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Biblia y causalidad (página 2)

Enviado por rodemil espinoza


Partes: 1, 2

El CRISTIANISMO propuso todo de nuevo mediante la Fe al alcance de todos los hombres considerados como iguales ante el Creador, mediante la mansedumbre y la paz, el sacrificio personal por amor a los demás logrados mediante el poder del Espíritu Santo. Pero…, los hombres no son capaces de pensar en abstracto; necesitan ver o palpar algo, aunque sea de piedra. No podemos renunciar a lo material y ahí tenemos las imágenes, el mito, las tradiciones, la mentira, el engaño, la pobreza, el hambre, la violencia, las guerras y la muerte.

El RACIONALISMO, el ideal humano basado en la razón representado por la serpiente hasta nuestros días, mira el pasado y la revelación exigiendo demostración mediante los resultados obtenidos. Si los resultados son negativos, significa que los principios son malos; en consecuencia la Fe en las imágenes indiferentes al sufrimiento y a la injusticia no sirve. Dios es una mentira. "Dios está muerto" dice uno de sus profetas (Nietsche). Al cielo llegaremos mediante las naves interplanetarias capaces de conquistar otros planetas llevando un hombre nuclear, clonado e inmortal; un hombre increíble a la medida de los poderosos.

Dado que todo acontecimiento tiene una razón de ser y es causado por otro acontecimiento que lo produce, sea este un hecho de la naturaleza, algún evento histórico o social, catástrofes, guerras, etc. que haya marcado la vida de los hombres pasando a ser parte de la memoria colectiva de los pueblos y del conocimiento, hechos que traspasaron a la humanidad como un patrimonio para todos los hombres, en principio oralmente y en forma escrita después; la Biblia o Palabra de Dios no está ajena a esta ley universal correspondiéndole a Moisés plasmar en la primera parte de la Tora o Ley Mosaica, la base de la Biblia hasta el presente.

Difícil es que un evento como el de Caín o la Torre de Babel esté considerado en la Biblia porque los hombres desearan escribir poesía. Teniendo comida y sexo sin trabajar en una tierra virgen como en el Edén el hombre no necesitaba nada, estaba sobrado de todo y nada tenía que lo impulsara a hacer o crear algo, de aquí que todo evento bíblico y de la historia humana alguna razón de ser debió existir para su ocurrencia y algún interesado en traspasarla al futuro y si no tenía como hacerlo había que inventar la forma.

La mayoría de los estudiosos está de acuerdo en que la civilización empieza en la zona del Medio Oriente y que se inicia con un lenguaje único que si se acepta el Diluvio como uno de estos eventos importantes en la vida de la humanidad, este lenguaje debió ser el de Noé, episodio que al datarlo de acuerdo a la cronología bíblica como punto de partida de la nueva humanidad, el evento de la Torre de Babel debió ocurrir entre 150 y 200 años después del Diluvio época en que la humanidad todavía podía tener un solo idioma (el de Noé) y quizás una sola raza (Gen 11:1).

El crecimiento poblacional

La Historia del Hombre según la Biblia, o Historia Sagrada, narra muchos acontecimientos que tienen como causa el aumento de la población humana en la tierra, aumento que traspasado ciertos límites implica sufrimiento, hambre, migración, nacimiento de ciudades, nacimiento de naciones, escasez, enfermedades, miseria, muerte, inventos, violencia, guerras, instituciones, ejércitos, burocracia, etc. etc. síntomas que fue necesario solucionar en bien de la continuidad de la sociedad. Un hospital tiene su génesis en la necesidad de curar enfermedades.

La característica del hombre ha sido, desde su aparición en la tierra, su reproducción y el trabajo como forma de procurar el sustento para sí y su descendencia en un planeta de recursos limitados que debe compartir con los demás seres animales. La reproducción humana ha sido siempre el tema de actualidad del hombre en torno a la cual gira la Historia, el arte, la literatura, la religión y las ciencias, estas últimas en cierto modo facilitando la vida para minimizar el trabajo.

Sin embargo estos dos factores son considerados en la Biblia como un mandato: "dejará el hombre a padre y madre para unirse a su mujer y comerán el pan con el sudor de su frente". Ambos preceptos aún no son sustituidos por las ciencias a pesar de todos los adelantos de la técnica como la clonación o los alimentos industrializados y artificiales. A medida que aumenta la población todavía resulta más económico, más simple, más apetecido y mas rico para las personas hacerlo como lo hacían nuestros antepasados, a lo más se usan los condones o la pastilla del día después en contra de tradiciones poco racionalistas de quienes ostentan el poder del mundo, ya que se trastoca la única forma de tener mano de obra barata para el sistema mientras no aparezcan los robots que no comerán ni se multiplicarán.

El problema surge cuando la naturaleza se defiende y en este mundo tecnificado y racionalista "se les está dando vuelta el paraguas" a una gran mayoría sin importar las clases sociales o las instituciones que representan. Está predicho que volveremos a la moral de Sodoma y Gomorra "en el final de los tiempos".

No existe ninguna creación de la naturaleza o humana que siendo nueva funcione mal o no lo haga. No existe un automóvil recién salido de fábrica que no funcione. Aplicando esta lógica como principio a nuestro planeta es imposible que hace unos miles de años atrás haya funcionado peor de lo que es hoy; que si nos retrotraemos a solo quinientos años atrás nos encontramos con un nuevo continente que alimentó a Europa por cientos de años con la sola fuerza de la tierra y del brazo esclavo local y de otros traídos del África para hacer realidad un deseo humano de no trabajar y disfrutar la sensualidad en contra de estos preceptos divinos.

A propósito del tema y la acción de la naturaleza (Dios puso en su corazón, dice la Biblia) los conquistadores europeos por fuerza mayor no trajeron mujeres al nuevo continente como una forma de dedicar toda su energía y la adrenalina a la navegación, a la aventura y a la obtención de riquezas aparte de la humillación y esclavitud de los nativos que también eran semejantes, "dolor que llega a los oídos del señor". El resultado fue que después de muchos años nació un nuevo pueblo que ayudó a la pérdida del imperio conquistado.

Aquí vemos como la naturaleza viene en ayuda de la vida y la humanidad ya que la práctica del sexo se transforma en mayor descendencia, muchos más cerebros pensantes, mas teóricos, filósofos y religiosos que sobrepasan a las minorías gobernantes, sanguinarias, ignorantes y déspotas que no quieren evolucionar a la par de los tiempos, naturaleza que junto al racionalismo dieron cuenta de aquel grupo reducido que no quiso compartir las riquezas del planeta y de toda la humanidad, misma causa que hizo surgir los movimientos proletarios del siglo pasado que dio el golpe definitivo al colonialismo y a la independencia de África y Asia que trae nuevas potencias emergentes que amenazan el mapa geopolítico actual.

La Historia del Hombre es la historia de los eventos que le han ocurrido, hechos ajenos a voluntad humana, por tanto inconscientes de su ser, donde la necesidad de supervivencia en un planeta cíclicamente hostil lo obliga a prepararse para defenderse como una forma natural de preservar la especie. Los acontecimientos, por tanto la Historia, ocurren por necesidad.

La necesidad, según el diccionario, es un "impulso irresistible que hace que las causas obren infaliblemente en cierto sentido". "Todo aquello de que no puede uno prescindir".

En biología, si no se puede satisfacer una necesidad vital, quién la precisa muere irremediablemente. Si algún pez necesitó una aleta que no tenía para nadar y buscar su alimento, significa que murió. Si un pez no le gusta el alimento del mar y quiere salir a buscar las raíces en los campos para alimentarse y sale de su medio, muere. Si el hombre no tiene qué comer en el continente y se arroja a las aguas como lo hacen los peces, morirá; o si se quiere arrojar de un árbol a otro volando, caerá y si no muere va a quedar muy mal parado, etc.

La principal variable que impele al hombre a luchar contra la naturaleza y acomodarse a sus exigencias es el aumento de la población provocado por la sensualidad. A una tribu primigenia le era suficiente emigrar del lado de sus ancestros para alimentar y proteger a los suyos, favorecido por un planeta que tenía tierras vírgenes, espacio y recursos. Es la historia nómada de la humanidad hasta hoy posible dentro de las fronteras de algún país que la practica.

Esta historia fue cambiando en la medida que el poder de alguna tribu fue imponiéndose sobre otras más débiles hasta copar o llenar la tierra que es "otra de las órdenes del Creador" (Génesis 1: 28), mandato que el ser humano lleva en sus genes, imposible de renunciar y que ha cumplido y llenado nuestro planeta en mas de una oportunidad dejando las huellas, la mayoría trágicas, que marcan el sino de la humanidad.

Historia es nombre de mujer

EVA, la mujer bíblica de la creación significa madre de todos los vivientes porque a través de ella han surgido todos los pueblos. Eva fue la primera promotora de un cambio en la historia de la humanidad, Adán, el hombre, solo siguió sus pasos.

El hombre macho, recio y guerrero, conquistador de pueblos y naciones se ha desnudado y rendido a los pies de una mujer, conducta que induce o hace la historia y como cualquier macho animal irracional ha cumplido algunas leyes naturales: somete al enemigo para vivir de él, sea a través de impuestos o esclavizándolo.

Como vencedor los machos sometidos eran su fuerza de trabajo y las mujeres el objeto de su botín sensual y como no existían los preservativos del racionalismo moderno, al cabo de unas pocas generaciones surgía otro pueblo, otra raza, otro lenguaje, otra cultura en un ciclo de constante ocurrencia a lo largo y ancho de todo nuestro planeta a partir de Noé y su familia, primeros seres humanos remanente del Diluvio, según los creyentes descendientes de Adán y no de un simio. Estos últimos pertenecen al mundo materialista de Caín de los cuales, al final de los tiempos no habrá de ellos memoria, excepto como la "vergüenza eterna de la Creación".

Este instinto arrogante y presuntuoso del hombre innegable por las ciencias humanas es exaltado por la historia como motor de una sociedad buscada, sin embargo analizando la génesis de los héroes actores de esta historia, toda o la mayoría son frutos de la casualidad y del azar.

Carlos Martel, clave en la historia de occidente por derrotar a los árabes en su avance contra Europa es un claro ejemplo de casualidad. Su único cartel fue ser hijo bastardo de un mayordomo real de Francia, creador de la dinastía real de los carolingios. ¿Qué habría sido de nosotros si el padre de Carlos Martel hubiese sido fiel a su mujer? ¿O si la noche que lo concibió no hubiese tenido ganas? ¿O si hubiera concebido una mujer? ¿O si hubiera estado entre el porcentaje de mortalidad infantil de la época, de seguro mayor que el de nuestros días? Si Martel no hubiese existido, quizás los árabes habrían conquistado Europa, una ilusión del islamismo hasta hoy, de tal forma que América habría sido conquistada por los árabes y todos nosotros y nuestras mujeres usaríamos falda y chador y nos inclinaríamos a diario hacia La Meca y en vez de viajar a Yumbel cada 20 de Enero viajaríamos a la Meca todos los años. Sin duda que tendríamos un mundo diferente.

La naturaleza se ha encargado de controlar y humillar al hombre ante sus pretensiones obligando al individuo a perfeccionarse y a crear para que se cumpla el mandato de llenar la tierra con el menor de los sufrimientos posibles.

Primero poniendo a prueba sus obras y destruyendo lo que no resiste los embates naturales como terremotos, huracanes, lluvias, maremotos, etc; diciéndonos que el hombre sabio debe construir sobre la roca y no sobre la arena (Mateo 7: 24-29) y

Segundo: Aquello que la naturaleza preservó el mismo hombre lo destruyó, tales son los antiguos imperios que se alzaron arrogantemente como grandes poderes humanos y ahí tenemos los egipcios de cuyo recuerdo solo tenemos las pirámides testimoniando la interpretación errada que hicieron de la revelación. De los babilonios tenemos la doctrina errada y contraria a la verdad de lo cual queda hasta nuestros días el Zodíaco y las supersticiones explotadas por el racionalismo y el comercio que hacen su agosto en las masas ignorantes del planeta. De los persas nos queda la fastuosidad de los reyes y del Vaticano como símbolo del poder sobre los hombres. Los griegos nos legaron la filosofía y el arte que distorsionan la Fe y la verdad haciendo de ellas la antítesis de la creencia en abstracto del Dios Creador: pusieron en duda cual serpiente los preceptos divinos y los reemplazaron por palabrería contradictoria entre los mismos filósofos que las enuncian, a la vez que perfeccionaron la fabricación de imágenes de piedra o cualquier otro material ante las cuales todo necio se inclina, incluido el racionalismo materialista detentor del poder.

De todos estos imperios pasados han dado cuenta los enemigos surgidos en el transcurso de la Historia que perfeccionaron las técnicas de guerra y de dominio de otros pueblos usando los puntos débiles del perdedor como son la gran cantidad de nacionalidades del imperio, la extensión territorial, la corrupción de las minorías gobernantes, las crisis económicas y el descontento popular, etc mismo fin que le espera a los actuales poderes cuya caída y reparto de sus despojos serán terribles para toda la humanidad.

De la observación del poder y la política global de los pueblos, todos tienen un mismo propósito inconsciente tendiente a llenar en breve de habitantes toda la faz de la tierra, sin considerar la respuesta del planeta manifestadas en el calentamiento global, la contaminación ambiental, la desertificación de las tierras cultivables, la violencia internacional y al interior de las naciones, etc. políticas y reivindicaciones que olvidan que nuestro planeta tiene recursos limitados y que la tecnología para transformar los recursos naturales está en manos de unos pocos que se hacen del poder cada día mas sofisticado en desmedro de los mas atrasados que tienen que comprarla a cambio de las materias primas de sus territorios. Llegará el día que tendremos las mas grandes usinas para transformar el cobre pero no tendremos minerales, mientras estos están intactos en los países de alta tecnología. De los miles de millones de habitantes del planeta, unos cuantos deben haber o saldrán que están estudiando los puntos débiles del poder universal. Por lo menos uno mostró sus garras atacando las torres símbolo de la Historia en el llamado 11 S.

Analizando la curva de la Historia aún es posible que la tierra se llene de habitantes hasta encontrar un punto de equilibrio para iniciar otro ciclo, sin embargo los tiempos históricos no se miden en años sino en generaciones, de tal forma que, quizás, pasarán varias generaciones de paz armada en una convivencia pacífica mientras los equilibrios subsistan. Claves son en la Historia los países del medio Oriente: Irán, Irak y las culturas permeadas por el islamismo como India, Pakistán y China bajo el símbolo de la luna, enemigos del Cristianismo occidental donde reina el machismo tradicional mas grande sometiendo a millones de mujeres a una esclavitud disfrazada.

El día que se independicen al estilo occidental el mundo temblará. La mujer es clave en el proceso de educación de los hombres y estos pueblos tienen mucho que decir en una cultura libre.

La población

Graficaremos con un razonamiento simple considerando la fertilidad de una tierra virgen y prehistórica, mucho menos contaminada que en nuestros días, con más recursos naturales de todo tipo que las ciencias de hoy carentes de estadísticas antiguas acomodan a sus estudios.

Conocidas son las familias numerosas de siglos pasados, que en la naturaleza se consideran como una forma de contrarrestar la mortalidad de todo tipo que impide un crecimiento explosivo. Quizás esto tenga algún sustento de realidad en la historia moderna en un planeta ya contaminado por el exceso de población y la consiguiente depredación, pero por lógica, en la antigüedad no necesariamente debió ser así.

Si se piensa en un planeta post diluvio, donde todavía pensamos en un edén: tierra fértil, alimentos naturales, tierra sana sin enfermedades, mujeres bellas, hombres fuertes, trabajo liviano, ambiente ideal para practicar el amor añorado y aplicado por todos los humanos. ¿Consecuencias…? Un hijo todos los años. Una edad fértil femenina de los 18 a 45 años sin pastillas del día después significa una prole por familia de por lo menos 25 hijos que de forma conservadora para nuestro ejemplo lo calcularemos en base a una media de diez para compensar la mortalidad por distintas causas.

Estos mismos datos del siglo pasado en Chile, donde los matrimonios tenían de ocho a 15 hijos, nos lo muestran las grandes viviendas antiguas que existen en las ciudades y que los terremotos se han encargado de ir exterminando para construir nuevas.

Si esta reflexión la aplicamos a las tres familias de los hijos de Noé teniendo 10 hijos cada una en 40 años después de Diluvio, se tiene un total de 30 hijos en la primera generación después de Noe, con un total de 38 personas en el planeta después de 30-40 años. Estas 30 personas jóvenes forman 15 matrimonios después de otros cuarenta años cuando se emparejaron los más jóvenes que tienen a su vez diez hijos c/u y que después de cierto tiempo suman 150 bisnietos de Noé; los que igualmente forman 75 matrimonios y 750 nuevas criaturas, etc. De aquí resulta el siguiente cuadro.

CUADRO DE POBLACION POST DILUVIO

edu.red

El Chile republicano creció en 165 años desde 1.010.336 habitantes el año 1835 sin el territorio conquistado en la guerra de 1879 y sin el territorio indígena del sur hasta 15.116.435 de criaturas el año 2002 según estadísticas del censo nacional.

El planeta creció después de Noé de 8 habitantes salvados en el arca hasta 93.750 nuevos habitantes unos doscientos años después, tiempo en que pudo ocurrir uno de los eventos mas controvertidos de la narrativa bíblica: la Torre de Babel.

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Tenemos entonces que de acuerdo a la cronologia bíblica, los eventos contemporáneos y trágicos de tiempos de Abraham narrados por los profetas obedecen a una causa que los provocan, causales propias de un exceso de población.

Del análisis poblacional descrito se ve cierta similitud entre la estimación supuesta para los descendientes de Noé en un planeta edénico, los doscientos años de independencia de Chile y la fórmula matemática aplicada por los demógrafos del mundo.

Cabría preguntarse si la tierra tuvo alguna vez tantos habitantes.

Los eventos y problemas descritos en la Biblia nos dicen que tuvo muchos habitantes, pero no significa que haya tenido toda esta cantidad al mismo tiempo, señal que algo ocurrió para que esto no fuera así. Debemos destacar que no había Ministerio de Salud para que controlara la natalidad, ni Ministerio de Educación para que publicitara los condones en la juventud. Es digno de destacar que Abraham no vino para solucionar problemas, sino a proponer una solución mostrando un camino que no era el liberalismo sensual de Sodoma y Gomorra ni la conquista territorial violenta, a pesar que se vio envuelto en varias guerras.

Ello es claramente explicable ya que ningún profeta ha venido a proponernos soluciones políticas, sociales o económicas, sino a mostrarnos nuestro error y el que quiera acepte y corrija su vida porque el camino que lleva conduce a la muerte. Políticamente no hay solución.

Torre de Babel

Este episodio como muchos otros narrados en la Biblia si ocurrieron fue porque algo hubo que los indujo. Se trata de ver si alguna relación tiene que ver con la Historia y la realidad.

Está claro que Babilonia existe respaldada por una mitología supersticiosa que perdura hasta nuestros días y que algún origen tuvo. Basta ver toda la bibliografía que al respecto existe en las redes sociales y la existencia de sociedades secretas que se ufanan de venir de esos tiempos y que si la Biblia lo menciona en el comienzo de los escritos sagrados y al final del Apocalipsis es por alguna razón.

Primero: sobre el idioma único.

Si pensamos que hace menos de mil años nuestros antepasados todavía hablaban "un solo idioma", el latín, y que ahora tenemos, los idiomas Español, Portugués, Francés, Italiano, Rumano y otros que salieron del gran imperio latíno, dado " que los romanos quisieron llegar al cielo por otro camino que no es el de Dios", eligieron el camino de las torres con imágenes y llenas de "arte" para impresionar a los paganos (Gente de campo) y el camino de las llamas y la opresión de la inquisición. ¿Lo creería Ud(

Tras esta conducta de los romanos y sus seguidores había un error y una "presión" que actuaba debido al creciente aumento de población de ellos y de sus vecinos que se hacían cada día más poderosos para arrebatar lo que el imperio había usurpado. Los romanos no sabían que su imperio iba a producir tantos idiomas y tantos países, excepto la Biblia, profetizada por Daniel.

Igualmente, el episodio de la Torre de Babel, está marcando una época de gran presión social en un único conglomerado unido por el idioma, por los fuertes lazos familiares de los tres o cuatro clanes que surgieron y por el recuerdo reciente de la catástrofe diluviana, presión que los llevaba a aferrarse en torno a un sólo territorio, en que nadie quería ser el primero en emigrar. A los sociólogos que conocen tan bien la psicología del liderazgo para preparar a los que dominan sobre las masas, se les está mostrando aquí un líder surgido de la fama de alguien sin linaje que la consiguió por su arrojo como cazador, atrevido y decidido a torcer el camino de la Verdad que se le mostraba.

Aún vivía Noé (ultimo de los longevos que debió consumir la enzima de la telomerasa, hoy día en proceso de investigación para prorrogar la vida de los dictadores) quién había profetizado el destino de sus hijos y ellos quizás, estuvieran empeñados en cambiar el designio de este destino. Aquí está el antecedente principal de los cambios que vendrían a futuro al igual que Teodosio, el emperador romano que dividió el imperio entre sus dos hijos, Oriente y Occidente, antecedente que servirá mas tarde para que surjan muchas naciones, en Occidente bajo la ideología de Roma y en Oriente con la ideología Ortodoxa. La fama de Teodosio no era la de cazador, sino la de ser emperador de Roma.

La Biblia nos dice que Nimrod, biznieto de Noé, fue el primer poderoso en la tierra (o prepotente, según la Vulgata) que hubo después del Diluvio. Sus antepasados no dejaron huellas antes de la catástrofe diluviana y él no quería que esto se repitiera y "quería hacerse un nombre por si era esparcido por la faz de la tierra" (Gen 11:4). Nimrod formó el Reino de Babel y construyó muchas ciudades movido por su fama de cazador (Gen10: 9-10). Es probable que su fama o su carisma haya unido al pueblo para "construir una torre que llegara al cielo" en contra de Noé, contra su profecía y contra las doctrinas religiosas que impuso a la comunidad postdiluviana. Esta actitud, comparada con la historia y la religión real de Babilonia, muestra que es evidente que Nimrod estaba en contra de las leyes ordenadas por el Creador al justo Noé.

Por tanto, ésta no es la interpretación que en la actualidad se le da a este episodio. Debemos considerar para su interpretación lo que significa "llegar al cielo" para el pueblo de Dios, tanto Judío como Cristiano.

Para el pueblo de Israel eran prohibidos los "lugares altos" o altares que los paganos hacían para los dioses babilónicos que eran una distorsión del Dios Único, Creador de la humanidad. Los zígurats de Babilonia, famosos hasta hoy, eran estos lugares altos o "torres de Babilonia", dedicados a deidades paganas de los caldeos y cananeos, con que "pretendían llegar al cielo" sin adorar al verdadero Dios.

El creyente adora a Dios "en Espíritu y en Verdad" (Juan 4:24) para poder "alcanzar o llegar al cielo" después de la vida terrenal, en Espíritu y no en cuerpo subiendo por la escala de una torre de gran altura. Las interpretaciones contrarias a este sentido son producto de los traductores oficiales, precisamente provenientes de la Roma de Teodosio, que no entran ni dejan entrar a los que desean hacerlo. "Mas ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! porque cerráis el reino de los cielos delante de los hombres; pues ni entráis vosotros, ni dejáis entrar a los que están entrando" (Juan 23:13).

En la antigüedad, en tiempos de Noé y Abraham, se construían los altares "para adorar a Dios y por lo tanto para llegar al cielo" (Gen 8:20 y 12:7). Estos debían cumplir ciertas características. Debían ser de piedras sin labrar con instrumentos de hierro (Gen 27:5), o simplemente de tierra, sin gradas, por donde subiera el sacerdote (Ex. 20:24:26). Cualquier otro altar quedaba fuera del rito para acercarse a Dios y "llegar al cielo".

La torre que hicieron en Babel no sólo no era de piedra, sino que era una torre de ladrillo cocido pegado con asfalto, con muchas gradas, para sacrificar a dioses falsos, imágenes de animales y aves con lo que pretendían llegar al cielo.

La Torre de Babel es un episodio clave en la historia de la humanidad, en especial porque se entiende mal y se distorsiona la Palabra de Dios, con interpretaciones erradas arraigadas en la mente del creyente como muchas mentiras-verdades del oficialismo poseedor de la fama.

Haciendo un paralelo con el Evangelio, Cristo dijo a sus discípulos: "Si alguno quiere venir en pos de mi, niéguese así mismo, y tome su cruz y sígame" (Mat 16:24). Es decir, si queremos "llegar al cielo" debemos seguir a Cristo, tomar nuestra propia cruz, como símbolo de las dificultades que nos aguardan, como las que tuvo que soportar el Señor y seguirle.

Pues bien, no falta el necio (término bíblico) que entienda mal, se fabrique una cruz de madera, semejante a la que sufrió Jesús y cruce con ella a cuesta la Cordillera de los Andes, de Argentina a Chile, seguramente para "ganar el cielo". Y este no es un invento. Fue noticia piadosa de todos los diarios que nuestro subdesarrollo espiritual y moral exalta; alabado, motivado y publicitado por los encargados de enseñar la Verdad al pueblo. Otro se crucifica todos los años en Filipinas y muchos se martirizan hasta causarse heridas sangrantes.

Hechos anecdóticos como estos a lo más son noticia sobre la estupidez humana; pero en el caso de la Torre de Babel, era todo el pueblo liderado por un famoso, construyendo una torre, como una sola persona, para "adorar a Dios y llegar al cielo".

Esta discrepancia, este desacuerdo general de Babel con las órdenes de Dios para honrar Su Gloria y obedecerle, es un paralelo con el rechazo de Adán (Humanidad) al Creador para seguir el camino propio; desacuerdo que dividió el pueblo separándose en diferentes tribus, unos para un lado y otros para diferentes lugares, a partir de lo cual, en poco tiempo se formaron las distintas naciones con distintos idiomas, acontecimiento que se repitió después de siglos con los romanos y los idiomas latinos.

Con respecto a las razas, en la familia de Noé venía parte de los genes y la composición racial prediluviana, incluida su condición pecaminosa, con cuatro matrimonios mezcla de "los hijos de Dios con las hijas de los hombres" cualquiera sea lo que signifique esta afirmación. En los nietos de Noé y por lo tanto en tiempos de la Torre de Babel, conforme a las leyes de Mendel, ya debió aparecer mas de algún rasgo de diferenciación racial entre una parte importante de los individuos.

– "Y después se dispersaron las familias de los cananeos" (Gen 10:18).

– Estos hechos corresponden o son contemporáneos de Peleg, en cuyos días fue repartida la tierra (Gen 10:25). TODO CAUSADO POR EL AUMENTO DE LA POBLACIÓN.

Los patriarcas de esta época eran los hijos de Noé, que aún vivían y tenían la "experiencia social" antediluviana; los que fueron sobrepasados por la fama de Nimrod, o quizás, empezaron a actuar por su cuenta queriendo evitar lo que allá y entonces les ocurrió.

La tierra se repartió, quizás, sin mucha necesidad, lejos o apartados de los planes de Dios, puesto que la tierra que debía ser para el pueblo elegido, le correspondió a los herederos de Cam cuyos hijos maldijo Noé por el pecado que cometió (Gen 9: 22).

El reparto de la tierra viene por la línea de Sem, el hijo mayor de Noé (10:25). Un poco especulando podríamos decir que Nimrod y los descendiente del hijo menor de Noé, maldecido por éste (Gen 9:25-27 y 8:11), se opusieron al reparto de la tierra ordenado por los hijos de Noé.

La oposición debió ser grave, porque los hijos de Canaán ocupan las tierras que debían ser para el pueblo elegido de Dios y que Moisés y Josué arrebatarían siglos mas tarde. En tiempos de Abraham ya existía enemistad entre los pueblos por causa de la subsistencia en la tierra. Quizás nadie quería abandonar o alejarse de la capital del mundo de esa época, Babel, en el futuro gran imperio babilónico.

El líder o rey que gobernaba al pueblo era contrario a los planes de Dios y curiosamente era nieto de Cam. Los planes para llegar a Dios son de tipo espiritual y no material como la construcción de torres o de naves, o de iglesias y/o de grandes ciudades, o por la fama alcanzada o por la prepotencia de un famoso como Nimrod.

La gran crisis que solucionar, se presenta en tiempos de Abraham, a quién Dios separa especialmente de la tierra de sus padres, de Ur de los Caldeos, de Babilonia y Nínive, las grandes ciudades que construyó Babel, para iniciar el verdadero Plan de Dios. Abraham desciende de Sem quien probablemente no estuvo de acuerdo con Nimrod ni con Peleg.

Abraham nació 352 años después del Diluvio, tiempos de muchos problemas sociales provocados por el exceso de población época en que pudieron existir del orden de sesenta millones personas en el planeta, con un crecimiento anual del 5,9 % (Ver cuadro de población).

En esta época la tierra era mucho mejor que la de hoy y había sido purificada por la acción del Diluvio, aún existía libertad absoluta, sin reglas morales de ningún tipo, un pueblo todavía sano. Tipo 450 años después de Noé había mas de siete mil millones de habitantes, mas que nuestros días. ¿Porque no podría ser( Población suficiente para repoblar China, India, Asia, África, Todo el Medio Oriente y América. Por ello las guerras en tiempos de Abraham, quizás como control natural de la población.

Los pueblos originarios de América

La Torre de Babel, el reparto de la tierra, Sodoma y Gomorra, el nacimiento de los idiomas, y las primeras guerras en que se vio involucrado Abraham, son eventos de una misma causa: El gran aumento de población.

La reconstitución de los hechos aparece en versículos separados de la narrativa bíblica, escritos por alguna razón.

Con tanta gente, nuevamente nacieron muchos problemas producto de las necesidades, del pecado y la injusticia por lo que no deben haber faltado los aventureros, perseguidos, esclavos o emprendedores que se lanzaron a los mares en cualquier cosa que flotara como balsas de troncos de árboles que no necesitan mayor técnica, hasta llegar a América. Muchos naufragarían y morirían, pero alguien de tantos pudo haber llegado; sólo que no había técnica para volver y de ahí que nadie supiera que habían otras tierras o continentes habitados en tiempo de Colón.

La gran población, el nuevo clima después del diluvio y la escasa técnica debió provocar todas las guerras después de Babilonia, en que las masacres de la barbarie humana no dejan arribar a la población, la cual, en pocos años de paz de un pueblo, pronto se hacia poderoso, capaz de desquitarse de sus vencedores del pasado.

En el transcurso de la Historia la paz ha traído aumento de la población, a causa de la presión social, del hambre, las enfermedades, la conquista de territorios y de las guerras fratricidas que controlaban la población en aumento, hasta una nueva paz impuesta por el vencedor que se imponía como Dios.

Hoy el problema ecológico más grande de nuestro tiempo es el acelerado crecimiento de la población humana. Hacia el año 1300 de nuestra era alcanzaba los 500 millones, y a principios del siglo XIX se había duplicado, llegando a ser 1000 millones. Desde entonces ha habido una auténtica explosión de la población humana, llegándose a más de 5000 millones en 1987. Ya ha finales del siglo XVIII, el economista británico Thomas Malthus, en su Ensayo sobre el principio de la población (1798-1803), advertía de los peligros de un crecimiento explosivo de la población.

El rápido crecimiento de la población, especialmente en los últimos 200 años, se ha debido a la disminución de la taza de mortalidad y no al crecimiento de la taza de nacimientos. El hecho de que las fuentes de alimentos, el agua potable y la salud pública estén al alcance de la mayor parte de la población ha dado como resultado una mayor longevidad.

En las últimas décadas, paralelamente al crecimiento masivo de la población, se ha asistido a un desplazamiento significativo de los habitantes de los medios rurales a los grandes centros urbanos. En 1950 había alrededor de 750 millones de personas viviendo en áreas urbanas, lo que representaba el 25% de la población total. En los años 2000 las áreas urbanas acumularán casi la mitad de la población mundial, es decir unos 28000 millones de habitantes.

La mayor parte de esta expansión urbana también ha tenido lugar en los países recientemente urbanizados. El rápido crecimiento de ciudades como Sao Paulo o Bangkok han sobrepasado el número de empleos y viviendas disponibles. Consecuentemente muchas personas viven en barrios marginado, como favelas del Brasil o las villas de la miseria de Argentina, en alojamientos inadecuados a menudo carentes de servicio de agua corriente y alcantarillado. En esos lugares existe un alto índice de desempleo, una pobreza generalizada y una falta de servicios básicos, como escuelas y hospitales (Letra cursiva tomada de google)

Objetivo de la verdad

Incompleto estaría este trabajo si no resumiéramos el objetivo de los acontecimientos o su razón de ser para la consecución de los planes divinos, hacia los cuales la Historia está dirigida: la redención del hombre por Dios y para Dios. En esto se manifiesta el amor de Dios hacia sus hijos y a Su Creación. Para ello se escribió la Biblia y para ello vino Cristo.

Antes es necesario dejar en claro que el hombre fue creado a imagen de Dios en una tierra inmaculada y puesto en el Jardín del Edén para que viviera eternamente sin necesidad de pasar por la muerte. Cuando hablamos de redención es porque el ser humano al desobedecer a Dios quedó destituido de su gloria y debe volver al polvo de la tierra de donde fue tomado en un proceso divino conocido solo por el Creador revelado al hombre mediante Su Palabra.

Si no hubiese sido por la desobediencia todo proceso de la "evolución del universo y la tierra" no habría afectado a las criaturas vivientes. No habría necesitado leer y escribir, no habría necesitado vestirse, ni viviendas, ni caminos ni industrias y menos guerras, enfermedades, ni dolor porque para eso estaba el Árbol de la Vida. Si necesitábamos conocer algo el Creador nos había plantado un Árbol del Conocimiento del Bien y del Mal para saber como defendernos del frío, de los terremotos o como llegar a la Luna, a Marte o cualquier lugar. ¿Se explican ahora los OVNIS y los ET?

Decidor es el pasaje del Génesis 3:16: "A la mujer dijo: multiplicaré en gran manera los dolores en tus preñeces; con dolor darás a luz los hijos…" dando a entender que antes de la expulsión del Edén la primera pareja ya había tenido hijos siendo estos nacidos sin dolor, deseos que tiene a los científicos investigando para que las señoritas ABC1 no sufran este trance y se decidan por procrear ya que cada vez están siendo menos y las minorías siendo sobrepasadas por "los rotos". Ayuda también a esclarecer estos pasajes controvertidos el castigo de Caín donde se deja bien en claro que antes del este hijo de Adán y Eva existían otros hombres (Gen 4: 8-17). Caín sería el primer hijo después de la desobediencia.

Sin embargo el colmo de la maldad humana ocurrió cuando los hijos de Dios sin el gen de la maldad "vieron que las hijas de los hombres eran hermosas, tomaron para sí mujeres, escogiendo entre todas". (Gén. 1: 1 al 5).

La expulsión del Edén implicaba "caminar por los alltibajos de la vida en la tierra", hacer vestidos, construir edificios y ciudades, construir caminos, hacer barcos, tener médicos, enterrar muertos, sufrir injusticias, sufrir dolor, disputarse territorios para la subsistencia, etc

A partir de la expulsión del Edén el único mandamiento que el hombre respetó, y al parecer con gusto, fue el de "henchid la tierra". (Génesis 1; 28)

Mientras la tierra alimentaba generosamente al hombre, este se olvidó de su Creador y por lo menos después de 235 años "empezó a invocar el nombre de Dios" porque al parecer había problemas sociales graves. (Gen 1:28 /4:26)

Sin embargo a Dios le interesa una criatura preocupada de ganar el cielo, y para ello es la Revelación. Dios no necesita que lo adoren para existir. El hombre necesita adorar a Dios, como el hijo necesita de su madre para su crecimiento integral.

El diluvio ocurre porque no se estaba cumpliendo el objetivo de Dios. Reinaba el pecado y en miles de millones de habitantes sólo había un justo sobre la tierra donde el mal estaba institucionalizado. Es decir, era un proyecto muy poco rentable para Dios. No cabía promover una revolución, sino un exterminio para empezar de nuevo.

Son factores externos los que hacen reaccionar al hombre para buscar a su Creador, momento en el cual Se manifiesta ayudado por un universo cambiante según la teoría de la expansión. Así fue como el cambio de clima que trajo consigo el diluvio fue el primer agente para recordar al hombre la soberanía de Dios (Gen 9:7-17) y para que esta criatura no se exalte sobre los demás y sobre El

El hombre por naturaleza es religioso y practicar la religiosidad hace necesaria una Institución, la que es impersonal, burocrática y absorbente del tiempo, de los recursos y de la preocupación del líder o de las personas, la que obstaculiza en algún momento la difusión y la búsqueda de Dios. Es en esta institución que se pierde el "primer amor".

El aumento de la población, trajo consigo la sensualidad y la corrupción social por lo que Dios mandó un recordatorio ejemplarizador en Sodoma y Gomorra cuyos habitantes no vivían en concordancia con el objetivo del Creador. (Gen 19:15-25).

Dios no puede estar siempre destruyendo pueblos y ciudades para enmendar el rumbo del hombre hacia su objetivo y ahí es donde aparece un hombre como Abraham para liderar el proceso espiritual. Abraham es el comienzo de Israel con cuyo ejemplo se escribió la Biblia para mostrar al mundo el amor y la fidelidad de Dios para los suyos hasta hoy, (II Sam 7:23/ Is 8:18).

El clima y los problemas sociales obligan a los descendientes de Abraham a emigrar a Egipto donde con los años la presión provocada por el exceso de población y el correspondiente sufrimiento, Dios levanta a Moisés en tierras extranjeras para que saque a los Israelitas de manos del Faraón egipcio.

Lo anterior está claramente expresado en Josué 24:31: "Y sirvió Israel a Jehová todo el tiempo de Josué, y todo el tiempo de los ancianos que sobrevivieron a Josué y que sabían todas las obras que Jehová había hecho por Israel".

En la vida, en la tierra y en el universo todo tiene un objetivo y el objetivo de Egipto fue incubar y proteger al naciente pueblo de Israel en su territorio hasta un momento en que se hacía imposible la supervivencia de dos naciones en un solo territorio.

Así como el objetivo del imperio persa fue castigar el gran pecado de Babilonia y de todos los países conquistados, incluida la apostasía de Israel. Nada más aportó Babilonia a la humanidad, excepto la superstición y la muerte.

El objetivo de Grecia, fue utilizar su imperio, su idioma y el desarrollo de su cultura para difundir la revelación de Dios a un mundo más extenso.

Todo, sin embargo, nos da a entender que el poder material, político, económico, militar o religioso no sirve para ganar el cielo. Más aún, el poder y la institución corrompen y aleja a las personas de Dios. Sin embargo este poder institucionalizado del mundo es usado por Dios para conseguir sus objetivos aunque crea desigualdad e injusticia en los pueblos que dejan a Dios y se olvidan o no consideran Sus leyes y Su Palabra. Esto le ocurrió a Grecia, a Roma, etc. y últimamente le ocurrió a la URSS, a China y estados Unidos.

Brevemente diremos que en los "últimos tiempos" Israel debía ser un actor activo en la historia de la humanidad, en especial porque debía actuar como nación desde la tierra prometida de donde había sido expulsado por pecar contra Dios al rechazar y crucificar a Cristo, pecado que pagó muy caro desde el año 70 D de C (Su sangre sea sobre nosotros, y sobre nuestros hijos: Mateo 27:25).

A principios del siglo XX nadie pensó que alguna vez esta magnífica profecía se cumpliría, pero las bestias apocalípticas (poderes de la tierra) se enfrentaron en la primera guerra mundial siendo derrotado el usurpador del territorio de Israel (Imperio Turco que dominaba desde 1400 D de C) a manos de Inglaterra y sus aliados en una primera etapa.

Dado que Inglaterra no estaba cumpliendo con la profecía de entregar a Israel su tierra, vino la Segunda Guerra Mundial con el sacrificio de seis millones de Judíos (Un millón por cada día de Creación) a manos de Alemania el Verdugo (o Judas) que le correspondió hacer cumplir la ley divina a "precio de sangre" con la ayuda de la Rusia atea la que surgió con ese propósito durante "setenta años" desde 1917 hasta 1987 (Aproximados).

La tragedia por la masacre del pueblo Judío convenció a las Naciones Unidas en 1948 entregar parte del territorio sagrado al pueblo Judío conquistado por Josué miles de años atrás quedando abierto el principio de los tiempos del fin con que finalizará la historia del hombre en la tierra basada en el camino propio elegido en el Edén.

Así Dios usó a favor de los Suyos y de Sus planes, con métodos no muy suaves como fueron estas guerras, a las grandes potencias. Usó a Inglaterra, Estados Unidos, Rusia, Turquía, Alemania, Italia y una parte del Oriente (Japón) como actores en la entrega del territorio prometido al pueblo de Dios. Falta el grueso del Poder del Oriente como broche final del cumplimiento de los planes divinos, para lo cual está resurgiendo China e India (Juntos el 40 % de la población del mundo que ignora a Cristo todavía y el Evangelio debe ser conocido por toda criatura en la tierra)

Nuestro planeta se habría llenado más de diez veces después de Noé a no ser por la muerte permanente que no dejó arribar la población pagana. Pero ahora, con el aumento de las ciencias tratando de desmentir a Dios, libres por el momento de grandes guerras de exterminio y de pestes mortales, procurando de una u otra manera alimentar la población en constante crecimiento; todo sistema económico, las teorías y la capacidad de los recursos colapsará en breve. Las promesas de los hombres en días mejores son una mentira porque Dios no miente y Su Palabra es verdadera.

A la gente le cuesta creer porque los creyentes son minoría, pero siempre han sido minoría, por lo menos visible. El colmo fue para el diluvio en que había un sólo justo entre miles de millones de personas alejadas del bien. Israel fue un minúsculo pueblo de seis a ocho millones de habitantes en tiempos de su máximo esplendor, rodeado de pueblos paganos que por siglos quisieron su tierra hasta hoy. Sólo un espíritu valiente apoyado en una fuerza superior puede sobrevivir y sobreponerse a una situación semejante.

Igualmente la Iglesia, comenzó con un sólo hombre, que con la ayuda de otros doce hombres inició la conquista del mundo sin ejércitos y sin la fuerza, y cuando parecía desaparecer, algún acontecimiento llegaba en su ayuda y aparecía triunfante aunque con algunas ventajas sobre los mártires del pasado, porque con su ejemplo, con su nombre y porqué no decir también, por las torres que no faltan en las ciudades del mundo, para abrir un diálogo que los pueda llevar a cumplir el objetivo, el de recordar y anunciar al mundo que el Dios de los dioses y el Rey de los reyes gobierna sobre todos los hombres. Las torres son sólo un recordatorio para que nadie diga en aquel día, glorioso para algunos y triste para otros, que por ignorancia no conoció a Dios. (Hech 17:30-31)

Nadie se puede escapar de este terrible futuro que espera al mundo porque ningún acontecimiento de esta naturaleza trae felicidad. Solamente la sangre, las catacumbas, las llamas y la persecución han abundado en los creyentes desde Cristo en adelante.

El racionalismo materialista es el enemigo natural de la revelación divina y nació para combatirla y ese es parte de su objetivo, pero la realidad está sobre lo que teorizan del hombre no siendo mas que una "idea derramada sobre la tierra" para combatir la rebelión contra la creación y por tanto un medio utilizado para el objetivo divino.

El racionalismo sirvió para derribar el concepto errado de la Verdad y su poder maligno contra la vida de los hombres. El racionalismo dio origen a la Revolución Francesa y ésta a Napoleón que terminó con el sistema monárquico español y europeo.

Sus efectos, la revolución industrial y las nuevas ideologías terminan con el bárbaro sistema de la esclavitud, dando origen a otro tipo de explotación humana de más responsabilidad individual: el proletariado. Ahora no se obliga al hombre a producir para otro, sino que es el hambre que lo mueve a vender el sudor de su frente para subsistir.

De este nuevo sistema político-económico predominan aquellos que por siglos dispusieron su esfuerzo y su sabiduría para producir y crear, mientras que los dominadores que vivían del sufrimiento de los mas débiles, como España, se quedaron atrás sin industria, sin tecnología, sin científicos. Sólo con títulos, héroes y hazañas, poetas y escritores, palacios y catedrales.

Sin embargo, no todo está perdido, porque así ha dicho Jehová: "Clama a mi, y yo te responderé, y te enseñaré cosas grandes y ocultas que tú no conoces" (Jer 33:3). La pobreza y el sufrimiento de tus hijos está clamando al Creador y la Verdad florece triunfante por Latinoamérica. Los hijos de esta tierra son la reserva moral del mundo corrompido y dirigido por una minoría sensual, ególatra y corrupta.

El racionalismo, con la técnica, las ciencias, el poder económico y las armas que inventó es capaz de cualquier cosa y lo que mas temen es la Verdad, y esta cunde cada día utilizando los mismos medios de difusión con que ellos engañan, solo que en una mínima parte. La paz y la libertad que hoy cuenta la Verdad, es de pocos años atrás en algunos países de Occidente donde la burla, el desprecio y la indiferencia hacia los creyentes es el acicate de su vida.

Sin embargo, esta libertad se ha transformado en el mayor peligro, ya que la difusión de la Verdad está institucionalizada y es difícil cubrir los costos del mercado sin una organización oficial que la respalde. Ya no puede ser con los medios de antaño, porque por cada minuto de difusión semanal que pueda tener, debe contrarrestar cientos de horas del mal dirigido a la mente de las personas con toda la técnica de difusión de masas aplicado y con todo el capital de las compañías transnacionales. La obra personal se hace difícil con la gente encerrada en los condominios y con la desconfianza y el temor a las personas en la calle.

El papel del creyente, hoy mas que nunca es de lo mas importante en la sociedad, por el bien de ella en cada país. La juventud desorientada por la religión y la política demagógica, tiene en la Verdad y Fe en Dios Creador, el fundamento del futuro. Es la misma Fe que triunfó en el imperio romano y en la oscuridad de la Edad Media.

Se necesita hacer de cada niño o joven, mujer u hombre, un ciudadano ejemplar, un soldado de Cristo, un obrero calificado, un técnico, un profesional, un investigador, un maestro o un dirigente social que inste e instruya con la Verdad, porque los resultados de la mentira y el engaño han sido negativos.

No hay nada que haya que "redistribuir", pero sí mucho que estudiar y trabajar, porque el futuro y el progreso son sólo eficiencia y esfuerzo, sudor y lágrimas; siendo la única manera de disminuir la distancia que nos separa con el mundo desarrollado y no podemos quedarnos a esperar que nos traigan todo dispuesto.

El Creador le ha entregado a cada país los recursos que necesita para sus hijos y las promesas de Su Palabra que nada les faltará a los que en El confían, porque son "más valiosos que las flores y los pajarillos que no siembran ni cosechan y que Dios las alimenta y viste". (Mat.6:25)

Muchos profetizaron contra el comunismo y el materialismo marxista, que era nada menos que otro tentáculo del racionalismo para engañar a las personas, pero este ya está muerto y su gran objetivo fue terminar con la institucionalidad existente hasta el siglo XX. Cumplida la liberación de más de la mitad de la gente del planeta, de países como Israel, China, India, y el resto de los países de Asia y África, la URSS dejó de ser.

Cada país y cada raza ya no le pueden echar la culpa a otro Imperio o potencia. El comunismo no fue más que una idea o mal espíritu, como dice la Biblia, "que vino sobre el mundo enviado por Dios para que la violencia hecha a los hombres y la sangre de ellos, recayera sobre los líderes, que mataron a sus hermanos y sobre todos los hombres que fortalecieron su poder para dominarlos". (Jueces 9:23-24)

"Imperios que habían acumulado tesoros para los días postreros; he aquí, clama el jornal de los obreros que han cosechado vuestras tierras, el cual por engaño no les ha sido pagado por vosotros; y los clamores de los que habían segado han entrado en los oídos del Señor de los ejércitos". (Santiago 5:1-6)

Ahora el camino está despejado. Cada pueblo tiene sus líderes y es libre de elegir a quien quiera. Ya no se impone la religión por decreto, excepto en los países islámicos, quienes siguen siendo la clave del futuro inmediato.

¿Porqué debimos pasar por tanta muerte y sufrimientos si el hombre era un ser inteligente y racional( ¿Podremos confiar en el hombre "civilizado" de estas últimas generaciones y poder decir que no se cometerán las barbaries cometidas(. Con sólo recordar la barbarie de las últimas dictaduras latinoamericanas y las guerras de los últimos treinta años en el mundo queda una gran interrogante.

La Historia muestra que el hombre ha sido un agente de cambios en la Naturaleza. Si los cambios han sido positivos o no para el planeta queda una gran duda porque tenemos un futuro infinito que recorrer juntos, Naturaleza y Hombre.

Cada cambio ha significado un gran trastorno a la humanidad, una revolución que trae guerras, hambre, pestes, plagas y muerte. Desde este punto de vista, el hombre ha sido un conservador, a causa de lo cual los pueblos se han desangrado.

Si la esperanza de remontarnos a otros planetas resultara sólo un sueño, tendremos que seguir juntos aquí por milenios indefinidos. Y aún así, si el Hombre alcanzara algún astro, es con la esperanza de encontrar el elixir de la vida con que soñaron nuestros antepasados, para traerlo a la tierra ya que todos no podríamos viajar, como lo hacemos a Cuba.

Si los científicos encontraran este elixir de la vida, qué precio tendría para la humanidad; porque seguro que no será un "spray" que se esparza para todos por "amor al pueblo". Podemos decir que los que van a la vanguardia de la tecnología, lo están haciendo para ellos y solamente para una minoría. ¿Qué esperanza existe para las mayorías(

Los testimonios muestran que la humanidad y nuestros antepasados tuvieron siempre el ideal de "alcanzar el cielo" y es lo que nos ofrece la Revelación de Dios, pero no en forma de obras materiales o acciones, o fórmulas que el hombre deba desarrollar. La Revelación de Dios muestra el camino para lograrlo, pero el hombre ha optado por otro propio.

El CRISTIANISMO llegó a proponer todo de nuevo mediante la Fe, mediante la mansedumbre y la paz, mediante el sacrificio personal y de amor a los demás. Pero… Los hombres no son capaces de pensar en abstracto; necesitan ver o palpar algo, aunque sea de piedra. No podemos renunciar a lo material y ahí tenemos las imágenes, el mito, la mentira, el engaño, la pobreza, el hambre, la muerte y las guerras.

El RACIONALISMO, el ideal humano basado en la razón, mira el pasado exigiendo demostración mediante los resultados obtenidos. Y tiene razón. Los resultados obtenidos durante 400 años de racionalismo son los peores de la historia humana, sólo comparables a los mil doscientos años del poder que derrotó. Necesitamos urgentemente al Autor de la Creación.

La FE, esta expresión tan simple, esta palabra de apenas dos letras que desde Adán hasta hoy ha estado disponible para todos. Ridiculizada por muchos, despreciada por otros, castigada y censurada por los poderosos, olvidada por las mayorías ha traspasado la Historia; fue la que creó el mundo, es la autora de la vida y es la que salvará al mundo. La humanidad y nuestro planeta tienen sus esperanzas puestas en la FE.

La FE es la rectora de la Historia que analizamos, pero no es la Fe en cualquier cosa. Ni en hombres, ni en imágenes de hombres, ni de cosas que están arriba en el cielo, ni que están abajo en la tierra ni en la profundidad de los mares (Ex 20:3-6).

La FE, es la Fe en Cristo Jesús, en el Hijo Único del Creador del hombre y del universo, que vino a la tierra para salvar al mundo, que murió y resucitó y ascendió de nuevo al cielo a preparar la nueva morada de los hombres, donde se vivirá eternamente. Para el materialismo, los creyentes vivirán en otra dimensión. No en la dimensión de la razón. Ni siquiera en la dimensión de la luz del sol o de los astros. Para el creyente será más simple que andar a pie el remontarse a los cielos de estrella en estrella y el estar junto al Creador por siempre.

 

 

Autor:

Rodemil Espinoza Reyes

Partes: 1, 2
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