El gran filósofo francés Blaise Pascal, de quien me considero discípulo en todos los sentidos, escribió en el siglo XVII: La ciencia humana se parece a una bola que crece ininterrumpidamente, y a medida que su volumen se multiplica lo imitan sus puntos de contacto con lo desconocido. En mi estudio que hice de las dos mayores pirámides de Giza se cumple lo escrito, pero al mismo tiempo el descubrimiento que anuncio en estas páginas da sentido, y reagrupa, muchos de los amuletos de aquella religión, de los cuales se ignoraba su motivación. El escarabajo fue un símbolo solar llamado Khepri (Keper). En algunos jeroglíficos lo pintaron con un sol (Ra) ubicado en el centro de un par de cuernos, como queriendo representar un contenedor transparente, que dejaba ver un círculo en su interior, lo cual a mi me sugiere el "Santo Grial" medieval. La veneración de las divinidades estelares entre las civilizaciones antiguas está muy bien demostrada. Al sol sería para los antiguos, como un gran corazón latiendo dentro del inmenso cielo. La dualidad de un simbolismo paralelo está en el hecho de que por las noches se convertía en un cielo estrellado. Actualmente la mayor muestra de un culto solar se practica entre el pueblo quechua del Perú. Ellos mismos se consideran "Hijos del sol" (Hijos de Inti). Grandes muchedumbres, que duermen bajo las estrellas tres días, suben anualmente a una montaña nevada. No les debe de importar demasiado, porque además se frotan su cara, las piernas y pies descalzos con la nieve. Todos buscan pureza después de su sacrificio
Al dios egipcio Khepri lo simbolizaron con un escarabajo. Se divinizó ese insecto desde las primeras dinastías de Egipto, siendo el de principal animal de veneración en el santuario de Heliópolis. Probablemente debió de influir el que las consonantes de su nombre Khepri coinciden con las del verbo que se traduce por "llegar a tener existencia." Khepri fue un símbolo solar, por el hecho de empujar una bola de estiércol, redonda como el sol a través del cielo, evocando la transformación trascendente. Es interesante que en su espalda tenga la letra _T_ mayúscula cuando sus alas están recogidas. Khepri creyeron que continuamente renacía, motivo por el cual en las momias sustituyó al corazón del difunto, pues Khepri tiene un ritmo de impulsos capaces de dar la vida. Por ello sería asociado a la idea del "eterno retorno", tanto de los dioses como de las personas, pues ya sabemos lo mucho que fueron sugestionables en materia de religión.
Ra era la divinidad principal del panteón egipcio y muchas veces, el llamado "Dios de la cara única", aparece representado con un disco solar sobre su cabeza. Los egipcios no fueron diferentes al resto de las culturas antiguas cuando consideraron el disco solar como fuente de toda vida, aunque, en realidad, no veneraban directamente a sus divinidades, sino el poder que tenían. Sobre todo veían aquel poder divino en el sol y también en el agua del Nilo, reconociendo que las personas, animales y plantas reciben de ellos un efecto creador de vida. Ra no sólo simbolizó al sol, sino además al Verbo, siendo la palabra el origen de toda la Creación. En el "Libro de los Muertos" se repite muchas veces la expresión "Palabras de Potencia" que debían pronunciarse cuatro veces, después de haberlas recogido con gran esfuerzo por todas partes. Por esa información, se comprende mejor que la ceremonia de "Abrir la boca" a las momias del Antiguo Egipto, en el fondo pudiese estar bien razonada.
Siguiendo con la idea del deseable equilibrio y la estabilidad, ahí están los obeliscos para recordarlo. En Heliópolis, los obeliscos simbolizaban los rayos del sol petrificados. En el "Renacimiento" de Egipto los obeliscos acostumbraban a erigirlos por parejas. Eran esculturas hechas de una sola pieza y muy difíciles de trabajar. Tenían su punta piramidal cubierta de oro porque, al reflejarse el sol, destellaba como si realmente fuese "Carne de los dioses." Las cimas de los obeliscos era el lugar donde primero recibían los rayos del sol naciente, de modo que, gracias a su punta, los obeliscos hacían evidente su directa relación con el sol (Ra). Uno de muy grande, ubicado cerca de Asuán (mide 41,70 m. y pesa 1200 Tn.) no lograron extraerlo porque se les rompió. Probablemente querían emparejarlo con el que está aún solitario ante el templo de Carnac (Karnak, en la ciudad de Tebas), pues mide 32 m. de altura. En la práctica los obeliscos servían de pararrayos.
FOTO: LA IMPORTANCIA RITUAL DEL FALO
Ignoro cómo creyeron que se sostenía el cielo estrellado. Si adoptaron el divino falo para asumir la función de soporte, tendría que existir todavía uno de realmente gigantesco. En su iconografía hay muchos obelisco que parecen ser buenos candidatos, y otros tuvieron un piramidión en su cúspide. Si realmente opinaron que los obeliscos y falos servían de soportes para el firmamento, aún deberían haberlos hecho de dimensiones mucho más grandes. He visto fotos de alguno inacabado que demuestra que al menos lo intentaron. El dios Minu, de la fecundación, era visto como un hombre de raza negra, vestido de faraón y sosteniendo en su mano un látigo. Su pene erecto acreditó la perfección de la creación del mundo en base al triángulo rectángulo, del cual procede la Sección áurea. Las pirámides estudiadas están diseñadas como cuatro triángulos "aureos" (rectángulos, o escálenos) unidos por el segundo de sus lados de mayor longitud.
En este escrito el lector podrá distinguir claramente los beneficios de aplicar mi sistema de investigación (como cuando presenté rostros en foto aérea), porque aplico siempre una perspectiva vertical, diferente a la investigación oficial que llamaré horizontal. La última pasa de profesores a alumnos, sin apenas variaciones a través de las diferentes generaciones de estudiosos. Me permito encontrar nuevas interpretaciones de los enigmas culturales, gracias a la conexión de ideas diferentes de forma innovadora. Para mi, la creatividad es ser yo mismo, porque también Dios me parece que "disfruta" creando.
Mirar puede hacerlo cualquiera, pero se trata de entender, cómo evolucionaron las ideas desde el año 6000 a.C. en las orillas del río Nilo. El país estuvo dividido: En la parte baja del delta, devotos del dios Osiris, y la del norte devota del dios Seth. Ésta fue el "Reino de los juncos", que es junto al curso del Nilo Azul, una zona natural difícil de comunicación entre Egipto y el África tropical. Era el reino de los Nuers, donde se recolectaba más papiros que en el delta, aunque era de muy difícil acceso. Esos pastores del sur en tiempos remotos a las personas las llamaban "Rebaño del dios sol", siendo gente muy castigada por sus dioses, pues criaban vacas en una zona llena de insectos y cocodrilos.
Ante las dos grandes pirámides un cierto orgullo (por la técnica actual y nuestros mayores recursos), nos puede anular las perspectivas, pero todo es más sencillo si se recupera el criterio elemental de aquellos remotos constructores. Cuando se ha encontrado la clave del problema, las ideas se diversifican resolviendo aspectos de sus ramificaciones expresados en sus símbolos. Hay que remontarse a los antiguos ganaderos para explicar la importancia del Nilo y la divinización de los animales que vivían en sus orillas. Ello puede explicar la posterior divinización de Hathor, con orejas de vaca y cuernos en su cabeza, igual que la diosa negra Isis. Heródoto escribió que por esta razón no comían nunca carne de vaca (Libro II: "Euterpe").
Es lógico, pues la profunda razón de ser de la religión egipcia fue: fomentar la convivencia entre personas y animales. Para conseguirlo asumieron la responsabilidad de preservar un perfecto equilibrio dentro de su ámbito. Hicieron obras de fe para agradar a Ra, su divinidad suprema. Es lógico admitir que del Antiguo Egipto tan sólo se conservaron los llamados "Misterios exteriores." Incluso éstos, siendo menores, consiguieron siempre despertar una chispa divina después de una comprometida iniciación. El pilar Djed es un amuleto cilíndrico que tiene su mitad superior dividida en cuatro espacios regulares. Son cuatro anillos anchos y delgados superpuestos. Los cuatro anillos del pilar Djed relacionaban el cielo con la tierra, y por ello los utilizaré para separar aspectos históricos de los filosóficos. El Pilar Djed, en los jeroglíficos es considerado como una sucesión de troncos unidos a fin de que soportasen el cielo. Lo entendían como si fuese el "Pilar de la estabilidad", y era como la columna vertebral con cuatro anillos salientes en su mitad superior. El ritual de levantarlo hasta su vertical, evocaba la resurrección del dios Osiris. Para sus rituales se ayudaban de dos serpientes cobra (una macho y otra hembra) a cada lado del pilar porque simbolizaban la estabilidad de la persona "osirizada". FOTO: EL PILAR "DJED"
CAPÍTULO 9
INICIACIÓN, ES DECIR "OSIRIARIZACIÓN"
La cosmogonía en el Antiguo Egipto, además de sus escritos jeroglíficos, tenía siempre la mucho más importante transmisión oral. La palabra (el Verbo) era la mejor expresión de poderío cuando tenía relación con lo sobrenatural. En el Antiguo Egipto, y más en la IV Dinastía, una iniciación servía para revelar secretos diferentes (que no diferentes secretos) a los más adictos y fieles aspirantes a ser sacerdotes. Desde el momento de diseñar una "Balanza Solar", disminuyó la función del corazón, por más que sus dibujos hoy logran confundirnos. Las iniciaciones sacerdotales en todas partes cambian según evolucionan los criterios enriquecidos por otras ideas afines a propios y extraños. Siempre ha sido y siempre será. Lo sorprendente es que una idea tan ancestral de la IV Dinastía de Egipto llegase a impregnar tan profundamente la mente de los filósofos griegos llamados clásicos. Isis, en Grecia adoptó la forma de varón barbudo llamado Serapis, que vestía túnica corta y un cesto con fuego sobre su cabeza. Aquella idea de los egipcios "El conocimiento y la belleza nacen del corazón"; lo corroboraron los filósofos Plinio y Plutarco. Éste último, por cierto, informó de que el ave ibis inspiró la primera letra del alfabeto egipcio, que es la base de los occidentales.
Eran verdaderos devotos del culto al sol como divinidad, pero su máxima sabiduría era tan simple como admitir que todo, incluido su cuerpo, formaba una unidad con el resto del mundo visible. Aprendían, como nosotros, que no es el corazón sino el cerebro el que, a semejanza del sol, alimenta nuestro espíritu gracias a un poder superior. Existe el sol exterior que hace crecer las cosechas, y otro sol mental que nos hace crecer espiritualmente para merecer una mejor vida en el Más Allá. Aquellos que no fueron completamente iniciados, obviamente siguieron opinando sobre sus dogmas religiosos "de corazón." Los aspirantes a ser sacerdotes no recibían las claves del misterio hasta que el neófito abría su mente a nuevas posibilidades de entender su verdadera naturaleza, superando el ritual para ser un Osiris. Era el núcleo de un rito muy parecido al funerario, cuando la salvación del alma (Ka) del difunto se pesaba en la "Balanza de la verdad." En la escena más popularmente conocida, se ve al dios Osiris juzgar, ayudado por los dioses Thoth y Anubis. Un sabio egipcio llamado Ormus en el año 46 d.C. reunió como pudo la religión de Osiris con las demás creencias. Harpócrates era el nombre del "Horus Niño", hijo de Isis y Osiris. Se lo representaba como un niño chupándose el dedo. La Golden Dawn lo traduce por "silencio." Por mi vocación de comunicador, dudo que mantener este tipo de secretos tenga ventajas, pues es la propia gente la que se automargina. El hermetismo fue suavizado, porque el hecho de que amar unas ideas también obliga a transmitirlas a quienes lo merezcan. Es una prevención para evitar que suceda como cuando, muy súbitamente, el planeta entero padeció una hecatombe climática.
OTRAS IDEAS "RESCATADAS" (PROBABLEMENTE DE LA IV DINASTÍA)
Ante las crisis generalizadas de nuestro mundo actual, que comienza por falta de valores humanos, creo que la idea de la Balanza Solar ha de servir de nuevo para avisarnos de que es el momento oportuno para aprender lo que los sacerdotes quisieron expresar construyendo dos pirámides tan juntas como gigantescas. Aquí me parece oportuno referirme a un sarcófago romano (s. II d.C.) donde se presenta, en relieve, al joven dios Kailos, desnudo, manipulando una balanza que simboliza el Momento oportuno. La idea fue copiada del mismo tema hecho en bronce por Lisipo de Pella, y dedicada a Alejandro Magno en el siglo IV a.C. por haber sido nombrado faraón de Egipto. En realidad es fruto de una inspiración mucho más antigua, y que nos ha llegado a través de este mármol de la Roma imperial que se guarda en el Museo de Turín (66 x 62 x 9 cm.) Colección Drovetti.
La siguiente foto con varias barbas postizas de faraones, nos informa de que éstas ya no serán consideradas muy ridículas, porque conectaban la Estrella de David con los Diez Mandamientos. Así pues, gracias al insólito atributo del poder de los faraones, ambos símbolos religiosos ya no estarán solamente relacionados por los relatos del patriarca Moisés en la cima del Monte Sinaí. (http://webspace.webring.com/../../anillodemoisés.
FOTO: EL SELLO DE MOISÉS y LOS "DIEZ MANDAMIENTOS"
El proceso de osirización, efectuado ritualmente ante el gran tribunal de los Neters, en el Ra-stau, trataba de desvelar el Ra de cada iniciado, de modo que luego pudiese ser considerado "poseedor del ojo" de la divinidad. Posteriormente Osiris fue una divinidad cuyo culto se difundió por todo el mundo antiguo porque se refería a una serie de reglas morales y de valores éticos, los cuales acabarían siendo sintetizados por los Diez Mandamientos". Una variante de la osirización se introdujo en el cristianismo cuando el gran integrador, que fue san Pablo, escribió sus muchas y muy famosas cartas. Son de fecha anterior a los cuatro evangelios del Nuevo Testamento, y escritas después de cambiar de criterio al caer del caballo camino de Damasco. Lo cierto es que las creencias siempre serán algo tan íntimo, que el verdadero creyente en un futuro habrá de lograr ser realmente: Uno con Dios. Hoy cualquier buen cristiano en Egipto seguirá distinguiéndose como Hijo de la Luz, pues creían que eran personas iluminadas, y no sólo por el sol. Hacían evolucionar su conciencia, y con ello su espíritu (Ba). El aspirante a sacerdote, después de superar el monte Manu, pasaba a un paraíso místico, aunque un faraón podía ser en vida "Hijo de Dios", distinción suprema y un honor que hasta la V Dinastía no se atribuyeron institucionalmente los faraones. Incluso las reinas eran llamadas "Esposas de Dios". Dioses como Ra, Osiris, y otros menores, como por ejemplo, los amigos de Osiris (Sennshu Hor), etc., nunca fueron personajes reales mitificados, sino que evocaron fuerzas de la naturaleza. Entre ellos se incluyó el caos, como fue el caso del dios Seth, con cuernos sobre su cabeza. Referirme de pasada a explicarlo aquí servirá para afirmar que puedo pensar que: varios dogmas de la Egiptología, han estado mal planteados desde el principio de su institucionalización. No ha de extrañar, porque las primeras excavaciones sistemáticas las efectuaron los franceses durante la segunda mitad del siglo XIX.
Referente al "Disco alado", simbolizaba al Astro Rey como el Dador de Vida, y asimismo la forma del Creador en el cosmos. Como ignoraban que el sol está sujeto a un ciclo vital, lo identificaron con el Ave Fenix, una especie de garza del Nilo que avisaba a los agricultores cuando estaba cerca la época de inundaciones, por lo que fue muy venerada. Era preferida para adornar algunos piramidiones (o piedra Ben-ben), sustituyendo al dios Ra. Su ojo radiante "que todo lo ve", fue un símbolo popular en el mundo occidental desde el siglo XVIII. Se pintaba muy grande en el centro de un triángulo para simbolizar la naturaleza divina del sol, porque su poder, capaz de dar vida, evidencia que el sol mismo debe tenerla. Se lee en la Santa Biblia: ¿El que hizo el ojo, acaso no podrá ver? El ojo dentro de un triángulo rectángulo con su vértice apuntando hacia arriba, tal como decora la llave de bóveda de la catedral de Santiago de Compostela (siglo XII), en Egipto a veces era llamado "Ojo Divino" (Utchat) porque recuerda su poder creador, decoró el obelisco que es símbolo del dios Ra. Quizá esa luz trascendió y se encuentra expresado artísticamente en las pequeñas ventanas de los ábsides de las iglesias medievales europeas, simbolizando que Dios está dentro de cada persona. El éxito dentro del cristianismo elevó el rol del triángulo con un ojo, y pasó a simbolizar el misterio de la Santísima Trinidad.
FOTO: LA ESTRELLA DE DAVID INCLUYE LOS "DIEZ MANDAMIENTOS"
De la organización religiosa de los sacerdotes de la IV Dinastía, y de los ceremoniales rituales que efectuaron, bastaría fijarnos en las cientos de órdenes masónicas que en los últimos siglos han pretendido haber heredado los símbolos del Antiguo Egipto. A mi me llama la atención un pequeño delantal cuadrado que no podían usarlo si mantenían discrepancias con algún otro miembro de la hermandad. Finalmente un ojo dentro el triángulo fue elegido el símbolo de la masonería. Cada escritor francmasón, en sus libros ha intentado hacer retroceder sus símbolos a las fuentes más antiguas de los egipcios. Documentalmente, éstas sólo se remontan al "Manuscrito Regios" (hacia 1390), de cuando el sabio griego Euclides fundó la masonería en Alejandría (Egipto). La política de los antiguos egipcios estuvo influida por la llamada "Organización de los Misterios" que tenía logia en decenas de distritos del país del Nilo, gobernada por un sumo sacerdote delegado por el propio faraón desde cuando se reunían en la capital de Menfis. Los sacerdotes de Hermópolis y los de Heliópolis, así como otros de Abydos, Menfis, Tebas, etc., acabaron fundiendo sus ideas en la capital de Alejandría, de donde en gran parte pasaron a los estudiosos del saber antiguo de todas las costas del mar Mediterráneo. En las catacumbas de Alejandría y hasta en las de Roma, en el siglo II pintaron escenas del cristianismo empleando símbolos egipcios. Es muy evidente la persistente influencia de los símbolos del Antiguo Egipto en el cristianismo. Un investigador de sus rituales me hizo dar cuenta de que dos elementos de máxima autoridad eran sujetados por el faraón entronizado. Son los mismos utensilios que se citan en el Antiguo Testamento en un consolador Salmo de David. Es muy conocida porque en Estados Unidos de América aún se recuerdan en la oración fúnebre por excelencia. En efecto, en los cementerios durante los enterramientos se lee: "…Tu vara y tu cayado me confortan…" (Salmo 23-4). FOTO: SÍMBOLOS EGIPCIOS PARA LOS PRIMEROS CRISTIANOS
La mística del dios egipcio Amón era parecida a la del monoteísmo hindú dedicada al dios Brahma, siendo también la que sirvió de fuente al cristianismo. Nada hay en sus alabanzas que no coincida con los atributos que proclamamos de nuestro Dios cristiano. Todos los demás dioses son secundarios al modo de nuestros ángeles. En el Salmo 104 de la Santa Biblia, la poesía dedicada al dios (Nether) Atón, se describe el mismo tema que los judíos dedicaron a Yahvé, por la secreta iniciación que había recibido Moisés. En realidad Akenatón sublimó el culto al "espíritu del sol", al modo como se continúa haciendo en las comunidades indígenas de Centroamérica, pero el sol nunca podría ser expresión suficiente de la "abstracción divina".
Pero lo copiado a favor de los hebreos no se limitó a los Salmos y a los Proverbios, pues también éstos fueron la traducción de las loanzas de Amenemope dedicadas al dios Ra. Los Diez Mandamientos derivaron de los jeroglíficas que relatan la "Pesada del Alma" del faraón difunto ante el dios Osiris. Parece una irreverencia, y realmente yo no me atrevo a transcribir un "Padrenuestro" egipcio que se puede leer en la "Oración de Abba Ra". Nos inundáron las creencias egipcias, y basta ver en los libros de arte que en la catedral de Notre-Dame-de París hay una escena en versión cristiana del "Juicio Final" que recuerda la que protagonizó el dios-chacal Anubis en el Antiguo Egipto. Está claro que habrá que seguir tirando del hilo de las antiguas creencias tanto de los templarios como después de los francmasones.
Para los europeos y sus colonias, el símbolo de una pirámide con un sol o un ojo en su centro, no sólo representó la omnipresencia divina (por ello está en todas las iglesias barrocas de Europa), sino que sigue dibujado en cada billete de dólar americano, porque los fundadores de los Estados Unidos (USA) se creyeron herederos espirituales de los conocimientos secretos y de la ética del Antiguo Egipto (vía los caballeros de la Orden del Temple), llegando incluso a urbanizar algunas grandes capitales con trazos triangulares superpuestos.
CAPÍTULO 10
UNA MENTALIDAD ÉTICA QUIZÁ IRREPETIBLE
En el Antiguo Egipto cada templo en su centro incluía un estanque de agua de proporciones gigantescas. Esto era posible por la proximidad del río antes de alterar su curso, pero parece ser que la zona que dominaban los sacerdotes Cada claustro aspiraba a ser un vergel, que compararé con la idea que nos ha llegado del Paraíso Terrenal. Cada monasterio estaba ubicado en el centro del recinto amurallado, para mantener un bello ámbito con exuberante flora y fauna como un Edén en miniatura. La zona de Giza tampoco estaba tan árida como la conoció Napoleón. El filósofo Heródoto, en su libro II "Euterpe", explica que aquella planicie era llamada "Campo de Filitis", por ser el nombre de la persona que allí pastoreaba sus rebaños. Al menos debió tener la vegetación de un clima subtropical, ya que lo más probable es que la erosión de la Esfinge la causó la lluvia. La confusión empieza por que, erróneamente, suponemos que el entorno de sus templos estaban entonces llenos de arena. Fueron recintos muy extensos, y sus muros estuvieron bellamente decorados con colores vivos, como las imágenes que en ellos se veneraban. Cada templo estaba ubicado en el centro del recinto amurallado, para mantener un bello ámbito con exuberante flora y fauna como un Edén en miniatura. Como seguramente les repugnaría nuestra idea de encerrar animales en jaulas (tal como los vemos en los parques zoológicos) ellos seguramente los admiraban en libertad en las orillas del río Nilo, si bien en sus templos tendrían algún espacio acondicionado para curarles de enfermedades y heridas.
De aquellos religiosos tan antiguos intuyo su gran ansia de pureza moral. Debieron de ser muchas las comunidades de polifacéticos sacerdotes obedientes a su faraón. Su devoción absoluta al dios Ra les hizo construir un conjunto gigantesco en la explanada de Giza, de modo que pudieron sentirse más unidos al cielo que nunca antes se había conseguido. Lo que sabemos de sus creencias quizá pudo haber sido comparable a las enseñanzas que con tanto éxito impuso al pueblo judío su gran patriarca Moisés.
TRANSMISIÓN DE UNA IDEA, LUEGO INCOMPRENSIBLE: LOS CUERNOS DE MOISÉS
Después de comprobar que la Esfinge de Giza estuvo distinguida con un disco, se puede entender, por fin, el aspecto físico de Moisés, siempre antes inexplicable. No solo la esfera, sino también el círculo se perdió, pero no del todo.
Se le presentó tradicionalmente con dos cuernos sobre su cabeza. En la Edad Media remitiéndose al disco de oro que había estado clavado sobre la cabeza de la Esfinge de Giza, la idea ancestral se sintetizó partiendo de la forma egipcia del disco. Se dibujaron unidos el círculo del sol sobre la cabeza de Moisés con dos cuernos de la luna, prescindiendo del simbólico círculo completo. Más difícil que justificar los dichos cuernos, es explicar convincentemente el por qué Moisés pudo llevar dos antenas para comunicarse con el celoso Iahvé de la Santa Biblia, o con "los dioses".
Un dibujo de unas antenas de este tipo existen también en el Monte Sinaí (son "dibujos" físicamente indestructible, porque aparecen con una dimensión inaudita). En otra web presento las presuntas "antenas" grabadas sobre un casco en la cabeza de un busto humano mucho mayor, gracias a una foto de la Nasa. Supongo que debió ser hecha hace varios milenios desde un satélite en órbita. Como aparece sobre las cimas del sur del Monte Sinaí se debe identificar que se trató del dios egipcio Seth tal como explicaba en sus libros Zecharia Sitchin.
Me debo siempre remitir a la IV Dinastía, porque creo que aquellos sacerdotes egipcios del período de las pirámides, han de ser recordados por su ética insuperable. Probablemente ellos fueron capaces de esperar la muerte con un contagioso optimismo, porque creían realmente en los poderes mágicos de sus rituales. Opino que fueron personas con una sensibilidad capaz de haber escrito los textos preliminares de las recopilaciones morales que, siglos más tarde, se incluyeron en los libros bíblicos: "Salmos de David", "Proverbios", o el "Eclesiastés." Platón consideró que aspiraban a la visión directa de la divinidad, y lo llamó Epopteia. Yo tengo una palabra que pesa mucho más, y con ella titulé uno de mis libros "ANAVANA" (sobre la búsqueda de un tesoro de religión), porque incluye la idea del equilibro gráfico en sus propias letras. La "V" central sería el fiel de la balanza, cuyos platos configuran la repetida sílaba ANA. Esa idea (y el conseguir la unidad en lo posible) impregnan siempre mi obra. Encontré ANABANA escrita en el libro medieval "LAS CLAVíCULAS DE SALOMÓN" (recibí la copia del Museo Británico.)
Entre los aforismos de la filosofía egipcia, el corazón es el mejor don de Dios, siendo de donde fluye toda salud y la prosperidad de las personas y de los animales. No son demasiado conocidas varias obras egipcias, como la titulada "Lamentaciones de Ipwer", que se copiaron en el libro "Éxodo" (7:20-21; 9:6;10:15; 11:5), y asimismo la titulada "Oración del Ciego", en la que se puede comprobar que en sus páginas hay frases del "Sermón de la Montaña", del "Padrenuestro", etc.. Los Cuatro Evangelios reflejan la altísima espiritualidad de los egipcios a los que me refiero en esta investigación. Se debe distinguir entre los escritos en los tres primeros siglos del cristianismo, de los posteriores cuando los cristianos gozaban de la libertad religiosa en el Imperio Romano, porque institucionalizó el emperador Constantino (siglo IV). Hay que leer la Santa Biblia con espíritu abierto.
Aquellas comunidades de sacerdotes tardarán en ser admirados por el resto del mundo, porque los cristianos, por ignorancia y resentimiento, entonces destruyeron todas las obras de arte por considerarlas obras del demonio (por ejemplo, en el templo de Filae, en una isla del río Nilo), y al hacerlo hipotecaron gravemente el futuro de Egipto, porque quemaron textos escritos por muchas generaciones de sacerdotes de una exquisita sensibilidad. Ellos habían sido capaces de trenzar los mimbres básicos para tejer una trama que, por medio de Moisés, y posteriormente el evangelista san Mateo, impregnaron el núcleo de la religión cristiana, justificando sus dogmas. Habían conseguido enfatizar y generalizar el valor de la verdad, de la justicia y del equilibrio mental. Se perdieron unos valores sociales que primero habían sido personificados en la imagen de la diosa MA'AT. De ello había escrito mucho el sabio visir egipcio Ptah-Hotep. Sus milenarias enseñanzas confirman que el corazón humano es la fuente de la moral, porque en ese órgano están latentes las cualidades reconocidas en MA'AT. La meta fue llegar al Valle de los juncos después de haber muerto; y no lo conseguían aquellas personas que conservaban pasiones animales. Supieron mucho de las miserias humanas, y es algo que se debe tener en cuenta, y nunca creer que, por ser unos muy antiguos personajes, tuvieron menos conocimientos que un bachiller actual. Es de justicia que mi defensa de su talento no quede confinada en el limbo de las historias pseudocientíficas.
Ptah-Hotep en el "Papiro Prisse" recopiló, hace casi cuatro milenios (cuando dijo tener 110 años de edad), unos pensamientos que transmiten el espíritu social de los sabios sacerdotes que planificaron las pirámides de Giza. Posteriores a los escritos de Ptah Hotep fueron: el "Libro de máximas" (de los muertos) del "Papiro Ani", y otro escrito en demótico que se conserva en el Museo del Louvre, de París. Por ellos se demuestra que desde el inicio hasta el final de la historia del Antiguo Egipto se siguió un mismo código moral. Fueron una gente muy bondadosa, y tan espiritual, que hoy sólo deben haber entre la especie humana unos pocos individuos con una semejante mentalidad intrínseca fosilizada. Ptahotep escribió que sólo puede mandar quien sepa llegar al corazón de quienes le escuchan, porque sus palabras no giran egoístamente entorno a si mismo: "Quien obedece al corazón está en el Orden." Sin los dones de MA'AT, las personas son esclava del "ahora", que es como decir aquello que es fugaz. En el fondo, siempre se encaminan los pasos de quien desee superar el propio ego. Son consejos para ser capaz, y consciente, de poder llegar a trascenderse. Las personas con buena esencia lo entienden, y si son inteligentes, cambian. Después se entiende mejor la fe de los egipcios, referente a que: la verdadera Vida comenzaba en la tumba;…si superaban la prueba de la pureza en la balanza.
Quizá deba enfatizar el hecho de que todo lo que consta en estas páginas resultará más difícil de entender si no se admite algún tipo de existencia después de la muerte, porque los egipcios montaron sus ideas a fin de obtener garantías del éxito de su traspaso final al Más Allá. No es fácil congeniar los sentimientos con la justa razón, pero aquella gente lo consiguió. El corazón es el justo medio del cuerpo humano en otras varias filosofías del mundo antiguo, y siempre está asociado a la bondad, la pureza, la armonía y sobre todo al equilibrio, lo cual refuerza mi idea de una balanza en parte visible en la meseta de Giza. Ptah-Hotep tal vez tenía la idea en su mente al escribir: "¡Nada en exceso!"; y añade sutilmente algún remedio preventivo: "El corazón se extravía oyendo a su vientre." Muchas de sus ideas pasaron a los filósofos griegos, por ejemplo citaré a Heródoto, quien, a pesar de vivir entre filósofos que usaban sus cerebros más que nosotros, escribió: "El corazón es el asiento de la conciencia moral y el trono donde vive el dios interno del hombre." Se trata del órgano humano que concentra todas las potencias del alma. Aún hoy es la piedra angular que sitúa a cada uno en su sitio.
LA IMPORTANCIA DEL ZODÍACO EN EL ANTIGUO EGIPTO
Los egipcios ya tenían su ancestral mini Stonehenge en la zona desértica de Playa Nabta, donde empezaron a unir las estrellas del cielo que parecían ser vecinas formando líneas rectas en grupos de tres. Después de siglos de observaciones llegaron a dibujar, con trazos rectos, los perfiles de animales que siguen siendo símbolos del zodíaco. En Egipto mismo experimentaron la variante de dibujar un triángulo equilátero superpuesto a otro invertido, logrando seis puntas equidistantes, con lo cual expresaron el símbolo de la sabiduría y del universo que la estrella les sugería. Las punta superior e inferior de la Estrella de David son los vértices de dos triángulos (pirámides) superpuestos. El que apunta hacia arriba es un antiguo símbolo empleado para representar el poder real, ansioso de proyectarse al cielo. El triángulo inferior representa el poder del cielo en la tierra. No todo el cuerpo humano es materia. Tenemos otros cuerpos, y de los más importantes citaré sólo el emocional (psicosomático). Nuestra conciencia actúa cuando todos están óptimamente ensamblados. Un triángulo apuntando al cielo indica la posibilidad de las personas de poder superarse en valores espirituales vinculados por energía pura (mentalsoma). En caso de rechazar edificarse, y perseverar en lo mundano, se desperdicia la oportunidad de ser mejor persona, que es para lo que nacimos.
No ha habido gente más profundamente religiosa que los antiguos egipcios, y quizá influyó su interés por el firmamento. El paso del sol por cada signo zodiacal, marca un periodo de 2160 años, bautizando cada uno de los símbolos del Zodiaco por el que transcurre cada planeta observado desde la Tierra. No tenían calendarios, con meses y semanas pero el río Nilo, con sus inundaciones catastróficas, los volvía a poner al corriente cada mes de septiembre. Antes de comenzar a subir el nivel de sus aguas, los agricultores beduinos, los árabes y los turcos que vivían en sus orillas, debían prevenir con exactitud los cambios de nivel, porque les podía inundar sus campos. Por fin, al encontrarse con las estrellas desplazadas (debido a los cambios de la "Era de la precesión") decidieron partir de un Tiempo Primordial (en los jeroglíficos "Zep-Tepi"). Albert Slosman, estudiando el zodíaco egipcio, hizo remontar su pasado a unos 26000 años antes de que unas tribus nómadas llegasen a orillas del río Nilo. Según él, cuando en tiempos remotos los egipcios pesaban los corazones de los difuntos, trataron de distinguir en una balanza los conceptos morales del Bien del Mal, por lo cual se dio al signo estelar que presentó con el nombre Khi-Ath ("Juez de los Corazones"). "La Balanza" era el nombre del signo zodiacal "Libra", que posteriormente fue entendido como sinónimo de una balanza. Es por esta circunstancia que aquí no podía faltar mencionar el zodíaco, ni tampoco su probable invención de las ideas que después desarrolló la Cábala (Kabala).
Uno de los libros de la Cábala es el de Moisés de León titulado "Sefer ha-Zohar" ("Libro del Esplenor"- siglo XIII), del cual se deduce que todas las fuerzas de la naturaleza están equilibradas. El emblemático "Zohar" podía ayudar a comprender las ideas de Dios cuando creó el mundo por el poder de las letras, aunque tan sólo los judíos ortodoxos serían capaces de entenderlo. En el se incluye "El Libro Secreto", que empieza: "Este es el libro concerniente al equilibrio de la "Balanza Cósmica…". Para los cabalistas también representó más que una herramienta, y pasados tantos siglos todavía opinan que la "Balanza Cósmica" domina toda la Creación. Argumentan que quien busca el equilibrio construye en si mismo el Templo de Dios. La Cábala se mantuvo en secreto hasta el siglo XIII, y su contenido místico estaba relacionado con el Anciano de los Días, que no es ningún personaje, sino alguna misteriosa herramienta, o máquina. FOTO: LA ZONA DE GIZA FUE SAGRADA
Las dos últimas palabras que pronuncian todos los judíos antes de morir son Ashem y Asad, cuyos valores numéricos son respectivamente 26 y 13. Por lo visto, entienden que se trata de una igualdad entre ambos números, lo cual a mi hasta ahora me parecía un contrasentido, pero puedo dar alguna idea. Las pirámides, siendo dos unidades, se deben ver como un solo instrumento, del mismo modo que toda persona se compone de un cuerpo y un alma, y sólo vemos lo físico. No ha de extrañar si las pirámides un día pueden enriquecer su mensaje gracias a la mística de los cabalistas. Parece como si éstos estudiosos, con una enorme fe en sus divinidades, hubiesen desarrollado unos esquemas de pensamiento semejantes a los del Imperio Antiguo de Egipto. No pensaban en su propia salvación, sino en llegar a ser dignos de merecer las expectativas de la divinidad al enviarlos al mundo. Siempre se trata de superar el propio ego para ser capaz de poder trascenderse conscientemente. Después, tanto los judíos como los cristianos llegaron a unas semejantes conclusiones, que yo puedo intuir sólo observando las dos mayores pirámides de Giza.
Se han divulgado todo tipo de investigaciones sobre los muchos misterios del Antiguo Egipto. Milenios más tarde los agnósticos (que la Iglesia peyorativamente llamó paganos, destruyendo al menos cinco docenas en el siglo IV), aprovecharon aquellas antiguas referencias religiosas para enseñar a sus adeptos cómo podían descubrir que en realidad eran almas inmortales. La verdadera gnosis salvadora, la que puede llegar a transformar, fue un estado místico de iluminación personal, sin intervención de una Iglesia, por lo cual tan sólo fueron dignos de gnosis los más espirituales. La base de los misterios era integrarse a la divinidad. Se trató además de lograr la unidad con todas las tradiciones espirituales, integrando los dioses que hiciese falta, pero no buscar a Dios fuera el mundo, sino dentro de quien fuese capaz de interesarse por su propia trascendencia. Ello me recuerda una frase atribuida al filósofo Sócrates: Conócete a ti mismo. Podemos partir de sus ideas para admitir que el conocimiento lleva el premio de la bondad. La idea siguiente sería que no es tanto la redención del pecado lo que se desea, sino superar la ignorancia de quien es puro de corazón. Entre los primeros cristianos, aquellos que creyeron que la clave la tenía san Juan, Jesús sólo habría sido un receptáculo perfecto de la Luz. Lo creyeron tanto cátaros como templarios desde el siglo XII y además una secta islámica llamada Nosairíes que habitaron desde el norte del Líbano hasta Turquía. Según los gnósticos, la Luz divina lo inunda todo interiormente, quizá más que lo hace exteriormente la luz del sol. Creyeron que el cuerpo es una prisión y negaron la necesidad de los obispos como intermediarios en su relación con la divinidad. Aquellas ideas llegaron a Europa durante la Edad Media predicadas con gran éxito por los Bogomiles de Bosnia, y triunfaron sobre todo a ambos lados de los Pirineos, la cordillera que separa España de Francia. (Es el tema de mi investigación: La Virgen del Claustro, patrona de Solsona, fue el gran tesoro de los cátaros).
CAPíTULO 11
LA "ESTRELLA DE DAVID": UN PENTÁCULO UNIVERSAL
Al empezar a investigar el conjunto monumental de Giza, yo ignoraba que en el Antiguo Egipto conociesen la estrella de seis puntas, y no lo consideré importante hasta que reuní diversos destellos de inspiración, como sucede cuando la sabiduría del espíritu revela lo sensible. Finalmente describo los frutos alcanzados después de concentrarme en una determinada época de la historia de Egipto. Los sacerdotes de la zona de Giza tenían entonces unas creencias peculiares que aún hoy se revelan apoyadas por pruebas visuales (pirámides), que por fin dejarán de ser unas obras inexplicables. Para presentar mi teoría no he necesitado esforzarme para incluir el diseño de la estrella de seis puntas, porque se encuentra en la geometría de las pirámides. En efecto, es fácil comprobar que cada una de ellas es la sexta parte de una forma cúbica. Como suman dos veces el número seis, el resultado son doce formas piramidales comunicándose por un vértice común (su perspectiva frontal son doce triángulos). Las medidas y distancias, estudiadas gracias al diseño de la Estrella de David, relacionan las dos pirámides con el cosmos. Escribió el filósofo Diodoro de Sicilia (Magna Grecia): "Los sacerdotes egipcios tenían prohibido divulgar los conocimientos que les habían sido confiados acerca de estas cosas." Pero por otra parte, ellos mismos entendieron el fondo de nuestra realidad espiritual, y tratarían de desbloquearlo, con el fin de descubrir la verdad última de nuestra existencia. Puede ser que la religiosidad de Pitágoras y de sus seguidores fuese debida a que entendieron la geometría de la Estrella de David como un "regalo divino", puesto que es útil para todo.
FOTO: EN UNA FORMA CÚBICA CABEN SEIS PIRAMIDES IGUALES
La relación entre el diseño de las dos mayores pirámides y los dos platos de una balanza, habría debido descubrirlo el filósofo griego, o el muy sabio rey Salomón. Su anillo real (con forma de estrella de seis puntas, y era llamado Hexagrama), en su tiempo se creía que el rey Salomón había ordenado incluir en su centro una pequeña pantalla de TV, y podía ver en su mágico anillo, tanto las cosas ya pasadas como las que sucederían en el futuro. Era un anillo tan prodigioso, que incluso le servía para dominar al demonio Asmodeo. Los egipcios parece que casi tenían en secreto el diseño de la estrella de seis puntas, aunque al fin, como la utilizaron milenios antes, fuesen los primeros en aprovechar la magia de la estrella para evolucionar espiritualmente. La utilidad a que me refiero, fue: Trasladar al propio corazón la iluminación del sol que brilla en el cielo. Retengan mi conclusión, porque aún no he dicho la última palabra acerca de cómo lo consiguieron. Invito a salir de nuestro actual modo de pensar, y superar la distancia en el tiempo y el espacio de nuestras coordenadas geográficas. Hay que dejarse conducir hasta una nueva cima de la historia de la imaginación, para penetrar en los razonamientos de unos sacerdotes comprometidos con los más nobles principios, y que vivieron entregados fervorosamente a sus actividades religiosas.
Wayne B. Chandler, al respecto de la Estrella de David, escribió: "Fue el Antiguo Egipto donde la estrella de seis puntas alcanzó su completo esplendor. Proclamada "Estrella de la Creación" por los egipcios, ésta representaba la unión entre el macho y la hembra, la energía en naturaleza y en todos los planos de la existencia; pero además era proclamada símbolo de la "Ley Hermética de la Correspondencia. "El triángulo apuntando hacia arriba indica el macrocosmos, y el triángulo apuntado hacia abajo indica el microcosmos; dos formas idénticas enclavadas pero independientes, cada parte representando un todo." El autor D.O. Graham escribió lo siguiente sobre el símbolo más universal del mundo: "En retrospectiva, la estrella de seis puntas fue un símbolo oculto egipcio, que el rey Salomón adoptó cuando él entró en la idolatría y la hechicería y erigió un altar de Astarot (estrella)." El mismo autor publicó en la "Enciclopedia Judía Universal":" la estrella de seis puntas…de acuerdo con los Rosacruces era conocida por los antiguos egipcios". Asimismo, en la obra "Muestras y símbolos del Hombre Primordial", del autor Albert Churchward escribió: "En la Astro-mitología de los egipcios, nos encontramos con la creencia en el primer hombre-dios (Horus I)… y su muerte y resurrección como Amsú Esto (la estrella de 6 puntas), fue el primer signo, o jeroglífico, de Amsú-Horus resucitado; fue el primer hombre-dios nacido con capacidad espiritual".
Tal como lo describió C. G. Jung: "Su pureza choca con nuestra mentalidad. Ingenuamente hemos olvidado que hay otro mundo más allá de la razón. Ignoro qué deberá de soportar la Humanidad antes de admitirlo." En cuanto a la principal obligación de aquellos adeptos egipcios, sabemos que era su meta el descubrir la Divinidad en el interior de la propia alma, así como admitir que está en todo lo creado. Se sabía que se había triunfado, si se era capaz de sentir compasión hacia todas las manifestaciones de la vida.
La Estrella de David se encuentra incluso en los libros más antiguos del mundo, que son Los Vedas de los hindúes, y en China, así como, probablemente, la conocieron culturas muy antiguas de América. No obstante su gran antigüedad, el dicho símbolo no está ligado a una religión o a algún pueblo específico. Los rosetones de las grandes catedrales, que decoran con vidrio de colores su óculo, como Notre-Dame de la catedral de Lyon, o la de Chartres (en Francia), no desvelan el misterio de sus orígenes. En la Edad Media la Estrella de David era muy mal vista, porque simbolizaba al pueblo judío que decían que había crucificado a Jesucristo (lo cual no es verdad, pues lo mataron los romanos del país donde el Papa hoy reside). La idea del disco solar pasó con gran éxito a ser la decoración preferida de los arquitectos de todos los tiempos y en los más variados motivos, de todos los cuales recojo muestras en mis mosaicos de fotos. Lo escrito evidencia que las pirámides no se construyeron para servir de tumbas para faraones, sino para servir de balanza para calibrar el alma de un faraón difunto. La experiencia enseñó que la vida sólo era posible a condición de dar y de tomar, en todos los planos (físico, psíquico y espiritual). Esta "Ley del intercambio", básica, la han llamado justicia, y se simboliza con una balanza cuyos platos están en perfecto equilibrio. FOTO: VESTIGIOS DE LA ESTRELLA DE DAVID EN EGIPTO
Aunque la conocieron, los egipcios en sus jeroglíficos no dejaron dibujadas Estrella de David más que para escribir el nombre de Amsú el "hombre dios", existe un relieve en una pequeña piedra esférica, que en una parte es plana para contener su sabio diseño, pero yo no puedo asegurar que fuese encontrada en Egipto. En cambio su diseño está en muchos dibujos más antiguos de sus contemporáneos de Mesopotamia, como demuestra la simbología del brazalete de los reyes asirios parecidos a un reloj de pulsera actual. Los mesopotámicos pudieron haber informado a los egipcios al respecto de su sabia geometría, porque en sus tablillas cuneiforme se lee que unos semidioses, llamados Anunnaki, bajaron del cielo para vivir en la Tierra enseñando su sistema matemático con base 60, el mismo que seguimos aplicando para medir el tiempo y al círculo (360º), porque resulta de dividir por 10 los 3600 años que el planeta Nibidu (de donde procedían los Anunnaki) tardaba en dar una vuelta al sol. Fue el providencial esquema que sirvió para construir el conjunto religioso arquitectónico más grande y perdurable del mundo, quizá porque fue un dibujo extraordinariamente venerado durante la IV Dinastía, por Kefrén, hijo del faraón Keops. Su sabio y bonito diseño, formado por doce triángulos equiláteros dispuestos en forma estrella de seis puntas, fue elegido cuando aún no se le había construido la pirámide de Micerino.
Los creadores de las dos mayores pirámides de Giza controlaban las tres básicas dimensiones, y por otra parte entendieron el secreto del tiempo, expresándolo todo con una Estrella de David. Con su impresionante altura los egipcios quisieron comunicarnos que su forma estática puede transformarse en dinámica. La forma de dicha Estrella, no sólo habla de la belleza de Dios, sino que informará -al observador muy atento- acerca de cómo se debe reflexionar para llegar a entender nuestra verdadera realidad.
FOTO: RELOJ ASIRIO BASADO EN LA ESTRELLA DE SEIS PUNTAS
EL "ÓCULO" ARQUITECTÓNICO, UN SÍMBOLO SOLAR
El equilibro deseable en cada persona sana oscila entre la esperanza y la desesperación. La idea egipcia del equilibrio mental, fue recogida por los filósofos griegos durante sus estancias en Egipto, y pasó a Europa tal como el poeta Virgilio lo presentó en su obra "Las Geórgias." Del mismo modo llegaron otros muchos conocimientos, entre los cuales fueron muy apreciadas las antiguas básicas balanzas comerciales, cuya forma en la actualidad nos sigue admirando ver su elegante diseño triangular. Fue tan básico que siguió coronando las fachadas de los grandes edificios oficiales, aunque de forma subliminal. Se disimulan, quizá porque nunca se supo explicar cuál fue su origen antes de aplicar el simbólico triángulo a la arquitectura de los clásicos templos griegos. Es un misterio y, como todos, siempre consiguen transformar en algo nuestras mentes. Lo cierto es que el triángulo conserva el germen de la idea ocultada por los sacerdotes del faraón Kefrén en su conjunto monumental compuesto por la Esfinge y las dos mayores pirámides de Giza, que entre ellos también forman un triángulo. El omnipresente triángulo, en fin, que sigue vinculado a las matemáticas, pero sobre todo en forma de una balanza es la síntesis para representar la Justicia Divina.
La idea egipcia de venerar el astro rey en el cenit de su recorrido diario, tampoco se perdió con el paso de los milenios. Fue mediante el agujero decorativo llamado óculo, que sirve para que penetren los rayos solares. Actualmente en la construcción de casas se abren ventanas circulares con el nombre de "ojo de buey", con el que se decoran arquitectónicamente muchos edificios nobles y regios palacios. Pero incluso cuando se trata de un sólo círculo resaltado sobre un espacio entre dos pilares, conserva la abstracción egipcia de una "Balanza Solar", definiendo con el símbolo la honradez del dueño del edificio. Incluyo una muestra del Palacio de los Castejones, en Ágreda (Soria). Sentirnos penetrados de alguna forma similar por la Divinidad, parece estar impreso en nuestros genes.
LOS ÓCULOS Y SU EVOLUCIÓN EN LA HISTORIA
Detecto ciertas reminiscencias de la "Balanza Solar" soportada por el sol, en los templos católicos. A sus dos platos de balanza (pirámides) les correspondería la estructura que se llama jamba, y están una a cada lado de la entrada. Son dos soportes laterales decrecientes (arquivolta) que sostienen el arco, o dintel. Observando las fachadas de las catedrales se pueden descubrir múltiples variantes. Siempre el sol es el soporte del conjunto imaginario. Desde el óculo, o imprescindible agujero circular superior, émulo del sol, el peso del muro se deriva hacia dos jambas. En Barcelona hay un gran óculo en la cúpula románica de la iglesia de Sant Pere de les Puelles, en pleno centro urbano. En todos templos cristianos lo sustituyeron por una estrecha ventana en el ábside central, pero la idea siempre es la misma. Los rayos del sol que entran por la abertura simbolizan a la divinidad. Otras veces los rayos se reflejan fuera, y pueden deslumbrar sobre las fachadas. El Partenón de la Roma Imperial es un templo muy bien conservado en la cúpula. Su geometría interna presenta una única entrada de luz por el óculo, o abertura circular, con un diámetro 8,20 m.. Fue un alarde de ingeniería, pues por su interior es una semiesfera perfecta. Consta diseñado por Agripa (que la copió de Anaximandro que vivió cinco siglos antes), y me recuerda una frase de los primeros siglos de constructores. Refiriéndose a las personas incultas, decían: "Tienen ojos y no ven" ("óculos habent et non videbunt"). Es un defecto que yo tuve durante muchas décadas ante las dos mayores pirámides de Giza.
El gran agujero circular (óculo) que decora con cristales de colores la parte superior de las entradas en las fachadas de iglesias góticas de Europa, muchas veces incluye el diseño de la Estrella de David, aunque quede su trazo disimulado, porque el simbolismo judío en la Edad Media no era bien visto. El rosetón, que así se llama dicho agujero, simboliza el sol; pero entonces perdió su relación con el disco solar que se incluye sobre las cabezas los dioses zoomorfos del Antiguo Egipto, y se convirtió en el sol espiritual que es Jesucristo la "Luz del Mundo."
FOTO: DETALLES QUE RECUERDAN LA "BALANZA SOLAR"
El último gran intento arquitectónico de construir con "geometría sagrada" el rostro del "Hombre-Dios", y después mantenerlo secreto, sucedió en la oscura Edad Media, al conseguir dibujar esquemática y subliminalmente el rostro de Jesucristo tras el diseño de las bóvedas de las catedrales. Se trata de las crucerías del arte gótico, difundidas por iniciativa de los caballeros de la orden del Temple en los siglos XII y siguientes. Otro símbolo hermético de sus preferencias, fue la Estrella de David, pues los templarios creyeron que sólo mediante la iniciación personal, basada en la humildad y la fe, dominando sus pasiones y evitando mundanas distracciones, quien triunfase merecía "renacer en espíritu" para seguir reflexionando su íntima naturaleza. En el fondo se trató de convertir la idea que ya estuvo sobre la cabeza de la Esfinge de Giza, (cuando era la de un león), pero con un renovado simbolismo espiritual.
Su evolución se consiguió mediante el llamado "Rosetón" que los propios monjes cistercienses abrieron en la parte superior del muro principal de sus iglesias. Sucedió cuando la orden monástica de los cistercienses se separaron de la conducta más relajada de la orden benedictina (abadía de Cluny) al preferir una mayor austeridad de vida, adoptando una pobre decoración en sus nuevas abadías. Son famosos los muy bellos vitrales de la catedral de Chartres. Sus preferencias por los óculos, y formas circulares, fueron los mismos redactados por san Bernardo de Claraval para los caballeros de la orden del Temple, y se remiten al Cristo Solar.
En las fachadas de las iglesias hay una variante del rosetón solitario por la parte de poniente (W.) de los templos, y para dar mayor simbolismo se decora en forma de Estrella de David, del Pueblo Elegido, porque es evidente que los israelitas lo copiaron de los antiguos egipcios. Aunque en los jeroglíficos no se incluye dibujada la estrella, ni tampoco la Esfinge con su disco, en ambos casos son el diseño imprescindible que permite comprender el esquemático secreto de "Balanza Solar." La meta para algunos sabios sacerdotes ya entonces debió de ser construir algo capaz de sugerir una idea que alabase el poder de Dios de forma muy superior, y para ello tuvieron en sus mentes el diseño de Estrella de David, de seis puntas, porque, al ser observada sin prejuicios, nos describe la perfección y la belleza de Dios; y más con sus dos triángulos entrelazados y con movimiento circulando por el interior de cada tubo, que son los seis lados de los triángulos. FOTO: REMINISCENCIAS EN LAS IGLESIAS CATÓLICAS
Sobre una superficie plana, la plenitud del simbolismo de las dos pirámides de Giza, concluye con el diseño de una Estrella de David (de seis puntas), lo que se consigue cuando el triángulo inferior, visible, sube; o el superior, invisible, se reúnen hasta ser ambos concéntricos (Ver mi foto del templo de la Sagrada Familia en Barcelona). Esa es la mitad geométrica (física). Y referente a la parte espiritual, la simbolizaron con su convicción, sin reservas, de poder trascender su vida después de haber muerto en la Tierra. Creyeron plenamente en la resurrección. Expuesto el dualismo vital entre los dos triángulos equiláteros superpuestos, las personas racionales ante tan sabio diseño dualista no permanecemos impasibles. Este simbólico dibujo está en nuestros genes, como el día y la noche, la acción y la reacción, inspirar y soplar, etc.. Es por ello que en todas partes del mundo, y en todas las culturas antiguas, ya aparece un derivado, y muy evolucionado, diseño de la Estrella de David llamado "Flor de la Vida", que la desarrolló al máximo.
La Estrella de David refleja el orden cósmico y el flujo perpétuo que se establece entre el cielo y la tierra. Es referirse a la convergencia entre Dios y sus criaturas. Por otra parte, los triángulos que tiene en su parte central (y yo convierto en capítulos) revelan una relación múltiple, la conexión entre el macrocosmos y el microcosmos, el espíritu y la materia, etc., pero antes que nada simboliza la sabiduría divina. Además, a la Estrella de David se le han atribuido poderes sobrenaturales de todo tipo desde tiempos ancestrales, cuando ya se hicieron los complicados diseños llamados Flor de la Vida. Un dibujo judío del siglo X constituye el ejemplo más temprano de la conexión que hay entre ambos símbolos. Quizá el origen del diseño de la Estrella de David podría haber sido tal como he dibujado sobre un rostro en una de mis fotografías. La Estrella de David es una figura de plena integridad geométrica; es lo que la hizo un símbolo universal. Está formada por dos triángulos equiláteros invertidos pero concéntricos, y tiene más simbolismo hermético cuando está inscrita en un círculo, o cuando contiene palabras escritas en su interior (Hexagrama). Si la imaginamos incluyendo en su mitad inferior las dos pirámides de Giza, vistas delante de la Esfinge, tendría sus dos triángulo inferiores al nivel del suelo de arena, y por el extremo opuesto, el triángulo de su ápice llegaría idealizadamente hasta el cielo, porque reúne la armonía de los elementos opuestos. El gorro Nemes de la propia Esfinge, antes de ser restaurada, por cada lado tenía cortadas sus dos forma triangulares laterales, para identificar en cada una de sus bases el nivel del suelo de arena rodeando las dos pirámides. Ésas bases equivalen al horizonte de la arena del desierto de Giza. El último triángulo central inferior, el que apunta hacia abajo, es el que ahora descifraré.
FOTO: LA "FLOR DE LA VIDA" EVOLUCIÓN DE LA "ESTRELLA DE DAVID"
CAPíTULO 12
"LA BALANZA CÓSMICA" ES SUPERIOR A LA "BALANZA SOLAR"
Yo no exageraba cuando, el mes de agosto de 2014, anuncié por Internet que, metafóricamente, trataría de "elevar" las dos mayores pirámides de la meseta de Giza. Lo voy a cumplir a continuación, día 12/13/14. Por lo que he escrito hasta aquí, las dos mayores pirámides de Giza siguen "pegadas" a la arena del desierto, lo cual no es la imagen que se tiene de una balanza básica. Para poder seguir mi razonamiento en esta búsqueda, que es un ejercicio de abstracción, advertiré que mis grupos de imágenes exigen concentración. Después de leer lo que sigue, prometo al lector que, al concluir puede tener un "premio".
En los capítulos anteriores me he referido a la "Balanza Solar", pero ha llegado el momento de ir más allá de la explicación del aspecto material, y para ello emplearé la expresión "Balanza Cósmica" para referirme a la máquina que incluye el equilibrio exacto entre los dos platos de la balanza que simbolizan las dos pirámides. En los once capítulos anteriores me he estado refiriendo al sol que vemos en el cielo, pero aquellos sacerdotes que veneraron, y diseñaron, la pirámide de Kefrén tuvieron su fijada en el sol espiritual (iluminación mental). Creyeron en un sol interior, del cual el rostro es una síntesis, tal como yo mismo, en mi obra: "La Cara Humana de Montserrat" (Ed. 1990), me esforcé en revelar. Las enseñanzas morales que transmitieron, basadas en la alquimia hermética (de Hermes-Thoth), no se referían a aspectos físicos, sino que buscaron el dominio de las fuerzas mentales, por creer que las cosas creadas están subordinadas al espíritu de una Mente Cósmica, palpitante, que llena tanto lo visible como lo invisible. La vida después de la muerte se creyó que era un estado de conciencia, el cual no se merece sin una sincera relación con la Infinita Mente Suprema (en el cristianismo D.O.M.).
LA IMPORTANCIA DE LOS SUBTERRÁNEOS EN EGIPTO
Es evidente que en el Imperio Antiguo no sólo les importaba lo que ven los ojos humanos. Los sucesores de Kefrén siguieron excavando interminables túneles durante generaciones. Por ejemplo, en la tumba de Seti I (que llega a los 150 m., y no se pudo llegar hasta su final), pretendieron alcanzar el nivel del Nilo sin conseguirlo. Los egipcios dominaron la arquitectura subterránea desde los tiempos más remotos de la historia de Egipto, siendo el templo de Abydos donde se ha escrito que estaban sus raíces. Es el santuario considerado la "Zona cero" y el que concentró la máxima veneración, porque allí se creyó enterrada la cabeza del dios Osiris. Desde que varió el curso del río Nilo, quedó casi inundado por las aguas. El arqueólogo Ken Wiiks, en 1995, descubrió en el Valle de los Reyes la "Tumba KV5", que con sus 3000 m2, y sus 150 cámaras excavadas, es la más grande. ¡Y siguen apareciendo nuevos espacios!.
Los dos subterráneos de iniciación más acreditados del antiguo Egipto estuvieron: uno en Giza, al norte, y otro en Abydos, al sur. Quien haya leído mi libro sobre la Cara Humana de Giza, en foto aérea, que está ubicada cerca de la gran Esfinge, conocerá bien mis preferencias por ese sector. Entonces evité referirme demasiado a las pirámides y a sus numerosos túneles subterráneos (30 m. bajo tierra), muchos todavía están por explorar. Otros se cubrieron para evitar que la tierra los tapase continuamente. La zona de Giza en los jeroglíficos es llamada Ra-stau ("stau" significa "extraer" el Ra, que no es el sol, sino el Verbo del cual nació la Creación). Se trata de los dominios de los Netteru (Netters), que eran los "amigos/servidores" del dios Osiris, los cuales ayudaban a que cada aspirante a ser sacerdote, al ser examinado les revelase su verdadera personalidad. Lo menciono aquí porque para los iniciados era como un anticipo de su "pesada de su alma" tras la muerte. En todo el ritual, la Esfinge debió tener una gran importancia.
Durante el mediodía del solsticio de verano, los reflejos del disco solar sería deslumbrante a los ojos del observador ante la entrada del Templo de la Esfinge, o quizá desde el templo que la Esfinge tuvo en la parte izquierda, del cual existen fotos antiguas. Quizá se hicieron otros ritos, tanto a los pies de las pirámides, como desde la perspectiva alejada de Gebel Ghibli, que ofrece una panorámica elevada privilegiada. Obviamente, lo más secreto de los rituales transcurría en el santuario iniciático adjunto a la Esfinge, el cual tiene planta de candelabro de múltiples brazos. Es un espacio que sería simétrico en sus dos mitades si no tuviese un pasadizo subterráneo enfocado directamente a la pirámide de Kefrén (aún visible en las fotos aéreas). Por allí desfilaron ordenadamente a los sacerdotes cuando se dirigían en procesión hasta ella. En Giza, con el paso de los milenios excavaron túneles en muchos otros sitios. En el Papiro Ani se refieren al Ra-stau de piedra, como la "Duat del sur", mientras que en la Ra-stau de Giza, o "Duat del norte", estuvo el "Túmulo de Osiris." Allí recientemente se descubrieron tres niveles de túneles (a 30 m. de profundidad, y alguno casi inundados) en cuyas paredes consta escrito: "La Casa de Osiris, Señor del Ra-stau." Era un espacio subterráneo oscuro, pero en lo profundo dirigieron su atención al sol interior de cada persona (Iluminación).
Una balanza necesita la referencia marcada por una aguja móvil para su control, que es llamada "fiel" (marcador), y a lo largo de la historia se imaginaron varios. Para medir el nivel de la balanza dentro de la explanada de Giza, inicialmente pensé que debió de ser otorgado al símbolo de la Cruz Ankh con asa. Después de reflexionar, entendí que el fiel de la balanza había ser la propia Esfinge. Las tradiciones que nos han llegado de los míticos tiempos a través de los escritos griegos, informan de la siguiente pregunta que aquel monumental cuerpo de felino hacía a los peregrinos y a otros que estudiaban para iniciarse en los secretos ancestrales: "¿Cuál es el ser que camina con cuatro patas por la mañana, con dos al mediodía, y utiliza tres patas durante la tarde?" Cuando el griego Edipo llegó a Tebas acertó a dar la correcta respuesta: "Un hombre camina a cuatro patas en su niñez, utiliza dos piernas en la edad adulta, y debe apoyarse en un bastón en su vejez." La solución remitía, pues, a la propia persona. Eso me indicó el deseo de calibrar el alma de quien se resigna a someterse al paso del tiempo con esperanza.
CADA PERSONA PODÍA SER EL FIEL DE LA "BALANZA CÓSMICA"
Hay donde elegir entre los símbolos que pudieron representar el control de la aguja, o "fiel", de la "Balanza Solar." Yo me remito a la forma de las dos pirámides dibujada en los muros de Heliópolis, y puedo superar la idea para entender que tan sólo quisieron dibujar las dos mayores pirámides de Giza. Tiene su aguja móvil centrada, aunque es diferente del soporte que sustenta el travesaño superior. Una foto de lo dicho ayudará a hacer evidente lo que puede ser complicado de explicar. Heliópolis era el templo más sagrado dedicado al sol que existió en el Antiguo Egipto, en la zona del actual aeropuerto de El Cairo.
FOTO: UN DIBUJO DE LA "BALANZA CÓSMICA" EN HELIÓPOLIS
La escultura de la gran Esfinge de Giza fue el lugar idóneo para ubicar metafóricamente el fiel de la "Balanza Cósmica." Antes de hacer los rituales, primero se debía encontrar un lugar dentro del templo, que era donde conectaban realmente el cielo y la tierra. Sabemos que fue una necesidad que se copió en los templos de todas partes. Tal espacio físico en realidad es el que está ocupado por el propio creyente que acude a rezar, pero en los templos de la IV Dinastía de Egipto lo ubicaron en la escultura de la Esfinge. La remodelación de la Esfinge inicialmente fue ventajosa sólo para Kefrén, pero con un rostro humano finalmente se logró que cualquier fiel de aquella religión, ante la Esfinge de Giza (símbolo enigmático por excelencia) pudiese sentirse muy afortunado al plantearse las preguntas trascendentales, aquellas que siempre se han hecho las personas más sinceras. Si lo deseaba "de corazón", él creyente podía convertirse en un devoto de la "Balanza Cósmica." En efecto; por siglos que pasen, y por mucho que sea el progreso.
Finalmente, ¿qué nos aconsejaría la misteriosa Esfinge para nuestro provecho? Probablemente, conociendo el rumbo de las sociedades económicamente más "avanzadas", nos diría: El verdadero poder no se consigue acumulando dinero ni influencias. La persona de verdad poderosa, paradójicamente es incapaz de comprometer a nadie, y menos perjudicar a otros en beneficio propio.
Sí que reconocemos que son unos métodos inaceptables; y sobre todo, no son las directrices adecuadas para lograr una mejor Humanidad. Todas las personas, con moderación y equilibrio, deberíamos configurar su más digno futuro.
FOTO: LA ESTRELLA DE DAVID SOBRE UN ROSTRO INVERTIDA
El estudio de los rasgos de una cara sirve para ofrecer un ejemplo de buen equilibrio psíquico. Gracias a la TV. cada día podemos comprobar que cuando una persona comprometida en algún proyecto nos explica sus ideas con vehemencia, si al expresarse lo observamos de frente (y más cuando la montura de sus gafas sea plana), siempre levantará su ceja izquierda por encima de la montura horizontal. Esta persona está muy capacitado para ejercer de artista, aunque no lo sepa; pero lo ideal es que, estando ambos hemisferios equilibrados, no se moviese ninguna ceja, porque la mitad izquierda el cerebro (sede de la lógica matemática) lo compensaría.
Aquellos sacerdotes probablemente mirarían el rostro de las personas desde una perspectiva que les informaba de su moralidad aunque el visitante estuviese callado. El rostro humano me permitirá presentar el último punto de vista de mi desarrollo. Quizá más que nunca se necesita la ayuda del diseño -siempre básico- de la Estrella de David, y aquí la presento sobre el rostro de mi esposa. Cuando apliqué la Estrella de David sobre una cara, descubrí una invitación a considerar el mundo más oculto, porque entraba en juego un espacio subterráneo que voy a descubrir. En efecto, al aplicar la dicha estrella de seis puntas sobre el mismo rostro, pero invertido, entonces el verdadero "Sol interior" de las personas estaría ubicado en el subsuelo entre ambas pirámides presentadas. Del sol del cielo, al sol del espíritu inmortal. He resaltando lo que son las dos mayores pirámides, una sobre cada ojo. Si el disco sobre la cabeza de la Esfinge (sustituto de la esfera solar), se sitúa cerca del labio superior de un rostro, la opuesta punta inferior de la dicha estrella de seis puntas tendría el "Sol interior" de cada persona ubicado debajo de la línea de las cejas. Puedo sospechar que los antiguos egipcios, a su manera, hicieron diferentes especulaciones. Al parecer, en su obsesiva búsqueda del equilibrio interior, sus propios ojos y los de otras personas, les recordaban los dos platos de una balanza, del mismo modo que su falda en forma de triángulo evocaba, sin más, el simbolismo oculto de las pirámides.
Cuando miramos un rostro humano invertido, se puede interpretar que los dos ojos del rostro pueden ser vistos como dos pirámides suspendidas de la nariz. Seguramente dicha idea no debió de gustar a todos; y lo confirma el hecho de que al cabo de un tiempo decidieron variar aquel esquema para incluir más estrellas en la explicación de su cosmogonía. La pirámide de Micerino parece ser que lo consiguió aunque sus símbolos no trascendieron. En cambio, la idea de una "Balanza Cósmica" sí que trascendió. Para que además pueda "renacer" el mecanismo de la Estrella de David que lo soportaba, recordaré al lector que esa parte de mi tesis que está leyendo (el 12 triángulo equilátero de mi "LITERATURA TRANSPONEDORA") remite a un espacio subterráneo. Todos los vestigios de arte funerario recuperados, y que tanto nos admiran, de la civilización del Antiguo Egipto entiéndase bien que provienen justamente del mundo debajo del nivel del suelo. Es el espacio reservado al triángulo equilátero con vértice apuntando al centro de la tierra, que en mi solución está enterrado por necesidad (12º). Tal vez esa idea pueda asociarse al extraño dibujo que está entre los jeroglíficos del relato de la "Batalla de Avaris". Se trata de dos pirámides unidas para formar una letra eme (M) muy abierta. Debajo del vértice, que sería su vástago angular, pintaron un círculo que contacta, como soporte de las dos pirámides. Inicialmente yo pensé que podría desear recordar el disco sobre la cabeza de la Esfinge de Giza, pero debido al tiempo que había desaparecido, al fin creo más probable que, por tradiciones ancestrales, se recordase la importancia del espacio subterráneo al que me he referido. Quizá alguien publique una interpretación mejor que ésta. Que diga más, quien más sepa.
Al observar el conjunto a través del esquema de la Estrella de David, las dos pirámides (platos de la balanza) estarían elevados en el aire. La forma de triángulo equilátero del vértice inferior de la Estrella de David hay que imaginar que está debajo del nivel del suelo. Este, que se corresponde con el "ojo de la clarividencia", es el que soporta el esquema de la "Balanza Cósmica", o sea las dos pirámides visibles. Dicho de otro modo, al invertir el rostro humano dentro del diseño de la Estrella de David, entonces el llamado Tercer Ojo quedará en el subsuelo enterrado, y su vértice estará en un nivel muy profundo. Dicho ojo hindú de la clarividencia (que se dibujan en color rojo en el centro de su frente), siendo ficticio, tiene mayor simbolismo que los dos ojos de un rostro humano. Es como si su portador renaciese por haber trazado una parábola sirviéndose de los dos ojos. Los hindúes dan la mayor importancia al llamado Ojo de Shiva (Agna chakra), porque consideran que es la excrescencia de la glándula pituitaria. La orden masónica de los "Perfectos iniciados de Egipto" (agrupados en Lyon-Fr.), conservaron símbolos recogidos del Egipto Antiguo y procuraron explicarlos y readaptarlos. La regla masónica de 24 pulgadas de los iniciados ingleses, provenía de los 24 sarcófagos del Serapheum, los cuales, pesando muchas toneladas cada una de sus tapas, cuando se abrieron estaban vacíos. El ojo en el centro del triángulo que les sirve de logo simbólico, como dije, tienen una mejor explicación que creer que son "la presencia de Dios en todas partes." Los dos ojos de la cara carecen de importancia al lado del ojo del espíritu, que no requiere una dualidad. Lo saben los musulmanes, puesto que en sus rezos, al estar arrodillados, contactan su frente con el suelo.
Al preguntarse por qué construyeron otra pirámide igual, tan inmensa como simétrica, la respuesta puede ser que desearon, y consiguieron, sugerir a las personas más evolucionadas, el esquema básico de cómo funciona nuestra mente: Vive sujeta a la Verdad, y si lo niega, entonces se desvive. Tal es la realidad de nuestra capacidad intelectual, y quien no lo niegue, se agotará luchando contra si mismo. La gloria de Dios, que todos llevamos en nuestros genes, deteriora gravemente el subconsciente del individuo que se oponga a esa realidad intrínseca y consubstancial. En pocas palabras, el legado de aquellas personas sabias y buenas consistió en dejarnos mucho más que varios monumentos formando triángulo en la meseta de Giza. Nos transmitieron su mejor consejo: Hay que esforzarse en dar prioridad consciente del espíritu sobre la materia. Ello desarrolla la propia mente, y el Reino de Dios estará más al alcance de cada persona sincera. Cuando una mente está agitada, lo deseable es recuperar nuestro centro de equilibrio. Con ello se recupera la calma, siendo entonces capaces de entender que existe vida más allá de lo que los medios de comunicación nos hacen creer. Es más; divulgan algunas cosas que a veces no son reales, e incluso desinforman.
No fue exclusivo de los sabios de la IV Dinastía descubrir que el corazón, sede de los sentimientos; en realidad es sintonizador de la mente con una potencia extra, inmaterial. Lo demuestra el que actualmente aún seguimos empleando la falsa expresión "querer con el corazón", a pesar de nuestro superior conocimiento de la anatomía humana. Habrá quien se sienta cómodo viviendo como si fuese en un estado de sonambulismo, pero si existe una conciencia cósmica, como yo creo, tal actitud indolente y desidiosa, podría ser grave. El miedo lleva a encerrarse en el propio ego, y hace acaparar dinero como para vivir mil vidas. El camino al deseado equilibrio es difícil, porque exige todos los humanos recursos, tanto físicos como espirituales, pero por otra parte, perseverando, los valores morales germinan y resulta que hay mucho más placer en renunciar a las mundanas diversiones que en dejarse arrastrar por ellas.
LA "BALANZA SOLAR" PODRÍA SER ALGÚN DÍA COPIADA
Cuando una idea está bien razonada y presentada, puede aspirar a conseguir que en un futuro vuelva a construirse una copia de la "Balanza Solar" como la de Giza, y quizá de mayor tamaño. A continuación voy a proponer un gran atractivo turístico para el futuro, para que sirva de estímulo promocional de Cataluña (NE. de España). Existe una forma natural de pirámide de tamaño colosal cerca de la autopista N-2, al pasar cerca de la población Ribaroja d'Ebre. Me sorprende siempre ver en el paisaje una forma triangular natural tan solitaria, al norte de la carretera. Por su parte trasera aquella burda colina necesitaría que se rebajase la ladera para parecerse a una pirámide aparentemente perfecta. Es quizá más enorme que la de Keops, en Giza, no obstante, para lograr darle un valor turístico al proyecto que la imitase, bastaría con forrar su cara más visible de material incorruptible. Ya existe allí una forma triangular perfecta, y se podría construir, casi a su lado, otra forma piramidal de medidas semejantes, al estilo de la que en la ciudad de las Vegas (USA) la iniciativa privada construyó en metal (se llama Pirámide Walter), por cierto, muy pocos metros más baja que la de Keops. Según pude leer, tan sólo les costó unos setenta millones de euros. Quizá cuando mi idea merezca alguna consideración, ya exista un material mucho más barato y manipulable.
UN FUTURO PARQUE TEMÁTICO CERCA DEL RÍO EBRO
Insisto en que, al decidir levantar allí una falsa pirámide complementaria, debería estar un poco separada para presentarlas igual de ensambladas que las dos mayores de Giza, en Egipto. Todo el conjunto -cuando se haga- tendrá un gran impacto visual, y muy cerca del río Ebro, motivo complementario que hace pensar en un parque temático de primera magnitud entre Cataluña y Aragón. Obviamente, podrían ahorrarse construir un "sagrario bajo tierra", porque la Egiptología, después de tantas décadas, todavía no ha descubierto el "sanctasanctorum",el cual quizá está ubicado entre las dos pirámides de Giza. Cuando mi profética visión se cumpla, probablemente la indumentaria de los antiguos egipcios volverá a ser una moda, resaltando una forma de triángulo invertido en la zona pectoral del vestido. Por cierto, los masones resaltan en su pequeño delantal ritual un triángulo invertido, como si fuese la parte trasera del sobre de una carta, pero tiene un punto en su centro. Su logo más conocido es un triángulo con un ojo en su centro; y es que el empeño de sus miembros fue decisivo para el nacimiento de la ciencia que se llama Egiptología.
FOTO: PROBABLE VESTIDO DE LA MODA FUTURA
Para concluir, reforzaré la idea del espacio triangular subterráneo entre ambas pirámides, aunque por tener claro simbolismo espiritual, sinceramente no considero imprescindible que lo excavasen entre las pirámides de Giza estudiadas. Hay que admitir, no obstante, la posibilidad de que la excavación de aquel subsuelo pueda sorprender en el futuro. Pienso en ello al ver cualquiera de los colgantes sostenidos por cadenas que siempre han adornado el cuello de las personas con símbolos religiosos, o joyas diversas. El simple hecho de que estén situados muy cerca del corazón, ya indica claramente que en el extremo inferior de una forma triangular siempre ha tenido una importancia excepcional en la mente humana. Y eso me lleva a resaltar la utilidad práctica de la "Balanza solar", y por lo tanto, de las dos pirámides.
Para confirmar que fue una buena idea, siempre debe ser útil en muchos sentidos. En este caso daré un ejemplo de que, al adoptarla, incluso ofrecerá beneficios inmediatos, por ejemplo ¿en nuestra respiración. Imaginemos que los dos pulmones tienen forma triangular y que ambos simbolizan las dos pirámides. Por otra parte, la mente, en la cabeza, simboliza el sol que las sostiene, y le correspondería al plexo solar; o sea, el ser el secreto espacio subterráneo entre las dos pirámides. En conclusión: nosotros utilizaremos el diafragma para respirar mejor conscientemente. (C) RRRiu (BCN, 13/12/14)
EL ANILLO DE MOISES DESCIFRADO
Existe un muy enigmático símbolo inédito sobre un anillo metálico, el cual se presenta reseñado como si estuviese fundido de un hierro nada común. Probablemente sea cierto su presunto origen meteórico. Es una obra de arte genuina y muy olvidada, que yo voy a defender su más que probable origen faraónico. El dicho símbolo decora un pesado anillo con un sello que todo el mundo podrá creer que ha visto antes, y se debe a que es un reflejo de una imagen de un triángulo en un espejo (especular). Es lo mismo que vemos al observar las dos palmas de nuestras manos al mismo tiempo. Nuestro cerebro también podría estar incluido.
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