A pesar de la gran desvalorización de la sociedad, hay que decir que muchos hombres y mujeres son ejemplos silenciosos de generosidad: la madre que hace de comer, se arregla, limpia la casa y además se da tiempo para ir a trabajar; el padre que duerme solo cinco o seis horas diarias para dar el sustento a sus hijos; la juventud generosa que ayuda a sus amigos cuando tienen problemas. Todos ellos son ejemplos que sin duda deberíamos seguir. Y estos actos de generosidad son de verdad heroicos. Siempre es más fácil hacer un acto grandioso por el cual nos admiren, que "simplemente" darnos a los demás sin obtener ningún crédito. Y es que casi todos tendemos a buscar el propio brillo, la propia satisfacción, el prevalecer sobre los demás y solemos evitar el dar nuestra luz a los demás.
Dar sin esperar nada a cambio, entregar parte de tu vida, volcarse a los demás, ayudar a los que lo necesitan, dar consuelo a los que sufren, eso es generosidad. Y no es un valor pasado de moda. La generosidad es la llave que abre la puerta de la amistad, es una semilla que siembra el amor, y puede ser la luz que nos saque del oscurantismo materialista dentro del cual, muchos de nosotros estamos viviendo en la más negra de las ignorancias.
Al reflexionar sobre esta virtud, encontramos que la vida del ser humano esta llena de oportunidades para servir y hacer un bien al prójimo. Una persona generosa se distingue por:
– La disposición natural e incondicional que tiene para ayudar a los demás sin hacer distinciones.
– Resolver las situaciones que afectan a las personas en la medida de sus posibilidades, o buscar los medios para lograrlo.
– La discreción y sencillez con la que actúa, apareciendo y desapareciendo en el momento oportuno.
Para crecer en generosidad antes debemos de considerar y reflexionar un poco en nuestras actitudes:
– ¿Conscientemente dejo de prestar ayuda por pereza, desagrado o apatía?
– ¿Me esfuerzo por superar la propia comodidad, tomando conciencia de la necesidad ajena?
– ¿Espero recibir ayuda, favores y servicios sin considerar el esfuerzo que los demás realizan?
– ¿Realmente actúo desinteresadamente? ¿Es igual la disposición con mi jefe, socio o la persona que siempre me apoya, a la que tengo en casa, mis subalternos, amigos, conocidos y personas en general?
– Antes o después de ayudar a los demás, ¿pienso o espero recibir un halago, felicitación, reconocimiento, beneficio o el favor devuelto a ser posible con creces?
– ¿Siempre tengo presentes los favores hechos? ¿Les recuerdo, sugiero o hago notar a las personas mi ayuda e intervención?
Ser generoso es algo que muchas veces requiere un esfuerzo extraordinario. Para vivir mejor esta virtud en lo pequeño y cotidiano, es de gran utilidad poner en práctica las siguientes medidas:
– Procura sonreír siempre. A pesar de tu estado de ánimo y aún en las situaciones poco favorables para ti o para los demás.
– Se accesible en tus gustos personales, permite a los demás que elijan la película, lugar de diversión, pasatiempos, la hora y punto de reunión.
– Aprende a ceder la palabra, el paso, el lugar; además de ser un acto de generosidad denota educación y cortesía.
– Cumple con tus obligaciones a pesar del cansancio y siempre con optimismo, buscando el beneficio ajeno.
– Usa tus habilidades y conocimientos para ayudar a los demás.
– Atiende a toda persona que busca tu consejo o apoyo. Por más antipática o insignificante que te parezca, considera en ti a la persona adecuada para resolver su situación.
– Cuando te hayas comprometido en alguna actividad o al atender a una persona, no demuestres prisa, cansancio, fastidio o impaciencia; si es necesario discúlpate y ofrece otro momento para continuar.
– No olvides ser sencillo, haz todo discretamente sin anunciarlo o esperando felicitaciones.
El vivir con la conciencia de entrega a los demás, nos ayuda a descubrir lo útiles que podemos ser en la vida de nuestros semejantes, alcanzado la verdadera alegría y la íntima satisfacción del deber cumplido con nuestro interior.
Practicando la generosidad en silencio, sin reflectores y sin anuncios en los medios sociales, es la única manera de que, no perdiendo su esencia, nos proporcione paz interior.
Honestidad
1º Año Sección "H"
La Honestidad: La honestidad forma parte de aquellas cualidades mas gratas que puede poseer una persona, ella garantiza confianza, seguridad, respaldo, confidencia, integridad. Si alguna vez debemos hacer un listado de las cualidades que nos gustaría encontrar en las personas o mejor aún, que nos gustaría poseer, seguramente enunciaremos la Honestidad. En este sentido, la honestidad es una forma de vivir congruente entre lo que se piensa y la conducta que se observa hacia el prójimo, que junto a la justicia, exige en dar a cada quien lo que le es debido. En nuestra vida encontramos a diario actitudes deshonestas como la hipocresía, alguien que aparenta una personalidad que no tiene para ganarse la estimación de los demás; o la mentira; el simular trabajar o estudiar para no recibir una llamada de atención de los padres o del jefe inmediato; el no guardar en confidencia algún asunto del que hemos hecho la promesa de no revelarlo; no cumpliendo con la palabra dada, los compromisos hechos y la infidelidad.
Ser deshonestos nos lleva a romper los lazos de amistad establecidos, en el trabajo, la familia y en el ambiente social en el que nos desenvolvemos. Incluso, la convivencia bajo estos parámetros se torna imposible, pues ésta no se da, si las personas somos incapaces de confiar unos en otros. Ser honestos significa ser sinceros en todo lo que decimos y hacemos: fieles a las promesas hechas en el matrimonio, en la empresa o negocio en el que trabajamos y con las personas que participan de la misma labor; actuando justamente en el comercio y en las opiniones que damos respecto a los demás. Los que nos rodean esperan que nos comportemos de forma seria, correcta, justa, desinteresada, con espíritu de servicio, pues saben que siempre damos un poco más de lo esperado.
La honestidad puede convertirse en un valor que se viva cotidianamente con los demás, tratando de no perjudicar o herir susceptibilidades, lo cual se puede dar cuando les atribuimos defectos que no tienen o juzgando con ligereza su actuar; incluso, evitando sacar provecho u obtener algún beneficio a costa de sus debilidades o de su ignorancia; procurar no apropiarnos de aquella información importante para la empresa en que trabajamos, o de aquel problema que nos ha confiado nuestro paciente o cliente que ha solicitado nuestra ayuda; tratar de no generar discordia y malos entendidos entre las personas que conocemos; señalando con firmeza el grave error que se comete al hacer calumnias y difamaciones de quienes que no están presentes; devolviendo con oportunidad las cosas que no nos pertenecen y restituyendo todo aquello que de manera involuntaria o por descuido hayamos dañado..
Si realmente pretendemos ser honestos, debemos empezar por enfrentar y asumir con valor nuestros defectos, buscando aquella manera que resulte más eficaz para superarlos, llevando a cabo acciones que mejoren todo aquello que afecta a nuestra persona y como consecuencia, a nuestros semejantes. Ello supone aprender a rectificarnos ante un error y cumplir con nuestras labores grandes y pequeñas sin hacer distinción. Si podemos gestar un ambiente cálido y confiable, sostenido por relaciones basadas en la honestidad, nos llevará a crecer como personas, espiritualmente, constituyéndonos en verdaderos hombres de bien.
Valores ambientalistas 2º año
Alejandro de Humboldt
Nació en Berlín, 14 de septiembre de 1769 y falleció en la misma ciudad el 6 de mayo de 1859. Naturalista, geólogo, mineralogista, astrónomo, explorador, sismólogo, vulcanista, demógrafo. Como científico, el sabio Alejandro de Humboldt es considerado uno de los últimos representantes del concepto universal del conocimiento, característico del movimiento de la Ilustración. Su padre Alexander Georg von Humboldt perteneció a la nobleza prusiana, habiendo sido mayor del Ejército y chambelán del Rey; su madre fue María Isabel de Colomb, de ascendencia francesa. Estudió botánica, matemáticas, filosofía, entre otras disciplinas, a las cuales se añadieron posteriormente la física y la química; cursó estudios en las universidades de Fráncfort y de Gotinga a partir de 1783. En 1790, realizó un viaje de estudios por las orillas del río Rin. De allí nació la primera de sus obras, titulada Observaciones mineralógicas sobre ciertas formas basálticas del Rin. En 1793, publicó Flora subterránea de Freiberg, con aforismos sobre la fisiología química de las plantas. Publicó un trabajo científico titulado Fuerza vital, que ha sido considerado como la génesis de su conocido libro Cuadros de la naturaleza.
En Venezuela, tanto Humboldt como Bonpland, tendrían la oportunidad de estudiar la naturaleza y otras características del país. Esta afortunada visita del sabio alemán fue una suerte para el análisis de un país contenido en esa notable obra Viaje a las regiones equinocciales del Nuevo Continente, sólo superada por su obra Cosmos, una verdadera enciclopedia científica para su época. Humboldt llegó a Cumaná el 16 de julio del mismo año 1799; seguidamente emprendió, a partir de Venezuela, una serie de investigaciones sobre América, entre otras la de indagar «por qué la refracción es menor en los trópicos que en la zona templada».
Uno de los primeros fenómenos que observó, el 28 de octubre de 1799, fue un eclipse de sol. En el oriente, recorrió Cumaná y sus alrededores, así como el golfo de Cariaco y la península de Araya; entre el 4 y el 23 de septiembre visitó el interior de la provincia de Cumaná; estuvo en las misiones de los indios chaimas y pernoctó en el valle de Caripe. El 20 de noviembre llegó a La Guaira; había querido viajar por tierra de Cumaná a Caracas, pero se lo impidió lo accidentado del camino y tuvo que hacerlo por mar. El viaje de La Guaira a Caracas en mula, le llevó un poco más de 3 horas y admiró la buena conservación de la vía; hizo mediciones de la temperatura en el sitio llamado La Venta. Caracas, De La Vega partieron hacia los valles del Tuy y de Aragua, pasando por Antímano, La Victoria, Turmero, Maracay hasta llegar a Valencia; hizo estudios, a su paso, del lago de Valencia y de las aguas termales de Mariara. Visitó Guacara y Valencia, de allí pasó a Las Trincheras, cuyas aguas analizó, hasta llegar a Puerto Cabello.
De estas últimas localidades tomó rumbo a los llanos centrales; en Calabozo, conoció a Carlos del Pozo y Sucre, quien había realizado estudios de electricidad con instrumentos considerados similares a los que poseían los físicos europeos. Estudió los fenómenos eléctricos producidos por el temblador y se admiró al ver toninas a tanta distancia del mar, las cuales estudió en las aguas del río Apure. De San Fernando partieron hacia el Orinoco adonde llegaron el 5 de abril de 1800; Estudió los grandes afluentes del alto Orinoco, así como las características singulares del caño Casiquiare. En este recorrido, observó la fauna, la flora, la hidrografía, los hábitos indígenas, la elaboración del curare, la antropología cultural de las tribus orinoquenses. De La Esmeralda regresaron descendiendo el Orinoco, examinando algunos de los afluentes provenientes de la margen izquierda que remontaron en parte; observaron el comercio fluvial que desde el Orinoco se proyectaba hacia los afluentes que cruzan los llanos. Su regreso por vía fluvial culminó en Angostura, hoy Ciudad Bolívar, y de allí por los llanos de El Pao hasta Barcelona, en donde fletaron una lancha para regresar a Cumaná.
Recorrió otros países de América: remontó el río Magdalena, visitando Nueva Granada, Ecuador y Perú; estudió el vulcanismo andino; viajó a México, Cuba y Estados Unidos. El 9 de enero de 1804 se embarcó para Francia, donde se ocupó de la redacción de su libro Viaje a las regiones equinocciales del Nuevo Continente, en el cual una buena parte se refiere a su permanencia en Venezuela; ese mismo año, conoció y trató en París a Simón Bolívar. En 1805, Humboldt y Gay-Lussac partieron para Italia, recorriendo los Apeninos en compañía de Leopoldo de Buch, visitaron el Vesubio cuando ocurría una intensa erupción. En 1808 preparó la primera edición de Cuadros de la naturaleza. En 1814 visitó Gran Bretaña, donde su hermano Guillermo había sido designado ministro plenipotenciario de Prusia.
Durante la década de 1820, sostuvo correspondencia con el Libertador Simón Bolívar quien lo calificó de «Descubridor Científico del Nuevo Mundo». En 1822 acompañó al rey de Prusia al Congreso de Verona, visitando también Nápoles. En 1829, participó en una expedición al Asia por invitación del zar Nicolás de Rusia; las experiencias de este viaje fueron consignadas en la obra Fragmentos de geología y de climatología asiática. En 1835 murió su hermano Guillermo. En 1840, comenzó a escribir su obra Asia Central, que publicó en 1843. Dedicó casi las 2 últimas décadas de su vida a la redacción de su obra Cosmos, cuya publicación se llevó a cabo de 1845 a 1857.
Parque Mittar Nakichenovich: Se creó con el objeto de proteger la cuenca hidrográfica donde tiene su nacimiento la quebrada de Araure, que surte los acueductos de las poblaciones de Araure y Acarigua. Su objetivo adicional es preservar y reforestar áreas verdes.
Pozo Blanco Ricardo Montilla: Sitio del Centro de Investigaciones y Educación Conservacionista de la Sociedad Venezolana de Ciencias Naturales. Tiene un sendero ecológico en forma de círculo que bordea todo el lugar, conformado por una caminería de piedras. Posee a la vez varias plazas donde se han colocado bustos conmemorativos de personajes de conciencia ecológica. Ubicado en Acarigu
Francisco Tamayo.
Nace en Sanare (Edo.Lara) el 4.10.1902 – Muere en Caracas (D.F.) el 14.2.1985
Botánico, conservacionista y lexicógrafo venezolano. Fueron sus padres Carlos Tamayo León y Abigail Yepes Piñero. Su madre murió al nacer él, por lo que su criado y educado por sus tíos Carlos y Hortensia de Yepes Borges, en la su hacienda cerca de Sanare (Edo.Lara). Su educación primaria la recibió en El Tocuyo a través de clases privadas a cargo del profesor José Antonio Rodríguez López. A mediados de 1922, fue a Coro (Edo. Falcón) para continuar sus estudios, pero no le son reconocidos los años cursados con el profesor Rodríguez, por lo que debe volver a cursar desde cuarto año de primaria, a los 20 años de edad. Durante este tiempo trabó amistad con destacados poetas e intelectuales corianos tales como José David y Elías David Curiel, Polita De Lima y otros. En 1923, se encargó de la dirección de la revista Orto. La educación secundaria la inició en Los Teques y la culminó en Caracas el en liceo Caracas (hoy Andrés Bello).
Tras ingresar en la Universidad Central de Venezuela, para seguir en la carrera de medicina; toma parte en los sucesos políticos de 1928, lucha en la Federación de Estudiantes de Venezuela y finalmente abandona los estudios. En Mérida pretende proseguir los estudios de medicina, a la vez que continúa su actividad política incorporándose a la Federación de Estudiantes de Venezuela (seccional Mérida) de la que llega a ser presidente. En Mérida permanece hasta 1935 año en que decide regresar a Caracas, donde al año siguiente ingresa al recién fundado Instituto Pedagógico en el que se gradúa como profesor en ciencias biológicas en 1943. Luego de esto realizó cursos de especialización en las ciencias biológicas, en Buenos Aires y San Isidro (Argentina) y en Caracas, donde fue alumno de Henry Pittier. Entre 1947 y 1978, ejerció la docencia tanto en el Instituto Pedagógico de Caracas como en la Universidad Central de Venezuela. Asimismo, la actividad docente la alternó con la de escritor e investigador. Como botánico llevó a cabo exploraciones en diversas regiones de Venezuela para el estudio y clasificación de la flora; varias plantas venezolanas, descubiertas por él, llevan su nombre. Fue cofundador de la Estación Biológica de los Llanos en Calabozo (Edo. Guárico). Aunque su obra escrita versa fundamentalmente sobre botánica, también realizó importantes estudios acerca del folklore y el léxico venezolano, especialmente el de la región del estado Lara. También participó en la reorganización del herbario del Instituto Universitario Pedagógico de Caracas y en el rescate y recuperación de la hoya hidrográfica de Tacagua (Distrito Federal).
Pittier, Henri-François.
Bex (Suiza) 13.8.1857 _ Caracas, 27.1.1950. Ingeniero, naturalista y botánico. Realizó sus estudios en la Universidad de Jena (Alemania), donde se graduó de ingeniero civil en 1885. Ejerció su carrera como profesor de ciencias naturales en el colegio de Château d'Oex y luego en el departamento de Geografía de la Universidad de Lausanne. Después de viajar por el Mediterráneo y el Cercano Oriente, en 1887 se estableció en Costa Rica donde dirigió el Instituto Físico-Geográfico, que incluía una estación meteorológica, un servicio de geografía y un museo de ciencias naturales; también publicó el Boletín de ese establecimiento científico. Además de estudiar la flora y la fauna de ese país, intervino en los levantamientos cartográficos y en la delineación de carreteras y vías férreas. En 1901, llamado por el Departamento de Agricultura de Estados Unidos,
Realizó trabajos de campo sobre botánica tropical en México, Guatemala, Panamá, Colombia y Ecuador. En 1913 realizó su primera visita a Venezuela como asesor para la instalación de una escuela de agricultura; en vista de que sus observaciones no fueron aceptadas, resolvió regresar a Washington. Posteriormente volvió a Venezuela en 1917 y a partir de 1919, se instala definitivamente en el país. Entonces a la edad de 62 años comenzó de nuevo su labor como botánico, conservacionista, fitogeógrafo y educador. Entre sus discípulos se destacan Tobías Lasser y Francisco Tamayo. Elevó de 2.000 a 12.000 las fichas catalogadas en el Herbario Nacional, hoy Instituto Botánico.
Suyo es el mérito de haber logrado la creación del Parque Nacional, al norte de Maracay y que hoy lleva su nombre. Fue fundador de las revistas Museo Comercial y del Boletín Comercial e Industrial. En octubre de 1931 ocupó la dirección del Observatorio Cajigal hasta 1933. En ese breve tiempo, con el apoyo de Alfredo Jahn, quien lo había recomendado, logró de parte del Gobierno Nacional la adquisición de nuevos instrumentos. Sin embargo, sus trabajos se especializaron en observaciones meteorológicas. Su crítica al estado en que encontró esa institución le hizo entrar en conflicto con el Colegio de Ingenieros del que fue miembro honorario. A partir de 1936, fue jefe del Servicio Botánico del Ministerio de Agricultura y Cría, cargo que ocupó hasta sus últimos días. Autor de cerca de 290 trabajos publicados en revistas de diversa índole, su principal obra, Manual de las plantas usuales de Venezuela (1926) ha sido reimpresa 3 veces. También dedicó su atención a estudios etnográficos y lingüísticos de los indígenas de Centroamérica y Colombia.
Octavio Jelambi.
(Betijoque, Estado Trujillo 1914-2005) Ingeniero Químico (Bruselas, Bélgica, 1942) Licenciado en Química (UCV, Caracas, 1959) realizó diversas investigaciones y publicaciones sobre higiene y seguridad industrial así como sobre calidad de aguas. Obtuvo distinciones a nivel nacional e internacional en aras de la salud y la conservación.
"CESAR GONZÁLEZ"
"Gonzalito"
Técnico Perito Agropecuario. Ambientalista. "Hombre árbol" ha dedicado su vida a sembrar árboles en las ciudades gemelas. La naturaleza es sabia, nuestro Creador lo fue mas aún, pero sin lugar a dudas el mas sabio de los mortales es Cesar González, mejor conocido como "Gonzalito", este popular hombre de Duaca estado Lara, ha dedicado parte de su vida a la conservación de las plantas, y con mucha razón es conocido en todo el mundo como el "Padre árbol" Cesar González ya con 87 abriles, continua por las calles y avenidas de las ciudades hermanas, por los bosques, a las orillas de los ríos llevando vida, sembrando árboles para general mas vida y conservar el ambiente y el planeta.Con una habilidad para plantar, enseñar e impulsar creando conciencia, esa que se ha perdido, esa mente que destruye nuestro planeta y nuestro ambiente, en eso anda Gonzalito, enseñando a los niños para no castigar al adulto, como lo dijo una vez el maestro del libertador Simón Rodríguez. Este noble hombre larense de nacimiento pero portugueseño por naturalización tienen mucho por que agradecerles, no hay ni habrá premio alguno que pague todo lo hecho por este humilde venezolano, por que dicho sea de paso siempre lo ha hecho por amor a la madre tierra, nunca para recibir premio alguno. Esta pasión por la naturaleza nació con el y se mantiene viva con el transcurrir del tiempo. Gonzalito se le ve por todo lado sembrando plantas por la vía a Payara un día y al día siguiente esta por la avenida Páez en donde plantó los bellas Caobas, nuestro árbol insignia en la isla de la avenida y más de uno lo tildo de loco, y hay están esplendorosa dando aire y frescura a la ciudad. Su constancia, su paciencia y carisma son calificativos que este personaje puede recibir, ya que este valuarte del ambiente es hoy sin temor a equivocarme la personalidad que más árboles ha sembrado en toda Venezuela. Para este duaqueño quien recibió sus primeras letras siendo en su época la educación muy difícil y precaria logro llegar hasta el 6º para luego realizar un curso de Perito Agropecuario en la Escuela La Providencia en el estado Aragua, con la ayuda de sus padres salió victorioso en esa incursión. Se inicio como perito logrando descubrir cosas importantes en su vida y fue donde se acerco a los problemas centrales de Venezuela que no era otra que la destrucción de grandes bosques para levantar grandes emporios industriales por los mercantilistas de la época destruyendo la naturaleza y su habitad. Su trayectoria y amor por la naturaleza lo ha llevado a muchos lugares del país, prestando sus servicios a muchas empresas como asesor de productores agropecuarios y fincas pecuarias por ser gran conocedor en la materia. Llego a Portuguesa en 1961 donde se residencio en la ciudad de Araure allí se estableció y desde entonces se ha dedicado a la siembra de árboles por todo el territorio portugueseño, de eso hace ya 49 años.
Para Gonzalito sus logros mas importantes es que ha compartido este trabajo con otras personas que persiguen al igual que él sembrar árboles, verlos crecer e inclusive ver que las personas comas de ellos. Por la vía a Payara sembró acompañado con otros amigos 1500 plantas donde hoy día solo quedan algunos tamarindos y mangos ya que los inconcientes los han destruidos. En esta actividad de siembra de árboles se ha sabido ganar el respeto y la admiración de muchos, actualmente se encuentra colaborando en la dirección de preservación del ambiente en el parque Mittar, donde dice sentirse satisfecho por los logros alcanzados ya que ha contribuido con la calidad de vida de las personas.
Valores científicos. 3º año
Humberto Fernández Morán.
Humberto Fernández-Morán nació en Maracaibo el 18 de febrero de 1924. Estudio en la facultad de medicina de la Universidad de Munich. Allí finalizó sus estudios a los 21 años, con los máximos honores. En 1944 regresó a Venezuela, y laboró en el hospital psiquiátrico de Maracaibo. Los dos años siguientes los dedicó a la realización de una especialización en Neurología y Neuropatología en los Estados Unidos. De esta experiencia surgió la creación del "bisturí de diamante", empleado mundialmente para cortes ultrafinos tanto de tejidos biológicos como de muestras lunares traídas a la Tierra, convirtiéndose por ello en el primer venezolano y único latinoamericano en recibir el galardón John Scott en Filadelfia. Durante su carrera, Fernández-Morán fue galardonado en diversas ocasiones tanto en Venezuela, como en el exterior, por sus contribuciones con distinciones como el Sillón XXVI de la Academia de Ciencias Físicas, Matemáticas y Naturales de Venezuela, la designación en su honor del Departamento de Biología Estructural Humberto Fernández-Morán, la Orden del Libertador; Orden Francisco de Miranda, Grado de Comendador; Orden "Dr. Enrique Tejera París"; Profesor Honorario de la Universidad del Zulia; Orden y Título de Caballero de la Estrella Polar conferida por el Rey de Suecia; Medalla Claude Bernard de la Universidad de Montreal; Honoris Causa de la Universidad de Milton; Premio Médico del Año otorgado en Cambridge y un Reconocimiento Especial otorgado por la NASA con motivo del décimo aniversario del Programa Apolo. Un venezolano ilustre. Es así como puede definirse a este hombre de ciencia quien con sus aportes hizo de Venezuela, cuna de investigaciones que hoy día son referencia obligada para el desarrollo tecnológico mundial.
Jacinto Convit
Este médico venezolano creador de la vacuna contra la lepra y nominado al Premio Nobel de Medicina, nació el 11 de septiembre de 1913, En septiembre de 1932, comenzó la carrera de medicina en la Universidad Central de Venezuela. Cinco años después, recibió el título de Bachiller en Filosofía, y optó por el doctorado en Ciencias Médicas con el trabajo "Fracturas de la columna vertebral", título que obtuvo el 27 de septiembre de 1938. En esos años conoció al doctor Martín Vegas, pionero en los estudios sobre la Lepra, quien lo convirtió en su discípulo. Como estudiante visitó la Leprosería de Cabo Blanco, un centro de reclusión de pacientes con este mal, en el que los encerraban por tener prohibido por la ley transitar libremente por las calles. Él mismo afirma que este lugar fue su segunda escuela, y que trabajar de cerca ese mal marcó el camino que seguiría en el futuro. Así se dispuso conseguir la cura contra la lepra. Su esposa, Rafaela Martota, enfermera con quien contrajo matrimonio en 1947, fue su más fiel colaboradora en este proceso. Su primer trabajo como médico graduado fue de residente en dicha leprosería de Cabo Blanco.
A partir de 1940, dedicó parte de su tiempo a laborar como director ad honorem de la Cruz Roja de La Guaira, y a atender consultas de enfermedades de la piel en el Dispensario Central, perteneciente a la escuela de Venereología. Le fueron conferidas por el Ministerio de Salud del Brasil en 1961, la Orden del Libertador en el grado de Comendador y la Medalla Cultura Gaspar Vianna. Convit se entregó a investigar y experimentar con mamíferos, reptiles y hasta peces con el fin de hallar una cura para la lepra. En 1989, realizó un anunció muy importante: los armadillos traídos del Estado Bolívar eran más susceptibles a contraer el bacilo de la lepra, causante del contagio de la enfermedad, que armadillos de otras regiones. A raíz de esto, desarrolló una vacuna que podía ayudar a los que padecían esta enfermedad.Como consecuencia de estos grandes descubrimientos en favor de la humanidad, Convit fue postulado en 1988 al Premio Nobel de Medicina. Es miembro fundador de la Sociedad Venezolana de Dermatología y Venereología, de la Sociedad Venezolana de Alergología y de la Sociedad Venezolana de Salud Pública; y miembro de la Asociación Internacional de Lepra, de la Sociedad Real de Medicina Tropical e Higiene (Royal Society of Tropical Medicine and Higiene), de la Sociedad de Investigación de Dermatología (Society for Investigative Dermatology), de la Academia de Ciencias de América Latina y miembro titular de la Academia Nacional de Medicina. Ha presentado trabajos en 143 reuniones científicas y tiene 262 publicaciones.
Actualmente, es miembro del Comité de Expertos en Lepra de la Organización Mundial de la Salud y Director del Centro Cooperativo de Investigaciones Terapéuticas de la Lepra (OMS) en Venezuela. Algunos de los reconocimientos que ha recibido son el Premio José Gregorio Hernández, el Premio Martín Vegas, la Orden 27 de junio de la Universidad Central de Venezuela, la Orden Francisco de Miranda, Orden del Libertador, la Medalla Federación Médica Venezolana, el Premio Nacional a la Creatividad y a la Inventiva, la Medalla "Salud para todos en el año 2000", y el título Doctor Honoris Causa otorgado por las Universidades Santa María, Francisco de Miranda, Nacional Abierta y Universidad de Los Andes.
Rafael Rangel.
Nació el 25 de abril de 1877 en Betijoque (Edo. Trujillo) y murió el 20 de agosto de 1909, en Caracas. Sus padres fueron Teresa Estrada y Eusebio Rangel Rafael Rangel fue un científico e investigador que se dedicó al estudio de las enfermedades tropicales. Se le reconoce principalmente por ser el primero en describir en Venezuela al Necator americanus, es considerado como el padre de la parasitología de nuestro país. En 1896 obtuvo el diploma de bachiller en filosofía en la Universidad del Zulia, y en septiembre de ese año inició sus estudios de medicina en la Facultad de Medicina de la Universidad Central de Venezuela. Al término del segundo año, abandonó la carrera para dedicarse al laboratorio y a la investigación.
Durante su época de estudiante, trabajó como asistente del Dr. José Gregorio Hernández, fundador de la Cátedra de Histología Normal y Patológica y de la Fisiología Bacteriología. Junto a Hernández terminó de familiarizarse con las técnicas de microbiología. Además, participó en los cursos de bacteriología dictados en el Instituto Pasteur de Caracas, bajo la dirección del Dr. Santos Aníbal Domínici. En 1903, emprendió el estudio que más fama le ha dado, el de la anquilostomiasis como agente casual de anemias graves en el medio rural. En ese momento es cuando describe al Necator americanus, y publica varios artículos. Se traslada a los llanos en 1905 y logra desentrañar la causa de "la peste boba", una enfermedad que afectaba a los caballos. A raíz de eso, describió una nueva variedad del Trypanosoma evansi al que bautizó como Trypanosoma Venezuelense. Cerca de la cuidad de Coro, entre 1906 y 1907, estudió la enfermedad conocida como "el grito de las cabras". Allí demuestra experimentalmente que el agente causal es el Bacillus anthracis o ántrax. A mediados de marzo de 1908, se encargó del estudio y control de una epidemia de peste en La Guaira. Cipriano Castro, presidente de la República para la época, lo pone a cargo de la campaña sanitaria. En menos de un mes, Rangel declaró terminada la epidemia.
Este incidente de La Guaira desencadenó una serie de ataques en contra de Rafael Rangel. Se le acusó de no haber diagnosticado a tiempo la enfermedad y de haber malversado el dinero de la campaña antipestosa. Además, le negaron una beca para estudiar en Europa.Todo esto lo sumió en una profunda depresión, que acabó el 20 de agosto de 1909, cuando vestido de bata blanca en su laboratorio se suicidó tomando cianuro. Sus restos reposan en el Panteón Nacional desde el 20 de agosto de 1977.
Miguel Pérez Carreño.
Este médico, científico y profesor universitario nació en Valencia, estado Carabobo, el 28 de septiembre de 1904. La tesis de grado con la cual obtuvo el título de bachiller en filosofía trató acerca del "Calor animal". Estudió ciencias médicas en la Universidad Central de Venezuela, y antes de graduarse trabajó como monitor de clínica quirúrgica. Culminó su doctorado en 1926, y a partir de ese momento se dedicó en buena parte a la actividad docente. Así llegó a desempeñarse como jefe de trabajos prácticos de anatomía topográfica y medicina operatoria; profesor de anatomía descriptiva; jefe de clínica quirúrgica; decano de la Facultad de Medicina y profesor de clínica quirúrgica I, a la par de su labor en la Policlínica de Caracas y en Bucaral. A partir de 1936, comenzó a investigar y describir el síndrome colo-pericolo-apendicular de origen parasitario, y ocho años después presentó un trabajo sobre este tópico a la Academia Nacional de Medicina, cuya importancia se centraba en que planteaba un tratamiento quirúrgico para dicha enfermedad previo al médico. Dedicó parte de sus últimos años a realizar investigaciones sobre el cáncer. Además, publicó más de 100 trabajos, y varios libros. Junto con sus colaboradores editó entre 1958 y 1966 Patología y clínicas quirúrgicas, una destacada obra de seis tomos.
También fundó la Sociedad de Venezolana de Cirugía, y los servicios de Cirugía del hospital de niños J.M. de los Ríos en Caracas. En su honor, el hospital perteneciente al Instituto Venezolano de los Seguros Sociales, ubicado en El Pescozón al oeste de Caracas, lleva su nombre. Miguel Pérez Carreño murió en Caracas el 22 de junio de 1966.
Juan Manuel Cajigal.
Este el ingeniero, militar, matemático y periodista nació en Barcelona, estado Anzoátegui, el 10 de agosto de 1803. Sus padres fueron don Gaspar Cagigal y doña Matilde Odoardo. Su madre quedó viuda en 1810, a raíz de lo cual su familia se trasladó a Cumaná, donde se encargó de su educación un primo de su fallecido padre, Juan Manuel Cajigal y Niño. En 1816 Juan Manuel Cajigal viajó a España, lugar en el cual cursó estudios de Cadete en el Cuerpo de Húsares Montados, y en la Universidad de Alcalá de Henares. Cuatro años más tarde, fue enviado a París, donde culminó sus estudios de matemáticas con honores, por lo que recibió proposiciones de una institución francesa para dirigir la Cátedra de Matemáticas. Sin embargo, éste prefirió regresar a Venezuela, y ofrecerle sus servicios a José María Vargas, el cual lo recomendó para un cargo en Colombia. Al no recibir ninguna respuesta, Cajigal se trasladó a Cumaná para trabajar como secretario del general José Francisco Bermúdez. Para 1830, cuando la situación política del país se estabilizó, el Congreso Constituyente decretó establecer en Caracas una Academia de Matemáticas, que funcionara bajo las órdenes de Juan Manuel Cajigal. Esta institución inició operaciones el 4 de noviembre de 1831. Este personaje, dirigió la instalación de los primeros telescopios en la capital venezolana. Igualmente, actúo como miembro fundador y secretario de correspondencia de la Sociedad de Amigos del País en 1829, 1830 y 1841. Participó en la política en dos oportunidades, una como diputado por Caracas en 1833 y otra como senador por Barcelona en 1835, período en el que formó parte de las comisiones de Guerra y Marina, y Relaciones Exteriores.
Durante su labor parlamentaria estuvo ligado a asuntos muy importantes como el Tratado Pombo-Michelena, la Ley Orgánica de las Provincias y el extrañamiento del arzobispo Ramón Ignacio Méndez. Además, actúo en los Colegios Electorales, en la Diputación Provincial, en la Dirección General de Instrucción Pública, y dictó la Cátedra de Literatura de la Universidad Central de Venezuela. Fundó y trabajó con José Hermenegildo García y Fermín Toro en el periódico Correo de Caracas, entre 1838 y 1841. Viajó a Europa en ese año, como secretario de la Legación venezolana en Londres. Tres años después, regresó al país para retirarse de la vida pública y de la actividad docente. En ese tiempo escribió un tratado de mecánica titulado Tratado de mecánica elemental, y otro sobre cálculo integral denominado Curso de astronomía y memorias sobre integrales entre límites.
Posteriormente, se mudó al pueblo de Yaguaraparo, estado Sucre, donde murió el 10 de febrero de 1856. Sus restos fueron enterrados en Río Chico, y luego llevados a la iglesia de San Juan de Dios en La Guaira. El Observatorio Naval de Caracas, que fue fundado el 8 de septiembre de 1888, lleva el nombre de este insigne personaje venezolano, como una manera de rendirle homenaje a quién fuera fundador de los estudios matemáticos en Venezuela.
Valores de identidad cultural 4º año
Andrés Eloy Blanco.
Nació en Cumaná (Edo. Sucre) el 1 de agosto de 1896 y murió en Ciudad de México el 21 de mayo de 1955. Andrés Eloy Blanco fue poeta, ensayista, dramaturgo, orador y político. Pasó sus años de infancia en Margarita; luego estudió en el Colegio Nacional de Caracas, para ingresar luego a la Universidad Central de Venezuela donde obtuvo, en 1918, el título de abogado. Blanco formó parte de los hechos de la semana del estudiante de 1928 contra el gobierno de Juan Vicente Gómez, lo cual le mereció la cárcel: primero La Rotunda, en Caracas; luego el Castillo Libertador de Puerto Cabello, períodos que utilizó para desarrollar su labor como escritor (1928-1934). En 1935 es confinado a Valera, por razones de salud. Después de la prisión, el poeta venezolano traía bajo su brazo varios libros escritos con una nueva forma de tratar la realidad, que denominó colombismo. Decía: "…no es una nueva escuela. Es un estado del alma. Se trata de una actitud descubridora del poeta en contacto con la realidad americana". Después de la muerte de Gómez en 1935, Andrés Eloy Blanco militó en las filas del Partido Democrático Nacional (PDN) y resultó electo presidente del Concejo Municipal del Distrito Federal. Fue fundador del partido Acción Democrática en 1941.
Blanco, participó también en la fundación del semanario satírico El Morrocoy Azul (1941). En 1945, Blanco formó parte de la Comisión Redactora de un Código Electoral. Ese mismo año se desempeñó como Diputado por el Distrito Federal y presidió la Asamblea Constituyente desde 1946 hasta 1947. Durante el gobierno de Rómulo Gallegos (1947-48), Andrés Eloy Blanco fue Ministro de Relaciones Exteriores. Cuando este fue derrocado, Blanco pasó al destierro, primero a Cuba, luego a México, donde murió en un accidente automovilístico. Andrés Eloy Blanco poseía un registro verbal que iba del romancero y los poetas del Siglo de Oro español, hasta los acentos del folklore, la leyenda y el habla del común, combinados por un artista que conocía todos los resortes del idioma. La obra de Blanco cosechó éxitos desde horas tempranas de su creación: el poema La espiga y el arado recibió el premio de los Juegos Florales de Ciudad Bolívar en 1916; en 1923, recibe el primer premio en un concurso promovido por la Real Academia Española de la Lengua, por su Canto a España, lo cual le da notoriedad internacional. En 1921, Blanco publica su primer libro Tierras que me oyeron. Andrés Eloy Blanco nos dejó como legado una extensa obra: Barco de piedra, Malvina recobrada, Abigaíl, Baedeker 2000, El huerto de la Epopeya, Navegación de Altura, La Aeroplana Clueca, Poda, Carta a Juan Bimba, Giraluna, Vargas, Albacea de la Angustia, entre otros. Los restos de Andrés Eloy Blanco reposan en el Panteón Nacional desde el 2 de julio de 1981.
Rómulo Gallegos
Nació en Caracas el 2 de noviembre de 1884 y murió en la misma ciudad el 7 de abril de 1969. Sus padres fueron Rómulo Gallegos Osío y Rita Freire Guruceaga. Rómulo Gallegos llega a ser uno de los más prolíferos escritores venezolanos. Su vida, dedicada a la creación literaria, cuenta unas cuantas incursiones en la política, actividad en la que, desempeña los más altos cargos durante los períodos más breves. En 1903, Gallegos comienza a trabajar en la redacción del semanario Arco Iris y, en 1909, participa en la fundación de la revista La Alborada.
Sus escritos también aparecen en las páginas de El Cojo Ilustrado.La dictadura del General Juan Vicente Gómez obligó al caraqueño a refugiarse en España hasta 1936, año en el que regresó a Venezuela para iniciar su actividad de hombre público al ser designado Ministro de Instrucción Pública. En 1937, Rómulo Gallegos es electo diputado al Congreso Nacional y, entre 1940 y 1941, ejerce la presidencia del Concejo Municipal del Distrito Federal. En 1947, Acción Democrática lo postula como candidato a la Presidencia de la República y es electo Presidente Constitucional hasta que, tras diez meses en el cargo, un golpe de Estado le condujo al exilio en México. Gallegos debutó como narrador con Los aventureros (1913), colección de cuentos breves de tono realista, pero es La trepadora (1925) la obra con la que se inicia la madurez artística del autor. En 1929 Gallegos publicó su obra maestra, Doña Barbara, una de las novelas más representativas de la literatura hispanoamericana. Esta obra es un potente fresco realista en el que describe con eficacia la vasta sabana venezolana y la vida primitiva que en ella palpita. A Doña Bárbara le siguió Cantaclaro (1934), novela de tono lírico y sentimental, en la que se narran las peripecias de un cantor ambulante a través de la llanura venezolana. Canaima (1935) cierra la trilogía de las obras en las que Gallegos alcanza su mayor vigor creativo. En años posteriores, el escritor intenta apartarse de la lucha entre la civilización y la barbarie –tema característico de sus grandes creaciones– para desarrollar, entre ficciones y formas literarias, aspectos dramáticos de la realidad venezolana, Con Pobre Negro (1937) y Sobre la Misma Tierra (1943), Gallegos da a su obra tonos históricos y sociológicos, al sumergir a sus personajes en ambientes bañados por radicales transformaciones políticas, sociales y morales provocadas por acontecimientos tan variados como la Guerra Federal o el inicio de la explotación petrolera. En 1957, Rómulo Gallegos obtiene el Premio Nacional de Literatura y, en 1958, es elegido, por unanimidad, individuo de Número de la Academia Venezolana de la Lengua. Como reconocimiento a la labor literaria de este hombre de las letras americanas, se crea el Premio Internacional de la Novela Rómulo Gallegos (1965) y, en 1972, se funda en Caracas, el Centro de Estudios Latinoamericanos Rómulo Gallegos (CELARG). Otras de sus obras publicadas son: El Último Solar, Los Inmigrantes, La Rebelión, El Forastero, La Doncella y el Último Patriota, Tierra bajo los pies.
Miguel Otero Silva.
Nació en Barcelona (Edo. Anzoátegui) el 26 de octubre de 1908 y murió en Caracas el 28 de agosto de 1985. Hijo de Henrique Otero Vizcarrondo, fundador del diario El Nacional; y de Mercedes Silva Pérez. Miguel Otero Silva fue escritor, humorista, periodista y político. Otero Silva realizó sus estudios de primaria en su ciudad natal; secundaria, en el Liceo San José de Los Teques y en el Liceo Caracas; y la educación superior la hizo en la Universidad Central de Venezuela, donde cursó estudios de Ingeniería Civil, carrera que no culminó a causa de sus luchas en contra del régimen dictatorial de Gómez. En 1925, Miguel Otero Silva publica su primer poema en la revista Élite. Asimismo, escribe en el periódico Fantoches y en la revista Caricaturas, demostrando sus dotes para el humorismo.Junto a Carlos Eduardo Frías, Arturo Uslar Pietri y Antonio Arráiz, entre otros, Otero colabora en el único número de la revista Válvula, primera publicación periódica vanguardista de Venezuela. Esto se produjo en 1928, año en el que también ocurren los sucesos de la Semana del Estudiante, encabezados por la llamada generación del 28, de la cual él formó parte.
Vinculado a la conspiración militar del 7 de abril de 1928, Otero debe huir al extranjero y desde allá continuar con su lucha por derrocar la dictadura de Gómez. Es así como participa desde Curazao en una toma del fuerte Amsterdam de esta isla y promueve una invasión a Venezuela por las costas de Falcón (junio 1929). En 1930, Otero se alista en las filas del Partido Comunista Internacional. A la muerte de Gómez, en 1935, regresa a Venezuela y se dedica a escribir en el diario Ahora, tribuna desde la cual critica el régimen "socarrón" de Eleazar López Contreras y es nuevamente expulsado del país, acusado de "comunista", en 1937.Otero Silva viajó por México, Estados Unidos, Cuba y Colombia, lugares en donde dejó testimonios de su creación literaria. Regresó a Venezuela en 1940, cuando Isaías Medina Angarita era el Presidente de la República y había en el país un régimen de libertades públicas que le permitieron a Otero seguir escribiendo y fundar, en 1941, el semanario El Morrocoy Azul, además de otro semanario de izquierda: Aquí está.En 1943, Henrique Otero Vizcarrondo fundó el diario El Nacional y Miguel Otero Silva fue su primer jefe de redacción. En 1946, tres años después de fundar El Nacional, Otero se separa del Partido Comunista de Venezuela. Ese mismo año se casa con la periodista María Teresa Castillo, con quien tiene dos hijos Miguel Henrique y Mariana. En 1949, Miguel Otero Silva se gradúa de periodista en la Universidad Central de Venezuela y preside la Asociación Venezolana de Periodistas. Otero Silva fue apresado en los últimos días de la dictadura de Marcos Pérez Jímenez (1958). Al caer el dictador, Otero fue elegido senador por el estado Aragua, cargo con el cual promueve la creación del Instituto Nacional de Cultura y Bellas Artes (INCIBA, 1960).Entre sus obras se encuentran: Fiebre, novela que se inspira en su lucha contra el régimen gomecista; Casas Muertas, libro que ganó el Premio Nacional de Literatura (1955-56) y Premio de Novela Arístides Rojas; Oficina número uno, La Muerte de Honorio, Cuando Quiero Llorar no Lloro, López de Aguirre, Príncipe de Libertad, La piedra que era Cristo.
Andrés Bello
Nació en Caracas el 29 de noviembre de 1781 y murió en Santiago de Chile el 15 de octubre de 1865. Se destacó durante su vida como humanista, poeta, legislador, filósofo, educador, crítico y filólogo. Andrés Bello vivió hasta los 29 años en Caracas, donde estudió en la Academia de Ramón Vanlosten, leyó los clásicos del Siglo de Oro español y aprendió latín con el padre Cristóbal de Quesada. En 1797 ingresó en la Real y Pontificia Universidad de Caracas, de donde egresó en 1800 graduado de Bachiller en Artes. En 1801 inició sus estudios de Derecho y comenzó a impartir clases particulares; entre sus alumnos estuvo Simón Bolívar. Paralelamente, estudió francés e inglés, y llegó a traducir poesías de distintos idiomas. En 1802, Bello fue nombrado Oficial Segundo de la Secretaría de la Capitanía General de Venezuela. Posteriormente, en 1807, fue Comisario de Guerra, Secretario Civil de la Junta de la Vacuna, y en 1810, Oficial Primero de la Secretaría de Relaciones Exteriores.
En 1808, con la introducción de la primera imprenta en Venezuela y la creación del primer periódico: Gazeta de Caracas, Bello fue nombrado redactor del mismo. En junio de 1810, acompañó a Simón Bolívar y Luis López Méndez a Londres, en misión diplomática ante el gobierno británico, nombrada por la junta de Gobierno de Caracas. En Londres, (1814)contrajo matrimonio con María Ana Boyland, con la que procreó tres hijos. En 1821 enviudó y en 1824, contrajo nuevamente nupcias con Isabel Antonia Dunn. De esta unión nacieron 10 hijos más. Desempeñó diversas actividades políticas e intelectuales, como la Secretaría de la Misión Diplomática. En 1822, fue Secretario interino de la Legación de Chile. También en esa ciudad mantuvo una estrecha relación con Francisco de Miranda, quien puso a su disposición su biblioteca particular, donde Bello estudió griego. Participó, además, en la fundación de la Sociedad de Americanos promovió la publicación de las revistas Biblioteca Americana y El Repertorio Americano.
En 1826, Bello fue electo Individuo de Número de la Academia Nacional, institución que se había creado en Bogotá. En 1828 fue nombrado Cónsul General en París y posible Ministro en Portugal, pero decidió marcharse a Chile en compañía de su familia antes de aceptar este último cargo. El 14 de febrero de 1829 salió de Londres hacia Chile y fijó su residencia en Santiago, donde fue declarado, por el Congreso de Chile (en 1832), ciudadano chileno con todos los derechos, y donde desempeño importantes cargos políticos y culturales: Oficial Mayor del Ministerio de Hacienda, Rector del Colegio de Santiago, Miembro de la junta de Educación, Oficial Mayor del Ministerio de Relaciones Exteriores y senador de la República. Uno de los aspectos más notorios de la vida de Andrés Bello es su obra escrita, los poemas A la vacuna y Al Anauco; El romance a un samán; los sonetos a la victoria de Bailén, A un artista, Mis deseos, Venezuela consolada y España restaurada y Resumen de la historia de Venezuela, entre otros. A su etapa londinense: Alocución a la Poesía, La agricultura de la Zona Tórrida (quizá la obra más conocida de Bello), el Himno a Colombia, Carta de Londres a París por un americano a otro, y Canción a la disolución de Colombia. De su estadía en Chile son: Gramática de la lengua castellana destinada al uso de los americanos, Principios de Derecho de gentes, Principios de Derecho Internacional, Principios de Ortología y Métrica, Código Civil, Análisis ideológico de los tiempos de la conjugación castellana, El incendio de la compañía, Geografía o descripción del universo, Historia de la Literatura, Filosofía del entendimiento, Compendio de gramática castellana para uso de las escuelas primarias y Modo de escribir la Historia.
Valores de la enseñanza y la pedagogía
Luis Beltrán Prieto Figueroa.
Luis Beltrán Prieto Figueroa nació en la ciudad de La Asunción en el estado Nueva Esparta, el 14 de marzo de 1902. Realizó sus estudios primarios y parte del bachillerato en la Escuela Federal Francisco Estéban Gómez. Culminó su educación secundaria en la capital del país, en el Liceo Caracas, bajo la tutela del maestro Rómulo Gallegos.
En 1934, Prieto Figueroa finalizó sus estudios en Ciencias Políticas y Sociales en la Universidad Central de Venezuela, y comenzó una intensa actividad política. En 1936 fundó el partido Organización Venezolana (Orve) y el Partido Democrático Nacional (PDN). Fue senador de Nueva Esparta entre 1936 y 1941, y nuevamente entre 1959 y 1969. Formó parte de la comisión redactora de la Constitución Nacional en 1936 y de la Carta Magna en 1961.En 1941, Prieto Figueroa fundó quizás el partido más conocido de toda Venezuela, Acción Democrática (AD). Fue su secretario general entre 1958 y 1959 y lo presidió entre 1963 y 1967, año en el que se separó del partido y formó el Movimiento Electoral del Pueblo (MEP), el cual dirigió casi hasta su muerte. Prieto Figueroa fue además secretario general de la Junta de Gobierno desde 1945 hasta 1948, así como Ministro de Educación entre 1947 y 1948, siendo en este período coautor del primer proyecto de Ley de Educación. El golpe de Estado del 24 de noviembre de 1948 lo llevó al exilio, hasta el restablecimiento de la democracia en 1958. En este período lejos del país fue profesor de la Universidad de la Habana, y se dedicó incansablemente a la labor educativa como jefe de misión de la UNESCO en Costa Rica y Honduras. A su regreso continuó su labor política y educativa. En 1959 fundó el Instituto Nacional de Cooperación Educativa (INCE). Luego promovió la publicación de las obras completas de Simón Bolívar y de Andrés Bello, fue coautor de la Ley de Educación vigente, promulgada el 9 de julio de 1980, y estuvo siempre presente en las comisiones presidenciales de educación. Prieto Figueroa murió el 23 de abril de 1993. Su constante labor a favor de la educación en Venezuela lo hace merecerse el título de "maestro de maestros".
Simón Rodríguez.
Nació en Caracas el 28 de octubre de 1769 y murió en Amotape (Perú) el 28 de febrero de 1854. Hijo natural de Alejandro Carreño y Rosalía Rodríguez. Hermano del músico Cayetano Carreño. Fue Filósofo, pedagogo, maestro y mentor de Simón Bolívar. Calificado de loco, maestro o don, este ejemplar venezolano, se caracterizó por seguir apasionadamente su ideal de pensar y enseñar en libertad plena. En junio de 1814 se casó con María de los Santos Ronco, acto en el cual se declaró "expósito de esta feligresía". Desde muy joven, Simón Rodríguez se dedicó a la educación y gozó del honor de ser el maestro de Simón Bolívar, en quien influyó notablemente. Toda su vida estuvo acompañada de ideas revolucionarias. Simpatizó con el movimiento independentista de Gual y España, y ante su fracaso, también él debió emigrar. Entonces se dirigió a Jamaica, donde estudió la lengua inglesa. Partió luego a los Estados Unidos y, finalmente a Europa.
La estadía del maestro en el viejo continente le permitió dominar el francés, el italiano, el alemán y el portugués, profundizar sus estudios filosóficos y entrar en contacto con las teorías revolucionarias que pronto implantarían un nuevo orden político y social de alcance mundial. Todos estos conocimientos, más tarde los vertiría en su más destacado alumno: el Libertador Simón Bolívar. En Francia se encontraron maestro y alumno y de allí partieron a un viaje que los llevó a Lyon y Chambery, para luego atravesar Los Alpes y entrar a Italia. En Milán, Rodríguez y Bolívar presenciarían la coronación de Napoléon Bonaparte como rey de Italia; y en Roma, el futuro Libertador de América se comprometería con el futuro de este continente, desencadenado del dominio español. Rodríguez se separó de su alumno y a partir de 1806 inició una peregrinación por varios países de Europa. De vuelta a América, Bogotá fue sede de la primera escuela-taller fundada por el maestro, en 1824. En 1825, Bolívar recibió a su mentor en Lima y lo incorporó a su grupo de colaboradores directos, nombrándolo "Director de Enseñanza Pública, Ciencias, Físicas, Matemáticas y de Artes y Director General de Minas, Agricultura y Caminos Públicos de la República Boliviana". El 7 de enero de 1826, Bolívar regresó a Lima y Rodríguez permaneció en Bolivia, de aquí no volverían a verse más. Aquel año fundó la segunda escuela-taller, con proyecciones para toda Bolivia. Su labor no pudo continuar debido a sus ásperas relaciones con el Presidente de Bolivia, Antonio José de Sucre. Rodríguez renunció a su cargo. El maestro se marchó a Arequipa donde publicó el Pódromo de Sociedades americanas en 1828, obra en la que insistía en buscar soluciones propias para los problemas de Hispanoamérica.Desde Lima, Rodríguez viajó en 1834 a Concepción (Chile) y allí se encuentra por segunda vez con Andrés Bello -ya se habían visto en Europa-.
En Valparaiso escribió en el periódico El Mercurio. En 1842 viajó de Lima a Ecuador. De allí visitó varias localidades de suramérica dejando rastro de su talento y creación inagotable. Simón Rodríguez murió en una aldea peruana en 1854, pobre y sin hogar. Sus restos fueron trasladados en 1954 al Panteón Nacional, en el centenario de su muerte. Algunas de las obras de Simón Rodríguez son: Defensa de Bolívar; El Libertador del Mediodía de América y sus compañeros de armas, Defendidos por un amigo de la causa social; Observaciones sobre el terreno de Vincocaya; Luces y virtudes sociales.
Belén San Juan
"Era una persona extraordinaria, muy humana, generosa, con una rectitud a carta cabal. No toleraba la deslealtad o la traición. Era un ser humano increíble, describe Rubén Hernández, uno de sus ex alumnos. Decenas de personas que la amaron reconstruyen fragmentos de su historia. Según su cédula de identidad nació el 1º de marzo de 1917, en la parroquia San Juan (Caracas). "Pero se lo celebramos el 29 de febrero. Ella decía que cumplía cada 4 años, en los años bisiestos", rememora Hernández. Con su espíritu pionero, Belén San Juan se preparó en la Escuela ormal de Mujeres, donde egresó como maestra en 1936.
Es una de las fundadoras de la Federación Venezolana de Maestros y de la Escuela Experimental Venezuela, puntualiza la profesora América Bracho, compañera de su último proyecto educativo. Según palabras de la propia San Juan, en una entrevista publicada en El Nacional el 20 de junio de 1980, "estoy en la profesión desde 1936. Me inicié en la Escuela Federal Bolívar, ubicada de Sordo a Peláez. Allí duré menos de un año, ya queacepté una invitación de mi gran maestro, el profesor Sabás Olaizola, para formar un grupo que le diera un vuelco a la educación. Así surgió la José Gervasio Artigas, un modelo de enseñanza experimental que se había usado en Uruguay". Con materiales de desecho y bajo la dirección de Olaizola, ayudó a organizar la Escuela Experimental América, en la esquina de Mamey. El régimen de Marcos Pérez Jiménez cerró el plantel, lo que mantuvo a San Juan alejada de las aulas durante varios años. En 1955, le dijo al dueño del aserradero Caracas: "Vengo a hacerle una proposición deshonesta. Hágame estemobiliario para un escuela y le empiezo a pagar dentro de 4 meses". Por la Voluntad de "la señorita Belén" y de Amalia Romero nació el Instituto de Educación Integral en 1955.
El instituto se constituyó en la mejor demostración de cómo enseñar para la libertad y la responsabilidad. "Belén rescató la Republica Escolar, era una forma de autogobierno de los muchachos que contaba de cuatro poderes: Ejecutivo, Legislativo, Judicial y Moral". San Juan involucraba a los estudiantes en el funcionamiento del plantel, en la lucha por la paz. Incuso,destaca Bracho, adoptó una canción de la posguerra para iniciar y clausurar los actos; en una de sus estrofas decía: "que brille siempre el sol".Pero el Instituto de Educación Integral cerró sus puertas a fines de la década de los 90. Arturo Castillo Linares, uno de sus alumnos, señala que la escuela se vio atacada de diversas maneras, que se pretendió afirmar que la metodología era anacrónica. "Fue una manera de quebrarla", lamenta Castillo, "aunque era realmente integral y nos permitía evaluar a losprofesores y evaluarnos nosotros". En opinión de José Miguel Menéndez, uno de los representantes que asumió el reto de una educación distinta para sus hijos, lo más impactante de Belén San Juan era la unidad entre orma y contenido. "Tenia una gran presencia física, los profundos ojos azules, la mirada, los estos, el cabello, en sus gestos. Pero esa imagen formal expresa un contenido importante, era una persona dirigente, magnética, inflexible, autoritaria en el buen sentido de la palabra. De ella lo que más me llamó la atención fue la coherencia entre el pensamiento y la acción", expresa.
Referencias bibliográficas
www.venezuelatuya.com/biografias.htm
www.saber.golwen.com.ar/biogvene.htm
www.venezueladigital.net/biografias/index.htm
Dra. Chirinos Arcaya, Eneida C. Dirección electrónica. Jemyrsch@hotmail.com [email protected]. Licenciado en Educación Integral. Mención Ciencias Sociales. Universidad Nacional Abierta (1992). Licenciado en Educación Integral. Mención: Lengua. Universidad Nacional Abierta (1994). Magíster en Gerencia. Mención: Gestión Educativa. Universidad Bicentenaria de Aragua. (1999). Doctora en Ciencias de la Educación. Universidad Santa María (2005), Actualmente se desempeña como Docente de Aula en el Liceo Bolivariano General "Juan Guillermo Iribarren" del Municipio Araure en el Estado Portuguesa. Autora de la Cátedra del General Juan Guillermo Iribarren, de publicaciones en la Revista CANDIDUS; y en las Columnas "Aquí y Ahora" y ¡Ponte las pilas! ¿Preguntas? … y Respuestas en el Diario Ultima Hora.
Autor:
Dra. Chirinos A, Eneida
Araure, Octubre, 2006
Página anterior | Volver al principio del trabajo | Página siguiente |