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Incidencia del maltrato en el rendimiento escolar (página 2)


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CAPÍTULO I

MALTRATO INFANTIL FÍSICO Y PSICOLÓGICO

1.1 Definición de Maltrato

No existe una definición única de maltrato infantil, ni una delimitación clara y precisa de sus expresiones.

"Sin embargo, lo más aceptado como definición es todas aquellas acciones que van en contra de un adecuado desarrollo físico, cognitivo y emocional del niño, cometidas por personas, instituciones o la propia sociedad. Ello supone la existencia de un maltrato físico, negligencia, maltrato psicológico o un maltrato sexual. Esta definición está en concordancia con la existente en el manual de psiquiatría DSM-IV".

Maltrato infantil es toda conducta que, por acción u omisión, produzca daño físico y/o psíquico en una persona menor de 18 años, afectando el desarrollo de su personalidad. Esta conducta es intencional y reiterada.

El maltrato se produce cuando la salud física, emocional, o la seguridad de un niño, están en peligro por acciones o negligencias de las personas encargadas de su cuidado.

Son diversas las definiciones que se han acunado en torno al maltrato infantil o con relación a los menores maltratados: así, se encuentran las dadas por organizaciones gubernamentales o no gubernamentales, o bien las expresadas por investigadores individuales o grupos de investigación. Dentro de las del primer grupo, el Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia/Federación Iberoamericana contra el Maltrato Infantil, lo consideran como "una enfermedad social, internacional, presente en todos los sectores y clases sociales, producida por factores multicausales interactuantes y de diversas intensidades y tiempos que afectan el desarrollo armónico, integro y adecuado de un menor, comprometiendo su educación y consecuentemente su desenvolvimiento escolar con disturbios que ponen en riesgo su socialización y, por lo tanto, su conformación personal y, posteriormente, la social y profesional".

La dirección de orientación y psicología, de la Secretaria de Estado de Educación, dice que el maltrato físico ocurre cuando una persona adulta le ocasiona internacionalmente lesiones en el cuerpo a un menor.

Maltrato físico: este curre cuando una persona adulta le ocasiona lesiones en el cuerpo a un/ a menor.

Maltrato: Es toda conducta de un adulto/a hacia un menor de (0-18 años) de que lesiones o dañe su desarrollo físico, psicológico o sexual. Para poder definir la violencia física, antes tenemos que definir o explicar lo que es la agresividad.

La agresividad es un componente biológico de muchos animales, incluso el hombre, lo que le diferencia de los animales es que a esta agresividad él puede añadir otros componentes y transformar esta agresividad en violencia física, estos son: consciencia y voluntad de hacer daño, ha llegado a definirse como una agresividad patológica. También se entiende como la fuerza que se ejerce sobre alguien o sobre la colectividad con intención de obtener algo que con la palabra o el derecho no se ha conseguido.

Se define en general como maltrato físico a cualquier lesión física producida en el menor (hematomas, quemaduras, fracturas u otras lesiones) mediante piquetes, mordeduras, golpes, tirones de pelo, torceduras, quemaduras, puntapiés u otros medios. En la definición del maltrato infantil es necesario resaltar el carácter intencional, nunca accidental, del desafió o de los actos de omisión llevadas a cabo por los responsables del cuidado del niño con el propósito de lastimarlo o injuriarlo.

"Un niño es considerado como maltratado cuando se trata de un menor de menos de 18 anos cuya salud física o mental, o su seguridad se encuentran en peligro debido a acciones, omisiones o negligencia de la madre, el padre u otras personas responsables de su cuidado".

El maltrato infantil ocurre cuando un adulto causa o amenaza con producir daño en el plano físico, emocional, sexual, así como abandono o negligencia en los cuidados del niño o niña.

Niño maltratado es toda persona que se encuentran en el periodo de la vida comprendido en el nacimiento y el principio de la pubertad, que es objeto de acciones u omisiones intencionales que producen lesiones físicas o mentales, muerte o cualquier otro daño personal, provenientes de sujetos que, por cualquier motivo, tengan relación con el niño.

1.2 Antecedentes del Maltrato

El maltrato a los niños/as es un problema universal que ha existido desde tiempos remotos, sin embargo es en el siglo XX con la declaración de los derechos del niño, cuando se le considera como un delito y un problema de profundas repercusiones psicológicas, sociales, éticas, legales y médicas. La investigación norteamericana sitúa el comienzo de la sensibilización mundial cuando investigadores como Kempe, Silverman, Steele, y otros, en 1962 etiquetaron el llamado Síndrome del niño maltratado.

Un factor que ha contribuido al maltrato de los infantes es considerar que son adultos en miniatura para insertarlo al trabajo laboral a temprana edad, esto ocurre en nuestro país como en otros países pobres.

La violencia ejercida sobre los menores existe desde los albores de la historia humana, y la ideología tradicional los ha considerado como una propiedad mas de los adultos (Wolfe, 1987) o como un adulto en miniatura sometido a las exigencias de producción económica, como ocurre en nuestro país y, en general, en los países de bajo recursos. "Lo que ha contribuido a ocultar tal maltrato. Por lo común, cuando el tema es abordado, se despiertan respuestas emocionales, lo que impide un análisis científico comprometido de sus componentes psicosociales para contribuir a su prevención y erradicación".

El abordaje científico del maltrato físico y de la negligencia se inicia en el mundo anglosajón con la descripción del llamado "síndrome del niño/a maltratado", descrito ampliamente por Kempe, Silverman, Steele, Droegemueller y Silver (1962). A partir de entonces, se ha delineado progresivamente la dinámica de la violencia familiar ejercida sobre el niño/a, originándose una gran cantidad de trabajos sobre este tema en diversos países del mundo.

El maltrato a los niños es un mal tan antiguo como la humanidad misma. Un ejemplo bíblico, esta vez extraído del nuevo testamento, es la matanza ordenada por herodes a todo niño menor de dos años que había en Belén y todos sus alrededores.

Otras civilizaciones cometían atrocidades contra los niños como medida de control de la población tal es el caso de los chinos que tenían como límite tres hijos y arrojaban el cuarto a los animales salvajes.

"Con el advenimiento de la industrialización y ya en los albores de la sociedad moderna, los maltratos a los niños lejos de desaparecer, tomaron una nueva forma: la explotación. Tal es el caso de los serios maltratos que se cometieron contra los niños durante La Revolución Industrial, haciendo trabajar 12 horas diarias en condiciones ínfimas y recibiendo letales azotes por parte de sus supervisores".

En la actualidad, siguen sucediendo numerosos casos en los niños que son sometidos a todo tipo de vejaciones, ejemplo de esto, es lo que acontece hoy día en ETIOPIA, donde los pies y piernas de algunos niños son deformados con el fin de que puedan mendigar con mayor éxito.

Durante la época del dictador RAFAEL LEONIDAS TRUJILLO, se cometieron brutales sucesos como la Matanza de los Haitianos de 1937, según refiere LUIS F. MEJIA, citado por JUAN ML. GARCIA (1983), 15,000 personas entre hombres, mujeres y niños fueron asesinados clavándoles la bayoneta en el corazón. Los niños, por su parte, eran lanzados contra los árboles, siendo en general perseguidos las niñas con la misma crueldad que las mujeres y los hombres.

Uno de los sucesos ocurridos en Maimón y narrado por Rutina Martínez se refiere a una madre con dos niñas pequeñas, que siendo apresadas pidió que se les perdonaran las vidas de sus hijas y la respuesta fue matar primero a las niñas, con lo que la madre no pudo resistir y cayó muerta (OarcLa, 1983).

La primera acción legal en defensa del niño abusado se llevó a cabo en 1874 en la ciudad de Nueva York, invocando la ley que ya existía sobre la protección de los animales. La niña Mary Ellen, de solo cuatro años pudo recibir ayuda para librarse de sus padres adoptivos que la golpeaban constantemente porque el tribunal determinó que formaba parte del reino animal (Marcovich, 1978).

Luego en el 1971, surgió El Síndrome del Niño Golpeado, que se refiere al maltrato físico, que fue estudiado en la reunión anual de la Academia Americana de Pediatría, por el Dr. D. Kempe, pero ya el Dr. Tardieu, catedrático de la Universidad de París lo había mencionado por primera vez en 1968, basado en sus estudios de autopsias de 32 niños que fueron golpeados hasta la muerte (Kempe H., 1979).

Entre los años 1968 y 1970, se comienza un extenso movimiento de concientización y el estudio de los maltratos contra los niños de Estados Unidos que culmina con leyes que sancionan este delito en muchos estados de esa nación y la creación de programas comunitarios preventivos con amplio financiamiento estatal. Se desarrollan estos programas en los Estados Unidos, Europa pero su difusión en otros países de América, África y Asia se debe en gran parte, a la efectiva labor de la "Sociedad Internacional

1.2.1. El Contexto Socio-Cultural.

El desarrollo se produce en un contexto sociocultural que se puede considerar como campos o territorios en los que se superponen en interactúan las influencias sociales. Aunque existe más de un modo de describir esta idea, la figura No. 1. Proporciona un esquema general. En esta se muestra el desarrollo de un niño inmerso en su familia, colegio y vecindario con quienes la interacción es continua, directa y reciproca. Obsérvese igualmente que estos reinos se superponen, es decir, que interactúan y ejercen su influencia entre si. Todos estos contextos diferentes están dentro de un campo cultural mayor con el que también interactúan. "Las flechas que aparecen en el esquema indican movimiento a través del tiempo, pudiendo preverse el cambio a lo largo del tiempo, tanto del individuo como de los distintos contextos. Más aun, la importancia de cualquiera de los cambios variará dependiendo del nivel de desarrollo del individuo".

Teniendo en la mente esta explicación general, se procede a examinar de modo selectivo la familia, los iguales (que actúan tanto en el vecindario como en el colegio), el colegio, la clase social y la cultural. Y es dentro de estos contextos donde los atributos sociales, intelectuales y físicos del individuo se desarrollan.

Figura: Contexto sociocultural y desarrollado a lo largo del tiempo. Adaptado por Jessor, 1993.

De ahí que debido a las investigaciones realizadas de cómo influye el contexto sociocultural en el que se desenvuelve el niño surgen las pruebas para obtener la problemática.

Surgimiento de las pruebas

Debido al interés de tratar la problemática que generan los maltratos en el niño surgen diversas pruebas y así poder conocer las variables de estos maltratos.

En una visión histórica de las pruebas Psicometrícas inicia que estas nacieron a mediado del siglo XX por el interés en el tratamiento humanitario de personas retrazadas y trastornadas mentalmente que estaban interesadas en instituciones de los Estados Unidos y Europa, también se usaban para la selección de los reclutas que irían a la guerra. Luego surgieron otros intereses como la medición de la inteligencia y desde hay se ramifico para medio infinidades de variables.

Entre los primeros creadores se encuentran Francis Galtón, Alfred Bidet, Stanfor y Weshler, entre otros.

Test A.B.C. fueron creados por Lorenzo Filho para conocer los componentes de la aptitud para el aprendizaje de la lecto-escritura.

Mide la intensidad de cada componente con el objetivo de alcanzar el diagnostico de la deficiencia de cada sujeto y en base a los puntajes obtenidos determinar la capacidad general que el autor denomina madurez.

Test F.H: fue creado por Louis Corman. Se utiliza para evaluar aspectos emocionales en el niño, es una de las técnicas de exploración de la afectividad infantil que goza de mayor popularidad. En esta prueba por lo tanto, se enfatiza el aspecto proyectivo.

Test DFH: fue creado por Elisabeth Koppitz, mide aspectos de la maduración perceptomotora y emosicionales.

1.2.2 Teorías del Desarrollo Humano que Explican la Naturaleza del Maltrato Infantil

Como Maslow, estaba preocupado sobre todo en ayudar a la gente a realizar su potencial inferior. Crecimiento personal de sus pacientes (a los que llamaba clientes).

La teoría de Maslow de la autorrealización subraya la importancia de alcanzar el desarrollo completo de todo el potencial personal.

También ha contribuido a la promoción de estilos de crianza que respeten la individualidad del niño y de enfoques pedagógicos que humanicen las relaciones interpersonales en las escuelas.

"Los humanistas pueden definir los cambios en el transcurso de la psicoterapia, pero no en la vida entera. Queda, sin embargo, el hecho de su influencia continua en la conserjería y la psicoterapia, y la alterativa de su punto de vista holistico, que es fundamental para superar las explicaciones simplistas del pensamiento y la conducta del hombre".

Kegan cree que en el ser humano evolucionan sistemas de significado hasta bien entrada la madurez. Elaborándolo sobre la tradición de Piaget y de las teorías del desarrollo cognoscitivo, define diversos niveles de "significación" semejantes a las etapas de desarrollo. Estos sistemas de significados conforman nuestra experiencia, organizan nuestros pensamientos y sentimientos que dan lugar a nuestra conducta.

1.3 Clasificación del Maltrato Infantil

1. El maltrato físico. Este tipo de maltrato abarca una serie de actos perpetrados utilizando la fuerza física de modo inapropiado y excesivo. Es decir, es aquel conjunto de acciones no accidentales ocasionados por adultos (padres, tutores, maestros, entre otros; que originan en el niño un daño físico o enfermedad manifiesta. Aquí se incluyen golpes, arañazos, fracturas, pinchazos, quemaduras, mordeduras, sacudidas violentas, entre otros.

2. La negligencia o abandono. La negligencia es una falta de responsabilidad parental que ocasiona una omisión ante aquellas necesidades para su supervivencia y que no son satisfechas temporal o permanentemente por los padres, cuidadores o tutores. Comprende una vigilancia deficiente, descuido, privación de alimentos, incumplimiento de tratamiento médico, impedimento a la educación, etc.

3. El maltrato emocional. Es aquel conjunto de manifestaciones crónicas, persistentes y muy destructivas que amenazan el normal desarrollo psicológico del niño. Estas conductas comprenden insultos, desprecios, rechazos, indiferencia, confinamientos, amenazas, en fin, toda clase de hostilidad verbal hacia el niño. Este tipo de maltrato, ocasiona que en los primeros años del niño, éste no pueda desarrollar adecuadamente el apego, y en los años posteriores se sienta excluido del ambiente familiar y social, afectando su autoestima y sus habilidades sociales.

4. El maltrato sexual. Es uno de los tipos de maltrato que implica mayores dificultades a la hora de estudiar. Consiste en aquellas relaciones sexuales, que mantiene un niño o una niña (menor de 18 años) con un adulto o con un niño de más edad, para las que no está preparado evolutivamente y en las cuales se establece una relación de sometimiento, poder y autoridad sobre la víctima.

Las formas más comunes de maltrato sexual son: el incesto, la violación, la vejación y la explotación sexual. También incluye la solicitud indecente sin contacto físico o seducción verbal explícita, la realización de acto sexual o masturbación en presencia de un niño y la exposición de órganos sexuales a un niño.

El maltratador habitualmente es un hombre (padre, padrastro, otro familiar, compañero sentimental de la madre u otro varón conocido de la familia). Raramente es la madre, cuidadora u otra mujer conocida por el niño.

Otro tipo de maltrato infantil es el llamado Síndrome de Münchausen por poderes, consiste en inventar una enfermedad en el niño o producirla por la administración de sustancias y medicamentos no prescritos.

Generalmente se trata de un niño en la edad de lactante-preescolar (edad media de 3 años). Los signos y síntomas aparecen solamente en presencia de la madre (habitualmente el perpetrador del maltrato), son de causa inexplicable y los exámenes complementarios no aclaran el diagnóstico. Este síndrome presenta una mortalidad entre 10-20%, y su impacto a largo plazo puede dar lugar a desórdenes psicológicos, emocionales y conductuales.

Además se debe incluir el maltrato prenatal, definido como aquellas circunstancias de vida de la madre, siempre que exista voluntariedad o negligencia, que influyen negativa y patológicamente en el embarazo, parto y repercuten en el feto. Tales como: rechazo del embarazo, falta de control y seguimiento médico del embarazo, negligencia personal en la alimentación e higiene, medicaciones excesivas o no prescritas, consumo de alcohol, drogas y tabaco, exposición a radiaciones, y otras.

En los últimos tiempos se habla de maltrato institucional, que consiste en cualquier legislación, programa o procedimiento, ya sea por acción o por omisión, procedente de poderes públicos o privados, por profesionales al amparo de la institución, que vulnere los derechos básicos del menor, con o sin contacto directo con el niño.

Cada uno de estos tipos de maltrato infantil presentan indicadores físicos y conductuales en el menor maltratado, así como indicadores conductuales y actitudes del maltratador, lo cual ayuda en su diagnóstico.

1.3.1 Indicadores de Maltrato Infantil

Los problemas que tienen los niños maltratados se traducen en unas manifestaciones que pueden ser conductuales, físicas y/o emocionales. A estas señales de alarma o pilotos de atención es a lo que llamamos indicadores, ya que nos pueden indicar una situación de riesgo o de maltrato. Sin embargo, hay que tener en cuenta que estos por si solos no son suficientes para demostrar la existencia del maltrato sino que además debemos considerar la frecuencia de las manifestaciones, como, donde y con quien se produce. Esos indicadores no siempre presentan evidencias físicas sino que pueden ser también conductas difíciles de interpretar.

Algunos de los indicadores, entre otros que se pueden dar son:

En el niño:

  • Señales físicas repetidas (moratones, quemaduras, mordeduras).
  • Niños que están sucios, malolientes, con ropas inadecuadas, etc.
  • Cansancio o apatía permanente (se suelen dormir en las aulas). Conductas agresivas y/o rabietas severas y persistentes.
  • Relaciones hostiles y distantes.
  • Actitud hipervigilante (en estado de alerta, receloso).
  • Conducta sexual explicita, juegos y conocimientos inapropiados para su edad.
  • Conducta de masturbación en público.
  • Niño que evita ir a la casa (permanece más tiempo de lo habitual en el colegio, patios o alrededores).
  • Tiene pocos amigos en la escuela.
  • Muestra poco interés y motivación por las tareas escolares.
  • Después del fin de semana vuelve peor al colegio (triste, sucio).
  • Presenta dolores frecuentes sin causa aparente.
  • Problemas alimenticios (niño muy glotón o con pedida del apetito).
  • Falta a la clase de forma reiterada sin justificación.
  • Retraso en el desarrollo físico, emocional e intelectual.
  • Presenta conductas antisociales: fugas, vandalismo, pequeños hurtos entre otras.
  • Intento de suicidio y sintomatología depresiva.
  • Regresiones conductuales (conductas muy infantiles para su edad).
  • Relaciones entre niños y adultos secretos, reservados y excluyentes.
  • Falta de cuidados médicos básicos.

Entre Los Padres:

  • No parecen preocuparse por el niño.
  • No acuden nunca a las citas y reuniones del colegio.
  • Desprecian y desvalorizan al niño en público.
  • Sienten a sus hijos una propiedad (puedo hacer con mi hijo lo que quiera porque es mío).
  • Expresan dificultades en su matrimonio.
  • Recogen y llevan al niño al colegio sin permitir contactos sociales.
  • La escasa relación personal
  • Los padres siempre están fuera de la casa (nunca tienen tiempo para…).
  • Compensan con vienes materiales afectiva que mantienen con sus hijos.
  • Abusan de sustancias toxicas (alcohol y/o drogas).
  • Trato desigual entre los hermanos.
  • No justifican las ausencias en clases de sus hijos.
  • Justifican la disciplina regida y autoritaria.
  • Ven al niño como malvado.
  • Ofrecen explicaciones ilógicas, contradictorias no convincentes o bien no tienen explicación.
  • Habitualmente utilizan una disciplina inapropiada para la edad del niño.
  • Son celosos y protegen desmesuradamente al niño.

El comportamiento de los niños maltratados ofrece muchos indicios que delatan su situación. La mayoría de esos indicios son no específicos, porque la conducta puede atribuirse a diversos factores.

Sin embargo, siempre que aparezcan los comportamientos que señalamos a continuación, es conveniente agudizar la observación y considerar el maltrato y maltrato entre sus posibles causas:

  • Las ausencias reiteradas a clase.
  • El bajo rendimiento escalar y las dificultades de concentración.
  • La depresión constante y/o la presencia de conductas autoagresivas o ideas suicidas.
  • La docilidad excesiva y la actitud evasiva y/o defensiva frente a los adultos.
  • La búsqueda intensa de expresiones afectuosas por parte de los adultos, especialmente cuando se trata de niños pequeños.
  • Las actitudes o juegos sexualizados persistentes e inadecuadas para la edad.

1.4 Causas del Maltrato Infantil

"Los estudiosos del tema del maltrato infantil han tratado de explicar su aparición y mantenimiento utilizando diversos modelos, así tenemos: el modelo sociológico, que considera que el abandono físico es consecuencia de situaciones de carencia económica o de situaciones de aislamiento social (Wolock y Horowitz, 1984); el modelo cognitivo, que lo entiende como una situación de desprotección que se produce como consecuencia de distorsiones cognitivas, expectativas y percepciones inadecuadas de los progenitores/cuidadores en relación a los menores a su cargo (Larrance, 1983); el modelo psiquiátrico, que considera que el maltrato infantil es consecuencia de la existencia de psicopatología en los padres (Polansky, 1985); el modelo del procesamiento de la información, que plantea la existencia de un estilo peculiar de procesamiento en las familias con menores en situación de abandono físico o negligencia infantil (Crittender, 1993); y por último el modelo de afrontamiento del estrés, que hace referencia a la forma de evaluar y percibir las situaciones y/o sucesos estresantes por parte de estas familias (Hilson y Kuiper, 1994)".

En la actualidad el modelo etiopatogénico que mejor explica el maltrato infantil, es el modelo integral del maltrato infantil. Este modelo considera la existencia de diferentes niveles ecológicos que están encajados unos dentro de otros interactuando en una dimensión temporal. Existen en este modelo factores compensatorios que actuarían según un modelo de afrontamiento, impidiendo que los factores estresores que se producen en las familias desencadenen una respuesta agresiva hacia sus miembros.

La progresiva disminución de los factores compensatorios podría explicar la espiral de violencia intrafamiliar que se produce en el fenómeno del maltrato infantil. Entre los factores compensatorios se señalan: armonía marital, planificación familiar, satisfacción personal, escasos sucesos vitales estresantes, intervenciones terapéuticas familiares, apego materno/paterno al hijo, apoyo social, buena condición financiera, acceso a programas sanitarios adecuados, etc. Entre los factores estresores se cuentan: historia familiar de maltrato, disarmonía familiar, baja autoestima, trastornos físicos y psíquicos en los padres, farmacodependencia, hijos no deseados, padre no biológico, madre no protectora, ausencia de control prenatal, desempleo, bajo nivel social y económico, promiscuidad, etc.

Un niño puede estar sufriendo malos tratos cuando se dan estas circunstancias:

  • Cambios repentinos en su conducta habitual.
  • Problemas físicos que no reciben atención de sus padres.
  • Se muestra ansioso y expectante como si algo malo fuera a pasar.
  • Absentismo escolar injustificado.
  • La familia se interesa poco por el proceso escolar del hijo y no acude al colegio cuando se le llama.
  • Los padres niegan que el niño tenga problemas y a la vez lo desprecian por su conducta.
  • La familia exige al niño metas inalcanzables para su capacidad. – Los padres o adultos a su cargo le -ridiculizan frecuentemente Los niños no miran a la cara a la gente o hablan mal de casi todo el mundo.

El maltrato al niño es más común en las familias que sufren estrés. La pobreza aumenta la probabilidad del maltrato, sobre todo si la familia no centra con otra fuente de apoyo social (amigos, parientes, servicios comunitarios). He aquí otros factores capaces de aumentar la probabilidad el maltrato y del abandono: baja escolaridad de los padres, desempleo, maltrato de sustancias, condiciones de apiñamiento y de vivienda pobre, problemas conyugales y otros factores que pueden ocasionarle gran estrés a la familia.

1.5 Consecuencias

Independientemente de las secuelas físicas que desencadena directamente la agresión producida por el maltrato físico o sexual, todos los tipos de maltrato infantil dan lugar a trastornos conductuales, emocionales y sociales. La importancia, severidad y cronicidad de estas secuelas depende de:

  • Intensidad y frecuencia del maltrato.
  • Características del niño (edad, sexo, susceptibilidad, temperamento, habilidades sociales, etc).
  • El uso o no de la violencia física.
  • Relación del niño con el agresor.
  • Apoyo intrafamiliar a la víctima infantil.
  • Acceso y competencia de los servicios de ayuda médica, psicológica y social.

En los primeros momentos del desarrollo evolutivo se observan repercusiones negativas en las capacidades relacionales de apego y en la autoestima del niño. Así como pesadillas y problemas del sueño, cambios de hábitos de comida, pérdidas del control de esfínteres, deficiencias psicomotoras, trastornos psicosomáticos.

En escolares y adolescentes encontramos: fugas del hogar, conductas autolesivas, hiperactividad o aislamiento, bajo rendimiento académico, deficiencias intelectuales, fracaso escolar, trastorno disociativo de identidad, delincuencia juvenil, consumo de drogas y alcohol, miedo generalizado, depresión, rechazo al propio cuerpo, culpa y vergüenza, agresividad, problemas de relación interpersonal.

"Diversos estudios señalan que el maltrato continúa de una generación a la siguiente. De forma que un niño maltratado tiene alto riesgo de ser perpetuador de maltrato en la etapa adulta".

Desarrollo de la conducta agresiva. La agresión se define como el comportamiento tendiente a perjudicar o lastimar a otra persona.

La violencia es hoy la segunda causa principal de muerte entre los adolescentes norteamericanos; el homicidio es la causa principal en los adolescentes de los grupos étnicos minoritarios (Carns y Cairos, 1994). A medida que la vida de un número creciente de familias se ve afectada por la violencia, los políticos y los ciudadanos interesados buscan formas de detenerla. Aunque la agresión suele comenzar en el hogar, muchas escuelas participan ahora en programas preventivos.

Desafortunadamente, este problema no tiene una solución simple. Las teorías actuales de la agresión en la niñez recalcan la importancia de los factores biológicos y ambientales.

Cambio de la agresión relacionado con la edad. Se observan diferencias caras en la forma y en la frecuencia de la agresión del niño.

Este tipo de agresión física es más común en los niños más pequeños, por ser limitadas sus habilidades verbales y sociales. En general, intenta obtener un objeto que sea, lo lastimar ni dañar a otra persona. Se da el nombre e agresión instrumental a esa conducta o a la protección del espacio de juego. Se le llama agresión hostil ni quiere lastimar o dañar a alguien.

Con la edad, la agresión instrumental disminuye y aumenta la agresión hostil. Los teóricos explican la transición de un tipo de agresión a otro atribuyéndola, en parte, a la capacidad de los niños mayores para deducir las intenciones o motivos de la gente.

Junto con la transición evolutiva de la agresión instrumentos de la hostil, se dan cambios importantes en la manera de expresar la agresión en diferentes edades. Los niños de corta edad con limitadas habilidades verbales acostumbran resolver sus disputas mediante la agresión física: en cambio, los de mayor edad prefieren utilizar formas verbales de agresión.

La causa primordial de la conducta agresiva son las primeras interacciones con ellos padres. El niño agresivo proviene de familias que se caracterizan o condiciones estresantes (por ejemplo, problemas económicos, maltrato e sustancias, disputas conyugales o trastornos mentales), las cuales hacen difícil que los padres les fluyen límites verbales a sus hijos, sobre todo si también estos son difíciles. Los castigos incongruentes o ineficaces de los padres a veces desencadenan un proceso coercitivo familiar y es no de los principales motivos de la conducta agresiva en el desarrollo temprano.

1.6 El Maltrato Infantil y el Rendimiento Escolar

El rendimiento escolar se define como el nivel de conocimiento de un alumno medido en una prueba de evaluación. En el R.A. intervienen además del nivel intelectual, variables de personalidad (extroversión, introversión, ansiedad) y motivacionales, cuya relación con el R.A. no siempre es lineal, sino que esta modulada por factores como nivel de escolaridad, sexo, aptitud. (Cortez Bohigas, Ma del Mar. Diccionario de las Ciencias de La Educación.)

Este nivel de comprensión se mide expresado en una nota numérica que obtiene un alumno como resultado de una evaluación que mide el producto del proceso enseñanza aprendizaje en el que participa (Oscar Retana Bonilla)

El rendimiento escolar es alcanzar la máxima eficiencia en el nivel educativo donde el alumno puede demostrar sus capacidades cognitivas, conceptuales, aptitudinales, procedimentales.

Se diagnostica trastorno del aprendizaje cuando el rendimiento académico del individuo ya sea en lectura, calculo o expresión escrita es sustancialmente inferior al esperado por edad, escolarización y nivel de inteligencia, los problemas de aprendizaje interfieren significativamente en el rendimiento o las actividades de la vida cotidiana que requieren lectura, calculo o escritura; de aquí que relacionamos como afectan el maltrato ya sea físico o psicológico en la vida escolar del niño o niña en su proceso de adquisición de conocimientos.

En el apartado del trastorno del aprendizaje incluye trastornos de la lectura, del cálculo, de la expresión escrita y del aprendizaje no especificado. En el ámbito de la psicopatología infantil existen bases empíricas para establecer dos amplias categorías o características en los niños y adolescentes (Jenkinns y Oatley 1998: Mahoney 1997)

Trastornos o desórdenes de interiorización, sobrecontrol o ansiedad/retraimiento, cuyas características se describen como ansiedad, timidez, retraimiento y depresión: Los niños con trastornos de interiorización y/o de exteriorización manifiestan patrones de características en muchos aspectos de su funcionamiento emocional que los diferencian de los niños normales. Estas diferencias son comúnmente notorias en varias habilidades incluyendo el rendimiento escolar y las relaciones interpersonales y sociales (Casey 1996).

Los trastornos de interiorización, particularmente la depresión y la ansiedad, involucran déficit en la inhibición de la agresión y un exceso de focalización interna de la tristeza y/o de la culpa, como muestra de sus dificultades para regular sus emociones. Los niños con estos problemas pueden mostrar un uso inadecuado o disfuncional de sus habilidades emocionales.

Una de las características más notables de los desórdenes emocionales en los niños es su variabilidad, la cual se refleja en el amplio rango de problemas de conducta, emocionales y de relaciones sociales que pueden distinguirse en las numerosas y contrastantes teorías desarrolladas para ayudarnos a entender mejor estas deficiencias y en la plétora de estrategias de diagnóstico y de tratamiento disponibles para estos niños.

Trastornos o desórdenes de exteriorización, de infracontrol o disocial, cuyas características se describen como pataletas, desobediencia y destructividad: "Los trastornos de exteriorización incluyen desórdenes de la conducta, con dificultades para manejar la rabia, la irritabilidad y la impulsividad".

Los problemas emocionales se exterioricen o no a través de problemas conductuales, desempeñan una función esencial en el proceso perceptivo, fundamental para el aprendizaje. "Ya en 1963, Frostig, Leferver y Wittlesey, en un estudio con preescolares y alumnos de primero básico, relacionaron los déficit perceptivo-visuales con problemas del aprendizaje y de la conducta. Estudiantes con leves trastornos del aprendizaje y de la conducta escolar muestran deficiencias en cogniciones, memoria, lenguaje, atención, relaciones sociales y desarrollo emocional (Bogels y Zigterman 2000)". En niños atendidos en grupos diferenciales diagnosticados dentro de la categoría "problemas de aprendizaje" entendida como retraso en el rendimiento escolar que no reúne requisitos para constituir un "trastorno", pero que puede darse coherentemente con este, un 40,1% de los niños se asignó al subgrupo "perturbaciones emocionales" (Bermeosolo y Pinto 1996). No es raro que un niño o un adolescente respondan con frecuencia a los criterios de más de un trastorno y que en él se sumen una serie de factores de riesgo.

Asimismo, se pueden distinguir varias subcategorías dentro de cada uno de estos trastornos.

Retraso mental: Este trastorno se caracteriza por una capacidad intelectual significativamente por debajo del promedio (un CI de aproximadamente 70 o inferior, con una edad de inicio anterior a los 18 años y déficit o insuficiencias concurrentes en la actividad adaptativa).

Trastornos del aprendizaje: estos trastornos se caracterizan por un rendimiento académico sustancialmente por debajo de lo esperado dadas la edad cronológica del sujeto, la medición de su inteligencia y una enseñanza apropiada a su edad.

Trastorno de las habilidades motoras: incluye el trastorno del desarrollo de la coordinación, caracterizada por una coordinación motora que se sitúa circunstancialmente por debajo de lo esperado dadas las edades cronológicas del sujeto y la medición de la inteligencia.

Trastorno de la comunicación: estos trastornos se caracterizan por deficiencia del habla o el lenguaje.

Trastorno generalizados del desarrollo: estos trastornos se caracterizan por déficit graves y alteraciones generalizadas en múltiples áreas del desarrollo. Se incluyen alteraciones de la interacción social, anomalías de la comunicación y la presencia de comportamientos, intereses y actividades esteriotipadas.

Trastorno por déficit de atención y comportamiento perturbador: este apartado incluye el trastorno por déficit de atención con hiperactividad que se caracteriza por síntomas manifiestos de desatención y/o de impulsividad-hiperactividad. Se presentan subtipos para especificar la presentación del síntoma predominante: tipo con predominio del déficit de atención, con predominio hiperactivo-impulsivo y tipo combinado. También se incluyen en este apartado: el trastorno disocial se caracterizan por un patrón de comportamiento que violan los derechos básicos de los demás o las principales normas o reglas sociales propias de la edad del sujeto; el trastorno negativista desafiante se caracteriza por un patrón de comportamiento negativista, hostil y desafiante. Este aparto incluye dos categorías no especificas; trastornos con déficit de atención con hiperactividad no especificada y trastorno del comportamiento perturbador no especificado.

Trastornos de la ingestión y de la conducta alimentaría de la infancia y la niñez: estos se caracterizan por alteraciones persistentes de la conducta alimentaría y de la ingestión de alimentos.

Trastornos de Tics: estos se caracterizan por tics vocales y/o motores.

El trastorno de ansiedad: es uno de los síntomas más comunes de la tensión emocional. Cuando se habla de trastornos de ansiedad, es para referirse a trastornos psíquicos que implican niveles excesivos de emociones negativas tales como nerviosismo, tensión, preocupación, temor y ansiedad.

"Numerosos factores impiden el desarrollo de adecuadas relaciones sociales en los estudiantes con problemas de aprendizaje: déficit en el procesamiento de la información, inmadurez, distracción, hiperactividad, baja autoestima, dificultad para expresar los sentimientos, sumados al aislamiento y al rechazo que sufren tanto de sus compañeros de curso como de sus profesores por su bajo rendimiento. Generalmente este rechazo social ocurre en todos los años de enseñanza, lo que afecta sus relaciones interpersonales a lo largo de su vida".

"Generalmente de preescolar síntomas de maltrato muestran conductas agresivas, desobedientes, destructivas e impulsivas, están proclives a desarrollar estas conductas en la etapa escolar y están en alto riesgo de ser rechazados por sus compañeros, padres y problemas asociados como la deserción de la escuela".

Los factores de riesgo del estudiante incluyen déficit cognitivos, del lenguaje, atención frágil, escasas habilidades sociales, problemas emocionales y conductuales. Los factores de riesgo de la escuela se refieren a aquellas características, circunstancias específicas ligadas a los docentes y administrativos como los prejuicios y las bajas expectativas de rendimiento, la inhabilidad para modificar el currículo, la falta de recursos y la carencia de estrategias de enseñanza adecuadas, la estructura, el clima organizacional y los valores del sistema escolar. La conducta descriptiva que el estudiante presente puede variar considerablemente de acuerdo a la naturaleza del problema que lo afecte, al tamaño del curso, a la materia que se esté enseñando y al tipo de escuela.

1.6.1 Dificultades de Aprendizaje

"El aprendizaje es un cambio relativamente permanente en el comportamiento, que refleja una adquisición de comportamientos o habilidades a trabes de la experiencia y que puede incluir el estudio, el cual se ve afectado por un ambiente desfavorable".

Las dificultades de aprendizaje se clasifican en Problemas Generales de Aprendizaje y Trastornos Específicos de Aprendizaje.

Problemas generales de aprendizaje: Se manifiesta un retardo general de todo el proceso de aprendizaje, observándose lentitud, desinterés, deficiencia en la atención y concentración, afectando el rendimiento global. Estas características se presentan en niños con un desarrollo normal y con inmadurez en el área cognitiva o verbal, lo que provocaría una lentitud para aprender.

También es posible ver estas manifestaciones en niños con retardo mental, dificultades auditivas severas y alteración en la psicomotricidad.

Alumnos de Aprendizaje Lento. Son alumnos que presentan dificultades para seguir un ritmo de aprendizaje normal, por presentar problemas a nivel de memoria, junto con una menor capacidad de atención a estímulos verbales y de expresión, y dificultades para evocar y recuperar la información aprendida.

Estos alumnos no estarían en la categoría de retardo mental, ni tampoco presentarían un TEA, ni alteraciones en su desarrollo sensorial o afectivo. Este grupo está constituido por niños con un desarrollo más lento y con un ritmo crónico de aprendizaje más bajo que el resto de sus compañeros, Bravo 1994.

Caracterización educacional de los niños de Aprendizaje Lento. (Bravo, 1994)

  1. Lentitud para procesar la información escolar y para seguir el ritmo de aprendizaje del resto de sus compañeros.
  2. Inadecuación entre el nivel de desarrollo de sus estructuras cognitivas y el grado de complejidad de los contenidos escolares.
  3. Baja motivación para aprender, acompañada de una baja autoestima.
  4. Inadecuación entre sus habilidades psicolíngüísticas y el lenguaje utilizado por el profesor.

En cada etapa, el sistema viejo se hace parte del nuevo, tal como el entendimiento correcto del mundo de los niños se mueve parte de los datos originales que el pensamiento operacional formal.

Breve resumen de las teorías del desarrollo humano

Teorías

Supuestos acerca de la naturaleza humana

Procesos

Áreas

Teorías del aprendizaje (skiner, Pavlov, Watson, Thorndike)

La naturaleza humana no es buena ni mala; la gente simplemememnte reacciona y responde a su medio.

Condicionamientos respondiente

Condicionamiento operante

Moldeamiento.

Modificación conductual

Reacciones emocionales condicionadas.

Teorías cognoscitivas (Piaget, Bruner)

Los seres humanos son nacionales, alertas, activos y competentes. No solo reciben información, sino que también la procesan.

Asimilación y acomodación equilibrio.

Educación razonamiento moral.

La tradición psicoanalítica (fredu, Ericsson)

Los seres humanos son criaturas impulsivas que tratan constantemente de redirigir o canalizar poderosas fuerzas inferiores.

Desarrollo psicosexual

Identificación

Cumplimientos de taras del desarrollo.

Estudio de la conducta humana, la personalidad y las relaciones interpersonales.

La psicología humanista y e las teorías del yo (Maslow, Rogers)

Los seres humanos son mas que un atado de patrones de estimulo y respuesta a de impulsos animales.

Autorrealización

Consideración positiva

Conserjería de adultos

1.6.2 Desarrollo de las Competencias Emocionales en la Escuela

Los alumnos que poseen trastornos de exteriorización, como desórdenes de la conducta, los cuales incluyen a menudo dificultades para manejar la rabia, la irritabilidad y una falta de afiliación con otras personas, y aquellos con trastornos de interiorización, particularmente depresión y ansiedad, presentan déficit en la inhibición de la agresión y un exceso de focalización interna de la tristeza y/o de la culpa, como muestra de sus dificultades para regular sus emociones. Estos alumnos generalmente muestran un uso inadecuado o disfuncional de sus habilidades emocionales.

La competencia emocional y social es la habilidad para comprender, manejar y expresar los aspectos emocionales de nuestra propia vida de tal manera que seamos capaces de manejar las tareas cotidianas como el aprender, el establecer relaciones interpersonales y sociales, resolver los problemas de cada día y adaptarnos a las complejas demandas del crecimiento y del desarrollo. Incluye varios aspectos tanto de la comprensión y de la expresión emocional como del manejo de la experiencia emocional interna y de la conducta expresiva.

La competencia en la expresión emocional incluye el uso apropiado y correcto de la expresión facial. La competencia en el aprecio emocional incluye el reconocimiento y la comprensión tanto de la expresión corporal como de la experiencia emocional interna y la de los demás y una correcta apreciación de aspectos emocionales relevantes en el contexto social.

Los alumnos que poseen una alta competencia emocional conocen tanto sus emociones como las de los demás; las expresan en forma adecuada y pueden controlarlas durante sus actividades cognitivas y sociales de manera tal que les facilitan la ejecución de dichas actividades. Por lo tanto, la fortaleza y la debilidad en competencia emocional en los estudiantes puede predecir su éxito en las interacciones sociales y en otros ámbitos tales como el rendimiento escolar, particularmente cuando las circunstancias requieren el manejo de las emociones y/o adecuadas relaciones sociales.

Muchos investigadores actualmente creen que para contar con el rendimiento cognitivo en su total potencial es necesario considerar conjuntamente los aspectos emocionales, motivacionales y volutivas del pensamiento.

Las alteraciones en las habilidades sociales, inseparables del desarrollo emocional, afectan la conducta y el aprendizaje en la escuela, lo que se traduce en bajo rendimiento y riesgo de fracaso y de deserción. Cada vez se otorga mayor importancia a una gestión eficaz a través del sistema educacional para que se produzca el éxito académico y social del estudiante, considerando que el buen rendimiento es un factor fundamental en la permanencia de los alumnos en la escuela.

La naturaleza del trabajo académico es fundamental en el proceso de escolarización e incluye tanto el diseño de la instrucción como el contenido del currículo. Una instrucción pobremente diseñada puede reforzar ciclos de fracaso en alumnos que necesitan especialmente de enseñanzas bien estructuradas, e instrucciones explícitas y certeras para poder tener éxito en el aprendizaje. Dentro de este grupo están incluidos los alumnos con una historia escolar de bajo rendimiento, y aquellos con problemas para aprender por déficit en la memoria inmediata, lenguaje, atención, alteraciones emocionales, conductuales, etc.

Dado que la relaciones interpersonales y sociales positivas son un factor importante para la permanencia de los estudiantes en la escuela, aunque tengan dificultades en sus vidas, hace necesario que tanto docentes como alumnos aprendan a convivir en la comunidad educativa, tanto con aquellos con éxito social y académico como con los que presentan problemas en su rendimiento y en sus relaciones interpersonales y sociales.

La debilidad en la competencia emocional es en parte responsable de la intolerancia, la discriminación y la falta de apoyo que afecta a muchos estudiantes en la escuela. Cada vez con mayor frecuencia se observan en algunos estudiantes signos claros de alteraciones emocionales provocados por las exigencias de la vida cotidiana. En las escuelas, la conducta disruptiva y la agresividad emergen de manera sorprendente, tanto por su complejidad como por su heterogeneidad, ya que aun bajo tratamiento, los niños y adolescentes con alteraciones emocionales no experimentan el mismo patrón o intensidad de la sintomatología; las reacciones pueden variar en cuanto a la duración, persistencia y fluctuación a lo largo del tiempo.

Solo la comprensión de estas alteraciones y el desarrollo de una alta competencia emocional en los integrantes de la comunidad educativa, vale decir, que tanto docentes como alumnos aprendan a conocer tanto sus emociones como la de los demás, expresarlas en forma adecuada y poder controlarlas durante las actividades cognitivas y sociales de modo que las favorezcan, pueden constituir una gran ayuda para la convivencia satisfactoria en la institución escolar. La regulación de las emociones comprende el más complejo grupo de competencias: el manejo de las expresiones emocionales en uno mismo y en otros, el manejo de los estados emocionales internos y el uso de la emoción en la planificación y en la ejecución de planes.

1.6.3. Criterios de Exclusión en los Casos de Trastornos de Aprendizajes

Otra cuestión que suele ser motivo de preocupación con respecto a la definición de los trastornos del aprendizaje está relacionada con la exclusión de aquellos niños cuyos problemas de aprendizaje se deben fundamentalmente a ciertas discapacidades sensoriales y motoras, alteraciones emocionales o una situación de desventaja sociocultural. El grado de discapacidad necesario para dicha exclusión es discutible. Así mismo, no siempre resulta fácil determinar cual es el trastorno primario. Así pues, con relación a los problemas de aprendizaje las alteraciones emocionales pueden ser trastornos primarios o secundarios. Se ha prestado especial intereses a la exclusión de niños que se encuentran en un entorno ambiental desfavorable.

"Lógicamente, puede considerarse que estos niños están discapacitados para al aprendizaje siempre y cuando los déficit en los procesos psicológicos sean el trastorno primario. No obstante, esta distinción es difícil de establecer y, por tanto, es difícil distinguir entre algunos casos de TA y la existencia de un rendimiento insuficiente debido a otro tipo de causas, como por ejemplo la falta de motivación".

1.7 Función de la Escuela frente al Maltrato Infantil

En las escuelas deben contar con conocimientos suficientes mediante observación de profesionales y estar alerta ante los siguientes indicadores, y ofrecer ayudar la escuela y detener esta situación, antes de que ocurra, como mecanismo de prevención primaria

Se entiende por prevención primaria al conjunto de acciones dirigidas a disminuir o eliminar los factores de riesgo que afectan a las familias y predisponen la existencia del maltrato a los niños/as.

Esta tarea no es en modo alguno, propia de la escuela y los docentes. Por el contrario, debe ser emprendida interdisciplinaria e interinstitucionalmente, en el marco de un conjunto de políticas públicas, dirigidas a eliminar o reducir las circunstancias ambientales y sociales que favorecen la existencia del maltrato. Pero dado que los factores culturales son fundamentales en la constitución del problema, la escuela puede cumplir una importante función en la promoción y transmisión de nuevos valores y actitudes, dirigidos a contrarrestarlos.

Líneas de trabajo que la escuela puede desarrollar con los niños y sus familias:

  • Realizar tareas de sensibilización y capacitación sobre las necesidades evolutivas de los niños.
  • Realizar talleres reflexivos con los padres sobre los mecanismos de control y resolución de conflictos en la educación infantil.
  • Desarrollar acciones de difusión y sensibilización entre los niños, las familias y la comunidad acerca de los derechos especiales que asisten a la infancia.
  • Articular con la currícula, actividades dirigidas a revisar críticamente la aceptación de la violencia, la discriminación y los modelos estereotipados sobre la crianza de los hijos.
  • Estimular por todos los medios, la confianza y autoestima de los niños/as.
  • Para desarrollar con éxito la función preventiva, la escuela como institución debe ser capaz de revisar sus propias actitudes hacia el control de las conductas de los niños y adolescentes.
  • Ofrecer a los alumnos el espacio y las oportunidades para experimentar formas no violentas de resolución de los conflictos. Las asambleas, los consejos de aula y todo medio que estimule la participación democrática en la vida escolar, pueden ser un buen recurso.

En caso que haya ocurrido, cuándo interviene la escuela:

Siempre que un docente sospeche que un niño/a está siendo objeto de maltrato por los adultos responsables de su crianza, no debe dudar en intervenir de alguna forma para impedir que la situación continúe. Para ello debe tener presente:

  • Que las únicas normas de cuidado y educación adecuadas para los niños, son aquellas que consideran su bienestar en primer término. Si un niño/a crece y se desarrolla sano y está normalmente contento, aunque las pautas culturales de crianza de su familia difieran de las nuestras, no hay razón para creer que son inaceptables.
  • Que los niños son personas con derechos propios y los padres no pueden hacer lo que quieran con sus hijos/as, porque no son de su propiedad.
  • Que el abandono, el castigo físico y el maltrato sexual a los niños son delitos penados por la ley.
  • Que la escuela como institución tiene la responsabilidad de garantizar el cumplimiento de los derechos infantiles protegiendo -en la medida de sus posibilidades- la vida y la salud de sus alumnos.
  • Que primeramente debe ser tenido en cuenta el interés del niño/a que está siendo objeto de maltrato y sólo en segundo lugar el de su familia. Sin embargo, un buen abordaje del problema puede ayudar a todos los miembros del grupo familiar, incluso a los que maltratan.
  • Que cuanto más tiempo se prolongue una situación de maltrato o maltrato, más graves son sus consecuencias y por ello es imprescindible actuar con seguridad, en cuanto se la identifica.

Frente a una situación de maltrato contra un niño se puede demandar orientación a equipos de profesionales que, luego de realizar el diagnóstico correspondiente, cumplirán con los procedimientos legales. Esta instancia constituye un modelo de intervención judicial que, sin desatender la seguridad del niño en primera instancia, se orienta a la verificación del diagnóstico. Cuando los hechos son indudables puede y debe realizar una denuncia a los órganos del Poder Judicial que asistirán a la familia protegiendo ante todo a la víctima.

 

1.8. Responsabilidad de los Padres, Madres y Tutores Frente al Maltrato Infantil.

Los padres, madres y tutores cumplen un rol importantísimo en el proceso de formación de la personalidad de los niños. Por lo que tienen la responsabilidad de:

  • Que el niño aprende sus primeras normas.
  • Manifestar sentimientos
  • Manifestar emociones.
  • Enseñar al niño a comportarse socialmente.
  • La familia tiene un rol fundamental, como transmisora de dichos valores y moldeadora de la conducta. A partir de ella el niño va adquiriendo cierto conocimiento para que a su debido tiempo pueda insertarse a vivir en sociedad. A medida que crecen, perciben las funciones que cumplen distintos miembros de la familia. Entre otras.

"Estas serán la base para su futuro desarrollo, es por eso sus clasificaciones como esenciales y primordiales".

Debido a la importancia de esta etapa de sociabilización que se llevada a cabo en el núcleo familiar, es que desde la psiquiatría se ha sugerido que la falta de relaciones primarias tempranas es también responsable de muchas personalidades psicópatas.

El niño crece sabiendo que ocupa un lugar significativo e importante para sus padres y esto es lo que luego lo convertirá en una persona psicológicamente fuerte, segura y con una buena imagen de si misma. Además crece en la familia y es con ésta con quien va a desarrollar sus primeras relaciones.

De este modo, conocen las características generales de los roles de padre, madre e hijos. También aprenden las primeras normas: lo prohibido y lo permitido. Durante esta época de aprendizaje los padres refuerzan y premian ciertas conductas, a la vez castigan otras. Explican situaciones que el niño no comprende, le muestran lo que no conoce. Así también, resuelven situaciones conflictivas juntos y premian de alguna manera sus logros. La manera en que los padres realicen estas funciones determinará en gran parte las características psicológicas del niño.

Los familiares son los encargados de conocer y transmitir las pautas que el niño debe vivir en la sociedad. En virtud de la posición que ellos ocupan en la vida del niño son especialmente significativos en su desarrollo. De esta manera, ellos son los que definen el mundo para el niño y sirven de modelos para sus actividades y conductas. Que un niño determinado sea agresivo o tranquilo, flexible o bastante rígido en su pensamiento, amistoso o inamistoso con los extraños, que se plante con seguridad o duda frente a nuevas situaciones, su manera de defenderse, su capacidad de amar y de darse, su manera de abordar ciertas situaciones, todo es en cierto modo, el resultado de la conducta previa de su familia, principalmente de sus padres.

CAPÍTULO II

EL MALTRATO INFANTIL EN LA REPÚBLICA DOMINICANA

2.1 Sobre Protección Contra el Maltrato y la Desatención

La violencia contra los niños, niñas y adolescentes ha sido un tema que siempre ha concitado la atención de la Sociedad dominicana. El maltrato a los niños, niñas y adolescentes constituye una de las peores violaciones a sus derechos fundamentales. La República Dominicana, no cuenta con estadísticas nacionales actualizadas que reflejen la magnitud de la situación a nivel nacional. Sin embargo, los datos parciales que podemos presentar muestran la gravedad del caso y la tendencia ascendente en muchas de las modalidades en la que se manifiesta el maltrato o el maltrato.

El CONANI está trabajando en la dirección estratégica de convertir el mes de abril, "Mes de la Prevención del Maltrato Infantil", en un gran catalizador de acciones contra el maltrato cada año y desde esa celebración propiciar una gran movilización social contra el maltrato.

2.2 Rol y Estadística del CONANI frente al Maltrato y Maltrato Escolar

En la República Dominicana existen varias instituciones que asisten a niños maltratados, los cuales les brindan asistencia psicológica, medica, legal, escolar, alimentación, los recluyen en casas-hogares donde son cuidados por personal calificado, le ofrecen cambio de tutela si es necesario, entre otras.

En este caso se hablará del rol del CONANI frente al maltrato y maltrato infantil, en el país, ya que es una de la institución más destacada a nivel internacional.

Los casos de maltrato en los cuales los niños, niñas o adolescentes hayan roto su vínculo socio- afectivo y se encuentren en una situación de abandono el CONANI, ha organizado una estrategia de intervención denominada "Hogares de Paso" definidos como: centros de acogida provisional para niños, niñas y adolescentes en riesgo personal y social, es decir: los y las que han roto su vínculo socio afectivo con su familia o que aún manteniendo dicha relación la misma representa una amenaza temporal para su desarrollo; niños, niñas y adolescentes que por razones de desamparo, violencia física y maltrato emocional requieren del auxilio del Estado.

En los últimos 5 años, con el apoyo de UNICEF y las principales universidades del país, se han llevado a cabo más de 20 diplomados especializados en el tema de la infancia y la prevención del maltrato, estos cursos han estado dirigido a técnicos, profesionales y funcionarios vinculados a la respuesta ante las denuncias de maltrato. En esa dirección, tomando como marco la nueva "Ley Institucional de la Policía, Ley 96-04", el Código para el Sistema de Protección de los Derechos Fundamentales de los niños, niñas y adolescentes, Ley 136-03 y el Código Procesal Penal, Ley 76-02, ley 24-97, este año, se desarrolla un diplomado para policías dirigido a: Fortalecer la capacidad de los agentes policiales en su rol de preservar el estado de derecho de niños, niñas y adolescentes, a través de un proceso de formación de multiplicadores en conceptos, herramientas, técnicas y metodologías para capacitar sobre derechos de la niñez, maltrato, explotación sexual comercial y adolescentes en conflicto con la ley penal.

Las principales ONGS, en alerta permanente contra el maltrato, junto al CONANI han venido trabajando juntos en varios frentes dirigidos a mejorar la atención y prevenir el maltrato.

En esa dirección, La Secretaría de Relaciones Exteriores (SEREX) ha adoptado importantes medidas para el apoyo de la ejecutoria de los trabajos realizados por el Consejo Nacional para la Niñez y la Adolescencia, institución responsable de trazar las políticas a favor de los derechos del niño, de la niña y los adolescentes:

2.3 Ley 136-03 (Código para el Sistema de Protección y de los Derechos Fundamentales de los Niños, Niñas y Adolescentes

DERECHO A QUE SEA DENUNCIADO EL MALTRATO EN SU CONTRA. Los profesionales y funcionarios de las áreas de la salud, pedagogía, Psicología, trabajo social y agentes del orden público, directores y funcionarios, tanto públicos como privados, y cualquier otra persona que en el desempeño o no de sus funciones tuviere conocimiento o sospecha de una situación de maltrato o de violación de los derechos de los niños, niñas y adolescentes, están obligados a denunciarla ante las autoridades competentes, estando exentos de responsabilidad penal y civil, con respecto a la información que proporcionen.

Prevención

Las instituciones llamadas a prevenir, deben enseñarles a los niños cuando una persona le da una caricia por cariño sano o cuando tiene un interés de abusar.

Cree que deben establecer ese programa el CONANI, Atención a Víctimas; las secretarías de Educación, Salud Pública y de la Mujer. "Antes que la protección debe estar la prevención", expresó la magistrada Tobal.

Hasta la fecha los delitos más denunciados son la agresión física y las violaciones sexuales. También, en coordinación con las secretarías de Salud y Educación, la Procuraduría inició un plan de prevención en las escuelas y en los hospitales para que médicos y educadores denuncien los maltratos infantiles como lo establece la Ley 136.

Trabajo responsable

La  Procuraduría General de la República y otras organizaciones del sistema como el Consejo Presidencial de la Niñez (CONANI) han encarado la protección de los menores con mucha responsabilidad, manifestó Tobal.

Inmediatamente detecta que un padre, madre o tutor está llevando a cabo un tipo de maltrato contra su niño, niña o adolescente proceden a ingresar al menor a un lugar de paso de el CONANI y luego de la investigación hacer los sometimientos judiciales, y determinar qué parte de la familia queda con la custodia del menor.

Existen planes que actualmente desarrolla la Procuraduría para prevenir el maltrato infantil en todas sus manifestaciones, sea físico, sexual y emocional cometido por padres, tutores, particulares o que tengan algún afín con las víctimas.

El jueves 31 de marzo del 2006 la Procuraduría y el CONANI en una jornada de trabajo que arrojó conclusiones para proteger a los niños, niñas y adolescentes en situación de riesgo. Participaron, además, la Policía Judicial Especializada, la Dirección Nacional de Protección a los Niños/as y Adolescentes.

Atención a Víctimas.

Los maltratos existían en contra de los menores de edad, pero que al existir en la actualidad autoridades dispuestas a realizar el trabajo con seriedad y vocación de servicio las personas se han animado a denunciar los casos.

En la actualidad las escuelas, centros médicos y particulares denuncian maltratos con niños, niñas y adolescentes.

Acciones.

En la actualidad existe un Ministerio Público que está bastante capacitado debido a los programas de la Escuela Nacional del Ministerio Público y de Investigación que ha ido desarrollando el Comisionado para Reforma y Modernización de la Justicia.

Se actúa buscando las pruebas necesarias y dándoles protección a las víctimas.

La campaña denominada "Los niños no son juguetes sexuales", puesta en marcha recientemente con el objetivo de proteger a los niños y niñas.

"Informamos a la familia y a los adultos responsables de su protección sobre las medidas a tomar para evitar situaciones de riesgos", precisó. 

 

2.4 Sanción al Maltrato contra Niños, Niñas y Adolescentes.

Art. 396.- SANCIÓN AL MALTRATO CONTRA NIÑOS, NIÑAS Y ADOLESCENTES. Se considera:

  1. Maltrato físico: cualquier daño físico que reciba el niño, niña o adolescente, de forma no accidental y en que la persona que le ocasione esta lesión se encuentre en condiciones de superioridad o poder;
  2. Maltrato psicológico: Cuando un adulto ataca de manera sistemática el desarrollo personal del niño, niña o adolescente y su competencia social;
  3. Maltrato sexual: Es la práctica sexual con un niño, niña o adolescente por un adulto, o persona cinco (5) años mayor, para su propia gratificación sexual, sin consideración del desarrollo psico- sexual del niño, niña o adolescente y que puede ocurrir aún sin contacto físico.

Será castigado con penas de dos (2) a cinco (5) años de prisión y multa de tres (3) a diez (10) salario mínimo establecido oficialmente, vigente al momento de cometer la infracción, si el autor o autora del hecho mantiene una relación de autoridad, guarda o vigilancia (maestro, guardianes, funcionarios, policías etc.) sobre el niño, niña o adolescente y se producen lesiones severas, comprobadas por especialistas en el área, se aplicará el máximo de la pena indicada anteriormente. Cuando los infractores sean extranjeros o nacionales que en la comisión del hecho negocien, trafiquen o se hayan vinculado para la comisión del hecho con traficantes o comerciantes de niños, niñas y adolescentes, serán castigados con el doble del máximo de la pena.

El Art. 397.- Sanción al maltrato por sus responsables. Si el maltrato es cometido por el padre, la madre y otros familiares, tutores o guardianes, responsables del o de niño, niña o adolescente, en contra de sus hijos, hijas o puestos bajo su guarda o autoridad, serán sancionados con privación de libertad de dos (2) a cinco (5) años y multa de uno (1) a cinco (5) salario mínimo establecido oficialmente. En todo caso, la pena debe ir acompañada de tratamiento psicoterapéutico.

2.5 Existen Programas Multidisciplinarios para Enfrentar este Problema

Numerosas instituciones Gubernamentales y no Gubernamentales, desarrollan programas multidisciplinario, uno de los primeros modelos lo constituyó el Consejo Nacional para la Niñez; la Secretaría de Estado de Educación y La Secretaría de Estado de Salud Pública también cuenta con programas de esta naturaleza así como muchas de las organizaciones de la sociedad civil que se ocupa del tema. Estos programas cuentan con psicólogos, psiquiatras y educadoras para la atención a los casos, realizándose las coordinaciones necesarias para la participación de profesionales de otras áreas (médicos, abogados) de acuerdo a la necesidad.

El CONANI cuenta con los Hogares de Paso, los cuales son: 7 centros de acogida con que cuenta el sistema de protección para alojar a los Niños, Niñas y Adolescentes, que requieran ser separados de su medio familiar como medida de protección. Esta separación solo se llevará a cabo cuando no se pueda garantizar la seguridad y/o la satisfacción de sus necesidades propias de su momento evolutivo si permanece con la familia. En cada uno de ellos hay equipos multidisciplinarios.

En el ámbito judicial, los tribunales especializados en niños, niñas y adolescentes cuentan con equipos multidisciplinarios auxiliares de los jueces para la investigación y evaluaciones socio-familiares.

El Plan contempla los siguientes objetivos:

  1. Fortalecimiento de la familia como núcleo fundamental para el desarrollo.
  2. Fortalecimiento de la responsabilidad social y ciudadana, la denuncia y conocimiento general sobre el problema del maltrato y la explotación sexual de NNA.
  3. Revisión y mejoramiento de las leyes, políticas, programas y servicios básicos y de protección.
  4. Fortalecimiento de las leyes y del sistema de administración de justicia para la efectiva persecución y procesamiento judicial de los perpetradores de maltratos y explotación contra niños/as.
Partes: 1, 2, 3
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