- Datos formales de la investigación
- Antecedentes de la investigación
- Planteamiento del Trabajo
- Análisis
- La reestructuración de Deng Xiaoping. ¿Hacia una Revolución Económica-Ideológica y Estructural?
- Conclusiones
- Bibliografía
"Partiendo de la necesidad de construir el socialismo como característica china integrando los preceptos básicos del marxismo con las condiciones actuales de China, debemos mantener la política de vigorizar la economía interna y de apertura al mundo exterior, y acelerar la reestructuración de la economía nacional en su conjunto, pero concentrando la atención urbana para crear una situación nueva y favorable a nuestra modernización socialista"
(12º Comité central del Partido Comunista chino. 3º sesión plenaria: 20 de octubre de 1984. HUNG YU – CHIAO: "Decisión del comité central del partido comunista chino sobre la reforma de la estructura económica". Taipei, diciembre de 1984. En HUNG YU-chiao; "Reforma de la estructura económica del régimen comunista chino"; Edición de la Liga Mundial Anticomunista; República de China; 1985. Pág. 2)
Datos formales de la investigación
Título de la investigación:
China después de Mao
Investigador:
Andrea Mella Figueroa.
Resumen de la investigación:
El trabajo analiza la reestructuración de China post Mao Zedong, principalmente desde el punto de vista económico pues es desde este punto que se trastocan los demás ámbitos de la sociedad –político, social, cultural, por citar algunos- mas, destacamos que la presente investigación tiene su objeto de estudio en las reformas económicas implementadas por China luego de la muerta de Mao Zedong por cuanto significan precedentes del cambio social, y son expresión misma de este. No es interés del presente trabajo analizar esta medidas en su dimensión económica, por cuanto no se poseen los conocimientos plenos para este estudio.
Antecedentes de la investigación
2.1.1 Definición del Problema a investigar:
El problema a investigar trata sobre la relación que se establece entre los ámbitos político y económicos estudiados específicamente en la aplicación de las reformas económicas de Deng Xiaoping en 1978 y como éstas han influido o no, en la organización política.
La importancia de resolver el tema planteado:
La importancia de resolver el problema planteado radica en que gracias al estudio del ámbito económico, pero no dejando de lado la variable política y social, luego de la muerte de Mao, se puede comprender cómo China puede proyectarse en el siglo XXI como una de las grandes potencias a nivel mundial.
Marco teórico y conceptual:
Al trabajar sobre una problemática desde el punto de vista económico se hace necesario aclarar algunos conceptos claves propios de este enfoque:
El concepto de socialismo se considera como el programa político de las clases trabajadoras que se ha formado en el transcurso de la revolución industrial.
La base económica del socialismo radica en la propiedad social sobre los medios de producción y de intercambio, en el sistema socialista de economía nacional sobre la base de la gran producción maquinizada en todas las ramas de la economía, en la supresión de la explotación del hombre por el hombre, además de promover la igualdad social a través de la intervención de los poderes públicos.
El socialismo surge como resultado del cambio revolucionario del régimen capitalista por el socialista. Se establece durante el período de transición del capitalismo al socialismo mediante las transformaciones socialistas en todas las esferas de la economía y de la cultura. El fin del socialismo es dar satisfacción a las crecientes necesidades materiales y culturales de toda la sociedad y de cada uno de sus miembros sobre la base de desarrollar de manera incesante y planificada la economía nacional, de incrementar ininterrumpidamente la productividad del trabajo social. La economía socialista se apoya en la propiedad estatal (de todo el pueblo), que pertenece al pueblo entero en la persona del Estado, y en la propiedad cooperativo-koljosiana que es una propiedad de grupos, colectiva. La forma más madura, determinante y principal de la propiedad social unida al nivel más alto de socialización de su producción y a un elevado grado de organización del trabajo es la propiedad del Estado. Bajo su influjo y con su ayuda la agricultura se transforma en consonancia con los principios socialistas.
Bajo el socialismo, se conservan la producción mercantil y las relaciones monetario-mercantiles, se utilizan la ley del valor, el cálculo económico, el dinero y la circulación de mercancías. También se conservan las diferencias esenciales entre la ciudad y el campo, entre el trabajo intelectual y el trabajo físico. El socialismo no está libre de supervivencias del capitalismo -de cuya entraña ha salido- en la economía y en la conciencia de los hombres. En la sociedad socialista, el trabajo, liberado de la explotación del hombre por el hombre, no se ha convertido aún en la primera necesidad vital de los hombres. A todo ello se debe que, bajo el socialismo, sea necesario mantener en vigor la ley económica de la distribución de los bienes materiales con arreglo a la cantidad y a la calidad del trabajo invertido por cada trabajador, establecer el control social sobre la medida del trabajo y la medida del consumo. Las distintas formas de interés material son de esencial importancia para el crecimiento y perfeccionamiento ulteriores de la producción socialista, para elevar la productividad del trabajo social, para incrementar el bienestar de los trabajadores. En la economía del socialismo, las contradicciones no presentan carácter antagónico, se superan según un plan, haciendo que avancen los sectores rezagados, perfeccionando las formas y los métodos de dirección y planificación de la economía, buscando reservas y utilizándolas mejor, estimulando la actividad creadora de las masas trabajadoras. El modo socialista de producción se estableció por primen vez en la Unión Soviética. Se está construyendo en varios países de Europa, de Asia y de América en el decurso de la edificación socialista.
Los procesos recientes del socialismo han demostrado de forma cada vez mas evidente el peso que tienen las historias nacionales, la diversidad de la situación económica, el pluralismo de las tradiciones culturales y de las ideológicas. Es así como, basándose en esta realidad, aparece la teoría de las "vías nacionales al socialismo".
El comunismo lo entenderemos según la definición del 22o congreso del Partido Comunista Soviético, donde se establece que el comunismo se trata de "un sistema social, sin clases, con una forma de propiedad pública de los medios de producción y total igualdad para todos los miembros de la sociedad y donde el gran principio: de cada uno según su capacidad, a cada uno según necesidades"[1].
A pesar de que el comunismo como tal aparece en la época contemporánea, se pueden encontrar los orígenes del ideal comunista en la República de Platón y en el comunismo evangélico. En la época moderna, no es casualidad que las primeras grandes utopías comunistas (Utopía de Tomas Moro "me parece que allá donde se rige la propiedad privada, donde el dinero es la medida de todas las cosas, es muy difícil que se llegue a establecer un régimen político fundado en la justicia y en la prosperidad"[2]) aparecieran cuando se presencia la decadencia de los modos de producción y de la vida feudal y a la afirmación de las clases burguesas. También se pueden ver que los ideales comunistas emergen en el seno de la Revolución Francesa, de la Revolución Inglesa.
La concepción comunista de Marx y Engels esta vinculada a la organización industrial del mundo moderno: una de las características fundamentales de la concepción marxista es la función histórica de la burguesía, quien "no puede existir sin revolucionar continuamente los instrumentos de producción, y por lo tanto las relaciones de producción y todo el conjunto de las relaciones sociales"[3]. Con respecto a este punto, Baldó Lacomba nos habla que el motor que explica el cambio social son las transformaciones, las modificaciones, las contradicciones internas que se larvan en el seno de una formación social, en la base de ese todo. De todas formas, hay que tener en consideración que a partir de la participación de la burguesía en las formas de producción, se han llevado a cabo grandes adelantos que se traducen en mejoras para la humanidad. Ahora, el impacto para el mundo entero se puede explicar a partir de la masificación de la "economía de mercado", sustituyendo a las antiguas empresas nacionales por nuevas industrias que trabajan a partir de materias primas que provienen de todas partes del mundo – esto potenciado por los imperialismos desarrollados en el siglo XIX -. "Con ello termina todo aislamiento local o nacional y empieza un tráfico universal, una dependencia universal de las naciones entre si"[4].
El conflicto se desata cuando las fuerzas de producción se rebelan contra las relaciones de producción y a las relaciones de propiedad. Y frente a estos conflictos la burguesía los supera destruyendo por un lado de manera forzada una gran cantidad de fuerzas productivas y, por otro lado, conquistando nuevos mercados, o explotando aun mas los existentes.
Una de las derivaciones que pueden establecerse del socialismo y del comunismo es el maoísmo, aunque este concepto no se utiliza en China, podemos establecer que mas que una formulación ideológica se enfoca en una concepción alternativa a la del conjunto del movimiento obrero occidental y a la del movimiento comunista internacional vinculado al partido comunista soviético.
El elemento que motivó la experiencia histórica de Mao Zedong en 1927 fue la constatación y convicción del potencial subversivo que constituían los campesinos pobres en un país como China. Esta fuerza era el Partido Comunista Chino, formado con la opción cultural de intelectuales, tomando la tradición china de estos intelectuales como maestros, dirigentes y organizadores de las masas campesinas. Es así como "bajo la guía del partido" las masas podrían desempeñar una función histórica, así como el proletariado la desempeña en la sociedad burguesa de Marx. Mao derivó de Marx la concepción de las clases como partes componentes antagónicas de la sociedad y de Lenin la visión del partido como organización indispensable de la vanguardia para a dirección de la lucha revolucionaria, además de la denuncia del imperialismo como sistema mundial vinculado a la sociedad capitalista. Se da esta característica china que corresponde a tomar algo creado en el exterior para asimilarlo a partir de la propia realidad y tradición.
Luego de tomar el poder en 1949 y de realizar la reforma agraria que quitó la tierra a los propietarios que no la cultivaban para distribuirlo entre los campesinos pobres, Mao intentó elaborar una estrategia de desarrollo que permitiera concretar la victoria sobre la dominación extranjera y sobre los terratenientes con una sustancial eliminación de la miseria, sobre todo rural. Siempre estuvo convencido de que la industrialización era la vía indispensable para aumentar la cantidad de bienes producidos y de ingreso disponible para el pueblo chino. Sin embargo, nunca pensó que la industrialización pudiera resolver los problemas de los campesinos, carentes de capital para invertir, si no era posible multiplicar la producción, la productividad y por tanto, el ingreso de los campesinos de manera que se le garantizaran a la industria, al mismo tiempo, materias primas, capitales y mercados de salida.
Este aumento en el ingreso de los campesinos se podría obtener – según Mao – potenciando y racionalizando la inversión de trabajo por parte de los campesinos y organizando su actividad. Esta organización solo podía lograrse a través de estructuras socialistas. Desde este punto, entre 1955 y 1956 se promovió la colectivización de la agricultura y después la reestructuración de las instituciones políticas y productivas del campo en las llamadas "comunas del pueblo"
Con respecto a la estructura del mercado, es necesario comprender como la economía de mercado es la que actualmente tiene la preferencia, entendiendo que ésta es "aquélla en la que las relaciones entre productores y consumidores se rige por las leyes de la oferta y la demanda"[5]. Es por esto que el concepto de capitalismo adquiere importancia. El capitalismo posee ciertas características dentro del conjunto de conductas individuales y colectivas referentes a la producción, distribución y consumo de bienes. Estos rasgos se pueden considerar como: propiedad privada de los medios de producción, para cuya activación es necesaria la presencia de un trabajo asalariado formalmente libre; un sistema de mercado basado en la iniciativa y en la empresa privada; procesos de racionalización de los procedimientos directos e indirectos para la valoración del capital y la explotación de las oportunidades de mercado con fines de ganancia[6]La racionalización política culmina en la formación del sistema político liberal, que coexiste con el capitalismo ya que es el Estado quien brinda un marco legal para el funcionamiento del capitalismo como lo es la defensa de los derechos privados en la empresa y de la fuerza de trabajo de la explotación, además de la creación de infraestructura para la reproducción de esta fuerza de trabajo (transportes, educación, urbanismo). De todas formas, se hace necesario aclarar que este sistema capitalista no puede ser aislado, sino que mas bien debe considerarse en un contexto extraeconómico
Hipótesis del Trabajo:
"El sistema chino a partir de la economía de mercado conforme a los procesos de globalización y de influencia extranjera, ha debido adaptarse a estos nuevos elementos a través de cambios en el sistema económico abriendo los mercados y modificando las estructuras de producción pero no necesariamente modificando la estructura política, económica y social en su totalidad lo que lleva a un mantenimiento del sistema político en la actualidad a través del partido comunista junto con la aparición de un nuevo concepto: el sistema socialista de mercado chino. Todo este proceso se ve intensificado cuando Deng Xiaoping accede al poder".
Objetivos de la Investigación:
El objetivo principal de esta investigación es poder comprender las reformas, especialmente económicas, implantadas por Deng Xiaoping cuando asumió el poder en 1978. Este objetivo nació a partir de cuestionamientos propios realizados en una primera instancia. Las principales preguntas son: ¿Cuál es el sistema económico y político de la actual China? ¿Cuáles son los efectos que produce la apertura del mercado en China? ¿Cuáles son los pasos actuales de China con respecto a la propiedad privada? ¿Cuáles es el papel del Estado? ¿Cuál es la importancia del paso al capitalismo? ¿Cómo afectó la ideología de Mao a este proceso? ¿Cuáles son los beneficios de la "economía socialista de mercado"?
Como se puede ver, estas preguntas reflejan una cierta ignorancia con respecto a la temática, por lo que se hizo necesario una revisión, en primer lugar, de la historia de China para comprender los grandes procesos que ha atravesado a lo largo de los años.
Como objetivo secundario se puede establecer que corresponde a responder las preguntas formuladas en una primera instancia, para así poder obtener una amplia visión del proceso por el cual China atravesó, pero también para poder tener información, conocimientos para poder analizar su situación actual, que aunque no es trabajada en esta investigación, si se considera un objetivo implícito.
Metodología y Técnicas a emplear:
Las técnicas empleadas serán simples: acceso a material (bibliotecas, archivos, fondos, etc.), la condición y motivación de cada bibliografía. Esta investigación se ha concentrado en la revisión bibliográfica
En segundo lugar, se procederá a la utilización del material en la elaboración del proyecto.
Con el fin de obtener una amplia visión de la historia de China, como ya se aclaró, comenzaré a partir de los libros de Fairbank, "China, una nueva historia" y Carrington Goodrich, "Historia del pueblo Chino". A continuación se presenta una concisa y reducida historia de China que germina tras dichas lecturas.
Breve Historia de china
Podemos encontrar los vestigios más antiguos de su civilización entre los siglos XIX y XVII antes de Cristo donde vemos cerámica con decoración pintada geométrica y también cuchillos de hueso y hachas de jade.
En la antigua China hubo Tres Dinastías legendarias: Xia, Shang y Zhou, investigaciones nos llevan a concluir que estas dinastías se sucedían una a la otra mediante guerras, pero no hay evidencia de alguna intrusión violenta por parte de otras culturas. Por otra parte, las antiguas capitales de las dinastías Xia y Shang demuestran el poder de un reinado basado en una agricultura sedentaria y mediterránea, es decir, no tenían un comercio fluvial con culturas externas. Es durante estas dinastías que surge del primer gobierno central que comienza a expandirse a través de la guerra – donde ayudó la producción de armas de bronce -, el comercio y también la superioridad global de las funciones rituales y litúrgicas del rey quien era mediador entre los antepasado y fuerzas de la naturaleza y los súbditos.
El Estado surge finalmente a raíz de la conquista de los Zhou sobre la dinastía Shang cerca del año 1040 antes de Cristo. El dominio Zhou quedo constituido por medio del establecimiento de lo que se ha denominado una red feudal, a través de la concesión de tierras a los hijos de los gobernantes Zhou para dirigir a 50 o más estados vasallos. Aunque siguieron ocupando el parentesco para la organización política, crearon una nueva base de legitimidad adoptando la teoría del Mandato Celestial, es decir, el poder provenía de una deidad impersonal, el cielo que determinaba que familia era la mas apta para gobernar.
Durante este período se vislumbran a los sabios y profesores quienes buscaban definir las bases teóricas del poder estatal y del orden social y para aconsejar a los gobernantes de cómo volver a la edad de oro. Dentro de estos pensadores encontramos a Confusio (551 a.C) y Mencio (372 – 289 a.C).
Dentro de esta variedad de poderes, finalmente el rey Qin se otorgó a si mismo el título de Primer Emperador y para poder gobernar efectivamente se promovió la burocracia dividiendo el territorio en 31 condados y se creó una élite separada de la ya existente.
La dinastía Han comenzó a regir en el año 206 a.C., al igual que los Qin, la burocracia afirmaba el poder del Estado a través del correo gubernamental, los inspectores regionales, entre otros medios. Esta dinastía gobernó durante cuatro siglos donde aumentó la población y también la cantidad de tierras en manos de magnates locales, por otra parte, el crecimiento económico estimuló el comercio internacional y la expansión militar. Hubo un nuevo desarrollo, enriquecido por las aportaciones exteriores, en ciencia, arte, literatura, música, industria y deporte. Un ejemplo de este desarrollo es la creación de relojes de sol y de agua muy precisos.
Hacia fines del siglo II la dinastía Han es derrocada producto de conflictos que llevaron a una inestabilidad que se vio acentuada a las luchas de tres casas reales por acceder al poder durante medio siglo. La principal consecuencias de este conflicto fue la desintegración del poder central lo que favoreció a los poderes locales, a los grandes terratenientes y reapareció el feudalismo. Es en este período también donde el budismo aparece con fuerza siendo acogido por la población agobiada por las guerras internas, el hambre y la miseria. Su máxima atracción consistía en el haber introducido la idea del Karma que sustituyó a la noción fatalista.
Al mismo tiempo el taoísmo comenzaba a transformarse en religión: "organizó en un todo sistemático las primitivas creencias y costumbres originales que giraban en torno del culto a la naturaleza, que se consideraba animada"
Yang Chien, oficial de la dinastía Chou y fundador de los Sui (590 – 618) es el responsable de haber reunificado a China. Este gobierno a pesar de su corto tiempo, se le reconoce importantes obras: reinició la expansión territorial en el sudeste, se mejoró la administración interior, hizo construir el Gran Canal, restauró la Gran Muralla, el budismo que había sido perseguido volvió a tener el rango de oficial. Pero para llevar a cabo la centralización y las otras reformas se realizó una campaña de intolerancia que provocó el descontento popular, y a su vez luchas internas entre la familia real provocaron la decadencia de esta dinastía.
La época de la dinastía Tang (618 – 907) es considerada una de las más prósperas y gloriosas. Gobernado por hombres movidos por la lealtad y el bien común, el pueblo chino vivió en tranquilidad y con abundancia. Chang An, la capital del imperio, se convirtió en la metrópolis más grande del planeta, con más de un millón de habitantes provenientes de todos los rincones del mundo. Después de que el país estuvo pacificado, Imperio fue dividido primero en 10 y luego, en el 733 en 15 provincias. Se dio un impulso a la educación, las tierras abandonadas durante las guerras civiles fueron distribuidas nuevamente (lo que solucionó el problema de los impuestos y sirvió para estabilizar al campesinado), aunque se le dio prioridad a la religión oficial, el confusionismo, prevaleció la tolerancia religiosa, se publicó un nuevo Código de leyes en el año 653. Pero el invento mas importante realizado en la dinastía Tang fue la imprenta con letras de madera que hizo posible la reproducción de textos a gran escala, y también permitió el papel moneda que reemplazó a las antiguas monedas.
"La era de Sui – Tang fue un período de rejuvenecimiento para China, en la cual las energías de los diversos estados, largo tiempo disipados por las luchas intestinas, se juntaron para llevar adelante al Imperio". Pero como había resultado de las otras dinastías, las amenazas externas e internas terminaban por colapsar el régimen que otra vez se dividió en diversos estados, el período que sigue a la dinastía Tang es conocido como el de las cinco dinastías y de los diez estados independientes: la guerra era general, la administración de la ley era rigurosa, con un alto grado de corrupción entre los funcionarios, se realizaron numerosos reclutamientos tanto para el servicio militar como para el trabajo, la descentralización del poder hizo que bajara la moneda tanto que el trueque se generalizó, en resumen una anarquía en gran parte del país. Carrington postula que este es uno de los períodos de mayor crisis en la historia de China, pero el recuerdo de la unión anterior (concepto que no era propio de Europa) asociado al orden, a la prosperidad y a la posibilidad de gloria hizo que se optara por la vía de la unión.
La dinastía de Sung (960 – 1279) volvió a reunir el poder en sus manos, al contrario de las de Han y Tang, esta dinastía no se distinguió por el aumento de dominios, los enemigos que rodeaban a China eran poderosos y el ejército imperial era deficiente por lo que las conquistas no fueron importantes. Pero lo que si se destaca en este período es la maduración de los elementos incorporados durante las dinastías Han y Tang. La arquitectura naval llegó a su propio desarrollo y con ello el tráfico marino favoreció el uso de artículos importados y un contacto más amplio con otros pueblos como los judíos y árabes. Otro importante adelanto corresponde a la aplicación de la pólvora y en la medicina se introdujo la vacunación contra la viruela.
Paralelamente a la dinastía Sung aparecía el poder de los mongoles, pueblo que puede ser identificado desde el siglo IV. En 1213, Gengis Khan consiguió entrar en China tras conquistar un paso de montaña y comenzó la conquista del Imperio central pero por problemáticas en los territorios conquistados, su hijo, Agdai comenzó la dinastía Yuan (1260 – 1368). Quizás el emperador más destacado es Kublai, nieto de Gengis Khan, quien detentó el mayor poder en la historia de China, al ser el emperador que más territorios ha tenido bajo su poder.
Nuevamente el descontento entre la población y de las otras casas reales provocaron revueltas que llevaron a la decadencia de una dinastía, esta vez surgen los Ming (1368 – 1644). Las primeras preocupaciones fueron la reorganización del territorio, la eliminación de amenazas subversivas, la promulgación de un nuevo código, la reconstrucción de las defensas del país, entre otros. También se lanzó una campaña de expediciones navales cuyas razones aun se desconocen pero sus consecuencias fueron beneficiosas para la economía y dieron un gran prestigio exterior. Pero estas expediciones cesaron súbitamente y sin un motivo claro aún y se revivió la política de que los barcos chinos no se aventuraran fuera de las aguas costeras con el objetivo principal de la defensa del territorio. Es desde este momento en que se prohíbe el contacto con extranjeros y China se cierra en sí misma mientras Europa iniciaba las expediciones por todo el globo. Los portugueses llegan a las costas chinas en 1514, y luego lo hacen los españoles, holandeses y rusos. China también cedió el poder a Japón quien atacó directamente sus costas.
Las mayores innovaciones de este período se pueden atribuir al Nuevo Mundo, en productos se destaca la incorporación del choclo, del cacahuate, el tabaco y de los camotes (donde el 2005 China es el principal productor mundial, cultivando el 83% del total mundial). También se realizaron innovaciones en la literatura, reinterpretación de estudios (geografía, filología, diccionarios, enciclopedias, obra de crítica literaria y artística), obras de ficción. En resumen este período se aprecia la fuerte influencia Europea que vivía el Renacimiento.
En el siglo XVI aparecen nuevas revueltas campesinas acompañadas de una crisis en el ejército que debilitaron al gobierno sumado a la aparición de los manchúes (1644 – 1912), pueblo extranjero descendiente de los jurchen [antepasados de los manchúes] que conformaron la dinastía Ching o Qing. Esta dinastía conservó casi intacta la forma de gobierno de los Ming. Tampoco se introdujeron cambios económicos o sociales de importancia en la vida china, ni tampoco hicieron cambios para transformar su economía. Adoptaron la política de dejar las cosas como antes lo que dio espacio para reparar y conservar las obras públicas, aplastaron levantamientos, ayudaron a las zonas más pobres, lo que permitió al pueblo chino levantarse de los períodos de crisis anteriores y se consagraron una vez mas a las artes.
Continuando con lo sucedido en la dinastía Ming, se aprecia un aumento en el comercio con europeos, "se estima que entre 1571 y 1821 entraron en las Filipinas, procedentes de la América española, 400.000.000 de dólares plata" y también relaciones comerciales con portugueses, holandeses, japoneses, indios, árabes. A partir de 1664 los ingleses comenzaron a comerciar en Cantón y poco a poco comenzó a aumentar hasta superar al holandés en 1689. China exportaba hojas de té, mahón (piezas de algodón crudo), seda, porcelana, y en menor grado exportaban papel tapiz, alfombras, joyas, abanicos, sillas, entre otros. "Incluso el gran Imperio chino se vio obligado, en 1839 – 1842, a abrir sus fronteras a la explotación occidental. En 1848 nada se oponía a la conquista occidental de los territorios"[7]
Es en este período donde comienza el comercio del opio que era producido en China desde el siglo XV pero que producto de su masificación fue importada por portugueses, holandeses, norteamericanos (desde 1810) e ingleses quienes encontraron productivo este tipo de comercio. "Solamente la conservadora y autárquica China se negaba a comprar lo que Occidente o las economías controladas por Occidente le ofrecían, hasta que, entre 1815 y 1842, los comerciantes occidentales, ayudados por los cañoneros occidentales, descubrieron un producto ideal que podría ser exportado en masa desde la India a Oriente: el opio".[8] La costumbre de fumar opio se extendió tanto que fue prohibida por decreto imperial en 1729 y su importación suprimida en 1800, medidas que no surtieron efectos pues hacia 1821 entraban anualmente en Cantón unas 5.000 cajas. Las principales consecuencias fueron la disminución de la plata en China, la corrupción de los funcionarios reales y una gran cantidad de población inactiva. Para solucionar estos problemas el gobierno manchú intervino quemando una gran partida de opio lo que desencadenó la guerra con los ingleses que alegaron sus derechos comerciales, llamada la primera "Guerra del Opio" (1839 – 1842), que ganaron sin problemas y China debió aceptar el tratado de Nankin (1842) que la obligaba a entregar 21 millones de dólares de plata como indemnización de guerra, a ceder a Gran Bretaña Hong Kong y abrir los puertos de Cantón, Amoy, Fuchu, Ningpo y Shanghai. Estas ventajas que obtuvieron los británicos se extendieron a los estadounidenses (tratado de Macao 1844) y a los franceses (tratado de Whampoa 1844). Sin embargo, otros incidentes dieron lugar a la segunda "guerra del Opio" (1858 – 1860) que terminó con el tratado de Tientsin (1858) que estipulaba embajadas extranjeras, apertura de once nuevos puertos, libertad de misiones para predicar la fe, la extraterritorialidad y el pago a Gran Bretaña y Francia de grandes indemnizaciones. A su vez, las potencias europeas y Japón invadían los límites del Imperio, lo que representa el "reparto de China" que se produce en esta época donde la soberanía china es pasada a llevar. Finalmente la guerra franco – china (1884 – 1885), la guerra con Japón y la ocupación alemana le privaron de diversos territorios además de indemnizaciones y concesiones.
A principios del siglo XIX la dinastía Ching ya se encontraba en crisis, su autoridad era combatida dentro y fuera a la vez. Existía una incompetencia administrativa producto de la corrupción de los funcionarios, la corte y sus consejeros trataron de adoptar una política de aislamiento frente a los conflictos. Cantón fue el único puerto de entrada y se dio un monopolio de comercio extranjero a una pequeña asociación de cambistas lo que provocó reclamos por parte de Gran Bretaña y otros países quienes solicitaron Hong Kong y la apertura de once puertos al comercio, derechos extraterritoriales para sus súbditos, la legalización de las importaciones de opio.
Pero también en el interior del pueblo chino existía resistencia. Así es como se producen frecuentemente rebeliones que causaron numerosas muertes y daños materiales: la dinastía estaba en claro peligro pero aun no colapsaba la estructura que la sostenía.
A partir de 1870 producto de las Guerras del Opio se realizaron varias violaciones de la soberanía china: se abrieron mas puertos, se exigieron indemnizaciones, se tomaron posesiones.
En 1900 la sociedad secreta Yihetuan o boxers, alentada en su antioccidentalismo por el poder manchú desencadenó motines contra los misioneros y extranjeros lo que provocó que un ejército internacional avanzara sobre Pekín. China se vio obligada a aceptar un protocolo (1901) que la obligaba a entregar una gran indemnización y aceptar la presencia de tropas extranjeras.
La presencia del capitalismo y sus contradicciones introducidas por las potencias extranjeras fueron las que crearon las fisuras a partir de las cuales se produjo este movimiento de liberación, influido también por el comunismo.
El nacionalismo antimanchú, el patriotismo en contra de las intervenciones extranjeras y la voluntad de modernizar el estado se reunieron en un movimiento dirigido por Sun Yat-sen quien el 10 de octubre de 1911 transformó una revuelta local en una insurrección general que se inicia con el Levantamiento de Wuchang y que se extiende hasta 1912, todo este proceso es llamado la revolución de Xinhai, que derrocaría el régimen imperial y daría lugar a la fundación de la República de China.
Dicha república se proclama en Nankín y se elige a Sun Yat-sen como presidente provisional y a Yuan Shikai (poderoso militar del antiguo régimen) como primer presidente definitivo. El concepto occidental de la República introdujo diferentes elementos ajenos a la historia política de China como lo es una Constitución que establecía un sistema parlamentario y elecciones periódicas. Para participar en estas elecciones, la Sociedad de la Alianza de Sun Yat-sen se convirtió en un partido político con el nombre de Partido Nacional Popular, el Kuomintang (KMT). Yuan Shikai no estaba dispuesto a dejar el poder por lo que se enfrentó con el KMT donde salió victorioso quedándose con el poder. Pero su muerte en 1916 echó por tierra sus intentos de instaurar un gobierno monárquico.
Los años siguientes estarían marcados por la lucha por el poder que termina en 1926 cuando Chiang Kai – Chek, en la Expedición del norte en contra de los "señores de la guerra". Entre los años 1927 y 1949 el gobierno chino estuvo en manos de Chiang Kai – Chek, imponiéndose con él, el dominio del Kuomintang. Para enfrentar los desastres de la guerra civil se adoptó una política de reconstrucción, de desarrollo económico y de reunificación territorial lo que trajo el apoyo popular. Pero el peligro de la invasión japonesa y de la expansión del partido Comunista lo llevaron a implantar un régimen dictatorial.
En este período donde se intensifican los conflictos con Japón, entre los años 1931 y 1933 se apoderó de Manchuria, sitió e incendió parte de Shangai e invadió Jehol, al norte de Pekín. Estas conquistas fueron demasiado fáciles para Japón que decidió intensificar los ataques en 1937. Pero la entrada de los Estados Unidos en la Segunda Guerra Mundial frenó el avance japonés en China. Tras la derrota de Japón, la tensión entre el KMT y el Partido Comunista continuó aumentando, ambos luchaban por el control de las bases.
El 1 de octubre de 1949 Mao Tse-tung proclama la República Popular de China. La organización se realizará de acuerdo a los estados socialistas: las estructuras sociales integran a sus miembros en todos los aspectos de su existencia: políticos, económicos, domésticos, culturales. La "unidad" es la encargada de tomar decisiones, establecer plazos, unidad que puede ser represiva pero a la vez dar espacios de libertad distanciados de la política.
Durante la República Popular China hasta la muerte de Mao podemos establecer cinco etapas:
La primera que va de 1949 a 1957 corresponde a la etapa de reconstrucción, en los que el nuevo régimen inicia una seria de modernización de la sociedad, pero también se establece un sistema autoritario alineado con el modelo soviético, pero admitiendo una parte de economía liberal. La reforma agraria y los objetivos políticos y sociales mas que económicos son los importantes. En 1953 se inicia el Primer Plan Quinquenal. Se racionalizan las empresas privadas y se acelera en 1956 la colectivización agraria, año en que también la doctrina de las Cien Flores en la que Mao parece reconocer libertades democráticas exclusivamente a obreros y campesinos, aunque es abandonada dos años mas tarde. En Segunda Etapa (1958 – 1962) es el Gran Salto Adelante donde se busca industrializar el país aunque con un cierto atraso en lo agrícola. En 1960 se produce la ruptura chino – soviética. En la Tercera Etapa (1963 – 1965) se corrigen los errores de la política económica, y en la Cuarta Etapa (1969 – 1976) la economía logra crecer con tasas relativamente altas (en torno al 7%). En 1976 con la muerte Mao, se produce una lucha por la sucesión y las primeras manifestaciones de la población en Tiananmen en apoyo a las ideas de Deng Xiaoping, quien sale victorioso como líder supremo.
A partir de la década del 70, China se había acercado a los Estados Unidos, pero cuando Deng Xiaoping llega al poder en 1978 se produce el acercamiento definitivo y se rompe con las doctrinas de Mao. En lo correspondiente a lo diplomático se hizo con Estados Unidos un frente común contra la URSS; en lo económico se dejó de lado la política autárquica para integrarse en los circuitos comerciales y financieros internacionales; la política exterior se caracterizó por favorecer a Estados Unidos.
También durante el mandato de Xiaoping se inicio la política de las "Cuatro Modernizaciones" que corresponden
1. Agricultura: donde se abandonaron los intentos de colectivización, es decir, el estado seguía siendo el propietario de la tierra pero la explotación pasó a los medianos y pequeños campesinos, lo que a la larga llevó a un aumento de la productividad.
2. Industria: Se apostó por el desarrollo de la industria ligera orientada a la exportación, basándose en el principio de "puertas abiertas"
3. Ciencia y tecnología
4. Fuerzas Armadas: La introducción del capitalismo a la China socialista tuvo grandes beneficios como también grandes costos y obstáculos como la falta de personal calificado y el gran crecimiento demográfico.
Una vez comprendida la historia de China a través de sus grandes procesos, entonces es pertinente profundizar en los cuestionamientos particulares de la investigación.
La reestructuración de Deng Xiaoping. ¿Hacia una Revolución Económica-Ideológica y Estructural?
"La muerte de Mao, el 9 de septiembre de 1976, daba comienzo a una nueva etapa que acabaría liquidando al maoísmo. Varios hechos confirman esta liquidación: el encarcelamiento de la denominada Banda de los Cuatro encabezada por la mujer de Mao, Chiang Chin, en octubre de 1976 y el juicio posterior; la reunión del XI Congreso del PCCh para sancionar el golpe contra los izquierdistas de la Revolución Cultural en agosto de 1977; abandono del modelo maoísta de política agraria en octubre de 1979 y, sobre todo, la vuelta al poder y su consolidación en él del nuevo hombre fuerte de China: Deng Xiaoping"[9].
Primeramente debemos analizar que es lo que se heredó de la administración de Mao. Jonathan Story en su libro "China: Como Transformará Los Negocios, Los Mercados Y El Nuevo Orden Mundial" nos aclara este panorama donde, según este autor, China había heredado "el sistema centralizado instaurado por Mao mostró su capacidad de movilización masiva de los recursos. China había conseguido montar un sistema industrial propio y había dado un gran paso para autoabastecerse en el sector alimentario. En el lado negativo, el sistema de planificación ni había alcanzado el control buscado ni la eficacia. […]En 1978 China era un país desesperadamente pobre"[10].
Es en estas condiciones que China comienza un período de asimilación de ideas y prácticas reformistas, conforme el ejemplo húngaro, yugoslavo (ambos habían puesto en práctica una importante reforma económica) pero sobre todo, de países capitalistas como Japón (Hsuan Mo, 1985). Razón por la cual, hacia 1979 es posible notar un cambio en las condiciones del agro y la industria, ambas encaminadas hacia la liberalización económica, al tiempo que comenzaba la apertura de ésta al exterior; no sólo al reanudar las relaciones con la URSS, sino al firmar acuerdos comerciales con EE.UU. Se aprecia un abandono de la primacía de la ideología, donde los lemas maoístas "la política al mando" y "el revolucionario sobre el experto" fueron reemplazados por el antiguo lema de estadista "Busca la verdad en los hechos"[11].
Las cuatro modernizaciones
Estas grandes transformaciones planteadas por Deng Xiaoping se concretizan en las llamadas "Cuatro Modernizaciones" que se enfocaban en los ámbitos de agricultura, donde se abandonaron los intentos de colectivización, es decir, el estado seguía siendo el propietario de la tierra pero la explotación pasó a los medianos y pequeños campesinos, lo que a la larga llevó a un aumento de la productividad; Industria, donde se apostó por el desarrollo de la industria ligera orientada a la exportación, basándose en el principio de "puertas abiertas"; ciencia y tecnología; y fuerzas armadas, donde a partir la introducción del capitalismo a la China socialista tuvo grandes beneficios como también grandes costos y obstáculos como la falta de personal calificado y el gran crecimiento demográfico.
Además emitió en 1979 los "Cuatro Principios Cardinales": "China debía continuar en la senda de 1) la vía socialista, 2) la dictadura del proletariado, 3) el liderazgo del partido, y 4) el marxismo – leninismo unido al Pensamiento de Mao"[12]
De esta forma, en los inicios del gobierno de Deng Xiaoping se plasmaba la dicotomía que hasta el día de hoy provoca grandes estudios: una economía abierta al mundo, capitalista; y por otra, el sector político monopolizado por el Partido Comunista Chino (PCCh) apoyado ideológicamente por el pensamiento de Mao.
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