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Diseño de una campaña comunicativa sobre la prevención de la violencia a la mujer en el barrio de Carcelén (Ecuador) (página 2)


Partes: 1, 2, 3, 4, 5

Diseñar una campaña comunicativa sobre la prevención de la violencia a la mujer implica una ardua investigación sobre estadísticas, testimonios , teorías sobre el maltrato , es indispensable crear una conciencia dentro de los actores de la sociedad empezando por la misma mujer, haciendo conocer sus posibilidades de cambio, como también su obligaciones y fomentar valores.

La aplicación social de este tema favorecerá no solamente a las mujeres sino a sus familias y por ende al barrio como beneficiarios indirectos. La comunicación es un campo muy amplio y esta ligada directamente al desarrollo, no se reduce a aportes auxiliares y metodológicos. Por el contrario es en si misma objetivo y sinergia, transformadora de la sociedad y de los sujetos que la componen, "es por lo tanto medio y fin, aspecto y estrategia global, y esta comprometida consiente o inconscientemente con modelos y proyectos macro o micro sociales y con los procedimientos que se implementan para plasmarlos" . La comunicación es un componente transversal de los factores del desarrollo lo atraviesa a tiempo que se desafía a dar respuesta a esta interrogante ¿cómo conjugar crecimiento económico con democracia política y equidad social? Pregunta que enraizada de promesas, búsqueda y construcción de una vida mejor, incluye de modo activo y de manera transversal los procesos comunicacionales.

El diseñar esta campaña comunicativa sobre la prevención de la violencia a la mujer en la barrio de Carcelén supone una voluntad de búsqueda de cambio concretos en los individuos uniendo los mundos colectivos con los individuales y lo objetivo con lo subjetivo; contiene una dimensión política y cultural que se explica en el tipo de sociedad que se quiere construir.

Constantemente los medios de comunicación como la televisión, radio y prensa, muestran noticia sobre violencia familiar que en la mayoría de los casos tiene un final trágico, los programas de televisión muestran casos de violencia contra la mujer, esto sucede en todo el país. En el barrio de Carcelén los cursos prematrimoniales de la parroquia son la oportunidad de exponer las vivencias y lo que no se debe hacer en la relación intrafamiliar o como pareja , la formación de comunicadores sociales con especialidad en desarrollo ha permitido reflexionar sobre el papel que la comunicación juega en estos casos y como la aplicación de una campaña comunicativa podría clarificar la visión de los actores del problema y como ellos pueden aprender nuevas formas de relacionarse.

Lo que se pretendió realizar mediante la propuesta innovativa es una Campaña comunicativa para prevenir la violencia a la mujer en el barrio de Carcelén debido al alto índice de mujeres maltratadas y violentadas en el barrio.

La campaña social fue realizada en base a los resultados obtenidos del grupo focal y buscó aplicar estrategias comunicativas que fomenten armonía familiar, basándonos en su idiosincrasia mediante un análisis del diagnóstico de actores, con la elaboración de materiales innovativos impresos, que invitaron a crear una cultura de paz dentro del hogar.

En el diseño de esta campaña se trató de mostrar nuevas formas de relación , comunicación y trato familiar propiciando el respeto , la tolerancia y el cariño dentro del hogar. Además se demostró la incidencia de la violencia hacia la mujer dentro de la familia mediante testimonios, encuestas y entrevistas que clarificaron las consecuencias de los actos de violencia dentro del hogar, todo esto mediante la recolección de información de libros, revistas, periódicos, folletos, etc., que exponían casos de violencia a la mujer dentro del hogar y con este banco de información se pudo ejemplificar de manera clara y certera la campaña comunicativa.

El objetivo general es diseñar una campaña comunicativa sobre la prevención de la violencia a la mujer dentro del núcleo familiar en el barrio de Carcelén mediante el uso de estrategias comunicativas de acuerdo a los resultados de un diagnóstico de actores para que exista un bienestar familiar desde el inicio de la vida familiar de las mujeres del sector.

OBJETIVOS

METAS

RESULTADOS

OE1.- Investigar sobre la violencia a la mujer mediante la recolección de información , utilización del Internet, uso de datos y estadísticas de las comisarías de la mujer para su explicación en la campaña de prevención de la violencia a la mujer

M1.-Al finalizar el sistema de recolección de datos se habrán sistematizado mínimo treinta libros y datos específicos sobre la violencia de género

R1.- Se recolecta, bibliografía, leyes, datos estadísticos sobre la violencia contra la mujer

OE2.- Diseñar un campaña comunicativa sobre la prevención de la violencia hacia la mujer, utilizando estrategias y teorías de comunicación de masas, mercadotecnia social, para sensibilizar a los habitantes del barrio de Carcelén para mejorar sus condiciones de vida.

M2.-Se terminará la campaña comunicativa en un lapso de ocho semanas utilizando la investigación anteriormente citada

 

R2.- Se elabora una campaña comunicativa exitosa sobre la prevención de la violencia contra la mujer que contiene datos sobre población objetivo y diagnóstico de actores.

OE3.- Realizar cinco productos impresos tales como; un afiche, dos volantes, un tríptico ,un díptico, sobre la prevención de la violencia contra la mujer, para que posteriormente sean transmitidos a los habitantes de Carcelén, mediante la campaña.

M3.-Se realizará el plan piloto de la campaña comunicativa en un fin de semana en los cursos prematrimoniales dictados en la parroquia de Carcelén

R3.- Se realizan 5 productos comunicativos impresos en los cuales constarán un afiche, un tríptico, un díptico, dos volantes para la difusión de la campaña comunicativa

Fuente: La Autora

Fecha: 20 03-2006

Para hacer la investigación se realizó la recolección de datos y de información en el sector de Carcelén.

La Campaña fue diseñada únicamente para el barrio de Carcelén. En este sector para obtener información se recurrió a técnicas de investigación participativa , así como también el análisis de contenido de leyes, análisis de datos y cifras, además de entrevistas, encuestas, la observación directa y se realizó dentro del diagnóstico de actores dos estudios de caso que centralizaran la atención en una descripción fecunda del impacto de la violencia a la mujer en los hogares.

Las fuentes de datos fueron proporcionados por las comisarías de la mujer y centros de defensa de los derechos de las mujeres , además de bibliotecas y páginas Web que tratan la información de violencia intrafamiliar y violencia hacia la mujer.

CAPÍTULO I

ANÁLISIS DE LA COMUNICACIÓN FRENTE A LA CAMPAÑA CONTRA LA VIOLENCIA A LA MUJER

  1. Lo que se pretendió realizar en este proyecto es el Diseño de una Campaña comunicativa para prevenir la violencia a la mujer en el barrio de Carcelén debido al alto índice de mujeres maltratadas y violentadas en el barrio.

    La campaña social fue realizada con base a los resultados obtenidos del grupo focal y buscó aplicar estrategias comunicativas, que fomenten armonía familiar, basándonos en la idiosincrasia mediante un análisis del diagnóstico de actores, con la elaboración de materiales innovativos impresos, que invitaron a crear una cultura de paz dentro del hogar.

    En el diseño de esta campaña se mostraron: nuevas formas de relación, comunicación y trato familiar propiciando el respeto, la tolerancia y el cariño dentro del hogar. Además se demostró la incidencia de la violencia hacia la mujer dentro de la familia mediante testimonios, encuestas y entrevistas que clarificaron las consecuencias de los actos de violencia dentro del hogar, todo esto mediante la recolección de información de libros, revistas, periódicos, folletos, etc., que expusieron casos de violencia contra la mujer dentro del hogar, con este banco de información se pudo ejemplificar de manera clara y certera la campaña comunicativa.

  2. CONCEPTOS Y TEORÍAS UTILIZADAS DENTRO DE LA CAMPAÑA

    Después de todos estos años de estudio es demasiado complejo entender a la comunicación desde un concepto corto que trate de englobar la realidad con la que se convive. Hablar de comunicación genera varios elementos entre ellos la participación , la democracia , la igualdad, es una doble vía donde emergen todo tipo de emisores y de receptores que a su vez se transforman en lo contrario.

    La comunicación es el mero reflejo de una realidad, es un imaginario que posee connotación que destaca, apropia, articula y combina un sinnúmero de culturas. Tiene procesos permanentes de intercambio, hibridación y reelaboración de significados y significantes.

    Se podría señalar que la comunicación es liberadora y a su vez es subversiva, es opresora y genera poder es un arma de doble filo que encanta y desencanta puesto que si es utilizada de buen modo forma seres humanos y si es engañosa , débil opresora elimina a los mismos.

    Toda comunicación puede entenderse como conectada a una forma de desarrollo, la comunicación es transversal, multidireccional y diversa, contiene una dimensión política y cultural.

    La comunicación es objeto y sujeto, tirana y amiga, porque si la entendemos como dos polos opuestos podemos descifrar la realidad que en ella se entreteje, por lo tanto podemos entenderla como un proceso que se encuentra en constante cambio y atraviesa todos los espacios de la política a la medicina y en ella confluyen la cultura y el desarrollo como ejes de concordancia y de apoyo.

    La comunicación por tanto se encuentra asociada a la cultura ya que de esta manera forma lo que nosotros denominamos modo de vida, es decir que al enfrentar la cultura con la comunicación podemos entender la problemática mediante la cual se aborda esta tesis, desde el núcleo más pequeño de nuestra sociedad donde se forma la cultura que es la familia comienzan a generarse los niveles de violencia y agresividad con las que se conjugan formas de vida, por lo que, la familia, la comunicación, la cultura y el desarrollo se encuentran en una enmarañada red donde las acciones se entrechocan se vuelven partes fundamentales del proceso de retroalimentación de la violencia .

    Violencia que se da a partir de las palabras y las acciones de los reproches y comentarios, desde la manera de organizar los roles que se desempeñaran en el hogar, hasta la manera de actuar en los trabajos, es por esto que sin lugar a dudas la comunicación es el eje del problema como también es el eje de la solución .

  3. CONCEPTO DE COMUNICACIÓN

    Es de gran importancia tomar como concepto la denominada comunicación asertiva para la ejecución de la propuesta puesto que en ella convergen las formas de cambio para una comunicación sin violencia.

    El proceso de comunicación visto de forma teórica o para efectos de análisis, pareciera sencillo, pero dicho proceso se ve interferido por variables tales como ruidos durante el envío (tergiversaciones del mensaje o chismes) o ruidos personales (rodeos), como inseguridades, timidez, falta de estima, entre otros.

    En virtud de lo anterior es relevante rescatar dos conceptos muy importantes para cualquier proceso de comunicación: autoestima y asertividad.

  4. COMUNICACIÓN ASERTIVA:

    Es la expresión sin lastima ni complejos de sí mismo. Un crecimiento personal sin evaluaciones ni chantajes hacia sí y hacia los que nos rodean. Una fuerza interna que centra y organiza los procesos individuales. Si se recurriera a algunos sinónimos autoestima es autovaloración, auto imagen, auto confianza.

    Una comunicación basada en la propia estima tendrá congruencia, es decir se hará verdadero contacto y se será emocionalmente sincero con nosotros mismos y con nuestro interlocutor.

  5. AUTOESTIMA:
  6. ASERTIVIDAD:

Este es otro componente esencial para el equilibrio en las relaciones humanas. Asertividad es autoafirmación, es la expresión cabal de mis sentimientos.

Comunicación asertiva es la respuesta oportuna y directa, que respeta la posición propia y la de los demás, que es honesta y mesurada para con los involucrados.

Los niños por excelencia son muy asertivos, van directo a sus necesidades y sentimientos, y se caracterizan por ser descriptivos en sus percepciones u opiniones, de allí que no hagan juicios o evaluaciones de la conducta de los otros, solo la describan. De ellos hay que aprender.

Asertividad es, una voz relacionada con las comunicaciones que se ha incorporado al lenguaje común de las personas.

Al decir asertividad nos referimos a una forma para interactuar efectivamente en cualquier situación, incluyendo aquellos momentos en las relaciones entre los seres humanos que representan un reto para quien envía un mensaje, debido a que a través de éste se puede confrontar o incomodar a quien lo recibe.

Cuando hablamos de aprender a ser asertivos me refiero a promover el desarrollo de las habilidades que nos permitirán ser personas directas, honestas y expresivas en nuestras comunicaciones; además de ser seguras, auto-respetarnos y tener la habilidad para hacer sentir valiosos a los demás.

Ser asertivo implica: Tener una comunicación intrapersonal muy efectiva consigo mismo: Ser conscientes de nuestros pensamientos, sentimientos, motivaciones, necesidades y deseos sin juzgarlos, administrar nuestras emociones y asumir la situación de manera responsable.

Es administrar nuestras emociones y asumir la situación de manera responsable. Saberse y sentirse bien por los talentos recibidos y por las cualidades desarrolladas. Es reconocer que nuestra inteligencia es suficiente para valorar nuestras situaciones, y tomar decisiones sin necesidad de la aprobación de otros.

Haber aprendido a reconocerse, y esto representa tener una imagen positiva de si misma(o), y un sentimiento positivo que se han logrado a través de un aprendizaje continuo, idealmente el ser asertivos debería de llevarnos a trabajar conscientemente hacia una solución de "Ganar – Ganar" esto significa asegurarnos que todas las partes involucradas encuentren satisfacción a sus necesidades tanto como sea posible.

Es un sentido de igualdad fundamental en todo. Es también la disposición a sintonizarnos con la experiencia de otros sin saltar a conclusiones ni juicios acerca de ellos o nosotros, desarrollar la habilidad de aplicar el raciocinio derivado de la experiencia para tomar decisiones responsables y beneficiosas.

Es la disposición de lograr lo que deseamos manteniéndonos conscientes que los resultados dependen de muchos factores, sin embargo es válido mantenernos flexibles al elegir y si es necesario permitirnos cambiar de opinión. Es asumir riesgos calculados, pero sin evadir la realidad, aceptar que existen situaciones más allá de nuestro control, y mantenernos confiados que al permanecer centrados en aquellas que si podemos influenciar, la mayoría de nuestras necesidades serán satisfechas.

La asertividad es innata y aprendida. De manera que el camino hacia la asertividad, puede convertirse en un aprendizaje, un proceso nuevo de descubrimiento de las potencialidades que se tienen en una relación consigo mismo es un comportamiento aprendido. Si corremos con la suerte de contar con buenos modelos de personas asertivas durante nuestra infancia, será natural para nosotros desarrollar ese hábito, de otra manera posiblemente nos encontramos en la situación de desear cultivarlo.

Los hombres y a las mujeres tradicionalmente tienen la orientación social de formas diferentes. En ocasiones es socialmente aceptable para los hombres ser agresivos, mientras que se espera que las mujeres sean pasivas y sumisas, en la actualidad la realidad es otra. Algunas mujeres al intentar romper el "molde" sumiso con el que pretende "etiquetarlas" la sociedad frecuentemente creen que la única manera de hacerlo es adoptando la postura diametralmente opuesta, la de la agresividad, al mismo tiempo que reconocen que el comportamiento agresivo es poco femenino.

Comunicarse con asertividad permite transmitir nuestras necesidades o deseos de forma madura y racional sin provocar el rechazo o malestar de la otra persona. Esta es una definición que busca acercarse hacia mi trabajo de tesis puesto que en ella se encuentran incluidos varios puntos. La violencia en el hogar se da generalmente por que para la mayoría de sujetos es difícil expresarse con palabras y utilizan los golpes para trasmitir sus sentimientos , además de una carga afectiva llena de lenguajes insultantes que cada vez desvalorizan a la mujer.

Las características de la comunicación asertiva no verbal se encuentran bajo estos parámetros

  • Cuerpo firme sin parecer rígido. Postura relajada.
  • Mirar a los ojos (No demasiado fijamente: se interpreta como agresividad)
  • Sonreír levemente
  • No acercase excesivamente a la otra persona. Invade su terreno personal, lo que incomoda.

Cuando la persona es capaz de expresar sus sentimientos, pensamientos y deseos y defender sus derechos sin violar los de los demás. Cuando se está abierto a la negociación, al diálogo y al compromiso, es cuando hablamos de una comunicación asertiva

Vivimos una comunicación pasiva cuando la persona no expresa directamente sus sentimientos, pensamientos y deseos. Cuando se intentan comunicar éstos indirectamente o se ocultan por completo. Se confía en que los demás adivinen lo que queremos o lo que sentimos. No se violan los derechos y/o sentimientos de los demás, pero se permite que los propios estén desatendidos. Este tipo de lenguaje frecuentemente es utilizado por las mujeres, en nuestras casas nos dicen que las mujeres debemos ser reservadas, hablar en todo muy suave, características de estilo que no buscan una comunicación para la ternura sino que en su defecto tratan de volvernos sumisas y un tanto cerradas al dialogo ya que no podemos expresar lo que sentimos.

La comunicación agresiva se da cuando la persona expresa lo que siente, lo que quiere y lo que piensa a costa de los derechos y los sentimientos de los demás y tiende a humillar y a atacar cuando no puede salirse con la suya, fomentando la culpa y el resentimiento en los otros, no fomentando la negociación ni el diálogo. Es lo que enseñamos a nuestros hijos, amigos, hermanos, primos, etc.; cuando decimos no seas "mandarina" cuando incitamos a la violencia, "si el te pega ,pégale más duro", "no te dejes", términos que son utilizados porque no tenemos la habilidad de dialogar y converger en el bien común, ya que cuando discutimos lo importante ya no es solucionar el problema sino, herir, maltratar, desvirtuar, ofender y ganar la batalla contra el "otro/otra"

Cuando una persona no se comunica asertivamente intervienen varios factores tales como: el déficit en el aprendizaje de la habilidad: cuando ésta no se posee en el repertorio personal no se puede poner en marcha. Este déficit puede ser debido a diferentes causas, pero generalmente suele ocurrir, como consecuencia de la ausencia de modelos adecuados, en periodos críticos de la vida.

Se posee la habilidad pero no se pone en práctica: bien por consecuencias negativas ante alguna actuación en la que la habilidad se llevo a cabo, lo que genera que en las siguientes situaciones no se ponga en práctica, o bien por pensamientos distorsionados, anticipando la evaluación que los demás pueden hacer de nosotros. Así se percibe a los otros como hostiles y la propia actuación siempre se evalúa como negativa y susceptible de ser reprobada y/o rechazada.

Para facilitar su explicación y ver las diferencias las situamos en comparación con la pasividad y la agresividad. Es muy importante unir la conducta no verbal con la verbal, ofreciendo una coherencia comunicativa. El comportamiento asertivo ofrece muchas ventajas, destacaremos las siguientes:

Disminución de la ansiedad. Aumento de relaciones más íntimas y significativas. Una mejor adaptación social. Un aumento de la autoestima. Maximización de consecuencias favorables y minimización de consecuencias desfavorables. Aumento de la confianza y seguridad en si mismo. Mejorar la aceptación y el respeto propio y el de los demás. Expresión de sentimientos, derechos y deseos tanto positivos como negativos de una forma eficaz, sin menospreciar o negar los derechos de los demás y sin crear o sentir vergüenza y/o sentimientos de culpabilidad. Aumento de la empatía (capacidad de ponerse en el lugar del otro).

Es importante tener en cuenta que el objetivo no es conseguir siempre lo que quiere, sino aumentar la probabilidad de lograr sus objetivos sin pasar por encima de los derechos de los demás.

Lo que sí se conseguirá siempre es sentirse mejor consigo mismo por haber sido capaz de expresar su opinión y sus sentimientos.

Como se ha dicho la asertividad es una habilidad y como tal susceptible tanto de aprendizaje como de mejora.

En definitiva, es una habilidad personal para facilitar el desarrollo y fomento de las relaciones interpersonales positivas, con una actitud de respeto y tolerancia hacia otras personas, aceptando las diferencias entre unos y otros y aprendiendo a comportarse de forma constructiva y solidaria, aportando cosas propias y valorando las aportaciones de los demás.

Aprender a comportarse de forma asertiva no es sólo aprender a expresar las emociones, afectos, sentimientos y opiniones propias, sino también aprender a recibir de forma adecuada las de los demás.

Para ello se proponen técnicas como:

Exposición en vivo: practicar y llevar a cabo las conductas en situaciones reales.

Juego de roles: practicar y llevar a cabo las conductas en situaciones simuladas, cambiando de rol.

Dinámicas de grupo.

Principales áreas para la práctica:

Iniciación de interacciones con otras personas. Hablar en público. Enfrentarse a superiores. Defensa de derechos. Expresión de molestia, desagrado y enfado. Expresión de sentimientos positivos. Rechazo de peticiones. Aceptación de cumplidos. Hacer cumplidos. Expresión de sentimientos negativos. Tomar iniciativas en las relaciones con el sexo opuesto.

El entrenamiento resulta sencillo y agradable y los beneficios personales se perciben muy pronto, es por esto que al utilizar el cambio de una comunicación pasiva o agresiva, hacia la asertividad estamos logrando grandes cambios, la campaña de comunicación esta orientado a eliminar estas deficiencias forjando y formando un nuevo estilo de comunicación en las parejas que tienen problemas y en las que inician sus hogares, propiciando de esta manera un menor índice de violencia en el barrio de Carcelén

  1. Se entiende como desarrollo, la condición de vida de una sociedad en la cual las necesidades auténticas de los grupos y/o individuos se satisfacen mediante la utilización racional, es decir sostenida, de los recursos y los sistemas naturales. Para ello se utilizarían tecnologías que no se encuentran en contradicción con los elementos culturales de los grupos involucrados. Este concepto integra elementos económicos, tecnológicos, de conservación y utilización ecológica, así como lo social y político. La esfera de poder, dentro del contexto social se hace necesaria como forma organizativa y de cohesión legítima, legal y funcional dentro de grupos sociales y como instancia de toma de decisiones entre individuos.

    Un sentido con mayor aplicabilidad y concreción en la definición de desarrollo establecería que el mismo está caracterizado por condiciones en las cuales los bienes y servicios se encuentran crecientemente al alcance de los grupos sociales que conforman la sociedad. Esta característica implicaría una mayor integración social y económica dentro de las sociedades, y por ello se disminuiría la existencia de grupos viviendo en condiciones de marginalidad.

    Por otra parte el desarrollo establecería una condición de acceso a los servicios sociales y a la participación social activa. En el primero de los casos se hace referencia a los sistemas de educación, y a la satisfacción de las necesidades de sobrevivencia en términos de alimento, vivienda, vestido, salud y seguridad. En el caso de la participación social activa se refiere a la capacidad del individuo y de las instituciones sociales a garantizar que las agrupaciones de poder sean instancias de intermediación entre los sujetos y actores en la toma de decisiones.

    De conformidad con los conceptos dados a conocer como fundacionales en términos del desarrollo por la Organización de Naciones Unidas –ONU-, en su Informe Anual de Desarrollo Humano de 1990, se tiene que el desarrollo en general es básicamente un proceso de vida que permite contar con alternativas u opciones de selección para las personas. Las aspiraciones de las personas pueden ser muchas, pero fundamentalmente se refieren a tres: (a) la búsqueda de conocimientos; (b) la posibilidad de tener una vida prolongada y saludable; y (c) tener acceso a los recursos que permitan un aceptable nivel de vida. Es a partir de estas tres finalidades que se derivan muchas otras.

    Uno de las principales características de los conceptos de la ONU es la reafirmación que las medidas macroeconómicas centradas en aspectos de producción y su relación con las poblaciones -caso de ingreso per capita-, tienen limitaciones. Entre estas limitantes se encuentra la evidencia de que el desarrollo si bien es cierto implica la posesión económica hasta cierto nivel, no se reduce sólo al aspecto de riqueza. Se hace énfasis en que el desarrollo humano incluye dos facetas complementarias. Una de ellas es la formación de las capacidades humanas. La otra, que esas capacidades puedan ser ejercidas en las diferentes esferas de la vida: económica, social, cultural o política.

    Toda comprensión de desarrollo supone una práctica comunicativa , el desarrollo es un proceso diseñado y construido por los sujetos , se lo realiza en función de un horizonte o una meta a seguir, esto que denominamos desarrollo se lo construye desde la cotidianidad es denso y a su vez contradictorio.

    En las culturas se hace y rehace en permanente tensión el desarrollo, es una búsqueda o un ideal complejamente inalcanzable puesto que siempre se encontrará en proceso de construcción

    Es la búsqueda de un estado de bienestar por lo que se forja mediante un proceso de reconocimiento, es de esta manera que el proceso al que nosotros denominamos desarrollo se encuentra engendrado con varias trabas tales como la pobreza mediante el cual se busca alternativas para generar desarrollo

  2. DESARROLLO

    Es un proceso de transformación complejo, no lineado, ni simplificado con encuentros múltiples; es unir la transversalidad de la comunicación junto al englobamiento absoluto del desarrollo hacia las necesidades de la sociedad donde interviene la cultura como eje modulatorio de la amistad y convivencia de estos dos grandes implica, técnica y ética , justicia , decisión democracia y gestión

    Es el proceso de participación ciudadana en el ejercicio y construcción de la palabra por tanto se la practica desde la cotidianianidad por lo que esta en constante formación.

    Hace cultura, sociedad e historia

    La comunicación para el desarrollo se basa en la premisa, de que el éxito en el desarrollo requiere de la participación activa y consiente de los beneficiarios previstos en cada etapa del proceso de desarrollo. En definitiva el desarrollo no puede llevarse a cabo, sin un cambio en la actitudes y la conducta de la gente a quien esta destinado,

    Con este propósito, por comunicación para el desarrollo se entiende el uso sistemático y planificado de la comunicación, a través de conversaciones directas, medios audiovisuales, de comunicación masiva, para recabar e intercambiar información entre quienes se ocupan de planificar iniciativas de desarrollo, con el fin de lograr un consenso sobre los problemas de desarrollo con los cuales se enfrentan y las posibles alternativas de soluciones.

  3. COMUNICACIÓN PARA EL DESARROLLO

    El concepto de cultura es fundamental para las disciplinas que se encargan del estudio de la sociedad, en especial para la antropología, la comunicación y la sociología. Los orígenes del término se encuentran en una metáfora entre la práctica de alguna actividad (por ejemplo, el cultivo de la tierra, que es la agricultura) con el ‘cultivo’ del espíritu humano, de las facultades intelectuales del individuo. En esta acepción se conserva aún en el lenguaje cotidiano, cuando se identifica cultura con erudición. De esta suerte, una persona "culta" es aquella que posee grandes conocimientos en las más variadas regiones del conocimiento.

    La UNESCO, en 1982, declaró

    …que la cultura da al hombre la capacidad de reflexionar sobre sí mismo. Es ella la que hace de nosotros seres específicamente humanos, racionales, críticos y éticamente comprometidos. A través de ella discernimos los valores y efectuamos opciones. A través de ella el hombre se expresa, toma conciencia de sí mismo, se reconoce como un proyecto inacabado, pone en cuestión sus propias realizaciones, busca incansablemente nuevas significaciones, y crea obras que lo trascienden.

    La cultura o el cuerpo social según Freud es tanto un mecanismo para satisfacer nuestras necesidades y procurarnos placer, como una manera de alejar o evitar el sufrimiento y las desgracias exteriores que vienen aparejadas con las fuerzas incontroladas de la naturaleza. La satisfacción de nuestras necesidades, que pasa por el despliegue ilimitado del instinto sexual y el instinto de agresión, puede convertirse también en causa de intenso sufrimiento cuando el mundo exterior nos priva de ella.

    La religión, la filosofía y la literatura ayudan a configurar la ideología y los valores que la sustentan y sirven como instrumentos de aprendizaje y como modelo de conducta para las sucesivas generaciones. El derecho cristaliza los valores y las costumbres y los convierte en normas de conducta.

    La cultura se ha nutrido de las ideas patriarcales acerca del sometimiento de las mujeres y no ha sancionado el derecho de los hombres a utilizarla violencia contra las mujeres para asegurar ese sometimiento.

    En toda nuestra historia cultural aparece de un modo constante y reiterado el binomio sometimiento y violencia en cuanto a las relaciones respectivas de hombres y mujeres.

    El sometimiento de las mujeres no se ejerce únicamente mediante la imposición de la fuerza sino también mediante el control ideológico, que se muestra muchas veces incluso más eficaz. Las formas de pensar, de entender las relaciones de género y de comportamiento social de los hombres y de las mujeres, ayudan a respetar un orden social desigual en mayor medida, si cabe, que la mera imposición de la fuerza. En este sentido se entiende la importancia que la ideología y la religión tienen en cuanto a configurar las posiciones sociales respectivas de hombres y mujeres.

    Algunas de las manifestaciones del código patriarcal tal y como se ha manifestado en la cultura occidental. Las religiones que en ella se han desarrollado, incorporan la idea de la inferioridad de las mujeres y de la aplicación de la violencia sobre ellas. Tanto en la mitología griega como en las tradiciones judeocristianas y las cosmovisiones indígenas, que van a tener una influencia enorme en nuestra cultura, se insiste en los rasgos de superioridad del hombre, a la vez que se refuerza sistemáticamente la idea de inferioridad y dependencia de las mujeres.

    El derecho en cada época sirve para apoyar las normas sociales de sumisión femenina, restringiendo enormemente su campo de acción y acotando sus capacidades respecto de los derechos de los hombres. Las leyes han sido el instrumento fundamental para mantener a las mujeres en situación de dependencia, impidiendo que fueran ciudadanas de pleno derecho, y colocándolas como dependientes de los hombres en la única esfera en las que podían actuar, la esfera privada.

    Las historias de la mitología empezaron trasmitiéndose como narraciones orales y fueron conocidas de todos antes de que pasaran a la escritura de la épica y el teatro griego. De este modo sirvieron como transmisores de cultura, enseñando a las sucesivas generaciones el comportamiento violento de los hombres poderosos. La naturalidad con la que se reflejan en los textos clásicos las violaciones y los malos tratos a las mujeres forman parte del aprendizaje cultural en el que sucesivas generaciones han aprendido como se mantienen las posiciones respectivas de los hombres y las mujeres en nuestra cultura.

    La combinación de la ira del dios más poderoso y del sometimiento a sus órdenes de todo el resto del universo presenta una escala jerárquica de poder y de obediencia. Y en la base de esta escala están las mujeres, cuyo sometimiento se aseguraba mediante la violencia.

    Las creencias tradicionales que consideran a las mujeres como personas subordinadas perpetúan una serie de prácticas ancestrales que entrañan violencia y coacción de las mujeres. Algunas de las tradiciones ancestrales encaminadas a controlar y someter a las mujeres conllevan formas de agresión física y se consideran violencia de género; por ejemplo, la mutilación genital de las niñas, en sus diversas formas, es una práctica ancestral que continua manteniéndose en numerosas regiones del mundo, sobre todo en los países subsaharianos y de África central y oriental.

    La mutilación genital femenina, es una de las prácticas de violencia de género sobre la que hay actualmente gran preocupación debido a su enorme extensión. Se calcula que unos dos millones de niñas son sometidas anualmente a la ablación del clítoris. Esta práctica no está reconocida como delito en todos los países donde se practica a pesar de las declaraciones tan enérgicas en su contra de las Naciones Unidas y de la Organización Mundial de la Salud.

    Por vez primera se la identifica como delito en algunos países europeos en los que se ha introducido a través de la población emigrante, que sigue manteniéndola como costumbre. Los médicos han desvelado las graves secuelas físicas que deja en las niñas y se han extendido las medidas para combatir este tipo de prácticas. En los países subsaharianos en los que sigue siendo una costumbre, hace ya años que una serie de organizaciones no gubernamentales tratan de contrarrestar sus efectos, ayudando médicamente a las mujeres víctimas de dichas prácticas y tratando de concienciar a la población y a las autoridades acerca de los daños de todo tipo que se causan con ellas.

    En Somalia, por ejemplo, una serie de organizaciones feministas vienen combatiendo estas prácticas desde comienzos de los años ochenta, y parece que han sensibilizado a buena parte de la población más educada que la ha abandonado, pero no se ha conseguido que las autoridades tomen medidas enérgicas contra la continuidad de las mismas, a pesar de la definición alcanzada en la reunión internacional de Beijing condenando la mutilación femenina como violencia contra las mujeres .También el batí, la inmolación de la esposa en la pila funeraria del marido, es una forma extrema de desconocer los derechos de las mujeres porque es una forma de suicidio forzoso que aún se practica en algunas regiones de la India. Ha sido prohibido legalmente, pero ello no impide que continúen las presiones religiosas en algunas regiones de la India para que se respete esta tradición. Simbólicamente supone la subordinación total de la mujer al marido porque niega su derecho a la vida una vez que muere el esposo.

    Existen múltiples formas culturales de agresión contra las mujeres que no llegan a presentar la gravedad de las que hemos señalado hasta aquí. Entre ellas podemos señalar el hostigamiento a las mujeres en los lugares públicos, las imágenes degradantes transmitidas por los medios de comunicación y los cánones de belleza femenina que atentan contra la salud. Todas ellas presentan formas atenuadas de agresión y se difunden en la forma de violencia simbólica.

    El término de violencia simbólica en el sentido acuñado por Bourdieu para referirse al hecho de que las clases sociales dominantes presentan sus saberes, sus valores y sus criterios como los únicos válidos. Se rechazan y se desdeñan las formas de entender el mundo que no coinciden con las del grupo dominante. En este sentido la violencia simbólica es una agresión contra las aspiraciones, los valores, los modos de entender el mundo y las prácticas cotidianas del grupo que se quiere someter y dominar. Los

    Instrumentos de la violencia simbólica son ideológicos. Con ellos refuerzan su dominio imponiendo sus criterios en el mundo de la ética, la estética, la moda, la moral, etc.

  4. CULTURA
  5. EL HOSTIGAMIENTO EN LA CALLE

Ésta no es la más grave de las formas culturales de violencia contra las mujeres pero si es una de las que pone de manifiesto más claramente el carácter de género que tiene y su implantación en todas las clases sociales.

En las calles de numerosas ciudades del mundo las mujeres se sienten amenazadas por los insultos, los piropos obscenos o las simples interpelaciones ofensivas. No es infrecuente que los hombres interpelen agresivamente a las mujeres que ven pasar, haciendo referencias a las distintas partes de su cuerpo, al margen de la condición social de estas mujeres. Con estas expresiones públicas los hombres afirman su superioridad genérica sobre las mujeres por encima de las diferencias de clase y las mujeres aprenden la jerarquía de género sea cual sea su posición social.

El insulto o piropo callejero es una forma de agresión a las mujeres muy característica de la violencia patriarcal porque simbólicamente es una falta de respeto que se acepta socialmente con naturalidad y con «sentido del humor».

En el terreno del hostigamiento público a las mujeres hay que incluir la publicidad sexista que es ofensiva para las mujeres. Asimismo, la pornografía se utiliza imágenes femeninas con un sentido de cosificación del cuerpo femenino y que, en muchos sentidos, ofende colectivamente la dignidad de las mujeres.

  1. EL IDEAL DE BELLEZA FEMENINA COMO AGRESIÓN

Ha habido en el pasado, y aún se mantienen en ciertas sociedades, prácticas culturales que se sitúan a medio camino entre formas de represión de las mujeres y reglas de belleza o arreglo físico. Son aquellas tradiciones, costumbres o modas que suponen sacrificios y causan daños físicos a las mujeres. Podríamos señalar la práctica, en algunas tribus africanas, de poner numerosos collares a las niñas desde muy temprana edad para desarrollar la longitud de su cuello cuando lleguen a ser adultas. Otra práctica terrible ha sido la costumbre china de vendar los pies a las mujeres para asegurar un

Tamaño muy reducido de los mismos cuando fueran mayores. Esta práctica se erradicó en los años cincuenta del siglo XX y también fueron terribles los daños y los sufrimientos por los que tuvieron que pasar las generaciones de mujeres a las que se les habían vendado los pies en la infancia y se les desvendaron a edad avanzada.

Podríamos también incluir aquí los enormes daños y sufrimientos infligidos a las mujeres para acomodarse a determinados patrones de belleza, como es actualmente la norma de delgadez extrema en la mayoría de las sociedades. Las privaciones que sufren las mujeres para adecuarse a esto son enormes, produciendo también innumerables trastornos alimenticios, llegando algunos de ellos a ser enfermedades graves como la anorexia y la bulimia.

Las dietas, la cirugía estética, los ejercicios para conservar el vigor físico, todo ello está en la frontera de las prácticas culturales que agreden a las mujeres. Se imponen con una fuerza enorme y, a la vez, son las mismas mujeres las que las asumen voluntariamente.

Este aspecto de la voluntariedad es el que señala el límite que separa lo que es y lo que no es violencia contra las mujeres; aunque hay que tener en cuenta lo persuasivas que pueden ser las normas culturales a las que muchas mujeres no pueden resistirse. Fátima Mernisi compara la presión del velo impuesto por la policía social de los países árabes integristas con la presión de la talla 38, como ella denomina a la obligación de la delgadez a la que son sometidas las mujeres en Occidente

Estos patrones culturales imponen el sometimiento a través de la idea de belleza. La fuerza de los mismos es tal que son las mismas mujeres las que ejercen la violencia y el sacrificio sobre ellas mismas. Se advierte con crudeza la fuerza de estas normas culturales y, sin embargo, es difícil identificar responsabilidades en una agresión que se produce colectivamente contra el cuerpo de las mujeres, pero en la que las mujeres se implican activamente.

  1. VIOLENCIA CONTRA LA MUJER

Es todo acto violencia basado en la pertenencia al sexo femenino que tenga o pueda tener como resultado un daño o sufrimiento físico , sexual o psicológico para la mujer, inclusive las amenazas de tales actos , la coacción o la privación arbitraria de la libertad tanto si se producen en la vida pública o privada, vulnerabiliza a las víctimas de tal problemática y trunca su desarrollo y armonía personal, así como su condición de ciudadanas, actoras y protagonistas sociales.

Se entiende como violencia contra la mujer «todo acto de violencia sexista que tiene como resultado posible o real un daño físico, sexual o psíquico, incluidas las amenazas, la coerción o la privación arbitraria de libertad, ya sea que ocurra en la vida pública o en la privada» (ONU, 1995).

La razón de ser de lo que llamamos violencia de género es la necesidad de los hombres de controlar a las mujeres en el sistema social que llamamos patriarcado.

Según la declaración de Naciones Unidas en Beijing de 1995, la violencia contra las mujeres «es una manifestación de las relaciones de poder históricamente desiguales entre hombres y mujeres, que han conducido a la dominación de la mujer por el hombre, la discriminación contra la mujer y a la interposición de obstáculos contra su pleno desarrollo. La violencia contra la mujer a lo largo de su ciclo vital dimana especialmente de pautas culturales, en particular de los efectos perjudiciales de algunas prácticas tradicionales o consuetudinarias y de todos los actos de extremismo relacionados con la raza, el sexo, el idioma o la religión que perpetúan la condición inferior que se le asigna a la mujer en la familia, el lugar de trabajo, la comunidad y la sociedad» (ONU, 1995).

12 VIOLENCIA MARITAL

Es una expresión del poder masculino que cariñosa , agresiva o violentamente , se detalla día a día sometiendo a su mujer a sus designios, obligándola a renunciar a sus sueños e identidad , para que seda su vida en favor de su comodidad , desarrollo profesional y vida cotidiana , aquello debe hacerse sin pretender tener autonomía : ella debe trasmutarse por y para la familia.

Millones de mujeres en todo el mundo son golpeadas por sus maridos, novios o amantes. Es una forma de realizar, en el ámbito individual, el mandato del código patriarcal que decreta la sumisión de las mujeres al poder de los hombres. Esta violencia se considera un asunto privado en la mayoría de las sociedades; se lleva en secreto y está visto simbólicamente como forma de mantenimiento del orden social.

Las formas de la violencia conyugal son muy diversas, yendo desde las formas más insidiosas del maltrato psíquico a las expresiones más brutales de fuerza que causan la muerte. En la ciudad de Sao Paulo, en Brasil, fueron asesinadas por sus maridos 772 mujeres, en el año 1980; y seguimos conociendo cifras igualmente alarmantes en casi todas las ciudades del mundo (Seager y Olson, 1986). Pero no es fácil saber la incidencia de la violencia conyugal salvo cuando desemboca en crímenes horrendos.

Los golpes, las palizas y las violaciones se mantienen fuera de los registros estadísticos públicos, en la mayoría de los casos. Apenas se denuncian las agresiones de pareja, y muchas de las ocasiones en las que se denuncian los datos se incluyen en los registros de criminalidad sin diferenciar el sexo del agresor, con lo que la característica fundamental de estos crímenes, el ser violencia de género, queda oculta bajo la imagen global de la violencia.

13 EL MATRIMONIO FORZOSO

Hay una forma de violencia contra las mujeres que se lleva a cabo en la familia y es la del matrimonio forzoso. El obligar a una joven a casarse contra su voluntad es en todo caso una imposición violenta, ya se use la fuerza física o la persuasión psicológica para obligarla. Los mecanismos de intimidación y las presiones para que se sacrifique en nombre de su familia, alternan con las sugestiones afectivas y el recuerdo de los padres, invocando un amor fraternal que no existe. Las exigencias de lealtad a la familia se unen a las calumnias, la falsificación de documentos y las mentiras, son un proceso ejemplar de acoso moral que busca debilitar la voluntad.

Los matrimonios forzosos no siempre implican a grandes familias y enormes fortunas, pero siempre requieren de violencia para doblegar la voluntad de las mujeres empujadas a ellos. Un ejemplo de estas prácticas se ha visto recientemente en Ecuador con el caso de una joven de Santo Domingo que pidió auxilio a la Policía durante un viaje familiar cuya finalidad era su matrimonio forzoso con un hombre mayor que ella.

El siglo XX ha visto desaparecer buena parte de esta tradición de matrimonio obligado o venta de esposas acordada por las familias, y se ha legitimado, al menos ideológicamente, la libertad de los contrayentes como requisito indispensable de la validez del contrato matrimonial. Sin embargo, esto no es todavía una regla generalizada en todas las sociedades actuales ni en todas las clases sociales.

  1. MUJER MALTRATADA

Es aquella que se encuentra por medio de mitos por develar , como la inocencia de los primeros golpes ,es una mujer sometida y dependiente , que se encuentra con una voluntad anulada , su identidad desvalorizada casi insignificante , llena de desprecio, depresión , ahogo y finalmente muerte.

15. VIOLENCIA DE GÉNERO

Esencia misma de la cultura , que reviste de normalidad y cotidianidad las acciones que transitan las relaciones familiares y sociales e invisibiliza la impotencia de miles de mujeres , signadas por la crueldad de la violencia masculina.

Al hablar de violencia contra las mujeres la denominamos violencia de género para señalar la importancia que en ello tiene la cultura, para dejar claro que esta forma de violencia es una construcción social, no una derivación espontánea de la naturaleza. En este concepto se incluyen todas las formas de maltrato psicológico, de abuso personal, de explotación sexual, de agresión física a la que son sometidas las mujeres en su condición de mujeres.

El fenómeno de la violencia de género es como los «dibujos escondidos », incorporados en láminas que contienen manifiestamente otro tipo de imágenes y que, en una primera visión, son difíciles de advertir. Antes de identificar el «dibujo escondido» no logramos verlo, vemos solamente las otras figuras a su alrededor. Una vez que hemos localizado el «dibujo escondido» ya lo vemos siempre. Sólo una vez que lo hemos identificado estamos preparados para verlo de nuevo.

De la misma forma, la violencia contra las mujeres está tan arraigada históricamente, y tan presente en nuestra sociedad, que nos cuesta identificarla; cuando adquirimos conciencia de que «esa no es forma de tratar a las mujeres», dejamos de verla como una situación irremediable. La vemos y la podemos nombrar. Cuando podemos nombrarla como a un problema social, violencia de género, empezamos a entender que hay un colectivo que la sufre sistemáticamente y podemos preguntarnos si esto es legítimo.

Este proceso de ver y nombrar un problema social donde antes sólo existían prácticas normales y aceptadas, ha requerido que un sector de la sociedad nos señalara el «dibujo escondido» de la lámina. En cada caso hay un colectivo que ejerce esta función de señalar una realidad nueva. En el caso de la violencia de género, han sido los grupos feministas de los países occidentales los que han señalado con un dedo acusatorio a todos aquellos que degradan la dignidad de las mujeres a través de la violencia. A raíz de la identificación de la violencia contra las mujeres que han hecho los grupos feministas, otros actores, como las asociaciones de defensa de los derechos humanos y las organizaciones internacionales han empezado a ver el problema.

Gracias a los medios de comunicación las nuevas ideas sobre este tema han ido extendiéndose por sectores cada vez más amplios de la sociedad.

Para entender esta denominación de violencia de género hay que tener en cuenta el carácter social de los rasgos atribuidos a hombres y mujeres. Se utiliza el concepto de género para identificar las diferencias sociales y culturales que se producen entre los hombres y las mujeres, distinguiéndolo del concepto de sexo, con el que nos referimos a las diferencias biológicas que hay entre los hombres y las mujeres. Con estos dos conceptos es posible entender cómo la mayoría de los rasgos de lo femenino y lo masculino son construcciones culturales, son producto de la sociedad, no derivados necesariamente de la naturaleza.

Tanto los rasgos producidos por la naturaleza como los aprendidos de la cultura tienen un arraigo muy potente en los seres humanos. Incluso hoy en día, debido a los avances de la ciencia, podría considerarse incluso más fácil cambiar los rasgos sexuales de un individuo que cambiar sus características psicosociológicas femeninas o masculinas.

Al definirla como violencia de género se ha dado un paso hacia el reconocimiento de la violencia contra las mujeres. Se denomina así por ser aquella violencia ejercida por los hombres contra las mujeres, en la que el género del agresor y el de la víctima va íntimamente unido a la explicación de dicha violencia. Es violencia de género porque es aquella que afecta a las mujeres por el mero hecho de serlo. Hay muchas agresiones y formas de violencia que no guardan relación con el hecho de ser hombre o mujer, mientras que aquí nos referimos a la violencia que se ejerce por los hombres para mantener el control y el dominio sobre las mujeres.

16 LA VIOLENCIA MASCULINA: UN GRAVE PROBLEMA SOCIAL Y POLÍTICO

Maridos, ex cónyuges, novios y antiguos compañeros son los responsables de la mitad de las muertes violentas de mujeres en el mundo, según el Informe mundial sobre Violencia y Salud que hizo público la OMS en Bruselas el 3 de octubre de 2002. Sólo el 5% de las muertes de hombres se debe a ataques de sus parejas.

En el periódico Las Ultimas Noticias, se informaba de que en las cárceles ecuatorianas había 200 hombres condenados por homicidio, cifra que constituía el 95,81% de la población recluida por este motivo; el 4,18% restantes eran mujeres: 7 en total. Aunque las cifras anteriores no se refieran exclusivamente a los casos de homicidio

Femenino o masculino dentro del hogar familiar, según se recoge de la investigación, la inmensa mayoría de las personas víctimas de violencia en el ámbito familiar, son mujeres. En otros estudios se encuentra que del índice total de violencia doméstica, sólo un 5% aproximadamente, son hombres maltratados.

"En el mes de julio de 2000 se publicaron los resultados de la Encuesta Nacional de la Violencia contra las Mujeres en EE.UU. (en la que, por primera vez, se recogen datos desagregados de la violencia masculina y femenina) en donde se entrevistó a 8.000 mujeres y a otros tantos hombres sobre sus experiencias como víctimas de varias formas de violencia, incluida la violencia doméstica. El primer resultado es que la violencia permea las relaciones familiares en USA y que este tipo de violencia es una preocupación grave de justicia y salud públicas. En lo que respecta a la violencia ejercida contra mujeres y hombres, por hombres y mujeres, se señala que las mujeres experimentan más violencia en las relaciones de pareja que los hombres: así, el 30,4% de las mujeres que habían estado casadas o vivido con un hombre, habían sido maltratadas alguna vez en su vida; mientras que el porcentaje de mujeres que habían sido maltratadas, en relación de pareja, por otra mujer, era del 11%. Los hombres que habían vivido en situación de pareja homosexual informaron de más agresiones que los hombres que vivían con mujeres: aproximadamente el 15% de los hombres que habían vivido en pareja con otro hombre, habían sufrido algún tipo de violencia todo lo contrario de los que habían convivido con una mujer, y habían sufrido maltrato alguna vez en su vida por parte de su compañera era el 7,7%. La Encuesta Nacional de Violencia contra las Mujeres concluía que la violencia doméstica es perpetrada principalmente por los hombres contra su pareja, sea ésta una mujer u otro hombre. Y concluye: "Por consiguiente, las estrategias para prevenir la violencia doméstica deberían enfocarse en el riesgo que plantean los hombres" Hay, no obstante, datos complementarios a los anteriores, según el Departamento de Justicia de EE.UU. entre 1976 y 1996 el número de víctimas mortales masculinas [no necesariamente provocadas por una mujer] cayó una media del 5%, y el número de víctimas mortales femeninas se redujo sólo una media de un 1%."

El recientemente galardonado Premio Príncipe de Asturias de Ciencias Sociales, el sociólogo Anthony Giddens, dice: "Aunque las mujeres también cometen actos de violencia doméstica contra los hombres, en la inmensa mayoría de los casos son estos los agresores y ellas las víctimas". Sin dejar de valorar los casos minoritarios en que los hombres son víctimas de violencia por parte de mujeres, es preciso poner la atención y dirigir la mirada pública hacia los problemas que afectan de manera mayoritaria a un significativo colectivo de la población de mujeres para analizar sus causas y encontrar soluciones.

17 ELEMENTOS TÍPICOS DE LOS DELITOS SEXUALES

  • Deslegitimación de la declaración y testimonio de la víctima
  • Desacreditación de la conducta de la víctima
  • Pruebas de honorabilidad de los agresores
  • Encubrimiento médico , deveniente del lenguaje utilizado en la redacción del certificado
  1. PROCEDIMIENTOS PARA UNA VIOLACIÓN
  • PREMEDITACIÓN: los sujetos conversan y planean
  • la violación
  • ORGANIZACIÓN DE LA VIOLACIÓN: actúan naturalmente y se turnan para inmovilizarlas y violarlas, tomando las seguridades para no ser descubiertos.
  • RELACIÓN CON LA VICTIMA: En la mayoría de los casos los sujetos eran amigos de la víctima

19.- VIOLENCIA SEXUAL

Sin perjuicio de los casos de violación sexual y otros delitos contra la libertad sexual se considera violencia sexual todo maltrato que constituye imposición en el ejercicio de la sexualidad de una persona y que la obligue a tener relaciones u otras prácticas sexuales con el agresor o con terceras personas, mediante el uso de la fuerza física , intimidación , amenazas o cualquier otro medio coercitivo

La violencia sexual es una de las prácticas más habituales de la violencia de género y de las menos denunciadas a nivel mundial. La violencia sexual masculina se apoya en las condiciones de ventaja que le ofrece el patriarcado y busca el sometimiento de las mujeres a través de la utilización de su cuerpo. No se trata de la expresión agresiva de la sexualidad, sino de la expresión sexual de la agresión masculina.

La agresión y la violencia sexual de los hombres no son un fenómeno biológicamente inevitable, sino un fenómeno socialmente generado por una cultura que asocia masculinidad con agresión y dominio sexual. La agresión sexual se convierte en un mecanismo de refuerzo de las relaciones desiguales de poder entre hombres y mujeres.

Se considera violencia sexual la que se ejerce contra el cuerpo de la mujer que supone a la vez una agresión física y un ultraje psíquico que atentan fundamentalmente contra la libertad sexual de la persona. La violencia sexual incluye todas las formas de agresión que suponen la utilización del cuerpo de las mujeres contra su voluntad.

Tradicionalmente se han entendido como delitos contra el honor y sólo recientemente se han visto como delitos contra la libertad de la mujer. Las agresiones sexuales van desde cualquier tipo de contacto sexual no deseado hasta el intento de violación, o la violación misma. El carácter de delito aparece cuando no hay consentimiento de la mujer. Un problema que aparece al analizar estos delitos es la forma de enjuiciar el consentimiento.

No todas las legislaciones ni todos los jueces entienden que la mujer tiene derecho a decidir lo que quiere y lo que no quiere, lo que consiente y lo que no consiente en el ejercicio de su libertad sexual.

En el código penal ecuatoriano se diferencia entre agresión sexual y abuso sexual según vaya o no acompañado de intimidación y violencia. La agresión sexual es el atentado contra la libertad sexual de la persona que va acompañado de violencia o intimidación.

Dentro de los casos se diferencia según que haya o no haya penetración. La letra de la ley siempre deja un cierto margen de interpretación y se han dado algunos casos singulares de jueces que atenúan la gravedad del hecho por diversas razones, como no considerar grave el desgarro vaginal de una joven por haberse realizado con los dedos y no con el miembro viril. Actualmente en Ecuador, ya no hay distinción en este delito según la virginidad o no de la mujer agredida, aunque ello pueda ser un agravante al considerar el castigo debido a la agresión

La violencia sexual se ejerce mediante presiones físicas o psíquicas que imponen relaciones sexuales no deseadas mediante coacción, intimidación o indefensión. El maltrato sexual se produce cuando se obliga a la mujer a mantener relaciones sexuales contra su voluntad, o en una forma que ella no quiere, ya sea por la fuerza o mediante coacciones. Podría incorporarse este tipo de violencia en la violencia física, pero se diferencia en cuanto el objeto del abuso es la libertad sexual de la mujer y no tanto su integridad física. La legislación recoge esta violencia como «delitos contra la libertad sexual», reconociendo así su carácter especial, que protege el bien jurídico de la autonomía moral de disponer libremente del propio cuerpo y no ver coartada esta libertad.

Las vías más comunes de presión son tres: la amenaza implícita o explícita de agredir o forzar a la mujer si no accede a los deseos de su pareja; la coerción social por la cual se presiona a la mujer para que cumpla las expectativas de su rol de género; y la coerción personal como las amenazas de infidelidad, control del dinero, abandono, etc. Una práctica muy habitual entre los maltratadores es utilizar las relaciones sexuales como muestra de reconciliación o muestra de castigo

  1. Constituye toda acción u omisión que cause daño, dolor, perturbación emocional, alteración psicológica o disminución de la autoestima de la mujer o el familiar agredido. Es también la intimidación o amenaza mediante la utilización de apremio moral sobre otro miembro de familia infundiendo miedo o temor a sufrir un mal grave o inminente en su persona o en la de sus ascendientes , descendientes o a fines hasta el segundo grado

    La violencia psíquica es toda conducta orientada a la desvalorización de la otra persona. Los malos tratos psíquicos causan sufrimiento y son tan dañinos o más que los malos tratos físicos en cuanto al deterioro de la salud física y mental de la víctima

    Hay muchos comportamientos que se pueden entender como violencia psíquica. Algunos de ellos son evidentes desde el exterior, mientras que otros son difíciles de percibir desde fuera de la relación interpersonal. Presentan diferentes niveles de gravedad según refuercen la desvalorización de la mujer que los sufre y el control sobre ella.

    La agresión psíquica se realiza mediante manipulaciones emocionales que se manifiestan en desprecio, humillación o culpabilización, que tienen el efecto de reducir la autoestima y la seguridad en sí misma de la mujer. Son formas de violencia psíquica las que se manifiestan en el desprecio hacia las opiniones, los trabajos, o las actividades realizadas por la mujer. También la indiferencia hacia sus necesidades y la falta total de atención son una forma de violencia psíquica.

    Una modalidad de violencia psíquica es la violencia de rol o control patriarcal, que se caracteriza por ser una conducta encaminada a controlar las actividades de la mujer en términos de su tiempo, sus relaciones, su trabajo y sus medios de subsistencia. Su objetivo es limitar al máximo la autonomía personal de la mujer y erosionar su autoestima e iniciativa propia, con el fin de reducirla a un ser pasivo y dócil.

    A medio camino entre la violencia física y psíquica están las amenazas y coacciones, a través de las cuales se imponen determinadas conductas de sumisión, obediencia, aislamiento o control. En esta situación también están las actitudes de hostilidad, los reproches y los insultos, que si bien suelen presentarse como agresiones verbales, están muy cercanas a la agresión física. Las amenazas, aunque estén recogidas como delitos en la legislación actual, muy frecuentemente, no se consideran por los tribunales como un aspecto importante de la violencia doméstica, siendo como son el mecanismo fundamental de la subordinación femenina. La amenaza de que se ejercerá violencia actúa como instrumento de control sobre las mujeres de una forma terriblemente eficaz, pues les impide tomar las decisiones que más les convienen, empujándoles en su lugar a obedecer lo que digan sus maridos o compañeros. La amenaza es el instrumento que mantiene el miedo, y este miedo es la base fundamental de la sumisión y la obediencia. Guiadas por el temor, las mujeres víctimas de la violencia no se atreven a hacer lo que desean y sólo buscan evitar el desencadenamiento de la violencia. Se pliegan a las exigencias del agresor para evitar sus posibles ataques de ira

  2. VIOLENCIA PSICOLÓGICA

    Todo acto de fuerza que cause daño , dolor o sufrimiento físico en las personas agredidas , cualquiera que sea el medio empleado y sus consecuencias sin considerarse el tiempo que se requiera para su recuperación es la violencia física.

    La violencia física es el uso de la fuerza contra el cuerpo de otra persona. Es maltrato físico cualquier conducta que suponga agresión física contra la mujer. Pueden ser empujones, bofetadas, patadas, estrangulamientos, etc., que pueden ser actos realizados con objetos contundentes, como un palo o un cinturón, o ser realizadas con armas blancas como cuchillos u objetos cortantes.

    El daño se puede graduar en función de la intencionalidad y del daño causado. En la evaluación de lesiones y severidad de las mismas se pueden destacar unos criterios básicos, como la conducta lesiva y su intencionalidad, los efectos de la lesión, los medios utilizados para lesionar, y los elementos que la acompañan como las amenazas. Sin embargo, no sólo importa la severidad de las lesiones resultantes sino también la severidad del acto cometido. Es frecuente que en los procesos penales se dé importancia a los partes médicos de lesiones, por encima de la intencionalidad y la brutalidad de las acciones que los ocasionaron. Hay muchos casos en los que la denuncia se produce cuando ya las heridas están curadas, y por tanto no existe suficiente información forense sobre la gravedad de las lesiones.

    En el país el lenguaje forense deja mucho que desear si una mujer es violentada, se señala que se presume una violación , se presume golpes con objeto contundente, tales parámetros liberan de la culpabilidad a muchos de los maltratantes u opresores.

    En la Policía Nacional las cosas son presumibles, a pesar de que haya roturas de huesos, terribles desgarramientos vaginales, moretones, mordeduras, etc. Este es el reflejo de la sociedad machista en la que vivimos , pues la mayoría de las excusas señalan que: "es mi mujer, como le voy a violar" "a ella, le gusta hacer el amor de esta manera" "estaba tentándome con una falda muy corto , uno es hombre, y sabe lo que pasa, uno es hombre" se trata de atentar y se violenta la integridad de las mujeres, señalándolas como prostitutas, como si estas mujeres por ejercer esta clase de profesión todo el mundo tendría derecho de abusar de ellas.

    La violencia física es la forma más evidente del maltrato doméstico. Es la más difícil de ocultar, la que deja secuelas de forma más inmediata; y sus víctimas no pueden minimizarla ni excusarla fácilmente. La visibilidad de las agresiones físicas, por otra parte, permite a la víctima tomar conciencia más fácilmente y pedir ayuda. El tratamiento legal de la violencia doméstica se ha centrado tradicionalmente sobre el maltrato físico, como reflejo de que en nuestra sociedad se le da más importancia al daño físico que a otros tipos de daño, quizás porque es más fácil de ocultar.

    Otra forma de maltrato físico que queda recogida en la legislación es el maltrato por omisión de cuidados y ayuda en situaciones en las que la salud de la mujer esté en peligro. Esta forma de maltrato se da con cierta frecuencia hacia los niños y los ancianos, pero también se puede dar en el caso de que la mujer esté enferma y su pareja le niegue su asistencia.

    La violencia física no aparece casi nunca sin manifestaciones de desprecio o maltrato psíquico. La combinación de abuso físico y psicológico que suele darse en la mayoría de los casos es un problema a la hora de delimitar y hacer visible la violencia doméstica, además de las circunstancias tan complejas que se derivan de la relación tan íntima y permanente del agresor y la victima

  3. VIOLENCIA FÍSICA
  4. VIOLENCIA INTRAFAMILIAR

Toda acción u omisión que consista en maltrato físico, psicológico o sexual, ejecutado por un miembro de la familia en contra de la mujer o demás integrantes del núcleo familiar

La violencia en el hogar, especialmente los golpes a la cónyuge, es tal vez la forma más generalizada de violencia contra la mujer. En países en que se realizan estudios fiables en gran escala sobre la violencia basada en el género, se informa de que más del 20% de las mujeres han sido víctimas de maltrato por los hombres con los que viven.

De acuerdo con el Informe sobre el Desarrollo Mundial 1993 del Banco Mundial, las violaciones y la violencia en el hogar culminan en la pérdida de más años de vida saludable, entre las mujeres de 15 a 44 años de edad, que el cáncer mamario, el cáncer del cuello del útero, el parto obstruido, la guerra o los accidentes de tránsito.

En respuesta a la Plataforma de Acción de Beijing, los Estados Miembros de las Naciones Unidas y la comunidad internacional han tratado de encontrar la manera de combatir más eficazmente la violencia en el hogar:

  • Muchos Municipios han promulgado leyes en que se reconoce que la violencia ejercida por los maridos debe ser tratada de la misma forma que la ejercida por extraños. En el país de Suecia esos actos se definen como graves violaciones de la integridad de la mujer, y se someten a penas más severas que en los casos en que esos mismos actos sean realizados por extraños.
  • Austria, Belarús, Bhután, Hungría, México, Portugal y Seychelles han decidido, por primera vez, considerar delito la violencia sexual ejercida contra las mujeres por sus maridos.
  • En Sri Lanka, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) ha trabajado en estrecha colaboración con las autoridades y las organizaciones no gubernamentales para prevenir la violencia en el hogar mediante la educación del público utilizando los medios de información y celebrando cursos prácticos destinados a sensibilizar a los miembros del poder judicial y los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley.
  • Belarús, Polonia, la Federación de Rusia y Zimbabwe figuran entre los Estados que han tratado de introducir servicios, como los hogares de acogida y las líneas telefónicas especiales, para ofrecer apoyo a las víctimas de la violencia.
  • Estados como Argelia y Brunei Darussalam han creado dependencias, en sus departamentos de policía, encargadas de combatir la violencia en el hogar.
  • Islandia ha creado un proyecto experimental de dos años de duración, titulado "Hombres de responsabilidad", destinado a los hombres violentos. El proyecto es supervisado cotidianamente por la Cruz Roja de Islandia y se someterá a evaluación cuando haya terminado.

La forma más frecuente de violencia familiar es el maltrato a la esposa, aunque hay muchas otras formas de violencia contra la mujer en el ámbito de las relaciones familiares y afectivas. La combinación de violencia física y maltrato psíquico del hombre a su esposa o compañera es el caso más frecuente de violencia doméstica y está muy difundido en la mayoría de las sociedades actuales. Gracias a la mayor sensibilidad social ante ello y a la detallada delimitación de las responsabilidades penales en las que puede incurrir el ofensor, se advierte de forma creciente la presencia de este tipo de violencia contra las mujeres en nuestra sociedad.

La violencia familiar contra las mujeres puede provenir también de otros miembros de la familia como el padre, los hermanos y otros parientes; y puede ser física o psíquica. La violencia física tiene muchas formas y muchos grados, pudiendo ir desde los empujones y bofetadas hasta golpes que producen la muerte. En el ambiente familiar también se produce una violencia sexual, que se presenta en una amplia gradación, pues puede ir desde las burlas y comentarios ofensivos hasta la imposición de actos sexuales que la mujer desea rechazar. La violencia psíquica incorpora todas aquellas formas de tratar a las mujeres que limitan su libertad o niegan sus derechos y su dignidad. Pueden considerarse como tal los insultos, los desprecios, la adjudicación estereotipada de tareas serviles, la limitación a su capacidad de trabajar, así como las limitaciones para contactar con amigos y familiares. A veces se habla también de violencia económica para referirse a aquellas situaciones en las que las mujeres tienen limitada su capacidad de obrar, de trabajar, de recibir un salario o de administrar sus bienes, por el hecho de ser mujeres, situaciones todas ellas que las sitúan en una posición de inferioridad y desigualdad social.

  1. VIOLACIÓN

Es algo más que un hecho delictual es la consecuencia de un proceso conductual deveniente de la ideología de la posesión masculina sobre la vida y sexualidad de las mujeres. Las múltiples expresiones del acoso sexual, tienen permisividad social.

La violación funciona en nuestra cultura como una amenaza potencial a todas las mujeres y como tal refleja la inferioridad de las mujeres, que son socializadas en el temor. La intimidación que ejerce sobre las mujeres, la amenaza permanente de una posible violación las mantiene en un estado de temor que refuerza las relaciones de poder patriarcal.

En los casos de violación es muy frecuente que se produzca la doble victimización, al responsabilizar a las mujeres de la agresión sufrida. Por ejemplo, se las hace responsables por haber acudido a determinados lugares o a determinadas horas, por atreverse a ir por parajes solitarios, por llevar un atuendo o ropa determinada; es decir, se utilizan argumentos que tratan de traspasar la responsabilidad de la agresión del hombre que la comete a la mujer que la sufre. Una de las formas más burdas de reflejar la misoginia se produjo en una sentencia judicial que excusaba la violación de una joven porque la víctima llevaba una minifalda.

Por otra parte, se exige en las mujeres una resistencia heroica a las agresiones que, si no se ha producido, se entiende como aceptación de los abusos. La Iglesia católica ha llegado incluso a canonizar a una joven, María Goretti, por resistir la violación hasta la muerte. Tal mentalidad debía tener un juez italiano, que no aceptó en 1999 la realidad de una violación porque la víctima llevaba pantalones vaqueros, que él consideraba que eran muy difíciles de quitar, lo cual demostraba la complicidad de la víctima.

El impacto psíquico de la violación es muy fuerte en las víctimas y muy frecuentemente también se producen otras consecuencias como la transmisión de enfermedades venéreas y embarazos indeseados. Las consecuencias psíquicas y físicas dependen enormemente de las circunstancias y de la gravedad de la agresión, de quien fuera el agresor y de los apoyos o ausencia de apoyos que recibiera posteriormente la mujer.

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