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Estrategia de comunicación comunitaria para fortalecer la cultura alimentaria del Adulto mayor (página 2)


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Modelo que pone énfasis en los efectos.

Nacido en los Estados Unidos en pleno siglo XX: durante la Segunda Guerra Mundial en la década de los cuarenta. Se desarrolló precisamente para el entrenamiento militar, para el rápido y eficaz adiestramiento de los soldados. Sus diseñadores cuestionaban al tradicional método libresco por poco práctico porque no lograba un verdadero aprendizaje en poco tiempo; por lento y caro. Y por ineficaz: el educando repite y después olvida. Proponían en su lugar, un método más rápido y eficiente, más impactante, de condicionar al educando para que adoptara las conductas y las ideas que el planificador había determinado previamente. (López, 2007: 71)

La comunicación (educación) que pone énfasis en los efectos, encontró su origen como una reacción ante el modelo analizado anteriormente, por lo que se le opuso resueltamente, al introducirle un nuevo contenido por la importancia significativa que le concedió a la motivación y la concepción de una comunicación con retroalimentación del destinatario. También se planteó el logro de un cambio de actitud en el receptor, al considerarlo activo trazándose acciones concretas que permitan la evaluación de sus resultados.

En la concepción de este modelo se determinaba de antemano lo que se quería lograr, como debía actuar y pensar el educado, cuestiones que se lograrían con la puesta en práctica de un programa previamente planificado. Lo anterior significaba que lo que se debe enseñar está programado, todo ello lo convierte en un modelo manipulador, por lo que al final resultó tan autoritario o más que el modelo que pone énfasis en los contenidos.

Modelo que pone énfasis en los procesos

Es el modelo pedagógico que Freyre denominó "Pedagogía Liberadora", la que encontró su origen América Latina, bajo influencias que allí llegaron de pedagogos y sicólogos de Europa y Estados Unidos pero encontraron en el área, la verdadera orientación social, política y cultural que llegaron a definirla como "pedagogía del oprimido" con el objetivo de lograr una educación que posibilitara la liberación de las clases desposeídas y convertirla en una poderosa arma de transformación social.(Freyre, 1969).

Para caracterizar este modelo se utilizará una frase de Freire al referir que: "la educación es praxis, reflexión y acción del hombre sobre el mundo para transformarlo". Ya no se trata de una comunicación para informar y aún menos para conformar comportamientos sino que busca formar a las personas y llevarlas a transformar su realidad.

Como se puede comprobar la concepción sustentada por el prestigioso pedagogo gira en torno a la comprensión de una visión diferente de la educación, pues los hombres en la sociedad se educan entre sí, de allí que la educación sea concebida como un proceso permanente, ya que el ser humano es capaz de aprender a lo largo de toda su vida (T?rnerman, 2009) es un proceso de acción-reflexión-acción en sus realizaciones prácticas en la sociedad con sus múltiples relaciones.

El modelo objeto de análisis, cambia totalmente la concepción del educador (comunicador) al concebirse como un facilitador, conductor, tutor, suscitador que posibilita y estimula el proceso de aprendizaje (o de comunicación) conjuntamente con el estudiante hacia el análisis, la reflexión, brindando la posibilidad de convertirse en un proceso de asimilación conjunta. Todo lo anterior permite además, que el educador también incorpore conocimientos y se transforme en el proceso de su relación con el educado "…Lo que necesita si es un revolucionario coherente, es saber que al educar él también se educa". (Freyre, 1985:47).

Mediante el modelo examinado, se da lugar, al logro de transformaciones en el proceso de enfrentamiento del hombre con la realidad, hay un paso del hombre acrítico en hombre crítico donde busca ayudar a la persona a desmitificar su realidad, tanto física como social. Lo que importa más que enseñar cosas y transmitir contenidos es que el sujeto aprenda a aprender, es por lo que la educación no se puede conformar con la transmisión de conocimientos de forma lineal, si no por lo contrario, que se inculque una enseñanza donde el hombre sea capaz de lograr su razonamiento lógico con el desarrollo de capacidades intelectuales que van más allá de lo empírico y que están relacionadas con las habilidades intelectuales como la deducción, y la síntesis.

El análisis realizado, ratifica que el modelo que enfatiza en los procesos, se basa en la participación activa de todos en el proceso educativo (comunicación) aspecto que necesariamente propicia una mayor y mejor participación en la transformación y realización de tareas sociales. Visto así, el modelo es participativo, pues esta se convierte en condición necesaria en la construcción de la sociedad democrática.

Cuando se llega por si solo realmente al conocimiento se aprende de verdad lo que se vive, lo que se recrea en la comunidad, el razonamiento hace al hombre más preparado ante la vida, donde siembra el sentido de pertenencia y así es capaz de entender y construir no solo lo que está en los libros y en conferencias.

La autora de la presente investigación cree importante atender la concepción sustentada por los entendidos del tema en el Seminario sobre Comunicación Social y Educación que tuvo lugar en Quito, Ecuador, en septiembre de 1982, donde se realizó énfasis especial a los aspectos relacionados con los actores del proceso de comunicación como emisores y receptores alternos, aspecto en el que se logró coincidencia con el planteamiento del canadiense Jean Cloutier, el que introdujo la terminología de EMIREC, que concibe la interrelación dialéctica de emisor/receptor.

Otro aspecto a considerar, es que sus partidarios ven a la comunicación, como la relación que se establece entre: proceso, error, conflicto, lo que significa que el error no es rechazado, no es sancionado, si no que por el contrario, es considerado una fase necesaria en el proceso de búsqueda de la verdad y aprendizaje, asumen el conflicto como la fuerza que le impone desarrollo al conocimiento, pues aquí se está hablando de un proceso de aprendizaje significativo.

En correspondencia con los resultados de las investigaciones realizados por los estudiosos del tema, se pudo corroborar la importancia de sus aseveraciones, dada la especial atención que le otorgaron al grupo en el proceso de educación (comunicación) partiendo de la concepción de que "nadie se educa solo" (Kaplún.En. Freyre, 1969). Es en la interacción social, el diálogo, la experiencia compartida que se logra la verdadera educación.

La educación debe centrase en el grupo que se educa por medio del establecimiento de zonas de apoyo (Brunner, 1991) que deben ser considerados como niveles a transitar en la apropiación del conocimiento de la realidad.

El análisis realizado, le permitió a la autora de esta investigación comprender aspectos positivos y negativos de los modelos analizados, brindando la posibilidad de tomar partido y compartir los postulados fundamentales del modelo que pone énfasis en los procesos, sustentado por Paulo Freyre y sus seguidores, pues el mismo logra imprimirle un sello distintivo al papel desempeñado por los actores en el proceso de comunicación. Con él se logra el desarrollo de una persona educada, de su dignidad personal, ayudándolo a sentirse miembro activo de la comunidad con elevada autoestima y confianza de sus capacidades físicas e intelectuales en la transformación social.

La estrategia de comunicación comunitaria elaborada por la presente investigación tiene en su base teórica fundamental las concepciones abordadas por el modelo que pone énfasis en los procesos, lo de manera favorable logrará la incidencia positiva en el fortalecimiento de la cultura alimentaría del adulto mayor en el Consejo Popular Guáimaro Norte.

I.5 Cultura alimentaria.

La cultura hace referencia al conjunto entero de la vida social y hasta las formas de expresión de la vida del espíritu, que es considerado como un orden de valores que dan una cierta calidad humana al grupo. Si se analiza el contexto cultural este caracteriza diversos tipos de culturas que no son más que los conjuntos de creencias, valores y conductas concretas de cada cultura.

En el Diccionario Filosófico se expresa que por cultura se entiende el conjunto de valores materiales y espirituales, así como, de los procedimientos para crearlos y trasmitirlos, obtenidos por el hombre en la práctica histórico – social.

La cultura desempeña un rol fundamental en la construcción de una identidad, mediante la cual los individuos representan y expresan sus sentimientos, reflejan rasgos que los unen y a la vez los diferencian y que son características propias de un individuo, grupo y comunidad.

La autora de la investigación coincide que no puede existir un grupo sin cultura que sea la identidad de este, permitiéndoles que se comporten en la vida social de distintas formas que incluirán las normas y procedimientos de cada uno de ellos.

La cultura atañe a todos los seres humanos, aunque con diferentes grados de conciencia y desde diversas perspectivas. Ella, tanto en sus realizaciones individuales como colectivas, resulta de procesos de acumulación y sedimentación, históricamente condicionados, de diversos elementos materiales y espirituales, que van desde las más elaboradas expresiones artísticas hasta lo más común de la vida cotidiana.

Por cultura privilegiamos un concepto que sitúa al hombre como sujeto de un proceso de asimilación -transformación de valores que hereda y crea en su constante interacción con el medio y que le permite proyectar conscientemente el futuro.

Estas ideas conducen al camino que descubre y fundamenta la cultura, como lo que identifica mediante símbolos, representaciones, creencias, valores tanto materiales como espirituales, lo creado por el hombre en su decursar histórico -social y que trasmite de una generación a otra.

"Cultura es el conjunto de realizaciones humanas, que ha trascendido a nuestro tiempo y que le permite al hombre actuar, conservar, reproducir y crear nuevos valores y conocimientos para la transformación de su medio natural y social". (Hart, 1988: 4)

Se brinda una visión de conjunto a través de la cual se manifiesta la capacidad del hombre no sólo para reproducir la realidad sino también para conservar y crear nuevos valores materiales y espirituales que le permitan transformar su entorno como premisa esencial para el mejoramiento constante de sus condiciones de vida.

La cultura como ya se ha señalado en otro momento, tiene un papel importantísimo en la vida del hombre, es por ello que su defensa, conservación y desarrollo, es una práctica social vital para conservar la organización humana a través de las comunidades. Todo ello conduce al entendimiento de la relación planteada.

Antes de tratar el tema de la formación de los hábitos alimentarios en el adulto mayor, que en sí encierra lo que se entiende por cultura alimentaria, es importante enfatizar en el carácter eminentemente social de nutrición, así como, la condición biopsicosocial del hombre, que están estrechamente relacionados con el estado de salud y los estilos de vida, aspectos en los cuales la nutrición desempeña un importante papel para lograr una buena calidad de vida.

Para mejorar la calidad de vida debemos promover una cultura alimentaria que sirva de base y permita a la población la adopción de actitudes y prácticas alimentarias adecuadas y saludables, es decir, crear una conducta alimentaria responsable y con plena conciencia de su relación con la salud y que proporcione satisfacción y placer (Sánchez, 2004: 57)

Se coincide con este autor pues no siempre nuestros gustos y preferencias alimentarias están en correspondencia con una alimentación saludable. Entonces no se debe comer solo lo que es de más agrado sino ampliar los horizontes e ingerir alimentos que sean en realidad beneficiosos para mantener una salud adecuada. Es por ello que un propósito importante en cuanto a la educación alimentaria y nutricional es lograr una convergencia armónica entre cultura, nutrición y placer.

Se plantea que la satisfacción y placer parten del hecho que el ser humano no vive solo para comer, ni come solo para vivir. Para el ser humano comer es más que alimentarse, comer es una fuente importante de placer, así como de interacción social y por ende, reviste un significado cultural que a veces nada tiene que ver con la nutrición.

Una alimentación saludable se caracteriza por la calidad e inocuidad de los alimentos que se consumen de forma balanceada.

Adecuada: a la edad, sexo, talla, clima, estado fisiológico.

Equilibrada: entre los macro nutrientes (proteínas, grasas y carbohidratos)

Suficientes: en cantidad de alimentos.

Completa: debe incluir alimentos de los siete grupos básicos.

Variedad: en color, sabor y consistencia.

Saber garantizar una alimentación saludable en el adulto mayor es vital para mejor estilos y calidad de vida, por lo que se hace necesario fortalecer las bases de una cultura del gusto, una educación del paladar, que condicionen la formación de hábitos en correspondencia con una alimentación saludable.

No podemos limitarnos a incrementar acciones educativas y brindar información para elevar el conocimiento sobre alimentación y nutrición. La educación alimentaria debe tener como finalidad el mejoramiento de la conducta alimentaria.

Tres conceptos o principios están en la base de este criterio:

1-el comportamiento se considera mediado por el conocimiento, es decir, lo que se sabe y lo que se cree afecta la manera de cómo se actúa.

2-el conocimiento es necesario, pero no suficiente para producir cambios de comportamiento; mucho más cuando se trata de hábitos, costumbres y conductas alimentarias arraigadas y transmitidas de generación en generación.

3-el cambio de comportamiento es un proceso y no un acto.

En sentido general el comportamiento es afectado por múltiples niveles de influencias (perspectiva ecológica) dentro de los que se encuentran:

-Factores individuales: características individuales que influyen en el comportamiento como rasgo de personalidad, motivaciones, necesidades, actitudes, conocimientos y creencias, la historia del desarrollo, experiencias vividas, costumbres y cultura.

-Factores del entorno social:

-Factores comunitarios: normas sociales que existen como algo formal e informal, entre individuos, grupos y organizaciones.

-Factores institucionales: normas, reglamentos, políticas en estructuras formales que pueden limitar o fomentar los comportamientos recomendados.

-Factores de política pública: políticas locales, estatales y leyes que reglamentan o respaldan acciones saludables y prácticas para la prevención, detección temprana, control y tratamiento de enfermedades.

Se entiende que además de estos elementos generales que condicionan la conducta humana, cuando se refiere al comportamiento alimentario específicamente, hay que tener presente que el patrón de consumo alimentario de un individuo, familia o comunidad es producto de otras múltiples variables y entre estas se encuentran: características propias del individuo, familia o comunidad, disponibilidad de los alimentos y la accesibilidad económica.

Se pueden mencionar algunos de los errores más frecuentes en la formación de los hábitos alimentarios en el adulto mayor.

1. Desconocimiento de cuán importante es una correcta cultura alimentaria en esta etapa de vida.

2. Errores en los hábitos alimentarios.

3. Comidas con grasa.

4. Desconocimiento por parte del familiar encargado de la alimentación del adulto.

5. Comidas fuera de los horarios establecidos.

En la presente investigación la autora se afilia a la definición de cultura alimentaria dada por Sánchez, donde la define como: "la adopción de actitudes y prácticas alimentarias adecuadas y saludables (…) requiere de la participación activa, permanente y coordinada de todos los actores y sectores que conforman el entorno social del individuo". (Sánchez, 2004:58.)

En ella expresa de forma clara, la necesidad de una buena higiene y una dieta sana y equilibrada, es una necesidad de cada individuo y cada sociedad para mejorar la calidad de vida, que se manifiesta en los hábitos, costumbres y formas de hacer en beneficio de la salud individual y colectiva, además de que es trasmitida al hombre de generación en generación y este la adecua a su entorno de vida dentro de la sociedad.

1.5.1 Cultura alimentaria en el adulto mayor.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), las personas de 60 a 74 años son considerados de edad avanzada: de 75 a 90 viejas o ancianas, y las que sobrepasan los 90 se les denomina grandes viejos o grandes longevos. A todo individuo mayor de 60 años se le llamará de forma indistinta persona de la tercera edad o adulto mayor.

El adulto mayor constituye un segmento poblacional en crecimiento, con reconocido protagonismo en el seno familiar y en el ámbito socio-comunitario. Algunos autores lo circunscriben a las edades comprendidas por encima de los sesenta años, si bien es cierto que estas clasificaciones son relativas y devienen productos de construcción social, en dependencia de la cultura y de los criterios científicos predominantes. Todo este proceso se encuentra contextualizado en un entorno donde las proyecciones demográficas de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) indican que en el 2000 las personas de 60 años y más aumentaron a 590 millones, y para el 2025 pueden ser 1 100 millones, lo que significará un aumento de 224% con respecto a1975.Cuba tiene y tendrá un envejecimiento notable de su población: al iniciar el siglo XXI casi 14,1% de la población cubana tenía sesenta años o más y en el 2025 uno de cada cuatro cubanos tendrá más de 60años.

El comportamiento alimentario del adulto mayor puede determinar su calidad de vida, por lo que el abordaje de este tema alcanza un significado especial en la última década.Si bien es cierto que la longevidad está determinada por factores genéticos, se reconoce que los factores ambientales, entre ellos la alimentación, intervienen en el proceso de envejecimiento y la duración de la vida. Para la valoración de los hábitos alimentarios en el adulto mayor es importante destacar que no sólo intervienen los factores biológicos, sino que el comportamiento alimentario se nutre de factores culturales, sociales, económicos, religiosos, históricos y muchas otras influencias que se inician desde edades tempranas.

De este modo, el componente nutricional en este ciclo de la vida adquiere particular relevancia por la vulnerabilidad del adulto mayor, expresado en los cambios metabólicos y orgánicos que se producen durante el proceso de envejecimiento y también por la aparición de factores de riesgo asociados a la malnutrición que, además de físicos, pueden ser psicológicos y socioculturales.

Las necesidades de energía durante esta etapa disminuyen con el descenso de la masa corporal magra, del índice metabólico y de la actividad física. Con relación a la ingesta de proteínas, vitaminas, minerales, fibra dietética y líquidos, varios autores sugieren que debe incrementarse su consumo en esta etapa de la vida. De igual forma, se produce una pérdida del sentido del gusto y el olfato, la disminución de los movimientos peristálticos del intestino y deficiencias en la masticación por el mal estado de la dentadura. Los cambios psicosociales y la monotonía de la dieta, junto a las afecciones patológicas, asociadas a diversos tratamientos farmacológicos, determinan la necesidad de adecuar la alimentación de las personas mayores a esta nueva situación.

Por tal motivo los especialistas en nutrición recomiendan confeccionar dietas que, con un menor aporte calórico, proporcionen una adecuada densidad de nutrientes. El consumo de líquidos se comporta por encima de las necesidades de otros grupos etarios, por lo que se recomienda que los adultos mayores estén atentos a la hidratación de su organismo.

Los requerimientos energéticos se comportan en el orden de las 1 600-2 000 kilocalorías, en dependencia de las fuentes (National Research Council, FAO, especialistas de experiencia en geriatría, entre otras).

En resumen, si bien las necesidades en calorías disminuyen, los requerimientos en elementos nutritivos de base parecen ser más o menos constantes. La distribución de nutrientes debe ser rica en proteínas, moderada en carbohidratos, pobre en grasas y abundante en fibra vegetal o dietética.

De gran trascendencia resultan la soledad y el aislamiento que pueden incidir muy desfavorablemente en la forma de alimentación del adulto mayor, ya que la falta de afectividad, así como la carencia de proyectos de vida y de relaciones sociales, pueden derivar hacia un consumo desequilibrado, expresado en varias manifestaciones (anorexia, obesidad, depresión emocional, creencias dietéticas erróneas, etcétera). Es por ello que se insiste en la necesidad de garantizar que las prácticas alimentarias del adulto mayor se realicen en un contexto agradable donde haya socialización.

Se ha determinado que el aislamiento influye de forma muy desfavorable en el estilo de comer de este grupo, sin descuidar el enfoque de género, donde las mujeres conceden más importancia a los aspectos de servicio sociabilidad, y en el caso de los hombres se proyectan un poco más por la satisfacción de su apetito.

El tema de la cultura alimentaria en este grupo resulta vital, y mucho puede contribuir al logro de una perspectiva más favorable en la formación de hábitos alimentarios adecuados para sí y el resto de las personas. Por ello la educación permanente en materia de alimentación representa una alternativa para mejorar las actitudes alimentarias de este grupo etario, lo que propicia la elevación de su calidad de vida.

La cultura alimentaria es de gran significado para el tratamiento de esta temática y representa un conjunto de valores, sintetizados en múltiples manifestaciones asociadas a los modos y estilos del comer, que constituyen reflejos del proceso histórico local y mundial en que se desarrollan, con una aspiración futura de perfeccionamiento, y donde la educación constituye su herramienta transformadora.En tal sentido, vale recalcar que muchos investigadores en Cuba y el mundo trabajan con las personas comprendidas en las edades tempranas donde se forman las conductas alimentarias. Sin embargo, expertos señalan que el adulto mayor presenta una especial sensibilidad al cambio de sus patrones alimentarios, si ello pone en riesgo su salud. También son prácticamente los responsables de la formación de hábitos alimentarios en la familia.

Específicamente, el tema de la educación alimentaria y nutricional en el adulto mayor ha sido asumido por las Cátedras Universitarias del Adulto Mayor, desde su fundación en el 2000, y constituyen un escenario propicio donde se imparten clases de cultura alimentaria, con gran aceptación de los cursantes. En este contexto el adulto mayor se considera un sujeto en desarrollo, por lo que la adquisición de informaciones y nuevos conocimientos relacionados con la alimentación, puede ejercer un efecto favorable en su comportamiento alimentario.

En realidad la vejez por sí sola no justifica un régimen alimentario estricto (excepto cuando se presentan enfermedades crónico-degenerativas), si se tiene en cuenta que los preceptos de alimentación equilibrada deben cumplirse durante toda la vida. Aun así se debe seguir pautas y procurar corregir las prácticas alimentarias erróneas, que en esta etapa de la vida adquieren un significado más comprometedor. Por lo general se presentan cuadros de malnutrición en este ciclo, tanto por comer demasiado, como por subalimentación.

Vale destacar que resulta un verdadero desafío el tratamiento nutricional y alimentario de este grupo, por la multifactorialidad de este proceso y la falta de contrastabilidad en esta materia, para lo que se sugieren las recomendaciones siguientes:

• Reducir al máximo las grasas de origen animal y priorizar el consumo de aceites vegetales, ricos en ácidos grasos insaturados, como el aceite de soja, girasol, maíz, maní, sésamo y oliva.

• Limitar el consumo de azúcares de rápida absorción.

• Aumentar la ingesta de líquidos.

• Consumir vegetales y frutas, en cantidades de cinco raciones diarias, siempre que sea posible.

• Aumentar el consumo de pescados y aves.

• Reducir la sal común.

• Preparar los alimentos de forma agradable y sencilla.

• Emplear las plantas aromáticas para saborizar las comidas (ajo, cebolla, perejil, apio, albahaca, etcétera).

• Adecuar la preparación de alimentos a las limitaciones físicas del adulto mayor, asociadas a enfermedades o procesos físicos degenerativos.

• Tener en cuenta los gustos y preferencias alimentarias del adulto mayor, sin violentar los principios de una dieta sana.

• Estimular su capacidad para asumir nuevos gustos y alimentos novedosos y sanos.

Finalmente, los saberes en materia de alimentación alcanzados por los adultos mayores, que se transfieren de generación en generación y que constituyen la base de la cultura alimentaria de los grupos sociales, merecen especial reconocimiento. Las prácticas alimentarias (consumo alimentario, aprovisionamiento, formas de cocinar, horarios, etcétera) que han desarrollado durante toda la vida, en tiempos donde no proliferaba la comida chatarra y las poblaciones practicaban un consumo más natural, sin duda forman parte del acervo culinario con matices muy valiosos que debemos preservar. Vale ejemplificar los jugos de remolacha, berro y zanahoria de nuestras abuelas, que tanto deben haber contribuido a la salud de las ulteriores generaciones. Todo ello también enriquece la perspectiva alimentaria del adulto mayor.

1.5.2 Programa de Cultura alimentaria en Cuba.

Cuando se analiza el estado de salud de la población cubana, resulta obvio que las enfermedades crónicas no trasmisibles, muy relacionadas con un estilo de vida, son el principal obstáculo en la prolongación de la salud y la vida de los cubanos. Las investigaciones realizadas enfatizan en los beneficios que se obtendrían si se actúa de manera oportuna y efectiva sobre sus principales factores de riesgo, entre los que se destacan los patrones alimentarios inadecuados y el sedentarismo.

Como parte de la estrategia encaminada a elevar la calidad de vida de la población cubana, en el país se implementa el Plan de Acción de Cultura Alimentaria, que aglutina a todos los sectores vinculados con esta temática. Se trata de una estrategia de comunicación y movilización social que pretende facilitar y acelerar el mejoramiento de la situación alimentaria y nutricional de toda la población, que no se limita a brindar información o a elevar los conocimientos sino que promueve la adopción de actitudes y prácticas alimentarias adecuadas para producir, seleccionar, preparar y consumir alimentos de acuerdo a los requerimientos nutricionales y con plena conciencia de su relación con la salud.

Objetivos

1-Incrementar en la población los conocimientos sobre la relación existente entre la alimentación y nutrición con el estado de salud para lograr la adopción de actitudes y prácticas alimentarias adecuadas.

2-Elevar el nivel de información sobre selección, preparación y consumo de alimentos sanos de la población en general y en grupos priorizados y de riesgo.

3-Incrementar los conocimientos sobre alimentación y nutrición del personal de los sectores de salud y educación así como los escolares a todos los niveles.

4-Perfeccionar los conocimientos de productores, comercializadores y manipuladores de alimentos para favorecer un mejor aprovechamiento de los recursos alimentarios disponibles y un tratamiento adecuado en el proceso de producción, elaboración y comercialización.

5-Proponer a los diferentes sectores productivos la necesidad de garantizar productos sanos y seguros de acuerdo a los recursos disponibles.

I.6 La Estrategia de comunicación.

La Estrategia de Comunicación, surge a partir que en una determinada actividad, hay algo que corregir, que cambiar, algo nuevo que decir, a determinados públicos y en determinado períodos de tiempo. Es un conjunto de acciones bien planificadas para lograr objetivos muy claros a través del uso de métodos, técnicas y enfoques de comunicación. Los objetivos determinan el cómo enfrentar la solución de los problemas, son la base de la estrategia.

La Estrategia es una ciencia y deviene de lo militar y su aplicación en una guerra. la autora hace referencia a lo planteado por el profesor e investigador Luis López Viera, en su libro Comunicación Social en el cual hace una compilación de textos y de los cuales plantea que los inicios de la estrategia parten en Roma y Grecia, siendo la figura de Julio Cesar su máximo representante, en el Renacimiento aparece como máximo exponente Nicolás Maquiavelo quien escribe su libro "El arte de la guerra" basándose en las experiencias de las antiguas campañas romanas y hace recomendaciones sobre cómo hacer la guerra, en su obra "El Príncipe" hace alusión de cómo debían componerse los ejércitos para asegurar la existencia del estado.

Este preámbulo histórico que podemos llevarlo hasta nuestros días, porque en todos los tiempos han existido estrategas relevantes, porque siempre ha habido guerras; pasó de lo militar a lo civil, por la siempre conocida estrecha relación entre guerra y política; por el desarrollo constante de la ciencia y la tecnología y por el intercambio cultural constante de la civilizaciones.

La estrategia ha sido definida de muy diversas formas, para que las estrategias tengan éxito los objetivos deben estar definidos con claridad y precisión y encontrarse comprometidos con las mismas los dirigentes principales que son, a fin de cuentas los encargados de decidir.

Toda opción estratégica debe seguir la lógica siguiente:

  • Considerar dimensiones externas e internas diagnosticadas.

  • Valorar los actores o grupos de actores internos y externos que pueden incidir.

  • Incluir acciones a corto, mediano y largo plazos.

Luís López Viera define como término de estrategia: … "una serie de acciones programadas y planificadas que se implementan a partir de ciertos intereses y necesidades en un espacio de interacción humana, en una gran variedad de tiempo. La estrategia lleva un principio de orden, de selección, de intervención sobre una situación establecida". (López, 2003).

Según Rayza Portal Moreno: "…las estrategias de comunicación constituyen el conjunto de formas y modos de comunicación que tienen como objetivo establecer una comunicación eficaz de ideas, productos o servicios. Son además programas generales de acción con un compromiso implícito de recursos, con el propósito de alcanzar los objetivos trazados…" (Portal. En. Vidal 1998: 99).

La autora del presente trabajo se afilia a la definición dada por Luís López Viera, donde la define de una forma clara y evidente, la cual está conformada por una serie de acciones programadas y planificadas, además se implementan a partir de ciertos intereses y necesidades de la interacción humana, donde se necesita una gran variedad de tiempo.

La autora analizando las definiciones anteriores plantea que con la puesta en práctica de la Estrategia de Comunicación Comunitaria que se propone en la presente investigación se contribuye a fortalecer la cultura alimentaría del adulto mayor del consejo popular guáimaro norte pues mediante el accionar comunicativo se logra que aumente la calidad de vida del adulto y logren adquirir conocimientos necesarios para su sana alimentación y correctos estilos de vida.

El fin de diseñar una estrategia de comunicación es tratar y resolver los problemas a nivel de la comunidad, utilizando las conclusiones del Diagnóstico de Comunicación, así como métodos, técnicas y medios de comunicación. Debe hacerse con la gente, no sólo para la gente.

Es necesario anotar que tan pronto comienza el diseño de la estrategia, el proceso cambia de un análisis de problema a la solución del problema. La estrategia de comunicación es diseñada para lograr los objetivos de comunicación. Para determinar la relevancia de estos objetivos es necesario considerar un número de factores, tales como la información de fuentes secundarias, los objetivos del proyecto, las necesidades de la comunidad, la oportunidades, los problemas y las posibles soluciones, la cultura de la población y su percepción de estos asuntos.

¿Qué es planeación estratégica?

Hablar de planeación estratégica, no es sinónimo de elaborar un «plan de trabajo». La «planificación» que lleva a desarrollar los planes operativos de trabajo, es parte importante de la planeación estratégica, pero no es lo mismo, pues la planificación «aterriza» lo que la planeación diseña como escenario de futuro por conseguir; se ha dicho: «Para construir el futuro hay que soñarlo primero…» y justamente lo que intenta la planeación estratégica es diseñar el escenario del futuro, que con una visión realista y audaz al mismo tiempo, permita modificar sustancialmente el estado de cosas del cual se parte. Planear es soñar el futuro que se anhela y poner todo el empeño en construirlo; es la dinámica que conduce el desarrollo de un plan estratégico; es la profecía autorrealizada; es la capacidad de ver globalmente el escenario que se quiere construir y diseñar el rumbo y las acciones que permitan lograrlo.

La estrategia es lo que se tiene que conducir con un sentido y con un rumbo acorde con la voluntad planeadora, mientras que la táctica es la capacidad de respuesta que tiene que diseñarse de acuerdo con los obstáculos o las circunstancias que brotan de la propia realidad y que se imponen. Lo estratégico brota de la voluntad, de la capacidad de sueño y de diseño -con sentido realista, por cierto- pero que surge de la propia voluntad. Las tácticas, por el contrario, son dispositivos que imaginan para salvar los obstáculos que impone la realidad.

En síntesis, planear estratégicamente incluye e incorpora necesariamente los elementos de la planificación operativa, pero no se agota en ellos, puesto que la planeación estratégica – se insiste- diseña los escenarios futuros a los cuales se quiere y se puede (realistamente) llegar, si se pone en juego la creatividad y voluntad para conseguirlo, sin más limitaciones que las que la ética y la moral imponen.

Lograr el acercamiento a la comunidad no siempre es fácil, a veces sus miembros no entienden lo que se pretende hacer y lo peor es cuando los integrantes o coordinadores del equipo no comparten el mismo sentir entre sí,"… es necesario incorporarse directa, practica y vivencialmente a la vida cotidiana de la comunidad" (Acebey, A; Calviño, M. Op. Cit: 63)

¿Cuáles son entonces los elementos que hay que desarrollar para lograr un plan estratégico? A continuación se da cuenta de cada uno de ellos, de acuerdo con la propia propuesta, atendiendo al modelo de Luís López Viera.

  • El referente: No se puede planificar desde el vacío, es necesario diseñarlo a partir de la voluntad colectiva de un grupo, empresa, organización. Por lo que a este grupo se le denomina referente.

  • El credo básico: Implica el análisis e interpretación de la realidad, está basado en el conjunto de principios y valores que le dan la unidad esencial y lo que puede expresar responsablemente su voluntad de futuro.

  • Horizonte de planeación: Es el tiempo en que está enmarcada la estrategia.

  • Análisis del contexto o de la formación social en que se va actuar: Se debe tener una interpretación de la propia realidad del contexto en el que se va a intervenir, o sea de la… "«formación social» que tiene que ver no sólo con datos o realidades concretas, sino también con las determinaciones históricas y culturales de las cuales deviene la realidad"

  • Objetivos estratégicos: son los que el grupo referente fórmula para expresar lo que se quiere lograr en el horizonte de planeación previsto.

  • Líneas de acción: Grandes directrices de actividades que expresan la identidad del trabajo del referente.

  • Ejes temáticos: Se formula para poder precisar los aspectos o contenidos particulares que se derivan de los objetivos estratégicos. Con ello se trabajará según las líneas de acción que se hayan decidido.

CAPITULO. II

Metodología empleada y caracterización del Consejo Popular Guáimaro Norte. Diagnóstico de la comunicación comunitaria

II.1 Metodología empleada

Se trata de un estudio descriptivo que empleó el enfoque cuantitativo – cualitativo. La presencia de este enfoque está dada por la selección propiamente de la muestra, la determinación de los informantes claves, por el empleo de la entrevista a profundidad y la obtención de los resultados, por el otro lado la aplicación de la encuesta. Todo ello, posibilitó realizar las valoraciones al respecto.

Se utilizó una combinación de las investigaciones Cualitativas y Cuantitativas, porque Según Maria Margarita Alonso e Hilda Saladrigas (2002) en: Para investigar en Comunicación Social es la que ""estudia la realidad en su contexto natural, ofrece técnicas especializadas para obtener respuestas a fondo del problema""

Según Roberto Hernández Sampier (2003), la investigación cuantitativa se caracteriza por el alto interés en la verificación del conocimiento, sobre todo a través del establecimiento de predicciones. Sus principales objetivos son medir, contar, establecer frecuencias.

Y la investigación cualitativa según Gregorio Gómez Rodríguez (2002), es un tipo de investigación formativa que ofrece técnicas especializadas para obtener respuestas a fondo acerca de lo que las personas piensan y cuáles son sus sentimientos.

Fueron empleados para el estudio diferentes métodos de investigación, del nivel teórico:

Histórico-Lógico: para determinar la génesis y evolución del problema objeto de estudio, las transformaciones que ha enfrentado hasta la actualidad.

Analítico- sintético: Permitió confrontar los requerimientos actuales de la investigación para atender los fundamentos teóricos necesarios.

Hipotético-deductivo: condujo a la sistematización de conocimientos del tema y científicos que permitieron la construcción de los elementos teóricos.

Del nivel empírico unos de los métodos utilizaron fueron el análisis documental, para analizar y estudiar documentos, artículos, resúmenes de investigaciones, tesis doctorales y literatura científica en general relacionada con el tema de investigación.

Una de las técnicas utilizadas fue la entrevista a profundidad, pues constituye una vía eficaz para la obtención de información requerida en la investigación y con el objetivo de obtener y conocer sus conocimientos acerca de los temas relacionados con la alimentación del adulto mayor, así como si se utilizan correctamente la comunicación en aras de fortalecer la cultura alimentaría de los mismos.

Se aplicó una encuesta que permitió determinar el grado de conocimiento sobre cultura alimentaria y hábitos alimenticios en los adultos mayores, y del nivel estadístico-matemático, el cálculo porcentual, para realizar la valoración cuantitativa del diagnóstico.

De la metodología cualitativa se utilizó la técnica de informantes claves, los mismos fueron seleccionados por su nivel de conocimiento a partir de su experiencia de su trabajo, por los años que llevan al frente acciones que se desarrollan en cuanto a la divulgación de este tema por parte de las organizaciones de masas, así de como evaluar el comportamiento y utilidad que se le da en la comunidad.

Por consiguiente apadrinaron a la autora de la presente investigación en el escenario y fueron sus fuentes primarias de información, brindaron la información precisa para fortalecer los fundamentos ofrecidos por la muestra encuestada.

La población objeto de estudio es el adulto mayor del Consejo Popular Guáimaro norte la cual representa una población N=1715, donde se trabajara con los adultos mayores comprendidos en el rango de edad de 60 a 74 años obtenido por el método de segmentación. Se selecciona una muestra de n=50, la misma es no probabilística fue seleccionada de manera intencional, teniendo en cuenta el criterio de sujeto tipo, atendiendo a los siguientes parámetros de selección:

Todos los adultos mayores que no tengan dificultades visuales graves (ciego), e invalidez para escribir, que no presente enfermedades mentales, y que presenten problemas de diabetes, hipertensión arterial y obesidad.

Se realizó una entrevista a 9 personas entre ellas enfermeras y doctoras. de tres consultorios médicos dentro de la comunidad seleccionándose de manera intencional por ser los que tienen más experiencia acerca del tema y conocimiento pleno de la comunidad.

Se escogieron para monitorear tres días de la semana, en el horario comprendido de 9:00am-12:00pm, la mismas se realizaron en el consultorio, donde existía un ambiente favorable, propició el desarrollo del proceso de indagación científica pues la información que arrojó tiene un alto nivel de fiabilidad, lográndose por la acción directa de la investigadora con el entrevistado evitando cualquier interpretación errónea que perjudicara la veracidad de la información.

Contó con 5 preguntas donde tuvo como objetivo conocer el grado de conocimiento de los entrevistados en cuanto al Programa de cultura alimentaría, así como los canales de información que utilizan para transmitir las informaciones, que flujo de comunicación predomina y como son los mensajes que se tramiten. (Ver anexo1).

Por otra parte fue utilizada la entrevista a 24 informantes claves que constituyen el grupo de apoyo comunitario (Ver Anexo 2), la cual estuvo dirigida a obtener información sobre la cultura alimentaria de la comunidad, qué acciones se desarrollan en cuanto a la divulgación de este tema por parte de las organizaciones de masas, así como evaluar el comportamiento y utilidad que se le da en la comunidad al flujo de comunicación, canales de información y mensajes.

La encuesta se elaboró por la aplicación de la técnica un cuestionario, que es el instrumento para obtener respuesta a preguntas utilizando para ello un formulario impreso contestado por el propio encuestado. (Ver Anexo 3).

Con la aplicación de esta técnica se recogió la información necesaria de forma rápida y efectiva como: si los comunitarios conocen lo que es la nutrición, las vías de información que se utilizan en la comunidad para divulgar una nutrición adecuada, si los mensajes que le llegan son comprensibles, además de los flujos de comunicación y los canales que se utilizan dentro de la comunidad. La información recogida pudo emplearse para un análisis con el fin de determinar y conocer el uso de las herramientas de comunicación que se ponen en práctica en la comunidad, que contribuyan a elevar la cultura alimentaría en el adulto.

II.2 Caracterización del consejo popular Guáimaro norte.

El consejo popular Guáimaro norte tiene una extensión de 150km, limita por el sur con el consejo popular guáimaro sur, al este con la provincia de Las Tunas, al oeste con el consejo popular Martí y por el norte con el consejo popular Palo Seco, cuenta con 12 circunscripciones de ellas 3 zonas rurales: CPA Triunfo de la Revolución, La Jaguay La Majagua. Su actividad económica fundamental es la agricultura y la ganadería.

Incluye una población de (8215) habitantes; de ellos cuatro mil seiscientos treinta y tres (4633) femeninas y tres mil cuatrocientos ochenta y dos (3482) masculinos. Del total, existen 2500 de 0a 18 años, 4000 personas entre 18 y 60 años y 1715adultos mayores con más de 60 años de edad; predomina la raza blanca.

Entre los aspectos Socio-Económicos existe una realidad económica enmarcada por diferentes centros laborales donde se cuenta con: Acueducto Municipal, Centro de Educación Municipal, Imprenta, Taller de Confecciones, PNR municipal, Comité Militar, Dos CUPEP, Banco Popular de Ahorro, Poder Popular, CDR municipal, FMC municipal y ONAT.

En cuanto a los centros de servicios predomina un Palacio de los matrimonios, una peluquería, un taller de refrigeración, una carpintería, 10 tiendas de productos víveres, 2 supermercados, 2 farmacias ,2 tiendas de divisas, una terminal de ómnibus. Además la existencia de Cooperativas como la CPA Triunfo de la Revolución, UBPC Constitución de Guáimaro, CSC Pepito Tey.

Existe un hospital hogar materno, centro de rehabilitación, una clínica estomatológica, una clínica de salud mental, encontrándose todos estos locales en perfectas condiciones y cuenta además con el personal capacitado y necesario para las realizaciones laborales, además existen 13 consultorios médico de familia en la comunidad.

El consejo popular se caracteriza por una rica tradición de amor y respeto a hechos históricos de la localidad, contamos con una casa de cultura, galería de arte, Sectorial de cultura, bibliotecas, librerías, cuenta con 7 promotores culturales y 15 instructores de arte los cuales desempeñas las diferentes actividades culturales que se dan lugar en el consejo, además existe un cine y una sala de video con variadas ofertas para niños, jóvenes y adultos.

En cuanto al movimiento deportivo existe una escuela comunitaria la cual cuenta con 230 técnicos y profesores de cultura física encargados de desarrollar programas como, Educa a tu hijo, embarazadas gimnasia básica para centro de trabajo, promoción de salud y atención al adulto mayor.

El nivel escolar promedio es de doce grado. La comunidad cuenta con un total de once instituciones educacionales: tres escuelas primarias, dos urbanas y una rural, tres secundarias básicas, un pre universitario y un centro mixto, dos cede universitaria pedagógica y salud, así como un circulo infantil.

El consejo popular cuenta con su Grupo de Trabajo Comunitario, integrado por:

  • Presidente del consejo popular.

  • Delegados de las circunscripciones…

  • Presidentes de CDR.

  • Organizaciones políticas y de masas.

  • Dietista

  • Doctora

  • Instructor de arte

  • Activista del INDER

En el Consejo Popular Guáimaro Norte existe problemas de viviendas muchas afectadas por ciclones, encontrándose en muy mal estado. Además esta zona presenta serias dificultades con la recogida de basuras por parte de los trabajadores de comunales, producto de esto existen micros vertederos que afectan el entorno, siendo la falta de higiene de las calles la mayor inquietud de la población. Las cuadras presentan insuficiente iluminación y existe problemas con las tuberías y en ocasiones falta el agua, además la carencia de actividades recreativas hace que se eleve la potencialidad delictiva.

Las problemáticas sociales son varias, entre las que se destacan la poca sistematicidad de las actividades y pocas opciones recreativas, culturales y deportivas, por lo que el tiempo libre de los niños, jóvenes y adultos está en proceso de estancamiento, viéndose limitado el desarrollo cultural e integral en la población, existe alto índice de personas desvinculadas del estudio o el trabajo, la vigilancia de los CDR es casi nula, alto índice de alcoholismo como peligro potencial para la familia y la comunidad. Además de otras como la violencia familiar, el hábito de fumar, los embarazos en la adolescencia así como insuficiente conocimiento en cuanto la cultura alimentaría e higiene de los alimentos en el adulto mayor.

II.3 Análisis de los resultados del diagnóstico del estado actual de la cultura alimentaría del adulto mayor del consejo popular Guáimaro norte.

Con el objetivo de conocer el estado actual de la cultura alimentaría en el adulto mayor a través de la comunicación comunitaria, se aplicó una entrevista a especialistas doctora y enfermera de un consultorio en la comunidad e informantes claves. Se realizó una encuesta a 50 adultos mayores, siendo la muestra seleccionada teniendo en cuenta los parámetros de selección aplicados, se seleccionaron para monitorear dos días, encuestando cada uno a 25 personas. La aplicación de estas técnicas investigativas dio lugar a los resultados obtenidos que se presentan a continuación:

La entrevista realizada a doctora y enfermera de un consultorio médico se aplicó con el objetivo conocer las herramientas de la comunicación que desarrollan para promover una cultura alimentaria adecuada en el adulto mayor. (Ver anexo 1).

La entrevista realizada a doctora y enfermera de un consultorio médico respondían a los siguientes indicadores:

1-Sobre el conocimiento que tienen acerca del Programa de cultura alimentaría en Cuba.

2-Vías de información más utilizadas para informar al adulto mayor teniendo en cuenta el flujo de comunicación.

3-Como son los mensajes que se transmiten al adulto mayor en cuanto al tema alimentario.

4-Medios de información que se utilizan para elevar la cultura alimentaría atendiendo a los canales de comunicación.

5-Valoración de la elaboración de acciones comunicativas dirigidas a elevar la cultura alimentaría en el adulto mayor.

El jueves 20 de Enero, en el horario comprendido entre las 9:00AM y las 12:30M se realizó una entrevista en tres consultorios médico de la familia de la comunidad seleccionándolos de manera intencional, fueron entrevistadas a 9 personas entre ellas enfermeras y doctoras. Dé ellas 5 enfermera que representa 55.5% y 4 doctoras representando el 44.4% del total.

De las enfermeras entrevistada 4 de ellas que representa el 80%, plantean que conocen en que consiste el Programa de cultura alimentaría en Cuba. El 60% de las entrevistadas plantean que las vías más utilizadas para informar al adulto mayor lo realizan a través de vía telefónica cuando tienen que avisarles de alguna actividad que se va a realizar, añaden que los recados mediante los vecinos son la que más frecuentes utilizan, esto da a conocer que el flujo de comunicación que se manifiesta en la comunidad es el horizontal, pues las informaciones se transmiten en un mismo nivel, es decir en la base de la comunidad.

Atendiendo al indicador #3, el 80% de las enfermeras utilizan la vía de información directa a través de los terrenos que realizan cada 15 días en la comunidad, como el medio de comunicación que ellas utilizan para elevar la cultura alimentaria en el adulto mayor. Esta vía no es la más apropiada para hacer llegar la información y el conocimiento que el adulto en verdad necesita, pues los terrenos se caracterizan por ser breves en la cual ellas no poseen el tiempo necesario para dar en ellos una charla o conferencia en cuanto al tema alimentario, también teniendo en cuenta la cantidad de adultos que debe visitar.

Por lo que se puede decir que existe un insuficiente uso y escaso conocimiento de los canales de información de comunicación que existen, al no reconocer las charlas, conferencias, talleres, plegables entre otros medios directos e indirectos que constituyen los medios de la comunicación.

El 80% de las entrevistadas, señalan que los mensajes que se transmiten no son suficiente para elevar la cultura alimentaría en el adulto mayor, plantean que estos no son precisos, claros, comprensibles, porque es insuficiente la divulgación que existe en cuanto a los mismos, lo que el 100%de ellas consideran que la falta de acciones comunicativas dirigidas al adulto mayor entorpecen el desarrollo de la cultura alimentaría del adulto mayor, pues no se les brindan vías, experiencias, conocimientos, soluciones en cuanto al tema, además que la comunidad no cuenta con la presencia de un promotor de salud ,encargado de propiciar las actividades de salud; afirman que no conocen los medios de comunicación más factibles para comunicar correctamente.

Las entrevistas realizadas a las doctoras, arrojo que el 100% conoce en que consiste el Programa de cultura alimentaría en Cuba, las mismas utilizan como vía de información más utilizada los recados mediante los vecinos y en muy pocas ocasiones lo realizan en las consultas atendiendo a los que asistan a la misma, por lo cual se establece en gran mayoría la transmisión de información a través del flujo horizontal.

El 80% utilizan los terrenos como una vía directa de información, allí ellas personalmente ofrecen pequeñas soluciones para mantener una correcta cultura alimentaria y hábitos alimenticios en el adulto mayor, la cual es insuficiente la transmisión de información pues se necesitan realizar charlas grupales, conferencias, talleres, en si hacer usos de los canales de la comunicación en aras de resolver las problemáticas de la comunidad.

El 100% evalúa la transmisión de los mensajes, de confusos, para la adquisición de los adultos, porque consideran que el mensaje que es transmitido a través de los vecinos, puede variar su contenido a la hora de llegarle al destinatario. Además el 100% de las doctoras entrevistadas manifiestas que la falta de acciones comunicativa es escasa en la comunidad, por su parte y por la ausencia del promotor de salud en la comunidad, lo cual entorpecen la cultura alimentaría del adulto mayor.

El lunes 24 de enero al viernes 28, en el horario comprendido entre las 9:00AM y las 12:30M se realizó una entrevista a los informantes claves, los cuales constituyen 24 integrantes del grupo de apoyo de la comunidad, siendo estos, el Presidente del consejo popular guáimaro norte, 7 Delegados de la Circunscripciones, 4 Presidentes del CDR, 1 dietista, 3 doctoras,4 instructores de artes, y 4 activistas del INDER.

Esta entrevista contó con 5 preguntas donde tiene como objetivo conocer si se ponen en práctica en la comunidad las herramientas de la comunicación, evaluadas mediante el conocimiento de cómo se lleva a cabo la cultura alimentaría del adulto mayor, flujo de comunicación existente en la comunidad, canales que se utilizan, características de los mensajes, y valoración en la elaboración de acciones comunicativas para elevar la cultura alimentaría del adulto mayor. (Ver anexo#2)

Se contactó que el 83.3% posee amplio conocimiento de cómo se llevar a cabo la cultura alimentaría en el adulto mayor en su comunidad .El 100% plantea que los consultorios médicos de la familia es la institución encargada de informar al adulto mayor acerca del tema alimentario. El 41.7% de los entrevistados plantean que el recado es la vía de información más utilizada para informar de alguna actividad dirigida al adulto mayor, esta es transmitida a través de los vecinos que acuden ese día al consultorio, siendo el flujo de comunicación horizontal el que predomina en la comunidad.

El 75% plantean que son escasas las charlas que en ocasiones realizan , donde manifiestan como única vía e insuficiente los terrenos correspondientes a realizar , donde se demuestra que este constituye una vía de información directa ,pero no eficaz para la transmisión de conocimientos sólidos que contribuyan a elevar al cultura alimentaría de los adultos mayores, se necesita hacer uso de los canales de comunicación dentro de la comunidad por parte de los especialistas de salud, realizar charlas conversatorios , talleres donde fluya la comunicación.

En cuanto a la valoración de las informaciones trasmitidas al adulto mayor el 75% la evalúa de incomprensibles y escasa porque al no realizar encuentros directos por parte de los especialistas que contribuya a fortalecer la cultura alimentaria el adulto mayor este comprende en realidad la validez del mensaje.

El 100% de los entrevistados manifiestan que la falta de acciones comunicativas dentro de la comunidad entorpecen el desarrollo de conocimientos sobre cultura alimentaría que estos deben llevar consigo para su sana alimentación y calidad de vida, plantean que en la comunidad no se desarrollan talleres , no existen plegables anuncios en los distintos lugares, como las tiendas, escuelas , los mismos consultorios de familia, que contribuyan de tal forma a elevar la cultura alimentaría en el adulto mayor así como los restantes comunitarios.

El lunes 31 al 5 enero se encuestaron a 50 adultos mayores, en el horario comprendido entre las 9:00AM y las 12:30M, en el hogar del adulto donde existía buena iluminación y un ambiente agradable que facilitó el cumplimiento eficaz de esta técnica de investigación la cual contó con 11 preguntas , dirigida conocer el comportamiento y conocimiento de los mismos en cuanto al tema alimentario, y evaluar la puesta en prácticas de las herramientas de comunicación existentes en la comunidad que contribuyan a elevar la cultura alimentaria en el adulto mayor.

La aplicación de la encuesta dio como resultado que:

El 8% de los encuestados que representa 4 adultos mayores, consideran el concepto de nutrición como el estudio de la producción y consumo de alimentos, el 72% que representa 36 adultos mayores afirman que es un acto de ingerir alimentos, el 6% que representa 3 adultos mayores manifiestan el estudio de los procesos extra corporales relacionado con la utilización de los alimentos, y solo el 14% que representa 7 adultos mayores coincide que es el estudio de los procesos intra corporales que ocurren con los alimentos, su composición, interacción y balance, todo estas afirmaciones se dieron a partir en el lenguaje específico del adulto mayor, ya que existen adulto mayor con preparación y otros con menos.

En cuanto del padecimiento de las enfermedades más comunes en esa edad, se obtuvo que:

El 20% que representa 10 adultos mayores padecen de diabetes, el 28% que representa 14 adultos mayores padecen de Hipertensión, el 18% que representa 9 adultos mayores padecen de obesidad, el 6% que representa 3 adultos padecen de diabetes y hipertensión, el 4% que representa 2 adultos mayores padecen de diabetes y obesidad, y el 24% que representa 12 adultos mayores padecen de hipertensión y obesidad.

El 70% que representa 35 adultos mayores plantean que a veces recibe apoyo del médico de la familia sobre cultura alimentaría, el 10% que representa 5 adultos afirman que sí, y el 20% que representa 10 plantean que no.

En cuanto al desarrollo de las actividades que tienen lugar en la comunidad solo el 6% que representa 3 adultos mayores manifestaron que siempre aprecian congruencia en la transmisión de información de las personas que tienen a su cargo la dirección en el consejo popular, de casi siempre el 8% que representa 4 adultos mayores, algunas veces contesto el 14% que representa 7 adultos mayores y el 72% que representa 36 adultos mayores plantean que nunca.

Dentro de las temáticas que mayor tratamiento se le ofrece en la comunidad, el 60% de los encuestados que representa 30 adultos mayores manifiestan que la higiene y elaboración de los alimentos es con la que más se trabaja, solo el 14% que representa 7 adultos mayores plantean que es la necesidad de una dieta balanceada, en cuanto a la necesidad e importancia de práctica del deporte para conservar su salud respondieron 6 adultos mayores que representa el 12%, el 8% que representa 4 encuestado afirman que es al hábitos alimentarios y 6% que representa 3 adultos mayores coinciden que es al tratamiento a enfermedades que más afectan a la tercera edad.

El 90% que representa 45 adultos mayores reconocen como única institución de informarles cómo debe ser su alimentación a los consultorios médicos de la familia. Los mismos manifiestan que las informaciones que le llegan del médico de la familia son a través del recado entre vecinos y 5 adultos mayores que representa el 10% las reciben por teléfonos.

El 100% plantea que el medio más frecuente de recibir las informaciones sobre la cultura alimentaría es mediante los terrenos, que realizan 1 vez o cada 15 días las doctora y enfermeras, añaden que los mismo son de manera rápida, donde le toman la temperatura, y le dan una breve explicación sobre la importancia sobre la higiene y manipulación de los alimentos. Esta vía directa de información es insuficiente para que el adulto mayor logre complementar una correcta cultura alimentaría, beben de poner en prácticas los canales de información que contribuyan a solucionar el problema existente.

El 100% consideran las charlas, conferencias y los talleres, como las vías más efectivas para la adquisición de los conocimientos en cuanto al tema alimentario, pues estas constituyen a que las informaciones que van a recibir provengan de una fuente directa, donde fluya el diálogo entre el emisor y los receptores.

Manifiestan el 100% de los encuestados que los mensajes que reciben a través de las vías de informaciones utilizadas en la comunidad son insuficientes y confusos en ocasiones.

El 90% que representa 45 adultos mayores consideran como otras vías importantes para recibir información son en este caso los anuncios en la radio, talleres, cine debates, charlas, donde puedan participar y compartir criterios y conocimientos, de forma que se haga un uso efectivo de los canales directos e indirectos de la comunicación dentro de la comunidad que contribuyan a elevar el fortalecimiento de la cultura alimentaría en el adulto mayor, donde exista el diálogo, intercambio y la interacción entre ellos y con los miembros de la comunidad.

En cuanto a la participación del adulto mayor en las actividades que se realizan dentro comunidad solo 20 adultos mayores que representa el 40% participan en ocasiones, el 60% que representa 30 adultos mayores manifiestan que no participan en las actividades porque no los motivan, además las actividades no corresponden con su edad.

Del resultado obtenido a través de los instrumentos aplicados se deriva un análisis que se ofrece a continuación:

Los resultados dieron a conocer que el flujo de comunicación que se manifiesta en la comunidad es el horizontal, pues las informaciones se transmiten en un mismo nivel, es decir en la base de la comunidad. Aquí la comunicación favorece las relaciones interpersonales entre los vecinos (adulto mayor), al ser ellos mismos quienes las transmiten por recados enviados del médico de la familia. La presencia de este flujo mejora la el desarrollo comunitario genera la participación de sus miembros, la coordinación, así como la solución de los problemas y conflictos, que se manifiestan en la comunidad.

Existe un insuficiente uso y escaso conocimiento de los canales de información de comunicación, tanto directos, como indirectos, por parte de los especialistas salud, al no reconocer las charlas, conferencias, conversatorios, debates entre otros como vías de información que contribuyan a fortalecer la cultura alimentaría del adulto mayor.

La higiene y elaboración de los alimentos es una de las temáticas más tratadas en la comunidad, a la vez escasa por no tratar el tema en profundidad en las visitas al hogar del adulto mayor, donde es necesario atender a la demás temática pues se consideran importantes para la salud en esta etapa de vida.

Atendiendo a los mensajes que se transmiten no son suficiente para elevar la cultura alimentaría en el adulto mayor, los mismos son insuficientes, no son precisos y carecen de claridad, además de ser incomprensibles para los receptores (adulto mayor).

Las faltas de acciones comunicativas dirigidas al adulto mayor entorpecen la cultura alimentaría de los mismos, al no brindarles vías, soluciones, experiencias, conocimientos en cuanto al tema, además que la comunidad no cuenta con la presencia de un promotor de salud, encargado de propiciar las actividades de salud; afirman que no conocen los medios de comunicación más factibles para comunicar correctamente.

Los adultos mayores no se sienten motivados para participar en las actividades que en ocasiones se realizan en sus CDR, por no sentirse motivados para acudir a las mismas, donde las faltas de acciones comunicativas de los distintos factores de la comunidad entorpecen el fortalecimiento de la cultura alimentaría del adulto mayor, además las actividades que se realizan manifiestan que no son de acorde con su edad y no responden a sus intereses.

Se manifiestan de acuerdo que deben de realizarse charlas, conversatorios, cines debates, talleres donde se profundice el tema de la cultura alimentaría por parte de los especialistas encargados, donde exista el dialogo, la reflexión, intercambio y la interacción entre ellos y con los miembros de la comunidad, participar, relacionarse, aprender y compartir criterios y conocimientos que propicie fomentar el trabajo en el grupo.

Atendiendo a los resultados, el modelo que pone énfasis en los procesos es el que se manifiesta en esta investigación, el adulto mayor desarrollara el rasgo de la personalidad al sentirse parte de la comunidad y con ella interactuar, donde con la puesta en práctica desarrollara su dignidad, autoestima, confianza en sí mismo, además que aumentar su valor como persona.

En sentido general la labor de promoción que se realiza en comunidad no es buena, pues se ven insatisfechas las necesidades culturales de los comunitarios no realizándose debates, conversatorios, charlas educativas; planteando en general que necesitan más intercambios de esta índole, hacer uso continuo de los medios de comunicación. Además la no existencia en la comunidad del promotor de salud exige un mayor protagonismo de los consultorios médicos y organizaciones de masas.

Los adultos mayores de la comunidad no reciben acciones sistemáticas sobre hábitos y prácticas saludables de alimentación por parte de los medios comunitarios, donde se deriva que los adultos no comen correctamente porque desconocen los fundamentos de una alimentación saludable y tienen conceptos, costumbres y creencias muy variadas en torno a este tema. Es por ello que se sustenta que educar en alimentación y nutrición implica una variada información, el desarrollo de motivaciones y la formación de correctos hábitos ya que es un proceso que comienza en edades tempranas de la vida, y llegar a la adultez con una correcta educación nutricional, con la premisa fundamental de lograr una población sana y culta.

La cultura alimentaria en el adulto mayor del consejo popular Guáimaro norte se considera que es insuficiente. Los hábitos dietéticos en la comunidad son deficientes, la dieta no es lo suficientemente balanceada producto a la escasa variedad de alimentos, y elevados precios, y principalmente por la no existencia de hábitos de consumo, además de correctos usos en cuanto a la divulgación sobre el tema alimenticio en la comunidad. De esto se desprende que la mayoría de los comunitarios no consume la cantidad de frutas y vegetales, debido a la falta de conocimiento en la mayoría de los casos.

Tienen un conocimiento acertado de lo que es cultura alimentaria, pero no lo suficientemente abarcador, pues se refieren a esta solo como la necesidad de llevar a cabo una buena higiene y una dieta sana y equilibrada, sin mencionar que es una necesidad de cada individuo y cada sociedad para mejorar la calidad de vida, que se manifiesta en los hábitos, costumbres y formas de hacer en beneficio de la salud individual y colectiva, además de que es trasmitida al hombre de generación en generación y este la adecua a su entorno de vida dentro de la sociedad.

CAPILULO III.

Estrategia de comunicación

III.1 Introducción

La estrategia de comunicación comunitaria que se propone está dirigida al adulto mayor del consejo popular guáimaro norte, con el objetivo de fortalecer su cultura alimentaría. Es importante destacar los esfuerzos que se realicen para lograr una buena comunicación en sentido general ante los comunitarios, donde la investigación realizada es favorable para el adulto mayor pues adquieran conocimientos sobre diferentes alimentos que pueden incluir en sus dietas y así aumenta la calidad de vida de este grupo, logrando actitudes voluntarias mediante acciones colectivas y organizadas.

Uno de los principales elementos de la comunicación comunitaria es la posibilidad que tiene la misma de interiorizar los conocimientos e incorporar diversas habilidades que apoyan al desarrollo social, tanto en lo económico como en lo cultural, además de su contribución al desarrollo de las comunidades y a la potenciación de los valores de la cultura en sus distintas manifestaciones.

La estrategia se proyectará con 24 meses de duración. Para la realización de ella se propone un conjunto de acciones aplicadas desde la comunicación y elaboradas a partir de una estrategia de mensaje, con un enfoque sociocultural a través de acciones comunicativas con los diferente factores del municipio, lo que permite un desarrollo social teniendo en cuenta que dentro de esta investigación se pone de manifiesto la atención que requiere este sector poblacional.

En cada acción se mencionan los responsables, haciendo generar la participación y diálogo entre los actores de la comunidad, donde le sirva a cada público de forma tal que logren cambiar las actitudes y contribuir a la educación alimentaría. Para el diseño de las acciones se tuvieron en cuenta diferentes instituciones, donde habitan un sin número de personas, esto con el objetivo de involucrarlos a partir de sus actitudes en las diferentes acciones para la gestión de los valores.

La autora concibe la estrategia de comunicación como una herramienta de gestión para los responsables de las acciones puestas en práctica de la estrategia, ellos son los responsables de su ejecución, control, evaluación y presupuesto. Estos aspectos serán tratados a continuación de modo muy descriptivo en la presente propuesta.

III.2. Referente

Delegados de las circunscripciones: Representado por el consejo popular como órgano territorial de gobierno. Coordina e integra a los vecinos a través de las reuniones de la circunscripción.

Credo básico: La atención al adulto mayor ha sido una de las preocupaciones del estado cubano, para lograrlo se han trazado estrategias y programas de cultura alimentaría con el objetivo de brindarles la debida atención que este sector de la sociedad necesita y se merece para lograr una vejez sana.

Los distintos temas referentes a cultura alimentaría de los ancianos deben ser conocidos por las personas que habitan en sus comunidades a través de las vías y medios de la comunicación comunitario.

Que todos los miembros de la comunidad tengan conocimiento de cuán importante es llegar a la vejes con una correcta cultura alimentaría, contribuir a establecer una mejor comunicación con respecto a la divulgación del conocimiento sobre hábitos alimenticios, utilizar las herramientas que ofrece la comunicación para así poder realizar acciones encaminadas a contribuir al desarrollo y fortalecimiento alimentario del adulto mayor.

III. 3 Horizonte de planeación.

El tiempo en que estará enmarcada la estrategia será desde Septiembre 2011 hasta septiembre de 2013.

III. 4 Análisis del contexto (ver Anexo 3-A).

No existe estrategia comunicación comunitaria para fortalecer la cultura alimentaria del adulto mayor, Insuficiente uso de las herramientas de la comunicación por parte de los encargados de la misión, existen pocas actividades con el fin de fortalecer la cultura alimentaria del adulto mayor, la falta de protagonismo por parte de las organizaciones de masas.

Existe un gran sentido de pertenencia de la comunidad y un alto grado de sensibilización y espíritu del grupo de apoyo comunitario pero además está la existencias de las herramientas de la comunicación que ayudan a que las soluciones al problema no sean espontáneas, es preocupante la desmotivación del adulto mayor a la participación de las actividades, la mala coordinación y planificación en las actividades a desarrollar, y la escasez de alimentos y sus altos precios.

III. 5 Objetivos estratégicos

  • Que el adulto mayor adquiera conocimientos sobre los temas referidos a la cultura alimentaría.

  • Documentar a la población sobre la actual situación que presenta el adulto mayor en el consejo popular guáimaro norte y cómo se comporta la comunicación con respecto a la divulgación de los conocimientos sobre la cultura alimentaría en el adulto mayor.

  • Demostrar que con una estrategia de comunicación comunitaria sustentada en acciones integradoras, se establecerá una mejor comunicación con respecto a la divulgación de los conocimientos sobre cultura alimentaría en el adulto mayor.

III. 6 Públicos meta

Adulto mayor del consejo popular guáimaro norte.

III. 7 Líneas de acción

1. Comunicativa: está orientada a la población, en función de elevar los niveles de conocimientos sobre cultura alimentaría del adulto mayor y su aplicación continúa mediante un sistema de mensajes.

2. Educativa: Pretende enseñar, modificar y crear hábitos, actitudes y provocar normas que ayuden a promover los conocimientos sobre cultura alimentaría en el adulto mayor.

3. Participativa, por la intencionalidad de generar procesos democráticos y de interacción. Romper con la unidireccionalidad.

III. 8 Estrategia de los mensajes.

1. Los mensajes se elaboraran con un lenguaje asequible de tal manera que pueda llegar a los receptores sin dificultades y se logre el dialogo e interacción entre ellos.

2. Para lograr el objetivo que se persigue con esta estrategia los mensajes emitidos durante el desarrollo de la misma serán cortos, directos y sencillos para una mejor socialización y comprensión del receptor esta medida se recomienda para transmitir un mensaje o desarrollar una acción.

3. Los mensajes deben generar motivación en el adulto para que se concienticen con el problema y aporten sus experiencias en cada acción. Se busca establecer una buena relación comunicativa mediante el dialogo, así como interacción intergrupal e interpersonal.

El slogan o lema a difundir será: Una dieta saludable le ayuda a vivir más.

Este lema expone el sentido y la necesidad de obtener una cultura alimentaria y a su vez impulsa la actuación de los miembros de la comunidad en especial al adulto mayor hacia una vida más sana y prolongada.

Los principales ejes temáticos serán.

1. Dotar de información a todos los integrantes de la comunidad sobre como promover los conocimientos sobre cultura alimentaría en el adulto mayor.

2. Divulgar en la población el concepto cultura alimentaría así como sus indicadores.

3. Promover la necesidad existente de realizar acciones para promover los conocimientos sobre cultura alimentaría en el adulto mayor.

III.9 Plan de acciones de comunicación comunitaria.

Período de tiempo: Septiembre 2011 hasta septiembre de 2013 (2 años). Acciones para propiciar niveles de participación que permitan la adquisición de conocimientos sobre cultura alimentaria en el adulto mayor del consejo popular guáimaro norte.

Partes: 1, 2, 3
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