"La convergencia tecnológica propiciada por la llamada Revolución Digital constituye un conjunto de tecnologías cuyas aplicaciones abren un amplio abanico de posibilidades a la comunicación humana. La aproximación entre Tecnología y Medios de Comunicación de Masas establece un nuevo modelo económico, productivo y social que supone la aparición de industrias, perfiles profesionales y modelos económicos hasta ahora desconocidos. Se presenta, pues, un panorama espectacular donde se multiplican las posibilidades comunicativas y se produce una fragmentación y segmentación de los contenidos. Esta nueva escena comunicativa implica un nuevo perfil de usuario más activo así como una estructura productiva con nuevos perfiles profesionales. El valor de la digitalización, por tanto, no sólo reside en un contexto de reorganización integral de productos y contenidos, sino de las formas de trabajo y de la propia estructura empresarial."
("LA ERA DIGITAL: NUEVOS MEDIOS, NUEVOS USUARIOS Y NUEVOS PROFESIONALES". Juan Ángel Jódar Marín.)
"No hay peor ciego que el que no quiere ver" dice el refrán, dándonos el pie para hablar acerca de cómo el mundo está mutando en cuanto a la tecnología y a los medios de comunicación. ¿Las producciones televisivas nacionales se encarecieron por la llegada de nuevas plataformas digitales y una consecuente "huida" del televidente tradicional hacia estos nuevos medios? ¿La caída del encendido perjudica a la industria televisiva? ¿Tantas plataformas convirtieron a la televisión en un medio poco rentable para producir material nacional? Comencemos desde el principio
Hace ya algunas décadas, cuando surgió la televisión, las personas la incluyeron en sus vidas, haciendo de esta una rutina, era común sentarse frente al televisor y pasar horas frente a él.
Con más de 60 años, la televisión logró consolidarse como uno de los medios de comunicación más importantes y de mayor influencia en el mundo. Constituyendo un espacio con diversos recursos para utilizar de acuerdo a la gran variedad de intereses, y un recurso inmenso y constantemente novedoso para diferentes prácticas educativas.
En sus comienzos, parecía competir con la radio, para ver quien se instalaba como medio masivo de comunicación. También, introdujo una nueva experiencia audiovisual en el hogar, proponiéndole al espectador una opción novedosa comparada con el viejo ritual de comprar entradas y asistir al cine
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Teniendo una forma de programación similar a la radio y una lógica de producción más cercana al cine, la televisión se caracterizó por contener una serie de programas reunidos dentro de una programación.
"El término de "convergencia digital" designa la posibilidad de consultar el mismo contenido multimedia desde diferentes dispositivos y esto gracias a la digitalización de los contenidos (películas, imágenes, música, audio, texto) y al desarrollo de la conectividad."
Definición extraída de www.es.ccm.net
Seis décadas después, la televisión ya no es la misma que antes, ha experimentado cambios tanto en el plano tecnológico como en el plano social. De manera paralela a la tv, nos encontramos con el desarrollo de nuevas tecnologías, tablets, celulares, consolas de videojuegos online, realidad virtual y televisores que interactúan constantemente con internet (Smart tv), dando acceso así a contenidos nativos pensados para lograr que el televidente pueda encontrarse absolutamente conectado, interactuando en vivo y en directo, compartiendo y disfrutando de una experiencia mucho más integrada que la tradicional de "mirar televisión". Estos avances tecnológicos nos permiten realizar varias tareas a la vez, lo que se denomina ser Multitasking, estamos viendo la telenovela en la televisión, mientras que compartimos, a través de nuestro celular, en las redes sociales nuestras opiniones sobre la telenovela y leemos el diario en la computadora.
Las nuevas tecnologías no sólo nos permiten completar nuestras tareas cotidianas de una forma más eficiente mientras nos encontramos en el tren o el colectivo, sino que estas mismas innovaciones nos permiten consumir los medios de comunicación sin restricciones tecnológicas, gracias a estos avances ahora nos ponemos al día prácticamente cuando la noticia está sucediendo cómo, cuándo y dónde nos gusta.
Desde nuestros celulares podemos captar las señales de los canales de aire. También podemos, mediante el uso de redes inalámbricas, proyectar en nuestros televisores los contenidos que están en nuestras computadoras personales o teléfonos inteligentes (smartphones). Y no se trata solo de visualizar, sino también de transmitir vía internet estos contenidos, grabarlos, volver a reproducirlos, compartirlos y en muchos casos modificarlos y continuar con la rueda de la colaboración.
Con este desarrollo de la comunicación junto al de las tecnologías de la información, acompañadas también de la aparición de nuevos soportes, debemos repensar qué sucede con los medios masivos tradicionales, en nuestro caso, la televisión. El pasaje de lo analógico a lo digital generó a su vez importantes cambios en la manera de organizar la vida cotidiana y nuestra relación con el mundo. Para esclarecer un poco nuestro campo, podemos remitirnos al concepto de digitalización:
"Digitalizar es traducir información como textos, imágenes o sonidos, a un formato que puedan entender los microprocesadores (binario, de ceros y unos). Este es el proceso de convertir información analógica en formato digital".
Definición extraída de > www.ecured.cu
El mayor acceso a Internet de los argentinos y la masificación junto con una gran facilidad para el uso de los equipos electrónicos están calando hondo en la industria del entretenimiento. La televisión abierta sufre el tsunami digital que atraviesa a los medios, ya que desde hace varios años los ciudadanos pueden elegir qué contenidos ver y consumir de la pantalla chica que les interese, cuando y donde quieran, las veces que lo deseen. Lo cual resulta mucho más cómodo y placentero que depender de un programador y el sube y baja del rating y los esperados anunciantes. Sobre esto podemos referirnos a la convergencia mediática, es decir que, los contenidos fluyen por múltiples plataformas, las industrias diversas operan en conjunto y las audiencias se movilizan para buscar las experiencias de entretenimiento. Todo a un estilo "OnDemand", en el que el usuario tiene miles de posibilidades para elegir qué ver.
"La proclamada "convergencia" de los tres grandes sectores (televisión-telecomunicaciones–informática) ha de ser sin embargo analizada en sus muy diversos significados y ampliamente matizada en términos económicos: convergencia de las redes por su interconexión creciente pero no por su unificación; convergencia muy lenta entre contenidos y servicios audiovisuales y multimedia; convergencia rápida entre agentes empresariales y sus estrategias, y convergencia dudosa a corto-medio plazo entre el mercado doméstico y el profesional"
(Garnham, 1999 en "Televisión económica" de Enrique Bustamante)
En cuanto a ésta cita que hacemos del libro "televisión económica", podemos actualizarla comentando que, luego de 16 años, la convergencia entre contenidos y servicios audiovisuales y multimedia es extremadamente rápida. Ya no tan lenta como hace una decada y media atrás.
Para comprender qué cambios operaron en la televisión en los últimos años resulta necesario entender las características del medio televisivo. Para ello, es útil retomar la distinción entre Paleo TV y Neo TV. La Paleo TV se caracterizó por la existencia de una programación estable por géneros y por públicos y una función pedagógica-educativa y asimétrica entre el medio televisivo y los espectadores. La Neo TV hablaba de sí misma, se centró en la institución emisora, se abandonó el contrato pedagógico, los géneros se mezclaron entre sí, perdieron especificidad, se fragmentaron las formas audiovisuales y los planos. Scolari incorpora el término hipertelevisión para pensar en una televisión que se expande más allá de sus propias fronteras y que enfatiza en: multiplicación de programas narrativos, fragmentación de la pantalla, aceleración de los relatos, narraciones en tiempo real y relatos no secuenciales.
En 1980 Alvin Toffler, en su clásico The Third Wave, anunciaba que: "(:..) los medios de comunicación de masas se fueron haciendo cada vez más poderosos. En la actualidad se está produciendo un cambio sorprendente. A medida que avanza, los medios de comunicación, lejos de extender su influencia, se ven de pronto obligados a compartirla. Están siendo derrotados en muchos frentes a la vez por lo que yo llamo los "medios de comunicación desmasificados"… Los medios de comunicación se hallan sometidos a intenso ataque. Nuevos y desmasificados medios de comunicación están proliferando, desafiando – y, a veces, incluso reemplazando – a los medios de comunicación de masas que ocuparon una posición tan dominante en todas las sociedades".una explosión de nuevas tecnologías de distribución como satélites, fibra óptica, cable, etc.. La televisión lucha por adaptarse a las nuevas condiciones. Debe adoptar rasgos de los nuevos medios para poder sobrevivir, , simular formas narrativas y expresivas propias de los entornos interactivos y desarrollar espacios de convergencia con las nuevas plataformas, como la implementación de Twitter, Snapchat y Facebook a programas televisivos.
La televisión, ese fenómeno "masivo" que conocimos, materializado en ese mueble entronizado ennuestras casas, que activaba la socialidad familiar, está condenada a desaparecer según algunos investigadores. Jean-Louis Missika volvió a hundir el puñal en un texto titulado La Fin de la Télévision (Paris: Éditions du Seuil). "Ha comenzado un proceso que determina la desaparición del modelo de televisión que conocíamos y su sustitución por aparatos audiovisuales múltiples, entre los cuales la televisión ocupará una posición siempre menos dominante".
"Hay grandes tendencias que recorren desde hace años el sector: multiplicación y especialización creciente de la oferta; segmentación paralela de los consumidores; avance de la lógica de pago por el consumidor; concentración creciente y globalización de los productos, las programaciones y los capitales."
("Televisión económica", Enrique Bustamante. P.171, 1999)
"En el caso de Youtube como plataforma, te permite ver lo que quieras. Es como un medio a la carta. Cuando prendes la televisión abierta tienes que ver lo que estén pasando, lo que estén comunicando. Además Youtube te permite compartir ese contenido. La clave es la interacción. Todo lo que tenga una interacción va a generar la viralidad, y al final eso es lo que le interesa a todas las marcas, poder ser viral", explicó el especialista en redes sociales, Irrael Gómez, en una entrevista realizada en la sección de Tecnología de Globovisión.
Cuando la televisión apareció en los "50, se creyó que la radio, su medio masivo antecesor a la pantalla monocroma, iba a desaparecer. Pero esto nunca sucedió, incluso debió reinventarse y fijar más los límites que la separaban de la tv. Por ello, podemos suponer que la televisión no desaparecerá como medio de comunicación, sino que está en la búsqueda de su lugar, tal vez ya no dominante como lo supo ser en las primeras décadas.
Por otra parte, es preciso comprender las lógicas de los llamados nuevos medios. Existen los medios de comunicación tradicionales en línea, medios analógicos que adhieren al universo digital, medios de comunicación nativos, no tienen antecedentes off-line, medios sociales, mantienen la comunicación en línea entre los miembros de una comunidad, y agregadores, re-difunden contenidos elaborados o conectan a los usuarios con los medios en línea.
Asimismo sostiene que comparten tres rasgos: son digitales (producto de la digitalización de los contenidos y las redes), interactivos (capacidad de comunicación bidireccional medio/usuario y entre usuarios) y están en línea (los contenidos están disponibles en cualquier momento).
La grilla que exponemos aquí corresponde al mes de septiembre del corriente año (2016) de nuestro objeto de estudio: TELEFE.
Como pudimos observar y remarcar, todos los programas resaltados en amarillo corresponden a programas de producción extranjera, o como se suele decir, enlatados. Éstos son comprados por los canales de televisión a un costo aproximado de 5.000 dólares que, comparados con el costo aproximado de una producción nacional de ficción, es poco. Según nuestras investigaciones, los productores y directivos de los canales de aire, a veces no quieren arriesgarse a producir contenidos nacionales por temor a que "no funcione" y obtener pérdidas.
Volviendo a la grilla expuesta anteriormente, según los cálculos que hicimos, 13 programas son de origen extranjero y 14 de origen nacional (sin contar los horarios que corresponden A CINE porque en ese caso varía, aunque mayoritariamente son películas extranjeras).
Partiendo de un valor aproximado de 536 horas en total al mes de transmisión en TELEFÉ, y analizando la grilla correspondiente a septiembre 2016, cuando comenzamos este trabajo de investigación, obtuvimos las siguientes conclusiones:
Los 13 programas extranjeros suman aproximadamente 9 horas promedio diarias, teniendo como pico máximo los sábados con 11 horas 15 minutos de enlatado. Lo que significa 62 horas semanales (61h.50".00"), obteniendo como resultado unas 247 horas por mes.
Los 14 programas nacionales suman aproximadamente 9 horas promedio diarias, lo que significa 72 horas 10 minutos semanales, teniendo como resultado 288 horas 40 minutos por mes.
Por ende, de 536 horas mensuales de transmisión, 288 horas equivalen a producción nacional y 247 horas equivalen a enlatados extranjeros. Porcentualmente nos encontramos con un 53,86% de nacional contra 46,13% de produccion extranjera. Solo un 7% aproximado entre una y otra. Llamativo, ¿no?
Según la LEY DE MEDIOS audiovisuales, N° 26.522, aprobada en 2009, en el Capítulo V Art. 65.- contenidos de la programación:
"Los titulares de licencias o autorizaciones para prestar servicios de comunicación audiovisual deberán cumplir con las siguientes pautas respecto al contenido de su programación diaria:
(…) 2.- Los servicios de radiodifusión televisiva abierta:
a. Deberán emitir un mínimo del sesenta por ciento (60%) de producción nacional.
b. Deberán emitir un mínimo del treinta por ciento (30%) de producción propia que incluya informativos locales.
Pero ésta ley "rigió" hasta el 10 de diciembre del 2015. Con la asunción del presidente Mauricio Macri, el AFSCA (La Autoridad Fiscal de Servicios de Comunicación Audiovisual) fue diluido y reemplazado por el ENACOM (Ente Nacional de Comunicaciones), dejando inválida la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual por pertenecer a la anterior autoridad fiscal que regulaba a los medios. Por ende, creemos, que estamos en un momento de "proceso" en el cual no hay marco que regule con autoridad definitoria, y los canales de aire, en este caso TELEFÉ, no respetan a rajatabla el mínimo de producción audiovisual nacional al aire.
4.2. SITUACIÓN CRÍTICA. La industria audiovisual nacional hoy.
El 24 de junio del corriente año, se realizo el Congreso de la Multisectorial Audiovisual en el Hotel Panamericano. Se trata de una iniciativa de varias asociaciones vinculadas con la producción de ficción en cine y TV, a raíz de la crisis que el sector atraviesa en la producción de ficción nacional, con disminución y pérdida del trabajo local en medios de comunicación, redes y plataformas diversas. A esto se suma la elección de los canales líderes de programar latas extranjeras, lo que deja como consecuencia que las ficciones de origen nacional que están al aire se cuenten con los dedos de una sola mano.
"De 30 ficciones que se producían en el primer semestre de 2013 se pasó a 22 en 2014, a 14 en 2015 y sólo a 6 en 2016"
Hoy Telefé es un canal que tiene su programación con un gran porcentaje de ficción enlatada, y Canal 13 acompaña la premisa. Las latas de horario central cuestan, por capítulo, 1.000 a 3.000 dólares. Un capítulo de una producción nacional cuesta alrededor de 65 mil dólares.
Hoy en dia hay muy poca producción nacional debido al bajo presupuesto con el que contamos. Se está produciendo menos porque los costos que ponen los productores (o encargados) son altísimos. Por otro lado, también se está perdiendo mucho en publicidad, se están yendo para diferentes plataformas (como internet). Por esto cada vez hay menos plata y se recurre a las latas extranjeras que cuestan menos y si llegan a alcanzar el éxito es mucha la ganancia.
4.3 El boom de "Moisés y los 10 mandamientos"
Moises y los diez mandamientos es la gran sorpresa entre las ficciones de lata y lidera el raking de rating de nuestro pais. Telefé sigue apostando por las producciones extranjeras para ganar la pulseada del prime time.
La primer emision obtuvo 14,9 puntos de rating y se convirtió en lo más visto de ese dia.
Pocos hubieran imaginado que una telenovela de 176 capítulos basada en cuatro libros del Antiguo Testamento iba a tener tanto exito a nivel mundial. Y este fue tal, que no sólo desbancó en materia de audiencia a la famosa señal Globo (creadora de éxitos como "Avenida Brasil") sino que también llegó a superar en espectadores a los partidos de Brasil para las eliminatorias del Mundial de Rusia.
Moisés y los diez mandamientos" es un producto realizado a partir de un presupuesto cercano a los 250.000 dólares por capítulo. Esa misma cifra alcanza en Argentina para una semana de grabaciones.
Telefe ya decidió comprar la 2da. temporada de esta novela
ENTREVISTA A PABLO BAGNUS.
Pablo Bagnus fue, en sus comienzos, productor en La Extraña Dama (telenovela) y Cosecharas tu Siembra (telenovela), transmitidas por Canal 9 entre 1989 y 1992. Fue Creativo y Realizador de spots publicitarios para Samsung, Nashua, Gestetner, Rex-Rotary (Argentina, Uruguay, Chile y Venezuela). Paralelamente, también trabajó como Director/Editor en Eco Tv / Rede Litoranea de Televisao, Brasil. Desde hace 18 años trabaja para TELEFE, como productor, director y actualmente editor. En 2012/13 Operación Triunfo, La Banda. 2012 Gran Hermano, 2011 Gran Hermano Medianoche. 2009/10 Herencia de Amor (telenovela). 2008/09 Don Juan y su Bella Dama (telenovela), 2007/08 La Ley del Amor (telenovela). 1998/2007 Casados con Hijos, Casados con Hijos 2, (sitcom). Operacion Triunfo, Susana Gimenez, Peligrosa Obsesion entre otros.
1. Actualmente, ¿cómo es tu día de trabajo hoy? ¿Qué es lo que haces exactamente en la actualidad?P.B.- Bueno, hoy estoy viendo todos los "Casos Cerrados" antes de tiempo porque compraron un programa que no va en el horario, no va en ningún horario. Sinceramente es muy bizarro, a mi me da vergüenza. El tema es que nadie lo vio entonces alguien se tiene que sentar a verlos y decir "va o no va".2. ¿Y esos productos quien los compra? ¿Vienen en los paquetes que se compran en Estados Unidos?P.B.- No lo sé, no sé si alguien viajó le pareció bueno y lo compro, no sé si vino en un paquete. Hay muchas cosas que por ahí compras una serie y de regalo te traen programas. Como llegó "Caso Cerrado" no tengo idea. El tema es que estas series vienen por un departamento que se llama fílmico y no sé si la gerente de fílmico lo propuso o si fue de la gerencia de programación que lo propusieron. La cuestión que fílmico te los da, te da a razón de 10 o 15 capítulos cada cuatro días te los van cargando y no hay un resumen de esto, nosotros ya pedimos, como nosotros estamos armando para el día siguiente porque además funciona. Por día usamos cuatro capítulos, no damos abasto, entonces no hay tiempo de vos adelantar y decir "Uy este caso esta bueno, este no". Son dos casos por programa y por ahí vos viste el primero y estaba más o menos bueno y el segundo era un bochorno como paso con "La papa anticonceptiva", que lo levantamos. Tengo varios nombres "El Ratón Explorador de Vaginas". Bueno, entonces, algunos los sacamos pero nosotros no decidimos, tenemos que mandar un informe y ahí tardan dos días en confirmarse.3. ¿Y por qué crees que rinden estos productos y no nuestros productos? Por ejemplo hace unos años reemplazaron "Doctores" para poner una novela extranjera.P.B.- No sé, no sé porque para mí debe haber muchos intereses. Esto debe costar dos mangos.4. Si, cuesta mucho más arriesgarse a poner la plata para hacer una ficción nacional, que no sabes si por ahí te va a dar resultadosP.B.- Ponele que no hablemos de ficción, que en realidad son caras. ¿Por qué no hacer programas? Te van a decir que es crisis. Yo me acuerdo, acá en los momentos de crisis se hizo "El Show del Blooper" y bueno por lo menos teníamos un conductor que era Darío Lopilato, veníamos, grabábamos, todos laburábamos y era un programa barato, eran bloopers pero por lo menos hacíamos algo. A ver esto da trabajo a edición, para este programa ("Caso Cerrado") están laburando seis personas de postproducción más los de grafica, porque además hay que cambiarle toda la grafica. Si fuera acá, laburarían todos los de piso. Yo no me puedo quejar en cuanto a trabajo porque en ese sentido hay pero los de piso por ahí están haciendo seis horas y no tienen nada.5. ¿Pero por qué crees no nos estamos arriesgando tanto a hacer algo nacional?P.B.- Particularmente, en el canal, me parece que es por la venta. Viste que se habla que se está vendiendo el canal. Y deben estar esperando. En un momento yo creía que era por la construcción de unos edificios porque hay todo un traslado. Viste que el canal estaba en Pavón y eso lo vendieron entonces quieren traer todo para acá (Martínez) y acá supuestamente van a venir los de noticiero. También hay oficinas acá, en la otra calle están los estudios de Susana, sobre la otra calle que había depósitos están armando oficinas y talleres (todo esto que era la casa de Gran Hermano), empezaron a traer todo para acá. Yo empecé a laburar acá, son ocho estudios que hay acá que eran estudios de cine y éramos doscientas personas. Ahora se está viniendo todo el canal para acá.
6. ¿Vos crees que Telefe termine siendo un lugar donde se prestan estudios para que vengan otras productoras y realicen sus productos?
P.B.- No lo sé, no tengo la menor idea. Puedo arriesgar a contarte lo que pasó en El Trece. El Trece se desprendió de su gente y el valor de El Trece pasó a ser su señal. Por ahí quieren que en Telefe el valor sea la señal y el resto que sean producciones externas y comprar programas, no lo entiendo.
7. ¿Crees que afecta culturalmente el hecho que los canales de aire, particularmente Telefe, estén bombardeados de programas extranjeros?
P.B.- Obvio, claro, si pero me parece que el canal no tiene una visión más allá de la comercial, como podía llegar a tener en otros momentos, de que es un medio de comunicación y tiene que generar. O sea, yo digo, yo viví diez años en Brasil y el mercado es muy diferente. Allá la Globo tiene el ochenta por ciento del encendido y tiene, no sé, el costo de producción es una locura comparado con otros canales. Y tiene una cosa de nacionalista que está buenísimo. Es muy raro que la Globo te ponga alguna serie extranjera, por ahí compran formatos. Empezó a coproducir, cosa que no hacía. Hasta un grande, es la cuarta cadena del mundo, es muy grande. Tienen un mercado interno muy grande también y además de tener un mercado grande casi todos ven ellos. Entonces toda la plata les va a ellos. Y ellos también están coproduciendo, así que, qué sé yo Si lo llegan a hacer ellos que tienen toda la torta, ¿acá no hacerlo? Pero la realidad es que si, que es una pena porque, cuando yo entre ya estaba medio en decadencia la tele, y yo veo que cada vez se labura peor y la programación es cada vez mas Entonces te empezas a plantear de quien es la culpa. Viste cuando tenes un circulo y no sabes si la gente ve poco porque es una mierda o es una mierda porque no hay plata porque la gente ve poco. Entonces ¿dónde empieza?
8. ¿Crees que tiene que ver un poco la situación actual del país, como afectan a los canales?
P.B.- Si, también. Creo que la situación actual tiene mucho que ver pero también creo que este proceso se debió ver hace tiempo.
9. ¿Vos crees que, por ejemplo, esto del boom de las telenovelas extranjeras se desencadeno a partir de una y que bueno el resto de las personas se fueron enganchando a partir de eso o que es algo que por ahí es otra alternativa a esto que vos decís que la producción nacional no se está esmerando tanto y entonces prefieren ver otro tipo de cosas?P.B.- Yo creo que debe ser una mezcla de cosas, yo no las vi, me parece que por ahí la primera esta de las turcas que trajeron eran muy buenos los libros, no lo sé. También a las novelas extranjeras les costó mucho entrar acá, sobre todo a las dobladas, yo me acuerdo cuando era chico ya quisieron entrar novelas brasileras no entraban porque el doblaje era espantoso y fueron insistiendo. Y el problema no es que entren las novelas extranjeras, es que ocupen el lugar y acá se deje de producir. Hace muchos años entraban, por ahí, algunas novelas extranjeras o series que ahora no hay. Ponele que en horario de pantalla fuera lo mismo porque ahora no hay tantas series. Y yo me acuerdo de chico que estaba lleno de series y de dibujitos animados pero estaba lo nuestro. El problema es que esté lo nuestro. Después que entre o que no entre esta bueno, que se yo, porque ves cosas diferentes, el tema es que desaparezca lo nuestro. Cuando ya empieza a ser mucho, digo, ocuparte mucho espacio ahí es el tema pero mas allá de pantalla de aire tiene que ver con un tema de industria. Argentina exportaba novelas y ¿Dónde quedo? ¿Qué paso? ¿Por qué se freno esto?10. ¿Está frenada, hoy en día, la exportación?P.B.- Y hoy en día, digamos, Telefe llego un momento en la misma época, cuando te digo que yo volví. Había un departamento, Telefe Internacional, que se vendían las latas, estaba "Muñeca Brava" que se vendió bárbaro, "Cachorra" se vendió bien, bueno "Chiquititas", las de Cris Morena un montón. A partir de eso se generó una cosa que era la de producción de novelas para afuera. Se hizo "Chiquititas Brasil", "Chiquititas España", Se hizo "Son Amores" creo que era una novela de Pol-Ka que se vendió a España y se hacia acá. Y era de Pol-Ka y estaba buenísimo. Sí, todo eso se perdió. Yo no sé si hay programas argentinos que se exporten, por ahí se exportan formatos pero programas, latas argentinas hace rato que no. Se están haciendo coproducciones, eso sí. Telefe hizo coproducción con Perú, que eso me parece piola porque es una forma de bajar los costos, al asociarte con otras empresas. Y ganas más en mercado pero después la exportación se terminó.
11. Habíando de nuestras propias latas nacionales ¿Vos crees que deciden volver a repetirlas porque tuvieron éxito en aquel momento o por esto mismo que no tienen otra cosa para pasar?P.G.- No, cosas para pasar deben tener. A mí me parece que tienen varias cosas primero es barato, es más barato que hacer la nueva y si funcionó vos tenes asegurado que va a medir un poquito menos pero va a funcionar, es como apostar más a lo seguro que poner la guita en otra cosa.
12. ¿Te sorprende que "Moisés" le venga ganando a Showmatch? El doble de rating hizo ayer. ¿Acá en el canal pasa desapercibido, se festeja o cómo es?
PG.- A ver la realidad es que no sé si están tan pendientes, en el día a día, los empleados si gana o no. Lo que pasa es que es esa dualidad, vos queres que gane pero por otro lado te da bronca que gane con otra cosa que viene de afuera porque lo que va a provocar es que sigan viniendo cosas de afuera. Entonces no sé si está bueno. Por si le fuera mal, haríamos otra cosa pero si le va bien y le va bien hasta a las repeticiones
13. ¿El encendido bajó? Así como antes se miraba más, ¿ahora la gente esta migrando a otras plataformas?
P.B.- Si pero la gente, es como dice Mirtha, "¿Qué gente?". Supongo que sí, digo, yo tengo dos chicos que es muy raro que vean tele, mis hijos ya no ven, está bien tienen cable pero ni siquiera eh. Yo, yo, desde siempre, desde antes de que Cablevisión tuviera el grabador yo tenía un grabador, bueno primero con la videocasetera y después tenía un grabador rígido y ahora con DirecTV, grabo con eso. Hace años que no veo televisión en vivo, a ver, veo un noticiero por ahí pero después adelanto los comerciales hace rato. Por eso te digo, ¿quien ve televisión en vivo por aire? Me parece que doña Rosa, no nos tenemos que olvidar que nosotros hacemos para doña Rosa que tiene la tele encendida todo el día, la compañía. Lo que pasa es que doña Rosa no te gasta un mango porque cobra la mínima.
14. ¿Estás al tanto de la multisectorial audiovisual por la ficción, el trabajo y la industria nacional?
P.G.- Si, escuche que se juntaron unos cuantos. Me parece que esta bueno, es gente que labura que quiere laburar pero la realidad es como todo. Vos podes armar todas las multisectoriales que quieras pero si las empresas, en sí, no ponen plata o no tienen interés en producirla mucho no se puede hacer. Digo, mismo, las productoras. Si no hay alguien que compre Pampa está cerrado, me contaron, porque a ¿quien le van a vender ellos? Es muy costosa la ficción, entonces ¿vos arriesgas para ponerlo a donde? Tenes que tener una pantalla.
15. Por eso se trasladan a las latas extranjeras, ¿cierto? Por el precio, por el costo, ir a lo seguro.
P.G.- Es que vos, pensa, no sé cuánto cuesta "Moisés" pero fracasar con una novela que te cuesta, por poner un numero, no tengo idea eh, cuesta cinco mil dólares el capitulo o por paquetes, que te venden el paquete, no sé cuánto debe estar. Contra una ficción que tenes un montón, arriesgas mucha plata.
16. Con "Avenida Brasil" había pasado, que la compraron, salió tanta plata y a los dos capítulos recuperaron lo que habían invertido.
P.G.- Si, en realidad lo que pasa, volvemos a lo mismo. Es una situación país, Brasil, con la Globo, con la venta interna recupera la inversión. Ellos armaron una industria, acá se deshizo la industria. Acá, por ahí, en otro momento vos podías porque con lo que vendías afuera financiabas la programación. Podías llegar a jugarte a hacer cosas. También, no sé, es complicado porque yo no sé qué pasaría hoy. Digo, todos ponen como objetivo querer llegar a lo que es Netflix , eso es un costo más alto hacer una producción tipo Netflix. Más allá de la tecnología, viste acá no se labura mas en HD, todo es 4K. ¿El HD duró cuanto? En realidad como equipo, en renovación de equipos fue una locura el gasto de plata. Porque queres llegar a hacer algo que no vas a llegar a hacer igual que Netflix, entonces tenes que, en mi opinión, buscarte otro nicho. Me parece genial América en ese sentido que dice "la ficción no va, vamos por acá"
ENTREVISTA A NORA MAZZIOTTI.
Investigadora y profesora. Responsable en su país del Observatorio Iberoamericano de la Ficción Televisiva y coordina la carrera de guionistas de radio y televisión del ISER. Ha sido profesora de la UBA, y lo es de la Universidad de la Matanza. Autora, entre otros libros, de La industria de la telenovela. La producción de ficción en América Latina (1996); El espectáculo de la pasión. Las telenovelas latinoamericanas (1993); Soy como de la familia. Conversaciones con Alberto Migré (1993) y de artículos en diversas revistas del exterior. Ha dictado seminarios en diversos países y sus textos han sido traducidos al inglés, al francés, al portugués y al bosnio.
1. ¿Por qué cree usted que hay tanto consumo de ficciones extranjeras y no tanto de ficciones nacionales?N.M.- Con respecto al consumo que no es algo que este demasiado estudiado lo que siempre hay que pensar es esto, no es que la gente elige lo que ve, sino que elige dentro de lo que es la oferta. No es que prefieren ver esas, no, las dan las ven porque tiene acostumbrado ese horario, ese día a consumir ficción. Esta estudiado que siempre los públicos agradecen la ficción nacional, sobre todo en televisión, eso pasa en todos los países, por eso se da la venta de formatos, por eso vos vendes el formato de la novela "Montecristo" pero lo haces en Chile y a los chilenos eso les gusta. Entonces, no es que la gente dice "ah me encantan las novelas turcas y de aquí en más voy a ver novelas turcas", no, descubrieron las novelas turcas porque las comenzaron a pasar y bueno las ven porque les gusta ver novelas, o digamos que pasaría lo mismo con otro género. Sobre todo la telenovela es un género que es muy querido por las audiencias.2. ¿Con qué se pueden llegar a sentir identificadas las audiencias con estas ficciones extranjeras? Teniendo en cuenta, por ejemplo, la telenovela ¿Qué culpa tiene Fatmagul? que muestran otras culturas que no son las mismas que las nuestras pero que siguen atrapando a los televidentes. N.M.- Yo insisto en que lo que media es el formato telenovela, y con qué te identificas, y bueno, te identificas con un personaje que es bueno, que es pobre y que lo quieren perjudicar, es así. Yo una vez leí un estudio fantástico en Brasil de un hombre que era como un tipo súper poderoso, gerente de algo, y el hombre decía que le encantaban las novelas de Talía, "yo soy como Talía" decía, "por lo que ella pelea, porque ella batalla para conseguir las cosas", osea las razones de la empatía son generalmente estas, de identificarse con alguien que es perjudicado por cierta razón y que hay alguien que abusa del poder, esa es la clave del melodrama.
3. ¿Cree que afecta culturalmente estos tipos de contenidos a nuestra sociedad?N.M.- Hablar de afectar es muy difícil y más en el plano cultural, osea las transformaciones culturales son muy largas y por una novela no va a ocurrir una transformación cultural. Lo que hubo, por ejemplo era que con las novelas turcas, muchos viajes a Estambul, y bueno, si también hay actos terroristas en Estambul, por más novela que haya la gente no va a ir. Osea la realidad se impone por sobre el género. Lo que pasa es que una cosa es que influya en un momento reciente a cuando se está emitiendo y que persista esa influencia, son cosas que además son muy difíciles de medir.4. ¿Cree que trajo repercusiones negativas en cuanto al trabajo nacional?N.M.- Bueno si, con respecto al trabajo nacional es como lo que está ocurriendo ahora con la sustitución de productos argentinos por productos extranjeros. Osea si vos compras chancho de Dinamarca los que producen chancho en Argentina se quedan sin laburo, si vos compras telenovela extranjera, los que hacen telenovelas Argentinas se quedan sin laburo, es tan simple como eso. Lo que pasa es que ya hubo casos así en la industria televisiva Argentina, por ejemplo en la dictadura fue muy claro la cantidad de series que se compraron y después las novelas mexicanas, y después las brasileras. Y en los últimos años los intereses de la productora eran no invertir, y bueno se empezaron a dar novelas extranjeras cuando se producen acá fantásticas, y ¿cuál es el resultado? bueno, autores que se quedan sin laburo, actores, productores, etc. Una novela da trabajo a más de cien personas, si vos compras novelas esas cien personas están buscando qué hacer.5. ¿Qué opina usted acerca de cómo afecto a la industria audiovisual, más que nada a la televisión, tantas plataformas donde se pueden ver diferentes contenidos audiovisuales con respecto a que el encendido cayó?N.M.- Cayo el encendido, quedo televisión abierta y queda como una opción más para ver televisión. Pero no cayó el consumo de pantallas. Vos estás viendo en tu cuarto, tu hermano está viendo en el colectivo osea estamos todos viendo una pantalla y la televisión abierta si baja, sigue siendo de golpe un consumo de los sectores más populares. Hay que buscar otras bocas de venta, por ejemplo Netflix compro ciertas cosas de programación Argentina, y bueno… "El Marginal", que lo escribe un profesor de acá, de la carrera de guión que está en el equipo, y "Estocolmo" que lo escribe Marcelo Cabaña que también es profesor de acá. Pero hay otras también en Netflix, la otra vez vi un par que eran de otros años. Entonces la cosa es también buscar otras salidas, no hay que dejar de producir, hay que buscar otras formas de financiación.6. Claro, tal vez el audiovisual no se ven tan perjudicado como industria pero si tal vez la televisión, ¿podría decirse?N.M.- No lo afirmaría totalmente, pero bueno si, la televisión se perjudica pero no totalmente. Hay mucha venta de formatos, y eso se hace el título en otra parte. Osea, hay nuevas formas de comercialización de como ubicar el producto.
7. Cuando hay un buen contenido, una buena historia, la gente se vuelca a esos programas, ¿qué es lo que pasa ahora que no hay tantos encendidos?N.M.- Y, no habrán buenos contenidos. A la gente le gusta la televisión Argentina, a los públicos les gusta reconocer sus actores y actrices. Vos decís "uy que bárbaro, no me quiero perder a fulano" por ejemplo la de Viudas e hijas del rock and roll con el personaje que hacia Verónica Ginasi, a ese le dieron más letra porque a la gente le gustaba, y es correcto que en la novela pase eso. Osea es un diálogo con el público, está bien, en esa novela no funcionaba la pareja principal y la última escena de la novela fue el casamiento gay que no se había pensado así.8. ¿Qué cree que se puede cambiar en el momento de contar nuevas historias para atrapar más a las audiencias? N.M.- Yo creo que propuestas hay buenísimas, lo que hay es cortocircuitos en, por ejemplo, entre gente de producción y gente que escribe los guiones, o de la producción, o los dueños de la productora que se meten en las historias, se meten en los casting, se meten demasiado. Entonces, ponele, Sebastián Ortega quiere que salga fulana, que salga mengana que la historia, no esto no me gusta, no vallas para acá… respeta el trabajo del otro, y además después hay devuelta problemas así de programación. "La Leona", la daban a las once, cuando termino la daban a las doce, o doce y cuarto, entonces no hay público que resista. Eso es una enorme falta de respecto al producto, no solo a los espectadores sino a todos los que trabajan en ese producto que su pacto con la audiencia era, no sé, a las diez de la noche. Entonces no podes ir desarmando porque sí.
9. Eso pasa tal vez, porque están midiendo el rating y analizando que vende más. Por ahí ciertas producciones siguen generando ganancias pero no tanto como otras propuestas por lo que lo van desplazando en el horario.N.M.- No, por supuesto que tiene su explicación. Claro que eso se hace, pero no debería ser así. Porque el rating minuto a minuto no se usa para ficción en muchas partes del mundo, en Brasil no se usa, entonces hay cosas que se respetan. También la industria Argentina es bastante especial, por ejemplo termina una novela, pasan dos meses antes de que estrenen otra en ese horario, en México, en Brasil, en Perú, son lugares donde conozco como se manejan, termina una novela y empieza otra. Acá eso lo hacía Alejandro Romay, en la década del setenta, que era dueño de canal nueve, los últimos quince días pasaba media hora de la novela que estaba terminando y media hora de la nueva, iba imponiendo la nueva y además iba afianzando ese horario como horario de novela y eso se hace en todas partes que se quiere mantener eso. Acá no, el público que ganaste para tal novela bueno, se te disperso, se fue a ver otras cosas. Y yo creo que eso no es correcto, pero bueno.10. ¿Por qué cree que canales importantes como lo son Canal Trece o Telefe no apuestan a las miniseries nacionales que se están transmitiendo, por ejemplo, en la Televisión Pública?N.M.- Esas historias surgieron a raíz de las subvenciones para el INCAA que daba la Presidencia de la Nación, dejaron de hacerse, no lograron ganar potencia en los canales hegemónicos porque no eran producciones de ellos, porque Canal Trece pasa la producción de Polka porque Canal Trece pertenece al grupo Clarín y Polka es de Clarín, en su mayoría, entonces o le dieron horarios muy marginales y la gente no puedo enterarse de esas nuevas propuestas. Y el encendido de Canal 7 como perdió lo que tuvo originalmente que fue programación de ficción bueno no era alto porque hacía décadas o años en los que no había más ficción. Todo hay que construirlo, mantenerlo, cuidarlo, si no lo haces se pierde.
11. ¿Cómo ve a futuro la industria audiovisual?N.M.- No tengo idea del futuro, porque pasan cosas que no estaban previstas, me refiero a plataformas, ¿qué sabíamos que íbamos a estar con los telefonitos hace diez años? Puede pasar cualquier cosa.
ENTREVISTA A ROBERTO CARNAGHI
Actor argentino de cine, televisión y teatro.
Egreso en el año 1966 de la Escuela Nacional de Arte Dramático. En sus muchos años de carrera, participó en aproximadamente sesenta obras de teatro, cuarenta y cuatro películas, más de cincuenta programas de televisión y por lo menos, cien publicidades. En 2006 ganó el Premio ACE de Oro.
1. ¿Cómo fueron sus comienzos actorales?
R.C.- Yo empecé en San Isidro en un teatro que se había creado, digamos, desde la dirección de cultura de la Municipalidad. Ahí descubrí el teatro, siempre me gusto la pintura, los libros, pero no el teatro. Y el cine, siempre digo que soy actor quizás más por el cine que por otra cosa, pero teatro no veía. Y bueno, ahí descubrí el teatro pero no de forma profesional, sino como que era un teatro independiente donde yo iba y trabajaba, hacíamos cosas, estaba uno que manejaba la electricidad, mi viejo era carpintero entonces yo me ocupaba de eso cuando hacíamos la escenografía y demás, y después si fui a la Escuela Nacional de Arte Dramático, y ahí una vez que egrese ya me dedique de forma profesional. Hasta ese momento yo vivía de otra cosa, también tuve que seguir viviendo de otra cosa, pero esos fueron mis comienzos, ahí descubrí el teatro. Empecé a ver teatro, a comprarme mis libros y fundamentalmente lo que más me interesaba fue cuando el profesor que teníamos allá en San Isidro que era Camilo Dapasano me dijo "usted tiene ciertas condiciones". Yo creo que en la vida en este tipo de profesiones ¿no? ya sea para ser futbolista tenes que tener ciertas condiciones, también para ser actor ¿no? porque sos una cara linda, no sé qué y queres ser actor, para mí lo más importante es saber si tengo condiciones para eso, condiciones para la música, sino me dedico a otra cosa que de pronto tiene que ver con el arte. Pero pasó por ahí, una vez que egresé de la Escuela Nacional de Arte Dramático ya comencé a trabajar de forma profesional, esos fueron mis comienzos, mi descubrimiento del teatro y mi pasión por el teatro, empezar a descubrir el gran teatro.
2. ¿A qué edad fue eso?
R.C.- Y , yo tenía 18 años, 17 18 años.
3. ¿Y la televisión? ¿cómo fue que la descubrió?
R.C.- Y, la televisión una vez que egreso de la Escuela Nacional de Arte Dramático, más que nada me dedico al teatro, es como que seguí estudiando de alguna manera. Trabajé en un teatro de San Telmo que se llamaba "El Mundo de jolen malaigen" mi primer obra con la que llegamos a poder sacar un dinero en cooperativa, pero la gente llenaba el teatro en aquella época, se llenaba de martes a domingo. Y después empiezo a estudiar con Carlos Gandolfo, sigo estudiando con Gandolfo y Alberto Ure, que eran nada que ver con la Escuela Nacional de Arte dramático, estaban en otra línea. Pero me convocaron y empecé a estudiar ahí y bueno, ya estaba casado con mi mujer, teníamos un hijo de la Escuela Nacional de Arte Dramático, una locura total, éramos estudiantes, y entonces yo me dedicaba a estudiar y no entraba guita en casa y ahí fue donde Alberto Ure me consiguió un psicoanalista que no me cobraba al comienzo y me dijo "bueno te lo voy a hacer trabajar" y empecé a buscar trabajo en televisión y a trabajar en publicidad. Alberto Ure fue un director muy importante que trabajaba en una empresa publicitaria y empecé a hacer publicidad. Aparece en la publicidad ya por aquella época la comicidad en la publicidad, no había, toda la publicidad era gente muy linda, muy armada. El primer fotógrafo al que me mandaba Alberto Ure me decía "vos con esa cara no podes trabajar" y así me dijeron varios eh. Pasa que no existía, ahora ya no las podes ver, pero era una cosa muy armada. Entonces aparece el humor, que viene de estados unidos no porque sea creado acá. Siempre es una copia. Y eso me hizo conocido y me abrió las puertas de la televisión. Pero yo ya estaba haciendo teatro. La televisión era distinta, digamos el teatro también ha cambiado, más que nada en la parte producción y demás. Pero la televisión era totalmente distinta de lo que es ahora. Cuando yo empiezo la televisión está, digamos a nivel actoral, los que trabajan son gente grande. Los galanas eran toda gente de treinta y pico de años, las mujeres también, si llegan a pasar un viejo programa lo van a ver, y en las películas lo mismo, son toda gente muy grande. Y cuando yo entro, osea, uno hace los pequeños papeles porque los galanes son tipos de treinta y pico cuarenta años. Eduardo Rudy, Raúl Rossi, era muy difícil entrar en televisión y la publicidad me abrió pasos porque habían cuatro canales, no existía el cable. Y entonces pasaban la publicidad en los cuatros canales y la publicidad era muy importante para los argentinos, la publicidad duraba mucho tiempo, no como ahora que duran 10, 15 segundos. Duraban 30 segundos, hasta 1 minuto, por ahí eran Francesas, de algún producto francés. La primera vez la pasaban completa y después la cortaban. Pero por lo general la publicidad era de 25, 30 segundos y había mucho trabajo. Me hice conocido a partir de ahí, no tanto por el teatro. Era otro mundo, habían otras reglas. Vos tenías que saber muy bien la letra, los libros, no podías cortar, no había compaginación, directamente si alguien se equivocaba te puteaban, te decían cualquier cosa, porque volver a decirlo, tenías la letra con alfileres. Las cámaras iban de un lado para el otro, la producción hoy cambió con respecto a ese tema.
4. ¿En qué sentido cambió?
R.C.- Más nivel digamos, hay un mayor nivel técnico, vos tenes una cámara y podes repetir, y también a nivel actoral, podes trabajar otras cosas, podes hacer exteriores, los exteriores antes eran más complicados, hacer un exterior en general era muy difícil con una cámara y había una escenita nada más, todo era piso. Hoy se estudia, pero en esa época era todo más que nada a pulmón. La gente que de pronto le interesó la televisión, algunos venían del cine, los actores en general venían de la radio o del teatro no era gente especializada en el tema de la televisión, fueron aprendiendo de alguna manera, y uno también, la publicidad me ayudo muchísimo, porque la publicidad me marcaba hasta aquí, presenta la botella, salir corriendo y llegas hasta acá, eso si se filmaba. Se hacía en 35, no se filmaba como se hace ahora en digital. Antes era filmación y duraban de la mañana hasta la noche. Se pagaba bien, muy bien te pagaban, no cuando no eras nadie, pero una vez que vos habías pegado con alguna publicidad se pagaba bien y fundamentalmente había muchísimo trabajo. Habían otros códigos, vos entrabas a un canal de televisión y nadie te paraba. Vos podías entrar tranquilamente y buscabas trabajo. Podías hablar con los productores, había contacto directo. Hoy vos no podes entrar en un canal, los productores no te atienden, te piden una foto, también en aquella época pedían alguna foto, pero entrabas más que nada por el carisma, si habías estudiado. Por ejemplo Pacheco, Osvaldo Pacheco tenía un programa que se llamaba "Viernes de Pacheco" el ensayaba, y los días que ensayaba entraban los libros, habían personajes que estaban fijos pero después también estaban los bolos donde vos te hacías conocido, entonces habían un montón de actores y te decían "mira che, tengo un policía para vos" tengo esto, que lo otro y estabas ahí, ibas y te daban trabajo, esta era una manera. A mí por eso te digo que la publicidad me abrió un poco las puertas porque era una cara conocida, no necesitaba decir soy fulano de tal a ver que hice o que no hice, la publicidad ya servía.
5. Con estos cambios que menciona que se produjeron en la producción ¿le costó adaptarse?
R.C.- No, a mi no me costó adaptarme, es como que hay otros códigos distintos con respecto a los que habían en aquella época. No podías llegar tarde, si llegabas tarde no podías trabajar más, te tenías que saber bien la letra. Siempre estaba la misma persona, siempre era el mismo director, el mismo asistente. Importaba la calidad, hoy también pero hay otras cosas, si te vienen bien, si el actor te sirve. No pasa más por descubrir a alguien sino por el que tiene rating. En esa época no pasaba por ahí, los actores ya eran conocidos, venían del teatro y del cine y de la radio, muchos vinieron de la radio. El público los conocía a través de eso, no tanto por la televisión. Cuando aparece la televisión, vos eras de un canal, los contratos eran anuales. Un programa como "La Tuerca" estuvo 11 años en pantalla y esos actores eran contratados por Canal Trece, que en ese momento pertenecía a Goar Mestre. Para que te des una idea, yo entro a Canal Trece, en un programa que estaba fijo digamos, tenía cierta continuidad y Goar Mestre, el dueño del canal, ´pasaba con su habano y me decía "Buen día Carnaghi" y venía al piso, saludaban, veían como estaba el material. Tenías una relación directa con los dueños del canal. Cosa que ahora no ocurre, hoy te encontras con productores que cambian. Ahora se hace casting, antes no se hacían casting, en general te llamaban por la foto. Eso es lo que cambió, se hizo más técnico, como todo. Estamos en un mundo donde la comunicación cambió, estamos siempre conectados. Y los medios de comunicación también cambiaron y uno se tiene que adaptar.
6. ¿Cree que estos cambios que se generaron y las importaciones de contenidos televisivos provocan que no hayan tantos trabajos en la televisión?
R.C.- No, eso tiene que ver con el trabajo, y tiene que ver con un problema económico, los medios de la comunicación y la televisión producen dinero, fundamentalmente les interesa el éxito y que les salga lo más barato posible. Tener técnicos y actores significa que les tenes que pagar un sueldo, aguinaldo, vacaciones, obra social, están a tu cargo, mañana te hacen paro, todo lo que significa eso. Hay un convenio, los convenios suben y bueno, el problema es que vos contratas un programa, por ejemplo, como la de los Turcos que es un programa viejo, de diez años atrás y lo compras por dos pesos, vos no tenes ningún problema, compraste la lata, la pones ahí, hace puntos, vendiste publicidad y todo, ¿para qué querés a los actores?, pasa por ahí, y la gente que compra. No son solamente responsables los programadores, también el público es responsable. Cambió eso, el producto cada vez cuesta más, de pronto gastas mucha plata, tenes un elenco, pones una escenografía maravillosa y la gente no la ve. En frente te ponen otro programa que a la gente le interesa que tiene algo que no es del mismo nivel, que no pueden competir. Los programas que yo hice siempre tuvieron éxito, por ejemplo "Montecristo", le ganábamos a Tinelli, a todos.
7. ¿Qué cree que le atrae a los Argentinos que ver productos nacionales?
R.C.- Y, estábamos hablando de los desaparecidos, de la tortura, junto con la historia de amor. Yo me encontré con jóvenes que me decían "yo tengo un grupo de amigos que nos vemos todos los miércoles, vamos a un restaurant donde haya televisión para comer y ver todos juntos Montecristo". Eso, o lo último que fue "Graduados" que se pasaba a las nueve de la noche y que fue un programa para la familia, unió a los chicos. Vos fijate, lo último que hizo Echarri, gastaron muchísima plata y sin embargo no les fue bien, lo tuvieron que pasar a las once y pico de la noche porque competís con otro programa que te gana. Pero pasa por ahí, porque es más barato, y si les va mal no gastan tanta plata. Siempre tenes que pensar que la televisión es un negocio, que es lo que me rinde y que no, no invierten, no tienen problema actoral, con los técnicos. Este es un país muy especial, tenemos que hacernos cargo de eso, de qué manera hemos sido educados, que nos venden.
8. ¿En qué cree que se ve identificado el Argentino con una ficción que es del otro lado del mundo y que no tiene nada que ver con sus costumbres?
R.C.- Creo que a la gente le puede interesar ver otro mundo. Un mundo distinto, son actores pero no son iguales que nosotros, tienen otro carisma, hay otras escenografías y quizá nuestra televisión siempre muestra los mismos actores, la misma historia cambiada un poquito y de pronto bueno, creo que a la gente le interesa un poquito eso y se engancho. Es una prueba, de pronto alguien dice voy a probar con esto y funciona y dice voy a traer a los coreanos, a tal cosa, a tal otra. Empieza de alguna manera a funcionar eso. También en aquella época si vos hacías un programa cómico no te ponían en frente otro cómico, era otro día. Camarota iba los lunes, Tato Bores los domingos. Si los teleteatros a la tarde. La televisión al comienzo era tratar de hacer un producto, vender una telenovela bien, habían autores, los sigue habiendo, pero quiero decir que eran autores de televisión.
Hace poco realizo "Milagro en Campaña" para la televisión pública, y como esa se han realizado más series que son muy buenas y que tienen una calidad increíble,
9. ¿qué pasa que no rinden?
R.C.- "Milagros en Campaña" fue un programa ya con otro nivel. Lo que pasa es que la gente ya no lo ve y el canal no apuesta. Todos esos programas se hicieron porque se dijo que se tenía que pasar programas Argentinos, y como canal nueve no tenía serie, no tenía nada hizo eso, pero lo pasaban en cualquier horario, no le hacían publicidad ni nada. Los dos canales más vistos son el Trece y el Once, cosa que antes no pasaba, antes se veían todos los canales.
10. ¿Cree que nuestras ficciones pueden competir con los enlatados?
R.C.- Con los malos enlatados sí. Los buenos, buenos, buenos no los ves en televisión, los ves en cable. Yo veo programas extranjeros que son maravillosos, esos no están en los canales, no tendrían éxitos, yo creo que sí, pero por ahí hay otro arreglo económico. Hay varios programas porque esos sí les deben salir una fortuna quizás comprarlo pero que tienen éxito en otras partes del mundo. Eso es la televisión, es el negocio.
11. ¿Qué lo hace a usted seguir apostando por trabajar en la televisión en este ambiente en el que no hay tanto trabajo, en el que los códigos cambiaron y no quedarse solamente con el cine o el teatro?
R.C.- Aparte de que tengo que vivir, me gusta la televisión. Yo todo lo que hago, ya sea publicidad, cine, teatro o radio, yo a todo le pongo el mismo amor, la misma fuerza, la misma energía. Son como distintos mundos, el teatro es del actor, el cine es del director y la televisión es del productor, pero dentro de eso los técnicos también y los productores también quieren ganar cuando apuestan, no es que da lo mismo, el producto por ahí necesita más ensayo, o más días de grabación, pero uno apuesta a que sea lo mejor de lo mejor, nadie apuesta a que de lo mismo. Esos programas que ponen a la tarde también apuestan a conseguir lo mejor, al mejor chimento. Es mi trabajo y me gusta hacerlo. Yo ahora estoy haciendo un programa para la Disney, Soy Luna, yo estoy encantado con eso, es otra manera de trabajar y de actuar, y trabajo con los chicos, hay italianos, españoles, chilenos, mexicanos. Los chicos son maravillosos, bailan, cantan, actúan, un nivel que yo no tenía cuando comencé, y después el cuidado, ahora todo se cuida mucho más, los detalles. Se vende en España, en Francia, en México, en Grecia, en todo el mundo. Vos tenes un contrato y sabes que para la tercer temporada ya estás, tiene mucho éxito, me dan los libros mucho antes, es otra cosa, pero hay otro dinero también. El dinero es fundamental pero también está en lo que haces, el dinero no significa que haces un buen producto. Podes tener mucho dinero pero después el producto no es lo que vos quisiste, o la historia, a veces es arriesgar, la televisión cada vez arriesga menos en el sentido de contar historias, yo creo que hay historias realmente interesantes pero siempre se cuenta y mismo.
12. ¿Por qué tipo de historia se arriesgaría?
R.C.- Historias que tengan más que ver con nosotros. Con lo que le pasa de verdad a la gente, nadie muestra ciertas cosas, yo que sé, los jóvenes ya no son lo que muestran, los viejos no son todos tan buenitos, no sé, quiero decir contar otras historias distintas más conectadas con la realidad, más que a la gente de pronto le pueda interesar. Graduados paso un poco por ahí, ¿no es cierto? la amistad, la familia judía, la gente me decía "vos te pareces a mi papá, siempre prendido a la televisión". Yo me acuerdo que querían que tuviéramos acento, y bueno eso también uno lo defiende, yo les decía que a mí no me parece, Tato Bores, los padres venían de Rusia, el tenía veinte años más que yo y era un porteñaso a muerte. Yo preguntaba porque íbamos a hacer el acento o tal cosa, sí las costumbres o lo demás ¿no es cierto? pero no hagamos lo otro. Presentemos las cosas graciosas pero son seres humanos como nosotros, son más religiosos, cumplen el año nuevo distinto y hay cosas que se notan de la colectividad, como son los tanos de una manera y los gallegos de otra, pero hoy estamos todos mezclados ¿no es cierto?, el porteño sí quizás con la provincia, y eso fue importante. Bueno, digamos que en ese sentido cambió la televisión, y cambió el trabajo, el teatro también, este es un momento muy terrible porque a nivel económico cuando hay problemas la gente deja de ir al cine, al teatro, a restaurantes, y en el teatro eso se nota, porque no es como en televisión que por más que tengas éxito o no ganas lo mismo que arreglaste a principio de año, en cambio el teatro pasa por el éxito, si la gente viene o no viene. Para hacer teatro hay que poner plata, para producirlo, poner las cosas, cuando arreglas con un teatro ellos piden tantas entradas, ponen las luces y todo, pero aumento la luz, el gas, aumentan las entradas y la gente no asiste, el problema económico es fundamental y es como que hay una cantidad de gente que va a ver el buen teatro, en los teatros chicos las propuestas son más arriesgadas, una obra que te interesa que por ahí no es tan masiva, si te va bien ganas plata y si no, si te va mal tenes que pensar que el diez por ciento es para el autor, que la sala se lleva un porcentaje, argentores, y de lo que cobras el seis por ciento es para la Sociedad Argentina de Actores, el once por ciento para la jubilación, el tres por ciento para el fondo de desempleo, más del veinte por ciento de tu sueldo lo tenes que poner ahí.
13. ¿Qué sensación nota hay en el ambiente?
R.C.- Muy preocupados, también está esta cosa discriminatoria "a claro ustedes porque apostaban a Cristina" y no, anda mal, no es que seas Kirchnerista o no, yo puedo estar de acuerdo o no con el gobierno anterior pero apoyo la cultura, a que la gente hiciera cine. Ese apoyo por ahí era la única manera para que vos puedas mostrar tu talento, si no tenes guita o no conseguís no puede haber gente que pueda crecer. En todos los ámbitos pasa lo mismo y con los actores aún más. Cuando dicen "tenemos tantas salas de teatros y tantos espectáculos" eso habla de que hay ganas de hacer teatro, no de que mucha gente vaya al teatro, es distinto.
14. Volviendo a las ficciones ¿en qué cree que se está fallando y que no se puede captar a las audiencias?
R.C.- Falla en que el mundo ha cambiado, por ahí la gente deja de ver televisión y se mete en internet, yo no escucho a ninguno de mis compañeros, no solamente actores, sino técnicos también, que vean televisión. Creo que lo que pasan por ahí, porque no le interesa a la gente, y le interesa la pavada, y creo que cada vez es peor, eso es lo que pasa. Todos el mundo me habla de Tato, el último programa fue en el ´93, ya en el ´93 el programa de Tato ya no tenía tanto éxito que antes, hacíamos un programa mensual y ya había bajado la audiencia, ya había otro público, la gente cambio, hubo un cambio, los cambios se dan muy rápido, es generacional. Antiguamente uno hacia lo mismo que el abuelo, que el padre, pero mis hijos son totalmente distintos, todo cambia, y de pronto la gente joven está en otra, no le interesa y hay un cambio también cultural, vos vas a Brasil y escuchan música de allá, vos acá no escuchas música argentina, antes sí se escuchaba, cuando yo era chico, joven, habían películas rusas, inglesas, francesas, italianas, japonesas, chinas, de todos los países de México, de España, de todos lados, pasaban películas de dibujos animados, no de Tom y Jerry, sino de películas animadas, el cine se llenaba. Bergman consigue su primer éxito en argentina antes que en Suecia. A los jóvenes se les inculcó de alguna manera otra cosa, las películas son todas americanas, todo lo que pasan en televisión incluso las de cable, no hay más películas de otros países, salvo el canal Europa que pasan algunas que son malas, yo digo ¿dónde están las viejas películas, maravillosas películas que fueron un éxito? ojo, películas sencillas… cambió la gente, este es un país que pero su identidad, tiene otra identidad distinta.
15. ¿Cree que el encendido en cierto sentido bajo por la existencia de otras plataformas como internet?
R.C.- Claro, ven otra cosa, porque lo que pasa es que te muestran lo que te interesa. La gente prende el televisor pero nadie mira. Cambio la imagen, te venden y tomas eso, te plantas en un canal y no ves nada más que eso, es como que no podes ver o discernir, ver la diferencia y no te interesa. Este país de blanco o negro, boca – river, es eso también, no me interesa tal cosa. Todo lo contrario, tiene que haber esto es bueno y esto también y que vos decidas. Yo creo que la gente joven pasa por eso también, por algo que yo creo que es un desapego también, todo en mi época estaba más conectado con lo social, con lo cultural.
16. ¿Qué estrategia usaría usted para que los jóvenes vuelvan a conectarse con la televisión?
R.C.- Es un proyecto de país. En Inglaterra en la segunda guerra mundial la gente iba al teatro, cuando comenzaban a tirar bombas se iban y cuando paraba volvían, es una cultura. Es un proyecto de país, este es un país en donde no hay proyectos de país.
17. Para redondear, el jueves se estreno "La última fiesta" ¿cómo fue?
R.C.- Y bueno, es un proyecto comercial, yo no la vi la película, me hablaron de que estaba bien dentro de lo que era, se filmó bien, con un bajo presupuesto, pero ya con una intención comercial digamos por la historia que cuenta, digamos por el hecho de que Vázquez es un buen actor, y como que hay un público que la va a ver, hay productores, gente que apuesta pero con un bajo presupuesto. Ya desde el guión se paga menos, los titulados del convenio, el equipo técnico es más chico, los decorados son más pequeños, en general acá en argentina las grandes películas se hicieron con bajos presupuestos, pero la historia interesa a más gente, está destinada a un público más joven. Creo que mostrar un mundo distinto por ahí puede interesar, son proyectos difíciles, hay que ver que quiere vender el canal, que gente tiene. Telefe ha sido un canal que ha apostado mucho más en comparación con Canal Trece.
ENTREVISTA A HUGO DI GUGLIELMO
Es Profesor del Master de Gestión de Contenidos de la Universidad Austral (Argentina) y ha dictado charlas y seminarios en Universidad Católica de Chile, Universidad de Montevideo, ORT de Argentina, Universidad de Palermo, FLACSO y otras. Y consultor Internacional de Medios, brinda asesoría en Programación Televisiva, Co-Producciones, Producciones, Estrategia, Promociones y Contenidos en General. Ha editado dos libros sobre la televisión: VIVIR DEL AIRE, La Programación Televisiva vista por dentro (Ed. Norma 2002) y La Programación Televisiva en Guerra (Ed. La Crujía, 2010).
1. ¿Por qué cree que hay tantas ficciones extranjeras en los canales de televisión de aire?
H.D.- Hay como dos motivos, en realidad siempre hubo ficciones enlatadas en los canales de aire, en distinta proporción de acuerdo a la época. Lo que pasa es que en general estaban más a la tarde que es un horario no tan competitivo y que se busca un costo más bajo, porque obviamente un enlatado es un costo más bajo. Y la diferencia de estos últimos dos o tres años es que están en el prime time, y peor aún, es que ganan. Desplazan el rating a muchas ficciones nacionales que no es que les va mal, porque no son grandes diferencias de rating pero están en una competencia complicada en la que antes no estaban. Al canal le sirve porque es más barato, no sé cuanto se estará pagando ahora pero ponele un capitulo de un enlatado aún siendo muy exitosa afuera debe de estar entre cinco mil y ocho mil dólares el capítulo y una novela bien producida debe de estar en ochenta o noventa mil, por lo cual la diferencia es muy grande.
2. ¿Cree que se están optando por poner estas ficciones en los prime time, no solo por la diferencia de costos, sino porque ha bajado el encendido?
H.D.- Los canales las compran porque además han visto que andaban muy bien en otro lado y aparte el director de programación las habrá visto y habrá dicho "esto puede andar muy bien, pruebo". De última, si la pongo en el prime time y no me anda tan bien, la paso a la tarde que no es tan riesgoso, osea negocio redondo, y le fue bien. No está pasando solamente acá, está pasando en Chile, está pasando en muchos lugares del mundo. Siete, ocho años atrás vos decías "voy a poner una novela turca" y te decían que estabas loco, y sin embargo se ha puesto, se ha puesto una coreana también que no anduvo muy bien pero sin embargo se ha probado.
3. ¿Qué cree que atrapa a los televidentes de estas propuestas extranjeras que en varios casos nada tienen que ver con su realidad, en términos culturales?
H.D.- El tema es el siguiente, yo creo que hay un punto en el que la gente ve alguna cosa distinta, que les llama la atención o les gusta, están muy bien producidas, tienen un esquema clásico de novela fuerte digamos, "Las mil y una noches" es un culebrón clásico bien hecho pero súper clásico que tenía un ámbito distinto, Turquía, con una costumbre diferente, el tema del machismo y la mujer en segundo plano que tiene que aceptar las cosas que se supone que nosotros hemos superado pero que en el fondo no del todo digamos hay algo de eso, pero si me mostras que son los turcos mi conciencia se queda más tranquila. Esa es toda una parte, la otra parte es que hoy el mundo es así, un productor no puede decir "ay que malos que son que ponen novelas extranjeras y me quitan el trabajo", no hermano, no es así la historia hoy, hoy la historia es, hace buenas historias, que sean exportables, que tengan una temática universal y que a la gente le pueda gustar en cualquier lugar del mundo porque este es el juego. A vos te venden y vos compras, vos también tenes que exportar, y tenes que usar esa calidad, no ser excesivamente local, no quiere decir que no hagas nunca una novela de contenido local, pero que se comprenda en varios países, la mayoría de las veces no te compran la lata, te compran la idea y la adaptan. Lo diferente en estos casos, por ejemplo la novela Los diez mandamientos y con Las mil y una noches, es que se vendió la lata, hace muchos años que eso no era así. O se vendían las latas latinoamericanas dentro de Latinoamérica, pero en un mercado más chico, pero que la misma viaje hace muchos años que no ocurría. Y si alguien quiere hacer Los diez mandamientos y hacer la escenografía y el vestuario de época, eso cuesta mucha plata. De todos modos no hay otra salida, no te digo que hagas "La última emperatriz de Egipto" ó "La reina de no sé donde", no hace falta tanto, vos podes hacer cosas de buen nivel. La producción hoy es básica, tenes que producir en buena calidad porque lo que vos ves es buena calidad. No sirve prohibir que se importen ficciones enlatadas para proteger lo local. Y hoy por hoy mucho menos, porque hoy todo el mundo tiene acceso a todo, entras por el cable a cualquier lado, entras por netflix, entras por internet, entras por youtube, por donde quieras tenes todo, osea vos no podes restringir eso porque no hay manera de restringirlo. Lo que tenes que hacer, que además me parece más saludable, es desarrollar lo tuyo, y venderme buenas historias, producímelas bien, poneme actores buenos, que sea moderno, lindo, en high definition, en 4K y ese es el chiste, así va a funcionar, no hay otra manera.
4. Y que también sea exportable como dijo antes
H.D.- Algunas cosas sí, Argentina, la verdad, no tiene tanta continuidad ni ha sido tan serio en el tema de exportación como México hace muchos años, Brasil mismo. Ellos armaron su industria solo para eso, y acá hubo que si que no, en una época que sí y en otra que no. Es una tarea de muchos años, no es de un día para el otro.
5. ¿Cree que se está desarmando la industria televisiva?
H.D.- Hay cosas que, por ejemplo Telefe tiene un departamento internacional hace mucho tiempo, con el que han logrado cosas. Digamos, vos tenes un departamento internacional en general te va muy bien el año en el que la pegaste con una gran novela y en los dos o tres subsiguientes seguís vendiendo montado en eso, con esos altibajos ellos han tenido eso y están haciendo algo inteligente también que es mucho co-producción internacional, ese es el mecanismo hoy. Para ser claro, hace veinte años atrás vos ibas a las ferias internacionales de televisión y la mayoría de los lugares a dónde vos ibas a compra lo que vendían eran latas, veinticinco años atrás ponele, quince años atrás ya las latas no eran tanto y eran más formatos de entretenimiento y empezó a haber de ficción también, ese intercambio. Hoy por hoy tener un poquito de latas, bastante de formatos y mucho de co-producciones. Vos vas a comprar co-producciones.
6. ¿Cree que en el futuro los canales de televisión funcionen como estudios rentables únicamente y que ya no produzcan nada propio?
H.D.- Yo creo que va a haber un mix de todo, primero porque está cambiando a una velocidad pasmosa, muy rápidamente, con lo cual es difícil sentar parámetros. La televisión va a seguir cambiando con toda la aparición de los medios digitales, el hecho de que lo que vos producís hoy tenes que pensar no solo en la televisión de aire, ó el cable que sería lo más "clásico", tenes que pensar en que futuro pueden tener para el negocio en internet, o aplicaciones, en los programas para chicos es muy claro eso, pero para adultos es más complicado, es decir todas esas cosas hoy las tenes que tener en cuenta, modifican los costos, modifican las costumbres de la gente y la gente misma se lo va comprando desde a poco. No hay un comportamiento de la gente estable de como utiliza los medios.
7. Antes llegaba la hora de la cena y la familia se sentaba a cenar y ver la televisión, ahora ya no, cada uno está separado viendo cosas diferentes y en su mayoría de los casos les cuesta quedarse enganchados con un producto audiovisual, si se aburren o algo no les gustó enseguida cambian de canal ¿qué truco se puede implementar para captar su atención y hacer que permanezcan atentos hasta el final del capítulo?
H.D.- Eso es prácticamente imposible de manejar, lo único que se puede hacer al respecto de esto es que siempre pase lo que pase con los medios, en lo tecnológico digamos, y cuando digo lo tecnológico te hablo desde el blanco y negro al color al 3D, al cable, al satélite, cualquiera de esos son cambios tecnológicos que modifican ciertas costumbres. Pero en definitiva a la larga lo único que termina determinando el éxito o el fracaso es el contenido, desde el inicio de la humanidad, los tipos que iban a un teatro griego a ver una historia era porque les gustaba el contenido, sino se quedaban en sus casas o al lado del fogón contándose cuentos o lo que fuera, lo que te atrae es el contenido, que es lo único que te va a tener más o menos quieto, lo que pasa es que somos cada vez más inquietos. Es decir, supongamos que una persona mayor como yo que crecí viendo televisión blanco y negro, yo por ejemplo estoy viendo una serie, o un programa político, viene la tanda, antes a veces te quedabas o ibas al baño, ahora agarras el telefonito te fijas los mensajes o miras las noticias y si me engancho no sé si te tardo a volver a verlo, o si me engancho mucho a lo mejor apago la televisión y me quedo con el telefonito. Lo mismo te pasa con la computadora, esos hábitos son muy difíciles de seguir y muy difíciles de medir. Las medidoras, que ya era un lío medir el rating estándar de aire y cable, se vuelven locas para medir que corno estamos viendo, y cuanto más joven peor, porque ven en simultáneo, comparten, entonces es mucho más complicado.
8. ¿Cree que debería cambiar la manera en el que se mide el rating?
H.D.- Yo creo que sí, pero la verdad es que no me atrevería a darles un consejo porque no se me ocurre como. En Estados Unidos constantemente están haciendo mediciones y sobre todo tratando de cruzarlas, por ejemplo, en los lugares de internet podes medir la cantidad de visitas, visitas exclusivas, etc. ¿Pero cómo lo cruzas con esa misma persona si está haciendo algo al mismo tiempo? Entonces viene por ejemplo una empresa internacional que está midiendo cuantas reacciones, comentarios, interacciones, mensajes genera el estreno de una cosa nueva, y lo clasifican como éxito porque generó tantos tweets, lo que pasa es que también es relativo, porque a lo mejor genero tantos porque no le gustó el programa, no porque les gustó. Entonces una cosa que aprendes en la televisión de aires o de cable es que si vos haces una promoción de un programa, que sea llamativo por su elenco, por lo que fuera, el primer rating que se te viene es "wow", pero no te pongas tan contento porque fijate dos o tres semanas a ver cómo se estabiliza, si se cae, si el boca a boca te lo aumenta. Es decir, te puede empezar medio bajo y el boca a boca te lo va subiendo, que es más raro, pero si es muy común que si hiciste buena promo y que en el primero tengas diez y en el segundo ocho y que ocho sea el promedio.
9. ¿Es recomendable estar pendiente del rating cuando uno realiza una ficción, teniendo en cuenta que en la mayoría de los países eso no se realiza así?
H.D.- Lo que pasa es que el sistema de producción que se utiliza en la mayoría del mundo no es el mismo que acá. Hay novelas por ejemplo que sin haber salido al aire están hechas por completo, y otras que no habían salido pero los capítulos estaban totalmente escritos y tenían 25 capítulos grabado e iba a salir dentro de dos meses. Acá el problema es que uno dice "voy a salir por lo menos con 10 terminados", después cuando llegó el día de la fecha y no llegaste decís "bueno salimos con 7", después se enfermó alguien, hubo un lío que se yo y perdiste, estás con la soga al cuello porque te viene el aire, ese es un tema, el otro tema es que en algunos casos se plantea que si no les va tan bien la volantean, y eso por ahí te da algún resultado si lo hiciste bien, si la gente te lo acepto, hay doscientos millones de condiciones para que eso pueda andar, que no todas tienen éxito, pero bueno, tenés esa opción de un volantazo, cambio y sacó al protagonista, pongo otro, ese tipo de cosas se hacen, lo que ocurre es que a lo mejor vos acá más o menos estabilizaste el barco y zafaste, ¿a quién le vendes eso que empezó como una comedia y terminó como un drama o un policial? con eso no vas a hacer nunca un negocio así. O no sabes cuantos capítulos va a durar, cuando lo comenzas a estirar porque anda bien. Todo eso trabó mucho nuestra salida al exterior, o nos han comprado algunas cosas cuando ya estaban terminadas, ó nos han comprado formatos que han reformado. Vos fijate una cosa, Polka que es la productora de ficción más exitosa en Argentina no tuvo ningún éxito en el exterior, lo único que hizo fueron co-producciones, con HBO, Disney, pero ideas suyas, completas no.
10. ¿Deberían los productores y directores comenzar a pensar a largo plazo y no esperar los resultados inmediatamente? teniendo en cuenta que, por ejemplo, Las mil y una noches, tuvo el éxito que tuvo por todo el trabajo de publicidad, el tiempo que le dedicaron a producir, lo minuciosos que fueron a la hora de hacer el doblaje.
H.D.- Lo que pasa es que los productores, directores, guionistas, vos los tenes que financiar. Mira vos en Argentina, de lo que se está produciendo acá, ¿qué ves vos de todo eso que se pueda exportar a ese nivel de producción?
11. ¿Cree que se puede recuperar acá ese formato clásico de novela?
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