Es decir, que este satánico tribunal funcionó durante más de seis siglos, llegando en este tiempo a usar la Tiara 79 papas (de los cuales algunos son tenidos como beatos y santos). Pontífices que dieron su visto bueno a todo lo que este tribunal significaba. Una gigantesca prueba de que esta acción de matar "herejes" no fue la decisión aislada de algún Papa o clérigo determinado, sino parte de la doctrina de la Iglesia de Roma. ¿A cuántos mató con este tribunal? Definitivamente, estos Papas "santos" bajaron a la tumba con las manos manchadas de sangre.
La Inquisición o mal llamado Santo Oficio es y será, sin duda alguna, la mayor lacra que ha tenido la Iglesia Católica durante toda su historia. Una de las más claras señales de que su "santidad" deja mucho que desear. Y como ilustración, a continuación anoto los nombres de todos los Papas involucrados en este diabólico acto:
1. Inocencio III (1198-1216) Fundador de la Inquisición.
2. Honorio III (1216-27)
3. Gregorio IX (1227-41)
4. Celestino IV (1241-
5. Inocencio IV (1243-54)
6. Alejandro IV (1254-61)
7. Urbano IV (1261-64)
8. Clemente IV Gil Foulques (1265-68)
9. Gregorio X (1271-76)
10. Inocencio V (1276)
11. Adriano V (1276)
12. Juan XXI (1276-77)
13. Nicolás III (1277-80)
14. Martín IV (1281-85)
15. Honorio IV (1285-87)
16. Nicolás IV (1288-92)
17. Celestino V (1294)
18. Bonifacio VIII (1294-1303)
19. Benedicto XI (1303-04)
20. Clemente V Bertrant de Got (1305-14)
21. Juan XXII (1316-34) Aviñón
22. Benedicto XII (1334-42) Aviñón
23. Clemente VI (1342-52) Aviñón
24. Inocencio VI (1352-62) Aviñón
25. Urbano V (1362-70) Aviñón
26. Gregorio XI (1370-78) Séptimo y último de los papas legítimos de Aviñón.
27. Urbano VI (1378-89) Su elección dio inicio al Cisma de Occidente.
28. Bonifacio IX (1389-1404)
29. Inocencio VII (1404-06)
30. Gregorio XII (1406-17)
31. Martín V (1417-31) Su elección puso fin al Cisma de Occidente.
32. Eugenio IV (1431-47)
33. Nicolás V (1447-55)
34. Clixto III (1455-58)
35. Pío II Eneas Silvio Piccolomini (1458-64)
36. Paulo II (1464-71)
37. Sixto IV Francisco Della Rovera (1471-84)
38. Inocencio VIII (1484-92)
39. Alejandro VI (1492-1503)
40. Pío III (1503)
41. Julio II (1503-13)
42. León X Juan de Médicis (1513-21)
43. Adriano VI (1522-23)
44. Clemente VII Julio de Médicis (1523-34)
45. Paulo III Alejandro Farnesio (1534-49)
46. Julio III (1550-55)
47. Marcelo II (1555)
48. Paulo IV Carafa (1555-59)
49. Pío IV (1559-65)
50. Pío V (1566-72)
51. Gregorio XIII (1572-85)
52. Sixto V Felice Peretti (1585-90)
53. Urbano VII (1590)
54. Gregorio XIV (1590-91)
55. Inocencio IX (1591)
56. Clemente VIII Ippolito Aldobrandini (1592-1605)
57. León XI (1605)
58. Paulo V Borghese (1605-21)
59. Gregorio XV (1621-23)
60. Urbano VIII (1623-44)
61. Inocencio X (1644-55)
62. Alejandro VII (1655-67)
63. Clemente IX (1667-69)
64. Clemente X (1670-76)
65. Inocencio XI (1676-89)
66. Alejandro VIII (1689-91)
67. Inocencio XII (1691-1700)
68. Clemente XI (1700-21)
69. Inocencio XIII (1721-24)
70. Benedicto XIII (1724-30)
71. Clemente XII (1730-40)
72. Benedicto XIV (1740-58)
73. Clemente XIII (1758-69)
74. Clemente XIV Canganelli (1769-74)
75. Pío VI (1775-99)
76. Pío VII (1800-23) Coronó a Napoleón.
77. León XII (1823-29)
78. Pío VIII (1829-30)
79. Gregorio XVI (1831-46) Abolió definitivamente la Inquisición el 15 de julio de 1834.
En 1210, los judíos de Inglaterra fueron maltratados por su fe religiosa por el rey Juan Sin Tierra y sus bienes confiscados para el Tesoro. Durante la guerra civil de Inglaterra de 1262, los hebreos fueron atacados en muchas localidades; sólo en Londres mil quinientos fueron asesinados. En el 1279 todos los judíos de la ciudad fueron arrestados acusados de adulterar la moneda del reino. Doscientos ochenta fueron ejecutados, y el rey Eduardo I ordenó la expulsión de todos los demás, apropiándose de todas sus posesiones. Dieciséis mil judíos partieron a Francia y Bélgica; muchos de ellos perecieron apenas cruzado el río Thames en el que los hacían ahogarse. La readmisión de los judíos a Inglaterra se produjo sólo en 1650.
En Turquía, bajo Selim II 1556-74), el judío José Nasí llegó a ser Duque de Naxos y gobernante virtual de Turquía, y usó todo su poder y riquezas para beneficiar a sus correligionarios, tanto dentro como fuera de sus fronteras. A su muerte, su influencia pasó, parcialmente, a Azkenasi, y también a la judía Esther Kiera, quien desempeñaría un importante papel durante el gobierno de los sultanes Amurates III, Mehmet III y Ahmet I.
El año 1530, los que habían sido expulsados de España se refugiaron en Holanda y publicarían una traducción del Antiguo Testamento. Las primeras congregaciones hebreas en Holanda, de 1593 y 1598, en Ámsterdam, fueron aceptadas por las autoridades de la ciudad. Tiempos estos en que los holandeses estaban en plena sublevación contra la dominación española. Allí pudieron los judíos celebrar sus ritos y comercializar en condiciones de plena libertad. Gracias a la llegada de nuevos inmigrantes judíos, pudieron formar comunidades en Hamburgo, Guyana y Brasil. Fue aquí en Ámsterdam donde se originó un movimiento para el restablecimiento legal de los judíos en Inglaterra.
En 1648, los hebreos de Polonia empezaron a ser perseguidos por los cosacos de Ucrania, que invadieron Polonia. Seguidamente sufrieron las desastrosas invasiones de los rusos y los suecos. Se estima que, en diez años (1648-58), más de 200.000 judíos fueron exterminados.
Desde el IV Concilio de Letrán, en Roma (1215), los judíos fueron obligados a llevar un distintivo en sus vestiduras, además de ser recluidos en barrios aislados (ghettos) y sufrir todo tipo de discriminación. El primero fue el de Venecia (1516), luego se crearon otros como el de Roma, el de la isla Tiberina y el de la isla del Tíber. Las matanzas masivas de éstos iniciáronse a raíz de las cruzadas y ensangrentaron a Europa intermitentemente. En 1532, la infundada acusación de asesinar niños trajo como consecuencia el exterminio de lo judíos de Roma. En 1541, Nápoles los desterró; Génova en 1550; Milán lo haría en 1597. En 1555, Pablo IV restableció las antiguas leyes contra los judíos y los confinó en un ghetto, además de obligarlos a llevar un distintivo judío. En 1569, Pío IV los expulsó de los Estados Pontificios.
A partir del siglo VI, los judíos en Francia empezaron a ser perseguidos. En 1254, casi todos habían sido desterrados de sus dominios por San Luís. El rey Felipe IV en 1306 los hizo arrestar a todo en un mismo día y les ordenó abandonar el país en el plazo de un mes, apoderándose de los sus bienes. Cien mil lo hicieron y se asentaron en comarcas vecinas (y los que eventualmente regresaron, volvieron a ser expulsados en 1394, no siendo oficialmente readmitidos sino unos cuatro siglos después). En 1309 fue atacada la judería de Palma de Mallorca; en 1320 se produjo contra ellos una sangrienta persecución por parte de unos 40.000 pastoreaux, liderados por un monje benedictino, que destruyeron ciento veinte comunidades. Ocho años después le tocó el turno a diversas juderías navarras. Con el telón de fondo de la epidemia de la peste negra, una plaga que mató alrededor de un tercio de la población de Europa entre 1348 y 1353 (millones de personas), fueron asaltadas varias juderías catalanas, y también andaluzas. De igual manera, por esta peste negra hubo matanzas de judíos en otros países europeos, especialmente en Alemania, Francia e Italia. Toda esta asesina represión llegó a su fin con los decretos de la Revolución Francesa. En 1790, la Asamblea Nacional Francesa otorgó la ciudadanía de los judíos sefardíes y, en 1791, les concedió plenos derechos civiles a todos. En 1806, Napoleón convocó una asamblea de judíos notables, y al año siguiente se formó el Gran Sanedrín. Estos decretos produjeron que paulatinamente la libertad religiosa y civil del pueblo hebreo fuera reconocida en todo el planeta.
Enrique II (1002-24) expulsó de Maguncia a los judíos que no quisieron ser bautizados. Entre mayo y julio de 1096, los Cruzados protagonizaron sangrientas escenas contra los hebreos de Tréveris, Works, Maguncia, Colonia y otras ciudades renanas. La segunda cruzada trajo como consecuencia también atrocidades en Colonia, Maguncia, Works, Spira y Estrasburgo. En Gottingen, en 1298, un noble llamado Rindfleisch incitó a las masas, que quemaron en la hoguera a la comunidad íntegra. Luego sus Judenschachters (asesinos de judíos) atravesaron Austria y Alemania saqueando, incendiando y asesinando judíos a su paso. Ciento cuarenta comunidades fueron diezmadas; cien mil víctimas asesinadas. La situación de los judíos se agravó con las revueltas y las guerras civiles durante Luís IV. En el 1336 y 1337, John Zimberlin, un alemán iluminado que había "recibido un llamado para vengar la muerte de Cristo matando judíos" lideró a cinco mil enardecidos armados, que usaban bandas de cuero en los brazos (los Armleder) y se lanzaron al asesinato de éstos en Alsacia. En Ribeauville fueron masacrados mil quinientos. Por su parte, el emperador Carlos IV (1355-78) ofreció inmunidad a los que atacaran judíos, otorgándoles sus propiedades a los favoritos de la corte (incluso antes de que una matanza tuviera lugar). En 1426, los de Colonia fueron expulsados, y cinco años más tarde, los de varias ciudades del sur de Alemania, quemados bajo la ya vieja y falsa acusación de delitos de sangre. El emperador Maximiliano ordenó que todos los libros hebreos fueran quemados, llegando sólo a salvarse el Talmud. El mismo Lutero, hacia el fin de su vida, fue el mayor oponente de los judíos, y el causante de que fueran expulsados por los príncipes protestantes.
En la Rusia zarista, Catalina I (1727) adoptó medidas activas contra los judíos de Ucrania y desterró a la población completa. Ana Ivanovna (1739) decretó su expulsión de la Pequeña Rusia, e Isabel (1741-62) también los oprimió. No obstante, su sucesora Catalina II llegó a decretar la libertad religiosa y civil de los hebreos de su reino. A principios del siglo XIX, en el Congreso de Viena, los hebreos pidieron la emancipación total. No obstante, en vez de eso, en agosto de 1819 bajo la consigna ¡Hep!, ¡Hep! fueron atacados fúricamente Wurzburg, Francfort, Leipzig, Darmstadt y Dresde. Pasando de allí a otras latitudes. Luego de la muerte del zar Alejandro II (1881), su sucesor Alejandro III los acusó de este crimen, y entonces miles de hogares fueron destruidos, muchas familias se vieron condenadas a la pobreza más extrema, y muchísimas judías fueron ultrajadas. Este pogromo (matanza de judíos) fue fomentado por el ministro del Interior, conde Nikolái Ignátiev, quien así mismo promulgó las discriminatorias e infamantes Leyes de Mayo, produciéndose luego disturbios contra los judíos en 1896, 1897 y 1899, que culminaron con las masacres de Kishiniov, Hotel, etcétera. Una oleada aún más sangrienta se desencadenó en el periodo 1903-06, durante tres días dejando un saldo de unos 2.000 muertos y muchos heridos. El primero sucedió en la pascua de 1903, en Kishiner. Esta matanza fue dirigida por los sacerdotes, y el lema general era "Matad a los judíos". Esta acción fue apoyada por la policía secreta del zarismo, la Ojrana y por otra organización asesina llamada las Centurias Negras. Llegaron incluso a destrozar a los bebés El segundo pogromo fue en junio de 1906, en Bialystok, y en septiembre en Siedice, con la ayuda de oficiales y soldados rusos En Odesa sucedieron matanzas desde 1859 hasta 1905. Este odio hacia los judíos nacía del llamado "Protocolos de Sion", publicado por vez primera en Rusia, donde presuntamente estaban los planes con los que los judíos se apoderarían del mundo. Toda una gran mentira para justificar todo cuanto se hacía contra el pueblo hebreo.
Durante la Revolución rusa de 1917 y la posterior guerra civil, se produjeron numerosos pogromos. Se estima que decenas de miles de judíos fueron asesinados alevosamente, superando los 300.000 el número de niños huérfanos. Entre 1880 y 1913 unos dos millones pudieron emigrar del Imperio ruso, principalmente hacia Estados Unidos. Por demás cruel fue la muerte de los hebreos y de todos los demás afectados por el Holodomor ("Terror-Hambruna en Ucrania" y "El hambre-genocidio en Ucrania"), provocado en el bienio 1932-33 por el gobierno de Stalyn, con el fin de someter al campesinado que se oponía a sus políticas. De acuerdo con la decisión del Tribunal de Kiev, las pérdidas demográficas provocadas por esta hambruna ascendieron a la cifra de 10.000.000. De acuerdo a las estadísticas el 1,4% eran judíos. Lo cual define una cantidad de 140.000.
En 1280, Alfonso X impone un fuerte tributo a las aljamas de Castilla y de León. Para 1391 se verifica una oleada de ataques contra las de Castilla y Aragón, que provoca la destrucción de las juderías de ciudades como Sevilla, Valencia y Barcelona. Todo como consecuencia de las soflamas antijudías del clérigo Ferrán Martínez. En la judería de Sevilla fueron linchados unos 4.000 hebreos entre hombres, mujeres y niños. En 1492, los reyes católicos de España decretaron que los sefarditas (nombre dado a los judíos en la Península Ibérica) que no se convirtieran al catolicismo debían abandonar el reino. Así salieron dispersándose por otras partes de Europa, el Mediterráneo y África, entonces bajo el dominio otomano. En las ciudades portuarias africanas, donde se les permitió desembarcar, quedaron diezmados por las plagas y el hambre. Estos afligidos hebreos conservaron como lengua el judeoespañol, que es un dialecto del castellano del siglo XV. Considérese que después de 1492 no había judíos abiertamente identificados a lo largo y ancho de toda la costa europea del Atlántico Norte, durante un período en el que allí estaba el centro del mundo.
En Portugal, Juan II los toleró unos ocho meses, luego los esclavizó pero, finalmente, en diciembre de 1496 el rey Emmanuel firmó un decreto expulsando a todos aquellos que hubieran rechazado el bautismo.
El ucraniano Bohdan Chmielnicky, jefe de los cosacos, fue eventualmente olvidado al perder su rol de peor genocida judeofóbico. Combatió la dominación polaca de su país asesinando también a más de cien mil judíos. Entre los años 1648-1656, muchas atrocidades fueron cometidas en su contra. Bohdan los usó como chivos expiatorios y trató de erradicarlos de Ucrania. Sus hombres los enterraban vivos, los cortaban en pedazos y los obligaban a matarse unos a otros. Este pogromo es considerado uno de los eventos más traumáticos en su historia.
También fueron los hebreos sometidos por el Ku Klux Klan (KKK), sociedad secreta norteamericana, política y religiosa, creada después de la Guerra de Secesión estadounidense (24 de diciembre de 1865). Formada por varias organizaciones de extrema derecha. Tradicional y violentamente xenófoba, especialmente contra los negros y los judíos, que promueve la supremacía de la raza blanca, la homofobia, el antisemitismo, el racismo, el anticomunismo y el anticatolicismo. Sociedad esta suprimida en 1870, pero que revivió en 1915.
Esta situación de discriminación racial-social-moral hacia los hebreos llegó a su clímax a mediados del siglo XX, durante la Segunda Guerra Mundial, cuando sucedió el mayor de todos los genocidios cometidos.
El Holocausto o Shoah
Conócese así el proceso de exterminio llevado a cabo por orden del caudillo del III Reich, Adolfo Hitler entre 1939 y 1945 en Alemania y en los territorios ocupados. Ya en 1922, este hombre proclamó que tan pronto alcanzara el poder, ahorcaría a cada judío de Munich, y luego de todas las otras ciudades hasta que Alemania quedara libre de ellos.
Leyes de Núremberg: Fueron una serie leyes de carácter racial antisemita, adoptadas por unanimidad el 15 de septiembre de 1935 durante el séptimo congreso anual del NSDAP (Reichsparteitag) celebrado en Núremberg. Fueron redactadas por el jurista y político Wilhelm Frick en su cargo de ministro del Interior del Reich, bajo la anuencia de Hitler y Julius Streicher. Dichas leyes impedían que el colectivo judío (llamado en esas latitudes Askenazíe) se relacionara con el pueblo alemán. Fueron el comienzo de la discriminación y persecución de la comunidad hebrea en Alemania. Julius Streicher usó su periódico Der Seturner para enseñarle a los alemanes que los judíos era lo peor que había y que debían de ser destruidos, tal como lo explica Hitler en su libro Mein Kampf (publicado en 1925 y 1928).
Las Leyes de Núremberg definían a un judío si presentaba algunas características:
Tener tres abuelos judíos y uno alemán lo consideraba 100% judío.
Tener dos abuelos judíos y dos alemanes lo consideraba mestizo judío al 50%.
Tener un abuelo judío lo consideraba Mischlinge o mestizo al 25%.
Abrazar la religión judía sin ser judío de nacimiento era considerado judío al 100% (podían ser pastores católicos, feligreses de sinagoga, etcétera).
Casarse o mantener relaciones extramatrimoniales con una persona judía era prohibido y él o la cónyuge alemán podía ser considerado como judío de primer grado. Esto estaba penalizado con prisión.
Los judíos que se hubieran convertido al "cristianismo" (luteranos, católicos o protestantes) eran considerados judíos de todos modos por su origen.
Estas leyes estaban divididas en dos grupos: "Ley para la protección de la sangre y el honor alemanes", la cual prohibía el matrimonio entre judíos y alemanes, practicar el comercio, trabajar con alemanes, y más; y "Ley de la ciudadanía del Reich", que negaba a los judíos el título de "ciudadanos del Reich", confiriéndoles sólo el de "ciudadanos nacionales".
El año 1934, Hitler asumió el poder total, estableciendo lo que ilusamente él denominó "el III Reich de los mil años". Al siguiente año se inició el proceso de exterminio del pueblo hebreo, conocido de varias formas: "Tratamiento especial", "Acción especial", "Reinstalación", "Acción ejecutiva", "Comunidades judías autónomas", "Transporte", "Extirpación". Empresa confiada por el Führer al Reischsfuhrerss Henry Himmler y, posteriormente, a Reinhard Tristan Eugene Heydrich (conocido en el partido como "el diabólico y joven dios de la muerte"), jefe de la Gestapo y del Servicio de Seguridad (SS). Este hombre pensaba que eliminando a los judíos se solucionarían una serie de problemas: políticos, sociales, económicos, militares y, sobre todo, raciales. El otro año comenzó en Berlín el estrangulamiento de este pueblo: les prohibieron asistir a los colegios de alemanes; bloqueos, expulsiones, expropiaciones. Se les acusaba de traición a Alemania en la Primera Guerra Mundial, su control de los bancos y del capital extranjero y su influencia sobre el bolchevismo. Se les obligó a que todos sus documentos y pasaportes llevaran una "J"; prohibición de portar armas, y llevar en el brazo una estrella amarilla de seis puntas, so pena de ser catalogados como ofensores al Estado. El recrudecimiento de la denominada "Santa Cruzada" (llamada así de manera irónica por los altos funcionarios nazi) comenzó en noviembre de 1938, con la llamada "noche de los cristales rotos" (Kristallnacht), en la que cuadrillas nazi rompieron los cristales de los escaparates de los comercios judíos, incendiando algunos. A quienes se resistieron los golpearon hasta matarlos, mientras que las cuadrillas sedientas de sangre cantaban la canción "Horst Wessel". El resultado final de esta acción fue de 36 muertes, 70 sinagogas incendiadas, destrucción de más de 800 negocios y tiendas de propiedad judía, y las detenciones de más de 30.000 de ellos, que fueron llevados a Buchenwald, el cual a partir de ese momento se convirtió en una verdadera tragedia.
El día 30 de noviembre de ese mismo año, comenzaron las deportaciones a Polonia. Un millar, en su mayoría viejos y pobres, al no quererlos en Polonia quedarían flotando en tierra de nadie, entre Alemania y Polonia. Eran tiempos en que el espíritu antisemítico estaba de moda, traducido en varios movimientos antijudíos: la "Croix de feu" (Francia), la "Cruz y la Flecha" (Rumania), además de varios partidos fascistas indígenas en Hungría, Eslovaquia y Croacia.
A fines de 1939 (ya iniciada la Segunda Gran Guerra), Alemania invadió Polonia, comenzando así la represión nazi contra los hebreos de esa nación. Los acorralaban dentro de las sinagogas y les prendían fuego (tal como se hacía en Berlín). Por supuesto, que las violaciones de judías se sucedían con frecuencia, si bien quienes las cometían se arriesgaban a ser enjuiciados por corrupción racial. Durante la ocupación, los nazi habían instalado muchos burdeles para satisfacer sus bajos instintos, lenocinios estos que alimentaban con mujeres polacas y rusas, no judías por eso de la corrupción racial. Hitler odiaba a los polacos tanto como a los judíos y había decidido convertirlos también en esclavos sólo un peldaño más arriba de los judíos. En Bielsko, a las mujeres judías las despojaban de sus ropas y las obligaban a bailar desnudas por las calles, para diversión de los polacos y miembros de la SS (conocidos como los "Cuervos Negros"). La tendencia asesina en los nazi era algo de lo más normal, existiendo en esos tiempos el proverbio alemán de que "uno no es hombre mientras no haya matado a un judío". Según el plan de Heydrich, Polonia sería un vertedero para los hebreos de Europa; no sólo los de Polonia, sino también los trasladados de Alemania, Austria y Checoslovaquia. Los reunirían en lugares como Lublin o Varsovia, donde los ubicarían en lugares aislados, que serían administrados por los más ancianos e influyentes de la comunidad hebrea. Así se organizó un gran ghetto en la capital.
El ghetto de Varsovia: Era un barrio asqueroso y deprimente rodeado por una cerca de 18 kilómetros, construido en la capital polonesa. Una ciudad dentro de otra ciudad. En su interior, las gentes, especialmente los niños, morían de hambre o de enfermedades como el tifus. En diciembre de ese 1939, se formaron los primeros Consejos Judíos de Varsovia (Juderant), los cuales trataban de hacer menos dolorosa la existencia de los hebreos apiñados en el ghetto. Estos Consejos eran supervisados por la Policía del ghetto. Lo mismo cabía decir de los demás ghettos. Los trenes llegaban a diario al ghetto de Varsovia con vagones de ganado repletos de judíos pobres, famélicos y temerosos. Mucha gente moría en el camino. Los niños se asfixiaban, los pasajeros nadaban en sus propios excrementos. No había agua; sólo el paquete de alimentos que se les permitía llevar consigo. Y, claro está, los látigos y las porras de los verdugos. Llegaron a haber unos 500.000 judíos dentro del ghetto, procedentes de varias partes de Europa, en un área para sólo 25.000 personas. Otros ghettos de menor importancia, pero tan crueles como éste se instalaron allí en suelo polaco, y en otras naciones ocupadas por las tropas alemanas, en Dvinsk (Letonia), Berdichev, Rovno y Zhitomir (Ucrania)…, hasta casi cincuenta.
Algunos jóvenes de los movimientos juveniles judíos salían subrepticiamente del ghetto a buscar comida, para aliviar así el sufrimiento de la gente. También salían niños huyendo, que por la misericordia de Dios eran rescatados por gente humilde, que sabiendo la suerte que corrían decidían cuidarlos. Algunos directores de los consejos judíos resistieron negándose a entregar a sus hermanos para su deportación. Por su parte, los hebreos en éste y otros ghettos y los campos crearon instituciones culturales y como pudieron continuaron sus prácticas religiosas. Todo con el fin de preservar su vida e identidad como pueblo.
De igual manera, a partir de junio de 1941 con la expansión alemana en los países vecinos durante la "Operación Barbarroja", se comenzaron a usar los campos de prisioneros en otras latitudes, y se crearían otros que pronto pasarían a ser campos de exterminio. Estos fatídicos campos, teniendo algunos de ellos otros subcampos, funcionarían hasta que las tropas aliadas los liberaran entre 1944 y 1945. El objetivo nazi era aniquilar polacos, comunistas, así como cualquier persona que no fuera deseada por ellos, y principalmente hebreos. Por lo que la mayoría de los exterminados eran estos últimos. Algunos de estos campos fueron los siguientes:
ALEMANIA
Dachau: Estaba situado en Munich (1933-1945). Fueron asesinadas 41.500 personas, además de otros muchos miles que murieron víctimas de las pésimas condiciones de vida.
Sachsenhausen: Ubicado en la población de Oranienburg (1936-1945). Perecieron 100.000 personas.
Buchenwald: Instalado en la colina de Ettersberg, cerca de la ciudad de Weimar (1937-1945). Se estima que murieron unas 56.000 personas por "propósitos científicos".
Flossenbürg: Estaba ubicado en Baviera (1938-1945). Unos 30.000 prisioneros murieron de cansancio, hambre y torturas.
Bergen-Belsen: Situado en el estado de Baja Sajonia (1939-1945). Unos 700.000 muertos.
Neuengamme: Instalado en Hamburgo (1938-1945). 56.000 víctimas.
Ravensbrück: Estaba situado a 90 km. al norte de Berlín (1939-1945). A finales de 1944 las SS instalaron una cámara de gas. Las víctimas se estiman en unas 92.000.
Arbeitsdorf: Ubicado en Fallersleben (1940-1942). Unos 600 muertos.
Hinzert: Estaba instalado en Renania-Palatinado (1940-1945). Albergó 13.600 prisioneros. Hubo 300 asesinados.
Mittelbau-Dora: Situado al lado del pueblo de Nordhausen, en Turingia. Campo de trabajo y la mayor fabrica de armamento (1943-1945).
Ohrdruf: Estaba ubicado en Ohrdruf (1944-1945). Fueron matadas 11.700 personas.
POLONIA
Stutthof: Instalado en Sztutowo (1939-1945). Más de 85.000 personas fallecieron.
Soldau: Estaba ubicado en Dzialdowo (1939-1945). Fueron ahogados con el gas de un camión 1.558 pacientes entre mayo y junio de 1940. En total, 13.000 de 30.000 prisioneros fueron asesinados.
Auschwitz-Birkenau: Situado a unos 43 km. al oeste de Cracovia (1940-1945). Recibía judíos de Alemania, Francia y Holanda. Fue el campo más temido y el orgullo de los nazi. Se estiman las víctimas en 2.500.000.
Gross-Rosen: Instalado en Gross-Rosen, Rogoznica. Al principio era un campo satélite de Sachsenhausen, pero el 1 de mayo de 1941 comenzó a funcionar independientemente. El 14 de febrero de 1945 fue liberado. Perecieron unas 40.000 personas.
Majdanek: Estaba situado a 4 km. de la ciudad de Lublin (1941-1944). Se estima que murieron unas 300.000 víctimas.
Chelmno: Ubicado a 70 km. de Lodz. El primero en utilizar el gas venenoso como método de aniquilación. Comenzó a operar el 7 de diciembre de 1941 y en abril de 1943 fue cerrado y su crematorio destruido. En abril de 1944 fue nuevamente abierto y cerrado otra vez el 17 de enero del siguiente año. Las víctimas eran encerradas en unos autobuses sellados (que tenían un letrero que rezaba: "AUTOBÚS DEL GHETTO") y hacíanlas respirar el monóxido mientras el vehículo avanzaba en movimiento. Al menos 152.000 personas fueron asesinadas.
Belzec: Estaba instalado a 100 millas en el sudeste de Varsovia. Fue el primer campo de exterminio construido por los nazi (1942-1942). Aquí murieron entre 500.000 y 600.000. Solo dos personas sobrevivieron
Sobibor: Construido al norte de Lublin (1942-1943). Poco antes, un prisionero de guerra soviético llamado Alexander Pechersky dirigió la mayor huida de presos de un campo de concentración en la Segunda Guerra Mundial. Lograron fugarse unas cuatrocientas personas. Aunque quizá sólo menos de la mitad sobrevivió. Se calcula que hasta 260.000 personas murieron.
Plaszow: Instalado en Cracovia (1942-1945). Fueron muchos miles las víctimas por las torturas, el cansancio, el hambre y las enfermedades.
Treblinka: Ubicado en la aldea del mismo nombre. Activo desde el 22 de julio de 1942 hasta el 19 de octubre de 1943, tras una revolución de los prisioneros donde destruyeron gran parte de las cámaras de gas y mataron a varios guardas SS. A diferencia de otros campos, en un principio Treblinka no contaba con barracones y la esperanza de vida era de 1 hora y media. Llegaron a morir decenas de miles por semestre.
FRANCIA
Vernet d'Ariège: Ubicado en los pirineos franceses, entre los pueblos de Le Vernet y Saverdun (1939-1944). Principalmente para los exiliados españoles que huían del régimen franquista y más tarde, para cualquier extranjero sospechoso y también judíos.
Les Miles: Estaba situado en el departamento de Bouches-du-Rhone (1939-1945). Usado para internar hebreos antes de entregarlos a los nazi, incluyendo niños.
Natzweiler-Struthof: Ubicado en Struthof, en la región de Alsacia (1941-1944). Fueron muertas unas 25.000 personas.
AUSTRIA
Mauthausen-Gusen: Situado en Mauthausen (1938-1945). Fue apodado el campo de los españoles, por la gran cantidad de presos españoles exiliados. Hubo aquí entre 100.000 y 300.000 víctimas mortales, la mayoría hebreos.
BÉLGICA
Breendonk: Ubicado en la antigua carretera que unía Bruselas con Amberes (1940-1944). Los presos fueron transportados al campo Vught (Holanda). El 3 de septiembre de 1944 las tropas aliadas entraron y lo encontraron totalmente vacío. Murieron unas 300 personas fusiladas o ahorcadas.
PAÍSES BAJOS
Westerbork: Ubicado en el noreste de Holanda (1940-1945). Hubo unos 100.000 judíos.
Amersfoort: Instalado en la ciudad del mismo nombre, en la región central (1941-1945). Desde aquí enviaban prisioneros a Buchelwald, Mauthausen y Neuengamme, Auschwitz, Sobibor y Theresienstadt.
Vugh: Construido en la ciudad del mismo nombre (1942-1944). Contuvo unos 30.000 presos que eran enviados a otros campos.
MOLDAVIA
Bogdanovka: Instalado en Transnistria (1941). Más de 40.000 muertos.
SERBIA
Crveni Krst: Irónicamente llamado campo de concentración de la cruz roja. Ubicado en Crveni Krst, una zona industrial de Niš (1941-1944). Fueron ejecutadas unas 12.000 personas.
Sajmište: Estaba situado a las afueras de Belgrado (1941-1944). Unas 100.000 víctimas.
Banjica: También ubicado en Belgrado (1941-1944). Aquí fueron recluidos unos 24.000 presos.
NORUEGA
Grini: Estaba situado a las afueras de Oslo (1941-1945). Según archivos, murieron asesinados 2.091 prisioneros bajo torturas de la Gestapo.
CROACIA
Jasenovac: Estaba ubicado a 100 km. al sureste de Zagreb (1941-1945). Hubo alrededor de 600.000 personas asesinadas.
LETONIA
Salaspils: Ubicado a 18 kilómetros al sureste de Riga (1941-1944). Entre 2.000 y 3.000 personas murieron, en su gran mayoría niños.
BIELORRUSIA
Minsk: Instalado en Minsk (la capital bielorrusa). (1941-1944). Entre noviembre de 1941 y octubre de 1942 fueron transportados hasta aquí 35.442 judíos de Alemania y del protectorado de Bohemia y de Moravia. En febrero de 1942, los hombres del coronel Nebe habían asesinado con armas de fuego a unos 45.000 judíos. Por todo serían más de 100.000 muertos.
Maly Trostenets: 1942-1943. Se estima el número de víctimas en 206 mil.
ITALIA
Risiera di San Sabba: Situado en la ciudad de Trieste. Se considera el único campo de concentración de Italia (1943-1945). Fueron ejecutados entre 3.000 y 5.000 presos.
ESTONIA
Vaivara: Instalado en el municipio de mismo nombre (1943-1944). El más grande de todos los que establecieron los nazi. Llegó a contener de una sola vez hasta 20.000 prisioneros de Vilna, Kovno, Letonia, Polonia y Hungría. Perdieron la vida 950 personas. Al ser evacuado, 2.466 internos fueron llevados a los campos de Kivioli, Ereda, Johvi, Golfields, Klooga y Lagedi. Durante el camino murió la décima parte por la aplicación de la llamada "selección del diez por ciento". De cada cien mataban diez.
CHECOSLOVAQUIA
Theresienstadt: Estaba ubicado a 46 km. de Praga. En principio fue un ghetto, después un campo de transito para acabar siendo un campo de concentración. Recibía judíos de Alemania, Austria, Países Bajos, Luxemburgo, Dinamarca, Eslovaquia y Hungría (1941-1945). Decenas de miles (la cuarta parte) fueron asesinadas en este campo. Al ser liberado fueron rescatados 17.241 sobrevivientes.
Pero la enajenada mente de Hitler no se conformó con esto, sino que en busca de "perfeccionar" la raza aria y reorientar la economía, también en 1939 ordenó la llamada Aktion T4, que consistía en aplicar la eutanasia a todas aquellas personas con discapacidad, indigentes y con problemas mentales y sexuales, tenidas como personas inferiores a las demás. Para esto se utilizaron seis sanatorios en Alemania y en la Austria anexionada: Grafeneck-Wurtemberg, Brandenburg a.d. Saale, Hadamar bei Limburg, Hartheim bein Linz, Sonnenstein bei Pirna y Bernburg. Oficialmente este programa se eliminó en 1941, pero en la práctica se continuó aplicando, como se vería en los campos de la muerte.
En un principio, en los campos fusilaban a los judíos, a quienes obligaban antes a excavar una fosa. Luego los echaban dentro de ésta. Pero en vista de la gran cantidad de balas que gastaban, decidieron asesinarlos uno por uno con un tiro en la nuca. Este método tampoco los satisfizo y comenzaron a envenenarlos con monóxido de carbono. Este procedimiento de asesinar personas con gas, ya antes en el año 211 a. C. lo había concebido el caudillo púnico Aníbal, al recomendar a sus aliados que encerraran a todos los habitantes de la ciudad de Capua en los baños públicos y los envenenaran con el gas del carbón al rojo vivo. Los primeros ensayos se hicieron en Hadamar y en el campo de Chelmno
En el mes de marzo de 1941, el Führer promulgó la llamada "Orden de Comisario", que significaba una invasión a Rusia. Se trataba de practicar una razzia en la Unión Soviética. Tarea esta que fue encomendada a Heydrich. Este dividió el territorio en cuatro jurisdicciones que se entregarían en manos de cuatro Einsatzgruppen a cuyos comandantes se designarían con las letras A, B, C, y D y quienes serían los responsables de las "limpiezas" del territorio. Estos Einsatzgruppen o Grupos de Acción (compuestos por unos mil hombres cada uno), eran los encargados de cumplir las acciones militares y de exterminio del régimen y lo conformaban individuos ucranianos, lituanos y bálticos, muchos de ellos estafadores y degenerados sin escrúpulos para asesinar a quien fuera. Eran alistados en la SS, la SD y la Policía Judicial.
__El grupo A, era comandado por Adolf Eichmann (encargado de Viena, Austria).
__El grupo B, dirigido por el coronel Artur Nebe (ocupado de Moscú).
__El grupo C, a cargo del coronel Paúl Blobel. Importante dentro de la "Gran Cruzada" por ser inventor de proyectos de exterminio. Su frase favorita era: "Una vez has matado a diez judíos, los cien siguientes resultan más fáciles, y los mil siguientes son ya pan comido".
__El grupo D, dirigido por el coronel y abogado Otto Ohlendorf (encargado de Crimea), tristemente famoso por ser el inventor del llamado "método sardina", que consistía en tender sobre el fondo de la fosa a un grupo de judíos, matarlos a tiros y luego colocar sobre éstos otro grupo en sentido contrario (pies con cabeza), y así sucesivamente, de modo de ahorrar el mayor espacio posible.
Ese mismo año se implementó el sistema llamado "noche y niebla", cuyo objeto era desaparecer todo rastro de las matanzas que se efectuaran. En marzo de 1942, se comenzó a utilizar el monóxido de carbono para envenenar a los hebreos en los galpones del campo de Belzec, en Lublin. Para el mes de junio, se prepararon otros centros similares (campos con galpones de gaseo) en Treblinka, Auschzwich y Sobibor. El proceso duraba unos 10 minutos. En los alrededores de los campos se sentía el hedor a cadáveres. Si bien una vez dentro de las fosas (que, por lo general, tenían 2,5 metros de profundidad), los cadáveres eran cubiertos por unas palas mecánicas, era mucho el hedor que se escapaba de la tierra. Ante este problema (que amenazaba por revelar el "secreto" de los nazi), en mayo, el coronel Blobel desenterró los cuerpos del campo de Babi Yar, y los incineró en una gran pira alimentada por grandes cantidades de gasolina. El día 29 un suceso estremeció al partido nazi: el gran Reinhard Heydrich (instrumento de Hitler para consumar la "Solución final de la cuestión judía"), fue herido gravemente por una bomba que lanzaron debajo de su coche. Seis días después falleció en medio de crueles sufrimientos. Se corrió el rumor de que antes de fallecer se arrepintió por todo lo que había hecho. Fue sustituido por Ernest Kaltenbrunner (el "Gran Oso"). Por esta muerte, Himmler mandó a ejecutar a 1.300 personas en Praga y Brno. Y una aldea llamada Lidice fue arrasada, siendo sus habitantes muertos o hechos presos (muertos potenciales). Por otra parte, Goebbels mandó fusilar en Berlín a 152 rehenes judíos, continuando esta ola de terror entre los civiles polacos por todo el tiempo que duró la ocupación.
En vista de lo lacerados que quedaban los cadáveres (lo cual impedía la extracción de dientes de oro y el afeitado), se buscó un gas mucho más letal y rápido. Para lo cual se comisionó al abogado Erick Dorf (ex ayudante de Heydrich), el cual contactó con la firma "Tesch & Stabenow" de Hamburgo. Su director, un tal Bruno Tesch, le ofreció un agente llamado Zyklon B. Se trataba de un pesticida de cristales de color azulado formados en gran parte de ácido cianhídrico de fácil manejo y drásticos resultados. Sólo 4 gramos eran suficientes para matar a una persona. Así, una tonelada bastaba para aniquilar a 250.000. Los efectos eran los siguientes: las víctimas sufrían una fuerte sofocación, luego se descontrolaban sus esfínteres por la anoxia. Como consecuencia, se orinaban y defecaban sin control. Luego venía la muerte cerebral, el coma y la muerte entre 20 y 25 minutos después de aspirado el veneno. Este proceso duraba el doble que el anterior, pero para ellos era más adecuado. En principio, a inicios de 1940 se usó en el campo de Buchenwald, sobre unos 250 niños gitanos. Después, el 3 de septiembre se uso en Auschwitz con 600 prisioneros de guerra soviéticos.
Por supuesto, que el Gobierno nazi cometía ese exterminio ocultamente, por lo que los judíos lo ignoraban. Les hacían creer que los trasladarían a "campos de reinstalación". A pesar de las matanzas que cometían entre ellos en las calles __al ser esto parte del juicio de Dios__, seguían creyendo lo que les decían. Otros, los menos, como podían intentaban huir; pero pocos lo lograban. En los Balcanes y en Europa Oriental no les prestaban ayuda, por estar muy enraizado el sentimiento antijudío. Mussolini tampoco los ayudaba. La Profecía contra los hebreos se cumplía inexorablemente. Por su parte, Franco, al ser neutral dejó entrar a algunos subrepticiamente. Y por si fuera poco, el clero (dirigido por Pío XII), con su silencio aprobó el Holocausto, siendo escasísimo el número de clérigos que protestaron. Y para engañar a la opinión pública se rodó una película "El Fuhrer regala una ciudad a los judíos". Luego otra película en febrero de 1944 bajo la dirección de Kurt Gerron. Al finalizar el rodaje, la mayoría de los actores, incluyendo al director Gerron fueron deportados a Auschwitz, donde fueron gaseados. En los campos de exterminio, algunos artistas pintaron lo que se conoció como la "propaganda del horror", cuadros que reflejaban la miseria y la tragedia que se vivía, tales como: "Rostros de ghetto", que representaba una masa de niños hambrientos, de ojos hundidos, alargando sus escudillas, suplicando les dieran más comida; "Esperando el final", "Castigo de rutina", "La raza superior", "Niños del ghetto", "Pasión lista", "Transporte al Este", y más. Pinturas estas que, a pesar de la estricta vigilancia alemana, salieron de los campos al exterior, y con el tiempo descubrirían el "secreto" de los nazi.
Ese 1942 empezó a formarse en el ghetto de Varsovia una fuerza que tenía como norte evitar la exterminación. Hoess, comandante en jefe de la SS, ordenó que tenían que presentarse 6.000 hebreos al día, para ser trasladados al Este. Al mostrarse reacios a cumplir la orden, los nazi recurrieron a la estratagema de ofrecerles un pedazo de pan y una lata de mermelada para inducirlos a subir a los trenes. Angustiados por la carencia de alimentos accedían.
El día 9 de enero de 1943, Himmler visitó el ghetto de Varsovia para contemplar personalmente los restos de la judería europea, y mandó a exterminarlos por completo en los campos de Treblinka y Auschwitz; quedaban sólo unos 60.000. Los habían ido sacando de allí ofreciéndoles trabajo. Acosados por el hambre aceptaban, y jamás volvían a regresar. Barrios enteros habían quedado vacíos. Himmler también mandó liquidar a los habitantes de todos los ghettos que quedaban en los países bálticos (Dinamarca, Finlandia, Polonia, Rusia y Suecia).
Destrucción del ghetto de Varsovia: Cuando sólo quedaban unos sesenta mil judíos, se consolidó la resistencia armada contra los alemanes. Se crearon entonces la Organización de Lucha Judía (ZOB), liderada por Mordechai Anielewicz, y la Unión Militar Judía (ZZW), al mando de Pawel Frenkiel. Integrada por grupos de jóvenes como el Hashomer Hatzair, el Gordiano y el Hashomer Hatzioni. No sólo carecían de experiencia en la guerra sino también de armas, puesto que su arsenal lo componían algunas pistolas, revólveres y rifles viejos. Su precario cuartel general estaba en un edificio abandonado entre las calles Mila 18 y Zamenhofa. La reacción judía se manifestó en ese mes de enero, cuando mataron varias decenas de ellos. Esto alarmó a los nazi, quienes sintiendo miedo decidieron destruir el ghetto. En la madrugada del 19 de abril, 7.000 hombres al mando del general de la SS Von Stroop asaltaron las instalaciones del ghetto, con el fin de destruir los 400 judíos (entre hombres, mujeres y niños) que conformaban la resistencia. El ejército regular incluida artillería, tanques y aviones, dos batallones de policía alemana, policía polaca, miembros clave de la SD y un batallón de apoyo formado por ucranianos, letones y lituanos. En contra de lo que se esperaba, la destrucción de las guerrillas judías no fue nada fácil, esto quedó demostrado por la prolongación del ataque alemán. Asaltaban las posiciones judías y los acribillaban a tiros; a los que conseguían en casas los quemaban vivos. Con todo, los hebreos no se rendían y la lucha continuaba, causando considerables bajas entre los alemanes, quienes utilizaron hasta artillería antiaérea para destruir los edificios donde se escondían. La valentía de los judíos fue tanta que igualó la desarrollada por la generación del tiempo de los Macabeos. Niños corrían y se montaban en los tanques, lanzando por las escotillas bombas incendiarias de fabricación casera, incendiando las unidades, mientras otros rebeldes corrían hacia las fuerzas nazi, dando la vida con honor, impresionando con su valor a sus matadores. Sin embargo, veinte días después, todos los insurgentes judíos habían muerto. El ghetto quedó parcialmente destruido bajo una historia de dolor interminable, que en Polonia nunca se olvidará.
También se sucedieron sublevaciones en otros ghettos. Los combatientes estaban claros de que no lograrían vencer, pero luchaban por honor y para vengar la muerte de sus hermanos. Muchos pudieron escapar de estos ghettos hacia los bosques enrolándose en brigadas que luchaban contra los alemanes.
Así mismo hubo rebeliones en campos como Sobibor, Treblinka y Auschwitz, donde con armas robadas atacaron al personal de las SS y sus colaboradores ucranianos. Todos los alzados fueron fusilados. En Auschwitz cuatro mujeres judías ayudaron a algunos judíos que trabajaban en los crematorios a volar uno de los éstos. Todos los implicados murieron.
En los países ocupados por los alemanes, la resistencia judía se concentró en ayudar y rescatar a cuantos pudieran. Por su parte, las autoridades judías de Palestina enviaron gente a Hungría y a Eslovaquia para ayudar a sus hermanos. En Francia, elementos de la resistencia se juntaron y formaron el l´Armee Juive (ejército judío). Otros lucharon en los movimientos nacionales de resistencia en Bélgica, Italia, Polonia, y otros países de la Europa oriental.
En julio de 1944, los rusos vencieron a los alemanes y apoderáronse del campo de concentración de Majdanek, también en Lublin, y ahorcaron a todos los alemanes que encontraron. Las pinturas de la "propaganda del horror" habían sido vistas por el mundo. Como era de esperar, los alemanes negaron todo diciendo que eran atrocidades perpetradas por los polacos. Pese a eso, Eichmann, Hoess y muchos otros continuaron con el plan. El primero ordenó deportar en masa a los hebreos de Rumania. En octubre, mandó trasladar a los supervivientes del ghetto de Krakov a Auschwitz (35.000 en total). Luego llevaron los "judíos húngaros" del campo de Bergen-Belsen a Suiza. Mientras, Himmler daba órdenes de destruir el crematorio de Auschwitz y de desmantelar el campo. Al verse descubiertos, los alemanes trataron desesperadamente de borrar toda evidencia. Sabían que el mundo les pediría cuentas. Pero al haber muchas, tan sólo les quedó huir. Todos los presos de Auschwitz fueron evacuados y trasladados hacia el oeste por los nazi, mientras los rusos les pisaban los talones. Los ocupantes de los diferentes campos eran obligados a caminar muchas decenas de kilómetros, en la llamada "caminata de la muerte". Llamadas así porque la mayoría morían de cansancio, de hambre o asesinados. Todo esto privados de alimentos y de agua.
El día 30 de abril de ese 1945, el "valiente" Adolf Hitler, viéndose derrotado y asustado de las consecuencias por sus crímenes, se suicidó junto con su esposa. Dos días después, Berlín caería en manos de los rusos.
Pogromos rumanos
Pero no sólo los alemanes deseaban exterminar a los hebreos, sino que también los rumanos aprovechando la guerra, por cuenta propia practicaron crueles matanzas entre las comunidades judías. Con la caída del Rey Carol II (1940) y la creación del Estado Nacional Legionario que aglutinaba al Ejército Real Rumano y al movimiento filofascista de la Guardia de Hierro, una nueva era de antisemitismo se abría en Rumania. Ion Antonescu se convirtió en Conductor de Rumania, llegando a convertirse esta nación en la más criminal del Eje en ese año 1941, por delante de Alemania y Japón. Ese año se alió con Hitler contra la Unión Soviética. Aprovechando la sublevación Legionaria de Rumania del 20 de enero de 1942, numerosos legionarios asaltaron sinagogas y locales hebreos, asesinando a los judíos por las calles y apaleándolos. En total, los incontrolados de la Guardia de Hierro con torturas liquidaron a 125 judíos de los que colgaron de ganchos por las calles, muchos llevaban un cártel que rezaba "Carne Kosher". Además quemaron 1.274 negocios hebreos y la Sinagoga de Bucarest resultó incendiada. Aquel suceso fue conocido como el "Matadero de Bucarest". Más de 693 judíos fueron torturados previamente y asesinados después en las mazmorras y patios de la cárcel de Jilava.
Siendo culpados los judíos del bombardeo soviético sobre la ciudad de Iasi el 26 de Junio de 1941, al otro día comenzaron las matanzas en esa ciudad. Soldados, policías y civiles rumanos armados salieron a las calles buscando a los judíos a lo largo y ancho. Mediante apaleamientos y linchamientos 1.500 judíos murieron a golpes o torturados. Los que no fallecieron en sus casas tras robarles las pertenencias, lo hicieron en las aceras de las calles. Esa jornada fue conocida como el "Domingo Negro de Iasi". A partir del día 28 se encerró a los judíos en trenes de carga y se los paseó por la zona dejándolos en los vagones sin posibilidad de salir hasta que muriesen de sed o asfixia. Hasta dos trenes se emplearon para la operación, en el primero perecieron 1.400 personas y en el segundo 1.194 más. Las ejecuciones continuaron a millares al día siguiente, aunque esta vez fuera de trenes. Ante esta masacre, la Cruz Roja intervino. El total de judíos asesinados en Iasi fue de 13.226 personas.
Apenas había transcurrido un día desde el pogromo de Iasi, cuando en la localidad de Dorio las fuerzas de seguridad rumanas asesinaron 53 judíos.
Pasados dos meses, hubo otro pogromo en Odessa. El odio hacia los judíos que sentían los soldados rumanos los hizo buscarlos vivienda por vivienda, haciéndolos abandonar sus hogares y sacándolos a las calles donde se los fusilaban. La mayoría, alrededor de 19.000 judíos, fueron conducidos al puerto de Odessa y ejecutados en los muelles. El resto fueron desalojados de Odessa y se los llevó caminando hasta la cercana localidad de Dalnic. Las formas que tenían los rumanos de acabar con los judíos fueron diversas, siendo Nicolae Deleanu el principal coronel rumano al mando de los asesinatos masivos. Muchos murieron quemados en graneros, otros ametrallados por filas, dinamitados con explosivos en edificios o fusilados en zanjas antitanque en grupos de 40 a 50 personas. El total de muertos en Dalnic sumó 30.000 personas.
Cuando acabaron las ejecuciones en masa el 24 de octubre, los rumanos habían liquidado a unas 50.000 personas, la mayoría judíos, aunque también unos pocos comunistas y civiles ucranianos.
Transnistria, zona que incorporó Rumania a costa de la Unión Soviética cuando la invadió, se convertiría en la mayor masacre de judíos perpetrada por Rumania en la Segunda Guerra Mundial. Antonescu propuso expulsar a todos los judíos, incluyendo las anexionadas Besarabia y Bukovina, para trasladarlos a Transnistria. En una medida más pequeña el programa se aplicaría a los gitanos y eslavos nativos en Moldavia. Controlados por multitud de soldados del Ejército rumano, los judíos abandonaron sus hogares en Besarabia y Bukovina rumbo a Transnistria. Por el camino fueron cayendo a millares por el hambre, el clima o los abusos de las tropas rumanas e independentistas de la Organización de Nacionalistas Ucranianos (OUN) que se divertían robándoles o matándolos. En las zonas de Ucrania ocupadas por Rumania también se expulsó a los judíos. A lo largo de las carreteras que unían Ucrania con Besarabia miles de cuerpos fueron llenando las cunetas en auténticas marchas de la muerte. Muchos se ahogaron al intentar cruzar el Río Dniéster o tiroteados por destacamentos rumanos en la orilla. Dentro de la misma Transnistria la situación no era mejor. A muchos judíos se los alojó en guetos provisionales que eran verdaderos mataderos como el de Kishinev. Sólo el tifus en la localidad de Bogdanovka se cobró la vida de 40.000 judíos. Otros sitios de muerte en la región fueron Domanovka, Acmecetca o Peciora. Al terminar el año 1941 y comenzar 1942, justo cuando la "Operación Barbarroja" quedó paralizada, decenas de miles de judíos habían muerto en Transnistria. Tanto en allí, como Besarabia y Bukovina, la población judía había desaparecido completamente.
Todo indicaba a comienzos de 1942 que Rumania iba a terminar por eliminar a todos sus judíos. Cuando Alemania inició la Solución Final, los rumanos se adhirieron a la macabra empresa. Sin embargo, Antonescu se echó atrás por razones de conveniencia política.
Las autoridades rumanas a partir de 1943 acordaron ponerse a trabajar para el intercambio de judíos con los países de los Aliados a cambio de dinero. Las conversaciones se hicieron a través de la Agencia Judía, la cual pidió enviar a Palestina 70.000 judíos a cambio de 200 lei rumanos, es decir, 200 libras palestinas por individuo. La negociación fue difícil y al final se estableció la cifra en 5.000 niños, sin embargo Gran Bretaña se echó atrás temiendo que con la llegada de más judíos pudiesen sublevarse en el protectorado de Oriente Medio.
A continuación alguna estadística sobre lo acontecido durante este genocidio:
Los soldados norteamericanos obligaron a la población de Ohrdruf a enterrar los cadáveres de los internados y a limpiar todas las instalaciones del campo. Prácticamente ningún habitante de la localidad se salvó de ver con sus propios ojos el horror que habían ocasionado a gente inocente. Algo parecido hicieron con los nazi que encontraron en los campos allanados.
En el bienio 1940-41, en las seis instituciones donde se practicó el programa "Aktion T4" (eutanasia) concebido por los nazi, perdieron la vida unas 72.000 personas.
En la ciudad ucraniana de Lvov, miles de judíos fueron asesinados en dos jornadas.
En Tarnapol son asesinados miles de hebreos.
Miles de judíos muertos en la ciudad polaca de Brzezany.
En el campo de Langestein (subcampo de Mauthausen-Gusen, Mantahusen, las tropas aliadas encontraron 50 vagones de ferrocarril repletos de cadáveres; los supervivientes no eran sino esqueletos cubiertos de llagas.
Durante la ocupación nazi de Ucrania, en Baby Yar (Kiev) ya para octubre de 1941, habían sido masacrados entre 100.000 y 150.000, habitantes, la mayoría judíos.
El 25 de diciembre de 1941, ya habían sido eliminados 32.000 hebreos en Vilna, capital de Lituania; 27.000 en Riga, capital de Letonia; y 10.000 en Sinferopol.
En el ghetto lituano de Kovno perecieron decenas de miles de judíos, incluyendo unos 2.500 niños. Poco antes de que llegaran los soviéticos, el ghetto fue destruido con granadas y dinamita, pereciendo quemados los últimos sobrevivientes (unos 2.000).
En Korets mataron a más de 2.000 judíos de igual manera.
De los centenares de miles de hebreos que habitaban Bielorrusia, el 80% fueron asesinados.
Sólo en 1944 se usaron 3.350 kg. de Zyklon B, suministrados mediante el médico de las SS Kurt Gerstein. 2.175 kg. en Sachsenhausen, y 1.1175 en Auschwitz.
En los hornos del campo de Auschwitz, encontraron una capa de grasa humana de 45 centímetros de espesor. Y en su almacén hallaron varias toneladas de cabellos humanos, perfectamente preparadas y etiquetadas.
En el momento en que cayó el régimen nazi, Adolf Eichmann dijo a Henry Himmler que habían matado 4.000.000 de judíos en los campos y 2.000.000 por medio de los Eisatzgruppen.
En conclusión, como en parte hemos visto, de los 8.300.000 hebreos que vivían en la Europa ocupada por los alemanes, alrededor de seis millones perdieron la vida en los campos de concentración, muertos violentamente de muchísimas maneras, o diezmados por el hambre y las enfermedades.
Inolvidables para la Historia resultan los nombres de algunos esbirros nazi que participaron en este vergonzoso crimen: Heinrich Himmler (jefe de la Gestapo y de la policía del Reich. Fue el organizador de los campos de exterminio. Luego de ser detenido el 23 de mayo de 1945, se suicidó con cianuro durante un interrogatorio); Rudolf Hess (uno de los principales colaboradores de Hitler); Joseph Kramer (conocido como "la bestia de Belsen". Capturado y ejecutado en compañía de sus colaboradores); Adolf Eichmann (miembro del partido nazi. Se internó en la ciudad de Alt-Aussee, escondrijo de los oficiales de la SS. Luego se iría para Argentina, donde lo alcanzó la justicia); Paúl Blobel (coronel que ordenó matar a muchos judíos); Otto Ohlendorf (en la península rusa de Crimea ordenó el exterminio de 90.000 judíos); Ericé Dorf (capturado en Alt-Aussee, se suicidó el día 16 de mayo de 1945 durante un interrogatorio llevado a cabo por la CIA); el doctor Joseph Mengele Kohn (que utilizaba medicamentos, presuntamente para combatir el tifus, pero que sólo causaban la muerte en medio de horribles dolores); el sargento Moll (encargado de colocar los cristales de Zyklon B en Auschwitz); el sargento Foltz (bajo las órdenes de Blobel asesinó a muchísimos en Ucrania); Jospeh Paul Goebbels (Ministro de Propaganda, encargado de la dirección de la guerra total. Se suicidó con toda su familia).
Juicios de Núremberg
Consistieron en un conjunto de procesos jurisdiccionales emprendidos por iniciativa de las naciones aliadas vencedoras de la Guerra. Se determinaron y sancionaron las responsabilidades de dirigentes, funcionarios y colaboradores del régimen nacionalsocialista de Adolf Hitler, en los diferentes crímenes y abusos contra la Humanidad por parte del III Reich alemán a partir del 1 de septiembre de 1939 hasta la caída del régimen alemán en mayo de 1945 (seis años y dos meses). Estos juicios se desarrollaron desde el 20 de noviembre de 1945 hasta el 1 de octubre de 1946, dirigidos por el Tribunal Penal Militar Internacional, contra 24 de los principales dirigentes supervivientes del gobierno nazi capturados, y de varias de sus principales organizaciones, acusados de delitos de guerra de agresión, crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad. En resumen, el tribunal dictó 12 condenas a muerte, 3 condenas de prisión perpetua, 2 a veinte años, una a 15 y otra a 10 años.
Martín Bormann (Sucesor de Hess como secretario del Partido Nazi. Condenado a muerte, en ausencia).
Hans Frank (Gobernador general de la Polonia ocupada. Pena capital).
Wilheml Frick (Ministro del Interior, autorizó las leyes Raciales de Núremberg. Condenado a muerte).
Hermann Goring (Comandante de la Luftwaffe y presidente del Reichstag. Pena capital).
Alfred Jodl (Jefe de Operaciones de la Wehrmacht. Condenado a muerte).
Ernst Kaltenbrunner (Jefe de la RSHA y de los einsatzgruppen. Pena capital).
Wilhelm Keitel (Comandante de la Wehrmacht. Condenado a muerte).
Joachim von Ribbentrop (Ministro de Relaciones Exteriores. Pena capital).
Alfred Rosenberg (ideólogo del racismo y Ministro de los Territorios Ocupados. Condenado a muerte).
Fritz Sauckel (Director del programa de trabajo esclavo. Pena capital).
Arthur Sevb-Inquart (Líder del Anschluss y gobernador de los Países Bajos ocupados. Condenado a muerte).
Julius Streicher (Jefe del periódico antisemita Der Sturner. Pena capital).
Walter Funk (Ministro de Economía. Cadena perpetua).
Rudolf Hess (Ayudante de Hitler. Prisión perpetua).
Erich Raeder (Comandante en jefe de la Kriegsmarine. Cadena perpetua).
Albert Speer (Ministro de Armamento. A 20 años).
Baldur von Schirach (Líder de las Juventudes Hitlerianas. A 20 años).
Konstantin von Neurath (Ministro "Protector" de Bohemia y Moravia. A 15 años).
Kart Donitz (Sucesor designado de Hitler y comandante de la Kriegsmarine. A 10 años).
Hans Fritzsche (Ayudante de Joseph Goebbles en el Ministerio de Propaganda. Absuelto).
Franz von Papen (Ministro y vicecanciller. Sin condena).
Hjalmar Schacht (Ex presidente del Reichsbank. Absuelto).
Gustav Krupp (Industrial que usufructuó del trabajo esclavo. Sin condena).
Robert Ley (Jefe del Cuerpo Alemán del Trabajo. Absuelto).
Los condenados a muerte fueron ejecutados por vía de ahorcamiento el 16 de octubre de ese 1946. Goring se suicidó en la víspera con una cápsula de cianuro, y Robert Ley el 25 de octubre de 1945, antes del veredicto. Después de la ejecución, los restos fueron incinerados y las cenizas lanzadas en el río Isar. Si bien Bormann fue juzgado en ausencia, luego se determinó que había muerto durante la caída de Berlín. Los condenados a cárcel fueron recluidos en la prisión de Spandau, hasta la muerte del último de ellos, Rudolf Hess, en 1987. De todos ellos, sólo cuatro cumplieron a cabalidad la pena, ya que Neurath fue indultado en 1954; Raeder, en 1955; Funk, en 1957, y finalmente Speer, en 1966.
También los nombres de algunas mujeres guardianas de los campos, que disfrutaban torturando hasta morir a las prisioneras, como Irma Grese "la bestia bella" (condenada a muerte), Emma Zimmer (condenada a muerte), María Mandel (condenada a muerte), Herta Oberheuser (condenada a 20 años), Elisabeth Volkenrath, Juana Bormann (la mujer de los perros), Dorotea Binz, Erna Wallisch (la bruja de Hitler), Ilse Kohler (la perra de Buchenwald), y otras más.
Primeras inmigraciones judías
Durante siglos, los judíos de la Diáspora anhelaron regresar a su país, produciéndose a partir del siglo XII olas de inmigración hacia Palestina, conocidas como aliyá. En 1141, el sefardí Yehuda Halevi hizo un llamado a los hebreos para regresar, efectuando él mismo el regreso a Sion, donde encontraría la muerte. Un siglo después, el rabino español Nahmánides emigró a Jerusalén y desde entonces se mantuvo una presencia constante de judíos, especialmente en esa ciudad. El también sefardí Yosef Caro emigró a la gran comunidad judía de Safed en 1535. Oleadas migratorias tuvieron lugar, por ejemplo, en el periodo 1209-11. Fue también famosa la "aliyá de los rabinos de Francia e Inglaterra" hacia Acre en 1258 y 1266. En 1260 Jehiel de París emigró a Acre, junto a su hijo y un numeroso grupo de seguidores. Pequeñas olas migratorias judías tuvieron lugar durante el siglo XVII, como la de Menachem Mendel de Vitebsk y 300 que lo seguían, Judah he-Hasid y alrededor de 1.000 discípulos y más de 500 de sus familiares de Gaón de Vilna, conocidos como Perushim. Oleadas de estudiantes rabínicos inmigraron en 1808-09, asentándose en Tiberias, Safed y luego en Jerusalén.
Pero la primera gran ola de inmigración judía a Palestina, se inició en 1881, como consecuencia de las persecuciones a que eran sometidos los judíos en Europa y las ideas de Moses Hess, un sionista-socialista que abogaba por la redención de la patria hebrea. Los judíos compraban tierras a las autoridades otomanas y a los terratenientes árabes, surgiendo así los primeros asentamientos agrícolas. Es en esta época que comienzan a manifestarse las primeras tensiones entre árabes y judíos. El surgimiento del Sionismo, fundado por Theodor Herzl, dio lugar a la segunda aliyá (1904-14) en el curso de la cual inmigraron unos 40.000. En 1909 un grupo de judíos rusos que llegaron luego del fracaso de la Revolución de 1905 fundaron Degania, el primer kibutz. La tercera (1919-23) y la cuarta (1924-29) inmigración judía se produjeron después de la Primera Guerra Mundial. El avance del nazismo en 1933 dio lugar a la quinta aliyá. Los hebreos en Palestina incrementaron su población de un 11% en 1920 a un 30% en 1940 y eran propietarios del 6% del territorio del Mandato británico (incluyendo a la actual Jordania) en 1943. El Holocausto, junto con la negativa de las potencias occidentales de abrir sus fronteras, ocasionó otra ola de inmigrantes a Palestina, elevando su número hasta los 600.000 habitantes.
El Sionismo
Conocido también como Movimiento Sionista Mundial, una asociación internacionalista estructurada el 19 de diciembre de 1894 en París. Cuya finalidad era lograr el retorno masivo de los hebreos a Palestina y la creación de un hogar nacional. La inclemencia racial sufrida fue utilizada por Jehová de los ejércitos, para que en las conciencias de los judíos coincidieran deseos de lograr la recuperación de la Tierra Prometida; sabían que si bien estaban purgando una disciplina del Dios de sus padres, estaba la promesa de la restauración. Fue este el germen que engendró lo que se conocería como el Sionismo. Tan adversado como fuerte, que finalmente, conforme a la voluntad del Creador, lograría sus objetivos. Fueron los ideólogos de este movimiento: Lord Balfour, Lord Rothschild, Lord Saftesbury, Sir Moisés Montifiori, Nahum Syrkin, Dov Ber Borojov, Aarón David Gordon, Charles Setter, el Barón Edmond de Rothschild, Michel Bar-Zoar, quien escribió un libro al respecto, y principalmente Theodore Herzl.
Esta vez los hebreos no utilizarían la fuerza para tomar la tierra como en los tiempos de Josué; no, ahora serían otros los métodos a practicar. Comenzaron reuniendo dinero para comprar tierras en Palestina, después organizaron el Banco Colonial Judío, que luego pasaría a llamarse Banco Nacional de Israel. Por cuanto era un pueblo afortunado en el comercio, ambos proyectos se dieron. Treinta años después, se organizaría en la ciudad suiza de Zurich la Agencia Judía, que regiría la vida de los hebreos de Palestina.
A partir de ese 1894, los pogromos, especialmente entre los rusos, provocaron la inmigración de judíos alentada por este movimiento. Ya desde 1838 Inglaterra había establecido en Jerusalén un Consulado cuya misión era proteger a los judíos que habitaran en la ciudad. Al otro año, el judío inglés Moisés Montifiori propuso un plan de colonización hebrea en Palestina. Así, en 1856 se hizo la primera plantación de naranjos en la región. Cuatro años después, Charles Setter fundó una escuela agrícola en la colonia de judíos llamada Mikve Israel, y Edmond de Rothschild, de la familia de los grandes banqueros judíos establecidos en Inglaterra y en Francia, compró tierras y organizó en el sur de Palestina unos viñedos. Por otra parte, la población judía en Estados Unidos formó varios grupos sionistas. Siendo este territorio y Europa las áreas de mayor influencia.
El primer congreso sionista se celebró en la ciudad suiza de Basilea en 1897, donde el ideólogo de este movimiento de inserción, el periodista austro-húngaro Theodore Herzl discurrió sobre sus aspectos. El segundo congreso sionista, celebrado en 1899, creó el mencionado Banco Colonial Judío, con sede en Londres y que se dedicaría a financiar el establecimiento de negocios agrícolas, industriales y comerciales en Palestina y en Oriente.
La tesis de la creación de un estado para los judíos fue aceptada por Gran Bretaña, y adoptada en 1917 con la llamada declaración hecha por el ministro inglés de Relaciones Exteriores, Lord Arthur James Balfour ("Declaración Balfour"). Ya en 1903, el gobierno inglés había propuesto a Uganda para que se estableciera este estado. Esta propuesta fue discutida durante el sexto congreso sionista. Se llegó a la determinación de desecharla y pedir que esta patria se creara donde le correspondía: Asia. Para entonces, la población judía en Palestina era de 60.000 almas. Su número aumentó tres años después cuando se establecieron judíos en el Valle del Jordán. Si bien, debido a la persecución turca muchos abandonaron la tierra. Llegando a ser para 1918, al fin de la Primera Guerra Mundial, sólo de 56.000.
La formulación clásica de la idea es la que hizo Theodor Herzl en su opúsculo "Der Judenstaat" ("El Estado Judío", publicado en Berlín y Viena en 1886), que tiene como precedente doctrinales la obra de Moses Hess "Roma y Jerusalén" (1860) y la del médico judío ruso Leo Pinsker "Autoemancipación" (1882).
A fines de septiembre de 1916, se rindió ante el emir Abdullah la mayor fuerza turca que había en Arabia. El 2 de noviembre de 1917, el ministro Balfour declaró que el gobierno inglés veía favorablemente la idea de establecer el Hogar Judío en Palestina, asegurando que conforme a esa doctrina el gobierno de Londres colaboraría para que así fuera. Un mes después, el general Allemby, jefe de las fuerzas militares enviadas a Egipto, vencía a los turcos en la tercera batalla de Gaza, y el 9 de diciembre de ese 1917 entraba en Jerusalén, lo cual hizo caminando, como lo hicieran en el pasado otros tantos generales. Jerusalén desde siempre ha sido la ciudad más especial. Comenzaba desde ahora el Mandato Inglés en la gentil Palestina. Ocupación que se prolongará hasta el cumplimiento profético sobre la restauración hebrea.
Instaurado el mandato británico sobre Palestina en 1922 por la Sociedad de Naciones, los judíos empezaron a llegar masivamente allí ante la amenaza nazi. Para 1941, las tierras que ocupaban en Palestina tenían una superficie de 528 kilómetros cuadrados, y diez años después llegaban a 16 mil 324.
Conforme a la inquebrantable voluntad de Dios, cincuenta y dos años después de haber sido creado de derecho, el Sionismo daría los esperados frutos y los hebreos recuperarían su tierra, luego de 1878 años de dispersión.
En 1947, tras el estallido de la violencia por grupos militantes judíos y árabes y ante la imposibilidad de conciliar a ambas poblaciones, el gobierno británico decidió retirarse de Palestina y puso en las manos de la ONU la solución del conflicto. Tras el informe de la comisión Peel, una comisión internacional que evaluó la situación sobre el terreno, la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó el 29 de noviembre de ese año un plan que dividía a Palestina en dos Estados, dando a los árabes y a los judíos una extensión similar de terreno (el 54% del total para Israel, pero incluía el desierto del Neguev, que representaba a su vez el 45% de la superficie del país). Jerusalén quedaría como una ciudad internacional administrada por las Naciones Unidas. La ONU no adoptó ninguna disposición para ejecutar el Plan y, apenas dos semanas después, en una reunión pública celebrada el 17 de diciembre, la Liga Árabe 1 aprobó otra resolución que rechazaba de forma taxativa la de la ONU y en la que advertía que, para evitar la ejecución del plan, emplearía todos los medios a su alcance, incluyendo la intervención armada, tal como lo hizo.
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1 La Liga de Estados Árabes o Liga Árabe fue fundada el 22 de marzo de 1945, por siete Estados: Egipto, Irak, Jordania, Líbano, Arabia Saudita, Siria y Yemen del Norte, como una organización que velaría por cumplir los deseos y expectativas de todos los árabes. A partir de 1953 se añadirían otros países. Actualmente la forman 22.
Capítulo XXII
Creación del Estado de Israel (1948)
(Segunda restauración judía)
EN el mes de mayo de 1948, contra toda oposición, los objetivos del Sionismo se cristalizaron. La noche del día 14, horas antes de que expirara el Mandato británico sobre Palestina, se creó el estado de Roca de Israel. Así lo dictaba la resolución aprobada el 28 de noviembre del pasado año por la Asamblea General de la ONU, sobre un plan de partición de Palestina en un estado judío y un estado árabe (Cisjordania), aboliendo como medida primaria las leyes antiinmigratorias británicas que impedían desde hacía años la entrada legal de nuevos hebreos a Palestina. Se cumplían de esta manera (parcialmente) lo predicho por los profetas antiguo testamentarios, y por el Señor Jesucristo mismo, sobre el retorno de los judíos a su tierra "De cierto te juntaré todo, oh Jacob; recogeré ciertamente el resto de Israel; lo reuniré como ovejas de Bosra, como rebaño en medio de su aprisco; harán estruendo por la multitud de hombres." (Miqueas, 2:12). David Ben Gurión, quien hizo esta declaración, asumió el gobierno provisional judío. Israel quedó conformado por un territorio de 21.000 kilómetros cuadrados. Aunque se barajaron varios nombres como Eretz Israel, Sion, Judea y Nueva Judea, se adoptó el nombre ahora moderno de Medinat Israel (en hebreo) y Dawlat Isra´il (en árabe). Concluían así 1878 años de dispersión. Israel renacía de las cenizas. Quienes aseguraban que nunca más volvería a ser una nación quedaron avergonzados. Porque sobre cualquier pensamiento o plan humano, la voluntad de Dios siempre se sobrepondrá.
Ahora bien, este contexto ha de ser entendido política y religiosamente. Las potencias europeas y EE.UU. habían obrado de acuerdo a sus objetivos políticos, militares y comerciales. Pero en realidad, sin saberlo habían sido instrumentos de Dios para que obraran a favor del pueblo hebreo. En realidad sólo fue el cumplimiento de la restauración prometida a este pueblo. De la misma forma cómo Jehová de los ejércitos utilizó a los monarcas persas para la primera restauración, ahora utilizaba a esta coalición para restaurarlos esta segunda vez. Algo que muchísimas personas aún no comprenden. Incluso entre cristianos que diciendo que adoran al Señor Jesucristo, apoyan iniciativas contra el pueblo donde nació.
Las tropas británicas abandonarían el suelo del recién creado estado. Cuyos gobernantes convertirían en menos de medio siglo este pequeño y árido país en una potencia política y militar. Una bofetada para todos aquellos gobernantes que nunca mostraron verdadera capacidad para hacer todo de la nada. Y en la actualidad y desde mucho antes, el país posee una sólida y creciente economía, al igual que un ejército dotado de todo cuanto pueda necesitar para garantizar la pervivencia del país.
Sus límites actuales son: Al norte, el Líbano; al este, Siria, Jordania y Cisjordania; al oeste, el mar Mediterráneo y la Franja de Gaza; al suroeste, Egipto, y al Sur, el golfo de Aqaba, en el Mar Rojo.
La capital Jerusalén cuenta con una población de 7,6 millones de habitantes, la mayoría de los cuales son judíos. Israel es también el hogar de árabes musulmanes, católicos, drusos y samaritanos, así como otros grupos religiosos y étnicos minoritarios. En el país se hablan dos idiomas oficiales: el hebreo y el árabe, desplazando así el inglés. El gentilicio del país en español es israelí y su plural israelíes, adoptado pocas semanas después de la independencia. La vida política sería llenada por los partidos políticos Mapay, el Socialista y el Laborista. El sistema político quedó formado por el Poder Legislativo, el Poder Ejecutivo y el Poder Judicial. Sus instituciones más importantes son el Presidente, que se desempeña como jefe de Estado, la Knéset, el Primer Ministro y su Gabinete, que forman el gobierno, y el sistema judicial, cuyo más alto tribunal es la Corte Suprema y su independencia está garantizada por la ley.
Con miras a integrar a todos los inmigrantes en una sociedad unida, Eleazar Ben Yehudá fomentó el hebreo como lengua de este nuevo estado. De igual forma adoptaron nuevos nombres hebreos. También se creó la Universidad Hebrea de Jerusalén, y sindicatos de cooperativas agrícolas. La economía moderna de Israel está basada no sólo en las nuevas tecnologías, como los sistemas de irrigación agrícola y los productos relacionados con la informática, sino también en profesiones ancestrales. El mercado de diamantes de Ramat Gan es el más grande del mundo. El turismo, tanto en la ciudad santa de Jerusalén como en la exótica Eilat, va creciendo día a día.
Guerras árabe-israelíes
Creado de derecho Israel, como se esperaba, inmediatamente la Liga Árabe desconoció este acto y se levantó en armas contra Israel. No hubo ningún intento por parte de la ONU de evitar la intervención armada que había proclamado la Liga Árabe meses atrás y, al día siguiente de la declaración de independencia, los cinco países árabes vecinos (Egipto, Líbano, Siria, Iraq y Transjordania) declararon la guerra al naciente Estado de Israel. Se presentó así la primera guerra árabe-israelí, que sería seguida de otros conflictos más:
1. (1948-49) Guerra de Independencia. A partir del 30 de noviembre de 1947, los árabes palestinos comenzaron a invadir el territorio de Israel, hasta el 31 de mayo de 1948, cuando los ejércitos regulares de dicha liga lo invadieron de lleno. En la guerra intermitente que tuvo lugar durante los siguientes 15 meses (con varias treguas promovidas por la ONU), y pese a la inferioridad numérica Israel conquistó un 26% de terreno adicional al del antiguo mandato, mientras que Transjordania ocupó las áreas de Judea y Samaria (actualmente conocidas como Cisjordania), y Egipto ocupó el territorio correspondiente a la actual Franja de Gaza. Luego de duros enfrentamientos, la guerra terminó con un alto al fuego y con unos 700.000 refugiados palestinos aglomerados en Gaza, el Líbano y la margen occidental. La victoria de los israelitas, apoyados por tropas franco-británicas, les permitió ampliar sus fronteras en el Neguev, en Galilea y en Jerusalén. Se pudieron así establecer leyes para organizar el nuevo estado, que pasaría a control total hebreo.
2. (29 de octubre al 5 de noviembre de 1956) Guerra del Sinaí. Por la nacionalización de la compañía del canal de Suez, por parte del presidente egipcio Gamal Abdel Nasser, y el bloqueo impuesto por éste del golfo de Eilat, impidiendo el paso de barcos israelitas, haciendo, además, incursiones en su territorio, produjo en el mes de noviembre la intervención militar israelí y tropas franco-británicas en el canal, y luego la de los cascos azules de la ONU.
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