Cuestionario
Ficha de observación
Métodos
Tipo de Estudio: Exploratorio – Descriptivo
El método a utilizar será el descriptivo – causal – comparativo
Revisión de literatura
EL PROBLEMA DEL HOMBRE
La pregunta más extraña y más difícil de contestar es: ¿qué es el hombre?, pero es posible que no sepamos lo que somos. El filósofo alemán Máx. Scheler, decía, que un hombre culto "al oír la palabra hombre, seguramente empezarán a rivalizar en su cabeza tres círculos de ideas totalmente inconciliables entre sí. Primero, el círculo de las ideas judeo-cristianas: Adán y Eva, la creación, el paraíso, la caída. Segundo, el círculo de ideas de la antigüedad clásica: el hombre es hombre porque posee la razón o lógos, donde lógos significa tanto la palabra como la facultad de apresar lo que son las cosas. El tercer círculo de ideas es el círculo de ideas forjadas por la ciencia moderna de la naturaleza y la sicología genética y que se han hecho tradicionales también hace mucho tiempo; según estas ideas, el hombre sería un producto final y tardío de la evolución del planeta tierra… "[1]
Cuantas más cosas sabemos del hombre, mas problemático se nos vuelve y más lejos estamos de comprenderlo en su unidad más profunda.
En todas las culturas y en todas las épocas, el asunto del origen del hombre se ha contestado desde una cosmología, es decir, desde una explicación determinada del universo. Estas respuestas han ido evolucionando, conforme el hombre avanzaba hacia el saber. Así tenemos que en primer lugar, las respuestas son de carácter mitológico, luego religioso, es decir narraciones fantásticas realizadas por los dioses. Ejemplo Zeus, para los griegos.
Los primeros filósofos, al interesarse por la naturaleza, los seres vivos, consideraron al hombre como un ser natural. Aristóteles hizo una clasificación de los serse vivos conocidos entonces y defendió la idea de que se ordenaban en función de su mayor o menor complejidad, formado una escala que permanecía invariable, esta idea permaneció varios siglos sin ser cuestionadas.
Con la aparición del cristianismo, el mundo greco-latino descubrió una religión que consideraba, que Dios había creado todo lo existente, y que el hombre era un ser privilegiado, creado por Dios a su imagen y semejanza. La naturaleza existía para que él la disfrutase.
En el Renacimiento el saber humano cambió radicalmente, apareció la física, como ciencia, y la naturaleza se explicaba recurriendo al lenguaje matemático, los hechos se describían a través de sus causas eficientes y se abandona la causalidad final. Sin embargo, las respuestas sobre el origen del hombre y el mundo no eran muy diferentes de las de siglos anteriores.
Se entendía que todas las clases de seres vivos, todas las especies existentes, habían aparecido en un mismo momento, es decir, que debían haber sido creados de algún modo—creacionismo. Las especies han permanecido, y permanecerán, invariables, nunca ha habido otras especies distintas ni nunca las habrá. Esta explicación es conocida como Fijismo.
En el siglo XVI, se ha y hacen los grandes descubrimientos geográficos, y existe gran curiosidad por lo que se descubre en lugares remotos y desconocidos, hay un afán por clasificar y ordenar las nuevas especies; C. Línneo (1707-1778), en 1735 publica su obra Sistemática naturae donde realiza una clasificación atendiendo al género y la especie de los seres vivos. En ella aparece el hombre como una especie más. Línneo está de acuerdo con el fijismo, pero sin embargo abre el camino a concepciones no fijistas de la naturaleza.
Se mantiene que unas especies proceden de otras, lo que significa que no son independientes entre sí, aparece el transformismo que sería el primer paso hacia las teorías de la evolución del siglo XIX.
El primero en sostener las tesis transformistas es G. L. de Bufón (1707-1788), quien señala que los fósiles procedían de especies extinguidas y que no eran eternas ni fijas, sino que habían sufrido transformaciones.
Un discípulo de éste, J. B. De Monet de Lamarck (1744-1829), fue el primer evolucionista en sentido estricto. Su teoría fue publicada en Filosofía zoológica en 1809, de acuerdo a ella las especies han sufrido y seguirán sufriendo cambios debido a la presión de lo que él denomina las "circunstancias"; lo que nosotros entendemos por medio ambiente.
El mismo año que Lamarck publica su obra, nace Charles R. Darwin (1809-1882) a quien se considera como el auténtico responsable del concepto de evolución. En 1859 publica El origen de las especies. "Cuyas ideas principales son las siguientes:
*Las especies no son algo fijo e inmutable, sino que pueden variar adaptándose al nuevo medio en el que viven. Este proceso es lento y gradual.
*Los organismos semejantes descienden de antepasados comunes, idea de la que no excluye al ser humano.
*El proceso de cambio en las especies ya existentes e incluso la aparición de nuevas se explica por lo que el llama selección natural."[2]
Después de Darwin, las teorías evolucionistas sufren diversos avatares, pero es la biología los que proporcionarán los fundamentos científicos de la evolución, como son el redescubrimiento de las leyes de la herencia (los trabajos de Gregor Mendel, que fueron ignorados hasta 1900) y la parición de la genética.
Será en los años 30 cuando la teoría de la evolución que de establecida de un modo más o menos definitivo en la teoría sintética, que viene a reunir las aportaciones de la biología de los últimos años con los elementos más estrictamente darvinistas. La evolución es el producto, fundamentalmente, de tres elementos: la selección natural, las leyes mendelianas de la herencia y las mutaciones.
Antropogénesis y sociogénesis: Hominización
El "Homo sapiens" (el hombre que sabe), es el resultado de la evolución biológica, nuestros antepasados de hace unos millones de años no eran seres humanos. Darwin "planteó que el hombre y los monos proceden de un mismo antepasado, es decir seríamos "hermanos " de los simios. Nunca afirmó que descendiéramos de alguna especie viviente de monos"[3].
Los hombres actuales somos Homo sapiens, la única especie superviviente de los Hominidae que es una de las familias del orden de los Primates, es decir, que somos primates, aunque de una familia distinta a la de los Pongidae, a la que pertenecen los monos actuales.
El Homo sapiens, es la única línea evolutiva superviviente, habiéndose extinguido los Neanderthalensis, rama que guarda una gran proximidad con nosotros.
Tres son fundamentalmente, las características que nos distancian de nuestros hermanos más próximos: el bipedalismo, la habilidad de las manos y el desarrollo del cerebro.
El Hombre como ser cultural: Humanización
Una vez que ha aparecido un ser humano como nosotros, una vez que se ha producido la hominización, comienza un proceso nuevo y diferente, la humanización. El hombre aparte de sus características físicas, ha desarrollado unas capacidades que le hacen radicalmente distinto de los otros seres vivos. Nos referimos al pensamiento, a la habilidad técnica, al lenguaje, a la convivencia con los otros, en definitiva, a la cultura. Este es sin duda su rasgo más notable, el que hará de él la especie de más éxito de la naturaleza. El hombre no es sólo un ser natural, sino también, y como resultado de esa misma naturaleza, un ser cultural.
Los hombres recibimos dos tipos de herencias: Una herencia biológica y una herencia cultural.
Comportamiento ético:
El hombre vive en sociedad, por medio del lenguaje nos comunicamos unos a otros, pero esa convivencia es posible, por que poseemos otro carácter, el de la moralidad. Somos seres morales, es decir, juzgamos nuestros actos y los de los demás con términos como bueno, malo, justo o injusto. Sabemos que debemos hacer y que no, pero estas normas son sociales, es decir son compartidas con las personas que convivimos.
Los humanos son definidos biológicamente por su inteligencia, Homo sapiens. Otro atributo que nos distingue de los animales es el sentido moral, Homo moralis. Solo los humanos evaluamos las acciones como moralmente buenas o malas.
La capacidad de hacer juicios morales se deriva necesariamente de la presencia conjunta de tres atributos: a) anticipar las consecuencias de las acciones; b) hacer juicios de valor; c) el libre albedrío. Estas son posibles por nuestra capacidad intelectual.
"Sólo el hombre posee la inteligencia necesaria para prever el futuro y valorar en términos morales, pero además y sobre todo, diríamos los filósofos, es el único ser que es libre, que puede elegir y siente el deber de actuar de acuerdo con su conciencia."[4]
El hombre posee Inteligencia, lenguaje y ética, pero además tiene otro concepto, el de la conciencia o auto conciencia, "es decir la experiencia interna, intransferible que cada sujeto tiene de sí mismo y de sus actos. Sólo el hombre puede pensar sobre sí mismo, sobre su vida y su destino. La conciencia acompaña todos nuestros actos. Únicamente el hombre sabe quién es, tiene identidad y por eso se sabe y se siente único, irrepetible".[5]
Esta autoconciencia, nos permite tener otro rasgo solamente humano :el saber que nos vamos a morir. Y el hombre es el único animal que entierra de un modo ritual a sus muertos y esto sólo es explicable si aceptamos que quien así se comporta es porque sabe que va a morir y lo que ello significa.
El tener conciencia de la muerte, implica también tener conciencia del tiempo. El ser humano es el único ser que se preocupa por su pasado, vive su presente y proyecta su futuro. Se sabe que es un ser temporal, es conciente del tiempo que ha vivido, vive y le queda por vivir.
El ser humano, es un ser abierto al futuro, porque el futuro es necesario para vivir, el hombre necesita proyectarse, planificar, esperar cosas; sin futuro su vida pierde sentido..
El hombre a través de la cultura adquiere una segunda naturaleza exclusivamente humana, que no nos viene dada, sino que tenemos que aprender en sociedad. Y esta cultura es compartida, porque es lo que piensa, siente y actúa no un individuo sino toda la sociedad, y estos son de tres clases: Cognoscitivos, Afectivos y normativos.
La reflexión filosófica sobre el ser humano:
La filosofía ayuda a entender quienes somos, y lo hace con la ayuda de otras ciencias, y esta a evolucionado con el tiempo, así tenemos:
1.- EL HOMBRE, ¿UN ANIMAL RACIONAL?
La mayoría de la gente define al hombre como un animal racional, pero eso se debe a los griegos, que aumentaron considerablemente la razón y reflexionó sobre el hombre como un ser contemplativo y teórico (el trabajo manual era para los esclavos). Los griegos quisieron entender al hombre situándolo entre los dioses y las fieras.
Platón definía al hombre como "Animal sin alas, con dos pies, con las uñas planas: el único entre los seres que es capaz de adquirir una ciencia fundada en razonamientos".
Aristóteles en su libro: Política, decía: "Se admite que hay tres cosas por las que los hombres se hacen buenos y virtuosos y esas tres cosas son la naturaleza, el hábito y la razón…Los otros animales viven primordialmente por acción de la naturaleza, si bien algunos, en un grado muy pequeño son también llevados por los hábitos; el hombre, en cambio, vive también por acción de la razón, ya que es el único entre los animales que posee razón, de manera que en él estas tres cosas deben guardar armonía recíproca entre sí. Los hombres en efecto, obran con frecuencia de manera contraria a los hábitos que han adquirido y a su naturaleza a causa de su razón, si están convencidos de que algún otro camino de acción les es preferible"
Pascal decía: "el hombre es una caña , la más débil de la naturaleza: pero es una caña pensante"
Linneo, designó a la especie humana como homo sapiens.
E. Morin, en el Paradigma perdido (Citado por César Tejedor Campomanes. Filosofía), dice:…".el hombre no puede verse reducido a su aspecto técnico de homo faber, ni a su aspecto racionalístico de homo sapiens. Hay que ver en él también el mito, la fiesta, la danza, el canto, el éxtasis, el amor, la muerte, la desmesura, la guerra. No deben despreciarse la afectividad, el desorden, la neurosis, la aleatoriedad. El auténtico hombre se halla en la dialéctica sapiens-demens"[6]
No debemos dudar que el hombre es racional y que es consciente de ello, pero tampoco debemos dejar de lado que el hombre, tiene pasión, imaginación , sentimiento, imaginación, vida…¿ y locura ?
2.- EL HOMBRE, ¿CENTRO DEL UNIVERSO?
Los griegos pensaban que la tierra, era el centro del cosmos y que el hombre era una síntesis ("microcosmos") del universo. Mas tarde Copérnico diría lo contrario referente a la tierra con nuestro sistema solar.
En 1936 Teilhard de Chardin, planteaba que el hombre es la meta y fin de la evolución del universo:"¿Qué sentido tiene éste devenir? ¿Está dirigida la evolución? Lo que me propongo en este ensayo es construir una figura del mundo físico alrededor de la persona humana escogida como elemento significativo de todo el sistema. La verdad del hombre es la verdad del universo para el hombre, es decir, la verdad simplemente…".[7]
El hombre no es la meta del universo, tampoco de la evolución. El hecho de que el hombre actúe con un propósito, no debe inducirnos a pensar que el universo también lo haga. Todo sucede según leyes y causas. El hombre es el resultado de la evolución, pero no su finalidad. Jacques Monod, decía que la aparición del hombre es pura casualidad, por puro azar.
El hombre no es el centro del universo, el lugar del hombre en el universo, es como un grano de arena en una inmensa playa de arena. El hombre es un ser finito ante la infinitud del universo.
3.- EL HOMBRE, ¿UN SER SOCIABLE?
Aristóteles afirmaba de que el hombre es un animal político, es decir, sociable y ciudadano. Pero también es un animal que habla y es ético y moral y todo ello es por su propia naturaleza.
Pero también esta afirmación encuentra una formulación opuesta: quizás el hombre no es naturalmente sociable, sino que su naturaleza es, de por sí, agresiva y egoísta. Plauto, decía:"El hombre es un lobo para el hombre", y esta tesis lo repite Thomas Hobbes, en Antología: Del ciudadano. Leviatán: "Hallamos en la naturaleza del hombre tres causas principales de discordia: primera la competencia; segunda, la desconfianza; tercera, la gloria. La primera causa impulsa a los hombres a atacarse para lograr un beneficio; la segunda, para lograr la seguridad; la tercera, para ganar reputación…Con todo ello es manifiesto que durante el tiempo en que los hombres viven sin un poder común que los atemorice a todos, se hallan en la condición o estado que se denomina guerra, una guerra tal que es la de todos contra todos".[8]
Lo que nos dice Hobbes, es que el hombre de ninguna manera es sociable, pero se siente obligado a asociarse y a someterse a la autoridad para no destruirse.
Rousseau, contradiciendo a Hobbes afirma, que el hombre es bueno por naturaleza, y es la sociedad la que lo pervierte.
4.- EL HOMBRE, ¿ES UN SER LIBRE?
Los existencialistas, parten afirmando que el hombre no tiene naturaleza, el hombre es libertad. El hombre al nacer, carece de una naturaleza definida, y tiene que irse haciendo a sí mismo, escogiendo lo que quiere ser.
Otros piensan que la libertad es un "sueño", la idea del hombre libre sería la enunciación de un deseo. Nuestra naturaleza biológica, los impulsos del inconsciente, la presión social, la educación primera…determinan nuestros actos,..No habría más libertad que la aceptación de la necesidad. Creerse libres no es sino ignorancia de lo que nos determina.
B. Spinoza: en Ética: "Los hombres se equivocan al creerse libres, opinión que obedece al solo hecho de que son conscientes de sus acciones e ignorantes de las causas que la determinan. Y por lo tanto, su idea de "libertad" se reduce al desconocimiento de las causas de sus acciones, pues todo eso que dicen de que las acciones humanas dependen de la voluntad son palabras, sin idea alguna que les corresponda".[9]
5.- EL HOMBRE, ¿UN SER ESPIRITUAL?
Platón, decía que el hombre estaba compuesto de cuerpo y alma, pero que el cuerpo sólo era una cárcel del alma, y que cuando más rápido se liberara de él, podría acceder al mundo de las ideas y contemplarlo. El alma era inmaterial e inmortal. Esto último fue adoptado por una corriente del pensamiento de occidente, particularmente por San Agustín y Descartes.
Aristóteles, decía que el ser humano era un ser corpóreo, y que el alma no es sino la estructura ("forma") y las funciones del cuerpo, considerado como un cuerpo vivo.
6.- EL HOMBRE, ¿DIGNIDAD O MISERIA?
La dignidad del hombre, está en lo que puede llegar a ser según su libertad y su acción. Pero en esta indeterminación está también su sufrimiento y su dolor, es decir, su miseria.
El hombre ha intentado saber lo que es. Heráclito,"Me he buscado a mi mismo" y Sócrates, inspirado en la frase escrita en el templo de Delfos: Conócete a ti mismo", nosotros también debemos intentarlo, pero para ello debemos tener en cuenta algunas dificultades:
1.-El hombre es un ser muy individualizado (o personalizado). No parece existir el hombre, sino únicamente hombres.
2.-El animal cuando nace, está ya biológicamente terminado. No así el hombre, que cuando nace es un ser de carencias, es un animal incompleto, no terminado, no hecho del todo. Por eso el hombre tiene que hacerse a si mismo, supliendo sus propias deficiencias y su inadaptación al ambiente. Para hablar sobre el hombre hay que recurrir, sobre todo a su historia—si hablamos de los hombres–, o a su biografía—si hablamos d este hombre.
3.-El hombre, es algo demasiado rico para que pueda ser encerrado en una sola idea. Cambia y se transforma continuamente, posee infinitas facetas, infinitos aspectos que no es posible agotar.
HOMBRE Y SOCIEDAD.Este binomio resulta inseparable; el hombre necesita de la Sociedad. La naturaleza de lo social.
El hombre es un ser social y biológicamente es imposible un ser humano fuera de la sociedad. Aprendizaje, costumbres, comportamientos o relaciones llevan al hombre a la vida que entendemos como humana, importancia que contrasta con la poca atención que se ha prestado a la realidad de este análisis. En principio se produce cuando sociedad civil y Estado son contemplados de diferente manera, aunque durante algo más del siglo su existencia todavía no se ha clarificado suficientemente lo social con variadas explicaciones sobre sus cambios. Los grupos primarios constituyen la red fundamental del entramado social y lo social constituye la verdadera sustancia medular de nuestra ciencia, así los problemas de la sociología se refieren a la naturaleza del vinculo social. El misterio que afrontan los sociólogos es la naturaleza de lo social. Las diferentes maneras de abordar esta solución en con el desarrollo de dos grandes campos:
1) Estática social.
2) Dinámica social.
Y se puede profundizar en él vínculo de lo social a través de los vínculos que lo componen. El papel de lo social en el desarrollo humano.
La vida humana es vida social. La evolución supone un paso de lo simple a lo complejo, de lo único a lo plural, una tendencia a la agregación inscrita en la lógica de la vida. Esta agregación cumple un papel adaptador que aumenta las posibilidades de sobrevivir y multiplicarse.
Algunas especies que han sobrevivido lo han conseguido mediante su sociabilidad lo cual aumenta al acercarnos al hombre el cual necesita del aprendizaje o socialización para un despliegue ideológico normal. Wilson ve en el parentesco la principal fuerza generadora de la sociedad y el fenómeno del altruismo, así cuanto mayor es el coeficiente de parentesco mayor es la disposición al altruismo. Esta cultura puede llevar incluso a la transformación de ciertos rasgos físicos.
Concepción del hombre como ser social.
Aristóteles ya definió al hombre como ZOON POLITIKON; animal político por naturaleza. El se refería a la polis como paradigma de sociedad, un sistema de vida, no un agregado de individuos, por tanto esta definición contiene un matiz importante; "su dimensión cultural".
El desarrollo de la teoría de Darwin propuso dos ideas fundamentales: 1) Idea equilibrio ser vivo-naturaleza.
2) Proceso evolutivo por adaptaciones y desadaptaciones.
Las mutaciones encajan al hombre en un territorio determinado donde lo decisivo es la adaptación al medio y el hombre es un resultado de innovaciones y autorregulaciones adaptativas por la condición social del hombre, así este es el proceso de una evolución biológica y social (co-evolución).
El hombre como especie es débil en sí mismo y ha sobrevivido en virtud de su carácter social desarrollando y transmitiendo una cultura que fue progresando. Así la cultura es el ambiente artificial creado por el hombre. Esta hominizacion lleva al hombre como tal.
Rasgos característicos de lo humano.
En la historia de la evolución el desarrollo humano supone un principio de autorregulación y una producción autónoma de ambientes artificiales y esto debe explicarse en relación de hasta que punto influye o es condición para el desarrollo humano. Todo esto complementado con la habilidad del propio lenguaje, creatividad, disposición solidaria a cooperar y trabajo con herramientas.
En las sociedades de primates existen ciertas protoculturas muy elementales que se desarrollan en los comportamientos grupales lo cual se puede observar con la antropología comparada. Con ello se puede encontrar una cierta línea de continuidad hacia nosotros. El hombre a lo largo de su evolución cultural ha hecho de la sociedad su nicho ecológico dentro de la cual no solo crea sino también fabrica de una manera más compleja que las otras especies por medio de su cerebro y de la prensilidad de sus manos. Mano – Cerebro. Esta fabricación es una tarea de grupo cuya cultura se transmite de generación en generación, lo cual posibilita la mejora de las herramientas. El hombre se ha ido remodelando como especie social, como "ser de praxis" (Marx). Otro de los aspectos básicos es el de la comunicación entre los seres humanos. La conformación social de los hombres acaba influyendo en su propia evolución como especie, lo social es parte de la naturaleza humana. Wilson expone así mismo que el segundo paso de la ampliación cultural del hombre se baso en la caza.
La cultura es la que conforma la personalidad humana permitiendo al hombre sobrevivir y desarrollarse.
Alberto Chirif: el futuro y la Amazonía
Alberto Chirif, es un antropólogo peruano egresado de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos. Desde hace 40 años su vida profesional está centrada en temas amazónicos, en especial, lo concerniente a los derechos colectivos de los pueblos indígenas. Trabaja como consultor independiente. Es autor de numerosos artículos especializados y de libros colectivos como Atlas de Comunidades Nativas (1977), El Indígena y su Territorio (1991) y Marcando Territorio. Progresos y limitaciones de la titulación de territorios indígenas en la Amazonía (2007).
Chirif ha seguido muy de cerca los últimos procesos sociales realizados en nuestra región y a partir de ahí plantea algunas reflexiones sobre el pasado, el presente y el futuro de una de las regiones más complejas como desconocidas del Perú.
¿Es posible hablar del "hombre amazónico" en términos retóricos?
Tomo el concepto de retórica en una de sus connotaciones: uso fingido del lenguaje, con un afán puramente estético formal, sin que importe la veracidad del contenido, y me defino frente a éste: detesto la retórica. Toda definición genérica, como la que me planteas, induce a errores. Pero intentando una precisión, puedo decir que no es "hombre amazónico" el habitante promedio de una ciudad como Iquitos, muy poco conocedor de la geografía, medio ambiente, historia y problemas actuales de la región, porque vive inmerso en su pequeño mundo de intereses urbano; y que si alguien merece el calificativo, es el campesino ribereño y el indígena, actores y creadores de conocimientos enraizados en la Amazonía.
¿Cuáles son las más importantes omisiones que se han ido generando respecto de la investigación de los temas amazónicos, según tu parecer?
Creo que la omisión más importante se refiere a investigaciones que den cuenta de los cambios ocurridos en las sociedades indígenas amazónicas, a raíz de la conquista y la colonización. También son escasas las investigaciones sobre cómo funciona la economía amazónica y quién se beneficia de las leyes promocionales y de las actividades extractivas impulsadas por diferentes gobiernos.
¿Crees que han existido estereotipos o prejuicios sobre la Amazonía peruana que le han hecho daño?
Claro que sí. La Amazonía ha sido siempre presentada como región de recursos inacabables que pueden solucionar los problemas del país, vía la colonización, y que si no se ha logrado esto es porque ha estado poblada por indígenas flojos, que acaparan sus recursos y son incapaces de progresar. Es decir, por "perros del hortelano". Hay muchos prejuicios más, pero el espacio no da para tratarlos.
¿Cómo es percibida la noción de pertenencia al territorio entre nuestros pobladores originarios?
El territorio para los pueblos amazónicos es el mundo según la creación, el cual está poblado por seres humanos de diversas tradiciones culturales, por seres inmateriales, los "dueños de la naturaleza", que protegen los recursos, y además por animales y una flora biodiversa. El mundo pertenece a todos porque es un espacio compartido. Sin embargo, los procesos de despojo llevados a cabo desde la invasión europea y continuados durante la invasión republicana han obligado a los pueblos indígenas a defender las fronteras que les han quedado y reclamar autoridad de gestión sobre los recursos naturales. Eso es lo que contemplamos hoy con las protestas indígenas.
¿Observas desconocimiento de los legisladores que han planteado propuestas sobre la Amazonía?
Sí, hay desconocimiento. Pero no quiero trasmitir la idea de que el centralismo es sólo un fenómeno limeño. El centralismo y el desconocimiento se reproducen a escala en el medio regional. ¿Cuáles son las políticas de desarrollo del GOREL, por ejemplo, sino iniciativas mal armadas y populistas o reproducción de otras ya fracasadas, como la promoción de la ganadería? ¿Qué se hace en términos de manejo de nuestros principales recursos, que son el bosque y, sobre todo, las aguas? Nada.
¿Cuál es tu diagnóstico sobre la movilización indígena realizada en estas semanas?
Es expresión del hartazgo de los pueblos indígenas frente a un gobierno que los ha insultado desde el comienzo, calificándolos de perros del hortelano y acusándolos de ser los causantes de los males de la región, como la deforestación, que en realidad ha sido impulsada por la colonización promovida por diferentes gobiernos, con el mismo argumento que da hoy el presidente García para justificar el despojo de sus tierras: superar la pobreza. Si los planes estatales del pasado para superar la pobreza produjeron más pobreza, al menos que habría hacer un esfuerzo para reflexionar sobre lo que pasó y el Estado debería hace un mea culpa por la responsabilidad que le cabe.
Si uno quisiera tratar de entender a los amazónicos ¿a qué fuentes, bibliográficas o no, debería recurrir?
A todas las posibles, porque al final el entendimiento depende más de la buena reflexión sobre la información que viene en esas fuentes.
Eres un consumado cinéfilo ¿has visto películas o material audiovisual amazónico o sobre la Amazonía que te parecen fundamentales?
La verdad que no. Las películas de Robles Godoy, no me convencieron, tampoco la que hizo Federico García sobre Arana: "El socio de Dios". Werner Herzog, con su "Fizcarraldo", deformó grotescamente la historia, al presentar a un genocida como un soñador obsesionado con traer la ópera a Iquitos. Su "Aguirre, la ira de Dios" está bastante mejor y al menos sí trasmite el carácter alucinado de ese conquistador. Producida en el medio, he visto algo sobre el chullachaqui, que se quedó en medio de la nada. No sé si el autor quiso hacer una comedia o la pintura de una creencia antigua. Por supuesto, he visto documentales extraordinarios sobre el medio ambiente amazónico.
Por ahí se anda promoviendo un concurso sobre las maravillas de la cocina peruana ¿Se puede considerar que existe una identidad gastronómica de la Amazonía? ¿Qué hay de aquello de la "cocina novoamazónica"? ¿Crees más bien que es un truco publicitario?
Sí, claro que hay una identidad gastronómica que se debe en gran parte a la tradición indígena. Cocinar en hoja, por ejemplo, es una herencia cultural indígena, que a pesar de su simplicidad, la considero brillante. La sarapatera es también una antigua herencia indígena. El tema de lo novoamazónico aún no ha sido bien desarrollado, a pesar de las noticias llegadas desde España, a raíz de la presencia de un chef peruano que llevó productos de la Amazonía. Creo que es un campo inmenso por explorar en el que ya han empezado a incursionar algunos restaurantes de Iquitos y Pucallpa.
¿Cuál crees ha sido la etapa más importante de la historia Amazónica?
No lo sé, pero definitivamente no considero que haya algo notable que destacar de la época republicana, que está más bien marcada por los atropellos contra los pueblos indígenas.
Si tuvieras que elegir un ranking lugares fundamentales que todo viajero debería conocer obligatoriamente dentro de la ciudad de Iquitos ¿cuáles serían?
Belén, como puerto, como mercado y lugar donde viven miles de personas en un medio verdaderamente alucinante, de casas flotantes, de comercio de todo tipo, de mezclas étnicas (indígenas, chinos); como lugar que genera admiración por la capacidad del ser humano para sobrevivir en un medio tan inhóspito, que me hace pensar que el que sobrevive a las enfermedades en Belén sólo morirá a palos. La arquitectura de la época del caucho es también algo que se puede visitar, pero cada día está peor por la desidia de las autoridades, que preferirían tirarse abajo todo ese patrimonio si de por medio les saliese un negocio. En este sentido, contrasto una vez más el voceado regionalismo de muchas autoridades con su desamor concreto por las cosas de su tierra.
Finalmente ¿en qué reside el desarrollo y el progreso de la Amazonía de cara al futuro?
En el buen manejo de sus recursos y, dentro de éstos, insisto que el agua es el principal, no sólo por la capacidad inmensa de producir peces, sino por el tema de la flora asociada al agua (el aguaje, por mencionar un ejemplo), por su importancia en la comunicación, en la regulación del clima, por la biodiversidad que renueva anualmente mediante las crecientes, y por su valor paisajístico y turístico, poco aprovechados aún.
El hombre amazónico: su cosmovisión, relación con la ecología y tecnologías de conservación de su medio ambiente
El Poblamiento de la Amazonia desde el Determinismo Ecológico
La amazonia se ha caracterizado por tener pocos restos arqueológicos, los cuales son muy importantes para conocer la historia, para darnos una imagen del pasado. En la selva baja, por la escasez de piedras para la elaboración de las herramientas, se utilizaron la madera y otros materiales frágiles que son perecederos o efímeros en el tiempo.
Asimismo los asentamientos del hombre cambiaron de lugar constantemente, debido al cambio frecuente del cauce de los ríos, esto ha impedido la ubicación de restos arqueológicos, los cuales se encuentran en los antiguos cauces, los mismos que además se encuentran en medio de la tupida vegetación.
América del Sur se pobló hacia los 13,000 a.c., pero la amazonia tiene una ocupación de 2,000 a.c. según los restos arqueológicos encontrados. En estas épocas, en la región se cultivo la yuca como alimento básico y la agricultura de roza y quema, constituyeron parte importante de la cultura amazónica, aquellos que vivían en la ribera de los ríos completaban su dieta con los recursos acuáticos. La caza fue una actividad secundaria en la selva alta. En la selva baja y en algunas zonas de la selva alta vivían dependientes de la caza al interior del monte.
La yuca (Manihot utilísima) fue domesticada desde este periodo en la región amazónica, tanto como en el Caribe, y llegó a la costa del Perú alrededor de los años 1,000 – 1,200 a.c. Las similitudes entre artefactos, que se encuentran en lugares distantes, reflejan los intercambios comerciales y la comunicación, que se dieron en viajes en largas distancias. Dos lugares donde se han realizado estudios más exhaustivos son el Ucayali Central y el río Napo.
Los conocimientos acerca de las culturas antiguas se basan principalmente en los restos de cerámicas, por ser de material más duradero, aunque también se tiene la evidencia de la formación de sociedades complejas en la Selva Alta y Ceja de Selva como la cultura de los Chachapoyas, Luya y Chillaos, Pakamuros, etc.
A modo de referencia se han dado cinco periodos en la prehistoria de la amazonia, estos son: El Paleoindio, Arcaico, Formativo, Desarrollo Selvático y Tardío. Los Periodos Paleindio y Arcaico no tienen datos directos pero se utilizan para una explicación más detallada. En estos periodos al comenzar a utilizar los recursos de los ríos en forma intensiva en la Amazonía se empezó a poblar de una manera más estable.
El medio ambiente ha sido el factor primordial del desarrollo civilizatorio en la amazonia en general, los elementos bióticos y abióticos han influenciado determinantemente sobre los patrones de asentamiento, alimentación, agricultura, caza, pesca, cultura, etc. Todavía en la actualidad la preponderancia ecológica se hace notar en los pueblos amazónicos a través de las diferentes relaciones que construye el hombre cuando entra en relación directa y equilibrada con su medio ambiente.
La Amazonia: Un Espacio Heterogéneo
Nuestra amazonia es bastante compleja y heterogénea en cuanto al aspecto geológico, hídrico, climático, social, económico, cultural y político. Presenta variados recursos naturales renovables y no renovables, muchos de los cuales son explotados por el Estado con problemas crecientes en los aspectos ambientales, sociales y económicos.
Desde el Estado peruano el manejo y explotación de los recursos amazónicos sigue un patrón histórico de observar a esta región, como una colonia interna de exportación para mercados externos, haciendo que las riquezas generadas no se inviertan o se inviertan poco en la amazonia peruana.
Desde las poblaciones amazónicas, los modelos de usos de sus recursos naturales son muy variados y obedecen esencialmente a tres formas de actuar: sin destruir los ecosistemas, destrucción de los ecosistemas originales y su sustitución, e intermedios con cierta alteración del ecosistema original.
El manejo de los recursos naturales por parte de las comunidades nativas, en la mayoría de los casos esta marcado por una estrecha vinculación de equilibrio entre el hombre y su ecología. El uso de los recursos esta normado por reglas morales y religiosas (cosmovisión) que construyen actividades costumbristas que permiten la conservación de los recursos ecológicos.
El manejo de los recursos naturales por parte de las poblaciones originarias, esta plasmado en sus costumbres y manifestaciones culturales. Los mitos, ritos, danzas, leyendas, cuentos, bailes, el pensamiento religioso, encierran manifiestos del uso equilibrado que hacen de sus recursos naturales; manifiestos, que muchas veces se transmiten por generaciones.
En cambio las poblaciones mestizas y citadinas, que habitan la amazonia, rompen con ese esquema de equilibrio hombre – ecología, haciendo mal uso de los recursos naturales. Sus conceptos de manejo de los recursos, se fundan en sus formas aprendidas de sus antecesores andinos o costeños a partir de un manejo integral y expansivo de los recursos, haciéndoles insostenibles para futuras generaciones.
La Interrelación entre la Ecología y la Cultura
El mundo para los pueblos de la amazonia esta centrado en la tierra y el bosque desde una visión holística o totalitaria. En este espacio los elementos bióticos y abióticos cumplen un rol primordial al momento de conceptualizar la visión del mundo que los rodea; así, los ríos, las lagunas, los animales, las plantas, las montañas, las cataratas, se materializan y cobran una vida autónoma a través de las costumbres, mitos, leyendas y su religiosidad; y muchas veces estos elementos son convertidos en dioses y espíritus.
Bajo este concepto, la naturaleza convive en estrecha relación armoniosa con el mundo de las personas donde se construyen relaciones de equilibrio que muchas veces conlleva a la mantención y sostenibilidad de los recursos ecológicos.
Es por ello que según el pensamiento de la amazonia, el espacio no tiene límites y no es propiedad de nadie, ya que los elementos de este espacio son propios y autónomos que son guiados por un espíritu protector que resguarda la no explotación desmesurada de estos elementos.
El hombre en la amazonia ha vivido en estrecha armonía con su medio ambiente. Desde un inicio el hombre amazónico se ha servido de sus recursos ecológicos para sobrevivir en un espacio muchas veces crítico y difícil, de su ecología ha tomado todos los elementos necesarios para alimentarse, protegerse, comunicarse, etc.
Es por ello que los hombres de esta región han construido en torno a su naturaleza un espacio de deificación y adoración hacia ciertos elementos ecológicos permitiendo la conservación de los elementos indispensables para la sobrevivencia.
Aunque la inmersión del pensamiento occidental a través de la globalización, esta rompiendo con esta concepción armónica de preservación y sostenibilidad. Los preceptos occidentales son mas instrumentalistas y utilitarias que rompen con la racionalidad originaria construida por milenios de años, donde la estrecha relación entre el hombre con su ecología es el principal factor de sobrevivencia de la cultura y la ecología.
Las Relaciones Socio Ecológicas y la Conservación Ecológica: El Caso de los Aguarunas
La población Aguaruna o Awajun se encuentra ubicada en las regiones de Cajamarca, Amazonas y San Martín, pertenecen al grupo lingüístico de los Jíbaros. Los Aguarunas se dedican tradicionalmente a la agricultura, la pesca, y cada vez en menor medida a la caza y a la recolección. Todas las actividades están fuertemente ligadas al aspecto ritual, ya que a través de las creencias mágicas – religiosas ordenan su mundo. El énfasis en conservar este aparato ritual mantiene aun vivas las costumbres acerca de los valores propios de los aguarunas, como el llegar a ser waimaku, en su sociedad producto de las visiones obtenidas en un estado ampliado de conciencia.
A través de las visiones, producto del consumo de sustancias alucinógenas como la ayahuasca, busca imágenes para una correcta y larga vida. Estas creencias no están desligadas de otros aspectos como la agricultura, la organización, la economía, la salud; constituyendo, un conglomerado holístico que corresponde a su cosmovisión.
El uso de tecnología importada, como las herramientas para la agricultura, ha hecho dependientes a los Aguarunas de artefactos que fueron elaborados por ellos, sin un impacto negativo en los suelos y en el contexto ecológico. Las tecnologías que no corresponden al contexto local, al ser maquinarias pesadas, por lo general, ocasionan un consumo energético no factible en estos pueblos, a la vez que producen una fuerte contaminación ambiental.
El reduccionismo ecologista que ha predominado en los estudios acerca del medio ambiente ha producido un retraso en la metodología para abordar dichas dinámicas medioambientales. El proceso histórico visto desde una perspectiva ambiental, vincula la transformación tecnológica de los ecosistemas con las formas de organización social. Las raíces, de los procesos de cambios, sociales no están desligadas de sus medios "naturales", y por tanto las explicaciones que se enfocan sólo en el aspecto económico se desligan de los mecanismos y las leyes que orientan el proceso mismo de la vida.
Así como el aspecto ecológico es básico para comprender los actuales procesos sociales, también lo es el aspecto cultural. En tal sentido la identidad es el aspecto cultural más importante. Las definiciones en el ámbito nacional, sobre los pobladores amazónicos, van a ser trascendentales en la identidad de los grupos o colectividades amazónicas.
Algunas comunidades Aguarunas siguen un patrón de asentamiento disperso que permite la "explotación calculada" de sus recursos naturales, permitiendo la conservación de sus elementos ecológicos. Algunas de sus prácticas agrícolas como la roza y quema y los multicultivos permiten conservar la ecología; así, ellos hacen uso de un terreno determinado para abrir una chacra, lo limpian y queman los rastrojos dentro de los límites necesarios, sin que afecte especies de flora y fauna en extinción. Luego aprovechan a lo máximo la tierra para sembrar diversos cultivos que permitan aprovechar todos los nutrientes.
Muchas de estas siembras están cargadas de un conjunto de manifestaciones folklóricas y rituales que principalmente son realizadas por las mujeres aguarunas. Existe un espíritu en las chacras denominado Núgkui, y las mujeres le cantan canciones mágicas y les ofrecen piedras mágicas (Nantang) para que las chacras sean productivas. Muchas de estos aspectos rituales son manifestadas a través de las danzas y mitos locales.
En las actividades de casa existen formas culturales de preservar y explotar de manera calculada la fauna silvestre, una de esas maneras se transluce a través de mitos normativos que manifiestan castigos por parte de un ser espiritual denominado Chullachaqui quien es el que resguarda la caza indiscriminada de los animales del bosque.
Los mitos sobre el Chullachaqui son contados y vueltos a narrar tantas veces, que se ha convertido en el símbolo de lo silvestre y guardián del equilibrio ecológico, en un regulador que impide la caza indiscriminada y por ende se convierte en un factor para la conservación de la naturaleza.
Pensamiento amazónico
SOBRE NATURALEZA, SOCIEDAD Y HOMBRE
«No hay nada más nuestro, que nuestros ríos, nuestra selva, nuestra manera de ser».
Así como los hombres de las comunidades campesinas de la sierra conciben el mundo centrado en la tierra, los nativos de las comunidades Cocamilla, Cocama, Asháninka, Machiguenga, Huitotos, etc., lo conciben centrado en el territorio, en el bosque, como una totalidad compuesta e interrelacionada por elementos como los ríos, las lagunas, los animales, las plantas, los territorios sin límites, sus costumbres, mitos, leyendas y su religiosidad, con sus dioses y espíritus.
Piensan que la naturaleza es una entidad con la cual hay que establecer relaciones armoniosas, de equilibrio y no de dominación que conduce a alterarla o trastrocarla, en las formas destructivas propias de los colonos serranos, misiones religiosas, empresarios, gobiernos o el Estado mercantilista y autoritario.
La naturaleza no es algo externo y opuesto al conjunto de relaciones sociales que establecen los nativos, sino algo relacional estrechamente vinculado a su vida biológica y social. No existe pues, una relación de oposición, instrumentalización y dominación entre naturaleza y sociedad, o entre naturaleza y hombre, como la que se da en la cultura y pensamiento occidental industrial como posindustrial. Así por ejemplo, en el pensamiento de los Asháninka, no existe la dicotomía entre naturaleza y sociedad. El ser y la justificación de su existencia es el territorio cuya unidad fundamental lo constituye el Bosque. Para ellos sólo existiría la sociedad, en la medida que la naturaleza ha sido incorporada y humanizada a través de las relaciones sociales míticas2.
Aislando metodológicamente los factores que han alterado o trastrocado la naturaleza y la cultura amazónica, se puede afirmar que su economía se ha basado en la agricultura, en la horticultura, la recolección, la caza, la pesca. La actividad agrícola es diversa, relativa con roza, quema, y con barbecho. Dicha actividad está dividida en tantas partes y momentos como intervenciones o acciones haya realizado el hombre y la mujer.
Esto no se entiende si no tomamos en cuenta su concepción de la propiedad, la cual no es entendida en el sentido occidental. La propiedad de la tierra o del territorio, no tiene el sentido de la propiedad privada individual o familiar. Transciende los sentidos individualista y familista de la propiedad. Piensa que el territorio es libre, sin límites, no es propiedad de nadie, porque nadie tiene derecho de apropiarse de lo que es de todos. No creen en las delimitaciones territoriales con fines agrícolas. De ahí también que se comprenda por qué no estuvieron de acuerdo con las delimitaciones territoriales y agrícolas que se hicieron como producto de la aplicación de la Ley de Comunidades Nativas durante el gobierno de Juan Velasco Alvarado.
Conciben el trabajo como una relación dirigida a producir los bienes y servicios que sirvan primordialmente para su subsistencia, y también para el comercio si es que sobra excedente. Esta actividad no se mide y valora solamente por los productos sino también por los procesos, es decir, por todo el conjunto de actividades realizados para arribar a los productos.
También es necesario mencionar el hecho de que no conciben al trabajo como una mercancía sujeta a las leyes del mercado laboral, a diferencia de los colonos occidentalizados que sí conciben la tierra, el territorio y el trabajo como sujetos al valor de uso y al valor de cambio. El objetivo económico de los colonos es hacer dinero, sentar patrones de acumulación capitalista que van más allá de la satisfacción de las necesidades básicas de la sociedad como son la alimentación, la nutrición, la salud, el trabajo humano, el sentido humanista de la vida económica y social.
PENSAMIENTO AMAZÓNICO SOBRE LA NATURALEZA
Como ya se dijo, el hombre amazónico concibe la realidad como una totalidad integrada por la naturaleza, la sociedad, la cultura, la economía, y la religiosidad. No establece las separaciones o rupturas dicotómicas de tipo ontológico y gnoseológico que establece el pensamiento occidental, separación que exacerba el pensamiento económico de corte neoliberal.
El centro fundamental de la naturaleza es el territorio que se expresa concretamente en el Bosque, integrado por el agua, la flora, la fauna, la tierra, el aire. El ser que determina y justifica la existencia del hombre amazónico es el territorio libre, usufructuado solidaria y colectivamente.
Los principios fundamentales que regulan el pensamiento amazónico sobre la naturaleza son las siguientes: Totalidad, Unidad, Diversidad, Movimiento e Integralidad. Principios que incluyen a la sociedad. «Los pueblos indígenas y sus territorios se pertenecen. Son inseparables», dijo el Presidente de Colombia, Virgilio Barco, en Putumayo, en 1988.
«La noción de territorio indígena es un concepto que intenta acercarse a definir la realidad milenaria de relación entre los pueblos indígenas y su hábitat natural, así como la ineludible necesidad de respetarla a la hora de asegurar el futuro de cualquiera de los dos términos de esa relación. Los territorios y los pueblos indígenas se pertenecen… podríamos definir el territorio indígena de la siguiente manera: Los montes, valles, ríos y lagunas que se identifican con la existencia de un pueblo indígena y que le han provisto de sus medios de vida; la riqueza heredada de sus antepasados y el legado que están obligados a entregar a sus descendientes; un espacio en el que cada pequeña parte, cada manifestación de la vida, cada expresión de la naturaleza, es sagrada en la memoria y en la experiencia colectiva de ese pueblo y que se comparte en íntima relación con el resto de los seres vivos, respetando su natural evolución como única garantía del mutuo desenvolvimiento; el ámbito de libertad sobre el que dicho pueblo ejerce su dominio permitiéndole desarrollar sus elementos nacionales esenciales…»3.
CONCEPCIÓN DE LA SOCIEDAD
El hombre amazónico concibe a la sociedad ligada a la naturaleza y a la economía, no las concibe separadas y aisladas unas de otras como ocurre en el pensamiento económico de las sociedades industrializadas de occidente. La sociedad viene a ser el conjunto de relaciones que establecen los hombres amazónicos, de integración y solidaridad, con la finalidad de reproducirse como seres pertenecientes a una comunidad concreta. En las comunidades nativas de la selva peruana encontramos la práctica de la reciprocidad, del «choba-choba», y la ayuda mutua. Lo social comprende e incluye lo biológico. No se hace vida social para reproducirse individualmente, sino que se hace vida social comunitaria para reproducirse como comunidad social. Se vive y se muere en y para la comunidad.
En este contexto, se puede entender que la identidad del hombre amazónico se define en términos de pertenencia a un territorio determinado, y a un grupo étnico concreto. No se define el hombre amazónico en términos individuales, biológicos o económicos, en el sentido de ser propietario de unas cuantas héctareas de chacras.
«El hombre se dedica a la pesca, la caza, la construcción de casas, la extracción de madera, el trabajo asalariado, y confecciona los instrumentos de trabajo masculino. La mujer cocina, lava la ropa, trae agua, cuida a los niños, se preocupa por los animales domésticos y se dedica a la alfarería. En la chacra el hombre corta los árboles, pero tanto el hombre como la mujer siembran, cultivan y cosechan. La mujer suele tener mayor responsabilidad de la chacra cuando su marido va a la caza o se dedica a extraer madera o a trabajos asalariados. Los niños y jóvenes ayudan a sus padres; y las niñas especialmente cuidan a sus hermanos menores. Los ancianos hacen trabajos generales según su capacidad. El marido suele ser el responsable de la economía familiar y del manejo del dinero»4 .
Sin embargo, la penetración o la introducción de las relaciones mercantiles y capitalistas se empezaron a dar a través de los «booms» del caucho, del barbusco, del petróleo, de la explotación de la madera, de la acción de los colonizadores, de las carreteras de penetración y de carreteras longitudinales, como la «marginal» del gobierno de Belaúnde. Como consecuencia de este fenómeno, las familias soportan un proceso de occidentalización. Devienen de unidades de producción en unidades de consumo de productos foráneos procedentes de las áreas urbanas. Los hábitos de alimentación, las relaciones sociales y económicas, resultan entonces violentamente trastrocadas. Sin embargo, este nuevo tipo de relaciones económicas no logra desterrar o derrotar el orden social establecido en base a actividades y objetivos de vida comunitaria, tanto en lo económico como en lo social.
CONCEPTO AMAZÓNICO DEL HOMBRE
Cuando se trata el tema de la relación entre el hombre y la naturaleza asistimos al encuentro ente Ecología y Filosofía. La Ecología ha cobrado hoy una gran importancia por haber estudiado y recomendado la preservación y el desarrollo de los ecosistemas y del paisaje natural, ante la destrucción y las altas tasas o índices de contaminación del medio ambiente, como consecuencia de los procesos de industrialización implementados por las grandes potencias, a costa de la destrucción de la naturaleza y -por extensión- de los medios ambientes sociales.
Lo que sucede es que la naturaleza y la sociedad no han formado parte de los modelos culturales de crecimiento económico, social y científico-tecnológico de occidente. Los movimientos ecologistas mundiales abogan por el restablecimiento de relaciones de equilibrio, de unidad entre el hombre y la naturaleza, la cual debe ser concebida y considerada como el hábitat primario del hombre, y también la generación y aplicación de tecnologías que reciclen y respeten, éticamente hablando, los ecosistemas mundiales.
Es en este contexto sociohistórico y discursivo, que cobra sentido el análisis y exposición de la relación hombre y naturaleza que hemos encontrado en la Amazonia, en el sentido de que, a pesar del nivel de desarrollo en que se encuentra, el tipo, los modos diversos de relación que se dan entre ambos, constituyen modos paradigmáticos, dignos de tenerse en cuenta para contribuir a dar solución a los problemas ecológicos mundiales, dada la tremenda importancia que tiene la Amazonia en el mantenimiento del equilibrio ambiental mundial.
Podemos empezar afirmando que el hombre amazónico es directamente un ser natural, como ser natural es material, corpóreo, sensible y es activo. Como tal realiza actividades económicas como la caza, la pesca, la horticultura, la agricultura de subsistencia para satisfacer las necesidades familiares y las de su comunidad, sin que existan mediaciones comerciales, mercantiles o de otro tipo que se interpongan entre él y la naturaleza.
Estas actividades las realiza el hombre amazónico en forma libre en un TERRITORIO y en un BOSQUE que no tiene las fronteras propias de la propiedad privada occidental de corte mercantilista. El tipo de actividad que realiza es el trabajo grupal, comunitario, cuyo objetivo o fin, no es la dominación de la naturaleza de corte instrumentalista o utilitario, que conduce, tal como es el caso de las sociedades «Modernas y poscapitalistas», a la destrucción de los ecosistemas y a la contaminación del medio ambiente.
El hombre amazónico actúa en y para la naturaleza y para su comunidad, domesticándola, humanizándola y a su vez la naturaleza lo naturaliza, lo mantiene en la condición de ser natural. El trabajo, que es -aparte del juego– la forma más excelsa y humana de actuar en la naturaleza, no la codifica o la objetiviza en forma mercantil, sino la considera como su morada, su hábitat social.
La actividad libre, humana y solidaria permite, gnoseológicamente hablando, convertir la sensoriedad animal en sensoriedad humana, a través de la cual entra en contacto y se relaciona con la naturaleza, con el agua, la flora, la fauna, el aire, los minerales y no-minerales. Esta sensoriedad activa le permite conocer el mundo natural para captar las propiedades, relaciones, formas o manifestaciones propias del mundo natural. Sobre esta base sensorial el hombre amazónico va desarrollando el pensamiento concreto y simbólico a medida que las relaciones socioeconómicas se van haciendo más complejas, abstractas y simbólicas; mucho más cuando entran en relación con otras formas culturales urbanas por medio de la radio, la T.V. y la educación.
Este conjunto de consideraciones nos lleva a realizar la segunda caracterización del hombre amazónico como ser social, en el sentido de constituir un conjunto de relaciones familiares y comunitarias, organizadas para reproducirse y desarrollarse social y naturalmente; es decir, como seres sociales y naturales en forma unitaria e integrada, no en forma separada, aislada y dicotomizada, porque para él -de acuerdo a su concepción- la naturaleza y la sociedad constituyen una unidad, no separada por «sistemas o estructuras» económicas urbano-occidentales. En cuanto a la identidad del hombre amazónico, éste se identifica en relación al territorio que cultiva él, su familia y su comunidad. En segundo lugar define su identidad en relación a la pertenencia a su etnia, o a su grupo cultural, étnico-lingüístico. El asunto de la identidad no es un asunto o un problema metafísico de «esencia» o de esencialidad consigo mismo, con su mismidad, o un asunto de identidad individual con su corporeidad, con su psiquismo o modos de ser individual descontextualizados de su medio. Tampoco es un asunto de establecer relaciones esenciales entre el «YO» y el «TÚ», al estilo de Martín Buber, o al estilo de los espiritualistas, que definen la identidad con un asunto puro y netamente espiritual, desligado de lo material o de la corporeidad humana. Otra forma importante de mencionar es la identidad definida o entendida como un problema puramente individual, donde se excluye del asunto a los demás o a las condiciones materiales y culturales de existencia. A este tipo de concepción apuntan mucho las psicoterapias que se practican en los medios urbanos occidentales. Pero este no es un problema de identidad en los hombres de las comunidades nativas de la Selva. En cuanto a la concepción integral o dicotomizada del hombre en lo que se refiere al cuerpo y al alma, encontramos que el hombre amazónico concibe al hombre en forma integral: El cuerpo y el alma están estrechamente unidos y vinculados. No los conciben separados uno del otro, ni tampoco oponen uno al otro. No tienen pues, una concepción dualista, dicotomizada del hombre. Tampoco espiritualista en el sentido de que el espíritu o el alma sería más importante y determinante que el cuerpo, o a la inversa, la corporeidad material y sensible. Ni «En general se cree que el cuerpo humano está compuesto de cuerpo y una sola alma»5. En un estudio antropológico que ha realizado Pierrette Bertrand Rousseau entre los Shipibos, nos dice que: «Cuando los shipibos hablan del ser humano, "Joni", en general no se refieren a una teoría fundamentalmente dualista que opondría el alma y el cuerpo… »6. Más adelante nos dice que "Yura" (el cuerpo), es el receptáculo de los elementos indispensables para la vida…"Bei", es verdaderamente uno de los principios fundamentales que animan el cuerpo del hombre, cuerpo animado, no sólo en el sentido de que alberga la vida sino en el sentido de un ser en movimiento ….."Caya", se utiliza simultáneamente como un término genérico que designa todos los elementos espirituales constitutivos de la persona»7. Este artículo concluye que los shipibos: «Lejos de plantear en su concepción del hombre la idea de un dualismo que opone la corporeidad y el espíritu, el pensamiento shipibo multiplica los elementos constitutivos de la persona en una síntesis original…»8
2. Seren Hvalkef, en rev. Amazonía , Nº 21, 1992.
3. Chirif, García y Chase: 1991.
4. Regan, 1993: 81-82.
5. Regan, op.cit., p. 191.
6. Pierrete Bertrand-Rousseau, en: Rev. Anthropologica, 1986: 93.
7. Ibid., pp.93-95.
8. Ibid., p. 111.
Aspectos generales
La selva amazónica, de 5 millones de kilómetros cuadrados, fue durante la era mesozoica el lecho de un mar, y se desarrolló progresivamente durante 22 mil años. De estos 5 millones de Km.2, pertenecen a Brasil 3.579.991 Km.2, repartidos entre los Estados de Amazonas, Pará y los territorios de Acre, Rondonia, Río Branco y Amapá. Lo demás pertenece a los países limítrofes de Venezuela, Guyana, Surinam y Guyana Francesa al Norte; Bolivia al Sur, y Colombia y Perú al Oeste. Se sitúa, aproximadamente, entre los paralelos 10º N y 15 Sº, y entre los meridianos 40º y 75º W.
Por otra parte, en la selva tropical del Amazonas se halla el río homónimo, el mayor del mundo por su caudal y por la extensión de su cuenca (esta comprende el 56% del área total del país) y el tercero por su longitud, que es de 6.500 Km. Nace en Los Andes del Perú, cuyo país atraviesa en dirección S. a N. con el Nombre de Marañón, y después de recibir las aguas del segundo brazo inicial, el Ucayali, tuerce en dirección E. al llegar cerca de la ciudad de Iquitos, donde toma el nombre de Amazonas, penetrando después en el país y atravesándolo de O. a E. hasta desembocar en el Atlántico. Este río es, como ya se dijo, el mayor sistema hidrográfico del planeta, conteniendo las dos terceras partes del agua dulce disponible en el mundo y lo habitan 200 mil especies de peces, cifra que tiene importancia si tenemos en cuenta que en todos los ríos de Europa apenas suman 150.
Ciencia y tecnología de los pueblos indígenas amazónicos
Los asentamientos humanos en la Cuenca Amazónica siempre se han realizado en áreas dotadas de la mayor diversificación de especies ya que así se garantiza la provisión de recursos diversificados a lo largo de todo el año.
Dichos espacios han sido creados a partir cultivos temporales y rozas con especies importante. De esta manera se consolidan unidades de concentración de especies que a largo plazo se convierten en reservas forestales creadas.
Una selva secundaria bien mantenida favorece al incremento de los animales de caza y a la concentración de ciertas plantas medicinales.
La práctica común: tala y quema
Algunas características comunes de los habitantes indígenas de los bosques húmedos tropicales en América Latina es la roza que consiste en un sistema sucesivo de tala y quema.
La tala es pensada en cómo dotar al suelo de la mayor cantidad de nutrientes. Es sabido que el ciclo de nutrientes en los bosques húmedos tropicales es muy rápido por la actividad de los microorganismos del suelo, y por lo tanto en poco tiempo de iniciado un cultivo comienzan a escacear.
Por ello, se tala primero plantas pequeñas y el sotobosque, que facilitan una rápida reincorporación de nutrientes al suelo. Luego se bota los árboles grandes, cuyos troncos fertilizan el suelo a largo plazo. Se trata de minimizar el tiempo que el suelo está expuesto directamente a los rayos solares, porque esto afectará a la flora microbiana.
El área de talada es siempre reducida. Para ampliar la zona productiva la tala se hace en otro lugar, dejando porciones de selva entre cultivos para asegurar la permanencia de animales silvestres y estimular la regeneración natural del bosque.
Una vez que el suelo ha perdido sus nutrientes, se quema la zona cultivada y se la deja descanzar por un número variable de años, hasta que el suelo recupere su fertilidad y el bosque se regenere (barbecho). Los cultivos son movidos entonces a otra porción del bosque (Cerón, 1991).
Las chacras
Entre algunas comunidades amazónicas de Perú, Ecuador y Colombia, han desarrollado el sistema de chacras. En la chacra se practica también la tala y quema del bosque. A diferencia de otros grupos amazónicos, en las chacras se talan todos los árboles del área desmontada.
El campo está rodeado por bosque no perturbado. Luego hay un área que no fue quemada o rozada pero que fue perturbada por la caída de los árboles. Al interior hay un área en barbecho sin quemar y finalmente otra con ramas de árboles y troncos medio carbonizados.
Luego de la quema se siembra los propágulos en la capa de raíces que sostienen el suelo desnudo. El cultivo principal es la yuca. Para la cosecha las plantas de yuca son desplantadas para obtener los tubérculos. Los residuos de yuca y otros brotes son quemados durante la cosecha, lo que enriquece el suelo, pero elimina las plántulas de los árboles.
La regeneración del bosque empieza desde la orilla hacia el interior, a través de la chacra. El cultivo de yuca y otros productos de menor importancia, es reemplazado por vegetación leñosa y árboles frutales. Después de 8-10 años el campo entero cuando se completa la regeneración natural del bosque. Luego de 15-20 años se reinicia el ciclo. (Alcom, 1990).
A más de la chacra poseen un huerto frutal que generalmente está ubicado cerca de su casa y cuyo excedente puede ser comercializado. Este huerto también se quema luego de cierto tiempo. Tanto la chacra como el huerto están al cuidado de las mujeres.
En las comunidades quichuas del río Napo las chacras empiezan a partir del primer rastrojo que deja la quema y continuan talando y sembrando en dirección a la selva, pero siempre cerca a los antiguos cultivos de yuca. Trabajan luego en la regeneración de las áreas cercanas a su vivienda. A veces transportan plantas de un lugar a otro, y al cabo de 4 a 6 años tienen su huerto con predominio de chontaduro, guaba, plátano y yuca (Cerón, 1991). El chontaduro y la guabas les sirve como cercos y sombra y la guaba para mejorar la calidad del suelo.
Abandonan los cultivos paulativamente. Por 2-3 años continúan cosechando yuca y plátanos y algunos árboles frutales hasta por 20 años. consiguiente, El abandono de los campos aumenta a medida que decrece la productividad. Posteriormente estos espacios se presentan con la misma estructura que la selva madura (Irvine, 1989).
Los Yurimahua en Perú
Los indígenas Yurimahua en Perú, practican la tala y quema de los cultivos luego de pocos años de iniciado. La ceniza de la quema aumenta el suministro de nutrientes, disminuye la saturación de algunos elementos como el aluminio y retarda el decrecimiento de materia orgánica por unos 6 meses, la alta temperatura aumenta la disponibilidad de nutrientes asimilables. Los microorganismos descomponen el 50% de la materia orgánica remanente en el suelo en el primer año después de la quema y un 30% adicionales en el segundo año. (Mejía, 1987).
Manejo de bosques inundados
En ciertas zonas de la cuenca Amazonas, predominan bosques inundados permanentemente o periodicamente inundados como son los bosques de igapó y de varcea. Los indígenas de estos bosques han desarrollado un sistema que favorecer directamente a las especies deseables, promoviendo su mantenimiento y productividad.
Los residentes plantan o siembran semillas de especies deseables y que puedan adaptarse a estas condiciones. Favorecen además a la dispersión de propágulos de especies como mango, guaba y achiote. Introducen también especies transplantando brizales y estacas de cacao, mango, plátano, cuyas inflorescencia y hojarasca ayuda a la formación de materia orgánica.
Hay deshierbe intenso y se construyen cercas improvisadas con hojas y tallos de palma. Los residentes podan con regularidad las palmas para cosechar el palmito y del fruto (Anderson, 1990).
Varias especies de palmas juegan un papel importante en estos bosques, pues están adaptadas a sobrevivir en zonas pantanosas y crecen en lugares donde otros árboles no podrían. Las palmas en general tienen una gran gama de usos por las comunidades indígenas.
Algunos grupos indígenas han logrado hacer una selección genética de cultivos adaptados a suelos inundados o inundados periódicamente.
El sistema en el delta del Amazonas
Selvas inundadas han sido manejadas por más de un siglo. Para ello se favorecer a las especies deseables indirectamente mediante la siega o el raleo de los competidores menos deseables tales como las lianas o las especies de árboles que se usan solo para madera o combustible.
Los árboles grandes son frecuentemente anillados (la corteza es cortada en forma de anillo, cerca del fuste) antes que derribados, para minimizar los daños. La elimación de especies no deseables disminuye la competencia de la deseadas y promueve la regeneración de tales especies al preservar selectivamente sus plántulas.
Hay especies toleradas que no son eliminadas ni favorecidas de las que se extraen ciertos productos, incluyen Spondias mombin (tapereba), Inga (guaba), Mauritia flexuosa (miriti) y el caucho.
Hay tres unidades de tierra, fácilmente distinguible:
huerto -corral
bosque de varcea
chacras de cultivo migratorio.
El huerto-corral posee generalmente 1 ha, donde se construyen plataformas para protegerlas de las inundaciones. Se cría animales domésticos y se cultiva una variedad de plantas exóticas y nativas, hierbas y arbustos que se usan para condimentos, medicina y ornamentales.
De los bosque de varcea, se extrae productos selváticos, incluyendo palmito, caucho, madera, fertilizantes, ornamentales, fibras, miel, granos, oleaginosas, medicinas, utensillos, animales de caza y pesca.
La chacra es de cultivo migratorio, donde se siembran especies anuales de subsistencia como el arroz, maíz, fréjol y cultivos comerciales más intensivos como la caña de azúcar y el arroz (Anderson, 1991)
El sistema de los Bora- Perú
Los indígenas Bora mantienen zonas de bosque permanente, dentro de sus agroecosistemas. Las zonas con bosques cubren áreas que se inundan estacionalmente y siguen los arroyos que comúnmente separan las chacras. Se conservan debido a las especies útiles que se encuentran en estás zonas bajas, y también porque estas áreas no se consideran buenas para el cultivo de yuca. Las áreas con bosques se cosechan frutos, madera, animales de caza. Ponen mucha atención en los lugares y en el crecimiento de algunos árboles en particular, dentro del bosque (Cerón, 1991).
Manejo altitudinal del territorio
Muchos de los pueblos indígenas que viven en los flancos orientales de la cordillera de los Andes o en otras zonas montañosas o colinadas, han logrado aprovechar estas circunstancias para crear un sistema de diversificación de cultivos, y a la vez de evitar la erosión.
Los Machiguenga del Perú
Debido al gran territorio que manejan, los Machiguenga tienen más de un cultivo a la vez. Tienen una producción de calorías muy alta, pero el consumo es mucho más bajo lo que les permite una autonomía familar. El maíz es una prioridad. Se cultiva en campos recién abiertos. Para sembrar hacen huecos con estacas de palma, después del maíz siembran yuca, los que representan el 85% de lo que cultivan. El resto son 18 productos de menor importancia. Por vivir en un ecosistema montañoso, manejan altitudinalmente el terreno. El maíz es más propicio en este tipo de suelos (Johnson, 1989).
Los Amuesha del Perú
Las diferencias altitudinales en las que habitan los Amuesha del Perú, no permiten el manejo del suelo y espacio mediante jardines o parcelas policultivadas porque la heterogeniedad climática, topográfica y de suelos dificulta establecer asociaciones.
Los Amuesha localizados entre 200 y 1700 m, dividen el territorio según su morfología de donde se desprende la vocacion de sus suelos. Cada area tiene una vocación de cultivo y cada familia debe combinar el espacio disponible a lo largo de todo el año par asegurar el suministro de alimentos.
En las tierras bajas tienen árboles maderables. En las tierras altas -bajas cultivan maíz y palmas. En las playas de los ríos cultivan fréjol. En las islas, maíz y Erythrina. En los pantanos las palmas aguaje y Mauritia.
En las tierras de altura con suelos rojos cultivan arroz, yuca y árboles frutales. En áreas con arenas blancas el caucho y de arenas amarilla, el barbasco y balsa. En zonas de suelos negros cultivan maíz y árboles maderables (Cerón, 1991).
Los productos del huerto
El cultivo de maíz entre los Amahuaca-Perú
El maíz es el cutivo principal para los Amahuaca y se lo planta en los campos nuevos, posteriormente no recibe atención especial porque el ciclo es sólo de dos meses, por lo tanto, se cosecha antes que la maleza invada el cultivo y en consecuencia las parcelas se abandonan después de un año.
Medicina Herbolaria
Para los grupos indígenas, la conservación de la biodiversidad es asegurar su propia sobrevivencia. Todas las enfermedades propias de la selva son curadas mediante el uso de tratamientos hechos a partir de elementos de la naturaleza, en su mayoría plantas.
En diversos estudios etnobotánicos se ha encontrado que:
– las comunidades quichuas ubicados en la vía Hollín-Loreto utilizan 61 especies de plantas con fines medicinales (Cerón, 1993)
– los cofanes de Dureno conocen 292 plantas útiles (1989)
– los quichuas en las faldas del volcán Sumaco utilizan 173 plantas (Cerón 1990)
– los huaorani utilizan120 plantas (Baker, 1988)
– los achuar 130 (Descola, 1988)
– los siona y secoya 224 (Vickers y Plowman, 1984)
– los quichuas de la cuenca del Río Napo 212 (Alarcón, 1988).
Plantas medicinales del pueblo Quichua del Napo
En su estudio en las comunidades quichuas del Napo, Alarcón (1988) encontró que la malaria puede ser tratada con hojas de Verbena littoralis (verbena); el reumatismo y dolores musculares se usan las hojas de hortiga así como de chini-panga (Urera), para problemas de la piel hay una larga lista de plantas que pueden ser utilizadas, incluyendo la hagapania (Ossaea), el tabaco, chiquita payanzo (Miconia), por mencionar unas pocas.
Para la cistitis usan la escobilla (Sida scandis), para las caries dentales se lava los dientes con quihui (Spilanthes paniculata), para las diarreas el palo de sangre o Warscewiczia coccinea, para la holanda huapa o Virola,
La forma como conviven con los distintos elementos de la naturaleza también se basa en el conocimiento que tienen las distintas formas de vida del bosque. Por ejemplo, para las picaduras de hormiga se aplican el látex de Cyclanthus bipartitus (papango). En caso de mordedura de culebra se toma el tubérculo hervido y molido de Xanthosoma helleborifolium (Machacui-yuyo). La planta llamada Chucchu huatana del género Drymonia, es usado por las mujeres que están dando de lactar para que les aumente la cantidad de leche (Alarcón, 1988).
Extractivismo de productos no-maderables del bosque
Otra posibilidad es la explotación de productos no maderables del bosque. Estos son aquellos productos forestales, incluyendo subproductos como los hongos y la carne de animales de monte, que no son procesados por grandes industrias forestales.
El bosque suministra la fuente más importante de proteína en forma de carne de monte, mientras que los ríos proveen de pescado. Los materiales de construcción tales como las palmas se usan en la construcción de casas tradicionales, utensilios de cocina, artesanías, incluyendo shigras, canastas que se tiñen con una gran variedad de hojas de bosque. Los productos del bosque tiene además importancia cultural, pues están relacionados con determinados ritos.
Extractivismo de insectos
De los distintos productos no maderable del bosque, los insectos son los más recolectados entre los pueblos indígenas de la cuenca amazónica. La recolección de insectos es posible gracias al conocimiento que estos pueblos han desarollado sobre sus ciclos de vida, ecología, su valor nutritivo y sabor.
Los Asháninka del Perú
La recolección de hormigas constituye una actividad importante entre los indígenas Asháninka del Perú. Ellos encuentran en estos insectos una importante fuente de proteína y grasas.
Los Aguaruna del Perú
Los Aguaruna consumen varias especies de insectos, pero prefieren las larvas de coleóptero de palma, larvas de coleóptero de suelo (escarabajos), larvas de mariposas y avispas. Posiblemente las larvas de escarabajos son la fuente más importante de alimentos en materia de insectos. (Cerón,1991).
Comercialización de productos no maderables en Iquitos
Los productos no maderables del bosque han cobrado mucha importancia en el área de Iquitos. Muchos han llamado al mercado de Iquitos como el pariso de estos productos. Esto se debe al conocimiento que tienen sobre su uso las comunidades cercanas. Por ejemplo, en Mishana, cerca de Iquitos, 50 familias rivereñas usan una variedad de productos que comercializan en Iquitos. Una hectárea de bosque contiene 275 especies de árboles y 842 árboles individuales. De estas, 72 especies y 350 individuos son fuente de comercialización: 11 son frutos comestibles, 60 son productos forestales y una especie, la shiringa produce caucho.
A más de los productos del bosque, ellos pescan cazan y practican la rotación de cultivos en pequeñas parcelas. El valor que reciben por la producción total por hectárea es de cerca de US$ 1700 por producto, lo que es considerable si se compara con lo que ganarían con ganadería o agricultura intensiva (Brack, 1992).
En otra comunidad cercana a Iquitos, Tamshiyacu, alrededor de 2000 personas trabajan colectando productos y haciendo rotación de cultivos para autosubsistencia y para el mercado de Iquitos. Ellos se dedican a las siguientes actividades, en orden descendente de importancia:
fructicultura (63%)
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