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El “factor” Bernanke: otro “Maestro” que se cae del tabernáculo (página 2)

Enviado por Ricardo Lomoro


Partes: 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8, 9

El Banco Central Europeo (BCE) inyectó casi 400 mil millones de euros (WSJ – 7/8/07) para créditos a corto plazo en el mercado monetario, la FED estadounidense abrió la espita crediticia más de 400 mil millones de dólares (web.urgente24.com – 10/10/07), pero además, bajó claramente los intereses y alargó el plazo de los créditos a corto plazo. En todo el mundo se ha seguido el ejemplo. Aún si con eso pareciera posible superar la crisis del mercado monetario, lo cierto es que la crisis financiera mundial no ha hecho sino comenzar (En la crisis de las punto com la "regadera" llegó a los US$ 900.000).

Para cubrir pérdidas, los hedge funds y los bancos venden los títulos que aún conservan algo de valor; títulos petrolíferos o títulos de metales. Muchos inversores conservadores del mundo entero huyen buscando refugio en títulos seguros (bonos estatales). Las operaciones en los mercados de valores se aplazan, el mercado de nuevas emisiones se viene abajo, el segundo motor del rally bursátil entra en la "UVI".

Si las últimas señales que provienen de los bancos (30/10/07) sirven como indicador, los estragos provocados por las turbulencias en el mercado del crédito podrían prolongarse por más tiempo del que anticipaban muchos.

Los inversionistas reaccionaron con optimismo a principios del mes de octubre cuando los principales bancos del mundo anunciaron miles de millones de dólares en pérdidas relacionadas, en su mayoría, a valores respaldados por préstamos hipotecarios de Estados Unidos. Las acciones de los bancos subieron ante la expectativa de que lo peor había pasado. Ahora, sin embargo, eso ya no parece realista.

Se creía que lo peor ya había pasado y que el tercer trimestre sería una oportunidad para que los bancos limpiaran su contabilidad, pero en la última semana o dos, se ha vivido un resurgimiento del nerviosismo y de la volatilidad y se han reavivado las preocupaciones sobre el mercado de hipotecas de alto riesgo.

En la tercera semana de octubre la firma de calificación de riesgo Moody's Investors Service redujo, o dijo que pronto reduciría, la calificación de riesgo de miles de millones de dólares en obligaciones de deuda colateralizada (CDO).

La banca de inversión no se fía de la banca de inversión. O bien no sabían, o si sabían no lo contaron. Ninguno de estos escenarios es bueno. Tras las millonarias pérdidas que han aflorado por la exposición a las hipotecas de alto riesgo en varias de las principales entidades financieras del mundo, el mercado se ha llenado de informes negativos que recomiendan a los inversores mantenerse alejados del sector por la percepción de que lo peor puede estar por venir.

Las advertencias -que han provocado una verdadera hecatombe en las cotizaciones de las primeras sesiones de noviembre- cobran mayor relevancia si se tiene en cuenta que proceden de las propias entidades implicadas en la crisis. El analista Roger Freeman (de Lehman Brothers) recortaba el precio objetivo de Merrill Lynch de 79 a 58 dólares y el de Bear Stearns, de 145 a 117, por el esperado deterioro de los fundamentales debido a las subprime. Debido a las pérdidas de miles de millones de dólares, las acciones de las firmas de Wall Street han caído en picada. El índice Financiero de Dow Jones había caído 14% en el año, hasta principios de noviembre, frente a un alza de 9% del Promedio Industrial Dow Jones.

La banca americana no es la única víctima de la complicada situación del sector. Goldman Sachs alertaba de una caída mayor en bolsa de la banca europea por el deterioro de los mercados crediticio e inmobiliario. "Habrá revisiones a la baja de las estimaciones de beneficios. El ciclo bajista va a ser más profundo y duradero de lo previsto", vaticinaba Oppenheilmer, estratega jefe para Europa de Goldman Sachs.

Pero no son sólo estas noticias sobre más posibles amortizaciones lo que está causando los últimos brotes de temor y precaución en los mercados. El motor real es la incertidumbre. La instituciones financiaras no han sido totalmente francas acerca de su exposición a este tipo de títulos y los inversores han desarrollado una saludable desconfianza ante todas las cifras que se les proporcionan. Es una situación frágil, incluso peligrosa.

Hemos llegado aquí, desde luego, debido a la crisis de crédito que en el último verano de 2007 (en el hemisferio norte) ha absorbido gran parte de la liquidez para los CDO relacionados con las subprime y hay todavía una gran diferencia entre los bajos precios que la gente ofrece por ellos y los que los bancos propietarios creen, o esperan, que valgan.

El final del túnel dista aún por mucho de estar a la vista. Bancos y hedge funds, en el mundo entero, siguen quitándose de encima derivados crediticios preñados de riesgo que habían financiado con dinero japonés barato; los créditos tienen que ser devueltos en yenes; entonces, se dispara hacia arriba el cambio del yen y se hunden las cotizaciones en Tokio. ¿Vendrá ahora la crisis del dólar, y con ella, la crisis del comercio mundial, con las consiguientes consecuencias, para las economías exportadoras de China (más otros países "emergentes") y Alemania (más otros países europeos), en lo que respecta al mercado estadounidense? Lo peor no ha pasado…

Animal Spirits: "Historias" de ayer… y de hoy – ¿Aprendemos algo de las crisis? – – ¿Estamos mal, pero vamos mejor? – La farsa continúa… – Junio 2011

(Parte II) – De Greenspan a Bernanke (la "regadera" y el "helicóptero")

Alan Greenspan (la era de la "exuberancia irracional")

Párrafos extraídos de mi Ensayo: Al "Maestro" con cariño (50 variables y ningún rigor) Hagiografía -no autorizada- de Alan Greenspan, mayo de 2005.

Introducción

"Los pecadores de Wall Street deben ser castigados prontamente". (Alan Greenspan – 16/04/04)

"Es necesario tener cuidado al reformular las reglas y las prácticas que ya no son suficientes para afrontar la reciente ola de escándalos en Wall Street…los legisladores deben evitar provocar daños colaterales". (Alan Greenspan – 16/04/04)

"Algunas prácticas y reglas han perdido su utilidad y requieren ser actualizadas. Pero al hacerlo debemos ser cuidadosos y no erosionar el paradigma que ha gobernado voluntaria y efectivamente las operaciones". (Alan Greenspan – 16/04/04)

Un día, cualquiera, la bolsa comienza a caer, el Nasdaq, cuyo oro relucía a más de 5000 puntos, y pasa a boquear, arrastrándose por los 1800 (agosto/2001).

¿La culpa la tiene Greenspan que pinchó la burbuja? ¿El batir de las alas de una mariposa en China? ¿O es que el príncipe estaba desnudo?

¿Es ésta una derrota huérfana?

¿Es ésta una crisis bursátil (especulativa) o una crisis sistémica?

No es la primera vez que ocurren estos eventos especulativos (primero), estos derrumbes caóticos (segundo) y estas réplicas del temblor esperables (tercero). Para sólo citar el pasado reciente: crac de 1987, minicrac de 1989, crisis de 1997, crisis de 1998…situación reciente.

Pero ahora la financierización de la economía (hija putativa del librecambio y la globalización) provoca estallidos más intensos, más extensos, y de efectos más prolongados, por mucho que les pese a los profetas del fin de los ciclos económicos.

Ese es el drama de la Nueva Economía, entre la velocidad y la verdad, entre lo intangible y lo tangible, el mito, la fantasía y la ilusión, han dejado a los actores de sí mismos frente al crash, la recesión…la depresión. Ahora la crisis lo contagia todo…

Intentaron pasar de los beneficios decrecientes a la economía de escala creciente.

Apabullaron con pronósticos y predicciones. Ayudados por los profetas de la nada -perdón- FMI, BM, OCDE, OMC,… intentaron pasar del mercado al supermercado.

Del arte de lo posible al arte de lo imposible… El dominio despótico del Leviatán económico.

En conocimiento de todo ello hace la Fed su entrada… El guardián de dinero se transforma en el guardián de la bolsa (que no es lo mismo)… Decide atizar el fuego, acepta sembrar problemas para el futuro, dándonos la razón a los que decimos que los gobiernos son instrumentos de los capitalistas financieros… dándonos la razón a los que decimos que es la sociedad la que paga el precio del rescate.

Los pesimistas (de ahora) tenemos fundamentos para creer que existen defectos en el sistema financiero actual que ponen en peligro la prosperidad económica mundial. Los pesimistas (de antes) tenemos pruebas para sostener que las crisis de la bolsa pueden ser los desencadenantes de una recesión prolongada… y más allá la depresión.

A todo esto la Fed opta por abordar el problema de la confianza…

Ofrece crédito ilimitado… Se dispone en forma incondicional y abierta a proporcionarlo…

Que fluya el dinero

¿Para quién? Para los especuladores del parqué… Para los hacedores de mercado… Para los mariscales de la derrota…

¿Por qué?… Tienen ustedes la respuesta…

¿Para qué?…Tienen ustedes la respuesta…

Ben Bernanke (la era del "quantitative easing")

Del conundrum de Greenspan al conundrum de Bernanke

El "Conundrum de Greenspan" y la liquidez internacional

En febrero de 2005, Alan Greenspan, quien presidía la Reserva Federal de los Estados Unidos, dictó un discurso en el cual advirtió que se estaba viviendo un "Conundrum" en las tasas de interés norteamericanas. Esto se debía a que si bien la Fed se encaminaba hacia su segundo año consecutivo de apretón monetario (subiendo la tasa de referencia -Fed funds-), las tasas de largo plazo no acompañaban esa misma suba, sino que se mantenían inusualmente incambiadas.

La causa principal que gestaba este fenómeno era la abundante liquidez internacional que procuraba bonos del tesoro norteamericano de largo plazo, y ello conducía a un descenso de las tasas de interés que pagaban estos instrumentos (simplemente por la ley de oferta y demanda).

Esta liquidez que ha venido inundando al mundo de dólares, se ha visto reflejada en tasas de interés internacionales históricamente bajas, así como un notable descenso en las primas de riesgo para las economías emergentes, a la vez que se ha producido un extraordinario aumento en el precio de los commodities (todos efectos que han conducido a la bonanza actual en los países emergentes).

Como es sabido, el gran ahorrador a nivel mundial ha sido China que ha desarrollado un proceso creciente de integración a las corrientes globales de comercio. Este inmenso y nuevo ahorrador global ha acumulado reservas internacionales en la forma de bonos del tesoro norteamericano de largo plazo, cuyo objetivo principal ha sido no permitir apreciar su moneda frente al dólar para favorecer a su sector exportador. Sin embargo, mantener ese ahorro bajo la forma de bonos estadounidenses ha tenido un inmenso costo de oportunidad: el de invertir en activos más rentables tendiendo a la eficiencia en el manejo de las reservas.

Bernanke da la vuelta al "conundrum" de Greenspan… para mal

A pesar de la bajada de tipos a corto, la subida a largo encarece las hipotecas y pone más presión en la vivienda. ¿Se acuerdan del "conundrum"? Pues bien, resulta que ahora ese "conundrum" empieza a invertirse y a funcionar al revés. Es decir, ahora lo que bajan son los tipos a corto plazo después de la sacudida que metió Bernanke, los tipos a largo no bajan, sino que suben. Es decir, tenemos otro "conundrum" sólo que al revés del de Greenspan. Y puede ser peor.

La razón que están citando los analistas para este comportamiento de la deuda en los últimos tiempos reside en los mínimos históricos del dólar frente al euro y los máximos del petróleo y otras materias primas. Ambos elementos son claramente inflacionistas y eso, un repunte de la inflación, es lo que anticipan los tipos de los bonos. No hay que olvidar que uno de los riesgos que asumía Bernanke con su bajada de tipos era precisamente una explosión inflacionista o incluso estanflación (si además de dispararse los precios, la actividad se estanca por la crisis de crédito). Pero la Fed y Wall Street consideraron que era más grave el riesgo de recesión que el de inflación.

Más leña a la crisis inmobiliaria

Este "conundrum invertido", aunque está normalizando la pendiente de la curva de tipos y, por tanto, aleja las perspectivas de recesión, dista mucho de ser positivo para la economía. De hecho, es muy peligroso si tenemos en cuenta que la mayor amenaza para la economía, de la que deriva toda la crisis "subprime" y del mercado de crédito, es la crisis del mercado inmobiliario.

En EEUU, las hipotecas no se referencian a un tipo a corto plazo como nuestro euribor (lo que hacemos aquí es una aberración cuando hablamos de deudas a 30 años o más). Allí utilizan referencias más lógicas, como los tipos de los bonos a 10 ó 30 años. Por eso, si estos tipos suben aunque la Fed los baje a corto plazo, los que tienen hipotecas a tipo variable verán encarecerse su pago mensual.

Y ya sabemos lo que va detrás: aumentan los impagos -la mayoría de las hipotecas "subprime" están a tipo variable- y los desahucios, lo cual incrementa la oferta de vivienda y reduce a la demanda… y finalmente, se retroalimenta la caída del precio de la vivienda. Sin contar con el nuevo golpe para el gasto de consumo que supone el aumento de la letra de la hipoteca, ya bastante golpeado por la subida de los carburantes.

A Bernanke se le complica la vida. El "conundrum" ha vuelto… pero al revés: suben los tipos de interés

La interpretación inflacionista, más negativa, es la que sostiene que los bonos descuentan una escalada de los precios precisamente por culpa de una política monetaria demasiado laxa. Esta explicación está relacionada con el dólar, puesto que esta política ha resultado en una debilidad del billete verde que hace menos atractiva la inversión en activos en dólares (como los bonos americanos) para los extranjeros.

Es decir, justo lo contrario de la explicación favorita de Greenspan para el "conundrum": que el atractivo de los bonos americanos para los extranjeros (sobre todo los países emergentes con grandes reservas de divisas) mantenía altos los precios de la deuda y bajas sus rentabilidades (que se mueven al revés que el precio).

Una continuidad del fenómeno actual hará subir más los tipos hipotecarios y prolongará la crisis del mercado inmobiliario. Pero, por otro lado, la creciente diferencia entre los tipos a corto y a largo plazo (el empinamiento de la curva de tipos) hace más rentable para los bancos prestar dinero a largo, aunque tengan problemas para titulizar esos préstamos en activos tal como está el mercado de crédito. Y eso puede volver a poner en marcha la maquinaria del crédito necesaria para que la economía vuelva a crecer.

Los analistas sostienen que el mercado de viviendas va a tener que encontrar su piso y ninguna disminución de la tasa de interés lo va a revivir en el corto plazo. Pero en la medida que los mercados continúen poniendo presión sobre la Reserva Federal para que sea más agresiva, los riesgos inflacionarios aumentarán y esto seguirá afectando las tasas de interés de largo-plazo.

Por lo tanto, mientras que el "conundrum" de Greenspan era que las tasas de interés de largo-plazo no aumentaban después de que la Reserva Federal aumentaba las tasas de corto-plazo, el "conundrum" de Bernanke parece estar caracterizado por lo contrario, con las tasas de corto-plazo disminuyendo y las de largo-plazo aumentando. Mientras que el "conundrum" de Greenspan era problemático en sí mismo, este nuevo "conundrum" es mucho peor porque pone en tela de juicio la habilidad de la Reserva Federal de conducir una política monetaria efectiva en caso de que la economía de los EEUU entre en una recesión. Y como las cuentas fiscales del gobierno de los EEUU están en tan malas condiciones, esto dejará a la economía de los EEUU con menos grados de libertad para reaccionar en caso de que la crisis se expanda al resto de la economía. Se puede argumentar que el gobierno puede aumentar los gastos fiscales pero esto también afectará los intereses de largo plazo, lo que hará más difícil la versión actual del "conundrum".

En todo caso, la volatilidad del mercado significa que no tiene nada claro cuál es el rumbo de la economía y si la actuación de la Fed está siendo la correcta. Al final, la respuesta y el futuro de los mercados dependerán de si tienen razón los que creen que la economía ya ha entrado en recesión o los que piensan que no es así y que las rebajas de tipos son una exageración que va a disparar la inflación.

Imagining Keynes (It"s time to get stimulated vs. ¡Take the money and run!)

(Parte II) – JMK: ¿ángel o demonio? (ante el absurdo ionescano que va desde el "demasiado grande para caer" -bancos- hasta el "demasiado grande para ser rescatado" -países-) – Marzo 2012

La "resurrección" de Keynes (por intercesión de apóstoles tardíos e inciertos estructuralistas) – QE1, 2, Lite, Op. Twist, y otros "relajamientos"… ¿para quién?

"Un buen banquero central es aquel que retira el ponche cuando la fiesta se anima", frase pronunciada por William McChesney, presidente de la Reserva Federal entre 1951 y 1970.

John Maynard Keynes decía: "El mercado puede permanecer irracional durante más tiempo del que uno puede mantenerse solvente".

Decía Albert Einstein que "locura es repetir una y otra vez lo mismo esperando resultados diferentes".

Desaprendiendo a Keynes (entre tantas medias verdades, que son siempre insidiosas) – Sense and Sensibility (algunos cometarios finales, sin Copyright)

Al libro de Keynes, "Teoría general de la ocupación, el interés y dinero", como ya dije antes, lo he leído cinco veces. A la mayoría de los autores citados los leo casi a diario, y he podido seguir sus opiniones sobre la crisis financiera a través de diversos medios internacionales. Otra cosa es que me haya "enterado" de algo… Pero sigo intentándolo.

Entre la nostalgia y la alarma, he podido constatar que la mayoría de los prestigiosos "seguidores" de Keynes (en su caso) ha promovido, justificado, o tolerado (por decirlo suave), que se debe continuar suministrando droga al drogadicto (banca). Todo sea para que no delinca (caiga), dicen… Ha fomentado, aceptado, o apoyado (por decirlo suave), que se pueda estimular a un muerto (banca zombi)… Todo sea para evitar el riesgo sistémico (aunque continúen delinquiendo), aseguran. Un vodevil siniestro.

La mayoría de estos ("ilustrísimos señores") "piden más" (gasto); en mi caso (perdón), con toda humildad "pediría diferente" (manera de gastar), y recién luego, si no alcanzara para incentivar la demanda, entonces propondría un incremento del gasto. No es un pequeño matiz. Es una forma totalmente diferente de emplear los fondos públicos.

Tal vez por miedo (riesgo sistémico), por vanidad (académica) o por connivencia (donaciones, contratos, publicaciones, cátedras, conferencias, congresos, premios…), han transigido, han rumiado, y han encubierto el proceso de "relajamiento cuantitativo".

Han consentido (casi todos) la socialización de las pérdidas (de la banca) y la privatización de las ganancias (de los bancos socorridos con el dinero público), por parte de sus directivos (bonus récord). La "cultura del maná", aplicada a los bancos.

¿Y por qué se da dinero? Pues porque el derrumbamiento de una institución crediticia importante origina tal caos para el conjunto del sistema que es mejor encogerse de hombros y sacarlo de los impuestos. Unas medidas irracionales, en cualquier caso. Y es que son múltiples las paradojas y círculos viciosos que de ellas se desprenden. De Ricitos de Oro (2007) se ha pasado al barón de Münchhausen (2011), en función de la arbitrariedad política y sus oscuros intereses.

Lo de la "arbitrariedad política" va de suyo: el TARP de Geithner, el helicóptero de Bernanke y los diversos Quantitative Easing (1, 2, Lite…), el Twist again, and so on…

Sobre lo "oscuros intereses", tomen nota de la siguiente noticia y saquen sus propias conclusiones: "El presidente de EEUU, Barack Obama, ha recaudado este año para su campaña electoral más dinero procedente del sector financiero y bancario que todos los candidatos presidenciales republicanos juntos". (The Washington Post – 20/10/11).

Probablemente Keynes no hubiera aceptado que los bancos que han sido ayudados con fondos públicos siguieran comportándose como empresas privadas cuando sus directivos deberían haberse convertido en funcionarios y trabajar por los contribuyentes que han aportado para su pervivencia.

Posiblemente Keynes hubiera propuesto que el sector bancario debería regirse por el Código de Hammurabi, que es la mejor regla de control del riesgo. No supondría el "ojo por ojo", sino asumir las consecuencias de las acciones llevadas a cabo y restablecer la simetría entre las remuneraciones y el trabajo realizado. Los bancos esconden el riesgo, ganan dinero, pagan bonus… Pero si la cosa se colapsa, deben pagar el precio.

Seguramente Keynes les hubiera dicho (grandes bonetes), que lo único "sistémico" es el ciudadano, el contribuyente, el hombre de la calle, del que muchos de ustedes (no digo todos), lamentablemente se han olvidado. Eso es lo que tiene vivir en la torre de marfil de las universidades de "la Ivy League", y no haber trabajado en una empresa nunca, no haber tenido que pagar una quincena nunca, no haber rodado por la puta calle nunca…

Finalmente (muchos, no digo todos), por exceso (consintiendo la malversación de fondos públicos) o por defecto (miedo de sostener ideas políticamente incorrectas) han terminado "traicionado" a Keynes. Lo han falsificado, desnaturalizado, adulterado, amañado, desvirtuado, deformado, tergiversado. Han "desaprendido" a Keynes, vamos.

El coste de los rescates bancarios y los ingentes planes de estímulo aplicados por los gobiernos para combatir la crisis ha ascendido a 13 billones de dólares (hasta 2009), el 21,12% del PIB mundial (61,5 billones en 2008). Una deuda adicional de 1.897 dólares por cada niño, mujer y hombre del planeta. Y ello, sin contar con las inyecciones extraordinarias de liquidez aplicadas por los principales bancos centrales. (Libertad Digital – 28/1/10)

En concreto, los rescates bancarios por parte de los gobiernos (empleando dinero del contribuyente) ha ascendido a 3,6 billones de dólares (el 5,73% del PIB mundial) o, lo que es lo mismo, 515 dólares per cápita. Mientras, los planes de estímulo han sumado 9,4 billones de dólares (el 15,39% del PIB mundial), equivalente a 1.382 dólares por ser humano, según un estudio elaborado por Grail Research and de Luxe & Associates, para la prestigiosa Harvard Business Review.

Según el informe, casi el 75% del rescate bancario ha sido llevado a cabo por los países occidentales, es decir, EEUU y las grandes potencias europeas. En este caso, el coste de salvar el sistema financiero haciendo uso del gasto público ha sido del 7,8% del PIB conjunto de dichos países.

¿Cuánto se podría haber incrementado el empleo con un aumento de la inversión equivalente a 13 billones de dólares? ¿Por qué no se aplicó ese dinero para ayudar a las familias que no podían pagar su hipoteca? ¿Por qué no se emplearon esos fondos en solucionar los problemas de la economía real? ¿Se puede restablecer así la confianza?

¿Por qué se intenta mantener el mismo sistema financiero que ya fracasó? ¿Por qué se admite que sigan mandando en los bancos los mismos directivos que promovieron semejante estafa piramidal? ¿Es ésta la forma de alcanzar expectativas razonables?

La crisis ha puesto de manifiesto que es necesaria una reorganización mundial del sistema financiero, que pasa por volver al viejo mecanismo en el que los bancos de negocios son para el largo plazo y el banco comercial, para el corto "les guste o no". Creo que el único que sostiene este postulado es Paul Volcker (ha declarado su preferencia para reinstalar algunas de las divisiones entre la banca comercial y de inversión que fueron eliminadas en 1999 con la revocación de la Ley Glass-Steagall).

Además, opina también que a la reforma se le debería dar una dimensión internacional: Algunos acercamientos, tales como los estándares de contabilidad, los requerimientos de liquidez y de capital, y el registro y reporte de procedimientos, deberían ser coherentes y acordados internacionalmente.

El 26 de noviembre de 2008, fue nombrado director del President's Economic Recovery Advisory Board (Consejo para la Reconstrucción Económica) por el presidente Barack Obama. El 10 de enero de 2011, Paul Volcker abandonó el gabinete de Obama y con él desaparece cualquier esperanza de que el Gobierno estadounidense consiga domar el salvaje mundo financiero. Lo demás es historia

Aunque ser ahora keynesiano no es la vía, me gustaría conocer sobre estos asuntos, según la interpretación de los "apóstoles" citados. Alguien, debería poner un poco de luz en medio de las tinieblas. Dar voz al que no la tienen y renovar la esperanza, de los que tienen hambre y sed de justicia. Un acto de contrición, arrepentimiento y cambio.

Algo "políticamente incorrecto", algo sacrificial, algo inmolatorio. Aunque, tal vez, sea demasiado pedir (con tanto freno y marcha atrás,). Así y todo, continúo esperando…

– Entonces… (iniciativas de desempeño aberrante)

La crisis financiera mundial puso al descubierto defectos del capitalismo al estilo estadounidense, las insuficiencias de lo que los británicos apodaron como la regulación financiera "leve" y la tendencia del sistema hacia cometer excesos periódicos. Más recientemente, la crisis de la deuda soberana de Europa puso de relieve la tensión de un costoso estado de bienestar en ausencia de un vigoroso crecimiento económico que lo financie.

El modelo de EEUU continúa en dificultades tres años después de que los reguladores dejaran que Lehman Brothers se hundiera. Miles de millones de dólares duermen ociosos en las arcas de las empresas, a pesar de que millones de trabajadores se hallan desempleados desde hace más de un año. El mercado inmobiliario sigue deprimido. La parálisis política en materia fiscal socava la autoridad económica en EEUU. Todo esto y más ha debilitado el argumento más simple a favor del modelo económico de EEUU: el hecho de que funciona.

El modelo europeo tampoco ofrece demasiado. En uno de los momentos más reveladores de 2011, Klaus Regling, que dirige el fondo de rescate de la zona euro, fue enviado en busca de dinero no a Washington, sino a Beijing. La misión no produjo resultados, pero sí provocó arrebatos de desdén por parte de algunos en China sobre las imperfecciones en el modelo europeo. En una entrevista con Al Jazeera TV, en noviembre (2011), Jin Liqun, director de la junta supervisora del fondo soberano China Investment Corp., se refirió a Europa como una "sociedad de bienestar agotada".

El modelo japonés, impulsado por las exportaciones, en su día la envidia de casi todas las demás economías, ha sido en gran medida descartado, como consecuencia de una década de luchas para reactivar el crecimiento. Si a eso sumamos el golpe asestado por la calamidad nuclear de Fukushima Daiichi, provocada en marzo (2012) por un tsunami y un terremoto, resulta que la reputación de Japón en términos de competencia y eficiencia se vio gravemente perjudicada.

¿Pero existe una alternativa bien articulada al capitalismo de mercado de los países (anteriormente) ricos?

Por ahora, los países (anteriormente) ricos están demostrando que no aprendieron la lección, y continúan actuando con "lentitud, parsimonia y vacilación"…

2 – "Helicopter" Ben (cadena de favores: todo sea por la banca)

– "Speculative attacks" (Bajemos al quiosco)

(Tras las huellas de "Hamelin" por el "apetitoso" jardín del Quantitative Easing: una selección -libre y parcial- de la hemeroteca reciente)

"Facta, non verba" (sólo se citan algunos artículos referidos a la Fed o Ben Bernanke)

"El BCE adjudicó en una subasta de financiación rápida llamada de "ajuste fino", 94.841 millones de euros, cantidad que supera los 69.300 millones de euros inyectados el 12 de septiembre de 2001, un día después de los atentados de Nueva York"… El BCE efectúa una inyección histórica de liquidez para tranquilizar al mercado (Gaceta.com – 10/8/07)

Al mismo tiempo, la Reserva Federal estadounidense (FED) puso a disposición del sistema financiero 24.000 millones de dólares en reservas temporales, la mayor cantidad desde el pasado junio, tras un aumento muy rápido de la demanda de efectivo de bancos como consecuencia de las pérdidas por las hipotecas de alto riesgo o subprime de EEUU…

… "La única manera de evitar que este fenómeno provoque un efecto dominó y pueda convertir la crisis en sistémica o estructural está en los libros: las autoridades monetarias deben acudir como prestadores de última instancia a inyectar liquidez a los bancos y, además, socorrer a aquellas entidades o fondos que tengan problemas de caja", indicó el presidente de Fimades, Luís Palma Cané. Fue exactamente lo que sucedió"… Nuevo temblor en los mercados mundiales (lanacion.com – 12/8/07)

La Reserva Federal (FED), el Banco Central Europeo (BCE), junto a los bancos centrales de Japón, Suiza, Canadá y Australia liberaron cerca de US$ 350.000 millones. "Enviaron un mensaje: algunos inversores van a perder plata, pero no se preocupen que no se va a trasladar al sistema financiero y a la economía real y si es necesario vamos a poner más plata", apuntó Eduardo Blasco, socio de Maxinver Consultores.

Un informe de Deloitte considera que los bancos centrales "tienen suficiente margen de acción y credibilidad como para inyectar toda la liquidez que haga falta para desbaratar una corrida". Ese margen comprende una posible baja en la tasa de interés…

"Los problemas crecientes en los mercados de crédito y la volatilidad en las bolsas han llevado a que Wall Street ponga la mirada en Washington en busca de un rescate. Pero el gobierno de George W. Bush rechazó dar un paso concreto: expandir el poder que tienen Fannie Mae y Freddie Mac -dos gigantes semi-gubernamentales en el mercado de préstamos inmobiliarios- para comprar hipotecas. En vez de ello, Bush y el secretario del Tesoro Henry Paulson han tratado de reforzar la confianza al hacer hincapié en la fortaleza de la economía global"… Los mercados buscan el apoyo de la FED para enfrentar la tormenta del crédito (The Wall Street Journal -online- 13/8/07)

Hasta ahora, la respuesta más significativa ha sido la de la FED, el BCE y otros bancos centrales, que han inyectado miles de millones a los mercados monetarios para que la escasez de crédito no haga subir las tasas de interés de corto plazo. Se trata de la mayor maniobra de este tipo desde los ataques del 11 de septiembre de 2001…

¿Qué más pueden hacer las autoridades de EEUU? El siguiente paso sería que el presidente de la FED Ben Bernanke -cuyo trabajo académico se ha centrado en los errores cometidos por el banco central durante la Gran Depresión de los años 30 y en las maneras en las que los mercados financieros pueden afectar al resto de la economía- bajara las tasas de interés para abaratar los préstamos y aumentar la liquidez…

Entre los grandes temores figuran que las grandes firmas están expuestas a mercados de una manera que ni siquiera éstas conocen o, al menos, no divulgan. Otro temor es que firmas altamente apalancadas se vean forzadas a deshacerse de sus participaciones, empeorando aún más las cosas.

Un rasgo inusual de la actual crisis es que los problemas comenzaron en EEUU en el mercado de hipotecas subprime, pero parecen afectar con mayor gravedad a Europa. Por eso el BCE ha sido más agresivo que la FED en inyectar dinero a los mercados para aliviar las tensiones. Y fue el gobierno alemán, no el de EEUU, el que tuvo que organizar el rescate de una entidad en problemas, IKB Deutsche Industrie Bank AG, que había invertido fuertemente en valores estadounidenses respaldados por hipotecas.

Algunos funcionarios de la FED temen que si reducen las tasas ahora, enviarán la señal de que la entidad está más preocupada por los mercados que por la economía. Algunos analistas sospechan que Bernanke es reacio a bajar las tasas con el fin de expurgar el llamado "Put Greenspan", un término acuñado por Wall Street que refleja la supuesta disposición del ex jefe de la FED a recortar las tasas y rescatar a los inversionistas de sus propias decisiones erradas. Pero Bernanke, dicen los analistas, se basará en consideraciones convencionales: crecimiento, inflación y estabilidad financiera…

"Ben Bernanke y Jean Claude Trichet -presidentes, respectivamente, de la FED y del BCE- han hecho esta semana algo que nadie en el sector privado haría: comprar "collateral debt obligations" (CDO), productos financieros derivados cuyo valor depende, en muchos casos de las hipotecas concedidas a maltrechos propietarios de viviendas estadounidenses de bajos ingresos, los llamados "subprime". La mega-inyección de liquidez de las últimas horas en los mercados financieros -alrededor de 120.000 millones de dólares en dos días ha incluido la compra de CDO entre otras clases de deuda de elevado riesgo"… Sólo los bancos centrales compran (lavanguardia.es – 13/8/07)

"Las innovaciones en el sector financiero han creado una expansión de la capacidad para distribuir el riesgo (…) y permitir una amplia gama de transacciones financieras que jamás habrían sido posibles en el pasado", afirmaba Raghuram Rajan, economista de Chicago, en una entrevista concedida a "La Vanguardia" a primeros de este año (2007). "Pero, a pesar de las apariencias, el riesgo está ahí afuera, no desaparece -añadía-, con los que estamos ante un riesgo sistémico".

La advertencia de Rajan parece haber resonado en los consejos de los bancos centrales a lo largo de los días subsiguientes…

"El goteo de entidades de EEUU con problemas para cobrar las cuotas de las hipotecas concedidas a personas con un mal historial crediticio, las ya tristemente famosas subprime, comenzó en el mes de abril con la suspensión de pagos de New Century. Era un aviso que tres meses más tarde se ha convertido en una crisis de liquidez en todo el planeta que ha obligado a actuar a las principales autoridades monetarias del mundo"… Los supervisores de EEUU llegaron tarde al problema de las "subprime" (negocios.com – 14/8/07)

¿Qué ha hecho en ese tiempo la FED? Pocas cosas y algunas demasiado tarde. El origen de las turbulencias en los mercados de crédito está en EEUU, en las mencionadas hipotecas subprime que se concedieron de forma indiscriminada durante la época del boom inmobiliario, en 2005 y 2006. En esos años, la concesión de hipotecas de alto riesgo se triplicó. Y la posterior desaceleración del precio de la vivienda, la subida de los tipos de interés y la menor tasa de crecimiento económico se ha traducido en un aumento de la morosidad que ha afectado a los títulos respaldados por esos préstamos (titulización).

Esa ha sido la correa de transmisión que ha llevado la crisis a todo el mundo a través de los fondos de inversión y de las entidades que invierten en esos activos. Pero la FED hasta ahora no se había preocupado seriamente de los criterios con los que se concedían esos préstamos que se están convirtiendo en fallidos. No ha sido hasta prácticamente hace 15 días, el 17 de julio, cuando la autoridad supervisora anunció medidas para mejorar la supervisión de este mercado. Un proyecto que, además, no se pondrá en marcha hasta el cuarto trimestre de este año (2007). Quizá para entonces las entidades a supervisar sean menos…

"Wall Street tiene un sueño: que la Reserva Federal rescate a los mercados financieros mediante un drástico recorte en las tasas de interés"… ¿Está la FED atrapada en un "riesgo moral"? (The Wall Street Journal -online- 14/8/07)

Detrás de ese sueño se esconde algo llamado riesgo moral (moral hazard). Se trata de un antiguo concepto económico que tiene sus raíces en la industria aseguradora. La idea es la siguiente: si uno protege a alguien demasiado bien en contra de un resultado no deseado, esa persona podría comportarse de manera imprudente. Por ejemplo, una persona que compra un cuantioso seguro para su auto podría manejar demasiado rápido porque se siente protegida.

En estos días, los inversionistas y economistas usan el término para referirse al anhelo de los mercados por un recorte de las tasas de interés. Si los inversionistas creen que la FED los rescatará de sus excesos, asumirán riesgos mayores y, al final, se exponen a consecuencias mayores. Algunos piensan que la FED creó este problema en 1998, 1999 y 2003.

Si la FED bajara la tasa ahora, ciertamente ayudaría a enfrentar la actual crisis de mercado al proveer dinero barato. Wall Street es un lobby poderoso en Washington y para los políticos no es fácil resistir a su petición de ayuda, ya que sus campañas electorales muchas veces dependen de las contribuciones monetarias de la banca instalada en Nueva York. Pero los escépticos temen que si la FED encabeza el rescate, alentaría a que los inversionistas especulen todavía más, creando una burbuja aún más grande.

"A uno no le gustaría que la FED rescatara a esta gente que ha ganado tanto dinero…", dice un experimentado operador bursátil de Nueva York. "Por otro lado, a uno no le gustaría que la economía caiga en recesión".

Ese es, en esencia, el dilema que enfrenta la FED…

"La tensión en los mercados ha sido evidente durante semanas, pero el jueves pasado fue distinto. A medida que el día llegaba a su fin, papeles comerciales denominados en euros -una deuda a corto plazo emitida por las empresas- por un valor de US$ 45.000 millones necesitaban cambiar de manos debido a su fecha de expiración. Los corredores normalmente encuentran compradores para esta clase de valores antes de la hora del almuerzo en Londres, equivalente a las 7 de la mañana en Nueva York. Pero esa mañana amaneció sin demanda y les tomaría todo el día vender apenas el 42% del total, según una fuente familiarizada con el mercado"… Tras un día de sustos y reacciones en cadena, la FED salió a tender la mano (The Wall Street Journal -online- 20/8/07)

Justo antes del mediodía, hora de Nueva York, casi al final de la sesión de corretaje en Londres…en un signo de desesperación y como un grito de auxilio dirigido a la Reserva Federal de Estados Unidos (FED), los inversionistas empezaron a concentrarse en los valores del Tesoro más seguros y a corto plazo. El rendimiento sobre los bonos a tres meses, los cuales se habían cotizado en 4%, cayó hasta 3,4% y la brecha entre los rendimientos de las notas del Tesoro y los papeles comerciales corporativos se amplió mucho… "Fue un giro extraordinariamente violento, y se hizo evidente que el mercado estaba a punto de angustia y que esperaba una respuesta por parte de la FED"…

Estas reacciones reflejaron uno de los días más peligrosos para los mercados globales de crédito desde 1998. El viernes por la mañana, la FED cedió. Sólo 10 días después de declarar que la economía de EEUU no necesitaba de su ayuda, la institución decía que "los riesgos al crecimiento han aumentado considerablemente" sugiriendo que podría recortar su objetivo para las tasas a corto plazo. En una medida inusual, la entidad animó a los bancos a tomar prestado directamente de la FED a través de una tasa de descuento, incrementando el atractivo de esos créditos.

Hoy la FED sabrá si hizo lo suficiente para resucitar la confianza que escaseaba tanto la semana pasada, lo cual quedó de manifiesto en la reticencia de los inversionistas a comprar o aceptar como colaterales los valores que en tiempos normales no se habrían puesto en duda…

El último capítulo en la crisis del crédito de 2007, cuyo origen está en el deterioro del mercado de las hipotecas de alto riesgo o subprime, comenzó el martes 7 de agosto en Europa. Poco después de las 9 de la mañana, en la segunda planta del Banco Central Europeo en Fráncfort, el banco repartió US$ 394.630 millones en su operación regular de financiamiento. Al final del día y a pesar de que los bancos de la eurozona tenían efectivo de sobra gracias a las operaciones de refinanciación de la mañana, las tasas de los mercados monetarios iban en alza…

"Piense en el presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos, Ben Bernanke, como el mecánico que revisa el motor de la economía estadounidense. ¿Su dilema? Tiene las herramientas de un auto Ford T de comienzos del siglo XX para arreglar un híbrido controlado por una computadora del siglo XXI"… Por qué la crisis es un dilema para Ben Bernanke (The Wall Street Journal -online- 23/8/07)

La FED se creó en 1913 y obtuvo las herramientas para prevenir y responder a pánicos bancarios… El desafío de Bernanke es que hoy en día los bancos no son el principal problema. Estos están repletos de dinero, pero son reacios a prestar justo cuando las otras instituciones que tienen dinero también se sienten inseguras de dar dinero. Así que Bernanke y sus mecánicos monetarios están usando herramientas del 1913, diseñadas para un sistema financiero centrado en los bancos, para arreglar en 2007 un sistema financiero centrado en los mercados…

Cuando el crédito comenzó a escasear, la primera movida de Bernanke fue inyectar dinero a los mercados monetarios de muy corto plazo. Cuando el motor no quiso arrancar, usó otras herramientas a su disposición, como bajar las tasas de interés que se aplican a los préstamos que los bancos piden a la FED. Después, probó las armas de la persuasión. Entonces, ¿funcionan las herramientas de la FED? Es demasiado pronto para saber. Lo único cierto es que el sistema financiero del siglo XXI vino sin un manual de reparaciones. Bernanke lo está redactando ahora.

"Cuando Ben Bernanke fue nominado para presidir la Reserva Federal de Estados Unidos en 2005, prometió "mantener la continuidad con las políticas y las estrategias establecidas durante los años de Greenspan". Pero al enfrentar su primera crisis financiera, Bernanke ha mostrado indicios de un claro quiebre con Alan Greenspan, quien dirigió los destinos de la FED entre 1987 y 2006"… Ben Bernanke se aleja de las recetas de Alan Greenspan y fija un nuevo rumbo para la FED (The Wall Street Journal -online- 30/8/07)

El giro es importante para entender los motivos por los cuales no ha recortado la tasa de interés de referencia. Además, podría alterar la percepción de los inversionistas sobre el funcionamiento de la FED bajo la batuta de Bernanke…

La FED ha cumplido históricamente dos grandes funciones: mantener la estabilidad financiera y controlar la inflación sin desatar una recesión. Para Greenspan, la confianza del mercado estaba tan entrelazada con las perspectivas de la economía que a menudo era imposible distinguir entre una y otra. Greenspan redujo las tasas de interés después del crash bursátil de 1987 y el rescate de última hora del fondo de cobertura Long Term Capital Management en 1998, para impedir que la aversión de los inversionistas al riesgo mermara el crecimiento de la economía.

Bernanke, en cambio, hace una distinción entre ambas funciones. El 17 de agosto, por ejemplo, recortó la tasa de interés que la FED cobra a los bancos que piden prestado al banco central y amplió el plazo de los préstamos de su ventana de descuento. Pero la FED no ha reducido la tasa interbancaria, que es mucho más importante para la economía y es la referencia obligatoria de todos los préstamos de corto plazo en EEUU…

"El presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos, Ben Bernanke, optó por encarar de manera agresiva el enfriamiento de los mercados de crédito, que amenazan con afectar a la economía estadounidense, al decretar un sorpresivo recorte de medio punto porcentual en las tasas de interés de corto plazo. Con esto, Bernanke ignora de momento a los críticos que dicen que un recorte sólo sirve para rescatar a los inversionistas de sus decisiones irresponsables"… La FED reduce la tasa y las bolsas celebran, aunque la presión inflacionaria persiste (The Wall Street Journal -online- 19/9/07)

La decisión muestra que Bernanke piensa que las turbulencias del mercado que comenzaron en agosto (2007) podrían provocar un daño económico mucho mayor. Además, el presidente de la FED también demuestra que su estilo y táctica son mucho más cercanos a los de su antecesor, Alan Greenspan, de lo que muchos pensaban. Sin embargo, con ello viene un riesgo. Es probable que los críticos comiencen a hablar de un "Bernanke put", así como antes se referían al "Greenspan put" (una opción "put" protege al tenedor de un valor de una pérdida de su inversión). Pero eso le preocupa menos a Bernanke que mantener la economía estadounidense a flote…

Los recortes, que fueron mayores a los que muchos economistas anticipaban, provocaron una euforia bursátil en Wall Street. El Promedio Industrial Dow Jones, que había subido 70 puntos antes de que se anunciara la decisión de la FED, saltó 335,9 puntos, un 2,51%, para cerrar en 13.739 unidades. Fue el mayor aumento porcentual en un día desde 2003"…

Si Bernanke recorta la tasa interbancaria, como lo anticipa el mercado, el contraste con Greenspan se desvanecerá y algunos lo criticarán por actuar en forma tardía…

Las reacciones a las tácticas de Bernanke han fluctuado entre las acusaciones de que él es un académico incapaz de ver las consecuencias de una contracción del crédito, a alabanzas por obligar a los peces gordos de Wall Street a pagar las consecuencias de sus imprudencias.

Tal vez a la FED no le quede más remedio que bajar las tasas. Pero mientras más se demora, mayor es la probabilidad de que disipe la presunción automática de los inversionistas de que las convulsiones del mercado conducen inexorablemente a una reducción de tasas. Ya hay indicios de que la estrategia empieza a rendir frutos…

"El medio punto porcentual de recorte aplicado por el Comité Federal de Mercado Abierto al tipo objetivo de los fondos federales y al tipo de descuento no estaba justificado por las turbulencias del mercado. Con los precios de las materias primas y el petróleo, disparados y un dólar débil, se arriesgan a reanimar la inflación. O bien el presidente de la FED, Ben Bernanke, ha cedido a la presión de Wall Street o cree que la economía de EEUU se está estancando gravemente. En cualquier caso, la subida del mercado parece equivocada"… La FED sabe algo que nosotros no sabemos (Negocios.com – 20/9/07)

"Las dos cabezas visibles de la economía norteamericana, el presidente de la Reserva Federal (FED) Ben Bernanke y el Secretario del Tesoro de Estados Unidos Henry Paulson, comparecieron ayer ante el Comité de Servicios Financieros de la Cámara de Representantes para hablar, entre otros temas, de la crisis hipotecaria de alto riesgo o subprime. El posicionamiento del presidente de la FED ha sido claro: "las pérdidas financieras globales han excedido incluso las estimaciones más pesimistas sobre las pérdidas de los créditos"… Bernanke reconoce que las pérdidas superan los cálculos más pesimistas" (Negocios.com – 21/9/07)

Por su parte el Secretario del Tesoro, se limitó a reconocer que la crisis tendrá un efecto "modesto" en el crecimiento de la economía…

"El ex jefe de la Reserva Federal Alan Greenspan negó que los reguladores del mercado hayan fracasado a la hora de predecir los problemas que causaron la reciente crisis global"… Greenspan, para nada sorprendido (BBCMundo.com – 28/9/07)

En una entrevista con la BBC, Greenspan dijo que las autoridades no habían respondido a los temores que los fondos de alto riesgo despertaban porque sólo las personas ricas invertían en ellos.

El hombre que llevó las riendas del banco central estadounidense también habló del estado general de la economía mundial y dijo que cada vez se sentía más pesimista en cuanto a su futuro. Sin embargo, agregó que la posibilidad de que la economía entrase en recesión todavía era menor del 50%.

La crisis crediticia se ha sentido a nivel global y, según señaló recientemente el director del Fondo Monetario Internacional, Rodrigo Rato, los efectos más grandes de la crisis se presentarán en el año 2008 en la economía de Estados Unidos.

Una de las causas de esta crisis fue la consolidación y venta de deuda proveniente de hipotecas de alto riesgo (subprime), que se vendieron a clientes de bajos recursos que en muchos casos no podían pagarlas. Cuando muchos ya no pudieron hacer frente a las cuotas de estas hipotecas, los bancos y casas de inversiones que habían comprado esas deudas como inversión entraron en problemas. Como medida de protección, los bancos que se vieron afectados se volvieron más renuentes a prestar fondos, lo cual hizo que la crisis crediticia se acentuara.

"Nosotros sabíamos lo que sucedía. La razón por la que no hicimos nada fue porque, en gran medida, la gente que participa de este tipo de prácticas atroces (comprar deuda de alto riesgo) es gente que invierte su propio dinero", dijo Greenspan a la BBC.

"Los mayores culpables de todo esto, se supone, son los fondos de alto riesgo, que son instituciones en las que invierte gente que tiene mucho dinero". "Debo decir que no me preocupa mucho que el patrimonio neto de estas empresas caiga de US$ 40 millones a US$ 5 millones, que es lo que sucedió en muchos casos", agregó Greenspan.

El ex jefe de la Reserva Federal también predijo que la era de inflación baja estaba llegando a su fin. "No puedo decir exactamente el momento en que sucederá, pero estoy bastante seguro de que la tranquilidad inflacionaria que hemos experimentado durante los últimos 20 años no es algo que se repetirá en el futuro", concluyó.

"Respira otra vez el sistema con tal de mantener como sea un nivel adecuado de liquidez. En total ya suman US$ 427.475 millones los colocados en el sistema por parte de la Reserva Federal de USA. Ahora, la entidad acaba de realizar la primera inyección de la semana con el anuncio de otros US$ 12.500 millones en reservas temporales al sistema bancario, vía acuerdos de recompra a un día"… La FED vuelve a acaparar la atención de Wall Street: nueva inyección de US$ 12.500 millones (urgente24.com – 9/10/07)

De esta manera, el optimismo vuelve a reinar en Wall Street. Esta mañana los inversores tomaron posiciones en el mercado neoyorquino a la espera de que la Reserva Federal publique las actas de su última reunión en las que podría desvelar algunas pistas sobre cuál será su decisión en la cita de octubre…

"Es curioso observar como el mercado de valores del país donde se desató la actual crisis es el que mejor se ha comportado"…Bernanke vs. Trichet, Dow vs. Euro Stoxx (Negocios.com – 16/10/07)

Esta semana se han vuelto a poner de manifiesto las dos diferentes políticas que aplican los bancos centrales estadounidense y europeo cuando los mercados financieros se desestabilizan.

A Ben Bernanke, presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos, no le tembló la mano a mitad de septiembre cuando decidió bajar los tipos de interés 0,5 puntos. Puso por delante de los riesgos inflacionistas, el objetivo de estabilizar a unos nerviosos mercados a sabiendas que quizás esta es la primera medida que hay que adoptar, cuando las cosas se complican en el mundo económico.

Jean Claude Trichet, presidente del Banco Central Europeo, ha hecho todo lo contrario. No se ha atrevido a subir los tipos de interés en la zona euro por las fuertes presiones recibidas en las últimas semanas especialmente la del presidente de su propio país, Nicolás Sarkozy. El francés Trichet los ha mantenido y parece que no los va a subir en este último trimestre del año, aunque su discurso no ha estado exento de ambigüedad.

Lo que sí sigue habiendo a corto plazo son problemas de liquidez en el sistema, al que le hubiera venido muy bien una pequeña rebaja de tipos, y ya no sólo por lo que hubiera supuesto por coste financiero, sino también por la señal de confianza y apoyo que el BCE hubiera lanzado a los mercados.

Así, por ejemplo, se interpretó en Estados Unidos y Wall Street lo ha agradecido con los máximos históricos marcados en la última semana. De hecho, de todos los grandes índices internacionales, es el primero que ha recuperado las pérdidas de las subprime y el único que ha alcanzado récord en este período.

Europa, como siempre, a su sombra. Vive más los males de los americanos y no sabe disfrutar de los buenos momentos.

"Las raíces de esta crisis eran evidentes desde hace meses. Un número cada vez mayor de deudores hipotecarios de alto riesgo, o subprime, estaba atrasado en sus pagos. Los fondos de cobertura y otras instituciones habían comprado valores complejos respaldados por esas hipotecas, lo que arrojaba dudas acerca de su liquidez. Esa mañana (9 de agosto) quedó claro que los bancos europeos tenían más dinero comprometido en esos instrumentos de lo que se había pensado. Eso provocó una búsqueda frenética por conseguir efectivo y una actitud reacia a prestar por parte de algunos bancos que cruzó el Atlántico"… La reacción de la FED ante la crisis del crédito revela el "estilo" Bernanke (The Wall Street Journal online- 31/10/07)

La manera en que Bernanke manejó la situación de agosto y su nivel de preparación ofrecen la demostración palpable de cómo difiere de su antecesor. Aunque es introvertido al igual que Greenspan, Bernanke ha cultivado un proceso más abierto y de colaboración. A Bernanke le gusta exponer todos los aspectos de un debate y obliga a los participantes a poner a prueba sus supuestos. También es más creativo a la hora de encontrar maneras de estabilizar el sistema financiero y no sólo se limita a usar el arma del recorte de las tasas de interés que Greenspan desplegaba con mayor facilidad…

Bernanke lleva toda su vida preparándose para este tipo de crisis. En 1979 recibió su doctorado en economía del Massachusetts Institute of Technology y pasó los siguientes 23 años en el mundo académico, principalmente en la Universidad de Princeton. Durante gran parte de esos años, se dedicó a estudiar cómo interactúan el sistema financiero y la economía real, en especial durante la Gran Depresión de los años 30…

"La Reserva Federal, el banco central de Estados Unidos, rebajó este miércoles la tasa de interés clave en un cuarto de punto porcentual, quedando en 4,5%. La medida no causó sorpresa porque así lo esperaban los mercados financieros. Ésta es la segunda rebaja del año en el tipo de interés, que tiene como objetivo tranquilizar el nerviosismo que ha ocasionado la crisis hipotecaria en EEUU"… Bajan tasas de interés en EEUU (BBCMundo.com – 31/10/07)

En esta ocasión se trata de un cuarto de punto y no de medio punto, como la rebaja que se llevó a cabo el 18 de septiembre. "La medida de este miércoles, junto con la decisión tomada en septiembre, debería ayudar a evitar algunos de los efectos adversos sobre el conjunto de la economía que, de otra manera, habrían surgido por los problemas en los mercados financieros, y a promover un crecimiento moderado en el transcurso del tiempo", señaló la FED en un comunicado.

Los analistas indican que quizá las autoridades están menos preocupadas sobre una recesión. Pese a la falta de confianza de los consumidores -descendió en octubre a su nivel más bajo en los últimos dos años- otros indicadores señalan que las cosas no van tan mal. Por ejemplo, según un informe publicado esta semana, el gobierno aseguró que la economía estadounidense creció en el tercer trimestre a un ritmo de 3,9 % que es su nivel más elevado en los últimos doce meses. Esto demuestra que, por el momento, no se ha dado el contagio que tanto se temía. Pese a la caída de inversiones, consumo y construcciones de vivienda, otros sectores como el consumo interno, las exportaciones, el gasto público, no han decaído…

La FED, en su comunicado, señaló que seguirá revisando las condiciones de la economía en el futuro para actuar "como sea necesario para fomentar la estabilidad de precios y un crecimiento económico sostenible"…

"Ben Bernanke, el presidente de la Fed, ha decidido quitar todas las restricciones a la liquidez en el sistema financiero norteamericano ante la insuficiencia de las medidas que ha tomado hasta ahora para frenar la crisis. Así, ha anunciado este mediodía una nueva inyección de liquidez conjunta con otros bancos centrales de hasta 200.000 millones de dólares y a plazo de un mes, frente al de un día (overnight) que regía hasta ahora"… Bernanke al rescate: se alía con el BCE para inyectar toda la liquidez que haga falta (El Confidencial – 11/3/08)

Los bancos centrales que participan en esta operación conjunta son el Banco de Canadá, el Banco de Inglaterra, el Banco Central Europeo, la Reserva Federal y el Banco Nacional de Suiza.

"Desde las medidas coordinadas adoptadas en diciembre de 2007, los bancos centrales del G-10 han continuado trabajando juntos, de manera estrecha y consultando regularmente sobre las presiones en la liquidez de los mercados de financiación. Las presiones en algunos de esos mercados recientemente se han incrementado nuevamente. Todos continuamos trabajando juntos y tomaremos medidas apropiadas para responder a esas presiones en la liquidez", ha explicado la Fed en un comunicado.

Bernanke ya anunció un aumento de las inyecciones de liquidez que tenía en marcha para intentar frenar los nuevos problemas de los mercados monetario y de crédito: varias firmas financieras habían incurrido en impagos en EEUU por su incapacidad para aportar garantías adicionales (margin calls) a los bancos acreedores ante el desplome del valor de sus activos, y las tensiones en el interbancario habían conducido a un nuevo repunte del Euribor en Europa y el US Libor en EEUU.

Pero esta medida no ha sido suficiente, a la luz de la continuidad de las tensiones interbancarias, de los nuevos problemas de impagos e incluso de las especulaciones de problemas de liquidez de uno de los gigantes de Wall Street, Bear Stearns. De ahí que Bernanke haya decidido cortar todas las amarras y abrir la mano totalmente, haciendo honor al sobrenombre de "Helicóptero Ben" (una vez dijo que la Fed debía lanzar billetes desde un helicóptero si era necesario).

La novedad de las inyecciones anunciadas es que no se dirigen únicamente a los bancos, sino también a otras instituciones como fondos de inversión o brokers. Asimismo, aceptará como garantía una gama más amplia de activos, como los famosos ABS y MBS respaldados con créditos hipotecarios, para los que no hay mercado en estos momentos.

"Las entidades no dan muestras de viabilidad y los reguladores quieren ir más allá de un plan de rescate"… La Fed piensa en un "banco basura" que recoja todos los activos tóxicos (Negocios – 17/1/09)

Las renovadas dudas sobre la viabilidad de los bancos estadounidenses obligan a los reguladores a un nuevo plan que retiraría los activos tóxicos de los balances de los bancos, en lo que podría convertirse en el mayor intento hasta ahora de descongelar el crédito.

Los asesores del presidente electo Barack Obama ven una crisis bancaria cada vez más grave y están considerando propuestas más atrevidas que las medidas tomadas hasta el momento, según dos personas próximas al plan.

"Necesitan hacer algo drástico", dijo el profesor de la Universidad de Harvard Kenneth Rogoff, ex economista jefe del Fondo Monetario Internacional y miembro del grupo de treinta consejeros sobre asuntos financieros, que incluye al secretario del Tesoro designado Timothy Geithner y a Lawrence Summers, director entrante del Consejo Económico Nacional.

Los funcionarios de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed, por sus siglas en inglés) están centrándose en la opción de establecer un llamado banco basura que adquiriría cientos de miles de millones de dólares de activos problemáticos que actualmente se encuentran en poder de los prestamistas. Esto podría permitir a los bancos reducir las provisiones, liberar capital y empezar a prestar más.

Paul Miller, analista bancario de Friedman Billings Ramsey, en Arlington, Virginia, calcula que las instituciones financieras necesitan hasta 1,2 billones en ayuda nueva. Otras medidas que podrían estar siendo estudiadas son proporcionar más garantías para activos tóxicos que continúan en los libros de los bancos, como los funcionarios hicieron con Citigroup en noviembre (2008) y con los 118.000 millones de ayuda asignados ahora a Bank of America, o comprar inversiones selectas. La presidenta de la Corporación Federal de Seguro de Depósitos (FDIC), Sheila Bair, ha desestimado la alternativa de nacionalizar prestamistas.

Es probable que se tome una decisión poco después de que Obama asuma la presidencia el 20 de enero. La caída en las acciones de las empresas financieras suma premura a las deliberaciones. Citigroup ha llegado a caer por debajo del nivel que alcanzó cuando las autoridades reguladoras salieron al rescate del prestamista en noviembre, antes de anunciar su plan de segregación de actividades. Bank of America cayó a un mínimo en 18 años porque la compañía solicitó más ayuda del Gobierno.

"Gran parte del problema en todo esto es que una vez que se produce un desastre financiero, la gente no sabe dónde están enterrados los cadáveres", dijo Paul Krugman, profesor de la Universidad de Princeton que ganó el Premio Nobel de Economía de este año, en una entrevista con Bloomberg Radio. "La gente piensa quién sabe en lo que me estoy metiendo al prestar o negociar con otros", afirmó.

"La Reserva Federal va a por todas y no está dispuesta a que los mercados estropeen los enormes esfuerzos por su parte y por parte del Gobierno para enfrentarse a la crisis. Ayer lo dejó bien claro en el comunicado posterior a la reunión, que venía a decir que, aunque no puede bajar más los tipos, pretende controlar el mercado de bonos para que una subida de los tipos a largo no eche por tierra todas las medidas de estímulo"… Bernanke: "Inversores, rendíos, os tenemos rodeados" (El Economista – 29/1/09)

El comunicado de la Fed, pese a pintar un panorama bastante negro para la economía, reconoce que las expectativas de crecimiento e inflación van a cambiar, y recuerda al mercado que puede ser peligroso ponerse en contra del banco central si la situación de los bonos se pone fea. De ahí que anuncie que está dispuesta a comprar bonos del Tesoro si es necesario para "mejorar las condiciones en los mercados de crédito".

En efecto, Bernanke espera una mejoría en el segundo semestre gracias a planes como el suyo de comprar activos hipotecarios por 500.000 dólares, que ya ha conseguido una bajada de los tipos de las hipotecas: "Una recuperación gradual comenzará a lo largo del año", afirma el comunicado, aunque admite que hay riesgos "significativos" para esta previsión. Asimismo, señala que está colaborando con Obama sobre fórmulas para rescatar al sector bancario.

Es decir, en la Fed saben que es probable que las expectativas mejoren en los próximos meses con el plan de estímulo del nuevo presidente y todo el dinero público que ya se ha gastado en rescatar bancos y otras empresas, y no quieren que dicha mejora se refleje directamente en unas expectativas más inflacionistas y tipos a largo más altos. Es decir, no quieren ver unos tipos que exageren al alza descontando la vuelta de la inflación después de que hayan exagerado a la baja por las expectativas de deflación (y por la demanda de activos seguros en medio del pánico financiero).

Concretamente, los analistas creen que la Fed no está dispuesta a ver los tipos a largo por encima del 3% y así se lo comunica a los mercados. La rentabilidad del bono a 10 años ha subido del 2% al 2,7% y la Fed dice que ya es suficiente. Básicamente, creo que quieren estabilizar el tipo a largo entre un 2% y un 3%: por encima del 3%, el mercado cruza la línea roja y pone en peligro la recuperación, a juicio de Bernanke.

Ahora bien, tampoco quiere que los bonos caigan por debajo del 2%, porque entrarían en terra incognita en la historia de EEUU, lo que podría acelerar una deflación prolongada. Es decir, la Fed está marcando un rango entre el 2% y el 3% para los bonos, aunque no lo va a reconocer, al menos por ahora.

El problema es que no está fijando ese rango para los tipos del mercado monetario, que son su responsabilidad, sino para el mercado de deuda pública, donde no debería haber ninguna intervención pública. La Fed está dispuesta a intervenir para controlar uno de los mercados más grandes que existen -mucho más que la bolsa-, lo que supone un acto de intervencionismo sin precedentes, aunque a la altura de la entrada masiva del Estado en el capital de los bancos.

Lógicamente, esta intervención va a alterar completamente el comportamiento de los inversores, que comprarán bonos en cuanto su rentabilidad se acerque al 3% y los venderán cuando caiga cerca del 2%. O tal vez eso es precisamente lo que pretende Bernanke, que el mercado haga el trabajo sucio con estos mensajes y que, al final, la Fed no tenga que comprar bonos directamente. Y a lo mejor, hasta le sale bien.

"La Reserva Federal de Estados Unidos dio ayer un pequeño paso hacia la compra de valores del Departamento del Tesoro al señalar que está preparada para hacerlo si estima que la medida representa un alivio significativo para los mercados de crédito. El banco central, sin embargo, no dio una señal clara de que pondrá en marcha la estrategia"… La Fed muestra señales de preocupación y está más cerca de comprar deuda del Tesoro (The Wall Street Journal – 29/1/09)

La Fed ha rebajado su tasa de referencia de corto plazo, conocida como de fondos federales, a casi cero y reiteró después de una reunión de dos días del Comité Federal de Mercados Abiertos que la tasa se mantendrá baja "por algún tiempo". Las autoridades ahora se están concentrando en nuevos programas de préstamos y compras de activos.

El banco central de EEUU también ofreció una sombría evaluación del panorama económico y se refirió a las crecientes preocupaciones de que la inflación pueda caer por debajo de los niveles considerados prudentes. "La producción industrial, la construcción de viviendas y el empleo continúan cayendo de manera aguda, a medida que los consumidores y las empresas recortan sus gastos", señaló la Fed en un comunicado divulgado después de la reunión. "Además, la demanda global parece estar desacelerándose en forma significativa".

La Fed tiene un cierto margen de maniobra porque dos de sus nuevos programas de préstamos se están reforzando. En uno, la Fed está comprando US$ 600.000 millones en valores emitidos o garantizados por firmas hipotecarias asociadas al gobierno: Fannie Mae, Freddie Mac, Ginnie Mae y los bancos Federal Home Loan. En el otro, proveerá financiamiento por hasta US$ 200.000 millones a inversionistas que compren valores ligados a préstamos de consumo.

En el comunicado, el banco central dijo que compraría deuda gubernamental "si la evolución de los acontecimientos" sugiere que eso podría ayudar a aliviar la crisis de crédito. La Fed, sin embargo, no ofreció ningún plan para realizar dichas compras. La adquisición de bonos del Tesoro podría resultar en una reducción mayor de las tasas. La iniciativa también podría mantener bajas las tasas de interés de una serie de préstamos ligados a valores del gobierno, incluyendo hipotecas y deuda corporativa.

Dichas medidas deberían ser fáciles de ejecutar para la Fed porque tiene la autoridad para comprar bonos del Tesoro y la división de mercado de la Reserva Federal de Nueva York tiene un largo historial de negociar bonos con operadores de valores. Pero la medida no está exenta de riesgos. Uno de ellos es que la estrategia puede tener un efecto contraproducente. Una compra a gran escala de deuda gubernamental por parte de la Fed significaría que el banco central está ayudando al gobierno a financiar el creciente déficit fiscal al imprimir dinero, algo que podría desatar presiones inflacionarias. Si esa es la percepción de los inversionistas, los rendimientos de los valores del Tesoro podrían subir, en vez de caer.

Algunas autoridades de la Fed creen que el principal riesgo en este momento no es un aumento significativo de la inflación, sino su rápido declive. El índice de precios al consumidor, excluyendo bienes volátiles como los alimentos y la energía, se contrajo a una tasa anual de 0,3% en el cuarto trimestre de 2008, comparado con un alza de cerca de 2,5% en el mismo período de 2007. "El Comité ve algún riesgo de que la inflación persista por un período a niveles que no son considerados ideales para estimular el crecimiento económico y la estabilidad de precios a largo plazo", declaró la Fed.

"El Departamento del Tesoro de Estados Unidos encabeza el esfuerzo para diseñar un renovado plan de rescate financiero, pero será la Reserva Federal (Fed) la que, tras bambalinas, jugará un papel clave para hacerlo funcionar"… La Fed jugará un papel clave en el nuevo plan de rescate financiero de EEUU (The Wall Street Journal – 10/2/09)

Los préstamos de la Fed son un pilar del ambicioso programa dirigido a reanimar los mercados de préstamos de consumo, que el gobierno planea ampliar en alcance y, posiblemente, en magnitud.

El programa, conocido como Línea de Crédito de Préstamos de Valores Respaldados por Activos a Plazo (TALF por sus siglas en inglés), fue anunciado en noviembre y originalmente tenía el objetivo de proveer US$ 200.000 millones en financiamiento para inversionistas que compren activos respaldados por préstamos de consumo, como créditos para comprar autos y deuda de tarjetas de crédito. Los funcionarios del gobierno se han apresurado para lanzar el programa este mes.

Ahora, el gobierno evalúa aplicar el programa en otros mercados, por ejemplo el de los valores respaldados por préstamos inmobiliarios comerciales y créditos hipotecarios que no estén ligados a los gigantes hipotecarios semiestatales Fannie Mae y Freddie Mac.

El banco central tiene otros roles en el rescate. Por ejemplo, podría ayudar a echar andar un banco "agregador" dedicado a comprar activos financieros en problemas. La Fed también podría garantizar los activos de ciertas compañías, como ya lo hecho en los casos de los bancos Citigroup Inc. y Bank of America Corp., aunque tales planes probablemente no sean incluidos en el anuncio próximo.

El banco central estadounidense también ha estado trabajando de cerca con otros reguladores para diseñar un programa para prevenir ejecuciones hipotecarias. La planeada expansión del programa TALF, sin embargo, probablemente sea su rol más prominente. También representa un esfuerzo del gobierno para separar dos problemas relacionados: sanear los bancos y estimular el otorgamiento de nuevos préstamos.

Las autoridades tenían la esperanza de que las primeras medidas para inyectar capital en los bancos ayudaran a estimular la concesión de préstamos. En gran parte, los esfuerzos han sido infructuosos. Ampliar el programa TALF es una manera de crear créditos mientras se elaboran otras medidas, como nuevas infusiones de capital o ayudar a la banca a vender o "aislar" los activos tóxicos.

"Lo que la Fed está haciendo es ir de mercado en mercado y preguntar, "¿cuáles son los mercados en los que el flujo de crédito está dañado?"" explica Laurence Meyer, ex gobernador de la Fed y actual vicepresidente de Macroeconomic Advisers LLC, una firma de investigación económica.

La atención del gobierno del presidente Barack Obama en el programa de préstamos de la Fed también es un intento por abordar otro problema que ha echado por la borda los esfuerzos por frenar la crisis de crédito. Aunque el Tesoro ha estado inyectando capital fresco en los bancos durante meses, muchos de los problemas del sistema financiero radican fuera del sistema bancario, en mercados donde los préstamos son parte de valores vendidos a inversionistas de todo el mundo. En los últimos 25 años, estos mercados han pasado a dominar el sistema crediticio de EEUU.

Aunque la Fed considera al TALF como una manera de llegar a instituciones financieras que no sean bancos, el programa está lleno de riesgos. El Banco de la Reserva Federal de Nueva York ha luchado durante meses para definir las condiciones para los créditos que otorgarán a los inversionistas que acudan a la Fed en busca de financiamiento. Si son muy estrictas, la iniciativa podría resultar contraproducente. Si son muy laxas, podría incentivar un acceso demasiado fácil al crédito o el programa podría ser visto como un regalo para los inversionistas privados.

"El jefe de la Fed cree que la recesión podría acabar este año, pero las cifras apuntan a que la crisis se agrava"… Ola de malas noticias modera el optimismo de Bernanke (The Wall Street Journal – 25/2/09)

El presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos, Ben Bernanke, albergó la esperanza de que haya una recuperación económica en 2010. Sus palabras, sin embargo, fueron pronunciadas en un día en que las últimas cifras apuntan a una recesión cada vez más obstinada y difícil de combatir.

En el mes de febrero (2009), la confianza del consumidor estadounidense cayó a su nivel más bajo registrado, en parte debido a que las familias tienen ahora menos fe de hallar un empleo. Asimismo, dos índices sugirieron que el declive en los precios de las viviendas se podría estar acelerando. Y las empresas, desde el gigante de software Microsoft Corp. a las cadenas minoristas Target Corp. y Macy's Inc., reportaron un deterioro del panorama para las ganancias corporativas.

Los últimos datos de la economía y las crecientes aflicciones en las principales instituciones financieras del país apuntan a uno de los mayores problemas que enfrentan el presidente Barack Obama y Bernanke: la crisis financiera y la recesión se están retroalimentando. Los declives bursátiles y el deterioro en sus carteras de préstamos disminuyen las posibilidades de que los bancos recauden capital privado y los vuelve más reacios a conceder créditos, restándole dinamismo a la economía y ahondando el problema que las autoridades federales tratan de paliar. Mientras tanto, el aumento del desempleo y las caídas de las ganancias corporativas elevan las moras en los préstamos, perjudicando a los bancos y volviendo a consumidores y empresas aún más reacios a gastar…

Los rescates financieros y un plan de estímulo fiscal del orden de los US$ 875.000 millones están diseñados para sacar a la economía estadounidense de este espiral descendente. En su testimonio de ayer ante el Congreso, Bernanke advirtió sobre el "poder destructivo" de las crisis entrelazadas en los mercados y la economía. Además, subrayó que detener este sistema de retroalimentación es clave para reencauzar la economía y añadió que existía el riesgo de que el ya sombrío panorama actual empeorara.

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