Según la tesis central de La riqueza de las naciones, la clave del bienestar social está en el crecimiento económico, que se potencia a través de la división del trabajo. La división del trabajo, a su vez, se profundiza a medida que se amplía la extensión de los mercados y por ende la especialización.
Una particularidad de la obra es el planteamiento de que, gracias a la apelación al egoísmo de los particulares se logra el bienestar general. Esto es muchas veces interpretado de forma imprecisa como que simplemente el egoísmo lleva al bienestar general. Sin embargo, pasajes tanto de esta obra como de los sentimientos morales dejan en claro que la empatía con el egoísmo del otro (en donde acentúa la siguiente frase: «dame lo que necesito y tendrás lo que deseas») y el reconocimiento de sus necesidades es la mejor forma de satisfacer las necesidades propias.
La obra incluye una filosofía de la historia, donde la propensión a intercambiar exclusiva del hombre se convierte en el motor del desarrollo humano. Esta obra constituye también una guía para el diseño de la política económica de un gobierno. Los beneficios de la Mano Invisible del mercado solo se obtendrán en una sociedad bien gobernada.
Entre sus aportes más importantes se destacan:
La diferenciación clara entre valor de uso y valor de cambio.
El reconocimiento de la división del trabajo, entendida como especialización de tareas, para la reducción de costos de producción.
La predicción de posibles conflictos entre los dueños de las fábricas y los trabajadores mal asalariados.
La acumulación de capital como fuente para el desarrollo económico.
La defensa del mercado competitivo como el mecanismo más eficiente de asignación de recursos.
Influencia
La investigación sobre la naturaleza y causas de la riqueza de las naciones ha estado sujeta a todo tipo de interpretaciones. Entre ellas las que más destacan son:
David Ricardo: realiza una crítica a la obra, desarrollando más la teoría del valor trabajo y conceptos tales como el capital y la reproducción.
Karl Marx: profundiza la línea de Ricardo, rescatando concepciones Smithianas.
Milton Friedman y Rose Friedman: se centra en temas como «La mano invisible» y el papel del Estado. Milton y Rose Friedman escriben La libertad de elegir basados en la doctrina smithiana del libre comercio.
Amartya Sen: lectura renovada de Smith que retoma la Teoría de los sentimientos morales, libro de gran importancia en el campo de la ética, la teología y la moral. Amartya Sen destaca la importancia del sentimiento de la simpatía en la obra de Smith y cuestiona la estrecha interpretación friedmaniana que atribuye al egoísmo la armonía del mundo.
Adam Smith y el comercio internacional
La teoría clásica del comercio internacional tiene sus raíces en la obra de Adam Smith que plantea la interacción entre comercio y crecimiento económico. Según los principios establecidos en sus obras, los distintos bienes deberán producirse en aquel país en que sea más bajo su coste de producción y desde allí, exportarse al resto de las naciones. Por tanto define la denominada «ventaja absoluta» como la que tiene aquel país que es capaz de producir un bien utilizando menos factores productivos que otros, es decir con un coste de producción menor. Defiende además el comercio internacional libre y sin trabas para alcanzar y dinamizar el proceso de crecimiento económico, y este comercio estaría basado en el principio de la ventaja absoluta y asimismo cree en la movilidad internacional de factores productivos.
David Ricardo
David Ricardo Ruben (18 de abril de 1772 – 11 de septiembre de 1823) fue un economista inglés, miembro de la corriente de pensamiento clásica, nacido y fallecido en Londres. También fue un hombre de negocios, especulador exitoso y amasó una considerable fortuna.
David Ricardo era el tercero de diecisiete hijos de una familia sefardí judía (procedente de Portugal) que emigró de Holanda a Inglaterra antes de su nacimiento. Después de una breve etapa escolar en Holanda, empezó a trabajar a los catorce años, en la London Stock Exchange (Bolsa de Londres), como empleado de su padre, donde aprendió lo básico sobre finanzas. En 1793 se casó fuera de la fe judía y las relaciones con su familia se volvieron más tirantes, por lo que Ricardo decidió establecerse por su cuenta. Especializado en la negociación de valores públicos, prosperó bastante rápido y para 1815 había amasado una fortuna considerable.
Después de haber adquirido su fortuna en la Bolsa de Londres, se convirtió en terrateniente. En 1819 fue elegido miembro del Parlamento por Portarlington; retuvo el cargo hasta su muerte, aunque nunca visitó Irlanda. En la Cámara de los Comunes sus opiniones gozaban de autoridad, y se ha dicho de él que fue el primero en educar a la Cámara en el análisis económico. Se retiró de los negocios, lo que le permitió dedicarse a trabajos intelectuales desde muy joven.
Su interés por los problemas de la teoría económica se desarrolló hacia la mitad de su vida. Su primer contacto con el tema parece datar de 1799 cuando en una visita con su mujer al balneario de Bath, leyó a Adam Smith. En 1809 aparecieron publicadas sus primeras opiniones sobre economía en forma de cartas a la prensa firmadas por "R" en relación con la depreciación de la moneda.
Obra económica
Su obra más importante, Principios de Economía Política y Tributación, apareció en 1817, constituye la exposición más madura y precisa de la economía clásica; en el prefacio afirma que "el principal problema de la economía política es determinar las leyes que regulan la distribución". Con ese fin desarrolló una teoría del valor y una teoría de la distribución. Escribió también gran número de ensayos, cartas y notas que contienen aportaciones de importancia. Sin embargo, sus escritos resultan tan condensados y complejos que muchos lectores encuentran mejor expuestas sus ideas en los trabajos de Jean-Baptiste Say, Malthus y McCulloch.
Este economista, cuya labor es particularmente importante por el lugar destacado en que colocó al problema del valor -especialmente al poner de manifiesto con claridad que los problemas de la distribución dependen de la teoría del valor.
Ideas económicas
La ventaja comparativa
Entre sus aportaciones destaca especialmente la teoría de la ventaja comparativa, que defiende las ventajas del comercio internacional y en esencia es una ampliación de la división del trabajo propuesta por Adam Smith y opuesta a las teorías proteccionistas.
Ley de hierro de los salarios
También se le atribuye la idea que afirma que el salario real de los trabajadores permanecerá cercano al nivel de subsistencia aunque haya intentos de incrementarlos, conocida como la ley de hierro de los salarios, basada a su vez en las ideas de Thomas Malthus.
La equivalencia ricardiana
Además propuso la que actualmente se conoce como la teoría de la equivalencia ricardiana, según la misma el déficit fiscal no afecta a la demanda agregada de la economía y también que en algunas circunstancias la decisión de un gobierno de cómo financiarse (utilizar impuestos o emitir deuda) puede no tener efecto en la economía. Irónicamente, aunque esta equivalencia lleva su nombre, Ricardo nunca estuvo totalmente convencido. Robert Barro hizo unas variaciones de la misma idea utilizando la teoría de las expectativas racionales.
Publicaciones
The High Price of Bullion, a Proof of the Depreciation of Bank Notes (1810)
Essay on the Influence of a Low Price of Corn on the Profits of Stock (1815)
Principios de Economía Política y Tributación (1817)
François Quesnay
François Quesnay.François Quesnay (n. 4 de junio de 1694 – € 16 de diciembre de 1774) fue un economista francés de la escuela fisiocrática, siendo de profesión médico cirujano.
Se dedicó principalmente a los estudios económicos, tomando parte en las intrigas palaciegas, en las que estuvo perpetuamente involucrado. Conoció –aproximadamente en 1750– a Jean de Gournay (1712-1759), que también fue un pionero del pensamiento económico, y alrededor de esta pareja se formaría progresivamente el grupo filosófico de los economistas o fisiócratas. Sus discípulos más destacados fueron: Victor Riquetti, marqués de Mirabeau (autor de L'Ami des hommes, 1745-1760 y Philosophie rurale, 1763); Nicolas Bardeau (Introduction a la philosophie économique, 1771); G. F. Le Trosne (De l'ordre social, 1777); André Morellet, conocido por sus disputas con Ferdinando Galiani sobre el comercio de grano durante la Guerra de la Harina; Mercier Larivière, y Dupont de Nemours. Adam Smith, que durante su visita al continente con Henry Scott pasó algún tiempo en París conocería a Quesnay y a algunos de sus seguidores, homenajeó sus servicios científicos en su obra La riqueza de las naciones.
Obras
En 1758 publicó el Tableau économique, que contenía los principios de las ideas de los fisiócratas. Este es quizá el primer trabajo que intenta describir el funcionamiento de la economía de forma analítica y puede considerarse la primera contribución importante al pensamiento económico.
Las publicaciones en las que Quesnay expuso su sistema fueron: dos artículos, sobre "Fermiers" (granjeros) y sobre "Grains" (granos) en la L'Encyclopédie de Diderot y D'Alembert (1756, 1757); un tratado sobre las leyes naturales en la Physiocratie de Dupont de Nemours (1768); Maximes générales de gouvernement economique d'un royaume agricole (maximas generales del gobierno económico de un reino agricola)(1758) y la, publicada simultáneamente, Tableau économique avec son explication, ou extrait des économies royales de Sully (con el famoso lema Pauvres paysans, pauvre royaume; pauvre royaume, pauvre roi: campesinos pobres, reino pobre; reino pobre, rey pobre)); Dialogue sur le commerce et les travaux des artisans, y otras piezas menores.
Sus escritos económicos se recogen en el segundo volumen de los Principaux économistes, publicados por Guillaumin con prefacio y notas de Eugène Daire; también sus OEuvres économiques et philosophiques estaban introducidas por August Oncken (1888); una repimresión en facsímil de la Tableau économique a partir del original sería publicada por la British Economic Association (1895). El resto de sus escritos fueron el artículo Évidence en la Encyclopédie y Recherches sur l'évidence des vérites geometriques, con un Projet de nouveaux éléments de géometrie, 1773. El Elogio de Quesnay fue pronunciado en la Academia francesa de ciencias por Grandjean de Fouchy.
Thomas Robert Malthus
Economista, clérigo y demógrafo británico (1766-1834), nacido en Rookery. Su principal estudio es el Ensayo sobre los principios de la población (1798), en el que afirmaba que la población tiende a crecer en progresión geométrica, mientras que los alimentos sólo aumentan en progresión aritmética, por lo que llegará un día en que la población será mayor que los medios de subsistencia, de no emplear medios preventivos y represivos. Malthus fue educado según los principios pedagógicos de Jean-Jacques Rousseau, de quien su padre era íntimo amigo, completó sus estudios en el Jesus College de Cambridge. Después de graduarse en filosofía y teología, fue ordenado pastor anglicano y estuvo durante un tiempo al frente de la parroquia de Albury. En 1793 fue designado miembro del equipo de dirección del Jesus College, puesto al que tuvo que renunciar en 1804 al contraer matrimonio. Por esas mismas fechas, la Compañía de las Indias Orientales fundó en Haileybury una nueva institución universitaria destinada a formar a los funcionarios que después servirían a Inglaterra en destinos de ultramar; allí ejerció Malthus como profesor de economía desde 1805 hasta su muerte.
En 1798, influido por las tesis de Adam Smith y David Hume, publicó de forma anónima su célebre Ensayo sobre el principio de población. Sin embargo, dada la polémica suscitada por la obra, en 1804 aparecería una edición ampliada y corregida, esta vez firmada por el autor. En ella incorporó, como confirmación de sus teorías demográficas, los datos y observaciones obtenidos durante sus viajes por Rusia, los países nórdicos, Francia y Suiza. Con la publicación del citado Ensayo sobre el principio de población se acuñó un nuevo término, el malthusianismo, empleado para definir una nueva corriente entre moral y económica caracterizada por su pesimismo en cuanto al futuro de la especie humana. Ante la disparidad sobre la teoría de Malthus y sus seguidores, de que la población crecía desproporcionadamente más deprisa que los recursos de subsistencia, la solución propuesta era el control de la natalidad a toda costa. Las teorías malthusianas incidieron negativamente en las políticas sociales, lo cual le valió al autor las severas críticas de los nacientes grupos marxistas. En 1820 se editó la segunda gran obra de Malthus, Principios de economía política, donde arremetió sagazmente contra los postulados de David Ricardo, el otro gran economista británico de la época.
LA TEORÍA DE MALTHUS
Malthus expresó su tesis en los siguientes términos "afirmo que la capacidad de crecimiento de la población es infinitamente mayor que la capacidad de la tierra para producir alimentos para el hombre. La población, si no encuentra obstáculos, aumenta en progresión geométrica. Los alimentos sólo aumentan en progresión aritmética. Basta con poseer las más elementales nociones de números para poder apreciar la inmensa diferencia a favor de la primera de estas dos fuerzas". Malthus perfiló asimismo su pensamiento económico en materia de comercio exterior y rentas en obra como Observaciones sobre los efectos de las leyes de granos e Investigación sobre la naturaleza y progreso de la renta. Posteriormente elaboró su teoría de la sobreproducción en Principios de economía política, donde expuso que la ley de los mercados de Say dejaba de cumplirse, debido a que una excesiva acumulación de capital formaba un aumento en la oferta que no hallaba ante sí una demanda suficiente, con lo cual aparecía, inevitable, la crisis.
POBLACIÓN Y ALIMENTOS
La tendencia al aumento geométrico de la población es un hecho verificable antes que una simple especulación teórica. Malthus afirma que una dinámica de este tipo se observa en los Estados Unidos; allí "los medios de subsistencia han sido más abundantes, las costumbres más puras y, por consiguiente, los matrimonios más fáciles y precoces que en cualquiera de los países modernos de Europa". De allí que la población se haya doblado en 25 años y que pueda doblarse también en los 25 siguientes.
Es importante notar que la tendencia al crecimiento geométrico de la población se convierte en una realidad cuando no hay dificultades de abastecimientos, pero también cuando hay matrimonios tempranos. Esto último significa que la sociedad es virtuosa, esto es que las pasiones sexuales se canalizan a través del matrimonio y que la procreación es una de sus principales consecuencias. Si este no fuera el caso, la población no crecería al ritmo que le permite la abundancia alimentaria.
En lo que se refiere a la producción de alimentos, Malthus supone que su crecimiento seguirá, en el mejor de los casos, una progresión aritmética. Considerando que cada período es de 25 años en el esquema de Malthus, esto quiere decir que la producción de alimentos crecería a una tasa anual de 1,62% en el mejor de los casos.
CONSECUENCIAS
Para el 2025, se calcula que casi 3.000.000 de personas se hacinaran en ciudades. De cumplirse las previsiones sobre el crecimiento demográfico, esa cantidad significara alrededor del 61 % de la población mundial. Según ha advertido recientemente la ONU y la Organización Mundial de la Salud (OMS), la nueva situación plantea problemas imprevisibles. No en vano, las ciudades son consideradas actualmente el principal centro de contaminación de la Tierra: consumen enormes cantidades de energía y de recursos naturales y generan millones de toneladas de residuos diarios. Todo indica que para el año 2000, 35 ciudades superaran los cinco millones de habitantes y 325 núcleo urbanos pasaran el millón. El crecimiento se concentrara en los países en vías de desarrollo, pues en los países desarrollados la tendencia parece invertirse: Grandes capitales como París y Londres han perdido población; solo Tokio sigue creciendo. Los problemas que enfrentaran las megalópolis son los siguientes: hacinamiento, malnutrición, falta de agua potable, precariedad sanitaria y de condiciones de vida, deserción escolar, delincuencia, aumento de enfermedades y mortalidad infantil, mayor índice de niños maltratados y analfabetismo.
KARL MARX
Karl Heinrich Marx (Tréveris, Prusia, 5 de mayo de 1818 – Londres, 14 de marzo de 1883) fue un filósofo, historiador, sociólogo, economista, escritor y pensador socialista alemán. Padre teórico del socialismo científico y del comunismo, junto a Friedrich Engels, es considerado una figura histórica clave para entender la sociedad y la política.
Biografía
Karl Marx fue el tercero de siete hijos de una familia judía de clase media. Su padre, Herschel Mordechai (luego Heinrich) Marx, quien era descendiente de una larga línea de rabinos, ejercía la abogacía en Tréveris, su ciudad natal. Era además consejero de justicia, sin embargo recibió fuertes presiones políticas, por parte de las autoridades prusianas que le prohibieron continuar con sus prácticas legales de acuerdo a su religión y le obligaron a abrazar el protestantismo para poder mantener el cargo en la administración de Renania. Su madre fue Henrietta Pressburg, nacida en los Países Bajos, y sus hermanos fueron Sophie, Hermann, Henriette, Louise, Emilie y Caroline.
Realizó sus estudios de derecho en la Universidad de Bonn pero los dejó para estudiar filosofía en Berlín. Se doctoró en 1841 en Jena con una tesis titulada Diferencia entre la filosofía de la naturaleza de Demócrito y la de Epicuro. Pronto se implicó en la elaboración de trabajos en torno a la realidad social, colaborando en 1842 junto con Bruno Bauer en la edición de la Gaceta Renana (Rheinische Zeitung), publicación de la que pronto llegó a ser redactor jefe. Durante este período también frecuentó la tertulia filosófica de Los Libres (Die Freien). La publicación finalmente sería intervenida por la censura, y posteriormente, Marx tuvo que marchar al exilio.
El periodo de París
Junto a Ruge funda en París la revista Anales franco-alemanes (Deutsch-französische Jahrbücher), de la que fue director, si bien durante poco tiempo ya que el gobierno francés la cierra por presión del gobierno prusiano. En 1844, en París, Marx conoce y traba amistad con Friedrich Engels, que se convertirá en su principal colaborador y además le ofrecerá en múltiples ocasiones apoyo económico debido a la penuria económica a la que se ve sometida su familia dada la eventualidad de sus ingresos. También conocerá en Francia a otros importantes pensadores socialistas de la época tales como Pierre-Joseph Proudhon, Louis Blanc y Mijaíl Bakunin y al poeta alemán Heinrich Heine. Escribió sus reflexiones teóricas de esa época en una serie de cuadernos de trabajo que póstumamente fueron publicados como los Manuscritos económicos y filosóficos. Por otra parte, el peso político de sus artículos periodísticos le hizo ganar fama de revolucionario, lo que provocó su expulsión de Francia.
El periodo de Bruselas y del Manifiesto
Establecido en Bruselas, funda la Liga de los Comunistas, tras lo cual se declara apátrida, ateo y revolucionario. Tras el periodo revolucionario de 1848 y la publicación del Manifiesto del Partido Comunista, en coautoría con Engels, se traslada a Colonia, donde organiza un nuevo diario, "Nueva Gaceta Renana" (Neue Rheinische Zeitung). Su nueva publicación alcanza un éxito inmediato, en el contexto de una época de fuerte sentimiento social y compromiso revolucionario. En consecuencia, es prohibido por el gobierno renano.
El periodo de Londres y El Capital
Es ahora cuando Marx se dedica a la escritura de una de sus obras fundamentales, El Capital, que elabora en las salas de lectura del Museo Británico. El primer volumen de El Capital no verá la luz hasta 1867, tras dieciocho años de trabajo.
Además, Marx participó en la fundación y organización de la Primera Internacional (28 de septiembre de 1864), conocida como la Asociación Internacional de Trabajadores (AIT), participando activamente en las discusiones. A él se le encarga la redacción del Llamamiento inaugural de la Internacional y participa en la elaboración de su estatuto y otros documentos. Se entablará a partir de los debates un enfrentamiento entre Marx y Bakunin, que terminará con la expulsión de este último en el Congreso de La Haya de 1872 y la salida de la Internacional de las secciones bakunistas. Estos últimos, reunidos en el Congreso de Saint-Imier (Suiza), no reconocerían los acuerdos de La Haya y refundarían la Internacional.
Tras la derrota de la Comuna de París de 1871, que significó un duro golpe para la Internacional, Marx se retiró de la lucha política y se dedicó a la escritura de su pensamiento. El 14 de marzo de 1883 falleció en Londres.
Vida familiar
Marx en 1882.Karl Marx se casó con Jenny von Westphalen, hermana del ministro de Interior prusiano, amiga de infancia con la que se comprometió siendo ya estudiante, pero sólo consiguió casarse con ella tras la muerte de los padres de ésta, que se oponían a la relación, y tras conseguir una cierta estabilidad económica (eventual) como director de los "Anales franco-alemanes". Vivieron con fuertes penurias económicas debido a la irregularidad de los ingresos de Marx, a la persecución política (que censuraba y clausuraba las revistas que publicaba) y a tener que mudarse constantemente de país. Marx tuvo con Jenny von Westphalen 6 hijos, en 1849 esperaban ya el cuarto, en 1855 ya habían fallecido tres -Guido, Franciska y Edgar- convulsiones, bronquitis y tuberculosis serían las causas, la pequeña, Eleonora Marx formó parte del movimiento feminista y Laura Marx, se casó con el dirigente socialista francés Paul Lafargue, y se suicidó junto a él en 1911.
Con ellos vivía Helene Demouth, quien les ayudaba en las tareas domésticas y tenía una excelente relación con la familia Marx. Era especialmente cercana a Karl, tanto así, que se supone que tuvo un hijo ilegítimo con ella que fue reconocido por Friedrich Engels como propio para evitar controversias dentro del matrimonio de Karl y Jenny.
Marx tuvo una vida personal dedicada de forma exhaustiva al estudio de las diferentes disciplinas del pensamiento y en especial de la filosofía e historia lo cual implicó que nunca tuviera estabilidad económica; sin embargo, contó siempre con el apoyo fiel e incondicional de su amigo Engels.
Pensamiento
Testigo y víctima de la primera gran crisis del capitalismo (década de 1830) y de las revoluciones de 1848, Marx se propuso desarrollar una teoría económica capaz de aportar explicaciones a la crisis, pero a la vez de interpelar al proletariado a participar en ella activamente para producir un cambio revolucionario.
La obra de Marx ha sido leída de distintas formas. En ella se incluyen obras de teoría y crítica económica, polémicas filosóficas, manifiestos de organizaciones políticas, cuadernos de trabajo y artículos periodísticos sobre la actualidad del siglo XIX. Muchas de sus obras las escribió junto con Engels. Los principales temas sobre los que trabajó Marx fueron la crítica filosófica, la crítica política y la crítica de la economía política.
Algunos autores pretendieron integrar la obra de Marx y Engels en un sistema filosófico, el marxismo, articulado en torno a un método filosófico llamado materialismo dialéctico. Los principios del análisis marxista de la realidad también han sido sistematizados en el llamado materialismo histórico y la economía marxista. Del materialismo histórico, que sitúa la lucha de clases en el centro del análisis, se han servido numerosos científicos sociales del siglo XX: historiadores, sociólogos, antropólogos, teóricos del arte, etc. También ha sido muy influyente su teoría de la alienación.
Otros autores, entre los que destaca Louis Althusser, argumentan que los escritos de Marx no forman un todo coherente, sino que el propio autor, al desarrollar sus reflexiones críticas sobre la economía política durante la década de 1850, se desembarazó de su propia conciencia filosófica anterior y comenzó a trabajar científicamente. Desde esta perspectiva no existiría una ciencia marxista, sino un científico, Karl Marx, que fue un pionero en la comprensión de los mecanismos fundamentales que rigen el funcionamiento de la sociedad moderna, en especial con su reelaboración de la teoría del valor, y cuya obra cumbre fue El Capital.
Las obras de Marx han inspirado a numerosas organizaciones políticas comprometidas en superar el capitalismo. Por una parte, habría que señalar la interpretación que han realizado los leninistas, partidarios de que una vanguardia del proletariado, organizada en un partido revolucionario, preparado, si es necesario, para trabajar en la clandestinidad, empuje a la clase obrera a hacerse con el poder mediante la fuerza insurreccional de masas, para así derrocar a sus antiguas clases opresoras y dominantes, la burguesía y la aristocracia, expropiándolas de su control sobre el aparato de Estado y los medios de producción, y procediendo a la construcción de un Estado obrero que, además de instituir a aquélla como clase dominante, le permita avanzar hacia el socialismo —sociedad altamente igualitaria y solidaria, sobre la base de la democracia obrera y la propiedad social sobre los medios de producción, y un fuerte desarrollo productivo y cultural, con una economía planificada capaz de suplir holgadamente las principales necesidades mayoritarias— y la desaparición de la división de la sociedad en clases, hasta llegar al comunismo —sociedad sin clases sociales y sin Estado, basada en un altísimo nivel de civilización—.
Por otra, la que realiza la socialdemocracia, en sus orígenes contraria a la táctica revolucionaria y partidaria de avanzar hacia el socialismo a través de progresivas reformas parlamentarias (hay que decir que la mayoría de partidos socialdemócratas han ido poco a poco reformando sus planteamientos, hasta aceptar la economía de mercado). Otros teóricos, como los del comunismo consejista son partidarios de la toma del poder por parte de la clase obrera auto organizada y no por parte de un partido.
Ideas filosóficas
Durante su juventud, y mientras se formaba en filosofía, Marx recibió la influencia del filósofo alemán predominante en Alemania en aquel tiempo, Hegel. De este autor tomó el método del pensamiento dialéctico, al que, según sus propias palabras, pondría sobre sus pies; significando el paso del idealismo dialéctico del espíritu como totalidad a una "dialéctica del devenir constante" donde la síntesis, a diferencia de Hegel, no había sido realizada. Además, sigue utilizando el método dialéctico para analizar las contradicciones en la historia de la humanidad y, específicamente, aquella entre el capital y el trabajo.
Una interpretación sobre el desarrollo de la obra de Marx, proveniente del francés Louis Althusser, considera que los escritos de Marx se dividen en dos vertientes. Esta interpretación es relevante en la exegética marxista, pero a la vez es muy polémica y pocos autores la mantienen al día de hoy. Althusser encuentra dos etapas:
1 – Marx joven (hasta 1845) período en que estudia la alienación (o enajenación) y la ideología, desde una perspectiva cercana al humanismo influida en gran parte por la filosofía de Ludwig Feuerbach.
Marx se pregunta y contesta en sus Manuscritos de 1844:
¿En qué consiste, entonces, la enajenación del trabajo? Primeramente en que el trabajo es externo al trabajador, es decir, no pertenece a su ser; en que en su trabajo, el trabajador no se afirma, sino que se niega; no se siente feliz, sino desgraciado; no desarrolla una libre energía física y espiritual, sino que mortifica su cuerpo y arruina su espíritu. Por eso el trabajador sólo se siente en sí fuera del trabajo, y en el trabajo fuera de sí. Está en lo suyo cuando no trabaja y cuando trabaja no está en lo suyo. Su trabajo no es, así, voluntario, sino forzado, trabajo forzado. Por eso no es la satisfacción de una necesidad, sino solamente un medio para satisfacer las necesidades fuera del trabajo. Su carácter extraño se evidencia claramente en el hecho de que tan pronto como no existe una coacción física o de cualquier otro tipo se huye del trabajo como de la peste. El trabajo externo, el trabajo en que el hombre se enajena, es un trabajo de auto sacrificio, de ascetismo. En último término, para el trabajador se muestra la exterioridad del trabajo en que éste no es suyo, sino de otro, que no le pertenece; en que cuando está en él no se pertenece a sí mismo, sino a otro. (…) Pertenece a otro, es la pérdida de sí mismo.
Paralelamente a estas ideas describe al hombre con diversas concepciones: lo considera un ser real de carne y hueso; es únicamente el resultado de la historia económica, un predicado de la producción de la misma.
Piensa que el hombre se realiza modificando la naturaleza para satisfacer sus necesidades en un proceso dialéctico en que la transformación de agente y paciente es transformación mutua. La autogeneración del hombre es un proceso real, histórico – dialéctico, entendiéndose la dialéctica como proceso y movimiento a través de la superación sintética de las contradicciones.
Cuando Marx habla de 'realidad' hace referencia al contexto histórico social y al mundo del hombre. Asegura que el hombre es sus relaciones sociales.
Para Marx, lo que el hombre es no puede determinarse a partir del espíritu ni de la idea sino a partir del hombre mismo, de lo que éste es concretamente, el hombre real, corpóreo, en pie sobre la tierra firme. El hombre no es un ser abstracto, fuera del mundo sino que el hombre es en el mundo, esto es el Estado y la sociedad.
La libertad, la capacidad de actuar eligiendo, está limitada a las determinaciones históricas, pero es, al mismo tiempo, el motor de aquéllas cuando las relaciones sociales y técnicas entran en crisis.
Dios, la Filosofía y el Estado constituyen alienaciones en el pensamiento, alienaciones dependientes de la alienación económica, considerada para Marx única enajenación real.
En líneas generales, Marx defiende la idea de que la alineación empobrece al hombre socio histórico negándole la posibilidad de modificar aspectos de los ámbitos en los que se ve involucrado, provocándole una conciencia falsa de su realidad. Sin embargo, éste es un hecho que puede suprimirse.
Políticamente, el pensador alemán aboga por una sociedad comunista. Entre el hombre alienado (aquel que no coincide consigo mismo) y el hombre comunista (aquel que finalmente es igual a hombre) se coloca el proceso transformador. Sólo en la sociedad comunista habrá desaparecido toda alienación.
2 – Marx maduro (1845-1875): Según Althusser, 1845, el año de La ideología alemana y las Tesis sobre Feuerbach, marca la ruptura epistemológica (concepto tomado de Gastón Bachelard). A partir de la cual Marx rompe con su etapa anterior, ideológica y filosófica, e inaugura un período científico en el cual desarrolla estudios económicos e históricos usando el método del materialismo histórico. Como diría Althusser, Marx inaugura el continente historia.
Este es, eminentemente, el período de su magna obra: El capital. Crítica de la economía política. No hay que olvidar, por otro lado, los textos de los que esta obra surge: la Contribución a la crítica de la economía política (que dará material para el primer capítulo de El capital) o los Grundrisse, cuyo tardío descubrimiento dio mucho que hablar sobre las continuidades de Marx con su primera etapa, y proporcionó de argumentos a los críticos de la ruptura epistemológica. Durante su etapa de madurez, la obra de Marx se vuelve más sistemática y surgen sus conceptos económicos más destacados: la teoría del valor, la explotación como apropiación de plusvalía, o la teoría explicativa sobre las crisis capitalistas.
Sin embargo otros autores, incluido Erich Fromm, niegan la "ruptura epistemológica" y sostienen que la idea de enajenación es la fundamental durante todo el pensamiento de Karl Marx. Más cercanos al humanismo, no consideran que haya un joven y un viejo Marx y reivindican la continuidad de su obra alrededor de un concepto del hombre y su enajenación en el capitalismo.
Críticos de Marx
La importancia de Karl Marx en el panorama intelectual y político del siglo XIX, y de su legado en el siglo XX, han provocado numerosas críticas a su obra y su persona. En el siglo XIX, las principales críticas provenían de intelectuales y organizaciones del movimiento obrero que sostenían posturas políticas distintas a las de Marx. Entre otros, Bakunin, anarquista y rival en la inspiración de la Internacional, consideraba autoritario a Marx.
Durante el último tercio del siglo XIX y, sobre todo durante el siglo XX, la fuerza del marxismo en los ambientes intelectuales y organizaciones políticas de todo el mundo hizo que numerosos pensadores conservadores y liberales intentasen refutarlo. Algunas críticas se centran en elementos concretos de la obra de Marx, mientras otras se oponen a alguna de las versiones del canon marxista elaborado por las organizaciones políticas y los intelectuales socialistas o comunistas.
Poco después de la muerte de Marx, el economista austríaco Böhm-Bawerk publicó varios ensayos sobre el subjetismo del valor, entre ellos Karl Marx and the Close of His System, de 1896, donde consideraba refutar El Capital y la teoría del valor-trabajo marxista, en tanto que teorías del campo de la economía. Ya en el siglo XX, una de las críticas más influyentes ha sido la de Karl Popper. En La sociedad abierta y sus enemigos analizó lo que llama 'profecías' marxistas, supuestamente desmentidas por la historia. Popper escribió también un ensayo crítico con las pretensiones del marxismo como ciencia de la historia, considerando que incurre en lo que llama 'historicismo'.
En el plano de la crítica personal, el historiador Paul Johnson dedica a Marx un capítulo de Intellectuals, un libro en el que resalta la mezquindad personal de muchas otras luminarias intelectuales.
Robert Owen
(14 de mayo de 1771 – 17 de noviembre de 1858), socialista utópico, considerado como el padre del cooperativismo.
Originario de Gales, de familia menestral, trabajó desde los 10 años; a los 20 años se hace con la dirección de una fábrica de tejidos en Manchester. El primero de enero de 1800, Robert Owen se hizo cargo de la empresa New Lanark. Algunas obras importantes son La Formación del Carácter Humano (1814) y Una Nueva Visión de la Sociedad (1823) que trata sobre las reformas del régimen industrial.
En 1825 fundó la Comunidad de New Harmony en Indiana, pero el experimento fracasó y tuvo que vender el terreno en 1828, perdiendo con ello una buena parte de su fortuna. Vuelve al Reino Unido y lidera un sindicato, ayudando también a otros.
Robert Owen defendía la posibilidad de desarrollar un sistema económico alternativo basado en la cooperativa. Su planteamiento era utópico porque pretendía sustituir el sistema capitalista por otro más justo que evitara los problemas británicos. Desde su perspectiva los obreros debían unirse para crear una nueva realidad europea basada en cooperativas que fuesen más rentables que las industrias: Cooperativas de producción y cooperativas de distribución. Estos planteamientos fueron los frutos iníciales, y en 1832 ya existían unas 500 cooperativas que englobaban a 20.000 trabajadores. Owen centró todas sus energías en defender los intereses de los trabajadores, y se vinculó con el Movimiento Obrero Británico. Crea la Gran Unión Consolidada de Oficios, con el objetivo de controlar todo el movimiento obrero británico. A los pocos meses de su fundación empieza a tener las primeras crisis porque inician una serie de huelgas que los obreros no cualificados no pueden soportar. Esto provocó un problema interno agravado por la presión externa. A pesar de ese gran fracaso esa experiencia sindical demostraba:
El sindicato de masas y de ámbito estatal era posible
Se podían plantear alternativas al sistema capitalista (como cooperativas de producción) Owen se dedicará a escribir y defender su visión de cooperativismo. Atacará instituciones como la familia, la religión, la herencia, etc., porque pensaba que limitaban la libertad del ser humano.
Confía en que la solución vendrá de la propia sociedad. Numerosas cooperativas de consumo británicas surgieron influidas por sus ideas.
Ideas: Hombre y sociedad
Desde el punto de vista de Owen, y en oposición a los filósofos del individualismo, el Hombre es un producto social, manufacturado. El hombre sería un libro en blanco que la sociedad, mediante sus agentes socializadores, procede a escribir. El carácter del individuo pasa a ser creación del medio social y el azar de las circunstancias, y no consecuencia de una naturaleza metafísica predestinada. Cree en la omnipotencia de la razón, por lo que su ideología asienta sus bases en la educación. Se puede considerar a Owen a uno de los padres del pensamiento pedagógico.
Parte de la idea de que las condiciones de vida determinan la suerte del individuo y, para mejorarla, se debe reconstruir el ambiente en que vive el ser humano. Para Owen, el hombre depende de su entorno natural y social. El hombre es bueno por naturaleza pero las circunstancias no le dejan serlo (idea original de Rousseau, y que quizá el adapte). Quiere mejorar el entorno del hombre para que éste sea bueno, para que emerja su bondad. El hombre bueno trabajará mejor voluntariamente.
Reforma de la sociedad.
Así como la vida de Owen es edificante, las fórmulas que preconiza para reformar la sociedad son abundantes, por lo que sus aportes pueden encontrar frutos en una gran variedad de filósofos posteriores. Fundamentalmente, su pensamiento evoluciona partiendo de la filantropía empresarial, pasando por un socialismo de carácter utópico denominado owenismo, que culminaría en el mesianismo social. Los aspectos más influyentes de la concepción oweniana de la reforma social son:
La idea de que la calidad del trabajo de un obrero mantiene una relación directamente proporcional con la calidad de vida del mismo, por lo que las medidas a aplicar consisten en cualificar y cuantificar la producción de cada obrero, brindar mejoras en las áreas de vivienda, higiene, educación, prohibición del trabajo infantil, salarios y determinar una cantidad máxima de horas de trabajo (estableció diez horas y media).
La recurrencia al Estado, del cual recibió poco o nulo apoyo, como legislador y emancipador de los cambios producidos en la comunidad ideal.
Simultáneamente las ideas de que una comunidad ejemplar puede servir de sustento de un cambio social profundo y que la reforma social son independientes de la acción política y la toma del poder.
La institución de comunidades agrícolas, en donde no existe la propiedad privada. Al igual que Fourier, y en oposición a Saint-Simón, Owen supedita la industria a la agricultura.
La idea de que el trabajo es, o debería ser, la medida del valor.
Establecimiento de Bazares Obreros, establecimientos de intercambio de productos por medio de bonos cuya unidad era la hora de trabajo rendido. Idea que anticipa a los Bancos de Intercambio de Proudhon.
John Maynard Keynes
Primer Barón Keynes, CB (Cambridge, 5 de junio de 1883 – Firley, 21 de abril 1946) fue un economista británico, cuyas ideas tuvieron una fuerte repercusión en las teorías económicas y políticas modernas, así como también en las políticas fiscales de muchos gobiernos. Keynes y sus seguidores de la postguerra destacaron no solo el carácter ascendente de curva de oferta, en contraposición con la visión clásica, sino que además la inestabilidad de la demanda agregada, proveniente de los shocks ocurridos en mercados privados, como consecuencia de los altibajos en la confianza de los inversionistas. Dado este énfasis en la demanda, era natural para Keynes proponer el uso de políticas fiscales y monetarias activas para contrarrestar las perturbaciones de la demanda privada, por lo que es particularmente recordado por su aliento a una política de intervencionismo estatal, a través de la cual el estado utilizaría medidas fiscales y monetarias con el objetivo de mitigar los efectos adversos de los periodos re cesionarios de las fluctuaciones cíclicas o crisis cíclicas de la actividad económica.
Los economistas lo consideran uno de los principales fundadores de la macroeconomía moderna.
Keynes fue un inversor de éxito logrando hacerse con una gran fortuna (después de afianzarse como economista ya que en su juventud sufrió grandes pérdidas que debieron ser cubiertas por su padre). Durante el Crack del 29 casi queda en bancarrota, pero pudo recuperarse en poco tiempo. Se le considera un gran bibliófilo, en especial por lo que respecta a las ediciones originales de las obras de Isaac Newton. Estaba interesado en la literatura en general y el drama en particular; se constituyó en empresario del Teatro de Artes de Cambridge, labor en la que puso gran entusiasmo (cierto día que el portero estaba ausente se le pudo ver a él mismo cortando las entradas en el hall). Gracias a esto, la institución se convirtió durante un tiempo en el más importante escenario británico fuera de Londres.
Bertrand Russell decía de Keynes que era la persona más inteligente que había conocido, señalando que, "Cada vez que hablaba con Keynes, sentía que mi vida estaba en sus manos, y rara vez no me hacía sentir un poco tonto". Otro conocido comentario que Keynes hizo a su mujer fue que había "encontrado a Dios en el tren de las 5:15" cuando recibía a Ludwig Wittgenstein, el protegido de Russell, para su estancia en Cambrigde.
Carrera: Sobre la divisa india
Keynes aceptó una cátedra de economía en Cambridge, financiada personalmente por Alfred Marshall, desde la cual comenzó a construir su reputación. Pronto fue nombrado para la Comisión Real para la Moneda y Finanzas de la India, donde mostró considerable talento para aplicar la teoría económica a los problemas prácticos.
Sus habilidades fueron muy demandadas durante la Primera Guerra Mundial. Trabajó para el consejero del Chancellor of the Exchequer, ministro británico para asuntos financieros, y para el HM Treasury, el Tesoro de Su Majestad, en asuntos financieros y económicos. Entre sus responsabilidades se encontraba el diseño de los contratos crediticios entre Gran Bretaña y sus aliados continentales durante la guerra, y la adquisición de divisas escasas.
Su muy popular expresión "A largo plazo todos estaremos muertos" ("In the long run we are all dead") es frecuentemente citada.
Tratado sobre Probabilidad
Keynes publicó su Tratado sobre Probabilidad en 1920, una notable contribución a las bases matemáticas y filosóficas de la teoría de la probabilidad.
Tratado sobre la Reforma Monetaria
Atacó las políticas deflacionarias de los años 20 en Un Tratado sobre la Reforma Monetaria de 1923, una incisiva argumentación sobre por qué los países deberían apuntar a la estabilidad de los precios domésticos al tiempo de proponer el uso de tipos de cambio flexibles. En el Tratado sobre el Dinero de 1930 (en 2 volúmenes) expone su teoría de tipo Wickselliana sobre ciclo de crédito.
Teoría General del Empleo, el Interés y el Dinero
Su obra central, la Teoría general de la ocupación, el interés y el dinero, desafió el paradigma económico dominante al momento de la publicación en 1936. En este libro Keynes presenta una teoría basada en la noción de demanda agregada para explicar la variación general de actividad económica, tales como las observadas durante la Gran Depresión de los años 30. Según su teoría, el ingreso total de la sociedad está definido por la suma del consumo y la inversión; y en una situación de desempleo y capacidad productiva no utilizada, "solamente" pueden aumentarse el empleo y el ingreso total, incrementando primero los gastos, sea en consumo o en inversión.
La cantidad total de ahorro en la sociedad es determinada por el ingreso total y, por tanto, la economía podría alcanzar un incremento del ahorro total, aun si las tasas de interés se bajaran para estimular los gastos en inversión. El libro abogaba por políticas económicas activas por parte del gobierno para estimular la demanda en tiempos de elevado desempleo, por ejemplo a través de gastos en obras públicas. El libro es a menudo visto como la fundación de la macroeconomía moderna. Los historiadores concuerdan en que Keynes influyó en el New Deal del presidente estadounidense Franklin Delano Roosevelt, pero discuten aún sobre el grado de dicha influencia. Una política de gasto deficitario del tipo de la emprendida en el New Deal comenzó a efectuarse en 1938, que había sido llamada pump priming, y había sido aprobada por el presidente Herbert Hoover. Pocos economistas renombrados en los EE.UU. comulgaron con las ideas de Keynes durante los años 30. Con el tiempo, sin embargo, sus ideas fueron más ampliamente aceptadas.
¿Cómo pagar la guerra?
En el 1942 Keynes era ya un economista ampliamente reconocido, hecho evidenciado en su admisión en la Cámara de los Lores con el título de Barón Keynes de Tilton en el Condado de Sussex, ubicándose en la bancada del Partido Liberal. Durante la Segunda Guerra Mundial, Keynes argumentó en ¿Cómo pagar la guerra? (1940) que el esfuerzo bélico debería ser mayormente financiado mediante el aumento de colonias en África y por mayores impuestos, en lugar de gasto deficitario, para de esa manera evitar la inflación. A medida que la victoria Aliada parecía más segura, Keynes estuvo muy involucrado en las negociaciones que establecieron el sistema Bretton Woods, en su papel de líder de la delegación Británica y presidente de la comisión del Banco Mundial. El plan de Keynes, referente a una unión internacional de clearing propuesta para un sistema de administración de divisas, involucraba un banco central mundial, el Bancor, que sería responsable de una unidad mundial única de cambio. Sin embargo, el peso de los EE.UU. en las negociaciones fue determinante para que el resultado final estuviera más acorde a los planes más moderados de Harry Dexter White.
Obras "menores"
Keynes escribió Ensayos en Biografía y Ensayos en Persuasión, el primero aportando retratos de economistas y otras personas notables, mientras que el segundo presenta algunos de los intentos del autor de influir en los formadores de políticas durante la Gran Depresión. Keynes fue editor jefe para el Economic Journal desde 1912.
Inversor
La brillante actuación de Keynes como inversor bursátil está demostrada por la información pública del fondo que administró en nombre del King's College de Cambridge.
Desde 1928 a 1945, a pesar de recibir un gran golpe durante el Crack de Wall Street de 1929, el valor del fondo de Keynes mostró un considerable crecimiento anual promedio de 13,2 %, comparado con un nivel general en el mercado del Reino Unido que se redujo en un promedio del 0,5 % anual.
El enfoque generalmente adoptado por Keynes con sus inversiones lo resumió él mismo en:
1. Una selección cuidadosa de unas pocas inversiones considerando su bajo precio en relación a su valor intrínseco actual probable, y el potencial en un período dado de años, y en relación a otras inversiones disponibles en ese momento.
2. Una tenencia firme de estas relativamente grandes cantidades contra viento y marea, quizás por varios años, hasta que, o bien han satisfecho la expectativa que se tenía sobre ellas o sea evidente que su compra fue un error.
3. Una posición equilibrada de la inversión, es decir una variedad de riesgos a pesar de que las tenencias individuales sean grandes, y riesgos contrapuestos si es posible (por ejemplo, una tenencia de oro entre otras inversiones en acciones, ya que probablemente se moverán en direcciones opuestas cuando haya fluctuaciones generales.
Keynes argumentó que "Es un error el pensar que uno limita sus propios riesgos diversificando mucho entre empresas de las cuales uno sabe poco y no se tiene ninguna razón particular para confiar… El conocimiento de uno y su experiencia son en definitiva limitados y raramente hay, en cualquier momento dado, más de dos o tres empresas en las cuales siento que puedo depositar una confianza completa." ("It is a mistake to think one limits one's risks by spreading too much between enterprises about which one knows little and has no reason for special confidence … One's knowledge and experience are definitely limited and there are seldom more than two or three enterprises at any given time in which I personally feel myself to put full confidence.")
Algunos pueden considerar que el consejo de Keynes respecto a la especulación mantiene su vigencia:
(Invertir es) intolerablemente aburrido y sobre exigente para cualquiera que esté exento del instinto apostador; mientras que quien lo tiene debe pagar a esta propensión el precio adecuado.
Cuando revisaba un importante trabajo en inversión de valores, Keynes argumentó que "compañías industriales bien manejadas, como regla, no distribuyen el total de sus beneficios a sus accionistas. En los buenos años, si no en todos los años, retienen parte de sus beneficios y los reinvierten en sus negocios. Por ende hay un elemento de interés compuesto operando en favor de una inversión industrial razonable."
Principales contribuciones al pensamiento económico
En su obra principal, Teoría general del empleo, el interés y el dinero, Keynes escribió sus opiniones en lo referente al empleo, teoría monetaria, y el ciclo de comercio, entre otros temas. Su obra dedicada al empleo se oponía a todo lo que los economistas clásicos habían enseñado. Keynes decía que la causa real del desempleo era el insuficiente gasto en inversión. Él creía que la cantidad de trabajo entregada es diferente cuando el decremento en los salarios reales (el producto marginal del trabajo) se debe al decremento del salario monetario, que en el caso cuando se debe a un incremento del nivel de precios, asumiendo que el salario monetario se mantenga constante.
Se puede sintetizar su aporte en el concepto de que cuando la demanda deviene transitoriamente más pequeña, ello puede tener como consecuencia, en determinados contextos institucionales, el que la oferta también sea contraída; con lo que resultaría un nuevo equilibrio del mercado, pero habiendo perdido el mercado mismo cierta magnitud entre ambos momentos.
En su teoría, el desencadenante de esos movimientos en la demanda y la oferta es el mercado de capital; la demanda de capital transitoriamente deviene menor, a partir de lo cual la oferta de capital le sigue mímicamente a la baja, en vez de mantenerse transitoriamente o aumentar transitoriamente.
Al resolverse ambos movimientos, el de la demanda de capital y el de la oferta de capital, ambos a la baja, el mercado como un todo vuelve a un nuevo equilibrio. Pero en éste, la cantidad de capital aplicado será menor que antes, por lo cual la nueva proporción resultante entre los demás factores de producción- Trabajo y Recursos, y el capital últimamente en el mercado, se alterará. Al reducirse o retenerse parte del capital o ahorro de antaño, una parte de los otros dos factores resultará excedente y no podrá más que quedar fuera del mercado; se realiza como un creciente stock involuntario de estos otros dos factores. Todo esto sucede en el contexto de cierta inflexibilidad en la información que se disemina y comunica, a partir de un marco institucional dado; que queda más o menos anacrónico o extemporáneo a los giros en el mercado de capital, que desencadenan luego el desempleo o la formación involuntaria de stocks de factores.
En su Teoría del dinero, Keynes dijo que los ahorros e inversión estaban determinados en forma independiente. La cantidad destinada a ahorro tenía poco que ver con las variaciones en las tasas de interés que a su vez tenían poco que ver con cuanto se destinaba a inversión. Keynes pensó que los cambios en la cantidad destinada a ahorro dependían en la predisposición para consumir que resultaba de cambios incrementales, marginales, al ingreso. Por tanto, la cantidad destinada a inversión estaba determinada por la relación entre la tasa esperada de retorno sobre la inversión y la tasa de interés.
Influencias en la obra de Keynes
Silvio Gesell
Arthur C. Pigou
Alfred Marshall
Adam Smith
David Ricardo
Karl Marx
Thomas Malthus
Influencia de Keynes
Las teorías de Keynes fueron tan influyentes, aun al estar siendo disputadas, que todo un subcampo de la macroeconomía llamada economía Keynesiana al día de hoy continua desarrollando y discutiendo sus teorías y las aplicaciones de estas. John Maynard Keynes se interesó en diversos campos de la cultura y fue una figura central del llamado grupo de Bloomsbury, conformado por prominentes artistas y escritores del Reino Unido. Sus ensayos autobiográficos Two Memoirs se publicaron en 1949.
Crítica
Su obra de 1930 Tratado sobre el dinero ("Treatise on Money") (2 volúmenes) fue visto como el mejor trabajo de Keynes por uno de sus más frecuentes oponentes intelectuales, Milton Friedman. Friedman y otros monetaristas han argumentado que los economistas Keynesianos no prestan suficiente atención a la estanflación y otros asuntos inflacionarios.
Friedrich von Hayek hizo una reseña del Tratado sobre el dinero tan dura que Keynes pidió a Piero Sraffa que reseñara (y condenara no menos duramente) el propio trabajo de Hayek. El conflicto Keynes-Hayek fue más que una de las batallas en la guerra entre Cambridge y la Escuela de economía de Londres, fue precursor del enfrentamiento de las dos principales concepciones liberales, contradictorias entre sí, dominantes desde el final de la II Guerra Mundial y hasta la actualidad.
Ludwig von Mises
Ayn Rand
Henry Hazlitt ha escrito un libro llamado El fracaso de las nuevas economías (The Failure of the New Economics), una detallada crítica capítulo a capítulo de la Teoría general de Keynes
Milton Friedman
Nacimiento 31 de julio de 1912 Brooklyn, Nueva York.
Muerte 16 de noviembre de 2006 (94 años) San Francisco, Estados Unidos.
Milton Friedman (* Nueva York, 31 de julio de 1912 – € San Francisco, 16 de noviembre de 2006) fue un destacado economista e intelectual estadounidense. Defensor del libre mercado y exponente del monetarismo neoclásico de la Escuela de Economía de Chicago, Friedman realizó contribuciones importantes en los campos de macroeconomía, microeconomía, historia económica y estadística. En 1976, fue galardonado con un Premio Nobel de Economía por sus logros en los campos de análisis de consumo, historia y teoría monetaria y por su demostración de la complejidad de la política de estabilización.
Con respecto a sus ideas políticas, Milton afirmaba:
Soy un libertario con una "l" minúscula y un Republicano con una "R" mayúscula. Y soy un Republicano por cuestiones de conveniencia, no de principios.
Creo que el término liberal clásico es igualmente aplicable. No me interesa mucho lo que me llamen, estoy mucho más interesado en que la gente piense más acerca de las ideas que acerca de la persona.
Sus orígenes
Milton Friedman se crió en una familia de inmigrantes judíos húngaros. Su padre era empresario y fue el dueño de una fábrica textil, en Rahway, Nueva Jersey, que quebró durante la Gran Depresión. La familia vivía en un apartamento en la misma edificación de la fábrica. Tenía tres hermanos y debió trabajar en restaurantes y tiendas para cooperar con una beca para estudiar en la Universidad de Rutgers, donde ingresó en 1929.
Estudiando la maestría conoció a la que sería su esposa seis años más tarde, Rose Director. Con ella tuvo dos hijos: David Friedman y Janet Friedman; David es un teórico anarquista que radicaliza las propuestas de libertad individual y economía de mercado, siendo uno de los principales teóricos del anarco capitalismo.
Sus estudios
Friedman se licenció en Ciencias Económicas por la Universidad de Rutgers, donde comenzó su pasión por las matemáticas, y lo motivó a buscar un grado de maestría en la Universidad de Chicago y un doctorado en la Universidad de Columbia en 1946.
Fue profesor de la Universidad de Chicago desde 1946 a 1976, donde enseñó teoría económica y se convirtió en leyenda. Friedman planteaba que la única manera de generar estabilidad política era sostenerla con estabilidad económica.
Es el principal representante de la llamada escuela de Chicago, corriente liberal y monetarista que encabezó la reacción contra las políticas económicas preconizadas por Keynes. Friedman critica el gran tamaño adquirido por el sector público en los países occidentales, denunciando la distorsión que la intervención estatal introduce en el funcionamiento de los mercados. Propone desmontar el Estado de bienestar y dejar que actúen libremente las leyes de la oferta y la demanda, volviendo a la pureza original del sistema que definiera Adam Smith. Recuperando viejas ideas, ha actualizado la teoría cuantitativa de la moneda, denunciando los efectos inflacionistas de las políticas expansivas keynesianas.
Sin embargo, ha defendido al mismo tiempo medidas de protección contra la pobreza, como un impuesto negativo sobre la renta o el cheque escolar para los ciudadanos de menores ingresos. Ha influido poderosamente sobre las políticas económicas implementadas para salir de la crisis en el último cuarto del siglo XX.
Friedman fue también analista de estadísticas para el gobierno de Estados Unidos, asesor económico de los presidentes Richard Nixon y Ronald Reagan. Colaboró con el gobierno de Margaret Thatcher, fue investigador del National Bureau of Economic Research entre 1937 y 1981, y presidente de la American Economic Association en 1967.
Fue un defensor del libre mercado y el más conocido líder de la Escuela de Chicago debido, en parte, a su labor de difusión a través de los distintos medios incluida la prensa escrita, el ensayo y la televisión con su serie "Free To Choose" (Libertad de Elegir) de 1980. Además impartió clases, entre otras, en las universidades de Princeton, Columbia y Stanford. Monetarista "de toda la vida" se opuso al keynesianismo – que promulgaba la intervención fiscal como motor de crecimiento – en el momento de máximo apogeo de éste, en los años cincuenta y sesenta. Abogaba por un crecimiento moderado y constante de la masa monetaria como medio para solucionar en gran parte los problemas de la economía y, a la vez, permitir un crecimiento económico sin inflación.
Sus más importantes contribuciones académicas a la Economía fueron una revisión de la teoría del consumo, de la curva de Phillips y una mejor comprensión del mercado de capitales y de los factores que influencian la velocidad de circulación del dinero.
Hong Kong como ejemplo
Friedman dijo una vez "si quieren ver capitalismo en acción, vayan a Hong Kong". Sostenía que la economía de Hong Kong era el mejor ejemplo de una economía de capitalismo laissez faire.
Obras más destacadas
Essays in Positive Economics, 1953
A Theory of the Consumption Function, 1957
A Program for Monetary Stability, 1959
Capitalism and Freedom, 1962
Inflation: Causes and consequences, 1963
The Optimum Quantity of Money and Other Essays, 1969
The Counter-Revolution in Monetary Theory, 1970
Free to Choose: A personal statement, con Rose Friedman, 1980.
"Analytical and Continental Traditions in Perspective", pp. 145-159, Friedman, M. an A Parting of the Ways. Carnap, Cassirer, And Heidegger. Chicago: Open Court Publishing, 2000.
MODELOS ECONOMICOS DE PRODUCCION
COMUNISMO PRIMITIVO
Por comunismo primitivo, comunidad primitiva, o modo de producción primitivo, se entiende, en la teoría marxista, una etapa del desarrollo de las formaciones económico-sociales, caracterizadas por el bajo nivel de desarrollo de las fuerzas productivas, la propiedad colectiva de los instrumentos de producción (rudimentarios) y la distribución igualitaria de los productos. Es el primero de los modos de producción que Marx definió como estadíos de la evolución de la historia económica.
Los hombres estaban organizados en bandas, dedicados a la caza, pesca y recolección, y la actividad laboral humana se basaba en la cooperación simple. Para Marx, este tipo de producción colectiva o cooperativa era, naturalmente, el resultado del desamparo en que se encontraba el individuo aislado, y no de la socialización de los medios de producción. Como consecuencia, el hombre primitivo no concebía la posibilidad de una propiedad privada de los instrumentos de producción, sólo algunos de éstos, que les servían también para defenderse de las fieras, les pertenecían en propiedad personal. Trabajo tan primitivo no creaba excedente alguno después de cubrir las necesidades más perentorias, y esa inexistencia impedía la explotación del hombre por el hombre. En ese régimen económico la producción habría estado directamente determinada por las necesidades colectivas, y entre el acto sustancial de la creación y lo creado no había ninguna mediación social y, por tanto, ninguna ruptura epistemológica.
Esta forma de vida corresponde al periodo que los pre historiadores han denominado Paleolítico, y no fue sino con el descubrimiento de la agricultura y la ganadería, realizado durante el Neolítico que permitió una primera especialización y división social del trabajo, como describe el historiador Vere Gordon Childe con sus conceptos de Revolución neolítica (en la que las aldeas campesinas aún conservaban buena parte del igualitarismo social) y la posterior Revolución urbana (cuando ya aparecen claramente las clases sociales y el poder político y religioso).
En el comunismo primitivo no había excedentes de producción, por lo que no existía desigualdad de bienes ni la necesidad de un Estado. Al ser una sociedad basada en el autoconsumo, todas sus relaciones sociales eran comunitarias.
Este modo de producción fue sustituido, dependiendo del lugar o la época, bien por el modo de producción esclavista o bien por el modo de producción feudal.
Características
Organización social considerada de muy bajo desarrollo.
No existía propiedad privada, no existían clases sociales y todo era comunitario.
La división del trabajo se hacía de acuerdo a la edad y al sexo, lo cual significa que los niños y las mujeres realizaban trabajos que su estado físico les permitiera.
La teoría del matriarcado (hoy muy puesta en cuestión y matizada por la antropología moderna) consideraba que en este tipo de sociedad la autoridad del grupo la representaban las mujeres. Lo mismo ocurría con la práctica de la poliandria (múltiples compañeros sexuales para cada mujer).
Las herramientas de trabajo eran muy rudimentarias, pues estaban hechas de piedra, madera o hueso.
Los tipos de familia que se identificaron son las siguientes:
Consanguínea: Los grupos conyugales se separan por generaciones. Todos los miembros de una misma generación pueden copular entre sí, estando prohibido hacerlo con un miembro de la generación anterior (padres, tíos) o posterior (hijos, sobrinos).
Punalúa: Aparece la prohibición de encuentros sexuales dentro de la misma generación, primero entre hermanos uterinos y luego se extiende a más grados (primos, primos segundos, etc), formándose grupos de hermanas o primas que copulan con un grupo de hermanos o primos.
Sindiásmica: En el régimen de matrimonio por grupos, o quizás antes, se formaban parejas conyugales por un tiempo más o menos largo, en la que eran mutuamente «cónyuges principales» entre varias otras uniones sexuales.
ESCLAVISMO
Luego de la desintegración de la sociedad de comunidad primitiva, las fuerzas productivas crean las condiciones para que se modifiquen las viejas relaciones sociales de producción. Ello da origen a una nueva organización social con rasgos propios y que se conoce como esclavismo.
Las cultura egipcia, babilónica, fenicia, se desarrollaron bajo el esclavismo, aunque las más importantes fueron la griega y la romana por todos sus aportes culturales a la humanidad.
Aquí solo señalaremos los rasgos económicos fundamentales y más generales del modo de producción esclavista que nos permitan una mayor comprensión de su funcionamiento.
En el esclavismo aparece y se desarrolla la propiedad privada de los medios de producción. La propiedad se da sobre el producto total y sobre el propio productor.
Se definen dos clases sociales antagónicas y fundamentales: los esclavistas que son los dueños de los medios de producción y los esclavos que no son propietarios de los medios de producción.
La aparición de estas dos clases se debe a la producción y desarrollo del excedente económico del cual se apropia una clase social convirtiéndose en poseedora de los medios de producción.
Esta apropiación de los medios de producción permite la explotación del hombre por el hombre y el aumento de la producción y productividad.
La base de la producción es el esclavo que realiza las actividades productivas.
Las fuerzas productivas se desarrollan ampliamente durante el modo de producción esclavista algunas de las pruebas son:
El desarrollo de la agricultura en Egipto alcanzó niveles muy altos, estableciéndose nuevos cultivos como el trigo, la avena y el mijo.
La construcción alcanzó grandes niveles; prueba de ello son las pirámides y las tumbas egipcias.
Se desarrolla la ganadería, cobrando auge la curaduría de pieles usadas para vestir, como ornamento y auxiliar en la construcción.
Es notable la utilización de piedras preciosas como rubíes y diamantes para producir taladros y otros instrumentos para cortar y perforar.
Los sistemas de riego fueron muy importantes en la época, abarcando la captación, conducción y distribución del agua para la agricultura y la ganadería.
El comercio se desarrollo ampliamente en el esclavismo, apareciendo un grupo de gente que se va a dedicar a esta actividad: los mercaderes. Asimismo, apareció y se desarrollo la moneda que facilita el intercambio de productos. Las relaciones sociales de producción esclavas fueron de explotación, basadas en la propiedad privada de los medios de producción, del producto total y del productor.
La sociedad esclavista alcanzó su máximo esplendor en Grecia y posteriormente en el imperio Romano (el esclavismo duró hasta la desintegración del imperio Romano aproximadamente hacia el siglo V de nuestra era.)
El trabajo de los esclavos no era altamente productivo debido a su escaso interés por el trabajo y porque nada les pertenecía. Se requería, una gran cantidad de esclavos, para que fuera rentable su explotación todo esto originó rebeliones de esclavos que no estaban de acuerdo con su posición y querían cambiar para mejorar. En esta etapa se da el periodo de transición del esclavismo al feudalismo.
"Surgió la necesidad histórica de sustituir las relaciones de producción esclavista por otras que modificasen la situación de los esclavos, la principal fuerza productiva de la sociedad".
Muchos esclavos fueron liberados, repartiéndoseles la tierra para que la cultivaran a cambio de un tributo. Estos esclavos liberados son los colonos que son los antecesores de los campesinos siervos medievales.
Así comenzó el modo feudal de producción.
FEUDALISMO
Se denomina feudalismo a la organización social, política y económica basada en el feudo que predominó en la Europa occidental entre los siglos IX y XV. Se trataba de propiedades de terrenos cultivados principalmente por siervos, parte de cuya producción debía ser entregada en concepto de "censo" (arriendo) al amo de las tierras, en la mayoría de los casos un pequeño noble (señor) nominalmente leal a un rey.
Definición de feudalismo
Existen en general dos definiciones de feudalismo:
– Definición institucionalista (por F.L. Ganshof): Designa un conjunto de instituciones que respaldan compromisos generalmente militares, entre un hombre libre, el vasallo (vasallus, vassus) y un hombre libre en situación superior. El primero recibe del segundo un feudo (feodum, feudum) para su mantenimiento.
Puede definirse el feudalismo como un conjunto de instituciones que crean y rigen obligaciones de obediencia y servicio –principalmente militar– por parte de un hombre libre, llamado "vasallo", hacia un hombre libre llamado "señor", y obligaciones de protección y sostenimiento por parte del "señor" respecto del "vasallo", dándose el caso de que la obligación de sostenimiento tuviera la mayoría de las veces como efecto la concesión, por parte del señor al vasallo, de un bien llamado "feudo".
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