El panorama estelar a través del Tiempo puede ser una imágen ilusoria de las realidades actuales o instantáneas, simplemente nuestro intelecto analiza lo que capta visualmente de los lejanos fenómenos. A la altura de nuestros tiempos, lo que el Hombre puede ver y analizar se encuentra segmentado, nuestro intelecto racional y analítico se dimensiona como una suma de puntos unidos en un segmento sin un principio y sin un fin. Nuestro intelecto y conocimientos progresan evolutivamente y el sentido y el valor existencial del Hombre se oculta en los enigmas y cerrados designios de todas las realidades espacio-temporales captadas que nos circundan. El Hombre vive y crea su sentido existencial y en los tiempos coetáneos llegó crear sus propios mitos de eficiencia, hedonismo, comodidad y placeres tenoexistenciales reales y virtuales lo que lo ciega de ver y analizar las auténticas realidades en la que la raza humana se desenvuelve y coexiste. Cuanto mayor es el nivel intelectual de un individuo exponente promedio de su género, tanto más busca encontrar el mayor placer de la vida y utilizar de todo lo ya se a perfeccionado instrumental y técnicamente lo que permite autodesviarse de todas las preguntas y respuestas del sentido y el valorde su propia existencia. El Hombre en nuestros tiempos se encamina sin advertirlo hacia el primitivismo filogenético de sus antepasados. K. Jung, S. Freud y J. Lacan descubrieron y demostraron tales primitivismos filogenéticos en los niveles del subconsciente. La Psicología en su conjunto unida a niveles conceptuales del intelecto humano; el Yo, el ello y el Superyo de la mente humana se extralimita e hiperboliza de sus marcos espirituales genéricos formados en el transcurso de milenios.
El Yo y el Superyo freudianos de los individuos, ahora pueden operar con aparatos cibernéticos, modelos informáticos, redes sociales interactivas y señales de autonconvencimiento de su ilimitada efectividad, logro de placer, comodidad, hedonismo y poder dar cuerda suelta a su ego y autoinducir sus instintos sexuales. El hombre de Neatherland buscó calor, abrigo y alimentos. El hombre contemporáneo por encima de lo básico busca todas las formas de comodidades y placeres que la sociedad ofrece. Si un individuo logra materialmente en parte los paradigmas que el mundo moderno ofrece, aquellos ya logran transformarse proyectos de pancartas y escenarios de su propio intelecto que distraen de preguntarse del lugar y el sentido que ocupa en el mundo donde el mismo individuo se dimensiona vital y socialmente. Los símbolos y paradigmas de la contemporaneidad contradicen por sus contenidos, formas y significados a los símbolos históricos de toda nuestra Era. En sentido paralelo, los conocimientos del Hombre y los cuadros psicológicos de las masas sociales podemos contraponerlas con los significados y las valoraciones de los íconos cristianos. El verbo señalar ya es reemplazado por el verbo digitar y en las grandes urbes las computadoras indican a los choferes de automóviles el camino a seguir. Científicos argentinos descubrieron que los mejores algoritmos de tránsito lo realizan las hormigas, las cuales en su trayecto no doblan e intercambian permanentemente información en el camino de ida y vuelta.
Los símbolos arquetípicos,las pancartas y los personajes y escenarios que nos circundan en la actualidad son contradictorios a la par de los símbolos de principios de la Era cristiana y medioevales. Si las imágenes televisivas e internéticas podemos llamarlas como ventanas hacia el Mundo globalmente interconectado visual e informativamente y al contrario, los íconos fueron y son ventanas hacia un Mundo invisible en los cuales la vida venció a la muerte y enlos cuales el estilo realista no coincide con las imágenes que representan. Las imágenes simbólicas de los íconos se ajustan a espacios condicionales. Los fieles veneraron imágenes al margen de los límites espaciales y temporales y por fuera de la lógica humana expresada en los ilogismos espaciales y en sus perspectivas sin horizontes, donde los objetos no se reducen sino que al contrario aumentan en la medida que nuestra vista se aleja del ícono. El único punto de cruce de las líneas geométricas de los íconos es el centro de los ojos de los espectadores que miran un ícono. Las figuras y las escenas de los íconos puden ser vistas de tres o incluso cuatro lados o perspectivas. La relación entre quines miran o veneran un ícono es ajena a toda ilusión óptica y los esquemas ilógicos del inconsciente humano no pueden sery ni por aproximación parecerse a lo que los íconos representan y visualmente expresan. Desde el S. VI D.C. los fieles cristianos comenzaron a venerar a los íconos y los mismos tuvieron un mayor valor que las incomprensibles escrituras bíblicas y las misas en idioma latín,idioma docto, lengua comprensible para individuos instruidos e incluso gran parte de los nobles de Europa occidental no lo dominaban.
Los fieles ortodoxos deben mirar a los íconos y no imaginarlos en su mente ya que para aquellos los íconos emanan fueza celestial y de acuerdo a reales registros, miles de fieles se curan de enfermedades orando ante ciertos íconos milagrosos. Los íconos religiosos no portan un sentido existencial filosófico o cultural ya que son microsegmentos de lo eterno, sin un principio y un fin. Las escenas y escenarios de la vida contemporánea y sus imágenes digitalizadas internéticas son contraposiciones lógicas de la biblias para analfabetos, las imágenes representativas de los íconos. Para interpretar lógica y racionalmente a personajes ficticios como H. Potter, Superman o el hombre araña y un sinnúmero de personajes cinematográficos y las caras y caretas de famosos mostrados por televisión, no requiere de ninguna instrucción ni tampoco que los espectadores sean alfabetos. El sólo conocimiento de un idioma verbal y vulgar permite la comprensión racional, analítica y emocional de los personajes , arquetipos , logotipos y las pancartas televisivas y cinematográficas. Los fieles cristianos veneraron desde los primeros siglos de nuestra Era retratos y escenas explanadas hacia la eternidad, hacia la infinitud espacial y temporal en formas de alogismos y perspectivas regresivas. Toda una total contradicción entre los esquemas del intelecto humano en el transcurso de dos milenios. El intelecto humano buscó en su imaginación detener o acelerar empíricamente al Tiempo y al Espacio y solamente pudo lograrlo a través de su propio inconsciente, cuando un individuo duerme y su lógica racional y analítica desaparecen de sus cuadros cognoscitivos ajustados a las realidades en las que se dimensiona cada individuo en particular. Todas estas circunstancias en nuestros tiempos se reflejan directa o indirectamente en el valor y el sentido existencial de cada individuo en particular y de las masas sociales informativamente globalizadas en general.
Cuando un individuo duerme, su cerebro no opera con cronologías temporales lógicas, el Tiempo como una categoría filosófica racional en el inconsciente humano se deforma. Las horas, los días y los años no tienen el mismo preciso sentido valorativo que cuando la esfera de la consciencia de cada individuo despierta. Cuando un niño nace su intelecto es una página en blanco libre de toda información sociocultural. Su memoria es filogenética como formas instintivas de supervivencia. Las relaciones entre los conocimientos de la humanidad y la psicología de las masas sociales puede ser ejemplarmente mostrada. En el transcurso de un milenio y doce años los conocimientos científicos progresaron en sentido matemático y en el S. XX en sentido geométrico. La psicología de las masas sociales coetáneas inercialmente pueden todavía operar con los mismos esquemas medioevales del S.XI. En el año 1000 los gentíos europeos ilustrados e ignorantes esperaron el fin del Mundo apocalíptico bíblico por el simple hecho del fin de un milenio y el inicio del segundo milenio. El pánico social llevó al sucidio a muchos individuos. En el año 1500 según la investigación de G. Duby (1967), los gentíos europeos diferidamente sufrieron estados de sufrimientos existenciales apocalípticos repetitivos, cinco centurias después del temor colectivo de los fieles católicos europeos sobre el fin del Mundo en el año 1000. Quinientos doce años después, las masas sociales global e informativamente interconectadas, instruídas y científicamente desarrolladas esperaron el supuesto fin del Mundo en el año 2012, en base a ocho hipótesis científicas y el fin de las predigitaciones futurológicas de Nostradamus, como el año del inicio de una nueva civilización y el fin del calendario maya en el mismo año. De estos fenómenos socioculturales y psicológicos de los grupos y masas sociales históricas y coetáneas develamos una relación dialéctica directa entre los esquemas del intelecto humano, la memoria colectiva de las civilizaciones y el transcurso cronológico y progresivo del Tiempo.
El intelecto humano marca algunos esquemas existenciales a través del Tiempo. Tales esquemas orientan el sentido existencial y pueden tanbién originarse de tiempos futuros hacia el presente. Lo que podríamos denominar la apocalipsis astronómica desde el futuro resulta ahora la estrella "Gran anaranjada" a tres mil años de distancia o un año luz alejada de la Tierra, la cual se dirige hacia nuestro sistema solar. La astronomía, sin dudas, desde un punto del Tiempo futuro nos encamina intelectual y existencialmente hacia las realidades de la nada, hacia nuestro fin cósmico en nuestro planeta. El intelecto humano no conoce el principio del principio de la materia y de la vida, ni puede imaginar con aproximación la infinitud espacio temporal del Universo, pero el intelecto humano hipotéticamente ya coincide racionalmente que la estrella que se nos aproxima puede ser la causa de nuestro punto final vital y existencial. J. P. Sartre en su obra "El ser y la nada", enfocó a la existencia humana en el sentido y el valor vital de cada individuo. El intelecto humano global y en el plano científico descubre y genera hipéboles ilusorias referidas al fin natural regular y necesario desde que un individuo nace. Todo el sentido de la vida humana desaparece para los filósofos existencialistas con la muerte de cada individuo.
Las causas materiales y objetivas fuera de nuestro ser pueden corresponderse con los esquemas ideales o abstractos del intelecto humano y con la cronología del Tiempo. Nuestra finitud vital nos programa con esquemas solipsistas autoilusorios. El hombre contemporáneo crea en su mente pancartas apocalípticas transportadas de tiempos pretéritos y futuros y desde su hábitat individual borra psicológicamente la necesaria regularidad de su propio fin vital y existencial. En tiempos pretéritos los esquemas psicológicos de faraones, emperadores, reyes y zares, frenaron y anularon a los precisos conocimientos del intelecto. En el año 1395 el jefe militar Tamerlan con un poderoso ejército antes de atacar Moscú vió en un sueño a una mujer resplandeciente en el pico de una montaña por lo cual dió la orden de suspender la invasión de los poblados rusos. Existen un sinnúmero de historias sobre el zar Iván ""El Terrible", el más cruel de todos los zares rusos, sobre sus temores y estados de pánico que sufría por algunos de los individuos muertos por su orden. Uno de sus jefes militares más capaces, el príncipe Borotinskyi fue arrestado sin causa por la sola razón de tener una gran capacidad intelectual en las estrategias militares. El príncipe murió por ser torturado y el zar Iván cada año visitaba la iglesia que Barotinskyi con sus propios recursos hizo construir, para rezar por el alma del príncipe asesinado. Cada individuo en promedio piensa y crea de acuerdo a las ideas de su época. Leonardo da Vinci no finalizó sus geniales estudios anatómicos tridimensionales por respetar la tésis de Galeno (130-200 d.C.) sobre los humores y las relaciones entre la anatomía humana y la psique. Los conocimientos adelantados quince siglos de da Vinci no le permitieron transigir las creencias del S. XV.
Napoleón Bonaparte rechazó la idea de instalar turbinas de vapor en su armada naviera. Stalin rechazó la idea de utilizar las innovaciones de la genética y la cibernética y censuró a su vez a la psicología por considerarlas ciencias de la "burguesía". Hitler rechazó la idea de desarrollar los armamentos atómicos, por la sola razón de no poder creer en las ocultas potencialidades del átomo. Los esquemas psicológicos de cada individuo en particular pueden generar dudas y rechazo a los precisos conocimientos científicos que descubre y son aplicados por el intelecto humano. Las fuentes primarias entre los conocimientos y la psicología de los faraones egipcios y las culturas previas a la civilizacíón de Grecia Antigua, podemos ejemplarizarla desde los contextos de los salmos del Libro de David (1040-970) época enque el intelecto humano se encontraba a la altura de su primeriza niñez, David en sus salmos denominó a la vista humana (el ojo, la retina) como a la inteligencia, en calidad del intelecto humano, por la razón de que la inteligencia, el intelecto de cada individuo es la vista del alma del ser humano. Para David sólo Dios existe sin un principio y sin un fin y, por lo contrario, la vida humana es muy corta y el Hombre se ocupa de lograr inconsistentes bienes y acumula riquezas para sus herederos. La vida física, nuestra vida propia y particular y la vida que nos circunda es solamente una agitación vana. Cosecuentemente, para David el total conocimiento de la pobreza libera a los individuos fieles de los sufrimientos del Día del Juicio. El ideal de David en sus salmos es granjear la vida sacrificada y dificultosa.
El intelecto humano, habitáculo ideoabstracto de los conocimientos y la psicología de cada individuo y colectiva se proyectó por centurias hacia la mentalidad de los fieles católicos y contrariamente hacia el intelecto y la psicología de los fieles protestantes. No vamos a comentar los orígenes teológicos de tales diferencias; las dicotomías entre el catolicismo y el protestantismo, las cuales no principiaron simplemente desde la declaración de Lutero ni de los fundamentos teológicos fundados por J. Calvino. La noción del Tiempo para los protestantes porte un significado de utilidad del mismo, perder el tiempo inútilmente es una forma de derroche de nuestra vida propia y el tiempo que nos es concedido para nuestraa salvación de nuestra alma. Cuanto más dinero acumula en el transcurso de su vida un individuo tanto más próxima se encuentra de su salvación. Tiempo es dinero, frase reconocida mundialmente. Para los protestantes la unión del intelecto y el tiempo es uno de los objetivos transferidos de su propia religión. La razón, el intelecto, el trabajo,la riqueza, la vida ascetica y el Tiempo para los protestantes fueron los paradigmas del Mundo protestante y la fe, el trabajo de la cultura de la tierra y el derroche para los católicos furon dicotomías de la consciencia y estilos de vidas de los fieles de las dos confesiones.Los protestantes no lloran públicamente a sus seres queridos fallecidos, los católicos los lloran y los musulmanes árabes pagan a lloronas profesionales cuando un familiar muere. Desde principios del S. XX desde los epicentros sociales protestantes se comenzó a anular por completo uno de los postulados del protestantismo ortodoxo, el de la vida ascética, siendo socialmente reemplazado por el depoder recibir los más prolongados períodos de placer, comodidad resultantes de un menor esfuerzo laboral y hedonismo, pragmatismo y utilitarismo.
Los esquemas de los conocimientos científicos desarrollados y acumulados por los hugonotes, bautistas y metodistas desde el siglo XVIII en los Estados Unidos, ya se tranfirieron en estereotipos de estilos de vida, ahora en calidad de esquemas intelectuales y psicológicos de las masas sociales norteamericanas y mundiales.Entre el contenido teológicos de los salmos del Libro de David (S.X a. C.) y los fundamentos teológicos de J. Calvino (s. XVIII d. C.) y los estereotipos magistrales globalizados de principios del S.XXI, ya no existen simples dicotomías teológicoreligiosas, sino que ya lograron transformarse en verdaderas contradicciones entre el intelecto y la psicología del promedio estadístico de las masas sociales mundiales. Un individuo protestante o de confesión catolica actualmente consideran cualquier forma de vida ascética como una forma de demencia o como mínimo una forma de exentricidad o frivolidad de los individuos que la practican. En realidad,la imensa mayoría de los fieles de todas las religiones se desenvuelven mental y activamente en sus polos y circunstancias sociales en función a los mismos estereotipos de actividades vitales modelos existenciales informativamente extendidos globalmente y ya concidentes con los esquemas intelectuales y psicológicos de las masas sociales contemporáneas . Las escuelas de la Psicología del S. XX, tanto freudianas como lacanianas exponen a la búsqueda de placer del Hombre como una de las formas filogenéticas de su propio ser. El intelecto, la consciencia de las masas sociales globalizadas reciben corrientes informativas en forma de pancartas, ideogramas visualizados y digitalizadas encaminadas hacia modelos temporales y transitivos correspondientemente extendidas hacia las formas del ser y la vida de cada individuo en particular y las masas sociales en general.
Intelecto, Tiempo y Existencia humana son dos conceptos y una categoría filosófica independientes entre sí, los conocimientos científicos ya acumulados y la psicología individual y social son dos planos particulares de la mente humana. Las llaves precisas de algunas obras filosóficas no pueden develar por completo y definitoriamente la obra de M. Heidegger "El Ser y el Tiempo". Los especialistas que se dedican a desmenuzar y discernir la obra de I. Kant, "Crítica de la Razón pura" hasta el momento muchos coinciden que es una obra indescifrable. Los logros intelectuales varían con el progreso del Tiempo y regular y consecuentemente varían los valores y el sentido existencial del ser humano. Desde finales del obscurantismo medieval hasta la interactiva conexión internética global transcurrieron seis centurias y el Hombre reacomodó sus esquemas psicológicos hacia el intelecto colectivo. Consecuentemente, sus valores existenciales se descolgaron de sus métodos mentales hacia sí mismo desde todas las circunstancias de su entorno social y viseversa, su entorno social ya puede formar los esquemas mentales y psicológicos en el intelecto de los individuos, fenómeno desconocido original y niveladamente para todas las civilizaciones humanas pretéritas.
Las masas sociales de principios del S. XXI en su inmensa mayoría ya se autoconvencieron de su poder y solvencia intelectual y empírica y sus marcos colectivos psicológicos ya son previamente explanados y dimensionados informativamente. Sophos y Psyche en nuestros tiempos modernos fueron transformados simbólicamente en un tornillo sin fin de Arquímedes, el cono de base del tornillo espoleado representa a los conocimientos colectivos y el punto extremo del cono se ajusta a la psicología de las masas sociales. Los esquemas del inconsciente humano son ilógicos, sin precisiones cronológicas temporales y los conocimientos humanos descubiertos y sistemáticamente aplicados ya no solamente sirven para crear y producir bienes y servicios para la Humanidad. Los conocimientos científicos desarrollados y aplicados masiva y globalmente ya sirven para perfilar y programar los esquemas psicológicos de las masas sociales interactiva e informativa, pragmática y utilitariamente conectadas y niveladas. El sentido y el valor existencial de cada individuo en particular ya se encuentra marcado y perfilado por sus propios esquemas psicológicos ya formados en su entorno y circunstancias sociales y culturales. Como regla general, cuanto más amplios y profundos son los conocimientos de un individuo, tanto más complejos y tortuosos pueden ser sus caminos en la búsqueda del significado de su propia existencia.
El pentagrama invertido descubierto a través de Google Maps en las estepas de Kazajistán de 366 metros de diámetro fue ya empleado históricamente por los mesopotámicos, los pitagorianos, los cristianos, los masones, los satanistas y los paganos. En la época mesopotámica fue un símbolo de poder imperial; en Egipto antiguo representó una matríz subterránea; en la Grecia Antigua fue una figura geométrica con cinco ases; para los cristianos representó los cinco estigmas de Cristo y en la época medieval sombolizó a la cabeza del Chivo, si bien para los fieles cristianos continúa siendo un punto cardinal hacia el reino de Satanás. La mente y la psicología humana en común acuerdo con los conocimientos develados funciona en algunos casos con la espontánea mistificación de los mismos. Inmediatamente, este pentagrama fue agregado en las páginas internéticas como una de las "diez conspiraciones mundiales". Hasta el momento no he leído si el diámetro del pentagrama coincide con las relaciones armónicas o los números de Pitágoras, tal relación se corresponde con 1,61803. Evidentemente que no tienen correspondencias matemáticas, por lo que podemos pensar que el pentagrama fue diseñado y construído con otros fines desconocidos. El pentagrama invertido descubierto o símbolo del Diablo como fue hace ya por los cristianos denominado, da lugar a las más absurdas y descabelladas hipotéticas suposiciones relacionadas con las previsiones apocalípticas bíblicas. La psicología humana funciona hiperbolizando los enigmas incluso en los marcos de las ciencias exactas. Al menos, los dos grandes diamantes rodeados por un par de círculos entrelazados hallados por medio de Google Maps en Nuevo México a principios del año 2013, pueden llegar a ser analizados matemática, lógicocognoscitiva y filosóficamente.
Entre un individuo que habita una zona semidesértica y practica una vida solitaria y otro individuo que habita en una jungla urbana, existen confrontaciones de sus autovaloraciones existenciales. El individuo solitario puede ser un académico o profesor diplomado y el individuo que habita en la gran ciudad puede no leer ni un periódico y sentarse diariamente delante de su televisor dos o tres horas para ver el mundo visualizado que no alcanza a comprender del todo. Los conocimientos y esquemas psicológicos de ambos individuos son dispares por completo. El individuo que practica la vida solitaria ni piensa ni desea regresar a las comodidades de la vida civilizada y el individuo que habita en una gran urbe puede llegar a pensar que el primero sufre de un estado demencial o místico incomprensible. El individuo ermitaño puede en el desierto recrear en su intelecto una parte detallada del mundo urbano o crear cuadros generales del mundo. El individuo sin calificaciones intelectuales, habitante de un distrito urbano opera mentalmente con lo que puede ver y oir y con la condición de lo que ve se le es mostrado en la calle o en su televisor o computadora. El profesor solitario sin conexión telefónica ni internética ni televisiva, si lo desea puede en su intelecto rememorar detalles, errores, defectos o vicios de su vida en la cómoda gran urbe que habitaba. El profesor puede a veces sufrir de llanto interno por conocer que ya no puede reconstruir las situaciones en el Tiempo para evitar los grandes errores cometidos en su vida familiar y laboral. Su intelecto y memoria le permiten revalorar los innumerables cuadros de su vida a través del tiempo. Por no tener una profunda fe religiosa no puede perdonar a varios individuos conque alguna vez mantuvo contactos laborales y sociales. Tales tipos de personalidades no frecuentemente pueden llegar a acumular odio ni envidia.
El acedémico se alejó de la vida civilizada ni por temor ni por odio a su entorno social, ni para rezarle a Dios solitariamente como los practicantes de ermita en el desierto de Egipto.Su propio intelecto le indicó vivir ensimismadamente en un hábitat natural y agreste sin espejeos sociales e informativos. En sentido paralelo, cuando un monje cristiano sale de su celda para dirigirse a la iglesia parte con unos cuadros psicológicos diferentes a sus cuadros mentales cuando regresa nuevamente. Si después de la misa dialogó con algunos visitantes de su monasterio, su intelecto y cuadros psicológicos ya variaron de su ensimismamiento espiritual de silencio y oración en el que se encontraba antes de salir de su celda. Lo mismo ocurre en la mente del académico en su estepa semidesértica y por el contrario con el gris y semiignorante habitante en la gran jungla urbana. El hombre de la urbe diariamente necesita de una dosis de noticias espectaculares y de poder repetirlas en el bar de la esquina de su casa o en el club zonal. Lo que habitualmente repite son los títulos y los factos de los hechos que vió o escuchó sin poder llegar a comprender las causalidades de la mayoría de los fenómenos culturales y sociales. Las diferencias radican en las valoraciones psicológicas de cada uno de los individuos hacia las circunstancias que lo rodean y la autovaloración existencial de su mente hacia el mundo real y virtual que en mayor o menor medida, voluntaria o involuntariamente, lo rodean y modelan su mente. El espejo de tales valoraciones funcionan con extremadamente diferentes dioptrías derivadas del nivel de intrucción de cada individuo y de la profundidad de autoanálisis de sus experiencias de vida.
El habitante de la jungla urbana puede ser un muy buen padre de familia y miembro de la sociedad y como regla el ángulo de sus espejos sociales pueden ser sus familiares y los individuos de su entorno social y laboral. El académico en la estepa no busca ni piensa en placeres corporales.El ignorante urbano busca habitualmente placeres fisiológicos ,una ducha caliente, , el sabor de su simple pero muy grasa comida y el contacto de sus desgastadas relaciones matrimoniales con el cuerpo de su esposa fantaseando con otras anatomías corporales y géneros humanos. El valor y el sentido vital y existencial del ignorante urbano se ajusta al perímetro de recibir el más intenso y prolongado placer quasifisiológico. Para los folósofos existencialistas franceses del S. XX,recibir placer en cualquiera de sus variantes son formas de la existencia del Ser. Comer caviar y beber champaña, o comer hamburguesas son formas de existencia y al mismo tiempo, defecar es una de las variantes existenciales francesas. Al existencialismo francés de finales del S. XX podemos equipararlo con los miles de ancianos fallecidos en sus departamentos parisinos por las altas temperaturas a mediados de los años 2000. El existencialismo francés se midió en percatar a los fallecidos por sus olores cadavéricos.
La ridiculéz del existencialismo francés tiene sus fuentes históricas, cuando en la Academia francesa se reían de J. L. Pasteur a la par de los microbios por él descubiertos. En el año 2013 los científicos franceses descubrieron que el uso de computadoras desarrolla la imaginación de los usuarios…En Moscú los embotellamientos automovislísticos de lunes a viernes retrasan los viajes entre dos a cuatro horas promedio. Una empresa automovilística francesa se ingenuó publicitar la estupidez vital de los moscovitas atrapados en los cuellos de botellas al publicitar que en los automóviles de tal marca el tiempo en que los individuos permanecen dentro de los mismos sólo le pertenece a los dueños de tales atomóviles. Publicidad para ingenuos en la ciudad con los mayores embotellamientos automovilísticos del mundo. Aquí primitivamente funcionan las tres categorías que en este estudio reciben tratamiento, intelecto, tiempo y significado existencial. El académico solitario se desconectó de los medios publicitarios masivos, de los estereotipos virtuales y reales de la vida moderna, de los algoritmos y fórmulas vitales y existenciales ahora globalmente difundidas. El gris habitante de la gran urbe debe recibir diariamente una dósis informativa y publicitaria o de alguna novedad escandalosa para poder reacomodar su mente en su monótona vida. Su mente debe ser inyectada de noticias atípicas e inusuales para su entrenamiento mental, analítico y emocional. El significado existencial de la mediana de las masas mundiales se conjuga entre los trajines laborales repetitivos y tareas absurdas, la vida con su entorno familiar y social y todo lo relacionado con las recetas, consejos y pancartas modélicas que reciben desde los medios de comunicación masivos.
El tecnoexistencialismo y autodevaluación intelectual
A) Desde finales del S. XX, las masas sociales completaron un nuevo e inusual segmento innovativo del ya geométricamente acelerado progreso técnico en la completa espiral histórica de la humanidad. El vocablo "tecnoexistencialismo" fue acuñado y detalladamente conceptualizado por quien escribe este estudio en su obra "Los algoritmos del tecnoexistencialismo" (2007) y "El tecnoexistencialismo" (2010). Desde los remotos orígenes de la filosofia, las nociones y sus coincidentes categorías filosóficas de técnica y existencia humana fueron conceptualmente incompatibles una con el otra. Los adelantos técnico-instrumentales, de las comunicaciones, la cibernética, la informática computarística e Internet permiten ya conciliar en el intelecto humano, modelos, esquemas, hábitos rutinarios y procedimientos socialmente conciliados y masificados. Estos ya ocupan espacios de pensamiento operativos e instrumentales en forma de innumerables instrumentos técnicos, escenarios,pancartas y recetas, los cuales ya alcanzaron ser evaluados en calidad de objetos complementarios empleados y aplicados para el maquillaje de la vida y la existencia ya de miles de millones de individuos. Vivimos en un mundo iluminado por proyectores lumínicos y en las zonas iluminadas se encuentran las masas sociales globales. Quienes orientan los proyectores pueden recibir información inversa de las actividades y hábitos de los conglomerados sociales ubicados en las zonas iluminadas. Las masas sociales pueden verse entre sí mismas pero la visión total de las superficies y de los diferentes conglomerados sociales iluminados pueden desde sus perspectivas solamente ser analizadas por los que orientan y enfocan las fuentes de luz. De tal simple ejemplo, en el mundo informativo, cultural y económicamente globalizado en el que coexistimos mental y utilitariamente, permite que los individuos necesariamente sean copartícipes voluntarios de la modelación preprogramada de sus esquemas de pensamiento, hábitos y estilos de vida.
En el momento que escribo este estudio (2013),en la revista Science fue publicado un artículo científico de autores del Reino Unido, Canadá y EEUU, que establece las relaciones entre la pobreza y los recursos mentales de los individuos. Fue mostrado que la pobreza reduce los recursos cognitivos orientados a guiar acciones y decisiones, por lo que existe una correlación directa entre la pobreza y los recursos mentales. Si el veinte porciento de la población mundial vive en extrema pobreza, ya podemos considerar que por la merma de las capacidades mentales esta fracción de la población mundial puede ser premodelada mental y psicológicamente por medio de recursos informativos y propagandísticos. La autodevaluación intelectual de esta fracción estadística de la población mundial no puede recibir tratamiento, por la simple razón que los pobres y marginados no tienen estímulos para prestar atención y orientarse hacia los modelos visualizados por los canales masivos telecomunicativos globales. La autodevaluación intelectual de las masas sociales que aquí analizamos, rige para las todos los grupos que tienen un sustento mínimo y cumplen algún rol social. G.F.Hegel y posteriomente C. Marx escribieron que para estudiar filosofía es necesario como mínimo tener condiciones materiales aseguradas y el tiempo libre suficiente para leer. Sabemos que Galeno tuvo cuarenta escribas transcriptores que grabaron en forma escrita todas sus investigaciones. Desde los tiempos de la filosofía antigua griega los ilustrados fueron los únicos que tuvieron oportunidad de educarse y libertad para poder pensar.
Las cronologías vitales y existenciales de los conglomerados sociales prebíblicos se midieron por las consecuciones diurnas y nocturnas y por las temporadas climáticas de cada año. En la época medieval las cronologías vitales comenzaron a medirse por el sonido de las campanas de las iglesias y posteriormente por las horas medidas por los rudimentarios relojes mecánicos en las torres de los campanarios de las catedrales y basílicas. Desde principios del S. XXI las masas comunicadas interactivamente por las redes globales internéticas pueden acceder a las bases de datos del intelecto cibercomputarístico nucleado y acumulado por un reducido número de epicentros de datos mundiales. Para un contigente de usuarios Internet es una herramienta de trabajo, y para el mayoritario resto de los cientos de millones de usuarios tal recurso ya se transformó en una innovativa forma de "opio del plueblo". Se formó un hormiguero informativo que sin dudas permite acceder a bloques informativos simplificados para las masas sociales globales comprensibles incluso para los grupos de individuos analfabetos. A principios del S. XX las estrechas élites de profesionales científicos, desde silenciosos laboratorios y oficinas universitarias publicaban en revistas científicas los resultados de sus investigaciones. En los tiempos coetáneos, cualquier ignorante o enfermo mental puede publicar lo que se le ocurra tener en su mente. No encuentro ejemplos precisos para tal fenómeno sociocultural, aunque podemos recordar que los conductores de tranvías berlineses frecuentemente lo criticaban sarcásticamente a A. Einstein porque no sabía contar monedas.
La "Rebelión de la masas" de Ortega y Gasset se transformó casi un siglo después, en una verdadera subordinación mental de las masas sociales global e interactivamente conectadas por Internet. Después de la Revolución francesa los marginados sociales junto con los intelectuales dirigentes revolucionarios forjaron el terror en la sociedad. La Revolución bolchevique en Rusia hizo desaparecer a generaciones de profesionales instruidos y las masas dueñas del poder crearon la plataforma política al máximo dictador del S. XX, I. Stalin. Actualmente,vomo afirma el escritor Qiu Xiaolong, "en China sin Confucio y sin Mao no quedó nada más que el dinero". En nuestros tiempos las masas sociales conectadas a las redes sociales internéticas ya generan incoherentes embrollos informativos neutros e inválidos que solamente generan ruidos y sombras en el intelecto racional, analítico y emocional del pensamiento colectivo. Esta libre posibilidad de expresar ecos y opiniones espejeadas ya pueden llegar formalmente a encajar con todas las concepciones utópicas. Toda información, todas las noticias tienen un valor antes de ser conocidas y otro valor después de ser conocidas. Los comentarios de las masas usuarios internéticos desvalorizan y tergiversan las noticias después de ser conocidas. Paralelamente recuerdo una cita por mi publicada, cada individuo analiza y puede valorar las realidades que lo circundan de acuerdo a su propio centímetro cultural. Es evidente que cada individuo puede medir intelectual y culturalmente en forma particular cualquier acontecimiento difundido en forma de bloques informativos. El valor de la Información fundado en la confrontacion verdad-mentira y la utilidad e inutilidad de determinada información, en los niveles del intelecto analítico de las masas de usuarios internéticos pierden su original sentido y ya logra transformarse en un absurdo. La revolución internética permite ya en sentido paralelo recrear inversamente las demenciales ideas de los personajes de la novela de Roberto Arlt "Los siete locos"(1931).
La autodevaluación intelectual de las masas sociales conectadas a los megavolúmenes informativos televisivos e internéticos pueden ser modélicamente ejemplificados como el funcionamiento de la caja negra ya apuntada en este estudio. Por una abertura de entrada de una caja negra entran todos los colores del espectro de la frecuencia de la luz (7), o los mismos del arco iris y por la abertura de salida se observa una tenue luz blanca. Este fenómeno físico podemos correlacionarlo con los procesos intelectuales de las masas sociales. Los televidentes y los usuarios de Internet reciben corrientes informativas con altas frecuencias de renovación diaria. De estos volúmenes informativos, visuales, textuales y auditivos, en el intelecto de los receptores prácticamente no quedan restos de información útil (la tenue luz blanca filtrada). Este fenómeno lo conocemos todos. Al finalizar la proyección de una obra cinematográfica los espectadores pueden comentar lo que vieron con un par de frases cortas. La mente de los millones de individuos interconectados informativamente borra de su memoria al promedio de la generalidad de todos los módulos de información por las vías racionales y analíticas. En la mente de los receptores son retenidas solamente las imágenes y noticias advertidas por el intelecto emocional de cada individuo en particular. En la época medieval los fieles católicos europeos pudieron memorizar en el idioma latín una o dos simples oraciones. Los vocablos del texto de la misa completa fueron incomprensibles para la mayoría de los fieles por desconocimiento del idioma docto. Esta particularidad de la mente humana, borrar de la esfera de la consciencia la información diariamente renovable que recibe cada individuo en particular es una de las claves de la autodevaluación intelectual de las masas sociales en los tiempos coetáneos.
Cada individuo conectado a Internet tiene derecho de escribir deliberadamente en Wikipedia sobre algún tema que estudió, leyó ó simplemente para satisfacer su ego. Si a principios del S.XX algunos intelectuales se quejaron de que los profesionales debieron transformarse en especialistas, a principios del S. XXI el vox populi de las muchedumbres internéticas son las que escriben deliberadamente las página multitemáticas de Wikipedia. Tal posibilidad la relaciono con la letra de un tango argentino que dice que ""es lo mismo una Biblia que un calefón". Démosle derecho de expresión y opinión a las masas y los resultados serán que la teoría matemática del cáos pronto podremos utilizarla en nuestros ordenadores. Los neófitos y los egocéntricos tienen tribuna de expresión interactiva y mundial. El nuevo opio cibernético del pueblo ahora reemplaza a los libros con resúmenes para adolescentes. Las disiciplinas científicas en nuestros días comenzaron a transformarse en apuntes quasicientíficos difundidos globalmente. Alguien puede cuestionarme que antes no existió tal libre acceso a la información y es cierto, pero es donde comienza el defecto de la era de las comunicaciones interactivas globales. Ninguna clase de información se encuentra clasificada y sistematizada. Si armamos un rompecabezas sin una figura visual de unión sistemática previamente impresa que una todas las piezas, quien intente armarlo deberá encontrar las coicidencias de cada una de las piezas que lo conforman, tarea que multiplica el absurdo trabajo hacia ningún objetivo formal preimpreso. Exactamente es lo que intelectualmente analizan las multitudes conectadas a los buscadores internéticos cuando encuentran millones de registros sobre cualquier tema.
Para poder llegar a abordar el tema de la autodevaluación existencial de las masas sociales debemos desmenuzar la progresiva autodevaluación intelectual, puente metódico y sistemático que permite formalmente perfilar e incluir esquemas premodelados en las íntimas cuerdas del significado y valor de la existencia individual y colectiva. Las altas frecuencias de reposicion de los bloques informativos televisivos e internéticos es el primer escalón hacia el borroneo de casuales visiones y vocablos por el intelecto racional y analítico humano. Actualmente ya no existen los gramófonos y tocadiscos donde los fonogramas grabados en discos podían ser escuchados en tres velocidades 33, 45 y 78 revoluciones por minuto. Si escuchamos un disco grabado a 33 revoluciones por minuto a la velocidad de 78 revoluciones o viseversa, de 78 en 33, escucharemos armonías cacofónicas. Los tactos musicales acelerados o retardados no podrán coincidir con nuestro análisis mental o armónico de las notas y palabras que fueron registradas en el disco. Este simple ejemplo podemos derivarlo hacia el empobrecimiento del análisis intelectual de las masas sociales contemporáneas causado por las contínuas renovaciones de los bloques y segmentos informativos auditivos y textuales. Las frecuencias de renovación visuales, las más importantes en la actualidad, podemos eequipararlas con la visión de un pasajero de un tren de alta velocidad en movimiento. Cuando el tren alcanza trecientos quilómetros de velocidad, el pasajero ya no puede distinguir detalladamente ni memorizar los objetos y las circunstancias en los espacios laterales del tren a lo largo de la vía. En sentido analógico, la falta de concentración analítica de las masas de espectadores televisivos y usuarios de Internet ya no prestan atención a los inmensos volúmenes de información visual, textual y auditiva que permanentemente se suceden y renuevan por minutos, horas y días. A un filósofo materialista de la antigua Grecia sentado al borde de un río le preguntaron porqué lloraba. El filósofo respondió que lloraba por la razón de no poder ver las mismas aguas del río.
B) A principios del S XXI los nuevos generadores de innovaciones coinciden que en el siglo pasado tuvieron valor las palabras, las oraciones y las ideas contenidas en las mismas. En el siglo en el que vivimos actualmente las palabras fueron reemplazadas por cifras. Las simplificaciones lingüísticas y textuales son reales y sin dudas la informática computarística nos encamina hacia el empobrecimiento intelectual de las masas sociales globales. Las simplificaciones verbales no comenzaron en nuestros tiempos. Los fieles critianos ya no pueden comprender la semántica ni la sintaxis de las primeras traducciones bíblicas del S. XVI del latín a los idiomas vulgares europeos. Las simplificaciones fueron varias en los últimos cuatro siglos y ya alcanzaron a ser recortadas con la Biblia latinoamericana en el idioma español . Las totales abreviaciones y recortes lingüísticos por su inutilidad práctica por loque las expresiones verbales ya son reemplazadas por imágenes gráficas tridimensionales sin textos. La Infográfíca es el nuevo idioma internético sin verbos y giros de vocablos y el cual es un verdadero recorte intelectual de la mente de las masas sociales coexistentes y futuras. Tales simplificaciones son un camino hacia la estupidización de las 9/10 partes de todas las clases y grupos ubicados por debajo del vértice de la pirámide social global. La informática y las redes sociales internéticas nos encaminan hacia la ignorancia y el analfabetismo colectivo y como detallaremos hacia la formación de todo un contingente de profanos sujetos iletrados que operan con modelos y esquemas visuales preprogramados. El uso de teclados ya invalidó la calidad caligráfica de las masas sociales, si bien la coordinación de los movimientos de las manos es un proceso esencial de autoconocimiento. Los subidiomas simplificados del chateo telefónico e internético ya barren los conocimientos ortográficos básicos y los giros gramaticales lingüísticos de los adolescentes en todo el mundo. El reemplazo de las estructuras de los textos verbales por gráficos visuales de exposiciones de ofertas numéricas, estadísticas y probabilísticas, es una innovativa espira regresiva hacia la devaluación intelectual de la mediana estadística de la población mundial informativamente intercomunicada.
Podemos analizar ejemplarmente la devalución intelectual de las masas contemporáneas a partir de una simple definición de I. Kant el cual escribió "que no es lo mismo tener 100 táleros (monedas) imaginarias en la mente que 100 táleros reales". En el mismo estudio especuló que a los táleros se los podía reducir la cantidad de veces necesarias, o sea, reducir la cantidad, el peso, de plata de los mismos, pero siempre serán táleros. El gran filósofo se olvidó del porqué continuaban siendo táleros, y lo ideal, lo imaginario, la especialidad del autor, no fue mencionada. Precisamente los signos y símbolos fundidos en el metal de las monedas es lo que permite la idealización o abstracción de lo que se concebia como tales unidades monetarias. Este histórico lapsus mentis de I.Kant podemos proyectarlo a las realidades virtuales con las cuales nos interconectamos. Cien táleros reales metálicos y cien monedas abstraídas imaginariamente por mi mente. Los contenidos internéticos son idealizaciones descodificadas visuales de una infinidad de tangentes realidades objetivas. Los cien táleros imaginarios podemos percibirlos y analizarlos mentalmente. Yo imagino un millón de dólares depositados en mi cuenta bancaria y puedo extraerlos con mi tarjeta de crédito o débito electromagnética. Si me conecto a Internet puedo acceder a los táleros imaginarios y no salir de tales marcos de idealización. Los objetos imaginarios pueden corresponderse con los objetos reales, pero nuestra imaginación siempre desborda a nuestra razón. Supongamos que un obrero o gris empleado navega por Internet o mira televisión por cable varias horas diarias. Las páginas de sexo son las más visitadas mundialmente. Es normal que cualquier persona pueda desear o imaginar lo que en realidad no tiene y no puede acceder a tenerlo. Lo imaginable puede transformarse en la mente de cualquier individuo en fetichismos imaginarios y pensar en dos dimensiones, una de acuerdo a la gris realidad en la que vive y la otra las realidades visuales que le muestran e imagina.
Pitágoras (570-495 a. C.) no fue un visionario del mundo de las cifras en el que nos dimensionamos. Para Pitágoras el mundo estaba configurado por un orden numérico. Para Pitágoras los números son cosas en sí. Los ciframientos numéricos coetáneos ya lograron transformarse en cosas en sí con relación a las estadísticas inversas de las masas. Los números de oro o relaciones armónicas pitagóricas, desde los intervalos musicales o las relaciones aritméticas de la escala musical, los números de Fibonachi, la relación matemática de la distancia de los planetas de nuestro sistema solar de Kepler, las relaciones de proporciones de L. daVinci, las relaciones de los tactos musicales de Bach y Mozart derivan de los números de oro pitagóricos. La información visual digitalizada nos aleja de las relaciones armónicas o de los números de oro pitagóricos, al margen de lo que porta tal información, verdad-mentira, útil-inútil, real o ficticia. Los vocablos, el verbo, desde los orígenes de las primeras civilizaciones forjaron el intelecto racional y analítico de la humanidad. El análisis masivo de infografías e imágenes fotográficas sin textos explicativos genera ahuecamientos intelectuales que nos regresan hacia la infancia de la raza humana. Los algoritmos de los programas computarísticos fueron codificados y las masas de usuarios de computadoras reciben información visual, textual y auditiva descodificada. La vista humana tiene una resolucion visual de 576 megapixeles y las fotografías y fotogramas de alta resolución alcanzan actualmente 20 megapixeles. Las asimetrías de las armonías pitagóricas se originan entre las desigualdades de los volúmenes difundidos de información visual y los insignificantes volúmenes de información verbal y lógicocognoscitiva. Las consecución infinita de imágenes visuales como vínculos ideoperceptivos del intelecto humano pueden llegar a transformarse en resultados de cálculos matemáticos preprogramados que puntualizarán cronográficamente la vida de las masas sociales comunicativamente interconectadas.
La Biblia para analfabetos, las representaciones iconográficas religiosas del cristianismo, fueron durante toda la época medieval (S.s X-XV), las únicas fuentes ideoperceptivas y lógico-cognoscitivas de veneración de casi todos los conglomerados sociales europeos. La comunicaciones globales y sus contenidos visuales ya nos regresan gnosológica y teleológicamente en el tiempo y nos encaminan hacia un nuevo segmento de la espiral dialéctica de devaluación del pensamiento racional y analítico de las masas sociales, comunicativa e interactivamente aunadas. Miles de millones de individuos alfabetos, social y laboralmente vinculados, comienzan a borrar de su intelecto los cuestionamientos sobre el lugar, valor y destino que ocupan sus vidas en la sociedad y en el mundo. Las masas estudian y trabajan y los individuos en particular se transforman en pequeños tornillos de la sociedad. Los borroneos mentales son paralelos gnoseológicamente a las pancartas y escenarios visuales difundidos sin explicaciones lógicocognoscitivas y analíticas. Las figuras rupestres de los cavernícolas fueron la primera forma de expresión creativa de la raza humana y tales íntimas cualidades filogenéticas imaginativas se mantienen y renuevan en nuestros tiempos hacia una neutralidad mental y psicológica por medio de bocetos y mudas expresiones visuales digitalizadas y premodeladas. El mítico Sísifo subía rocas hacia el pico de una montaña y las arrojaba hacia el abismo una y otra vez. Sísifo tuvo un programa en su mente con algoritmos muy simples, esforzarse en subir las rocas y luego disfrutar visual y espiritualmente el arrolador vuelo de las mismas hacia abajo. Las grises masas, sin leyendas, realizan menos claros y precisos automatismos operacionales que Sísifo en su mito. El propio héroe mitológico organizaba su demente éxtasis a partir de sus propios esquemas mentales y con su propio esfuerzo físico. Las masas sociales contemporáneas operan activamente con automóviles, aparatos, instrumentos técnicos, computadoras y programas ideados y fabricados por otros individuos. Los sociólogos utilizan el neolismo de "cajanegrizar", para explicar que las masas de usuarios ignoran por completo el funcionamiento interno de los aparatos e instrumentos altamente tenológicos que diariamente usan.
Existe una lógica interna y externa entre el Intelecto, el Tiempo y la devaluación intelectual de las masas sociales de principios del S. XXI. En el siglo XVII en la Universidad de Harvard fueron reformados los programas universitarios al eliminar todas las disciplinas científicas "medievales", o del catolicismo, todavía dictadas en las universidades europeas. El nuevo programa creado por los protestantes, hugonotes y baptistas se basaba sobre discilinas "tecnológicas", matemáticas y ciencias naturales aplicadas, simplificando todas las inútiles disciplinas humanitarias europeas. En el S. XX Norbert Wiener (1894-1964), creó y fundamentó la Cibernética, núcleo teórico básico de la creación de las computadoras. En su libro "Cibernética y sociedad",(1950) anticipó matemática y lógicamente el mundo de las comunicaciones automatizadas e interactivas en el que actualmente nos dimensionamos. El conocimiento para Wiener se encuentra coligado e infaliblemente relacionado con la comunicación, y el poder con el control y la evaluación de los propósitos humanos. Directamente los servicios analíticos estadístico-probabilísticos de las actuales redes sociales internéticas!!!. A principios del S. XXI, el principio de "la negación de la negación" en la espiral de la historia humana de G. F. Hegel funciona con una similar precisión que la de un rayo laser. Las reformas de los programas universitarios en Harvard en el S. XVII, actualmente se retroproyectan hacia la realidad al reducirse drásticamente el interés de los estudiantes estadounidenses por estudiar ciencias humanitarias y en especial literatura, historia, filosofía y religión.
La devaluación intelectual de las masas sociales coetáneas tiene sus fundamentaciones científicas históricas. G. W. Leibniz (1646-1716) en su obra "El arte de las combinaciones" (1666), catalogó a las combinaciones matemáticas como un "gran arte" sobre las cuales los descubrimientos se basan en las "primeras verdades" y los que permiten con los métodos de la lógica inferir y deducir a todo el sistema de conocimientos denominados por el autor como principios de la Ciencia Universal. Leibniz, quien descubriera el sistema binario de unos y ceros utilizados en los programas computarísticos actuales, fue el primero en suponer sobre la posibilidad de la modelación de las funciones del cerebro humano por medio de máquinas utilizando "modelos matemáticos". En el S. XX, J. von Neumann (1903-1957), fundador de los programas computarísticos en base al sistema binario de Leibniz, escribió que las altas matemáticas tendrán enormes repercuciones sobre el pensamiento moderno. Neumann creó las relaciones entre la cibernética y los ordenadores, compilando los principios de la programación en base a su teoría de los juegos y poder demostrar la capacidad que tienen las máquinas de reproducirse. Las ideas de Leibniz y von Neumann ya se objetivizaron en los sistemas computarísticos y las deducciones de todos los sistemas de conocimientos ya se sintetizaron pragmáticamente en el análisis de los comportamientos de las masas sociales usuarias de las redes sociales internéticas.
Una de las más serias limitaciones causadas por la recepción de las actuales constelaciones informativas audiovisuales, es que en sí mismas portan esquemas simplificatorios lógico-cognoscitivos que al ser idealizados se traducen en un erróneo entendimiento analítico entre las formas y los contenidos de los bloques difundidos. Gran parte de los objetos y sujetos difundidos sobre supuestos o imaginarios contextos no pueden llegar a coincidir con la más básicas conclusiones lógico-matemáticas, factor que acelera el debilitamiento intelectual de las masas de receptores de información. Si mancomunamos las relaciones lógicas entre las formas y los contenidos de las constelaciones visuales televisivas, internéticas y artísticas a través de las esencias matemáticas descubieras por K. Gödel (1906-1978), podemos hallar desfasajes entre la idealización y el análisis de aquellas formas y contenidos. Una de las esencias matemáticas descubiertas por Gödel es la demostración de que los números portan simultáneamente contenidos lógicos y objeto-materiales. Por ejemplo la consecución de los números naturales: 1, 2, 3, 4,….n puede ser resuelta lógicamente pero su tranferencia hacia una infinidad perfecta requiere del traspaso del nivel de pensamiento lógico hacia los objetos reales o materiales (una mesa, dos mesas etc.). La unión de dos infinitudes potenciales y actuales se revela en los cálculos de números irracionales y al emparejarlos con las consecuciones de los números racionales. Los espectadores de las corrientes informativas y en especial los niños, no siempre pueden llegar a diferenciar si los personajes y objetos visuales programados computarísticamente son auténticamente reales o imaginarios. Internet es una hidra con muchas cabezas y las probabilidades para confundir lo real con lo inexistente ya es un paso grave del desfasaje lógico más básico de la mente de las masas sociales globales.
Actualmente Google, Yahoo, Facebook, Twitter y Apple utilizan el sistema de análisis de información inversa de los usuarios recibida a través de las cookies, o el ya reconocido guarismo estadístico-probabilístico "Bigdata". Este programa funciona por intermedio del análisis de los patrones comunicativos de los modelos de imitación y por medio de algoritmos permite modelar por las preferencias en Internet los comportamientos y los deseos de cada usuario en particular y agrupar a los diferentes grupos de usuarios en general. Por cifras y transformaciones algorítmicas se puede develar con alta probabilidad el nivel intelectual, los rasgos psicológicos individuales y las acciones actuales y futuras de un usuario en particular conectado a la red internética. Cada usuario puede ser estudiado estadística y probablísticamente por sus preferencias en los buscadores y redes sociales internéticas. Todos las actividades sociales de un usuario puede ser vista en Bakers Social Visits que interactúa con Google Analytics. Todos los movimientos espacio-tiempo de un individuo portador de su ordenador o teléfono celular pueden ser vistos por el servicio de geolocación de Map Box y los datos de Twitter. Los modelos de Leibniz ya no son simples inferencias y deducciones abstractas, son ya los cuadrantes intelectuales y psicolgógicos de entrada y salida de información cifrada antes y después de ser recibida por las masas sociales global e interactivamente conectadas. La fórmula de la informacion emitida y recibida, las redes sociales las transforman en niveles entrópicos del intelecto social global. Los cálculos probabilísticos de salida o de información inversa recogidos por las redes sociales internéticas pueden ser una fuente de los sistemas de conocimientos informáticos de premodelación racional, analítica y emocional de cientos de millones de individuos. El homo viator ya se transforma en el homo interneticus, el hombre en las búsquedas virtuales premodeladas de sus copiados modelos intelectuales, vitales y existenciales. En la obra de S. Brandt "La nave de los locos" (1494), según la opinión de M. Foucault, las naves de los locos eran navíos simbólicos que conducían a dementes en busca de razón. Ahora millones de individuos navegan en Internet en función a esquemas y modelos y plantillas visuales connotadas que previamente recibieron informativamente.
El valor de la información en general, se mide por su guarismo antes de ser recibida y después de ser recibida y por la simple resta de dos logaritmos cuadrados. Esta fórmula tiene su valor vigente en nuestros tiempos, pero debemos señalar ciertas características innovativas de la publicidad y sus efectos y resultados en nuestra era internética, la cual ya refleja la autodevaluación intelectual de las masas sociales, comunicativa e informativamente interconectadas. El intelecto colectivo ahora puede ser modelado sin encuestas estadísticas y probabilísticas realizadas por sociólogos. Desde principios del siglo XXI ya no se les pregunta a las masas de consumidores qué ellos desean y porqué ellos realizan lo que realizan. Las encuestas ya no tienen ningún sentido realizarlas. Los especialistas en publicidad ya lanzan campañas publicitarias conceptualmente diferentes que las de a finales del siglo veinte. Los algoritmos visuales, verbales y las urdimbres escénicas ya son orientadas por sus formas y contenidos de idealización hacia la esfera subconsciente de los espectadores y potenciales consumidores. Encaminar las campañas publicitarias hacia los actos irracionales de las masas de consumidores de mercancías y servicios, ya evidencia la clara endeblez racional y analítica del intelecto de las masas sociales coetáneas. La autodevaluación intelectual colectiva ya monigotea mentalmente a las masas potenciales y reales de consumidores a nivel mundial.
La esfera subconsciente humana no opera con patrones cronológicos temporales ni con medidas de unidades espaciales. El tiempo y el espacio cuando un individuo duerme no tienen ninguna configuración precisa con las métricas del intelecto racional, analítico y emocional de la esfera consciente de cada individuo. Ligar las precisas necesidades causales del intelecto humano con los bocetos irracionales e ilógicos del subconsciente individual y colectivo, sólo fue posible por la simultaneidad e interactividad de las comunicaciones globales. Los puentes que pueden unir los ocultos deseos irracionales con el intelecto racional de diferentes categorías de potenciales consumidores de mercancías y servicios son ya aplicados en las campañas de publicidad. Las claves de tales herramientas psicológicas son descentrar los conocimientos (intelecto racional y analítico) hacia los deseos y representaciones mentales derivadas de la esfera subconsciente de cada individuo. En los bloque publicitarios actuales se satisface la razón crítica; se crean sensaciones de confort; se cambian por completo las plantillas de las formas culturales vulgares o tradicionales; se descentran las asociaciones cognoscitivas y se modifican visualmente las sensaciones. Los principios de la publicidad actuales nos demuestran las claves dela progresiva e irreversible devaluación intelectual de las masas sociales contemporáneas. Todos los principios enumerados se relacionan con mecanismos conexionistas y el modularismo de la mente humana. El procesamiento de la información liga imágenes visuales simbólicas en calidad de activación racional y la utilización de un lenguaje y conceptos próximos a los que utiliza el intelecto humano en el procesamiento de información. El intelecto promedio de las masas sociales coligados por plantillas publicitarias premodeladas ya podemos analizarlo por medio de las teorías naíf de la mente humana de Fodor.
Las companías publicitarias encontraron una nueva fórmula que efectiviza las campañas propagandísticas sin el uso de urdimbres técnicas, me refiero al uso ya prohibido de ultrasonidos, o el efecto del cuadro 25. Los principios métodicos arriba enunciados, ya aplicados en la difusión publicitaria mundial, se basan en la síntesis de los conocimientos con los deseos de cada individuo y la mediana estadística de las masas de receptores de los mensajes publicitarios. Si estas reglas ya funcionan en la práctica, ya superaron y son inversas a la teoría del lenguaje del pensamiento humano de J. Fodor (1935). Fodor explicó el paradigma del procesamiento mental de la información. En su estudio "La modularidad de la Mente" (1983), dividió a la mente humana en dos esferas de procesamiento de la información; los sistemas de "entrada" o analizadores, y los sistemas "centrales". Los sistemas de entrada son modulares por ser bloques en forma de cápsulas inabordables e inaccesibles al sistema central el que hipotéticamente es un sistema de "fijación de creencias". Fodor postula que lo único que es posible demostrar empíricamente son los sistemas de entrada, por ser modulares. El sistema central de la mente humana empíricamente no puede ser mostrado. De este postulado se confrontan dos esferas sin conexión evidente, los conocimientos y los deseos de cada individuo y los estados mentales intencionales (actitudes proposicionales y representaciones mentales).
Si calibramos diferencialmente las claves empleadas en las campañas publicitarias actuales, descubrimos que los actos irracionales de las masas de consumidores de mercancías y servicios reales y potenciales son estimuladas publicitariamente hacia el sistema central de Fodor (intencionalidad, representaciones mentales), y del mismo deriva analógica, asociativa e irracionalmente hacia el sistema modular de entrada de información. Lo que sorprende, es que tal inversión del tránsito de la información entre las dos esferas mentales, coincide con los postulados de la Teoría económica de la segunda mitad del S. XX. "La mayor parte de los actos económicos son irracionales", y si no lo fueran, cada individuo calcularía o mediría detalladamente todos sus gastos de compras y por tanto no sería posible el crecimiento de los multiplicadores económicos. Es más que evidente la deducción de la devaluación del intelecto de las masas sociales por efecto de las comunicaciones sistematizadas e interactivas globales. Los ilógicos símbolos de la esfera subconciente humana se retroproyectan asociativamente en la esfera consciente racional, analítica y emocional en la mente de cada individuo en cuadrantes intencionales con las plantillas y contextos de las tramas escénicas publicitarias percibidas visual y auditivamente. Las espontaneidades irracionales compaginadas por pancartas analógicas a los ocultos deseos de la esfera subconsciente se reactivan en la irracionalidad de los actos de homo oeconomicus. Las masas sociales mundiales, evidentemente ya comenzaron a perder las abscisas y ordenadas analíticas de su intelecto al realizar actos derivados de huecos modelos visuales sin precisos puntos cardinales de razonamiento. Las redes sociales internéticas ya emplean métodos de formaciones de rebaños de los grupos sociales, denominado clúster o cúmulos, la acumulación de datos portadores de información, para luego ordenarlos en grupos con parámetros parecidos. Estos grupos estadísticos ya expresan las intencionalidades de los individuos en cualquier centro urbano de cualquier país del mundo. La posibilidad de transparentar las intencionalidades e imágenes mentales de la esfera subconsciente hacia el intelecto racional por medio de estímulos audiovisuales, ya es una espira de la involución mental colectiva sin precedentes históricos al menos desde finales del medioevo.
Si las campañas publicitarias modelan audiovisual y textualmente imágenes análogas a los espejismos del subconsciente humano, ya podemos confirmar que unas visualizaciones son imágenes holográficas recíprocas y coincidentes con las intencionalidades y representaciones mentales de las masas sociales globales. El significado de las imágenes externas se desdoblan con los deseos, intencionalidades y fantasías de las imágenes de los sueños que alcanza a recordar cada individuo. La irracionalidad de los actos en los planos económicos del sujeto, pueden estar unidos a sus esquemas egocéntricos, sus ocultos deseos sexuales y a toda la infinidad de sujetos y objetos que recuerda de sus sueños. Este es un mecanismo profundamente estudiado por la Psicología del cual aquí no nos ocupamos. El intelecto racional humano se borronea bajo los destellos irracionales de la esfera subconsciente al no poder encontrar puntos cardinales que orienten a los individuos en el mare magnum informativo internético y televisivo en el que deben por necesidad dimensionarse socioculturalmente. Las oraciones y los textos lingüísticos se proyectan en el intelecto racional y analítico de cada individuo que los lee; las imágenes visuales con cortos textos no necesitan ser desmenuzadas mentalmente. Sabemos que cuando un individuo mira una obra cinematográfica su semiesfera cerebral racional descansa. Todo cierra hacia lo que en este estudio abordamos, las nuevas técnicas comunicativas ya canalizan y forjan el ahuecamiento intelectual de las más amplias masas sociales globales, sin diferencias de nacionalidades, edades y sexos. El empobrecimiento de la amplitud racional y analítica del Hombre es el primer jalón que lo encamina hacia la autodevaluación del sentido, el significado y el valor de su propia e individual existencia.
Los ejes sociales de pensamiento históricos fueron modelados y manipulados por los emperadores en la antigua China; por los faraones en el antiguo Egipto; por los emperadores romanos; por La Iglesia católica en el Medievo y por el Partido comunista en la época de la Unión Soviética. Las arbitraridades y el voluntarismo de una persona o un reducido grupo de individuos pudieron orientar el pensamiento de millones. El gran experimento histórico mundial fue el soviético, el cual cerró, censuró e interfirió todos los canales de información externos. La devaluación intelectual del pueblo soviético tuvo su fuente en la manipulación de la información periodística, literaria, radiofónica y televisiva. Si bien fue el pueblo más lector de literatura clásica del mundo, después de la desaparición del régimen comunista y la apertura deliberada de todos los canales comunicativos mundiales, transcurridos veinte años, Rusia tiene el mayor coeficiente progresivo de analfabetismo de Europa. La apertura de las corrientes informativas occidentales arrasaron con la práctica de la lectura de los rusos y la infográfica, la música, las ahuecadas formas culturales globalizadas e Internet devaluaron la calidad y las precisiones gnoseológicas básicas de los conglomerados sociales en la época liberal democrática rusa. En la mente de los conglomerados sociales rusos coetáneos se proyectó un "mundo de arlequines" (N. Nabokov),vestidos con ropas extranjeras, con costumbres socioculturales sin tradiciones históricas, que viajan en automóviles de lujo y que parcialmente reconocen límites morales y éticos. El modelo de los efectos de los ilimitados volúmenes informativo-culturales y comerciales y sus denotantes, las mercancías occidentales, puede ser un prototipo a nivel mundial de los efectos de las corrientes internéticas sobre la mente de las masas sociales coetáneas global e interactivamente comunicadas.
Las masas sociales mundiales intercomunicadas interactivamente sobre dimensiones geográficas globales, tienen la posibilidad de acceso ilimitado y con insignificantes diferencias temporales entre la emisión y la recepción de la información. El análisis de una estrecha fracción de los volúmenes de información difundida, es para cada individuo por su propia cuenta una labor imposible de realizar. Delante del individuo aparecen millones de segmentos de una figura de rompecabezas sin coincidencias formales mutuas. Es por eso que los guarismos de los "grandes datos" (Bigdata), son auténticamente válidos por ser cifras estadísticas sin detalles lingüísticos. Las cifras estadísticas (de salida), transformadas en guarismos probabilísticos, son una nueva forma de modelación intelectual y emocional de las masas sociales interconectadas por Internet. Entre las formas y los contenidos visuales y las noticias de "entrada", (las formas y los volúmenes de información previamente difundidos), y sus efectos resultantes de "salida", (las frecuencias de conexiones a determinados bloques y páginas por los usuarios de las redes internéticas), funcionan casi sin explicaciones verbales, ahora sin el histórico argumentado, razonado y reflexionado Logos. Los resultados de las sumas estadísticas de conexiones hacia determinadas páginas internéticas se representan en forma de coeficientes y gráficos escalares sin letras, palabras y oraciones lingüísticas, las mismas por su inutilidad práctica y utilitaria quedan al margen de los infográficos. La mente y los actos de las masas sociales ya se corresponden con megacifras reducidas por cálculos probabilísticos sin que sea necesario explicarlas por medio de anotaciones verbales.
Uno de los más graves problemas globales que se inició con el empleo de Internet y que demuestra los nuevos condicionamientos para la devaluación intelectual son los nuevos valores entrópicos de los idiomas. De acuerdo a la Teoría de la información desarrolada por Claude Shannon (1916-2001) la utilidad de cualquier bloque informativo puede medirse por medio de la fórmula de la entropía y es posible muy sencillamente de comprobar si analizamos la cantidad de bloques informativos en Internet en idioma inglés y los comparamos con la cantidad de bloques sobre el mismo tema en otros idiomas. Los idiomas de pequeñas naciones reciben corrientes informativas limitadas y ello implica a la información útil y todas las simplificaciones de errores, ruidos y redundancias. El idioma inglés es el más empleado en el mundo y sin considerar al idioma chino, que no tiene ninguna relación directa con los idiomas occidentales y además en China pocos dominan idiomas extranjeros, por lo que el idioma inglés actualmente tiene el menor valor entrópico informativo internético. Cuanto mayor es la cantidad de bloques informativos útiles tanto menor es la entropía informativa de cada idioma. De tal principio deducimos que en la blogosfera la entropía de los idiomas aumenta con el siguiente orden: id. inglés, ruso, alemán, español, chino, francés, japonés, árabe, portugués, y todos los otros- (11%), (Global Internet usage, 2013). Para determinar la entropía de cada idioma usamos la relación de los contenidos lingüísticos para sitios en la web (no usamos la relación de usuarios por idioma!!). Los cuadros internéticos proyectan aproximativamente las realidades de los conocimientos globales solamente en idioma inglés y en menor medida en idioma español. No solamente las diferencias son cuantitativas, si analizamos la calidad informativa de Wikipedia en diferentes idiomas, nos sorprenderemos de las abimales diferencias cualitativas de la información publicada que existen entre un idioma a otro. Quines dominan un solo idioma de un pequeño país deben conformarse con las limitaciones informativas de su propio idioma en las páginas y bloques internéticos. En los idiomas húngaro, finlandés, búlgaro, eslovenio, checo, rumano y el resto de los idiomas limitados por el pequeño número de poblaciones, podemos estadística y probabilísticamente perfilar una futura devaluación intelectual de los pueblos de aquellas naciones. El intelecto humano ya puede ser representado como una pirámide en la cual en el vértice superior se encuentran las reducidas élites intelectuales portadoras de los conocimientos globales.
Nos dimensionamos mental y activamente en un nuevo mundo medido, calculado y orientado por cifras. En un mundo que borronea al milenario Logos- ideas, pensamiento, sentido, (concepto, principio, causa, fundamento) de las cosas y los acontecimientos. El Logos en calidad de recurso verbal y discursivo de las esferas socioculturales fue un representante de la específica de los paradigmas mentales y comunicativos desde las épocas bíblicas. Las cifras y gráficos estadístico-probabilísticos de los "grandes datos" no contienen ni expresan al Logos, expresan numéricamente los deseos y los actos individuales o grupales, muchos de los cuales fueron previamente informativamente programados en forma de inductores de preferencias y deseos. Por medio de los cálculos de los grandes datos es posible pronosticar la cantidad de espectadores de una obra cinematográfica en el primer fin de semana después de su estreno, con una aproximación del 94 porciento. Por medio de los androides de las computadoras es posible saber si un automóvil es conducido por su dueño u otra persona. Todas cifras con resultantes despojadas del Logos formador y estructurador de la mente humana. Como antes apuntamos, el Hombre ya pierde sus capacidades caligráficas por el uso de los teclados de las computadoras. La caligrafía fue una práctica de reconocimiento en calidad de expresión racional y emocional de cada individuo como lazo neuronal del cerebro con los movimientos de la mano. Si la humanidad desecha al Logos por su práctica inutilidad, las masas sociales ya estarán preparadas a transformarse en funciones de "entrada y salida" de premodelados y decodificados paradigmas televisivos, informáticos e internéticos. La mente humana es probable que llegue a funcionar como los sistemas de autoregulación cibernética al igual que los sistemas homeostáticos de los programas computarísticos boceteados por Leibnitz, formulados por von Neumann y desarrolados por W. Gates.
Los psicólogos nos indican que las ratas al no poder salir de un laberinto experimental especialmente diseñado y construido, finalizan la búsqueda de una salida golpeando con su cabeza un espacio del carton lateral hasta suicidarse. Las masas sociales embrolladas en las redes internéticas no es posible que lleguen a actuar de igual manera. El intelecto humano se dimensiona ideal y activamente de acuerdo a las leyes de la entropía de la información. Para explicar tal concepto diremos que si los lectores de este estudio encuentran en el mismo pasajes útiles la entropía es baja (organización de ideas aplicables), o si a este estudio los lectores lo consideran inútil la entropía es alta (desorganización de ideas y pensamientos). Toda información tiene un determinado nivel entrópico; ejemplarmente los pronósticos meteorológicos o los informes de embotellamientos de tránsito automovilísticos generan orden y organización, son útiles diariamente y por tal razón portan una baja entropía informativa o son noentrópicos. Las constelaciones informativas y publicitarias televisivas e internéticas difundidas mundialmente, por encima de que no pueden ser captadas en su totalidad, generan ruidos neutrales por su inutilidad y en conjunto portan una alta entropía por no generar estructuras lógico-cognoscitivas de pensamiento analítico en la mente de las masas de receptores. La mente de los espectadores de cuadros visuales sin contenidos de análisis funciona como la caja negra antes apuntada, los individuos pueden recibir megavolúmenes de imágenes visuales sin contextos de pensamiento y espontáneamente se borronean de su memoria. La entropía informativa de tales constelaciones de ruidos informativos es alta, por la causa de que no pueden crear segmentos de idealización lógico-cognoscitivos de pensamiento. El alto nivel entrópico de las constelaciones informativas "basura" se proyectan sobre la calidad racional y analítica intelectual de las masas de receptores. La mente humana no puede armar una figura lógica de un rompecabezas con millones de segmentos sin concomitancias formales correlativas.
El homo interneticus de los tiempos modernos ya tiene dificultades para continuar siendo "el hombre volante" argumentado en la obra de Avicena (980-1037), que nos indica la capacidad humana de poder percibirnos a nosotros mismos de manera inmediata como una función autoreflexiva del hombre. Si un individuo navega varias horas diarias en Internet sin objetivos prefijados utilitarios, el mismo pierde su propia capacidad de autoconciencia con relación a las realidades visualizadas y los cortos mensajes que puede ver y leer. El sinnúmero de bloques informativos que un individuo puede llegar a ver, se borronean y desaparecen de su memoria en el transcurso de minutos. Tal individuo no podrá idealizar opiniones de valor por la propia segmentación y reducción temática y contextual de los bloque difundidos. Es lo mismo que leer dos párrafos de las trecientas páginas de un libro. Para los asiduos navegantes internéticos, las constelaciones informativas son percibidas y superficialmente analizadas y podemos en sentido cognoscitivo compararlas con el análisis de las visiones percibidas de un registro de video acelerado. El cerebro humano es un sistema de registro que se autoengaña. La mayor parte de las representaciones del Hombre se fundamenta en lo que puede recordar y no en lo que él padeció y sobrellevó en realidad. El cerebro humano cuando intenta concentrar su atención en un sinnúmero de problemas, filogenétivamente no se encuentra preparado para prestar atención a sus reales problemas y a su vez poder llegar a concentrarse en las constelaciones informativas. Esto fue fundamentado en la obra de J. Haidt, "The Happines Hypothesis", "Nuestra parte emocional es un elefante y nuestra parte racional es un jinete. Aparentemente es el jinete quien maneja y administra al elefante, pero su control es muy débil. En cualquier momento el elefante de seis toneladas puede ir hacia donde se le le ocurra".
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