RESUMEN.
En el presente trabajo de investigación se pretende reflejar de la forma más fiel posible a la realidad un problema que afecta a la sociedad en general, en especial a aquellas personas que viven en grandes núcleos urbanos. Este problema, conocido muy bien como decimos, por las personas que residen en las ciudades, es el de la contaminación acústica.
Para la elaboración del presente estudio se ha escogido la ciudad de Sevilla y se han tomado como referencia los datos aportados por la empresa INGENIERÍA ACÚSTICA Y SERVICIOS S.L. al Ayuntamiento de Sevilla sobre el mapa sonoro de Sevilla, con el fin de obtener un conocimiento de la realidad acústica ambiental de la ciudad y que servirá como base importante para la realización definitiva del trabajo.
En el desarrollo de este estudio, se ha procedido a la realización de una serie de encuestas (tanto en el hogar como en la calle) a fin de determinar el grado de conocimiento y afectación de la población sevillana ante este problema.
Básicamente, el presente trabajo de investigación trata de conocer y poner en conocimiento el alcance de la contaminación acústica sobre la población de esta ciudad y sus posibles repercusiones: nivel de vida, salud, relaciones con los demás, etc.
INTRODUCCIÓN.
La contaminación acústica es considerada por la mayoría de la población de las grandes ciudades como un factor medioambiental muy importante, que incide de forma principal en su calidad de vida. La contaminación ambiental urbana o ruido ambiental es una consecuencia directa no deseada de las propias actividades que se desarrollan en las grandes ciudades.
El término contaminación acústica hace referencia al ruido cuando éste se considera como un contaminante, es decir, un sonido molesto que puede producir efectos fisiológicos y psicológicos nocivos para una persona o grupo de personas. La causa principal de la contaminación acústica es la actividad humana; el transporte, la construcción de edificios y obras públicas, la industria, entre otras. Los efectos producidos por el ruido pueden ser fisiológicos, como la pérdida de audición, y psicológicos, como la irritabilidad exagerada. El ruido se mide en decibelios (dB); los equipos de medida más utilizados son los sonómetros. Un informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS), considera los 50 dB como el límite superior deseable.
Técnicamente, el ruido es un tipo de energía secundaria de los procesos o actividades que se propaga en el ambiente en forma de ondulatoria compleja desde el foco productor hasta el receptor a una velocidad determinada y disminuyendo su intensidad con la distancia y el entorno físico.
La contaminación acústica perturba las distintas actividades comunitarias, interfiriendo la comunicación hablada, base esta de la convivencia humana, perturbando el sueño, el descanso y la relajación, impidiendo la concentración y el aprendizaje, y lo que es más grave, creando estados de cansancio y tensión que pueden degenerar en enfermedades de tipo nervioso y cardiovascular.
Existe documentación sobre las molestias de los ruidos en las ciudades desde la antigüedad, pero es a partir del siglo pasado, como consecuencia de la Revolución Industrial, del desarrollo de nuevos medios de transporte y del crecimiento de las ciudades cuando comienza a aparecer realmente el problema de la contaminación acústica urbana. Las causas fundamentales son, entre otras, el aumento espectacular del parque automovilístico en los últimos años y el hecho particular de que las ciudades no habían sido concebidas para soportar los medios de transporte, con calles angostas y firmes poco adecuados.
Además de estas fuentes de ruido, en nuestras ciudades aparece una gran variedad de otras fuentes sonoras, como son las actividades industriales, las obras públicas, las de construcción, los servicios de limpieza y recogida de basuras, sirenas y alarmas, así como las actividades lúdicas y recreativas, entre otras, que en su conjunto llegan a originar lo que se conoce como contaminación acústica urbana.
El siguiente trabajo va a intentar de reflejar el impacto causado por la contaminación acústica en la población sevillana, así como las posibles repercusiones que pueda tener en dicha sociedad.
OBJETO DE ESTUDIO.
El objeto de este trabajo es el de evaluar la contaminación acústica del casco urbano de Sevilla, con el fin de:
- Disponer de un diagnóstico general del ruido ambiental.
- Definición de los focos principales de ruido urbano, al objeto de poder llevar a cabo acciones correctoras que conduzcan a la disminución del grado de contaminación acústica ambiental.
- Análisis de la repercusión social del problema de la contaminación acústica en Sevilla, mediante:
- El estudio de los comportamientos observados en los individuos, en respuesta a los niveles de ruido soportados.
- Establecimiento de un cuadro propositivo de los niveles de ruido asumibles por la población para el desarrollo normal de sus actividades y de la vida en general.
- Definición y configuración del conjunto de medidas de actuación necesarias para hacer viable la aplicación de la normativa, evaluando su coste económico.
FUENTES PRINCIPALES DE NIVELES DE RUIDO URBANO.
Determinar de forma fehaciente las posibles fuentes de ruido urbano conlleva un trabajo minucioso de campo, consistente en ir tomando apuntes de aquellas causas que, a juicio de los técnicos, actúan en el origen de los niveles de ruido que se estaban produciendo.
Aquellas causas aleatorias y puntuales se contabilizan individualmente, como puede ser el ejemplo del paso de una ambulancia, la activación de una alarma de coche o de un local comercial o el paso de los servicios de limpieza nocturna.
Las causas más estables y continuas se contabilizaron según unos criterios previamente establecidos por el equipo de muestreo de campo. En el caso del nivel de tráfico se determinan cuatro posibles niveles:
- Nivel alto de tráfico.
- Nivel medio de tráfico.
- Nivel bajo de tráfico.
- Nivel muy bajo o sin tráfico.
También se tuvieron en cuenta las posibles variaciones por el estado atmosférico y climatológico durante el periodo de medida.
Las fuentes más frecuentes de los niveles de ruido que se han tenido presentes en la valoración realizada, las representamos porcentualmente a continuación:
ESTIMACIÓN DEL GRADO DE ACEPCIÓN O DESAGRADO DE CONTAMINACIÓN ACÚSTICA.
La valoración del grado de acepción o rechazo del grado de contaminación acústica evaluado en la ciudad, es del todo comprometido realizarlo utilizando únicamente resultados de la medición del ruido, sin realizar un análisis sociológico de la respuesta ciudadana a las afecciones sonoras. No obstante, realizamos a continuación una estimación de esta aceptación o rechazo.
A continuación realizamos una valoración sobre la posible afección de la contaminación acústica en la ciudad de Sevilla, utilizando para ello unos niveles de comparación obtenidos de la información bibliográfica disponible. Hacemos distintas valoraciones tanto para periodos diurnos como nocturnos, así como los distintos usos del medio exterior. Realizando las valoraciones sobre la base de las medidas aritméticas de los Leq (dBA) obtenidos para cada uno de los periodos de evaluación y para cada uno de los lugares de muestreo, asignándoles éstos a los distintos usos.
De forma resumida, representamos a continuación de forma gráfica unas estimaciones sobre el grado de aceptación o desagrado de los niveles sonoros ambientales durante el día y la noche en Sevilla, al amparo de los criterios de valoración definidos.
NORMATIVA SOBRE LA EXPOSICIÓN AL RUIDO.
En España, a nivel tanto de competencias del Estado como de la Comunidad Autónoma de Andalucía, no existe una reglamentación que contemple los niveles de exposición comunitaria al ruido.
En Sevilla, el Excmo. Ayuntamiento, aprobó la ORDENANZA MUNICIPAL DE PROTECCIÓN AMBIENTAL EN MATERIA DE RUIDOS, el 31 de Julio de 1992. Esta ordenanza establece las normas de actuación de los ciudadanos y de la administración con objeto de proteger el Medio Ambiente Urbano contra las perturbaciones producidas por los ruidos.
En las ordenanzas se establecen en su Título III los niveles de ruido admisibles en el Medio Ambiente Urbano, tanto en el medio exterior como en el interior de los edificios.
Los niveles máximos de ruido admisibles en el medio exterior, quedan definidos en el Capítulo 2º de esta ordenanza, y son los siguientes de acuerdo con el uso del suelo:
8-22 horas 22-8 horas
Usos sanitarios 45 dBA 35 dBA
Usos industriales y almacenes 70 dBA 55 dBA
Usos comerciales 65 dBA 45 dBA
Usos residenciales 55 dBA 45 dBA
Dado el objeto de este estudio, entendemos que sería conveniente presentar, además de los criterios de valoración anteriormente expresados, un criterio de valoración basado en la bibliografía, que nos permita de forma rápida y fiable poder conocer el grado de aceptación o de rechazo de los niveles de ruido medidos. Para ello utilizaremos el siguiente cuadro comparativo:
VALORACIÓN | LA eq-D | LA eq-n | LDN |
Muy ruidosa | Leq>70 | Leq>60 | Leq>70 |
Ruidosa | 65<Leq<75 | 55<Leq<60 | 61<Leq<70 |
Poco ruidosa | 60<Leq<65 | 50<Leq<55 | 60<Leq<65 |
Tranquila | Leq<60 | Leq<50 | Leq<60 |
A nivel nacional, desde hace más de 15 años, los especialistas y la opinión pública vienen reclamando la necesidad de una Ley de carácter nacional que regule de forma exclusiva la contaminación acústica.
En este sentido, este grupo de trabajo considera que es necesaria una clara concienciación política al más alto nivel que condicione la elaboración inmediata de esta Ley.
Esta norma, que será de carácter básico, deberá proteger a los ciudadanos contra los efectos nocivos producidos por la exposición al ruido ambiental.
Dicha Norma Básica integrará y coordinará los Decretos y Ordenanzas ya existentes desarrollados por Comunidades Autónomas y por los ayuntamientos.
Autor:
Eloy Flores-Domínguez Rodiño
Jesús María Sánchez González
2º de Ciencias Ambientales
Huelva 1998