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Teoría integracionista (página 2)


Partes: 1, 2

Desde mediados del siglo XIX, hasta la Primera Guerra Mundial, Gran Bretaña en su carácter de gran potencia mundial, había sido el eje dominante del comercio internacional, que sin estar institucionalizado se hallaba basado en el librecambio, debido a su economía fuertemente dependiente del comercio exterior, es decir, un sistema sin trabas comerciales y barreras arancelarias importantes, que no tenía tampoco obstáculos serios para el movimiento de los factores de la producción – trabajadores y capitales- y convertibilidad de las monedas al patrón oro, siendo la principal la libra esterlina.

Al terminar la Primera Gran Guerra, Gran Bretaña, a pesar de haber sido uno de los países triunfadores de la contienda bélica, a raíz de la pérdida de poder ocasionado por los esfuerzos de la guerra, empezó a dejar de ser el centro de la política internacional. Esto impactó en las relaciones económicas internacionales, diluyéndose gradualmente en líneas generales el sistema liberal del comercio internacional.

La Gran Depresión de 1929 y la crisis económica mundial que se desató con tal motivo, acentuó la decadencia del sistema comercial, por lo que los gobiernos ya sea por estrategias o para proteger sus economías internas de la recesión, se volcaron a un nacionalismo económico proteccionista, utilizando como instrumentos la elevación de los aranceles aduaneros y la fijación de limitaciones a la importación.

En 1930, Estados Unidos promulga la ley Smooth Hawley por la que se aumentan los aranceles de 900 artículos. Gran Bretaña a su vez, abandona el patrón oro en 1931 y en 1932 aprueba la Ley de Derechos de Importación, con lo que acaba con un siglo de libre comercio. El comercio internacional descendió de tal manera que a fines de 1932 el volumen del intercambio de manufacturas había bajado un 40 %.

Ante estas circunstancias, a partir de 1934, al ratificar la Ley de Acuerdos Comerciales Recíprocos, Estados Unidos -potencia ascendente- comienza a aplicar una política comercial basada en la negociación de acuerdos bilaterales de comercio con determinados países, que básicamente consistía en la apertura de los mercados mediante la reducción de aranceles por productos, a cambio de un trato equivalente o recíproco, es decir, utilizando el principio de la reciprocidad.

Otro principio que reinstauran los Estados Unidos en ese período, es el principio de la "Nación más favorecida", que provenía del siglo XVII y que significa que cualquier preferencia que otorgara un Estado contratante a un tercer país, es automáticamente extendido a las otras partes que firmaron el tratado con dicha cláusula.

El "bilateralismo" sustituye así al "libre cambio" como forma predominante de las relaciones económicas internacionales y se caracteriza por el aumento significativo de los aranceles aduaneros y el establecimiento de restricciones cuantitativas a los intercambios internacionales, fijándose topes a la importación de cada mercadería. Se instaura el monopolio estatal sobre el comercio exterior, el control de cambios y la no convertibilidad de las monedas nacionales, de suerte que si un Estado tenía un saldo acreedor al final del ejercicio respecto de otro, no podía emplearlo en la adquisición de productos o en saldar cuentas con terceros países. En una palabra, el comercio se realizaba en compartimentos estancos entre los Estados.

El "bilateralismo" subsistió hasta el termino de la Segunda Guerra Mundial. Al concluir ésta, emergen en la escena internacional como potencias excluyentes los Estados Unidos y la Unión Soviética, lo que trae aparejado que por primera vez en la historia, el centro de decisión político mundial deja de ser Europa y se traslada a un país americano y a otro euroasiático. Se conforman dos bloques ideológicos con sus respectivas "esferas de influencias".

Los Estados Unidos, siguiendo la visión liberal de sus gobernantes, pregonan la reconstrucción del mundo de posguerra, lo que para ser posible, desde el punto de vista económico, debía estar estructurado en un trípode institucionalizado.

De esa manera, en 1944, en Bretton Woods (EE.UU.) se crean el Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento, y el Fondo Monetario Internacional, que van a estar dentro de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) como organismos especializados.

La función del Fondo era la regulación de la balanza de pagos de los países que solicitaran auxilio financiero a dicha institución, cuando se encontraran con déficit; los préstamos se concedían por plazos breves -un año a un año y medio-. A su vez, la tarea encomendada al Banco consistía en sostener la tasa de inversión principalmente de los países destruidos por la guerra para reconstruirlos, y posteriormente fue la de ayudar a los países en desarrollo; los créditos que otorgaba eran, lógicamente, a largo plazo (diez años en adelante).

La tercera pata del trípode era la institucionalización y regulación del comercio internacional. Para estos efectos, entre 1946 y 1948, a instancias del Consejo Económico y Social de la ONU, se realizaron sucesivas Conferencias en Londres, Nueva York, Ginebra y La Habana, con la intención de crear una Organización Mundial del Comercio (OMC) con la finalidad de quitar las barreras que los estados habían puesto al comercio internacional, principalmente desde la crisis de los años 30.

La versión final de la OMC se elaboró en La Habana en 1948, pero dicho tratado no fue ratificado por los Estados -solo Australia y Liberia lo ratificaron- y por ende no entró en vigor. En Estados Unidos, el principal escollo se dio por las diferencias que existían entre los proteccionistas, que se agrupaban en torno al Departamento de Agricultura y el Congreso y los defensores del libre comercio del Departamento de Estado, influenciados por Cordell Hull. Así, no viendo posibilidad de ratificación del tratado en el Congreso, el presidente Truman ni siquiera lo presentó para su tratamiento.

acuerdo de regulación de las relaciones comerciales entre las partes firmantes, con el objetivo de liberalizar el comercio de bienes manufacturados, con la reducción progresiva de los aranceles aduaneros, usando como herramientas los principios de la "Nación más favorecida" y la "reciprocidad". Recién en la Ronda Uruguay del GATT en 1994, se establecieron los cimientos que dieran origen a la Organización Mundial del Comercio, dependiente de las Naciones Unidas, que comenzó a regir a partir de enero de 1995.

A partir del GATT, la diferencia con relación al período de entre guerra, estuvo basada en el hecho de que el trato de la nación más favorecida no se daba en forma bilateral, sino multilateral. Es decir, que todos los firmantes Como era sumamente difícil conformar una organización internacional del comercio, el Poder Ejecutivo y el Departamento de Estado de los Estados Unidos, con un conjunto de países occidentales deciden en 1947 en Ginebra -antes de la Conferencia de La Habana- crear el Acuerdo General sobre Tarifas Aduaneras y Comercio (GATT), como un del GATT se comprometían a otorgarse mutuamente dicha cláusula de manera automática y por medio de negociaciones comerciales entre los Estados -generalmente los de mayor poder económico-, reduciendo recíproca y progresivamente los aranceles aduaneros, siendo el método empleado, producto por producto. Así, cuando un país concedía una reducción arancelaria de un X % sobre determinado producto a otro, automáticamente esta rebaja se extendía y beneficiaba a todos los demás Estados partes. A la vez, los Estados ya no podían elevar dichos aranceles, en virtud de lo que se llamó la "consolidación de los compromisos"

Sin embargo, por el Art. XXIV del GATT, se admitió la excepción de la aplicación de la cláusula de la nación más favorecida, cuando dos o más países decidieran profundizar su integración económica a través de una Zona de Libre Comercio o una Unión Aduanera, sin que las reducciones arancelarias entre ellos se trasladasen a los otros Estados componentes del GATT.

Concepto de integración:

Existen básicamente dos formas de establecer relaciones internacionales en materia de intercambio comercial, a saber: la cooperación que incluye acciones destinadas a disminuir la discriminación, como es el caso de acuerdos internacionales sobre políticas comerciales y la integración que comprende medidas conducentes a la supresión de algunas formas de discriminación, como lo es la eliminación de barreras al comercio; es este último concepto de integración el que nos interesa para efectos del desarrollo de este capítulo.

Partiendo desde lo mas básico, la palabra integración viene del latín, integratio – onis, que según el diccionario de la RAE significa acción y efecto de integrar o integrarse, constituir las partes un todo, unirse a un grupo para formar parte de él.

Entrando más profundamente y desde una perspectiva de relaciones internacionales, se utilizarán dos definiciones de integración, las cuales son complementarias y ayudarán a una mejor comprensión del fenómeno al que nos referimos en el presente capítulo.

León Lindberg define la integración como " los procesos por los cuáles las naciones anteponen el deseo y la capacidad para conducir políticas exteriores e internas clave de forma independiente entre sí, buscando por el contrario tomar decisiones conjuntas o delegar su proceso de toma de decisiones a nuevos órganos centrales". Por su parte Jorge Mariño dice "se entiende por proceso de integración regional el proceso convergente, deliberado (voluntario) -fundado en la solidaridad-, gradual y progresivo, entre dos o más Estados, sobre un plan de acción común en aspectos económicos, sociales, culturales, políticos, etcétera"(Mariño, 1999: 112).

Cabe preguntarse -antes de profundizar más en lo que contempla un proceso de integración-, el cómo se constituye el deseo o la voluntad de los Estados de pasar a formar parte de una comunidad más amplia, llegando inclusive a ceder parte de su soberanía. Frente a esta interrogante se puede responder básicamente de dos maneras: 1 "la causa de este proceso radica en el empleo de la fuerza, o en la amenaza de usarla, por parte de una autoridad central… o, en ausencia de esta autoridad, como ocurre en la vida internacional, por un Estado o coalición dotados de poder suficiente para utilizar la fuerza o dar credibilidad a la amenaza de hacerlo… 2 "la formación de comunidades políticas se debe fundamentalmente a la acumulación de valores e intereses compartidos, una situación a la cual se llega a través de la interacción entre sus distintas unidades, y por procedimientos consensuales" (Wilhelmy, 1988: 56). En este estudio nos centraremos en los procesos que se llevan a cabo según esta última perspectiva.

Características de los procesos de integración:

Jorge Mariño (1999: 113) ha establecido ciertas características esenciales a todo proceso de integración regional, las cuales mencionaremos a continuación con la finalidad de establecer una generalización. Estas características son:

·                     Los sujetos son los Estados soberanos.

·                     Los Estados emprenden el proceso integrador en forma voluntaria y deliberada

·                     Como todo proceso -aún más, con la complejidad del caso al que se hace referencia- se debe avanzar por etapas, es decir, el proceso debe ser gradual.

·                     Las etapas deben ser cada vez más profundas y dispersas; de allí la necesidad de la progresividad y la convergencia del proceso.

·                     Por último, el proceso de integración se inicia con acercamientos económicos, pero lentamente y dependiendo de cada proceso -conforme a lo estipulado por los Estados miembros-, la agenda va abarcando e incluyendo nuevos temas de las áreas sociales, culturales, jurídicas, y hasta políticas de los países miembros.

Tipologías de integración:

La tipología que expondremos a continuación, cabe dejar claro, es de carácter político. Si bien es cierto, nuestro análisis se centrara principalmente en los aspectos económicos de los procesos de integración, es de suma importancia considerar los factores políticos que influyen en la evolución del proceso, como condicionantes de su éxito o fracaso. Vemos en lo anterior, la importancia de mencionar esta tipología.

Haciendo referencia a una variedad de factores entre los cuáles se pueden mencionar el nivel de integración, el alcance de la integración, la homogeneidad cultural de las distintas unidades y la calidad de los beneficios que se obtienen de la integración, Gianfranco Pasquino (1981: 814) ha esbozado una tipología de la integración, en la que establece tres tipos: territorial, nacional y social; cada una de las cuales se explicarán a continuación.

Integración territorial

Es básicamente, la extensión del poder de un grupo hacia un territorio anteriormente fraccionado. Esto implica la transferencia de la obediencia desde las distintas regiones y desde los distintos grupos a las autoridades centrales. Esta integración puede producirse de diversas modalidades y su objetivo no es sólo la creación de una unidad central fuerte, sino la construcción de un mercado único, el establecimiento de un código jurídico común, un sistema de transporte unificado y un sistema tributario extendido a todos los grupos. Es posible distinguir tres modelos de integración territorial: la conquista, aquí nos encontramos frente a un centro que toma la iniciativa del proceso de integración con el uso de la fuerza en la mayoría de los casos; la fusión, es un proceso lento de acercamiento progresivo entre los diversos grupos geográficamente contiguos, lo cual se puede ver facilitado por la percepción de valores e intereses comunes; y la irradiación, requiere la existencia de un símbolo central aceptado por todos los grupos como punto de referencia, además de una considerable homogeneidad étnica y la necesidad de un período prolongado, de manera que las capacidades del sistema se expandan al mismo ritmo que la tasa de movilización y de las expectativas de los grupos.

A.Integración nacional

Se refiere al proceso de creación de una identidad común a todos los grupos étnicos, lingüísticos, religiosos y regionales con el fin de que se sientan parte de la misma comunidad política. Mientras el proceso de integración territorial consiste principalmente en imponer obediencia, el proceso de integración nacional consiste en la aceptación, por parte de la población, de las órdenes provenientes de las autoridades centrales porque se consideran legítimas, por tanto, el proceso de integración nacional recibe un fuerte influjo del proceso de integración territorial. La creación de un consenso mínimo sobre algunos valores fundamentales, y especialmente sobre la aceptación de algunos procedimientos para la resolución de los conflictos, resulta muy relevante. Es evidente que el proceso de arreglo y solución de conflictos se ve facilitado entre otras cosas, porque la movilización de las masas esté estrictamente controlada por las élites de los distintos grupos y que por otro lado dichas élites se pongan de acuerdo; además la existencia de estructuras partidistas capaces de mediar en los conflictos y de agrupar los intereses, el reclutamiento de los funcionarios públicos y los magistrados de manera proporcional entre los distintos grupos, así como una economía en expansión, son todos elementos que permiten una solución positiva del proceso de integración nacional.

B.Integración social

Se refiere a la superación de la divergencia entre élites y masas, entre gobernantes y gobernados. Esta divergencia no adquiere importancia política mientras las masas acepten como justo el gobierno de las élites. La divergencia entre élites y masas no se debe solo a una desigualdad de acceso al poder, sino que depende también de la desigualdad en la instrucción y en el nivel de conocimientos y de la dificultad de las comunicaciones; su superación requerirá intervenciones complejas y múltiples. Si las élites logran mantener siempre un justo equilibrio entre la necesidad de dar una guía y una orientación a la sociedad y la apertura a los deseos de las masas y a los líderes elegidos por éstas, la divergencia tenderá a reducirse; la superación de las divergencias, por lo tanto, está fuertemente condicionada por la calidad del liderazgo. A medida que avanza la integración, aumenta la disponibilidad de los individuos a trabajar unidos por la consecución de objetivos comunes.

Entendiendo que la topología descrita anteriormente explica los procesos políticos por los cuales se articula la voluntad política como condición necesaria pero no suficiente para llevar a cabo la integración, asumimos que esta ultima entendida como un acto de voluntad política, trae consigo consecuencias de carácter económico que varían a medida que se avanza en el grado de integración. Aquellas consecuencias a que se hace referencia, serán descritas a continuación.

cuenta que en la actualidad no existe un proceso de integración que se Tomando encuentre en la etapa de "integración completa" propiamente tal, es posible plantearse la en necesidad de crear organismos supranacionales en los grados intermedios de la

Para Basaldúa (1996: 10), ya en la unión aduanera deben crearse los órganos necesarios, incluidos aquellos competentes integración, es decir, en la unión aduanera, en el mercado común o en la unión económica.para la formación progresiva del derecho comunitario, resultando igualmente indispensable establecer un tribunal de justicia permanente.

La conveniencia y oportunidad de que los órganos de un proceso de integración regional y/o sus capacidades decisorias tengan o no las características de la supranacionalidad, nos conduce a plantearnos cuáles son las implicancias de la palabra "supranacionalidad", tema que trataremos a continuación.

EL FUNCIONALISMO

Existen diversas perspectivas teóricas para abordar el estudio de las relaciones internacionales, las cuales han surgido principalmente durante el último siglo, producto casi siempre de la turbulenta experiencia del quehacer internacional. Esto ha determinado que con frecuencia dichas perspectivas se basen en la experiencia empírica, sin ayuda suficiente de aquellos principios filosóficos y epistemológicos que tan esenciales son a la teoría.

En una primera aproximación, podemos mencionar la de teorías de alcance global y de teorías de alcance medio (Tomassini, 1989: 63).

Las teorías de alcance global, son aquellas que han alimentado los principales debates teóricos del siglo XX como es el caso del Realismo y el Idealismo, por nombrar solo a las más importantes.

Las teorías de alcance medio por su parte, son complementarias a la visión convencional de las relaciones internacionales que nos entregan aquellas teorías aquí denominadas como de alcance global. Dentro de las teorías de alcance medio encontramos básicamente tres grupos: 1 teorías de las decisiones, 2 teorías sobre el conflicto y 3 teorías de la integración. Finalmente dentro de esta última tipología, podemos ubicar a la teoría Funcionalista de las relaciones internacionales, la cual nos es de interés para el desarrollo del presente estudio.

La reconstrucción de los antiguos y nuevos aliados destruidos por la Segunda Guerra Mundial era fundamentalmente un medio para lograr la contención del avance soviético. Veinte años más tarde, la morigeración de la Guerra Fría y el surgimiento de otros intereses en las relaciones entre los Estados, en un mundo política, social y tecnológicamente más complejo, condujeron a un mayor entrelazamiento entre las distintas sociedades nacionales y a una profunda transformación del sistema internacional, con sus naturales consecuencias sobre la teoría.

Surge así, gradualmente, una nueva visión de las relaciones internacionales que privilegia la integración entre los distintos segmentos de las sociedades nacionales en función de múltiples intereses específicos, dentro de un mundo en que la interacción entre los Estados es cada vez mayor.

La transformación de la realidad internacional contemporánea hace necesario ir más allá de las variables "Poder" y "Seguridad" como únicos o tal vez más importantes elementos de análisis en el estudio de las relaciones internacionales. A diferencia del pasado, actualmente las relaciones internacionales son protagonizadas por un creciente número de centros de poder cuya actuación externa no solo representa los intereses del Estado, sino también los de la sociedad civil organizada. Por otro lado, estos centros de poder se desenvuelven en torno a una agenda más compleja y menos jerarquizada a la cual se incorporan nuevos temas que son manejados por nuevos y múltiples agentes con frecuencia distintos del Estado, los cuales ponen en juego recursos de poder no tradicionales de arenas mucho más numerosas, cambiantes y entrelazadas que antes (Wilhelmy, 1988: 71).

Los elementos mencionados, permiten reconstruir el surgimiento de un sistema internacional integrado por numerosos ámbitos que giran en torno a la agenda, los agentes, los recursos y las arenas antes señaladas y que vinculan de distintas maneras a las sociedades nacionales en función de intereses específicos, lo que permite postular el surgimiento de circuitos y procesos de integración en los campos energético, industrial, alimentario, financiero, estratégico, ideológico, cultural, etc.

Esta visión de la realidad internacional, se presenta como una alternativa real a la visión anárquica de las relaciones internacionales propuesta por la corriente realista y a la relación de dependencia planteada por el estructuralismo.

Para abordar el estudio de las fuerzas que contribuyen a la formación e integración de las diversas comunidades políticas, especialmente de aquellos procesos de integración entre los Estados, son de vital importancia los aportes hechos por la teoría funcionalista de las relaciones internacionales.

El Funcionalismo surge en el periodo de entre guerras, a partir de los trabajos realizados por David Mitrany quien sugería que ante la creciente complejidad de los sistemas gubernamentales, el Estado moderno se veía en una incapacidad de satisfacer las necesidades básicas -en seguridad y bienestar- de su población. Tales necesidades, no sólo creaban la demanda de especialistas altamente entrenados en el nivel nacional, sino que también contribuirían a la emergencia de problemas esencialmente técnicos en el nivel internacional. Para colmar esta carencia, proponía la creación paulatina de una red de organizaciones internacionales que irían asumiendo la gestión de sectores concretos -agricultura, energía, transporte, defensa, entre otros-. Se gestaría así un sistema aterritorial de transacciones, encargado de satisfacer -con la colaboración de los gobiernos estatales y de las poblaciones de los distintos Estados- las necesidades básicas de los ciudadanos. Así poco a poco, surgiría entre los ciudadanos de los Estados participantes en el experimento la conciencia de estar vinculados a los demás por una red cada vez más densa de intereses comunes. De este modo, la percepción de que las organizaciones son útiles para satisfacer las necesidades cotidianas, llevaría a una transformación gradual de las actitudes de los individuos, en el que se produciría una paulatina transferencia de las lealtades -hasta entonces concentradas en los respectivos gobiernos- hacia las distintas organizaciones internacionales encargadas de la satisfacción de intereses. Mediante este método y a partir del desarrollo de la conciencia de las ventajas de la cooperación internacional, se eliminarían las actitudes ultra nacionalistas irracionales que, según el análisis funcionalista, son un factor fundamental en el estallido de los conflictos internacionales violentos.

Aunque la propuesta funcionalista no plantea un final claro para el proceso integrador, Mitrany consideraba que a largo plazo, las organizaciones internacionales se irían coordinando entre sí. Posiblemente, de esta relación conjunta surgiría una organización mundial.

Es importante señalar que el modelo funcionalista de Mitrany no preveía, al menos en el mediano plazo, la desaparición del actual sistema de Estados; éstos no debían desaparecer, sino que habían de participar activamente en la gestión de las organizaciones supranacionales (Salomón, 1999: 3).

Los funcionalistas, en general, se preguntan por el papel que cumple cada uno de los actores de un sistema, lo cual no sólo implica describir la actividad que desempeña, sino también el propósito a que aspira y su aporte al funcionamiento del sistema (o el subsistema) en su conjunto, e incluye la suposición de que estos últimos, en lugar de estar aglomerados por la fuerza, son el resultado de la interacción entre sus diversas partes, cada una de las cuales desempeña un rol necesario para el todo, y de su capacidad para desarrollar pautas de cooperación y establecer una adecuada división del trabajo entre ellas. Pero el pensamiento funcionalista, no obstante constituir tal vez la principal fuente de inspiración de los estudios sobre los procesos de integración, trasciende con mucho este fenómeno y sirve de base a otras corrientes que representan una revisión más radical de la teoría convencional de las relaciones internacionales. Otros autores, entretanto, aunque inspirados en los funcionalistas, han partido de definiciones más precisas del concepto de integración, viendo a éste como un proceso mediante el cual los actores políticos pertenecientes a distintos sistemas nacionales se persuaden de la conveniencia de trasladar sus lealtades, expectativas y actividades políticas hacia un nuevo centro, cuyas instituciones pasan a poseer o reclamar jurisdicción sobre los estados nacionales preexistentes (Wilhelmy, 1988: 56).

Es importante mencionar los aportes realizados por Karl Deutsch a la teoría funcionalista, quien apela tanto a la teoría de sistemas como a la de la comunicación. Deutsch basa la explicación de los procesos de integración en el fenómeno de las comunicaciones, utilizando a su vez, los análisis de Norbert Wiener sobre cibernética y la clásica contribución de Talcott Parsons sobre los distintos tipos de sistemas sociales. "La existencia de la ciencia social está basada en la capacidad de considerar a un grupo social como una organización y no como un conglomerado. Las comunicaciones constituyen el cemento de las organizaciones. Sólo las comunicaciones capacitan a un grupo para pensar unido, para percibir unido y para actuar unido. La sociología necesita comprender el fenómeno de la comunicación". Deutsch analiza las relaciones entre la integración de las comunidades políticas y las comunicaciones. Para él los países son conjuntos poblacionales unidos por flujos de comunicación y de transportes y separados por territorios vacíos o poco poblados. En general, las fronteras corresponden a áreas donde las comunicaciones disminuyen drásticamente; por eso la interacción al interior de los estados nacionales ha sido tradicionalmente mayor que entre los distintos estados. La principal contribución de Deutsch a la teoría de la integración, radica en su trabajo sobre las condiciones en las cuales se formó una "comunidad de seguridad" en el área del Atlántico Norte. Buscando las similitudes entre la formación de una comunidad política (y también de seguridad) en los Estados Unidos, durante el siglo pasado, y la formación de la OTAN y la Comunidad Europea a partir de los acuerdos franco-germanos sobre el desarrollo conjunto de su industria del hierro y el acero, después de la Segunda Guerra Mundial, Deutsch analiza cuantitativa y detalladamente todos los flujos de comunicación generados en esos distintos ámbitos en sus respectivas épocas. Deutsch comprueba que entre los resultados del incremento de las comunicaciones entre las distintas unidades involucradas en dichas experiencias, se cuenta una creciente proporción de valores compartidos, el desarrollo de un estilo de vida distintivo, la percepción de la posibilidad de compartir los premios y castigos atribuidos por el resto de la comunidad internacional en función de la conducta de los distintos miembros de estos nuevos conglomerados, una aceleración del desarrollo económico de la comunidad en su conjunto, y un fortalecimiento de la capacidad política y administrativa de las distintas unidades nacionales como consecuencia de su mayor cohesión y de una creciente coordinación de sus políticas. Según Deutsch, estos logros se basan en el incremento de las comunicaciones y las transacciones entre los nacionales de los distintos estados o partes integrantes de una comunidad en formación más amplia, en la mayor movilidad de las personas, en los crecientes intercambios culturales y en la integración de las élites de cada una de las correspondientes unidades (de una comunidad política de por si. Los estudiosos que tratan de desarrollar una explicación completa del fenómeno de integración económica y social del siglo XX, deben necesariamente recurrir a la teoría funcionalista (Plano, 1971: 404), la cual utilizaremos en el presente estudio, para analizar la evolución del proceso de integración que se ha llevado a cabo en Europa occidental a partir de la firma del tratado de la Comunidad Europea del Carbón y del Acero, actualmente Unión Europea.

Finalmente, para efectos del presente trabajo, entenderemos por teoría funcionalista de las relaciones internacionales aquella que "propone la creación lenta y acumulativa de una comunidad mundial, mediante programas de cooperación económica y social -no necesariamente política- progresivamente más amplios entre los distintos Estados partes del proceso. Los hábitos de cooperación que resultan del éxito del progreso hacia los objetivos de un campo, pueden transferirse a otras zonas que requieran actividad

Condiciones claves del proceso integrativo

Joseph Nye, plantea cuatro condiciones que él estima como claves a todo proceso de integración, las cuales influyen en la naturaleza del compromiso original y la subsiguiente evolución del proceso integrativo. Estas condiciones son las siguientes:

A.        Simetría o igualdad económica de unidades

Las diferencias o similitudes de algunos indicadores como el ingreso per capita y el tamaño de los potenciales participantes en el proceso integrativo medido por el PNB total, parece ser de importancia relativa mayor en los procesos de integración entre Estados menos desarrollados, que en el caso de Estados altamente desarrollados.

Desde esta perspectiva, MERCOSUR es bastante distinto en sus unidades lo que en sí mismo, se constituye como una traba real en el proceso de integración pues Uruguay y Paraguay no han de conservar esta simetría con Argentina y Brasil.

B.        Valor de la complementariedad de la élite

El nivel en que los grupos de élites dentro de las entidades que se integran piensan igual, es de considerable importancia, por tanto dependerá mucho de las élites el grado de integración al que se quiera llegar. Sin embargo se sostiene también que las élites que han trabajado juntas eficazmente en una situación transnacional, a continuación pueden abrazar políticas divergentes que no conducen a la integración.

El nivel hasta el cual los burócratas nacionales se vuelven participantes en la integración regional determinará el nivel de su socialización, considerada importante porque se dice que los burócratas nacionales son cautos ante la integración por la posible pérdida de control nacional.

C.        Existencia de pluralismo

Mientras mayor es el pluralismo en todos los Estados miembros, mejores son las condiciones para una respuesta integrativa a la retroalimentación desde los mecanismos del proceso. Esta es una falencia que se ha dado principalmente en los procesos de integración del tercer mundo, al contrario de lo que sucede en Europa.

Globalización e integración

Mirando hacia atrás en las postrimerías de este siglo, caracterizado como tumultuoso, incierto y de extremos, se pueden observar algunas mega tendencias. Una es el carácter invasor de la tecnología. Otra es la presencia del valor cultural de una pretendida modernidad. Una tercera tendencia es un cambio sustancial del sistema de relaciones entre Estados y sociedades, desde una configuración internacional a una configuración global. En este sentido, el análisis de dos conceptos relacionados con este cambio -la integración y la globalización– adquiere particular importancia (Nef, 2000: 11).

Aunque sabemos que los términos integración y globalización son distintos, en el discurso contemporáneo, ambos se usan, ya sea indistintamente, o en forma muy próxima, implicando que el proceso de integración conduciría a la globalidad, a partir de la lógica seguida por la teoría funcionalista.

Frente a la dificultad de establecer un concepto más o menos preciso de la globalización, optaremos por describir brevemente lo que éste fenómeno implica. Según las palabras utilizadas por Ghymers, "globalización designa un proceso amplio y acumulativo de aumento de las interdependencias entre las economías nacionales y de reducción de las barreras y distancias entre mercados nacionales, a raíz del crecimiento rápido de las transacciones internacionales, tanto para los bienes y servicios como para factores de producción. Este proceso apareció en el campo financiero con la liberalización financiera y la emergencia de un mercado de capitales a nivel mundial, pero el mismo fenómeno mas progresivo se desarrolló, también, en el resto de la economía con la apertura comercial, el fracaso de los esquemas proteccionistas y la evolución tecnológica. Estos desarrollos permiten hablar ya de la emergencia de un mercado único mundial, no solamente financiero y de materias primas sino que, también, industrial e incluso gran parte de los servicios".

Una vez establecido a grandes rasgos lo que implica la globalización y profundizado el estudio de lo que implica la integración -en el capitulo I-, ahora, pasaremos a establecer una diferenciación entre estos dos conceptos:

  • "La diferencia sustantiva entre la integración y la globalización está dada por cuatro factores: La globalización es más amplia y general y contiene en menor grado el elemento explícito o voluntarista de política que existe en la integración. En otras palabras, la integración presupone un grado de negociación y, por mínima que sea, de igualdad entre las partes. La globalización, en cambio, es un proceso impuesto por un contexto externo y en el que los términos de la accesión están, por lo general prescritos a priori.
  • "A pesar de su orientación economicista, la integración se plantea por lo común como un proceso de transfronterización de países, y no sólo de empresas y economías. En este sentido, y a pesar de su base tecnocrática, la integración involucra a múltiples actores sociales y a factores de producción más allá del capital.
  • "La integración es un concepto eminentemente regional, o constitutivo de bloques, antes que un proceso de trilateralización a escala planetaria de esos mismos bloques.
  • "Finalmente, la integración carece de la orientación determinista de la globalización" (Nef, 1994: 12).

Es innegable, no obstante, que los procesos de integración real han facilitado el posterior proceso de globalización y que ambos han sido siempre liderados por los sectores de punta en la economía. Este fue el caso de las grandes empresas industriales y extractivas en los años 60 y del capital financiero y las comunicaciones en los años 90.

El 22 de Enero de 1962 Kennedy planteó realizar una asociación comercial abierta ña y los "cinco", fue vista con recelo y franca oposición por el general De Gaulle, quien entendía que aquello no era sino un hábil medio para perpetuar la supremacía americana, mientras que él estaba dispuesto a desarrollar una política europea menos ligada a los Estados Unidos.

En 1961 Irlanda solicitó la adhesión a la CEE, nueve días antes de que lo hiciera el Reino Unido y poco después Dinamarca. También en 1962 solicitaron la entrada Noruega y España. Frente a la candidatura española, está no progresó hasta la institución plena del régimen democrático.

La idea de la unión política no fue abandonada, ya que la concertación de las políticas exteriores quedó establecida como objetivo fundamental de las políticas de los Estados comunitarios. Pero sobre todo, lo que gravitaba tras el fracaso del plan francés, fue el rechazo de la Francia de De Gaulle a todo planteamiento supranacional.

Durante 1964 se produjeron importantes avances, la República Federal de Alemania propuso la desaceleración del desarme aduanero; el Consejo Europeo propuso la puesta en marcha de una política económica a mediano plazo; se abrió la ronda Kennedy para la reducción de derechos de aduana entre Estados Unidos y la CEE; los "seis" dan un paso hacia la unión monetaria, instituyendo un comité de gobernadores de los bancos centrales de los Estados de la CEE, se pone en marcha el Fondo Europeo de Orientación y de Garantía Agrícola -FEOGA- y se adopta un plan de unificación de los precios de los cereales.

Pero el detonador de la crisis de la construcción europea, será precisamente el problema de los desacuerdos en la política agrícola, principalmente en materia de financiamiento, lo que dio origen a diversos intentos de negociación fracasados.

Las consecuencias de la ruptura de negociaciones, consumada el 1 de Julio de 1965, se tradujo en la ausencia de los ministros franceses en las reuniones de los "seis", lo que se conoce como la política de la silla vacía. De este modo, los ministros de agricultura y asuntos exteriores se abstuvieron de reunirse con sus colegas y el ministro de finanzas francés no estuvo presente en la reunión correspondiente y, asimismo, dejaron de asistir los representantes de Francia a los consejos de la CECA y el EURATOM.

Como las decisiones de los consejos debían ser tomadas por unanimidad, la ausencia de Francia paralizó prácticamente al mercado común, quedando solo abierta la vía diplomática tradicional y los acuerdos bilaterales. Esta crisis duró 6 meses, hasta que los "cinco" enviaron un llamado a Francia, manifestando que la solución de los problemas debía hacerse en el marco de los tratados y de sus instituciones. Ante el frente común de los "cinco", Francia decide reunirse en Luxemburgo, alcanzándose un acuerdo en una segunda reunión -compromiso de Luxemburgo-, donde se estimó que los miembros del Consejo se esforzarían en plazo razonable, para buscar soluciones que pudieran ser adoptadas por todos los miembros en cuestiones de alta importancia que afectaran a uno o más miembros.

Se apela a la conciliación de las divergencias y a que éstas no impidan la marcha normal de los trabajos de la comunidad. Finalmente, los miembros del Consejo propusieron adoptar de forma unánime: el reglamento financiero agrícola, la organización de un mercado de frutas, legumbres y verduras y de materias grasas y la fijación de precios comunes para la carne bovina, arroz, azúcar, aceite de oliva, leche y otros. Por último, dieron la consideración de muy importante a las negociaciones de la Ronda Kennedy.

Si bien el compromiso de Luxemburgo permitió desbloquear la situación, la postura de Francia volvería a marcar enormes distancias, primero en materia de defensa y después a propósito de la ampliación de la comunidad.

 INTEGRACION SOCIAL  EN EL PERU

El Ministerio de Educación, como ente rector y normativo de la educación peruana,

Debe "obligar" a través de las normas pertinentes la creación, implementación, y

mantenimiento de las Bibliotecas Escolares en todos lo centros educativos a nivel nacional; esto implica el financiamiento para la adquisición de material bibliográfico documental, mobiliario y equipo, útiles; debe asegurar un local adecuado y debe asegurar el personal profesional idóneo para su atención, entre otras cosas.

El Ministerio de Educación, como ente rector y normativo de la educación peruana, debe "obligar" a través de las normas pertinentes que en la calendarización del año escolar y en la horas efectivas de trabajo escolar se incorpore por lo menos 1 hora en cada uno de los cursos el desarrollo de los contenidos utilizando de manera presencia de la Biblioteca Escolar.

INTEGRACIÓN EN EL  SISTEMA EDUCATIVO

La biblioteca escolar permite a los alumnos participar en un proceso de aprendizaje activo. Les ofrece información, los apoya en la investigación, les brinda lectura variada y recreación. Estimula su creatividad y promueve la autonomía, permitiéndoles aprender a trabajar con una variedad de fuentes de información. En definitiva, el Centro permite a los alumnos afianzar actitudes, hábitos y destrezas en el campo del aprendizaje y del medio social.

La biblioteca ofrece un espacio para desarrollar la creatividad de los alumnos y

profesores, facilitando y promoviendo la creación de diversos tipos de materiales educativos.

 Muchas veces los profesores no encuentran los recursos necesarios parasatisfacer las necesidades de sus alumnos y su entorno. En esos casos, ellos producen sus propios materiales educativos, como por ejemplo guías de lectura, transparencias, manuales, láminas sencillas, hasta paquetes de multimedia, vídeos, casetes, etc., que pueden permanecer en la biblioteca y ser utilizados por otros usuarios.

Los principales usuarios de los servicios de la biblioteca son los que forman la comunidad escolar, fundamentalmente alumnos, profesores y también padres de familia y personal del centro educativo. Los servicios que ofrece la biblioteca escolar seorganizan con el objeto de satisfacer los intereses y necesidades de aprendizaje, de información y de extensión cultural, y fundamentalmente en apoyo del desarrollo de

Calendario Cívico Escolar: El objetivo es realizar un conjunto de actividades en relación a las fechas conmemorativas del Calendario Cívico Escolar.

Semanas Culturales: Desarrollar un conjunto de actividades en diferentes áreas para estimular y vivenciar la cultura, como por ejemplo: Semanas de la Pintura, de la Música, de la Artesanía, de la Literatura, de la Fotografía, del Cine, de la Ciencia, de la Tecnología, del Turismo, etc.

Exposiciones Bibliográficas: Se trata de desarrollar y preparar en la biblioteca una exposición de libros, recortes, medios audiovisuales, etc., que permitirán a los estudiantes despertar su interés por el tema que se está exponiendo y plantear algunas preguntas.

Concursos: Se trata de desarrollar una serie de concursos donde participe la

Comunidad escolar. Por ejemplo, concurso de ortografía, literatura, fotografía, de investigación, etc.

Club Amigos de la Biblioteca: Motivar a los alumnos, profesores, padres de familiay comunidad educativa en general para integrarse a la biblioteca a través de su participación en el club. Los amigos del club pueden asumir una serie de labores fundamentales del quehacer diario de la biblioteca. El Club de Amigos puede funcionar a nivel de alumnos, de profesores o de padres integrando a aquellas personas

Programas de integración social: El Programa de Integración Social acoge a personas multimpedidas, es decir a aquellas que demás de la ceguera, presentan otros problemas asociados como retardo mental, deficiencias auditivas o impedimentos físicos. Esto hace que se convierta en un grupo humano heterogéneo y complejo por su naturaleza.

A través del Programa se busca intentar que estas personas consigan mayor independencia personal ( aseo, alimentación y vestido), que desarrollan tanto la comunicación expresiva como la comprensión, estimular el interés por el medio ambiente y todas aquellas actitudes que requiere la socialización.

Así como la persona multimpedida presenta varias limitaciones, al trabajar con ellos se evidencia varias habilidades, que al desarrollarlos permiten una diversidad de opciones o multiopciones, lográndose que a través de estas actividades se sientan realizados; teniendo siempre en cuenta la individualidad de cada persona.

La clave para el trabajo con personas multimpedidas es paciencia, persistencia y tolerancia a la frustración, ya que nos encontraremos con muchos tropiezos en el camino, e invertiremos bastante tiempo para obtener a veces pequeños logros.Pero estos avances nos llenan de satisfacción y alegría al saber que estos jóvenes avanzan a pasos lentos pero seguros.

La Familia es la pieza fundamental, su participación y colaboración en el programa afianza el aprendizaje de habilidades y facilita la instauración de nuevas conductas, y sobre todo debe tenerse presente que es el soporte afectivo lo que facilita que su familiar evolucione cada vez mejor.

Proyectos de integración social: Este Proyecto, esta dirigido a la búsqueda de Talentos Deportivos para que participen en los Campeonatos nacionales e Internacionales que el Club participe. • La integración de las niñas, llevando un mensaje de Paz, a través del Fútbol. • El Club y la entidad que apoye, como imagen de Integración y Desarrollo Social. Objetivo General: El Fútbol como mecanismo de Integración y Desarrollo Social.

Objetivos Específicos: • Estimular la Integración y unidad de las niñas de escasos recursos con niñas de otra formación social y valores. • Promover y estimular el Fútbol, para las niñas y señoritas como una recreación sana y como prevención para alejarse de la delincuencia que va aliado al pandillaje y consumo de sustancias psicoactivas-Drogas.

Buscar y/o Construir un Albergue, para que las Futuros Talentos de Fútbol Femenino, de Escasos Recursos Económicos, niñas de provincias, tengan un lugar donde vivir, entrenar y pasar sus tiempos de estudio y ocio. • Facilitar el desarrollo del talento innato en determinadas niñas para llegar a ser futbolistas de alto nivel. • Confraternizar y generar plena identificación de las futbolistas con el Club y con su País.

Más información

El Fútbol como medio de Desarrollo e Integración Social

El Club Real Maracaná de Chosica, se fundó el 02 de Octubre del 2000, la sede principal se encuentra en Chosica, en la sede de Chaclacayo, entrenan las Categorías 89, 91, 93 y 95

El Club Real Maracaná forma jugadoras de gran calidad y trabaja para mejorar el sistema de competencia en el Fútbol Femenino Peruano

La producción de jugadoras de alto rendimiento con el perfil de su propia Institución, la seriedad de su trabajo en las divisiones menores, permite visualizar un excelente futuro.

INTEGRACION EN LATINO AMERICA

La generación de mecanismos de integración social: principales desafíos es la apropiación de las TIC por parte de las organizaciones de la sociedad civil es señalada como fundamental para fomentar la apertura de canales de integración social. La rápida utilidad de estas herramientas permite coordinar acciones, intercambios y reflexiones desde distintos sitios, sin la asunción de costos de traslado y movilidad real, agregándose así un complemento clave para la acción de estas organizaciones. Además, como lo expresa una de las expertas consultadas para este trabajo, "permite una conexión global – local muy importante y creo que eso es fundamental y que se está pudiendo hacer hoy, que eso antes era inviable. Me parece que esto es básico, fundamental, porque si no el poder de la sociedad civil, de las organizaciones sociales, va a quedar muy acotado a lo local." Mediante el uso de los recursos que brindan las TIC, las personas pueden participar e incluir sus expectativas y visiones, trascendiendo elámbito local.

De esta manera, un problema que surge en el ámbito local puede lograr repercusiones

Globales. Las organizaciones sociales, mediante el uso de TIC, pueden propiciar un trabajo en red radicalmente diferente a las estructuras piramidales características de la era industrial. Pero para que el uso de este tipo de herramientas repercuta en el logro de una mejor integración social y en la generación de ciudadanía, las organizaciones deben trabajar fuertemente tanto en la generación de contenidos como también en la generalización de capacidades. Uno de los especialistas consultados dice que las organizaciones también deben tratar de colaborar "para que sectores sociales excluidos generen su propio contenido. ¿Cómo los convencemos que tienen contenidos para Internet? Hay que demostrárselo, hay que acompañarlos, etc.".

El problema de la brecha digital doméstica (tal como se definió), adquiere mayor dimensión si se lo conceptualiza no sólo en términos de ciudadanos excluidos sino también de organizaciones. En este sentido, "la dificultad de muchas OSC de acceder a estos recursos es una auténtica brecha digital organizacional, que las lleva a quedar al margen de un sistema que crece y se supera día a día. […] El incremento sostenido del número de organizaciones que utilizan TIC, más allá del grado de apropiación alcanzado por las mismas, exige reflexionar sobre la distancia que se crea entre aquellas cuyo uso es parcial y aquellas que no tienen acceso a las TIC, contribuyendo a ahondar la brecha organizacional existente, en tanto no pueden incorporar la lógica y la dinámica del espacio de flujos, permaneciendo excluidas de las prácticas y tiempos que dominan en la sociedad red."

La utilización de las TIC genera cambios sustantivos en la forma de relacionamiento de las personas y puede implicar una mayor movilidad ciudadana. Su utilización puede lograr una "auto representación" que impacta positivamente en canales de integración social. Pero para ello, como se mencionó, la mejora en los problemas de alfabetización digital resulta clave. Pero también lo es la generación de contenidos, ya que es de esa forma que se logra una más completa calidad de la democracia. Debe existir una doble acción, paralela, para lograr aumentar tanto el número de personas conectadas como la producción de contenidos. Una de las expertas consultadas expresa que "con la conectividad no alcanza, es la base necesaria porque sino el otro no existe, pero sólo conectándose no quiere decir que haya una democratización y ni siquiera que haya un acceso a la información. Hay que tener la base de infraestructura, poder en términos de estar capacitado y además, generar contenidos, o sea que no sea sólo absorber información sino también generar y procesarla: tener capacidad de análisis, de utilización de esa información, una cuestión más de formación ciudadana o de habilidades en un sentido más amplio." Las OSC podrían trascender mejor su realidad local proyectándose globalmente, interactuando con otras OSC, formando redes para la defensa de intereses y problemas comunes y construir respuestas articuladas. Pero ese tipo de mejoras organizacionales está dada en la visualización de estas herramientas como un recurso disponible y que sean administradas de forma eficiente. Además, la organización social debe ser capaz de ver la posibilidad de contar con información de otras, para así entablar los puentes en función de sus intereses, mejorar su gestión y el beneficio para sus usuarios.

SANTIAGO DE CHILE, 24 (ANSA)- Los gobiernos de Chile y Perú coincidió hoy en que está en curso una nueva etapa de colaboración bilateral, con la idea de que "los sistemas de protección son elementos fundamentales para las democracias estables y progresistas en América Latina".

Se inauguró la constitución formal del Consejo de Integración Social entre ambos países, con la presencia de ministros del área social. Estuvieron los ministros de Educación, Salud, Trabajo y Previsión Social, Planificación y Servicio Nacional de la Mujer, y por Perú los titulares de las carteras de Educación, Salud, Trabajo y Promoción del Empleo y de la Mujer y Desarrollo Social.

"Lo que estamos haciendo es agregar un componente de integración social, a la integración en el plano económico con Perú", resaltó el canciller chileno, Alejandro Foxley.

CONCLUSIONES

Luego de finalizado el presente trabajo y una vez profundizado en los conceptos de Funcionalismo e Integración como objetos de estudio del mismo, podemos afirmar, en teoría, que los procesos de integración -principalmente en sus aspectos económicos- debieran seguir una lógica bastante clara, partiendo desde lo que denominamos como una zona de libre comercio, hasta llegar a lo que se conoce como una unión económica y monetaria, para posteriormente dar un paso bastante mas difícil hacia lo que sería la unión política, lo que implica entre otras cosas la creación de instituciones supranacionales, es decir, con la atribución de dictar normas obligatorias para los Estados y cuya aplicación sea inmediata y prevalente, producto de una voluntad de ceder grados de soberanía, siendo esto ultimo una de los aspectos polémicos y que hace difícil el avanzar en la integración.

Según lo visto en el segundo capítulo de este trabajo, primero es necesario reconocer que la integración es posible gracias a una voluntad manifiesta o explícita por parte del poder político de cada uno de los Estados que se hacen partícipes de un proceso de integración. Lo anterior nos lleva a afirmar que la integración es un proceso esencialmente político -por tanto una de sus características es la presencia del conflicto-, siendo este último un elemento que está presente durante todo el proceso integrativo independientemente del grado al que se llegue o se quiera llegar. Esto se ve reflejado en las diferencias de opinión entre los Estados partes del proceso de integración europea respecto del alcance que debiera adoptar la evolución europea, dividiéndose las opiniones entre federalistas y unionistas.

Si bien el elemento político es de gran importancia, no es posible considerarlo como una variable aislada, ya que, de manera obligada debemos considerar otros factores que complementan lo que hasta ahora hemos dicho.

El proceso de integración europeo, si bien no ha estado exento de problemas, se ha visto reforzado basándonos en lo que hemos dicho hasta el momento, por la capacidad de los gobiernos de los Estados miembros de alcanzar niveles satisfactorios de consenso a pesar de las diferencias existentes entre ellos. Aunque es necesario destacar que mientras más se quiere avanzar en la integración, se presentan mayores dificultades para alcanzar acuerdo.

Otro factor que ha dificultado el avanzar hacia lo que sería una unión política, es la escasa participación de los ciudadanos europeos en la única instancia de representación directa que contempla la Unión -el Parlamento Europeo-, lo que estaría suponiendo un débil traspaso de lealtades por parte del ciudadano común para con el proceso de unión, lo que nos lleva a afirmar que solo bastaría con que exista voluntad por parte de los gobiernos para poder llevar a cabo la integración. Ahora, si miramos el caso de MERCOSUR, nos encontramos con la existencia de la voluntad política por parte de los gobiernos, pero con un proceso de integración claramente en decadencia, lo que nos lleva a afirmar que la voluntad política es una condición necesaria pero no suficiente para llevar a cabo de manera exitosa la integración.

Un proceso de integración, ya sea en sus aspectos tanto políticos como económicos, se hace mucho mas difícil en presencia de factores como la asimetría económica entre las partes del proceso -el ejemplo más cercano es el caso de América Latina con el MERCOSUR-, el subdesarrollo como complemento de lo anterior y por tanto la inestabilidad producto entre otras cosas del descontento social que se manifiesta en forma de violencia, la escasa capacidad de adaptación a los cambios y la incapacidad de las élites de llevar a cabo un proyecto común de integración. Lo anterior visto desde una perspectiva funcionalista, se constituye en un obstáculo al proceso de derrame que supone la integración funcionalista. En este sentido nos es fácil entender el porqué del éxito en el proceso de integración de Europa, ya que precisamente los Estados que iniciaron el proceso y los que posteriormente se fueron integrando, en su mayoría se caracterizan por ser países industrializados, con economías más o menos simétricas, con una alta capacidad de adaptación por su condición de países desarrollados y por último con una élite que es capaz de complementarse y alcanzar acuerdos.

BIBLOGRAFIA

PAIDOS, 1990, Argentina. Arnaud, Vicente. MERCOSUR, Unión Europea, NAFTA y los procesos de integración regional, Aboledo-Perrot, 1996, Argentina.BARBé, Esther Relaciones Internacionales, Tecnos, 1995, España.Bobbio, Norberto Diccionario de política, Siglo Veintiuno Editores, 1981, México.CECCHINI, Paolo La Unión Europea: eficacia y democracia, McGraw-Hill, 1994, España.CELARE América Latina – Unión Europea. Mas allá del 2000, Ediciones CELARE, 1997, Argentina.Deutsch, Karl Análisis de las relaciones internacionales, Editorial Deutsch, Karl El Nacionalismo y sus alternativas, Editorial PAIDOS, 1971, Argentina. Deutsch, Karl Los nervios del gobierno, Editorial PAIDOS, 1985, Argentina. ugherty, James E. Teorías en pugna en las relaciones internacionales, Grupo editor Latinoamericano, 1993, Argentina. Heredia, Raimundo "América Latina: una mirada al proceso de integración de la región", Documento de Trabajo Nº 64, Instituto de Ciencia Política, Universidad de Chile, noviembre de 1997, Chile. HOLZMANN, Guillermo "Dilemas actuales de la integración. Un enfoque desde la ciencia política", en Revista Política y Estrategia, 1995, Argentina. Mariño, Jorge La Supranacionalidad en los procesos de integración regional, Mave Editor, 1999, España. Morgenthau, Hans Lucha por el poder y la paz, Colección Constelación Internacional, 1963, Argentina. Nef, Jorge "Los procesos de integración y la globalización", en Revista Diplomacia Nº 82, Academia Diplomática Andrés Bello, Enero-Marzo 2000, Chile. PEREZ, Rogelio Historia

Dedicatoria

Dedicamos este trabajo a todas las personas que han colgado el prejuicio de discriminación y luchan por la integración social.

 

 

Autor:

Cahuana Matute Lorenza

Sánchez Villano Elena

Universidad Inca Garcilaso De La Vega

Nuevos tiempos y nuevas ideas

Facultad de Psicología y Ciencias Sociales

Escuela de Trabajo social

Profesor Mg. Eva Riquez

Ciclo: III

Turno: Noche

2008

Partes: 1, 2
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