Se entiende por estadística criminal " el conjunto de datos numéricos sobre los crímenes y criminales, extraídos de los registros de organismos oficiales, clasificados, dispuestos y analizados en forma que revelen relaciones entre categorías y datos, publicados periódicamente según un plan uniforme. (Tharstein Sellin)
Las estadísticas criminales pueden originarse en diversas fuentes; entre las que se destacan la policial, la judicial y la penitenciaria.
Estadística policial: es aquella que recoge y compila la policía; sus datos abarcan delitos y contravenciones, que son tomados de las distintas dependencias administrativas (intendencias-comisarías, servicio de investigación, etc.).
Estadística judicial: es la que proporcionan los jueces y magistrados penales del país de acuerdo con los procesos iniciados y las providencias dictadas en su desarrollo.
Estadística penitenciaria: compila los datos relacionados con la población reclusa del país: distíngase en ella los sindicados de los sentenciados, las diversas categorías de delitos que se les imputa, el sexo, edad, procedencia y demás aspectos personales de los presos, así como el flujo periódico de ingresos y salidas.
Criminología y política criminal
La Política criminal, en cuanto disciplina que ofrece a los poderes públicos las opciones científicas concretas más adecuadas para el eficaz control del crimen, y las alternativas legales consiguientes, ha facilitado la recepción de las investigaciones criminológicas y su transformación en procesos normativos.
La Política criminal ha sido el puente necesario entre el saber empírico ( Criminología) y su concreción normativa (legislación penal). Hoy en día se comparte la opinión de que Criminología, Política Criminal y Derecho Penal son tres pilares del sistema de las ciencias criminales, recíprocamente interdependientes.
La Criminología esta llamada a aportar el substrato empírico del mismo, su fundamento científico.
La Política criminal, a transformar la experiencia criminológica en "opciones" y "estrategias" concretas asumibles por el legislador y los" poderes públicos.
El Derecho penal, a convertir en proposiciones jurídicas, generales y obligatorias, el saber criminológico esgrimido por la Política criminal con estricto respeto de las garantías individuales y de los principios de seguridad e igualdad propios de un Estado de Derecho.
UNIDAD 3
El positivismo criminológico
LOS PRECURSORES-. POSTULADOS DE LA ESCUELA POSITIVA.- LA CRIMINALIDAD: CRIMINALIDAD REAL, APARENTE, LEGAL, OCULTA, JUDICIAL, IMPUNE, TRATADA, GLOBAL Y PARTICULAR.
EL POSITIVISMO CRIMINOLÓGICO
La consolidación de la Criminología como disciplina empírica, científica, se halla estrechamente unida al positivismo criminológico y. en particular, a la Escuela Positiva italiana, que surge a mediados del siglo XIX como reacción a la Escuela clásica.
El positivismo criminológico representa el momento científico, de acuerdo con la famosa ley de Comte sobre las fases y estadios del conocimiento humano: la superación.'por tanto, de las etapas mágica o teológica (pensamiento antiguo) y abstracta o metafísica (racionalismo ilustrado)
También, significa – según Ferri- un cambio radical en el enfoque del delito: los clásicos habían luchado contra el, castigo, contra la irracionalidad del sistema penal del antiguo régimen; la misión histórica del positivismo será luchar contra el delito, luchar contra el delito a través de un conocimiento científico de sus causas, con el objeto de proteger el orden social: el nuevo orden social de la naciente sociedad Burguesa industrial:
LOS PRECURSORES
Lombroso (1835-1909). Garófalo 11851-1934) y Ferri (1856-1923). son los tres representantes más importantes de la Escuela Positiva. El órgano difusor de la misma fue la revista "Archivo de psiquiatría" "Ciencia penal y antropología criminal".
Lombroso representa la orientación antropobiológica. Su teoría de la criminalidad acentúa la relevancia de los factores biológicos individuales y el carácter atávico-regresivo del delito. Para el autor, "determinados estigmas degenerativos, de transmisión hereditaria, permitirían identificar al delincuente (nato) como un genus homo delinquens, esto es: como una variedad o subespecie mórbida del género, humano inferior.
Ferri simboliza, en el positivismo criminológico, la directriz sociológica, No obstante. Ferri tiene en cuenta, también, los factores antropológicos y los físicos al fundamentar la génesis de la criminalidad. Su aportación primordial discurre más en el ámbito político-criminal (teoría de los sustitutivos penales) que en el estrictamente criminológico. Y más aún en el metodológico. Es uno de los grandes teóricos del método positivo y de los más agudos críticos del Derecho penal clásico, cuya "oración fúnebre" entonó sugiriendo su sustitución por la Sociología Criminal.
Garófalo sistematizó y divulgó el pensamiento positivista, suavizando extremismos doctrinarios. Jurista conservador, dedicó todo su esfuerzo a convertir los postulados teóricos del positivismo en módulos normativos que inspirasen las leyes y transformasen la realidad, a través de la praxis diaria de los jueces. Formuló el concepto de delito natural, sostuvo la prioridad de la prevención especial como fin de la pena, la temibilidad o peligrosidad del autor como criterio rector del castigo, etc., constituyen pilares de su valiosa contribución.
El positivismo criminológico encontró una gran difusión en Italia y algunos países sudamericanos (en éstos, fundamentalmente, la directriz sociológica de Ferri), menor en Alemania, España y sobre todo en Francia. Casi insignificante en los países anglosajones.
POSTULADOS DE LA ESCUELA POSITIVA
Los principales postulados de la Escuela Positiva se encuentran en contraste a los de la Escuela Clásica.
Para la Escuela Clásica el delito es sólo un ente jurídico abstracto, desconectado de su protagonista (el hombre delincuente) y de su entorno (la realidad social), para el Positivismo Criminológico el delito es un hecho real, natural, empírico, histórico, concreto.
Por su orientación garantizados, la Escuela Clásica acátate la definición legal de delito. Los positivistas, por el contrario, entienden que la esencia del crimen no se agota con la violación de la norma jurídica que aquél implica y se esfuerzan por elaborar un concepto natural de delito, de base sociológica, como sinónimo de comportamiento "antisocial", de agresión a las condiciones esenciales de la convivencia. (Garófalo)
Los clásicos acentuaron el binomio "delito – pena" como soporte del sistema. El delincuente "es "solo el "sujeto activo" de la infracción, un concepto lógico de referencia, como lo es el sujeto pasivo o el objeto material. Los positivistas, por el contrario, hacen bueno el dicho de que no existe delito sino el delincuente. Y confieren al examen de éste-como realidad biopsiquica y social -el máximo interés. La persona del delincuente ocupa el centro del sistema: el delito "síntoma" de ,1a peligrosidad o "temibilidad" del autor.
El estudio del delincuente por la Escuela Positiva es fundamentalmente fenomenológico tipológico. Da lugar a una rica gama de tipos criminales y clasificaciones, que parten del conocido esquema lombrosiano aceptándose la hipótesis de que átomos de ellos expresan anomalías orgánicas o psíquicas atávicas, de transmisión hereditaria, que convierten a tales delincuentes en una variedad o subespecie infrahumana.[13]
Mientras los autores clásicos, mantuvieron el principio (metafísico) o dogma de la igualdad del género humano no hay diferencias cualitativas sustánciales entre el hombre delincuente y el no. delincuente- los positivistas vistas propugnan la tesis de la diversidad del crimen (el delincuente como persona distinta del ciudadano honesto). [14]
El protagonismo del delincuente polariza el análisis positivista, matiza todos sus planteamientos. Para la Escuela Positiva, no se castiga el hecho, el delito, sino al autor (El criterio de la medida -del castigo lo da la temibilidad o peligrosidad del delincuente, no la gravedad objetiva y nominal de la conducta que tiene mero valor indiciario. sintomático. La preferencia por el tratamiento, las medidas -en lugar de las penas- y la
necesidad de un sistema individualizador se explican por razón de tal perspectiva.
El sistema del positivismo es igualmente asimétrico, que vuelca los esfuerzos científicos en la persona del autor despreocupándose de orientar, también, su análisis empírico al estudio del delito y de la ley penal.
La Escuela Clásica afirmaba el libre albedrío del hombre. El positivismo es determinista, la libertad humana una ilusión subjetiva según Ferri. Para la Escuela Positiva la "conducta del hombre se halla sometida a la ley de la causalidad – como los" demás fenómenos naturales- y de terminada por un complejo de procesos físicos y sociales.)
El mero hecho de vivir en sociedad- y no el libre albedrío-fundamenta la eventual responsabilidad criminal de quien infringe las leyes (principio de la responsabilidad Social).
El positivismo criminológico antepone la eficaz defensa de la sociedad al garantismo individualista de la Escuela Clásica, los derechos de los ciudadanos honrados a los de los delincuentes, la función protectora de la pena a la función retributiva o incluso a la disuasoria y a la reformadora.
La pena es defensa social, instrumento eficaz al servicio del bienestar social. Se desconfía de la eficacia de la prevención general, aspirándose, fundamentalmente a una adecuada prevención especial: procurando que el criminal no reincida, a través de un sistema de medidas y tratamientos de readaptación acordes con las características individuales de cada delincuente concreto.
Por ello, las garantías legales ceden al arbitrio judicial y penitenciario (principios de la individualización de la pena y de la sentencia indeterminada) Las formulaciones más extremos del positivismo renuncian, incluso, al nullun crimen, nulla poena sine lege y sugieren una radical desjuridización de la función penal, que pasaría de las manos del juez a la de los médicos, antropólogos, sociólogos, psicólogos, etc.
La lucha contra el delito, para el positivismo es lucha contra la causas del delito. La Escuela Clásica confió Ingenua y dogmáticamente la eficacia de la ley penal, en su efecto preventivo-disuasorio, despreocupándose de la génesis natural del delito, de su etiología.
El positivismo clama por un diagnóstico científico del problema criminal (psicológico, antropológico, sociológico, estadístico, etc.) y por la articulación de las estrategias necesarias para neutralizar los factores criminológicos,
En dicho programa. "el Derecho penal ocupa un lugar secundario, porque se cuestiona la eficacia del mismo.
Por ello, más importantes que las penas son los sustitutivos penales, esto es: un conjunto de medidas de orden económico, social, político, educativo, cultural, religioso, familiar, etc., que inciden en la realidad social de modo preventivo contrarrestando de raíz las influencias criminológico de la más diversa índole.
DESVIACIÓN Y CRIMINALIDAD
Se entiende por desviación el conjunto de conductas desviadas que ocurren en una sociedad dada, en un tiempo determinado.
Desviada es toda conducta que se aparta de las normas o patrones comportamiento coercitivamente impuestos por un grupo, "mediante la amenaza de una forma negativa de reacción social, enderezada a procurar el control de tal conducta.
El delito es una especie de conducta desviada, definida como tal por las leyes penales, y a la cual se le asigna una pena como reacción social institucional.
La criminalidad es una especie del fenómeno social cíe la desviación, consistente en la totalidad de los delitos que ocurren en una sociedad y en un tiempo determinados; es, como dice Rico, un "fenómeno de masas".
Los términos conducta desviada y delito son generalmente utilizados para aludir a conductas individuales. Desviación y criminalidad se refieren a los fenómenos sociales consistentes en la sumatoria de todas las conductas desviadas o delitos, según el caso.
Al lado del delito, existen otras especies de conducta desviada, tales como la llamada "enfermedad mental", tenemos también una microdesviación integrado por las conductas que contrarían las normas de las "buenas maneras o costumbres", la moda, etc.
UNIVERSALIDAD Y RELATIVIDAD DE LA DESVIACIÓN
Existen dos características de la desviación: su universalidad y su relatividad.
La desviación es universal porque en todas las sociedades humanas, patentas, presentes y futuras, ella ha existido, existe y existirá. "El delito ha existido siempre en todas partes; pocos hechos tan universales como él".
La delincuencia forma parte de toda sociedad porque es imposible que exista una totalmente exenta de ella. Alfonso Cardoza Ortiz, afirmaba que "la delincuencia será siempre un mal inseparable de la vida social; como la enfermedad y las dolencias suelen acompañar ordinariamente a la vida física".
Es bien conocido el viejo apotegma según el cual, donde hay sociedad hay normas, o derecho, en sentido lato, y como donde hay hombre hay sociedad. Si elaboramos un poco, podríamos también decir que donde hay normas habrá siempre quienes las violen, o lo que es lo mismo, donde hay normas hay desviación, donde hay derecho hay delito, en sentido lato y elaborando aún un poco más puede afirmarse que allí donde hay desviación hay reacción social, donde hay delito ha y sanción.
Pero, siendo, universal, la desviación es también relativa, en cuanto que la definición de lo desviado varía, a veces considerablemente, de sociedad a sociedad y, dentro del mismo grupo social, cambia constantemente con el transcurso del tiempo.
La relatividad de la desviación se expresa en la existencia de diversidad de sistemas jurídicos. De otra parte, una simple mirada comparativa, sobre la geografía o el tiempo, basta para corroborar que lo desviado en un lugar no lo es en otro, y que lo desviado hoy no lo fue ayer o puede no serlo mañana.
LA CRIMINALIDAD
Se entiende por criminalidad el conjunto de delitos y contravenciones cometidos en un tiempo y espació determinados.
Este concepto, sin embargo, admite distinciones según la mayor o menor amplitud con que se torne o de acuerdo con la mente que lo produzca.
Cuando la criminalidad se estudie estadísticamente es necesario precisar tales aspectos; ellos permiten clasificar aquel fenómeno en varias modalidades así tenemos: la criminalidad real, aparente, legal, oculta, judicial, impune, tratada, global y particular
CRIMINALIDAD REAL
Es la totalidad de delitos y contravenciones que efectivamente se realizan en un tiempo y espacio determinados, independientemente de que hayan sido o no investigados o siquiera conocidos por la autoridad o los particulares.
CRIMINALIDAD APARENTE
Está constituida por el conjunto de delitos y contravenciones que llegan a" conocimiento de la autoridad (policía judicial, jueces) en virtud de denuncias formuladas, por conocimiento directo de tales funcionarios, por informaciones confidenciales o mediante cualquier otro medio de comunicación o percepción.
CRIMINALIDAD OCULTA
Resulta de la diferencia que media entre la criminalidad real y la aparente, vale decir, entre el número de hechos punibles realmente cometidos y la cantidad de ellos que ha llegado a conocimiento de la autoridad.
De esto resulta que la cifra de la criminalidad oculta será más o menos amplia según que la autoridad tenga noticia de un número más o menos cercano a la totalidad de infracciones que efectivamente se cometieron.
Si esto fuere así, si la autoridad tuviese conocimiento de la totalidad de los hechos punibles que se hubiesen cometido en un tiempo y lugar determinados, desaparecería la criminalidad oculta. Pero la verdad es que tal hipótesis no se da nunca; incluso en aquellos países culturalmente desarrollados, con eficientes autoridades, siempre existe criminalidad oculta.
Este fenómeno puede tener dos causas, porque el hecho no se denuncia o porque la policía no investiga.
Las razones por las que un hecho delictivo no es denunciado a las autoridades suelen ser las siguientes: no se llega a descubrirse: no ha sido percibido por víctima o testigo como delictuoso; hay desconfianza o animadversión hacia la autoridad policial o judicial; por simpatía hacia el delincuente; porque la comunidad misma se muestra contraria a denunciar, por temor a represalias; porque se considera la condena imponible como más grave que el daño ocasionado por el delito; para evitar ser implicado en la investigación como testigo o eventual copartícipe; porque se piensa que es un perdida de tiempo; cuando exista la posibilidad de obtener reparación por otra vía.
CRIMINALIDAD LEGAL
Es aquella que ha sido realmente investigada por la autoridad competente y en relación con la cual se ha producido un decisión Judicial más o menos provisional, tal como el auto de detención.
CRIMINALIDAD JUDICIAL
Con este nombre se denomina aquella parte de la criminalidad legal que culmina en sentencias condenatorias. Desde un punto de vista esencialmente jurídico, es la única delincuencia reconocida en un Estado de derecho que parte del supuesto de que una persona es inocente mientras no se haya pronunciado en su contra sentencia condenatoria irrevocable.
CRIMINALIDAD IMPUNE
Llamase de esta manera aquella parte de la criminalidad que media entre la aparente y la judicial; en otras palabras, es el número de infracciones penales que habiendo sido conocidas no culminaron en sentencia condenatoria.
CRIMINALIDAD TRATADA
Es aquella parte de la criminalidad judicial que señala las infracciones penales en las que se ha producido sentencia de condena y cuyos responsables efectivamente han cumplido la sanción impuesta. Por fuera de ella quedan los condenados que no descontaron total o parcialmente la pena, en relación con los cuales la fuerza intimidante y resocializadora de la sanción penal no se ejerció plenamente.
Los factores que determinaron esta especie de criminalidad son ausencia del sindicado durante el proceso lo que supone declaratoria de reo ausente, fuga del enjuiciado o sentenciada, condena de ejecución condicional, libertad condicional, perdón judicial, amnistía o indulto.
CRIMINALIDAD GLOBAL
También se la denomina "inespecífica". es aquella que comprende todo el conjunto de delitos y contravenciones sin discriminación alguna; es la suma de infracciones penales cometidas en un determinado tiempo y espacio, cuya realización ha llegado a conocimiento de las autoridades. Esta modalidad y la específica se refieren a la criminalidad aparente.
CRIMINALIDAD ESPECÍFICA
Es aquella parte de la criminalidad global que se refiere a una determinada categoría o especie de infracciones penales; de esta naturaleza es la criminalidad contra la propiedad o contra la vida o contra la libertad sexual. También lo es en sentido estricto, la que cuantifica una determinada clase de hechos punibles; así, delitos de robo, de violencia carnal, de secuestro o de peculado. [15]
CRIMINALIDAD COMÚN Y CRIMINALIDAD DE CUELLO BLANCO
La criminalidad común o convencional es la cometida por el hombre de la calle, la que no requiere de condiciones particulares del sujeto activo. Se concreta en delitos como homicidios, hurtos, ofensas sexuales, etc.
La criminalidad de cuello blanco apunta a un concepto desarrollado por Edwin Sutherland para referirse a los delitos realizados por personas d " de respetabilidad y status social alto, en el curso de su ocupación".
Es la criminalidad "profesional" de los poderosos. Como puede fácilmente comprenderse, la criminalidad de cuello blanco, a pesar del ato «daño social que ocasiona, ofrece uno de los más altos índices de criminalidad oculta.
A la criminalidad oculta de cuello blanco frecuentemente se le denomina cifra dorada de la criminalidad y a la criminalidad común oculta de los poderosos (la no cometida " en el curso de su ocupación"), cifra parda.
UNIDAD 4
LA TIPOLOGÍA LOMBROSIANA.- EL DELINCUENTE NATO: CARACTERÍSTICAS.- EL LOCO MORAL: CARACTERÍSTICAS.- EL DELINCUENTE EPILÉPTICO: CARACTERÍSTICAS.- EL DELINCUENTE LOCO (PAZZO. DELINCUENTE PASIONAL.- DELINCUENTE OCASIONAL.- LA DELINCUENCIA POLÍTICA, VALORACIÓN DE LA OBRA DE LOMBROSO.
CESARE LOMBROSO (1835-1909)
Nace en Verona, Italia, el 6 de noviembre, en el seno de una familia acomodada de judíos. Joven precoz, a los quince años había escrito ya ensayos sobre la Historia dé Roma y la estructura agrícola de la vieja Italia; a los treinta contaba con doce libros importantes descubrimientos en el ámbito médico, como los estudios realizados sobre el cretinismo y la pelagra, sobre las propiedades desinfectantes del alcohol, etc. Realizó estudios de medicina en Pavía, Pádova y Viena. Su tesis doctoral versó sobre el "cretinismo en Lombardía".Fue médico militar, y desde 1864. Realizó importantes estudios antropométricos' comparando los daros obtenidos del análisis de tres mil soldados y habitantes de las diversas regiones italianas. Se interesó por el frecuente uso del tatuaje obsceno por los soldados delincuentes.
En 1853 obtuvo permiso para estudiar a los enfermos del Hospital de Santa Eufemia, de Pavía, en la sección de pacientes enfermos mentales. En 1884 fue nombrado médico de las cárceles de Turín. Conoció a Ferri y Garófalo en un curso de Psiquiatría y Antropología Criminal, fundando con ellos una verdadera escuela en la que Lombroso es el antropólogo. Ferri el propagador y sociólogo y Garófalo el estabilizador y jurista.
SU OBRA
Su obra es innumerable, tanto por su extensión, como por su temática que versa sobre medicina, historia, antropología, psicología, psiquiatría, demografía, política, espiritismo, criminología, etc.. Al parecer, más de 650 publicaciones entre las que se destacan:" El hombre delincuente", "El crimen, causas y remedios".
"La donna delinquente." El crimen político y las revoluciones", "Aplicaciones de la Antropología criminal". etc.
LA TIPOLOGÍA LOMBROSIANA
Está integrada por seis miembros.
1º Delincuente nato (atavismo)
2 º Delincuente loco moral (morbo)
3 º Delincuente epiléptico (epilepsia)
4 º Delincuente loco:
a) alienado
b) alcohólico
c) Histórico
d) mattoide
5 º Delincuente ocasional:
a) seudocriminales
b) criminaloides
c) habituales
6º Delincuente pasional
EL DELINCUENTE NATO (ATAVISMO)
Según Lombroso, criminales y no criminales se distinguen entre sí en virtud de una rica gama de anomalías y estigmas de origen atávico o degenerativo. El delincuente es un ser atávico; producto de la regresión a estadios primitivos de la humanidad; un subhombre" o especie distinta e inferior al homo sapiens. hipoevolucionada – genus homo delinquens– como consecuencia de un genuino "salto atrás hereditario". Dicha regresión se haría patente a través de rasgos y deformaciones físicas propias de especies vivas inferiores que aún perviven en razas salvajes.
En el plano anímico reflejaría las actitudes y mentalidad del hombre aborigen, incompatibles con las exigencias de la sociedad actual.
Este planteamiento complementa luego, con una referencia a la teoría de la degeneración, esto es, a la condición patológica y enfermiza del delincuente. El criminal seria, pues, un individuo ancestral y degenerado que esto exhibe los estigmas físicos y mentales del hombre primitivo.[16]
Características físicas
Las principales características físicas o estigmas de esta subespecie humana, eslabón perdido que se sitúa entre el homo sapiens y los "vertebrados superiores", serían, entre otras: frente huidiza y baja, gran desarrollo de los arcos superciliares, asimetrías craneales, fusión del hueso atlas y el occipital, gran desarrollo de los pómulos, orejas en forma de asa, tubérculo de Darwin, gran pilosidad, braza superior a la estatura, etc.[17]
Además de tales estigmas físicos, somáticos, señaló también, otras taras de diversa naturaleza, sociales y morales, hábitos y costumbres del delincuente nato": peculiaridades sensoriales y funcionales como su notable analgesia (insensibilidad al dolor, al mero tacto), agudeza visual proporcionalmente muy superior a la auditiva, gran agilidad, frecuente mancínismo (zurdería) y mayor robustez de los miembros izquierdos, insensibilidad afectiva, falta de sentido moral y remordimiento, cinismo, vanidad, impulsividad, crueldad, afán vindicativo, ociosidad, tendencia al juego, a las orgías, uso frecuente del argot y de tatuajes obscenos, etcétera, propensión a asociares con otros delincuentes formando bandas y elevados índices de reincidencia.
EL LOCO MORAL
El segundo tipo guarda semejanzas con el delincuente nato.
Se trata de "una especie de idiota moral, que no puede elevarse a comprender el sentimiento moral, o si por la educación lo tuviera, ésa, se estacionó en la forma teórica, sin traducirse en la práctica; son daltónicos, son ciegos morales, porque su retina psíquica es o se transforma en anestésica. Y como falta en ellos la facultad de utilizar nociones de estética, de moral, los instintos latentes en el fondo de cada hombre toman en él ventaja" {Krafft.-Ebing)
Características
Su corpulencia física, analgesia, astucia, precocidad sexual y desviaciones frecuentes de este instinto, incapacidad para la vida en familia, perversión afectiva, vanidad morbosa, inteligencia natural intacta, holgazanería, desfachatez en la comisión arrogante de hechos criminales. Al igual que el delincuente nato, el loco moral suele serlo desde la infancia o la pubertad, encontrándose criminalidad entre sus parientes y familiares próximos. [18]
EL DELINCUENTE EPILÉPTICO
Un tercer tipo es el "delincuente epiléptico", basado en dos nuevos casos reales, el del "conde belga" y el del soldado napolitano Misdea.
Se trata, según Lombroso de individuos violentos y agresivos. No padecen ninguna enfermedad mental declarada, ni el clásico estado alcohólico. Cometen delitos gravísimos sin experimentar después, remordimientos, coincidiendo al referirse a determinadas sensaciones (vértigos, temblores, pérdida del control, etc.) durante el acceso comicial.
Características
Entre las principales características señala: destructividad, precocidad sexual y alcohólica, obscenidad, sonambulismo y estados crepusculares, rapidez de cicatrización de las heridas, tendencia a la holgazanería, canibalismo, vanidad, grafomanía y doble personalidad en la escritura, intermitencias y cambios de humor, amnesias frecuentes, propensión al tatuaje, al empleo de ciertas expresiones reiteradas, al agrupamiento con otros enfermos, etc .1
DELINCUENTE LOCO (PAZZO)
Dentro de este tipo de delincuente existen subtipos: alcohólico, el histérico y el mattoide.
Lombroso realizó en Italia una labor semejante a la de Pinel en Francia, distinguir los reclusos enfermos mentales de los reclusos no enfermos mentales, propugnando la creación de manicomios para los primeros, en lugar de cárceles. Diferenciaba Lombroso el delincuente loco (que ha cometido un delito con plena responsabilidad y enloquece después en la prisión) del loco delincuente (enfermos mentales que delinquen sin la necesaria capacidad de entender y querer.[19]
EL DELINCUENTE PASIONAL
Todos los delitos cometidos por este delincuente "de ímpetu" tienen como substrato la violencia de alguna pasión (no sólo la pasión sentimental, también la religiosa, la patriótica, etc.). El individuo pasional difiere de todos los tipos anteriores: no es un delincuente loco, ni un sujeto atávico o epiléptico, ni un loco moral.
DELINCUENTE OCASIONAL
Este sexto de la tipología de Lombroso, lo reconoce muy tardíamente, se dice que fue por influencia de Ferri. No es un tipo homogéneo, y. consta de tres subtipos: los seudocriminales, los criminaloides y los delincuentes habituales.
LA DELINCUENCIA FEMENINA
Lombroso se ocupó de la delincuencia femenina en su obra "La donna delinquente, la prostituta e la donna nórmale", que fuera escrita en colaboración con Ferrero.
Considera a la prostitución como un fenómeno atávico, específico de la mujer, sucedáneo y, al propio tiempo, alternativo de la criminalidad.
La forma natural de regresión, en la mujer es la prostitución, no el crimen: la mujer primitiva era impura, no delincuente. Por ello, cabe detectar los estigmas degenerativos propios del delincuente nato con mucha mayor facilidad entre prostitutas que en el resto de la población femenina. O. lo que es lo mismo: el delincuente nato femenino abunda más entre mujeres prostitutas que en las demás mujeres delincuentes.
La prostitución, por otra parte, opera como alternativa eficaz y segura para la mujer que puede escoger entre el delito o la prostitución; precisamente por ello son más reducidos sus índices de participación en el crimen, comparados con los de la delincuencia masculina.
LA DELINCUENCIA POLÍTICA
En su obra "El crimen político y las revoluciones", trata de la delincuencia política., realizada junto con Laschi.
El interés por esta temática parece tener su origen en una observación que hizo Laschi al visitar el Museo de la Patria de Turín: los grandes héroes y prohombres de la Patria exhibían características propias del delincuente "nato". Como ya había sucedido a propósito de la donna delincuente. Lambróso llega a la conclusión de que no existe un tipo unitario y homogéneo de "delincuente político".
VALORACIÓN DE LA OBRA DE LOMBROSO
El resultado neto de la teoría de Lombroso no es muy grande en términos generales. Ni su teoría del delincuente nato", ni la del "tipo delincuente" resistieron la prueba del tiempo. Sin embargo, debemos admitir que logró consolidar la idea ya conocida antes de 1870, de que debería considerarse al delincuente como un caso patológico, como un degenerado; y se debe en gran parte a su influencia el hecho de que en la actualidad se conceda in foro a este aspecto del problema una atención mucho mayor que antes.
El gran mérito de Lombroso no reside, probablemente, en la originalidad de sus tesis antropobiológicas, la que muchas de éstas eran ya conocidas y el autor se limitó a sistematizarlas. Tampoco en la perfección de su método, pues tanto sus estudios antropométricos como sus inferencias estadísticas exhiben el escaso rigor de un empirismo incipiente.
El gran mérito de Lombroso no es otro que el haber llamado la atención sobre el protagonismo del hombre delincuente en el suceso criminal del hombre real, concreto, histórico. Que no existe el crimen sino el criminal.
Se le ha reprochado la escasa importancia que concedió a los factores sociales, ambientales, por la misma razón que a los sociólogos se les censura lo contrario: que infravaloren la relevancia de la carga biológico –genética de cada individuo. La objeción es irrefutable, cierta. Lombroso exacerbó el impacto criminógeno del código biológico, del legado hereditario que el hombre recibe de la naturaleza ( el delincuente nace).
Otros autores restan trascendencia a los rasgos anatómicos, por considerar que los tiene toda persona o que carecen del significado criminógeno pretendido.
Así. Manouvrier advertía. No existe un hombre en el que no se pueda encontrar alguna anomalía muscular o de otra clase que no recuerde una conformación propia de los simios o los cuadrúpedos; añadiendo: No hay nada que pueda servir para caracterizar al delincuente…. ni siquiera la famosa fossette del occipital que según la maliciosa observación del profesor Benedikt, podría indicar, a lo más, una propensión a las hemorroides".
Otros, por último, niegan, en su caso, el carácter atávico de las malformaciones detectadas.
UNIDAD 5
Enrique Ferri. Su pensamiento criminológico
SUS POSTULADOS.- LA TIPOLOGÍA CRIMINAL.-RAFFAELE GARÓFALO.-EL DELITO NATURAL.-SU PENSAMIENTO RESPECTO DEL POSITIVISMO. -LA TEORÍA DE LA CRIMINALIDAD.-LA PENA DE MUERTE.
ENRIQUE FERRI 1856-1929
Hace en San Benedetto (Mantua), en el seno de una familia modesta. Su padre era vendedor ambulante. Entre todos los partidarios de Lombroso. Ferri, fue quien realizó una labor más apreciable de divulgación de la doctrina. Era orador brillante, hábil polemista y manejaba con facilidad la pluma.
Como hombre de ciencia, fue el primero en observar que la teoría de Lombroso resultaba insostenible en su forma original. Consiguió traer a su lado a los demás representantes de la Escuela Positiva, incluso al propio Lombroso. Buena prueba de ello tenemos en el libro de este último "El crimen, causas y remedios", publicado en 1838. Esta obra trata tanto de las causas sociales del delito como de las individuales y en ella se abandona el punto de vista pesimista de que no existe remedio para el delito.
En su Sociología criminal se ocupa de los sustitutivos penales.(medidas correctivas que pueden reemplazar a la pena). Proporciona en este libro la fórmula siguiente para explicar el origen del delito: "Todo delito es el producto de condiciones individuales, físicas y sociales".
A veces es uno de esos factores el de mayor importancia y otras veces lo es otro, en conjunto, sin embargo, el factor más importante es el individual: "El ambiente social da su forma al delito: pera su origen lo debemos ver en las inclinaciones biológicas antisociales (tanto orgánicas como psíquicas)".
1º La aportación de Ferri a la ciencia criminal y a la Criminología es de notoria importancia. En su obra "Principios de derecho penal", sintetizó de la siguiente manera: "Haber demostrado la inexistencia del libre albedrío que la defensa de la sociedad es el objetivo máximo de la justicia penal; los tres tipos de factores en la génesis del delito; la clasificación de los delincuentes en cinco grupos; la estrategia de los sustitutivos penales como mecanismo indirecto de tutela del orden social; la motivación y no la supuesta naturaleza objetiva del delito como base del sistema de sanciones; la propuesta De que se sustituyan las granjas coloniales por el aislamiento celular del recluso durante el día; la sentencia indeterminada, en lugar de penas con límites taxativamente prefijados en la ley; la solicitud de hospitales para delincuentes mentalmente enfermos; la abolición del jurado; el empleo generalizado de la indemnización como castigo en el ámbito del derecho público, y el principio de que el crimen ha de ser estudiado a través de la persona del infractor.
Asimismo se suele añadir por la doctrina otros méritos suyos, como el de la propia invención del término" delincuente nato".el concepto de responsabilidad legal como contrapuesto al de responsabilidad moral, su contribución a la consolidación de la sociología criminal.
2º Una de las facetas más importes de la obra de Ferri es la metodológica. Afirmó que el método experimental, inductivo, era el único capaz de deparar el conocimiento necesario para abordar científica y eficazmente el problema criminal. Sólo este método inductivo -experimental permitiría un análisis del delito acorde con tres conocidas exigencias del positivismo: medir y cuantificar el fenómeno estudiado, adoptar una postura neutral, objetiva, en la investigación, y enunciar las leyes naturales que regulan inflexiblemente el suceso social examinado. Psicología positivista. Antropología criminal y Estadística social constituyen para este autor los tres pilares de la nueva disciplina criminal, de la Sociología Criminal, de la que el viejo Derecho Penal "clásico" será mero apéndice.
La Psicología positiva demuestra que el libre albedrío es una ilusión subjetiva. La Antropología criminal, que el delincuente es un individuo anormal, degenerado, atávico. La Estadística, que el crimen tiene una dinámica propia, en la que apenas influyen las leyes penales y las sentencias de los magistrados.
3º La negación del libre albedrío constituye el punto de partida de su pensamiento. El hombre se halla sometido a las leyes de la naturaleza, a la causalidad, pero son muchas y muy diversas las causas que determinan su comportamiento y la combinación entre ellas.
El hombre responde porque vive en sociedad, no porque sea o deje de ser libre. Se trata, pues, de una responsabilidad "legal" o "social", no "moral", que permite atribuirle las consecuencias naturales y sociales derivadas de sus propios actos por el mero hecho de vivir en sociedad con los demás y haberlos ejecutado.
Otro postulado suyo es el de la finalidad de la pena: no el castigo del delincuente (pena castigo), sino la defensa de la sociedad (pena defensa) de acuerdo con el grado de peligrosidad del autor y el de reprochabidad de su motivación. La gravedad del hecho mismo, su naturaleza, y la culpabilidad del infractor pasan a un segundo plano.
4º para Ferri el delito es producto de una anomalía biológica, física y social, a diferencia de otras tesis contemporáneas que veían en el hecho criminal el resultado de anormalidades exclusivamente biológicas o exclusivamente sociales, o incluso, un fenómeno funcional.
Sin embargo, confirió una clara prioridad criminológica (etiológica) y político-criminal a los factores sociales. En primer lugar, porque a ellos se debe, a su juicio, el incremento general de la criminalidad.
En segundo lugar, porque son los más accesibles a la acción del legislador, que puede modificarlos, corregirlos.
5º La ineficacia de la pena como instrumento capaz de neutralizar, en su caso, tan sólo los factores psicológicos del delito, pero no los restantes, más importantes – lleva a Ferri a formular su teoría de los sustitutivos penales. Los sustitutivos penales se proyectan en todos los ámbitos del orden social; en lo económico, político, científico, etcétera, legislativo, religioso, familiar, educativo.
6º Es conocida, por último, su tipología, que suele tomarse como una de las clasificaciones paradigmáticas del positivismo criminológico. Consta de cinco miembros, al que se une un sexto en las adiciones a la quinta edición de la Sociología Crimínale.
Delincuente nato,
Delincuente loco o alienado
Delincuente pasional.
Delincuente ocasional.
Delincuente habitual.
pseudodelincuente o delincuente involuntario.
RAFFAELE GARÓFALO (1852-1934)
Nace en Nápoles, en el seno de una familia aristocrática, católica y conservadora. Perteneció desde muy joven, a la carrera judicial. Magistrado, primera, y presidente del Tribunal de Casación, ocupó desde 1887 la cátedra de derecho Penal de la Universidad de Nápoles.
Garófalo es conocido por su definición del "delito natural"; por la importancia que asigna al autor en el sistema del Derecho Penal, siendo éste el criterio que inspira la clasificación de las penas y la propia fundamentación de éstas (prevención especial)-, por haber propugnado con especial generosidad y contra comente la pena de muerte acudiendo al símil naturalista de la ley de la selección natural de las especies; incluso por haber conseguido acuñar la actual denominación de la Criminología con más éxito que Lombroso o Ferri.
Garófalo discrepó, a menudo, del pensamiento ortodoxo de sus compañeros de escuela: en lo filosófico (determinismo moderado), en lo político (extremadamente conservador), en lo político-criminal (partidario inequívoco de la pena capital), en lo criminológico (no comparte la teoría de la criminalidad antropológica de Lombroso ni el sociologismo de Ferrí. crítica las tipologías criminales de ambos, etc.). en lo estrictamente penologico (especial énfasis del principio de la prevención especial como fundamento del castigo).etc.
Sin embargo, su fé ciega en el método empírico-inductivo, y la radical superioridad que reconoce a la sociedad respecto al individuo, son dos premisas básicas del positivismo que comparte con Lombroso y Ferri.
1º Según Garófalo, el positivismo criminológico hablaba siempre del delincuente, olvidando que este concepto presupone el de delito.
Por ello consideró una necesidad lógica la definición de este último, pero con independencia de las pautas legales. El concepto de "delito natural" pretende suministrar una noción de crimen autónoma, estrictamente criminológica, que permita el ámbito y objeto de una nueva disciplina empírica.
Es contrario a la hipótesis del atavismo, de fondo epiléptico, como explicación teórica del delincuente nato antropológismo lombrosiano. Considera verdadero delincuente sólo a aquel que exhibe una falta de alguno de los dos sentimientos (o de ambos): del sentimiento de piedad (rechazo de la causación voluntaria de sufrimiento a los demás) o del sentimiento de probidad (respeto a los derechos de propiedad ajenos); vivencias ambas que integrando la sensibilidad moral variable de cada momento histórico, se presentan en estadios más o menos avanzados y resultan esenciales para la convivencia social.
2º La teoría de la criminalidad de Garófalo; más exactamente, su diagnóstico sobre el hombre delincuente, se distancia tanto del análisis antropológico lombrosiano como del sociologismo de Ferri.
Para los clásicos el delincuente era una ficción: el sujeto activo del delito. Los positivistas invirtieron los términos del problema: no existe el delito sino el delincuente. Este autor tuvo el mérito de destacar la necesaria correlación entre el concepto de delito y el de delincuente.
En la teoría de la criminalidad desempeña un papel decisivo el concepto de anomalía psíquica o moral, esto es la carencia en el delincuente de un adecuado desarrollo de la sensibilidad moral, de vivencias altruistas: defecto no mero producto de factores ambientales, sino condicionado por una tase orgánica.
Dicha anomalía moral, según este autor, difiere claramente de la genuina enfermedad mental. Porque no se trata de un factor patológico, en sentido estricto, sino de una variación psíquica, transmisible sin lugar a dudas por vía hereditaria, y que aparece con mayor frecuencia entre miembros de ciertas razas inferiores que en las modernas sociedades civilizadas.
Los factores sociales y ambientales tienen un valor secundario en orden a la explicación e incluso a la prevención del crimen, dado que su teoría de la criminalidad es una teoría endógena que potencia el carácter congénito o hereditario dé la anomalía moral del individuo delincuente.
3º La tipología criminal de este autor rompe con el modelo positivo convencional. Partiendo de la base de que el déficit orgánico de sensibilidad moral varía de unos individuos a otros, distingue cuatro clases de delincuentes, según el grado de carencia que exhiban en los sentimientos morales altruistas de probidad o piedad: asesinos, delincuentes violentos, ladrones y criminales lascivos.
4º La teoría de la pena la concibió como la eficaz defensa dé la sociedad contra la criminalidad, pero potenciando al máximo la idea de prevención especial.
Defendió la pena de muerte, como consecuencia del "darwinismo social" que inspira su obra. Existe un proceso de selección natural de las especies que condena a muerte a aquellas que no se adaptan al medio. Debemos seguir el ejemplo de la naturaleza y eliminar de la sociedad a quienes por un déficit o ausencia de los necesarios sentimientos altruistas han demostrado su incapacidad para adecuar su conducta a las exigencias de la convivencia social.
La pena de muerte por tanto, no es sino un mecanismo de selección artificial que sigue, simplemente, el sabio modelo de la naturaleza.
En el sistema de penas Garófalo juega un papel decisivo pues, dos ideas, la de eliminación de quienes representan un serio peligro para la comunidad, de una parte; y de otra, la continúa referencia al proceso de selección natural, que opera como legitimación moral tácita del castigo.
Ambas explican, probablemente, el rigor, naturaleza y prelación de los instrumentos defensas en cada caso indicado, según Garófalo, que en último término se prescribirán de acuerdo con las características y temibidad del tipo criminal de que se trate.
CLASIFICACIÓN DE LOS DELINCUENTES
La preocupación esencial de Garófalo fue demostrar la existencia del concepto de delito natural, y apoyado en esta noción, deriva la clasificación de los delincuentes, en:
a)Privados del sentimiento de piedad, o sea los asesinos.
b)Privados del sentimiento de probidad, los ladrones.
c) Privados de los sentimientos de piedad y probidad, como los salteadores de caminos y los violentos.
Posteriormente agrega a esta clasificación, el grupo de los cínicos, en los que incluía a los violadores, raptores, estupradores, psicópatas sexuales, etc., los que segregó del grupo de los asesinos.
La existencia de los delitos naturales, llevo a pensar a este autor, que los delincuentes que incurren en estos delitos, no merecen ninguna consideración. El criminal, lo es por una deficiencia moral, que es muy difícil de corregir, por lo que debe de excluírsele o suprimírsele. Al lado de los delitos naturales existen los delitos legales, los que. para Garófalo, no requieren sino sanciones benignas, como la reparación del daño causado cuando sea posible, porque estos delitos no atentan contra los sentimientos de piedad y probidad, ya que sólo pretenden conservar el orden público, la seguridad del Estado.
Numerosos críticas se han enderezado contra el concepto del delito natural, por ejemplo se afirma que es arbitraria su elección de los sentimientos de piedad y probidad, que además no existe un criterio definido para conocer la medida media, en que cada sociedad debe conocer dichos sentimientos; y que la distinción entre el delito natural y legal es artificial, ya que la estabilidad y la integración del grupo social también dependen de la conservación del orden público o de la seguridad del Estado.
Eugenio Florián abunda en la crítica de las ideas de Garófalo cuando escribe: "Como la incriminación de un hecho, como delito es siempre la manifestación de exigencias sociales más o menos imperativas, y por consiguiente, el producto de determinadas condiciones de lugar y tiempo, el concepto de delito natural, a diferencia del legal va contra la realidad, o al menos, representa un concepto equívoco".[20]
UNIDAD 6
Orientaciones biológicas. La antropometría criminal
NOCIÓN.- LA ANTROPOMETRÍA.-A. BERTILLON.- LA BIOTIPOLOGÍA.- ESCUELA FRANCESA.- ESCUELA ALEMANA. -ESCUELA ITALIANA.-ESCUELA AMERICANA.
EN EL ÁREA DE LA ANTROPOLOGÍA
LA ANTROPOLOGÍA CRIMINAL. NOCIÓN.
La antropología criminal es la disciplina que se ocupa de la investigación y desenvolvimiento teorético de los factores primordialmente biológicos que intervienen en la génesis de la personalidad antisocial y de la delincuencia como factores predisponentes y potencialmente activables en la interacción socio-cultural, sean hereditarios, constitucionales o adquiridos.
LA ANTROPOMETRÍA
Se denomina antropometría, en su sentido estricto, a la parte de la antropología que trata de las medidas y proporciones del organismo humano, con fines comparativos y estadísticos (de anthropos + metron)
LA ANTROPOMETRÍA:
La Criminología. en sus orígenes históricos, se halla estrechamente unida a la Antropología. En una primera etapa, la Antropología se identificaba con la Antropometría. ya que todos sus esfuerzos se orientaron a fundamentar una supuesta correlación entre determinadas características o medidas corporales y la delincuencia.
Con Lombroso se diversificó tan estrecha óptica, abarcando las investigaciones antropológicas a otros muchos ámbitos y perspectivas: fisionómicos, organoscópicos, biográficos, étnicos, genéticos, etc.
No obstante, ha predominado en la Antropología el enfoque antropométrico ( búsqueda de ciertas medidas que faciliten, junto con otras técnicas, la identificación del delincuente), así como el estudio de las costumbres y hábitos de los criminales y la de los factores físicos que pueden asociarse al comportamiento delictivo. Esto es. la evolución de la Antropología criminal parece apuntar más hacia una Antropología biológica que hacia una Antropología cultural. [21]
ALPHONSE BERTILION (1857 1914)
Los principales progresos en el campo de la Antropometría se debieron a Alphonse Bertilion Hijo de médico y nieto de matemático, francés, trabajó en los archivos de Surete"
Bertillon. Ideó un complejo sistema de medidas corporales, once inicialmente que unidas a la fotografía de los delincuentes, pretendía servir como instrumento de identificación de éstos.
El método despertó numerosas críticas y rechazos: " Su informe se lee como si fuera un chiste', le reprocharía uno de sus superiores. Pero lo cierto es que el bertillonaje" acabó siendo adoptado por las policía y presidios de todo el mundo.
Según su creador, midiendo la estatura, la longitud de la cabeza, la del dedo medio, la máxima de los brazos, etc. pudieron ser identificados muchos delincuentes que, en otro caso, hubieran escapado a la acción de la justicia.
El "bertillonaje" sólo puede ser entendido como un método de identificación del delincuente, unido a otras técnicas más modernas, en el marco de la Criminalística. Pero que, en modo alguno, aporta una teoría explicativa del hecho criminal que importa a la Criminología. [22]
La biotipología
Es la disciplina que se ocupa del estudio de los tipos antropológicos y de sus variaciones de carácter constitucional y hereditario (bio + tipos).
LA BIOTIPOLOGÍA:
En su etapa precientífica está representada por los fisonomistas, existiendo desde luego una cantidad no despreciable de trabajos desde los griegos hasta el renacimiento.
Así es muy conocida la tipología de Hipócrates (padre de la medicina), quien fundamentó su tipología en los humores; al comienzo admitió tres: sangre, mus y flema, agregando posteriormente la bilis negra, con el objeto de no romper el orden cósmico de su tiempo, que se basaba en cuatro elementos: aire, tierra, agua y fuego.
Para Hipócrates, con el predominio de la sangre se da el tipo sanguíneo individuos de cuello grueso, propensos a sangrar por las fosas nasales ya las insolaciones. Con el predominio de la bilis se da" el tipo colérico, individuos de constitución delgada. Con el predominio del flema se da el tipo flemático: individuos de reacciones lentas y débiles en general Con el predominio de la bilis negra se da el tipo melancólico.
Tipo sanguíneo predominio de la sangre
Tipo colérico predominio de la bilis
Tipo flemático predominio de la flema
Tipo melancólico predominio de la bilis negra
La Biotipología es la ciencia del tipo humano poliédrico, concebido como unidad vital (biotipo), con varias facetas: Morfología, Fisiología y Psicología, según la conocida definición de Lavasfigne; biotipo. la resultante morfológica, fisiológica y psicológica, variable de individuo a individuo, de las propiedades celulares y humorales del organismo.
Se trata, pues, de una disciplina científica, cuyas precursoras fueron la Fisonomía y la Psicología, que versa sobre el "tipo humano" atendiendo al predominio de un órgano o función. Su premisa es que existe una correlación entre las características físicas del individuo y sus rasgos psicológicos, entre tipo somático o corporal y tipo mental o temperamento.
De las innumerables tipologías, cabe resaltar las siguientes, partiendo de una clasificación por escuelas:
ESCUELA FRANCESA
En la Escuela Francesa destaca Claudio Sigaud (182-1921), quien distinguía cuatro "tipos" humanos según el sistema que predomine en los mismos (respiratorio, digestivo, muscular y cerebral), sistemas que conectan, a su vez, con los cuatro medios principales (atmosférico, alimenticio, físico y social).
respiratorio atmosférico
digestivo alimenticio
muscular físico
cerebral social
Las características de los cuatro tipos son:
a) Respiratorio. El tronco es relativamente pequeño, tórax muy desarrollado en anchura y altura. El tórax predomina sobre el abdomen y presenta una cara romboidal con preponderancia de la zona respiratoria.
b) Digestivo, es según expresión popular: "todo abdomen y mandíbula". De cuello relativamente corto y grueso. Abdomen que predomina sobre el tórax.
c) Muscular, desarrollo armónico de esqueleto y de músculos.
d) Cerebral: figura frágil y delicada, de frente grande y extremidades cortas.
ESCUELA ALEMANA:
Es, sin duda, Ernest Kretsehmer (1888-1964) el más grande representante de la Biotipología alemana.
Kretscltmer elabora una doble clasificación topológica muy conocida.
Distingue, por una parte, los tipos (constitucionales) leptosomático, atlètico píenico y diplàstico (y mixto); y. de otra, el tipo esquizotinico, el ciclotìmico y el viscoso, estableciendo las oportunas correlaciones e interdependencias.
leptosomático
atlético
pícnico
displástico
mixto
Características:
a) Tipo Leptosoma (Del griego lentos, delgado, soma, cuerpo) sus características son: cuerpo alargado y delgado, cabeza pequeña, nariz puntiaguda. Su representación geométrica es una línea vertical. La exageración del tipo se denomina "asténico".
b) Tipo Atlético. Gran desarrollo del esqueleto, de la musculatura y de la epidermis, tórax y cabeza grande.
Digamos que coincide con una pirámide invertida.
c) Tipo Pícnico. (Del griego puknos, ancho) Fuerte desarrollo de las cavidades viscerales, abdomen prominente, tendencia a la obesidad y aspecto flácido. cabeza redonda, ancha y pesada, extremidades cortas. Su representación es circular.
d) Tipo Displástico Se trata de sujetos que no entran en ninguno de los grupos mencionados anteriormente; generalmente carentes de armonía, con características muy exageradas; Kretschmer habla de 3 subdivisiones básicas: gigantismo, obesidad e infantilismo eunucoide.
e) Tipo Mixto. Son los más frecuentes y provienen de combinaciones de los otros tipos producidos por la herencia. Es difícil encontrar los tipos "puros" y lo importante de esto es que la coincidencia de las características físicas con las psicológicas no pueden ser exactas.
Relacionando los tipos "constitucionales" anteriores con las correspondientes características psicológicas, formula una segunda tipología: tipos esquizotimicos, ciclo túnicos y viscosos.
1) Hiperestésicos: Nerviosos .irritables idealistas.
2) Intermedios: Fríos, enérgico sistemáticos, serenos.
3) Anestésicos: Apáticos, solitarios, indolentes.
Cuando el tipo esquizotimico se agrava tenemos al esquizoide, y al enfermar mentalmente se convierte en esquizofrénico.
Esquizotímico = esquizoide =esquizofrénico
b) Tipo Ciclotímico. Son de constitución pícnica. Sujetos extrovertidos, y aunque cambian de un extremo a otro (alegría-tristeza), pueden reconocerse básicamente:
1) Hipomaníacos: En continuo movimiento, alegría.
2) Sintónicos: Realista, prácticos, humoristas.
3)Flemáticos: Tranquilos, silenciosos, tristes.
Cuando el tipo ciclotímico se agrada tenemos al cicloide, y de enfermar mentalmente se convierte en ciclofrénico (maníaco-depresivo)
Ciclotímico = cicloide = manico-depresivo
c) Tipo Viscoso. Son de constitución atlética. Tranquilos por lo general. Cierta actitud pasiva, en unas resentimiento, en otros amabilidad. En muchos aspectos fluctúan entre el leptosoma y el pícnico.
En cuanto a Biotipo y Criminalidad. Kretschmer llega a las siguientes conclusiones:
Que los pícnicos representan el menor número dentro de la totalidad de la criminalidad, siendo además los de menor reincidencia y mayor adaptabilidad. Son pasionales u ocasionales, raramente habituales.
Los leptosomáticos para Kretschmer siguen a los atléticos en criminalidad, pero su su participación criminal es menor que la de los atléticos. Son difíciles al tratamiento y fáciles a la reincidencia. Abundan entre ellos ladrones y estafadores.
Los atléticos serían para Kretsehmer los tipos con mayor inclinación criminal, principalmente de carácter violento. Son sujetos explosivos y en ocasiones cínicos.
ESCUELA ITALIANA:
La Escuela Italiana tiene muy valiosas representantes; mencionaremos a tres: Viola, Bárbara y Pende.
Jacinto Viola:
Nos indica que la constitución humana se apoya en dos sistemas-.
1. El sistema de la vida vegetativa (víscera).
2. El sistema de la vida de relación (nervioso y muscular).
De aquí deduce dos tipos:
a) El Tipo Longilíneo. Sujeto delgado, de extremidades largas, prototipo del hombre que lucha por ideales. Este tipo proporciona los delincuentes políticos. Para Constancio Bernardo de Quirós, el ejemplo más acusado de este tipo es el Quijote, cuyo físico y actitudes idealistas, no dejan lugar a dudas de lo correcto de esta clasificación. Representa la vida de relación.
b) Brevilíneo: individuo gordo, de extremidades cortas, prototipo del hombre lento que en el campo criminal proporciona al delincuente vulgar, al ladrón, al falsario, al estafador. Se retrata en este tipo al personaje de Sancho Panza, cuyo carácter se refleja más acusadamente en su confrontación diaria con el Quijote.
Representa a la vida vegetativa.
Bárbara
Considera al tronco como expresión de la vida vegetativa y a las extremidades como expresión de la vida de relación; así, hay dos tipos entremos (braquitipo y longitipico) y uno intermedio; resultando las siguientes subdivisiones:
Braquitipo Excedente
Antagónico
Deficiente
Normotipo Macrosómico
Microsómico
Longitipo Excedente
Antagónico
Deficiente
Nicola Pende. Tiene el mérito de tomar en cuenta los factores endocrinológicos, y clasifica a los seres humanos en:
a) Longilíneo Esténico. Fuerte, delgado, musculado es taquipsíquico (gran velocidad de reacción) en él predominan tiroides y suprarrenales hiperfunción.
b) Longitipo Asténico. Débil, delgado, con escaso desarrollo muscular, bradipsíquicos (lentitud de reacción) son híposuprarrenálicos.
c) Brevilìneo Esténico. Fuerte macizo. Musculado, chaparro, son bradípsíquicos y glandularmente tienen hipersuprarrenalismo hipotiroidismo.
d) Brevilìneo Asténico. Gordos, débiles, bradipsíquicos. Son hipotuitarios e hipotiroideos.
La famosa "Pirámide" de Pende (director del Instituto Biotipológico de Roma) está constituida por la base: la herencia y las otras caras: la morfología, el temperamento, el carácter y la inteligencia. El vértice es la síntesis Biotipológica.
ESCUELA AMERICANA.
La Escuela de William Sheldon. Este investigador critica las anteriores clasificaciones biotipológicas (italiana, francesa y alemana), principalmente por su tendencia antropométrica, considerando que el distinto grado de desarrollo del ectodermo. mesodermo y endodermo permiten distinguir tres tipos corporales básicos, en que cada individuo posee los tres componentes mencionados, pero uno predominando.
El desarrollo del endodermo determina el predominio relativo de las formas blandas y del aparato digestivo. El mayor desarrollo del mesodermo determina más acusadamente un individuo de sistema muscular, óseo y tejido conjuntivo. El ectodermo nos presenta al hombre con un sistema nervioso predominante, de formas lineales y frágiles.
Con base en los componentes mencionados Sheldon propone los somatipos que a su juicio no deben identificarse con los tipos propuestos por Kretshmer, porque en la clasificación del investigador alemán los biotipos son rígidos y se refieren a conceptos de funcionalidad, en tanto que en su clasificación – según Sheldon – se atiende, además, a criterios estructurales.
El somatipo se obtiene mediante el auxilio de la técnica fotográfica y del examen de 17 medidas que comprenden la parte inferior, posterior y costado del individuo. La posibilidad teórica de somátipos tomando en cuenta las combinaciones posibles asciende a 343, número que Sheldon reduce primeramente a 76. Después condensa en 19, para ser más accesible el manejo de los somatipos. [23]
UNIDAD 7
LAS GLÁNDULAS.- ENDOCRINOLOGÍA Y CRIMINALIDAD.- LA GENÉTICA CRIMINAL.- HERENCIA Y ENDOCRINOLOGÍA.- GENOTIPO Y FENOTIPO.- CORRELACIONES CRIMINÓGENAS.- LOS GEMELOS.
LA ENDOCRINOLOGÍA CRIMINAL
LA ENDOCRINOLOGÍA
Desde el pasado siglo diversas investigaciones han tratado de reconducir el comportamiento humano en general – y. en particular el criminal – a procesos hormonales o endocrinos patológicos, a determinadas " disfunciones " – hiperfunciones o hipofunciones- de las glándulas de secreción interna, dada la conexión de éstas con el sistema neurovegetativo. y del sistema neurovegetativo. a su vez. con la vida instintivo- afectiva.
El auge de estas teorías corre parejo a la evolución y desarrollo de la moderna endocrinología.
El proceso se inicia, probablemente, con la obra del químico alemán Wohler, quien en 1828, demostró la posibilidad de sintetizar en un laboratorio el componente orgánico de la urea. Claudio Bernard, a mediados del pasado siglo, trazaría la diferencia entre glándulas exógenos y endógenas. Thomas Addison descubrió la función de las glándulas suprarrenales, y Takamine Aldrich logran aislar la adrenalina, siendo Stalinger el que denominaría "hormonas" a la secreción de las glándulas endógenas, abriéndose paso. así. la idea del nombre como ser "químico", con todas sus consecuencias.
Con ello, el desajuste o desequilibrio del componente químico u hormonal del individuo pasaría a configurarse como concepto central de la "nueva Criminología".
LAS GLÁNDULAS:
Las glándulas pueden dividirse en dos: glándulas endocrinas (o de secreción interna) y glándulas exocrinas (o de secreción externa). Las segundas secretan su contenido por medio de un canal secretor (salivales, gástricas, sudoríparas, lagrimales), las primeras secretan hormonas directamente al torrente sanguíneo.
Los diferentes rasgos de la personalidad dependen directamente del funcionamiento glandular, y la personalidad cambia si las glándulas endocrinas son hiper (más) o hipo (menos) estimuladas, o si su función es inconstante (dís).
Las glándulas endocrinas o de secreción interna y que tienen influencia en la conducta criminal son:
1) La Hipófisis. Glándula pituitaria, situada en la base del cerebro, es el centro de control glandular: a pesar de su pequeño tamaño (pesa medio gramo) secreta unas 40
hormonas con las que dirige a las demás glándulas endocrinas.
2) Suprarrenales. Dos glándulas situadas cada una sobre un riñón. Su medula secreta adrenalina y noradrenalina. dos hormonas que actúan sobre el sistema nervioso Vegetativo; sobre todo cuando el organismo debe actuar con rapidez en situaciones de emergencia. Son de gran importancia pues intervienen en todos los casos de crimen emocional, al presentarse miedo, ira, odio. etc.
3) Tiroides. Situada en el cuello, delante de la tráquea, secreta tiroxina, es un acelerador biológico.
4) Paratiroides. En la parte posterior de la tiroides, son 4 glándulas con funciones opuestas a la tiroides. Secretan paratiroxina.
5) Testículos. Glándulas sexuales masculinas, llamadas glándulas gónadas masculinas, tienen una doble función: producen espermatozoides y secretan la testosterona. Que da los caracteres sexuales secundarios.
6) Ovarios. Gónadas femeninas, producen los óvulos. Secretan foliculina y progesterona. Regulan el ciclo menstrual y producen los caracteres sexuales secundarios.
ENDOCRINOLOGÍA Y CRIMINALIDAD
Pinatel divide la historia de los estudios endocrinológicos en Criminología, en tres períodos.
a) Período de los precursores (Lombroso);
b) Período de sistematización (Pende, Brandino. Di Tulio, Vidoni y Ruiz Funes); en esta etapa se consideró que las anomalías de la secreción de las glándulas endocrinas era el factor fundamental en la criminalidad.
c) Período de reacción (De Greeff, Sheldon, Glueck, Taft, Huwitz); en que se consideran las endocrinopatías como insuficientes para producir un crimen.
Es indudable, como ya hemos afirmado, que no puede explicarse el crimen o la criminalidad por medio de un solo factor o causa.
La Endocrinología ha aportado múltiples datos para la mejor comprensión del comportamiento humano, ya Pende afirmaba que el estudio de las glándulas de secreción interna puede explicar "en parte el cómo y no el porque del crimen".
Di Tullio afirma que; "Es necesario tener presente, a este respecto, la importancia de las glándulas de secreción externa, y especialmente de las de secreción interna, en el desarrollo del temperamento y del mismo carácter individual, y por eso hace tiempo que se trata de conocer cada vez mejor la influencia que las disfunciones harmónicas y neurovegetativas pueden tener en la génesis y dinámica de los delitos contra las personas, contra las buenas costumbres y hasta contra la propiedad
Es necesario, sin embargo, indagar también en este campo, cada vez con mayor rigor científico, para evitar conclusiones precipitadas y dañosas generalizaciones.
Se cree que entre las funciones hormónicas y la actividad criminal se puede establecer las siguientes relaciones:
a) Relación de subordinación genética de las anomalías éticas y de las tendencias criminales a las funciones hormonales.
b) Relación de simple coordinación y reciprocidad de las unas a las otras, como manifestaciones de una especial disposición degenerativa del individuo.
c) Relación en que las anomalías hormonales y éticas permanecen independientes y autónoma.
Y en otra parte, el maestro de Roma nos dice que, "De particular interés para el conocimiento de las causas de la criminalidad son los procesos endocrinos, fisiológicos o patológicos que pueden alterar las distintas funciones nerviosas y los distintos procesos psíquicos individuales.
Sentado esto, se comprende cómo, entre los factores causales de la criminalidad, se debe, necesariamente. recordar también las alteraciones funcionales de las glándulas de secreción interna.
Es bien sabido que son no pocos los autores que han afrontado el problema de la relación entre endocrinología y Criminalidad, partiendo de la premisa de que. pudiendo las funciones de las glándulas de secreción interna, y especialmente sus disfunciones. influir en el temperamento y en el carácter individual, en algunos casos, tales funciones y disfunciones hormónicas pueden influir también sobre el desarrollo de la criminalidad.
Esto, también, por el hecho de que las glándulas de secreción interna tienen estrechos vínculos con el sistema nervioso vegetativo, que a su vez. tiene estrechas relaciones con la vida instintivo -afectiva, influyen fuertemente sobre el desarrollo del temperamento y del carácter individual.
De ahí las distintas relaciones que pueden establecerse entre funciones endocrinas y actividad psíquica, entre temperamentos endocrinos y caracteres individuales, entre constelación hormónica individual y criminalidad.[24]
LA GENÉTICA CRIMINAL
HERENCIA Y ENDOCRINOLOGÍA.
El ser humano está conformado por millones de células; cada una de ellas contiene un núcleo un cierto número de corpúsculos filamentosos llamados cromosomas; a su vez, los cromosomas se descomponen en unidades hereditarias que se denominan genes y están constituidos por moléculas de ácido desoxirribonucleico (A.D.W.), componente químico considerado como el germen de la vida.
Los genes que integran cada cromosoma tienen la potencialidad de combinarse entre sí en unos quince millones de posibilidades; de tales combinaciones resultan a la postre las características biosiquícas y comportamentales del nuevo ser: el color de los ojos, la conformación del rostro, la estatura, el sexo, el factor R.H; etc.
Cada célula humana contiene 46 cromosomas; dos de ellos definen el sexo y se llaman gonosomas: los restantes se conocen con el nombre de autónomas. El hombre un gonosoma es masculino (Y) y el otro femenino (X); en la mujer, ambos son femeninos (X); en consecuencia, la fórmula normal del sexo se identifica para el hombre con las letras "XY y para la mujer, con las letras "XX".
Las células de la reproducción, que se conocen con el nombre de gametos, contiene 23 pares de cromosomas cuyos genes llevan consigo todo el conjunto de posibilidades del nuevo ser, de acuerdo con las llamadas leyes de la herencia que descubriera el fraile Gregorio Mendel "La herencia comprende, pues, un cierto número de pares de genes compuestos de un elemento de origen paterno y otro elemento de origen materno. Estos pares de genes se separan en las células sexuales del individuo de suerte que cada una de ellas recibe uno de los elementos, el paterno o el materno". [25]
La combinación de estos genes a partir del momento en que el espermatozoide fecunda al óvulo da lugar a peculiares composiciones génicas en cada nuevo ser; por eso es por lo que como lo anota Hurwitz. "el conjunto de las constituciones hereditarias no se trasmite íntegramente de generación en generación, sino que de cada línea de ascendientes se hereda un número de genes que se combinan de diferente manera en el nuevo individuo". [26]
Ello explica por qué las características biosíquicas de los padres y ascendientes no pasan necesariamente a sus descendientes; lo que se trasmite, pues, a través de los complejos mecanismos de la herencia no son los caracteres o propiedades sicosomáticos de los genitores, sino el terreno disposición al que puede o no desarrollarse y aflorar de acuerdo con la mayor o menor influencia de otros factores.
Esto significa que en cada singular personalidad yacen, unas a lado de otras, una enorme variedad de disposiciones hereditarias que se mezclan y combinan de múltiples maneras hasta conformar la personalidad de un nuevo ser.
GENOTIPO Y FENOTIPO
La unión de los genes masculinos y femeninos en el acto de la procreación da lugar al genotipo; por genotipo entendemos, dice Exner, "la imagen hereditaria del organismo, la totalidad de las posibilidades de desarrollo conforme a la disposición preformada"[27]
Este genotipo, puesto en contacto con el mundo circundante se transforma en fenotipo; su conformación depende de la constante interacción entre los factores disposicionales propios del genotipo y los factores ambientales que lo rodean; genotipo y medio determinan y condicionan, pues, la estructura fenotípica, en la que aparecen ya desenvueltas y desarrolladas aquellas posibilidades que el nuevo ser trajo al mundo.
Resulta así que la influencia mutua entre mundo circundante y genotipo es la que decide la naturaleza sicosomática del individuo; la que significa que la coincidencia fenotípica de dos personas no tiene necesariamente la misma causa genotípica y a la inmersa, que del hecho de que existan dos individuos con genotipo idéntico no se deduce que su fenotipo también lo sea.
El fenómeno de la herencia resulta así edificado sobre los conceptos de genotipo y fenotipo.
CORRELACIONES CRIMINÓGENAS
Conocidos estos presupuestos de la herencia veamos cuál es su relación con la criminalidad.
Fue una investigación realizada sobre la familia Juke. cuyo fundador era un reconocido alcohólico, la que determinó el incremento de los estudios sobre las vinculaciones entre los factores hereditarios y la criminalidad.
El profesor Dugdale, criminólogo norteamericano, llevó adelante una encuesta sobre 709 descendientes de esta familia y comprobó que por lo menos 77 fueron delincuentes, 202 prostitutas, meretrices y propietarios de burdeles y 142 vagabundos. Más tarde, la investigación fue ampliada a cerca de 3.000 descendientes del mismo tronco; el resultado fue que al menos una mitad de ellos fueron considerados deficientes mentales y un tercio estaba constituido por ladrones, prostitutas, mendigos o tipos antisociales en general. [28]
La constitución biosíquica del hombre es el resultado de la influencia de los factores ambientales sobre el genotipo o conjunto de disposiciones que le fueron trasmitidas por los mecanismos de la herencia.
Ahora, parece indudable que la conducta humana es el reflejo de la personalidad en la medida en que ella reacciona ante los estímulos que el mundo le depara de acuerdo con los mecanismos que la integran; de donde se deduce que el fenómeno herencial juega un papel importante en el comportamiento del hombre; el mayor o menor grado de esa influencia depende de la medida en que las disposiciones heredadas hayan logrado desarrollarse en el fenotipo; y como el delito es también un comportamiento humano sicológicamente idéntico al comportamiento lícito, resulta apenas lógico concluir que esos mismos factores disposicionales pueden influir en mayor o menor grado la conducta criminal.
De allí que el primitivo concepto de delincuente nato que enunciara Lombroso y su moderno equivalente, el de delincuente constitucional, tienen una base en común: la importancia que los factores disposicionales ejercen sobre su comportamiento criminoso.
A este propósito señala Di Tullio "sobre la base de nuestra personal experiencia madurada a través del examen de varios miles de criminales observados y estudiados desde 1920 que hasta hoy, creemos estar en condiciones de afirmar que un gravamen hereditario se encuentra, con particular frecuencia en aquellos sujetos que presentan un estado de predisposición a la criminalidad, vale decir, aquellos individuos en los que se encuentran las características descritas por nosotros cuando nos referimos a la constitución delincuencial" [29]
Esto no significa, desde luego, que la herencia sea o pueda ser causa de la conducta antisocial; frente a tal fenómeno el papel del criminólogo no es otro que el de estudiar en que medida el patrimonio hereditario del delincuente pudo haber influido sobre su constitución y, más exactamente sobre su personalidad, teniendo en cuenta que esta si bien vinculada ancestralmente con sus antecesores, es eminentemente plástica y susceptible, por lo mismo, de transformación.
Puntualizando aún más las consecuencias de estos planteamientos. Exner formula estas tres posibilidades:
1 Los padres pueden haber tenido disposiciones criminales sin que ellas aparezcan en sus hijos;
2 El hijo puede presentar una disposición criminal que no mostraban sus padres o abuelos, y.
3 Pueden existir disposiciones criminales en padres e hijos que nunca se manifiesten exteriormente, es decir, que permanezcan siempre en estado de latencia.[30]
Ordinariamente la carga negativa que se trasmite a través de la herencia se denomina tara hereditaria: ella se identifica con una enfermedad física, una anomalía mental o con el alcoholismo; según que la tara de que se trate se encuentre en los padres, en los abuelos o en los colaterales, se denominan directa, indirecta o colateral.
Por lo que hace a las demás glándulas de secreción interna (epífisis, hipófisis, tiroides, paratiroides. timo, páncreas, suprarrenales, paraganglionares), aunque es reconocido su preponderante papel en el biosiquismo humano, la eventual influencia que puedan ejercer sobre la conducta en general y la delictiva en particular, parece ser modesta (criminalidad pasional).
LOS GEMELOS
Distinguiese entre gemelos univitelinos o monosigóticos y gemelos bivitelinos o visigóticos.
Los primeros se forman de la unión de un espermatozoide con un óvulo que luego se divide, en tanto que estos nacen cuando dos óvulos son fecundados por sendos espermatozoides; en el primer caso los dos hermanos tienen el mismo genotipo de allí su extraordinario parecido físico. En el segundo siendo diversos el genotipo se explica sus diferencias morfológicas más o menos acentuadas.
Preocupado por estudiar la influencia de la herencia sobre la criminalidad de los gemelos, el profesor Lage realizó una investigación sobre 37 parejas, entre ellas 15 monovitelinas y 22 bivitelinas; su conclusión fue la siguiente: Los mellizos monovitelinos se comportan frente al delito de una manera preponderantemente concordante, mientras que en cambio los vívitalinos lo hacen de una manera preponderantemente discordante.
De acuerdo con la importancia del método de investigación de los mellizos debemos, por tanto, deducir la consecuencia de que la disposición juega un papel preponderante en absoluto entre las causas del delito".[31]
El profesor español Manuel López Rey considera que actualmente a perdido importancia la cuestión de las familias criminales y los mellizos delincuentes, aunque no niega que en ciertas familias la criminalidad aparece como evento frecuente.
Puntualizaremos que la frecuencia de las conductas delictivas en ciertas familias, que de otro lado casi siempre están colocadas en los estratos desfavorecidos económicamente, se debe a una multiplicidad de factores. Entre los cuales no se puede descartar definitivamente los genéticos.
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