Los piratas que a veces se detenían en Corn Island en el siglo diecisiete, no sólo obligaban a los indios a que le suministraran alimentos sino que los capturaban para llevárselos como esclavos. En 1768, solo quedaban unos 50 indios en tierra firme. La población de Corn Island fue totalmente exterminada. En cuanto a los indios Kukra de las cercanías de Bluefields fueron perseguidos por los Mískitu quienes, cuando lograban capturarlos, los vendían a los ingleses. En la primera mitad del siglo diecinueve, los Kukra se extinguieron por completo. El único recuerdo que de ellos queda es el nombre de un promontorio: Kubra Hill.
Los Rama que vivían a orillas del Río Punta Gorda se dispersaron en la primera mitad del siglo dieciocho debido a la actitud de los ingleses hacia ellos, pues los tomaban como esclavos, práctica que todavía duraba en 1790. En 1774 el río había sido totalmente a abandonado, estableciéndose la mayoría de estos indios a orillas del Río Indio, debido al miedo que le tenían a John Potts, inglés residente en Bluefields, y a la viruela que se había desatado entre algunos de ellos.
En el siglo dieciocho, el conflicto por la Moskitia se había desarrollado entre Inglaterra y España. A partir de 1821 fue entre aquélla y Centroamérica. De 1838 en adelante fue entre Nicaragua e Inglaterra.
En 1796 estalló la guerra entre España e Inglaterra. En 1808, las tropas del emperador francés Napoleón Bonaparte entraron en España y depusieron al rey español. Se produjo, entonces, un desorden a favor de la independencia. En 1825, España había perdido todas sus colonias en el continente americano. Con ello, la región del Atlántico entraba en un nuevo campo de conflicto.
Centroamérica e Inglaterra, 1821-1844
El 15 de Septiembre de 1821, se declaró la independencia de Centroamérica de su antigua metrópoli, España. Dos años después, en 1823, se formó la República Federal de Centroamérica, integrada por Guatemala, El Salvador, Honduras, Nicaragua y Costa Rica. Al año siguiente, Inglaterra envió a un representante diplomático con el fin de observar la evolución de los acontecimientos. Poco después, un Banco inglés hizo un préstamo a la nueva república centroamericana. Esta deuda fue utilizada posteriormente por Inglaterra, para conseguir la realización de sus deseos en Centroamérica. Por algún tiempo no se hizo alusión alguna al asunto del ahora llamado Reino Moskito. Inglaterra en efecto, podría dar como argumento que el reconocimiento de soberanía en la región del Atlántico se había hecho a España en 1787 y no a la República Federal Centroamericana que en ese entonces no existía.
Cabe señalar asimismo, de 1834 a 1838, la actitud intervencionista del cónsul inglés Frederick Chatfield, quien impidió cualquier reclamo de Centroamérica en el Atlántico. Al llegar el año 1838, el Reino Mískitu seguía independiente de Centroamérica.
Nicaragua e Inglaterra, 1838- 1844
En Abril de 1838, Nicaragua se separó de la Federación Centroamericana. El país, en realidad, había vivido en luchas políticas y sociales desde 1821. Ningún político y hombre de estado de Nicaragua hizo alusión alguna vez al asunto vez al asunto del Reino Mosquito entre 1821 y 1838. Había sin embargo, una región al este del país, que había estado ligado a la historia Nicaragüense, desde 1539 y que iba a poner en conflicto al nuevo Estado nicaragüense, con el rey Mískitu: el Río San Juan.
Desde el siglo dieciséis se pensó en establecer una comunicación interoceánica a través de Nicaragua utilizando el río San Juan. A principios del siglo diecisiete había un activo comercio, entre Granada y Portobelo, que usaba como vía de comunicación el Gran Lago y el Río San Juan. A finales del siglo, los piratas pudieron remontar el río y llegar y saquear la isla de Ometepe y Granada. En el siglo dieciocho el río se utilizó muy raramente como vía comercial. Los españoles construyeron varias fortalezas desde 1604. De tal manera que el Río San Juan siempre había estado bajo dominio y control español.
El desarrollo del comercio europeo en el siglo diecinueve, a raíz de la revolución industrial inglesa, atrajo de nuevo la atención por el Río San Juan como posible ruta comercial.
En 1837 fue nombrado superintendente de Belice Alexander MacDonald. Deseando extender los cortes de caoba en la Moskitia Hondureña, dió su apoyo al rey Mískitu coronado en Belice en 1825. En 1840, el Estado de Nicaragua envió un comandante a establecerse en el puerto de San Juan del Norte, ubicado en la desembocadura del Río San Juan. Al año siguiente Mac Donald, acompañado del rey se presentó al puerto reclamando al gobierno nicaragüense la usurpación del territorio del rey. El comandante nicaragüense fue arrestado y hecho prisionero por Mac Donald. Las banderas inglesas y Mískitu fueron izadas en el puerto. Nicaragua protestó contra ante el gobierno inglés. Era el principio de un largo y complejo conflicto entre Nicaragua e Inglaterra.
La costa de Mosquitos y el Reino Mosquito de 1787 a 1844.
En el siglo dieciocho, los ingleses se referían a la Mosquito Shore, o Costa de Mosquitos, como el territorio cuyos límites eran al norte Cabo Camarón, en Honduras, y al sur Río San Juan, en Nicaragua, al este el mar; y al oeste un territorio indefinido. Los Mískitu, que agrupaban a indios "puros" y a indios mezclados con africanos habían logrado establecer su hegemonía sobre los otros indios, gracias al apoyo de los ingleses, a través de un general entre el Cabo Camarón y el Cabo Gracias a Dios; de un rey entre este último sitio y Sandy Bay, de un gobernador entre Sandy Bay y la desembocadura del Río Grande de Matagalpa. Al irse los ingleses en 1787, la región entró en una serie de luchas que sólo terminaron a finales del siglo.
La nueva Monarquía Mískitu, 1816 – 1844
En enero de 1816 fue coronado en Belice el joven rey Jorge Federico I. El hecho de haber sido coronado rey en Belice es muy significativo. En el siglo dieciocho, los dignatarios Mískitu recibía la aprobación de sus cargos en Jamaica. La influencia ahora iba a ser la de los comerciantes beliceños y no la de los gobernadores y comerciantes jamaiquinos.
Durante su reinado, que duró hasta 1824, año en que fue asesinado, la antigua Costa de Moskitos, ahora rebautizadas por los ingleses como Reino Mosquito, llamó la atención de varios especuladores de tierras, entre los cuales el más conocido era Gregor Mc. Gregor.
En 1823, el rey vendió al general inglés Mc Gregor una inmensa extensión territorial en la Mosquitia hondureña. Dos grandes barcos llegaron a las cercanías del Río Tinto, cargados de colonos. Mc. Gregor se proclamó rey del nuevo territorio. La empresa, sin embargo, fracasó. El corto reinado de Mc Gregor no tuvo consecuencias en la Mosquitia.
En Abril de 1825 fue coronado en Belice un nuevo rey miskito de nombre Roberto Carlos Federico, hermano del rey anterior. Reinó hasta 1842, fue bajo su reinado que prácticamente toda la Costa Atlántica fue cedida a especuladores extranjeros.
En enero de 1839 vendió a los hermanos Samuel y Peter Sheperd y a Stanislaus Thomas Haly, ricos comerciantes jamaiquinos, el territorio comprendido entre el Río Escondido y el Río Grande de Matagalpa, así como el distrito comprendido entre el Río San Juan en Nicaragua, hasta King Buppan en Panamá. Como pago, el rey recibió la condonacion de las deudas contraídas por el rey y sus súbditos con estos comerciantes.
Las extravagantes concesiones del rey preocuparon a sus consejeros ingleses que no se beneficiaban con las ventas. El rey comenzó a viajar con frecuencia a Belice, en donde redactó su testamento, en 1840, nombrando como regente, en caso de muerte, al superintendente de Belice, Alexander Mac Donald, a quien encargaba la educación de sus hijos.
Por su parte, los comerciantes de Jamaica y Belice vendieron los títulos de las tierras que habían obtenido del rey. Preocupado en 1840 Mac Donald porque algunos de estos títulos estaban ahora en manos de gente que no eran ingleses, obligó al rey a anular todas las concesiones de tierras hechas anteriormente, tanto por el como por su antecesor.
En 1841, el rey emprendió un viaje por sus dominios acompañado por Mac Donald. Al pasar por Corn Island, el 27 de agosto de 1841, decretó la abolición de la esclavitud en su reino. Era el fin de un sistema introducido en esta zona por los piratas desde el siglo diecisiete y que había sido desastroso para muchísimos indios de la región, aunque, si bien es cierto, en 1841 sólo había esclavos de ascendencia africana en Corn Island y Bluefieds.
A la muerte de Roberto Carlos Federico se estableció, de nuevo, la regencia. Quedaba como regente el coronel Mac Donald, superintendente de Belice. Está claro que de 1800 a 1844, la monarquía Mískitu estuvo de hecho en manos de los ingleses. A partir de 1844, la monarquía tomaría un nuevo aspecto, el de Protectorado inglés.
La capital de la Reserva era Bluefields. El gobierno estaba precedido por un jefe hereditario y no por un rey. En 1861 se reunieron 51 representantes, a veces llamados wihta, a veces headman, para aprobar una nueva constitución, a propuesta del cónsul inglés.
La mayoría de ellos, al menos 32, eran Creole de Bluefields, Corn Island y Laguna de Perlas. De las aldeas al norte del Río Grande de Matagalpa, donde se hallaba la mayor parte de la población india, sólo habían 11 representantes. La Asamblea dominada por los Creole contó con 43 para que formaran el Consejo General, de los que 33 eran Creoles de Bluefields, Corn Island y Laguna de Perlas. Sólo quedaron ahora tres miembros del norte del Rio Grande. Es decir que el poder estaba en manos de los Creole de Bluefields.
LA IGLESIA MORAVA
En 1847 la dirección central de la Iglesia Morava envió a dos misioneros para que realizaran un estudio preliminar sobre las condiciones que el área ofrecía para el inicio de la evangelización de sus habitantes. Es importante señalar que los misioneros portaban una carta de presentación firmada por un miembro del Ministerio de Relaciones Exteriores de Gran Bretaña, lo que de hecho nos lleva a establecer desde un inicio la existencia de lazos positivos entre la iglesia morava y la administración británica local.
Como resultado del informe de esos misioneros, el Sínodo General de 1848 aprobó la instalación de la misión morava en la región, iniciativa que contó con el apoyo de la administración británica ya que el reconocimiento que el Acta del Parlamento Británico hacía de ésta en cuanto antigua iglesia episcopal le permitía trabajar libremente tanto en Gran Bretaña como en sus colonias.
La iglesia morava inició su labor en la región del Atlántico de Nicaragua respondiendo a las necesidades de modernización de la administración británica por medio de una práctica que fuese a la vez civilizadora y evangelizante. Y en ese contexto llegaron los primeros misioneros en 1849. Estos comenzaron su labor entre la población de origen Creole (afroamericana) de la zona de Bluefields.
Al comienzo no se buscaba un aumento rápido de los miembros de la congregación, sino que se trataba de educar a la población local en los lineamientos morales del protestantismo. Se pretendía que éstos adoptaran una ética protestante que fuera conductora de todos los órdenes de la vida cotidiana. Por este motivo, los misioneros dedicaron mucho tiempo a realizar visitas domiciliares con el fin de convencer a quienes querían bautizarse de la necesidad de adquirir una moral estricta. Esto era requisito previo para todos aquellos que estuviesen interesados en casarse o bautizarse.
El trabajo moravo entre los Mískitu fue dificultoso en su inicio, la membresía de la iglesia había ido aumentando muy lentamente registrándose solamente un crecimiento anual del 5% hasta 1880. En ese momento el proceso se invirtió y entre los años 1881 y 1883 el incremento de la feligresía supera el 100% anual. Este cambio se debió al movimiento que se conoce como Great Awakening (el "Gran despertar") y que tuvo, al parecer, mayor importancia numérica entre los miskitos, a juzgar por los informes de los propios misioneros.
Este avivamiento religioso se inició entre los Creol de Laguna de Perlas y Bluefields para extenderse luego a las zonas indígenas de Kuamwatla, Karatá, Wounta, Haulover, Yulu, Sandy Bay, Tuapi, Dakura y Wawa (Wilson 1975, 145).
Los síntomas que presentaban las personas durante este movimiento revitalizador eran estados extáticos y convulsiones, al mismo tiempo que visiones, en medio de las cuales confesaban sus pecados. Cuando una persona de una comunidad sufría este tipo de trance, rápidamente se extendía a todos los demás miembros de la aldea, inclusive a los niños. Así que comunidades enteras pedían que los misioneros llegaran a visitarlas, pues querían integrarse a la misión.
Conflicto entre la Reserva y Nicaragua
El tratado de Managua de 1860 indicaba claramente el retiro de la presencia gubernamental inglesa en la Costa. El conflicto entre Inglaterra y Estados Unidos por esta región había sido zanjado por el Tratado Clayton-Bulwer. El conflicto entre Inglaterra y Nicaragua por la Costa había terminado con el Tratado de Managua. Un tercer conflicto surgía ahora entre las autoridades de la Reserva y las de Nicaragua, que sólo terminaría en 1894.
La reactivación económica
La producción de banano, los cortes de caoba y la minería del oro fueron actividades que estuvieron totalmente en manos extrañas a los habitantes de la Reserva. Cada una se desarrollo en una región especial de la misma.
En el sur, la llanura aluvial entre Bluefields y el Rama era favorable al desarrollo del cultivo del banano, que en los años ochentas comenzó a tener mercado en los Estados Unidos. Como los británicos antes, los norteamericanos consiguieron concesiones de tierras prácticamente gratuitas. Llegaron colonos procedentes de Nueva Orleans a establecer plantaciones de bananos a lo largo del Río Escondido. Con ellos vinieron comerciantes que se quedaron en Bluefields.
El primer envío de bananos tuvo lugar en 1883. Pronto se formó la "Mosquito Fruit Co." Un vapor hacia un viaje mensual desde el Río Escondido hasta Nueva Orleans. Con el desarrollo de las plantaciones fue necesario hacer dos viajes mensuales.
En 1885, la actividad bananera era tan lucrativa que otras compañías entraron en competencia, ofreciendo mejores precios a los productores. Comenzaron a llegar barcos bananeros procedentes de Baltimore, Filadelfia, Nueva York y Nueva Orleans a recoger el banano al Río Escondido. La " Bluefields Steamship Co." de Jacobo Wemberger, establecida en 1890, llegó a ser dominante en la producción y el transporte.
Toda la actividad bananera se hallaba en manos de ingleses y, sobre todo, norteamericanos. Entre los Creole cabe citar a Cuthbert y a J. O. Thomas, quienes tenían plantaciones.
En 1884, la compañía "John D. Emery "consiguió concesiones para cortar caoba en la Reserva, sobre el Río Grande de Matagalpa y el Río Wawa, entre 1860 y 1894 sólo se hicieron exploraciones en busca de oro. En Cuicuina, fuera de la Reserva, se había encontrado algún oro. En 1894, las únicas minas de oro dentro de la Reserva eran Tumba Hills, a orillas del Río Bambina y Prata Hills, a orillas del Río Wawa.
La Sociedad en Blufields
En 1860 vivían unos 12,000 indios en toda la Costa Caribe. La mitad de ellos Mískitu; la otra mitad Mayangna. Los Creole se hallaban establecidos en Bluefields, Laguna de Perlas y Corn Island. Hasta 1880, no eran mas de mil.
En la sociedad de la Reserva podemos distinguir:
-Indios
-Garifona
-Creole
-Blancos extranjeros
Durante el periodo de la Reserva, los Creole formaron un grupo social heterogéneo, por encima de los indios pero debajo de los blancos.
Su composición era la siguiente:
1. El núcleo original establecido en la región en la última década del siglo dieciocho, los unos descendientes de los esclavos de Robert Hodgson o de las relación es de uno de sus hijos con una mulata, según parece de Corn Island. Estos últimos se consideraban la aristocracia Creole. Rechazaban el apelativo de negro.
2. Un grupo de mulatos llegados en la primera mitad del siglo diecinueve, procedentes de Jamaica. Muy activos, muchos de ellos pasaron a engrosar el núcleo de la aristocracia local.
3. Mulatos llegados de las islas británicas del Caribe. La mayoría tenía pequeñas plantaciones y casas propias.
4. Otra oleada que llegó con motivo del cultivo del banano a partir de 1880. Se trataba de una población afro caribeña, sobre todo de las islas de Jamaica y del Gran Caimán. Se empleaban como sirvientes a como trabajadores en las plantaciones de bananos.
Bluefields era el centro de los Creole. En 1894 tenía unos 2,000 habitantes. La calle principal era King Street que salía del muelle y en la que se hallaba localizada la mayoría de los establecimientos comerciales. El resto de la ciudad se componía de casas distribuidas sin orden ni concierto.
Las casas eran de madera y construidas sobre zancos para evitar la humedad. Los residentes norteamericanos construían con madera y estilo de su país. En 1894 se publicaba el "Bluefields Messenger" y dos veces por semana salían barcos a Nueva Orleans; había hoteles, restaurantes y salones de baile.
La vida política estaba controlada por los Creole, a pesar de constituir solo el 10% de la población de la Reserva. Esto se observó, en particular, en el gobierno. El vicepresidente entre 1860 y 1874 fue Henry Patterson, de Laguna de Perlas. Le sucedió en el cargo su hijo Charles quien llegó a amasar una importante fortuna en el comercio del hule. El Procurador General y Secretario de Gobierno fue, de 1860 a 1894 a petición de los moravos, James Willy Cuthbert, carpintero inmigrado de Jamaica en 1854, se estableció en laguna de Perlas. Hizo que se nombrara a su hijo secretario de Gobierno. Importante, igualmente, llegó a ser John Oliver Thomas, originario, también, de Jamaica. Llegó a Bluefieds en 1859 para explorar los recursos naturales de la región. Fue miembro en los Consejos General y Ejecutivo. Se dedicó también a los cortes de madera en los que empleaba un gran número de trabajadores.
Los Creole sentían especial simpatía por el gobierno inglés y trataron de que los blancos participaran en el gobierno de la Reserva. Sin embargo. sólo los misioneros moravos participaron en el gobierno de la Reserva.
La llamada reincorporación de la Moskitia
Al firmarse el tratado de Managua de 1860, Nicaragua quedó dueña soberana de dos comarcas: la de San Juan Norte en el sur, y la de Cabo de Gracias a Dios en el norte. En la primera vivía muy poca gente y no la habitaban indios. En el norte, en cambio, además de vivir un gran número de indios, muchísimos extranjeros comenzaron a llegar en los años noventas atraídos por el oro. Por otra parte, la fundación de la población del Rama en el Río Escondido era la punta de lanza del avance nicaragüense hacia Bluefields. Finalmente, hay que añadir que las explotaciones madereras de la compañía "John E. Emery" en el Río Grande de Matagalpa realizaba sus cortes de madera sin tener en cuenta los límites de la Reserva. El gobierno de Nicaragua trataba de hacer sentir su presencia en particular en el norte.
La forzada reincorporación
El 11 de julio de 1893 entró triunfante a Managua el ejercito liberal jefeado por el general José Santos Zelaya. Era el fin de treinta años de gobierno conservador caracterizado por el predominio de la oligarquía granadina. Era el inicio de un régimen imbuido de las ideas progresistas del siglo diecinueve, que iba a transformar el Estado de Nicaragua.
El gobierno de la Revolución Liberal.
El general Zelaya era un liberal convencido. Además de ser instruido creía en la posibilidad de la unión Centroamericana. De carácter fuerte, no tuvo miedo enfrentarse ni a la oligarquía granadina, su principal detractora, ni a la iglesia, ni al gobierno inglés, ni al gobierno norteamericano, ni a sus mismos partidarios. El uso de la fuerza le parecía correcto si se hacía a favor de las ideas que él sustentaba.
Poco después de su ascenso al poder se produjo un conflicto con el gobierno conservador de Honduras, que degeneró en guerra abierta. Zelaya estaba dispuesto a ayudar a los liberales de este país a tomarse el poder. A finales de 1893 se produjeron incidentes militares en la zona de la Comarca del Cabo de Gracias a Dios y se decidió el envío de tropas de refuerzo que, embarcadas en el puerto de el Rama, debían de acantonarse en Bluefields. A la cabeza de las tropas iba el general Rigoberto Cabezas.
Ocupación militar de Bluefields.
A principios de enero de 1894, el gobierno nicaragüense envió un contingente militar a Bluefields jefeado por el general Rigoberto Cabezas. El jefe Clarence protestó contra esta presencia. El 11 de de febrero por la noche, las tropas del gobierno de Zelaya arriaron la bandera Mískitu e izaron la bandera nicaragüense, destituyeron al jefe y proclamaron el estado de sitio.
Los comerciantes norteamericanos, unos 500 en la Reserva, de los que cerca de 100 vivían en Bluefields se alarmaron ante la presencia militar del gobierno de Nicaragua. Temían no sólo por sus vidas sino que también por sus casas, negocios y plantaciones. Bajo el gobierno de la Reserva habían vivido tranquilos. De pronto encaraban la presencia gubernamental nicaragüense, lo que significaba que, bajo el estado de sitio impuesto, no se reconocían los arriendos, concesiones y contratos que habían conseguido anteriormente. El español quedaba establecido como lengua oficial en todas las transacciones.
Los Creole que habían estado controlando el gobierno de la Reserva eran los más opuestos a la intervención de Nicaragua. Era a ellos a quienes más los afectaba, pues significaba la pérdida de su poder político y de su supremacía social.
Por su parte, el ministro de Relaciones Exteriores de Estados Unidos escribía: "A nadie se engaña llamando a esta autoridad [de la Reserva] un gobierno de indios misquitos堮i Estado Unidos ni Gran Bretaña pueden en justicia sancionar o sostener este abuso de la soberanía de Nicaragua".
Levantamiento de los Creole en Bluefields.
A principios de julio se produjo un incidente entre los soldados nicaragüenses y algunos cornaileños. El cinco del mismo mes el juez Congrio, el recaudador Mallitz y el magistrado renunciaron a sus cargos en Bluefields. Otro tanto hicieron los miembros del Consejo Provisional, salvo uno de ellos. Esto significaba el desconocimiento de lo actuado por Rigoberto Cabezas en Bluefields, es decir, de la autoridad del gobierno nicaragüense.
A las nueve y media de la mañana del mismo día, la policía y la gente del lugar se aglomeraron frente al Palacio de Gobierno. Comenzó un fuerte tiroteo que duró dos horas y continúo en la noche. La bandera de Nicaragua fue rota y en su lugar se izó la bandera Míkitu. Todo parecía indicar que la acción de Zelaya había abortado.
Los comerciantes solicitaron al capitán Jeat, Cónsul norteamericano el desembarco de los marinos para que los protegiese pero no se hizo nada hasta en la mañana.
El seis, por la mañana, los comerciantes extranjeros se presentaron ante el Jefe Roberto Henry Clarence, pidiéndole que anulase la autoridad del antiguo consejo y que se eligiese un nuevo. Se procedió a una reunión para nombrarlo. Por la noche hubo disturbios en el Bluff en que resultaron muertos dos soldados, y otros ocho capturados, todos nicaragüenses. Las armas y las municiones fueron tomadas por los rebeldes. Mientras tanto llegó el barco norteamericano . Por la tarde del seis, 62 marinos desembarcaron en Bluefields.
El general Cabezas escribió el día siete al capitán del "Marblehead" ofreciendo entregar los archivos, libros y papeles del gobierno Miskitu que estaban en su poder, con tal de que su vida y la de sus oficiales fueran respetadas. Asimismo que las armas y los prisioneros se entregaran a un tercero. Cabezas se comprometía a abandonar Bluefields. El capitán reunió al jefe Míkitu, al consejo y a los cónsules ingles y norteamericano. La propuesta fue aceptada y Cabezas salió de Bluefields con sus tropas rumbo al Rama a las dos de la tarde. Todo parecía indicar que el antiguo gobierno de la Reserva estaba restaurado.
Caída definitiva del gobierno de la Reserva
El señor Thomas, líder Creole de la Reserva, de origen jamaiquino, escribiendo al cónsul americano en Bluefields,se expresaba en la forma siguiente: "Los nicaragüenses no sienten simpatía hacia los habitantes de la Reserva Mosquitia. Tienen envidia de la prosperidad de la Reserva. No hablamos la misma lengua, no tenemos la misma religión y nuestras leyes, maneras y costumbres no les agradan. Sus modos de vida y de gobierno nos son odiosos…" Por su parte, el ministro de Relaciones Exteriores de Nicaragua expresaba claramente que el gobierno de Zelaya estaba dispuesto a ejercer el control sobre la Mosquitia "comprendo perfectamente que los extranjeros y en particular los jamaiquinos tengan más simpatía hacia el antiguo régimen. Sería absurdo suponer otra cosa. La Reserva ha estado incondicionalmente bajo su control y por lo tanto la intervención de una autoridad que observa y corrige irregularidades no les agrada".
En el conflicto que se había desatado desde febrero aparecían como actores decisivos los gobiernos de Estados Unidos, Gran Bretaña y Nicaragua. El gobierno nicaragüense contaba con el apoyo del gobierno norteamericano aunque conocía que los comerciantes norteamericanos de la Reserva le adversaban. El gobierno de la Reserva, por su parte, contaba con que Gran Bretaña le apoyaría. Fue un mal cálculo. A lo largo del siglo diecinueve, el gobierno británico había dado muestras de querer distanciarse de los asuntos de la Mosquitia. Ahora iba a hacerlo en forma casi definitiva.
En agosto 1894 entraron de nuevo las tropas nicaragüenses a Bluefields, asumiendo el control de la situación. El barco ingles "Mohawk" en la playa dió asilo al jefe Clarence y a unos 140 Creole. Era el fin de la Reserva. No de los problemas fundamentales de sus habitantes.
De la Convención Moskitia al Tratado Harrison – Altamirano
Una vez calmada la situación en Bluefields y conseguido el reconocimiento tácito del gobierno norteamericano, el gobierno de Zelaya buscó medios para legitimar la "Reincorporación" de la Moskitia. Con tal fin reunió una Convención en Bluefields a finales de 1894.
La Convención Moskitia
Uno de los artículos del Tratado de Managua concluido entre los gobiernos de Gran Bretaña y Nicaragua en 1862 reconocía la soberanía de este último. En qué consistía tal soberanía no estaba muy claro. Entre los jefes Mískitu que gobernaron de 1860 a 1894, siempre existió el temor que se produjera una intervención militar de Nicaragua.
Por otro lado, el mismo tratado establecía la autonomía de la Reserva, entendida como asegurada por una "potencia protectora" que era Inglaterra. La toma militar de Bluefields por el gobierno de Nicaragua, sin que Inglaterra hiciera nada para oponerse, puso fin a la autonomía de la Reserva.
En octubre de 1894, el general Rigoberto Cabezas, fue nombrado gobernador civil de la Costa Caribe. En Bluefields se hicieron elecciones para escoger los miembros del gobierno municipal.
Los electos tomaron posesión el 30 de octubre. Ese mismo día se leyó la Constitución nicaragüense, válida para la Moskitia. Se hicieron elecciones municipales también en Corn Island y Laguna de Perlas.
Había que legitimar el nuevo estado de cosas ante los Mískitu. De acuerdo al articulo 4º. del Tratado de 1860, tenía que redactarse un documento en el que se indicase que se habían incorporado "voluntariamente" a la República de Nicaragua.
A partir del 17 de septiembre, una delegación oficial nicaragüense viajó por las aldeas Mískitu. Su misión consistía en pedir a los habitantes que eligieran delegados para una Convencion se trataría de dar a todos los pueblos de la Costa una nueva organización "de conformidad con los usos y costumbres" de los mismos y "Procurando, al mismo tiempo, el progreso".
El 20 de noviembre de reunieron los delegados de aldeas en el Palacio de Gobierno de Bluefields, para firmar el "Decreto de Reincorporación" de la Moskitia a Nicaragua. Entre los once artículos decretados se establecía que la Constitución de Nicaragua y sus leyes serían obedecidas por los pueblos de la moskitia . Debido a que el documento fue firmado por los delegados Mískitu, el gobernador y el cónsul norteamericano, tomó la forma de un tratado. Hecho capital. Un autor ha escrito recientemente que "La convención de 1894 le reconoce este status [de etnia]堰or parte del estado nacional nicaragüense. Ello le da una significado perdurable al documento, aparte de las promesas vacías ahí contenidas".
La rebelión del General Reyes
De 1894 en adelante, la vida política de la Costa Caribe quedó inmersa en los vaivenes de la vida política nicaragüense.
En 1899, el general Reyes era gobernador del Atlántico. Aunque liberal, ese año, apoyado por otros liberales intento dar un golpe de estado al general Zelaya. Los costeños dieron su apoyo a Reyes. El intento de derrocar a Zelaya, sin embargo, fracasó. Los costeños tuvieron que pagar los platos rotos. Fue así que ese mismo año se reunió una nueva Convensión en Bluefields para decidir cuál sería la nueva situación sus habitantes en la República de Nicaragua.
Los delegados asistentes al evento renunciaron a los privilegios que se les habían reconocido en 1894.
El tratado Harrison – Altamirano
En 1905 se firmó el tratado Harrison-Altamirano entre Nicaragua y Gran Bretaña. Era el reconocimiento a nivel internacional de la "Reincorporacion" de la Mosquitia a Nicaragua. Ratificado en Londres en 1906 tuvo validez hasta 1955.
De acuerdo al Tratado:
El tratado de Managua de 1860 quedaba abrogado.
Gran Bretaña reconocia a Nicaragua "la soberanía absoluta" en la que había sido la Reserva Mosquita. En relación con los indios Mískitu, el gobierno de Nicaragua convenía en concederle las siguientes concesiones:
Proponer una ley válida por cincuenta años después de la ratificación del nuevo Tratado, para que Creole y Mískitu nacidos antes de 1894 quedaran exentos del servicio militar y de impuestos directos.
El gobierno nicaragüense permitía a los indios vivir en sus aldeas.
Las tierras poseídas por Creole y Mískitu serian legalizadas. Si no tenían títulos cada familia de cuatro miembros recibiría ocho manzanas.
Habían tierras ejidales en cada aldea india.
Por otro lado se permitía la residencia al antiguo jefe Robert Henry Clarence, siempre y cuando no incitara a los indios a levantarse en contra de Nicaragua.
La Convención Moskitia y el Tratado Harrison- Altamirano fueron los instrumentos jurídicos que legitimaron la incorporación de la Reserva a Nicaragua. El conflicto, sin embargo, entre la actitud del gobierno de Managua y la posición de algunos líderes de la región no dejó de provocar ciertas tensiones a lo largo del siglo veinte.
La política de Zelaya (1894-19010)
La política de Zelaya a partir de 1894 era moderna para la época. De acuerdo a las ideas que se tenían entonces sobre el progreso material y espiritual de las sociedades era necesario " integrar" a las poblaciones del Atlántico dentro de la comunidad nacional nicaragüense de tradición hispánica. Por otro lado, continuando con la práctica de los jefes Mískitu de los siglos dieciocho y diecinueve, el gobierno de Zelaya hizo importantes concesiones a compañías extranjeras. Hay que añadir que la gente del Pacífico y el mismo gobierno obtuvieron beneficios en esas concesiones.
La primera preocupación del gobierno de Zelaya fue el ordenamiento institucional de la región de acuerdo a las leyes de Nicaragua.
En 1840, el gobierno de Nicaragua emitió un decreto para habilitar el puesto del Río Segovia (Coco). A partir de 1860, al quedar la región al norte del Río Hueso o Bragmann, dentro de Nicaragua, se inició la presencia activa del estado nicaragüense en la región. El 19 de Mayo de 1862 se creó el cargo de "Superintendente de la Costa Norte del Departamento de Nueva Segovia" En el propio Cabo se estacleció al año siguiente el cargo de "prefecto". Al mismo tiempo se decretaba que con el producto de las maderas que en la Costa Atlántica existían se hiciera abrir un camino desde los llanos de Jalapa hasta la última catarata en Balana y de allí al Cabo de Gracias a Dios. Paralelamente se enviaban "Comisiones".
La primera comisión se envió en 1864. Se trataba de conocer los recursos de la región para celebrar "contratos de cortes y exportación de maderas y demás frutas naturales". En 1869 se emitió la "ordenanza Municipal del Puerto de Cabo Gracias a Dios", base del nuevo régimen administrativo de la nueva Comarca. La autoridad mayor sería el Inspector General del Cabo Gracias a Dios y Costa Caribe. Todo ello revela que antes de 1894 el gobierno de Nicaragua estaba instalado en el norte de la Costa Caribeña.
De acuerdo con lo establecido en la Convención Moskitia se creó un Juzgado y una delegación de policía en Bluefields. Todos los policías tenían que ser gente del Pacifico y todo debía tramitarse en español. Los moravos gozaban de gran influencia entre las poblaciones Creole y Mískitu. En sus escuelas se enseñaba en inglés. En 1900 se promulgó que la enseñanza debía darse en español. Entre 1900 y 1910, los moravos tuvieron dificultades a raíz de esta medida. Por otra parte se consideró a los misioneros moravos como "agentes y espías" del gobierno británico. Gracias a la intervención del representante alemán en Nicaragua no fueron expulsados del país.
En cuanto a las medidas económicas tomadas por el gobierno de Zelaya hay que señalar que el estado nicaragüense había iniciado arreglos con compañías extranjeras en la región desde 1862.
Ese año se autorizó al ingles James William Shelton a cortar maderas en la margen este del RÍó Coco, a una distancia de 30 Km. de su desembocadura, por tres años, a cambio de mil quinientos pesos anuales.
Varias concesiones fueron hechas a William Vaughan Jr.. en el mismo río, en 1865 y 1866, también para cortes de madera. En 1884, 1886,1887 y 1888 se hicieron concesiones para el transporte fluvial y marítimo a F.A. Pellas. A partir de 1894, las concesiones se iban a multiplicar y entre sus beneficiarios se contarían no sólo extranjeros sino que también nicaragüenses del Pacífico. Por otra parte, el área cubierta era inmensamente mayor. Ni los Creole ni los indígenas estuvieron conscientes de ello.
Después de la caída de Zelaya, los Creole recobraron sus espacios de poder, ahora compartidos con los representantes del gobierno central, que dejaron a las compañías extranjeras las decisiones fundamentales alrededor de la vida de la Costa Atlántica. Al Estado fundamentalmente le interesaba los cobros de impuestos y concesiones que se le daban a las compañías extranjeras y éstas, tuvieron en los Creoles una fuerza de trabajo calificada y que hablaba inglés, por lo que se siguió fortaleciendo la estratificación étnica promovida por las compañías, donde los Creoles ocupaban cargos de confianza, de mayor conocimiento técnico y de capataces de campo.
Surgimiento de lo(as) Creole de Bilwi
Los ingleses y luego los estadounidense encontraron en la fuerza de trabajo Creole de todo el Caribe, su mejor opción técnica para asumir responsabilidades especializadas y de supervisión, lo que los puso inmediatamente en el segundo escalón de la pirámide ocupacional que definirían las empresas extractivas y los enclaves extranjeros del siglo XX.
Ejemplo de lo anterior se da con la construcción del canal de Panamá (una nación forjada en 1903 a la luz de los intereses canaleros) que se inicia en 1881. En "1884 el Registro General de Jamaica estimó que 34,852 personas emigraron allá cada año… cuando los franceses se fueron a la bancarrota, en 1905 los estadounidenses deciden terminar el canal. La Comisión del Istmo canalero comenzó a reclutar a través de oficinas en el Caribe angloparlante, con una oficina central en Barbados. Cuando el canal fue finalizado en 1913, por lo menos 40,000 hombres de estos países habían estado en sus nóminas de trabajo" (Claypole, 2003, Tomo 2: 90)
Desarrollo y consolidación de la economía de Enclave: inicios del siglo XX en la Costa Caribe.
Se tiene un Estado-Nación fortalecido en el Pacífico y dos Regiones Autónomas con características de protonacionalidad, como ya se afirmara anteriormente.
El Estado Liberal concedió importantes territorios a inversionistas extranjeros. El funcionamiento irregular de la economía de enclave que podría definirse como "bonanza y crisis cíclica" hizo de las comunidades los lugares de "refugio" en tiempos de crisis, no así para los Creoles que era la fuerza de trabajo más arraigada en los centros urbanos y que desde esos tiempos emigran, principalmente a Estados Unidos y algunos a Managua, para mejorar sus condiciones de vida y la de los familiares que se quedan.
"En 1921, la Bragman䳠Bluff Lumber Co. inició operaciones madereras en la región de Puerto Cabezas. Recibió una concesión de aproximadamente 25,000 manzanas para explotar el pino. La compañía acondicionó un puerto y tenido una línea para sacar la madera. Abrió caminos y construyó puentes de madera. En 1926 era el mayor empleador de Nicaragua con 3,000 asalariados. El ferrocarril se utilizaba también para el acarreo del banano. La compañía instaló aserrío, planta eléctrica, fábrica de hielo y red telefónica en Puerto Cabezas. Era tal su poder económico que pagaba a la policía del puerto y de los campamentos. En el periodo de mayor expansión llegó a producir 55,000 pies de madera de pino al día. En los años cuarenta entró en decadencia". (Romero, 1996: 148)
Según el Obispo John F. Wilson "esta compañía antes se llamaba The Bilwi Timber and Banana Co". (Wilson, 1990: 130)
Esta construcción convocó parte a la fuerza de trabajo Creole de Bluefields y Laguna de Perlas; pero como no era suficiente, la compañía constructora contrató a Creoles y/o negros que hablaban inglés provenientes de: Barbados, Jamaica ,Haití, Belice, Honduras, Costa Rica, Panamá más 20 hombres de la India
Esta información y otras referidas al tema fueron suministradas por Mr. Adolfo Cambell y Mr.Oscar Palmer(Q.E.D).
Mr.Cambell expresó que su papá nació en la Isla Guadalupe, que de ahí pasó a trabajar al Canal de Panamá después se trasladó a Bluefields, y a Laguna de , que de ahí pasó a trabajar al Canal de Panamá después se trasladó a Bluefields, y a Laguna de Perlas donde se casó. Posteriormente vino a trabajar en esta construcción y optó por quedarse a vivir en el Barrio El Muelle
Por eso se afirma que la construcción y el pueblo Creole de Bilwi tienen una composición pancaribeña, lo cual se podrá comprobar más adelante. Pero la obligada reflexión es ¿Cómo es posible que ligeramente se diga que "todos los negros son perezosos, cuando queda demostrada no sólo su capacidad de trabajo sino la búsqueda del mismo en diferentes países caribeños y del continente; el peso de la visión discriminatoria nos convierte en mediocres jueces de los demás.
Alrededor de los barrancones de la compañía se fueron concentrando otras personas y las que formaron un caserío; que se conocería como Bilwi, nombre de origen Mayangna.
Cuando la obra se terminó "se fueron en diferentes barcos unos 400 hombres, otros se quedaron a vivir aquí.Sólo para Jamaica se utilizaron como 4 barcos" coincidieron en recordar las dos personas aludidas anteriormente.
En el informe presentado por el Dr. Frutos Ruiz el 14 de Septiembre de 1925 a la Presidencia de la República se describe la situación del Puerto, del cual se extrae el presente fragmento:
"Puerto Cabezas es un Puerto de la República de Nicaragua abierto por decreto ejecutivo en el año 1924. Situado al Noreste de Nicaragua, entre el Río Wawa y el Río Hueso, distante de la barra de aquel por unos 20 km. y del Río Hueso por el Norte, unos 50 km. limítrofe con la comarca del cabo de Gracias a Dios, del que dista unos 100 km. dentro de la Costa de la Mosquitía, a 4 km. al Sur del pequeño promontorio denominado Bragman Bluff en los 14° L N, contiguo al caserío que fue en un tiempo de indios mosquitos llamado Bilue".
El Puerto tiene un muelle de madera de unos novecientos metros de longitud (de Este a Oeste) dentro del mar en cuyo extremo cala unos veinte (20) pies de agua, pues el fondo de la costa es de muy poca gradiente, por lo que debe alargarse más para que entren los buques de alto bordo. Está bien defendido de las corrientes marinas por lo que a pesar de ser casi mar abierto no ofrece mucho peligro. Tiene facilidad de hacer muelles, rompeolas y escolleras presentándose para que con el tiempo, las embarcaciones tengan seguro refugio.
Tres años atrás el Sr. L.T Miles había construido el primer muelle que fue destruido por no reunir las condiciones necesarias ante el aumento del tráfico de la compañía que le sucedió. El nuevo muelle tiene doble vía férrea, en su extremo llevara varias líneas para las maniobras de carga y descarga.
A la entrada del muelle hay sembrado sin orden y hay casas de madera de la empresa destinada a distintos servicios como hotel, comandancia de policía, hospital. Más lejos de la aduana, está el comisariato y las casas para "Creoles". Más al poniente, se encuentra un nuevo hotel, oficinas, un emplazamiento de maquinaria, patios para estibar la madera que está lista para el mercado y más allá está el nuevo edificio para la gran aserradora que podrá aserrar cien mil pies de madera al día (200 mts de largo y 30 mts de ancho) y cuenta con un completo taller de mecánica. El valor del complejo es de 250,000.00 dólares.
Más al Occidente están los edificios para vivienda de los operarios de la empresa, llamados españoles. Las viviendas son de dos clases: unas tienen dos habitaciones, corredor y cocina para la familia; otras son caserones (Barracones) distribuidos en cuartos separados destinados a una sola persona. Estas viviendas eran arrendadas a C$ 10.00 y C$ 5.00 mensuales por cada una de las dos clases de habitación respectivamente.
Al Norte del muelle, a distancia de unos 300 metros y cerca del mar se levantan las edificaciones para habitación de los empleados de la compañía las cuales están construidas en manzanas ordenadas en forma de población, con sus calles correspondientes de 50 pies ingleses de anchura. Las calles no están trazadas mirando los puntos cardinales, sino de Noreste a Sureste. Son casa de madera de pino, techo de tejas de hierro galvanizado, pintadas de azul y blanco, levantada sobre basas de concreto, con estilo propio de clima fríos, no tiene patio interior, aunque sus habitaciones están bien distribuidas, sin embargo, su ventilación no es suficiente para estos climas, lo que, añadido a que no son espaciosas, contribuye a que serán calientes. Estas casas para empleados son como veinte.
La plata eléctrica desarrolla 150 kilovatios (kw) la que se aprovecha para la luz y para una pequeña fábrica de hielo que produce seis quintales diarios insuficiente par el consumo. También extrae el agua potable de una laguna que está al poniente a una distancia de 2,500 metros (2.5 km), con capacidad de 200 millones de litros distribuidos con una tubería de hierro a casi todos los edificios.
Al Norte de todas estas edificaciones y en una faja de unos 300 mts de ancho a lo largo de la Costa se ha levantado recientemente el caserío de Bilué separados de los edificios de la empresa Bragman Bluff por un cerco de alambre que corre de oriente a poniente; había un portón que cerraba la entrada que hoy ha desaparecido. Este caserío tiene unas 50 casas, muchas de madera con techo de zinc, otras de caña y hojas de palmeras, ninguna de ellas tiene valor de mil córdobas; presenta un aspecto de ranchería por la pobreza de edificación y por carecer de calles, ya que se han edificado sin ningún plan de urbanización.
Ese caserío vive del comercio de pulpería, abarrotes, algunas tiendas de telas, casas de comida y especialmente de la venta de licores. Hay 19 cantinas; de ellas 10 están patentadas para vender aguardientes. Los consumidores son los trabajadores de la empresa Bragman Bluff. Además hay dos sastres, dos zapateros, dos albañiles, dos carpinteros y un médico recién llegado". (INIFOM, 2000: 6 – 7)
El informe además contiene unos juicios y apreciaciones sobre los indios y negros que contrataba la compañía que demuestran el desprecio de los representantes del Gobierno Central, (en este caso representado por un español de España); "indios que no han aportado un adarme de valor a la Civilización, y hasta por su número, sin valor alguno, son muy pocos miles. Los pocos negros que parecen muchos por ser país despoblado ni siquiera ofrecen curiosidad (etnológica), pues ni lengua propia tienen y sólo son apetecidos como bestias de carga por las compañías extranjeras, prefiriendo al resto de los nicaragüenses", Más adelante se refiere al problema de los negros (numeral XXV) y da cuenta que la compañía había introducido negros, lo cual estaba prohibido ya que esos puestos los deberían ocupar nicaragüenses. Los jefes de la compañía le explicaron que "ellos ponderaban la necesidad de introducir negros para ciertos trabajos, V.g la industria de la trementina, para estibar madera, etc, etc, cuyo trabajo es mejor que el de los nicaragüenses, así como estos sirven para otros trabajos como la agricultura, la ganadería, mejor que los negros" Ruiz recomienda multar con C$ 25.00 mensuales en caso de seguir dándose el problema y termina expresando "El gobierno debe mirar con toda atención, no sea que, cuando se dé cuenta, encuentre en Puerto Cabezas un pueblo africano que ni pizca de amor siente por Nicaragua" (Ruiz, 1995: IV – V – XXV).
La Misión Morava y el poblado alrededor del nuevo enclave:
"… muy pronto los misioneros se dieron cuenta de lo estratégica que era esta zona para la obra en general, no sólo por su desarrollo económico sino por su posición geográfica. Estos factores fueron determinantes para considerarla como la nueva sede administrativa de la obra en Nicaragua. Pero como este objetivo no se pudo lograr inmediatamente, los misioneros, buenos estrategas como eran, se fijaron en el poblado más cerca de Puerto Cabezas. Este poblado era Tuapí, "… y fue hasta 1927 que el superintendente Grossmann fue transferido a Puertos Cabezas" (Wilson,1990: 130 – 131)
Expansión y crecimiento de la RAAN y Bilwi
Un espacio de poder recobrado :
En Bilwi lo (as) Creole fueron muy motivados por la iglesia Morava para obtener una educación que los preparara para ocupar cargos que no sólo podrían desempeñar en las compañías, sino también en otros ámbitos; la mayoría de enfermeras eran mujeres Creoles, el magisterio también fue asumido inicialmente por ellos(as), los que tuvieron oportunidad y recursos se trasladaban a León, Ciudad Universitaria del país, y los líderes religiosos Creole de una Iglesia Morava que inició su "Autoctonización entre 1949 y 1974" (Wilson, 1990: 135), conformaron una elite intelectual que abarcaba de esa manera espacios estratégicos de poder, y era más educada que los representantes del gobierno central y más aún de sus jefes militares.
Aspectos demográficos (antes de 1979)
Lo que se inició como una pequeña comunidad fue creciendo :
En 1925 asciende a 1500ha.Este total incluye unas 350 personas residiendo en el caserío indígena de Bilwi.
Con el auge de la explotación maderera en 1940la población municipal aumenta a un total de 6,495 habitantes.
En 1950 asciende a 8,501Ha .5,983een el área urbana.
. En 1964 había subido a 7,000, y en 1971, 5,528 habitan en área urbana y 7,938personas en el área rural.
Hasta mediados del siglo diecinueve, la población de la región del Atlántico era rural. El desarrollo económico en la segunda mitad del siglo y en el siglo presente favorecieron el aumento de la población urbana.
En los años setenta, Bluefields fue el primer centro urbano. Su crecimiento se debió al desarrollo del cultivo del banano en la cuenca del Río Escondido." (Romero, 1991: 151)
De tal manera que un análisis del crecimiento demográfico posterior a 1979 afirma que "Según el Censo Nacional de 1971, el municipio de Puerto Cabezas contaba con una población de 11,461 habitantes. Sin embargo, en sólo 24 años esta población se triplicó, pues al momento del Censo Nacional de 1995 se contabilizaba un total de 39,771 habitantes, equivalente al 20.6% de la población total de la región, creciendo a una tasa promedio anual de 4.6%, un poco más alta que la tasa de la región que refleja el 4.03% y más alta que la tasa nacional que fue de 3.57%.
Para el 2000 la población del municipio se estima en 51,993 habitantes, experimentando una tasa de crecimiento promedio anual de 5.2% en el quinquenio 1995 – 2000, por encima de la tasa regional que asciende a 4.4% y superior a la tasa nacional que es de un 3.09%.
El fuerte crecimiento poblacional experimentado por Puerto Cabezas, especialmente en los últimos veinte años, se debe probablemente a su ubicación geográfica, pues es el principal centro poblado de la zona como Puerto Marítimo, además, es el centro Regional y sede del Gobierno Regional Autónomo y por tanto le ha correspondido asumir funciones políticas – administrativas y como proveedor de servicios de infraestructuras social y productiva, convirtiéndolo en centro de atracción de los municipios aledaños". (INIFON, 2000: 21)
Pero uno de los aspectos principales de esta eclosión demográfica fue que durante la guerra en la década de los ochenta; muchos Miskitu de Río Coco y de su cabecera municipal, Waspán, llegaron huyendo del escenario bélico y se refugiaron en Bilwi. A esto se debe agregar una fuerte migración campesina que llegó a la ciudad por los mismos motivos. Las razones que sustenta el análisis demográfico son válidas, máxime si se toma en cuenta la crisis y la recesión económica de los últimos años, que ha dado lugar a fuertes contingentes migratorios de personas que llegan a Bilwi de diferentes partes del país incluyendo gente que llega a instalarse desde Managua.
Población total por género edad, año 2000.
La composición de la población por género en el municipio de Puerto Cabezas refleja un leve predominio de población femenina, pues, en 1995 existían 20,484 mujeres y se incrementó a 26,779 en el 2000, lo que equivale al 51.1% del total municipal. En cambio los hombres ascendían a 19,287 en 1995 y aumentaron a 25,214 en el 2000 y representan el 48.5% del total municipal.
Del total de la población municipal se estima que: el 72.3% pertenece a la etnia Mískitu, el 21.7% a la etnia Mestiza, 5.4 a la etnia Creole y el 0.3% a la etnia Mayangna.
Cuadro No. 1
Población por etnia según áreas geográficas, año 2000
Area | Mískitu | Mestiza | Creole | Sumu | Total |
Urbana | 17,291 | 9,207 | 2,934 | 97 | 29,529 |
Rural | 20,299 | 2,076 | 30 | 59 | 22,464 |
Total | 37,590 | 11,283 | 2,964 | 156 | 51,993 |
(Alcaldía – IPADE, 2003)
Estos cambios demográficos junto con otros procesos vividos en las décadas comprendidas de 1979 – 1999 han modificado la correlación de poder en Bilwi.
Principales características socioculturales de los(as) Creole
El Inglés Creole:
Existe una subvaloración del Inglés Creole, asumiendo que el inglés "standard" es el mejor inglés que existe; es indudable la importancia que tiene el llamado inglés standard desde la perspectiva de los negocios a nivel mundial, pero eso no implica que se desvalorice y discrimine el Inglés Creole, y la importancia que tiene desde el punto de vista humano y lingüístico.
El esquema de la gramática del Inglés Creole no ha sido estudiada con la profundidad necesaria; un valioso esfuerzo en este sentido realizado por Wayne O䎥il que asume como punto de partida la tesis doctoral de Holm, J. 1978 "The english creole of Nicaragua䳠Miskitu Coast".
Se citan algunos aspectos generales de este estudio:
"Debido a su origen particular, se supone que los idiomas criollos iluminan, de manera extraordinaria, el lenguaje y su desarrollo en el individuo y la sociedad. De hecho, ésta debe ser seguramente la justificación para la gran cantidad de tiempo y energía que la lingüística moderna ha invertido en ellos.
Personalmente, tomo un punto de vista un tanto menos apocalíptico en el transcurso del examen detallado de las indiosincracias de una lengua, que considero simplemente una variedad del inglés: el inglés nicaragüense; el objeto de su estudio consistirá en entender qué es y cómo llegó a ser lo que es.
El inglés nicaragüense -también conocido en la literatura sobre los criollos como el inglés criollo de la Costa Miskita – es el término utilizado en las páginas que siguen para referirse a la lengua materna de unas 30 mil personas en la Costa Caribe de Nicaragua – Hale y Gordon (1987)-, siendo la ciudad de Bluefields, en la Region Autónoma del Atlántico Sur (en adelante, RAAS), su capital cultural y comercial.
En su mayoría son afro-americanos, descendientes de esclavos que escaparon a la Costa Miskita o fueron tenidos ahí en cautiverio, traídos de otras partes del Caribe por colonos británicos desde la mitad del siglo XVII, o que vinieron a la Costa de otras colonias británicas en el Caribe después que fuera abolida la esclavitud a mediados del siglo XIX -Holm (1986).
Dentro de los hablantes del inglés nicaragüense se encuentran también unos dos mil garífonos e indígenas rama; estos dos pequeños grupos han perdido, en gran medida, sus idiomas originales. Hay unos cuantos ramas, sin embargo, que todavía hablan su lengua nativa – Craig (1990: 12-14) mientras que los Caribes, exilados por los británicos sumariamente de su isla nativa de San Vicente a la Costa Caribe de Centro América a finales del siglo XVIII, mantienen fuertemente su garífono nativo en Honduras, Guatemala y Belice. Un número indeterminado de los cerca de 70 mil indígenas miskitos de Nicaragua tienen también como lengua materna el inglés nicaragüense, y otros lo hablan como segunda lengua…"
"Sin embargo, al comienzo es importante enfatizar su similitud con las variedades más conocidas del inglés, y no dejarnos llevar por los puntos de diferencia, para así no caer en el error -como muchos creolistas- de que estamos mirando a algo poco relacionado con el inglés, tan diferente, que es un idioma aparte y tipológicamente bastante distinto.
En su vocabulario y su gramática, el inglés nicaragüense llegó a ser lo que es por medio del contacto con los idiomas y los pueblos relacionados con él, incluyendo a las numerosas lenguas de Africa Occidental empleadas por los esclavos. El inglés nicaragüense también llegó a ser lo que es simplemente porque cambió con el tiempo, como lo hace cualquier idioma" (O䎥il, 1991: 18-23).
Hablar Inglés Creole es un elemento fundamental para la identidad de este pueblo, lo cual no significa que sectores de otros pueblos no puedan hablarlo, máxime si se toma en cuenta que tanto el mískitu como el creole fueron lenguas francas y funcionalmente todavía lo son. Por esta razón hay otros indicadores que expresan la identidad Creole, tal y como se verá a continuación. Lo más importante en señalar aquí es el hecho de que en muchos hogares de parejas jóvenes se está hablando español en lo cotidiano del hogar, y eso es un síntoma muy preocupante desde la perspectiva del debilitamiento de la cultura y las crisis de identidad que eso conlleva "mi madre es negra y mi papá miskito, pero yo hablo sólo español, ¿Qué soy? Fue un ejemplo extremo que se encontró, ya que tradicionalmente en los matrimonios mixtos la madre enseña primero al niño(a) el idioma que ella habla como lengua materna y los demás valores de su cultura.
En una estrevista informal se afirmaba que habían personas que por tener rasgos negroides muy fuertes, se adscribían a la identidad Creole y lograban aprender bien el inglés, por las ventajas y estatus que esto representaba, ahora con el cambio de correlación de fuerzas se han adscrito a su etnia original.
Cosmovisión Creole:
El hecho de que la población Creole sea básicamente urbana propició una fuerte evangelización de parte de los misioneros alemanes que fueron los primeros evangelizadores que llegaron a la Costa Caribeña. En términos comparativos, no es lo mismo tratar con una feligresía compacta poblacionalmente, que la tarea de evangelizar a comunidades dispersas y con un patrón de poblamiento con esa misma característica. Por tal razón los misioneros motivaron a crear grupos poblacionales entre los miskitu y mayagna, que permitiera aglutinarlos, aunque su dispersión rural siempre se conservó.
Se menciona esto porque se quiere demostrar que ese control sobre una población que siempre ha sido poca numeros en relación a las demás, fue lo suficiente fuerte como para que no se desarrollara un sistema de creencias religiosas paralelo, como el Vudú o la santería en otros países del Caribe. A pesar de todo hay creencias mágico-religiosas de influencias interculturales como se verá más adelante.
La mayor parte de los Creole pertenecen a religiones protestantes. Son moravos (en su mayoría), anglicanos, bautistas y evangélicos de otras denominaciones. En las entrevistas de campo las personas eran muy reacias a hablar sobre el tema. Y esto se debe a que religiosa y socialmente son prácticas que se repudian, se menosprecian y convierten en pecador(a) a la persona que está vinculada a los mismos. Pero aquí nos encontramos con una doble práctica social, se condena pero la mayoría cree y de una u otra manera practica rituales con la ayuda o no de la persona que invoca el espíritu de Obeah. "Algunos pueblos africanos mantienen una fuerte creencia en el poder del obeahismo y Myalismo, que fueron conservados vivos por los Obeah-men y Myalwomen que venían en los buques de esclavos…Obeahman estaba más vinculado con prácticas de brujería (sorcery) y Myalwoman para enfrentarse con los desastres" (Claypole, tomo 1, 2001: 108). En general las razones que mueven a comunicarse con Obeahman o woman (una variante con relación a lo expresado por el autor anterior), en general son:
Protegerse de peligros del mundo real o sobrenaturales
Curarse una enfermedad
Lograr fortuna o éxito en los negocios, viajes, etc.
Controlar la naturaleza para beneficio propio
Mediatizar a un enemigo
Triunfar sobre el amor
Procurar un resguardo – amuleto, contra un mal cualquiera y/o para llamar a la buena suerte
Resolver problemas de la vida cotidiana
Encontrar lo pérdido o robado
Conocer qué depara el futuro
Desde la perspectiva antropológica, estas creencias merecen el mismo respeto que las institucionales, forman parte del control social y resuelven problemas a las personas, por muy irracional que suene esto en los oídos del científico puritano, que se erige en el juez de lo que no domina ni conoce. Esto no está referido a la charlatanería y embaucadores (que los hay) en iglesias institucionalizadas y en los que hacen prácticas paralelas de creencias mágico-religiosas). Se cita a continuación la parte central un estudio que hiciera un grupo de profesionales, la mayoría Creole, (Hooker, et.al, 1999: 5-8).
Cabe señalar que en este libro se incursiona más en este aspecto porque la práctica religiosa institucional es pública, conocida y escrita.
"La creencia en antiguos ritos aún persisten en los comportamientos sociales y condiciones de vida de la poblacion Creole
Cuando afirmamos que una buena parte de la población creole de una u otra manera mantiene tradiciones y costumbres relacionados a sus antiguos ritos y creencias, no queremos plantear que estos estén a la luz del día. Sin embargo si analizamos a profundidad la lógica del comportamiento de las personas, si observamos su comportamiento cotidiano en relación a los fenómenos naturales, si estudiamos la estructura de las creencias, podremos cerciorarnos de que persiste la centenaria cultura de los antepasados.
La mayor parte de los creoles pertenecen a las religiones protestantes. Son Moravos, Anglicanos, Bautistas, Evangélicos. Solo una pequeña minoría se considera católica. Cuando los primeros misioneros de las diferentes denominaciones religiosas llegaron hace un poco mas de ciento cincuenta años a la Costa del Caribe Nicaragüense (en aquellos tiempos la Moskitia) la mayor parte de los pobladores de ascendencia africana aún tenía sus propias religiones naturales y practicaba sus ritos relacionados a las fuerzas de la naturaleza. Son apenas cuatro generaciones desde que el cristianismo con su doctrina monoteísta transformara parcialmente la estructura de pensar y sentir de la población. Y es justamente por ello que debajo del manto del cristianismo se vislumbran las viejas creencias, relacionadas a los diferentes poderes.
No queriendo analizar los orígenes de las diferentes religiones se puede sin embargo afirmar que mientras el cristianismo parte de la concepción de que el ser humano tiene un destino al cual su Señor lo guía, las religiones naturalistas permiten influenciar ese destino. Mientras en el cristianismo el bien perdura mientras las fuerzas del mal sucumben gracias a la fe libertadora en Jesús, en las religiones naturistas existen espíritus que se pueden invocar y que pueden influenciar sobre el destino de los seres. Esto tiene una enorme importancia sobre la percepción de los fenómenos como la vida y la muerte, el bien y el mal, la enfermedad y la salud y no deja de influenciar el quehacer cotidiano de las personas.
Hoy en día la cultura Creole mantiene el Obeah[1]como parte fundamental de sus creencias. A pesar de ciento cincuenta años de misión y profesión de religiones protestantes, los espíritus siguen siendo invocados por personas llamadas a tener contacto con las fuerzas sobrenaturales. Prácticamente todos los creoles, sin distingo de religión o nivel educacional tienen un profundo respeto por las creencias que han sido legadas por sus antepasados. En la vida cotidiana de hoy en Bilwi un juego o campeonato de basket ball o de base ball es el producto de una invocación a las fuerzas de los espíritus, a como lo puede ser un buen negocio. Muchos inclusive hoy en día practican ritos con muñecas[2]para influenciar sobre el destino de las personas. Cuando se le pregunta a los mas ancianos, refieren que dichos cultos vienen de Jamaica y que son los Jamaiquinos los que los desarrollaron. Obviamente el hecho de que en las plantaciones de azúcar en Jamaica hace menos de dos siglos habían grandes aglomeraciones de esclavos que conservaron sus creencias y costumbres, lo que incidió sobre la perseverancia de estos cultos, mientras que los pobladores afrocaribeños que llegaron como sirvientes de los británicos en pequeños grupos fueron aculturizados mas prontamente. De igual manera los creole tienen un profundo respeto por las señales de lo desconocido o "sobrenatural". Un gallo que canta al mediodía, un perro que aúlla por la noche, una mariposa negra pueden ser señales que hay que respetar. Existen asimismo "especialistas" en predecir el futuro[3]que gozan de gran respeto en la sociedad creole, así como ritos que nadie se atrevería a cuestionarlos como el sembrar chile de guinea en el patio o la famosa mary gold, plantas que ayudan a impedir la entrada de maleficios a la casa. Son conocidos los efectos del nido del pájaro macuá, de polvos que adormecen a los habitantes, todos elementos que debido a la profunda fe que en ellos tienen los pobladores creoles, no son mitos y leyendas , son realidades de la vida cotidiana.
Estas creencias, basadas en fenómenos naturales se mantienen vigentes en la población creole y han sido en parte adoptadas por la población miskita, de cercano contacto con los afrocaribeños desde que en 1675 un barco con esclavos africanos encallara en las costas de la Moskitia.
Es interesante señalar cómo a pesar de que las diferentes iglesias siempre prohibieran los cultos "paganos" de la población creole, estas creencias y ritos prevalecieron por los siglos, de manera mas o menos solapada en dependencia de la situación. Estas creencias en cierta manera mantuvieron cohesionado al grupo cultural de los afrocaribeños, que se identifican unos con los otros por encima de barreras geográficas, sociales o lingüísticas. Es así como el Vudú trasciende las fronteras, a como lo hace el gallo pinto y la casaba. Las creencias y los ritos aún practicados hoy en día permiten una identificación como grupo étnico y son ciertamente uno de los elementos más importantes en la identidad de pueblos, que contra su voluntad fueron arrancado de su entorno, debiendo sobrevivir bajo condiciones inimaginables.
En relación a la salud y la enfermedad, a pesar de que muchos creole aceptan la explicación "científica" de los fenómenos, en la profundidad siguen creyendo en maleficios y perjurios, en errores y tabúes. Y es por ello que creen en la palabra del médico, rezan al Dios de las iglesias cristianas y practican sus ritos al mismo tiempo, a fin de lograr a salvación del enfermo. Existe para los creoles el pain o䢥lli, comparable con el yumu de los miskitos, que mas que un cólico intestinal es una fuerza negativa que se anida en la boca del estómago y que no sólo se cura con hierbas sinó que también con rezos y cultos a los espíritus.
Sin querer profundizar en la materia, pero con el ánimo de llevar a nuestra conciencia ", consideramos que para este grupo poblacional existe "otra realidad" que la que la cultura y tradición cristiana ha impuesto en los últimos siglos. Convive en la cultura creole lo adoptado en los últimos ciento cincuenta años de los misioneros, lo aculturizado por la convivencia con la cultura anglo-sajona con lo propio, lo que está con la población afrocaribeña desde que fueron arrancados de su entorno natural. Existe en la vida cotidiana ese sincretismo entre lo adoptado para sobrevivir individualmente y la identidad propia, elemento sin el cual no hubiera sido posible la sobrevivencia como grupo étnico.
Consideramos que no es pertinente valorar fenómenos como los descriptos anteriormente, desde una óptica folclórica ni desde la mira de una sociedad de un desarrollo superior, que observa y mide "a los primitivos" desde una esfera científica, sin que falte una sonrisa de comprensión en la comisura de los labios. Asimismo, tampoco es pertinente calificar los comportamientos y hábitos de las culturas diferentes de la occidental actual, como nocivos o buenos. Mas bien un abordaje de los fenómenos y comportamientos sociales de los diferentes grupos étnicos y sociales debe contemplar la vivencia de ese grupo como una realidad que condiciona el comportamiento social y por ende condiciona su forma de ser.
En 1955 Benjamin D. Paul había pregonizado el lema : Si quieres ayudar a una comunidad, debes a aprender a pensar como piensan las personas de esa comunidad. A pesar de que han pasado mas de cuarenta años desde que las primeras escuelas de antropología impulsaran modelos científicos para comprender la forma de vida de los diferentes pueblos, aún persisten modelos de intervención, que en nombre de la ciencia moderna pretenden homogenizar a las diferentes étnias, globalizando los comportamientos y contribuyendo así a la anulación de importantes elementos que son parte de la identidad de un grupo poblacional. Es obvio que el lema de Paul es hoy mas válido que nunca y nos obliga a reflexionar sobre nuestras intervenciones en salud, sobre la percepción de la calidad de las mismas y sobre la intencionalidad que llevan, sobre todo cuando se ejecutan sobre comunidades sociales y étnicas que desde sus ancestros tienen una percepción diferente de la vida.
A como se demostró, es obvia la persistencia de estructuras mentales y una cosmovisión o "modelos de vida" propios en la población de origen afrocaribeño, mas allá de la aculturización de que ha sido objeto durante los cuatro siglos de contacto con la cultura occidental. A pesar de que los modelos de vida del hombre blanco, con su relación materialista de la vida y su sometimiento a las estructuras del poder del capital, han tenido una enorme influencia sobre los creoles, persisten, de manera solapada, pero bien visibles, ritos y creencias que son la viva expresión de sus orígenes y que los unen mas allá de fronteras, religiones o credos políticos.
Es un enorme error negar la existencia de esa visión diferente de la vida, ya que no sólo contribuye a eliminar los últimos vestigios de una cultura que ha hecho posible la sobrevivencia de los grupos étnicos de ascendencia africana bajo las condiciones mas adversas, primero durante el sometimiento desgarrante que los llevó a ser esclavos en las Américas y posteriormente durante casi doscientos años de un proceso de enajenación y asimilación que en la actualidad culmina con la globalización que somete a todos los grupos étnicos al dictado del mercado de consumo.
La existencia de ritos y creencias en las minorías creoles no sólo son el vivo vínculo con su historia, no sólo son la raíz de su pasado, sino que pueden ser el camino hacia un futuro. Esa identificación de las raíces, esa aceptación de un pasado traumático ha de permitir un fortalecimiento en las relaciones con los demás grupos poblacionales.
Los conocimientos sobre los ritos y creencias de los grupos poblacionales y minorías étnicas permiten acercarnos mas a esos grupos, permiten ayudar a pensar cómo piensan y por lo tanto son un soporte importante para la definición de cualquier tipo de acción relacionada a esos grupos sociales.
La aceptación con dignidad de la existencia de ritos y creencias es lo que contribuye a definirse como parte de una etnia, es lo que ayuda a tener identidad, y por lo tanto es parte de esa compleja estructura que nos identifica como parte un grupo. La persistencia de esos ritos y creencias antiguos no ha de ser visto e interpretado como oscurantismo de los ignorantes sino que mas bien como una antorcha que indica sobre nuestro pasado y que puede aportar en iluminar sobre el camino al futuro.
Si los sistemas de salud con sus diversos modelos y enfoques pretenden realmente ayudar a las poblaciones mas allá de las discriminaciones, deben aceptar a cada uno de los grupos que pretenden favorecer y por ende no deben sobreponer modelos de vida de un grupo sobre los demás. No se pretende que la medicina blanca u occidental adopte las creencias de la población afro. Se pretende que respete y acepte la existencia de esas creencias y que involucre estos elementos al abordar a los grupos poblacionales cuya cosmovisión es parte de un universo interpretado de manera diferente. Se trata de respetar a cada grupo étnico y tratarlo con los mismos derechos dentro de ese marco de diversidad cultural.
Esto permitirá el desarrollo de modelos de atención adecuados, en los que los beneficiarios podrán sentirse representados, donde realmente podrán ser sujetos de su propio desarrollo y no objetos de una intervención". (Hooker, et. Al; 1999; 5-8)
La familia Creole.
La familia Creole está caracterizada por tener una fuente matrifocalidad; esto significa que el peso de muchas obligaciones y decisiones recaen sobre la madre; esto se debe a razones históricas y a otras más recientes:
Cuando los y las esclavas estaban al servicio de sus amos, éstos disponían de los mismos de acuerdo a sus intereses y caprichos. Las familias eran separadas, los hombres destinados a misiones en otros lugares o países. Las mujeres comúnmente se quedaban con la prole e iban constituyendo una red familiar solidaria, donde el mayor estatus residía en las de mayor edad.
Desde 1925, fecha de fundación de Bilwi, los hombres están sometidos a fuertes desplazamientos, siguiéndole el paso a las compañías; a veces lo hacía con la familia, muchas veces solos. En otros momentos (y actualmente) se embarcaban y pasaban la mayoría del año fuera del hogar. Esta movilidad fortaleció la matrifocalidad antes mencionada y como las familias se van estructurando de forma nuclear (padre-madre-hijos(as)), la suma de varias de ellas, descendientes de la abuela materna, viven en el entorno territorial de la misma, es decir, las mujeres llevan a sus maridos a vivir en el espacio vital de su madre y abuela (esto se llama residencia matrilocal), de tal manera que la abuela tiene una fuerte influencia y poder en esa familia. Pero a esta forma de organización no se le puede llamar matriarcado, porque no constituye un sistema donde haya un predominio de las mujeres sobre los hombres,basado en relaciones de no-equidad. Muchos de los "privilegios" machistas siguen intocables, gozan de libertades que no tienen las mujeres o son mal vistas por ejercerlas.
Pero sí es cierto que esta organización familiar, donde ese poder se adquiere (se insiste en eso) sobre la base de mayores obligaciones en el hogar, ha formado mujeres con un carácter muy independiente y varones que son reconocidos como mucho menos violentos, que son más cariñosos con sus hijos(as) y que se integran a las labores domésticas, sin vergüenza pero sin implicaciones de sumisión.
La exogamia (apertura a formar pareja con miembros de otros pueblos) es un rasgo distintivo de los Creole. Algunos(as) entrevistados(as) afirman que hace muchos años los padres procuraban inculcarles a los hijos que Creoles hacía pareja con Creole, pero esto fue transformándose, máxime si se toma en cuenta que al ser pueblo demográficamente menor a los demás, tendían a buscar parejas en los otros(as) diferentes, porque de lo contrario estarían formando hogares con parientes muy cercanos entre sí.
Pero actualmente esta exogamia es de una apertura mucho mayor, de acuerdo a varios informantes. Los hombres se están inclinando por casarse con mujeres mestizas o miskitu de piel clara. "Hay que mejorar la raza, yo no quiero que sean negros mis hijos" afirmó uno de ellos. Las mujeres Creole afirman que los hombres están haciendo esto porque buscan mujeres dóciles ya que ellas no lo son. Pero también la mujer desde hace rato se está emparejando con mestizos o Mískitu, donde muchas reciben malos tratos e irresponsabilidad paterna para sus hijos(as). Un entrevistado exclamaba: "Las negras son muy creídas, se las dan, se van con otros, y cuando ya las jodieron, buscan a nosotros los negros, cuando ya las fregaron, por eso no quiero tener pareja negra".
Más allá de que si las razones que dan los(as) entrevistadas, está el problema que esta exogamia mucho más abierta los puede debilitar más como pueblo, a menos que se tomen medidas que puedan prevenir y/o neutralizar esta tendencia.
Migraciones sistemáticas:
Entre los Creole de la RAAN ha habido migración sistemática como respuesta a las crisis económicas a que eran sometidos por las entradas y salidas de los enclaves. De tal manera que ha habido una fuga constante de cerebros y/o de fuerza de trabajo que busca cómo emigrar a los Estados Unidos, a otros países Caribeños y Managua.
a) Migración a los Estados Unidos.
La mayoría de lo (as) emigrantes obtienen trabajos que se pueden considerar marginales (cuido de anciano (as), trabajos domésticos, empleados de gasolineras, limpieza de edificios, vigilancia, etc), pero que les ayudan a mejorar su calidad de vida por la vía de endeudamiento, de tal manera que una de las entrevistadas expresó que viven cobijados por el refrán "San Pedro no me llames a tu portón porque mi alma se la debo al patrón". "El banco les manda el estado de cuentas con los descuentos de los créditos directos y de los pagos que realizan con las tarjetas de crédito; tratan de obtener otro trabajo de medio tiempo o aumentar sus horas extras y aunque la educación es gratuita hasta la secundaria, el costo del College y la profesionalización constituyen un lujo que pocos logran asumir".
Otras personas, principalmente jóvenes, caen en la drogadicción con lo que esclavizan su vida, lo que les acerca a las pandillas y sus actividades delincuenciales.
La mayoría entra en un proceso de desarraigo que llevado al extremo los hace renegar de su origen para tratar de asumir una identidad estadounidense, con una ciudadanía de tercera o cuarta clase.
"Para evitar sentirse discriminados por sus jefes, asumen una posición más disciplinada, obediente y servil, para ganarse la simpatía de aquel que de otra manera lo confrontaría directamente con agresiones discriminatorias; prefieren autodiscriminarse para que el patrón (a) aparente sin esfuerzo un trato de igual a igual."
Otra persona entrevistada expresó : "Mi familia no se sienten negra, se sienten gringos, y cuando pueden llegar al terruño de vacaciones, nos tratan de demostrar su superioridad; lo (as) que nos quedamos somos atrasadas porque queremos, y su conducta ante los servicios en general, (con sus billetes verdes como símbolos de su poder personal) los lleva a maltratar a quienes los atienden, quejándose de la atención, del desorden, de la falta de creatividad, etc; "si esto sucediera en Estados Unidos hasta podría demandarlos" expresan los pobres disfrazados de ricos".
Este desarraigo es un mecanismo de defensa, que trata infructuosamente de lograr un equilibrio personal y colectivo que les ayude a no enfrentar de manera consciente el dolor que se siente aql estar desvinculado de su terruño.
De tal manera que su actuar en el territorio del " sueño americano" es distinto; como no se integran realmente al "American Way of Life", les queda la alternativa de sumarse a otro (as) nicaragüenses, alquilan parques para jugar béisbol con equipos que llevan los nombres de la "patria olvidada", venden comidas típicas, toman licores del país tropical, y se interrelacionan cubiertos con una sombrilla mayor, la de ser representantes de un país llamado Nicaragua, una identidad que los refuerza como colectivo, porque las otras puertas están cerradas. Una especie de odio – amor que les proporciona el equilibrio necesario para que la negación de sí mismos y su autoestima salgan lo mejor librada posible en el marco de contradicciones que lo (as) entrevistadas en este estudio señalaron.
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