El sistema ISO 14 001 en empresas seguras y limpias (página 2)
Enviado por José Manuel Castorena Machuca
Tabla 2. Diferencias conceptuales y metodológicas entre la economía ecológica y la economía ambiental. (Fuente: Van den Bergh, 2000)
ECONOMÍA ECOLÓGICA
ECONOMÍA AMBIENTAL
1. Utiliza una escala óptima
2. Su prioridad es la sostenibilidad
3. Necesidades completas y distribución equitativa
4. Desarrollo Sostenible
5. Es pesimistas en relación al crecimiento y a las preferencias individuales
6. Co evolución impredecible
7. Maneja una concepción del tiempo histórico irreversible
8. Ciencia completa, integral y descriptiva
9. Es concreta y especifica.
10. Utiliza indicadores físicos y biológicos
11. Utiliza el análisis de sistemas
12. Utiliza la evaluación multidimensional
13. Integra modelos con relaciones causa efecto
1. Utiliza conceptos de localización óptima y externalidades.
2. Su prioridad es la eficiencia
3. Bienestar óptimo y "eficiencia paretiana"
4. Crecimiento sostenible
5. Es optimista con relación al crecimiento y a las opciones "ganar- ganar"
6. Optimización determinística y bienestar intertemporal
7. Maneja una concepción del tiempo cronológico, lineal y reversible.
8. Ciencia mono disciplinaria, parcial y analítica.
9. Es abstracta y general
10. Utiliza indicadores monetarios
11. Utiliza la teoría de las externalidades y la valoración económica
12. Utiliza el análisis costo-beneficio y costo efectividad.
13. Aplica modelos de equilibrio general.
Principales acontecimientos del medio ambiente, hacia el desarrollo sostenible.
Durante los años sesenta y setenta la contaminación ambiental se intensificó y se extendió, lo que elevó la conciencia ecológica en algunos sectores de las sociedades industrializadas, dando lugar a nuevas ideologías ambientalistas, siendo algunas de éstas contrarias al crecimiento económico.
En el año de 1968, un grupo de especialistas y científicos de varios países se dieron cita en
Roma, bajo la presidencia de un economista e industrial italiano, Aurelio Peccei, con 70 miembros especializados en diversas disciplinas que coinciden en aseverar que se hace urgente poner remedio a la situación mundial. Este grupo realizó un modelo sobre la dinámica probable de la situación del mundo, en donde eligen cinco fenómenos críticos: la población en continuo aumento, producción industrial, producción agrícola, los diferentes tipos de contaminación que se crean con las dos variables anteriores y el consumo que se hace de los recursos naturales; en donde finalmente se concluye que "todas las proyecciones basadas en el crecimiento conducen a la catástrofe" Furtado (1976, p.127).
De este acontecimiento surge el informe Meadows, del Massachussets Institute of Technology realizado por el Club de Roma en 1972 sobre los límites del crecimiento, que supuso la primera voz de alarma y el inicio del proceso de concienciación, al plantear límites al crecimiento económico con efectos catastróficos para los sistemas económicos y ecológicos.
Las conclusiones que plantearon en dicha investigación fueron:
1) Si las actuales tendencias de crecimiento en la población, industrialización, contaminación, producción de alimentos y la explotación de recursos continúan sin modificaciones, los límites en el planeta se alcanzarán en los próximos cien años; y como consecuencia disminuiría la población y la capacidad industrial.
2) Es posible alterar estas tendencias de crecimiento y establecer unas condiciones de estabilidad económica y ecológica capaces de ser sostenidas en el futuro. El estado del equilibrio global puede ser diseñado de tal forma que las necesidades materiales básicas de cada persona sobre la tierra sean satisfechas y tengan igualdad de oportunidad para realizar su potencial humano individual.
3) Si la población del mundo decidiera encaminarse en este segundo sentido y no el primero, cuanto antes inicie esfuerzos para lograrlo, mayores serán sus posibilidades de éxito (Meadows, 1972).
La alternativa que proponen en sus conclusiones, es la de crecimiento cero, es decir, aquella situación en la que no hay crecimiento económico; por lo que esta publicación causó mucha polémica.
Surge el antecedente directo del desarrollo sustentable: el eco desarrollo, concebido como un estilo de desarrollo en el que armonizaran los objetivos sociales y económicos con un manejo de los recursos y del medio ambiente que sea ecológicamente adecuado. Término utilizado por primera vez en 1973 por Maurice Strong, para dar a entender una idea de desarrollo económico y social que tomase en cuenta la variable ambiental. El eco desarrollo promueve que las sociedades se organicen en función del uso racional de sus respectivos ecosistemas, los que se valorizan gracias a la adopción de tecnologías adecuadas y lo que supone además, basar el desarrollo en el esfuerzo propio y la recuperación de los valores tradicionales, asumiendo como elemento básico la autodeterminación (Bifani, 1999).
En 1987 la Comisión Mundial del Medio Ambiente y Desarrollo, presidida por Gro Harlem
Brundtland, publicó un informe llamado: "Nuestro futuro común", en respuesta a la demanda de la Asamblea General de las Naciones Unidas, en el cual se planteaba la necesidad de realizar un programa global para el cambio, el cual tenía la finalidad de:
a) Proponer estrategias medioambientales a largo plazo para alcanzar un desarrollo sostenible para el año 2000 y a partir de esta fecha.
b) Recomendar que la preocupación por el medio ambiente pudiera traducirse en una mayor cooperación entre los países en desarrollo y entre los países que poseen diferentes niveles de desarrollo económico y social que condujera al establecimiento de objetivos comunes que tuvieran en cuenta la interrelación entre los hombres, los recursos, el medio ambiente y el desarrollo.
c) Examinar los cauces y medios mediante los cuales la comunidad internacional puede tratar los problemas relacionados con el medio ambiente y ayudar a definir las sensibilidades comunes sobre las cuestiones medioambientales a largo plazo.
d) Realizar los esfuerzos pertinentes necesarios para resolver con éxito problemas relacionados con la protección y mejora del medio ambiente, así como ayudar a elaborar un programa de acción a largo plazo para los próximos decenios y establecer los objetivos a los que aspira la comunidad ambiental (Martínez, 1995).
Por otra parte, en dicho informe presentado por la Comisión, se formaliza el concepto del desarrollo sostenible, el cual aparece por primera vez en 1980 en el informe de la
International Union for the Conservation of Nature and Natural Resources, titulado Estrategia Mundial para la Conservación. La idea de desarrollo sustentable empezó a tomar forma a partir del reconocimiento de que todas las sociedades tienen derecho a desarrollarse, siempre y cuando ninguna de ellas atente contra las posibilidades de desarrollo de otra. Es así que el desarrollo sostenible, fue retomando en 1987 por la Comisión Mundial sobre el Medio
Ambiente, para proponer la celebración de una conferencia internacional, en donde se tratara de implantar un estilo de desarrollo que satisfaga las necesidades del presente sin comprometer las de generaciones futuras.
En el año de 1991 los autores de "Los límites del crecimiento", retoman y continúan con dicha investigación, tomando, además, como referencia el informe Brundtland y el concepto de desarrollo sostenible y surge una nueva publicación denominada "Más allá de los límites del crecimiento", en donde sostienen que se utilizan recursos y producen desechos a tasa que no son sostenibles, y proponen para cambiar esta tendencia:
a) Los insumos globales de energía y materiales se pueden reducir incrementando su eficiencia.
b) Se pueden elevar los límites tanto como sea posible mediante técnicas al alcance del hombre.
c) Se pueden mejorar las señales y acelerar las reacciones; la sociedad puede mirar más adelante cuando evalúa los costos y beneficios de las elecciones actuales.
d) Se puede prevenir la erosión y, donde ya existe, se la puede revertir.
e) El crecimiento de la población y del capital pueden hacerse más lentos y eventualmente detenerse (Martínez, 1995).
Por otra parte, a partir de los programas establecidos en la Comisión Mundial del Medio
Ambiente, se realizó en 1992, en Río de Janeiro, Brasil, la Conferencia Internacional sobre el Medio Ambiente y Desarrollo, en donde el objetivo principal era el de conseguir consenso internacional para favorecer la cooperación entre países en materia medioambiental y desarrollo. En el ámbito de la gestión de los recursos se trataron temas de relevancia como: protección de la atmosfera, racionalización en la utilización de las tierras, acciones contra la deforestación y desertificación, desarrollo agrícola sostenible, protección de océanos y recursos de agua dulce, gestión de eliminación de residuos, conservación de la diversidad biológica y gestión de la biotecnología.
Tanto en la Comisión Mundial del Medio Ambiente, como en la Conferencia Internacional sobre el medio Ambiente y Desarrollo se consideraron como principales problemas:
a) La presión demográfica, es decir el crecimiento exponencial de la población mundial,
b) La degeneración de los recursos naturales:
1) Pérdida de los recursos del suelo; el grave proceso de erosión, que muchas veces se vuelve irreversible por la intensa utilización del suelo agrícola, generando una sobreexplotación mediante el uso indiscriminado de fertilizantes, pesticidas etc.
2) Contaminación del suelo; causada por la agricultura y ganaderías modernas debido a la utilización de biosidas y fertilizantes.
3) Deforestación; la destrucción de los bosques debido a la producción de leña como combustible, la exportación de madera y la apertura de tierras para agricultura y ganadería
4) Biodiversidad en peligro; generada por los procesos de degeneración del medio ambiente, que pone en peligro la supervivencia de numerosas especies, lo que crea grandes desequilibrios en el ecosistema.
5) Deterioro de las condiciones atmosféricas; el efecto invernadero por la excesiva emisión de gases a la atmosfera, el agujero de la capa de ozono y la lluvia ácida que afecta negativamente a los ecosistemas.
6) Contaminación de las aguas; por la gran cantidad de residuos tóxicos de origen industrial que son vertidos a las fuentes de agua dulce.
c) Los desequilibrios urbanos; el crecimiento de la urbanización que da lugar a núcleos urbanos que son grandes fuentes de contaminación.
d) La cuestión energética; agotamiento de materias primas no renovables como el petróleo y el gas natural (Martínez, 1995).
En la Conferencia de Río de Janeiro en 1992, se desarrollaron documentos en donde se resumen el establecimiento de estrategias y medidas conjuntas para combatir la degradación ambiental en el marco de un desarrollo económico compatible con el medio ambiente, que son los siguientes:
a) La Declaración de Río, la cual recoge los principios básicos que permiten alcanzar el desarrollo sostenible. Fija el marco para los derechos y obligaciones individuales y colectivas en el campo del medio ambiente y desarrollo; se alude al nuevo sistema de colaboración entre países industrializados y en vías de desarrollo; establece el deber de los estados de promulgar leyes efectivas sobre el medio ambiente y la conveniencia de promover un sistema económico que eleve el crecimiento y el desarrollo sostenible de todos los países; recomienda además aplicar el procedimiento de evaluación de impacto ambiental para cualquier actividad de nueva implantación.
b) Agenda 21, programa dirigido a promover el desarrollo a través de sistemas económicos e industriales, en el cual los temas son: desarrollo sostenible, demografía, riesgos ambientales, protección de ecosistemas, conciencia ambiental, acuerdos internacionales, entre otros.
c) Convenio sobre Cambio Climático, cuyo objetivo consiste en reducir progresivamente las emisiones de dióxido de carbono y otros gases de efecto invernadero. Incluye disposiciones de información, de que todos los países deben elaborar un inventario sobre sus emisiones de gases de invernadero (Gómez, 2003).
Antes de realizarse la Conferencia Internacional sobre Medio Ambiente, representantes de la conferencia, solicitaron la presencia de dirigentes de la International Organization for
Standarization (ISO) para su oportuna participación en este evento, con la finalidad de crear nuevas normas ambientales internacionales. Atendiendo a esta solicitud, ISO convocó a sus miembros, en busca de asesores voluntarios, donde más de 25 países respondieron y formaron un grupo llamado Strategic Advisory Group on the Environment (SAGE).Una de las funciones que tuvo el grupo, era la de evaluar la necesidad de contar con normas internacionales de control ambiental, y considerar si las normas podrían servir para (Clements, 1997):
a) Promover un enfoque común a la administración ambiental, similar a la administración de la calidad.
b) Fomentar las habilidades de las organizaciones para obtener y medir mejorías en el desempeño ambiental.
c) Facilitar el comercio y retirar las barreras comerciales
Después de un tiempo, SAGE se dividió en 6 subgrupos para trabajar en diferentes disciplinas, quedando de la siguiente manera (Clements, 1997): sistema de administración ambiental-Reino Unido; auditoría ambiental- Países Bajos; clasificación ambiental- Canadá; desempeño ambiental- Estados Unidos; análisis de ciclo de vida– Estados Unidos y aspectos ambientales en normas sobre productos– Alemania.
A pesar de que la función de SAGE fue la de evaluar la necesidad de las normas ambientales, los subgrupos empezaron a elaborar normas en distintas áreas, por lo que de esta manera nace la serie de normas ISO 14000.
Por otra parte, para el año de 1997, los países industrializados se comprometieron en la ciudad de Kioto, a llevar a cabo medidas para reducir los gases de efecto invernadero, por lo que se retoma el documento propuesto en la Cumbre de 1992: "convenio sobre cambio climático". Es así como se aprueba el "protocolo de Kioto" sobre cambio climático, el cual es un acuerdo internacional que tiene por objetivo reducir las emisiones de seis principales gases que provocan el calentamiento global, en un porcentaje aproximado de 5%, dentro del periodo 2008 al 2012, tomando como referencia los niveles de emisión de 1990. Cabe señalar que la entrada en vigor del Protocolo fue en el año 2005.
En 2002, se llevó a cabo en Johannesburgo, Sudáfrica, la Cumbre Mundial sobre el Desarrollo Sostenible, Río + 10, en dicho evento participaron 180 países y los temas que se trataron principalmente son: agua y sanidad, energía, agricultura, biodiversidad y salud. Entre los principales objetivos están el de centrar la atención del mundo en la resolución de desafíos como la mejora en la calidad de vida de los seres humanos y la conservación de los recursos naturales, Hacer balance de los objetivos conseguidos desde el año 1992 en la Conferencia de Naciones Unidas sobre Medio Ambiente y Desarrollo, que tuvo lugar en la ciudad de Río de Janeiro y concretar los compromisos que permitan la consecución de un desarrollo sostenible en todo el planeta (Gómez, 2003). En dicha cumbre, se presenta un panorama de la situación desde la Conferencia de Río de Janeiro de 1992, que en términos ambientales se habla de un empeoramiento preocupante de la contaminación, producto del crecimiento económico, poblacional y algunos patrones de producción y consumo.
En el año de 2007, se realiza en Bali, la Cumbre de Naciones Unidas sobre Cambio
Climático, en donde se propone redefinir el protocolo de Kioto, adecuarlo a las nuevas necesidades y proponer un protocolo que sustituya al de Kioto cuando este expire en el año
2012. En la cumbre, se propone además, la idea de estudiar la manera de transferir tecnología a los países en desarrollo, para poder reducir la contaminación.
En la Tabla 3 se puede observar la relación de los eventos más importantes a nivel internacional referentes al medio ambiente.
Tabla 3. Principales eventos a nivel internacional en la formación de la conciencia ambiental.
Desarrollo sostenible
II.2.1 El desarrollo sostenible
El desarrollo sostenible se ha convertido en el principal concepto de investigaciones y estudios relacionados con la conservación del medio ambiente. Como se mencionó anteriormente, el desarrollo sostenible fue definido y retomado por el informe Brundtland como "desarrollo que satisface las necesidades del presente sin comprometer la habilidad de futuras generaciones de satisfacer sus necesidades" Capuz (2002, p.23). Existe también otra definición que se abordó en el documento Cuidando la Tierra que proporciona Union of Conservation Scientists (IUCN), United Nations Environment Programme (UNEP) and World Wide Fund for Nature (WWF), en el año de 1991, que lo describe como "mejorar nuestra calidad de vida, mientras se vive dentro de los límites de capacidad de los ecosistemas que nos rodean" Blanco (2004, p.19). A pesar de que el concepto tiene una amplia connotación ecológica, el desarrollo sostenible no se centra exclusivamente a cuestiones ambientales, implica también sostenibilidad económica y social. Según (Rodríguez, 1998) el desarrollo sostenible deberá ofrecer un sistema ecológicamente sano, económicamente viable y socialmente justo, como lo muestra la Figura 3.
Figura 3. Los pilares del desarrollo sostenible. (Fuente: Blanco, 2004, p.23)
De manera más específica, la sostenibilidad ecológica se refiere al uso responsable de los recursos naturales, al mantenimiento o aumento de la capacidad de los ecosistemas en uso; la sostenibilidad social supone la participación ciudadana como la forma de garantizar una adecuada educación, salud y otras cosas esenciales en la generación presente como en la futura, llamada también equidad intergeneracional; y la sostenibilidad económica: cerciora que las interacciones que se realicen con los recursos naturales beneficien de una u otra forma a los involucrados en los sistemas productivos (Blanco, 2004).
Por otra parte, en el desarrollo sostenible se parte de la idea de que el crecimiento es necesario para satisfacer las necesidades humanas básicas, por lo que el desarrollo sostenible requiere mucho más, es decir, el crecimiento debe cambiar para hacer menos intensivo el uso de recursos naturales. La Comisión Brundtland consideró que el desarrollo sostenible requiere, antes de que se alcancen los límites por el uso del medio ambiente, que la población tenga asegurado el acceso equitativo a los recursos, así como la reorientación de la tecnología para reducir el impacto; y también propone cambios en las actitudes, objetivos, legislación y acuerdos institucionales (Mitchell, 1999).
II.2.2 Principios para un desarrollo sostenible
Al definir el desarrollo sostenible, la comisión estableció una serie de principios con los que debe de cumplir toda sociedad sostenible, sin embargo, las condiciones económicas, sociales y ecológicas varían de un país a otro, por lo que la comisión concluyó, que no puede establecerse un modelo de desarrollo genérico que se aplique a todos los países, si no que cada nación debe establecerlo según sus condiciones, necesidades y oportunidades. En 1992 se declaran los principios del desarrollo sostenible. En la Tabla 4 se muestran algunos de los principios más relevantes de la declaración de Río de Janeiro.
Tabla 4. Principios de la Declaración de Río de Janeiro en 1992 del desarrollo sostenible.
(Fuente: Mitchell, 1999)
Estos principios implican según (Gómez, 2003):
a) Globalidad: el desarrollo debe abarcar a la totalidad de los seres humanos y dar prioridad a los más pobres.
b) Solidaridad en el espacio: el desarrollo debe resolver el mayor problema de la humanidad, la pobreza y evitar desequilibrios territoriales.
c) Solidaridad en el tiempo: el desarrollo debe garantizar el uso de los recursos naturales a las generaciones futuras.
d) Existencia de límites físicos al desarrollo marcados por la limitación de los recursos naturales.
e) Progresismo: el desarrollo debe propiciar la incorporación de la mejor tecnología disponible, siempre que sea económicamente viable y socialmente apropiada.
f) Económicamente realista: el desarrollo debe trascender las relaciones de intercambio basadas en el dinero para incorporar los procesos sociales y naturales.
En 1998, el Programa de Desarrollo de las Naciones Unidas acordó una agenda con siete planes de acción para conseguir el desarrollo sostenible:
1) Asegurar un mínimo de recursos para todos los habitantes del planeta, 2) desarrollar productos y servicios eco eficientes, 3) eliminar residuos causantes de desequilibrios y reestructurar los incentivos, 4) fortalecer la acción pública para proteger al consumidor, 5) fortalecer los mecanismos internacionales para gestionar los impactos globales del consumo, 6) construir alianzas fuertes entre las asociaciones de defensa de los consumidores, de los pobres y del medio ambiente y 7) desarrollar las sinergias entre la sociedad civil, el sector privado y la administración (Capuz, 2002).
El desarrollo sostenible contiene algunas paradojas, conflictos y limitantes en su aplicación, según Mitchell (1999), algunas de estas son:
a) Muchos países son dependientes a la tecnología, y esta ha facilitado un uso intensivo de los recursos naturales, soluciona problemas y crea oportunidades, pero al mismo tiempo ha causado degradación ambiental.
b) En muchos países se tiene la creencia de que la ciencia y tecnología permite a la sociedad comprender y controlar la naturaleza, sin embargo muchas veces el conocimiento es incompleto o inclusive erróneo.
c) Como se mencionó anteriormente en la definición y los principios, el desarrollo sostenible parte de que las necesidades de la generación actual no debería imposibilitar a las generaciones futuras a satisfacer las suyas; sin embargo, es difícil determinar, en cantidad, lo que debe ser usado y lo que debe ser preservado para uso futuro, y esto tomando en cuenta que una parte importante de la población ni siquiera tiene cubiertas sus necesidades.
d) Para el logro del desarrollo sostenible se requieren intercambios entre los intereses individuales y colectivos. De esta manera, en muchos países se ha favorecido la superioridad de los derechos individuales, y para que se pueda cumplir con dicho desarrollo sostenible, estos derechos tendrían que reducirse, ya que la mayoría de los problemas ambientales reflejan problemas colectivos, que surgen de la acumulación de efectos negativos de intereses individuales, situación que genera fuertes dificultades para llevarlo a cabo.
e) La mayoría de las sociedades e instituciones se resisten al cambio, generalmente al querer implantar nuevas vías o acciones a seguir, se generan tensiones y conflictos o simplemente se rechazan.
f) El desarrollo sostenible requiere la aceptación de la población local por lo que se piensa en el vía descentralizar o desconcentrar la toma de decisiones, llevándolas al gobierno local; sin embargo, esto no es muy válido, ya que existen problemas globales que requieren un planteamiento conjunto.
g) La unión de las palabras: desarrollo y sostenible, crea una expresión que utiliza juntas dos palabras con significado opuesto; en este sentido sustentable se refiere a una actividad que puede continuar a largo plazo y opuestamente desarrollo es interpretado como crecimiento, lo que implica utilizar cantidades adicionales de recursos para producir. Se debe determinar entonces, que clase de crecimiento se necesita para cubrir las necesidades humanas, cómo sostener este crecimiento y cómo puede asegurarse que el crecimiento no va a degradar de una manera inaceptable al medio ambiente, el cual proporciona parte de la base para el crecimiento.
II.2.3 Características de la insostenibilidad
Los principales problemas que se presentan a nivel internacional, regional y local en materia medioambiental, son los de contaminación y agotamiento de los recursos naturales; a pesar de los tratados, convenciones, conferencias y esfuerzos en general, se presentan algunas características o síntomas de la falta de sostenibilidad, las cuales no indican un panorama favorable en el área ambiental. Blanco (2004), habla de los principales fenómenos de insostenibilidad causados primordialmente por el impacto del hombre; estos son efecto invernadero/cambio climático, reducción de la capa de ozono, acidificación, contaminación tóxica, extinción de especies, deforestación, degradación de la tierra/pérdida de fertilidad de los suelos, reducción del agua, reducción de recursos no renovables y aglomeración, entre otros. Algunos datos de los fenómenos anteriormente mencionados, son los siguientes:
Las emisiones de gases de efecto invernadero se incrementaron en un 24% a nivel internacional en el periodo 1990 y 2004 (Calvillo, 2009). México actualmente produce 1.6% de las emisiones de gases efecto invernadero, ubicándose en el lugar 13 a escala mundial y el segundo lugar en América Latina, después de Brasil (Enciso, 2009). La emisión de dióxido de carbono ha afectado el mar en diversas formas, principalmente por el calentamiento global, por lo que el nivel del mar ha crecido en un promedio anual de casi 2 milímetros durante más de 40 años, con un ritmo que se acelera; se han realizado estudios que sugieren que el nivel del mar se elevará 80 centímetros este siglo y podría afectar seriamente a 630 millones de personas que viven a menos de 10 kilómetros del mar (Economist, 2009).
Los científicos han señalado que habrá una mayor frecuencia de olas de calor, veranos más cálidos e inviernos más suaves. La temperatura subirá según estudios entre 1.4 y 5.8 grados centígrados de 1990 a 2100; en México, de 1996 a 2004, la temperatura se elevó en 3 grados centígrados (Enciso, 2005).
Más de tres cuartas partes de todas las especies de mar están por debajo de niveles sostenibles, o al borde de estarlo. Según algunos científicos, 90% de los grandes peces depredadores (atún, pez espada y tiburones) han desaparecido; en estuarios y aguas costeras, 85% de las grandes ballenas y casi 60% de las pequeñas se han extinguido. La acidificación ha afectado a los arrecifes de coral por sobrexplotación, sobrecalentamiento y contaminación, algunos científicos exponen que los arrecifes de coral podrán desaparecer en unas cuantas décadas (Economist, 2009).
La escases de agua es un problema también bastante grave, en el año 2005, mil 700 millones de personas sufrían escasez de agua y se prevé que para el año 2025 llegue a 5 mil millones (Enciso, 2005). En México, la cantidad de agua disponible ha descendido de forma drástica, ya que en el pasado medio siglo, bajó en 60%; de 11 mil metros cúbicos por persona (disposición alta), ahora cada habitante cuenta con 4 mil 312 metros cúbicos (categoría intermedia) y que para el año 2020 llegue a 3 mil 500 metros cúbicos (disponibilidad baja), según datos de la Comisión Nacional del Agua 2008.
II.2.4 Agentes clave en el desarrollo sostenible
Para poder llevar a cabo un desarrollo sostenible, es necesaria la participación de varios agentes o sectores, así como la interacción entre ellos; algunos de estos agentes clave son principalmente la sociedad, empresa y gobierno. En este sentido Capuz (2002), explica la relación de los principales sectores para llevar a cabo el desarrollo sostenible, como se muestra en la Figura 4, en donde se observa que el gobierno debe promover la protección del medio ambiente, permitir la participación de la sociedad en la política y en la vida pública y proveer mecanismos de regulación hacia las empresas; y por otra parte las empresas dan servicios a la sociedad, deben extraer los recursos necesarios para la producción de forma eficiente y sostenible y finalmente la sociedad debe respetar el entorno medioambiental.
Figura 4. Relaciones entre los agentes implicados en el desarrollo sostenible. (Fuente:
Capuz, 2002)
Las principales responsabilidades que le corresponde asumir al gobierno para lograr el desarrollo sostenible, consisten en definir la legislación en materia ambiental, ejecutar programas de educación ambiental, crear mecanismos de mercado para fomentar la protección ambiental, determinar estrategias ambientales y promover el uso de instrumentos de política económica. Estos últimos pueden ser basados en modificaciones de precios como son los impuestos, subvenciones, fiscalidad ambiental y prohibiciones o como instrumentos de intervención como los derechos de propiedad o derechos de contaminación; y hay un rubro más que son los acuerdos voluntarios clasificados en programas públicos, acuerdos negociados y compromisos voluntarios.
Al respecto Capuz (2002), habla de cinco categorías de acciones de las que dispone el gobierno, que bien aplicadas llevan a asumir con éxito la sostenibilidad:
1. El castigo; leyes o impuestos, que penalizan a aquellos ciudadanos o industrias que no respeten al medio ambiente.
2. El premio; leyes y subvenciones que reporten beneficios para aquellos ciudadanos o industrias que destaquen por su cuidado del medio ambiente.
3. La persuasión; inversión pública en acciones de formación, sensibilización y educación cívica para convencer a ciudadanos e industria de que deben colaborar con la conservación del medio ambiente.
4. La participación en el mercado; la administración compra servicios o productos que demuestren que son respetuosos con el medio ambiente. De esta forma generan una demanda que incrementa la producción de esos productos, contribuyendo a que sean más competitivos y atractivos para los consumidores privados.
5. Inacción vigilante; dejar la protección del medio ambiente al mercado. Se aplica el principio que dice que cuando aumenta la demanda de conservación del medio ambiente, por reacción, la oferta se hará más sostenible. Sólo vigila espacios naturales de especial relevancia.
Por otra parte, como se mencionó anteriormente, los ciudadanos tienen una importante y significativa responsabilidad para fomentar el desarrollo sostenible. La sociedad debe interesarse y respetar la naturaleza, mostrando un comportamiento responsable en materia ambiental, participando en grupos de protección y apoyo ambiental, reduciendo la utilización y consumo de materias primas y energía, reutilizando y reciclando, entre otras. Aunado a esto, corresponde también al ciudadano, exigir a la empresa que disminuya el impacto ambiental de los productos y/o servicios que esta ofrece y al gobierno que vele por un modelo económico sostenible.
La empresa o industria es otro sector clave y propulsor del desarrollo sostenible, porque desempeña un papel muy importante en el desarrollo de la sociedad y es considerada como la fuente principal de impacto medioambiental, como el agente que cuenta con los recursos para ser usados en la protección del medio ambiente. Entre algunas responsabilidades correspondientes a este agente, están las de cumplir con la legislación en materia medioambiental, actuar con responsabilidad, empleando instrumentos o compromisos voluntarios para la protección ambiental, así como su oportuna participación en temas ambientales.
Sin embargo, aún cuando la empresa cumpla con estas acciones, cabe señalar, que tiene mucha relevancia la relación reciproca de las empresas con otros sectores como el gobierno y la sociedad, ya que dicha interacción, determina, en cierta manera, el impacto que esta genera al medio ambiente; el funcionamiento de la empresa de forma sostenible, depende tanto de factores internos o externos a ella; un ejemplo claro de esto es, que la mayoría de las empresas se limitan a cumplir con la legislación correspondiente a su país, pero en muchos casos, no es suficiente para una adecuada protección ambiental.
Blanco (2004), menciona las principales instituciones u organismos que influyen significativamente en el desempeño ambiental de los negocios:
a) Tratados internacionales, acuerdos regionales y planes de acción de los diferentes países; las decisiones colectivas a nivel internacional, regional o individual tomadas por los diferentes países incide de manera directa en la forma que operan las empresas; esta influencia no sólo es unidireccional, también la empresa puede desempeñar un papel importante en las decisiones políticas, haciendo intervenciones o recomendaciones al gobierno.
b) Organizaciones locales; estas deben asumir un papel protagónico en el desarrollo sostenible, deben intervenir en la toma de decisiones políticas y así poner las necesidades de las diferentes localidades. Los gobiernos locales pueden promover la unión de las empresas y las comunidades para crear sociedades de mutuo beneficio.
c) Prácticas empresariales; las empresas pueden desempeñar un papel importante en las decisiones políticas y también mediante el desarrollo de herramientas voluntarias de conservación. La interacción entre las organizaciones locales y las prácticas empresariales pueden generar foros ambientales, las autoridades locales pueden actuar como organizadoras, facilitando la información disponible y promoviendo la comunicación y ayuda de los negocios con otras organizaciones.
Además de estos sectores, existen otros no menos importantes para tener un desarrollo sostenible, como las organizaciones no gubernamentales y la comunidad científica, los cuales, es importante que trabajen de manera conjunta y reciproca con los demás agentes. Algunas responsabilidades de las organizaciones no gubernamentales, consisten en promover la protección ambiental mediante la creación de programas específicos, proporcionar información, participar en la educación de la población en el área ambiental, organizar y promover alianzas entre diferentes instituciones y participar en los foros con las empresas para poder tener aportaciones positivas. En el caso de la comunidad científica, las acciones que puede realizar son, trabajar de manera conjunta con empresas y gobierno para la búsqueda de alternativas menos dañinas o contaminantes para las diferentes actividades humanas.
II.2.5 El desarrollo sostenible y la empresa
La empresa asume un papel sumamente importante y clave en la problemática ambiental, ya que se sitúa, por un lado en el mercado de insumos productivos, y por el otro, en el mercado de bienes y servicios, siendo la institución encargada de llevar a cabo el proceso de producción y distribución en función de la demanda de consumidores y productores. De esta manera, la empresa es en gran medida la que toma los recursos naturales y ambientales como materia prima, para posteriormente transformarlos, valorizarlos económicamente y además introducirlos al mercado; y en ese mismo proceso, también devuelve los residuos o desechos a la biósfera.
En este sentido, Conesa (1997), define a la empresa, como un sistema técnico-social abierto, cuya función básica es la de crear bienes y/o prestar servicios que contribuyan a elevar el nivel de vida de la humanidad, compatibilizando este hecho con un mercado respecto al medio ambiente, que posibilite la idea de desarrollo sostenible.
Anteriormente se había mencionado que se da una evolución en la teoría económica, respecto a la perspectiva de sistema económico cerrado en un inicio y abierto posteriormente, por lo que la empresa, como parte de dicho sistema económico, ha evolucionado también, desde un concepto cerrado como unidad económica cuyo fin es la maximización del beneficio, a un concepto abierto donde se le considera como un sistema en el que se incorporan tanto la organización interna como las interrelación con el entorno. Esta evolución ha tenido importantes cambios que de acuerdo con Arizkuren (1995), podemos agruparlos en las siguientes áreas:
1) Cambios en la sociedad; lo que implica una crítica al orden social y cultural imperante, la sociedad exige la mejora de su calidad de vida, y por lo tanto pide al mundo de los negocios que intervenga en la resolución de problemas que se plantean como la conservación de la energía, la contaminación, etc.
2) Cambios en las relaciones empresa-sociedad; debido a la creciente concentración de poder económico en unas cuantas personas y empresas. Lo que muchas veces provoca una actuación con falta de ética, generando el rechazo de amplios sectores de la sociedad, que pide un mayor control, el cual garantice que su comportamiento corresponda con lo que la sociedad espera de las empresas.
3) Cambios en el concepto de responsabilidad social de la empresa; que evoluciona en conceptos diferentes para situarse en una fase en que se toma la responsabilidad social con carácter instrumental; es decir, ayudar a distintos grupos sociales para la solución de problemas, pero como un medio para alcanzar objetivos económicos en interés propio. Por lo tanto, se produce una mezcla de obligaciones que emanan de las normas del gobierno y de la sensibilidad de las propias empresas.
Cuando la empresa desempeña sus funciones de manera efectiva y con la interacción de los sectores, los resultados del impacto son positivos y se dividen en tres principales grupos. En la Figura 5 se muestra como una economía sana da como consecuencia más recursos invertidos en tecnología e innovación; empresas más fuertes ayudarán a que se creen más trabajos y un mejor ambiente laboral, la eficiencia permite un mejor ambiente con una reducción de contaminación (Blanco, 2004).
Figura 5. Resultados esperados en empresas sostenibles. (Fuente: Blanco, 2004, p.43)
Entonces las actividades realizadas en la empresa, actúan sobre el medio ambiente, modificando el equilibrio de los ecosistemas y ejerciendo un conjunto de alteraciones medioambientales, que generan un impacto ambiental. Este último es definido como: "la alteración neta, positiva o negativa, en la calidad de los distintos sistemas, componentes o factores del medio y en la calidad de vida del ser humano, todo ello como resultado de la actuación considerada" Conesa, (1997, p.45).
Desde el punto de vista del impacto ambiental que generan las empresas, hay tres aspectos relacionados con la empresa (Blanco, 2004): a) lo que utiliza: emplea gran cantidad de insumos del ambiente en una forma dañina; b) lo que hace: manufactura productos que utilizan mucha energía, tóxicos y contaminantes; c) lo que desecha: a través de los métodos de manufactura y los productos mismos que generan muchos desechos.
Los principales efectos de las empresas al medio ambiente, se pueden sintetizar en los siguientes (Conesa, 1997):
a) Sobreexplotación o utilización de recursos por encima de las tasas asumibles por el medio (extracción de materias primas, consumos acelerado de agua y energía, etc.)
b) Ocupación del suelo donde se construye o instala la actividad, en territorios con una pobre capacidad de acogida para la actividad, lo que trae consigo la alteración o incluso la destrucción del ecosistema existente (flora, fauna, sistemas biológicos, etc.).
c) Emisión de efluentes por encima de la capacidad de recepción o asimilación del medio, lo que trae consigo contaminación del aire, agua, suelo, por residuos tóxicos y peligrosos, radiactiva, electromagnética, sonora y por olores.
e) Alteraciones del equilibrio hidrológico y deterioro de la calidad del agua.
f) Modificaciones de las características del suelo.
g) Alteraciones de las biocenosis, e incluso destrucción completa de las mismas (extinción de especies animales y vegetales).
h) Modificaciones del paisaje por deterioro estético y de la calidad visual del medio.
i) Daños sobre las poblaciones próximas por deterioro de la salud humana y disminución de la calidad de vida.
j) Riesgos de accidentes y siniestros (incendios, explosiones, escapes, fugas, dispersiones de tóxicos).
k) Cambios demográficos, migratorios y ocupacionales.
l) Modificaciones del nivel de renta y consumo de las actividades económicas en general y del nivel de vida.
m) Alteraciones o destrucción de elementos arqueológicos, históricos y culturales, presentes en el medio.
Las empresas tienen diferente percepción acerca de la variable ambiental, así como la actitud que adopta esta respecto al medio ambiente, es decir no todas perciben el medio ambiente de la misma manera y ven con importancia las consecuencias que tiene su actividad empresarial sobre el medioambiente y la minimización de los impactos negativos. Azqueta (2002), menciona la clasificación de las empresas de acuerdo a su percepción y actitud respecto al medio ambiente, basada en la Fundación Entorno 2001:
a) Negativas; en este grupo se encuentran aquellas empresas que consideran la preocupación con respecto al medio ambiente, y las medidas que genera, como un elemento de distorsión que dificulta sus operaciones convencionales, reduciendo la obtención de sus beneficios. La empresa cree que el medio ambiente supone una amenaza para sus resultados económicos y considera que los problemas medioambientales son agrandados por los grupos ecologistas.
b) Pasiva-indiferente; en este caso, el medio ambiente no es una variable relevante para la empresa, aunque de vez en cuando se ve obligada a tomar algún tipo de medida forzada por la situación. Los problemas ambientales no preocupan de manera especial a la empresa y sólo actúa frente a ellos cuando se ve obligada a hacerlo.
c) Reactiva; en este grupo se encuentran las empresas que se ven directamente afectadas por la normatividad ambiental, debido al hecho de pertenecer a un sector sensible. Este tipo de empresa actúa a favor del medio ambiente, fundamentalmente para cumplir la legislación aplicable y responder a las demandas del gobierno.
d) Proactiva; a diferencia de las del grupo anterior, la empresa integra la variable ambiental en sus procedimientos de gestión, bien sea para adelantarse a los acontecimientos, bien para explotar lo que percibe como ventajas del mercado. Es la empresa que participa activamente en los asuntos medioambientales y promueve la aplicación de técnicas de prevención y sistemas de gestión.
e) Líder; en este grupo se encuentran aquellas empresas que ven la preocupación social con respecto al medio ambiente como una oportunidad de potenciar su propia línea de negocios.
La empresa es y pretende seguir siendo pionera en su sector en la aplicación de técnicas de prevención medioambiental, sistemas de gestión y otro tipo de soluciones.
Además del posicionamiento de las empresas con respecto al medio ambiente, juega un papel importante el motivo o tipo de estimulo que tiene la empresa para tener una postura positiva de su relación con el medio ambiente. En este sentido Azqueta (2002), clasifica los diferentes vectores fundamentales del cambio en la industria:
a) Ahorro de costos; en primer lugar el ahorro de costos de producción, mejorando la eficiencia de los procesos productivos y la utilización de materias primas y energía. Sin embargo, este ahorro de costos, muchas empresas consideran que representa un costo de producción añadido. En segundo lugar, es el ahorro de costos por un rediseño del proceso de producción o el diseño del producto, que reduce la utilización de materias primas, agua, energía y producción de residuos. Otra fuente de ahorro de costos es la originada por el reciclaje y la reutilización de los residuos generados por la empresa. Finalmente puede ahorrar costos en sus propias instalaciones, haciendo energéticamente más eficientes sus oficinas y plantas de procesamiento y producción, así como el empaquetado y trasporte de sus productos.
b) Cumplimientos de la normativa; el segundo gran motivo para adoptar prácticas de protección del medio ambiente, es la necesidad de cumplir con la normatividad ambiental, evitando sanciones. Aparte de la sanción monetaria, muchas empresas cuidan su imagen corporativa ante clientes y accionistas. Por otra parte, algunas empresas adoptan medidas ambientales beneficiosas, no sólo para cumplir con la normatividad vigente, si no para adelantarse a cambios legislativos en el sector, lo que posibilita una ventaja comparativa frente a otros competidores.
c) Reducción de riesgos; otra decisión de las empresas encaminadas a reducir los costos es la inversión que realiza para la reducción de eventuales riesgos ambientales.
d) Presión de los demandantes; la empresa puede verse impulsada a tomar acciones positivas con el entorno ambiental por la exigencia de sus propios clientes. Por un lado puede verse empujada por la presión de las empresas que desean mostrar una imagen respetuosa con el medio ambiente, ya que un creciente número de corporaciones está exigiendo a sus proveedores que sean capaces de revelar una gestión medioambiental aceptable; por otro lado, son los consumidores o clientes convencionales los que demanden este comportamiento, ya que la responsabilidad social de las empresas es un factor importante a tener en cuenta a la hora de tomar las decisiones de compra; finalmente, el propio sector publico puede ejercer una presión considerable, en sus papel de demandante de bienes y servicios, así como dentro de su política de contratos y concesiones, introduciendo criterios de responsabilidad ambiental en el proceso de selección. Las relaciones con este sector proporcionan el marco institucional en el que la empresa desarrolla sus actividades, por lo que se ven favorecidas si la empresa muestra una imagen positiva en el área ambiental.
e) Una apuesta de futuro; para evitar la pérdida de mercado, la empresa puede apostar para tratar de introducirse y obtener una ventaja económica con ello. Se trata de segmentar la demanda en función de las preferencias ambientales de los consumidores, o de entrar en un mercado ya segmentado diferenciando activamente su posicionamiento ambiental con respecto a su competencia.
f) Presión de los trabajadores; se habla de que la empresa al contar con una política ambiental responsable se genera un impacto positivo en el comportamiento de los propios trabajadores, lo que se traduce no sólo en una mayor identificación de los objetivos generales, sino también en una participación activa y creativa en la gestión de su política ambiental.
Para incorporar la variable del medio ambiente a la actividad empresarial, ésta cuenta con herramientas o instrumentos que pueden ser de dos tipos: los que se centran en el proceso de producción y distribución de bienes y servicios, entre los que se encuentran como principales: la política ambiental de la empresa, los sistemas de gestión ambiental y la auditoría ambiental y los que se dirigen a garantizar el desempeño ambiental del producto ofrecido como son: el análisis del ciclo de vida del producto y el eco etiquetado (Azqueta, 2002).
Es importante mencionar un concepto que hace referencia a la responsabilidad por parte de la empresa, de la protección del medio ambiente, el cual surgió principalmente por la búsqueda de una idea justa en el ámbito económico y social por parte de las empresas, es la responsabilidad social, ésta es definida por Velasco (2005) como: "el modo en que las empresas integran voluntariamente en sus estrategias, gestión y operaciones comerciales, su preocupación , respeto e interrelación con su entorno social económico y medioambiental"; es decir, la empresa responsable es la que posee la capacidad de escuchar los intereses de la comunidad, gobierno, consumidores, proveedores, empleados, entre otros, así como tomarlos en cuenta para la planeación de sus actividades y atender sus demandas.
Actualmente se plantea una necesidad de que las empresas realicen una función social, que sirva de respuesta a las nuevas condicionantes y necesidades de la sociedad en que la empresa desarrolla su actividad. Las principales demandas de la sociedad son: respeto por los derechos humanos, protección del medio ambiente, protección de los trabajadores, el desarrollo de las comunidades, desarrollo tecnológico, protección de los consumidores, preocupación respeto y la interrelación como política de empresa, con aquella parte de la sociedad que puede verse afectada por la actividad empresarial (Velasco, 2005).
Para García (1982), la responsabilidad social depende de variables como:
a) El marco legal; referente al reparto de actividades sociales que deben que prestarse a una sociedad moderna por instituciones supra empresariales, como el Estado (dimensión legal).
b) La presión social; debida a la posición más o menos crítica de la sociedad con respecto a la función de la empresa y el empresario. (dimensión social).
c) La propia capacidad de Management; a la dimensión ética y empresarial que conduzca al empresario a asumir determinadas funciones dentro de su función objetiva (dimensión ética).
A la exigencia de la propia organización empresarial y a su gestión respecto de los recursos humanos y sociales en el propio proceso económico (dimensión directivo-cultural).
La responsabilidad social puede desarrollarse en tres niveles, Blanco (2006, p.113): "1) Un nivel de responsabilidad básica como consecuencia de la existencia de la empresa dentro de la sociedad, que va a obligarla al cumplimiento de las normas que ésta exija, como pueden ser:
Los niveles de contaminación atmosférica que marque, la utilización de materiales reciclables, gestión de residuos, entre otros; 2) Un nivel de responsabilidad organizacional, debido a las relaciones de la empresa con todos los afectados por su actividad, como el control de calidad o la reducción de la contaminación a niveles inofensivos; 3) Un tercer nivel de responsabilidad social, que es la motivada por su relación con otras fuerzas sociales. La empresa trata de mejorar o conservar el entorno porque lo necesita para su desarrollo, como es la lucha contra la contaminación".
Además la responsabilidad social de la empresa se sitúa dentro de tres categorías que son,
Blanco (2006, p.115):
"a) El entorno físico: la empresa al realizar sus operaciones, utiliza y aporta nuevos elementos a este subsistema. Así utiliza recursos naturales y evacúa residuos, lo que obliga a que la empresa se responsabilice del impacto que genera su actividad en el entorno, por lo que debería internalizar, no sólo los problemas económicos, sino también de los problemas sociales; b) La comunidad: la empresa afecta a esta área desde una visión local, reducida, hasta una visión nacional o internacional. La ubicación de la empresa genera modificaciones, alterando la distribución de recursos y riqueza del entorno donde se sitúa; c) Los recursos humanos: que incluye al capital humano desde el interno, trabajadores, directivos, etc., hasta el externo, clientes, proveedores, etc. La responsabilidad social de la empresa es aquí un factor de primer orden, no sólo porque posibilita cauces para la conciliación de intereses, sino porque hace patente que ciertas políticas pueden perjudicar al capital humano, ya externo o interno".
La empresa, entonces, debe mostrar una actitud positiva y de progreso en cuanto a la problemática ambiental, al desarrollo sostenible, asumiendo las respectivas acciones o responsabilidades e interactuando con otros sectores elementales que tengan como objetivo la protección ambiental y la responsabilidad social empresarial.
Al tener en cuenta esto, la empresa obtendrá una serie de ventajas como son: reducción de costos, mejoras de imagen, mejoras en la calidad de vida de los empleados, mejoras en seguridad, mejoras en los mercados. En la Tabla 5 se muestran los principales beneficios para las empresas al tener actitudes y prácticas adecuadas con el medio ambiente. Sin embargo, a pesar de los beneficios obtenidos por la empresa, es importante que estas consideren que el respeto y el valor del medio ambiente no es una alternativa de la gestión empresarial, ya que debe ser visto como una exigencia indispensable para su supervivencia, llegando a la consecuencia de que el medio ambiente "es un ratio empresarial tan importante y representativo como el económico-financiero, el de procesos, marketing, labora, fiscal, etc." Conesa, (1997, p.49).
Tabla 5. Beneficios potenciales de unas actitudes y prácticas medioambientales adecuadas.
(Fuente: Hunt, 1996)
Instrumentos de gestión ambiental
II.3.1 La gestión ambiental
Como se ha visto, en los últimos años han surgido un gran número de organismos internacionales, los cuales han venido desarrollando importantes actuaciones en forma de programas y proyectos que han ejercido una influencia decisiva en el desarrollo de una conciencia ambiental por parte de los gobiernos, instituciones y ciudadanía. Conesa, define la política ambiental como el "conjunto de actividades y procedimientos con los que diferentes niveles competenciales y organizativos, del Estado o de las empresas y organizaciones no gubernamentales, pretenden alcanzar unos determinados fines de protección del medio ambiente y conservación de la naturaleza". Además de las políticas ambientales a nivel internacional, existen otras políticas ambientales que pueden ser adoptadas en los ámbitos nacional, regional y local; como son las políticas de la administración pública y las políticas y estrategias empresariales.
En cuanto a las políticas de la administración pública se consideran tres aspectos. El primer aspecto es el ordenamiento jurídico: la correspondiente normativa (directivas, leyes, decretos, órdenes), el derecho ambiental también constituye un ordenamiento jurídico, el cual debe recoger, expresar y regular la complejidad de las relaciones del conjunto de factores físico-naturales, sociales y económicos que interaccionan entre sí, las principales funciones del sistema natural, el carácter colectivo de los bienes medioambientales, la participación de todos los sectores y procedimientos claros, precisos y ágiles para efectos medioambientales graves e imprevisibles que requieran de intervenciones rápidas. El segundo aspecto es la administración ambiental, se debe de contar con organismos ambientales que controlen y programen el cumplimiento y además de llegar a una correcta administración del medio ambiente tienen que considerar los aspectos de planificación, vigilancia, infraestructura, estructura y coordinación. Finalmente, el tercer aspecto se refiere a la participación pública, es indispensable la participación ciudadana con información y sensibilización, periodos de información pública,
etc. (Conesa, 1997).
Por otra parte, están las políticas empresariales, las cuales Conesa (1997) las define como
"aquellas que se refieren a la declaración de objetivos y principios hecha por la empresa, que expone el compromiso adoptado para mejorar su actuación con respecto al medio ambiente".
La política empresarial es propia de cada empresa, atiende a su naturaleza, al tipo de actividad que desarrolla, a sus procesos productivos y al entorno medioambiental, pero todo ello dentro de la política ambiental del estado y la sociedad en general. La política medioambiental de la empresa debe ser detallada, estableciendo acciones para el futuro y conteniendo la información necesaria para que la dirección y los trabajadores puedan determinar con claridad sus áreas de autoridad y responsabilidad.
De acuerdo con Conesa (1997), el contenido de la política medioambiental puede variar de una empresa a otra, pero pueden establecerse algunas reglas básicas que deberían aparecer en todas: adoptar y aplicar los principios del desarrollo sostenible; procurar adoptar estándares al nivel más alto posible, en todos los centros de la empresa y cumplir como mínimo todos los requerimientos legales; adoptar un sistema de evaluación del ciclo de vida de los productos, desde la extracción de las materias primas hasta el desecho final de los mismos; procurar reducir el uso de materias primas, energía, agua, entre otros y siempre que sea posible usar materiales y accesorios reciclables; minimizar la producción de desechos en la empresa, buscar el establecimiento de procesos que no los generen y en caso de que eso no fuera posible, tratarlos al principio del proceso y no al final; tratar los residuos cuya producción es inevitable y desecharlos de manera que el impacto en el medio ambiente sea mínimo y finalmente presionar a las empresas con las que se tiene relación (proveedores, contratistas, vendedores) para que adopten estándares medioambientales en línea con los de la empresa.
Además de garantizar el cumplimiento continuo de la legislación, así como los requisitos normativos medioambientales pertinentes que sean aplicables, la política medioambiental de la empresa tendrá por objeto llevar a cabo una mejora continua de la actuación de la empresa desde el punto de vista medioambiental y cabe mencionar que en algunos reglamentos o normas se establece que la política y programa medioambiental de la empresa se debe fijar por escrito con los documentos correspondientes y que ésta se adoptará al máximo nivel directivo, se revisará periódicamente y se comunicará al personal (Conesa, 1997).
Tomando en consideración lo anterior, Ortega (1994, p.60), define la gestión del medio ambiente como "el conjunto de actuaciones necesarias para llevar a cabo la política medioambiental, o dicho de otra manera para lograr el mantenimiento de un capital ambiental suficiente para que la calidad de vida de las personas y el patrimonio natural sean lo más elevados posible, todo ello dentro del complejo sistema de relaciones económicas y sociales que condiciona ese objetivo". La gestión medioambiental comprende el conjunto de actividades, medios y técnicas para conservar los elementos de los ecosistemas y las relaciones ecológicas y se traduce entonces, en la asignación de los recursos materiales, económicos y humanos, necesarios para la consecución de niveles de calidad ambiental.
La gestión ambiental se aborda desde varios puntos (Pousa, 2006):
a) Económico; las actividades deben ser rentables y constituir una fuente de bienestar económico, provocando una sostenibilidad social y cultural.
b) Ecológico; se debe tener en cuenta la integridad de los ecosistemas, su capacidad de carga y de generar externalidades positivas, así como la conservación de los recursos naturales y de la biodiversidad.
c) Social; la sostenibilidad social se deriva del desarrollo de las actividades agroambientales, recreativas, paisajísticas y eco turísticas.
El concepto de gestión medioambiental, engloba la actuación de mejorar y elevar la calidad de vida de las personas, al respecto Gómez (2003), menciona que la calidad de vida está determinada por tres componentes, que son el nivel de renta, las condiciones de vida y trabajo y la calidad ambiental. La calidad ambiental la refiere como el grado de conservación de los ecosistemas, biodiversidad, paisaje, pureza del aire, cantidad y calidad del agua, estado y limpieza del suelo, entre otros.
Existen una serie de principios de carácter general, los cuales corresponden a la gestión ambiental, Gómez (2003):
a) Lo económico es ecológico y lo ecológico es económico; expresa que el medio ambiente no debe entenderse como dificultad u obstáculo para las actividades económicas sino un argumento de negocio y factor de competitividad.
b) Responsabilidad compartida; señala que la cuestión ambiental es un problema de la sociedad en conjunto.
c) Es mejor prevenir que curar; evitar o reducir los problemas antes de que se produzcan y gestionar las actividades con mentalidad previsora.
d) Sostenibilidad de las actividades: hace referencia al respeto a las tasas de renovación de los recursos naturales renovables, a unos ritmos e intensidades de uso para los recursos naturales no renovables, a la capacidad de acogida de los ecosistemas y capacidad de asimilación del aire, agua y suelo.
e) Integración ambiental de las actividades: plantea la identificación de las actividades de desarrollo. El diseño de los proyectos y la gestión de las actividades económicas con sensibilidad ambiental.
f) Lo verde vende: principio que pone de manifiesto la aptitud favorable de los consumidores y clientes hacia los productos y procesos ecológicos.
g) Pensar globalmente, actuar individual y localmente: se refiere a que el área de extensión de los problemas es muy amplia y por pequeña que sea una causa puede desencadenar efectos que acumulados con el tiempo pueden llevar a resultados muy importantes y que las opciones personales inciden en problemas globales.
h) Quien contamina paga: el causante de contaminar debe de responsabilizarse de los costos públicos que implica reparar el daño. Esto debe de ir acompañado de la mejora de los procesos industriales y métodos de trabajo con el fin de reducir los residuos y la contaminación; al mismo tiempo la sociedad debe de cuestionarse la necesidad de consumir productos procedentes de una industria altamente contaminante.
Se habla también de los principios de gestión ambiental a nivel de actividades y de la empresa en particular los cuales se exponen a continuación, Gómez (2003):
a) Mejora continua y cíclica: es la espiral de mejora utilizada en la gestión ambiental de la empresa que señala la conveniencia de definir objetivos limitados y alcanzables en un primer ciclo, cuya consecución será la plataforma para definir nuevos y más ambiciosos objetivos en un segundo ciclo.
b) Sensibilizar, formar y motivar a todo el personal, como base de toda la gestión.
c) Conocer el estado y su evolución de la situación interna y del entorno, como base de adaptación a las circunstancias cambiantes.
d) Comunicar, transmitir la información de manera fluida para que todo el personal entienda su función y coordine sus acciones hacia el objetivo común de la mejora continua.
e) Participación de todos los niveles de responsabilidad.
f) Planificación y flexibilidad, diagnosticar la situación, definir objetivos, adoptar medidas y controlar su aplicación.
Gómez (2003), menciona los principales instrumentos que se han instituido para gestionar el medio ambiente; se clasifican en dos, según su estadio temporal de aplicación: preventivos y correctivos. Los preventivos se ponen en práctica cuando se abordan nuevos planes, proyectos
o actividades, tienden a evitar que se produzcan impactos, estos a su vez se clasifican en primarios, secundarios y de gestión propiamente dicha; dentro de los primarios están la formación, sensibilización y educación de la población en general, de los planificadores, de los gestores, agentes sociales, entre otros; los secundarios están constituidos por la normativa en materia de calidad ambiental, la investigación básica y aplicada (tecnologías apropiadas, tecnologías limpias, mejor tecnología disponible y económicamente viable), el acopio de información y su disposición en base de datos de fácil actualización y acceso público y la elaboración de indicadores de calidad ambiental que expresen de forma sintética el estado del medio ambiente; los instrumentos de la tercera categoría de gestión propiamente dicha son la planificación, la evaluación del impacto ambiental y el compromiso ambiental.
Por otra parte están los instrumentos correctivos de la gestión ambiental, los cuales se dirigen a cambiar las acciones para reducir los impactos, se aplican en actividades en funcionamiento; estos se dividen en dos categorías: los orientados a las actividades productivas, en donde entra la auditoría ambiental y como segunda categoría los que están orientados a los productos, como son el eco etiquetado ecológico y el análisis del ciclo de vida.
II.3.2 Eco eficiencia
Una de las medidas para que la empresa tenga un mejor desempeño ambiental es la
eco eficiencia, la cual propone producir más con menos deterioro ambiental. La eco eficiencia es una iniciativa propuesta en 1992 por World Business Council for Sustainable Development (WBCSD), grupo de 120 compañías internacionales de 33 diferentes países (Blanco, 2004).
Acerca del concepto de eco eficiencia que proporciona el WBCSD, "La eco eficiencia se obtiene por medio del suministro de bienes y servicios a precios competitivos, que satisfagan las necesidades humanas y proporcionen calidad de vida, mientras progresivamente reducen los impactos ecológicos y el consumo de recursos a lo largo de su ciclo de vida, por lo menos hasta un nivel acorde con la capacidad de carga estimada de la tierra." Díaz (2006, p.14).
La eco eficiencia es una técnica que va dirigida al desarrollo sostenible, promueve el beneficio económico de las empresas que sean más competitivas, innovadoras y responsables con el medio ambiente, fomentando su desarrollo, y propone no utilizar soluciones al final de los procesos, sino llevar a cabo ajustes en los sistemas que busquen soluciones proactivas y que prevengan los daños.
El WBCSD propone algunos elementos para tener una mayor eco eficiencia (Blanco, 2004):
a) Reduciendo el consumo de recursos naturales y materiales a lo largo del ciclo de vida de los productos.
b) Reduciendo los niveles de consumo de energía en la producción de los bienes y servicios.
c) Aumentando el componente renovable, reciclable y reutilizable de insumos y productos: incremento de la renovabilidad.
d) Disminuyendo la carga contaminante (emisiones, ocupación del territorio) tanto directa como indirecta, reduciendo su nocividad.
e) Ampliando el espectro de necesidades cubierto por el producto o servicio que ofrece y su durabilidad, de forma que no sea necesario sustituirlo o complementarlo con otros productos con tanta frecuencia.
La eco eficiencia implica la consecución de estándares de calidad de vida mediante la producción de bienes y servicios, sin dejar de tomar en cuenta el cuidado ambiental. Todo esto se puede lograr mediante procesos limpios, un consumo responsable y sostenible creando valor por parte de las empresas para conseguir una sostenibilidad económica, como se puede observar en la Figura 6 (Aranda, 2006).
Figura 6. Implicaciones de la eco eficiencia. (Fuente: Aranda 2006, p.28)
Blanco (2004), habla de cuatro niveles para implementar la eco eficiencia:
a) Empleando procesos de eco eficiencia; de esta manera las compañías pueden disminuir los costos de producción y las operaciones en general. La reingeniería de los procesos, siguiendo las pautas de la eco eficiencia es probable que incluya una reducción en el uso de los recursos y de la contaminación.
b) Revalorización de los subproductos; la cooperación con otras compañías puede crear oportunidad para generar valor en sus desechos; un subproducto que pareciera innecesario para una compañía puede ser una alternativa valiosa para otra.
c) Creando nuevos y mejores productos; siguiendo las pautas ecológicas de diseño es posible una producción con una funcionalidad mayor.
d) Mercados eco eficientes; algunas compañías innovadoras, rediseñan productos trabajando en forma cercana a sus clientes y de esta forma encuentran nuevas formas de satisfacer sus necesidades logrando redefinir la oferta y la demanda por completo.
II.3.3 Análisis del ciclo de vida
El análisis del ciclo de vida, o también llamado eco balance, es un instrumento muy utilizado por las empresas para la gestión ambiental y para facilitar el conocimiento de su situación ambiental. La definición oficial del análisis del ciclo de vida, es que es un proceso objetivo para evaluar las cargas ambientales asociadas a un producto, proceso o actividad.
Esto se lleva a término identificando la energía, materias utilizadas y los residuos de todo tipo de vertido al medio; determinando el impacto de este uso de energía y materias y de las descargas al medio; evaluando e implementando prácticas de mejora ambiental (Aranda,
2006).
Es decir, el análisis del ciclo de vida son registros o inventarios que permiten a la empresa cuantificar la cantidad de energía, agua y materias primas que se utilizan y cuáles son (cualitativa y cuantitativamente) los residuos sólidos, líquidos y gaseosos generados en cada una de las fases del proceso de fabricación, en el uso o consumo y su eliminación final, es decir, en su ciclo de vida completo; de ahí está la segunda etapa que consiste en valorar los resultados.
La realización de un análisis de ciclo de vida exige el análisis y las mediciones correctas durante la fabricación de un artículo, desde la extracción de materias primas hasta la determinación de los rendimientos energéticos y del uso del agua; así como la eficiencia de los procesos incluyendo la generación de subproductos, desechos y residuos finales, así como su tratamiento, reciclaje y eliminación (Conesa, 1997).
El análisis del ciclo de vida puede ser de tres tipos (Azqueta, 2002):
a) De producto; en este caso, el foco de atención se centra en la producción de un único bien dentro de los que se constituyen la oferta de la empresa.
b) De proceso; en este segundo caso, al análisis del ciclo de vida cubre todo el proceso productivo de la empresa.
c) De la empresa; en este puede abarcar todas las operaciones de la empresa, y no solo las relativas específicamente a la producción.
El análisis del ciclo de vida del producto se estandariza mediante la norma ISO 14040 y cuenta con una serie de fases (Azqueta, 2002):
a) Fase previa a la producción; en esta etapa se contemplan las operaciones necesarias para obtener las materias primas que se utilizaran en la producción, la fabricación de los componentes básicos y su transporte hasta la planta de producción.
b) Producción; cubre las operaciones de producción y montaje del bien analizado.
c) Distribución; se toman en cuenta los impactos ambientales ligados al empaquetado, transporte, y distribución del bien a sus usuarios.
d) Utilización; en algunos casos, es el uso del producto el que genera los mayores impactos ambientales.
e) Eliminación; en esta etapa se analizan los impactos ligados a las operaciones que acompañan al producto una vez que éste ha terminado su vida útil y se convierte en un residuo.
El proceso del análisis del ciclo de vida se lleva a cabo con el siguiente proceso (Llanes,
2006):
1) Recopilación de un inventario de las entradas como son la materia y energía, y de las salidas como pueden ser productos, emisiones, residuos; relevantes del proceso de producción.
2) Evaluación de los potenciales impactos medioambientales generados como consecuencia de las entradas y salidas del proceso de producción.
3) Interpretación de los resultados de la etapa del inventario y de la evaluación de impacto, de acuerdo a los fines que se pretenda alcanzar con el análisis del ciclo de vida.
Los análisis del ciclo de vida son imprescindibles para el etiquetado ecológico de un material, equipo o producto. Son de gran utilidad puesto que permiten identificar fácilmente áreas del proceso de fabricación y gestión empresarial en las que pueden introducirse mejoras. Por ello este análisis suele integrarse en las revisiones ambientales y en las auditorias.
II.3.4 Etiquetado ecológico
El etiquetado ecológico es otro instrumento de la gestión empresarial medioambiental, el cual permite diferenciar mediante el uso de un sello o etiqueta, aquellos productos sostenibles que han implicado el uso responsable de los recursos y con un menor impacto sobre el medio ambiente.
Las etiquetas ecológicas proporcionan y facilitan la información sobre las repercusiones ambientales de los productos, la capacidad de selección y el criterio objetivo al consumidor; de la misma forma impulsa a los trabajadores y distribuidores, a tener mayores utilidades mediante el mejoramiento de los procesos productivos y disminuyendo los impactos ambientales producidos. Las empresas que se apegan y utilizan programas de etiquetas ecológicas adquieren una ventaja competitiva usando el sello como un mecanismo para mantener y atraer más clientes. El etiquetado ecológico está estandarizado con la serie de normas ISO 14020.
Los tipos de etiquetado ecológico son los siguientes (Clements, 1997):
1) Etiquetaje ecológico tipo I; son los que responden al programa de certificación del producto, realizada por una entidad independiente, la cual define los requisitos o criterios a cumplir para diferentes categorías de productos, basado en el análisis del ciclo de vida.
2) Etiquetaje ecológico tipo II; consiste en una declaración ambiental, informativa por parte de la organización o el fabricante de un producto o servicio ecológico. No existe una certificación por una entidad y tampoco se utilizan criterios de referencia predeterminados.
3) Etiquetaje ecológico tipo III; son declaraciones ambientales que muestran información estandarizada, basada en el análisis del ciclo de vida de un producto o servicio, con diagramas que presentan un conjunto de indicadores ambientales pertinentes, acompañados de una interpretación de la información. En la Tabla 6 se pueden ver algunos ejemplos de
eco etiquetas, según su clasificación.
Tabla 6 .Etiquetas ecológicas.
Conesa (1997), explica los principales objetivos que el etiquetado ecológico permite alcanzar:
a) Facilitar información exacta y verídica: la etiqueta ecológica intenta garantizar con exactitud y veracidad los mensajes que de una u otra manera acompañan a los productos, se pondrá a disposición del consumidor una experta y fiable evaluación sobre la
eco compatibilidad del producto.
b) Sensibilizar a los consumidores: con el etiquetado ecológico combinado con los instrumentos informativos, los consumidores dispondrán de la información necesaria y suficiente para tomar conciencia de los efectos que la elección del producto que adquiera, tendrá sobre el medio ambiente.
c) Capacitar a los consumidores en la selección: una vez que el consumidor dispone de una información exacta y verídica y está sensibilizado ante los efectos que un producto tiene sobre el medio ambiente, está capacitado para seleccionar objetivamente un producto en sustitución de otro que considera de peor calidad en cuanto a la agresividad con el medio ambiente.
d) Mejora de las ventas e imagen del producto: En base a la función de sensibilización del consumidor, se mejora la imagen de un producto, y en función de la capacidad de selección se mejoran las ventas.
e) Inculcar a los fabricantes y diseñadores de productos y servicios, la responsabilidad ambiental: el etiquetado ecológico inducirá a los responsables de la actividad a incorporar las consideraciones medioambientales al proceso productivo de tal forma que se verán impulsados a establecer procesos de fabricación más ecológicos y sofisticados y a diseñar un plan de minimización de residuos y acumulación de sustancias contaminantes.
f) Defender el medio ambiente: el etiquetado ecológico favorece las actuaciones en defensa y protección del medio ambiente. El hecho de inducir a los consumidores a adquirir servicios y productos medioambientales asumibles, trae consigo la disminución del impacto ambiental que ejercen las acciones derivadas del proceso productivo al medio ambiente.
Los elementos que componen un sistema de etiquetado ecológico son los siguientes (Azqueta, 2002):
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