Aportes teóricos a la educación indígena y las oportunidades de participación competitiva
Enviado por Lucy Mijares
- Resumen
- Introducción
- El problema
- Discurso teórico
- Enfoque metodológico
- Presentación y discusión de la realidad
- Conclusiones
- Interpretación y teorización de la realidad
- El modelo teórico
- Reflexiones finales
- Bibliografía
- Anexos
UN MENSAJE PARA REFLEXIONAR
"El Docente es el único ser con el arma capaz de cambiar a la humanidad y transformar una nación: La educación"
Este pensamiento surge de todas las reflexiones que por muchos años me han conducido al análisis y a la comprensión del contexto educativo desde todos sus ángulos, deduciendo que no es la riqueza, no es el tamaño del territorio, no es el emporio natural, no es el poder, son sus individuos a través de su pensamiento, sentimientos y percepción que moldean todos los elementos físicos; de sus estrategias dependerá que estos respondan positivamente a sus necesidades, y es sólo a través de la herencia cultural más significativa de todos los tiempos, capaz de moldear su comportamiento y pensamiento, que lograrán sus sueños:
La Educación.
La Autora
El estudio, tiene como finalidad generar, a partir de la interpretación de la realidad y desde su historicidad, un modelo teórico que aporte ideas al concepto educación indígena y la oportunidad de participación competitiva en los procesos de desarrollo de Venezuela. La investigación se orientó hacia el estudio de los procesos de desarrollo político, social y económico y su influencia en la actuación del indígena dentro de la cultura occidental. La metodología utilizada fue la etnográfica, apoyado en los paradigmas transaccional y socio-construccionista. Para la recolección de la información se utilizaron las técnicas de Observación Participativa, Notas de Campo y la Entrevista en Profundidad con Informantes Claves. Como instrumentos se usaron las grabaciones sonoras, el video y fotografías y la Revisión Bibliográfica y Documental. De los resultados se concluyó: Los indígenas quieren una educación diferenciada, pero que llene las expectativas de los estudiantes y los prepare para participar activamente en los procesos de desarrollo competitivo del país; La evangelización ha sido una de las primeras formas educativas del indígena; La economía actual de los indígenas no cubre sus necesidades primarias, mucho menos los coloca a un nivel competitivo respecto a la economía nacional; Se percibe en los planteamientos indígenas que desean erigirse como una raza y cultura independiente dentro de la cultura occidental. La interpretación de la información, se elaboró partiendo de una descripción endógena hasta una teorización original que generó las teorías sobre la Educación Indígena y las oportunidades de participación competitivas en los procesos de desarrollo que sustentan el modelo teórico ideal.
Descriptores: Cultura, Educación Indígena, Procesos de Desarrollo, Participación Ciudadana, Competitividad.
La cultura de un pueblo se halla relacionada con todo aquello que sus habitantes hayan creado y mantienen en el tiempo, tales como sus costumbres, tradiciones, su folklore. No se debe hablar entonces, de pueblos, razas o culturas inferiores, sino de la capacidad de cada grupo social para usar estrategias competitivas de desarrollo integral.
Según Aretz (1978) dentro de los estratos sociales predominantes se encuentran "los estratos indígenas o aborígenes…" (p.3)
Venezuela, país subdesarrollado, por su sistema económico-político-social debilitado según Cordeiro (1996) por un "mercado basado en la propiedad privada y la ley de la oferta y la demanda, por una política donde funcione la democracia representativa verdaderamente, basada en la participación popular y la responsabilidad de los líderes y una sociedad con igualdad de oportunidades y justicia pública" (p.13); cuenta con una cultura indígena poseedora de innumerables riquezas culturales que se encuentran en la base de nuestra identidad.
La población indígena, según el último censo de la O.C.E.I. (1992), aproximadamente es de 315.815 individuos, distribuidos en 30 grupos étnicos, en 1.494 comunidades indígenas en todo el país.
Entre estos grupos culturales se encuentran los indígenas del Estado Amazonas, conformados en 15 etnias a saber: Yanomami, Guahibo, Piaroa, Ye'kuana, Curripaco, Baré, Baniva, Piapoco, Puinave, Warekena, Yabarana, Panare, Arawak, K'ariña. Sáliva. Otras cuatro, se encuentran como grupos esporádicos en peligro de extinción: Sanema, Hoti, Macu y Cubeo.
Estas poblaciones han desarrollado un conjunto de respuestas culturales que les ha permitido crear sistemas sociales complejos, y un grado de bienestar, que no es susceptible de ser evaluado por los indicadores desarrollados en la sociedad industrial para medir calidad de vida, y que no tienen efectos negativos para el ecosistema.
Sin embargo, las incursiones de colonos y misioneros, han transformado estos sistemas sociales indígenas, convirtiéndolos en dependientes de la cultura del mundo occidental.
El Estado Amazonas ha sido siempre un atractivo para el resto del país, no obstante, es muy poco lo que se conoce de la cultura indígena, de su educación y la participación competitiva de sus miembros en los procesos de desarrollo del país.
Surge así la necesidad de conocer la educación que reciben los indígenas y si ésta les permite incorporarse al aparato productivo del país, a través de su participación competitiva en los procesos de desarrollo: sociales, económicos y políticos.
La Educación indígena y la oportunidad de participación competitiva en los procesos de desarrollo económico, político y social de Venezuela, es un estudio que se circunscribe a la realidad de una cultura que posee diversas subculturas o etnias, arraigadas en sus costumbres y tradiciones, signadas por más de un siglo de destrucción de las sociedades autóctonas, y otros más reducidas a una condición servil y dominada por una minoría de blancos conquistadores.
Esta condición ha conllevado a los indígenas a querer mantener su organización social, política y económica aparte de la cultura occidental, logrando enmarcar algunos derechos dentro de la Constitución Bolivariana de Venezuela de 1999; sin embargo, ellos han manifestado querer una participación protagónica dentro de los procesos de desarrollo competitivo que rigen la cultura occidental, por lo que es muy importante que la Educación que reciben, la Intercultural Bilingüe, llene sus expectativas educativas y no limite su participación.
El estudio, luego de una interpretación y teorización de la información, se orientó a contrastar la realidad observada con las teorías existentes a fin de generar aportes teóricos sobre la Educación Indígena y la oportunidad de Participación Competitiva en los procesos de desarrollo de Venezuela, centrado en el análisis histórico de la cultura como aspecto fundamental.
La investigación, epistemológicamente se orientó hacia la búsqueda de la verdad sobre la educación y participación indígena, signada por valores sociales, económicos y políticos que históricamente han caracterizado las culturas indígena y occidental, por lo que el estudio se circunscribió en los paradigmas transaccional y socio-construccionista, enmarcado dentro del enfoque introspectivo-intuitivo de la fenomenología.
Metodológicamente, se basó en el paradigma cualitativo etnográfico y en los análisis históricos y documentales, dirigida a interpretar la información obtenida de los informantes claves (internos: comunitarios, comunidades educativas, organizaciones indígenas; externos: gobernación, médicos, organizaciones no indígenas, etc.), a través de métodos de observación y entrevistas en profundidad, para contrastar esta realidad con las teorías existentes, a fin de producir nuevas teorías que enriquezcan el contexto estudiado.
La estructura del estudio se presentó en siete fases: El Problema; El Discurso Teórico; El Enfoque Metodológico; Presentación y Discusión de la Realidad; Conclusiones y Recomendaciones; La Interpretación y Teorización de la Realidad; Aportes Teóricos sobre la Educación Indígena y la oportunidad de Participación Competitiva en los procesos de desarrollo de Venezuela; por último las Referencias Bibliográficas y los anexos.
CAPÍTULO I
Planteamiento del Problema
La perspectiva que la modernidad ha dado al mundo, constituye un elemento obligatorio a la hora de estudiar los nudos críticos culturales de una sociedad.
La modernidad ha traído consigo signos sociales que se han convertido en principios: la libertad, la democracia, los derechos cívicos, pluralidad de pensamiento, etc. Estos principios se manifiestan en la política y en la economía, los cuales influyen directamente en la modernización cultural e intelectual, que conlleva a la modernización social: del arte, del pensamiento y de la educación.
José Martí, prócer de la independencia de Cuba, hace más de un siglo, expresó que "…ser culto es el único modo de ser libre", vislumbrando la importancia decisiva de la educación y la formación integral de los individuos para asegurar el porvenir de las naciones.
Para Dewey (1967), la educación es "un proceso de estimulación, de nutrición y de cultivo". Visto desde este punto, los seres humanos organizados como grupo social, se mantienen por medio de la transformación de los miembros inmaduros a través de un proceso educativo, convirtiéndolos en sostenedores activos de sus propios recursos.
La Educación como proceso social tiene la misión fundamental de formar al hombre para la vida, trascendiéndolo en el tiempo, revalorizando y enriqueciendo el acervo histórico de la sociedad, creando conciencia de grupo e integración de los ciudadanos que comparten elementos comunes de cultura, historia y trabajo.
La escuela, a su vez, es el instrumento básico de sociabilidad, a través del cual el individuo se sitúa en su hábitat, aprende a conocerlo, a formarse como ser social, a transformarlo a tono con las nuevas exigencias sociales y a ubicarse dignamente en él.
Muchos pensadores han impreso a la educación ese carácter formador, García (1999) cita entre otros a: Confucio(551-479 A. de C.), Lao Tse (600 A. De C.) quienes educaban a los adultos de la época; Sócrates(470-339 A. De C.) con sus pensamientos reflexivos, Platón (428-347 A. De C.), Aristóteles(384-322 A. de C.) configuraron modelos educativos que se mantuvieron en el tiempo. La sociedad griega, educaba hacia la formación del carácter con relatos épicos; San Agustín y Santo Tomás de Aquino educaban para comprender la fe cristiana; Tommaso Campanella(1568-1636) propone un sistema educativo con énfasis en el conocimiento; Jan Amos Komensky, popularmente llamado Comenius(1592-1670) enfatizó en la necesidad de una educación a través de la comprensión del entorno y de la vida cotidiana. Jean de Condorcet (1743-1794) fue más futurista, proponiendo una educación individualizada, con miras a la perfección humana, gratuita, laica, igualitaria y que procurara mejores condiciones económicas en el trabajo. Karl Marx (1818-1883) desarrolla programas basados en la formación intelectual, , la gimnasia y la formación técnica. Enrique Pestalozzi (1746-1827), creó la escuela Primaria Popular. Otro pensador, Augusto Comte (1798-1857) propugna la educación para todos. En Venezuela, García menciona a Simón Rodríguez (1771-1854) y Andrés Bello (1781-1865) como precursores del pensamiento contemporáneo de las sociedades. (p.p.35-38)
Las sociedades no se forman etiquetadas según las razas, credos o culturas, sino que coexisten dentro de ellas, entrelazados por un bien común: la convivencia. Ésta, encierra un patrón de supuestos básicos, inventados, descubiertos o desarrollados para enfrentar los problemas de adaptación externa e interna, y que habiendo funcionado lo suficientemente bien para ser considerado válido es trasmitido a las nuevas generaciones como la manera correcta de percibir, pensar y sentir: la cultura.
Cada país posee una cultura diferente, caracterizada por la región geográfica, sin embargo, dentro de cada país existen diversas áreas y grupos culturales, que se identifican con la región donde están ubicados y a las manifestaciones culturales predominantes. Los valores culturales de cada país, región o comunidad en específico, están representados por unas características que lo identifican de una u otra, manifestándose a través de su organización, su vivienda, sus costumbres, lengua, creencias.
Dentro de estos estratos sociales se encuentra la cultura indígena, milenaria, que se ha mantenido, en algunos de sus grupos, invariable. Estos, primeros habitantes del continente americano, representan la cultura de un pueblo que comenzó a morir desde el encuentro de dos mundos, el autóctono y el colonizador.
En las culturas autóctonas se encuentra una particularidad muy especial que es la transmisión cultural en forma oral. Por consiguiente cabe resaltar que lo antes expuesto viene a fortalecer y a construir un código de conducta diaria, el comportamiento habitual, dinámico y la misma está conformada de actitudes, concepciones, conocimientos, formas de actuar y de crear.
Las etnias indígenas son procedentes de la cultura oral, desde el mensaje de los ancianos que enseñan a los niños a través de sus mitologías, leyendas y cuentos de sus antepasados. Su educación está basada en los sistemas de crianza y socialización propios de cada sociedad indígena, a través de la cual se transmiten y recrean los elementos constitutivos de su cultura: idioma, valores, espiritualidad, religiosidad, organización social, económica y patrimonio.
Las sociedades actuales están enmarcadas en un contexto multicultural, en el que se encuentran varios modelos y paradigmas culturales y educativos que interactúan entre sí, produciendo un enriquecimiento mutuo, la Educación Intercultural que, según Puig y Otros (2000), entrelaza programas y prácticas educativas con la finalidad de elevar el rendimiento educativo de las culturas minoritarias, y concientizar a la cultura mayoritaria para aceptar los grupos étnicos minoritarios. Esta concepción, presupone una verdadera interacción, igualdad y convivencia entre las distintas culturas presentes en la misma sociedad (pp. 1467-1471).
Eiguillor (1993), considera que la relación intercultural es "el contacto no violento entre culturas diversas" (p.9). Esta opinión se relaciona con la consideración anterior, donde se plantea la igualdad y convivencia entre los grupos culturales.
Puig y Otros (2000) consideran que
el planteamiento intercultural en la educación parte de la constatación y el reconocimiento de la diversidad cultural, en la que la propia interacción entre culturas es un hecho educativo en sí mismo… la escuela es un lugar donde se produce… un encuentro entre culturas. Es responsabilidad suya,… que la diversidad cultural se viva desde condiciones de igualdad. Se debe cuidar el proceso educativo para que la interacción cultural produzca un enriquecimiento mutuo. (p.1467)
Esta concepción difiere de la Educación Intercultural Bilingüe que actualmente se imparte en el Estado Amazonas, la cual es un régimen educativo especialmente planificado para las comunidades indígenas que poseen lengua materna autóctona, donde la educación es impartida por docentes indígenas y sus lineamientos no dan cabida a personas que no sean de su misma etnia, limitándose este enriquecimiento mutuo al sólo conocimiento que puedan poseer estos educadores sobre la cultura occidental.
La Asamblea Nacional (2001) actualmente elabora El anteproyecto sobre la "Ley de Educación de los Pueblos Indígenas y uso de sus idiomas"; el mismo plantea que la Educación Intercultural Bilingüe tiene como finalidad la formación del individuo en los conocimientos filosóficos, cosmológicos, culturales, valores, idiomas, históricos, tradiciones, científicos y tecnológicos producidos por los pueblos indígenas, complementada sistemáticamente con la enseñanza del castellano y por aportes científicos, tecnológicos y humanísticos, procedentes del acervo cultural de la nación venezolana y de la humanidad.
Se percibe en esta concepción de la educación la ausencia de la igualdad y enriquecimiento mutuo entre las culturas planteada por Puig, y de una interrelación con los planes y modelos económicos del país, consustanciada con el desarrollo y transformación económica y social del mundo.
Es importante además, reflexionar que al ser promulgado este anteproyecto no constituiría un texto legal legitimador de una realidad estatal, pues cada región tiene sus peculiaridades étnicas que se circunscriben a la cultura occidental predominante, y el sólo hecho de existir dos leyes educativas, una para cada cultura, en una misma región administrativa puede traer consecuencias fatales a la hora de asignar los recursos y a la hora de tomar decisiones frente a su misma legalidad, porque colindarían sus estamentos, y diluiría la esencia magna de la Ley Orgánica de Educación de Venezuela frente a la Ley Orgánica de los Pueblos Indígenas de Venezuela. Se estarían creando, entonces, dos Sistemas Educativos venezolanos paralelos, frente a una sóla realidad: la educación de los ciudadanos y ciudadanas de la República Bolivariana de Venezuela.
Los grandes fines que orientan la educación venezolana, están explícitos en la Ley Orgánica de Educación de 1980; estos fines destacan la importancia de formar a un individuo capaz de participar activa, consciente y solidariamente en los procesos de transformación social, a través de un sistema educativo que contribuya a la formación y capacitación de los recursos humanos necesarios para el desarrollo de los procesos económicos del país.
Esta concepción de la educación se aproxima a un modelo que vincula la educación con el trabajo, donde se invierten grandes recursos financieros con la finalidad de producir el capital humano indispensable para el desarrollo del modelo económico.
La política educativa del país se ha definido a partir de la imagen de la sociedad que aspira construir; los requerimientos de esta sociedad en el ámbito de la educación se han formulado con la adecuación a sus necesidades.
El sistema educativo venezolano, se enfrenta a nuevas necesidades y retos de contribución al desarrollo económico y social, ya que para la consolidación de las nuevas políticas económicas establecidas por las relaciones internacionales para superar la crisis y reactivar la economía se requiere del fortalecimiento de la capacidad de innovación científica y tecnológica en todos los sectores, a fin de aprovechar las ventajas que ofrece la electrónica y la informática. Este cambio se traduce en la necesidad de articulación entre las políticas educativas y científicas tecnológicas.
Para Gómez (1997)
Los sistemas educativos asumen más que nunca la importante función de creación, transmisión y difusión del nuevo conocimiento científico y tecnológico, necesario para el logro de la autonomía económica y la solución de las necesidades propias, mediante el desarrollo de la capacidad endógena de creación y adaptación de nuevos conocimientos. (p.24)
Este reto planteado por Gómez se encuentra en la visión de los lineamientos estratégicos del IX Plan de la Nación, un Proyecto de país (1995), los cuales expresan explícitamente la capitalización de los recursos humanos a través de proyectos estratégicos tales como: Reestructurar los sistemas educativos formales e informales para adaptarlos a los nuevos retos del desarrollo; mejorar la adaptación y capacitación tecnológica, mediante el desarrollo de un sistema integrado de capacitación técnica con participación del sector industrial y laboral; fomentar el desarrollo tecnológico interno al aparato productivo mundial, a fin de mantenerse exitosamente dentro de la competencia y con un nivel de desarrollo excelente.
Para que un país pueda lograr un nivel de desarrollo excelente, con una capacidad de producir y colocar exitosamente en los mercados internacionales sus productos y bienes, debe entrar en el campo de la competitividad.
Este desarrollo competitivo no debe limitarse sólo al aspecto económico, también debe dedicar especial atención al desarrollo social, y a la proyección de su sociedad como uno de los elementos fundamentales de la nación.
Generalmente, los países se dan a conocer a nivel mundial, no sólo por su proyección económica, sino por su proyección social. La educación, la cultura, el deporte y la economía son las cualidades más sobresalientes de los países desarrollados.
Cordeiro (1996) manifiesta que "todo país desarrollado se diferencia de los países tercermundistas por su visión de 'grandeza'". Entonces, la competitividad es un "medio para alcanzar el bienestar y el incremento sostenido de la calidad de vida de toda la población" (p.13), implicando el uso de acciones y estrategias tendientes a mejorar los resultados en las actividades donde se aplica.
Pero más allá de los bienes y servicios que un país pueda producir, para Hernández (1996) está
la otra cara de la competitividad,…la cultural…se trata de aquella vinculada a la capacidad de una nación, una región o una etnia para hacerse visible, adquirir un lugar en el nuevo escenario globalizado, ya no… a través de un producto o servicio en particular sino de imágenes e interpretaciones del mundo y de la vida, que muestren sus características y cualidades como comunidad en particular… independientemente de que esa preferencia no pueda medirse en términos de precio, calidad y consumo. (p.29).
En el caso de lo que Ibáñez T. (1996) llamó la época del discurso de la modernidad y el surgimiento de una nueva época, la del discurso de la postmodernidad, desde de su dimensión sociológica, es ineludible el estudio de los problemas culturales, especialmente el de la cultura indígena, como símbolo de la "negación" a la participación competitiva de la clase dominada en los procesos de desarrollo del país.
La participación competitiva del indígena en los procesos de transformación, desde esta perspectiva se ve soslayada, primero por los derechos contemplados en la Carta Magna, los cuales cercenan su participación social, al limitarlos a su vida cultural, autonegándose el progreso tecnológico y al no presentar programas educativos concretos y cónsonos que los coloque en ventaja competitiva con el aparato productivo del país.
Para la discusión de la participación competitiva indígena dentro de la realidad social actual, es necesario reflexionar desde una visión histórica, cómo han influido las creencias (el "mito del buen salvaje" del siglo XVII), las tradiciones, la evangelización, la educación, las políticas económicas nacionales y estatales, la organización social y el contexto familiar de cada etnia, sobre la transculturación o inserción en la cultura occidental.
El problema no se delimitó a un grupo étnico en particular, pues la diversidad de etnias, cada una con una connotación diferente en cuanto a su "modus vivendi" y ubicación geográfica, hizo imposible el estudio delimitado.
El estudio se hizo tomando en cuenta, no sólo el contexto cultural – material, objetivo; además, fue necesario ir más allá, al contexto socio – cultural, subjetivo, mágico – religioso.
El contexto cultural – material determina la participación indígena en Venezuela desde el punto de vista del desarrollo económico y tecnológico del país, la tradición económica de la cultura indígena y la tradición económica del resto de la nación. El indígena desde su economía tradicional no puede colocarse en el nivel competitivo regional y nacional, pues no producen lo suficiente para estar en capacidad de incorporarse al aparato productivo del país.
El contexto socio – cultural determina la participación indígena en Venezuela desde una perspectiva social; La evangelización, a través de la intervención de la iglesia en la cultura indígena, los ha conducido a un nivel de sumisión de otra cultura, originando la sobreprotección del indígena. Este contexto encierra las relaciones y los valores familiares y vecinales, el racismo étnico, las costumbres, y en general todo cuanto ha limitado o favorecido la participación indígena.
La cultura influye sobre el comportamiento de la humanidad, por tanto, una cultura puede modificar el comportamiento de los individuos de otras culturas.
Esta concepción conlleva a pensar que las tradiciones y costumbres de la cultura indígena han contribuido a automarginarse del resto del mundo.
La educación indígena actual no está orientada hacia su formación ciudadana venezolana, como lo establece la Constitución Bolivariana de Venezuela de 1999 y consustanciado con el proyecto de Ley Orgánica de Educación del 2001.
La política, caracterizada por los procesos políticos acaecidos en el país: caciquismo, caudillismo y democracia, ha demostrado que existe un interés de distintos actores sociales en mantener al indígena alejado de la cultura occidental.
El indígena, como un ciudadano venezolano más tiene todos los derechos consagrados en la Constitución Nacional para participar en cualquier proceso que incida sobre su desarrollo socioeconómico. Pero al paso del tiempo se ha observado que los sectores políticos los discriminan al darles una participación restringida en los procesos políticos.
El indígena quiere participación en los procesos políticos, pero con el deseo a que se respete la autonomía de su cultura, lo cual denota que los indígenas tienen interés en erigirse como un nuevo orden social y político a la par con la cultura occidental.
La participación competitiva indígena en los procesos de desarrollo venezolanos está signada por la apreciación de la cultura occidental, la cual se orienta hacia dos vertientes, según lo valoriza Oldham, citado por la Iglesia en Amazonas (1995):
– Los que califican a los indígenas como "atrasados", "irracionales" y "salvajes primitivos", y justifican históricamente la destrucción física masiva o su integración social y económica para elevarlos al nivel de desarrollo humano occidental.
Los que califican de "nobles salvajes" o "comunistas primitivo e inocentes", favoreciendo la preservación de los indígenas sin la intervención de los agentes de desarrollo, negándoles la oportunidad de desarrollo de sus comunidades y territorios.
Un ejemplo de estas dos vertientes la conforman las opiniones de dos columnista del diario "El Nacional": el primero, Olavarria (2000) historiador y exconstituyente, quien califica de "trágica realidad" y "criminal" "el otorgamiento de derechos por razones de raza", que hizo la Asamblea Nacional Constituyente de 1999,
a los llamados 'Pueblos Indígenas' y el reconocimiento constitucional de sus supuestos derechos políticos, culturales y territoriales que pueden llevar al desmembramiento de más de la mitad del territorio venezolano, en el momento y hora en que estos decidan ejercer su derecho a la libre determinación y reclamen la independencia del territorio que les fue concedido. Lo que está sucediendo con el tendido del cableado de transmisión eléctrica por la Gran Sabana, es muestra del traidor contrabando que le metieron a la Constitución 'Bolivariana' quienes dicen representar a los pueblos indígenas. Dentro del irresponsable apresuramiento con el que se debatió esa Constitución, todos los artículos del capítulo VIII del título III, relativos a los derechos de los pueblos indígenas, fueron aprobados en bloque y sin debate. (p.D1).
En las palabras del columnista se aprecia una inconformidad por la forma en que fueron otorgados los derechos a los pueblos indígenas, debido a que considera que deben tener los mismos derechos de los demás miembros de la sociedad venezolana. Olavaria manifiesta en sus reflexiones el error de conceder a un grupo minoritario más de la mitad del territorio nacional, el cual se perdería en el momento que ellos hagan uso de sus derechos consagrados, dejando entre ver que Venezuela quedaría dividida en dos territorios: el de la Cultura Occidental y el de la Cultura Indígena, enajenando a los demás ciudadanos venezolanos del derecho al disfrute de todo el territorio nacional como lo estipula nuestra Carta Magna.
Es obligatorio reflexionar muy a profundidad esta apreciación, pues no se puede tomar decisiones a la ligera, que implique un consenso nacional, pues Venezuela es libre y de todos los venezolanos.
La segunda columnistas, Castillo (2000) considera que los indígenas son los "dueños de la Tierra de Gracia" como la llamó Colón:
El capítulo abierto desde entonces, las condiciones socioeconómicas actuales de los indios, los movimientos indigenistas del continente, la incorporación de grupos vinculados a los derechos humanos y a la defensa del ambiente y las luchas actuales de los habitantes de la Amazonía venezolana, no son hechos episódicos, constituyen la última resistencia de los sobrevivientes de los antiguos dueños de la Tierra de Gracia…señalados como bestias parlantes para justificar la esclavitud y la expropiación, han soportado durante más de 500 años la exclusión de la tierra que les pertenecía. En Venezuela, a pesar del capítulo de la Constitución que establece la participación activa de los pueblos indígenas en la toma de decisiones que involucran sus derechos ancestrales sobre el hábitat que ocupan, pareciera que predomina el criterio según el cual el indio, para responder al estereotipo debe ser dócil y manso. Nada de oponerse a convenios firmados a sus espaldas. En el fondo está presente la visión de que es un ser salvaje que se presta, inocentemente, a la manipulación de otros…no importa el sentido de pertenencia… a la tierra…su hogar y en la cual mantienen su identidad y su cultura, como el caso de los pemones… y el tendido eléctrico de la Gran Sabana. (p. A5)
Reflexionando sobre estas consideraciones, se debe obligatoriamente trasladarse en el tiempo y espacio, al mismo nacimiento del Estado de Derechos, donde se han instituido leyes y normas que han regulado precisamente el otorgamiento de títulos de propiedades a los ciudadanos habitantes de un país, si se les otorga a los indígenas la "Tierra de Gracia" ocupadas ancestralmente antes de la conquista, los venezolanos que actualmente habitan en ellas perderán sus tierras y propiedades que por derecho han adquirido. Por otra parte si se interpreta "ius vindicandi", o facultad de reclamar la propiedad de la cosa, junto con la tenencia de la misma, siempre que hubiera sido arrebatada de un modo injusto a su legítimo propietario, habría que hacer un exhaustivo análisis desde la época de la llegada de los colonos, para buscar los verdaderos dueños, y reflexionar si a estos se les arrebató de un modo injusto su "propiedad", pues para este entonces no existía el derecho a la propiedad, o si estos habitantes abandonaron sus "propiedades", ha de recordarse que no se tiene seguridad que los indígenas actuales sean los verdaderos pobladores de hace quinientos años, porque dentro de sus características, se encontraba el nomadismo.
Se observa una posición contraria entre los dos escritores, uno rechaza el otorgamiento de tierras a los indígenas, la otra los defiende, manifestándose en las dos posiciones que los aborígenes, por una u otra razón, no son aceptados en la sociedad occidental.
Pero, al constatar la posición de los indígenas, algunos grupos se encuentran organizados, reclaman sus derechos de participación, y "respeto de su cultura", tal como lo manifestara en una entrevista hecha por la autora, el Licenciado Guillermo Guevara, indígena de la etnia Hivi (Guahibo), y representante de Organización de Pueblos Indígenas de Amazonas (ORPIA).
La participación solicitada por este grupo está enfocada hacia los procesos políticos. En ningún momento se refirió a la educación como medio para alcanzar la participación; lo cual conlleva a pensar que la educación no es considerada suficientemente efectiva como para colocarse a nivel de competencia con la cultura occidental, intuyéndose que la Educación Indígena no está brindando oportunidades de participación competitiva a los indígenas en los procesos de desarrollo del Estado y del país.
Esta realidad orientó el estudio a generar aportes teóricos que redefinan la Educación Indígena hacia el establecimiento de políticas que coadyuven a ofrecer oportunidades de participación competitiva en los procesos de desarrollo de Venezuela.
Surgen así tres grandes interrogantes que moldearon la investigación:
¿Cuáles son los fundamentos teóricos sobre la Educación Indígena, los Procesos de Desarrollo de la humanidad, la Participación Ciudadana y la Competitividad?
¿Cuáles son las características de la Educación Indígena actual y las oportunidades de participación competitiva en el proceso de transformación social, político y económico del Estado Amazonas?
¿Cuáles son los elementos articulantes de un Modelo Teórico de Educación Indígena y la oportunidad de Participación Competitiva en los procesos de desarrollo de Venezuela?
Justificación de la Investigación
Los cambios políticos, económicos y sociales ocurridos en Venezuela desde la época de la conquista hasta los tiempos actuales han signado un período de destrucción, humillación y marginalidad de las comunidades indígenas, algunos porque los califican como atrasados, irracionales y salvajes, otros por considerarlos primitivos e inocentes, incapaces de defenderse. La cultura occidental ha tratado de protegerlos, unos para incorporarlos y otros para mantenerlos.
Venezuela atraviesa actualmente por un proceso de redefinición del papel que los poderes establecidos y la sociedad civil tienen en la toma de decisiones económicas y políticas. Dentro de esta redefinición se ha dado un aparte a los derechos de los pueblos indígenas, solicitado por las organizaciones indígenas, en la Constitución de 1999 de la V República Bolivariana de Venezuela. Estos derechos esgrimen el respeto a la cultura indígena, su cosmovisión, valores, espiritualidad, a una educación propia y a un régimen educativo de carácter intercultural y bilingüe.
La investigación sobre la Educación Indígena y la oportunidad de participación competitiva en los procesos de desarrollo de Venezuela. Caso Estado Amazonas, se orientó hacia el estudio de la actuación indígena dentro de la cultura occidental y los procesos de desarrollo económico, político y social de Venezuela desde la visión de una educación diferenciada, a fin de generar Aportes Teóricos que signen una verdadera participación competitiva. Se justifica:
En lo teórico porque se orienta a redefinir teóricamente la Educación Indígena a fin de aportar conocimientos que conlleven a ofrecer oportunidades de participación competitiva en todos los aspectos que moldean su personalidad.
En lo epistemológico pues intenta comprender una realidad subyacente dentro de un mundo rodeado por elementos disyuntivos de otra cultura, que perturban el normal desenvolvimiento de sus individuos dentro de su cultura.
El estudio es relevante para la sociedad porque aportará nuevos conocimiento acerca de una cultura que comenzó a morir desde el encuentro de dos mundos, y que se ha mantenido en el tiempo, bajo un yugo opresor.
Además, es relevante para la ciencia social y del conocimiento, porque generó nuevas teorías sobre un concepto poco estudiado; para la educación indígena pues enriquecerá su concepción tanto filosófica, como psicológica y pedagógica, así como también sus políticas educativas.
El estudio tendrá un impacto dentro de la sociedad, pues pretende "chocar" encontrarse con posiciones contrarias que por siglo han mantenido en una total marginalidad a la raza indígena por considerarlos inferiores o por sobreprotegerlos.
Objetivos de la Investigación
General
Generar aportes teóricos que orienten la Educación Indígena hacia el establecimiento de políticas que coadyuven a ofrecer oportunidades de Participación Competitiva en los procesos de desarrollo de Venezuela.
Específicos
Analizar la fundamentación teórica sobre la Educación Indígena, la Participación Ciudadana, Política y Económica, Procesos de Desarrollo y transformación de la humanidad.
Describir las características de la Educación Indígena actual y las oportunidades de participación en los procesos de desarrollo y transformación social, político y económico del Estado Amazonas.
Explicar los elementos articuladores de un modelo teórico de Educación Indígena y la oportunidad de participación competitiva en los procesos de desarrollo de Venezuela.
Aportar elementos teóricos a través de un modelo a la Educación Indígena para ofrecer oportunidades de participación competitiva en los procesos de desarrollo de Venezuela.
Alcances y Delimitaciones de la Investigación
La investigación sobre la Educación Indígena y las oportunidades de Participación Competitiva en los procesos de desarrollo de Venezuela. Caso Estado Amazonas, generó teorías en lo que, según Padrón (1997) llamó la fase diacrónica del proceso de investigación; a partir de un momento de diagnosis, descripción, explicación hasta lo constrastivo, se fueron descubriendo teorías que orientaron hacia la construcción de un modelo teórico de la Educación Indígena y la oportunidad de participación que les brinda en la transformación socioeconómica del país.
Además, contribuye a abrir un espacio para la discusión y el análisis crítico de la realidad social y cultural de los pueblos indígenas que permita valorar su actuación dentro de la cultura occidental.
En el campo investigativo, contribuye con la investigación cualitativa etnográfica, al generar nuevos aportes teóricos que enriquecerán sus contenidos conceptuales.
Así mismo, como investigación que se fundamenta en la historicidad y la construcción de la realidad, favorece el estudio y comprensión de las relaciones entre las culturas indígenas y occidental.
La investigación se circunscribe geográficamente a las etnias indígenas que habitan actualmente en el Estado Amazonas, por ser demográficamente, las más numerosas del país, y albergar la mayor diversidad étnica. Los actores intervinientes fueron miembros de las etnias Guahibo, Piaroa, Y릱uot;kuana y Yanomami, por ser las etnias con mayor cantidad de individuos.
El estudio se ha enfocado hacia la Investigación Fenomenológica Etnográfica, tomando como base el paradigma transaccional, resultado de la integración de los paradigmas adaptativos, estructura de oportunidades y sociocultural, planteado por Saegert y Winkel en 1990 citado por Ibáñez (1996) y el paradigma socio–construccionista, que según Ibáñez, fue utilizado por Gergen después de 1982.
Estos paradigmas orientan la investigación hacia la historicidad y el estudio de la realidad tal cual se manifiesta en su hábitat.
Sistema de Categorías de Análisis
Para Martínez (1998) categorizar "es clasificar, conceptualizar o codificar mediante un término o expresión que sea claro e inequívoco (categoría descriptiva), el contenido o idea central de cada unidad temática" (p.75), que puede ser una frase, un párrafo o un sector más amplio.
Estas categorías, según Martínez, se pueden integrar en una categoría mayor, reduciendo grandes cantidades de datos a unidades analíticas, que faciliten su estudio, en concordancia con los objetivos de la investigación.
Posteriormente se elaboró la lista de categorías y subcategorías, colocándolas en una matriz de correlación de datos, de tal manera que exprese los contenidos protocolares a fin de facilitar su identificación, comprensión y/o comparación.
Es importante destacar que en los modelos de investigación Fenomenológica Etnográfica la realidad a investigar emerge del contacto directo del investigador con el investigado, sin embargo, es necesario definir las unidades y categorías de análisis a los fines de facilitar la descripción de dicha realidad.
Para el estudio se consideraron las Categorías:
1. Contexto Socio-Cultural: que relaciona las Sub-Categorías: Proceso Social; Unidades de Análisis: La Cultura, La Cultura Occidental, La Cultura Indígena, Organización Social, Educación y Evangelización; Sub-Unidades de Análisis: Formación Social, Educación de la Sociedad, Religión; Proceso Político: Unidades de Análisis: Sistemas Políticos y Modelos Políticos; Sub-Unidades de Análisis: Caciquismo, Caudillismo, Democracia, Modelos políticos Occidental e Indígena.
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