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Evolución histórica del alcohol (página 2)


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Se ha demostrado en numerosos estudios que la combinación de los tres tipos de tratamiento del alcoholismo es lo que mejor resultado da; esto es, menor índice de recaídas y mayor tiempo de abstinencia. Así, lo más recomendable es que la persona alcohólica acuda al médico psiquiatra para que éste le trate farmacológicamente, al mismo tiempo que siga una psicoterapia con un especialista. En algunos casos es útil que la persona visite asimismo grupos de ayuda y apoyo.

El tratamiento farmacológico del alcoholismo

  • Tratamiento hospitalario: Habitualmente, resulta necesario ingresar a la persona que intenta desintoxicarse o que manifiesta el síndrome de abstinencia en una clínica o un hospital, sobre todo aquellos pacientes que tengan un historial de graves episodios de abstinencia alcohólica, que manifiesten un marcado síndrome de abstinencia, que muestren desordenes médicos o psiquiátricos asociados o que vivan en circunstancias domesticas desfavorables.

  • Tratamiento ambulatorio psiquiátrico: El médico psiquiatra se encarga de la farmacoterapia; esto es, de proporcionarle al paciente dependiente la medicación necesaria. La medicación suele consistir en unas pastillas anticonsumo que producen reacciones muy desagradables cuando el paciente consume alcohol. Esto siempre y cuando el paciente esté de acuerdo y las tome voluntariamente. Asímismo el médico psiquiatra puede recetar fármacos antidepresivos, ansiolíticos (reductores de ansiedad), etc., en fuinción de cada paciente.

Tratamiento psicológico del alcoholismo

Es muy recomendable que la persona dependiente del alcohol comience una psicoterapia a parte de acudir al médico. La adicción del alcohol no es solo física, sino en gran parte psíquica, por lo que es imprescindible atender a esta parte y otorgándole un gran papel en la recuperación de la persona dependiente del alcohol.

Asociaciones de alcohólicos

Este tipo de asociaciones son muy comunes en la actualidad debido a la gran importancia que está adquiriendo esta adicción en la sociedad.

Existen agrupaciones a nivel mundial (Alcohólicos Anónimos), a nivel estatal (Federación de alcohólicos rehabilitados de España), así como numerosas asociaciones a nivel regional o municipal (ADIANTE).

Alcohólicos Anónimos (A.A)

Alcohólicos Anónimos (acrónimo AA) es una hermandad de enfermos alcohólicos, no lucrativa, espiritual, que realiza reuniones entre sus miembros con el fin de ayudarse mutuamente para abandonar el alcoholismo mediante terapias de grupo. Es una asociación que se extiende a nivel mundial y que su origen se remonta a 1935 y que actualmente consta de sedes en más de 180 países y ofrece sus servicios son a más de 100.000 grupos de alcohólicos.

Como método de trabajo, establecen una serie de Doce Pasos que el enfermo ha de seguir para ser capaz de superar la adicción o la enfermedad. Su base de funcionamiento son las terapias de grupo y además recomiendan utilizar la psicoterapia ocupacional, ya que son ellos mismos los que programan y llevan a cabo distintos eventos para informar al público en general. Su programa de los Doce Pasos ha sido tomado por otras asociaciones de autoayuda como es el caso de Al-Anon, grupos de familiares de alcohólicos, que nace casi al mismo tiempo que Alcohólicos Anónimos y es fundada por las esposas y otros familiares de los primeros miembros de Alcohólicos Anónimos y que al día de hoy forma una numerosa comunidad que edita su propia literatura. Otra de las comunidades que han aplicado exitosamente el programa de los Doce Pasos es Neuróticos Anónimos, así como Narcóticos Anónimos y otras comunidades más.

El programa de Recuperación de A.A. ayuda al alcohólico a poner en orden sus pensamientos confusos y a deshacerse de la carga de negatividad de sus sentimientos.

Los miembros asisten a reuniones de A.A. con regularidad, para estar en contacto con otros miembros y para aprender cómo aplicar mejor el Programa de recuperación en sus vidas.

Rara vez se ha visto fracasar a una persona que haya seguido cuidadosamente el Programa de Recuperación de Alcohólicos Anónimos. Los que no se recuperan son aquellas personas que no pueden o no quieren entregarse totalmente a este sencillo Programa.

Federación de alcohólicos rehabilitados de España (FARE)

La Federación tiene como objeto, promover, coordinar, orientar e impulsar el movimiento asociativo de los enfermos alcohólicos rehabilitados y sus familias y la rehabilitación, así como lograr el máximo interés de las Administraciones Públicas, de los Organismos no alcohólicos, de los profesionales competentes y de la sociedad en general.

Dentro de las actividades a realizar, está el normalizar desde el punto de vista social el trabajo que se realiza, darlo a conocer y difundirlo.

Toda la labor que llega a unas 125.000 personas se realiza gracias a los Alcohólicos Rehabilitados, familiares, profesionales y voluntarios que tienen muy claro que el alcoholismo es una enfermedad, que tiene un tratamiento efectivo y por ese motivo más del 80% de las personas que siguen las pautas de FARE consiguen alcanzar y mantener la abstinencia a bebidas alcohólicas.

ADIANTE, Asociación de Ex-alcohólicos

En el año 1990 inició sus primeros pasos la Asociación de ex-alcohólicos "ADIANTE" de As Pontes.

En estos años de vida la Asociación ha celebrado jornadas Regionales de Alcoholismo, la última de carácter internacional sobre información y prevención de esta enfermedad, y cuyas ponencias fueron desarrolladas por eminentes doctores en Medicina, Psiquiatría y Psicología, de fama mundial.

La Asociación de ex-alcohólicos "ADIANTE" cuenta con un equipo técnico, formado por un médico, una psicóloga y un diplomado en sociología que atiende al Servicio Social.

La Asociación tiene fundamentalmente tres objetivos: a) la prevención e información de la problemática alcohólica.b) la rehabilitación y reinserción familiar, laboral y social del enfermo alcohólico. c) el apoyo a los familiares.

La metodología para la prevención e información es la charlacoloquio en los Centros de Enseñanza y la entrevista y comunicados en radio y prensa.

La metodología para la rehabilitación y reinserción pasa en primer lugar por la desintoxicación ambulatoria o familiar de los enfermos con apoyo farmacológico durante y después según criterio médico. El siguiente paso a seguir son las terapias individuales y grupales, dirigidas por la psicóloga de la Asociación, y que se desarrollan una vez a la semana en los locales de la Asociación.

La metodología para el apoyo a familiares se viene realizando con entrevistas puntuales y terapias individuales y grupales cada quince días.

Es digno de resaltar la extraordinaria cohesión del grupo de enfermos alcohólicos y el alto porcentaje de éxito logrado lo cual es gratificante y estimulante ya que al mismo tiempo obliga a una revisión continua para evitar posibles fallos.

Patologías relacionas con el alcoholismo

El etanol no es un nutriente natural del organismo humano, es intrinsicamente tóxico, por lo cual, su consumo habitual y su alta ingesta, genera en el organismo múltiples desequilibrios metabólicos causando daños y enfermedades, en muchas ocasiones irreversibles.

La metabolización del etanol, entre otras cosas, origina:

. Cambios en las membranas celulares, el consumo agudo de alcohol, incrementa la fluidez de las membranas celulares. Este fenómeno tiene lugar en todas las membranas del organismo, también, en las del sistema nervioso central, provocando intoxicación etílica o intoxicación alcohólica aguda. Al incorporarse el etanol en las membranas de las neuronas, desorganiza su estructura bilaminar, altera su composición lipídico-proteica, por lo tanto, modifica sus propiedades electrofisiológicas y funcionales, causando un efecto inhibidor sobre el funcionamiento del sistema nervioso central.

. Desequilibrio redox en el hígado, El metabolismo del etanol a través de la ADH y de la ALDH genera un exceso de equivalentes reducidos en el hígado, en forma, sobre todo, de NADH, que supera la capacidad de los hepatocitos para mantener el equilibrio redox causando: hiperlactacidemia, hiperuricemia, aumento de la síntesis de ácidos grasos y disminución de la síntesis de proteínas.

. Alteración estructural y funcional de las mitocondrias, La mitocondria es la estructura diana en el daño hepatocitario inducido por el etanol, las mitocondrias aparecen tumefactas y pierden la estructura de sus crestas. Sufren graves alteraciones de la cadena de transporte de electrones, de la fosforilación oxidativa y de la síntesis de ATP y todo ello reduce su capacidad de conservación de la energía.

Una vez mencionado, a grandes rasgos, las consecuencias de la metabolización del alcohol en nuestro organismo, vamos a centrarnos en el etanol como el causante de hepatopatías alcohólicas.

El consumo de alcohol agudo y crónico puede provocar daños graves en el hígado (hepatopatía alcohólica). Al principio, la grasa se acumula en las células de este órgano y el hígado aumenta de tamaño pero, en la mayoría de los casos, no hay síntomas. Algunas personas desarrollan una hepatitis inducida por el alcohol, que produce la inflamación y la muerte de las células hepáticas (hepatocitos) y que se manifiesta por una ictericia en los ojos y en la piel. En un 20% de los alcohólicos aparece una cirrosis, un trastorno irreversible en el que el tejido hepático normal es reemplazado por tejido fibroso, produciendo una alteración muy grave del funcionamiento hepático.

Hepatitis alcohólica.

La hepatitis alcohólica, es una lesión hepática caracterizada histológicamente por "balonización" y necrosis de hepatocitos, infiltrado inflamatorio lobulillar con predominio de polimorfonucleares y un grado variable de fibrosis pericelular y perivenular.

Clínicamente, la hepatitis alcohólica es muy variable, desde casos prácticamente asintomáticos, que solo se diagnostican mediante biopsia, hasta otros muy floridos clínicamente, con fiebre, leucocitosis, hepatomegalia dolorosa, estigmas alcohólicos, ascitis, varices esofágicas e incluso encefalopatías.

Cirrosis hepática.

Cirrosis, enfermedad crónica del hígado que cursa con destrucción irreversible de

las células hepáticas. La cirrosis es la fase final de muchas enfermedades que afectan al hígado. Se caracteriza por áreas de fibrosis (cicatriz) y muerte de los hepatocitos (células hepáticas). Sus consecuencias principales son, el fracaso de la función hepática y el aumento de la presión sanguínea en la vena porta (que transporta la sangre desde el estómago y tubo digestivo al hígado). En Europa occidental, el alcohol y la hepatitis B son la causa principal de la cirrosis.

Sus principales síntomas son:

  • Pérdida de apetito.

  • Malestar general.

  • Náusea y vómitos.

  • Pérdida de peso.

  • Agrandamiento del hígado.

  • Ictericia o coloración amarilla de la piel y la parte blanca de los ojos, debido a la acumulación de la sangre cuando el hígado no es capaz de eliminar bien la bilis.

  • Prurito o picazón.

  • Ascitis o líquido en el abdomen, por mala circulación de la sangre en el hígado.

  • Vómitos con sangre, por ruptura de venas (várices) en la parte baja del esófago.

  • Hipersensibilidad (sensibilidad aumentada) a los medicamentos, provocada por mal funcionamiento del hígado.

  • Encefalopatía o cambios del estado de conciencia, los que pueden ser sutiles (confusión) o profundo (coma).

Tratamiento de la cirrosis hepática:

Se recomienda que la persona presente una abstención total en el consumo de alcohol, complementado con una dieta balanceada.

Existen otras complicaciones orgánicas del abuso del alcohol que afectan al: tubo digestivo, al páncreas, al sistema circulatorio, generan complicaciones neurológicas, musculo esqueléticas, endócrinas, hemato inmunológicas y es un factor de riesgo importante en la aparición de cáncer (de esófago, de colon y recto, de estómago, de mama y de hígado)

Alcohol y tubo digestivo.

El consumo ocasional de etanol tiene efectos sobre el funcionalismo digestivo que dependen de la dosis ingerida. La ingestión de una dosis moderada de una bebida obtenida por fermentación (vino o cerveza) estimula la secreción de ácida gástrica, mientras que la bebida destilada carece de este efecto, así pues un consumo masivo de bebidas destiladas, puede producir alteraciones de la mucosa gástrica de tipo inflamatorio (hiperemia, erosiones e incluso hemorragias en la mucosa) pudiendo ser reversibles. Los alcohólicos crónicos, por el contrario, son mejores candidatos a la hora de padecer una gastritis crónica (inflamación de la mucosa del estómago)

Las alteraciones de la absorción intestinal son frecuentes en los alcohólicos crónicos, ya que el etanol puede producir atrofia de las microvellosidades que recubren el intestino delgado generando un déficit vitamínico en estos enfermos.

El CH3CH2OH altera la motilidad digestiva a todos los niveles.

En el estomago, las bebidas de baja graduación en dosis moderadas aceleran el vaciamiento gástrico. En el intestino delgado y grueso puede darse tanto una lentificación como una aceleración del tránsito, siendo esto último más frecuente en el colon, por lo que los alcohólicos activos suelen presentar dierrea y estreñimiento en las fases de abstinencia.

El consumo crónico de etanol, incrementa la permeabilidad intestinal, puesto que es muy poco el alcohol que llega a las porciones distales del intestino delgado e intestino grueso, este efecto del etanol, se debería, sobre todo, a que alcanza la mucosa intestinal a través de la circulación general. Una vez allí, la flora intestinal, que dispone de alcohol deshidrogenasa (ADH) lo transforma en aldehído acético, que ejerce sus efectos dañinos en nuestro organismo, antes de ser transformado en acetato.

Conclusión: Las complicaciones del aparato digestivo por culpa de la ingesta de esta sustancia son:

1. Hipertrofia parotídea.

2. Transtornos de la motilidad.

3. Gastritis crónica.

4. Maldigestión /malabsorción

5. Tumores digestivos. (cáncer de esófago, de colon y recto, de estomago y de hígado )

Alcohol y páncreas

El abuso del alcohol es la causa más frecuente de pancreatitis en Occidente. Se entiende como pancreatitis aquella enfermedad inflamatoria del páncreas que agrupa diferentes procesos agudos y crónicos. En las pancreatitis agudas se puede conseguir restablecer la función pancreática normal, mientras que en las crónicas queda una lesión residual permanente en el páncreas.

Las agudas se caracterizan por la presencia de un dolor abdominal y por un incremento de las enzimas pancreáticas en la sangre, la orina y otros fluidos. Generalmente es un cuadro clínico leve, aunque en ocasiones puede complicarse y ocasionar la muerte del paciente. En las crónicas se produce una destrucción del parénquima hepático, que va perdiendo su función, pudiendo desencadenarse un cuadro de diabetes.

Alcohol y sistema circulatorio.

El abuso crónico del etanol se asocia a una amplia y variada gama de alteraciones cardiovasculares, entre ellas encontramos:

Miocardiopatías alcohólicas:

Enfermedad cardíaca asociada al consumo exagerado de alcohol, caracterizada por hipertrofia y bajo gasto cardíacos.

Arritmias cardíacas:

La arritmia es una alteración en la formación y/o en la propagación del impulso eléctrico que origina la contracción del corazón.

Hipertensión arterial:

La hipertensión arterial es una condición médica caracterizada por un incremento continuo de las cifras de presión arterial por encima de 139/89 mmHg

Alcohol y sistema nervioso.

El tejido nervioso, no dispone de capacidad oxidativa del etanol, por lo que los efectos nocivos relacionados con el abuso de esta sustancia dependen directamente de ella y no, como en los casos anteriores, del acetaldehído.

Las complicaciones neurológicas más características del abuso del alcohol son:

  • Ictus cerebrales:

Los accidentes cerebrovasculares o ictus (trombosis o derrame cerebral, antiguamente llamado apoplejía) están causados por un trastorno de la circulación cerebral que ocasiona una alteración transitoria o definitiva del funcionamiento de una o varias partes del encéfalo.

  • Enfermedades nutricionales asociadas al alcoholismo:

.Síndrome de Wernicke-Korsakoff: Es un trastorno cerebral que involucra la pérdida de funciones específicas del cerebro debido a la deficiencia de tiamina. Este trastorno es consecuencia de la deficiente nutrición que encontramos en muchos alcohólicos. Los síntomas son desorientación y falta de atención. Si no se trata, puede dar lugar a estupor, coma y muerte. Concretamente, se debe a una falta de vitamina B (tiamina) que es consecuencia de la malnutrición, la débil absorción gastrointestinal de la vitamina y de la reducida función hepática, los cuales son consecuencia del abuso del alcohol.

.Síndrome SESA: Es una complicación muy frecuente que consiste en una encefalopatía subaguda que produce confusión y disminución del nivel de conciencia, a la que se superponen déficit neurológicos focales (hemianopsia, hemiparesia, asfisia) convulsiones focales y un patrón de ondas lentas en EEG con descargas epileptiformes lateralizadas.

  • Enfermedades de patogenia tóxico- metabólica.

. Demencia alcohólica: Síndrome demencial atribuíble al abuso crónico de alcohol y a la deficiencia nutricional asociada; es un deterioro intelectual, mnésico, crónico y progresivo.

A todas estas complicaciones neurológicas, hay que añadirles otras alteraciones encefálicas secundarias como: encefalopatías hepática, ictus hemorrágicos, el daño cerebral secundario a hipoglucemia o a alteraciones electrolíticas, las secuelas cerebrales relacionados con los abusos del alcohol y problemas de orden psicológico.

Alcohol y sistema musculo – esquelético.

  • Miopatías alcoholicas: Necrosis muscular aguda.

  • Osteoporosis: Es una enfermedad en la cual disminuye la cantidad de minerales en el hueso, perdiendo fuerza la parte de hueso trabecular y reduciéndose la zona cortical por un defecto en la absorción del calcio.

  • Contractura de dupuytren: Es un transtorno caracterizado por una proliferación excesiva del tejido conjuntivo que afecta a la aponeurosis de la palma de la mano y que se caracteriza por la formación de nódulos y de cuerdas fibrosas que fijan en posición de flexión algunas articulaciones metacarpofalángicas e interdigitales.

Alcohol y sistema endócrino.

  • Eje hipotálamo – hipófiso – gonadal:

El etanol ejerce un efecto tóxico directo sobre la producción hormonal de las gónadas y sobre el eje hipotálamo- hipófiso- gonadal. El testículo del varón alcohólico aunque no sea cirrótico, muestra con frecuencia una atrofia de los túbulos seminíferos y reducción de las células germinales, con disminución del número y la movilidad de los espermatozoides.

Esta droga, actúa directamente sobre la síntesis de testosterona en el testículo e inhibe la secreción hipotalámica de LHRH y la hipofisaria de LH, estas mismas o similares alteraciones se producen también en la mujer alcohólica, en la que es más frecuente la menopausia precoz.

  • Eje hipotálamo – hipófiso – tiroideo:

Disminuye la síntesis y liberación de hormona tiroidea con un aumento compensador de la producción de TRH y TSH.

  • Eje hipotálamo – hipófiso – suprarrenal:

Los sujetos que abusan crónicamente del etanol muestran con frecuencia un hipercortisolismo bioquímico que se manifiesta por niveles elevados de cortisol en sangre y en saliva y por disminución de la ACTH plasmática.

Alcohol y complicaciones hemato – inmunológicas:

  • Anemias en alcohólicos : La anemia puede definirse como la disminución de los glóbulos rojos de la sangre o de su contenido de hemoglobina, la que resulta insuficiente para el normal transporte de oxigeno a los tejidos.

Esta enfermedad se detecta en un porcentaje significativo de los alcohólicos crónicos hospitalizados debido a:

1. Toxicidad directa del etanol.

2. Deficiencia del ácido fólico

3. Alteraciones del metabolismo del hierro.

Existen pues, otras complicaciones relacionadas con este apartado que son:

  • Deterioro de la función fagicítica.

  • Alargamiento del tiempo de la hemorragia.

  • Aumento de IgA.

  • Deterioro de la inmunidad celular.

Amnesias parciales (Blackout) en el alcoholismo

En determinadas ocasiones la persona ebríaolvida (esto es, tiene amnesia) ciertos episodios transcurridos. Así, al estar sobria no recuerda situaciones completas o parciales y, o bien las recuerda cuando vuelve a estar ebrio, o no vuelve a recordarlas.

Alucinosis alcohólica en el alcoholismo

La alucinosos alcohólica es un trastorno psicótico que se caracteriza por la presencia de alucinaciones, en la mayoría de los casos auditivas de tipo amenazante (la persona oye voces insultantes) y por la consecuente interpretación delirante de la realidad. La alucinosis alcohólica suele aparecer tras una intoxicación alcohólica después de que el individuo haya ingerido grandes cantidades de alcohol durante algunos días. Cesa cuando la persona deja de beber.

Alteraciones de la personalidad en el alcoholismo

Es dificil establecer una relación dependencia del alcohol – personalidad; parece ser que aquellos que dependen del alcohol y aquellos que abusan del alcohol presentan tendencia a la irritabilidad, falta de control de impulsos y deesinhibición. Algunos estudios señalan hacia una posible afectación del lóbulo frontal del cerebro. Puede ser que la dependencia del alcohol produzca trastornos en la personalidad y puede ser que trastornos de la personalidad lleven a una persona a depender del alcohol; los estudios no son concluyentes.

ÁMBITO BIO-PSICO-SOCIAL

Al principio el alcohólico puede aparentar una alta tolerancia al alcohol, consumiendo más y mostrando menos efectos nocivos que la población normal. Más adelante, sin embargo, el alcohol empieza a cobrar cada vez mayor importancia, en las relaciones personales, el trabajo, la reputación, e incluso la salud física. El paciente pierde el control sobre el alcohol y es incapaz de evitarlo o moderar su consumo.

El consumo excesivo y prolongado de esta sustancia va obligando al organismo a requerir cantidades crecientes para sentir los mismos efectos, a esto se le llama "tolerancia aumentada" y desencadena un mecanismo adaptativo del cuerpo hasta que llega a un límite, en el que se invierte la supuesta resistencia y entonces "asimila menos", por eso tolerar más alcohol, es en sí un riesgo de alcoholización.

Hay que informar y formar sobre los graves efectos nocivos específicos en grupos concretos de población:

  • niños, adolescentes y ancianos

  • mujeres(durante el embarazo y la lactancia)

  • personas con profesiones de riesgo, por el uso de armas, máquinas, automóviles, tareas de precisión, etc.

  • personas con trastornos de la personalidad con antecedentes o en situaciones proclives a las conductas dependientes, impulsivas, agresivas, antisociales, etc.

  • enfermos con patologías crónicas orgánicas o psiquiátricas.

Los componentes "personales" y "ambientales" son los otros factores coadyuvantes, no absolutamente necesarios, pero muy importantes, y se explican a continuación:

La persona (factores internos):

a) Biológicos

La metabolización del alcohol tiene lugar en el hígado. La energía que proporciona esta reacción es asimilada por el organismo siempre y cuando no supere un nivel máximo de 700 calorías. Cuando el volumen de bebida alcohólica supera este coeficiente entran en funcionamiento otros mecanismos fisiológicos que dan comienzo al progresivo deterioro del organismo. Los efectos nocivos que originan el alcoholismo son tanto de carácter orgánico como psíquicos.

b) Psicológicos:

Se recurre a la ingesta de alcohol para disminuir la angustia generada por los conflictos emocionales propios del desarrollo y de las vivencias biográficas. En definitiva, el alcohol se transforma en la única fuente de gratificación.

Muchos estudios han puesto de relieve que se bebe para eliminar la conciencia de fracaso personal y para evitar los pensamientos de inferioridad, inseguridad e inacapacidad que puedan alterar peligrosamente la vivencia del presente, paralizando los proyectos futuros, las metas e ilusiones. En estos casos, el individuo se escuda en apoyos artificiales, como son las bebidas alcohólicas. También cabe destacar la existencia de dificultades para la comunicación, un aumento de la timidez, introversión, reserva, que conducen a no tomar compromisos afectivos o llegar incluso a rechazos sociales o agresiones en sus distintas formas.

c) Psicopatológicos

La principal alteración psico-patológicas producida por la excesiva ingestión de alcohol es la modificación del perfil psíquico del enfermo, que experimenta una manifiesta debilidad emocional previa a la aparición de estados depresivos o de ansiedad. Trastornos frecuentes son: alucinaciones, paranoias, tanstornos de ansiedad, del sueño, afectivos, disfunción sexual…

Culturales o ambientales (factores externos):

  • a) Nivel de los factores ambientales próximos a las vivencias precoces infantiles: unas se relacionan con el ambiente y las actitudes familiares y otras con las formas de vida en los distintos medios culturales y sociales.

El alcoholismo puede conducir a la familia a un proceso desorganizador, paralelo al deterioro que sufre el paciente a través de su enfermedad. Por este motivo, es frecuente que en estas familias aparezcan alteraciones de su dinámica y transtornos emocionales en sus miembros.

A lo largo del tiempo, se producen reiteradas y variadas situaciones conflictivas en la pareja. La vida familiar gira en torno al alcohol, los hijos se ven implicados en ellos y con posibles problemas futuros.

  • b) Nivel de los factores sociales de la comunidad: que actúan como incitadores culturales a cualquier edad. Algunos ejemplos son: la facilidad con la que se recurre al alcohol en cualquier momento y en cualquier lugar; la proximidad, la gran producción, la fácil disponibilidad y el bajo precio de las bebidas alcohólicas; el peso de los elementos simbólicos que se unen al alcohol como pueden ser el de amistad, de negociación, de solidaridad, de purificación…;la tolerancia social; y por último de forma más indirecta, los elementos derivados de la vida en una sociedad tecnificada y sus consecuencias de desfase, desesperanza y soledad.

Clases de bebedores

Abstemio absoluto: Presenta una conducta de rechazo y aversión natural al alcohol, la cual puede tener origen congénito en el metabolismo, ser por conductas culturales, venir dado por enfermedades adquiridas que producen aversión o intolerancia a la sustancia o por situaciones y vivencias pasadas muy perturbadoras en lo personal.

Bebedor Moderado: Ingestión habitual de diversas bebidas alcohólicas inferior a los 3/4 litros por día. Es el denominado bebedor social y presenta una gama de conductas variables en función de la habitualidad de consumo, la OMS lo define como un "bebedor seguro" ya que mantiene su libertad con relación al consumo de alcohol frente a aquel otro que la pierde.

**Otra denominación es Fase pre-alcohólica: se inicia por motivación social. Su propia naturaleza hace que el comportamiento del bebedor no resulte llamativo para el espectador ni plantee problemas en ninguna esfera social

Bebedor Habitual: Toda su vida social se centra en el alcohol. No consumen por gusto, sino porque le aporta una sensación aparente de seguridad, valor o placer. Al comienzo, la ingesta es circunstancial, y puede dejar de beber. Con el tiempo, se establece el hábito. Pueden, en esta etapa, mantener su estabilidad socio-familiar y económica y su autoestima, pero reconociendo que por el camino que van pueden llegar a pérdidas importantes de todo tipo.

**Otra denominación es Fase prodrómica: el consumo adquiere carácter de necesidad y el bebedor empieza a tomar consciencia de ello, ocasiona efectos leves pero ya constantes.

Bebedor Excesivo: Presenta más de una embriaguez por mes. Tiene una pérdida de libertad, de la capacidad de control que le conducen a una situación de abstinencia y subordinación a la clínica psiquiátrica de base.

Este bebedor muestra conductas de huida o evitación, conductas de desinhibición o de estimulo, conductas anti-dolor o anti-enfermedad. Su forma de consumo se vuelve irregular y se considera que el sujeto tiene como objetivo la evasión de una realidad insoportable y la creación de un mundo nuevo

**Otra clasificación es Fase crucial: se pierde el conocimiento de que se ha instaurado la dependencia.

Alcohólico: Se caracteriza por depender del alcohol, tanto física como psíquicamente, y la incapacidad de detenerse o abstenerse.

Es la expresión patoplástica final de un consumo crónico de alcohol, siendo indiferente la vertiente inicial que condujo al mismo. Los fenómenos de tolerancia y el síndrome de abstinencia están presentes de manera característica. No es necesaria la existencia de intoxicaciones agudas o embriagueces entre los antecedentes biográficos de estos pacientes para el diagnóstico. **Otra clasificación es Fase crónica: el consumo de etanol empieza a ser constante y con una práctica diaria.

Alcoholico tipo 1: Fuerte influencia del medio y del entorno, no influyen los factores genéticos y el inicio de los problemas relacionados con el consumo es más tardío. En ellos se encuentra una mayor dependencia psicológica, con el fenómeno de pérdida del control de la ingesta y una gran vivencia de culpabilidad. En su personalidad hay más rasgos pasivo-dependientes.

Conducta de espera sin interés en lo novedoso, exhiben conductas de evitación de peligro o daño, preocupación por la opinión de los demás y necesidad y sentimientos de reconocimientos y recompensas

Alcoholico tipo 2: Mayor influencia de los comportamientos alcoholémonos y antisociales de los padres y familiares próximos. Se sostiene la existencia de factores genéticos. Tienen más dificultad para lograr una abstinencia completa y son más frecuentes e importantes sus conductas agresivas.

ESCALA DE JELLINEK PARA LA VALORACIÓN DEL ALCOHÓLICO

Los tipos de bebedores se diferencian en la motivación de beber, la intesidad del consumo, el patrón de ingesta y las manifestaciones clínicas o psicosociales.

ALFA. Dependencia exclusivamente psicológica del alcohol en la que se someten a tratamiento los síntomas emocionales. (bebedor ante situaciones de estrés) Existencia de complicaciones (gastritis, cirrosis) aunque no se registre dependencia física ni psíquica.

BETA. Bebedor episódico o dipsómano.

GAMMA. Dependencia física y psíquica, pérdida de la capacidad de beber con moderación y pérdida del control. (bebedor excesivo irregular, con problemas psicológicos subyacentes, con rápida progresión al alcoholismo)

DELTA. Dependencia física e incapacidad para abstenerse de beber. (bebedor excesivo regular social, con lenta progresión al alcoholismo)

ÉPSILON. Alcoholismo periódico (dipsomanía), con las mismas características que la categoría gamma, pero con largos periodos de abstinencia (bebedor episódico o dipsómano)

Intoxicación por alcohol y drogas en la adolescencia

La ingesta de alcohol, independiente de los aspectos legislativos, comienzan en forma regular entre los 14 y 17 años y es en este período cuando, generalmente, el medio social tolera mejor un comportamiento excesivo del sujeto con respecto al alcohol ocurrido en forma esporádica. La mayoría de los trabajos que han estudiado la adquisición de la conducta de ingesta de alcohol se han centrado en el papel fundamental de los dos agentes socializantes básicos: La familia y el grupo de iguales.

La adolescencia es la etapa de la vida que supone el paso de la niñez a la edad adulta, durante la cual el individuo tiene que superar una serie de retos, a saber:

1. Lograr su propia identidad.

2. Aceptar la pérdida del cuerpo infantil y asumir su sexualidad.

3. Conseguir la independencia parental.

4. Elegir un estilo de vida, en cuanto a estudios, trabajo,…

Todo esto convierte al adolescente en una persona difícil, muy sensible, irritable,

encerrado en sí mismo, inseguro y en eterno conflicto consigo mismo y con los demás, poco accesible a padres, profesores y médicos, siendo por el contrario muy influenciable por amigos y compañeros.

Por tanto, el adolescente se encuentra en esta etapa rodeado de una serie de personas y circunstancias que le puede llevar a consumir drogas por motivos muy diversos: Curiosidad, descubrir nuevas sensaciones, para vencer la timidez o sentirse más sociable o desinhibido, por la presión de amigos o compañeros, para ser aceptado en un grupo, para vencer una situación desagradable o estresante, por la baja autoestima, necesidad de sentirse como un adulto, como desafío a la autoridad o independencia parental, para combatir el aburrimiento o facilitar una relación sexual.

Todas estas causas y algunas más pueden llevar al adolescente a consumir drogas, tanto legales como el alcohol y el tabaco, como ilegales, sobre todo cuando se dan las circunstancias propicias (fiestas, discotecas…)

Etapas del consumo de drogas

El contacto del adolescente con las drogas conlleva varios pasos desde el consumo experimental progresando hasta el último, que es el adictivo. Los pasos son los siguientes:

1. Consumo experimental ("lo pruebo") Se trata de un consumo casual y no se vuelve a consumir. Lo hacen por moda, curiosidad. Los que evolucionan al paso siguiente son los menos y lo hacen lentamente.

2. Consumo ocasional ("me divierte") El consumo es esporádico, en alguna fiesta. El paso a la siguiente etapa es acelerado.

3. Consumo circunstancial ("repito") En este nivel se accede a la droga siempre que las circunstancias son favorables (fiestas, fines de semana).

Aún no hay tolerancia pero se inicia la dependencia psicológica. El consumo es básicamente en grupo. El siguiente paso es rápido.

4. Consumo habitual ("repito a menudo") Se usa la droga en forma frecuente

y entre semana. Se consume en grupo y empieza a consumirse en solitario.

Aparece la tolerancia y se desarrolla la dependencia psicológica. El paso siguiente es muy rápido.

5. Consumo adictivo ("no sé parar") Se droga con frecuencia diaria o muy alta, en grupo y en solitario. Se inician actividades de compra, venta (tráfico) así como cultivo propio en algunos casos. Se desarrolla tolerancia y dependencia.

La situación en España

España es el sexto país mundial en consumo de alcohol per capita. Cada español consume por término medio 10 litros de alcohol al año. Esta población consumidora está comprendida entre 15 y 64 años de edad, siendo el 70% de la población la que consume alcohol con regularidad.

En la última década, se ha producido una tendencia a un consumo mayor de cerveza y destilados en detrimento del consumo de vino.

Pero más preocupante que el tipo de bebida consumida es que la población empieza a beber a edades cada vez más tempranas y que el porcentaje de mujeres que beben alcohol también ha aumentado. Al igual han aumentado el número de ancianos que beben a pesar de ser especialmente sensibles a los efectos nocivos del abuso del alcohol.

En el ámbito social el alcohol es responsable de casi la mitad de los accidentes de tráfico y de muchos otros hechos violentos, como homicidios, suicidios, incendios, accidentes laborales o domésticos. Pero además la relación entre abuso de alcohol y enfermedad lo convierte en la tercera causa de muerte en España.

El consumo de alcohol durante el embarazo es la causa no genética más frecuente de retraso mental y de malformaciones congénitas, porque alcohol que ingiere la madre embarazada atraviesa con gran facilidad la membrana placentaria y pasa al hijo en gestación.

Perfil psicosocial actual del(a) consumidor(a) español(a)

Podemos simplificar en cuatro los perfiles más frecuentes que se dan en la actualidad en nuestro medio; dando por admitido que se tratan de estereotipos y que por tanto, ni abarca absolutamente a todo el colectivo a que se refiere, ni ello impide que el perfil descrito aparezca en personas pertenecientes a otros grupos.

Estos perfiles son:

  • El varón trabajador manual (trabajador de mono azul): este tipo se caracteriza por una forma de consumo excesivo regular. Esta persona ingiere más del triple de alcohol del umbral admitido como "seguro". Además, es característico que sus familiares no tengan conciencia de su elevado consumo de alcohol.

  • El varón adolescente (estudiante): le caracteriza la forma de consumo intenso y recurrente de fin de semana. Esta pauta de consumo juvenil condiciona de manera muy importante la formación académica, los futuros estilos de vida y las posibilidades laborales.

  • La mujer ama de casa: su incremento de alcohol se hace en relación con acontecimientos o crisis vitales concretas, que se ve incapaz de superar. Suele presentarse una forma de consumo excesivo regular de forma excesivo irregular.

  • La mujer trabajadora administrativa/ejecutiva: suele presentarse una forma de consumo excesivo regular, que puede intercalarse con periodos de consumo excesivo regular.

Se presenta una ingesta similar al consumo del varón que realiza una actividad laboral homóloga. Sus consumos elevados no se relacionan directamente con circunstancias o crisis personales, sino que, más bien, se consideran un símbolo de status y de estilo de vida. Su estado de salud así como su estado sociolaboral, se deterioran muy pronto.

Alcoholismo y criminalidad

El alcoholismo puede llevar a actuaciones delictivas contempladas en el Código Penal. Se observa que la importancia de los actos apenas se menciona en los tratados habituales de psiquiatría. Estos datos chocan necesariamente con la habitual creencia de que son las toxicomanías por las drogas ilegales las mayores productoras de delitos y de que el alcohólico, al menos en sus primeras fases, es una persona bien adaptada socialmente. Quizás ello refleje que no se ha evaluado adecuadamente la importancia del alcohol como factor delictógeno.

POSIBILIDAD DEL ALCOHOL DE ALTERAR LA CONDUCTA

Existen la patología de conducta agresiva, y es la patología psiquiátrica no alcohólica a la que se asocia el consumo de alcohol. El abuso de sustancias etílicas en los cuadros de manía y la no infrecuente asociación de esquizofrenia y alcoholismo. Si a esto añadimos que los individuos con trastorno de la personalidad suelen abusar del alcohol y que, de la misma manera, el fenómeno de la politoxicomanía incluye sustancias con contenido de etano, se deduce que las posibilidades de entrar en conflicto con la ley son lo bastante importantes como para dedicar un estudio pormenorizado.

Además de los problemas médicos, las alteraciones de la conducta tendrían que formar parte de cualquier campaña preventiva. Aparte de los accidentes de tráfico, problemas familiares, laborales e intentos de suicidio, existiría una violencia específica del alcoholismo en forma de agresividad contra la esposa o pareja y el síndrome del niño golpeado.

Delitos contra las personas, muchos alcohólicos crónicos son vagabundos que cometen robos para poder subsistir o simplemente seguir bebiendo.

Lucha antialcohólica

La lucha antialcohólica consiste principalmente en educar al pueblo contra el abuso en la consumición de bebidas alcohólicas. Esta tarea se realiza mediante afiches, folletos, conferencias y clases alusivas en la escuela. La aplicación de impuestos, la limitación de la producción y la prohibición de despachar este tipo de bebida a los menores de edad son medios indirectos que tratan de reducir el consumo. Las curas de desintoxicación alcohólica que se realizan en nuestro país se basan en un tratamiento médico social, del que se obtienen buenos resultados siempre que el alcohólico desee curar su toxicomanía. De esta manera, se rescatan individuos y se devuelven a la sociedad a la familia personas aptas para vivir en ellas.

Algunas de las medidas actuales que se toman en la lucha contra el alcoholismo son:

EL ALCOTEST. Una defensa en las vías. El alcohol es responsable de muchos accidentes de tráfico. Como una manera de prevención, se ha ideado el Alcotest, que es una prueba que sirve para determinar si un conductor ha bebido alcohol y está o no en condiciones de conducir. Básicamente consiste en hacer soplar una bolsa que contiene un compuesto químico reactivo. En contacto con el aliento, el reactivo cambia de color según la concentración alcohólica. El alcotest constituye una defensa contra la imprudencia de muchos conductores de vehículos y ha probado su eficacia positivamente.

TRATAMIENTO. El principal propósito del tratamiento antialcohólico es el de enseñarle a los enfermos a enfrentar y solucionar sus problemas sin recurrir al alcohol. En procura de ese objetivo tiene mucha importancia el abordaje de los problemas a nivel de grupos de alcohólicos de ayuda mutua continua, de los que existen varios en nuestro país y donde personas que han pasado experiencias similares orientan y capacitan a enfermos en asistencia. Una de esas organizaciones es la de Alcohólicos Anónimos (A.A.) que funciona a través de unos 18.000 grupos diseminados en más de 100 países.

INFLUENCIA DE LOS MEDIOS SOCIALES. El uso de los medios masivos de comunicación social es determinante para la adquisición de diferentes productos nocivos para la salud, relacionando los productos con personajes televisivos, que reflejan una realidad imaginaria idealizada al televidente.

Consejos para mantenerse sobrio

•  Bebe lentamente (un trago por hora para hombres y hora y media para mujeres) •  Deja pasar el mayor tiempo posible entre trago y trago. •  Inicia un consumo con bebidas sin alcohol. •  Consume agua o alguna bebida sin alcohol entre cada copa. •  No bebas más de cuatro copas por ocasión. •  Consume alimentos antes y durante el consumo. •  Deja de consumir bebidas con alcohol una hora antes de salir del lugar en el que te encuentras. •  Durante tu consumo no combines bebidas fermentadas y destiladas. •  Compra tus bebidas en lugares establecidos y si estas en un antro o bar, asegurate que lo que te sirvan no esté adulterado. •  Si te sientes triste, deprimido o muy cansado evita consumir alcohol; el estado anímico y emocional provocan que se absorba más rápidamente el alcohol.

Mitos e injurias sobre el alcohol

Aunque inicial y fundamentalmente nos referimos a tópicos que circulan entre el público en general, no es excepcional que también sean invocados en ambientes sanitarios, lo que obliga a una aclaración y corrección rigurosa:

  • La primera idea, que es necesaria señalar de manera taxativa, es que el alcohol no es beneficioso para la salud. Puede producir un efecto placentero y no ser nocivo en personas sanas con un consumo moderado, pero no obstante su potencial tóxico resulta incuestionable.

  • La segunda idea a aclarar es que no posee un efecto terapéutico. Tiene la posibilidad de crear dependencia en muchas personas con consecuencias negativas orgánicas, psíquicas y sociales

  • Con respecto a la alimentación, el alcohol no es un alimento necesario ni conveniente, ni debe utilizarse como reforzador de la dieta porque no aporta energía aprovechable por el organismo. Dificulta la combustión de la glucosa, altera el metabolismo de los hidratos de carbono aumentando la producción de grasas y altera la absorción de nutrientes en el aparato digestivo. No altera el apetito ni aumenta el número ni la calidad de hemoglobina además de ni favorecer a la producción de leche materna

  • Otro punto a tener en cuenta, es que es un vasodilatador, que produce perdida de calor y aumenta la susceptibilidad a las enfermedades por exposición al frío.

  • El alcohol también reanima y estimula los reflejos, pero solo en muy pequeñas dosis y ante circunstancias adversas muy concretas y controlables se manifiesta como ansiolítico o tónico. Su autentico efecto es depresor del SNC, pudiendo llegar a producir sedación y anestesia. Por ello, no combate la depresión, sino que la agrava, perturba la coordinación…

  • Un dato importantísimo, sobre todo en pacientes es que su consumo con fármacos potencia sus efectos nocivos.

  • No mejora la respuesta sexual, lo parece por la desinhibición conductual que produce llegando hasta la imprevisividad por su efecto tóxico sobre el cerebro.

  • No es bueno ni para la circulación, ni el corazón. Pero un consumo moderado puede ejercer un efecto cardio-protector

Bibliografía

Libros:

  • 1 Valbuena Briones Agustín. Manual de Toxicomanías y alcoholismo. Problemas médicos y psiquiátricos. 2 ª ed. Barcelona: Masson- Saolvat; 1993

  • 2 Draper Miralles. Yo me drogo, tú te drogas, el se droga. Plaza & Janes ed. Barcelona. 1986. pag. 173

  • 3 "chemical industrial". f.a. lowenheim, m.k. moran. Editorial wiley-interscience. New york, 4 edicion, 1975. pag: 355-364.

  • 4 Lizasoain Hernández, Ignacio; Leza, Juan Carlos; Ladero, José María; Lorenzo Fernández, Pedro. Drogodependencias, Farmacología. Patología. Psicología. Legislación. Farmacología del alcohol. Intoxicación aguda. Editorial Médica Panamericana S.A. 3ª edición (2009). Cap:25

  • 5 Lizasoain Hernández, Ignacio; Leza, Juan Carlos; Ladero, José María; Lorenzo Fernández, Pedro. Drogodependencias, Farmacología. Patología. Psicología. Legislación. Fundamentos biopsicosociales del alcoholismo. Complicaciones psiquiátricas del abuso del alcohol. Editorial Médica Panamericana S.A. 3ª edición (2009). Cap: 28

Online:

  • 1 Kidshealth.org. Dorgas en España. [ acceso 1 noviembre, actualización abril de 2009] Revisado por: Steven Dowshen, MD. Disponible en:http://kidshealth.org/teen/en_espanol/drogas/alcohol_esp.html#

  • Google .com. Metodos de desintixicación [ acceso 1 noviembre] Disponible en:

  • 3 http://metodos.info/metodos-mas-empleados/adiccion-al-alcohol/

  • 4 Alcohólicos anónimos.com. Adicciones[ acceso 1 noviembre ] Disponible en: http://www.adiccion-alcohol.com/

  • 5 Google.com. Trastornos sociales producidos por el alcohol [acceso 1 noviembre] Disponible en: http://www.alcoholofilia.org/

  • 6 Wikipedia.com. Tipos de alcohol [acceso 1 noviembre] Disponible en: http://www.alfinal.com/monografias/alcoholismo.php

  • 7 Google.com. Tipos de alcohólicos [acceso 1 nov, actualizado el 16/06/2009] Disponible en:http://www.alcoholismo.info/alcohol.htm

Artículos:

El alcohol en el siglo XXI. Alberto Pastor Esteban.Localización: Investigación y marketing, ISSN 1131-6144, Nº. 96, 2007 , pags. 27-29

Otro material:

Apuntes facilitados por la profesora docente

Apuntes sobre alcoholismo. Radio Nederland Wereldamroep. Rosario Cutillas: 22-06-2003.

 

Enviado por:

Ing.+Lic. Yunior Andrés Castillo S.

"NO A LA CULTURA DEL SECRETO, SI A LA LIBERTAD DE INFORMACION"®

www.monografias.com/usuario/perfiles/ing_lic_yunior_andra_s_castillo_s/monografias

Santiago de los Caballeros,

República Dominicana,

2015.

"DIOS, JUAN PABLO DUARTE Y JUAN BOSCH – POR SIEMPRE"®

Partes: 1, 2
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