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Psiquismo y elementales (página 4)


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Un ingles acepto la propuesta y fue conducido hacia la vieja bohemia; lo mando a sentar. Las otras sibilinas se apartaron. El ejemplo del inglés animó la compañía y todos los visitantes pasaron a exhibir la palma de la mano. Sucesivamente Iban y venían sonrientes más o menos convictos y acordes en afirmar que la quiromántica algo adivinara de justo y verdadero.

Lucía y Dalile no querían imitar a los demás, el dueño del clan quiso persuadirlos.

Un inglés de porte distinguido y un poco altivo, objetó entonces:

–En verdad Sr. Dalile, El señor debía experimentar…. Mire que vale la pena mostrar la mano a esa hechicera. Dalile respondió que eran cosas que no le interesaban.. Mire, insistió el ingles— la verdad es que ella lee admirablemente y el señor pierde una buena oportunidad de divertirse.

La adivina comprendió el sentido del dialogo, hace señal a Dalile, que sin duda para no mostrarse ridículo, resolvió imitar a los otros.

Infelizmente con él, las cosas fueron diferentes. Mal le fijó los ojos en la mano abierta, y la mujer no pudo disimular su sorpresa. Llamó a las comadres mostrándoles la mano en observación y todas se manifestaron admiradas. Mientras tanto la gitana en referencia habló algunos minutos. El se sonrojaba contrariado. Por fin habló algunas palabras a la quiromántica. Fue cuando ella respondió moviendo la cabeza negativamente, y con vivacidad, al mismo tiempo que se fijaba en Lucía. La vieja insistía, parecía que Dalile se negara a cualquier propuesta .que ella le hiciera. Luego él notó que todas las miradas convergían hacia su esposa. Con resolución pidió a Lucia que también se hiciese examinar la mano

Lucía inicialmente se negó, empero, la insistencia de la gitana termino por convencerla y esta aceptó, por prevención a malos entendidos. Se acercó una de las compañeras y le arrimó una silla, Lucía se acomodó y le extendió la mano que la quiromántica leyó con avidez. Grande fue su asombro, que se sucedieron expresiones de espanto y sorpresa, miró la moza con gran admiración, y luego llamó a las compañeras y mostrándoles la mano de Lucía; emitían una ruidosa algarabía en lenguaje exótico, de la cual no comprendí una sola palabra.

Fatalísima curiosidad!

Porqué no obedecía al presentimiento íntimo que me repelía de aquella sala innoble? Me dejé impresionar por la actitud de la hechicera y la curiosidad venció el temor. No pude escucharle los conjuros a media voz que hacía, y me acerqué oyéndole decir que Lucia era amada por un mago que tenia la facultad de separarse del cuerpo durante la noche para visitarla, además ese mago poseía un talismán. Yo ya me había ubicado detrás de lucía. Fue cuando la "arpía" erigiendo los ojos hacia mi, hizo un gesto de terror. A continuación, cerrando los puños, extendió los brazos en dirección donde me hallaba, y aclamó estentórea:– Jesús!, Maria! Protégenos!… He ahí está! –Lo veo claramente.

Es curioso este drama de espanto y admiración por parte de las viciosas gitanas al registrar la presencia de Leyre, referenciándolo como hechicero, cuando en realidad la mediumnidad mercenaria y supersticiosa de estas mujeres, las podría encuadrar dentro de una variedad de brujas. Es aquí que cabe el adagio popular que dice: (El burro hablando de orejas).

Para hacer una mejor exposición sobre quiromancia, diremos que, las líneas de la mano con sus rasgos muestran estados de salud, pues las corrientes nerviosas y los ganglios o chacras menores provocan cambios en estas líneas que pueden ser interpretadas o leídas por una persona especializada, tal como lo demostró el Dr. Arnoldo Krum Heller en su obra Quirologia Médica. Empero además de esta apreciación agregamos que también se opera el fenómeno mediúmnico llamado psicometría que consiste en observar en la tela magnética de la mano,(archivo akasico) sucesos realizados en el pasado; así como acontecimientos todavía por venir.

Otro fenómeno digno de esclarecer es el de la grafología, por medio de la cual es posible apreciar en los caracteres de las letras algunos rasgos de la personalidad con sus perfiles psicológicos, y en algunos casos es posible conocer hasta el nivel evolutivo de la persona analizada.

Uno de los objetivos centrales de este .texto es el de esclarecer sobre eventos y fenómenos que muchos no conocen y que los espíritas en especial, deben saber y divulgar por bien de la humanidad, pues el espiritismo, por sus conocimientos sabe develar lo que se encuentra haciendo parte del "egoísta ocultismo," en algunos casos de carácter bien esotérico, y en otros solamente superstición y mentira.

El ritual del tabaco, con sus invocaciones, es un proceso hechicero practicado por gente inescrupulosa y vulgar, y por lo regular está más dedicado a causar encantamientos en los enamorados; empero la lectura del tabaco, no pasa de ser un acto meramente supersticioso, mentiroso, en el que supuestamente a través de las formas variadas de las cenizas, mostraría prenuncios o advertencias de cualquier naturaleza.

Igualmente ocurre con las interpretaciones que algunos supersticiosos le dan al cuncho del café, en el que se presentan formas caprichosas, extrañas, que sólo se producen al azar, y por el acaso, como suele ocurrir también en algunos muros o superficies en que el agua y la lama producto de la humedad, causan como especie de imágenes que la gente piadosa y mística atribuye como apariciones de alguna virgen o del Papa, que según el mundo católico considera como haciendo parte del sagrado santoral

Lucia desmayo, Y yo mismo me encontré de camino dentro del ámbito de la noche. La paciente fue reconducida al carro, el marido volvió a la sala, al mismo tiempo que las gitanas se retiraran en tumulto blandiendo navajas y haciendo tiros de revolver.

Algunos campesinos al sentirse asechados por fantasmas indeseables, desenfundan el machete virándolo en su entorno, rastrillándolo sobre el suelo, en señal defensiva. Hoy, pensamos que más que superstición, es lógico que algunos espíritus teman ser afectados en su cuerpo astral, pues cuando éstos se encuentran muy materializados algo puede suceder que les afecte en su fisiología psicosomática.

Luego el Sr. Dalile tomó carro y partió para la ciudad, traté de antecederlo, y me vi en el aposento de Lucía. La forma incorpórea de mi amada ya allí se encontraba posante.

—Lucía! Mi lucia— Dije abrazándola. ¿Qué fue lo que te sucedió? Cuénteme lo que le dijo la gitana. Y ella respondió:

Dígame, Antonio, si es por artificios de magia que consigues venir hacia mi. No me eludas ni me mientas…

–Te juro que ignoro absolutamente lo que sea la magia, y si es cierto que a ti me reúno por medios sobrenaturales, eso se da a contra de mi voluntad, Pienso que sea el bendito rosario que nos tenga recíprocamente ligados, y si hay en eso cualquier sortilegio, sería por obra de la virgen santísima.

–Ven arrodíllate con migo a los pies del crucifijo y repitas mis oraciones. Me empujó para el oratorio entrelazó sus manos entre las mías, y rezó el padre nuestro, el Ave Maria, haciendo que yo los repitiera. Nos santiguamos antes y después de las oraciones. Fue una prueba decisiva, Lucia se tranquilizó. Si magia hubiese en nuestro caso, no podría ser diabólica…

— Perdóname haber desconfiado de ti… Pero…Que mujer terrible ¿estaba allá?

Si! Y escuché todo lo que ella te decía… Mi Dios! ¿Que hacer? Se arrodilló de nuevo y pareció abismada en una oración fervorosa. Después, más calma, se irguió y caminó hacia mí.

–confió en Dios y la virgen… presiento que fui destinada para la vida eterna. Ojala pueda volver mi cuerpo al seno de la tierra, para pertenecerte única y exclusivamente. Se sentó e hizo sentarme al pie para mirarme demorada, y piadosamente, con una expresión de infinita ternura.

Mi pobre Antonio, comprendo cuánto hayas sufrido… Escuchamos el ruido de un carruaje… pasos pesados indefinidos, repercutían en la escalera, y después en el corredor. Entraran, traían el cuerpo inanimado de mi Lucía. Lo extendieron en la cama, y las señoras extranjeras que participaran con ella del evento, allí estaban también atentas. Llegó el Médico, se retiran todos quedando solamente el galeno y el marido. Este, de una vez examinó, palpó, auscultó y concluyó:

Siempre la misma cosa. Es necesario dejarla sola. Si mañana no despierta, entonces intervenimos. Por ahora nada hay que hacer. Quedó el Sr. Dalile un poco contrariado. No le tomemos mayor importancia. Nuestra interpretación de pensamientos era tan dulce y tan profunda que permanecimos inmóviles con el temor de quebrarles el encantamiento. En esos momentos golpeaban la puerta. La siniestra gitana entró, se aproximó del Sr. Dalile y le entregó alguna cosa. No pude ver que era. Después ella le hablaba al oído y él meneaba la cabeza….como que la mujer le hacia un pedido. Lo vi. sacar la billetera y ponerle en la mano un valor bancario. Ese gesto nos sorprendió Nos sentimos tomados de una inquietud indefinida. Fue cuando observé precipitarse la gitana con un arma empuñada. Instintivamente; me coloque al frente de Lucía. Lo que sucedió no lo recuerdo.

Aquella narrativa me suscitó tan extraña complicación, que tuve que recogerme meditativo y en silencio. Llegué a acusarme por haber consentido a Leyre discurrir tan larga y exhaustivamente. La curiosidad a mi manera de ver, sobrepasara en mí, los deberes de médico. Procuré corregir la falta, pensando en recomendarle extemporáneamente, reposo y silencio.

El día 24 de marzo, por la mañana, El Dr. Duriux vino a buscarme a toda prisa, por que el discípulo se hallaba gravemente herido, presumiendo que se hubiera intentado suicidar. Tan sorprendido como Uds, se podrían imaginar, salté de la cama y aún en chancletas y vestido sin detalles como de emergencia, me dirigí al lugar. Al llegar a los aposentos de Leire, encontré a la madre de Leire arrodillada junto al lecho y sollozarte.

Con una palidez de cera, el joven tenía la pijama y los cobertores empapados de sangre, debido a una extensa herida en el pecho. Duriux, solicitaba agua hervida, agua oxigenada y lo más necesario con el fin de proceder a una intervención rápida.

La herida aparecía en la región sub- clavicular izquierda, región particularmente complicada, debido a los grandes vasos que la atraviesan- la arteria y vena sub cava. Verifiqué que la herida en sentido oblicuo de adentro hacia fuera y de abajo hacia arriba fue producida por cuchillo o puñal; y aunque no era profunda habiendo la lámina resbalado por la aponebrosi clavipectoral, apenas afectando los ejes del músculo superficial del gran pectoral. La hemorragia abundante que hubiera sobrevenido, me pareció que se hubiera debido al seccionamiento de algunos ramos de la arteria acromo-toráxica . por lo tanto traté de tranquilizar a la Sra. Leyre y el colega Diureux, no se trataba, afortunadamente de herida mortal, pero para mayor seguridad, mandé a llamar al profesor Vilanova, notable cirujano que me confirmó el diagnostico – ¿quien hirió a éste joven preguntó él–. Respondí que probablemente había sido él mismo.

–yo no concuerdo, por que si el golpe fuese aplicado por su propia mano, la incisión no se daría en sentido oblicuo ascendente y externo, como lo vemos. Ese golpe, por lo tanto solo había podido ser ejecutado por otra persona por el frente y a la derecha de la víctima.

–pero no es posible – aclamó la sra. Leyre- por que mi hijo se acostó ayer a las veintiuna hora , no saliendo más del cuarto, por otro lado, nadie penetro en nuestra casa, cuyas puertas yo misma cerré cuidadosamente muy de mañana cuando le di la entrada a la empleada, las trancas y los cerrojos estaban intactos.

— una cosa puedo asegurar- replicó el profesor- parece ser que no fue este muchacho quien a si mismo se hirió; por mi parte, comprendía el raciocinio del colega, lo hallaba perfectamente lógico. Si Leyre se hubiera herido a si mismo, la dirección de la herida podría ser perpendicular u oblicua, de afuera para dentro y de encima hacia abajo, al menos que se pudiese conjeturar un minucioso estudio del movimiento necesario, para disimular a otra mano criminal.

— A dónde está el cuchillo?- pregunta Vilanova

La Sra. Leire, respondió: Nadie lo encontró! Es extraño, respondió el cirujano, en cuanto observaba la herida.

—-Hertault, por favor, busque un litro de suero, mientras aplico estas ampollas de éter y cafeína.

Media hora después de aplicado el tratamiento, Leyre abrió los ojos sin dar muestras de recuperación de los sentidos.

Nunca observé un estado de choque tan profundo, si no en los grandes traumatismos— dice el cirujano— tendremos que esperar la recuperación del paciente para poder escuchar de él, sobre la realidad del suceso.

— Esa hemorragia es curiosa, me desconcierta y encuentro que ese estado de choque es más grave que el admisible por la herida y consecuente a la hemorragia, sorprende en verdad, que tal cantidad de sangre se vierta, siendo que los vasos sanguíneos rotos son tan pequeños, pues son de aquellos que generalmente se obturan por si mismo. En este caso, ninguna señal de brumos o cúmulos como si la sangre fuera de un hemofílico… ¿Será hemofílico este joven? — De ninguna manera! Respondió Durieux – muchas veces se ha cortado, sin presentar anomalías.

Leyre adormeció, juzgamos innecesaria nuestra presencia y partimos.

Al día siguiente, la madre de Lucia recibía un telegrama de parte del señor Dalile quien le anunciaba estar de regreso dispuesto a cancelar el matrimonio con Lucia, diligencia que se cumplió trayéndole el mejoramiento psicofísico de Lucia y un año más tarde, se realizó el matrimonio con Leyre.

ACCIÓN DE LOS ESPÍRITUS EN LOS FENÓMENOS DE LA NATURALEZA

GIL RESTANI DE ANDRADE

Revista Internacional de Espiritismo R.I.E

Brasil, Mayo de 1996

LA FORMACIÓN DE LA VIDA EN LA TIERRA

En las respuestas a las preguntas 44 a 47 del LIBRO DE LOS ESPÍRITUS, las Entidades Superiores que orientaron la obra dieron preciosas respuestas a las indagaciones formulabas por el Codificador Allán Kardec acerca de la "Formación de los Seres Vivos".

En síntesis, informan los Espíritus Mayores que la Tierra contenía los gérmenes formadores de los seres vivos los cuales esperaban el momento favorable para su desenvolvimiento; antes de la formación de la Tierra, los elementos orgánicos se hallaban, en estado fluídico, en el Espacio, o en otros planetas, a la espera de la creación del globo; la propia especie humana se encontraba entre los elementos orgánicos del propio globo terrestre, de ahí la consideración de que el hombre se formó en el barro de la tierra.

André Luz, a través del médium Francisco Cándido Xavier, en el libro "Evolución en Dos mundos", explana la información, esclareciendo como se procesó la evolución de la vida en la Tierra: "Mares poco calientes fueron invadidos por una masa viscosa gigantesca; de esa jalea cósmica se vierte el principio inteligente, en sus primeras manifestaciones. Trabajadas milenariamente por los operarios espirituales que las magnetizan y valoran, intercambiándolas entre sí, bajo la acción del calor interno y del frío exterior, las mónadas – sustancias orgánicas más simples – se dan a conocer en el mundo".

La obra se extiende, explicando como los espíritus co-creadores del Mundo actúan incesantemente sobre las variadas formas de vida y su jornada evolutiva.

En el Libro "El Camino de la Luz", el espíritu Enmanuel, valiéndose de las facultades sensitivas del querido médium Chico Xavier, explaya: "Jesús reunió en las alturas los interpretes divinos de su pensamiento. Se vio entonces, descender sobre la Tierra, desde la inmensidad ilimitada de los espacios, una nube de fuerzas cósmica que envolvió el inmenso laboratorio planetario en reposo. Desde ese momento y después de un tiempo se podía observar la existencia de un elemento viscoso, en la costra solidificada del planeta, como el fondo de los océanos, cubriendo toda la Tierra. Con esa masa gelatinosa nacía en el Planeta el protoplasma y, con el germen sagrado de los primeros hombres".

León Denis, en "El Problema del Ser, del Destino y del Dolor", al comentar la Evolución y Finalidad del Alma", así se expresa sobre la formación de la vida en la Tierra:

"En la planta la inteligencia dormita; en el animal, sueña; solo en el hombre despierta, se conoce, se domina y se torna consciente; a partir de ahí, el progreso, de alguna manera fatal en las formas inferiores de la Naturaleza, sólo se puede realizar por el acuerdo de la voluntad humana con las Leyes Eternas".

Más, efectivamente, es de "El Libro de los Espíritus" que vamos a extraer las informaciones más precisas acerca de intervención de los Espíritus sobre el mundo corporal. Con base en la extraordinaria obra, podemos tejer las diversas consideraciones.

LOS ESPÍRITUS DE LA NATURALEZA

Los espíritus que presiden los fenómenos de la naturaleza forman una categoría especial en el Mundo espírita; algunos ya habrían encarnado en el estado material, no necesariamente como seres humanos. Una abrumadora mayoría de esos espíritus ha reunido las condiciones para su primera experiencia encarnatoria dotada del principio inteligente, Dios no se entrega a una acción directa sobre la materia, teniendo, por lo tanto, sus laboriosos y dedicados agentes en todos los grados de la escala de los mundos. Los espíritus que interfieren en los fenómenos de la Naturaleza no habitan ciertamente la Tierra, dirigiendo los fenómenos de acuerdo con sus atribuciones. Se dividen en dos categorías: conductores, que actúan con conocimiento de causa y con libre albedrío; conducidos – los que, aún ensayando para la vida, actúan en innumerables aglomeraciones, sin saberlo. Unos comandan, otros ejecutan; los que ejecutan se encuentran atrasados con relación a los conductores, así como acontece entre los propios hombres. Primero, los espíritus que aún aguardan su primera experiencia encarnatoria actúan como ejecutores como comandos o dirigidos. Cuando se desenvuelven suficientemente, dentro de las Leyes Divinas, su inteligencia comandará y dirigirán las cosas del mundo material; posteriormente, evolucionarán, hasta el punto de llegar a tener condiciones para cooperar, coordinar y dirigir atribuciones del mundo moral. "Es así, que todo funciona, que todo se encadena en la Naturaleza, desde el átomo primitivo hasta el arcángel, pues éste comenzó por el átomo. Admirable ley de armonía que vuestro limitado espíritu no puede concebir en su conjunto".

De esta manera, existen espíritus en innumerables grados evolutivos, magnetizados al planeta, en etapa que podemos denominar como pre-reencarnatoria que actúan bajo la coordinación y dirección de los espíritus que ya vivieron experiencia en la materia.

CITAS DE LA LITERATURA MEDIÚMNICA

En el Plano espiritual, no solamente existen espíritus de la especie humana. Encontramos también espíritus de animales, como describe André Luiz, en el Libro "Nuestro Hogar", cuando menciona las formas monstruosas que lo asuntan en su largo peregrinaje por la región umbralina; al ladrar de perros, carruajes tirados por caballos, citando además la existencia de Ibis, grandes aves que devoran "formas mentales odiosas y perversas, entrando en franca lucha con las tinieblas del umbral".

También, del Libro "Nuestro Hogar", aprendemos extraordinaria lección sobre las aguas y la acción que sobre ellas ejercen los espíritus. "El agua no solamente transporta los residuos de los cuerpos, también conlleva las expresiones de nuestra vida mental. Será nociva en las manos perversas, útil en las manos generosas, y cuando está en movimiento, su corriente no solamente esparcirá bendiciones de vida, sino además que se constituye en un vehículo de la Providencia divina, absorbiendo las amarguras, odios y ansiedades de los hombres, lavándoles la casa material y purificándoles la atmósfera íntima.

Además, del excelente libro de André Luiz, extraemos de su último capítulo, la descripción de socorro dado, con el concurso de los espíritus de la naturaleza, al enfermo Ernesto, segundo marido de Zelia, viuda del autor espiritual de la obra "… Narcisa llamó a alguien, con gestos que yo no podía comprender. A partir de ese momento, ocho entidades espirituales le atendían el pedido. Inmensamente sorprendido, la indagué sobre la existencia de mayales y eucaliptos. Debidamente informada por los amigos, que me eran totalmente extraños, la enfermera me explicó: – son servidores comunes del reino vegetal, los hermanos que nos atienden. Y ante mi sorpresa remató: Como puede observar, nada existe de inútil en la Casa de Nuestro Padre. En toda parte, si existe quien necesite aprender, hay quien enseñe; y donde aparece la dificultad, se presenta la Providencia.

CITAS DEL NUEVO TESTAMENTO

Es de los ejemplos de Jesús, del Nuevo Testamento, que extraemos las más valiosas lecciones de la acción de los Espíritus sobre la Naturaleza. En los siguientes acontecimientos de la vida de Cristo, esa acción está explícita:

  1. Bodas de Canaán – Transformación del agua en Vino (Juan, II-1 a 11)
  2. Los Endemoniados de Gadara – Vibraciones espirituales aterrorizan una manada de cerdos, que se lanzan al mar y se ahogan. (Mateo VIII –28 a 34)
  3. La Higuera Estéril – Poderosísima descarga de fluidos que hace que el árbol se seque, inmediatamente- (Mateo XXI – 18 a 22)
  4. La Pesca Milagrosa- Vibraciones del Maestro hacen que haya abundancia de pescado. (Lucas V – 1-11)

La más valiosa lección, sin duda, es el pasaje de la Tempestad Aplacada, conforme nos lo narra el Evangelista Marcos (Capítulo IV – Versículos 35 a 41). En ella, Jesús reprendió el viento y dijo al mar: Cálmate, enmudece! El viento se aquietó y apareció una gran calma. Y los discípulos, acostumbrados a ver la acción del Jesús sobre las fuerzas espirituales de obsesores, se dicen unos a otros: "¿Quién es éste que hasta el viento y el mar le obedecen?"

Es absolutamente incomprensible que el Maestro fuese a influir directamente sobre los vientos y el mar. Obviamente, se estaba dirigiendo a las potencialidades que el Padre designara para ejercer su acción sobre la naturaleza, o sobre los espíritus que interfieren sobre los fenómenos naturales.

Las tempestades, espiritualmente reflejan la acción de la providencia divina, a fin de reequilibrar las fuerzas mentales en desequilibrio, sea en la Tierra, en el plano material, sea en el Mundo de los espíritus.

En el libro "Entre la Tierra y el Cielo", de André Luiz, el destacado espíritu nos cuenta acerca de una tempestad magnética desencadenada en las proximidades de "Mansión de Paz", uno de los puestos de socorro espirituales localizados en regiones del umbral: "A través de la ventana de material transparente de esa Mansión, se veían una cantidad enorme de criaturas atadas unas a otras, vociferando maldiciones y dando gemidos que causarían piedad hasta los más endurecidos de corazón. Se agarraban unos a otros, para defenderse mejor de la tempestad magnética que azotaba esa región llevando consigo una lama oscura en extraño torbellino, como si fuese una nube oscura saltando".

CONCLUSIÓN

El Maestro Allán Kardec siempre nos estimuló hacia la investigación permanente, para ampliar nuestro entendimiento y comprensión acerca de las enseñanzas contenidas en la Doctrina Espírita. De sus anotaciones sobre este importante tema, pasamos a comprender que "todo tiene su razón de ser y nada sucede sin el permiso de Dios". (El Libro de los espíritus – pregunta 536); que los grandes fenómenos "tienen como único motivo el restablecimiento del equilibrio y de la armonía de las fuerzas físicas de la Naturaleza". (536 A).

UNA EXPERIENCIA MÁS

Otro acontecimiento importante para nosotros que trata de la sobrevivencia del espíritu de los animales, sucedió hace algunos años, cuando en la plaza central de mercado de Neiva, una señora ofrecía un singular perrito de color achocolatado, cejas muy curiosas y poseedor de una gran expresión de ternura y amistad. Opté por adquirirlo y una vez en casa, nos enteramos de su género, era una hembra. No nos decepcionó, por cuanto la cachorra significaba algo especial para nosotros. Mucho se encariñó con nuestros pequeños hijos, pasando a ser el centro de atención de la familia. Meses más tarde enfermó y murió, pese a los esfuerzos realizados por aliviarla. La identificábamos con el nombre de mona, y ante lo sucedido nuestros apesadumbrados hijos me requirieron para preguntar si mona continuaba viviendo en el mundo invisible, respondiéndoles afirmativamente, por cuanto la muerte es aparente y además todos los seres vivos sobrevivimos después de extinguirse la vitalidad del organismo físico que alberga al espíritu.

En el siguiente día, después del almuerzo, nos dispusimos a reposar como de costumbre, adormeciendo suave y profundamente. En este estado, se me presentó mona meneándome su colita, acercándose con muchos halagos, pasando a juguetear con mi mano izquierda la que sutilmente mordía con sus agudos dientes. Al despertar, pude constatar sobre mi mano la señal dejada por su delicada mordedura, igualmente la baba allí depositada. Sobre lo acontecido; meditamos y analizamos hasta qué grado se materializó la cachorra, ya que su presencia en el sueño dejó una prueba irrefutable .de que el ectoplasma del que soy poseedor dio lugar a semejante comprobación. Por lo sucedido con mona pasé a relatar el hecho a mi familia.

Un día después, encontrando a mi esposa profundamente dormida, la escuché que balbuceaba —"¡mona!". Procedí a despertarla, molestándose por mi inoportuna interrupción. Su comentario fue que se encontraba experimentando el mismo fenómeno con la juguetona mona, la cual continuaba viva en el espacio y muy apegada a los seres con los cuales había compartido en nuestro hogar.

EL ALMA DE LOS ANIMALES EN LA CODIFICACIÓN KARDECIANA

Limitar el desarrollo espiritual al reino humano es empequeñecer los planes divinos de la creación. A la vez es apoyar la posición teológica católica y protestante, la cual no le asigna a los animales ni alma ni sensibilidad, es decir, que ellos fueron creados para estar sometidos al capricho del hombre.

Sin embargo, a pesar de esa limitación espiritual apoyada por ciertos espiritas que poco estudian, de todos modos los animales son seres con un principio inteligente e inmortal y que están destinados a grandes mutaciones esenciales y formales hasta alcanzar el nivel del reino hominal. "El libro de los espíritus" de Allán Kardec así lo demuestra con toda racionalidad filosófica. La vida es pues una corriente ascendente sin solución de continuidad que realiza su proceso de evolución en lo psíquico y en lo formal. Esta grandiosa concepción del alma animal no solo la vemos sustentada por la codificación kardeciana, sino también por eminentes discípulos de Kardec como León Denis, Gabriel Delanne, Gustavo Geley, Manuel González Soriano y tantos otros pensadores más, los cuales sobre las bases de la ciencia, la filosofía y la religión han sostenido que el alma de los animales está destinada a una constante evolución palingenésica hasta alcanzar el nivel de la formación humana.

Además corrientes espiritualistas con base en las concepciones filosóficas de Oriente y en antiguas tradiciones de Occidente, también sostuvieron la evolución espiritual de los animales. Nos referimos a la Teosofía, la Rosacruz, y todas las escuelas esotéricas que en la actualidad sustentan firmemente el proceso de la evolución anímica y psíquica de los animales.

Con esto queremos demostrar que la palingenesia zoológica es de carácter universal y está relacionada con la misma doctrina de la reencarnación del reino humano. Pues si la evolución del alma animal no fuera una realidad estaría en peligro la misma doctrina de la reencarnación del ser humano, ya que la negación de aquella no sería otra cosa que un rompimiento del alcance dialéctico que existe entre ambas concepciones palingenésicas, las que establecen para la naturaleza del espíritu un orden y una armonía racional, al conceder a toda forma de vida la misma igualdad de desarrollo y evolución.

SOBRE UN PRINCIPIO MEDIÚMNICO DE CARÁCTER DIÁLECTICO

En el parágrafo 540 de "El libro de los Espíritus" se da un principio mediúmnico de carácter absolutamente dialéctico, el cual expresa lo siguiente: "así, todo sirve, todo se encadena en la naturaleza", "desde el átomo primitivo hasta el arcángel, que a su vez ha empezado por el átomo. Admirable ley de la armonía, cuyo conjunto no puede apreciar vuestro espíritu limitado.

En efecto, los negadores de la palingenesia zoológica son, como dice el principio mediúmnico antes citado, "espíritus limitados", es decir que se mueven dentro de ese antiguo clima mental escolástico empeñado en sostener que la tierra es el único mundo habitado y el hombre el único ser dotado de alma inteligente e inmortal. pero el espíritu deberá sobrepasar ese "espíritu limitado" de que hablan las entidades espirituales que dieron base a la doctrina Espírita pues debemos buscar el porvenir y evolución de la vida y la forma en todos los ordenes de la Naturaleza y el Universo; de este modo nos zafaremos del "espíritu limitado" que nos ata a los sentidos materiales y percibimos que "desde el átomo primitivo hasta el arcángel" todo evoluciona y se perfecciona y que todo ser existente tiene ante sí un inconmensurable porvenir. Sabremos, en efecto, que tanto el átomo como el arcángel han atravesado numerosas situaciones existenciales para llegar al ser y al yo humano y divino y que todo pasa a través de los tres reinos naturales y de las más variadas dimensiones del universo hasta llegar a dirigir las del mundo mortal", como dice "El libro de los espíritus".

En la creación la vida posee una divina igualdad que solo necesita del proceso, el desarrollo y la evolución para llegar a la cúspide del ser donde el Yo se determinó como tal por el pensamiento, el sentimiento y la voluntad. En consecuencia, ningún ser animal queda rezagado en el andar evolutivo de los espíritus. Porque la vida se determina como espíritu en razón de la divina igualdad existencial de todos los seres.

SOBRE LA INTELIGENCIA DE LOS ANIMALES Y DE SU PORVENIR ESPIRITUAL

En el parágrafo 597 de "El libro de los Espíritus" se pregunta lo siguiente: "Puesto que los animales tienen una inteligencia que les da cierta libertad de acción, ¿existe en ellos un principio independiente de la materia? "Y se obtiene de los seres espirituales esta respuesta: "Si, y sobrevive al cuerpo". En efecto, vemos aquí que el principio inteligente de los animales sobrevive a la muerte como el de los hombres. La ley de igualdad existencial nos vincula a los irracionales a pesar de todas las virtudes que tenemos y que nos envanecen al lado de nuestros hermanos menores, como llamó Franciso de Asís a los animales.

Luego en el parágrafo 601 de la misma obra se formula esta pregunta: "¿Siguen los animales una ley progresiva como el hombre? Y se da esta respuesta: "Si, y por esto en los mundos superiores, donde están más adelantados los hombres, estando también los animales que tienen medios más desarrollados de comunicación, pero son siempre inferiores y están sometidos al hombre. Son sus servidores inteligentes".

Pero donde el verdadero papel de los animales se pone realmente de manifiesto en la codificación kardeciana es en el parágrafo 604 en el cual se hace el planteamiento filosófico siguiente: "Siendo siempre inferiores al hombre los animales, aunque perfeccionados en los mundos superiores, resultaría que Dios ha creado seres intelectuales perpetuamente condenados a la inferioridad, lo que parece no estar conforme con la unidad de miras y de progreso que en todas sus obras se observa". La respuesta obtenida es la siguiente: "Todo se encadena en la naturaleza por lazos que no podéis ver aún, y las cosas en apariencia más disparatadas tienen puntos de contacto que nunca llegará a comprender el hombre en su actual estado. Puede entreverlas por un esfuerzo de su inteligencia; pero solo cuando ésta haya adquirido todo su desenvolvimiento y se haya emancipado de las preocupaciones del orgullo y de la ignorancia, podrá ver claramente la obra de dios. Hasta entonces sus ideas limitadas le harán ver las cosas en un aspecto mezquino y restringido. Entended bien que Dios no puede contradecirse, y que en la naturaleza todo se armoniza, por medio de leyes generales, que nunca se separan de la sabiduría del creador".

SOBRE LA UNIDAD DEL SER HUMANO Y ANIMAL COMO DIMANANDO DE UN MISMO PRINCIPIO

En el parágrafo 606 de "El Libro de los Espíritus" se formula la pregunta: "La inteligencia del hombre y la de los animales, ¿dimana, pues de un principio único? La respuesta expresa: "Sin duda alguna; pero en el hombre ha experimentado una elaboración (por razones palingenésicas) que la hace superior a la que anima al bruto.

En esta parte de la codificación kardeciana tenemos planteada la unidad sustancial en cuanto al origen del ser y de la inteligencia, los cuales se desarrolla mediante una constante palingenésica y reencarnación tanto del hombre como del animal.

Esta concepción sustancial es la que nos hace entrever que en el universo existe una divina igualdad que permitirá el reencuentro, en condiciones y grados morales correspondientes, de un perro con su amo, de un caballo con su dueño, etc., pero ya con la misma imagen humana, para proseguir así avanzando desde "el átomo al arcángel", como dice el mensaje mediúmnico del parágrafo 540.

En el parágrafo 607 se pregunta: "Se ha dicho que el alma del hombre en su origen, es el estado de infancia en la vida corporal, que apenas destella su inteligencia y que se ensaya en la vida (Parag. 190). ¿Dónde pasa el espíritu por esta primera fase?": La respuesta expresa: "en una serie de existencias que procede al periodo que llamáis de humanidad".

En efecto, el ser pasa y se ensaya para la vida humana a través de periodos no humanos, o sea animales, a fin de alcanzar su condición de ser racional mediante la adquisición del Yo, el pensamiento y la voluntad. Es decir, que el animal deviene ser espiritual par alcanzar el estado de conciencia personal mediante su evolución palingenésica, tal como ocurrió con el hombre.

En el mismo parágrafo 607 se formula una pregunta que resulta decisiva para la demostración de la evolución espiritual de los animales, la cual expresa: "¿parece, pues, que el alma ha sido el principio inteligente de los seres inferiores de la creación?", La respuesta es terminante y dice: "¿No hemos dicho que todo se encadena y tiende a la unidad de la naturaleza? En esos seres que estáis muy lejos de conocer en su totalidad, se elabora el principio inteligente, se individualiza poco a poco y se ensaya en la vida, como hemos dicho. Esto es, hasta cierto punto, un trabajo preparatorio como de la germinación, después del cual el principio inteligente experimenta una transformación y se convierte en espíritu. Entonces empieza para él, el periodo de humanidad, y con él la conciencia de su porvenir, la distinción del bien y del mal y la responsabilidad de sus actos, como después del período de la infancia viene el de la adolescencia, luego la juventud, y en fin, la edad madura. Por lo demás, nada de humillante tiene este origen para el hombre. ¿Se creen humillados los grandes genios por haber sido fetos informes en el seno de su madre? Si algo debe humillarle, es su inferioridad ante Dios, y su importancia para sondear la profundidad de sus designios y la sabiduría de las leyes que arreglan la armonía del universo".

"En esa admirable armonía que hace que todo sea solidario en la naturaleza, reconoced la grandeza de Dios. Creer que él ya haya podido hacer algo sin objetivo y crear seres inteligentes sin porvenir, sería blasfemar su bondad, que se extiende a todas sus criaturas".

En el capítulo XI titulado "Génesis Espiritual" del Libro "La Génesis" Del Allán Kardec, en el parágrafo 23, el maestro hace importantes reflexiones en cuanto al destino espiritual de los animales. Dice al respecto: "según a opinión de algunos filósofos espiritualistas, el principio inteligente, distinto al principio material, se individualiza y se elabora pasando por los diversos grados de la animalidad; ahí es donde el alma se ensaya para la vida y desarrolla sus facultades por el ejercicio; ese sería, por decirlo así, su periodo de incubación. Llegada al punto del desarrollo máximo que tal estado mental permite, recibe las facultades especiales que contribuyen al alma humana; de este modo habría filiación espiritual como la hay corporal".

SOBRE LA LEY DE UNIDAD QUE ENLAZA Y PRESIDE LA CREACIÓN

Después de tan lógicas y racionales consideraciones, el maestro Kardec reafirma la evolución espiritual de los animales con las expresiones siguientes: "Este sistema, basado en la gran ley de unidad que preside a la creación, es preciso convenir que está conforme con la justicia y la bondad del creador, así da una salida, un objetivo y un destino a los animales; éstos dejan de ser criaturas desheredadas, encontrando en el porvenir que les está reservando una compensación a sus sufrimientos. Lo que constituye el hombre espiritual no es su origen, sino los atributos especiales que le transforman y hacen de él un ser distinto, así como el fruto sabroso es distinto de la raíz amarga de donde ha salido. Por haber pasado por la hilera de la animalidad, el hombre no dejaría de ser hombre, no sería animal, así como el fruto no es raíz, como el sabio no es tampoco el feto informe por el cual comenzó su vida en el claustro materno".

Estas reflexiones de Kardec nos colocan frente al orgullo y la vanidad humana que no se resignan a un pasado tan inferior, según algunas gentes, como el haber sido animales durante ese período llamado "espíritu primitivo". Pero ni el paso por la hilera animal ni él haber sido informe feto degrada ni destruye al espíritu humanizado; por el contrario, lo engrandece heroicamente por haber pasado a través de tan bajas esferas existenciales, mientras que dentro de su ser brilló siempre la luz divina, la cual triunfó después de un fatigoso proceso evolutivo y que lo hizo entrar en la humanidad, como dice el codificador de la doctrina espirita. Porque el arcángel no podrá valorar la grandeza de las cosas divinas si antes no pasó a través de las formas inferiores de la tierra.

SÍNTESIS DEL SER, DE LA VIDA Y EL UNIVERSO

La vida es una y se manifiesta a través de variadas formas materiales. En todo fenómeno vital se opera un movimiento transformador de las esencias que posee, es decir, que prosigue su proceso de evolución, ya que todo lo que encierra en la forma está llamado a transformarse para pasar a estados superiores más elevados. Pero la vida, como esencia divina y universal, no se enquista, no se detiene jamás, en ninguno de los tres reinos de la naturaleza. Ella rebasa todas las limitaciones y estancamientos y mediante impulsiones creadoras pasa a otros seres, a otras razas, a otros tipos de existencia y de ser.

El hombre es pues el resumen de una historia universal cuya esencia jamás se detuvo ni en lo mineral, ni en lo vegetal, ni en lo animal. Su imagen está formada por esa esencia universal que se relacionó con él desde las zonas más inferiores de la naturaleza y que, desde su condición de átomo, devino un arcángel llamado a ser agente de Dios y su ayudante consiste en la marcha de la evolución universal.

Esta es pues la gran filosofía palingenésica que nos ofrece la codificación kardeciana. Filosofía que ha sido corroborada por eminentes pensadores como Quintín López Gómez, Eduardo Niño, Joaquín Huelbes Temprado, Alverico Perón, Pietro Ubaldi, Camilo Flammarion, León Denis, Gabriel Delanne, Manuel González Soriano, León Chevreuli y Gustavo Geley, a quien se puede considerar como el mejor sistematizador del evolucionismo palingenésico de los seres desde su más variadas condiciones primitivas.

Corrobora en estos momentos a la filosofía palingenésica de la codificación kardeciana la aparición en Venezuela de un libro titulado "Darwinismo espírita", una narración mediúmnica escrita psicográficamente por Sebastián Attias. Además, la evolución del alma animal ha sido confirmada en las obras mediúmnicas escritas psicográficamente por Francisco Cándido Xavier, todo lo cual viene a señalar que la filosofía espirita posee notables profundidades metafísicas que no se logran penetrar debidamente sin una sólida cultura clásica, espiritualista y filosófica.

Sin la ascensión del alma de los animales a la condición humana, la evolución sería un proceso parcial y ciego sin relaciones con la grandeza esencial y divina del universo. Los animales son nuestros hermanos menores, razón por la cual están en nuestro ser como una demostración de las grandes irradiaciones de la vida divina y universal. Pues hemos pasado por el reino animal a través del proceso palingenésico de los espíritus. De este modo se cumple el proceso dialéctico en la creación, como expresa el principio mediúmnico kardeciano, al decir que "todo sirve, se encadena en la naturaleza, desde el átomo primitivo hasta el arcángel, que a su vez ha empezado por el átomo".

Cabe aquí agregar lo que dijo un antiguo poeta místico: "Dios duerme en el mineral, sueña en el vegetal y en el árbol, despierta en el animal, y se vuelve consciente en el hombre. ¿Cuándo ha dejado de crecer por el hecho de morir?"

El ingeniero Ernesto Bozzano en su admirable libro "Las manifestaciones Metapsíquicas y los Animales", en el cual registra cientos de casos de apariciones de perros y de otros irracionales a sus dueños, en el último capítulo del libro colocó un mensaje mediúmnico en el cual se patentiza todo el proceso de la evolución del ser. Ese mensaje mediúmnico viene pues a corroborar lo que significa los tres reinos de la naturaleza desde el punto de vista espiritual y filosófico, y a la vez certifica el papel existencial de los animales como nos los muestra la codificación kardeciana.

En ese mensaje expresa lo siguiente:

El gas se mineraliza,

El mineral se vegetaliza,

El vegetal se animaliza,

El animal se homoniza,

El hombre se diviniza.

Este mensaje del mundo invisible a destruir ese "espíritu limitado" de algunos espiritualistas que, con sus infundadas negaciones, lo único que hacen es apoyar a las viejas teologías empeñadas en hacer de los animales seres mecánicos y sin alma, pero si, muchos de estos aptos para comer. Sin embargo la doctrina de la evolución universal, demostrada por la codificación kardeciana, sigue su marcha incontenible, al punto que le ha dado al darwinismo un nuevo sentido al demostrar que no sólo la forma evoluciona sino también lo que ella contiene: la vida inmortal llamada a devenir por ley de reencarnación espíritu, yo y arcángel.

Es necesario, pues poner mayor espíritu filosófico y más análisis científico en los estudios que se hagan sobre cosmovisión espírita, si es que se quiere alcanzar a comprender ese enlace dialéctico que unifica el divino fenómeno de la vida con las manifestaciones universales a que está sujeto el ser.

EL PLANO DE LOS ELEMENTALES

Comprende las esferas situadas en las partes vibratorias bajas del mundo espiritual.

Por seres elementales se entiende a todos aquellos que poseen condiciones de vida rudimentaria, incompleta organización psíquica, embriones de espíritus libres, espíritus de la naturaleza, que son agentes naturales y casi siempre instintivos e inconscientes; almas por decir así, de los elementos naturales y que derivan, hacia el reino animal y más luego al reino humano.

El elemental natural, tiene vida propia y vive en el astral y también en el plano material. Según su evolución va incorporando los pensamientos e ideas de los hombres, los cuales ejecutan como si fuesen propios. Realizada una se apropia de otra que también ejecuta, y así actúan ininterrumpidamente, tornándose por eso en algunos casos, seres peligrosos, porque son inconscientes y no tienen discernimiento suficiente para distinguir el bien del mal. Son criaturas que están en el comienzo de su evolución y en los diferentes reinos.

En lo anteriormente expuesto, se hace referencia a los espíritus de los vegetales y animales, empero no a los elementales artificiales.

Los ficticios o artificiales se encuentran en todas partes: en la superficie de la Tierra, en la atmósfera, en las aguas, en las profundidades de la subcorteza, junto al elemento ígneo, invisibles a las miradas humanas, ejecutan infatigable y oscuramente un trabajo inmenso de los más variados aspectos, en los reinos de la naturaleza, junto a los minerales, los vegetales, los animales y los hombres.

Los espíritus elementales son clasificados en dos categorías generales: los elementales ficticios y los elementales naturales.

Los primeros son conocidos normalmente como "larvas", creaciones mentales, formas –pensamientos, que exigen tres ingredientes esenciales para subsistir: una sustancia orgánica, una forma aparente y una energía vital. Existen sustancias plásticas etéreas que permiten su creación; la forma depende del sentimiento o de la acción mental que inspiró su creación, y el elemento vital que los anima de la fuente universal de energía cósmica.

La vida de las larvas durará en la medida en que la energía mental o pasional emitida en el acto de la creación pueda ser prolongada siempre que, incluso cesada la fuerza creadora inicial, continúen estas siendo alimentadas por pensamientos, ideas, vibraciones de la misma naturaleza, de encarnados y desencarnados, existentes en la atmósfera astral, que abundan a lo largo y ancho del espacio y de los diversos mundos, multiplicándose continuamente.

El ser pensante constantemente crea siempre, consciente o inconscientemente, lanzando al mundo astral diferentes productos mentales.

La creación consciente depende de que el individuo sintonice o vibre, en el momento, en la onda mental que corresponde a determinada creación (amor, odio, lujuria, celos, etc.) y por eso tal forma de creación raramente es normal, habitual, porque no es fácil determinar la forma de larva que corresponde a la idea o al sentimiento creador; más la voluntad adiestrada, impulsando a la idea y al sentimiento, puede realizar la creación que tiene en vista y proyectarla en el sentido o dirección apuntada, para producir los efectos deseados.

La larva cuando es producto de un deseo, una pasión o un sentimiento fuerte, se corporifica, recibe una vida más larga que la larva simplemente mental que, casi siempre, tiene una alimentación más restringida, a no ser que esté más proyectada por una persona dotada de un alto poder mental, o por grupos de personas en las mismas condiciones.

Los sacerdotes egipcios, por ejemplo, creaban larvas para defender las tumbas de los muertos, animándolas de una vida prolongada, y ellas se proyectaban sobre los violadores de sepulcros, provocándoles perturbaciones graves hasta la muerte.

***

En cuanto a los elementales naturales, estos forman agrupaciones innumerables comprendiendo seres de vida propia aunque esencialmente instintiva, que van desde los microbios, de duración brevísima, hasta los espíritus de los animales que por su espíritu incompleto, les consideramos psiquismos elementales.

Los elementales ficticios o artificiales de la tierra, se agrupan en numerosas clases: los de la floresta, de las grutas, de la sub- corteza, de los arenales, de los desiertos, de las planicies, de las regiones heladas, etc., desempeñando cada especie y variedad un determinado trabajo bajo la supervisión de espíritus desencarnados, estos que van desde la protección de animales, la flora y en fin todo el ecosistema.

Los aborígenes de varias regiones del globo, mantienen con ellos estrechas relaciones: no derriban bosques ni inician sus estaciones de caza sin antes evocar a los genios que presiden estas actividades; hacen sus evocaciones previamente golpeando en sus tambores sagrados, en medio de ceremonias bárbaras y cuando el genio surge entre ellos, muchas veces completamente materializado, le hacen rueda en torno y danzan u cantan durante largo tiempo.

Los Lapones mantienen comúnmente estos contactos, son despertados por esos seres que duermen, remiten avisos, piden auxilio en las enfermedades, son protegidos en la caza y en la pesca, y otros lo utilizan hasta para hacer transacciones curiosas, como esa de vender viento a terceros, con la garantía de navegación segura, por lo que mandan a que el interesado amarre en los mástiles pedazos de paño, en los cuales da cierto número de nudos para hacer conocida la embarcación, bien visible a los elementos escalonados para la protección, nudos que los navegantes van deshaciendo poco a poco, en la medida en que el viento cesa y van necesitando de él en esta o en aquella dirección.

AVES Y ANIMALES DEL ASTRAL INFERIOR

Autor ATANAGILDO

OBRA: Más Allá de la Sepultura

Conforme os dije, debido a la necesidad de mantener y defender esas regiones tan aterradoras predominan ciertos tipos de aves y animales de gran porte, muchos de los cuales nos hacen recordar las formas grotescas y brutales de los animales prehistóricos cuyas características vosotros conocéis.

Una de las variedades de aves que más me impresionó en el astral inhóspito es muy parecido al cuervo europeo, de plumas negras y de una tonalidad parecida a la tierra negra y húmeda… es un tipo de ave que emite gritos tan estridentes que parece un enorme gigante que levanta una enorme masa de hierro para dejarla caer sobre trozos de acero suspendidas sobre la región sombría… además de esa ave, observé otro tipo de ave milenaria que conocí en otras vidas pasadas en Alejandría y Menfis. Se trata de una especie alada que era muy reverenciada como ave sagrada, comúnmente momificada y conservada en vasos riquísimos sobre las tumbas de los sacerdotes y faraones egipcios. Es un ave de extremidades largas, como la cigüeña, de pico largo y curvo, que se encuentra clasificada por los especializados terrestres como "ibis aethiopica".

Existen otros innumerables tipos de aves que están siendo clasificadas por los estudiosos… que se mueven en los reinos inferiores… aunque sean paisajes inhóspitos y que infunden temor, es necesario que el hombre encarnado conozca ese mundo astral en vez de acondicionarse exclusivamente a la lectura fantasiosa de los escritores de ficción, que aunque se aproximen a la realidad impresionante no saben trazar caminos benéficos sin sembrar esperanzas para las almas desesperadas.

En muchas excursiones realzadas a las regiones subterráneas…, el tipo de animal que más me llamó la atención fue una especie de caprino gigante – un tipo de cabra montés muy común en los Alpes suizos y muy conocida en las montañas asiáticas y africanas – cuyas extremidades delanteras son más cortas que las traseras, los cuernos son largos y acentuadamente curvados hacia atrás.

Observe a esos animales en pequeños grupos con aspecto terriblemente amenazador y que tenían en sus oscuros ojos un mirar siniestro y hasta diabólico. Eran monstruos peludos, de color sepia y tenían largas barbas hasta las quijadas… agitan el aire a su alrededor cuando se mueven a saltos bruscos, dejando una sensación de temor a las restantes especies de los alrededores…

Para los desencarnados que aún desconocen la composición y la plasticidad de la sustancia astral inferior, es muy fácil confundir a esos caprinos con cierta falange de espíritus malhechores y degradados de las sombras, que se aprovechan de la debilidad ideoplástica de los religiosos "fallecidos" que temen al infierno y a Satanás, para crear escenas de tanta angustia, que no me es permitido revelar, por orden superior, en estas comunicaciones.

Finalmente, pude comprobar que las leyendas o fantasías más absurdas creadas en el mundo físico se fundamentan en esas figuras horrendas, que después de desencarnados encontramos palpitantes de vida en las regiones del astral inferior. Tal vez dominado por tales impresiones dantescas es que el hombre terreno acostumbraba a pintar al diablo con pies de cabra y cuernos de carnero.

¿Se les podrá atribuir alguna función útil a esas aves monstruosas del astral inferior? Aquí la Ley es la misma que rige los fenómenos del "descenso" de la energía y su consecuente materialización en vuestro mundo físico. Aunque varíen los planos vibratorios, la ley permanece inmutable y original en su determinismo creador. Las cosas se transforman, perfeccionan y evolucionan o se petrifican y estacionan a través del tiempo. El astral inferior es inmenso crisol de fuerzas y formas agresivas en continua evolución renovadora, y se asemeja a un rústico y vigoroso laboratorio situado exactamente en el límite de la vida física y de la existencia angélica.

Ese mundo salvaje y saturado de fuerzas prepara los elementos y las formas originales que descendieron a la cuna primaria de la vida terrena, así después drena y purifica los tóxicos mentales y psíquicos de los desencarnados enfermos, ayudándolos a elevarse hacia las esferas más hermosas. Es también el taller que construye las formas carnales para los espíritus que descienden a la materia y en su entorno desencarnatorio funciona como un tanque que lava y recibe sus trajes sucios. Algunas situaciones demasiado pavorosas, de rectificaciones espirituales, nos recuerdan el mismo efecto que hace el nitrato de plata cuando se usa para cauterizar las llagas físicas.

Esas especies gigantescas que merodean siniestramente entre la vegetación sombría del astral inferior cumplen con la tétrica tarea de ser "transformadores vivos" de las energías deletéreas de ese medio tan nocivo.

Aquello que los espíritus de divinidad tendrían que ejecutar bajo los más lúgubres y heroicos sacrificios, esas monstruosas aves y otros tipos de animales extravagantes que realizan a gusto, deglutiendo todas las formas de elementales peligrosos y dañinos que producen las mentes enfermas y diabólicas.

En el mundo físico, la lombriz, el sapo, la lagartija y principalmente el gallinazo, son valiosos cooperadores del campesino, propagando la semilla y destruyendo las sustancias corrompidas y sanean el ambiente de la vida humana.

El astral inferior que rodea la atmósfera terráquea, como ya os recordé es un vasto depósito de deshechos mentales creados por el descuido de la humanidad encarnada, en peligrosa simbiosis con los genios de las tinieblas. Gracias a las aves y a los monstruos que viven en esa tormentosa morada, esas creaciones mentales nocivas son incesantemente devoradas, pudiendo mantener el equilibrio necesario para proseguir la vida astralina y la manutención vital e instintiva de la vida física.

Indagué por mis propios medios, el motivo de la existencia de esas aves y la razón de sus horribles formas que bien podría imitar a todos los cuadros más terribles de la Tierra. Yo no tenía dudas que eran aves destinadas a un ambiente infernal, cuya espantosa voracidad hacía desaparecer instantáneamente todo lo que caía cerca. Pero aún ignoraba su benéfica función de gigantescos transformadores de vida nociva inferior, cuando devoran las creaciones delictuosas que provienen del caos de las pasiones desenfrenadas de la mayor parte de la humanidad terrena.

Esas aves devoran y trasmutan en los hornos crematorios de sus abultados estómagos, las larvas, los elementales, los duendes peligrosos, los desperdicios y los combustibles repelentes que se producen, se agregan e incorporan por efecto de la proyección degradada de la mente humana en la sustancia astral.

¿Existe alguna función especializada para cada tipo o variedad de aves o animales del astral inferior, para la desintegración de las fuerzas y sustancias peligrosas producidas por la mente de los hombres? El espíritu observador no tarda en identificar la sabiduría y la armonía del Creador, que mantienen el equilibrio de la vida por medio de las formas y energías opuestas.

La poesía y la utilidad caminan juntas al servicio benefactor de la creación; mientras el picaflor chupa el néctar de las flores, que es su manjar predilecto, el urubú o buitre hambriento se sirve de la carne putrefacta y se vuelve eficiente higienizador del ambiente apestado. Por eso, los seres dantescos del mundo mórbido del astral también varían su preferencia nutritiva por la forma deletérea que se producen por causa de pensamientos y pasiones degradadas del hombre. El apetito de ciertas aves del astral se satisface con sustancias de un tono pardo terroso y de viscosidad violácea, producidas por la codicia, celos; otras prefieren alimentarse con porciones repugnantes de formas negras y entremezclados con fulgores chispeantes, que se crean por las expresiones violentas del odio, de la cólera y de la irascibilidad de los encarnados.

También noté un tipo alado muy parecido al buitre terrestre, de cabeza pelada y de aspecto chocante a primera vista, que además de su mórbida alimentación se entregaba a un movimiento febril de alas, quedando luego en una actitud de ave enferma… los preceptores me informaron que aquel tipo de ave lenta, de mirar fijo y enfermo, sólo devoraba las configuraciones mentales producidas por las almas encarnadas y desencarnadas que son enfermas, melancólicas y sin esperanzas, que especialmente mantienen la idea fija en el suicidio.

En aquellas grutas y cuevas aterradoras del astral inferior, delante de las expresiones más horrendas que la imaginación humana pueda crear, la madre Tierra actúa a favor de sus hijos para que llegue lo más rápido posible a la perfección. Sirviéndose de aquellos repulsivos "transformadores vivos", los hace trabajar bajo el control de la ley benefactora para higienizar el medio e impedir el desarrollo de las formas perniciosas y ofensivas de sus propios creadores humanos.

Las especies de fauna del astral inferior en obediencia a la ley específica del magnetismo, afín a sus tipos se conservan en las regiones o zonas en que se depositan sustancias mentales perniciosas de su preferencia nutritiva. Hay tantas variedades animales, reptiles y aves astralinas, acordes a la producción de los más variados tipos de sustancias degradas provenientes de las mentes humanas. De acuerdo con la psicología de los pueblos terrenos, cada raza presenta en particular una tendencia colectiva más elevada o más nociva, todo depende de la pasión o de la virtud predominante en su seno. Hay pueblos cuya índole fundamental es la ociosidad, en otros, la furia belicosa y existen aquellos en que predomina la sensualidad, la hipocresía, la inescrupulosidad, la cupidez o la venganza, como si fuesen dominadas por una sola pasión.

JUVRUS Y ORCO

WALDO VEIRA

Obra: Proyecciones de la Conciencia

Capitulo 12

Domingo 5 de agosto de 1979, Me recojo en la cama siendo las 20:09 horas, físicamente cansado y somnoliento. Tuve una nítida y prolongada visión de María Clara, preparándose con anticipación para una excursión diferente, sin revelar detalles. Casi siempre constituye sorpresa el itinerario de la proyección, cuando esta es dirigida. Los intensos ejercicios de exteriorización de energías se prolongaron hasta las 20:36, hora que indicaba el reloj cuando lo consulté. Me recosté por el lado derecho.

***

La conciencia me hizo aparecer frente al espíritu María Clara, que allí se presentaba con la apariencia de encantadora niña de unos 9 años de edad, cabellos oscuros abundantes y alisados. Vestido delicado, con expresiones de niña muy entendida. Era la ya conocida María Clara, que estaba preparándose y en condiciones para su próxima reencarnación.

Explicó que mi visita se haría a una entidad llamada Orco y que en lo posible evitara sobresaltarme manteniendo la confianza y serenidad durante el tiempo de su presencia, aunque no siempre visible. A continuación, hizo breves consideraciones sobre los animales y los hombres en la Tierra, sus tareas, evolución y razón de ser, como especie de preámbulo.

Se llevó a cabo la excursión a una región espiritual limítrofe a la superficie del planeta.

Por momentos, observé que el ambiente no era el más agradable. En la atmósfera, más oscura que clara, el penoso cambio se dio del volitar,al deslizamiento, del deslizamiento pasamos al lento caminar hasta alcanzar una desértica y semioscura planicie. Los haces de luz que salían del psicosoma, inmediatamente desaparecieron.

En el húmedo, pesado y frío ambiente, atravesando por helados vientos y desagradables emanaciones, bordeaba solamente una luz con apariencia de neblina bajo el cielo color plomizo. Formas vagas pasaban como sombras opacas en la espesa oscuridad. Extrañas bolas de energía revoleteaban aquí y allá, dando la sensación de estallarse.

Cuanto más se avanzaba, más denso y difícil se presentaba el aire cuya estructura se semejaba de la propia materia física, extendido como red en plena noche sin luna, y en medio del cual me esforzaba por continuar.

Rompían las tinieblas el vagar de sombríos personajes, de persistentes formas pensamiento y de creaciones indescriptibles, algunos alucinados y con forma de avispas caballo, que simulaban observar, muy rápidos, voraces y perseguidores, daban la sensación de penetrar en todas las cavidades pero que, felizmente, así como aparecían eran naturalmente alejados.

Después de lo anterior, el recorrido fue extenso, realizando con prisa que no permitió el examen detallado del medio ambiente. Un espíritu, con apariencia de hombre duro y fuerte atravesó el camino. Explicó mentalmente:

–Bienvenidos sean, soy Javrus. Les presentaré a Orco.

Presentí instantáneamente que él conocía mi procedencia y la finalidad de la visita.

Así que me desentendí, y en ese momento, el tortuoso camino, es atravesado de un salto por un enorme perro color tierra, del tamaño de una pantera, musculoso, pelos largos semejante a una melena, con brillantes ojos parecidos a los humanos muy penetrantes y perturbadores. Gruñía con sonidos estridentes, a manera de un lobo muy feroz. De las patas sobresalían puntiagudas garras. Era un personaje capaz de impresionar al espectador más sereno.

La entidad hizo un gesto para calmarlo y el auténtico perro de la región Malasia se hizo a un lado, se mantuvo alerta por un momento y después se retiró de regreso tomando la misma dirección de donde procediera, desapareciendo en las sombras.

El corpulento Javrus hizo algunas consideraciones sobre las tareas en que se desenvolvía con Orco. Me comunicó que se desempeñaba como vigilante espiritual y que Orco no debía ser tomado como un perro común pero sí, como un ser más evolucionado a su especie, de inteligencia subhumana, dotado de un poderoso magnetismo animal. A tales seres, no es raro que se les denomine elementales o asistentes de la naturaleza, y así se les dé el nombre que sea, afirmó, son una creación de Dios, hermanos menores de nuestro sendero evolutivo, igual a los demás.

Informó además, que muchas de las misiones de paz e incursiones de asistencia y rescate son confiadas a los dos para atender a entidades enfermas, necesitadas de recursos aún muy humanos, para ser esclarecidos y rehabilitados, por respirar aún el producto contaminado de las fuerzas psíquicas de la superficie planetaria, que son los residuos mentales de los encarnados invigilantes. Muchas otras especies animales existen para el servicio, conforme a las posibilidades y aptitudes personales, a la manera de Orco.

Acentuó que, frecuentemente el encarnado que consigue llegar hasta aquellos parajes espirituales, al retornar a la vigilia lo hace con sobresaltos, tejiendo en su imaginación en décimos de segundos, bajo la actuación del pavor y al primer contacto con el cerebro físico, increíbles y floridas pesadillas en la que lucha con monstruos que lo persiguen implacablemente. Es natural que así sea, pues si el ambiente y la apariencia y expresiones de Orco amedrentaba a los más experimentados desencarnados de ágiles y lúcidas mentes, que decir de los encarnados proyectados fuera del cuerpo, de manera precaria, improvisada, raciocinio débil, en salidas fugaces y condiciones mentales no siempre conscientes?

Cualquiera que las experimente, ha de reconocer que aquellas escenas pueden desencadenar las más fantásticas pesadillas, fantasías y creaciones mitológicas en la mente encarnada. Estas situaciones deben haber inspirado a la formación de los servicios de los guardias humanos que se hacen acompañar de perros en tareas de vigilancia, búsqueda y rescate.

En ese punto le dirigí un gesto fraternal y Juvrus se quedó con la responsabilidad de abnegado en la incesante lucha purificadora en un área de intensos conflictos espirituales. ¿Cuánto tiempo hará que ese abnegado espíritu se encuentra trabajando en esa región?

La salida de allá fue lo menos desagradable y el retorno a lo físico sucedió como una ligera travesía.

***

De regreso a lo físico, acostado sobre el lado derecho, consulté el reloj y registré mentalmente, 9:36 de la noche, con la percepción del brillo en la semioscuridad del cuarto de aquellos inolvidables ojos de la personalidad de Orco, avanzando y ladrando. De aquél núcleo de fuerzas vivas, él se destacó por fuerza mayor, tocándome profundamente y desarchivando de manera instantánea y completa los acontecimientos de mi banco de memoria.

Nunca se deja de aprender. Cuantas vidas desconocidas existen aún para ser estudiadas. En el plano extrafísico encontramos las cosas más extrañas que en la propia superficie del planeta. Es bueno decir aquí que el periespíritu o cuerpo luminoso tiene siempre alguna claridad, sea sutil o exuberante, lo que varía es su tonalidad, grado e intensidad, o la potencia energética irradiante conforme al grado evolutivo de la inteligencia, las condiciones de la conciencia y del ambiente.

Y, en ese instante, un baño de energías espirituales parece haber hecho sonar una campanilla en mi interior, que me llamaba para cumplir con el registro de lo experimentado.

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