Historia esoterica y espiritual de chile (página 21)
Enviado por Fernando Edmundo del Cármen Laredo Cárter
Y es más que eso. Por razones muy profundas el operador o lector del destino ha de entender que su deber supremo es INTERPRETAR LA VOLUNTAD DE DIOS Y DE LOS DIOSES PARA EL CONSULTANTE. Se le debe dar a conocer la verdad que esa alma necesita oir para ponerse en sintonía con EL PROPOSITO DE SU ENCARNACIÓN, O CON SU MISIÓN O TAREA FUNDAMENTAL. Es decir, la ayuda ha de ir más allá de lo que haría un psicólogo promedio, que no practicara la Logoterapia. (La cual es la única terapia que se propone descubrir directamente el Sentido de la Vida para el Paciente. Los otros medios terapéuticos llegan muy eventualmente a ese asunto. Tal Carl Gustav Jung se acercó a este propósito al estimular a los sujetos neuróticos a descubrir su arquetipo fundamental.) Por lo tanto, si el oráculo es más que un ganapan de su arte adivinatorio, ha de tener mucho cuidado de no quedarse solo en lo que el consultante quiere oir, o desea oir. Se comete pecado contra Dios y contra el alma profunda del consultante si uno se queda en las cosas bonitas, cuidando solo en el ámbito de estimular las meras esperanzas de la gente.
Para lograr éxito en esta delicada tarea el operador HA DE TOMAR SU ARTE CON ESPIRITU RELIGIOSO, Y HA DE PEDIRLE AL CREADOR QUE LO ILUMINE EN SU EMPRESA CON CADA PERSONA QUE LE CONSULTE. DE ESA MANERA FLUIRÁ HACIA EL ORACULO UNA DIVINA CORRIENTE OCULTA DE INSPIRACIÓN. Entonces sus palabras serán realmente proféticas, y no una mera entretención de salón.
Lo mismo sería si el consultante fuese un político o un empresario, un hombre o mujer con real poder, que tiene el destino de muchas personas en sus manos. O alguien que tiene alguna misión sagrada que le debe ser revelada. En esos casos se hace un inmenso servicio al Todo y al Plan Divino, y se debe estar atento a mirar más allá de la cáscara de los problemas contingentes, e ir al fondo de las almas y del Destino de los seres. Pero esa tarea sagrada no se cumplirá si el operador es superficial, si no tiene el mismo una vida profunda y sintonizada con Dios.
Es una horrenda falta ética cuando el adivinador mira el bolsillo del que le consulta para dar su mejor esfuerzo. El psíquico o vidente debe cuidar que la calidad de su atención sea igual tanto para el rico como para el pobre. Así se ganará el respeto de las personas y su propia dignidad estará a salvo.
El operador psíquico, como los antiguos profetas de Israel, debe estar dispuesto a retar o a corregir al consultante, en el caso de estar incurriendo en conductas contrarias al orden moral establecido en las Sagradas Escrituras, y no seguir fomentando el mal en esa persona o alma. Su rol profético es en verdad una forma de medicina para las almas encarnadas. Por lo tanto ha de estar dispuesto a decir lo que, en ocasiones, el paciente no querria oir de su médico.
Por ejemplo, si el consultante fuese un homosexual, el psíquico, manteniéndose fiel a los códigos éticos de la Sagrada Escritura, que dicen que un sodomita o un afeminado no pueden entrar en el reino de los cielos, tendrá que decirle que tal conducta es aberrante y pecaminosa de modo educado o sutil, en algún momento de la consulta. Y desde luego, manteniéndose en el espíritu del Cristianismo tendrá que decirle que el cambio voluntario hacia el bien o el arrepentimiento siempre es posible. El Perdon de Cristo o de Dios se puede lograr pero el arrepentimiento a tiempo es la condición previa necesaria para obtenerlo.
Como la mayoría de las personas no leen la Biblia con la suficiente atención, no saben que NO EXISTE EL PERDON GRATUITO. La condición es volver a Dios arrepentido y no pecar más. Pero desgraciadamente la forma común de arrepentirse de las personas es una mera compunción emocional y pasajera ante sus pecados. Eso no es arrepentimiento verdadero.
Arrepentimiento es la traducción occidental española de la palabra griega METANOIA, que significa TRANSFORMACION DEL PENSAMIENTO O CAMBIO DE MENTALIDAD. Por lo tanto, si usted no cambia a fondo su modo de pensar acerca de la vida y de su conducta, y sigue pensando que todo ha sido bueno y correcto, volverá a pecar, una y otra vez. Y su pedido de perdón humano o divino no vale nada.
Es por eso que la gente hace sufrir al prójimo. Le duele ser como es, pero vuelve a actuar igual, pues no está convencido en el fondo de si mismo de que ha actuado mal. La verdad es que una mala acción implica un mal pensamiento detrás, y muchas veces, no es sólo un mal pensamiento, sino que toda la estructura de su edificio mental está mal construida. Por eso volverá a herir a los que más ama una y otra vez.
Muchas veces el ser humano ha quedado mal construido pero en su fuero íntimo cree que todo está bien y su solicitud de perdón a una mujer, por ejemplo, es sólo una estrategia más para no perder el bien o el placer que esa dama representa para él. En ese caso aunque el hombre llore delante de su pareja no hay arrepentimiento real, es apenas una adaptación momentánea ante la actitud de rechazo de la mujer. Es fácil manipular a las personas con el llanto y las rodillas en el suelo, pero al poco rato las cosas vuelven a empezar. Eso también vale para mujeres poco sinceras.
Muchas veces el ser humano, creyendo que el rechazo de los demás ante algunas malas conductas es solo un enojo pasajero y no una cuestión de principios morales rotos, pide perdón sólo para dejar pasar el tiempo, y así el malestar pasará y él podrá volver ha hacer de las suyas. De allí que el psíquico clarividente ha de observar muy bien el alma y la estructura metal de quien lo consulta. Y si se trata de un problema semejante al que aquí se está planteando no debe dejarse manipular y estimular a la persona a la Metanoia radical.
Por lo tanto es inevitable que los profetas de hoy de ayer y los de mañana se conviertan en consejeros u orientadores existenciales. Y en verdad, para eso los puso Dios en la tierra.
Sobre todo ahora que el mundo académico es tan relativista, agnóstico y desorientador en materia moral y espiritual para las nuevas generaciones, el psíquico-vidente-intuitivo debe asumir el Dharma de instruir al mundo en el buen camino.
Pero cuidado con el vago y superficial sentido del Bien que las personas tienen hoy. Para un ignorante algo puede ser bueno por un criterio estadístico de Mayoría. Pero para el sabio ese camino puede ser realmente malo. El Psíquico debe, como hizo el Rey Salomón hace 3000 años, pedir Sabiduría a Dios de modo constante. El carácter sagrado de su servicio a la comunidad lo requiere. Y no basta con pedirlo a Dios. El psíquico debe estudiar en buenos libros, sobre todo en las sagradas escrituras de todos los pueblos y de los filósofos expertos en Metafísica. Tampoco debe olvidar las lecciones de la historia profana de las naciones y las vidas de los santos, tan ricas en lecciones existenciales y experiencias místicas. La historia de los pueblos y la historia sagrada en particular es Karma y Dharma en acción.
Lo de la práctica de la lectura y el estudio personal debe ser reiterado, pues los psíquicos-videntes tienden a pensar que les basta con sus intuiciones y con sus visiones para avanzar por la vida y ser perfectos. Craso error. Las visiones espirituales de un individuo pueden ser verdaderas y enviadas por Dios, pero las interpretaciones serán correctas o incorrectas según la formación intelectual de los videntes. Y por ignorancia uno puede terminar interpretando mal sus más elevadas percepciones en el mundo de la Luz, y enseñar doctrinas equivocadas a las personas que vienen en busca de luz espiritual para sus vidas. Así el Karma nos agarrará más fácilmente por el cuello.
El vidente he de ser sabio, amplio y profundo, con un rico discernimiento de la realidad del consultante y de la Voluntad de Dios para él. Deberá recordar que la Eternidad se juega dentro del tiempo, y que por lo tanto no existen decisiones insignificantes o pequeñas que no sean trascendentes o importantes. El Señor, en su omnipresencia y omnisciencia, con su Ojo que todo lo ve, está observando al vidente y al consultante. Y anotando en el gran registro Akhásico los pensamientos, palabras y acciones de cada uno. El psíquico, tanto como el que necesita una respuesta a sus angustias, están en camino. Son Peregrinos en el Sendero de la Vida. Pero el que sabe más es siempre más responsable ante Dios y los Maestros que el que sabe menos.
En el Chile del futuro habrán de nacer Santos, Maestros y Profetas, o candidatos a esas tareas, con aquel dharma preciso. Y cada uno deberá encontrar paso a paso su destino o su lugar en el Gran Templo del Universo, o su parte en la Gran Melodía Cósmica. En cada uno de aquellos escogidos deberá equilibrarse la Mente y el Corazón. O como dicen algunos libros de Magia Blanca, el adepto ha de aprender a Pensar con el Corazón y a Sentir con la Cabeza.
Cada uno de esos Hijos de Dios deberá recordar un principio básico del Plan Divino. Nadie nace por accidente o por error en un país determinado. Si nació en Chile lo más probable es que su misión DEBE desarrollarse en este país y no en otro. Sólo en muy contadas ocasiones los Dioses hacen nacer a un alma en un lugar y luego se le manda a otro continente o país. El país donde uno nace ha de ser el que debemos servir con amor y abnegación.
Y si en verdad nuestra misión fuese universal o mundial y tuviéramos que viajar lejos, la tarea ha de asumirse sin mirar atrás. Cristo ha dicho: Ninguno que poniendo su mano en el arado mira hacia atrás es digno del reino de Dios.(Lucas 9,62).
Los que quieran o se sientan llamados al Servicio de Dios y de la Verdad Suprema deben procurar primero estudiar mucho y desarrollarse bien, en todas sus capacidades naturales y parapsíquicas, en forma integral. Deben desarrollar un cuerpo y una mente sanos, una inteligencia despierta y eficiente, y aprender a protegerse de las personas y de las ideas que los podrían sacar del recto camino de Dios.
Y de acuerdo con las tendencias de la juventud actual los escogidos de Dios deben cuidarse del Divertimiento y de la pérdida de tiempo en leseras o tonterías. Fiestas, drogas, alcohol, cigarrillos, sexo libre, flojera, inercia, malas palabras, conversaciones malsanas o corruptas, risa fácil y superficial, burlas e ironías, homosexualidad y promiscuidad no van con los verdaderos hijos de Dios.
Mucha música, mucho internet, muchos juegos virtuales, así como el trasnochar y levantarse tarde no son conductas adecuadas para un buscador de la sabiduría y de la Luz y de la Palabra de Dios.
No se debe perder tiempo ni energía en vanalidades. La vida es corta y la misión es larga. El Señor no desea las sobras de la vida de sus servidores. Quiere lo mejor de ellos, las primicias de la vida, no el raspado de la olla para él. Intentar servir a Dios demasiado tarde en la vida indica un alma indiferente al Amor Divino, una forma de desprecio al llamado del Señor, un abuso de su bondad y de su misericordia.
Como ahora casi todo el mundo cree en la reencarnación ha de tenerse el cuidado de no postergar el Servicio a nuestra misión para la próxima vida. Puede ser que cuando llegemos a ella ya Dios y los Maestros no necesiten de nuestros servicios y seamos reemplazados por otras almas más nobles y generosas que nosotros. Y la ley de Karma nos dará un amargo resultado por nuestra negligencia y egoísmo.
Otro asunto importante que deben tener en cuenta los clarividentes incipientes es que existen muchos niveles o tipos de clarividencia. Y contrariamente a lo que la gente imagina ver colores de auras o ver espíritus desencarnados es una forma baja o inferior de esa facultad. Es una mera clarividencia astral. Otro tipo es la clarividencia de las formas mentales que ve directamente la proyección de los pensamientos que flotan en el aire, sean de las personas vivas o muertas. Este tipo de clarividencia lleva directamente a los Archivos Akásicos o a la Memoria del Cosmos, que es una especie de biblioteca mental con registros de vidas pasadas, acontecimientos históricos y datos diversos que utilizan los ángeles del karma o Señores Lipika para juzgar y sentenciar a las almas en mundos sutiles o en el físico.
Las formas más elevadas de clarividencia tienen relación con la participación en los Poderes de la Omnisciencia y la Omnipresencia de Dios, en la cual el Vidente Ve con los Ojos de Dios que están todas partes. Este vidente percibe la realidad con los ojos de todas las almas vivas o muertas del universo. Es como los ojos de la mente de todos fuesen sus ojos. Es el tipo de clarividencia que han mostrado los chamanes más elevados y los yoguis cercanos a la Conciencia Cósmica.
Así el chamán puede ver por los ojos de un águila volando de día, o de una lechuza volando de noche. O por los de un lobo, o por los de un pez, (poder que le sirvió a Cristo para hacer el prodigio de la pesca milagrosa). Como también ver por los ojos de los ángeles, o de los demonios, o los de Zeus, de Yahvé o de Vishnú.
Otro tipo de clarividencia complementaria a la que recién exponía es la capacidad de visión de los Arquetipos o de los Pensamientos de la Mente de Dios. Ese es el mundo de los Dioses, de las ideas inmortales que flotan eternamente en Dios como razones de los seres creados. Platón y san Agustín percibieron esa realidad excelsa. También Pitágoras.
Allí los arcanos del Tarot están vivos, los números eternos también. Es una dimensión eminentemente geométrica. Es la Mente infinita de los proyectos temporales y atemporales de Dios. Allí el Logos Divino habla y revela sus planes a los profetas como San Juan, el apóstol amado, y el Profeta Ezequiel. Recuérdese que la Nueva Jerusalen es un inmenso cubo de oro semitransparente. No todos los psíquicos tienen todos los tipos de clarividencia. Tienen tendencia hacia algunos de estos modelos. En algunos casos podrán desarrollar los que les faltan, en otros casos no.
Asi mismo todo aprendiz de clarividente ha de cuidarse de la esquizofrenia, pues este poder es fronterizo con ese tipo de demencia. Como también debe privarse del uso de drogas alucinógenas que alteran artificialmente los niveles de conciencia de las personas, y que desgraciadamente nos pueden conectar con un inframundo demoníaco que nos podría obsesionar hasta la muerte.
Vosotros, los clarividentes del futuro, sois los Ojos del Alma de Chile. Aprended a usar bien esos ojos. Lo primero es buscar la visión de Dios, la contemplación de la Luz Suprema. Tened la certeza que Aquel que veréis es El Mismo, Ayer, Hoy, y Siempre. Es el mismo Dios que habló con los Profetas de Israel, y el que habló por boca de la Sibila de Cumas, o el que se comunicó con las Pitias de Delfos, con San Juan Evangelista, con San Juan Bosco, con Mahoma y con el Gurú Nának de la India, o con Lao Tsé en China. Por lo tanto no os creis los únicos que habeis visto la Divina Luz, el resplandor de la Inteligencia Infinita. Aprended de esos antiguos videntes. Leed los libros sagrados que ellos dejaron como testimonio. No creais cuentos de extraterrestres que traerán la salvación a la humanidad. Ni tampoco en historias de encuentros con seres extraterrestres que hagan de maestros en el mundo invisible o mental. Aunque aparezcan en comunión con Jesus de Nazaret y con Budha.
En el Infinito Universo interior de la Humanidad está disponible la conexión directa con la Divinidad Suprema, con la Mente Divina y con los verdaderos maestros, que son los que han vivido con nosotros a través de los siglos. De allí vendrá la salvación en concreto, no de otra parte. No hace falta otra Fuente de Poder. Dios es Inmanente a la Humanidad. Nunca hemos estado sin El.
Como dice San Pablo en una de sus Epístolas: Estoy seguro que ni la muerte, ni la vida, ni los ángeles, ni los principados, ni las potestades, ni lo presente, ni lo porvenir, ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del Amor de Dios que es en Cristo Iesus Señor Nuestro. (Romanos 8,38-39.) Esa realidad oculta es tán definitiva y primaria, que era así desde miles de años antes que Cristo encarnara. El existía desde muchísimo tiempo antes de nacer como Iesus de Nazaret. EL estuvo con Moisés y le ordenó alzar la Serpiente de bronce en el desierto para salvar a los israelitas del veneno de las serpientes que los atacaban.
El era quien habló con los Profetas, con cada uno de ellos, y por lo tanto, seguirá hablando con los profetas que nazcan en el futuro. Ese mismo Verbo o Logos de Dios habló por boca de Krishna y de Mohamed. El mismo fue que ordenó a Noé construir el Arca que salvaría a la semilla de la humanidad de las aguas Diluvio.
Es el Mismo Pez Inmenso que habló con Manú y le ordenó atar su barco a su propio cuerpo plateado para salvar a los sabios de las primitivas comunidades hindúes de la violenta marejada e inundación cósmica narrada por ese pueblo. (Historia de Matsya-Avatara, primera encarnación de Vishnú como pez de salvación.) Por eso no solo de pan vive el hombre sino de toda palabra que sale de la boca de Dios. Y Dios está dentro del alma de los hombres y de las mujeres, y debemos estar atentos a sus Palabras de Ayer, de Hoy, de Mañana y de siempre. Y como el Verbo de Dios o el Logos es Inmutable debeis saber que Dios no se contradice, por lo tanto las Palabras que el Señor pronuncie en el futuro no pueden decir algo contrario a la esencia de lo que él dijo en siglos antiguos. Así se prueba al verdadero profeta. Es el mismo mensaje, pero con palabras nuevas, con ropaje nuevo.
Los profetas o Nabis del futuro no solo han de estar atentos a las Palabras que descienden de lo Alto, sino también a las manifestaciones de Dios en la Historia. Es decir, a reconocer la mano de la Providencia Divina en los acontecimientos del país y de las personas. Dios mismo puede hacer la Historia de la Salvación de Chile por medio de movimientos religiosos, ecológicos, políticos y militares, como también por medio de fenómenos culturales. Así como ha ocurrido en el pasado de Chile, así también ocurrirá en el futuro. Y sucederá a pesar del famoso Pago de Chile, la crítica y la ingratitud de muchos.
Las videntes y los sensitivos, los intuitivos y los profetas del futuro tendrán por misión ejercer un especial sacerdocio de conexión directa y supraconsciente con la Divinidad y con los Grandes Maestros, o con los Dioses, como decían los griegos antiguos, al consultar a sus oráculos.
Eso es necesario porque los sacerdotes de oficio, a pesar de su ordenación, que es tan rica en potencialidades, han ido perdiendo los carismas o dones de inspiración directa del Espíritu Santo, y por lo tanto se les ha oscurecido la visión espiritual y profética.
Han privilegiado la razón y los criterios humanistas y sociológicos, negándose a desarrollarse sobrenaturalmente como el Padre Pío de Pietrelcina, notable profeta y santo, o como San Juan Bosco, otro gran sacerdote y vidente.
Pero eso es una gran responsabilidad que obliga a elevar la calidad de vida, pensamiento y conducta de los parapsíquicos futuros. Y los obliga a estudiar la sana doctrina, la teología, las religiones comparadas, las experiencias de otros videntes antiguos y modernos, a purificarse y a buscar el viviente contacto con las inteligencias superiores o las Mentes Maestras que aún observan y vigilan el desarrollo de los pueblos desde lo alto de la Montaña, desde sus mansiones eternas, o desde sus nidos de águilas. Pero esos contactos no tienen relación con extraterrestres.
Los Maestros de verdad son los mismos que fundaron las civilizaciones antiguas. Rama, Zeus, Moisés, Enoch, Mohamed, Hermes, Abraham, Noé, Osiris, Zarathustra, Odín, Bochica, Quetzalcoatl, Iesus, Pitágoras. No es necesario buscar a Otros. Es más, cambiarlos por otros puede ser muy peligroso para el futuro de la humanidad. Contactarse con otro tipo de entidades puede introducir influencias satánicas más fuertes en la mente colectiva de los hombres. El Apocalipsis advierte acerca de fuerzas diabólicas que el hombre por imprudencia puede dejar en libertad y desencadenar un verdadero Armagedon en el peor momento, cuando el discernimiento espiritual de las personas está muy ofuscado y no se sabe reconocer o identificar quienes son los buenos y quienes son los malos de verdad. Ya hemos sufrido en Chile una tremenda obnubilación de los espíritus en relación con el Marxismo y la Teología de la Liberación, y el asunto de los Derechos Humanos.
Las Fuerzas de la Luz actuaron disfrazadas con ropajes de militares en lucha antiguerrillera, y muchos pensaron que ellos eran los malos. Eso es pura ceguera e ignorancia. Los Grandes Maestros jamás han sido promarxistas ni neutrales en estas materias. El marxismo es pura oscuridad. Pero su denuncia de la injusticia social ha confundido a mucha gente buena, que se han negado a saber el inmenso daño que esa corriente ideológica le ha hecho al alma de la humanidad.
Por eso los videntes del futuro deben saber filosofía, historia, simbolismo, yoga, chamanismo, Biblia, mitología, magia, meditación, reiki, EN PROFUNDIDAD, no sólo para impresionar a un cliente o a un oyente, sino para sintonizar la Voluntad de Dios y ofrecer a los Dioses un instrumento multifacético y bien preparado a su servicio.
En la actualidad hay demasiada superficialidad e ignorancia en los videntes como para ser instrumentos de excelencia en las manos de los maestros. Y eso es lamentable. Este autor ha conocido a decenas de videntes de grandes posibilidades, pero se niegan a estudiar los libros y a usar bien la cabeza, y por eso no son capaces de interpretar correctamente lo que ven o lo que sueñan, y andan dando tumbos de escuela en escuela, o de grupo en grupo, sin someterse a las serias disciplinas morales e intelectuales que les harían instrumentos de excelencia al servicio del Señor.
También es necesario cuidarse de la traición o de la deslealtad al espíritu de los fundadores de las Escuelas Tradicionales, y por lo tanto se debe promover la fidelidad a Dios y a los Maestros. Eso se debe demostrar en una resistencia firme a la asimilación de herejías doctrinales de cualquier tipo y que ordinariamente mezclamos en nuestros pensamientos y palabras.
La historia de Israel está llena de castigos divinos por causa del adulterio espiritual del pueblo de Dios. Se debe estudiar muy seriamente los asuntos conceptuales de las distintas escuelas esotéricas y pseudo-esotéricas, antes de aceptar una posible compatibilidad doctrinal. El sincretismo tiene peligros sutiles que se deben tomar en cuenta. No todas las ideas religiosas son equivalentes y compatibles. Existen seres invisibles detrás de las ideas. Y pueden ser buenos o malos. De luz o de tinieblas. Un psíquico de calidad no debe ser ingenuo ni cándido. Dice la Escritura que el Anticristo intentará engañar incluso a los Escogidos, no sólo a los tontos que ya pertenecen a las Tinieblas.
Vivir la cultura y ejercer un constante discernimiento es la clave.
Los que nacen videntes deben ejercer el discernimiento con mayor agudeza que el resto de los seres humanos. Su función social-sacerdotal les obliga a ser oráculos exactos o lo más exactos que sea posible. Las personas están existencialmente desorientadas, y su inteligencia está confusa. Por eso el psíquico no sólo ha de percibir, sino también esclarecer el panorama de la vida y de los Propósitos Divinos para que las personas tomen decisiones sabias y prudentes.
Y como existen muchos niveles de Videncia, debemos asegurarnos que los sensitivos de hoy y de mañana estén BIEN CONECTADOS. No vaya a ser que tomemos a un demonio por ángel de Luz, o a Satanás por Iesucristo. Uno puede creer en la sinceridad del vidente o del intuitivo. Puede que me esté diciendo exactamente lo que percibió. Pero la interpretación puede ser errada. Y el elevado contacto puede ser una mentira o un auto-engaño.
Una familia norteamericana empezó a ver extraterrestres dentro de su casa, con trajes plateados brillantes, cascos muy bonitos. Nadie más los veía. Solo los miembros de la familia, que creían mucho en los Ovnis y en la posibilidad de ser Contactados. Eran extraterrestres astrales, de otro plano. Pero se aparecían a toda hora y comenzaron a inquietar al dueño de casa. Se consultaron especialistas en Ufología. Pero ellos no pudieron dar ningún consejo apropiado. De repente a alguien se le ocurrió consultar a un Pastor Evangélico acerca de esta situación tan perturbadora. Entonces el pastor se apersonó en la casa e hizo un exorcismo en forma solemne. Y, curiosamente, los extraterrestres se fueron de inmediato del plano invisible de esa casa y no molestaron más a las personas.
Esta huida de los entes nunca hubiese ocurrido de haber sido extraterrestres verdaderos. Pues a esos visitantes del espacio no tienen porqué huir del Nombre de Iesucristo. Sólo los demonios huyen de esa Presencia. Por lo tanto se trataba de demonios disfrazados de astronautas, que leían los pensamientos y las imágenes pro-ovnis que tenían esas personas y se aprovecharon de su ingenuidad.
Ahora veremos un caso menos burdo, mucho más elevado. Se trata de saber si un cierto yogui de la India vió realmente a Iesus, en una aparición en California, en 1945. Nos referimos a Paramahansa Yogananda. Un gran vidente, un devoto de corazón puro. Sentimientos elevados y la sinceridad están aquí presentes. Pero aún un yogui de alto grado puede autoengañarse y engañarnos a nosotros sin desearlo. En este caso debemos ver SI EL CONTENIDO O EL MENSAJE DE LA ENTIDAD ES CONCORDANTE O NO CON LAS SAGRADAS ESCRITURAS.Esta recomendación no es solo para cristianos, musulmanes o judíos.
Tambien rige para hindúes, según el Uddava Guita, contenido en la undécima sección del Bhagavata Purana, cap. 14,17 dice que el conocimiento de un vidente para que sea verdadero y confiable debe discernirse a partir de las Escrituras, de la intuición o percepción directa, de la opinión de los sabios expertos en la sagrada tradición, y de la razón. Si no coinciden los cuatro criterios, el conocimiento es falso, o la visión es mentirosa. Lo dicho en aquel versículo es reafirmado en el mismo documento escritural, en el cap. 23,18. Ese criterio es el que usa la Iglesia católica romana y la ortodoxa oriental para reconocer a los santos que han hablado con Dios y que han recibido revelaciones de él.
Veamos cómo opera eso proceso de discernir la verdad en detalle:
El maestro Yogananda estaba orando a Iesús para obtener alguna claridad acerca de sus interpretaciones del Nuevo Testamento, sentado en su escritorio de Encinitas, a 160 km de los Angeles, Usa.
De repente toda la oficina se iluminó con una luz celeste y apareció Iesús de cuerpo entero frente al yogui. Éste sintió que de los ojos de Iesús fluía el poder que sostiene a todos los mundos en la existencia. Y le transmitían información intuitiva multiforme.
De repente apareció delante de los labios de Iesus un cáliz de oro, el cual descendió hacia Yogananda para que bebiera y luego el cáliz dorado volvió a los labios de Iesús. Entonces el yogui escuchó la voz de Iesúscristo que le dijo: DE LA COPA QUE YO BEBO, TU BEBES. Y desapareció.
¿Era Iesuscristo realmente o era una alucinación o una autocreación mental En este caso la respuesta es afirmativa, era el Iesús verdadero, porque es la prolongación lógica de dos textos del Evangelio de San Mateo 20,23 y de San Marcos 10,39.
Allí Iesús afirma y promete que los apóstoles podrán beber de su vaso o de su copa, y ser bautizados en su bautismo, de sacrificio personal o de sangre.
Yogananda entonces, de acuerdo al contenido de la visión es un apóstol de Iesus o del Verbo de Dios hecho hombre. Y los hechos externos lo demuestran. Paramahansa Yogananda dedicó toda su vida al servicio de Dios y de la Humanidad, y tuvo poderes de sanación instantánea de enfermedades incurables, de resurrección de muertos, de expulsión de demonios, de transformación de corazones y de lectura de mentes.
Tenía los mismos poderes de Iesucristo y de los apóstoles. Incluso realizó un milagro equivalente a la pesca milagrosa frente a una playa de California, semejante al de Cristo frente a los apóstoles en el lago de Genesaret. Lucas 5,1-11.- (Según testimonio del Swami Kriyananda) Debe haber concordancia entre los pensamientos y las obras del vidente, entre sus palabras y su vida y la calidad o el contenido de una visión.
En este caso todo coincide y apunta hacia una verdadera manifestación de Cristo en la persona de Yogananda. Por eso san Pablo, en la Epístola a los Hebreos 13,8 dice: Iesucristo es el mismo ayer, hoy y siempre. Es inmutable. No cambia, es la misma Verdad Viviente Personal y única a través de los siglos. Es un Mismo Yo supremo que se irradia en millones de yoes personales encarnados en millones de cuerpos. Una sola alma suprema manifestada en la multiplicidad de los seres creados.
Pero en otros casos el vidente es un reino dividido por efecto de los pecados y carece de coherencia interna.
Entonces sus visiones podrían ser falsas. O bien verdaderas, y dadas sólo para ayudar a una persona a levantarse de la oscuridad, para darle un estímulo que no merece pero que necesita. Y, que además, debe tener cuidado de mantenerse a la altura de su misión y de su visión para no caer de nuevo en el poder del Mal.
En Chile un caso reciente de vidente falso es Miguel Angel Poblete, que en el año 1983, a los 15 años comenzó a tener visiones de María bajo el influjo de la marihuana y posteriormente, ya adulto se cambió de sexo, y continuó usando drogas, junto a un estilo de vida licenciosa que lo llevó a una temprana muerte a los cuarenta años.
También los psíquicos han de cuidarse de las voces del más allá o locuciones interiores- San Juan de la Cruz, un experto yogui cristiano recomienda no hacer caso de las voces internas y apoyarse en la Palabra revelada del Señor (la Escritura). Es un buen consejo.
Patanjali, el famoso autor indo de los Yogasutras también recomienda no hacer caso de las promesas de los entes invisibles. Si el yogui incipiente les hace caso puede caerse del sendero de perfección. Y es verdad.
Por causa de estos avisos y otros que mencionan los grandes tratados de espiritualidad, y porque la amarga experiencia de muchos avala el consejo de los sabios, hay que ser prudente frente a las voces de lo Invisible.
Dion Fortune, la fundadora de La Sociedad de la Luz Interior, decía que uno debía pedir pruebas a los seres invisibles para que demostraran que decían la verdad y que no eran demonios engañadores. Y yo digo, que además de eso, ha de verse la concordancia de las voces con los contenidos de la Tradición Sagrada de todos los Pueblos.
Sus mitologías y religiones. O por lo menos la Biblia o el Korán. Si difieren mucho, como es el caso del Libro de Mormon o el Libro de Urantia, no debe hacérseles caso. Son senderos falsos. La Verdad eterna es siempre Una, inmutable, viviente y Universal.
Es una grave tentación de soberbia el creer que uno sabe más que los sabios iluminados por Dios de eras pasadas. Es el demonio el que quiere que el ser humano pierda la humildad y se vuelva soberbio. Existe mucha soberbia intelectual y espiritual en el mundo posmoderno. Por eso hay que cuidarse de quienes afirman que en materias religiosas o metafísicas hay que partir de cero.
Son creídos y soberbios, se creen más inteligentes que Pitágoras, o que Santo Tomás de Aquino, o mejores que Ramanuja e Ibn Arabi. Nuestras experiencias místico-proféticas deben cotejarse con las experiencias y conocimientos de los más grandes espíritus que ha producido la humanidad sensible a la divinidad suprema.
Rumí, San Pablo, Sankaracharya o Maimónides son superiores a los Kryon, a los Crowley, o a los Pleyadianos o a la Misión Rama de los que quieren ir a Ganímides. Meister Eckart es superior Allan Kardec. Martin Luther King es superior a Josef Smith.
El problema de los hombres es y será siempre tener criterios de calidad y discernimiento en la búsqueda espiritual. Desgraciadamente la gente no lee a los mejores y por eso cae en manos de embaucadores de una seudociencia hermética.
La ley del menor esfuerzo engaña a millones de personas, y en particular internet es un medio cegador de almas en vez de ser un iluminador. Los medios electrónicos hacen perder el sentido de la disciplina rigurosa. Ser discípulo es ser disciplinado y fiel a un maestro y a un camino, y a una cosmovisión coherente o unitaria de la vida.
Los indisciplinados, o los rebeldes a los maestros y los infieles son expulsados de los cielos de cualquiera religión de ayer de hoy o de mañana.
Los jóvenes se engañan con lo fácil de los medios electrónicos. Y más se engañan con el reduccionismo conceptual. Van perdiendo la riqueza del idioma y con eso se empobrece el alma de un pueblo. La riqueza de un alma individual y colectiva es el Verbo de Dios, el Logos, la abundancia de ideas y razones divinas para hacer las cosas.
Perder vocabulario es perder grandes trozos del mundo intelectual y espiritual de un pueblo. Es perder grados de comprensión de la vida y de la verdad. Es alejarse de la Luz.
La Luz es Palabra Viviente de salvación y de orientación existencial de una comunidad. Es Cristo. Perder Palabras y conceptos es perder grandes trozos de comunión con el Cristo Cósmico. Un profeta del Señor, sea en el pasado, en el presente o en el futuro, ha de ser rico en palabras, pero no palabrero y embaucador. Sus palabras han de ser hermosas, profundas, iluminadoras, inspiradas. El Espíritu Eterno debe ser la Luz del Profeta o de la Profetiza del futuro de Chile.
El libro de Ezequiel tiene unas poderosas palabras de enseñanza para los que nacen o son llamados a ser profetas de su pueblo, en el cap. 33, vers. 1 al 9. Se titula el deber del Atalaya. Cada vidente inspirado por Dios es un atalaya. Es un vigilante en la cima de una alta torre desde donde ve más alto y más lejos que los demás miembros de la comunidad. Y eso involucra un deber patriótico y religioso a la vez.
Recomiendo leer esos nueve versículos. Y no se olvide nunca que la palabra hebrea Nabí, es vidente o profeta. Y actualmente nacen muchos. Pero se quedan en etapas muy primarias de desarrollo. Predomina mucho el infantilismo en los psíquicos. Ya va siendo hora que crezcan. Y en vez de andar viendo elementales y espíritus desencarnados, o sintiendo malas energías, eleven sus mentes y entren en los talleres de la eternidad, en la mente universal, donde los Dioses o los Maestros van escribiendo los destinos de los pueblos y tejiendo los acontecimientos, siguiendo los misteriosos diseños arquetípicos del Padre infinito.
No anden imaginando cosas respecto a los niños índigos o los niños cristal. Niños con misiones especiales siempre ha habido y siempre habrán, y es natural que ahora nazcan más que antes porque en un siglo la población humana se ha cuadruplicado.
A esa velocidad de reproducción humana a fines del 2100 seremos unos quince mil millones de seres humanos o más. No agrando la cifra pues las guerras y las pestes surgen en cualquier momento y algo se frena el proceso. Lo mejor será ir pronto a colonizar Marte, Siberia y Australia. Y luego a algún satélite de Júpiter y finalmente a las estrellas.
Pero si quieren ser fieles al Señor, tienen que aprender a no seguir el pensamiento de las masas humanas y la opinión de los medios de comunicación social.
Los verdaderos profetas tienen necesidad de aislarse de la influencia de las muchedumbres y del pensamiento masivo ignorante y alcanzar un alto grado de sintonía personal interior con Dios y las Mentes Maestras. Eso significa hacer retiros espirituales con frecuencia. Y no siempre en grupos.
Por eso decía el profeta Iesaiyahu (Isaías) PORQUE MIS PENSAMIENTOS NO SON VUESTROS PENSAMIENTOS,NI VUESTROS CAMINOS MIS CAMINOS, DICE YAHVE.COMO SON MAS ALTOS LOS CIELOS QUE LA TIERRA, ASI SON MIS CAMINOS MAS ALTOS QUE VUESTROS CAMINOS, Y MIS PENSAMIENTOS MÁS QUE VUESTROS PENSAMIENTOS. (Isaías 55, 8 -9).
Un vidente, para llegar a saber y a comprender la Mente de Dios o la de Cristo, debe comenzar por conocer a fondo la Biblia judeo-cristiana. Nótese que digo a fondo. Eso significa que uno ha leído las sagradas escrituras unas cuarenta veces completa. Y por partes, cientos de veces. Y si quiere ser poderoso contra los espíritus del mal, debe saber varios salmos de memoria.
El secreto del poder es que quien posee un arte ha poseerlo a fondo. Ser superficial es ser un don nadie en el mundo oculto.
El poder y el saber son el fruto de la dedicación. Sin dedicación o sin consagración a Dios y a la Verdad no hay sacerdocio espiritual, ni maestría, ni magia.
Además, como andan circulando tantas versiones diferentes acerca de lo que es el amor divino o universal, una candidata o un postulante a profeta del Señor siempre ha de recordar que Dios es Amor unificante, ordenado y ordenador.
No existe un amor divino o universal que conduzca al caos o a la rebelión contra Dios y sus leyes cósmicas, y sus reflejos sociales correspondientes. Si alguien lo manifestara así es un instrumento de fuerzas oscuras o demoniacas, no un vidente de Dios.
La misma inteligencia divina que inspiró a los profetas de la Biblia, incluyendo a los dos San Juan; del Korán; del Adhi Grant (del Gurú Nának y sus sucesores) está vigente hoy día, y estará vigente mañana.
El Verbo de Dios que gobierna el universo visible e invisible, al cual han de servir los profetas de ayer, de hoy y del futuro no cambia ni cambiará jamás, es inmutable. La forma externa de un mensaje puede variar, pero el fondo o la esencia eterna jamás cambia. Todo el mundo puede ser bueno, y la gente ser buena, PERO HAY MUCHOS GRADOS DE BONDAD. En los niveles más bajos de bondad es muy frecuente la mezcla con falsos valores y principios equivocados, e incluso hay gente buena que sirve a la oscuridad o al demonio por ignorancia.
En cambio, la bondad, cuando está en un nivel de excelencia siempre está unida a la sabiduría divina y a un sometimineto a la Voluntad de Dios. Es una bondad iluminada. La otra es una bondad oscura. Y existen grados intermedios entre ambas. Hay que cuidarse de no estar sirviendo al Mal en forma inconsciente, ya sea por nuestras metas, o por nuestro estilo de vida. Chile y sus psíquicos o videntes deben definir muy bien a quien sirven. Los Maestros observan y esperan, pero no con paciencia infinita, más vale apresurar el paso .-
Algunos antecedentes del Autor.
Esta obra ha sido escrita por un chileno de larga y variadísima vida docente. Nacido en 1948 le ha tocado ver y sentir toda la problemática existencial del siglo XX de su patria, y observar los primeros pasos de los hombres por el tercer milenio de la cristiandad.
Ha hecho clases de Historia y de Ciencias Naturales en colegios de educación básica por 31 años, como también de Filosofía por seis años y un año de Biología en colegios vespertinos de educación media de la Quinta Región.
Ha dictado clases de teología para laicos en la Asociación Cristiana de Jóvenes de Valparaíso y de Viña del Mar por dieciséis años.
En 1985 publicó su primer libro, titulado La Ciencia de Los Profetas destronó a los Extraterrestres.
Enseñó religión en colegios básicos municipales y particulares.
También ha publicado numerosos artículos acerca de doctrinas espirituales en las Revistas La Voz de la Guay de Valparaíso y en Revelaciones de Santiago. En esta última revista publicó artículos mensuales por cinco años.
También ha pertenecido a diversas organizaciones esotéricas: en la Sociedad Teosófica, en grupos rosacruces y en logias masónicas, como también la Self Realization Fellowships, de Paramahansa Yoganada por más de cuarenta años.
En algunas de estas organizaciones ha dictado importantes seminarios y charlas esotéricas.
Ha participado en programas de radio en varias radioemisoras de Valparaíso y Santiago por siete años.
Ha experimentado y realizado profundos estudios de hipnosis, de fenómenos espiritistas, de la sanación bioenergética, de Reiki, de los estados alterados de la conciencia en la meditación y en las prácticas del mantra-yoga y de la kriya yoga.
Y ha recorrido Chile entre la Serena y Chiloé más de quince veces, buscando Lugares de Poder y tradiciones mágicas regionales.
Ha dirigido miles de sesiones de oración meditativa y talleres de sueños por más de treinta años, y se graduó con honores como profesor de religión en un curso de posgrado de cuatro semestres, terminado en 1993, organizado por el Obispado de Valparaíso.
El punto fuerte del autor es lo que se denomina Hermenéutica sagrada. O la Interpretación de Textos sagrados. Esto incluye estudios del Tarot, de las Runas, la Kabalah, símbolos alquímicos y la geometría sagrada.
En su biblioteca personal, que consta de más de 3500 volúmenes, tiene los textos hebreos y griegos de la Biblia, el Korán, el Guita, los Vedas, los Upanishad, el Send-avesta, el Tao-te-king, el libro de los Muertos, el Corpus Herméticum, la Suma de santo Tomás de Aquino, obras completas de Madam Blavatski, de René Guenón, y de otros grandes esoteristas.
Y posee muchísimos documentos kabalísticos y masónicos, algunos tan antiguos como textos de Ritos de York de 1865. O el Tratado Teológico-filosófico de Roberto Fludd Andros, en versión tomada por video en la biblioteca de Nueva York, de un texto-reliquia en latín de 1617, y que es un tesoro para los estudiosos del rosacrucismo.
La actual Historia Esotérica y Espiritual de Chile es el fruto de seis años de investigación libresca y de toda una vida consagrada a la experimentación mística y metafísica. El libro se comenzó en julio del 2005 y se ha cerrado en julio del 2011.
Como bien comprenderá el lector culto, el autor no es sólo un erudito teórico en estas materias, sino que una persona que hace rato ha entrado en el reino de los hechos, más allá de las palabras.
Actualmente, habiéndose retirado de la docencia fiscal-municipal hace algunos años, se dedica de lleno a la formación espiritual e intelectual de sus discípulos adultos, que han estructurado una Escuela Esotérica alrededor de su persona y enseñanzas. (correo electrónico: [email protected]) Esta sagrada tarea de formación humana y espiritual de adultos, en el seno del Círculo Esotérico San Atanasio de Athos, ha sido asumida en virtud de haber heredado el manto de su propio maestro, a cuyos pies permaneció veinte años, el Dr. Mario Celso Rosales y Funes.
Este ilustre sabio, maestro de maestros, se encuentra ya decorando las columnas luminosas de la Logia celestial, en el Oriente Eterno.
Era profesor, teósofo, políglota, doctor en filosofía, en medicina, en biología, licenciado en teología y lenguas clásicas, y Gran Inspector General grado 33 de la Orden Masónica Mundial Mixta de Chile, le instruyó en todas las ramas del saber externo e interno, y del poder espiritual y de la visión interna que son necesarias para alcanzar la madurez esotérica en el mundo contemporáneo.
Este ilustre maestro, autor de varios libros de alto rigor científico y filosófico, era vidente, e hijo de un teósofo que practicaba magia ceremonial.
A su enseñanza se debe gran parte de las alturas teológicas que se mencionan al pasar en este libro. A él vaya el justo homenaje que le corresponde, pues por el hecho de haber actuado casi siempre en la sombra, hoy casi nadie lo recuerda.
Es justo, necesario y bueno que Chile reconozca a los maestros y sabios que han nacido en su tierra, pues no sólo en la India y en el Tibet o en Egipto nacen guias y maestros. Siempre han nacido en todas las patrias, y seguirán naciendo en el futuro. El problema es reconocerlos y seguirlos. La grandeza y el futuro de los países dependerá siempre de eso.
Autor:
PROFESOR FERNANDO LAREDO CARTER Registro de Propiedad Intelectual N° 207.318.-
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