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El hombre funcionando en sus tres dimensiones (página 6)


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Muchas de estas prácticas (sino todas) provocan que los demonios trabajen sobre la vida de los hijos. Ellos reciben un espíritu de adivinación, o de hechicería que los llevará cautivos si es que no hay una ministración adecuada. Hay muchos ejemplos de personas contaminadas cuyo origen del problema se encuentra en sus antepasados. No es pues extraño encontrar líneas enteras de brujos o adivinos. Esta forma de contaminación pasa de padres a hijos aún cuando los descendientes no practiquen voluntariamente. La masonería, una forma sutil de espiritismo y en palabras de Pablo de "doctrinas de demonios".

Es común también que a la muerte de un miembro de la logia masónica, uno de sus descendientes, quizás aún uno que apenas esta en el vientre sea contaminado por el demonio de masonería. Al pasar los años el receptor de la contaminación buscará involucrarse con la masonería, casi de manera automática. Es también evidente que en muchos casos estos demonios, trabajan especialmente en el área de la mente, provocando de esta manera que no sean capaces de ver la luz del evangelio, con el pretexto de no verla racional o simplemente no entenderla. Los bebés pueden ser afectados espiritualmente de manera positiva o negativa, Lc.1:39-44, en ese pasaje Juan el bautista fue lleno del Espíritu Santo en el vientre de su madre.

Algunas recomendaciones finales

  • Debemos orar antes de actuar. Aun en situaciones donde tengamos responsabilidad como pastores, líderes o padres, siempre debiéramos orar primero. Como padre, tengo la responsabilidad de corregir y disciplinar a mis hijos, pero necesito orar antes de actuar. Como líderes, a veces necesitamos reprender, pero debemos dar a Dios la primera oportunidad mediante la oración. No se trata de no hacer nada y de que Dios lo haga todo. Oramos primero, dando a Dios una oportunidad de ministrar en la situación y mantener las relaciones. Dios puede actuar directamente en la situación o darnos sabiduría para saber responder.

  • Debemos resistir al enemigo y asumir autoridad sobre él. El problema no es la persona, sino los poderes de las tinieblas que aprovechan toda situación, multiplican el conflicto, estorban la reconciliación y destruyen las relaciones. Debiéramos decir: "Satanás, te reprendo. No tendrás mi matrimonio, mis hijos, mi amigo, mi líder. Te resisto y te ato en el nombre de Jesús." Podemos detener al enemigo para que no impida la obra de Dios en las vidas de los que nos rodean.

  • En vez de luchar contra sangre y carne cuando somos reprendidos, podemos juzgar sinceramente si en ello hay algo de verdad. Toda reprensión, toda crítica y toda acusación debieran ser tomadas en cuenta con humildad. Pudieran ser total o parcialmente ciertas. Cuando consideramos las posibilidades de que pudiéramos estar equivocados, somos accesibles al ministerio de otros en nuestra vida. Esto es actuar con humildad. Así se empieza a librar la guerra espiritual. El orgullo ha incapacitado a la iglesia por siglos: "Yo tengo la razón y los otros no. Yo sé; tú no." Por lo general estamos más equivocados de lo que nos gusta admitir.

Pero aunque tengamos la razón y realmente sepamos la verdad, debemos estar abiertos y dispuestos a examinar el contenido de lo que nos dicen los demás. Aunque algo de lo nos digan sea falso, no tenemos porque estar a la defensiva, y no tenemos que pelear con la gente. Si hay verdad en lo que dicen, es una oportunidad para arrepentirnos, hacer restitución y llegar a ser más como Jesús.

  • Jamás debemos perder la fe o caer bajo condenación. Las palabras de la gente, con razón o sin ella, no debieran hacernos titubear en nuestra fe en la Palabra de Dios, en nuestra confianza de la salvación, o en nuestra fuerza y madurez. Cuando otros están en desacuerdo con nosotros, podemos quedar emocionalmente incapacitados. La crítica es tan áspera que flaqueamos ante nuestros acusadores y convenimos con lo que sea que digan. Si la crítica viene de parte de los líderes, tendemos a someternos a sus afirmaciones. Dudamos de nosotros mismos. Dudamos de lo que siempre hemos creído que es la verdad, y hasta podemos dudar de Dios.

Usted debe llevar a Dios en oración la palabra que ellos dicen que viene de él. Si con humildad y franqueza hacemos todo lo que debemos ante Dios, y él no confirma que la palabra sea suya, al llegar a este punto, podemos rechazar lo que dicen con toda confianza. Podemos dejar lo que dicen con Dios. Nunca tenemos porqué perder la confianza, sino que debemos permanecer fuertes en nuestra fe.

  • Debemos mantener buenas relaciones a todo costo. Pr. 18:19 dice: "El hermano ofendido es más tenaz que una ciudad fuerte, y las contiendas de los hermanos son como cerrojos de alcázar." Si peleamos con la gente no tomamos en serio la guerra espiritual. Si permitimos que las relaciones se perjudiquen, que las doctrinas nos dividan y que los problemas de la gente echen raíces en nuestra vida, no estamos edificando el reino de Dios, ni derribando el reino de Satanás. En realidad estamos estorbando el reino de Dios y ayudando al reino de las tinieblas. Necesitamos usar lo que Dios nos ha dado para la batalla en el lugar correcto y contra el enemigo verdadero. ¿Por qué nos ha capacitado Dios con la habilidad de criticar, de enojarnos y de discutir? Para que podamos enojarnos respecto al pecado y el diablo, dando libertad a nuestro enojo en la oración y resistiendo firmes al enemigo.

El enojo puede ser pecado cuando egoísta y orgullosamente lo dirigimos hacia la gente. Pero recuerde, Dios se enoja, pero nunca peca. Su enojo nunca está egoístamente motivado y nunca procede del orgullo. El se enoja por las razones correctas, y usa su enojo de una manera correcta. Nosotros, por otra parte, nos enojamos cuando nuestro orgullo es herido, o cuando somos obstaculizados en nuestros intentos egoístas. Si sólo pudiésemos redirigir nuestro combate hacia los poderes de las tinieblas. Si pudiésemos aprovechar nuestras emociones y energías, que gastamos peleando unos con otros, y dirigirlas hacia el verdadero enemigo, veríamos un gran cambio. Veríamos el colapso total de un imperio satánico que por demasiado tiempo hemos permitido que exista. Si cada uno de nosotros determinara nunca pelear contra otro ser humano mientras viva, Satanás temblaría. Le haríamos a él lo que nos hemos hecho los unos a otros durante siglos. Nos daríamos cuenta de la verdad: Nuestra lucha no es contra sangre y carne y debemos procurar nunca olvidar que las Bases Legales determinan en muchos casos la facilidad con que podemos en el futuro ser afectados. Bien vale caminar con prudencia y no dar lugar al Diablo.

CONTAMINACIÓN POR POSESIÓN DE OBJETOS

Esta es una de las formas más sutiles de contaminación en la que muchos creyentes son engañados. Es bueno considerar delicadamente todos estos puntos no sólo para ser cuidadosos con nuestra propia vida, sino también para poder ayudar a otros. Literalmente la palabra "anatema" es la transcripción de un vocablo griego que significaba algo erigido (en un templo) o "algo que se coloca en un templo". La palabra en su raíz hebrea "Herem" (Lit. lo consagrado). Era lo sustraído de todo empleo humano, y por tanto maldito. En particular era el botín de guerra que debería ser destruido porque probablemente había sido dedicado a un dios pagano. Dt. 7:26 RVA TA No meterás en tu casa ninguna cosa abominable, para que no seas anatema juntamente con ella. La aborrecerás del todo y la abominarás, porque es anatema No meterás cosa alguna de ídolo en tu casa, porque no vengas a ser anatema, como él lo es. La detestarás como inmundicia y la abominarás como suciedad y horruras; por cuanto es un anatema. La recomendación es contundente, no se debe introducir objetos contaminados a la casa de los creyentes; encontramos dos textos mas: Dt. 13:17 RVA TA No se pegue a tu mano nada del anatema, para que Jehovah desista del furor de su ira, tenga piedad y compasión de ti, y te multiplique, como lo juró a tus padres, Ni reservarás en tu poder cosa chica o grande de este anatema; a fin de que deponga el Señor su enojo, y se compadezca de ti y te multiplique, como tiene jurado a tus padres que lo hará. "Pero vosotros guardaos del anatema. No toquéis ni toméis nada del anatema; no sea que hagáis anatema el campamento de Israel y le ocasionéis destrucción." Jos. 6:18 Muchas personas no reconocen el peligro de poseer algunos objetos que quizás a primera vista no parezcan "demoniacos". Algo que debemos entender es que hay demonios asociados a los objetos. Podemos hablar de objetos dedicados u ofrendados a un demonio, como un ídolo, un objeto de las "alasitas", objetos talismanes, o los muchos objetos que ofrece la Nueva Era.

4. Contaminación Por Trauma. Esta forma de contaminación es quizás una de las menos evidentes. Una definición simple sería la siguiente: La contaminación por trauma se presenta cuando una persona sufre experiencias cercanas a la muerte, violencia sorpresiva o sensaciones extremas de tristeza o abandono que abren puertas para que espíritus inmundos ingresen y lo contaminen. Generalmente es mas frecuente en niños, pero los adultos no están libres de su contaminación. En palabras de Don Basham : "Hemos comprobado que los malos espíritus pueden tener acceso a una persona de distintas maneras.

La razón puede ser la deliberada y reiterada indulgencia de apetitos carnales. O una tragedia inesperada, o una gran tristeza. Esas son cosas que pueden hacer vulnerable a una persona. En síntesis, cualquier clase de tensión o postración nerviosa que produce lo que podríamos llamar una fisura en las defensas naturales de la persona, brinda una oportunidad a los malos espíritus. Consideremos por ejemplo el miedo. Una madre sienta a su hijito frente al televisor para que mire un programa para niños mientras ella anda de aquí para allá en la casa, ocupada en sus quehaceres. Sin que se dé cuenta termina el programa y a continuación pasan una película de terror. El niño, sentado frente al televisor experimenta miedo y un espíritu malo hace presa de él."

a. El Abuso Infantil. La víctima de abuso infantil se convierte en víctima del pecado de otros, por lo general figuras de autoridad en las que

confiaba, bien en la infancia o en la adolescencia. El abuso infantil es una de las peores perversidades que se están perpetuado hoy en día en todas partes del mundo a través de poderosos principados y potestades malignas. Tiene que ver con esa parte de la raza humana tan querida por Dios que son los niños. Satanás aborrece a Dios, se concentra sobre todo en aquellos a quienes El más ama: nuestros hijos. Es tan simple como eso.

Con frecuencia este abuso desciende la personalidad del niño, produciendo su disociación y dando como resultado los desordenes múltiples de personalidad. Diversas investigaciones revelan que el setenta y cinco por ciento o más de los casos de desordenes en la personalidad han sido consecuencia de algunas formas de abuso extremas o abuso sexual infantil.

CUATRO CLASES DE ABUSO

Podemos mencionar al menos cuatro formas de abuso infantil:

Sexual, Físico, Psicológico y Religioso. Cada uno tiene su propio perfil y sus propias consecuencias.

TIPO DE ABUSO Y SUS CONSECUENCIAS

  • Abuso Sexual Vergüenza extrema y problemas sexuales. También presente el miedo y la ira. Demonios de lascivia y dificultad de llevar relaciones emocionales estables y duraderas.

  • Abuso Físico Rabia excesiva y problemas en las relaciones interpersonales.

  • Abuso psicológico Autoimagen muy negativa y espíritu de rechazo. Siempre produce ira.

  • Abuso Religioso Confusión extrema en cuando a Dios y la fe cristiana; incapacidad de confiar en El y en su Hijo.

Cada una de estas formas es destructiva y provoca consecuencias que se extienden en el tiempo. Es muy difícil el poder clasificarlas por su grado de deterioro o daño. Pero definitivamente hay dos que son los más contaminantes, el abuso sexual y el abuso religioso.

El Abuso Sexual. Cuando una persona tiene relaciones sexuales con otra persona son una sola carne; Pablo lo menciona muy claramente en 1Co. 6:15-18 "¿No sabéis que vuestros cuerpos son miembros de Cristo? ¿Quitaré, pues, los miembros de Cristo para hacerlos miembros de una prostituta? ¡De ninguna manera! ¿O no sabéis que el que se une con una prostituta es hecho con ella un solo cuerpo? Porque dice: Los dos serán una sola carne. Pero el que se une con el Señor, un solo espíritu es. Huid de la inmoralidad sexual. Cualquier otro pecado que el hombre cometa está fuera del cuerpo, pero el fornicario peca contra su propio cuerpo."

En las ministraciones de este tipo que he tenido siempre encontré espíritus de lascivia muy fuertes; masoquismo, masturbación o cualquier otro en el género de demonios sexuales. En la mayoría de los casos era muy poco probable que estas personas los hayan adquirido de manera voluntaria, mas bien parecen ser la herencia que ha quedado del agresor sobre la persona abusada o forzada. Las personas heridas no reconocen esos problemas como suyos y en muchos casos ni siquiera los entienden, pero perciben su presencia en su vida. En una amplia mayoría de casos de demonización grave en cristianos adultos hay presentes demonios sexuales. La perturbación de la sexualidad trastorna a la persona completa; los demonios reconocen este hecho y lo explotan para el mal. Cuando las personas quedan sexualmente incapaces, todo su ser es dañado. Puede causarse más daño a la humanidad envileciendo su sexualidad que mediante ningún otro factor, a excepción del espiritual. Por tanto, la forma más destructiva de abuso infantil no es el físico, sino el físico-sexual. Si a este último se le añade una dimensión religiosa, el abuso sexual se hace todavía más destructivo. El sexo es uno de los instintos más poderosos en la vida. Los hombres y las mujeres tienen en este punto algunas de sus luchas más feroces. La sexualidad desbocada conduce a algunos de los problemas personales y sociales más graves, a los cuales se enfrenta la humanidad. La violación, el incesto, la homosexualidad y una gama inimaginable de perversiones sexuales que practica la raza humana. Los demonios del abuso y la perversión sexual flotan en el aire, por así decirlo, en todas partes, y se cuentan entre los más activos, sutiles y depravados de todos los espíritus malos.

El abuso Religioso. Dentro de las depravaciones más fuertes sobre los niños esta el abuso ritual o religioso. En la mayoría de los casos hay también abuso sexual. Debido a un principio de autoridad o tutela, esto es que un niño esta bajo la cobertura de una persona adulta, se conoce que muchos satanistas entregan a sus hijos para ser "dedicados" a sus demonios. Aunque ellos son totalmente inconscientes a este abuso; por el principio de tutela ellos son contaminados y sellados para que más tarde, cuando crezcan puedan ser sacerdotes o miembros especiales dentro de la secta. El abuso a los niños y los asesinatos son las dos áreas en las cuales los individuos son muy cautelosos cuando hay personas que se declaran a sí mismos como satanistas.

Los mensajes recibidos de personas como Anton LaVey son confusos. Los escritos implican que algunas acciones no deben tomarse a menos que sean absolutamente necesarias. Y esto, para una mente desviada, lo que es necesario, puede ser el extremo. Aún más terrible es cuando individuos con esa mente y con los mismos deseos y conductas anormales se reúnen en grupos. El abuso llega a convertirse en ritual, y la cantidad de personas involucradas en ello, hace que los niños se intimiden con mayor facilidad.

Los niños son las víctimas más fáciles porque son los menos confiables debido a su inocencia y porque son fácilmente engañados. Por ejemplo, en un caso de la policía, hubo un abuso confirmado, pero las alegaciones fueron más lejos. Algunos niños fueron forzados a tomar sangre que había sido extraída de sus cuerpos. Un niño dijo que la sangre fue extraída de la parte trasera de su pierna y esa historia fue repetida por otros. Sin embrago, los médicos que los examinaron dijeron que no hay venas que puedan ser usadas en esa forma que los niños describieron. Además no se encontraron marcas que indicaran el uso de agujas. Los casos comunes de abuso sexual muestran patrones similares, tal como la pedofilia, una enfermedad emocional en donde el adulto ama a un niño y no puede comprender por que es incorrecto usar a ese niño sexualmente. En cambio, el satanista que participa en tales actividades se desvía de lo antedicho. El o ella pueden ser considerados como pilares de la comunidad, como un médico, maestra de escuela, o aún clérigo. En esa persona no se notan disturbios emocionales como los definidos en la literatura secular, no hay señales de ira en contra del niño ni sentimientos amorosos anormales. Para ellos, el niño es un medio para la meta, o como parte del ritual sin más aprecio por él que el que se tiene por un martillo cualquiera que se use para una construcción.

EL ABORTO

En todo proceso de aborto existe siempre la presencia de un espíritu de muerte. Si es que el aborto se consuma, la madre en este caso, es contaminada dramáticamente. En los meses siguientes se presentará en ella una tendencia a la depresión, falta de autoestima y es muy probable que aún su cuerpo quede tan contaminado que no pueda concebir nuevamente. Si es que el aborto no se consuma, lo más probable es que el bebé, sea contaminado por un espíritu de muerte que en las etapas primeras se mostrará como rebeldía y rechazo. Muchos son los problemas que afectan a las familias donde se han presentado abortos. Normalmente aún el resto de la

familia es afectada tremendamente. El aborto es homicidio, no hay palabras que puedan atenuar el problema, todo juicio contra el homicidio se aplica cabalmente al aborto.

El rechazo

El rechazo es un demonio que provoca la ausencia o la percepción de ausencia de amor significativo, o de aceptación incondicional. Esto provoca con el tiempo tres manifestaciones importantes: · Autorechazo · Temor al rechazo · Rechazo a los demás Todo esto acompañado con una baja auto-estima, por ejemplo, una imagen pobre de sí mismo. El rechazo obra en un círculo vicioso que da más oportunidad a los demonios para oprimir y manifestarse. En palabras F. Marzullo y T. Snyder: "Las personas que no encuentran aceptación en un área, por lo general destruyen relaciones en otras áreas de la vida. Por ejemplo: al encontrar aceptación a través de la provisión de cosas materiales, una persona puede convertirse en un esclavo del trabajo que le provocará el rechazo a su familia por la deficiencia en el tiempo de pasar juntos." Una lucha interminable por obtener aceptación es un claro síntoma del ciclo de rechazo que está en operación. Hacer una revisión de las causas o fuentes del rechazo será de ayuda al ministro que probablemente se encuentra ajeno a ellas. Entonces relacionaremos a estas causas con los espíritus malignos y mostraremos cómo éstos pueden aprovechar la carne del hombre, en vez de vivir por medio de la presencia del Espíritu Santo (Ro.8:14). Cuando no se ha hecho frente a los recuerdos penosos y no han sido curados e integrados a la vida, con frecuencia rompen las defensas e interfieren en la vida normal de la persona.

Es bueno preguntar a las personas: en tu mente algunas imágenes o escenas que se repiten? ¿Qué parece que no te dejan en paz, sino que siguen repitiéndose una y otra vez? ¿qué siguen apareciendo en tus sueños? mentales (recueros) que son bastante fuertes para interferir en tu vida presente? Si la respuesta es afirmativa, pedir a la persona que hable de ellas. En un sentido, todo lo que causa dolor físico o mental y angustia emocional puede ser llamado un trauma o una herida.

Se debe limitar la discusión a algunas de las experiencias más comunes de la vida que causan sufrimiento emocional, al infringir un golpe al yo de la persona. Todo lo que da un golpe, hiere y duele. Esto puede suceder en cualquier nivel de la vida, desde el estadio prenatal, la infancia, la niñez, la adolescencia, la edad adulta, hasta la senectud. En el mismo centro de nuestros traumas hay un sentimiento de rechazo. Cuánto más importante o significativa es la persona que nos rechaza, mayor es nuestro sentimiento de ser rechazados por ella. Las formas más penosas ocurren durante los años primeros de la vida -la edad preescolar y los primeros grados- porque no hay manera en que nos expliquemos la razón de la acción que el niño interpreta como rechazo. Los niños no pueden entender por qué se les trata de esta manera, y no tienen maneras de responder o ajustarse. Muchas veces hay razones muy lógicas para explicar lo que ocurre, pero no hay medio de comunicárselas o de que ellos lo entiendan propiamente.

Por ejemplo, muchos de los que sienten rechazos más profundos son el resultado de accidentes, enfermedades, retrasos inevitables y aun muertes. Los padres, miembros de la familia, maestros, pastores o amigos se ven forzados por las circunstancias a prestar atención, de modo precedente, a alguien o algo distinto. Esto es experimentado como un rechazo y puede dejar una cicatriz penosa en su memoria.

Sería necesaria una enciclopedia para cubrir todas las diferentes maneras en que las raíces del temor están incrustadas en nuestros recuerdos. Se dice que en la Biblia hay 365 veces las palabras "no temas", una para cada día del año. Es así porque Dios sabe lo que es vivir en este mundo lleno de temor; comprende que estos temores profundamente enraizados son uno de nuestros mayores obstáculos para la fe. Para enfrentar El problema del rechazo es necesario por lo menos cuatro instancias: · Arrepentimiento. Por el asesinato, y por haber corrompido el propio cuerpo, que esta hecho para ser templo de Dios. · Reprender al demonio de depresión y muerte a los otros espíritus malignos que Dios muestre. · Pedir perdón a Dios y aceptarlo. · Perdonarse a uno mismo, no permitiendo que la acusación controle nuestra mente.

SIGNOS COMUNES DE RECHAZO

Cuando un individuo que posee estos estados mentales se relaciona con otras personas en circunstancias donde hay presiones, podemos esperar los siguientes problemas. 1. Depresión. 2. Hostilidad 3. Ansiedad 4. Escapismo por medio del trabajo excesivo, televisión, alcohol, relaciones fuera del matrimonio, pornografía, drogas, lectura, estudios y pasatiempos. 5. Enfermedades físicas (psicosomáticas). 6. Rebeldía:" como nadie me ama, haré mi propia voluntad". 7. Hechicería, dominación o manipulación de los demás (aún los niños son capaces de hacer estas cosas). 8. Comerse las uñas. 9. Mojar la cama. 10. Chuparse el dedo. 11. Nerviosismo 12. Problemas crónicos de lujuria. 13. Fantasía 14. Pensamientos obsesivos 15. Esquizofrenia, doble ánimo 16. Paranoia. C. Causas Comunes De Rechazo.

Lo que las personas encuentren en sus años formativos desde la concepción hasta los 5 años, puede causar una distorsión en la estructura de nuestro hombre interior. La falta de amor; el rechazo desde el tiempo de la concepción en adelante; no ser deseado antes del nacimiento; toda forma de abuso; sea sexual (por parte de la madre o padre) o el intento de aborto; el maltrato físico y verbal de la madre, muerte en la familia un acto/perversión sexual inusual de la madre, etc. Tales cosas pueden afectar al niño en el vientre y abrir puertas para que entren espíritus malignos.

Los bebés se dan cuenta y perciben el ambiente. ¿Recuerdan el relato de Juan el Bautista que saltó en el vientre de Elisabet el escuchar la salutación de la madre de Jesús? (Lc.1:39-44) Los partos difíciles comúnmente producen rechazo o temores en la criatura. Por ejemplo: cuando el cordón umbilical se enrolla en el cuello del bebé, hay falta de oxígeno; instrumental que se utiliza en el parto puede lesionar al bebé; o cuando se lleva al bebé a una incubadora y se le separa del cariño y el calor de la madre. Si hay gemelos, la competencia por recibir atención es a menudo fuerte y uno o ambos niños resultan frustrados o insatisfechos. Lo mismo pasa especialmente en familias numerosas, con los niños que no fueron objeto de caricias adecuadas. Los padres decepcionados son el sexo del bebé. El rechazo durante el parto puede abrir la puerta para que entren espíritus de homosexualidad o lesbianismo.

RECHAZO MANIFIESTO

El maltrato y la violación son tan comunes hoy. Los espíritus malignos aprovecharan esta situación. Podrán aparecer espíritus de temor, por ejemplo: miedo al hombre, miedo al padre o a cualquiera que realizó el abuso, espíritus de violación, incesto, tormento, dolor, vergüenza, indignidad, lujuria, homosexualismo, lesbianismo, perversión, sexo anal, sexo oral, temor al sexo o frigidez que se pueden manifestar en la vida. Si el afectado es, entonces se desarrollará excesiva dependencia de sus iguales al buscar aceptación y un significado para vivir. Esto trae como consecuencia promiscuidad en las niñas, lujuria en los niños con posibilidades para el lesbianismo/homosexualismo en los años siguientes. Algo también común es: la rebelión, amargura, el comportamiento antisocial o criminal y/o altos logros en deportes, estudios, música, etc. · Un niño no deseado o no amado. Ejemplo: Un padre dice: "Ojalá que nunca hubieras nacido". · "No sirves para nada ni nuca servirás". · "Eres una mala persona". · "Nunca llegarás a ser una persona de éxito". · Largos períodos lejos del niño debido al egoísmo. · Golpear al niño por enojo o frustración. · Tener una aventura amorosa. · Divorciarse de su pareja. · Criticar al niño constantemente.

RECHAZO OCULTO

Mucha gente no valora la importancia de pasar tiempos de calidad y cantidad con sus hijos. El padre o la madre que no están disponibles durante la niñez o aun en la adolescencia afectan tanto en la salud espiritual de los niños. El divorcio o separación. Niños a quienes se dejan solos mucho tiempo. Esto también puede suceder cuando el niño se deja a un pariente o con una niñera (aunque éstos sí amen al niño). Que el padre o la madre sean muy duros al castigar o al utilizar palabras de corrección. Padres duros o negligencia al demostrar suficiente afecto, elogio o aliento. · Sobreprotección, sofocamiento (por lo general con niños, pero, no es raro en el matrimonio). Ejemplo: evitar que alguien se convierta en una persona totalmente funcional. · Actuación premeditada, amor condicional. Ejemplo: "Te amo SI…"

CONSECUENCIAS DEL RECHAZO

1. Como Matrimonio. El cónyuge, que antes del matrimonio ha experimentado rechazo significativo, no sabe cómo dar o recibir amor y nunca ha aprendido la confianza básica. Los sentimientos de inferioridad impiden la participación en actividades de rutina, como intentar tareas que tengan el riesgo de fracasar o el establecimiento de metas a largo plazo. Los cónyuges bien adaptados usualmente no comprenden el comportamiento neurótico de una persona rechazada. Las personas que tienen un patrón de rechazo desde su niñez, a menudo indicarán rechazo en situaciones o conversaciones donde no existe rechazo alguno. Pero con frecuencia las personas rechazadas se casan entre sí y siguen un patrón de rechazo mutuo. Ya sea real o imaginaria, una interpretación falsa de ciertos hechos abre viejas heridas y amplía el rechazo supuesto o verdadero. Otro resultado común del rechazo es adherirse como una sanguijuela a otra persona que le proporcione el amor que ha buscado. Monopolizar el tiempo y el afecto de esta persona y los celos extremos son comunes. Los esfuerzos para reducir estas situaciones se interpretan como rechazo adicional. De ahí resulta entonces que la persona agobiada desea terminar la relación y así se demuestra como parece, que los temores más profundos de la persona rechazada son ciertos. Las personas rechazadas no pueden permitir que sus amigos verdaderos tengan derecho a ser independientes sino que muchas veces tratan de controlarlos y sin querer, dan lugar a otro rechazo. El amar incondicionalmente a una persona rechazada con frecuencia resultará en que el rechazo muestra emociones o un comportamiento neurótico, pues la personalidad rechazada no sabe como obrar normalmente en un ambiente de amor y se siente "fuera de control". A menudo la persona rechazada se comportará de tal manera que origina, más rechazo en quienes lo rodean, cuando intenta probar el amor que le tienen. El rechazo produce rechazo. Una madre o un padre que fueron rechazados no pueden dar verdadero amor y generalmente transmiten este espíritu a sus hijos.

2. En La Escuela Es muy frecuente en los niños que vienen de hogares donde hay rechazo, los mensajes condicionales. Hay tanto inseguridad en sus vidas que poco o nada pueden realizar como metas personales. Se debe evitar el avergonzar a un niño delante de otras personas.

3. Entre Hermanos O Parientes Aun cuando los padres acepten y traten a los niños justa e igualmente, las comparaciones y/o la rivalidad de unos con otros pueden producir sentimientos de inferioridad. Pueden surgir patrones exagerados de rechazo si la cadena comienza por los padres que también están en rechazo.

4. Como Personas. Si al sentirse inferior el joven adulto encuentra difícil o imposible el escoger una carrera y/o su preparación, puede tener sentimientos crecientes de confusión, frustración en el empleo o derrota, el desaliento puede acompañarse de elecciones equivocadas. Estas afectan desfavorablemente al cónyuge o a la familia. En resumen, siempre que se esperimente el rechazo, lleva a una crisis de identidad que abre la puerta a muchas clases de demonios, que tratarán de establecerse en la mente o personalidad de un individuo.

¿CÓMO ENFRENTAMOS EL RECHAZO?

Es importante ante todo, quitar el terreno para la actividad del demonio mediante: 1. Perdonar a todas las personas que nos han herido. 2. Cambiar nuestra forma habitual de enfrentar la vida, por la vida de Cristo. El es el único que puede ayudarnos a vivir de santidad, mientras nos despojamos de nuestras cargas y dejamos a Cristo ser nuestra vida (Col.3:4). 3. Romper toda maldición, incluyendo palabras malignas de la familia y amigos. 4. No debemos aceptar las palabras que durante años nos han atado y destruido.

HAY TRES REACCIONES DIFERENTES EN LOS NIÑOS POR EL AMOR CONDICIONAL

  • a. Actuar excesivamente para buscar aceptación b. Adaptarse. c. Rebelión.

· Muerte prematura de los padres, que significa la pérdida de la fuente principal de aceptación. · Cuando nace varón y los papás querían niña. Entonces son "super buenos", para cubrir la culpa de rechazar al niño. · El niño que "cambió la vida". Si los padres no querían al niño, pero ocultan ese sentir, se inclinarán demasiado a una forma de probar que el niño sí es deseado. Estos padres prestan atención a cómo otros padres cuentan la historia de la llegada de sus hijos. · Privación del amor paterno durante largos períodos de tiempo en hospitales durante la infancia o niñez · Incapacidad de los padres para comunicar amor al niño en forma verbal, física o ambas. · Comparaciones desfavorables de favoritismo con hermanos o parientes. · Suicidio de alguno de los padres, es lo máximo en el rechazo a sí mismo y a los demás. · Divorcio de los padres. Siempre que se experimenta el rechazo, lleva a una crisis de identidad que abre la puerta a muchas clases de demonios, que tratarán de establecerse en la mente o personalidad de un individuo.

A CONTINUACIÓN SE ENUMERAN ALGUNOS DE LOS TEMORES COMUNES Y PARALIZANTES

· temor de la oscuridad, · temor de ser abandonado o dejado solo, · temor del fracaso, de no realizar nada de valor, · temor de perder el control de las emociones o el juicio · temor del sexo, pensamientos y deseos sexuales, · temor de las personas y de confiar en otros, temor del cáncer y otras enfermedades graves, · temor de Dios y del juicio final, · temor de cometer el "pecado imperdonable", · temor del futuro, · temor de la muerte de otros, deudos o amigos, o la propia. Entre los cristianos, muchos de estos temores son muy intensificados por un sentimiento de culpa ante el hecho de tener temor. Se dice: "los buenos cristianos no deben estas acongojados o asustados; después de todo, Jesús siempre está con ellos, así que no debe asustarles nada." Además, la Biblia dice: "El perfecto amor echa fuera el temor" (1Jn. 4:18). Así que esto les asusta aún más y se encuentran entrampados en un círculo viciosos de temor y admitir que se tiene temor! En realidad, muchos de estos temores están arraigados en experiencias que a su vez han producido temor, enseñanzas no sanas y relaciones pobres en algún punto del pasado, especialmente durante los años de la infancia. Han sido empujadas al fondo de la mente tantas veces que la persona es posible que sólo tenga un recuerdo vago de ellas. Con frecuencia no son recuerdos específicos y el individuo se ve acosado por sentimientos de angustia globales y generales que se adhieren a veces a un punto luego a otro."

Las maldiciones

Las Maldiciones Las Maldiciones En El Mundo Espiritual Las maldiciones pueden venir de cuatro fuentes posibles: · Dios Los siervos de Dios · El mundo espiritual · Los servidores humanos de Satanás. Maldiciones Generacionales. Las maldiciones ancestrales se determinan con suma frecuencia por sus malas consecuencias. Maldiciones Auto Impuestas

Maldiciones Que Operan A Través De Las Palabras a. Las Palabras De Maldad Que Otros Han Pronunciado Contra Nosotros. b. Las Palabras Perversas Que Hayamos Dicho Contra Los Demás. c. Las Malas Palabras Que Hemos Hablado Contra Nosotros Mismo. d. Juramentos e. Maldiciones por brujería

Principios Que Gobiernan Las Maldiciones a. Hay Una Causa Para Toda Maldición b. El Pecado Es La Puerta Para La Maldición. c. Toda Maldición Es Un Problema Espiritual Que No Se Puede Remediar Por Medios Naturales. d. Donde Permanece El Pecado, También Permanece La Maldición e. Una Maldición Implica Que La Mano De Dios Ha Sido Retirada. F. La Ley No Suministraba Soluciones Para La Maldición G. Cristo Nos Redimió De La Maldición De La Ley h. La Redención Se La Debe Apropiar Cada Uno. Pasos para romper las maldiciones

LAS MALDICIONES

LAS MALDICIONES EN EL MUNDO ESPIRITUAL

Las maldiciones son un concepto no muy claro para la mente occidental. Pensamos en una maldición como en la expresión de ira o disgusto sin poder inherente para infringir daño. ¿Son sólo eso las maldiciones? ¿Realmente qué son las maldiciones? La Biblia empieza y termina con maldiciones. Dios pronuncia la primera contra Satanás y la tierra (Gn. 3:14,15,17-19), y la última referencia a la maldición proclama el fin de ésta (Ap. 22:3). En otras palabras: para la humanidad no existe escapatoria de la maldición y las maldiciones hasta que hayan llegado nuevos cielos y la nueva tierra, y los santos glorificados con nuestro Señor en el reino eterno.

LAS MALDICIONES PUEDEN VENIR DE CUATRO FUENTES POSIBLES:

· Dios · Los siervos de Dios · El mundo espiritual · Los servidores humanos de Satanás.

La maldición es de manera fundamental un concepto del Antiguo Testamento que obtiene su significado de la cosmovisión propia de la cultura oriental. Las maldiciones no se utilizan allí con la idea occidental de proferir juramentos o decir palabras torpes. En el Antiguo Testamento maldecir es un concepto de poder destinado a liberar una fuerza espiritual negativa contra el objeto, la persona o el lugar maldito.

Dios mismo pronuncia maldiciones que resultan difíciles de exagerarlos. Se dedican capítulos enteros a enumerar las maldiciones que el pecado trae sobre el pueblo del Señor (Dt. 27 -31); y uno de los temas más destacados es el de las maldiciones frente a las bendiciones, el cual también ocupa capítulos completos (Dt. 28-30; Nm. 22-24).Tan precioso es para Dios su pueblo que tres veces declara que maldecirá al que lo maldiga. Y también expresa: "Benditos los que bendijeren, y malditos los que te maldijeren" Nm. 24.9

MALDICIONES GENERACIONALES

Las maldiciones generacionales o ancestrales son determinadas por el andar en obediencia o en desobediencia delante de Dios. "Llamo hoy por testigos contra vosotros a los cielos y a la tierra, de que he puesto delante de vosotros la vida y la muerte, la bendición y la maldición. Escoge, pues, la vida para que vivas, tú y tus descendientes" Dt. 30:19. Nuestra actitud afecta a los que vienen después de nosotros, no es algo que podamos escoger, sea para bien o para mal, nuestros hijos serán influidos por nuestras decisiones. "No te harás imagen, ni ninguna semejanza de lo que esté arriba en el cielo, ni abajo en la tierra, ni en las aguas debajo de la tierra. No te inclinarás ante ellas ni les rendirás culto, porque yo soy Jehovah tu Dios, un Dios celoso que castigo la maldad de los padres sobre los hijos, sobre la tercera y sobre la cuarta generación de los que me aborrecen. Pero muestro misericordia por mil generaciones a los que me aman y guardan mis mandamientos." Exodo 20:4-6

LAS MALDICIONES ANCESTRALES SE DETERMINAN CON SUMA FRECUENCIA POR SUS MALAS CONSECUENCIAS

Algunas señales de Deuteronomios 28 en la siguiente lista:

· Insuficiencia financiera constante o pobreza. · Planes y proyectos frustrados constantemente. · Vidas con traumas o crisis constantes. · Esterilidad e impotencia, abortos y complicaciones en la reproducción · Muertes prematuras o muertes por causas no naturales. · Enfermedades hereditarias y crónicas. · Rupturas de relaciones familiares frecuentes de padres a hijos. · Dificultad para percibir la presencia de Dios, comprender la Biblia, concentrarse en la oración, y ausencia de dones espirituales.

MALDICIONES AUTO IMPUESTAS Hay un aspecto que los occidentales hemos descuidado notablemente, nuestra manera de hablar. Palabras sin precisión, vacías de contenido, expresiones de burla y aparentemente inofensivas, son generadoras de muchos problemas. Jesús nos exhorta en Mt. 12:36-37 : "Mas yo os digo que de toda palabra ociosa que hablen los hombres, de ella darán cuenta en el día del juicio. Porque por tus palabras serás justificado, y por tus palabras serás condenado". "En las muchas palabras no falta pecado, pero el que refrena sus labios es prudente." Pr.10:19 Claramente se puede apreciar la recomendación que nos hace la palabra en el verso anterior y en los siguientes; Pr. 6:2 "te has enredado con tus palabras, y has quedado atrapado con los dichos de tu boca." Pr. 17:27 "El que tiene conocimiento refrena sus palabras, y el de espíritu sereno es hombre prudente."

LAS MALDICIONES QUE OPERAN A TRAVÉS DE LAS PALABRAS PUEDEN SER

a. Las Palabras De Maldad Que Otros Han Pronunciado Contra Nosotros. Las malas palabras pueden producir maldiciones, no sólo cuando se dicen con toda maldad, sino también cuando se pronuncian con descuido. Esta es una de las razones por las que debemos aprender a disciplinar nuestra lengua, por una parte y por la otra, aprender a romper el poder de las palabras que dicen mal de nosotros.

"Mas yo os digo que de toda palabra ociosa que hablen los hombres, de ella darán cuanta el día del juicio" (Mt.12:36) En el griego el término "agros" significa palabras sin fruto, sin provecho, estériles, vacías. El apóstol usa este mismo fonema para expresar la falta de efectividad; es decir, palabras inútiles, sin provecho, sin las respectivas obras de fe (2P. 1:8)

b. Las Palabras Perversas Que Hayamos Dicho Contra Los Demás. Es de una gran importancia que entendamos un principio bíblico básico. Los demonios no pueden entrar en un creyente cuando quieran; ellos necesitan que se les proporcione la oportunidad de hacerlo. Además, los demonios son los que les dan fuerza a las maldiciones. Por tanto, nadie nos puede poner una maldición (un demonio) a menos que haya una puerta abierta en nuestras propias vidas. Por esto, con toda razón, dice la Santa Biblia: "Como el gorrión en su vagar, y como la golondrina en su vuelo, así la maldición nunca vendrá sin causa" (Pr. 26:2) Cuando se cumplen las condiciones de Dios, ningún demonio tiene derecho a levantarse ni a permanecer en un creyente. Se puede y se debe expulsar con toda rapidez en el nombre de Jesús.

c. Las Malas Palabras Que Hemos Hablado Contra Nosotros Mismo. "Te has enlazado en las palabras de tu boca y has quedado preso en los dichos de tus labios" (Pr. 6:2) La palabra hebrea yaqosh, que se tradujo "preso" significa llevar a la ruina o la destrucción, como cuando a las aves se les captura en una red.

JURAMENTOS

¿Qué acerca de los juramentos o votos que se hacen cuando las personas se unen a logias, fraternidades o hermandades? Jesús amonestó : "No jureís en ninguna manera" (Mt. 5:34). La Biblia Ampliada traduce esta frase así: "No os ateís en ninguna manera con juramentos". Además, muchos aspectos en los juramentos de las organizaciones humanas son impíos. Igualmente en la Biblia se lee: "Pero sobre todo, hermanos míos, no juréis, ni por el cielo, ni por la tierra, ni por ningún otro juramento; sino que vuestro sí sea sí, y vuestro no sea no, para que no caigáis en condenación". (Stgo. 5:12)

ALGUNAS ACTITUDES QUE PROVOCAN MALDICIÓN SOBRE NUESTRA VIDA SON:

· Idolatría Dt. 27:15; Ex.20:5 · Engañar al prójimo Dt.27:17 · No honrar a los padres Dt.27:16 · Fornicación Dt.22:21-29 · Relaciones sexuales anormales (incesto, zoofilia) Dt.27:21-29 · Oprimir a los indefensos Dt.27:19 · Crueldad contra una persona inválida Dt.27:17 · Relaciones homosexuales Gn.19:13,24,25; Lv.20:13 · Poseer objetos "contaminados" o malditos Dt.7:25,26 · Cualquier práctica de ocultismo Lv.20:6,2; Dt.18:9-13 · Asesinato Dt.27:24 · Asesinar por dinero (hacer abortos) Dt.27:25 · No reverenciar el nombre de Dios Dt.28:58 · Abandonar a Dios Dt.28:20 · No servir al Señor con gozo y alegría Dt.28:47 · Maldecir o actuar en contra de la simiente de Abraham Gn.12:3;27:29 · No dar la gloria a Dios Mal.2:2 · No pagar los diezmos Mal.3:9; Hg.1:6-9 · Desviar a otros del camino del Señor y conducirlos a cultos falsos Dt.13:18-21 · Quitar o agregar a la palabra de Dios Ap.22:18,19 · No querer colaborar en la lucha de Dios Jue.5:23 · No advertir a quienes pecan Ez.3:18-21 · Pervertir o adulterar el evangelio de Cristo Gal.1:8,9 · Rehusarse a perdonar a los demás Mt.18:34,35 · Sacrificar niños Lv.18:21; Dt.18:10

MALDICIONES POR BRUJERÍA

Hay dos fuentes espirituales de poder; Dios y Satanás. Los siervos del Dios Altísimo usan su autoridad espiritual delegada para bendecir a los demás y para derrotar el mal. Los emisarios de Satanás emplean el poder de Satanás para maldecir, controlar y hacer males. A este poder sobrenatural, maligno y perverso, se le conoce como brujería o hechicería. La palabra de Dios condena en forma absoluta todas las prácticas de la hechicería y las prohibe totalmente. "No sea hallado en ti quien haga pasar a su hijo o hija por el fuego, no quien practique adivinación, ni agorero, ni sortilego, ni hechicero, ni quien consulte a los muertos, porque es abominación para Jehová cualquiera que hace estas cosas" Dt. 8:10-12

A los brujos o hechiceros o magos, se les condenaba a muerte bajo la ley de Moisés (Lv. 20:27). La Palabra de Dios es enfática en condenar a todo cuanto hoy se conoce con el nombre de "las artes negras (mágicas). El control de los demás es otro objetivo de la hechicería. El brujo, hechicero o mago, así como quienes les siguen, intentas controlar a los otros y esperan obtener algún provecho sobre sus semejantes o sus compañeros. Este poder es real, pero es el poder de Satanás y su fin es ruina. La historia de Israel registra las múltiples ocasiones en que el pueblo de Dios ignoró a Dios y se volvió a las tinieblas para buscar ayuda. Los israelitas pensaban que los brujos les resolverían las crisis. Dios reprendió y juzgó a Israel por confiar en la hechicería. "Y si os dijeren: Preguntas a los encantadores y a los adivinos, que susurran hablando, responded: ¿consultará el pueblo a su Dios? a los muertos por los vivos? A la ley y al testimonio! Si no dijeren conforme a esto, es porque no les ha amanecido. Y pasarán por la tierra fatigados y hambrientos, y acontecerá que teniendo hambre, se enojarán y maldecirán a su rey y a su Dios, levantando el rostro en alto".

La hechicería se ha incrementado y extendido de manera tremenda en nuestra nación y e todas nuestras propias sociedades durante los últimos años. La Palabra del Señor establece: "el mundo entero está bajo el maligno" (1Jn. 5:19), pues "el gran dragón, la serpiente antigua, que se llama diablo y Satanás, el cual engaña al mundo entero" (Ap. 12:9). Dios dijo que el diablo engañaría al mundo entero, y hemos visto el cumplimiento de esta porción de las Escrituras. Los engaños de diablo también se infiltran en el Cuerpo de Cristo, La hechicería se disemina en muchas congregaciones locales por medio de las influencias de la Nueva Era. Hay una gran increíble cantidad de cristianos que se han vuelto a poderes distintos de los de Dios, en búsqueda de sanidad, guía y poder.

Los israelitas habían salido de Egipto, habían derrotado a los reyes amorreos y ahora acampaban en las fronteras de Moab. Balac estaba temeroso de ellos. La única posibilidad que encontró para derrotar a los hebreos, consistía en hacerlos maldecir por Balaam. Aquí vemos que, desde tiempo atrás era bien conocido que la brujería mostraba muy diversos sistemas y métodos que permitían aprovecharse tanto de los enemigos como de muchas personas. Balaam mostraba una muy conocida reputación en maldecir a la gente. Su habilidad y sus capacidades para echar maldiciones sobre los demás no era producto de una simple superstición. En efecto, el propio rey Balac pudo afirmar: "yo se que el tu bendigas será bendito, y que el que tu maldigas será maldito" (Nm. 22:6) A pesar de la implacable codición que mostró Balam hacia las recompensas ofrecidas por Balac, rey de Moab, solo pudo pronunciar bendiciones para el pueblo de Dios. Con toda su soberanía el todopoderoso intervino de manera muy activa y no permitió que hubiera ninguna maldición sobre los miembros de su pueblo escogido. Esta puede ser una explicación más que razonable para entender las palabras de autor sagrado en Dt. 23:5.

¿Por qué Balam fue incapaz de maldecir a los israelitas? ¿Acaso no tenía a su favor su gran experiencia en artes secretas y mágicas? Conviene recordar que en el caso de los israelitas toda incredulidad y toda rebeldía habían salido de en medio de ellos. Cuando la nube se movía ellos se movían también. Israel constituía el pueblo de Dios que andaba en total y completa obediencia a el. Por lo tanto, el altísimo bendecía a su gente ¿Cómo puede un cristiano protegerse de las maldiciones de los hechiceros? Nuestra protección consiste en ponernos toda la armadura de Dios, esa es toda la protección que necesitamos. Como soldados de Cristo debemos mantener ceñidos nuestros lomos con el cinto de la verdad, utilizar la coraza de justicia, emplear el yelmo de la salvación, y mantener perfectamente abrazado con todo nuestro aliento el escudo de la fe. Nuestros pies deben estar calzados permanentemente con el apresto de la diligencia para proclamar el evangelio de la paz y debemos tomar siembre con toda autoridad la espada del Espíritu que como sabemos es la palabra de Dios. (Ef. 6:13-17)

PRINCIPIOS QUE GOBIERNAN LAS MALDICIONES

Hay ocho leyes básicas que gobiernan las maldiciones. Esas leyes se aplican a cada una de las categorías en sus distintas clases: Las generacionales, las que se originan en los pecados de cada persona, las que vienen por las cosas malditas, las que se deben a palabras de maldición, las que se fundamentan en los padres fundadores, y las maldiciones que nacen por la brujería.

a. Hay Una Causa Para Toda Maldición Pr. 26:12 Nadie puede, inadvertidamente, tropezar con una maldición y ser víctima de ella. A las maldiciones las regulan las leyes espirituales, las leyes de Dios. De hecho, Dios decide si una persona ha de ser maldecido o maldito; su decisión tiene como base nuestra propia obediencia a los estatutos y mandamientos que se hallan en las Santas Escrituras Dt. 28:15. Las bendiciones así como las maldiciones están sujetas a las ordenanzas y reglas divinas, nadie tropieza en las bendiciones de Dios. Dt. 28:1-2.

b. El Pecado Es La Puerta Para La Maldición. Las primeras maldiciones sobre la raza humana se produjeron en el huerto del Edén cuando Adán y Eva pecaron. La serpiente recibió maldición Gn. 3:14. Además sobre la mujer también hubo maldición Génesis 3:16. Así mismo para Adán Gn. 3:17. Vale la pena recordar que "la maldición nunca vendrá sin causa" Pr.26:2. Hubo maldiciones en el Edén y sus causas fueron el pecado. Por tanto el pecado que raíz que origina la maldición. Mientras permanezca la raíz la maldición no se puede quebrantar. No es posible hacer que los problemas espirituales retrocedan con armas carnales. Una maldición es un problema espiritual que exige una solución espiritual. De la misma manera muchas condiciones de enfermedades y sufrimientos físicos y una buena cantidad de dificultades

financieras se deben a maldiciones.

c. Toda Maldición Es Un Problema Espiritual Que No Se Puede Remediar Por Medios Naturales. Gál. 6:7 El profeta anunció el juicio de Dios que iba a venir sobre Israel a causa de su idolatría. Los Israelitas sembraron vientos y cegaron torbellinos (Oseas 8;7). Aunque rendían tributo a Asiria, eso no les compró su seguridad pues el pueblo de Dios estaba bajo maldición debido a la adoración que dieron a los becerros. De manera semejante nadie que se halle sometido a maldiciones jamas podrá escapar de sus efectos mediante el ingenio humano. Cuando las enfermedades y las dolencias se deben a maldiciones ninguna ciencia humana podrá servir. Si el diezmo no se paga a Dios y se retiene o se dedica a otros finas habrá una maldición sobre los recursos económicos y ninguno de los tipos de planes o presupuestos servirán para controlar al devorador. Mal. 2:2. Definitivamente, Dios es imposible de burlar. Hasta la propia riqueza se puede convertir en maldición.

d. Donde Permanece El Pecado, También Permanece La Maldición Salomón acababa de dedicar el hermoso templo a Dios, y la gloria del Señor llenó por completo ese lugar. Aunque el altísimo moraba en medio de los israelitas ellos debían seguir en el camino de la obediencia sino lo hacia así, quedaban expuestos a las maldiciones que Dios iba a permitir en su contra. 2Cr. 7:13 Sin embargo, por medio del arrepentimiento vendrían las bendiciones, 2Cr. 7:14. Los demonios tienen sus escondites, donde se mantienen y permanece el pecado. Una maldición solo puede terminar sus efectos cuando el pecado sale a luz, mediante la confesión cuando se le abandona y se obtiene el perdón de Dios.

e. Una Maldición Implica Que La Mano De Dios Ha Sido Retirada. El poder de las maldiciones es diabólico si Dios permite una maldición, Satanás y sus demonios son los instrumentos que la ejecutan. Para decirlo de otra forma: cuando se impone una maldición, Dios quita por un instante su mano protectora y permite obrar al diablo. Si volvemos al libro de los principios vamos a encontrar un pasaje explicativo del antagonismo que Dios fijó entre la serpiente y la humanidad, por medio de la maldición pronunciada Génesis 3:15. Así, el pecado del hombre dio poder a la serpiente antigua, el diablo para herir el talón del Señor. Cuando nuestro maravilloso Señor Jesús llevo sobre si todos nuestros pecados, Satanás pudo herir a la simiente de la mujer, pero el le aplasto la cabeza. La cruz y la resurrección de Cristo nos liberaron de toda maldición. El pecado se personifica y un emisario de Satanás espera tan solo una rendija para brincar adentro con su maldición. Todo lo que necesita para hacerlo es que se le abra la puerta del pecado. Si alguien se va a dormir sin arrepentirse de la ira, dejará abierta la puerta para que entre el pecado. Que no se sorprenda si en la mañana siguiente encuentra su vida afectada. El Señor ordenó al rey Saúl destruir a todos los amalecitas, junto con sus pertenencias y todos sus ganados. Saúl desobedeció a Dios, pues tomo vivo al rey Agag junto con todos sus rebaños, por este pecado vino sobre el rey Saúl una maldición. 1Sa. 16:14. Por la influencia de este espíritu malo, Saúl se volvió paranoico, extremadamente suspicaz y no hacía sino llenarse de celos contra David. Lo perseguía con toda furia y varias veces intento darle muerte. Las maldiciones de esa enfermedad mental vinieron sobre el Rey Saúl, debido a su rebelión que es como el pecado de la adivinación (hechicería) y como ídolos e idolatría es la terquedad 1Sa. 15:23. Así es pecado es una puerta por cuyo medio entra una maldición. Y el poder que respalda y sostiene a toda maldición es un espíritu satánico. Con cierta frecuencia a una maldición se la mira como en la categoría especial de "demonización" aunque un "espíritu o demonio de maldición es algo bien distinto de otros espíritus del mal". Sin embargo, en realidad, tener cualquier espíritu es estar maldito y estar maldito es tener un espíritu inmundo.

F. La Ley No Suministraba Soluciones Para La Maldición No se impartía ninguna gracia para quienes pecaban bajo la ley. La maldición venía sin remedio de ninguna clase. En efecto, la palabra de Dios lo declara de manera indudable (Gál. 3:10) Como todos hemos pecado y por cuanto todos estábamos destituidos de la gloria y de la gracia de Dios, y nadie es justo, la maldición ha venido incuestionablemente sobre todas las personas que se hallan en la faz de la tierra, el caso de David es un ejemplo perfecto de tal afirmación. David violó los mandamientos "no cometerás adulterio" y "no matarás". ¿Pero acaso no se arrepintió? Claro está que sí. Y hasta con lágrimas amargas. La prueba se encuentra en el Salmo 51. Pero a pesar de todo cuando el profeta Natán confrontó al rey David, le anunció la maldición como consecuencia de su pecado estaba decretada (2Sa. 12:10,11,14). Aunque David se arrepintió con toda sinceridad el; juicio que se había pronunciado, vino sobre él y pasó a toda su familia. Bajo la ley no había ningún remedio para las maldiciones. Bajo la ley las maldiciones de la idolatría iban hasta la tercera y cuarta generaciones (Ex. 20:5). Cuando se concebía un hijo fuera del lecho conyugal, las consecuencias por el pecado de sus padres se extendían hasta la décima generación (Dt. 23:2). Una vez que se ponían en movimiento una maldición, la ley no suministraba ningún recurso en su contra. Por tanto, demos gracias a Dios por nuestro Señor Jesús.

G. Cristo Nos Redimió De La Maldición De La Ley Gál. 3:13 ¿cómo nos redimió Jesús de la maldición de la ley? Se hizo nuestro sustituto. Tomó sobre él mismo el castigo que se debía aplicar a nuestras iniquidades y a nuestra maldad y lo llevó en su propio cuerpo sobre la cruz. 1P. 2:24. La ley que se dio por medio de Moisés imponía maldiciones sobre todos los que desobedecieran los mandamientos divinos. Estas maldiciones afectaban el cuerpo, la mente, la relación interpersonal, el sustento de la vida, la libertad, el ambiente y sobre todo, el bienestar. La cruz es, por tanto, el foco central de evangelio y lo hace así con toda justicia, Jesús nos ha redimido de la maldición de la ley. En términos prácticos esto significa que ya no hay toda razón para que alguien permanezca bajo maldiciones. La solución se halla a la mano.

h. La Redención Se La Debe Apropiar Cada Uno. Jesús murió por todos los hombres, pero no todos son salvos ¿Por qué?. El remedio se debe apropiar. Muchos de los hijos de Dios permanecen bajo varias maldiciones de la ley. ¿Por qué? No se han apropiado de los beneficios redentores que efectúo Cristo con respecto a la maldición.

PASOS PARA ROMPER LAS MALDICIONES

  • Afirme su relación con el Señor Jesucristo

  • Arrepiéntase de todos sus pecados (conocidos y desconocidos)

  • Renuncie a los pecados de sus antecesores

  • Acepté y reciba el perdón de Dios y perdónese usted mismo.

  • Perdone a todos aquello que alguna vez le hayan ofendido

  • Renuncie a cualquier contacto con las sectas, con el ocultismo y con todas las religiones orientales.

  • Destruya todos los libros y objetos asociados con las sectas, con lo oculto o que tengan sus orígenes en toda fuente de religiones falsas.

  • Expulse a todos los espíritus de las maldiciones.

  • Reclame y aprópiese de las bendiciones.

La ministración a las personas

La Ministración Bases Legales Para Ministrar Las armas del creyente · La oración · El Ayuno La Sangre De Cristo · El Nombre De Jesús · La Alabanza · La Palabra · La Fe · La Unción Con Aceite · Los Dones Del Espíritu Santo · La Protección Y La Ayuda Angelical

Pasos Hacia Una Buena Condición Espiritual ¿Cómo Fortalecernos? Reconoceremos la conspiración del enemigo contra nosotros. Formas de Guerra. Guerra Espiritual A Nivel Ministración o "A Ras Del Suelo" Guerra Espiritual a Nivel Estratégico

Recomendaciones Para Ministrar

Formas De Guerra Guerra Espiritual A Nivel Ministración o "A Ras Del Suelo" Guerra Espiritual a Nivel Estratégico

Como Saber Si Es Un Mal Espíritu ¿Como entran?

¿Quiénes Pueden Necesitar Liberación? Requisitos para ser liberado. Otras Señales

LA MINISTRACIÓN

Bases Legales Para Ministrar

Toda la historia humana es un relato del esfuerzo continuo del hombre contra los emisarios del mal. La pregunta es: ¿Qué hacen aquí esos demonios? ¿Cómo venimos a un planeta tan infestado con el mal? La Biblia enseña que los ángeles fueron creados para ser santos (Mc. 8:38), pero en algún punto, algunos ángeles se rebelaron contra Dios en forma deliberada. Dios juzgó a estos ángeles rebeldes. Algunos fueron encadenados en el infierno, pero otros fueros dejados en libertad para oponerse a Dios y a su reino. ¿Por qué haría Dios eso? ¿ Por qué dejaría libre a una fuerza que se le iba a oponer?. Creo que es porque el desarrollo del hombre en su potencial máximo depende de una experiencia con un adversario. Eso es, Dios quería que aprendiésemos a combatir. Los hombres son una raza de guerreros, hechos a imagen de Dios y destinados a reinar juntamente con él. Intrínseco en nuestra naturaleza está el impulso de conquistar algo, de controlar algo. Este deseo se puede pervertir en codiciar el poder motivados por el orgullo, o se puede someter y usar en el gobierno misericordioso del reino de Dios. Fuimos destinados para gobernar con Cristo.

Formado por los hijos redimidos de Adán, está surgiendo una novia que entrará en comunión con el Dios trino en las bodas del Cordero (Ap. 19:5-9). Pero antes de la eternidad viene una breve experiencia de contienda aquí en la tierra. Piense en el mandato original de Dios para el hombre y la mujer, en Gn. 1:28: "Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra, y sojuzgadla, y señoread en los peces del mar, en las aves del cielo, y en todas las bestias que se mueven sobre la tierra.".

Note la palabra sojuzgar, que implica una posición de adversario. Dios no usó la palabra como cultivar. El sabía que una persona entraría en su heredad únicamente señoreando, tomando dominio. Dios ha señalado para nosotros una heredad personal. Mientras persistimos en conocer a Dios, él nos declara la revelación acerca de nuestro destino personal. Tenemos lugares donde ir y gente que bendecir. Se nos ha dado un don, una promesa y un territorio que tomar. Cuando comunicamos el evangelio, criamos a los hijos y cultivamos las riquezas de la tierra, enfrentamos la oposición de loa demonios. Han sido dejados allí por Dios sólo para que practiquemos en ellos. Estos demonios ya han sido sojuzgados y derrotados, pero nuestro privilegio es "ejecutar en ellos el juicio decretado"(Sal. 149:9). Esto es lo que responde a la siguiente pregunta: ¿Por qué permite Dios que el mal esté presente en la tierra? Desde luego que la posibilidad de hacer mal está presente en el estado de libertad sin embargo, esto no se refiere al asunto de los demonios.

Lucifer y los ángeles rebeldes estaban presentes en este planeta en la época de la creación del hombre. Desde la caída de Adán y Eva, la influencia diabólica ha penetrado en todas las culturas a causa del continuo pecado. Los que seguimos a Cristo enfrentamos una tarea similar a la de los israelitas después de cruzar el río Jordán para entrar en la tierra prometida. Ellos entraron en la tierra por fe, al igual que nosotros entramos en la salvación por fe. Luego enfrentaron la tarea de derrotar a los cananeos. En Jue. 3:1,2 hay una referencia a las tribus cananeas que quedaron en la tierra después de la muerte de Josué. En el versículo 2 se hace esta interesante declaración: "Solamente para que el linaje de los hijos de Israel conociese la guerra, para que la enseñasen a los que antes no lo habían conocidos."

¿Quiere Dios todavía que conozcamos la guerra? ¿Sigue siendo parte de su plan desarrollarnos como guerreros? Sí, hemos de asociarnos con Dios en la guerra. El creyente neotestamentario aplica el poder de la resurrección de Jesús. "Porque las armas de nuestra milicia no son carnales, sino poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas"(2Co.10:4). Este medio ambiente hostil es esencial para nuestro futuro eterno. La humanidad fue creada para ejercer dominio. Es necesario que enfrentemos un antagonista durante nuestro breve aprendizaje en la tierra para lograr el carácter que se requerirá para reinar con Cristo en la eternidad.

"Hay poderes, tanto en el cielo como en la tierra, que se opondrán cuando tratéis de llevar mi misión redentora. ¡Tened ánimo! Se me ha dado autoridad absoluta y total sobre los seres cósmicos que están en los cielos y sus agentes humanos que os resistirán en la tierra. Ninguna autoridad es mayor que la mía: Yo soy el Señor del cielo y de la tierra. Por tanto, podéis ir y ser capaces de hacer discípulos de todos los grupos sociales de entre las naciones de la tierra" Mt. 28:18-20 (PA) 1. Jesús nos da autoridad sobre el reino de Satanás Lc. 9:4; 10:1; 10:17; Hch. 16:18 2. Lc. 10:18 – "Serpientes" Gn 3. "Escorpiones" Ap. 9:1-11 3. Lc. 10:19 – "Autoridad" – La autoridad "exousía" que Jesús da es mayor que el poder "dynamis" del enemigo. 4. Requisito = Mantener equilibrio v. 20 La Guerra Espiritual Se Libra En Base A La Completa Seguridad De La Salvacion 1. Un cristiano sigue siendo un cristiano aunque este luchando con un grave problema de pecado en su vida. 1Co. 5:1-5; 11:30-32; 1Jn. 2:1-2 2. Un cristiano sigue siendo un cristiano aunque este luchando con un grave problema mundano en su vida. 2Ti. 4:10 3. Un cristiano sigue siendo un cristiano aunque este luchando con un serio problema de demonios en su vida. Hch. 5:1-10; 1Ti. 5:9-15

LAS ARMAS DEL CREYENTE

· La oración · El Ayuno La Sangre De Cristo · El Nombre De Jesús · La Alabanza · La Palabra · La Fe · La Unción Con Aceite · Los Dones Del Espíritu Santo · La Protección Y La Ayuda Angelical Pasos Hacia Una Buena Condición Espiritual ¿Cómo Fortalecernos? Reconoceremos la conspiración del enemigo contra nosotros. Formas de Guerra Guerra Espiritual A Nivel Ministración o "A Ras Del Suelo" Guerra Espiritual a Nivel Estratégico La guerra espiritual no es un juego, pues Satanás y los demonios bajo su control son seres reales con personalidades torcidas, corazones malvados e intenciones maliciosas. Ellos son más poderosos que los humanos, pero no son Dios ni se asemejan a Dios.

Nuestro armamento para la guerra son armas espirituales. Parece sencillo y lo es para los que no viven en la carne. "Pues aunque andamos en la carne, no militamos según la carne". "Porque las armas e nuestra milicia no son carnales, sino poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas" (2Co. 10:3-4)

· La oración Fácilmente se puede entender que la oración es la manera más elemental de guerra. Es bueno reconocer entre oración como

tal y oración intercesora. (Ef. 6:18)

· El Ayuno La palabra nos enseña que hay demonios que salas específicamente con oración u ayuno. El ayuno se constituye en una poderosa herramienta en las manos de los intercesores. El ayuno predispone nuestros sentidos espirituales para poder ser más sensibles a Dios. (Mt. 17:21)

· La Sangre De Cristo La victoria sobre el enemigo esta fundada sobre la obra redentora de Cristo. Su sangre ha sido el precio pagado y hoy como siempre, es el sello que nos declara como propiedad de Dios, atestigua que su victoria es nuestra victoria y evita cualquier ataque de Satanás sobre la vida del creyente. (he. 9:14)

· El Nombre De Jesús No hay nombre más poderoso que el nombre de Jesús, los demonios temen y tiemblan bajo ese nombre maravilloso. Todos ellos lo detestan y no soportan su poder. (Fil. 2:10)

· La Alabanza Dios se mueve poderosamente a través de la alabanza de su pueblo. El cubre con su presencia el lugar donde su nombre es

alabado y su presencia y la alabanza por sí misma es un arma poderosa. El Diablo detesta la alabanza a Dios. · Atar y Desatar Jesús nos ha dado autoridad para sujetar cualquier demonio y evitar su manifestación o control y para desatarlo de la vida de una persona y echarlo fuera. (Mt. 16:19)

· La Palabra Distinguimos en este punto que tanto la palabra escrita "logos" es decir la Biblia, y la palabra dada por Dios en un momento determinado "rhema" son útiles para ministrar liberación. El proclamarla, el usar la "espada del espíritu" trae poderosas bendiciones para ayudar a los oprimidos. (He. 4:12)

· La Fe Es imposible presentarnos en la guerra de Dios con temor en nuestro corazón; si ese es el caso, ya hemos sido derrotados. El temor es el evangelio del enemigo. Cuando nos acercamos a ministrar a alguien lo hacemos por la autoridad incuestionable de Jesucristo. (1Jn. 5:4)

· La Unción Con Aceite El aceite tipifica al Espíritu Santo y su aplicación debe ser hecha con discreción y en el momento de Dios. Es recomendable que después de la liberación, podamos ungir al creyente confirmando de esta manera la completa obra de restauración. (Stg. 5:14)

· Los Dones Del Espíritu Santo Hay dones especialmente útiles en la ministración; la profecía, el discernimiento de espíritus, las lenguas. Todo ello ayuda poderosamente. (1Co.12:10)

· La Protección Y La Ayuda Angelical Cuando se presenta una demonización muy fuerte o cuando sentimos que no tenemos recursos que puedan terminar la liberación, es bueno saber que disponemos de ángeles ministradores que están a nuestro servicio. Podemos pedir su presencia y que ellos intervengan en la liberación. Es cierto que parece un método no muy "ortodoxo", pero Dios sabe hasta donde podemos ayudar personalmente. (He.1:7) La actividad central básica para la guerra espiritual es la oración. En un sentido es un armamento de la guerra y, en otro sentido es el medio por el cual todos los otros armamentos funcionan. Uno de los pasajes principales sobre la guerra espiritual es Ef. 6:12-18 donde nos dice: 'No tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes." Si oramos con una actitud de fe y obediencia, los armamentos específicos que Dios nos ha dado para la guerra espiritual serán efectivos para vencer al enemigo. ¿Cuáles son algunos de estos armamentos? Hay varias referencias bíblicas que indican la importancia del nombre de Jesús. Mc. 16:19 cita a Jesús cuando nos mandó a echar fuera demonios en su Nombre. Jn. 14:14 dice que si piden algo en Mi Nombre, lo haré. Pablo dice que Dios dio a Jesús un nombre que es sobre todo nombre. Cuando Jesús nos invita a usar su nombre, El transfiere su autoridad divina.

El nombre de Jesús en un armamento sumamente poderosa pero tiene que ser usada con cuidado. En Hch. 19:14-16 tenemos la historia de los siete hijos de Esceva quienes procuraban echar fuera los demonios de un endemoniado en el nombre de Jesús, y, los demonios sabiendo que eran falsos, los atacaron arrancándoles la ropa de ellos haciéndoles huir. Nadie tiene la autoridad de Jesús a menos que Jesús sea su Señor. El nombre de Jesús es el armamento más poderosos para la guerra espiritual y tiene tremenda autoridad, pero solo si lo usamos de acuerdo a su voluntad.

PASOS HACIA UNA BUENA CONDICIÓN ESPIRITUAL

Diga el débil: Fuerte soy (Joel 3:10). Cuando Pablo en Ef. 6:12 nos dice que "tenemos lucha", utiliza un término propio de la lucha greco-romana. Este tipo de lucha obliga a los competidores a estar constantemente alertas. Hay otras semejanzas. Esta lucha exige un acondicionamiento físico, mental y emocional. En realidad, la lucha greco-romana requiere una mayor condición física que la mayoría de los deportes. De igual manera, la guerra espiritual requiere también un alto nivel de aptitud espiritual. "Fortaleceos en el Señor, y en el poder de su fuerza" (Ef. 6:10).

Cuando la Biblia discute la guerra espiritual nos ordena sencillamente "fortalecernos". No dice que sólo después de años de ser creyentes podemos llegar a ser fuertes. Nos defraudamos a nosotros mismos con demasiada frecuencia, negando lo que somos y lo que Dios ha hecho por nosotros. Estamos en una guerra espiritual, y si no sabemos que podemos ser fuertes, viviremos en derrota continua. Somos fuertes. No es un alarde. No es orgullo. Estar de acuerdo con la verdad de Dios es humildad. En Cristo somos fuertes.

¿CÓMO FORTALECERNOS?

· La primera cosa que debemos aprender a hacer es hablar con Dios y escucharlo. No quiere decir que la oración rutinaria y ritualista nos dé fuerzas. Las oraciones pudieran o no fortalecernos, pero hablar con Dios siempre lo hará. Nos hemos alejado de la conversación abierta y sincera con Dios. Las oraciones pudieran ser poco más que palabras, pero la conversación íntima con el Dios vivo nos trae vida y nos fortalece. Tenemos que estar en la presencia de Dios y hablar con él, conscientes de que él está interesado y escuchando. Entonces debemos estar igualmente dispuestos a escucharlo. La fuerza viene de estar en su presencia. · Segundo, debemos meditar en la Palabra de Dios. Al igual que la oración, esto debe ser más que un ejercicio religioso. Leer la Biblia pudiera fortalecernos o no, pero meditar en ella siempre lo hará. Es fácil leer la Biblia regularmente y pensar que hemos cumplido con los requisitos. Pero, ¿qué se ha logrado si no hemos meditado, entendido, creído y recibido la Palabra de Dios? No hemos hecho nada más que una actividad religiosa. · Otra cosa que debemos hacer para fortalecernos es tener comunión. Al igual que la lectura de la Biblia, ésta puede ser la también nada más que una actividad religiosa. Todos hemos ido a la iglesia, estrechado manos, palmeando espaldas y dispensando sonrisas, abrazos y saludos sin nunca haber sido fortalecidos.

La idea de tener comunión no es sólo para celebrar una reunión, sino para promover la relación con quienes tenemos más cosas en común: nuestros hermanos y hermanas en Cristo. Ir a la iglesia pudiera fortalecernos o no, pero la verdadera comunión comienza con ser accesibles y sinceros. Relacionarnos unos con otros en humildad nos fortalece. El orgullo, la independencia y excluir a otros de nuestra vida nunca nos fortalecerá, no importa a cuál reuniones asistamos. Podemos hallarnos en medio de la gente y todavía escondernos. Pero cuando bajamos las defensas en el lugar conveniente, en el tiempo oportuno, en la cantidad adecuada, con la gente apropiada, podemos unirnos en verdadera comunión. Esto es ser responsables y accesibles. " Antes exhortaos unos a otros cada día, entre tanto que se dice: Hoy; para que ninguno de vosotros se endurezca por el engaño del pecado" He. 3:13). La verdadera comunión incluye la exhortación. Tenemos una responsabilidad de exhortarnos y guardarnos uno al otro de la dureza de corazón. Necesitamos estar involucrados e interesados, exhortándonos diariamente unos a otros a mayor fe, amor y obediencia. Esto requiere compromiso uno con el otro, y la buena voluntad de considerar el bienestar de los demás como parte esencial de nuestro andar con Dios. · Otro medio para el acondicionamiento espiritual es orar en el Espíritu: hablar en lenguas. "El que habla en lengua extraña, así mismo se edifica…"(1Co. 14: 4). Sea que uno crea o no en hablar en lenguas, la Biblia es bien clara acerca de una de las muchas cosas que esto hace para el creyente: Orar en el Espíritu Santo edifica y fortalece el ser interior. · Somos fortalecidos también cuando adoramos; no quiere decir que sólo adoremos por lo que pueda hacer por nosotros. Adoramos por amor a Dios. No obstante, la verdadera adoración siempre nos fortalecerá; cantar, alabar en voz alta y levantar las manos pudiera fortalecernos o no. Con frecuencia confundimos la adoración que sale del corazón con la acción que pudiera ser algo más que ritual religioso. La adoración verdadera es venir ante el trono de Dios con una consciencia limpia y postrarnos ante él. Es contacto verdadero con Dios. Podemos caminar cada día completamente seguros, capaces de enfrentar cada crisis, circunstancia o ataque del enemigo cuando se presente. Es constante, pero podemos descansar en nuestra fuerza, dependiendo de Dios. El reposo de la fe no significa inactividad espiritual, que nada va a pasar, y que no necesitamos responder. "No es vuestra la guerra, sino de Dios". Pablo dijo: "Pues no ignoramos sus maquinaciones." El problema es que demasiados de nosotros ignoramos. Se nos ha enseñado a no saber las maquinaciones del diablo, a hacer caso omiso de él, y a interpretar erradamente el "reposo de la fe" como pasividad. Podemos aprender a reconocer las maquinaciones de Satanás. En toda situación, podemos descubrir lo que es del diablo y enfrentarlo. Podemos reconocer sus maquinaciones para destruir nuestro matrimonio, estorbar nuestras relaciones o arrastrarnos a la depresión. Las maquinaciones del enemigo fallan cuando las reconocemos. Sólo reconocerlas nos da la victoria. El ataca nuestra ignorancia y nuestra debilidad, pero fracasa cuando es confrontado con nuestra fuerza y el conocimiento de sus maquinaciones. 1Co. 2:6-8 dice: "Sin embargo, hablamos sabiduría entre los que han alcanzado madurez; y sabiduría, no de este siglo, ni de los príncipes de este siglo, que perecen. Más hablamos sabiduría de Dios en misterio, la sabiduría oculta, la cual Dios predestinó antes de los siglos para nuestra gloria, la que ninguno de los príncipes de este siglo conoció; porque si la hubieran conocido, nunca habrían crucificado al Señor de gloria." Hay una sabiduría que está oculta de los poderes de las tinieblas, pero accesible para nosotros si somos humildes delante de Dios. Esta sabiduría, dice el escritor de Hebreos, es para los maduros. He. 5:14 dice: "….para los que por el uso tienen los sentidos ejercitados en el discernimiento del bien y del mal." La sabiduría secreta de Dios es para los que están aprendiendo a reconocer las estratagemas del diablo y lo que es de Dios. La sabiduría de Dios nos ayudará a discernir y a reconocer las obras del enemigo en nuestra vida y en el mundo que nos rodea. Si esperamos en Dios, conoceremos las llaves.

RECONOCEREMOS LA CONSPIRACIÓN DEL ENEMIGO CONTRA NOSOTROS.

· La humildad es otro punto importante. Pudiera ser difícil de aceptar, pero los fariseos tenían la razón. Ellos entendían las Escrituras completamente. Sus declaraciones doctrinales estaban en orden. Sabían cómo ser buenos judíos. En su tiempo, eran los que creían en la Biblia, estaban comprometidos en la obediencia intransigente de la Palabra de Dios. Sin embargo, estaban tan orgullosos de su justicia que no reconocieron a Dios en forma humana. Jesús anduvo ante ellos, habló con ellos y los reprendió, pero no lo pudieron ver porque estaban demasiado orgullosos de tener la razón. Los fariseos crucificaron mientras defendían la piedad y la rectitud. Todas nuestras luchas contra unos y otros, nuestras batallas carnales desde el comienzo de la historia hasta hoy, sólo han fortalecido el control de Satanás en la tierra sobre los perdidos, y sobre el pueblo de Dios. Nuestro orgullo nos ha metido en una lucha en la que cualquier participación significa la derrota. No debemos luchar contra sangre y carne. Si peleamos contra la gente, no podemos luchar contra el enemigo. · El amor, la fortaleza suprema. Dios ama a la gente muchísimo más que nosotros y también es muchísimo más capaz que nosotros para ejercer influencia en el corazón de las personas. Si realmente creyéramos esto, ¿no estaríamos en constante oración los unos por los otros?

RECOMENDACIONES PARA MINISTRAR

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