejo proceso de búsqueda de alternativas y selección de la más idónea para solucionar el problema planteado.

3ra. El momento implementativo de las decisiones adoptadas, o sea, la ejecución.

4ta. Corresponde a la función evaluativo del resultado obtenido, es decir a través de la presentación. (Tomo I/06 Página 263 P3).

Formas de participación.

La doctrina marxista plantea dos formas de participación.

  • 1. Directa. (Significa practica de la discusión y consulta de toda la población de los asuntos más importantes de carácter económico, político y cultural)

  • 2. Indirecta. (Forma representativa del poder del pueblo. Diputados, delegados, (sistema político de carácter socialista)

  • Elaboración directa o indirecta de la política gubernamental

  • La actividad comprende proceso electoral (votos)

  • La comunicación de los representantes con sus representados, problema central de la democracia representativa( es mayormente elitista y formal)

  • El debate que comparte la política.

  • La afiliación, organización social y política y otros. (T1/02 Página109). T1/06 Pág.266 P2).

Entre los factores que la determinan participación política de los ciudadanos se encuentran los siguientes:

  • Antecedentes sociales y posición que ocupa el individuo en la sociedad (la educación y la clase social a la que pertenece).

  • Características psicológicas del individuo.

  • Tradiciones familiares y regionales.

  • Factores históricos.

  • Medio político en que se materializa su participación.

  • Acceso a la información.

  • Acceso a las instituciones del gobierno o a los centros de poder.

  • La competencia política. (Tomo I/06 Página 267 P2).

Participación política.

Su problema central consiste en la vinculación de la participación con el poder real, pues la misma no se reduce a tener acceso a múltiples espacios de discusiones, sino a contribuir a tomar decisiones desde esos espacios. Precisamente la calidad de la participación radica en la capacidad y posibilidad que tiene el individuo para discutir y tomar decisiones públicas, fiscalizarlas y ser actor en sus decisiones. (Tomo 1/06 Página 268 P1).

Funciones de la participación política.

  • 1. Garantizar el ejercicio de rendición de cuenta de los gobernantes antes los gobernados.

  • 2. Es el medio por excelencia para prestar o reiterar el apoyo a un gobierno democrático.

  • 3. Vía para la materialización de objetivos democráticos de un sistema político y se legitima el poder. (Tomo 1/02 página 110. P2 .Tomo 1/06 Página 268 P2).

Factores que determinan la participación de los ciudadanos.

  • 1. Antecedentes sociales y posición que ocupan en la sociedad (la educación y la clase social a la que pertenece;

  • característica psicológica del individuo.

  • tradiciones familiares y religión.

  • factores históricos.

  • medio político en que se mantiene su participación.

  • acceso a ala información.

  • Acceso a instituciones.

  • gobierno o centro de poder.

  • competencia política. (Tomo 1/06 Página 266 P2).

Tener en cuenta que nuestros criterios serán útiles para los reajustes necesarios en la reorganización del país, urgidos como estamos de encontrar un nuevo equilibrio, de reparar y consolidar, mediante la más amplia participación popular, el imprescindible consenso que persiguen nuestras ideas socialistas.

Donde la unidad de todas sus fuerzas ha sido y sigue siendo la estrategia fundamental de la Revolución Cubana. Pero unidad no equivale a homogeneidad de pensamiento, sino a la concertación de los puntos de vista diferentes, que debemos respectar en primera instancia.

Por eso hablamos de reparación y consolidación de un consenso que nos incluye, pero también, a aquellos que aunque no piensen exactamente como nosotros, aspiran a una sociedad mejor, basada en la independencia y la justicia social fin estratégico de nuestra Revolución socialista.

La socialización y cultura política

TOMO 1/02 PÁGINA 115

LA SOCIALIZACIÓN

La socialización es un proceso mediante el cual el individuo adopta los elementos socioculturales de su medio ambiente y los integra a su personalidad para adaptarse a la sociedad.  Dicho en otros términos, socializar es el proceso por el cual, se aprende a diferenciar lo aceptable de lo inaceptable en su comportamiento. Socializar es un proceso muy importante que debe  fomentarse en los hombres desde muy corta edad, por tanto podemos definirlo como:

El "proceso a través del cual el sujeto social va incorporando todo un conjunto de conocimientos, normas y valores políticos que le posibilitan la adopción de una participación activa en la vida política de la sociedad y, en particular, en su sistema político".

Los procesos de socialización.

Se considera el desarrollo social como un proceso de adquisición progresivo de conductas, hábitos, normas y reglas, y actitudes sociales por parte de los miembros más jóvenes de la sociedad con el fin de integrarse en ella.

Procesos básicos de socialización que son necesariamente independientes:

  • 1. Adquisición de conductas prosociales:

  • Desarrollo de la ética social.

  • Este proceso implica la interiorización progresiva de razones, creencias, normas.

  • Y valores propios de la cultura de referencia.

  • 2. Adquisición de conocimientos y habilidades sociales. Desarrollo cognitivo-social.

  • 3. Adquisición de actitudes de sociabilidad. Desarrollo afectivo-social.

Socialización, proceso mediante el cual el individuo adopta los elementos socioculturales de su medio ambiente y los integra a su personalidad para adaptarse a la sociedad (véase Adaptación social). En psicología infantil, es el proceso por el cual el niño, aprende a diferenciar lo aceptable de lo inaceptable en su comportamiento. La psicología social está interesada en cómo los individuos aprenden las reglas que regulan su comportamiento social. En antropología, es el proceso por el cual se transmite cultura de una generación a otra. Véase también Aculturación.

El comportamiento político.

Está estrechamente relacionado con la participación, al examinar las actitudes de las personas ante la política y el modo en que se expresan sus actitudes, pero este estudio debe comenzar por la socialización política. Aristóteles consideraba la participación como medio eficaz de socialización política, de inculcar el civismo entre los ciudadanos, aunque la socialización política es más amplia, ya que comprende la influencia de una diversidad de elementos sobre el individuo. (Tomo 1/06 Páginas 268 – 269).

La socialización política del individuo.

Es la influencia que sobre él ejerce la familia, el medio circundante y el sistema político. Es el proceso de asimilación por el hombre de un determinado sistema de conocimientos, normas y valores que le permiten funcionar como miembro de la sociedad, incluye tanto la influencia orientada sobre el individuo como los procesos espontáneos que influyen en su formación. (Tomo 1/02 página 119 P1.Tomo 1I/06 Páginas 269 P3).

El fin estratégico de la socialización política:

Es producir consenso y apoyo ciudadano activo para mantener la estabilidad del status quo o, en caso necesario, su subversión. Algunos la definen como la vía en que la sociedad trasmite su cultura política de generación en generación. (Tomo 1/02 Página 117 P3.Tomo 1/06 Páginas 269 P4).

Plano en que puede desglosarse la socialización política:

  • La capacitación política como proceso de formación de la cultura política.

  • El estudio de la correlación de lo individual y lo social en la conciencia política.

  • La participación política como el ejercicio de los ciudadanos de sus deberes y derechos en la esfera de la vida política.

  • De los medios y métodos de educación política, lo que incluye el papel de la información a las masas. (Tomo 1/02 Página 112 UP .Tomo 1/06 Páginas 269 P6).

Cultura política

El "conjunto de orientaciones, pautas y valores socio-psicológicos relativamente estables que caracterizan  las relaciones que se establecen entre las clases, grupos sociales e individuos con respecto al poder político y que condiciona la experiencia del desarrollo político de la sociedad (Tomo 1/02 Página 131 P3).

La cultura política.

Es el resultado del proceso de socialización política. Su fin estratégico es educar, moldear al sujeto necesario a los fines sociopolíticos de la nación. (Tomo 1/06 Páginas 269 P7).

A partir de la cultura política se definen las formas de participación de los ciudadanos en la vida social. La cultura política y la socialización política determinan la participación política. A su vez la participación política de los ciudadanos acelera el proceso de socialización política. (Tomo 1/06 Páginas 270 P1).

La Cultura Política.

Siendo un producto de la actividad política expresada a través de las orientaciones y pautas de los individuos, de sus conductas y tradiciones, del poder político en la dinámica histórica de éstos, refleja, desde ese punto de vista, el nivel de desarrollo de un sistema político determinado, teniendo también una notable influencia en la educación política, la conducta política, en la opinión pública y en otros muchos procesos que intervienen en el funcionamiento de dicho sistema. (Tomo 1/02 Página 131 Ú P)

La cultura política incluye:

  • 1. el nivel de conocimientos alcanzados y de representaciones existentes sobre la política, sobre los intereses hacia ella;

  • 2. las valoraciones y relaciones emocionales que guardan las diferentes clases y grupos sociales con respecto al poder político;

  • 3. conjunto de aspectos organizativo _ conductuales que conforman la vida política, como:

  • las tradiciones,

  • símbolos políticos,

  • los roles políticos,

  • los modelos de conducta política".

En las sociedades de clases antagónicas y en particular la capitalista.

  • 1. Existe una cultura política de clase dominante.

  • 2. Y una cultura política aglutinadora de los intereses de las masas populares.

  • 3. Existen subculturas más particulares de acuerdo a las estructuras sociales, profesionales, étnicas- nacionales etc. (Tomo 1/02 Página 132).

A partir de estos conceptos deben saber establecer la relación entre participación, socialización y cultura políticas. Dominar  los modelos de socialización política y el papel que desempeña la cultura política en el sistema político capitalista. Identificar los procesos de socialización y cultura políticas, su relación con la participación política en la sociedad contemporánea.

  • 1. La socialización y la cultura políticas como expresión de los valores e intereses de la clase dominante.

  • 2. Agentes y medios de socialización.

La socialización política del individuo es la influencia que sobre él ejerce: la familia; el medio circundante y el sistema político.

El proceso de asimilación por el hombre es de un determinado sistema de:

  • 1. Conocimientos.

  • 2. Normas.

  • 3. Valores.

La cultura política real.

Realiza la vinculación entre el sistema político como conjunto de elementos tradicionales y el sistema de in dividuos con su psicología y sus orientaci0ones políticas.

Esta ligada a la cultura general en el desarrollo histórico de la sociedad e incluye:

  • 1. Nivel de conocimiento alcanzado.

  • 2. Nivel de representaciones existentes sobre la política, sobre los intereses hacia ella.

  • 3. Las valoraciones y las relaciones emocionales que guardan las diferentes clases y grupos sociales con respecto al poder político.

  • 4. Los aspectos organizativos-conductuales que conforman la vida política (las tradiciones y símbolos políticos, los roles políticos y los modelos de conductas políticas).

En la formación y funcionamiento de la Cultura Política.

Tiene una importante influencia las peculiaridades del desarrollo histórico de la sociedad en general, y del sistema político en particular; así como también factores de carácter: Étnicos – nacionales, Demográficos, Religiosos etc. Socio clasistas (Desempeñan el rol decisivo)

En los documentos de nuestro VI Congreso, la cultura fue definida como:

"Expresión de identidad, la cultura es fuente de vida espiritual y por ello sustento de todo sistema de valores. Indispensable para el crecimiento del ser humano, vía de acceso al conocimiento, es componente necesario de todo auténtico proceso de desarrollo social y contribuye al logro de una mejor calidad de vida".

Con el objetivo de profundizar en el socialismo en nuestro país, desde la cultura los principales dirigentes asistentes en el VI Congreso de la UNEAC señalaron:

  • Continuar la batalla desde la cultura contra la banalidad y la superficialidad.

  • Saber bien lo que se importa de otros países, para preservar los valores de la cultura nacional.

  • Necesidad de que la UNEAC se caracterice por mantener y renovar, de forma permanente, la unidad de la intelectualidad en torno a la Revolución.

  • La necesidad de restaurar el tejido espiritual de la sociedad, donde hayan sido dañado los valores.

  • Acompañar la crítica, el análisis y la denuncia de los problemas con la decisión revolucionaria de participar en su solución. Martí, en Nuestra América: "la crítica es la salud, pero con un solo pecho y una sola mente.".

  • Que la vanguardia artística converse, discuta y critique aspectos cruciales junto a la máxima dirección del país, lo que no es usual en el mundo.

  • Una atención y seguimiento especial a la televisión, y a una mayor unidad entre el Instituto Cubano de Radio y Televisión (ICRT), el Ministerio de Cultura y la UNEAC.

  • La crítica justa y comprometida para avanzar en la construcción de la sociedad cubana, pero no de la crítica por la crítica que nada resuelve.

  • Necesidad de profundizar en el tema de la calidad en la programación televisiva y las medidas adoptadas para darle financiamiento continuado a los medios a fin de mantener su estabilidad.

  • Trabajar con urgencia por una mayor eficacia mediática y por una transformación del sistema de trabajo en el ICRT para hacer un mejor aprovechamiento de los costosos recursos y cumplir su función ideológica y creativa.

  • Estar a tono con el movimiento cultural en el mundo contemporáneo, en todas dimensiones, para que en la política cultural única estén representados todos los valores.

  • Reconocer la importancia de la Alternativa Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA), para el desarrollo de la cultura. "Los proyectos del ALBA han de tener un carácter colectivo, abarcador, que sirvan para unir culturas y pueblos en un camino irreversible hacia la justicia social" como, expresión cultural del esfuerzo integracionista impulsado por Cuba, Venezuela, Bolivia, Nicaragua y otros países. 

  • A la intelectualidad cubana, le corresponde jugar un papel de vanguardia en la proyección de una imagen real y profunda de nuestra cultura en el mundo.

  • La necesidad de realizar un trabajo cuidadoso en la inserción del arte cubano en el escenario internacional, para lograr el equilibrio entre el mercado y la cultura, la rentabilidad y los valores, sin que uno de esos polos anule al otro.

  • El importante papel que deben jugar nuestros medios en la proyección internacional de la cultura y la creación y sostenimiento de espacios que exijan profesionalismo de los periodistas y críticos, como premisa de una información rigurosa, más allá del éxito coyuntural, las modas y factores extrartísticos.

  • Continuar incrementando el prestigio de Cuba en zonas de la inteligencia cultural.

  • No temer al esclarecimiento de la verdad por riesgoso y complejo que sea, sin ingenuidad política alguna, esa ha sido siempre la mejor arma del socialismo.

  • La unidad (que no equivale a la homogeneidad de pensamiento, sino a la concertación de puntos de vista diferentes) de todas sus fuerzas como la estrategia fundamental de la Revolución cubana.

  • Destacar el papel esencial de la cultura como expresión de la identidad, fuente de vida espiritual y sustento de todo sistema de valores.

  • Luchar contra los modelos reduccionistas y banalizadores que han permeado amplios sectores de la población, teniendo en cuenta "las circunstancias políticas concretas en cada momento del país".

  • Eliminar con urgencia las insuficiencias de las entidades que tienen que ver con la formación del ciudadano y a las concesiones que en espacios como los destinados al turismo, las redes gastronómicas y el comercio, reproducen y difunden lo peor de los modelos seudo culturales impuestos por la globalización.  Lo que es aun mucho más grave cuando se hace desde las instituciones y empresas de la cultura, o se distribuye y amplifica cotidianamente a través de nuestros medios de difusión tanto en sus espacios para el llamado entretenimiento como en aquellos con propósitos educativos o informativos.

  • Luchar contra todos los que difunden modelos reduccionistas, simplificadores, banales, que no contribuyen a preparar a nuestra población para interactuar de manera inteligente, lúcida, con los circuitos contemporáneos de transmisión de la información, convirtiéndonos en ávidos receptores de toda banalidad simplificadora; favoreciendo así la elaboración de proyectos de vida basados en una falsa conciencia política.

  • Desde la cultura y los valores, discutir la formación de públicos y gustos, de modelos culturales" por todos nuestros escritores y artistas.

  • Lograr que la literatura y el arte reflejen, cada vez con mayor frecuencia, los problemas más complejos de la sociedad cubana y la necesidad de un diálogo adecuado y respetuoso entre los especialistas, las instituciones y los creadores.

  • Vigilar la calidad de todos los procesos culturales que tengan lugar en la sociedad cubana". En esencia, una función altamente participativa.

  • Constituir un espacio permanente para el diálogo serio, analítico y crítico, como requerimiento de la cultura cubana.

  • Lograr a través de una amplia cultura política, aquilatar lo que significaría para los cubanos regresar al pasado, siendo imprescindible en estos tiempos que corren, no olvidar la obra y figura del Ché.

  • Revertir en positivo los destinos del socialismo en Cuba porque el hombre no mira de qué lado se vive mejor, sino de qué lado está el deber.

  • Reafirmar nuestra visión optimista de las perspectivas actuales de la Revolución, donde hay un proceso de cambio y rectificaciones, la eliminación de restricciones, pero dentro del cauce socialista.

  • La UNEAC debe asumir uno de los mayores compromisos de la organización, velar porque la cultura se convierta en escudo y espada de la nación.

  • Llevar el juicio crítico y la reflexión de jerarquizar los vínculos de la UNEAC con el pueblo y las instituciones culturales a partir del protagonismo de su membresía y la restitución de sus funciones, donde el inmovilismo fue mellando el papel de la vanguardia artística.

  • Revitalizar la tradición pedagógica a tenor con la ética y la preparación de los maestros emergentes. "Nosotros tenemos una tradición pedagógica que forma parte de nuestra cultura". Y esa tradición hay que rescatarla.

  • Combatir con creatividad las "manifestaciones de burocratismo, demagogia, gremialismo y oportunismo" confrontando la diversidad de opiniones, pero siempre sobre la base del fortalecimiento de la unidad estratégica de la vanguardia artística y la política y el renovado compromiso con la Revolución y su liderazgo histórico encabezado por Fidel.

  • Actualizar y fortalecer la política cultural de la Revolución y priorizar el avance hacía una cultura socialista ajena a los epigonismos baldíos, que respete la pluralidad y la diversidad de criterios sin concesiones al hegemonismo y al colonialismo cultural.

  • Para hacer realidad estos empeños, la UNEAC seguirá siendo una organización selectiva, que agrupe a quienes con su ejemplo personal sean paradigmas del desarrollo artístico e intelectual alcanzado por el país, continuidad de la historia cultural cubana y reflejo de la política de la Revolución.

  • Fortalecer la atención con los jóvenes artistas, acentuando la premisa de que el trabajo político-ideológico debe pasar necesariamente por la formación cultural de sus promotores.

  • Recontextualizar las opciones de recreación al margen de la cultura de masas impuesta por los ideólogos del capitalismo contemporáneo que pretende sustituir el arte genuino por la superchería y el consumismo.

  • La integración armónica de todos los actores sociales como clave del éxito en el trabajo cultural comunitario, la labor cultural en ese ámbito sólo es eficaz cuando artistas e intelectuales actúan unidos a las instituciones, a las organizaciones políticas y de masas, y demás actores sociales.

  • Que las direcciones locales de cultura como catalizadores de esa integración, que hace posible que los trabajadores sociales, los promotores culturales, los creadores y la sociedad civil influyan en las necesidades espirituales de la comunidad.

  • Lograr que las investigaciones respondan a las necesidades reales y lograr la eficacia de la labor mancomunada de promotores, creadores y dirigentes.

  • La necesidad de estudiar, detalladamente, las características distintivas de cada localidad para poder jerarquizar las acciones culturales a desarrollar, sobre todo, aquellas vinculadas a la preservación y desarrollo de la cultura popular y tradicional.

  • Contribuir a que en los lugares públicos se ofrezca lo mejor de las creaciones culturales contemporáneas, especialmente, en centros de formación de niños y jóvenes.

  • Mantener a buen recaudo edificaciones centenarias, espacios de indiscutible valor histórico y tradiciones culturales heredadas a través de los siglos, devienen premisas para el trabajo artístico. "Hemos de ir andando, severamente andando, envueltos en el nuevo día que nace". Frase del Poeta Nacional de Cuba Nicolás Guillén.

  • Lograr que la educación sea considerada como patrimonio vivo de la nación, al respecto señalar que: que la vanguardia artística se vincule cada vez más con las escuelas de arte en todos sus niveles y se pondere al claustro de profesores como formadores de valores.

  • Revitalización del grupo de trabajo que integran la UNEAC, el Centro Nacional de Escuelas de Arte (CREART) y el resto de las instituciones del sistema para evaluar de manera sistemática el progreso de la enseñanza artística.

  • Que la vanguardia artística se vincule cada vez más con las escuelas de arte en todos sus niveles y se pondere al claustro de profesores como formadores de valores.

  • La creación de las escuelas de niños y jóvenes talentos de la música y de otras especialidades del arte.

  • Lograr maestros más cultos y alumnos mejor preparados.

  • Mayor proceso integrador de los artistas con el sistema de enseñanza artística.

  • Que existan más textos sobre la cultura cubana en las bibliotecas de las escuelas de arte, e incentivar entre el estudiantado el hábito por la lectura.

La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) aprecia la evolución sostenida del sistema de enseñanza artística cubano que cuenta con 63 centros en todo el país y más de 27 mil alumnos.

Carta de Fidel a los delegados del VI Congreso UNEAC La Habana/2008.

"todo lo que fortalezca éticamente a la Revolución es bueno, todo lo que la debilite es malo."

La conciencia humana, sus ambiciones e inclinaciones están a la altura de las que tenía en la sociedad griega de los tiempos de Platón, sólo que ahora está sometido a todo tipo de influencias distorsionadotas de la realidad y enajenadoras de la conciencia.

En los tiempos de la antigua Grecia el decursar bucólico de la existencia y la ausencia casi total de medios de comunicación hacía al ciudadano menos vulnerable a la manipulación desde afuera, a la siembra de ajenos, artificiales y perniciosos modelos y anhelos, hoy el individuo está expuesto a un barraje de propaganda y publicidad banalizadora, capaz de anularle incluso la capacidad de pensar con raciocinio.

No de balde en el mundo capitalista se gastan cada año millones de millones de dólares en publicidad que, además de subvertir los valores intrínsecos del hombre, su moral y su ética, poniendo en primer plano el ansia irracional de tener y tener, de subir y subir a cualquier precio, se transforma en un fenómeno que amenaza al medio y hasta a la propia supervivencia de la especie.

Los especialistas de marketing del capitalismo saben perfectamente lo que quieren y cómo lograrlo. Conocen por apropiación de estudios realizados por la Psicología, las debilidades de la conciencia humana y hacia esos puntos vulnerables dirigen su fuego. A ellos pertenecen los mensajes subliminares y otras técnicas para entrar por la puerta de atrás de la psiquis del hombre común y, lo mismo venderle un artefacto inútil que sembrarle una idea injusta.

En estos años hemos sido testigos de la facilidad con que algunos de esos clichés mentales hacen presa en ciertos compatriotas, sobre todo jóvenes, quienes asumen hipotéticas bondades de modelos ajenos con una actitud acritica.

A esa juventud hay que enseñarla a pensar como en su momento hizo el padre Varela con sus compatriotas de la época, a saber discernir entre lo verdadero y lo aparente, entre lo cierto y lo falso, entre lo justo y lo injusto. Y, sobre todo, a poner por delante de su propio interés individual, los del país y los de la sociedad en su conjunto.

Martí lo hizo, sólo que fue más allá cuando proclamó y dedicó su vida a predicar y hacer valer su pensamiento de que Patria es Humanidad. En este sentido están dirigidas las palabras de Fidel a nuestros intelectuales y su responsabilidad ante la sociedad cubana de nuestros días, en su condición de fragua de valores.

Armando Hart papel actual de la vanguardia artística en Cuba destacaba en el

VI Congreso UNEAC La Habana/2008.

Articular la cultura y la política concebida por el Héroe Nacional de Cuba como un arte.

La cultura cubana continuará desempeñando, como hasta aquí, el papel de escudo de nuestra identidad y de sus componentes esenciales, que hacen posible la existencia de Cuba como nación independiente y soberana.

Pensamiento de Martí de que primero la justicia y después el arte, y entonces afirmé "ha triunfado la justicia, adelante el arte".  Hoy, quiero comenzar subrayando: ha triunfado el arte, adelante la cultura general integral a que nos ha llamado Fidel, cuya primera categoría es la justicia. 

Como ha dicho el presidente Rafael Correa de Ecuador, no estamos en una época de cambio, sino en un cambio de época y debemos, por tanto, extraer conclusiones que resulten útiles y pertinentes para estos momentos excepcionales que nos ha tocado vivir.

Por primera vez en la dilatada historia del hombre existe el peligro real de que nuestra especie no pueda sobrevivir a causa de una catástrofe ecológica de enormes proporciones o de guerras devastadoras que rompan el equilibrio, cada vez más precario, que hace posible la vida sobre el planeta Tierra. El modelo de sociedad consumista depredadora de los recursos del mundo es insostenible y el drama social del hombre empeora por día y amenaza con el colapso de la civilización. La política guerrerista del gobierno de la potencia hegemónica ha colocado a la humanidad en una verdadera encrucijada. Fidel lo ha expresado de manera dramática: O cambia el curso de los acontecimientos o  no podría sobrevivir nuestra especie.

El mundo se ha globalizado y sus problemas también; no se trata ya de salvar a una comunidad aislada, sino a la humanidad toda. Se ha ido imponiendo un materialismo vulgar y ramplón acompañado por el desorden jurídico, las diferencias de desarrollo económico, social y cultural, el racismo, el hegemonismo y la "fascinación" por el modelo consumista a ultranza que impone el lenguaje subliminal y empobrecedor de los medios de comunicación. También existe una mayor conciencia aún de la gravedad del drama y se ha ampliado el conocimiento de amplios sectores de la población sobre estos peligros así como su capacidad de movilización para enfrentarlos.

En la raíz de estos males está la degradación ética. La corrupción de las costumbres y los consorcios de la droga marcan la impronta de la vida cotidiana en muchos países desarrollados, y para mayor escarnio se le achaca toda la responsabilidad de esta última a las zonas pobres productoras de la materia prima. La irresponsable política de la actual administración en Estados Unidos destinada a financiar guerras y carreras armamentistas han llevado a ese país al borde una aguda crisis económica que amenaza con extender sus efectos negativos a toda la economía mundial.

Es en medio de estas realidades que nuestro pueblo lleva adelante su revolución y desde luego ellas marcan también el carácter de muchas de las dificultades que debemos enfrentar y superar.

En la génesis de la historia cultural del hombre hace miles de años se halla la justicia como su principal categoría, fue el peldaño esencial y decisivo del movimiento cultural. No se trata, exclusivamente, de una formulación derivada de nuestras nobles aspiraciones, sino de una verdad científica y filosófica incuestionable para todos aquellos grandes sabios que pensaron y estudiaron con lucidez sobre los orígenes de la evolución cultural y su larga historia. La cultura no es sólo una categoría de la superestructura, es una infraestructura humana, es decir, lo que se ha llamado segunda naturaleza.

Con esa confianza infinita en el mejoramiento humano y en el papel de la educación y la cultura, Fidel ha señalado:

El gran caudal hacia el futuro de la mente humana consiste en el enorme potencial de inteligencia genéticamente recibido que no somos capaces de utilizar. Ahí está lo que disponemos, ahí está el porvenir.

Los cubanos contamos con una tradición intelectual que se remonta a los tiempos forjadores de la nacionalidad. Luz y Caballero dijo que Félix Varela fue el hombre que nos enseñó a pensar primero. Podríamos agregar: Luz nos enseñó a conocer; y Martí, en base a esta tradición, y a su genio a actuar.  Por último, sobre estos fundamentos Fidel Castro nos ha enseñado, y nos continúa enseñando a vencer. Pensar, conocer y actuar en función de los intereses de los pobres y de toda la humanidad están en la raíz de la cultura decimonónica cubana que constituye el fundamento de la cultura general integral que las más importantes figuras de nuestra intelectualidad han sustentado.

 Como una singularidad de nuestro devenir histórico, en Cuba se produjo una vinculación muy estrecha entre el movimiento intelectual, artístico y literario, y el movimiento social y político. Cuando el movimiento artístico y literario se articula con el de carácter científico natural, aparecen con claridad ante nosotros los caminos políticos que requiere la nueva época.

Recuerdo cuando asumí el Misterio de Cultura,  el primer encuentro y  el de mayor utilidad e importancia, fue con los más sobresalientes intelectuales del país. Pude comprobar, que salvo alguna que otra excepción los  más importantes intelectuales cubanos pertenecían al Grupo Orígenes, de raíz cristiana, presidido por José Lezama Lima y a la Sociedad Nuestro Tiempo, presidida por Harold Gramatges y que orientaba el Partido Socialista Popular. Esto explica que las figuras cimeras de la cultura nacional siempre estuvieron junto a la revolución.

Bien se sabe que he venido insistiendo siempre en  ello y hoy lo hago, más que nunca antes, porque ahí está la clave de por dónde empezar para enfrentar el drama de nuestra época.  Esto es hablar de Martí, de Mella y de otros intelectuales y personalidades de la tradición cubana.  Repasemos las glorias más altas a escala de Nicolás Guillén, primer presidente de la UNEAC, a quien está dedicado muy acertadamente este Congreso, de Alejo Carpentier, Lezama Lima, Juan Marinello, Julio Le Riverend, Mariano Rodríguez, Amelia Peláez, René Portocarrero o Cintio Vitier, Fina García Marruz y Alicia Alonso, los tres últimos presentes entre nosotros y otros muchos, y no se encontrará ninguno de esa escala que haya traicionado a la Revolución socialista triunfante el 1º de enero de 1959.

Esta es una de las grandes enseñanzas válidas para los que crean arte, educación y cultura, y válida también para los que hacen política. Olvidar una de estas dos dimensiones o ponerlas en antagonismo y no relacionarlas, le hace daño al socialismo.  Esta es la dolorosa experiencia de la historia socialista tras la muerte de Lenin. Articularlas debidamente es estar a la altura de Martí y de Fidel.  De ahí nuestra insistencia en la necesidad de vincular el movimiento universitario y académico en general con el movimiento  social y político.

Sobre estos fundamentos, las ideas políticas y el pensamiento social cubano se empalmaron en el siglo XX con la cultura europea de Marx y Engels insertándose en nuestra identidad a partir de una interpretación original, como siempre lo ha hecho América Latina con lo que le ha llegado del exterior. Por esto hemos subrayado que el ideal socialista en Cuba se orienta por la interpretación de Mella, Martínez Villena, el Che y Fidel. Asumimos la historia del socialismo a partir de una visión crítica y apoyándonos en una vieja institución jurídica que formulaba el derecho de aceptar herencias a beneficio de inventario. De esta manera no tenía que cargarse con las deudas. Fueron los elementos de la tradición cubana y latinoamericana los que crearon los antecedentes de nuestras ideas de hoy.

Está a la vista la fractura de las bases éticas, políticas y jurídicas de las sociedades más desarrolladas de Occidente, y en especial la norteamericana actual, la cual constituye, como se sabe, el poder hegemónico del capitalismo mundial. 

José Martí caracterizó el desafío que aún hoy tiene vigencia. La contradicción, dijo, no está entre civilización y barbarie, sino entre falsa erudición y naturaleza. Así, cuando la cultura se corresponde con intentos de dominación es falsa erudición y por consiguiente agrede a la propia naturaleza, y en cambio cuando se identifica con el ideal de liberación, se revela como una segunda naturaleza genuinamente humana. Ella no es accesoria a la vida del hombre, está comprometida con el destino de la humanidad y situada en el sistema nervioso central de las civilizaciones. En la cultura hacen síntesis los elementos necesarios para la acción, el funcionamiento y la generación de la vida social de forma cada vez más amplia. Las alternativas de un progreso económico estable han fracasado en diversos proyectos, porque se subestimó el factor humano y la compleja trama de relaciones, creencias y valores que se hallan en la médula de la cultura.  

La cultura siempre ocupó un lugar destacado en los procesos productivos y en la economía y al igual que el universo, en cuanto a espacio físico, ella tiene una influencia infinita en el desarrollo humano y por tanto en la propia economía. Los métodos económicos, especialmente los vigentes, no son suficientes para determinar todo su alcance, aun  mejorados, porque no se puede medir el universo con cintas métricas, es necesario utilizar años-luz.  He venido insistiendo en la idea de que la influencia de la cultura es de tal dimensión económica que resulta imposible medirla por métodos convencionales. En las actuales condiciones se ha convertido en una apremiante necesidad  determinar la magnitud económica de la cultura y el arte.

La Nación cubana alcanzó, desde su propio alumbramiento, una cultura política y social situada en la avanzada de la Edad Moderna, porque asumió la cultura occidental en función de los intereses de la población trabajadora y explotada no sólo del país, sino del mundo. Recuérdese que Martí echó su suerte no sólo con los pobres de Cuba, sino de todo el orbe.

Investigar, estudiar y promover los vínculos que unen a todos estos componentes espirituales, piezas maestras de la tradición intelectual de la historia de Occidente, sólo se puede hacer sobre el fundamento de una síntesis universal de ciencia y conciencia. Lo más trascendente está en que ello constituye una necesidad objetiva para salvar la civilización occidental del caos creciente.        

Por estas razones, y en cuanto a Cuba y sus tareas educativas, científicas y sociales inmediatas, se impone el fortalecimiento jurídico y cultural sobre el fundamento de la historia nacional, latinoamericana y universal; es necesario hacerlo con independencia de los procesos intelectuales acaecidos en otras zonas del mundo.

En la ética y en la política culta está la clave para encontrar los nuevos caminos del socialismo. Esta es la enseñanza que nos brindan Martí y Fidel, y yo no he sido más que un modesto aprendiz de  los dos más grandes políticos que ha dado Cuba: Fidel y Martí. Fue a partir de  la universalidad de Martí que me hice marxista en los tiempos que entraba definitivamente en crisis el pensamiento soviético.

En Martí y en Fidel está presente una visión humanista de la política que se fundamenta en la defensa radical  de la libertad y la dignidad humanas para todos los individuos que pueblan el planeta y, al mismo tiempo, en la búsqueda de fórmulas armoniosas que logren sumar al mayor número posible de personas a la consecución de los objetivos que se persiguen.

Hay personas radicales que no son suficientemente armoniosas, y por tanto no pueden enfrentar felizmente el drama de nuestra época y los hay muy armoniosos que no logran llegar a ninguna parte. Hay que ser radicales y armoniosos a la vez, esa es la raíz de la política martiana y fidelista. He ahí la clave para hacer política en estos comienzos de siglo XXI.

Se ha planteado con mucha fuerza el tema de la calidad de la educación tanto general como artística y quiero insistir en la idea de que la masividad ha de ir acompañada de la calidad.  No habrá una sin la otra, lo esencial se halla en que si no empleamos un método que llegue a las masas, a maestros, alumnos y al pueblo en general, no se podrán cumplir estos objetivos. Y, para ello, debemos apoyarnos en cuatro pilares esenciales que inciden en este tema: La familia, la escuela, la comunidad y los medios masivos en general.

Cuando se produjeron a comienzos del pasado año las discusiones en torno a situaciones creadas que se relacionaban con la política cultural recordé aquella frase de Juan Marinello "Toda gran libertad supone una gran responsabilidad" y me dispuse a participar modestamente en el debate ejerciendo la libertad que creó y garantizó la revolución y cuidando de nuestras grandes responsabilidades.

Sigo pensando que hoy resulta esencial hacer uso de esa libertad para defender la tradición democrática, revolucionaria y socialista de la nación cubana y de los valores de lo que podemos llamar el ADN de Cuba, es decir  de nuestra identidad. Hoy tenemos responsabilidades mayores porque no solo estamos defendiendo la cultura cubana, sino también su influencia necesaria en la cultura latinoamericana, caribeña e incluso mundial. La cultura que representan Martí y Fidel tiene responsabilidades universales.

En la articulación, de manera creadora,  de la cultura, que tiene en la justicia su categoría principal, con  la política culta, que toma muy en cuenta la tradición intelectual de la nación cubana con su aspiración a una cultura general integral, está la clave para alcanzar la invulnerabilidad ideológica a que aspiramos.

En Cuba esa articulación se fundamenta en sólidos principios éticos y que podemos resumir en aquella frase memorable del fundador de la escuela cubana José de la Luz y Caballero:

Antes quisiera yo ver desplomadas, no digo las instituciones de los hombres, sino las estrellas todas del firmamento, que ver caer del pecho humano el sentimiento de la justicia, ese sol del mundo moral. 

Para abordar el tema del nuevo pensamiento filosófico  que requiere el siglo XXI  debemos desterrar definitivamente los istmos que debilitan la actividad creadora del hombre y apoyarnos en el método electivo de la tradición filosófica cubana del siglo XIX, que se sintetiza en aquella fórmula del propio Luz y Caballero: Todos los métodos y ningún método, he ahí el método. Consideremos a los sabios, llámense Einstein, Newton, Marx, Aristóteles, etc., o llámese también Che Guevara, no como dioses que todo lo resolvieron adecuadamente sino como gigantes, que descubrieron verdades esenciales que son puntos de partida para descubrir otras verdades que ellos, en su tiempo, no podían encontrar. Esto es, afirmarse en el pensamiento del Che Guevara, de Marx, Engels, Lenin, Martí y de todos los grandes pensadores de la historia universal.

Se impone como una necesidad insoslayable poner fin a esa dicotomía estéril que establece una línea divisoria infranqueable entre lo objetivo y lo subjetivo, entre  razón y emociones, entre teoría y práctica. He insistido en la idea que el principal error de los materialistas del siglo XX fue no tomar en cuenta que el hombre es también materia.

La manera de encontrar un camino científico y filosófico para el mundo del presente y del futuro es relacionar dos elementos presentes en la condición humana: las emociones y la inteligencia, y que ellas nos conduzcan a la acción.

Hay, en resumen dos cuestiones esenciales que estoy muy interesado en subrayar:

 a) Los artistas y escritores, muy relacionados con quienes crean y laboran en  las disciplinas sociales y humanista y en las de las ciencias naturales, pueden hacer un aporte de trascendencia a la cultura cubana, latinoamericana y universal. Desde los orígenes mismos de nuestra nacionalidad y de nuestra tradición cultural, la justicia se asumió y exaltó como su principal categoría. Hoy, a partir de los vertiginosos progresos en las esferas tecnológicas y de la información, podemos demostrar que la cultura se ha convertido en el principal motor de la economía.

 b) La vinculación cada vez más estrecha de las ciencias naturales y sociales pueden hacer una contribución de gran trascendencia en la educación, la cultura y la  práctica política a partir del método electivo de la tradición cubana y subrayar los vínculos entre inteligencia y emoción que son los pilares del nuevo pensamiento filosófico que necesita hoy la humanidad.

Reitero, la necesidad de articular, con la pericia y sensibilidad de orfebres, la cultura y la política concebida por Martí como un arte.  No perdamos esta oportunidad.

¡Adelante, pues, la justicia, que es decir la cultura!

Los partidos políticos: Son el resultado de la lucha de clase y son la expresión más o menos adecuada de las clases y fracciones de clases. F. Engels.

Carlos Marx. En el manifiesto comunista recalcó la necesidad de que la clase obrera se organizara políticamente y se transformara en partido político para alcanzar el poder político.

El estado de democracia real de un país. El grado de participación efectiva de la gente en los asuntos sociales y del Estado, define el estado de democracia real de un país.

Resumen. Para culminar el estudio de esta temática debe responder argumentadamente a la interrogante.

¿Se puede afirmar que los partidos políticos en las sociedades capitalistas en la actualidad están en crisis?

Puntualizar como lo más importante: saber valorar, desde el punto de vista marxista, el concepto de política, su relación con el poder político y con la legitimación social de éste, así como con el concepto de sistema político. Poder argumentar la relación entre el conflicto y la lucha de clases, los diferentes casos de conflictos que se dan hoy en el mundo. Caracterizar a los partidos políticos y grupos de presión y la relación entre estos actores políticos, identificación de los procesos de socialización y cultura políticas, su relación con la participación política en la sociedad contemporánea.

Tarea de estudio: Realizar un resumen sobre las nociones de partidos políticos, grupos de presión y la relación entre estos actores políticos. Así como la identificación de los procesos de socialización y cultura políticas, su relación con la participación política en la sociedad contemporánea.

ACTIVIDADES DE AUTOEVALUACIÓN: Responda las siguientes preguntas:

  • 1. ¿Qué relaciones existen entre los conceptos de partidos políticos y de grupos de presión? Defina cada uno de ellos.

  • 2. Caracterice los partidos políticos en los países capitalistas actualmente.

  • 3. Relacione los conceptos de participación, socialización y cultura políticas.

TEMA 2: CORRIENTES POLÍTICAS CONTEMPORÁNEAS.

CLASE ENCUENTRO No.1 La izquierda como vertiente política, la socialdemocracia, el socialismo, teoría y práctica; derrumbe y desmontaje del socialismo en Europa del este y la URSS; la transmisión al capitalismo; balance socio político; la experiencia socialista China y Viet nam. (Tomo 1/02 Páginas 137-314 Tomo 2/06 Páginas 3 – 204).

PROBLEMA: Caracterización de las distintos tipos de corriente políticas contemporáneas. Caracterización de las corrientes políticas de derecha.

OBJETIVOS:

  • 1. Caracterizar a la izquierda como vertiente ideopolítica en el mundo de hoy, las diferentes corrientes y fuerzas políticas que la componen y sus retos actuales.

  • 2. Demostrar la vigencia de la teoría del socialismo en la actualidad, precisando el papel de las reformas en la transición al socialismo.

  • 3. Valorar las causas y consecuencias del derrumbe y desmontaje del socialismo de Europa del Este y la URSS.

  • 4. Valorar que la transición del socialismo al capitalismo es un proceso regresivo. Sus características en Europa del Este y Rusia.

SISTEMA DE CONOCIMIENTOS:

La izquierda como vertiente política: la lucha por su recomposición. Las diferentes fuerzas políticas que la componen Sus retos actuales.

El socialismo y su vigencia como teoría y como proyecto político. Problemas teóricos de la transición al socialismo. Las reformas y su lugar en este proceso. Causas y consecuencias del derrumbe y desmontaje del socialismo de Europa del Este y la URSS. Especificidad de cada caso. La transición del socialismo al capitalismo como proceso sociopolítico regresivo. Sus particularidades en Europa del Este y Rusia.

La socialdemocracia internacional contemporánea. Sus principales proyecciones políticas. La conservación del capitalismo desde esta perspectiva.

La derecha como vertiente política. Diferentes fuerzas políticas que la componen. La conservación del capitalismo en la perspectiva de las expresiones teórico-políticas de derecha. La democracia cristiana. Su esencia. Principales proyecciones políticas en los años 90. La extrema derecha. Su esencia. Causas del surgimiento y características de la extrema derecha actual.

Método: Elaboración conjunta y trabajo independiente.

Medios: Libro de texto y guía de estudio.

Sistema de evaluación: Preguntas orales o escritas.

ORIENTACIONES PARA EL TRABAJO INDEPENDIENTE:

El análisis de este bloque temático debe partir de una presentación general de que el espectro político en la actualidad  se mueve en un complejo entramado de corrientes políticas. Entre ellas se pueden señalar algunas principales: el liberalismo, su tradición y su actualización en los noventa, el neoconservadurismo como ideología política del neoliberalismo, el comunitarismo y el utilitarismo como vertientes del liberalismo, el marxismo y el socialismo, la socialdemocracia, el social cristianismo (democracia cristiana), el feminismo (perspectiva de género en Teoría Política), el medioambientalismo, el pacifismo, los fundamentalismos, el racismo y el antirracismo, el postmodernismo, y otras.

Una vez representado las distintas corrientes políticas que se manifiestan en el mundo de hoy, lo fundamental está en saber revelar hacia qué tendencia pertenecen, o sea, si son conservadoras o progresistas.

La socialdemocracia es una corriente política que en determinados momentos y situaciones concretas se orienta hacia la izquierda. Los estudiantes deben caracterizarla, así como el divorcio entre programas y su proyección en el gobierno, su base social actual, su modelo económico y político de estructura de la sociedad y su proyección hacia América Latina.

Sobre el socialismo por ser aspecto esencial del programa de la asignatura se deben realizar resúmenes sobre: el concepto período de transición, sus características y tareas de la revolución. El estudiante debe tener claro que la revolución socialista se inicia con la revolución política y se mantiene durante toda la transición al socialismo, en la cual se mantiene la primacía de la política sobre la economía.

EL ESTUDIANTE DEBE DOMINAR:

  • los aspectos teóricos generales de la transición del capitalismo al socialismo, las contradicciones del período de tránsito en Cuba, las causas y consecuencias del derrumbe y desmontaje del socialismo de Europa del Este y la URSS.

  • Las reformas y su lugar en la transición al socialismo.

  • Características fundamentales de la transición del socialismo al capitalismo como proceso sociopolítico regresivo.

  • Las experiencias de construcción del socialismo en China y Vietnam.

El estudiante debe realizar las actividades de auto evaluación que aparecen en la guía correspondiente a los contenidos tratados en el encuentro.

BIBLIOGRAFIA BASICA.

Colectivo de Autores Teoría Sociopolítica. Selección de Temas. Editorial Feliz Valera La Habana 2002 y 2006 Tomo 1/02. Parte II Página 137 -274 .Tomo 2/06 106. Páginas 3 – 204).

BIBLIOGRAFIA COMPLEMENTARIA.

  • Álvarez Somoza, Francisco. Cultura política: componentes y crisis. Revista de Estudios Europeos, La Habana, No. 33.

  • Hannecker, Martha. La izquierda en el umbral del siglo XXI. Edit. Ciencias Sociales. La Habana, 1999, 3ra. Parte, págs. 271-310.

  • Hobsbawn, Erik. Crisis de las ideologías: liberalismo y socialismo: Memorias. México, D.F.No 414/92.

  • Lenin, V. I. Acerca de la significación del oro, ahora y después de la victoria completa del socialismo; Cinco años de la Revolución rusa y perspectivas de la revolución mundial; La nueva política económica y las tareas de los Comités de Instrucción. En: Obras escogidas en 12 tomos, tomo 2. Editorial Progreso. Moscú, 1977.

  • Lenin, V. I. La economía y la política en la época de la dictadura del proletariado. Obras Escogidas, T. III.

La izquierda como vertiente política, diferentes corrientes y fuerzas políticas y sus retos actuales

TOMO 1/02 PÁGINAS 137 – 152 (TOMO 2/06 PÁGINAS 3 – 51)

El debate sobre la Izquierda y la Derecha en la Teoría Política tiene un carácter histórico-concreto, surge con la Revolución Francesa y se ha mantenido hasta la actualidad, donde presenta características muy polémicas y límites a veces muy difusos. Pero lo más importante es entender que se trata de un debate entre las fuerzas del conservadurismo (defensoras de la eternidad del régimen capitalista) y las fuerzas del progreso social (tendentes a una alternativa distinta al sistema capitalista, por lo general partidarias de una sociedad más justa,  de igualdad, equidad y libertad reales, cercanas, en su conjunto, a una alternativa socialista revolucionaria auténtica).

La izquierda como vertiente política.

Algunas cuestiones preliminares que debe tenerse en cuenta para la mejor comprensión del tema:

La izquierda es un término referencial surgido de la práctica política, con el que se identifican generalmente las fuerzas progresistas y renovadoras, contestarías del orden conservador establecido, que pretenden renovar determinados valores básicos (ideológicos, políticos, éticos, sociales y económicos) de aquellos sistemas que ya no son representativos del avance, la renovación y el proceso social.

Por tanto, en las condiciones del espectro político mundial actual, las fuerzas políticas que integran esta vertiente no poseen fronteras nítidamente definidas. De manera convencional, en los marcos de la "democracia representativa", se incluyen en la izquierda: los partidos de orientación comunista, los partidos de inclinación social reformista (en especial los socialdemócratas) y los nuevos movimientos de participación ciudadana con tendencia progresista. Este esquema de fuerzas se ajusta a los países capitalistas desarrollados y, en cierta medida, a los países de un nivel medio de desarrollo; en otras regiones del mundo se consideran también componentes de la izquierda: los movimientos políticos militares de liberación nacional y los movimientos sociales democráticos urbanos.

La izquierda.

Las fuerzas progresistas y renovadoras, contestarías del orden conservador establecido, que pretenden renovar determinados valores básicos (ideológicos, políticos, éticos, sociales y económicos) de aquellos sistemas que ya no son representativos del avance, la renovación y el proceso social. (Tomo 1/02 Página 142 P2. Tomo 2/06 Página 25).

El concepto de Izquierda en su sentido histórico tuvo su origen años después de la Revolución Francesa, cuando los parlamentarios se sentaron a la derecha e izquierda del Rey según la defendieran o rechazaran los privilegios del absolutismo. (Tomo 2/06 Página 37 P1).

Estas interpretaciones sobre el término izquierda discriminan sus elementos, de los de la derecha, a partir de su posición con respecto a la categoría progreso, permitiendo considerar a los partidos comunistas, junto al movimiento socialdemócrata (incluyendo al partido laborista británico), tan apegado a las políticas neoliberales en los últimos años y puedan seguir siendo considerados de izquierda. (Tomo 2/06 Página 37 P3).

La base objetiva del complejo proceso de crisis de la izquierda está inmersa dentro del proceso de "crisis de la cultura política" a partir de los profundos cambios que se han operado en todas las esferas de la sociedad, redimensionado como resultado del proceso de globalización que genera el capitalismo monopolista trasnacional. Estos elementos han provocado un reordenamiento en la estructura socioclasista de la sociedad, que incide directamente en sus expresiones políticas e ideológicas. (Tomo 2/06 Página 21 P3).

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