Principales problemas didácticos detectados en las asignaturas del plan de estudio de la carrera de Derecho (página 2)
Enviado por Ileana Mart�nez Villar
Recientemente se realizó un estudio en países europeos en Universidades de Inglaterra, Francia y España con el propósito de obtener información sobre algunas características de la formación profesional recibida así como el desempeño laboral de los graduados de los cursos 1995-96 al 1998-99.Entre el conjunto de elementos generales que caracterizan el trabajo profesional expuestos en el cuestionario, los egresados señalaron como muy necesarios en el puesto de trabajo, los siguientes:
Habilidad para fundamentar sus opiniones personales
Incorporación al trabajo en grupo
Habilidad para la expresión oral y escrita
Todos con valores superiores al 80% (95.3%, 86.09% y 83.4% respectivamente) estos resultados constituyen la expresión de exigencias laborales contemporáneas que demandan el necesario dominio de cualidades y habilidades vinculadas a la comunicación interpersonal. Sin embargo la formación en este sentido no es suficiente en estudiantes formados en las diferentes especialidades
El Diseño Curricular previsto contempla en sentido general una formación que desarrolle habilidades comunicativas aunque de forma aislada y espontánea algunas asignaturas o profesores en particular puedan tributar a su desarrollo
En la actualidad se implementan algunas acciones con carácter experimental
que tienen el propósito de sensibilizar a los estudiantes con la necesidad de un desarrollo eficiente de las relaciones interpersonales con vistas a su futuro desempeño profesional
Los avances en los estudios de la lengua han arrojado un cambio en la concepción que se tenía sobre ella. Se ha pasado de considerarla como un mero sistema de signos, y de relaciones entre ellos, a concebirla como el producto de una actividad. Este nuevo enfoque nos propone mirar la lengua "en uso" que se da entre hablantes concretos en situaciones diversas y tiene, de hecho, repercusiones en el campo didáctico.
Desarrollo
No puede olvidarse que la Educación Superior, posee entre sus propósitos fundamentales la elevación de la calidad de la formación del profesional, de manera tal que este pueda enfrentarse de forma independiente y creadora a las circunstancias, necesidades y problemas que se le presenten en las distintas esferas de la vida, dando respuesta así al encargo social que plantea este nivel de enseñanza.
En los planes de estudio de las diferentes carreras, se encuentra la más viva manifestación de lo antes señalado, en los que se contemplan objetivos que se traducen en las aspiraciones que posee la sociedad en la formación de las nuevas generaciones, tanto en lo instructivo – educativo, como profesional y teniendo en cuenta las características del egresado que se desea formar.
Sin embargo, este ideal de profesional formado a la luz del Plan de Estudio que posee la carrera, adolece de ciertas desatenciones que se manifiestan en la impartición de las diferentes materias, tal es el caso de la comunicación oral en la enseñanza de la carrera de Derecho debido a que es imprescindible que sus profesionales desarrollen una adecuada comunicación para llevar a cabo de manera eficiente, a partir de las múltiples relaciones que los unen con los entes sociales que se vinculan a diario.
En correspondencia con lo anteriormente explicado, en el modelo del profesional de la carrera de Derecho aparece entre sus objetivos el siguiente:
"Estar convencidos de su papel de educador de grandes masas y de los funcionarios estatales, por lo cual debe lograr en el ejercicio de su profesión un alto sentido humanista y actuar en cada caso, desde cualquier posición, como agente ideológico, aplicando la persuasión y la educación en sus relaciones con el pueblo y con los funcionarios estatales."(José A. García: 1999).
Y dentro de las habilidades generales a desarrollar se puede encontrar: "Debe tener una irreprochable redacción y ortografía y una correcta expresión y además debe expresarse de manera oral y escrita con adecuado empleo".
El desarrollo de tales habilidades, en especial las de comunicación profesional , no ha sido objeto de trabajo sistemático, lo cual puede deberse en alguna medida a que los docentes de las diferentes disciplinas y asignaturas, no han interiorizado el rol que les corresponde desde sus materias respectivas, en lo tocante al desarrollo de habilidades comunicativas profesionales
En el diagnóstico y caracterización del estado actual del proceso de desarrollo de habilidades comunicativas profesionales en los estudiantes y profesores de la carrera de Derecho de la Universidad de Pinar del Rio y a partir de la aplicación de varias técnicas e instrumentos pedagógicos se pudo constatar que:
Los estudiantes: poseen limitaciones en el desarrollo de las habilidades comunicativas profesionales , tanto en lo relacionado con la expresión verbal como no verbal, , destacando el hecho que desconocen las vías, métodos y procedimientos que les permitan la utilización de las mismas en su formación académica y laboral.
En el caso de los profesores: en observaciones a actividades docentes se pudo comprobar a partir del análisis y evaluación de las mismas, que las dificultades relativas al desarrollo de habilidades comunicativas profesionales relacionadas con el lenguaje verbal y no verbal en el proceso pedagógico tienen como fundamento la no existencia de actividades y estrategias metodológicas que contribuyan desde el diseño de las asignaturas al desarrollo de tales habilidades.
Todo lo antes expuesto permite caracterizar una situación problémica insertada dentro del proceso de desarrollo de los profesionales del Derecho de hoy, que sin dudas dificulta la óptima formación de los educandos para ejercer de manera eficaz en la esfera laboral en cualquiera de los puestos que su amplio perfil le confiere, lo que justifica, sin duda alguna, que el tema que se pretende estudiar posee una evidente actualidad. Al abordar el proceso de desarrollo de habilidades comunicativas profesionales como parte fundamental en el desarrollo del futuro profesional, es necesario profundizar en las diferentes definiciones así como en los distintos puntos de vista que existen al respecto . En las habilidades se encuentra una de las formas de asimilación de la actividad. El término habilidad es utilizado, generalmente, como un sinónimo de "saber hacer".
Desde el punto de vista semántico la habilidad es definida como la capacidad y disposición para una cosa y también como cada una de las cosas que una persona ejecuta con destreza. Diccionario Océano, (1998).
Para Petrovsky (1985), "las habilidades constituyen el dominio de un complejo sistema de acciones que permite una regulación racional de la actividad con la ayuda de los conocimientos y hábitos que el sujeto posee"
Carlos Álvarez de Zayas (1999), define "la habilidad como la dimensión del contenido que muestra el comportamiento del hombre en una rama del saber propio de la cultura de la humanidad. Es desde el punto de vista psicológico, el sistema de acciones y operaciones dominado por el sujeto, que responde a un objetivo. También las considera un sistema de acciones y operaciones para alcanzar un objetivo.
En su tesis doctoral Gisela Bravo (2004) retoma algunas definiciones de habilidades expuestas por diferentes autores entre las que se encuentran:
"Son el dominio de acciones (psíquicas y prácticas) que permiten la regulación racional de la actividad con ayuda de los conocimientos y hábitos que posee el sujeto".
Juan L. Márquez (2004), la define como: "Formaciones psicológicas mediante las cuales el sujeto manifiesta en forma concreta la dinámica de la actividad con el objetivo de elaborar, transformar, crear objetos, resolver situaciones y problemas, actuar sobre sí mismo: autorregularse".
Zilberstein (2000), señala que como parte del contenido de la enseñanza, la habilidad implica el dominio de las formas de la actividad cognoscitiva, práctica y valorativa, es decir,l conocimiento en acción".
Los autores citados coinciden de una u otra forma en considerar que la habilidad se desarrolla en la actividad y que implica el domino de las formas de la actividad cognoscitiva, práctica y valorativa, es decir "el conocimiento en acción, esta es la tendencia de la mayoría de los autores que se adscriben al denominado "enfoque histórico- cultural"
En diversas investigaciones pedagógicas se aborda el problema de la formación y desarrollo de las habilidades en calidad de componentes esenciales del contenido de enseñanza. En ellas se investiga sobre las estrategias más eficientes para formarlas y sobre cuándo considerar que las habilidades están formadas en el nivel que se desea.
Durante varios años diferentes enfoques en la psicología han considerado que las habilidades constituyen elementos psicológicos estructurales de la personalidad, vinculados a su función reguladora-ejecutora, que se forman, desarrollan y manifiestan en la actividad, asumiendo así, que la teoría de la actividad es el fundamento ineludible para un adecuado enfoque del problema.
En este contexto es oportuno retomar las aportaciones de Leontiev (1978), cuando refiere que para que se produzca con plena efectividad el proceso de desarrollo de habilidades, es necesario que su sistematización lleve implícita no solo una repetición de las acciones y su reformación, sino también el perfeccionamiento de las mismas. Argumenta además que la formación de habilidades trae consigo el dominio de acciones diversas y ocurre como resultado de la sistematización de dichas acciones subordinadas a objetivos conscientes.
Se puede plantear que las habilidades se forman y se desarrollan por la vía de la ejercitación de las acciones mentales, mediante el entrenamiento continuo y se convierten en modos de actuación que dan solución a tareas teóricas y prácticas.
La verdadera formación de los conocimientos conduce y depende necesariamente, de un proceso de desarrollo de habilidades. Dominar un concepto, por ejemplo, no significa que el estudiante pueda repetir textualmente el mismo, sino que significa la posibilidad de operar con él, de utilizarlo, de incorporarlo a los procedimientos de su actividad intelectual como de ella.
Se puede concluir, que las habilidades permiten al estudiante poder realizar un proceso de enseñanza dirigido, el estudiante no solo se apropia de un sistema de métodos y procedimientos, que puede posteriormente usar en el marco de variadas tareas, sino que también comienza a dominar paulatinamente acciones, aprende a realizarlas de forma cada vez más perfecta y racional, auxiliándose para ello de los medios que ya posee, es decir, en la experiencia acumulada, en la que se comprenderá sus conocimientos y los hábitos ya formados.
Dentro de la literatura consultada se puede apreciar una variada clasificación de estas. Suele distinguirse entre las habilidades generales y las habilidades específicas. Las generales pueden ser incluidas en la realización de muy diversas formas de actividad (ej: habilidad para planificar el trabajo, habilidades lógicas, habilidades de observación, etc.) y las específicas (ej: habilidad para demostrar teoremas, para aplicar una técnica específica de investigación, etc.)
El Dr. Carlos Álvarez de Zayas (1999) clasifica las habilidades, según su nivel de sistematicidad en:
Las propias de la ciencia específica, que en el contexto del presente estudio se sitúan en la frontera entre las habilidades propias de la profesión del graduado en Derecho y las que se integran desde la lengua materna en el desarrollo de las habilidades comunicativas de estos profesionales.
Las habilidades lógicas, también llamadas intelectuales o teóricas, las que se aplican en cualquier ciencia, tales como inducción–deducción, análisis-síntesis, generalización, clasificación, definición, etc.
Habilidades propias del proceso docente en sí mismo, y de auto instrucción, tales como el tomar notas, la realización de resúmenes y de fichas, el desarrollo de los informes, la lectura rápida y eficiente, entre otras.
Las habilidades más generales se tienen que formar y desarrollar mediante la actuación coordinada de todas las disciplinas docentes que forman el plan de estudio.
Existen, además, un conjunto de habilidades, que por su grado de generalización y poder autorregulador de la personalidad, pueden ser colocadas como columna vertebral de cualquier currículo, ya sea escolar o extraescolar que pretende encauzar y desplegar el potencial de desarrollo psicológico de la persona y que se denominan habilidades conformadoras del desarrollo personal; porque posibilitan la eficiencia o competencia del individuo, ya sea en la actividad o en la comunicación (con las demás personas y consigo mismo), en cualquier esfera de la vida porque están en la base de todo aprendizaje y porque son mecanismos de autodesarrollo. Álvarez de Zayas, (1999)
Es importante retomar también la definición del término habilidad profesional esencial, pues son las habilidades básicas a las que se les debe prestar mayor atención dentro del currículo de la carrera. El Dr. Carlos Cañedo (2004) la define como: "Sistema de acciones y operaciones profesionales a formar, que resulta indispensable para estructurar sobre ellas el modo de actuación que le dé solución a los problemas técnicos y humanos que un individuo tiene que resolver en el contexto de la profesión."
Se debe enfatizar, entonces, que dentro de ese grupo de habilidades básicas se encuentran las habilidades comunicativas tan necesarias para cualquier ser humano y, por supuesto, para los profesionales que el mundo de hoy exige. Estas, son necesarias para lograr la formación general e integral del Licenciado en Derecho, en el contexto de la enseñanza de las normas jurídicas que implican "saber hacer", (Castellanos, 2005).
Por lo tanto los estudiantes del Derecho deben desarrollar habilidades y dentro de estas la de comunicación, teniendo en cuenta lo planteado por Juan .L. Márquez (2006)," La necesidad de comunicación, el deseo de conocer, de comprender lo nuevo, lo admirable, el esfuerzo por ser comprendido, de informar algo a alguien, la necesidad de influir sobre el otro para provocar la acción o respuesta deseada, constituyen motivos para la estimulación al adolescente a la asimilación activa de la lengua como vía fundamental para estos efectos, ya en los predios de la carrera, para valorar aún mejor la necesidad del desarrollo de tales habilidades comunicativas es indispensable, ubicar al profesional del Derecho en los múltiples contextos en los que se desenvuelve al ejercer su carrera, donde pudiera ser profesor, abogado, fiscal , juez o asesor legal. Cuestión esta que no es decidida hasta que el discente culmine los estudios.
La figura del profesor como formador académico de los futuros profesionales, constituye el primer eslabón en la formación de los mismos como óptimos comunicadores, influye con su actuar en el mundo tan variado de las relaciones de trabajo y de todo tipo que surgen a su alrededor, sobre todo con los estudiantes; por ello, el hecho de que el profesor logre una actuación competente como comunicador implica, en primera instancia el desarrollar una serie de conocimientos, sistemas de acciones y operaciones que sin dudas facilitarán el aprendizaje y la comprensión de sus estudiantes, así como las habilidades que sin dudas serán la base de la formación del profesional.
Las distintas materias que comprenden el espectro de conocimientos que el futuro jurista debe asimilar, facilita a través de sus complejos de conocimientos la posibilidad de realizar acciones que favorezcan el control y dominio de este tipo de habilidades, dentro de ellas se debe destacar la Oratoria como asignatura que posee gran importancia en la formación académica del estudiante,.
Por otra parte, a pesar de que el presente trabajo no abarca el desarrollo de todas las habilidades comunicativas profesionales que requieren dominar los juristas para desenvolverse de manera eficaz en la vida profesional, se considera que esta investigación ha de resultar importante, debido a que de alguna manera puede contribuir al desarrollo de habilidades comunicativas profesionales relacionadas con el lenguaje en los estudiantes de la carrera, esto se traducirá en un egreso con mayor calidad de los educandos, lo que a su vez favorecerá el ejercicio profesional de los mismos, facilitándoles las relaciones de todo tipo derivadas de su desempeño laboral y personal en sentido amplio.
En la Psicología, autores como S. L.Rubinstein, L.S Vigotski, A.N Leontiev entre otros, han orientado su estudio hacia las formas de asimilación de la actividad que se explican a través de los conceptos de hábitos, habilidades y capacidades y se caracterizan por reflejar diferentes niveles de dominio de las unidades estructurales: operación, acción, actividad, respectivamente.
A pesar de esto, no existe un consenso entre los criterios conceptuales manejados alrededor del término: habilidad. En estudios realizados por H. Brito al respecto, se asume por habilidad"… aquella formación psicológica ejecutora particular, constituida por el sistema de operaciones dominadas que garantiza la ejecución [de la acción] del sujeto bajo control consciente" (1990: 3)
Por ello, considero que, según el anterior concepto, para reconocer la presencia de una habilidad es necesario que en la ejecución de la acción se haya logrado un grado de sistematización tal que conduzca al dominio del sistema de operaciones esenciales y necesarias para su realización. (Aunque no es único éste concepto alrededor del término habilidad, asumo este para desarrollar el trabajo ).
Dentro del amplio espectro de las habilidades, las relacionadas con la comunicación, desempeñan un papel fundamental en la actividad pedagógica, a tal extremo que las consideran como rectoras dentro de las habilidades pedagógicas ya que a través de ellas se ponen de manifiesto el resto. (Ana M Fernández: 1995).
Es de destacar entonces que las habilidades comunicativas son aquellas que comprenden un conjunto de acciones que el sujeto domina y que le permiten conducirse en situaciones de comunicación. A partir de este planteamiento puede decirse que cuando el sujeto desarrolla habilidades comunicativas y las pone en práctica en los más diversos contextos comunicativos, logra una competencia comunicativa.(Raiza Cepeda: 2000.)
La determinación de habilidades comunicativas no es una cuestión sencilla, y menos cuando se trata de adecuarlas a un actuar concreto de un grupo de profesionales, este es el caso de la dada por el MsC José Antonio García en su tesis en opción de dicho título donde determina las habilidades comunicativas que, según su criterio, necesita el abogado para llevar a vías de hecho su trabajo. Ellas son:
Habilidades para la modelación interna del acto comunicativo y de autocontrol de la conducta .
Habilidades vinculadas al lenguaje verbal.
(Habilidades relacionadas con el lenguaje extraverbal.
Habilidades comunicativas de influencia socio psicológica y para conseguir afectar con el mensaje.
Como bien puede verse este autor en su clasificación determina que para el abogado es importante el dominio de habilidades relacionadas con el lenguaje verbal y extraverbal.
En tal sentido, en ambos grupos de habilidades realmente son necesarias para la actividad profesional del jurista, , admite que ellas actúan como herramientas indiscutibles de su trabajo, en algún sentido considera que las habilidades que se relacionan con el sistema paralingüistico (volumen de la voz), que por supuesto entra dentro del grupo de habilidades relacionadas con el lenguaje extraverbal, también se relacionan con el logro de afectar con el mensaje, por lo que entrarían en dos clasificaciones, ambas son determinantes para lograr una competencia comunicativa en el abogado.
Sin embargo, es importante que se reconozca, que la formación y desarrollo de las habilidades necesarias para realizar el ejercicio con calidad, pueden ser formadas y desarrolladas desde las diferentes asignaturas de la carrera, y por consiguiente cuando los estudiantes egresen y se enfrenten a la práctica, entonces todo les será menos complejo.
Hablar, no resulta difícil, ahora, dar entonación, altura a la voz, detenerse en el momento adecuado, tener un tiempo de exposición que no agote al auditorio, resulta más complejo, sobre todo cuando tienes que convencerlo y éste es extremadamente heterogéneo, y cada una de estas cuestiones se vuelven imprescindibles cuando el jurista tiene que defender los derechos de una persona,. Es por ello, que se ha orientado el estudio de habilidades comunicativas verbales y no verbales dentro del contexto de las Disciplina
Para los operadores del Derecho dominar las habilidades comunicativas resulta más que importante, una cuestión indispensable, pues si se toma en cuenta que entre las tareas que posee este profesional se encuentra el deber de educar, convencer, persuadir y prevenir fenómenos dañinos a la sociedad es obvia la necesidad de su dominio.
Para ello es indudable que las habilidades comunicativas se convierten en una herramienta que determinan, según su buena utilización o no, el éxito de la labor del jurista, en cualquiera de sus perfiles laborales.
Hacer que las personas que constantemente se relacionan con los operadores del Derecho entiendan, comprendan y crean en lo que ellos necesitan exponer, mostrar, probar no es cosa sencilla, más aún cuando este público es tan heterogéneo, que lo integran personas de diversos niveles culturales, edades, profesiones, etc. Además de la alta responsabilidad que entraña el actuar de este profesional debido a que tiene la obligación de determinar ciertas cuestiones que se relacionan tanto con la formación académica de los estudiantes, como en otros casos donde discute cuestiones tan serias como la libertad de una persona y hasta la vida de ésta. En tales determinaciones juega un papel preponderante las habilidades profesionales donde se destacan las comunicativas. Esto se manifiesta a partir de la exposición que haga el jurista en cada uno de los papeles que le toca jugar en su realización profesional.
El jurista, en sentido general, con su actuar, tiene que ser capaz de polarizar criterios, actitudes, aclarar contenidos, educar, orientar y hasta movilizar multitudes en relación con lo que expone.
La labor del jurista tiene que perfeccionarse para actuar en el momento que debe enfrentar al pararse frente a un grupo de personas y hablar en voz alta para que lo escuchen y por supuesto que logre llegar a lo más sensible de sus pensamientos y convencer.
El conocimiento del uso correcto del lenguaje, es para el jurista una herramienta de trabajo, pero no se enseña durante el estudio de la carrera, ni se ejercita, y de alguna manera esto afecta negativamente luego la realización de los egresados en la práctica. El uso de manera intencionada de cualidades de la voz puede lograr que el abogado transmita confianza, interés, valor etc, que para los que tienen en juego su vida o su libertad, o la defensa de sus derechos o los de sus familiares, son verdaderamente fundamentales.
La enseñanza del Derecho no escapa a esta necesidad de buscar vías a través de las cuales pueda lograrse una mejor preparación de los egresados de dicha carrera en cuanto al dominio de habilidades comunicativas profesionales que facilitan su desenvolvimiento profesional, y encuentra en el empleo de los métodos de enseñanza posibles soluciones a tal problemática.
Para continuar con este análisis, es menester que se tenga presente que en el trabajo de los docentes como profesionales de la comunicación, (fundamentales educadores de los futuros juristas) intervienen innumerables signos que inciden en el establecimiento de las buenas relaciones. Sin embargo, este profesional no es entrenado en este sentido, por lo que puede decirse que maneja este elemento de la comunicación de forma intuitiva, y de hecho a veces logra tener éxito, otras no. Por consiguiente, tampoco se preocupa por crear habilidades en sus educandos para que los empleen con mayor éxito en su desempeño laboral, y ya no tanto de manera casual, sino de forma intencionada.
Por todo lo antes expuesto, se propone la utilización de una estrategia metodológica que tenga como objetivo el desarrollo de habilidades comunicativas profesionales a través de las asignaturas de la carrera, empleando para ello, uno de los métodos participativos contenidos entre la gama tan variada de los existentes, para lograr optimizar el papel que desempeñará el egresado al culminar sus estudios.
En el diagnóstico y caracterización del estado actual del proceso de desarrollo de habilidades comunicativas en los estudiantes y profesores de la carrera de Derecho de la Universidad de Pinar del Rio y a partir de la aplicación de varias técnicas e instrumentos pedagógicos se pudo constatar que:
Los estudiantes: poseen limitaciones en el( desarrollo de las habilidades comunicativas profesionales sobre todo las relacionadas con la expresión verbal, sobre todo las relacionadas con el sistema lingüístico, destacando el hecho que desconocen las vías, métodos y procedimientos que les permitan la utilización de las mismas en su formación académica y laboral.
En caso de los profesores: en observaciones a( actividades docentes se pudo comprobar a partir del análisis y evaluación de las mismas, que las dificultades relativas al desarrollo de habilidades comunicativas relacionadas con el lenguaje en el proceso pedagógico tienen como fundamento la no existencia de actividades y estrategias metodológicas que contribuyan desde el diseño de las asignaturas al desarrollo de tales habilidades, debe destacarse además la poca importancia que le conceden al desarrollo de las mismas.
Todo lo antes expuesto permite caracterizar una situación problémica insertada dentro del proceso formativo de los profesionales del Derecho de hoy, que sin dudas dificulta la óptima formación de los educandos para ejercer de manera eficaz en la esfera laboral en cualquiera de los puestos que su amplio perfil le confiere, lo que justifica, sin duda alguna, que el tema que se pretende estudiar posee una evidente actualidad
Por lo antes expuesto podemos plantear que después de analizar los documentos de la carrera programas orientaciones metodológicas libros de texto llegamos al a conclusión que existen problemas didácticos que afectan el proceso de enseñanza aprendizaje de la lengua materna en el desarrollo de las habilidades comunicativas profesionales tales como:
1. Los objetivos están divididos en instructivos y educativos y no de forma integradora , debe aparecer lo instructivo lo educativo y lo desarrollador
2. En las asignaturas aparecen más de cinco temas como promedio que lo consideran como unidades didácticas
3, Aparecen unidades didácticas que incluyen tres temas de la asignatura
4. El sistema de valores está de forma general en la asignatura y no por unidades por lo que no se especifica como se van a potenciar en cada momento
5. El sistema de habilidades no siempre responde al objetivo general de la asignatura
6. La evaluación está concebida de forma general y no por cada unidad didáctica
7. Los medios y la forma no se explicita
Estos problemas frenan el desarrollo del proceso de enseñanza aprendizaje de la lengua materna en el contexto curricular
Conclusiones
Para fundamentar el proceso de desarrollo de habilidades comunicativas profesionales nos sustentamos en teorías lingüísticas, sociológicas, psicológicas y pedagógicas que constituyen sustentos primordiales que sirvieron de base en este trabajo permitiendo llegar a la conclusión que el plan de la carrera según su conformación no permite en los estudiantes en formación lograr un buen desempeño profesional en sus diferentes modo de actuación en el contexto de su desempeño laboral.
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Autor:
Lic. Ileana María Martínez Villar
Pinar del Río, 2009
"Año del 50 Aniversario del Triunfo de La Revolución"
Universidad de Pinar del Río
"Hermanos Saíz Montes de Oca"
Centro de Estudios de Ciencias de la Educación Superior
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