La revolución que falta: la revolución integral de las conciencias
Enviado por JOSE ANTONIO BONILLA CASTILLO
== LOS PRIMORDIOS DEL SOCIALISMO
No somos ni historiadores ni sociólogos; por otra parte el asunto principal de esta monografía, no es analizar detallada y profundamente el socialismo y sus varias tendencias. Sin embargo, una visión rápida sobre las ideas socialistas y los principales acontecimientos que las acompañaron son indispensables para una mayor comprensión del asunto fundamental de este texto: la Revolución Integral de las Conciencias.
A pesar de que la idea de socialismo se pierde en la noche de los tiempos (mismo ella existía durante el Imperio Romano, en el cristianismo primitivo, en las rebeliones campesinas de la Edad Media, etc.) las palabras socialismo, así como comunismo, surgen con esa grafía en 1830-40.
Es reconocido que tres pensadores: Saint-Simón (1760-1825); Fourier (1772-1837) y Owen (1771-1859) fueron los primeros en denunciar el capitalismo emergente, como fuente de "injusticias" e "irracionalidades". Ellos elaboraron planes para una sociedad racionalmente planificada, controlada por los productores (obreros, campesinos). Entretanto, este modelo estaba apoyado en el comando de los propios gobernantes, de manera que existiese solidaridad entre reyes, industriales y trabajadores.
Es por eso que fueron llamados por Blanqui en 1839 como "socialistas utópicos".
En el prefacio para la edición del "Manifiesto del Partido Comunista", Engels justifica este adjetivo diciendo que en 1848(() "comunista era aquel que defendía la necesidad de un completo cambio social". Ya socialista era "aquel que con panaceas variadas y toda clase de cataplasmas, quería eliminar los males sociales, sin cambiar sus causas".
O sea, según la visión de Engels, el socialismo era un movimiento burgués; el comunismo era un movimiento de los trabajadores.
Entretanto, otros autores tenían visiones diferentes.
Por ejemplo Mackenzie (1) dice que el socialismo fue madurando en la medida en que el capitalismo se volvía más opresor, de modo que el socialismo utópico de Fourier, Sant-Simon y Owen fue siendo desplazado por un socialismo materialista, a partir de la mitad del Siglo XIX, donde se establecen los fundamentos de los movimientos populares actuales. A partir de este momento, junto con lo que podemos llamar de "socialismo", se desarrollaron dos tendencias opuestas: el socialismo autoritario o comunismo, a partir del liderazgo de Marx y Engels; después en el siglo XX, Lenin, y el socialismo libertario o anarquismo, cuyos primeros ideólogos fueron Proudhon y Bakunin, después Kropotkin.
El hecho es, que según aquel autor "los partidos socialistas trabajan dentro del Estado capitalista para asegurar, por la reforma o la revolución, el poder político que necesitan para adaptar las instituciones y la estructura económica de la sociedad a sus finalidades".
Es muy difícil colocar en forma resumida el desarrollo del socialismo a partir de la segunda mitad del siglo XIX, debido a su extraordinaria riqueza y biodiversidad. Con todo, tentaremos hacerlo en el próximo ítem.
== LAS IDEAS SOCIALISTAS
El socialismo "en sentido amplio"
La palabra socialismo es muy compleja, porque ella significa dos cosas distintas: en primer lugar una denominación amplia, la cual podría ser caracterizada por la expresión "justicia social". Ya un segundo significado implica en el cómo operar para que esa "justicia social" sea efectivamente implantada.
Tenemos desde el socialismo utópico (hoy desaparecido), la socialdemocracia, así como el nacional-socialismo de Hitler, junto con el socialismo científico (comunismo), el socialismo libertario (anarquismo), etc., etc.
Aquí vamos a comentar rápidamente sobre el primer significado; el segundo será detallado en los próximos ítems.
Según Kocher (2): "en las sociedades capitalistas, la necesidad de reflexión sobre las diferencias entre los hombres y la proposición de caminos para su superación, se manifestaron bajo la denominación de Socialismo".
De acuerdo con el mencionado autor, el socialismo moderno, nació en Francia, aún sin estar reconocido por aquel nombre, en ocasión del Movimiento Revolucionario francés de 1830(*). Dos motivos sobresalen para que esto haya ocurrido de esa manera:
En Francia, a diferencia de Inglaterra, la burguesía se mostró claramente incompetente para desarrollar grandes industrias, base del capitalismo. En Inglaterra, el poder económico consiguió rápidamente controlar las resistencias políticas y sociales al naciente modo de organizar la sociedad.
Francia ya tenía un antecedente glorioso de lucha popular, la Revolución de 1789, que bajo su lema "Libertad, Igualdad y Fraternidad" llevó a una extraordinaria esperanza de superación de las desigualdades sociales, frustrada por el poder político en los años siguientes (Napoleón, la Restauración Monárquica en 1815 y mismo el gobierno surgido de la Revolución de 1830(*).
De esta manera, la idea de "socialismo en sentido amplio" nació en Francia como crítica social y política a las condiciones que reinaban en aquel país. A partir de allí, como un foco luminoso fue irradiando para otros países.
Complementa Kocher (2): "El socialismo se transformó en una idea universal a lo largo de su historia. Él vislumbró la transformación de la sociedad capitalista bajo los más diferentes ángulos y, simultáneamente, alcanzó un status de ideología transformadora que ayudó a escribir la Historia de los Siglos XIX y XX.
Entretanto, estamos en el Siglo XXI. Ahora precisamos analizar todo ese transcurso del socialismo en la historia humana y así comprender que es lo que está faltando en su ideología para que ahora se pueda cristalizar realmente el sueño de justicia social (La Gran Utopía).
El socialismo autoritario o científico: comunismo.
A) Marxismo
El socialismo "científico" fue desarrollado principalmente por Marx con la colaboración de Engels, siendo que ambos elaboraron el famoso "Manifiesto Comunista" (1848); la obra más importante de Marx fue "El Capital". Marx introdujo varias ideas nuevas, algunas sorprendentes, a saber:
Infraestructura y superestructura – La primera, se refiere a la base económica de una sociedad; la segunda a su manifestación tanto ideológica (ideas políticas, morales, filosóficas) como en la forma de estructuras de poder (Estado, ejército, policía, leyes, etc.).
De este modo, Marx introdujo la figura del "Homo economicus" (aunque no usó esta expresión).
Dialéctica – Ella se opone completamente a la metafísica y al idealismo, limitando el ser humano a su cuerpo físico y a su mente racional. Él parte del concepto de que el mundo es dinámico y se desarrolla a través de tres fases: tesis, antítesis y síntesis. Así por la contradicción entre las dos primeras surge la tercera (síntesis) que representa un nivel superior, base de todo progreso.
Es muy interesante percibir que a pesar de la grandiosidad de estos conceptos, él no los exploró profundamente, por lo menos en un punto. En efecto, si materialismo es una tesis e idealismo su antítesis, habrá una fase de síntesis entre esas dos ideas. Exactamente ese es el punto crucial que deberemos abordar en el siglo XXI: un socialismo síntesis, que en el Capítulo 5, denominamos de socialismo holístico.
La lucha de clases y la plus-valía – Para Marx, la evolución de la Humanidad se procesa a través del antagonismo irreconciliable entre las clases sociales de cada época (dueños de esclavos x esclavos; señores x siervos; burgueses x proletarios). En el caso particular de la sociedad capitalista, la división social ocurre a partir de la apropiación de los medios de producción por un grupo de personas (burguesía) a expensas de aquellos que producen (proletarios).
Aquí se origina el concepto de "plus-valía", o sea los proletarios reciben apenas una parte (generalmente pequeña) de los frutos de su trabajo; el resto va para los bolsillos del capitalista burgués.
Materialismo histórico – Aquí se define como raíz de una sociedad, la forma como la producción social es organizada. Esta producción social involucra dos aspectos: las fuerzas productivas (tierras, técnicas de producción, instrumentos, materia prima y máquinas) y relaciones de producción que son los modos en que se organiza la producción, siendo que la actual es capitalista.
El materialismo histórico representa una ruptura de cómo la Historia era estudiada hasta entonces, o sea una mera secuencia ordenada de hechos relativos a religiones, imperios, guerras y cosas de ese tipo.
Así Marx se preocupaba con detectar cual era la base económica que sustentaba estas sociedades: quien, como y para quien se producía. También quería mostrar el movimiento de la historia de las civilizaciones, en términos de movimiento dialéctico (tesis, antitesis, síntesis).
B) Leninismo
Lenin (1870-1924) fue un revolucionario ruso, con gran producción intelectual, a partir de la cual completó la visión marxista, creando así un instrumento más completo: el marxismo leninismo. Esta ideología llevó a la victoria de la Revolución Rusa en 1917, después de un ensayo fracasado en 1905-07.
Con el triunfo revolucionario, Lenin pasó a ser el principal líder del nuevo gobierno soviético, en el cual desempeñó el cargo de Presidente del Consejo de Comisarios del Pueblo hasta 1924, cuando murió.
Una de las principales ideas de Lenin fue la de que solo la modernización industrial, llevaría a una elevación de conciencia de las masas trabajadoras, facilitada por su concentración en las respectivas fábricas. En esto contrastaba fuertemente con otra orientación socialista (la llamada populista), que consideraba que el socialismo ruso se desarrollaría a partir de las comunas campesinas.
Un aspecto muy relevante de su pensamiento era "la creación de un partido centralizado, fuerte y dirigido por intelectuales con intensa visión marxista" (Wikipedia, 3) en lo que discordaban completamente de los populistas, que no estaban preocupados con la fortaleza del Partido y al cual percibían como una moldura para contexto de las actividades sindicales de los trabajadores, cuyo adecuado funcionamiento consideraban como el aspecto más importante.
La falta de una base doctrinaria fuerte con enfoque marxista (y después marxista-leninista) según Lenin, vaciaría a las masas de su contenido revolucionario, sustituido por una visión, para él obvia, de que la falta de aquella base conduciría a una desorganización del movimiento, en lo que se refiere a su esencia y que llevaría apenas a una preocupación con aumento de salario y reducción de las horas de trabajo.
Es importante subrayar que Lenin, hace 100 anos, entendió que los trabajadores (industriales) no tendrían como rasgo propio, la conciencia socialista; ésta les debía ser inyectada por los intelectuales.
Él ligaba profundamente el entusiasmo revolucionario de las masas con los aspectos materiales del trabajo y luchó incansablemente por electrificar el país, organizar la industria, la agricultura y el transporte sobre la base técnica de la gran industria moderna. Dentro de esa línea de raciocinio, consideraba como absolutamente necesario que hubiera una cultura revolucionaria, que permitiese a cada persona utilizar constructivamente, con las mismas posibilidades de aprovechamiento, los resultados que la Ciencia, la Tecnología y la Cultura pudieran ofrecer a las personas.
Según Lenin "sólo la vanguardia de la clase obrera, el Partido Comunista es capaz de orientar a todos los trabajadores en todas las esferas de la vida social, a partir de las cuales acontezcan los procesos de transformación de la sociedad".
También formuló una teoría sobre la victoria del socialismo en un solo país (la Unión Soviética), defendiendo la idea de coexistencia y emulación económica entre el socialismo y el capitalismo.
Wikipedia (3) centra su principal crítica contra Lenin en lo que se refiere a su participación activa en la construcción de un Estado autoritario y policial, que más tarde (a partir de 1924) fue perfeccionado y sofisticado por su sucesor, Stalin.
Según esa publicación, Lenin utilizó todos los medios disponibles para acelerar el proceso revolucionario, lo que incluyó deportaciones, campos de concentración y ejecuciones en masa. Se estima que durante su comando se hayan ejecutado, por lo menos 100.000 personas en forma sumaria. La justificativa era que se trataba de "enemigos de la clase proletaria".
C) Trotskismo
León Trotsky fue durante el comando de Lenin, el segundo dirigente más importante de la Unión Soviética. El fue el responsable por la organización del ejército "rojo", constituido principalmente por obreros. Durante el período 1918-21 ejerce el cargo de Comisario del Pueblo. Poco después (1922) Trotsky y Stalin profundizan diferencias, en gran parte causadas por la creciente burocratización de este último.
Con la muerte de Lenin (enero de 1924), Stalin comienza en el Comité Central del Partido un proceso de difamación y calumnia contra Trotsky, que en 1925 es prohibido de hablar y en 1929 es expulsado de la Unión Soviética.
Vaga por Turquía, Francia y Noruega, hasta que se establece en México en 1937, donde escribe sus libros más importantes. En 1940, es asesinado por Ramón Mercader, por orden de Stalin.
Su visión general implicaba variantes importantes a la concepción del socialismo. Dentro de ellas pueden mencionarse:
Creó la teoría de la "revolución permanente", en lugar de "socialismo en su solo país".
Propuso la reducción drástica de la burocracia, a través de la rotación de cargos.
Hizo aportes teóricos importantes sobre feminismo.
Propuso la estabilización del socialismo, a través de planes quinquenales (idea que fue finalmente incorporada por Stalin)
Organizó el aparato de control social con sus campos de concentración, que después sería usado por Stalin contra los propios seguidores de Trotsky.
En cierta forma es el pionero de los actuales movimientos de antiglobalización, a través de la unión política de los revolucionarios junto a militantes de otras causas (feminismo, ecologismo, sindicalismo), lo cual, tal vez, representase un germen del socialismo holístico como será discutido en la Parte 2 de esta Monografía.
El socialismo "libertario": anarquismo
Por lo menos en dos asuntos, el socialismo "autoritario" y el socialismo "libertario" son coincidentes:
Ambos tienen como objetivo la justicia social (aunque los caminos para alcanzarla son notablemente diferentes).
Ambos coinciden en una visión materialista de la sociedad humana (aunque con matices también diferenciados).
La diferencia mayor entre ambas ideologías, corresponde a la visión del Gobierno y del Estado. Para los autoritarios, eran necesarios gobiernos fuertes, capaces de encauzar las energías revolucionarias de los trabajadores para poder materializar la justicia social.
Ya los libertarios piensan que varias instituciones existentes en una sociedad convencional como iglesias y especialmente gobiernos formales, deberían ser disueltas. A partir de ese momento, y con base en autodisciplina y cooperación voluntaria, la sociedad humana puede auto-organizarse, viviendo en paz y armonía.
Existe una confusión semántica con las palabras "anarquía" o "anarquismo", generalmente identificados como "caos" o "confusión".
Sin embargo, etimológicamente anarquismo viene del griego, donde "an" significa "sin" y "arquia" (oriunda de la palabra "archon") significa "gobernante". O sea el anarquismo involucra una teoría política que considera los gobiernos (como los conocemos) nocivos e innecesarios, dado que las sociedades humanas tienen capacidad para auto-organizarse.
Por lo tanto, el buen desarrollo de una sociedad anarquista depende de autodisciplina y cooperación voluntaria y no de obediencia jerárquica.
Dicho de otra forma, esa ideología considera que los gobiernos crean una construcción artificial, en la cual el poder es impuesto de arriba para abajo. El anarquismo entiende la sociedad como algo diferente, o sea la sociedad no sería una estructura y si un organismo vivo que crece en función de su propia naturaleza. Esto parece ser un concepto nuevo, bien interesante.
Esta forma de pensar lleva a rechazar la formación de partidos políticos, ya que éstos terminan monopolizando el poder, acabando con la espontaneidad de acción de los grupos sociales, lo que llevaría, necesariamente, al autoritarismo y a la negación de la libertad humana.
Hay aquí una diferencia notable acerca del camino a recorrer para alcanzar la justicia social seguida por el socialismo "autoritario" (gobierno central fuerte) y el "libertario" (ausencia de poder central y énfasis en la descentralización a partir de núcleos, federaciones etc.).
Si bien el "anarquismo" pregona la socialización de la propiedad, del mismo modo que los "autoritarios", considera que sin acabar con el gobierno central, solo se sustituiría la clase capitalista, por una nueva clase privilegiada: la burocracia gobernante, genialmente oriunda del Partido "autoritario".
Sin tener aquí espacio ni intencionalidad suficiente como para discutir profundamente el asunto, parece que la teoría anarquista mencionada en el párrafo anterior y desarrollada fundamentalmente en la segunda mitad del siglo XIX, fue una previsión muy acertada de lo que acabaría ocurriendo si el socialismo "autoritario" consiguiese imponer su ideología, pues el surgimiento, expansión y decadencia de la Unión Soviética ilustra la veracidad de aquellos conceptos.
Otro punto que vale resaltar es que la visión "libertaria" parece más apropiada para el siglo XXI, que la "autoritaria" que ya hizo una penosa experiencia durante el siglo XX. En efecto, apelar para la autodisciplina y la cooperación voluntaria, ambas asentadas en la vida interior de las personas y rechazar imposiciones venidas del medio exterior, es el camino que debemos recorrer en asuntos políticos, éticos, económicos, sociales y espirituales. O sea un reflorecimiento, acompañado de algunos elementos que están ausentes en aquella ideología, nos puedan llevar a una reestructuración constructiva del socialismo como vía para crear La Gran Utopía (4). Esa reestructuración podría ser llamada de Socialismo Holístico (ver Parte 2 de esta Monografía).
Los principales pensadores anarquistas son Proudhon, francés (1809-1865), Bakunin, ruso (1814-1876) y posteriormente Kropotkin también ruso (1842-1921). Es interesante saber que Kropotkin era hijo del Príncipe de Smolensk y de la hija de un general del gobierno zarista; por eso era llamado el "Príncipe Anarquista".
Los libros más famosos del anarquismo son: Proudhon: ¿Que es la Propiedad( (1840); "Confesiones de un revolucionario" (1849). Bakunin: "Federalismo, Socialismo y Antiteología" (1872); "Estado y Anarquía" (1873).; Kropotkin: "La Conquista del Pan" (1902); "Apoyo Mutuo" (1905).
Como ya fue explicado, la palabra "anarquía" significa, literalmente "sin gobernante" y como esto fue colocado como desorganización, caos y confusión, varios anarquistas deseando subrayar los aspectos esencialmente positivos y constructivos de su ideología, usan la expresión "socialismo libertario".
Es interesante ver, por ejemplo en el "American Heritage Dictionary" que las definiciones de ambas palabras llevarían a la siguiente condensación de significados:
Socialismo libertario: Sistema social que cree en la libertad de acción, pensamiento y libre albedrío del ser humano, en el cual los productores poseen el poder político, así como los medios de producción y de distribución de los bienes.
La defensa de la libertad que el anarquismo hace en forma férrea no es una apología al individualismo (egoísta por naturaleza) y sí al crecimiento de cada persona dentro de su biodiversidad específica. Aquella ideología también propone que si bien la libertad es altamente deseable, necesita un ámbito social adecuado para desarrollarse.
Es en este punto que la diferencia entre socialismo autoritario y libertario se hace más aguda. En efecto, estos últimos defienden la idea de que el mencionado ámbito sea descentralizado y basado en la gestión directa de las personas, oponiéndose a toda centralización jerárquica que involucre una autoridad coercitiva; ya la autogestión sería la esencia de la libertad.
En este punto, la ideología anarquista, cien años antes que Koestler (5) desarrollase la visión holística con sus dos principios básicos: auto-afirmativo (tiene que ver con la parte, el individuo) e integrativo (tiene que ver con el conjunto, con la sociedad), ya había sentado la base de estos conceptos, aunque con palabras diferentes.
Así, el socialismo "libertario" enseña que la libertad es la mayor riqueza humana, pero ella no puede ser usada como arma de imposición a los otros, ya que si así ocurriese, dejaría de ser libertad y sería prepotencia. La libertad, a través de la autodisciplina y la cooperación voluntaria, debe estar al servicio del progreso de la sociedad, o sea de cada parte o individuo (principio auto-afirmativo), así como del conjunto social (principio integrativo).
El movimiento anarquista ha tenido una amplia difusión y actuación en el mundo (algo disminuida actualmente por el peso insoportable de la globalización y el consumismo). Algunas de las participaciones más notorias son:
La Comuna de París (1871) (ver más adelante). Según Bakunin, fue el primer ensayo y demostración práctica de aquella ideología.
Los mártires de Haymarket. La celebración del Primero de Mayo como el día del Trabajador, tiene como origen la ejecución de cuatro anarquistas en 1886 en Chicago, en ocasión de la lucha de los trabajadores por la jornada de ocho horas.
Formación de uniones sindicalistas. Entre 1890 y 1914 (inicio de la primera guerra mundial) hubo el apogeo del movimiento anarquista en casi todos los países industrializados de Europa, en los Estados Unidos e inclusive en América Latina. Esta expansión se debió a aceleración de uniones sindicalistas, organizadas en forma confederada y no impositiva o jerárquica.
En particular, en España, cuando se inició la guerra civil española, en 1936 (ver más adelante), la unión anarcosindicalista (CNT) contaba con un millón y medio de miembros.
( En Rusia, la participación de los anarquistas fue fundamental para la derrota imperial y el triunfo de la Revolución (1917). Ellos fueron particularmente activos en la creación de formas de producción autogestionarias, a través de comités y consejos de fábricas, que recibieran el nombre de "soviets". Una expresión muy en boga en 1917-18 era "Todo el poder a los soviets". En pocos años, con la derrota del socialismo libertario frente al autoritario, la consigna cambió para "Todo el poder al Partido".
Aquella derrota de los libertarios, incluyó su eliminación física por parte de los bolcheviques. Para pasar del poder de los "soviets" al poder del Partido, Lenin suprimió el control autogestionario, realizado por los propios trabajadores, a partir de la premisa de que aquel control reduciría la productividad.
El alzamiento de Kronstadt en 1921 según (6), fue "el primer intento totalmente independiente del pueblo de liberarse de todo control y llevar a cabo la revolución social; este intento se hizo directamente por la clase obrera, sin pastores políticos, sin líderes, sin tutores".
( En Ucrania, bajo el liderazgo de Néstor Makhno, las ideas anarquistas se aplicaron con éxito, a través del desarrollo de una verdadera auto-determinación social, apoyada en procesos autogestionarios. Makhno llegó a ser conocido como el "Robin Hood" de Ucrania enfrentando el zarismo, los nacionalistas ucranianos y finalmente a los bolcheviques de Lenin, que acabaron triunfando.
A partir de estos y otros hechos, los anarquistas ya en 1921, comenzaron a describir la Unión Soviética como un país que no era conducido bajo una óptica socialista y si de "capitalismo de Estado".
( En Italia, en 1920, aprovechando la insatisfacción general del proletariado, así como canalizando el fervor oriundo de la Revolución Rusa, comenzaron huelgas de ocupación, que se extendieron hasta los campesinos, que tomaron tierras.
Los huelguistas, sin embargo, no apenas ocuparon las empresas y sí desarrollaron un régimen de autogestión que pronto involucró 500.000 huelguistas ¡que estaban produciendo para ellos mismos!, eliminando así la respectiva plus-valía. Guerin nos informa detalles específicos: "La autogestión emitió su propio dinero. Se requería estricta disciplina, y una estrecha solidaridad se estableció entre las fábricas, donde las materias primas, incluyendo el carbón se ponían en un fondo común y se repartían equitativamente".
Desentendimientos entre la orientación libertaria, la autoritaria y las uniones reformistas, abrió espacio para una negociación con el gobierno para volver a la "normalidad". Los anarquistas eran contra esto; pero como estaban en minoría fueron derrotados. A partir de este desenlace se sembraron las semillas del fascismo, que apareció como prevención contra-revolucionaria; en efecto, a pesar de sus discursos populacheros, el fascismo siempre contó con apoyo y admiración de los capitalistas y terratenientes.
( La Guerra Civil española duró tres años (1936-39)(*) y ocurrió a partir del alzamiento fascista del General Franco contra el gobierno legal, comandado por el Presidente Azaña, del Partido Republicano. El pueblo español, creó un ejército de milicianos para enfrentar los sublevados. Esto involucró el mayor experimento del socialismo libertario de todas las épocas.
En efecto, más de 7 millones de personas en un total de 24 (o sea alrededor de 30% de la población), pusieron la autogestión en práctica. En particular, toda la industria de Cataluña fue puesta bajo auto-gestión de los trabajadores o por lo menos, su producción controlada por ellos.
Los anarquistas colocaron la unidad antifascista antes de todo, luchando junto con socialistas, comunistas, republicanos etc. Después de una serie de victorias, las resistencias fueron carcomidas de dentro por las divisiones internas, ya que los autoritarios no admitían la autogestión y sí el predominio del Partido.
También influyó decisivamente la gran ayuda que recibió Franco de Alemania e Italia (que aprovecharan esa guerra para experimentar sus armamentos). Entre tanto, Inglaterra y Francia permanecieron ajenas al conflicto. El resultado final fue la derrota del movimiento revolucionario.
La Rebelión Estudiantil en Francia
Ocurrió en mayo-junio 1968 y tal vez fue el resurgimiento del anarquismo de sus cenizas como nueva ave fénix. Ese movimiento fue encabezado por un grupo de libertarios, entre ellos Cohn-Bendit.
En la medida en que las represiones policiales ordenadas por el gobierno iban aumentando, el movimiento que inicialmente era de protesta contra aquellas, pasó a tomar un cariz revolucionario. El 13 de mayo hubo manifestaciones masivas que totalizaron más de un millón de personas, sólo en Paris.
Ya al día siguiente los obreros ocupan numerosas fábricas, inclusive la mayor de Francia, la Renault-Billancourt. El día 20 las huelgas y ocupaciones se generalizaron, involucrando por lo menos seis millones de personas comprometidas con el movimiento.
El Gobierno y los patrones, gendarmes del capital se asustaron, así como el Partido Comunista, que dirigía la mayoría de los sindicatos. El resultado fue un acuerdo espurio entre estos tres elementos.
Bookchin (6) dice que "dentro de las asambleas, un hambre de vivir tocó a millones de personas, un renacimiento de los sentidos que el pueblo no sabía que era suyo. No fue una huelga de estudiantes o de obreros. Fue una huelga del pueblo que no se percató de ninguna división de clase".
La combinación de las energías autoritarias (capitalistas y comunistas), así como las maniobras del gobierno desplegando fuerzas militares muy poderosas y garantizando aumentos de salarios de hasta 35%, acabó restableciendo la normalidad en Francia por vuelta del 5 de junio.
También los líderes estudiantiles, tuvieron vislumbres que los llevaron a comprender algo crucial: No es suficiente con cambiar de gobierno (aunque puede ser necesario), o sea no es suficiente con el cambio externo, tenemos que sintonizarlo con el interno.
En (6) se plantean 36 preguntas sobre anarquismo y se proporcionan las respectivas respuestas. Creemos que para una visión preliminar de la ideología anarquista sea suficiente su consulta. Para lectores que quieran profundizar el tema pueden consultar los principales autores, especialmente los clásicos (Proudhon, Bakunin, Kropotkin).
Las informaciones expuestas, relativas al pensamiento anarquista (o socialismo "libertario"), durante los últimos 150 años, muestran un conflicto interminable entre dos concepciones bien diferentes; una relativa a la necesidad imperiosa de conquistar el Poder o sea la visión autoritaria (capitalismo, comunismo) y otra, que coloca como meta fundamental, la libertación del ser humano de ese Poder autoritario, muchas veces opresor y despótico (anarquismo).
La primera opción, tanto capitalista como comunista, no parece ser una vía a recomendar para desarrollar el asunto de esta Monografia "La Revolución Integral de las Conciencias". El capitalismo, porque cada vez más, extiende sus garras sobre la sociedad humana, ahora bajo la forma de una globalización caníbal, que acaba perjudicando, financieramente al Tercer Mundo, pero sobre todo empobreciendo el significado de la vida humana, donde las personas están siendo transformadas en entes descerebrados, cuyo único motivo de existir es consumir.
Ya el comunismo se auto-destruyó. No hubo ningún poder militar que lo subyugase. Cayó de maduro, porque es incompatible con la naturaleza humana: somos individuos y seres sociales, simultáneamente y no apenas hormigas que trabajamos para la Reina (o el Rey Partido), que piensa por nosotros.
Por su parte, la opción libertaria se presenta como digna de consideración, pues ella toca la esencia del ser humano: su condición natural de ser libre, simultáneamente comprometido con la sociedad en la que vive. La autogestión, la autodisciplina, la solidaridad, la cooperación voluntaria y otros atributos de ese tipo forman su centro fundamental. Y todos ellos serán fundamentales para la creación de la Gran Utopía (ver Bonilla, 4) a ser construida a través de la "Revolución Integral de las Conciencias" que es la propuesta en que se apoya este libro.
¿Esto quiere decir que el "socialismo libertario" es la "nueva" gran idea a impulsar( Creemos que no, si antes no es hecha una reformulación, a través de su transformación en "socialismo holístico" (Ver más adelante)
La idea central a desarrollar rápidamente en este momento, es que la visión holística precisa ser incorporada, especialmente en lo que tiene que ver con el reconocimiento de que el ser humano está constituido por cuatro componentes, a saber: material, mental, afectivo y espiritual.
Creemos que el socialismo libertario, influenciado por sus principales ideólogos, que construyeron su teoría básica hace más de cien años, estaba en un contexto que cambió y continúa cambiando. Veamos:
En la segunda mitad del siglo XIX, tanto Marx como Bakunin y otros, percibieran la religión como una cosa nefasta para la evolución individual y social. En particular, Marx nos legó su memorable frase: "La religión es el opio del pueblo".
Sin embargo, en la época el análisis se centraba en los efectos negativos que la religión (especialmente occidental) tenía sobre las personas en términos de dependencia, de manipulación y de alienación, así como de omisión. En efecto, no se vio la religión prevaleciente, por lo menos en la forma practicada, colocarse al lado de los pobres, los humildes, los desposeídos. Su alianza (a veces explícita, otras veces implícita) con el poder económico llevó a extremos puritanos de ver el "pecado" solo en términos de sexo fuera del matrimonio, pero no en la exploración del hombre, en la penosa situación de la mujer, en la desigualdad chocante entre los seres humanos, etc.
Pero, y aquí está lo fundamental: religión no es sinónimo de espiritualidad (auténtica). La especie humana ha tenido gloriosos ejemplares de maestros espirituales, desde Hermes Trismegisto, Aquenaton y Zoroastro, hasta Lao-Tse, Buda o Jesús. También hemos tenido religiones que han quemado tres millones de personas en la hoguera, porque no querían aceptar los dogmas que les eran impuestos (lo que no significa que eran ateas) y lo peor, en nombre del venerado nombre del Cristo.
Lo que aquí se plantea, en forma resumida y preliminar es lo siguiente: precisamos separar religión de espiritualidad; estudiar con mayor profundidad las diferencias entre estos dos conceptos y responder sin dogmas, ni ideas preconcebidas, si la espiritualidad (auténtica) es (o no) una herramienta importante (tal vez imprescindible) para activar en forma completa la tan esperada Revolución Integral de las Conciencias.
Finalmente, cabe agregar que en los últimos cien años, a partir de la Teoría de la Relatividad y de la Teoría Cuántica (desconocidas con certeza por Marx, Proudhon y Bakunin y casi seguramente por Kropotkin), nos proporcionan conocimientos que permiten ver el hombre, el planeta y el Universo todo de manera totalmente diferente. La consecuencia más importante de esto es que la Ciencia más avanzada, converge cada más con la espiritualidad (auténtica) que, por ejemplo, conocía hace 5000 años (!) la Teoría de la Complementariedad, penosamente descubierta por Nils Böhr, por vuelta de 1930.
Este tema es absolutamente fascinante y la discutiremos con ciertos detalles más adelante. Para finalizar, comentaremos brevemente algunas referencias del anarquismo en América Latina y especialmente Uruguay. Es interesante informar que desde 1847 funcionaban en Colombia "sociedades democráticas" influenciadas por las ideas de Proudhon. A partir de 1861, Rhodakanaty inicia el movimiento en México, que se extiende rápidamente para el resto de América Latina.
En el Uruguay, en 1872 se funda la sección Uruguaya de la Asociación Internacional de Trabajadores, donde predominan los anarquistas. El número de periódicos anarquistas en Uruguay hasta 1942 es impresionante: más de 20 (ver, 10)
En 1905, se crea la Federación Obrera Regional Uruguaya (FORU) con predominancia anarquista. En 1911, 90.000 de los 114.000 obreros uruguayos están afiliados a ella.
En 1956 fue fundada la Federación Anarquista del Uruguay. Ya en 1967 la FAU fue declarada ilegal junto con otras fuerzas políticas (que no incluían el Partido Comunista). A partir de esa fecha se entra en la ilegalidad.
En 1968, se crea la ROE (Resistencia Obrero-Estudiantil), que actuará como forma legal de la proscrita FAU. Paralelamente es organizada la OPR (Organización Popular Revolucionaria), que actúa como brazo armado de la antigua FAU. La represión oriunda de la dictadura uruguaya (1973) llevó a la necesidad de trasladar muchos miembros para Argentina, pero en la dictadura de Videla (1976), la situación se complica, conduciendo a la confusión, la dispersión y el sentimiento de derrota.
Con la caída de la dictadura (1985), comienza la reconstitución de la FAU, consolidada con la realización del 7º. Congreso (marzo 1986).
Los cambios geopolíticos de la década de 90 (según, 11) "afectaron el imaginario colectivo, el concepto y la esperanza socialista. La izquierda reformista se ha vuelto aún más tibia y adopta conceptos y discursos de cuño liberal. La intelectualidad de izquierda, en su gran mayoría, se volvió complaciente con el sistema y rechaza ideologías de resistencia".
Es en este punto que se inserta la idea de "Revolución Integral de las Conciencias".
== LOS PRINCIPALES MOVIMIENTOS REVOLUCIONARIOS DEL SIGLO XIX
La Revolución de 1830
Esta revolución no fue, por lo menos en su comienzo, una revolución socialista y sí de la burguesía que después de la Revolución Francesa (1789) fue promovida e integrada por industriales y comerciantes ricos, así como por algunos intelectuales. Ellos, lo que realmente querían era tener acceso al Poder, antes monopolizado por la nobleza.
En este caso, la Revolución no quedó restricta a un país como en el caso de la Comuna de París (1871), pues ella estalló más o menos simultáneamente en Francia, Bélgica, Alemania, Italia, Suiza y Polonia.
En la época, reinaba en Francia (donde comenzó el movimiento) el Rey Carlos X, extremadamente conservador, al contrario de su predecesor, Luis XVIII (su propio hermano).
En 1830, el rey disolvió las Cámaras, al parecer en forma fraudulenta. De este modo fue destruida la Constitución Napoleónica (vigente desde 1814).
A raíz de este hecho, hubo una serie de barricadas en las cuales participaron, en curiosa mezcla obreros, guardias y antiguos militares napoleónicos. El 29 de julio, las barricadas llegaron al número de ¡6000! en las calles de Paris.
En la época, la palabra "liberal" tenía un sentido bien diferente al actual (especialmente al término "neoliberal"). En efecto, la burguesía emergente se aliaba con las clases trabajadoras para oponerse a la nobleza.
Esta rebelión popular llegó a su eclosión durante los días 27 a 29 de julio y son conocidas, históricamente por las "Tres Gloriosas". Carlos X asustado y recluido en Saint Cloud, abdicó en favor de su hijo, el duque de Burdeos. La lucha ahora cambió de rumbo: para dentro de los revolucionarios.
En efecto, los estudiantes y la Guardia Nacional querían la proclamación de la República. Ya los liberales, encabezados por Thiers propusieron coronar al duque de Orleáns (enemigo de la rama real anterior, los Borbones). Finalmente, el empuje revolucionario hacia la República disminuyó y el mencionado duque (Felipe) acabó siendo designado Rey de los franceses, de modo que la burguesía triunfó una vez más.
La Revolución se expandió hasta Polonia que se sublevó en 1830, a partir de la Academia de Cadetes, pero la ayuda que esperaban de Occidente no llegó y el general Cholpicki con tropas rusas de élite, acabó con el movimiento, en parte también debido a disidencias internas.
Ese tipo de situación precisa ser modificado, a través de la "Revolución Integral de las Conciencias"; de lo contrario, no podremos llegar a la creación de la Gran Utopía (Bonilla, 4).
La Revolución de 1848
Felipe de Orleáns, colocado en el trono de Francia por los liberales en 1830 y tolerado por las fuerzas populares fue derribado en 1848, debido a su gobierno corrupto. La tolerancia acabó y en las manifestaciones obreras la consigna era "nacionalizar fábricas y empresas". De este modo París se levantó nuevamente bajo el impulso proletario. Ellos, según noticias de la época "preferían morir de un tiro que de hambre".
El gobierno francés, para aplastar la rebelión, llama al General Cavaignac, con sus tropas coloniales. Llegando a París quedó sabiendo que el "slogan" del gobierno del corrupto Rey Felipe de Orleáns era "Enriqueceos". A pesar de las tropas, el Rey cayó en febrero de 1848.
Coincidencia o no, en el mismo año fue elaborado el famoso "Manifiesto Comunista" de autoría de Marx e Engels, cuja palabra de orden era: "Proletarios de todos los países, uníos".
Con estos estopines, el movimiento francés se extendió como un reguero de pólvora, especialmente en los países que actualmente llevan los nombres de: Alemania, Italia, Hungría, Austria y Republica Checa. Así el poderoso Matternich, el Rey Luis I de Baviera y otros personajes tuvieron que huir.
Puede ser difícil unir los proletarios de todos los países, pero el capital es fácil de ser unido (siempre que eso le traiga beneficios). De este modo, fueron pedidas tropas por la nobleza y la gran burguesía europea al zar Nicolás I, conocido como el "gendarme de Europa" que envió regimientos rusos y divisiones cosacas. Estas fuerzas militares se vieron completadas por las fuerzas de élite de Austria y Prusia.
Página siguiente |