Una vez realizados todos estos pasos se obtiene una batería de bacterias que contiene todos los genes presentes en un organismo. Cuando se parte de ADN genómico digerido o fragmentado con enzimas de restricción, cada bacteria contiene un fragmento del genoma original. Esta batería de bacterias recibe el nombre de genoteca genómica. Si se parte de ADNc obtenido del total de los ARN mensajeros de una célula, cada bacteria contendrá una única copia de ADNc y, por tanto, un único gen, con la ventaja de que en este caso se ha eliminado la información no codificadora (intrones) presente en el ADN.
Antes de proceder al estudio de los genes es necesario identificar las bacterias que contienen el gen o genes de interés. En primer lugar, deben identificarse aquellas bacterias que han recibido los vectores de clonación de aquellas que no recibieron las construcciones. Cuando el vector de clonación es un plásmido, normalmente se utiliza un marcador del vector (generalmente la resistencia a un antibiótico), de tal manera que sólo las bacterias que contengan el plásmido podrán crecer en el medio que contenga dicho antibiótico. En el caso, por el contrario, de que las células contengan un fago, basta con buscar la presencia de placas de lisis. En segundo lugar, deben identificarse las bacterias que presenten los genes de interés para separarlas del resto. Para ello, se recurre a diversas estrategias que van desde la hibridación con sondas de ácidos nucleicos (tanto en genotecas genómicas como en genotecas de expresión), hasta el empleo de técnicas de inmunodetección para genotecas de expresión, que permiten detectar la proteína producida por el gen deseado mediante anticuerpos específicos. Entonces, se toma esta bacteria y se hace crecer para producir un clon de bacterias idénticas. Como el vector que contiene el ADN insertado se replica siempre que la célula bacteriana se divide, se produce la cantidad suficiente de ADN insertado clonado necesaria para caracterizar el gen. De esta manera, es posible estudiar los genes que codifican proteínas y que tienen un interés especial, o aquellos cuya inactivación, consecuencia de una mutación, origina una enfermedad específica. Por ejemplo, se puede determinar su secuencia y la naturaleza de la mutación que da lugar a una enfermedad.
En algunos casos, el gen se puede expresar en la célula bacteriana para producir la proteína específica (a partir de una genoteca de expresión), que se puede emplear en el tratamiento de enfermedades como la diabetes mellitus (insulina) o el enanismo (hormona del crecimiento). Recientemente, se han podido introducir genes funcionales clonados en los individuos, para tratar una enfermedad de forma más directa. Es probable que el empleo de estos procedimientos de tratamiento genético con ADN clonado aumente en el futuro.
Luego de miles de experimentos con ratones y otros mamíferos se llega al único caso exitoso hasta 1997, la tan famosa oveja Dolly creada por Wilmut.
Dolly llegó a adulto – hasta tuvo cría – ésta fue generada a partir de una célula de adulto mientras que en experimentos anteriores se realizaba con núcleos de células juveniles. Pero se plantea hoy el problema del envejecimiento veloz de sus crías.
Como realizaron el clon de Dolly, nacida en Escocia
Se toma una célula de la ubre y de ella se extrae el núcleo que contiene todos los cromosomas.
Se detiene el reloj biológico de la célula mamaria para que se olvide su función anterior.
De otra oveja se toma un óvulo no fecundado, del cual se elimina el núcleo porque contiene solo la mitad de los cromosomas. El citoplasma provee los nutrientes para el futuro embrión
Se combinan el citoplasma y el núcleo. Este último tiene toda la herencia (ADN) de la oveja madre, por eso el clon será igual a ella.
Mediante una descarga eléctrica, las membranas externas del óvulo y la célula mamaria se fusionaron.
El núcleo con el ADN de la célula donante se integró en el interior del óvulo vacío.
Esta fusión hizo que la célula comenzara a dividirse y a reproducirse hasta convertirse en un embrión.
El embrión se implantó en el útero de una tercera oveja, que hizo la función de "madre de alquiler".
El desarrollo del embrión dio lugar a Dolly, una oveja exactamente igual a aquella a la que se le extrajo una célula de las glándulas mamarias.
La clonación reproductiva en animales
Como suele ocurrir con muchos avances científicos de vanguardia, aquí puede que también se hayan exagerado las posibles derivaciones prácticas inmediatas, aunque no cabe duda que a medio y largo plazo, cuando la técnica se vaya perfeccionando, podría encontrar numerosos campos de aplicación.
Uno de los objetivos buscados por el grupo de Wilmut (en alianza con una empresa) es unir la técnica de la clonación con la de Ingeniería genética de mamíferos con objeto de producir medicamentos o sustancias útiles comercialmente. La idea es que una vez que se haya obtenido un animal transgénico interesante (por ejemplo, ovejas o vacas que en su leche secretan sustancias terapéuticas determinadas por un gen introducido previamente), ese individuo serviría de "molde" para generar varios ejemplares clónicos.
Otra aplicación sería asegurar copias de un ejemplar que haya mostrado buenos rendimientos. La clonación evitaría que su buena combinación de genes (su genotipo) se "diluyera" al cruzarlo sexualmente con otro. Sin embargo, mientras el coste de la técnica sea elevado, no estará al alcance de las explotaciones ganaderas convencionales. Pero además habría que tener mucha precaución con la amenaza de pérdida de diversidad genética de la cabaña ganadera, ya que si se impusiera este método, se tendería a la uniformidad (una tendencia ya presente en la agricultura y ganadería actuales). Recordemos que la biodiversidad es un recurso valioso también en los "ecosistemas agropecuarios", ya que supone una reserva de recursos genéticos adaptados a diversas condiciones ambientales y a diversos contextos socioeconómicos.
Se ha hablado igualmente de que la clonación podría representar la salvación "in extremis" de ciertas especies silvestres amenazadas de extinción y difíciles de criar en cautividad. Pero si se llega a este caso, sería el triste reconocimiento de nuestro fracaso de conservarlas por medios más simples y naturales. Además, lo más probable es que, debido a que la clonación no aporta diversidad genética, la especie estuviera abocada de todas formas a la "muerte genética", condenada quizás a vivir en zoológicos o en condiciones altamente artificiales, casi como piezas de un museo viviente.
Tipos de clonación según el método
1. Partición (fisión) de embriones tempranos: analogía con la gemelación natural.
Cada mitad o trozo desgajado del embrión se introduce en una zona pelúcida de otro óvulo, o en una cubierta artificial, y se implanta. Los individuos son muy semejantes entre sí, pero diferentes a sus padres.
En ratones, tiene éxito con blastómeros separados en fase de 2 células. Pero los blastómeros de embriones de 4-8 células pueden suministrar células para la masa celular interna y para el trofectodermo si se incorporan junto con blastómeros de otros embriones.
Se viene aplicando desde hace años en ganadería. Estudios de Willadsen (1979 y 1981) sobre ovejas: algunos blastómeros de embriones de 4-8 células pueden originar individuos completos.
Recientemente se ha hecho en monos (macacos Rhesus)
En humanos hubo un experimento polémico (Hall y Stillman, 1993) con un zigoto poliploide inviable (no se pretendía implantarlo).
El resultado son individuos prácticamente idénticos entre sí (salvo mutaciones somáticas), pero diferentes a sus padres. Serían equivalentes a gemelos monozigóticos.
No se debe considerar como clonación en sentido estricto.
2. Paraclonación: transferencia de núcleos procedentes de blastómeros embrionarios o de células fetales en cultivo a óvulos no fecundados enucleados y a veces, a zigotos enucleados. El "progenitor" de los clones es el embrión o feto.
Los núcleos pueden proceder de:
Blastómeros de embrión preimplantatorio: las células de la masa celular interna como las del trofectodermo son totipotentes.
Células embrionarias o fetales de un cultivo primario o de un cultivo celular.
Estos núcleos se transfieren a un óvulo enucleado o a un zigoto al que se le hayan eliminado los pronúcleos. Este óvulo receptor aporta mitocondrias, y en el caso del zigoto, algo del espermatozoide.
El resultado: individuos casi idénticos entre sí, pero diferentes de los progenitores del embrión que aportó el núcleo transferido. Se pierde una generación, ya que el embrión donante del núcleo se destruye. Los individuos nacidos así se parecerían (desde el punto de vista del genoma nuclear) al individuo que hubiera surgido del embrión destruido.
A mitad de los 80 se venían produciendo paraclonaciones en diversos animales de granja: ovejas y vacas. Willadsen logró terneros por transferencia de núcleos de embriones en fase de hasta 128 células. En 1996 el equipo de Wilmut y Campbell logró dos ovejas (Megan y Morag) por transferencia de núcleos de embriones. PPL siguió con experimentos de paraclonación con células embrionarias y fibroblastos fetales.
Se ha empleado en animales transgénicos clónicos. Polly (julio 1997), es una oveja paraclónica (núcleo donante: fibroblastos fetales) transgénica productora de factor IX de coagulación humano. Intentos de cerdos modificados para xenotrasplantes.
Un avance reciente significativo es la clonación de decenas de ratones empleando núcleos de células madre no quiescentes, realizado por un equipo de la Universidad de Hawai y la Universidad Rockefeller. Una de las mayores incidencias de este trabajo es que demuestra que se puede clonar con núcleos de células en cultivo bien caracterizadas, y no solamente con células frescas o cultivos primarios. Como las células madre de ratón se manejan bien desde el punto de vista genético, esto abre la vía a la fácil creación de ratones clónicos y transgénicos.
3. Clonación verdadera: transferencia de núcleos de células de individuos ya nacidos a óvulos o zigotos enucleados. Se originan individuos casi idénticos entre sí (salvo mutaciones somáticas) y muy parecidos al donante (del que se diferencian en mutaciones somáticas y en el genoma mitocondrial, que procede del óvulo receptor).
El núcleo procede de individuo nacido. Se transfiere a óvulo o zigoto enucleados, y el embrión se implanta en útero. El resultado: individuos casi idénticos entre sí y casi idénticos a su progenitor (donante del núcleo).
Se ha logrado en varias especies:
Oveja (Dolly). Núcleo donante de célula sin identificar de ubre de oveja de 6 años de la raza Finn Dorset. Embrión implantado en hembra Scottish Blackface. Baja tasa de éxitos: 430 óvulos, de los que se obtuvieron 277 óvulos reconstituidos, que se cultivaron por separado durante 6 días. 29 blastocistos "normales" se transfirieron a hembras receptoras. El único éxito fue Dolly. Algunos fueron fetos o neonatos muertos, o con alteraciones del desarrollo.
Ratones, con núcleos del cúmulo oóforo. (El primer ratón clónico nació el 3 de octubre de 1997, y fue llamado Cumulina; ya ha tenido progenie aparentemente normal, que a su vez se ha reproducido). El haber obtenido clones en esta especie de laboratorio, con ciclo de vida corto y de la que se tienen amplios conocimientos de su genética, abre perspectivas insospechadas para los estudios básicos sobre la clonación: mecanismos de la reprogramación celular, impronta (imprinting) genómica, activación del genoma del embrión, diferenciación celular, etc. Poco después, este mismo equipo japonés informó de la clonación de ratones a partir de células del rabo de ratones adultos.
Ganado bovino: núcleos de células epiteliales del oviducto, del cúmulo oóforo, epiteliales, musculares.
Ganado caprino.
Recientemente se ha logrado en ganado porcino: el grupo de Roslin-PPL lo ha conseguido con un nuevo método de doble transferencia nuclear, con el nacimiento de cinco lechones, con dos subgrupos de tres y dos que eran clones entre sí y con respecto al correspondiente donante.
Fines de los distintos tipos de clonación
De la gemelación artificial
En animales:
Investigación básica
Mejora de FIV
Mejora de fertilidad de las especies empleadas.
En humanos:
En FIV, para mejorar resultados en mujeres con pobre estimulación ovárica
Gemelos idénticos separados en el tiempo
De la paraclonación
En animales:
Individuos idénticos para investigación
Producción ganadera
Junto con clonación, para biotecnología: tejidos "humanizados", granjas farmacéuticas
Fuentes de tejidos, para xenotrasplantes
En humanos:
Investigación básica y aplicada
Terapia Para enfermedades mitocondriales que producen ceguera o epilepsia: transferencia del núcleo del embrión hasta un óvulo-zigoto recepetor.
De la clonación verdadera
En animales:
Mejora de conocimientos en biomedicina modelos de enfermedades. Con transgénesis: producción de medicamentos. Organos para xenotrasplantes: cerdos transgénicos con factor inhibidor de complemento humano.
Ganadería: Obtención de animales transgénicos. Recombinación homóloga para generar animales noqueados con genes inactivados y sustituidos. Producción de proteínas terapéuticas.
Ovejas simultáneamente clónicas y transgénicas que segregan en su leche esa proteína de la que carecen los enfermos del enfisema pulmonar congénito.
Estudios con cabras.
Idealmente se necesita método de transferencia no quirúrgica de embriones. Rápida propagación de fenotipos probados en el sector ganadero. Venta y distribución cómoda de embriones. Evitar la falta de diversidad genética, limitando el número de individuos de un mismo clon en cada rebaño.
Intentos de salvar in extremis a especies de la extinción (p. ej, el panda gigante, un bóvido salvaje asiático llamado gaur, etc.). Incluso alguien está intentando "resucitar" especies extinguidas de las que hay material biológico conservado (alguna especie de marsupial australiano como el tigre de Tasmania, el bucardo -una subespecie de cabra montés recientemente desaparecida del Pirineo español). En enero de 2001 nació en los EE.UU. un gaur clónico, pero murió a los dos días a causa de una disentería. En octubre de 2001, se comunicó el nacimiento en Italia de un muflón clónico, a partir de células de hembras muertas de la isla de Cerdeña.
En humanos:
Clonación reproductiva: Crear un individuo clónico. Posibles situaciones: Como técnica de reproducción asistida excepcional, no convencional.
Cuestiones de eficiencia: si se tuviera la eficiencia del caso Dolly, necesitaríamos 200 mujeres.
Pero recientemente se ha visto que con el líquido de aspiración del folículo ovárico se pueden obtener muchos folículos preantrales que se pueden madurar en laboratorio hasta ovocitos maduros.
Desarrollo de folículos ováricos humanos en ratones scid e hipogonádicos.
Cuestiones de seguridad: Incidencia de nacimientos muertos y abortos. Según Wilmut, hay un patrón continuo de muertes durante el desarrollo embrionario y fetal, llegando a término sólo 1-2% de los embriones.
¿Qué edad genética tiene el clon? ¿Corresponde a la edad de la célula donante? Los datos actuales parecen indicar que la transferencia nuclear no revierte la edad genética.
¿Supone esto mayor peligro de acumulación de mutaciones y de envejecimiento celular? Hay informes sobre anomalías en este sentido, por ejemplo, un acortamiento significativo de los telómeros, lo que parece un indicio de la edad celular. Es posible que los efectos fisiológicos en el acortamiento de la edad de los animales clonados se reflejen tras varias generaciones. Sin embargo, otros informes sobre las terneras clónicas parecen indicar que ocurre lo contrario, un rejuvenecimiento según ciertos parámetros moleculares.
Clonación no reproductiva: se realiza la manipulación celular como en la anterior, pero el embrión no se implanta en útero, sino que puede servir a distintos objetivos, principalmente de investigación: Sobre fertilidad, anticoncepción, etc.
Desarrollo embrionario
Obtención de células madre e inducción de diferenciación a diferentes tejidos.
Lógicamente ésta técnica provocó la reacción mundial, especialmente si se piensa en clonación humana dado que ésta técnica alimenta la fantasía de perpetuarse a través de un clon, desafiando nuestro destino como mortales.
El embriólogo Ian Wilmut, creador de la oveja Dolly, dijo a los diputados que lo invitaron a discutir estos avances científicos: "si usted realmente quiere hacer un clon humano, puede hacerlo. El único límite es la ética…"
Problemas Éticos
La clonación humana está expuesta a todas las observaciones éticas y jurídicas que lo han condenado ampliamente. Como ha escrito Hans Jonas, es "en el método la forma más despótica y esclavizante de manipulación genética; su objetivo no es una modificación esencial de la sustancia hereditaria, sino su esencial fijación en la oposición a la estrategia dominante en la naturaleza". Es una manera de manejar la relación y complementación constitutivas, tanto en su aspecto biológico como en el propiamente personal. Tiende a considerar la bisexualidad como un mero residuo funcional, puesto que se requiere un óvulo, privado de su núcleo, para dar lugar al embrión-clon y es necesario un núcleo femenino para que su desarrollo pueda llegar hasta el final.
La clonación humana merece un juicio negativo también en relación con la dignidad de la persona clonada, que vendrá al mundo como "copia" de otro ser. Esta práctica propicia un intimo malestar en el clonado, cuya identidad psíquica corre serio peligro por la presencia de su "otro". Tampoco es imaginable que pueda valer un pacto de silencio, el cual sería imposible e inmoral, ya que el clonado se engendró para asemejarse a alguien que "valía la pena" clonar y, por lo tanto, recaerán sobre él las atenciones y expectativas, que constituirán un atentado contra su forma de pensar.
El cuerpo humano es elemento integrante de la dignidad y de la identidad personal de cada uno, y no es justo usar a la mujer para que proporcione óvulos que son necesarios para los experimentos de clonación.
El proyecto de la "clonación humana" es una terrible consecuencia a la que lleva una ciencia sin valores y es el producto del profundo malestar de nuestra civilización, que busca en la ciencia y en la "calidad de vida" el significado del sentido de la vida y a la salvación de la existencia.
¿Podrá el Derecho evitar la clonación humana?
La sociedad humana deberá probablemente enfrentar uno de los mayores desafíos para la dignidad de la persona: la fragilidad de las posturas éticas ante el avance avasallador de los intereses económicos en juego en la materia.
¿En qué consiste exactamente la clonación?
Para presenciarlo, resulta necesario efectuar una previa aclaración terminológica. Si bien se habla vulgarmente de "clonación" para referirse a la técnica que dio nacimiento a Dolly, tal término es más genérico, e incluye todo procedimiento tendiente a producir réplicas de un material biológico determinado, ya se trate de secuencias de ADN, de células, de tejidos o de organismos. En tal sentido, la clonación es, desde hace décadas, una técnica de rutina en los laboratorios. Una parte importante de los progresos en el desarrollo de nuevos productos farmacéuticos está ligada a este tipo de clonación, que no plantea de por sí mayores problemas éticos.
Pero en el caso de Dolly estamos ante una forma muy particular de clonación, que consiste en la transferencia del núcleo de una célula somática y tiende, no a generar réplicas de células o de tejidos, sino de individuos completos.
Es aquí donde surge el problema ético y jurídico, cuando se intenta utilizar tal procedimiento par obtener réplicas de seres humanos.
Eticistas Gubernamentales
A nivel de las legislaciones nacionales sobre el tema, podemos destacar:
La ley alemana de protección del embrión, de 1990, que sanciona penalmente a quien "provocare artificialmente la formación de un embrión humano portador de la misma información genética que otro embrión, feto, o ser humano vivo o muerto". también se sanciona la acción de trasferir tal embrión a una mujer. La tentativa es punible.
La ley española de reproducción asistida, que sanciona penalmente la creación de seres humanos idénticos.
La llamada Fertilisation and Embriology, prohíbe en el Reino Unido la clonación a partir de células embrionarias. El artículo 3, inc. 3º dispone que "no puede autorizarse… el reemplazo del núcleo de una célula embrionaria por el núcleo de la célula de otra persona o de un embrión, ya sea en su estadio inicial o en las etapas subsiguientes de su desarrollo".
La Ley danesa 503 de 1992, que establece un sistema de comités de ética médica y biológica, prohíbe la clonación humana.
En Francia, las leyes de bioética de 1994 no previeron la prohibición de la clonación humana. No obstante, la revisión a que serán sometidas este año hace suponer que se completará tal laguna. El Comité Consultivo Nacional de Ética para las Ciencias de la Vida y la Salud emitió un dictamen el 22 de abril de 1997 condenando toda práctica tendiente a reproducir seres humanos idénticos.
En los Estados Unidos no existe una legislación única al respecto, si bien se han presentado numerosos proyectos al Congreso. California es hasta el momento el único Estado que ha aprobado una ley prohibiendo la clonación, aunque muchos otros están considerando una medida semejante.
Por su parte, la Ministro de Salud Pública de Italia dictó una ordenanza que establece: "Está prohibida cualquier forma de experimentación y de intervención, practicada u orientada a la clonación humana o animal".
En Argentina, existe un Decreto que prohíbe los experimentos de clonación relacionados con seres humanos. Por su parte, la Comisión Nacional de Bioética realizará investigaciones sobre la clonación para asesorar al Gobierno en la redacción del Proyecto de Ley. Mientras tanto, el Senado nacional declaró como "práctica aberrante" la clonación de humanos y advirtió que la ciencia y la técnica "deben respetar" los criterios fundamentales de la moralidad.
Japón decidió ayudar económicamente la investigación sobre clonación en seres humanos.
En tanto, en el Brasil la clonación humana es ilegal desde 1995. sin embargo, el Vicepresidente admitió que "el caso de la oveja Dolly podría generar algunos cambios en las posiciones actuales".
Asimismo, en Arabia Saudita, opinan que la clonación debería ser penada con la amputación de pies y manos o con la pena capital, y consideran que "la clonación es la manipulación de un ser vivo; es la mayor perversión que puede existir en la tierra".
Eticistas Científicos
La mayoría de los eticistas religiosos consideran la clonación humana como un hecho incorrecto. Los más permisivos entre ellos instan a una gran precaución en la utilización de este tipo de manipulación genética. No obstante, la ciencia tiene sus propios eticistas y, por lo general, toman el punto de vista opuesto. Los científicos tienden a centrarse en los beneficios positivos de la clonación, descartando los peligros. Tienden a no hacer predicciones de consecuencias catastróficas seriamente. A la crítica ética proveniente de la ciencia exterior la consideran poco ilustrada y/o perjudicial. Señalan que se puede confiar en ellos como creadores de su propia ética. Incluso cuentan con sus propios héroes éticos, santos científicos de todo tipo (Galileo, Bacon).
Los eticistas científicos enfatizan las posibilidades correspondientes a conquistar la enfermedad y la infertilidad. Se centran en nueva información acerca del funcionamiento celular que ayudará en la lucha contra el cáncer. Además, la clonación podría actuar como medio de protección en contra de ciertas enfermedades genéticas que resultan de la combinación de genes de ambos padres. No obstante, la ciencia cuenta con su propia historia de escándalos éticos y la idea de que la gente debería dejar hacer a los científicos lo que ellos consideren correcto ya no convence a nadie. El Dr. James Watson, quien ganó el Premio Nobel por descubrir la estructura del ADN, concuerda con que esta problemática no puede ser dejada en las manos de la ciencia.
Eticistas Económicos
Ni a la ciencia ni a la economía les gustan las restricciones éticas. Los portavoces de los intereses económicos (en la economía) apoyan a los científicos en contra de cualquier situación que restrinja la clonación. Los intereses económicos se encuentran concentrados mucho más en la clonación animal que en la humana. No quieren ver arruinadas las posibilidades económicas de la clonación animal a causa de las preocupaciones que acarrea la clonación humana.
Eticistas Literarios
Eticistas Literarios
La literatura, como la religión, constituye una importante fuente de ética. Los novelistas y los poetas proporcionan puntos de vista éticos y muchos ya han tomado posiciones muy críticas en cuanto a la clonación. El libro de Mary Shelly "Frankenstein" (1818) fue la primera evaluación negativa. Frankenstein era inteligente y articulado, pero se encontraba profundamente angustiado por su origen antinatural. En esta historia, el personaje se vuelve loco y asesina al doctor que lo creó. "Los Chicos de Brasil" fue tan aterradora como la clonación misma.
Eticistas Religiosos
La religión católica manifestó que "ninguna experimentación científica, en ningún momento y por ningún motivo, puede ser justificada si pasa el límite determinado por el respeto a la vida desde su concepción, según lo estableció la voluntad de Dios". Por su parte, el cardenal Joseph Ratzinger aclaró: "La iglesia no entra en las cuestiones técnico-científicas. Lo que le importa es la dignidad del hombre, la defensa de la vida naciente desde la concepción. No es lícito que se manipule la voluntad de Dios". También admitió: "Son bienvenidas las investigaciones para ayudar a vencer el hambre y las enfermedades, pero la sacralidad de la vida es intocable".
La Conferencia Episcopal Argentina se puso en contra de la clonación de seres humanos. Opinan que esto desconocería la dignidad y exclusividad de la procreación que le corresponde a los padres, dejaría de lado el valor de la sexualidad dentro del matrimonio, no reconocería el derecho a tener padres y a ser educado en el ámbito familiar y daría lugar a la utilización de los clones para otros fines. También advirtió: "De poco valdría la prohibición si todos, con la responsabilidad que nos corresponde, no hacemos llegar a la conciencia de cada hombre para que no se sienta autónomo frente a valores, principios y leyes".
Otra religión en contra fue la musulmana. Lo manifestaron mediante una frase del Corán: "¡Conservad la consanguinidad! Dios siempre os observa". Opinan que la clonación es una "flagrante profanación de las leyes divinas reveladas, la ética y la naturaleza misma". Por su parte, la religión judía también se pronunció en contra.
La sorpresa fue el apoyo de la Iglesia Metodista, quien defendió la clonación y la consideró "buena" por el aporte que puede realizar a la curación de enfermedades y manifestó: "Los laboratorios que la están efectuando están trabajando a favor de la vida". Asimismo afirmó: "Dios le ha dado a la humanidad la capacidad de pensar y aún de manipular la vida", y puso como ejemplo el caso de "un médico cuando transplanta un órgano".
¿Podrá el Derecho evitar la clonación humana? En el momento actual, es imposible dar una respuesta a este interrogante. Lo que parece claro, es que las tentativas del Derecho por evitar la duplicación humana dan la impresión de constituir una empresa quijotesca, sobre todo si se tienen en cuenta los poderosos intereses económicos que debe enfrentar y que funcionan en base al único criterio de la rentabilidad. Tales intereses se presentan como temibles gigantes contra los que el pobre Derecho intenta luchar en vano con su lanza y su escudo. El resultado lógico de este desafío es que Don Quijote termine maltrecho por el suelo. Pero quién sabe si, a lo mejor, la justicia logra imponerse sobre la fuerza, si la humanidad recupera la creencia en su propia dignidad y el caballero andante sale triunfador. Los años venideros nos dirán cuál es el final de esta historia.
Dilema del hombre clonado
Veamos algunas definiciones: "Humano: perteneciente al hombre o propio de él. // Persona". "Hombre: ser animado racional. Bajo esta concepción se comprende al género humano".
Si un ser vivo presenta dichos caracteres genéricos debe decirse que él forma parte de la humanidad y no existen motivos para excluir del género a un ser que presente el accidente de poseer idéntico contenido genético al de otro.
¿Es el clon una persona? La persona es un ser único, integral, e irrepetible, sujeto de derechos y obligaciones, capaz de autodeterminarse. Con este pensamiento, niegan la posibilidad de conferir personalidad a un ser clónico, porque no es ni único, ni singular, ni irrepetible: no es sujeto; al no ser persona no podrá ser sujeto de derechos ni de obligaciones, ni será capaz de autodeterminarse.
El fundamento es la característica "única e irrepetible" de la persona. Piensan que, si para obtenerse un clon es necesaria una persona "original" o "fuente" del material genético, y dado que esta persona es la que posee los caracteres "únicos e irrepetibles"; el clon no es único ni es irrepetible, por lo tanto: el clon no es persona. Al tratar de definir la situación jurídica, sólo logran identificarlos como "individuos dentro de la generalidad, pero no-personas".
Imaginemos que ya se produjo la clonación y se obtuvieron cinco entes clónicos. Estos poseerán idéntico contenido genético y podrán ser físicamente iguales al original. Pero serán cinco individualidades diferentes, con necesidades y vivencias diferentes. "Esto es así porque la herencia genética de un ser humano no es como lo describe una metáfora usual, un programa preciso y fijo. Más bien, es una serie de potencialidades cambiantes que actúan sobre el individuo y su medio ambiente. Mucho más que cualquier otra especie, somos el resultado de los genes y del medio ambiente; no sólo una suma de genes y ADN, sino el producto de una constante interacción de ellos". Esto argumentó Jessica Mathews, y agregó: "Una característica física o emocional en nuestro medio actúa como una particular dotación genética para producir una conducta particular, que a su vez pone al individuo en un medio particular, y así sucesivamente de acuerdo con una pauta infinitamente compleja, que hace a cada persona, única. Los gemelos criados por separado dan una idea aproximada de cómo podrán ser los clones humanos. Aunque coinciden en muchos sentidos, los individuos genéticamente idénticos son individualidades diferentes. Los clones podrán ser todavía menos parecidos, al no compartir el mismo medio uterino".
La naturaleza de los clones: Serán entes que presentarán las distintas características genéricas de la Humanidad, con los idénticos caracteres físicos y psíquicos, parecerán seres humanos, hablarán como ellos, etc. No podremos sino concluir que son personas, o se caería en la desgracia de considerarlos cosas.
En efecto, de llegar a presentarse el caso de la clonación humana, no habría otra alternativa más que aceptar su condición de humano y en virtud de ello reconocer su personalidad.
La filosofía cristiana plantea que el comienzo de la vida va directamente relacionado con el momento de la concepción. En este momento el alma se une al cuerpo formando una unidad constituida por una forma substancial, el alma, y una material, el cuerpo. Según esta filosofía, el alma es sustancia pura, por lo que puede existir con independencia del cuerpo o de la materia. Sin embargo, esta independencia es relativa, ya que desde un punto de vista extrínseco, el alma humana sí depende del cuerpo. El alma necesita del cuerpo específicamente para su función del conocimiento intelectual, ya que las ideas se forman a partir de las imágenes de las cosas corporales por medio de la abstracción. Es decir, el alma se une a la materia o al cuerpo para que éste le proporcione las imágenes que el alma ilumina, convirtiéndolas en especies inteligibles. Aristóteles, en cuanto a esto, establece que: "El alma humana es el acto primero de un cuerpo natural organizado", y ante esto Santo Tomás de Aquino establece:
Se llama cuerpo orgánico al que tiene una diversidad de órganos. La diversidad de órganos es necesaria en el cuerpo que sustenta la vida en razón de las diversas operaciones del alma. En verdad, el alma, como es la forma más perfecta entre las cosas corporales, es principio de diversas operaciones, y por eso requiere la diversidad de órganos en su perfectible.
Una vez establecido que el ser humano está constituido por el alma humana y el cuerpo substancial desde el momento de la concepción, debemos preguntarnos qué derecho tenemos, si alguno, a manipular un embrión humano que es catalogado como persona humana. Se han establecido varias teorías filosóficas en cuanto a esto, pero la más aceptada es la de animación inmediata que establece que el embrión tiene alma humana desde el momento de la concepción. Esta teoría presenta varias debilidades, ya que se hace difícil establecer que existe un alma humana desde el mismo momento de la fecundación, porque aún no se han desarrollado todos los órganos necesarios para la realización de las operaciones distintivas del ser humano. Por otro lado, encontramos la teoría de la animación retardada que establece que un embrión tiene alma humana sólo después de un período de gestación, cuando ya posee los órganos necesarios para realizar las operaciones específicamente humanas. Esta, por su parte, presenta la problemática de no explicar el concepto mismo de la generación, pues si falta el producto inmediato de la concepción humana, no se podría explicar el curso de la evolución.
ARISTOTELES (384 a.C – 322 A.C.)
Su filosofía se caracteriza por ser un movimiento filosófico y científico basado en la experimentación.
Considera que todas las filosofías y las ciencias tienen que partir de las experiencias, es decir, de todas las sensaciones que nos ofrece el mundo de la percepción y del conocimiento sensible.
323 a.C.: Aristóteles especuló sobre la naturaleza de la reproducción y la herencia.
SANTO TOMAS DE AQUINO (1225-1274)
Santo Tomás de Aquino enseña que la norma moral y el valor moral se fundan en el bien moral. Este es en el orden moral el bien ontológico, que es convertible con el ser, es decir con el ente, y con la verdad.
KANT (1724-1804)
Kant describe su sistema ético, basado en la idea de que la razón es la autoridad última de la moral. Afirmaba en sus páginas que los actos de cualquier clase han de ser emprendidos desde un sentido del deber que dictase la razón, y que ningún acto realizado por conveniencia o sólo por obediencia a la ley o costumbre puede considerarse como moral.
Según Kant, entonces, la conciencia moral nos dicta lo que debemos hacer, y nos muestra la acción correcta. Cumplir con el deber dictado por la conciencia moral es actuar éticamente bien.
La filosofía y el avance de las ciencias
En el umbral del tercer mileno, la humanidad ha recorrido una larga y compleja trayectoria que va desde el régimen de la comunidad primitiva, pasando por la esclavitud, el feudalismo, hasta la sociedad capitalista-imperialista de nuestros días, cuya crisis general, producto de sus contradicciones y las luchas sociales y sus consecuencias, abrirán el camino a la sociedad socialista del futuro, un camino impresionante que va desde las cavernas donde habitó, desde la época en que la horda o el clan se procuran los medios de existencia recogiendo plantas comestibles y dedicándose a la caza.
En ese largo y penoso andar, el hombre ha ido del mito a la ciencia, del conocimiento empírico al teórico, hasta la etapa de la física cuántica, la cibernética, las calculadoras y computadoras electrónicas, la robotización, la informática, la biogenética, la proteómica, la biónica, etcétera, que ayudan en diversas funciones de la producción moderna de bienes materiales y de múltiples actividades técnico-científicas.
Esos cambios profundos y contradictorios en la vida social presentarán, crecientes exigencias a las convicciones ideológicas, al pensamiento científico y a la cultura filosófica de las nuevas generaciones. Debido a ello, necesariamente aumentará la importancia del estudio de las ciencias y en especial crecerá sin cesar y por doquier el afán de grandes sectores sociales por estudiar la filosofía científica con su elevada calidad. Ya que en los sistemas filosóficos de Platón y Aristóteles, Bacon y Descartes, Locke y Hume, Kant y Hegel y muchos otros, la ontología -teoría del ser- La lógica -teoría de las formas, del pensamiento- y la gnoseología -teoría del conocimiento-; se estudiaban aisladamente; en ciertos casos llegaban sólo a rozarse, pero no se mantenían unidas, es decir, en un sistema único de concepciones filosóficas.
Pero, también en nuestra época, en el siglo nuevo, que será de mayor progreso del pensamiento científico y filosófico, se podrán escuchar voces que pongan en tela de juicio, el derecho de la filosofía a la existencia como ciencia especial del conocimiento o, que la ignoren, degraden o deformen, en los centros de estudio, su enseñanza.
La clonación de un perro abre el camino a la cura de enfermedades humanas
La clonación de un perro llevada a cabo por un equipo de científicos surcoreanos abre las puertas al tratamiento de enfermedades que afectan a los canes y al propio ser humano, como la diabetes y la demencia. . El jefe del equipo que completó el experimento, el científico surcoreano Hwang Woo-suk, anunció, a la vez que se revelaba el éxito de la clonación en la revista 'Nature', que se ha dado un paso de gigante hacia la cura de dolencias que sufren tanto los seres humanos como los perros. Hwang, quien ya en febrero saltó a la fama al aislar las primeras líneas de células madre embrionarias y ajustadas al ADN de pacientes, ahora vuelve a convertirse en el centro de la admiración y la polémica por haber clonado a Snuppy, un galgo afgano procedente de la célula de una oreja de su padre genético. . Snuppy, que ya tiene poco más de dos meses de vida, recoge las iniciales en inglés del centro investigador donde trabaja el equipo de Hwang y la palabra 'puppy', que es como se conoce a los cachorros. Snuppy nació con ayuda de una cesárea tras una gestación de dos meses por su madre de alquiler, una hembra de labrador de cuatro años a la que se implantó el óvulo fertilizado (de otra can) con el material genético de la piel de la oreja de su padre-donante.
El segundo caballo clonado del mundo en Italia
Científicos de ingeniería genética anunciaron el nacimiento del segundo caballo clonado del mundo, un animal que, esperan, superará el rendimiento de campeón de su padre castrado. El potro, que fue bautizado "Pieraz-Cryozootech-Stallion", nació en Cremona (Italia) el 25 de febrero de 2005, según el laboratorio francés Cryozootech de Evry (Francia) y LTR-CIZ de Cremona, que llevó a cabo el clonaje. "Pesó 42 kilos al nacer y ahora pesa 50 kilos y está muy bien".
"Pieraz-Cryozootech-Stallion" es el clon de "Pieraz", campeón mundial de resistencia en 1994 y 1996 y fue castrado por razones de seguridad, como ocurre a menudo en los casos de caballos de resistencia. Cryozootech reconoce que no hay ninguna garantía que su descendencia sea "tan buen competidor" como el campeón original. Sin embargo, para responder a la preocupación manifestada por los criadores de caballos de carrera, la empresa señalo que esta técnica es fiable en el ámbito de la conservación del patrimonio genético.
Henri Bozo, responsable del Haras de Monceaux en Lisieux (oeste de Francia) especializado en la crianza de caballos de carrera, considera "el clonaje como una idea ridícula". "Lo bonito en esta profesión, es utilizar lo que nos da la naturaleza y no buscar controlarla", señala.
Conclusión
La ciencia es, en su historia, una lucha constante de los científicos y filósofos avanzados contra la ignorancia y la superstición, contra la reacción en política y en el campo de las ideas.
En este nuevo descubrimiento científico es importante, en el caso de las plantas saber que existe la posibilidad de mejorar su calidad y perfección para la venta. En los animales, se podría alcanzar mayor calidad, también se crearían órganos de animales encéfalos para luego ser transplantados al hombre y, además, la clonación nos permitiría recuperar especies muy importantes, y, aunque se debe respetar la biodiversidad, desde mi punto de vista esto esta bien.
Pero el hombre siempre quiere más, busca lo imposible y lo trata de hacer posible para, de esta manera encontrar respuestas ante problemas que preocupan a toda la humanidad y a cada individuo. Esto tiene su lado negativo ya que el último y mayor ideal de los científicos a partir de la clonación es clonar seres humanos.
La ética moral y los posibles riesgos no permiten a los científicos efectuar una clonación humana pero, aun así, conocemos varias hipótesis acerca de los riesgos que ésta puede acarrear. Creemos muchas cosas, como por ejemplo, que el ser clonado puede no tener espíritu, que quizás sea solo un cuerpo sin la capacidad de razonar, o tal vez sea tan idéntico al ser humano donante de la célula. Esto ultimo seria contra la dignidad de la persona clonada, pues vendría al mundo como una copia de otro ser.
El panorama es complejo y requiere de una urgente reflexión. Una de las soluciones seria prohibir la clonación de seres humanos o crear leyes para que no se experimente más de lo que se necesita.
Bibliografía
ARISTEGUI, Rosana A. y colaboradores. "Ciencias Naturales 8". Editorial Santillana. Buenos Aires, 1998.
MASSARINI, Alicia – LIASCOVICH Rosa. "Biología 2. Genética y evolución".
Editorial Kapelusz. Buenos Aires, 2005.
BOCALANDRO, Noemí y colaboradores. "BIOLOGIA 1. Biología humana y salud". Editorial Estrada. Buenos Aires, 2005.
"MILENIO Enciclopedia del CONOCIMIENTO". García Ferre Producciones.
Buenos Aires, 2000.
Diccionario enciclopédico "Océano Uno Color". Grupo Editorial Océano.
Barcelona, España, 1998.
SITIOS WEB:
http://www.monografias.com/trabajos11/clonas/clonas.shtml#intro
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