Estas relaciones entre fumar y psicopatología tienen como resultado una mayor dificultad para dejar de fumar en aquellas personas que presentan conformidad, así como una mayor vulnerabilidad para iniciarse y mantenerse en el hábito. No obstante, no se pueden realizar conclusiones absolutas ya que no han sido ampliamente investigadas y es un tema que requiere continuos abordajes y actualizaciones.
FUNDAMENTO SOBRE LA ASCENDENCIA SOCIAL
Si se explora el tabaquismo y el consumo de tabaco como enfermedad social, ésta no se aparta del clásico planteamiento de Karl Marx y Federico Engels.
Su obra histórica sobre materialismo dialéctico, como instrumento metodológico, es idónea para el análisis de los fenómenos sociales.
Permite invocar lo social, ubicar las causas de la enfermedad y señalar la necesidad de intervenir precisamente en comunidad. Toca los temas de distribución de la riqueza, acceso a bienes y servicios básicos como, educación, empleo, vivienda, ropa, alimentación, abrigo, paz y seguridad ciudadana. Precisamente, son los mismos puntos que más recientemente se han vuelto a invocar como prerrequisitos de garantía de la salud, descritos en la Carta de Ottawa.
En áreas de la salud, las actividades rebasan el enfoque individual, pasan al terreno de lo social y lo económico. Rudolf Virchow decía: "La medicina es una ciencia social y la política es medicina en gran escala".
El pensamiento sociológico sobre el tema de la enfermedad y la salud permitió al sanitarista estadounidense Charles Edward Winslow (1920) elaborar el concepto clásico de salud pública: "… es la ciencia y el arte de prevenir las enfermedades, prolongar la vida y promover la salud física y la eficiencia a través de los esfuerzos de la comunidad organizada por el saneamiento del ambiente, el control de las infecciones comunitarias, la educación de los individuos en principios de higiene personal, la organizaciones de los servicios médicos y de enfermería , para el diagnóstico temprano y el Tratamiento preventivo de las enfermedades, y el desarrollo de la maquinaria social, la cual asegurará a cada individuo en la comunidad un estándar de vida adecuado para el mantenimiento de su salud".
Lo social también se vive en las etapas avanzadas de las enfermedades asociadas al tabaquismo. En su conjunto, responden como morbimortalidad. Al respecto, el sociólogo estadounidense Talcott Parson dijo: "La enfermedad es la incapacidad del individuo de funcionar en la sociedad".
En efecto, en los estudios cualitativos efectuados en el Instituto Nacional de Cardiología "Ignacio Chávez", sobresale la dramática percepción sobre salud en algunos pacientes, con su testimonio de "es buena hasta que uno ya no sirve".
De modo que, considerar el tabaquismo no sólo como enfermedad genuina del individuo sino también emanada del ámbito social, tiene la ventaja de facilitar la tarea de comprenderla y Rafael César Chávez Domínguez y cols. Julio-Septiembre 2004, Segunda Época, Vol. 17 para emprender actividades correctas y en sentido más propio.
Corregir las desviaciones de salud a partir de la población es encomiable, tanto con el enfoque individual y biológico como el psicológico y social. Se trata del mismo espíritu congruente con la prevención de las enfermedades coronarias, cáncer, respiratorias y otras crónicas que reclaman cambiar hábitos de vida, costumbres y estilo de vivir.
Con estas consideraciones, el fomento a la cultura por la salud se convierte en una necesidad primordial, que es de orden fundamentalmente social.
El tabaquismo en el contexto social
El Programa Nacional de Salud 2001-2006, establece que la salud de la población es una condición indispensable para alcanzar una auténtica igualdad de oportunidades, desde éste abordaje la salud es vista como un valor compartido y como un objetivo social.
En las últimas décadas se observa en el país un descenso en la mortalidad producto de enfermedades infectocontagiosas propias del subdesarrollo y las principales causas de muerte se han modificado; la variación en el panorama epidemiológico de las enfermedades no transmisibles y lesiones, presenta un aumento de tal magnitud, que el sector las asume como patologías emergentes.
El tabaquismo se ubica dentro de las patologías que requieren atención emergente, considerado incluso por algunos especialistas como la epidemia del siglo y los datos demuestran que existe una fuerte vinculación con los principales indicadores de morbilidad y mortalidad.
En México se estima que 122 personas mueren diariamente por causas asociadas al tabaco, esta es una de las razones por las que el tabaquismo se encuentra dentro de los diez problemas de Salud Pública prioritarios. En el presente, se perfila como una enfermedad no transmisible que, de no establecer medidas integrales para su control, rebasará la capacidad sanitaria que se requiere para su atención.
Desde 1980 las enfermedades del corazón, constituyen la primera causa de mortalidad y para 1998 representó el 15.4 % de todas las defunciones; más de la mitad de estos casos (62.4%) corresponden a cardiopatía isquémica, patología asociada directamente con el tabaquismo. La tasa de muerte por cáncer de pulmón ha aumentado en ambos sexos durante los últimos años, en una relación de 2.5 hombres por una mujer. Entre 1992 y 1998 la mortalidad por tumores malignos en labio, cavidad bucal y faringe tendió a incrementarse, alcanzando 735 en el último año.
Además de los riesgos para la salud, los costos sociales incluyen ausentismo escolar y laboral, disminución de la productividad, altos costos en la atención médica, problemas de salud mental, y pérdida en años de vida productiva, entre otros.
La Encuesta Estatal sobre Uso de Drogas en Enseñanzas Secundarias 2004 detecta que el tabaco es la segunda droga más consumida entre los jóvenes de 14 a 18 años, tras el alcohol. A estas edades, las mujeres fuman más que los hombres, aunque éstos comienzan a consumir tabaco antes y lo hacen más intensamente. La edad media de inicio sigue siendo la más baja de todas las drogas, a los 13,1 años.
En España, según los datos de la última encuesta nacional de salud (2003), el consumo diario de tabaco entre la población española de 16 y más años fue de 31,7% ( (un 28,1% a diario y un 2,9% ocasionalmente), un 17,3% declara ser ex fumador y un 51,7% dice que nunca ha fumado. Los patrones de consumo de tabaco varían considerablemente según el sexo y la edad. Según esta última encuesta, en los hombres el porcentaje de fumadores diarios fue de 39,2% y en las mujeres de 24,6%.
Al analizar la evolución del tabaquismo en España de 1993 a 2003 se observa que el consumo de tabaco diario en los hombres ha descendido sensiblemente (de 44% a 39,2%) en contraposición al aumento que ha experimentado el consumo en las mujeres (de 20,8% a 24,6%). Este aumento de mujeres jóvenes fumadoras previsiblemente tendrá repercusiones sanitarias a medio y largo plazo en la mortalidad por cáncer, enfermedades cardiovasculares y respiratorias.
Por grupos de edad, el porcentaje de población fumadora diaria más alto se observa en el grupo de 25 a 44 años (44,9%) seguido del grupo de 16 a 24 (36,7%).
En cuanto a su incidencia sobre la salud de los españoles, el tabaco es la primera causa de enfermedad, invalidez y muerte evitable en el país, y está relacionado directamente con más de 25 enfermedades (especialmente con el cáncer de pulmón y otros tumores, y las enfermedades pulmonares y cardiovasculares).
MAYOR CONSUMO DE TABACO, MAYOR INCUMBENCIA SOCIAL
México no escapa al concepto general de que a mayor consumo de tabaco en el país, mayor la preocupación, además de que ratifica su naturaleza social. El problema no es reciente.
En 1839, la esposa de Ángel Calderón de la Barca, primer Ministro Plenipotenciario español para la recién reconocida República Mexicana, quedó impresionada por el ambiente en una función teatral donde fue invitada: "Fumaba todo el patio, las galerías, los palcos y hasta el apuntador, de cuya concha salía una rizada espiral de humo, daba profecías de oráculo délfico" y reflexionaba "la fuerza de la costumbre no podía ir más lejos".
En la actualidad, las recientes estadísticas publicadas revelan que el tabaquismo creció en 5 millones, bajó la edad de inicio y aumentó la proporción en mujeres.
La exposición al tabaco ha contribuido a elevar la mortalidad de enfermedades del sistema circulatorio, respiratorio y neoplasias. Ha elevado el riesgo atribuible de enfermedades cardiovasculares. Los consumidores de tabaco bajaron de 22.4 a 9.9%, con un costo relativo del 4% de su ingreso; aunque relativamente mayor en personas de menor ingreso, pero la demanda de cigarrillos baratos, sin filtro, aumentó de 0.4 a 4.8%.
La estadística de 1998, en individuos de 18 a 65, años reveló una prevalencia global de 32%; el 51.2% entre varones y el 18.4% entre mujeres. La estadística de jóvenes de 20 años o menos, en el año 2000, alcanzó la proporción de 21.7%; de
26.7% entre varones y de 16.2% entre mujeres.
Las estadísticas informan que entre 1970 y el año 2000 se redujo 50% el consumo per cápita, pero el total no cambió. Comercio y agricultura informan en el mismo periodo que la exportación de la hoja de tabaco disminuyó de 43,085 a 8,817 toneladas; en cambio, aumentó la importación de cigarrillos elaborados. Las iniciativas para desalentar la compra del producto incrementando precios encontró barreras en los altos medios legislativos.
Mientras tanto, sobresalen las tendencias a la alza de muerte cardiovascular: 56,382 en el año 2000, que superan a muertes por enfermedades respiratorias y cáncer. La mortalidad por enfermedades isquémicas del corazón fue de 23,537 en varones mayores de 35 años y 19,714 en mujeres; de enfermedades cerebro vasculares fueron 11,879 varones y 13,403 mujeres; otras enfermedades del sistema circulatorio reportaron 5,583 varones y 6,980 mujeres. Los niños se inician fumando en edades menores que las niñas, pero luego las niñas fuman más que ellos.
ANALOGÍA ENTRE LAS ENFERMEDADES DEL INDIVIDUO Y LAS SOCIALES
Con el tabaquismo ocurre igual que con las enfermedades genuinamente sociales, como la ignorancia, desempleo, pobreza, violencia, corrupción, guerra y terrorismo. No importa en qué segmento de la población ocurra, afecta a todas
y cada una de las personas en la comunidad.
Igual ocurre con las enfermedades crónicas de naturaleza biológica como enfermedades respiratorias, cáncer, diabetes, cardiopatía coronaria y enfermedades cerebro vasculares. Siendo enfermedades físicas y biológicas trascienden al individuo y del huésped saltan e interactúan con el entorno ecológico, social y económico.
El remedio no está en cada individuo, sino en subsanar los problemas comunes de la población.
TRANSTORNOS DE CONDUCTA Y PROBLEMAS PSICOSOCIALES ASOCIADOS AL CONSUMO DEL TABACO.
El transtorno por déficit de atención (TDA) es uno de los más comunes en la población infantil. Se estima una prevalencia del 3 al 5% en esta población. Actualmente, se calcula que el 50% de los niños que acuden a un servicio de consulta externa en un centro de salud mental de primer nivel de atención, busca tratamiento para este trastorno. Los niños con TDA son más vulnerables a presentar trastornos de aprendizaje, de conducta, oposicionalista del desarrollo, depresión, tics y consumo de tabaco.
Este grupo de pacientes, es también más vulnerable a sufrir maltrato infantil, rechazo escolar y aislamiento social. Los adolescentes con TDA tienen mayor probabilidad de tener problemas con la justicia, comparados con sus pares que no padecen este trastorno.
La ausencia de tratamiento puede ocasionar fracaso escolar, social y familiar, multiplicando así los riesgos de que se presenten otras afecciones mentales como son el consumo de drogas y el disocial. Las consecuencias individuales, familiares y sociales de este padecimiento, subrayan la importancia de establecer lineamientos generales para su manejo obteniendo un beneficio para los enfermos y sus familias, de manera de reducir el impacto que tiene individual y colectivamente.
Es también interesante profundizar el estudio entre tabaquismo y depresión, primera causa de discapacidad en el mundo.
LA RESPUESTA DE LA SOCIEDAD ORGANIZADA
A pesar de que actualmente la sociedad conoce más los efectos nocivos del tabaco, los adolescentes mexicanos y las mujeres lo consumen cada vez con mayor frecuencia. La oferta permite encontrar cigarros casi en cualquier comercio formal e informal, disponible incluso para menores de edad o suelto por unidad a pesar de estar prohibida su venta bajo esta modalidad.
En nuestro país existen pocos obstáculos para el consumo de productos de tabaco y frecuentemente no se cumplen las disposiciones al respecto.
Las medidas para prevenir la adicción se han visto frenadas por la baja percepción del riesgo, el clima social imperante, la cultura, las tradiciones que apoyan el consumo. Por otro lado, la falta de manifestaciones conductuales y sociales que asocien de manera inmediata el consumo del tabaco con efectos dañinos, como en el caso de alcohol y otras drogas, llevan a una mayor permisividad la cual a su vez es apoyada por la distancia temporal que existe entre el inicio de la adicción y las consecuencias a la salud. Todos estos elementos hacen más compleja la problemática.
El tabaquismo representa un alto costo para el sistema de salud pues las evidencias demuestran que su impacto afecta sensiblemente la economía familiar, la institucional y la nacional.
Además, es importante considerar que las políticas oficiales expresadas en leyes y reglamentos que pretenden normar la producción, distribución, venta y consumo, no siempre surgen por intereses de protección a la salud, sino que, a menudo, se pondera más el desarrollo agrícola, industrial y comercial que la misma salud pública.
Bajo este panorama, en un esfuerzo por considerar que la salud y la educación son elementos centrales del capital humano, la actual administración establece, en el Programa Nacional de Salud 2001-2006, que en el combate a las adicciones se deben incluir acciones en materia de educación, prevención, tratamiento y control.
Causas que han propiciado la situación actual de tabaquismo en nuestros jóvenes
1. Bajo precio de los cigarrillos.-
Se ha demostrado que si baja el precio del cigarrillo aumenta su consumo y al contrario, cuando sube el precio del tabaco disminuye el consumo. Lo más grave es que esta relación se hace más clara entre los grupos de más baja edad, ENTRE LOS 11 – 13 AÑOS DE EDAD.
2. Campañas publicitarias que animan al consumo.-
En la actualidad no es raro que ciertas marcas de cigarrillos promocionen torneos deportivos (torneos de tenis, rallies de coches o de motos, etc.), se anuncien en cochecitos de juguetes e incluso en gomas de borrar para niños con los anagramas correspondientes.
En México, el tabaquismo arrebata la vida a más de 60,000 personas cada año, con alrededor de 165 defunciones por día, por lo que ante esta situación, senadores del PRD se pronunciaron por aumentar en la cajetillas de cigarros el tamaño de los mensajes que advierten sobre los efectos nocivos de este producto.
Para ello, los legisladores trabajan en una iniciativa para reformar la Ley General para el Control del Tabaco, con la cual pretenden que los mensajes de prevención en las cajetillas ocupen el 50% del espacio de la cara anterior y el 30% de la cara posterior, con pictogramas o imágenes alusivas a los efectos del tabaco.
La última Encuesta Tabaco y Juventud realizada en México reveló que los jóvenes se inician en el consumo de tabaco alrededor de los 13.7 años de edad, y que entre el 20 y 31% de los estudiantes que nunca han fumado piensa que el siguiente año probará cigarros.
El senador José Luis García Zalvidea resaltó que ante este panorama el Estado deberá afrontar que un porcentaje mayor de mexicanos padezca problemas de salud asociados al tabaco por periodos más largos, con la consecuente carga financiera que esto representa.
La orientación para generar la cultura de protección a la exposición al humo de tabaco, la emisión de disposiciones de carácter general para homologar las acciones de protección, prevención y la cesación a nivel nacional en materia de tabaquismo es vital para mejorar la salud de la población mexicana, aseveró el senador.
Más de 3.6 millones de niños y adolescentes en EE. UU. fuman, según revela un estudio del Departamento de Sanidad del país. Regina Benjamín, responsable de Salud Pública, afirma que se trata de una epidemia entre los jóvenes.
El consumo de nicotina entre niños de 12 años hasta adultos de 25, según las autoridades, es alarmante. Cerca del 80% de los consumidores empiezan a fumar a la edad de 18 años, y el 99% antes de los 26, dice el informe.
Esta adicción puede provocar enfermedades cardiovasculares y problemas en los pulmones. Además el número de muertes por este hábito es de 1.200 al día. Por cada fumador fallecido hay dos nuevos, menores de 25 años.
Sin embargo ni el posible daño a la salud, ni las estadísticas pueden resguardar a los jóvenes que encienden su primer cigarrillo. En el estudio, realizado por primera vez desde el año 1994, se acusa a las industrias tabaqueras, que instigan a los menores a iniciarse en este hábito nocivo. Sus productos se encuentran entre los más anunciados en EE. UU. Solo en publicidad gastan unos 10.000 millones de dólares cada año.
"No quiero centrarme en la culpa, sino en la prevención", indica Benjamín. "Quiero saber que estamos haciendo todo lo posible para remediarlo y que los niños dejen de fumar".
En su conclusión, el informe llama a todos a trabajar más para proteger a los jóvenes estadounidenses del tabaco.
Según la Organización Mundial de la Salud, en el mundo cada 6 segundos muere una persona por enfermedades asociadas al consumo de nicotina, mientras que anualmente por estas razones fallecen 5 millones de personas.
Teoría
El Tabaquismo es la drogadicción que presenta un individuo al tabaco, es provocada principalmente por uno de sus componentes activos, la nicotina, acaba degenerando en el abuso de su consumo o tabaquismo.
El tabaquismo es una enfermedad crónica sistémica, perteneciente al grupo de las adicciones, y catalogada por el Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales DSM-IV de la American Psychiatric Association. Actualmente, la principal causa mundial de enfermedad y mortalidad evitable. Hoy en día el tabaquismo es considerado una enfermedad adictiva crónica con posibilidades de tratamiento.Para comprender el tabaquismo se debe estudiar la sustancia que produce la drogadicción.
El tabaco es una sustancia psicoactiva (droga) capaz de generar al menos uno de los siguientes fenómenos: dependencia, tolerancia y síndrome de abstinencia.Dependencia: Quiere decir que fácilmente uno no se puede retirar de una droga.Tolerancia: Que para tener el mismo efecto sobre uno, se necesita cada vez más cantidad.Síndrome de abstinencia: Uno se pone "ansioso" cuando por alguna razón no puede fumarse el cigarro deseado.
En el 2004, la Organización Mundial de la Salud (OMS) estimó 4.9 millones de muertes anuales relacionadas con el consumo de tabaco.
Generalmente cuando una persona inicia con su habito de fumar lo puede hacer por diferentes factores, tales como curiosidad por saber el sabor del tabaco o curiosidad por saber si los mitos del tabaco son ciertos, como es el caso del mito que la primera vez que fumas te sentís mareado y con nauseas, o simplemente porque sus padres lo hacen entonces esa persona lo empieza a hacer.
La adopción del hábito de fumar puede dividirse en tres periodos o etapas:Iniciación: Es el periodo de los primeros contactos con el tabaco. Es la época del "fumador que no fuma". Se trata de encontrar qué sensación esconde el tabaco.Afrontamiento: Es el periodo del "fumador que comienza a fumar". Al principio el consumo es de vez en cuando y superficial, o sea no traga el humo, pero las inhalaciones comienzan a ser más profundas y así va incrementándose la satisfacción física. De esta forma el fumador se convierte en habitual por el hecho de fumar.Mantenimiento: Esta es la fase del "fumador que fuma". Se manifiesta por un malestar que desemboca en la necesidad de fumar, estableciendo así un círculo vicioso cada vez más potente y de mayor frecuencia.
Por más que se diga que el humano es un ser racional, y que sus decisiones son de carácter lógico basadas en la conveniencia y en un análisis costo-beneficio, existe evidencia que pone en duda si existe un "otro yo" dentro de nosotros -que es más emocional, irracional y caprichoso- y es el que realmente toma las decisiones y hasta nos maneja. Esta discusión viene al caso porque en estrategias de posicionamiento predominó por varias décadas la idea de que si se persuadía al consumidor de los beneficios intrínsecos del producto, éste se convencía actuando de manera racional. Pero cada vez más se observa la liga emocional y la psicología evolucionaria vinculada incluso a la bioquímica del cuerpo; es decir, que somos más "animales" de lo que nos creemos: "cavernícolas con corbata, pero cavernícolas al fin", como lo dice Richard Koch.
Abundan las teorías del por qué la gente fuma: aliviar el estrés, problemas laborales, presión social, ejemplo de sus padres, por querer aparentar madurez o independencia, o por rasgos de personalidad hacia tomar riesgos. Algunos de los entrevistados llegaban al grado de decir que fumaban socialmente porque no sabían qué hacer en la fiesta. ¿Racional? Las compañías tabacaleras han hecho lo propio en asumir una posición clara y comunicar masivamente con el fin de desmotivar el uso del tabaco en adolescentes -que es cuando el mayor porcentaje de fumadores inicia-. Pero nadie parece detener a los fumadores. En el caso de las mujeres en Estados Unidos -país que tiene estadísticas de todo- desde 1950 al 2001 la muerte en mujeres por cáncer de pulmón se ha incrementado un 600%. Enfermedades del corazón son la principal causa de muerte en mujeres y las fumadoras son hasta seis veces más propensas a padecerlas. Hay ciertas peculiaridades entre los sexos frente al cigarro, pero en cualquier caso la pregunta sigue siendo: ¿por qué si el cigarro puede matar, la inteligencia y la voluntad no son suficientes? Las estadísticas indican que las mujeres batallan más que los hombres para dejarlo, aparte del vínculo emocional que puede crearse con el hábito de fumar, la razón número uno para que la mujer no deje el cigarrillo es el miedo a subir de peso. Y esto nos lleva al tema de la anorexia. Esta enfermedad moderna busca el estar delgado a nivel cadavérico porque es atractivo. Ahí está Calista Flockhart la protagonista de Ally McBeal, la serie de la complicada vida romántica de una joven abogada. Constantemente se discute su condición anoréxica y sigue apareciendo en la televisión masiva y emerge como rol. Este fenómeno es propio de Occidente. Y en México muchas mujeres, sobre todo en los niveles A/B –clase alta, media alta-, el problema empieza a aparecer desde los doce o trece años. Hay algunos rincones del mundo donde todavía una mujer gordita es más sexy y se preocupan por subir de peso: como los Maradi en Nigeria y los Samoanos al este de África. Pero estos últimos bastiones son lo que la maquinaria de Hollywood -un medio que impacta en el psiquis mundial de lo que está "in" o lo que está "out"- todavía no toca. Al otro lado del continuo está la obesidad. A pesar de la abundancia de información de lo que le conviene al cuerpo humano, la comida chatarra y el comer por ansiedad es otra de las variables dignas de estudio con eso de que "el otro yo" de repente se activa y la persona devora sin límite para aliviar la insatisfacción emocional y compensarla con algo fisiológico; "no puedo parar de comer, no sé qué me pasa", como si se estuviera poseído.
Las drogas son otro continuo que empieza con los calmantes naturales como la Valeriana, pasando por ansiolíticos como Tafil, Rivotril, "balanceadores" como el Ritalin, somníferos como el Rohypnol y el Halcion, antidepresivos como el Prozac; y al extremo, marihuana, heroína, crack, Extasy. Todo lo anterior parece indicar que una vez resueltos los problemas fisiológicos básicos y los de seguridad, el humano siente un vacío que quiere llenar consumiendo, adquiriendo, usando, ingiriendo, pero que parece que nunca se llena. Thomas Jefferson y los constitucionalistas parecen haber documentado este hallazgo diciendo que "los humanos cuentan (por naturaleza) con ciertos derechos inalienables; entre los cuales están Vida, Libertad y la búsqueda de la Felicidad". Nótese que habla de la búsqueda, no de la experimentación de la felicidad, como diciendo "buena suerte gente". El marketing requiere de estudiar varias disciplinas que rigen el comportamiento humano -o el comportamiento del consumidor-, como por ejemplo: antropología, sociología, psicología, economía, y ahora la psicología evolucionaria. Esto es mucho más que las 4P´s. También se tiene que encontrar la forma de mover las fibras "irracionales". El trabajo del profesional nunca termina.
La planta del tabaco pertenece al género nicotina, familia botánica de las solanáceas; es la única en la naturaleza capaz de sintetizar el potente alcaloide nicotina, que conserva aún en sus hojas secas. Es originaria de América y conocida en Europa después del descubrimiento en 1492. Fueron Rodrigo de Jeréz y Luis de Torres los primeros en contar como los nativos de Cuba lo consumían, enrollando las hojas en forma de mosquete e inhalaban su humo.
Puede ser consumido de diferentes formas: en polvo, en cigarro puro, en pipa y para mascar.
Inicialmente era usado con fines medicinales y fue introducido en Europa en 1570 por Jean Nicot (a quien debe su nombre la nicotina), que era embajador francés en Portugal.
La nicotina fue aislada por primera vez por Poseel y Reiman en el año 1828 y fue Orfila quien inició en 1843 las primeras experiencias farmacológicas con ella.
El uso del tabaco como placer comienza en Europa sólo a principio del siglo XVIII, e inicialmente se consumía en pipas y en forma de rapé.
La producción industrial del cigarro se inició a mediados del siglo XIX y la primera fábrica estuvo en Sevilla, España.
Actualmente la producción industrial se hace cada vez más sofisticada, tratando de bajar los niveles de alquitrán y reducir el porciento de nicotina, sustituyendo su acción sobre el paladar con múltiples sustancias químicas (alrededor de 500) para conciliar las demandas de las productoras, la publicidad y los organismos internacionales de salud sobre la mención de advertencia de daño a la salud que deben llevar las cajetillas.
Hoy, es este un tema agudo y polémico, que llega hasta anunciar los llamados "cigarros sin humo" (smokeless), ya que como es conocido, es en el proceso de combustión que se produce la mayor cantidad de tóxicos al organismo. También son llamados "cigarrillos ecológicos" o "cigarrillos limpios" (incluye el tabaco mascado y el que se esnifa) y su consumo es cada vez mayor entre adolescentes en occidente, aunque dañan menos el ambiente, no dejan de ser igualmente dañinos a la salud; especialmente a la orofaringe.
Nos sentimos obligados a ser promotores activos en la lucha contra el tabaquismo mundialmente, ya que en gran medida somos responsables del origen de este dañino hábito y su difusión en el mundo.
FACTORES PREDISPONENTES Y FACTORES PROTECTORES
Entre los factores predisponentes o protectores se citan la Intención del adolescente de fumar en el futuro. El control ejercido por los padres sobre la conducta del adolescente y las normas que establecen. También el hecho de tener amigos fumadores, el grado de cohesión de la familia, el clima escolar y la aprobación o desaprobación por parte de los amigos y a la percepción correcta o incorrecta acerca de la prevalencia de tabaquismo entre los amigos.
En un estudio prospectivo de intervención-control en 14 comunidades rurales de Minessota. Se estudia la influencia de normas sociales sobre el tabaquismo en adolescentes de Edad 14,7 años sobre 3128 chicas y 3146 chicos de 8º a 10º se distribuyeron de forma aleatoria al grupo de intervención o al de control.
Reininger realiza un estudio valorando distintos factores de protección o predisposición y operacionaliza un índice sintético de protección. los factores son:
Poca cohesión familiar
Buscadores de sensaciones
Actitudes positivas hacia las conductas de riesgo
El consumo de tabaco fue menos probable si la cohesión familiar era alta existían práctica religiosas en la familia ,se daba una correcta supervisión por parte de los adultos y el ejemplo de los adultos no fomentaba fumar.
El clima de la escuela y el apoyo de los profesores también se comporta como factor protector frente al consumo de tabaco.
Otra cuestión a tener en cuenta son las relaciones intrafamiliares y dentro de esta se puede considerar el número de comidas familiares como un índice global de funcionamiento de la familia y ello es así porque la comida familiar ejerce varios papeles importantes de: socialización y.-comunicación. Las comidas familiares se asocian a un mayor número de horas que los padres pasan en el domicilio mejores notas escolares, menor número de conductas de riesgo, mejor dieta peso más adecuado y un riesgo cardiovascular más bajo.
Eisenberg evaluó la asociación entre tabaquismo y comidas familiares: 26,7%. Comían 7 o más veces por semana juntos y 33,1% 1-2 veces por semana La cohesión familiar valorada mediante una escala específica se asoció moderadamente a las comidas familiares OR: 0,27 p<0,001.
A menor frecuencia de comidas familiares encontraron más síntomas depresivos, ideas de suicidio y menos autoestima A mayor frecuencia menor consumo de alcohol, tabaco y marihuana. Los chicos que comen más de 7 veces tienen OR: 0,42 para ser fumadores frente a los que no lo hacen nunca Y para las chicas Todas Las relaciones son significativas excepto para autoestima.
Tabaquismo involuntario
La mayor parte de la contaminación ambiental que produce el tabaco procede de la fuente secundaria de humo, la cual contiene una variedad de agentes tóxicos mayor que la principal. El fumador pasivo o involuntario, es toda persona que inhala el humo de la combustión de productos de tabaco que se encuentra en el aire en ambientes cerrados.
Durante muchos años se pensó que el tabaquismo pasivo o involuntario tenía nula o poca importancia, atribuyéndole sólo efectos irritantes sobre la conjuntiva ocular o el tracto respiratorio superior. Las primeras referencias suficientemente documentadas del tabaquismo pasivo se realizaron en la década de los setenta, se estableció que es un riesgo innecesario, involuntario, que repercute negativamente sobre la salud del organismo del no fumador.
En 1986 los hallazgos en la materia llevan a los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos de Norteamérica (NIH), a declarar que fumar pasivamente es causa de diversas enfermedades entre las que se incluye el cáncer de pulmón.
Aunque es difícil evaluar los efectos del tabaquismo pasivo, actualmente se usan los marcadores biológicos que permiten valorar la exposición reciente al humo de tabaco ambiental, así como los métodos epidemiológicos, que evalúan los resultados de la exposición crónica en la salud de la población.
Estudios realizados en sujetos no fumadores han detectado la presencia de tóxicos componentes del humo del cigarro en niveles orgánicos similares a los detectados en fumadores habituales leves.Los fumadores involuntarios obligados a inhalar el humo del tabaco en el ambiente, producido por los fumadores activos en la escuela, el trabajo o en el hogar, llegan a ser considerados como fumadores leves, es decir, están expuestos a los mismos riesgos a la salud que los fumadores activos.
Con estas evidencias se ha llegado a un acuerdo generalizado en la comunidad científica para afirmar, que la exposición crónica del fumador pasivo es un riesgo real para la salud. En México se han hecho declaraciones sobre este tema, para promover iniciativas que protejan a la población no fumadora, pues actualmente se sabe que la fuente secundaria del humo de tabaco es una de las principales causas de contaminación atmosférica en ambientes cerrados.
Con base en los datos de las Encuestas Nacionales de Adicciones, en 1988 42.5% de la población encuestada estaba expuesta, de manera involuntaria al humo del tabaco en su hogar, lo cual representa 11 358 400 de personas; a pesar de que reconocen que el humo del tabaco afecta la salud, esta cifra se incrementó en 1998 a 18 144 032 lo que representa el 52.6% de la población, conformada en su mayoría por mujeres.
Tipos de fumadores
El fumador negativo: Es aquél que fuma en situaciones de crisis y utiliza al tabaco cono un relajante.
El combate al tabaquismo constituye una prioridad en materia de salud pública. Está suficientemente documentado que el tabaquismo involuntario o pasivo, repercute negativamente en la salud de los no fumadores. El consumo de tabaco no representa un problema único para la salud del consumidor, ya que el humo tanto de la combustión del cigarro como el que produce el usuario al inhalarlo y exhalarlo, genera un riesgo para la salud de las personas que se encuentran a su
Alrededor. Dicho problema se presenta en ambientes cerrados, como los espacios laborales, escolares, públicos y familiares. Esta problemática ocasiona que múltiples enfermedades relacionadas con el consumo de tabaco sean adquiridas o se manifiesten, aún en personas que no son consumidoras directas de tabaco.
El tabaquismo es considerado en la actualidad uno de los problemas prevenibles de salud más importantes en el mundo, su consumo se asocia a más de 5, 000, 000 muertes al año, debido a la alta incidencia de padecimientos crónicos invariantes que provoca su consumo.
Además de provocar una serie de complicaciones en la salud, su efecto negativo en la economía se refleja de manera importante; en varios países se ha reportado que las familias gastan entre 10% y 17% del total de sus ingresos anuales en productos de tabaco. Además, las agencias de desarrollo, donadores y agencias multilaterales también están reconociendo que el uso del tabaco tiene implicaciones en la pobreza. Se estima que existen alrededor de 110 millones de fumadores en el mundo. Cada minuto mueren 7 personas por enfermedades asociadas al tabaquismo. Cada día de 14 000 a 15 000 jóvenes comienzan a fumar en los países de altos ingresos y aproximadamente 84 000 en los países de bajos y medios ingresos.
En el mundo se consumen 15 billones de cigarros diarios, una buena proporción de dicho consumo ocurre en los países en vías de desarrollo, por lo que, de no detener esta tendencia estos países enfrentaran las consecuencias del consumo. 60% de los 5700 billones de cigarros que se fuman y 75% de los fumadores se encuentran en esos países. Es decir, las personas más pobres consumen más productos que quienes perciben mayores ingresos. De igual manera se identifican patrones similares en cuanto a educación y nivel socioeconómico.
La atención médica que se da a enfermedades derivadas del tabaquismo cuesta a las instituciones de salud en el mundo más de 200 mil millones de dólares al año. La OMS estima que para la década del 2020-2030 el tabaco será responsable de 10 millones de muertes al año y su costo representará un problema muy grave. En México el tabaquismo representa 165 muertes diarias a consecuencia de todas las enfermedades que se asocian a esta adicción. Estas defunciones representan 10% de las muertes nacionales.
Desarrollo
En todo el mundo, fuman hoy día alrededor de 1.100 millones de personas y se prevé que en el año 2025 el número supere los 1.600 millones. En los países con mayores niveles de ingreso, el hábito de fumar experimenta un descenso paulatino desde hace decenios, aunque sigue aumentando en algunos grupos de población. En los países de ingreso medio y bajo, por el contrario, el consumo de cigarrillos aumenta cada vez más. La mayor libertad del comercio de tabaco está contribuyendo al incremento del consumo en estas naciones.
El hábito de fumar suele adquirirse en la juventud. En los países con mayores niveles de ingreso, alrededor de 8 de cada 10 fumadores adquirieron el hábito en la adolescencia. La edad de inicio en los países de ingreso medio y bajo por lo general oscila en torno a los primeros años de la veintena, pero también está descendiendo. Hoy día, cualquiera que sea el país estudiado, los pobres tienden a fumar más que los ricos.
Los primeros europeos que llegaron a América observaron que los indígenas fumaban en pipa las hojas del tabaco, y copiaron esta práctica y la llevaron a Europa a mediados del siglo XVI. Casi todo el tabaco se consumía en pipas, puros o como rapé. Este modelo cambió a comienzos del siglo XX, cuando cada fumador venía consumiendo más de mil cigarros al año.
La actitud general de la sociedad era que el tabaco aliviaba tensiones y no tenía efectos nocivos (no se conocían). Durante la II Guerra Mundial los médicos recomendaban enviar cigarros a los soldados, por lo que se incluyeron en los lotes de raciones.Sin embargo, los epidemiólogos no tardaron en observar que el cáncer de pulmón, poco frecuente antes del siglo XX, había aumentado de forma considerable a comienzos de la década de 1930. Algunas organizaciones iniciaron estudios comparando las muertes de fumadores con las de no fumadores durante un periodo de varios años, ya sea que murieran de cáncer o de otras causas. Por otro lado, los estudios experimentales con animales demostraron que muchas de las sustancias químicas contenidas en el humo del cigarro son carcinógenas.
En 1962, el gobierno de Estados Unidos eligió un grupo de diez científicos para que analizaran las pruebas de que disponían. Sus conclusiones quedaron incluidas en el informe general sobre sanidad de 1964, donde se afirmaba que "fumar es un riesgo para la salud de suficiente importancia como para justificar la necesidad de acciones apropiadas para remediarlo".
La primera medida que se tomó fue incluir en 1964 una advertencia en las cajetillas. Esta advertencia se reforzó en 1969 hasta quedar así: "Las Autoridades Sanitarias advierten que el tabaco perjudica seriamente la salud". En 1971 se prohibió todo tipo de publicidad de cigarros en radio y televisión.
En las décadas de 1970 y 1980 varias ciudades y estados aprobaron leyes que exigían espacios reservados para no fumadores en los lugares públicos y de trabajo. En febrero de 1990 una ley federal prohibió fumar en todos los vuelos nacionales cuya duración fuera inferior a seis horas. En Europa la situación ha sido similar incluyendo en las cajetillas la advertencia de que fumar es perjudicial para la salud y prohibiendo fumar en los lugares públicos. Estas medidas van encaminadas a erradicar este hábito tan perjudicial.
La evidencia médica sobre los riesgos asociados al consumo de cigarrillo crece cada día; el daño del humo y la nicotina (además de otros compuestos del cigarrillo) sobre los pulmones y el corazón, es algo reconocido por la mayoría de las personas, pero pocos tienen conocimiento del perjuicio de fumar sobre otros órganos, como nariz, senos para nasales y laringe. Según afirman especialistas, el humo del cigarrillo es una de las principales causas de enfermedad a nivel de los senos para nasales, ya que provoca inflamación constante en los tejidos al interior de la nariz.
Cuando esto ocurre, hay serias alteraciones con la respiración; en forma adicional, la nicotina es nociva para la membrana que recubre el interior nasal. El humo no afecta tan sólo a la persona fumadora, sino a niños y adultos alrededor ("fumadores pasivos").Diferentes estudios han comprobado ya la relación existente entre madres fumadoras y posterior desarrollo de asma en sus hijos; en este sentido, es alentador el informe presentado ante la Conferencia Internacional sobre el Tabaco y la Salud, realizada en fecha reciente, donde se afirma que las mujeres embarazadas son más receptivas a mensajes educativos para dejar de fumar.Debido a que el embarazo es un acontecimiento muy significativo para la mujer, 4 de cada 10 embarazadas fumadoras, decide dejar el cigarrillo durante este período; lo anterior se aplica principalmente a mujeres con alto nivel educativo.Sin embargo, otros datos no son tan alentadores; el consumo de cigarrillo ha aumentado en importante porcentaje en las mujeres en general, haciendo que el cáncer de seno haya sido desplazado por el de pulmón como primera causa de muerte por cáncer en mujeres (Salud Hoy).
Pese a inversiones millonarias en campañas educativas, el número de fumadores continúa en aumento, pasando de 25 por cada 100 adultos entre los 18 y 24 años en 1990, a 29 por cada 100 en 1997.Información anterior había demostrado el lazo existente entre cigarrillo y enfermedad del corazón, sin embargo, según afirman los autores del reciente estudio, el cigarro es igualmente nocivo, y personas que lo consumen en forma usual, tienen un riesgo incrementado de morir por problemas cardiovasculares.
Se cree que los elementos tóxicos presentes en el tabaco aumentan la unión entre células encargadas de la coagulación en la sangre (plaquetas) y contribuyen a la formación de placas de ateroesclerosis (placas de lípidos o grasa en el interior de las arterias).
Farmacología
El tabaco contiene más de 4,000 sustancias químicas activas y de ellas al menos 43 son cancerígenas. La composición del humo es muy compleja y sus principales componentes son: el alquitrán, la nicotina, el monóxido de carbono y los irritantes.
NICOTINA
Es el principal componente químico activo del tabaco. La nicotina se utiliza en agricultura como un insecticida y en química como fuente de ácido nicotínico, el cual se obtiene por oxidación de la nicotina. Los fumadores de tabaco absorben pequeñas cantidades de nicotina a partir del humo inhalado, y experimentan ciertos efectos fisiológicos. En pequeñas dosis la nicotina es un estimulante nervioso, especialmente del sistema nervioso vegetativo, favoreciendo la liberación de adrenalina y de otras sustancias del organismo. En grandes dosis, la nicotina paraliza el sistema nervioso autónomo impidiendo la transmisión de impulsos a través de los espacios localizados entre las células nerviosas contiguas (espacios sinápticos). Dosis aún mayores de nicotina pueden producir convulsiones y muerte. Los efectos de la nicotina sobre el sistema nervioso varían según los individuos. En algunas personas la nicotina acelera la formación de úlceras gástricas. En la actualidad, la nicotina se considera una droga que produce adicción física y psíquica.Cada cigarro contiene entre 0,005 a 3,5 miligramos de nicotina. Los pulmones absorben hasta el 90% de la nicotina cuando se da un jalón al cigarro, mientras que esta cifra se reduce al 35% si el humo sólo pasa por la boca. La nicotina supone la principal causa de dependencia al tabaco y su falta(al dejar de fumar) provoca síntomas de abstinencia (nerviosismo, irritabilidad, tristeza, falta de concentración). También provoca la liberación de adrenalina y no adrenalina, que actúan sobre el sistema nervioso aumentando la frecuencia cardiaca, la presión arterial y el flujo de sangre por las arterias coronarias. Esto hace que aumente la cantidad de oxígeno que necesita el tejido cardiaco pero no su suministro, lo que favorece las crisis cardiacas.
ALQUITRAN
Es el principal componente de la brea que se emplea en la construcción de carreteras y compone la parte sólida del humo. Cada calada hace que se deposite una pequeña película de alquitrán en las zonas con las que está en contacto el humo: boca, garganta y pulmones, donde se acumula provocando irritación y alteraciones en las células.
Una persona que fuma una cajetilla diaria, inhala alrededor de 840 centímetros cúbicos de alquitrán de tabaco por añoEl alquitrán y los componentes que forman parte de él (hidrocarburos aromáticos) son sustancias con potente capacidad para producir cáncer en los órganos sobre los que se deposite de forma repetida y durante tiempo.
MONOXIDO DE CARBONO
Es un gas muy tóxico pues, al pasar desde los pulmones a la sangre, impide que el oxígeno se una a la hemoglobina contenida en los glóbulos rojos (hematíes) y forma carboxihemoglobina. De esta forma, la hemoglobina no podrá transportar oxígeno y, aunque el sujeto respire normalmente, éste llegara en menor cantidad a todos los tejidos.Ocurre lo mismo que en las intoxicaciones por el gas del tubo de escape de los coches o por quemar carbón o madera en espacios cerrados (unos accidentes que suelen ocasionar la muerte).En las personas que no fuman, menos del 2 % de la hemoglobina total de la sangre es carboxihemoglobina, mientras que en los fumadores esta cifra puede alcanzar hasta el 14%. Este efecto es determinante a la hora de causar un infarto, igual que sucede con las acciones de la nicotina. También se producen daños en el feto cuando la mujer embarazada fuma y su sangre no lleva el oxígeno suficiente a la placenta.
OTRAS SUSTANCIAS
Algunas de las sustancias químicas asociadas con el humo del tabaco son: amoníaco, dióxido de carbono, propano, metano, acetona, cianuro de hidrógeno y varios agentes cancerígenos. Otras sustancias químicas asociadas con el hecho de masticar o inhalar tabaco son, entre otras: anilina, naftaleno, fenol, pireno, alquitrán y 2-naftilamina.
Tabla #1
Principales partículas y gases que componen al humo del cigarro
PARTÍCULASGASESPrincipio activoCantidadPrincipio activo
CantidadAlquitrán1-40 mg
Dióxido de carbono (CO2)20-60 mg
Agua1-4 mg
Monóxido de carbono10-20 mg
Nicotina1-2,5 &µg
Metano1,3 mg
Fenol20-150 &µg
Isopreno582 &µg
Catecol130-280 &µg
Acetona100-600 &µg
Pireno0-200 &µg
Cianidina de hidrógeno240-430 &µg
Benzo (a) pireno20-40 &µg2-
Butanona80-250 &µg2,4
Dimetilfenol49 &µg
Tolueno108 &µgtn- y p-
Cresol20 &µg
Acetonitrilo120 &µgp-
Etilfenol18 &µg
Acroleína84 &µg
Sigmasterol53 &µg
Amoníaco80 &µg
Fitosteroles130 &µg
Benceno67 &µg
Indol14 &µg
Dimetilnitrosamina10-65 &µg
Nitrosopirrolidina10-35 &µg
Acetaldehído770 &µg
Nitrobenceno25 &µg
La OMS y los CDC desarrollaron la Encuesta Global de Tabaquismo en los Jóvenes (GYTS por sus siglas en inglés) para observar el uso de tabaco entre los jóvenes en países que usan una metodología y un cuestionario central comunes. El sistema de monitoreo de la GYTS tiene como objetivo mejorar la capacidad de los países para diseñar, implementar y evaluar los programas de control y prevención del consumo de tabaco. El financiamiento para la GYTS ha sido proporcionado por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, la Agencia Canadiense de Salud Pública, el Instituto Nacional de Cáncer, la UNICEF, y la Organización Mundial de la Salud-Iniciativa Libre de Tabaco.
La Encuesta Mundial sobre Tabaquismo en los Jóvenes (GYTS, por sus siglas en inglés), un proyecto internacional de monitoreo establecido en forma conjunta por la OMS y los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), les permite a los países analizar el consumo de tabaco entre los jóvenes y de esa manera darle dirección a la ejecución y evaluación de los programas de prevención y control del tabaco.
La encuesta GYTS ha sido completada en 121 sitios en 76 países y la Franja de Gaza/Margen Occidental, y ha recogido datos a nivel nacional en 52 países y a nivel de estados, provincias/regiones y ciudades en 24 países.
Este documento informa sobre las diferencias entre los sexos en el consumo de tabaco, específicamente entre los jóvenes de las seis regiones de la OMS a nivel mundial. Dos hallazgos no esperados surgieron del estudio.
Primero, que hay poca diferencia entre los sexos con relación al consumo de cigarros así como en el consumo de otros productos de tabaco. De 120 sitios que recopilaron información sobre la forma en la que fuman cigarros los varones y las jóvenes, más de la mitad (n=61) no reflejó diferencia entre los sexos. Para otros productos del tabaco, 82 de los 117 sitios (70.1%) no mostraron diferencia entre los sexos.
Segundo, el análisis reveló el uso sorprendentemente alto de otros productos del tabaco con relación a los cigarros. Los hallazgos sugieren que los programas deben enfocarse ampliamente en todos los productos del tabaco, no sólo en los cigarros.
Además, los programas requieren componentes especialmente dirigidos a cada uno de los sexos que se enfoquen en las consecuencias únicas para las mujeres, como los efectos en su sistema reproductivo. La falta de diferencias en el estudio resalta el crecimiento potencial de la epidemia del tabaco, especialmente entre las mujeres en los países en desarrollo en los cuales se encuentra la mayoría de sitios incluidos en este estudio.El 21 de mayo de 2003 fue un día histórico para la salud pública mundial. En la 56a Asamblea Mundial de la Salud, los 192 Estados Miembros de la OMS adoptaron por unanimidad el primer tratado mundial de salud pública, el Convenio Marco de la OMS para el Control del Tabaco. Negociado bajo el auspicio de la OMS, éste es el primer instrumento jurídico diseñado para reducir las defunciones y enfermedades relacionadas con el tabaco en todo el mundo. Ahora es decisivo que los países firmen y ratifiquen el Convenio lo antes posible.
En España a 2003 el 31% de la población mayor de 16 años es fumadoraA partir del 1er de enero del 2006 se ha creado en España el sitio en Internet Vida sin tabaco en donde por medio de ayuda en línea miles de personas dejarán de fumar.
La FIFA y el Comité Organizador del Mundial de fútbol de 2006 han pedido conjuntamente a los aficionados prescindir del tabaco. De hecho, durante la celebración del torneo entre el 9 de junio y el 9 de julio se insistirá en ello permanentemente.
Los efectos del cigarro se reflejan en una serie de enfermedades entre las cuales se destacan las siguientes:
Cáncer de pulmón: El riesgo de desarrollar cáncer de pulmón es 5 a 20 veces mayor en los fumadores que entre quienes no fuman. De 80% a 85% de las muertes por cáncer de pulmón tienen como causa fumar cigarro, cifras que son muy significantes si se tiene en cuenta que el cáncer de pulmón es responsable de 25% de las muertes por cáncer en general, y de 5% de las muertes por todo tipo de causas.
Son numerosos los estudios epidemiológicos que han establecido la relación entre tabaquismo y cáncer de pulmón (CP).
Así, estudios como el realizado por Doll e Hill26 en médicos británicos, o el también clásico de Hammond y Horn en pacientes norteamericanos, concluyen de forma incontrovertible que la eclosión del CP y el aumento del consumo de tabaco se hallan directamente relacionados. Hasta tal punto se ha establecido esta relación que como señala P. Correa "quizá no existe otra enfermedad en la que se hayan cumplido más cabalmente las etapas de investigación epidemiológica".
El tabaco es responsable directo de más del 90% de los casos de CP
En los hombres fumadores el riesgo de padecer esta enfermedad es de 5 a 20 veces mayor que para los no fumadores. En mujeres fumadoras el riesgo es menor que en los hombres, pero significativamente mayor que en las no fumadoras.
Cáncer de laringe: Existe una fuerte asociación entre el cáncer de laringe y el consumo de cigarro; hasta 84% de los casos en hombres se pueden atribuir al hábito de fumar.Cáncer de esófago: Entre 75% y 78% de los casos de cáncer de esófago se deben a fumar. Hay una clara relación entre la dosis de cigarro y la mortalidad relacionada con este tipo de cáncer.Cáncer de vejiga: La proporción de casos de cáncer de vejiga que es consecuencia de fumar varía entre 40% y 60% para hombres y 25% a 35% para mujeres.
Otros tipos de cáncer: Se han relacionado con el hábito de fumar, aunque en menor proporción que los ya mencionados, los cánceres de boca, páncreas, estómago y cuello del útero.
Enfermedad coronaria: Hace referencia a la obstrucción de los vasos sanguíneos del corazón y se traduce en problemas serios como la angina de pecho o infartos del corazón. Se calcula que 30% a 40% de las muertes por enfermedad coronaria dependen de fumar cigarro, y así este hábito se convierte en el principal factor de riesgo modificable para esta enfermedad. Existe una franca relación entre la dosis (edad en que se empezó a fumar, número de cigarros al día, tiempo de exposición y profundidad de la inhalación) y el riesgo de muerte por esta enfermedad. Además, la exposición al cigarro aumenta los efectos nocivos que sobre la enfermedad ejercen otros factores como la diabetes y el exceso de colesterol sanguíneo.
Enfermedad cerebro-vascular: El fumador tiene el doble de posibilidades de presentar un accidente cerebro-vascular; este riesgo es mayor en el grupo de fumadores jóvenes. En las mujeres fumadoras que utilizan anticonceptivos orales la posibilidad de presentar cuadros trombo-embolicas (desprendimiento de coágulos sanguíneos hacia ciertos órganos vitales del cuerpo) y hemorragia subaracnoidea, aumenta hasta 20 veces.
Enfermedad oclusiva arterial periférica: Esta enfermedad consiste en la oclusión progresiva de un vaso sanguíneo, con mayor frecuencia en las piernas, y puede llevar a la suspensión del flujo circulatorio a esa zona y la pérdida de la extremidad. Fumar cigarros es el principal factor que predispone a esta dolencia. Si el paciente tiene además diabetes, la oclusión del vaso se puede presentar mucho más temprano y ser más severa.
Enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC): La EPOC se manifiesta en dos formas principales: La bronquitis crónica que produce tos y expectoración en forma persistente, y el enfisema pulmonar, que genera destrucción del pulmón y dificultad respiratoria en forma progresiva. Se podría aseverar que en la práctica la EPOC es patrimonio de los fumadores, tanto en la forma de bronquitis crónica como en la de enfisema pulmonar. En el gran fumador la posibilidad de EPOC es 30 veces mayor que en el no fumador. Entre 80% y 90% de las muertes por EPOC se presentan por causa de fumar. Adicionalmente, fumar acelera el deterioro de la función de los pulmones, con aumento en la frecuencia de síntomas como tos, expectoración, dificultad respiratoria y vigilancias. Además, se incrementa el número de personas que presentan enfermedades respiratorias agudas.
Efectos sobre el embarazo: Hay una clara relación entre fumar cigarros y hechos como retardo del crecimiento intrauterino, aborto espontáneo, prematuras, muerte fetal y neonatal, alteraciones en el desarrollo físico y mental del infante y muerte súbita en la infancia. Además, hay una relación entre la cantidad de cigarros fumados y la posibilidad de la presencia de desprendimiento de la placenta y ruptura prematura prolongada de membranas.
Riesgos para el fumador pasivo: Los hijos de padres fumadores tienen mayor frecuencia de síntomas y enfermedades respiratorias como bronquitis, neumonías y asma. En los adultos la exposición involuntaria se relaciona con síntomas como irritación ocular, secreción de moco nasal, dolor de cabeza y tos. En las personas alérgicas la exposición al humo de cigarro desencadena o empeora los síntomas de la enfermedad. El contacto crónico disminuye en forma importante la función de las vías respiratorias pequeñas. Además, el fumador pasivo tiene probabilidad una y media veces mayor de presentar cáncer pulmonar que la persona que no se expone al humo.
Sistemas de ingeniería y espacios libres sin humo
Recientemente México aprobó una ley federal y otra en la capital del país que prohíben fumar en espacios cerrados. Estas medidas legislativas están en plena concordancia con las acciones propuestas en el Artículo 8 del Convenio Marco para el Control del Tabaco de la Organización Mundial de la Salud, que México ratificó en 2004. En este ensayo se revisa la evidencia científica que demuestra que la exposición al humo de tabaco causa enfermedades crónicas y agudas en niños y adultos no fumadores.
Toda exposición al humo de tabaco es dañina, por lo tanto sólo la creación de espacios 100% libres de humo de tabaco, tal como lo plantean las nuevas leyes, constituye una intervención efectiva para proteger a la población. Este tipo de medidas se asocian con impactos positivos para la salud, como la reducción de la prevalencia de fumadores y del número de cigarrillos fumados diariamente, así como incremento en las tasas de cesación. En este texto, también proveemos evidencia de disminución de síntomas respiratorios agudos y de hospitalizaciones por infarto agudo del miocardio.
Los principales argumentos de la industria tabacalera son desmentidos con ejemplos bien documentados de que no hay pérdidas económicas causadas por este tipo de medidas y de que la prohibición de fumar es aceptada por la población. Con las leyes aprobadas, el control del tabaco en México se ha fortalecido y entre los retos futuros están la implementación, evaluación y vigilancia del cumplimiento de la prohibición, así como otras leyes similares en los estados.
A los fumadores en ejercicio se les veta la entrada en multitud de sitios, mientras a nadie se le fuerza a ir a los bares o restaurantes que aquellos elijan. ¿Cuál es el problema para que los fumadores –clientes, dependientes y dueños- dispongan de lugares en que los no fumadores sean libres de no entrar? Cada uno puede hacer de su capa un sayo: contra su voluntad no hay por qué protegerlo de vagos peligros. Más de las tres cuartas partes de los españoles da por buena la existencia de locales para fumadores. La ley de marras es una efectiva restricción de la libertad y un estorbo a la conllevancia.
Estolidez. Los redactores de la ley confirman clamorosamente la opinión que de los políticos tiene la mayoría de los ciudadanos. La torpeza preside en especial la lista de espacios vedados al tabaco. Es patente que el legislador ha ido señalándolos a voleo, según se le pasaban por la cabeza, sin ninguna preocupación por el orden y la congruencia.
El artículo séptimo, así, cataloga los tales espacios desde la letra a hasta la equis. Al llegar a la erre menciona las "Estaciones de servicio y similares". A continuación, en la ese, introduce una disposición universal y omnicomprensiva: "Cualquier otro lugar en el que, por mandato de esta ley o de otra norma o por decisión de su titular, se prohíba fumar". Parece que ahí debiera acabarse la cosa. Pero no, el inventario vuelve a la enumeración particular: "Hoteles, hostales y establecimientos análogos", etcétera, etcétera. Para acabar majestuosamente: "En todos los demás espacios cerrados de uso público o colectivo". En comparación, la enciclopedia china de Borges es un modelo de lógica: "Los animales se dividen en a/ pertenecientes al Emperador, b/ embalsamados, c/ amaestrados, d/ lechones…".
De las luces que exhiben los parlamentarios reos del texto baste solo otro espécimen: según el artículo octavo, quien en un hotel quiera el desayuno en su habitación de fumador tendrá que salir de ella para que el camarero se lo sirva y que volver a entrar cuando el camarero salga.
Vileza. Domina la ley el espíritu persecutorio, en un horizonte de entredichos y busca de culpabilidades ("incluso en los supuestos de infracciones cometidas por menores"), de aliento a la intolerancia y la discordia, y de cerrazón sectaria a la realidad de la vida y de los hombres.
Legislación internacional
La Organización Mundial de la Salud (OMS) es el organismo internacional que abandera y estimula el cambio de actitudes de muchos gobiernos a la vez que trata de crear un convenio marco que suscriban los gobiernos y se comprometan a desarrollar acciones más decididas en la prevención y control del tabaquismo. El Banco Mundial en un informe redactado y publicado en 1999, también se ha incorporado a las políticas internacionales de prevención.
Las medidas iniciales de la OMS, se basaron en:
Elaboración de informes científicos por comités de expertos
El desarrollo de los programas Tabaco y Salud (1988 - 1995; 1996 - 2000).
La adopción de resoluciones, la última adoptada en 1996, insta a elaborar un Convenio Marco para la Lucha Anti tabáquica (CMLA), y de uso como instrumento jurídico internacional
El convenio marco para el control del tabaco es un tratado antitabaco promovido por la Organización Mundial del Comercio (OMC) que entró en vigencia el 27 de febrero de2005, tras años de oposición e intentos de negociación de la industria tabacalera.
Países europeos han ratificado el tratado, entre ellos Alemania, Francia, el Reino Unido y España.
También lo han ratificado Uruguay, Australia, Japón, India, Chile México y Canadá.
En plazo de cinco años, estas naciones deberán prohibir la publicidad, la promoción y el patrocinio del consumo de tabaco.
SISTEMAS DE AGRESION ES EL CONSUMO DE TABACO
El fumador encuentra en su hábito y deleite de paladear el humo además del sabor de un cigarrillo, la forma real de auto agredirse.
Así lo refirió el psicólogo Félix Ortega, quien es parte de la Clínica del Tabaco en el Centro de Integración Juvenil (CIJ) La Piedad.
Comentó que durante este mes ha estado manejando una intensa campaña para crear conciencia sobre la adicción al tabaco así como preparar a los ciudadanos para que el próximo 31 de mayo "Día Michoacano sin Fumar", se genere un eco comprometido de todos los fumadores.
Compartió un dato que ha sido publicado en el libro de María Elena Medina Mora y Jesús Kumate, sobre tabaquismo en el que resalta que en el País se consumen anualmente 2 mil 500 millones de cajetillas de cigarros.
En los estudios que el mismo texto presenta –refirió- se habla de que si hubiera un aumento mayor habría menos consumo, es decir si se le aumenta el 10% al producto, el uso disminuiría en un 15%.
Serían 400 millones de cajetillas menos por año y 21 mil millones de pesos por recaudación del impuesto incrementado.
Añadió que hasta ahora las acciones que de forma efectiva han dado resultado para disminuir el consumo de cigarrillos es el que no se permita publicidad de las marcas de tabaco, el que se prohíba fumar en lugares públicos y lo más favorable ha sido el aumento del precio.
"La población así como las autoridades no deben perder de vista que el consumo de tabaco genera daños a la salud para fumadores y no fumadores, además de que deja efectos económicos negativos en un consumidor", comentó.
Félix Ortega, agregó que las políticas públicas, legislación y sectores de salud no deben de quitar el dedo del renglón y favorecer a la prevención de la adicción, pero mucho mejor es dejar de fumar como ya lo hacen en la clínica de la cual forma parte y que anunció tiene las puertas abiertas para la población en general, tanto de La Piedad como de la región, apuntó.
Tienen más riesgos las mujeres fumadoras
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), alrededor de 5 millones de personas en el mundo mueren al año a causa del tabaco.
Las enfermedades cerebro vasculares son relacionadas con el tabaquismo en que las muertes de mujeres superan ampliamente a la de los hombres
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), alrededor de 5 millones de personas mueren al año a causa del tabaco, lo cual representa uno de cada diez adultos, y se estima que para el 2030, las muertes a causa del tabaco aumenten a 8 millones de personas.
Según datos del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP), en México se gastan más de 75 mil millones de pesos al año en la atención de enfermedades relacionadas al tabaquismo.
Considerando que México ocupa el segundo lugar a nivel mundial de mujeres fumadoras, quienes corren mayor riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares por esta causa, y el sexto en número de fumadores.
En un comunicado de la Secretaría de Salud se destaca que las enfermedades cerebro vasculares son la única enfermedad relacionada con el tabaquismo en que las muertes de mujeres superan a la de los hombres, esto es 29.2 contra 21.7%.
El cáncer de pulmón, cáncer cervico-uterino, insuficiencia ovárica prematura, disminución de la fertilidad y menstruación dolorosa son algunas de las enfermedades que también pueden llegar a padecer las mujeres fumadoras.
En la actualidad el 15.9% de la población mayor de 15 años son fumadores, entre ellos hay una mujer por cada tres hombres.
Pese a que las tendencias muestran que los hombres fuman más que las mujeres, destaca que alrededor del 21% de ellos deja de fumar mientras que las mujeres tienen mayores problemas para dejar el cigarro y las que llegan a dejarlo, por lo general reinciden.
Se explica que esto se debe en parte a que los reemplazos de nicotina usados en los programas para dejar de fumar no resultan eficaces para controlar su deseo de fumar; y les preocupa aumentar de peso por dejar de fumar tabaco.
Cabe mencionar que un 69.4% de la población mayor de 15 años nunca ha fumado, siendo mayor la proporción de mujeres, 8 de cada 10 mujeres contra 5 de cada 10 hombres.
En 2008, las enfermedades isquémicas del corazón fueron la principal causa de muerte relacionada al tabaquismo tanto en mujeres (10.9%) como en hombres (10.4%), mientras que las enfermedades cerebro vasculares son las únicas relacionadas con este hábito en las que las muertes de mujeres superan a las de los hombres, es decir, fue muy superior en mujeres con un porcentaje del 6.7% que en hombres que tuvieron 4.6%, respectivamente.
Es importante señalar que cualquier persona está propensa a padecer estas enfermedades y si a esto le agregamos que son fumadores se corre mayor riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares, además de reducir su expectativa de vida en 10 ó 20 años, conduciendo a la muerte prematura.
Por ello, se recomienda llevar una vida sana, dejar de fumar, tener una alimentación balanceada y hacer ejercicio regularmente, así como checar los niveles de presión arterial, colesterol y glucosa en sangre.
Pero lo más importante acudir con el médico para que dé un diagnóstico oportuno y el tratamiento adecuado.
CONSECUENCIAS DE LOS SISTEMAS DE LUCHA ANTITABACO
En las esferas de decisión se plantean varias preocupaciones tradicionales en relación con las acciones antitabáquicas. La primera es que la intervención para controlar el consumo de tabaco traiga consigo una pérdida permanente de puestos de trabajo. Sin embargo, el descenso de la demanda de tabaco no supone una disminución de la tasa global de empleo del país.
El dinero que los fumadores destinaban a la compra de cigarrillos se aplicaría ahora a otros bienes y servicios y generaría otros puestos de trabajo en sustitución de los perdidos en la industria del tabaco.
Los estudios preparados para este informe demuestran que en la mayor parte de los países no se produciría una pérdida neta de empleo y que en algunos se verificarían, de hecho, ganancias netas, si el consumo de tabaco disminuyera.
En realidad, son muy pocos los países, casi todos ellos del África al sur del Sahara, cuya economía depende en gran medida del cultivo del tabaco. En ellos, la disminución del consumo interno tendría escasa repercusión, pero el descenso mundial de la demanda provocaría un gran aumento del desempleo. En estas circunstancias, sería fundamental diseñar políticas para facilitar la reconversión.
No obstante, conviene subrayar que, aun cuando se produjera un descenso importante de la demanda, este sería muy lento, a lo largo de una generación o más.
Un segundo motivo de preocupación es la posibilidad de que la elevación de los impuestos que gravan el tabaco lleve implícito un descenso de la recaudación del Estado. Sin embargo, las pruebas empíricas demuestran que el aumento impositivo incrementa los ingresos públicos.
Ello se explica en parte porque la reducción proporcional de la demanda no supera la magnitud del incremento de las tasas, puesto que los consumidores adictos responden de una forma relativamente lenta a la elevación de los precios. Un modelo desarrollado para este estudio llegó a la conclusión de que un modesto incremento de los impuestos sobre la venta de cigarrillos del 10% en todo el mundo incrementaríamos ingresos por tabaco en alrededor del 7% global, si bien con diferencias en los distintos países.
El tercer motivo de preocupación es el temor a que un impuesto más alto provoque un incremento masivo del contrabando, manteniendo las cifras de consumo de cigarrillos y reduciendo los ingresos públicos. El contrabando es un problema grave, pero en el informe se llega a la conclusión de que, aun en los países en que es muy frecuente, la elevación de los impuestos aumenta los ingresos del Estado y reduce el consumo. Por tanto, más que desechar el aumento de los impuestos, la respuesta correcta al contrabando consiste en tomar medidas enérgicas contra la actividad delictiva.
El cuarto motivo de preocupación es el impacto desproporcionado que el aumento de los impuestos sobre el consumo de cigarrillos podría tener en los consumidores pobres. Los impuestos ya existentes sobrecargan más a los fumadores pobres que a los ricos.
Sin embargo, la preocupación fundamental de las autoridades gubernamentales debería ser el impacto distributivo de la totalidad del sistema de impuestos y gastos, y no tanto el de un impuesto dado.
Conviene observar que, en general, los consumidores pobres reaccionan más al incremento de los precios que los ricos, por lo que su consumo de cigarrillos tenderá a disminuir en mayor medida al aumentar los precios y su sobrecarga económica global será también menor. No obstante, es cierto que quizá su pérdida de los beneficios percibidos del hábito de fumar sea comparativamente mayor.
Desintoxicación iónica, es un tratamiento que combina técnicas milenarias como la Reflexologia con Tecnología Iónica para brindar Salud, Energía y Bienestar. Y es que al introducir los pies en agua y un poco de sal, activa nuestro metabolismo y se moviliza al cuerpo para drenar toxinascomo Azúcar, Grasas, Fármacos, Químicos, Plomo, Tabaco, previniendo yliberando de enfermedades como:
Sobrepeso,
Diabetes
excesos de Azúcar, Colesterol, Acido Urico, Triglicéridos,
Pulmonía,
Insuficiencia Renal,
problemas de Próstata,
Hipertensión,
Cálculos en Vesícula,
Problemas de Hígado graso , Cirrosis, Hepatitis.
Además de que Evita padecer Amputaciones, Diálisis y Ceguera por diabetes.
Ayudando también a superar adicciones de Tabaco, Drogas y Alcohol.
Por una parte depura nuestro cuerpo y por otra parte conlleva a una mejorabsorción de nutrientes. Y es que al drenar toxinas se estimula :
la regeneración celular, que reflejara un aumento de energía y vitalidad,
un fortalecimiento del sistema inmunológico,
Mejora la respiración,
ayuda a relajar músculos, huesos y articulaciones,
Mejora la calidad de sueño, facilitando un descanso realmente reparador
libera del estrés,
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