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La Barbarie Doctrinal de Gobierno (página 7)

Enviado por Alberto JIMÉNEZ URE


Partes: 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7

Luego de recibir un dudoso de legitimidad «mandato», algunos «gobernantes» han cambiado la bitácora de navegación de los barcos a los cuales se les confirió la responsabilidad de capitanear. Estaban informados que tenían al frente un mar agitado, es cierto, pero no infalible. Sin esperar que las aguas sosegaran, ellos eligieron conducir sus naciones hacia donde había alerta internacional de «tsunamis»: pero, no sin antes resguardarse junto con la cúpula de buró-ratas en distantes y seguros puestos de control. Los avances de la Tecnología Comunicacional les permiten ser imbéciles «sin parecerlo», ser déspotas pero «transfiriéndoles» sus actos criminales a millones de inocentes e ingenuas víctimas.

Escribió MARITAIN: «[…] El lógico, que considera ante todo el término y la proposición desde el punto de vista de su uso en el razonamiento, se aferra, sobre todo, a la división del término en sujeto (S) y predicado (Pr.) […]» (61). Quienes juzgamos los acaecimientos conforme a (términos) conceptos que aprendimos respecto a lo que es el Ser Humano, sus percepciones, representación y voluntad, no admitimos la perversión de los sentidos como parte del orden de los conceptos que da forma a la Conciencia Universal del Bien. Semejante fusión sólo satisfaría a los desalmados que propugnan, torcidamente, que el «Derecho al Ultraje de Funcionariado» es irrecusable por ser cometido por representantes de la «institucionalidad». Somos lógicos, y -por ello- para nosotros hay un individuo (sujeto) que predica para ser «infractor» o «salvador». Inflige o beneficia, según los casos, pero sus actos no son difusos.

Luce similar a la trama de una de mis novelas premonitorias, pero, en esta realidad y tiempo advierto que hay un evidente desorden en los conceptos que la iniquidad difunde para sostener el «Derecho al Ultraje de Funcionariado» que soberbios exhiben mandatarios con sus cortes de bufones y mercenarios de antiquísima estirpe leguleya. La Conciencia Universal del Bien bebe de la pócima de Jacques MARITAIN: «[…] Si este estado de anulación de toda zozobra, si esta calma y serenidad en las que el alma permanece vacía de toda ansiedad de deseo y de toda clase de temor, si esta ataraxia es el cumplimiento supremo de la vida humana […]» (62)

La imperturbabilidad del Ser Humano ante el protagonismo y malicia de obcecados violadores que (con espurio poder) provocan tribulaciones al mundo no es cómplice: indica que prosigue de pie, sin letalidad valiente, sosteniéndose con los principios morales que le han permitido permanecer impoluto en el interior de las fauces de las bestias que al cabo derrota.

(XCII)

El Factor «Juris Pendencia» santificado por ex constituyentes que conspiran para cometer con Juezas y Jueces

«De un[a] ex constituyente aplica se diga: persona que conforma un grupo de elegidas y electos con intereses convergentes para crear una constitución, empero que procura redactarla de tal forma que no deje sin trabajo para interpretarla a mujeres u hombres de leyes que serán muy bien remunerados para degenerar sus preceptos o custodiarlos de acuerdo a las exigencias de la burocracia política al mando o los ad infinitum timados ciudadanos de una república»

Sobre el Derecho a manifestar en Venezuela, en un párrafo de la «Juris Pendencia» (63) leo: «[…] En la presente causa la Sala, en atención a la facultad discrecional que posee, considera pertinente entrar a emitir pronunciamiento sobre el fondo del asunto planteado, sin necesidad de abrir procedimiento alguno, por estimar que la causa constituye un asunto de mero derecho […]»

Urge recordar que la «Carta Magna» es la máxima norma de una república, a partir de cuyo contenido se podrán redactar leyes que –aun cuando regulatorias- no constituyan un desacato a su espíritu. Abogados y juezas o jueces adhesos de gobiernos monopólicos (como los neo-comunistas del S. XXI en Latinoamérica, en cuyos despachos las conductas de monarcas se reeditan) tienen por hábito insistir en la de caterva interpretaciones «Iuris-Laxas» de las constituciones para blindar las masacres o abusos de poder de los infractores con mando porque pertenecen a sus hordas políticas.

En cuanto a la discrecionalidad de los jueces aludida en esa sentencia, a mi parecer es absurda por cuanto ante un precepto constitucional explícito ningún árbitro en ejercicio de impartición de Justicia puede arrogarse la facultad de dictar conforme a sus caprichos. Las providencias de supremos tribunales para la santificación de la Injusticia (de la estirpe que en Venezuela intimidan) como la publicada en el mes de Abril de 2014, nada esclarecen pero tienen ponzoña: «[…] cualquier concentración, manifestación o reunión pública que no cuente con el aval previo de la autorización por parte de la respectiva autoridad competente para ello, podrá dar lugar a que los cuerpos policiales y de seguridad en el control del orden público a los fines de asegurar el derecho al libre tránsito y otros constitucionales (como, por ejemplo, el derecho al acceso a un instituto de salud, derecho a la vida e integridad física) actúen dispersando dichas concentraciones con el uso de los mecanismos más adecuados para ello, en el marco de los dispuesto en la Constitución y el orden jurídico […]» Si la Ley de Partidos Políticos, Reuniones Públicas y Manifestaciones contradice lo claramente expuesto en el Art. 68 (64) de la Constitución Nacional de Venezuela vigente desde 1999, entonces es írrita y nula (supra, Art. 07)

Los magistrados de una sala política situacional deberían ocuparse de la defensa, sin circunloquios, de los fundamentos de una constitución: de sus provectos enunciados, que no admiten ser interceptados por alcabalas donde personas interesadas en perpetuarse en el poder pretenden sodomizar a los ciudadanos que mantienen como rehenes de sus perversidades. Entre sus atribuciones no está la de dictar discrecionalmente sentencias: sino leer los enrevesados contenidos de un petitorio y despiojarlos.

Desde hace más de una dácada, en Venezuela los «Síndrome de los Hermanos Escarrá» y el «José Vicente Rangeliano» pretenden sustituir el Principio de Razón Suficiente por la arbitrariedad y confusión implícitas en la discrecionalidad interpretativa de la Constitución e inferencias públicas del Funcionariado y Bufonariado Cívico-Militar de Alto Rango. A extranjeros que pudieran leer mis epilogismos y que no estén informados sobre los personajes que dan nombre a esas pandémicas enfermedades o síndromes, sugiero que investiguen la trayectoria de estos personajes: José Vicente RANGEL y hermanos Carlos-Hermán ESCARRÁ. En el curso de sus nocivas tribulaciones de radio y televisión, un ya difunto y corrompido militar vociferaba insultos y amenazas de muerte contra millones de ciudadanos que luego RANGEL maquillaría con «interpretaciones discrecionales». El caso de los hermanos ESCARRÁ es mucho más lamentable porque consagraron sus talentos a la legitimación de los actos inconstitucionales de quienes tiranizan. En perjuicio de nuestros «Derechos Humanos» (a la Vida, Protesta, etc.) los usurpadores frente al Poder Ejecutivo han ordenado prácticas genocidas y cruentas represiones contra quienes conformamos la población venezolana que manifiesta su malestar por la mala vida que férrea y gradualmente nos imponen.

(XCIII)

Revolución: su «etimología», «tretas de juego» y «caradura del prontuariado»

«Algunos historiadores falsifican la Realidad, los políticos pretenden confiscarla para torcerla, ciertos sociólogos intentan forjarle una estructura teorética para justificar las luchas fratricidas entre societarios, los psiquiatras ven en cada individuo a un desquiciado ciertamente en potencia, los científicos la someten a experimentaciones y los escritores fabulamos para olvidarla a veces pero otras con propósitos de enmendar los suplicios de las personas que ella –inmisericorde como quirurgo forense- muestra»

En el curso de toda ordinaria «Caradura del Prontuariado», quienes en el ámbito político fastidian no inventan una nueva revolución u hoz con martirio: sólo dicen que la hacen porque ellos son revolucionarios a causa de su patogénesis o «sufrimiento primario» y –sin previo anuncio- emprenden hostigamientos contra las clases sociales comprometidas con el progreso. Impulsar una revolución («revolutum») es iniciar, literalmente, giros para mover algo o evitar el aburrimiento, esto último en palacios donde los parásitos de gobierno vampirizan a la Tesorería de Estado. Un objeto esférico gira sobre un eje invisible aunque igual puede trasladarse hacia cualquier parte, sin dejar de rotar, como nuestro planeta.

Cuando los sistemas políticos del pasado requieren transformarse para ser corregidos y no generen padecimientos de la Humanidad, entonces se presume que necesitamos aplicarles «revoluciones» para moverlos hacia adelante. Avanzar es el fin supremo de toda organización social. Dale mayor velocidad al motor de un gobierno y verás que los ciudadanos progresan. Jamás aceptaré la publicitada tesis según la cual ciertos regímenes explícitamente totalitarios (se ajusta más a la realidad calificarlos de ese modo y no «autoritarios») hayan sido o sean revolucionarios.

Que alguien me refute e infiera las razones por las cuales está persuadido que la masacre con guillotina (Grande Peur) fue un signo de progreso en París, allá donde se presume que los hombres más inteligentes del momento idearían una profunda y beneficiosa transformación social (1789-1799). Tal vez no se equivocó Georges LEFEBVRE al escribir que la Asamblea Nacional Constituyente de Francia firmó el Acta de Defunción del Viejo Orden Feudal, pero el Vandalismo como acto de novísimo gobierno que le sucedería no tuvo nada de «humanista» y por ello no admito se le califique como «revolucionario».

La Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano (Agosto 27 de 1789) no necesita de la Sala de Interpretación Bufonariada de nuestro tiempo en Venezuela, esa que proscribe el Derecho a la Protesta «[…] porque no es un concepto absoluto […]». La libertad, propiedad, seguridad, resistencia a la opresión, libertad de opinión, de prensa y de conciencia, protesta, libertad individual, presunción de inocencia e irretroactividad de la ley son imprescriptibles. Los conceptos de Ilustración y Soberanía Popular que impulsaron la abolición de «feudos», «servidumbres personales» y «diezmos» característicos de una Monarquía no han desaparecido en el Mundo (mucho menos en Latinoamérica). Las vilezas y crímenes de costura monárquica no extinguieron con la muerte de Luis XVI ni con la irrupción de Napoleón BONAPARTE en la Francia estigmatizada por la agitación política permanente, pena capital, desigualdad social, miseria y guerras (por ambición de conquista, arrogancia militar y mitomanías)

Con mostachos, calvas, boinas, charreteras, pantalones, faldas o no, la América Latina ha parido degeneradas y degenerados que portan un virus letal: cuya cepa es mutante y muestra resistencia a los antibióticos. Por ello hoy padecemos lo que llamo «Caradura del Prontuariado», que a veces igual defino «Dictadura de Bufonariado».

(XCIV)

Organigrama de la Dictadura de Bufonariado

«Desafío a los adeptos de tiranías que muestren sus razonamientos y públicamente defiendan, sin bufonadas, la falacia según la cual quienes impulsan la corrosiva percepción feudal o monopólica de los poderes en un país son aptos o doctos para formular proyectos de Estado»

Es irrestricto que un Estado corrompido se sostenga gracias a su bufonería de nómina, presente en las siguientes y fundamentales instituciones: PRIMERA.- El «Coger Ejecutivo». SEGUNDA.- La «Apalea Nacional». TERCERA.- El «Tribunal Excretorio de Justicia».- CUARTA.- El «Joder a Ciudadanos» y QUINTA.- La «Puerca Uniformada Nacional».

Alguien puede coger, dejar que le cojan o mantenerse célibe mientras otros cogen sin necesidad de copular o «cargarse a cualquiera que se lo permita». En un Régimen Dictatorial de Bufonariado, los que ejecutivamente cogen billetardos ajenos forman parte de uno de los prescindibles poderes públicos estatales. «Coger» no es un delito siempre que lo entiendas conforme a otras acepciones que tiene el vocablo. De modo intuitivo y en cofradía institucional, quien integra un «Coger Ejecutivo» piensa que no se apropia de las reservas financieras o tesoros de la nación a la cual pertenece sino que está «en situación de goce o disfrute» de esos emolumentos. La Epistemología lo certificará y hasta podría declarar que él es un individuo «cogitativo» porque supo cómo y dónde «coger».

No es difícil entender que en claustros donde se parla con ferocidad algunos suelen molestarse, tanto que la «Apalea Nacional» se confiere Inmunidad de Cháchara. Todo está permitido entre querellados a causa del discurso, o «querellos» nada plebeyos que lanzan sus mejores puñetazos casi a punto de blandir pertrechos letales. Hay registros de heridos en recintos de leguleyos que legislan, o conceden «poderes especiales», al máximo entre los aventajados en ejercicio de ocupación del Trasto de Gobierno. A la «Apalea Nacional» se debe que quien pretenda ejercer sus Derechos Civiles sea debidamente penalizado, siempre con respeto a la Tradición de Porrazos a Opositores (recuerdo el adagio latino que dicta: «Nihil est Rex acceptius»)

El «Tribunal Excretorio de Justicia» tiene la inconmensurable responsabilidad de ordenar que se cumpla la Tradición de Porrazos a Opositores para mantener el orden público en una república por ellos defecada. Destaca su atribución de impartir, con celeridad, la inmundicia para garantizar el respeto a los «Hedores y Fluidos Humanos». Atento a las amenazas desestabilizadoras del gobierno prostitucional, el «Tribunal Excretorio de Justicia» satisfará al Supremo Aventajado publicando cómicos interdictos que criminan a toda persona que pretenda ejercer sus Derechos Civiles.

Sin embargo, en caso de abusos u omisión de inmundicia, el «Joder a Ciudadanos» interviene para obligar al «Coger Ejecutivo» que cumpla oportunamente con sus obligaciones de acuerdo con el organigrama y ratifique los Castigos a Opositores establecidos en la Prostitución Nacional. Para ese «joder» es impostergable restituir garantías de aplicación de injusticia y recordar los Deberes de Sumisión a los ciudadanos de la república.

Para todos los fines circenses o criminales, la «Puerca Uniformada Nacional» defenderá letalmente los intereses de mujeres y hombres que adhieren a la «Dictadura de Bufonariado» y reciben las migajas del Festín Perpetuo de Tesorería y Finanzas Públicas. A este «joder» se suman los (¿convencidos?) convidados con armas que, sin acreditación formal, son remunerados para matar al pueblo detractor.

La «Puerca Uniformada Nacional» tiene el monopolio del Parque de pertrechos de Guerra. Instiga a la Violencia Cívico-Militar, está presente en espuelas primarias y secundarias para adoctrinar a infantes y adolescentes en comportamientos deleznables. Distribuye, apátridamente, los alimentos fuera del país sin admitir que comete contrabando de extracción. Participa en asesinatos, en la toma de haciendas y empresas productivas. A máxima capacidad, utiliza su fuerza letal en contra de civiles que se auto-defienden con pírricas barricadas del pillaje que la propia «Puerca Uniformada Nacional» propicia.

(XCV)

La «Metodología del Montaje, Siembra y Simulación de Hechos Punibles»

«Nunca querré perdonar a quienes nos amenazan con matarnos, porque a quien cruz quiera ellos darán sobre la cruz muerte y sus víctimas no somos mesiánicos: sólo ciudadanos apacibles que anhelamos vivir en un mundo donde a la Justicia Social no preceda la vindicta o violencia»

La «Historia Teatral del Totalitarismo Venezolana» registra la primera puesta en escena que un ya difunto megalómano, persuadido que era un supremo e infalible «iluminado», ordenó difundir en tribulaciones de radio y televisión. Un periodista amigo y vecino, cuyo nombre protejo, recibió la orden de presentar la noticia mientras mostraba una vieja e inservible bazuca: pertrecho con el cual (según la «propaganfala») los enemigos de quien ya se mostraba explícitamente totalitario pretendían eliminarlo. Esa chatarra sería el arma elegida para disparar contra el avión presidencial y cometer «magnicidio». ¿Quién olvida que un todavía insepulto tiranosaurio caribeño advirtió, durante toda su vida, que todos sus opositores políticos querían matarlo? Esos malparidos suelen ser adeptos de las simulaciones y les place transferir culpas o inventarlas. Sin dudas, son proclives a cometer toda clase de abominaciones que no requieren de ingenio sino voluntad criminal y un bien pagado «Mercenariado de la Pendencia Judicial».

La «Metodología del Montaje, Siembra y Simulación de Hechos Punibles» ha tenido afamados autores intelectuales. En tiempos cuando LENIN, STALIN, MAO TSE-TUN y HITLER tiranizaban e imponían sus «dictaduras de prontuariado» en Rusia, Alemania y China, el photoshop irrumpió exitosamente como recurso para la manipulación de imágenes con fines políticos o deformar la Historia (Cualquier persona interesada en una comprobación hallará en los servidores de la Tecnología Web fotografías que ilustran mis afirmaciones). Aparte de lo cual, asesinaban a detractores disparándoles para luego colocarles armas en sus manos. También allanaban sus residencias donde les colocaban arsenales, drogas o cualquier otra cosa ilícita: táctica muy popular entre gobiernos hegemónicos y democracias corrompidas.

Todos los venezolanos estamos trágicamente inmersos en una gigantesca puesta en escena criminal, donde gente que representa a una desquiciada oligarquía pretende gobernar vitalicia pero delictivamente y se exhibe aventajada gracias al asalto administrativo de la Tesorería Nacional y el control del combustible fósil.

El estilo paupérrimo de existencia que se nos ha impuesto genera una imposible de maquillar (por los propaganfalaces) «tensión social», que no terminará con besos ni abrazos luego de un falso diálogo entre quienes representan partes: la «aventajada» y «desahuciada», respectivamente. Lo más complejo de la situación que padecemos es que las víctimas tenemos prohibido, por volición, «levantarnos en armas» contra nuestros opresores. Divulgamos la moción civilizada de emplear la Inteligencia, que no es letal. Ella, con frecuencia, sorprende a la Humanidad: con sus acertados juicios, invenciones y comportamientos.

(XCVI)

Solicito al TSJ «Orden de Captura y Enjuiciamiento» al Bufo[Funcio]nariado] Mayor Cívico-Militar

«Exhuman de los muertos las infamias de la cuales se ufanaron en vida y al mando de perplejas naciones, pero para quienes se regocijan de ello imitándolos anuncio que igual extremaunciones»

Conforme a mis atribuciones originarias-soberanas (que son constitucionales) consigno, mediante «Notitia-Probatio-Publicus» ante la Fiscalía General y Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) de Venezuela, este escrito «contencioso administrativo» solicitándole a los magistrados que dicten «Orden de Captura y Enjuiciamiento» al Bu[Funcio]nariado Mayor Cívico-Militar que (en flagrancia, continuidad y concierto para delinquir) comete los siguientes delitos: «depreda» el Tesoro Nacional, «asesina a ciudadanos inocentes e indefenso», «hostiga», «sodomiza», «persigue», «tortura» y «encarcela a opositores», discrimina a ciudadanos por razones políticas», «simula hechos punibles con prácticas de puestas en escena» y «defeca encima de tratados internacionales sobre Derechos Humanos». Si no cumplieren con mis exigencias, puedo actuar para restituir el Estado de Derecho anunciándoles mi ultimátum a la horda de vándalos que gobiernan y a quienes han sido o son sus cómplices en el curso de más de casi quince años de abusos e impunidad.

No disputo pero desconozco y contradigo la autoridad de quienes hoy ejercen soberbia, explícita y corruptamente funciones de gobierno en Venezuela. Me declaro, amparado por el Art. 350 de la Carta Magna, «contencioso» y en desacato frente a ellos por cuanto vulneran el ordenamiento jurídico de la república de la cual formo parte. Me siento afectado y obligado a rechazar sus actos contrarios a las leyes y dignidad de quienes tenemos la ciudadanía venezolana, porque nuestros Derechos Civiles no son «difusos» pero sí de «humanos», «absolutos» e «imprescriptibles»: jamás tergiversables virtud a la presunta sabiduría jurídica de mercenarios que, aun cuando acreditados por universidades en materia jurídica, suelen emplear sus conocimientos viciándolos a causa de su codicia y perversión personales o de militancia política grupal.

Exijo, con suficiente conocimiento de artículos fundamentales de la Constitución Bolivariana de la República de Venezuela (el 1°,2°,3°,5°,6°,7°,13,19,21,22,23,25,27,28,43,44,47,48,49,51,54,55,57,58,59,61,68, 350) que resguardan mis derechos, y el resto de los ciudadanos inocentes que somos víctimas de la Dictadura de Ultimomundano que se nos ha impuesto en el país, medida cautelarísima de suspensión de funciones de mando a todos las y los sátrapas y la corte de lacayos compuesta por: empresarios, juezas, jueces, asambleístas, fiscales, militares, policías y colectivos armados. Estoy, moral y constitucionalmente, obligado a impelerlos y «pasarlos por las palabras».

(XCVII)

El «Efecto Tyrannumcacare»

«No pueden calificarnos de insurrectos los primates a quienes exigimos depongan su mediocre discurso adulador de crímenes y pertrechos, porque las nuestras no son ovaciones en palco de patíbulos ni tenemos armas de guerra cuya venta sólo enriquece a proveedores de la muerte en perjuicio de la Humanidad: pero, no niego que somos legítimos insubordinados o civiles y defensores el Derecho al Disfrute de la Post-Modernidad»

Divertiría si semejara un poco a otro interesante y mitológico como el «Efecto Pigmalión», surgido cuando un rey-escultor modeló la figura de una mujer (Galatea) sin sospechar que se enamoraría de ella y pediría a la diosa Afrodita que le diese vida a su hermosa estatua para amarla. Empero, llamo «Efecto Tyrannumcacare» al [de] generado por un individuo al cual se le da un «mandato» mediante sufragio y que luego se imagina que es una especie de matón rodeado de zopencos contra los que (infligirá) practicará el «bullyngnismo» y cuyas riquezas malversará.

El «bully» aborigen convierte el ejercicio de las funciones de gobierno en actos que constituyen delitos: se modela a sí mismo y se enamora de su fabulosa crueldad e impunidad, fornica con la compleja proyección de su «eco-materia-refleja», a la cual también con tupé define «Todos Somos Él-Yo», sin necesidad de reciclar a ninguna diosa de la Antigüedad para que le conceda existencia e intentar sofocar su priapismo copulándose desenfrenadamente.

Algunos enrevesados etimólogos creen que «bully» tendría una raíz indoeuropea, que sería una especie de trans-trasto del Griego-Latín-Sajón phrater/frater/bráter/brat/brother […] No luce plausible que de un vocablo que significa «hermano» salga un retoño («bully») que dícese de un patán. Es un diminutivo del inglés «bull» (macho). El Tyrannumcacare no se aproximaría a un canino bulldog, precisamente, sino a un «bully» (machito) o quizá un «bumy» (atorrante, en ninguna cosa buena diestro) y por ello hacen tanto ruido mediático. Falso que lo impulse una ideología o proyecto político a favor de los desposeídos. Caminan, cierto, pero no saben por qué. Fablan, es verdad, pero ignoran por qué. Por codicia, conocen el valor y uso del billetardo.

El «Efecto Tyrannumcacare» lo es por cuanto le precede una caracterología que incluye divertimentos idiomáticos en tribulaciones de radio y televisión, lo que parece insólito si se reconoce que el «tiranocaca» lo es por indocto y miasma. En escasos meses de mando, un sustituto (en nefasto turno) del «Todos Somos Él-Yo» (que se arrogue tener sensibilidad social) enfrentará a sus opositores calificándolos como «chukis». Estoy persuadido que el perezoso de supremo legado no preguntará a los autores-asesores intelectuales de sus marranadas mediáticas, en «tribulaciones de radio y televisión», qué significa «chuk» en inglés.

Tampoco sus predecesores (que similar a los pierolapithecus catalaunicus gritaban, pero improperios) habrían investigado antes de proferir. Digo que los militantes del «Todos Somos Él-Yo» no sólo carecen de sensibilidad social, sino que muestran una impronta de sujetos sin ningún respeto por el Ser Humano: porque convertir las alocuciones de mandatario en desahogos de inmunodeficiente intelectual con afrentas, burlas, mentiras, ridiculeces y hasta órdenes subliminales para que adeptos de su régimen cometan crímenes no son inferencias de estadista.

Los países que abordaron el gigantesco navío del primermundanismo experimentan vivir, lógicamente, la Era de Post-Modernidad. Pero otras naciones de vastos territorios del Mundo, y no por falta de recursos financieros o talentos, somos obligadas a indigestarnos a causa del «Efecto Tyrannumcacare» que aun cuando esté por sucumbir emite dinosáuricos sonidos e incuba monstruos.

(XCVIII)

La «libre determinación de gobernantes bárbaros»

«Ni en nombre de la república ni por la autoridad que le confiere una írrita ley que pidió para legitimar sus atrocidades. Ni en el nuestro, soberanos impedidos de materializar nuestra voluntad, Ni virtud al Mito del Comandante Supremo que los parió. El caos reina sobre las ruinas de una república, pero ninguna calamidad es tan inmensa que desafíe a la Inteligencia y logre suspenderla»

Ocurre en diversos lugares del mundo, ante la indiferencia de muchas naciones. Innumerables personas son criminadas: perseguidas, confinadas en hospicios, torturadas, condenadas a morir a causa de su disidencia política, creencias religiosas o renuncia a ellas (apostasía). Hechos que prueban la vigencia de la libre determinación de gobernantes bárbaros, que no de los pueblos víctimas. Esas y esos bestias tienen preponderancia sobre las y los defensores del Ser Humano. Por ello, no extraña la solidaridad incondicional entre esos sujetos a los cuales llaman (cortésmente) «dignatarios».

¿Por qué a quien recibe la investidura de «Presidente Constitucional» se le llama igual «dignatario» y a sus empleadores nos dan trato de esclavos? ¿Cuándo inició esa mala saña que convierte a los gobernantes en peligrosos enemigos de los ciudadanos que acudimos, con más esperanza y sentimentalismo que razonamientos, a votar para escogerlos? ¿Qué impulsa a personas que fueron elegidas para gobernar países a emplear sus fuerzas armadas nacionales contra gente que expresa su legítima protesta y malestar? No somos, los electores, ¿constitucionalmente ciudadanos con autoridad para ejercer eso que se infiere como soberanía?

En la calle, recintos educativos, en la vejatoria y tortuosa espera para comprar alimentos, siempre se oyen amargas quejas. Algunas en voz alta porque la frustración se manifiesta y, rabiosa, prorrumpe. El caos favorece a los antisociales del coliseo institucional, quienes buscan y logran ventajas en perjuicio de los apacibles. Resignados, todos sufrimos el martirio. Pero el soberbio gobernante, conforme a su predecible «libre determinación», nos condena a escucharle sus infamias e idioteces y también la de un funcionariado cómplice que insensibiliza a la población mediante su infinita perversidad. A un Fiscal General parece no importarle que se le llame Fecal, a una magistrada vileza, a un diputado eructo de tuberculoso. Son felices en «Pustulandia», disfrutan interactuando para destruir a una nación que no los merece.

En «Pustulandia» los de mayor o menor jerarquía hablan, visten y caminan idénticamente. Pero, es más doloroso escuchar a sus despreciados «adeptos de perrería» propagar la fétida Mitología del Comandante Supremo. La estupidez e ignorancia los hace cometer perjurio cuando, con infundios, acusan de todos los males a opositores de la tiranía mientras afirman que «[…] antes del advenimiento del supremo que les dio patria sólo comían galletas para perros y desechos de carnicerías […]», Con una mueca horrenda encaran las quejas de quienes, como ellos, padecemos al momento de buscar productos del consumo diario.

Los «adeptos de perrería» y quienes enfrentamos la hostilidad del funcionariado de gobierno estamos en la misma periferia. Pero, a diferencia de quienes defino «falaciegos», nosotros somos víctimas conscientes de estar bajo asedio. Nada de cuanto experimentamos responde a nuestra «libre y soberana determinación», porque hay un gobierno agresor que la ejerce flanqueado por una mercenaria fuerza armada que algún día tendrá que ser condenada y abolida.

Notas

[1] Ya los mítines de estos tiempos no se parecen a los que se realizaban bajo las inclemencias de la Naturaleza. El «meeting» o discurso político ya es tecno-mediático. Tampoco tienen que ver con el «mitmaq» quechua del Imperio Inca, «mitimae» (que aludía al traslado de personas de origen foráneo con fines políticos-administrativos a sus dominios)

[2] Las matanzas «vindicativas» o por «vindicta» de la prolongada Era Vulgar, que, aun cuando vivamos en la Post-modernidad, sostengo que persiste consumándose bajo ajusticiamientos esterilizados o no: torturas, ahorcamientos, mediante el genocidio de misil que devasta, contaminación biológica y la psicosis inducida. Improntas del no exterminado bacilo de la Doctrina Necrófila, que boga por la muerte de los que no están al mando.

[3] Marat, Robespierre, los girondinos y jacobinos en cohecho criminal, Stalin, Lenin, Hitler, Castro y más.

[4] Cuando defino Ultimomundano a nuestro indocto e impenitente territorio lo hago más por enfado que por desprecio u ostentación despectiva.

[5] «Resguardado emperador, los que están por morir te ovacionan»

[6] «Que no se ha consumado o está pendiente»

[7] En Calcis, 321 a. d. C.

[8] Imputado por ese «delito» y obligado a beber cicuta, en el 399 a. d. C.

[9] Para mí, es la voluntad fundamentada en la preeminencia de la Razón Incontaminada.

[10] En el curso del Siglo XX, John Broadus Watson (Greenville, EEUU, 1878/1958) fundó la Escuela Psicológica Conductista que bogaba por técnicas de manipulación de las conductas con fines educativos.

[11] WOLFF, Werner: Introducción a la Psicología. «Fondo de Cultura Económica», México, 1953. P. 299.

[12] El «mantuano (Lat. «mantuanus») fue poderoso durante la Colonia Ultimomundana.

[13] Lat. «gothus», germano que participaría en la fundación de los reinos de Italia y España. En Latinoamérica el «Godismo» fue un movimiento político durante el Siglo XIX. Adhería al estilo de gobierno de bagaje imperial.

[14] Título dinástico del Rey en el curso del primitivo Imperio Egipcio.

[15] Hamas es la organización palestina-fundamentalista creada en 1987 por Amed Yassin, quien fue abatido en Gaza. El grupo rebelde Al Fathad conformaría uno de los vástagos del Terrorismo Internacional, agresivo e intransigente. Bajo la expresión Bolivarianismo Falaz, agrupo a los militantes (militares y milicianos) de la insociabilidad política: que, en Latinoamérica, se apartan con sus acciones de los apotegmas no lesivos del pensamiento de Simón Bolívar.

[16] Siempre he sostenido que las fratricidas conflagraciones «independentistas» no tuvieron sentido, ello por cuanto ningún país jamás se «autoabastecerá» plenamente: es decir, no será «independiente del resto del mundo». Hubo formas de ocupación territorial y progreso sin que se cometieran tantas atrocidades. Los seres humanos fuimos, somos y seremos «interdependientes» y hermanos. O, acaso, ¿no conformamos una especie?

[17] Es inocultable que el desarrollo tecno-científico-financiero, de «corte imperial», de los norteamericanos, sólo fue posible la mediante la guerra: de «ocupación», sin duda «genocida» y la «expansión criminal» por la «posesión de riquezas tras explotar a los individuos a los cuales se les consideraba «inferiores». La «fatalidad», paradojalmente, ha signado el éxito de unos en perjuicio de otros.

[18] Culto a los «fetiches», las serpientes y prehistóricos rituales materializados en la práctica del Sincretismo.

[19] Profesada por más de 500 millones de personas, propugna la «liberación de los sufrimientos» mediante la «renuncia a todos los deseos materiales o carnales»: y, de ese modo, en consecuencia alcanzar el Nirvana o «Iluminación» (equivalente al Paraíso prometido a los cristianos y musulmanes en sus respectivos textos religiosos)

[20] Ambas ediciones de Monte Ávida Editores (Caracas, 1982)

NOTAS

[21] SARTRE, Jean Paul: La náusea (1938). «Premio Nobel de Literatura», el año 1964, en grado de aborto.

[22] Recuerdo una magnífica frase de Montesquieu, Charles-Louis (1689-1755, París): «La sociedad es la unión de los hombres, pero no los hombres. El ciudadano puede perecer, pero el hombre permanece» (El espíritu de las leyes, 1748)

[23] «Conjeturas de cientifismo postmoderno advierten que nuestra ascendencia podría remontarse más hacia los peces transformados en anfibios, quienes, por extrema necesidad de supervivencia, desarrollaron las cuatro extremidades por las cuales los llaman tetrápodos»

[24] «Humanamente, me resisto a tener que aceptar que las guerras pueden ser doctrinales»

[25] «En rededor de las contiendas armadas, la curiosísima holgazanería especulativa de numerosos profesores universitarios me inspiró a componer este neologismo»

[26] «El lenguaje proveyó al Hombre de un mecanismo de evolución que, en pocos siglos, lo separó de los demás animales» (aseveraron G. A. Miller, E. Galanter y K. H. Pribram en su compendio Plans and the structure of Behavior, New York, edición de Henry Holt Company en 1960, p. 142. Citados por Hilde Gutmann de Díaz, en Orígenes del Lenguaje. Edición de la Universidad de Los Andes, 1969)

[27] Se atribuye a los actores del teatro antiguo, quienes representaban (con «antifaces») los caracterismos, el término «personalidad». Cada cual debía imbuirse en determinado «ser» para que una puesta en escena tuviere sentido.

[28] En la esencia de la Doctrina del Despotismo, advierto lo siguiente: no hay un «Padre» (sino una entelequia); ni un «hijo» (empero si un tirano) y tampoco un «espíritu santo» (sólo el Fantasma de la Sempiterna y Homicida Revolución)

[29] No fue sino a partir de lo que se definió como «Ilustración», doctrina intelectualísima y libertaria que reivindicó la divagación científica y la tesis de someter a juicio al autoritarismo [desarrollada durante los s.s. XVII-XVIII-XIX] cuando comenzó a gestarse la Civilización que persiste en encarar sin armas a los despóticos en el mundo.

[30] Proudhon, Pierre Joseph: ¿Qué es la Propiedad? Ediciones Orby. Barcelona, España, 1985

[31] Digo extravagantemente por cuanto, en la época en la cual Proudhon vivió, el concepto de Propiedad ganaba adeptos en todo el mundo y se fortalecía inteligiblemente.

[32] Ob. cit. p.p. 29 y 30.

[33] Así como los «gorbachovianos» del Soviet Supremo maquillaron el manifiesto de su Marxfalso, ahora eufemísticamente llamado Perestroika o Glasnost («Transparencia»), en Ultimomundano, sin ningún riguroso documento que difundir, los sempiternos disociados y resentidos platican respecto a imponer una codicia que no doctrina llamada Socialismo del Siglo XXI.

[34] Aquella protagonizada por los mandatarios de países capitalistas mediante las cuales, jocosamente, atribuyen bondades a ciertas restricciones económicas.

[35] Me inclino por el principio según el cual existe una Razón Suficiente e Inmutable, no precisamente «metafísica», virtud a la cual podemos medir los hechos y a partir de ellos levantar una Lógica Justicia Universal.

[36] Yo sugiero al lector el estudio que al respecto escribió el sabio profesor y filósofo argentino Angel J.Cappelletti, titulado La Ideología Anarquista (Alfadil ediciones. Caracas, 1985)

[37] Ob. Cit. p. 45.

[38] Ibídem. p. 52.

[39] Extremo talento encima de la («bigback») ancha espalda de ese afamado progenitor intelectual de Sócrates, cuyo nombre auténtico era Aristocles: pero que, a causa de su extravagante figura, se le apodó Platón [significó «ancho» en dialecto ateniense]. Fue genial que sostuviese que «mientras los reyes no fuesen filósofos, o éstos monarcas, no podrían corregirse las abominaciones que todavía socaban a la Humanidad». Tuvo el privilegio de registrar en «Notaría» a la hoy magnánima e ilusa «Academia», por haber instruido a sus seguidores en un gimnasio edificado en terrenos de un presunto e ilustre héroe que se los legaría con providenciales fines.

[40] Unívoca versión de conocimientos frecuentemente «apriorísticos», de «capnomancia», «alucinaciones», «clarividencia», de percepciones «hiperrealistas» o de «libentis libatio» (de ebrios): más que del «escrutinio» o la «experimentación química» sobre objetos, estudio y análisis de sucesos y fenómenos físicos.

[41] Entre los adoradores de Platón o Aristocles hubo numerosos efebos, hijos de adinerados e influyentes en el gobierno de Dionisio II, a quien fallidamente tutoró en estudios filosóficos (370-360 a. C.) porque al tipejo la «Dictata Aristoclesca» no cambió su comportamiento.

[42] Innecesariamente convertibles en truhanes, los sabios de la Antigüedad eran soberbios con el descalzo: empero rastreros y cómicos para el agrado de reyes e ignorantes cortesanos.

[43] RUSSELL, Bertrand: Fundamentos de Filosofía («Ediciones G. P. », Barcelona-España, s.f., p. 502)

[44] ILIÉNKOV, E. V.: Lógica Dialéctica («Editorial Progreso», Moscú, 1977, p. 294)

[45] No ofendo cuando de ese modo los califico, porque, si representan a naciones y no acatan la llamada Carta Democrática que rige a la OEA, y si, aparte, la «minan», se convierten tácitamente en forajidos de la Diplomafia Transnacionl.

[46] El ardid de la «autodeterminación de los pueblos» les servirá de escudo anti-críticas para impunemente mantener desasistidos a sus gobernados y, en no pocas ocasiones, exterminarlos (como sucede en la Siria donde un genocida presidente ordena bombardear ciudadades) Lo hace ante la morbosa observación de la también desahuciada Organización de Naciones Unidas (ONU)

[47] Vocablo que procede del francés «massacre», matanza colectiva de personas.

[48] En el curso de la intesta Centuria XXI, pocos sospechaban que los petropredadores exhumarían la tesis criminal de Marxfalso para desgracia de la Humanidad.

[49] En estado de pureza absoluta (Lat.)

[50] RODRÍGUEZ ARIAS-BUSTAMENTE, Lino: De la propiedad privada a la propiedad comunitaria.- Monte Ávila Editores. Caracas, 1979 (p. 205)

[51] RODRÍGUEZ ARIAS-BUSTAMENTE, Lino: Comunitarismo, Americanismo y Derecho.- Universidad de Los Andes, 1998.

[52] PROHUDON, Pierre Joseph: ¿Qué es la Propiedad?.- Ediciones Orbis, Barcelona, España, 1985 (p. 32) Editado por primera vez en francés, el año de 1840.

[53] Los girondinos, durante la Revolución Francesa, eran moderados y contrarios al Gran Terror y guillotina que los necrófilos y radicales jacobinos promovían. Genocidas que fueron ajusticiados virtud a la «reacción thermidoriana» que les fijó el «Día de Thermidor o Decapitación», tras cuyo suceso se abolió el uso de la guillotina.

[54] RAMIS, Pompeyo: Lógica y Crítica del Discurso. «Edición de la Universidad de Los Andes», Mérida, Venezuela, 1999, p. 13.

[55] HUSSERL, Edmund [1859-1938, a quien se le atribuye la fundación de esa corriente filosófica, bogó por la necesidad de asumir el conocimiento con el respeto y rigor con el cual se emprende el estudio y la investigación científica en las demás disciplinas]

[56] HEGEL, W. W. F [1770-1831, alemán]: Fenomenología del Espíritu. «Fondo de Cultura Económica», México, 1973. P. 66).

(57) CICERÓN, Marco Tulio: Tratado de los Deberes.- Editora Nacional, Madrid, España, 1976 (pp. 172-173)

(58) Aun cuando los epilogismos que fraguamos cuando ya somos conscientes [es decir, adeptos de la Filosofía] no sean necesariamente hipócritas o lesivos, no impedirá que fermenten hasta culminar embriagándonos y convirtiéndonos en criaturas delirantes u oníricas.

(59) MARITAIN, Jacques: El orden de los Conceptos.- Edición del «Club de Lectores», Buenos Aires, Argentina, 1967.

(60) MARITAIN, Jacques: Filosofía Moral. «Ediciones Morata», Madrid, España, 1962.

(61) p. 79 de El Orden de los Conceptos.

(62) P. 94 de Filosofía Moral.

(63) Me refiero al Recurso de Interpretación de Naturaleza Constitucional y Legal sobre el artículo 68 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, solicitado por un alcalde simpatizante de la Dictadura de Bufonariado asistido por Hermán ESCARRÁ.

(64) Los ciudadanos y ciudadanas tienen el derecho a manifestar, pacíficamente, sin armas, y sin otros requisitos que los que establezca la ley […] Se prohíbe el uso de armas de fuego y sustancias tóxicas en el control de manifestaciones pacíficas. La ley regulará las actuaciones de los cuerpos policiales y de seguridad en el control del orden público.

 

 

Autor:

Alberto Jiménez Ure

Apartado Postal No. 96. Mérida, Edo. Mérida. República Bolivariana de Venezuela.

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