"Estas conductas no las arregla la ley y por ello es necesario educar en igualdad de género y brindar alternativas para resolver los conflictos. Sencillamente amor no es igual a dependencia y complacencia". Como medida inmediata, comentó, la Universidad de Los Andes (ULA), junto con el Sistema de Naciones Unidas y la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo, organizó una campaña que será lanzada a mediados de Mayo 2010 para concienciar jóvenes y adolescentes sobre ese problema. "En nuestros talleres, tenemos parejas que vienen a buscar ayuda porque se agreden y no quieren llegar al extremo de golpearse, y en eso consiste nuestro trabajo: visualizar que si hay violencia en el noviazgo y dar una alternativa. Tenemos que hacerlo a tiempo, pues hemos visto un caso reciente, el de Jennifer (esposa de Edwin "el Inca" Valero), a quién se invisibilizó en la prensa nacional. Pero nosotros tenemos un trabajo continuado desde 2006, desde la Dirección de Asuntos Estudiantiles de la ULA, y nuestras estadísticas del programa de consulta de pareja nos indican que hay un problema de violencia de pareja dentro de las aulas", aseveró.
Por ello, en Marzo de 2010, se constituyó la Red Universitaria de Prevención de la Violencia en el noviazgo, organización a la cual pertenecen las universidades nacionales e institutos de educación superior. Hasta ahora se han formado 50 preventores y preventoras universitarios y se ha instruido al personal técnico de desarrollo estudiantil de 10 universidades. En fin, mucho se está haciendo, lo cual quiere decir –a entender de Dalia Rodríguez –que en este tema si hay respiro para la mujer, "en caso de que sobreviva". Las alternativas son denunciar, hablar con la familia, buscar ayuda psicológica y protección física.
1 de cada 3 mujeres. En el mundo, una de cada tres mujeres ha sido abusada. Quien la maltrata es alguien cercano.
En el año 2008, la Defensoría Nacional de los Derechos de la Mujer reportó que atendió (4.172) casos de violencia.
Hoy en día se conocen entre 800 y 1.000 casos cada mes, en algunas regiones del país no hay oficinas para recibir denuncias.
Ofelia Álvarez, quién también es Directora de Fundamujer, dijo que más de 300 organizaciones nacionales e internacionales hicieron un exhorto al Estado Venezolano para que se haga responsable ante los hechos como el de Jennifer Carolina de Valero. La exigencia fue llevada igualmente ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, pues consideró que "el asunto es el incumplimiento de la ley". "A Jennifer no pudieron protegerla y ahora estamos todos indignados. Pero hay una pila de casos que no salen. A la Fundación llega un promedio de seis mujeres solicitando ayuda; también van hombres y dicen que quieren cambiar. Pero es un problema de cultura que nos afecta a todos. Por eso hay que comenzar a prevenir en el noviazgo, cuando comienzan todas las prohibiciones, los celos, las inseguridades, el control. Ofelia Álvarez reconoce que en el país se crearon los tribunales de violencia, pero opina que esa gente necesita mayor preparación.
Derecho a la Vida
Las mujeres han venido denunciando las injusticias del sistema patriarcal y organizándose políticamente a fin de impulsar la transformación histórica necesaria para la erradicación de la violencia contra la mujer. No es tarea fácil. Se trata de promover la transformación de estructuras ideológicas patriarcales que anteceden al capitalismo, al socialismo y a toda forma de organización social, económica y política que los seres humanos (los hombres, más bien) han determinado a lo largo de la historia. La Ley Orgánica sobre el Derecho de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia es el producto de años de lucha y trabajo de las activistas venezolanas defensoras de los derechos humanos de las mujeres. Según cifras del Ministerio Público, la Fiscalía recibió (101.705) denuncias de violencia contra la mujer en 2009. Sólo una de cada 10 mujeres agredidas se atreve a denunciar; calcule usted cuántas mujeres fueron agredidas por sus parejas, jefes o superiores sólo en 2008. Según cifras del Observatorio Venezolano de Violencia, (16.047) homicidios ocurrieron en 2009 en Venezuela, y en uno de cada 10 de esos casos la víctima fue una mujer; es decir, (1.607) mujeres asesinadas el año pasado (2009) y en 90% de los casos por sus parejas o cónyuges. Con la Ley se propone, entre muchos objetivos, erradicar la falsa idea de que el maltrato hacia la mujer por parte de su pareja es un asunto e marido y mujer, es decir, un asunto de la vida privada. La violencia verbal, psicológica, sexual, patrimonial hacia la mujer es un delito y punto.
El Estado Venezolano es responsable de la aplicación de la Ley y de garantizar a las mujeres el derecho a la vida. La Ley, en su artículo 87, describe 13 medidas de protección que los órganos receptores de denuncia deben aplicar para proteger a la mujer agredida en su integridad física, psíquica, sexual y patrimonial. Las medidas de protección tienen su fundamento en la certeza científica de que, si el Estado no interviene para romper el llamado ciclo de la violencia, este se irá reforzando en un espiral de violencia que muy probablemente culmine con el asesinato de la mujer agredida.
Los actos de violencia contra la mujer están tan naturalizados en nuestra cultura machista que la mayoría de las personas –y especialmente las mujeres consideran éstos como asuntos de la vida privada y por lo tanto se deben resolver sin la intervención de terceros y, peor aún, se creen las culpables de lo que les está sucediendo. Esa es la razón por la que cientos de mujeres afectadas por los delitos de amenaza, hostigamiento, violencia física, violencia patrimonial, violencia obstétrica, violencia laboral, acoso sexual, prostitución forzada o violencia sexual, entre otros delitos, mantienen su situación en secreto y tienen miedo o vergüenza de denunciar. Se calcula que por cada mujer que denuncia haber sido objeto de violencia hay 10 que no lo hace. Este reconocimiento coloca la responsabilidad en la persona que comete la agresión y no en la víctima como causante de la violencia. La ley establece que ninguna mujer es culpable de ser víctima de violencia. Muchas mujeres se preguntan: ¿Qué se gana con denunciar?. Magdymar León, Coordinadora Ejecutiva de AVESA y especialista en este tema, señala varias de las ventajas que involucra la denuncia:
1. Se hace público el delito; por lo tanto otras personas conocen de los hechos, además abre la posibilidad de que sean impuestas medidas de seguridad y protección de la víctima con la finalidad de prevenir nuevos hechos de violencia.
2. La víctima puede ser referida a centros especializados de atención, tanto médica como psicológica, para recibir la debida atención.
3. Hay un reconocimiento social del agresor, lo que en muchos casos contribuye a regular su comportamiento violento, asimismo el agresor puede ser enviado a centros de rehabilitación e incorporarse a programas destinados a erradicar la conducta violenta.
4. Se identifica la persona agresora ante el sistema de justicia, lo que disminuye las probabilidades de impunidad (en muchos casos se encuentra que los agresores tienen antecedentes de sucesos violentos contra otras mujeres pero esas víctimas nunca denunciaron.
5. Se equilibra la relación de poder entre la víctima y el agresor. Recordemos que el fenómeno de la violencia contra la mujer está íntimamente ligado a la inequidad de poder entre la víctima y el agresor, denunciar le da mayor poder a la víctima en tanto cuenta con el respaldo de una serie de instituciones encargadas de su protección y seguridad.
6. Permite a la víctima apropiarse de sus decisiones, denunciar implica una acción de la misma víctima para poner fin a la violencia. Es necesario enfatizar que la denuncia es una salida que el Estado pone a disposición de las víctimas para su seguridad y protección, así como para sancionar a la persona agresora por el delito cometido. No denunciar sólo beneficia a los agresores.
Según la Sra. Florencia Parodi (Directora de Prevención y Atención de Violencia contra la Mujer del Inamujer, manifestó: "Muchas mujeres no tienen conciencia de que están siendo maltratadas, y un claro ejemplo de esta situación es que el 75% de las que se atreven a denunciar por vía telefónica lo hacen después de ocho años de maltrato". Debido a vínculos emocionales y a la estructura de nuestra sociedad, muchas víctimas ven como algo natural el maltrato y no caen en cuenta de ese hecho.
En estos momentos se cuenta con la Ley Orgánica sobre el Derecho de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, en la cual se tipifican 19 tipos de agresiones, y cualquier mujer que pueda estar ante la sospecha de algún maltrato puede llamar a través del número (0800-Mujeres (6853737) Ó * 112 (Movilnet), que es un servicio gratuito, nacional y confidencial, en el cual se les brinda orientación y apoyo psicológico de emergencia las 24 horas del día, los 365 días del año.
Mujeres sufren en silencio el maltrato
Una mujer pasa en promedio siete años de su vida en pareja aguantando violencia antes de atreverse a denunciar este hecho, y cuando lo hace es porque se ha dado cuenta de que su vida está en peligro. Este problema de larga, obedece en gran parte, a la escasa información que tienen las mujeres sobre sus derechos y la protección que le brindan las leyes, lo que hace más difícil la erradicación de este problema. Así lo señala Morelba Jiménez, Coordinadora de Igualdad y Género del Centro de Población de Naciones Unidas, Organización Mundial que tiene entre sus misiones trabajar para que todas las mujeres vivan con dignidad y respeto.
Afirma que a pesar de los avances que ha habido en cuanto a la preservación de los derechos de la mujer dentro de la sociedad venezolana, "la violencia del hogar ha ido aumentando, pasando desde una cachetada a un jalón de cabello, tirarle un plato encima, amenazarla con una pistola y darle un tiro".
Aunque no existen estadísticas oficiales al respecto, se estima que detrás de cada mujer que denuncia por haber sido agredida, hay diez que no lo hacen por miedo que les produce esa situación.
Morelba Jiménez dice que por ello la respuesta del Estado tiene que ser inmediata, ya que si la acusación es desestimada la mujer regresa a donde está el agresor y éste al enterarse de que ella ha sido capaz de denunciarlo podría empeorar su conducta haciéndole más daño.
Yolanda Jaime Guerrero, Magistrada del Tribunal Supremo de Justicia, señala en un artículo escrito para la Revista Venezolana de Estudios de la Mujer, que "las estadísticas del maltrato a la mujer en Venezuela y en el mundo son sorprendentes. Casos conocidos como la brutal agresión de la que fue víctima Linda Loaiza López o la psicóloga Vivian Stusser no deben quedar impunes. Así lo exigen miles de mujeres anónimas que padecen en silencio el drama familiar del maltrato físico".
En el mismo artículo, titulado "Política Judicial frente a la violencia de género", dice que 97% de los casos de justicia de paz están vinculados a la violencia familiar; y para el mes de febrero de 2009, el Ministerio Público había recibido 101 mil 705 denuncias de violencia contra la mujer, de las cuales 33 mil 719 han ocurrido en el área metropolitana de Caracas.
Morelba Jiménez, Coordinadora del Componente de Igualdad de Género del Centro de Población de Naciones Unidas, dice que estas son las únicas cifras oficiales que se conocen, por lo que se estima que el número de mujeres maltratadas en el país es mucho mayor al de los casos denunciados.
A nivel mundial se estima que al menos una de cada tres mujeres en todo el mundo ha sido golpeada, forzada sexualmente o abusada de algún otro modo en el transcurso de su vida. El abusador habitualmente es alguien cercano.
Morelba Jiménez, dice que la relación de violencia es asimétrica, de poder entre el hombre y la mujer. "Las mujeres son violentadas porque los hombres consideran que son incapaces de responder a la agresión. Cuando ésta responde, no agrediendo, sino poniendo una denuncia, el hombre intensifica la violencia para poder ejercer la dominación". Explica que hay distintos tipos de violencia, entre ellas, la física que ocupa el primer lugar; seguida de la psicológica que es la más invisible y puede llevar también a la mujer a la muerte por desespero, suicidio, pérdida de la autoestima.
Por tal razón, y con motivo de celebrarse hoy el Día Internacional de la Mujer llamó a los representantes del sexo femenino a entender el significado de la violencia y conocer las leyes existentes al respecto, para dejar de un lado el miedo y denunciar a los agresores.
Casas de abrigo
Para aquellos casos en los cuales está en riesgo la vida, el Instituto Nacional de la Mujer (Inamujer) tiene a su cargo las Casas de Abrigo, donde se brinda protección y un hogar temporal con atención integral. La ubicación de esos hogares es totalmente confidencial, de manera que el agresor no pueda intentar hacer nuevamente daño. Actualmente se cuenta con cuatro Casas de Abrigo.
Perfil para ingresar a las Casas de Abrigo: No hay discriminación en cuanto a edad, formación, nacionalidad, condición social o de ningún tipo para las mujeres que quieran ingresar a esos hogares, pero solo se admitirán aquellos casos donde haya peligros graves de agresión.
Solicitud para ir a las Casas de Abrigo: A través del número de teléfono (0800 – Mujeres (6853737) se hacen las gestiones iniciales para ingresar.
Para Virginia Aguirre, Directora del Observatorio Bolivariano de Género, de los 19 tipos de violencia, los más comunes son: violencia física, violación psicológica, violencia sexual y la trata de mujeres, niñas y adolescentes.
Proyecto Convenio Inamujer – Metro de Caracas. En el 2008 se inició un convenio entre el Sistema de Transporte Subterráneo Metro de Caracas e Inamujer con el cual se instalaron módulos de información en las principales estaciones del subterráneo para difundir información sobre la violencia a las mujeres y recoger sus necesidades.
Violación
Debido a la estructura patriarcal (machista) que caracteriza a nuestra cultura, cuando ocurre alguno de los delitos tipificados en la Ley Orgánica sobre el Derecho de las Mujeres a una Vida sin Violencia, la tendencia general es a culpabilizar a la víctima. Este fenómeno cultural se concreta a través de la perpetuación de una serie de mitos que todos y todas, independientemente de nuestra formación académica, asumimos como ciertas. Para que el espíritu de la Ley se cumpla a cabalidad y se le de un trato justo a las víctimas, es necesario analizar de manera crítica los mitos sobre la violación que aún prevalecen en nuestra ideología. En general se cree que las mujeres son violadas por andar con ropa insinuante y actitudes provocadoras. También se cree que la mayoría de las víctimas de violación son mujeres jóvenes y atractivas. La realidad es que la apariencia física no es relevante (En la ASOCIACIÓN VENEZOLANA PARA UNA EDUCACIÓN SEXUAL ALTERNATIVA (AVESA) se han atendido mujeres de todas las etnias: negras, blancas, pelirrojas; de todas las contexturas: gordas, flacas, de músculos fuertes y de músculos flácidos, de todas las formas corporales: con barriga, sin barriga, de senos pequeños, grandes, firmes, caídos; de todas las clases sociales: pobre, clase media, clase alta….¡y pare de contar! Y tampoco es relevante la edad. En general se cree que la violación se debe a un impulso sexual incontrolable del agresor.
La realidad es que los impulsos sexuales son conscientemente controlables por todos los hombres y las mujeres al igual que cualquier otro impulso vital. También es una realidad que la mayoría de las violaciones han sido y son, parcial o totalmente, planificadas. En general se cree que la mujer puede defenderse y que si se resiste no puede ser violada. La realidad es que ante situaciones de violencia imprevistas la reacción es impredecible y además la víctima está en situación de absoluta desventaja para defenderse. Una mujer que se resiste puede ser gravemente maltratada e incluso asesinada y, seguramente, no podrá evitar ser violada. Ofrecer resistencia pone en mayor riesgo la integridad física de las mujeres y puede significar la pérdida de su propia vida o la de seres queridos. Por ejemplo, una mujer que se atendió en la ASOCIACIÓN VENEZOLANA PARA UNA EDUCACIÓN SEXUAL ALTERNATIVA (AVESA) fue violada en el estacionamiento de Parque Central (en Caracas – Venezuela) y fue sometida colocándole una pistola en la cien a su niño de cuatro años. Para que se cumpla lo que la Ley contempla en los casos de violación, y las víctimas sean atendidas integralmente en sus necesidades legales, médicas, psicológicas y sociales; y los victimarios sean juzgados y condenados con justicia, es imprescindible trabajar en la erradicación de los mitos que la justifican y culpabilizan a las mujeres víctimas de violación.
Prostitución Forzada
Miles de mujeres venezolanas y millones en el mundo se ganan la vida como prostitutas. Una gran parte de las trabajadoras sexuales –cómo las propias prostitutas prefieren ser llamadas- no obedecen a los grotescos estereotipos que la mayoría tenemos sobre ellas: mujeres de poca o ninguna moral, drogadictas y portadoras de enfermedades. La mayoría de estas mujeres son trabajadoras que tratan de ahorrar dinero para mandar a sus hijos/as a la escuela, sufren los embates de la inflación, pagan renta y sobreviven con los escasos recursos económicos que aporta este duro oficio. Popularmente y con intención descalificadora, se dice que la prostitución es el oficio más antiguo de la mujer. Falso. La mujer de la antigüedad, además de ser prostituta (prostitutas sagradas en muchos casos) fue guerrera, campesina, sacerdotisa y muchos oficios más. En cualquier caso, el origen de la prostitución no está en la existencia de las mujeres que se prostituyen, está en la enorme demanda de prostitutas por parte de los hombres, lo cual es una evidencia más de la cumulación por parte de los hombres del capital económico que no poseen las mujeres. La pobreza en muchos casos obliga a las mujeres a trabajar como prostitutas.
En la mayoría de los casos, detrás de las prostitutas hay hombres que las explotan, extorsionándolas o sometiéndolas a diversas formas de tráfico de mujeres o prostitución forzada. Señala Oscar Uribiola en su libro Sexo: En todos los casos la prostitución está acompañada de graves fenómenos como tráfico de seres humanos, prostitución infantil, engaño, esclavitud, maltrato, abuso, deudas, inmigración, leyes ineficaces, educación ineficiente y discriminación. La existencia de la prostitución tiene su origen en la discriminación y explotación de la mujer. Explotación que data de milenios de antigüedad. El conocimiento de los derechos humanos de las mujeres, consagrados en las leyes venezolanas y tratados internacionales, es un requisito indispensable para que ninguna mujer, incluyendo a las prostitutas, pueda ser discriminada o violentada por ninguna razón.
En ese sentido, la Ley Orgánica sobre el Derecho de las Mujeres a una Vida sin Violencia (numeral 8, artículo 15), establece que ninguna mujer puede ser forzada a ejercer la prostitución, y la Constitución de Venezuela, además, garantiza (Art. 21) a las mujeres que ejercen la prostitución por su propia voluntad, los mismos derechos que todas las mujeres y hombres de este país.
Prostitución Forzada: Se entiende como la acción de obligar a una mujer a realizar uno o más actos de naturaleza sexual por la fuerza o mediante la amenaza de la fuerza, o mediante coacción como la causada por el temor a la violencia, la intimidación, la opresión psicológica o el abuso de poder, esperando obtener o haber obtenido ventajas o beneficios pecuniarios o de otro tipo a cambio de los actos de naturaleza sexual de la mujer (Numeral 8, artículo 15 de la Ley Orgánica sobre el Derecho de las Mujeres a una Vida sin Violencia).
Femicidio
El viernes 30/04/2010, fue reseñada en diversos diarios impresos y noticieros televisivos una concentración en la que nos dieron cita un grupo de mujeres (y hombres) de diversas tendencias políticas y activistas en defensa de los derechos de las mujeres, frente a la Sede principal Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela, el jueves 29 de Abril a las 11:00 a.m.
Entre pancartas cuyos textos alertaban: ¡Cuidado, el machismo mata… y el silencio también!; y exigían ¡No más femicidios en Venezuela! Fue entregado a la magistrada Yolanda Jaimes un documento firmado por más 60 organizaciones de promoción de DDHH de las mujeres y avalado por más de 500 firmas. El pliego entregado culmina con la exigencia de que "este femicidio sea objeto de averiguaciones exhaustivas para que se determinen las responsabilidades, y reciban las sanciones pertinentes por su inacción y omisión como representantes del Estado y garantes del derecho a la vida de las mujeres a vivir libres de violencia". El término femicide fue acuñado en Inglaterra por Mary Orlock al comienzo de la década del 70, y fue utilizado por primera vez públicamente por la feminista estadounidense Diana Russell en un testimonio ante el Tribunal Internacional de Crímenes contra las Mujeres, celebrado en Bélgica en 1.976. La misma Rusell define el femicidio como el asesinato misógino de mujeres cometido por varones. Referirse al asesinato misógino de mujeres y niñas como femicidio, permite evidenciar que la muerte de las mujeres a manos de sus esposos, amantes, padres, novios, pretendientes, conocidos o desconocidos, no es consecuencia de razones inexplicables, conductas patológicas, o de la simple casualidad. Llamar femicidio estas muertes de mujeres, remueve el velo oscurecedor con el que las cubren los términos neutrales como homicidio y asesinato, señalan Radford y Rusell.
El concepto de femicidio indica el carácter social y generalizado de la violencia basada en la inequidad de género, neutralizando así los planteamientos culpabilizantes de las víctima como "ella se lo busco", o "quién la manda a pendeja", así como los argumentos desculpabilizantes de los victimarios: "el pobre estaba loco", "tenía muco estrés", o "perdió el control". El concepto de femicidio permite erradicar de una vez y para siempre la idea de que los asesinatos de mujeres perpetrados por sus parejas son "crímenes pasionales". Esta violencia no es casual, el factor de riesgo es ser mujer.
La alta incidencia de femicidios en Venezuela está íntimamente asociada al grado de tolerancia de la sociedad y el Estado frente a la violencia contra las mujeres. La negligencia, la indiferencia, y las políticas públicas ineficientes son un dramático reflejo de la estructura de dominación y subordinación que se produce en una sociedad machista que legitima la violencia generalizada contra las mujeres. Por eso advertimos ¡Cuidado, el machismo mata! Y exigimos ¡No más femicidios en Venezuela!
Testimonio Nº 1
Era el año 2006. El Instituto Regional de la Mujer de Lara no tenía todavía servicios de atención psicológica o social, y se remitió el caso de una señora, quien solicitaba apoyo psicológico para sus nietas de 10 y 8 años y para una pequeña de 2 años que se había quedado en casa con la madre. Una Psicóloga y la experta Merdedes Muñoz (AVESA), trabajadora social, conversaron con la señora. La misma contó cómo su hija era maltratada por su marido frente a las nietas y solicito ayuda psicológica para ellas y orientación para ayudar a su hija. No quería denunciar, temía que si lo hacía no hicieran nada y él moliera a su hija a palos como lo había hecho la única vez que ella se había atrevido a denunciarlo. Su yerno era celoso, tomaba mucho e insultaba y le pegaba a su hija casi a diario. La niña mayor contó cómo su papá torturaba a su mamá amenazándola de muerte mientras amolaba el machete.
Se insistió en la denuncia, contestó que tenía que hablar con su hija primero. Les dimos cita. Ellas vivían en una comunidad que está como a una hora de Barquisimeto. Se las arreglaría para que todas pudieran venir a la cita escondidas…
En un fin de semana la Presidenta del Instituto Regional de la Mujer llama a la experta Mercedes Muñoz (Avesa) para contarle que en la página de sucesos aparecía la abuela de las niñas pidiendo justicia…El hombre había degollado a su esposa delante de las tres niñas. Cuando terminó con ella, se abalanzó sobre las hijas con el machete. Las niñas corrieron con su hermanita chiquita cargada mientras él las seguía de cerca. Los mecánicos de un taller que estaba en el camino las protegieron. Él logró huir y a los dos días lo agarraron. La abuela llevó a las niñas mayores a consulta psicológica los meses siguientes al crimen. La niña más grande cargaba con una enorme culpa. Según contó, su papá, quien no sabe leer, le había pedido que le leyera una carta entregada a su mamá por el señor que les había vendido el rancho. La niña la leyó y le explicó a su papá que era una carta de cobranza. Él no le creyó y le dijo que era una mentirosa como su mamá. Furioso, buscó el machete y le cortó la cabeza a su mamá delante de ella y sus hermanas. La niña se torturaba con la idea de que, si ella hubiese leído mejor; su papá le hubiera creído y su mamá estaría viva. La abuela también se culpaba, iba y volvía sobre porqué no había hecho la denuncia. "No lo denuncié porque tenía miedo de que la matara, y de todas maneras la mató", nos decía en medio del llanto. En la prensa, los artículos aludieron la locura del hombre, el desempleo del hombre, el alcoholismo del hombre. El victimario víctima, pues. Catorce años de condena le dieron, que con buena conducta son muchos menos…
En ALAPLAF también quedaron espantadas. La ley es un cuerpo jurídico que ayuda, pero aún es poco operativa. En el Estado Lara hay un solo Tribunal de Violencia contra la Mujer, una sola Fiscalía y no hay refugios…
Este fue un testimonio de Delia Mondragón, trabajadora social de la Asociación Larense de Planificación Familiar (Alaplaf) e insigne luchadora por los derechos humanos de las mujeres.
Testimonio Nº 2
La mamá de Eudomar Quintero me pidió orientación para proteger a su nieto de 5 años y su hermanita de uno. Su hija de 22 años había sido asesinada por su esposo, Erickson 000000, de 29 años, con quien había estado casada 7 años. Erickson, después de matar a Eudomar, se dio a la fuga, gritando amenazas de que buscaría a su hijo para matarlo y después se suicidaría. Una abogada que labora en la Defensoría de los Derechos Humanos de las Mujeres del Municipio Sucre de Miranda, fue contactada por un familiar y recomendó la asesoría de la prenombrada abogada. Desde Marcaibo se vinieron la mamá y las hermanas de Eudomar a buscar protección. El asesinato ocurrió el 31 de ahosto de 2009 en Cabimas, Estado Zulia, cuando ella volvió a su casa. Se había mudado a la casa materna, después de que su esposo la persiguió con la intención de matarla con cuchillo, y ella huyó hacia la calle cuando casualmente pasó una patrulla que se lo llevó preso. Después de ese hecho, se fue a vivir con su familia. Allí le llegó una comunicación de un tribunal en donde se le acusaba de haber abandonado voluntariamente el hogar y se le recomendaba regresar a su residencia, aunque sin la presencia del esposo, contra quien se habían dictado medidas cautelares que le prohibían acercarse. Nosotros mismos la trajimos nuevamente y le compramos todo, comida, medicinas, lo necesario para que ella no saliera, porque si se iba de su casa perdería los derechos como esposa, por eso se vino de Maracaibo, declaró su madre, la señora María Galué, el día que su hija fue asesinada. Llegó a la residencia, se escondió detrás de una mata de topocho y se metió en la cocina donde la joven estaba preparando un tetero a su niña, empezaron a discutir y a forcejear, entonces él sacó la escopeta, le dio un tiro en la cara y la mató. Relata el mismo recorte de prensa que la mamá de Eudimar me entregó. Erickson 00000000, se dio a la fuga, gritando amenazas, hoy día todavía es prófugo de la justicia. Va por ahí, jactándose de que tiene dinero suficiente para pagar sicarios, funcionarios y a la justicia. Él trabajaba en Pdvsa. El 16 de septiembre de 2009 me dirigí al Ministerio Público a los fines de solicitar:
1) Que se nombre un fiscal de competencia nacional que revise el caso para proveer nuevas actuaciones mas efectivas dentro del proceso penal contra Erickson 000000.
2) Que se otorguen medidas de protección para el niño, la niña y a su abuela materna.
3) Que se le priven de los derechos de padre a Erickson 00000, quien constituye un riesgo para la vida de sus hijos.
4) Que se abra una investigación de carácter penal a los funcionarios que no actuaron adecuadamente para proteger la vida de Eudomar Quintero.
Hasta ahora, sólo se ha logrado que la abuela de los niños tenga la guardia y custodia de los hijos de Eudomar; ojalá no ocurra otra tragedia. Testimonio de María Hernández Royett, Abogada, Integrante de Momuma e insigne luchadora por los Derechos Humanos de las mujeres.
Testimonio Nº 3
Luego de 18 años de maltrato físico y verbal, Isabel Jiménez (40) años se separó de su concubino en junio de 2009. Ante su negativa a regresar, la buscó horas después. No le importó encontrarla en casa de su hermano y allí mismo la atacó con un arma blanca. Momentos antes, el hombre, bajo los efectos del alcohol, encerró a sus tres hijas y amenazó con matarlas si Isabel no regresaba al hogar.
Por recomendación de vecinos, la mujer consignó la denuncia ante la Fiscalía y el agresor due detenido. Pero, dos horas después estaba en la calle, tras pagar un soborno.
Isabel no es un nombre ficticio. El 29 de abril su historia fue conocida a través de los diarios del Estado Falcón, a donde acudió y mostró un fuerte golpe en la cabeza, un brazo fracturado y quemaduras que le hizo su alcohólico ex marido en la casa que habitaban en el barrio La Cañada, Coro – Estado Falcón. Quería divulgar su caso para que la gente la ayudara a capturarlo. En Coro nadie le había hecho caso. "¿Tenía que pasar esto para que se den cuenta del peligro que corro junto con mis hijas"?, preguntaba.
La Detective (CICPC) Ysmary Zárraga asegura que Isabel forma parte de las 40 mujeres que en promedio acuden mensualmente al CICPC para denunciar casos de violencia doméstica. En su condición de Jefe de la Brigada Contra la Violencia de la Mujer, de la Subdelegación en la capital falconiana, sostiene que este delito ha pasado a ocupar el primer lugar en el Estado. Mas, no cree que se trate de aumento de los casos, sino de que las mujeres han perdido el miedo a denunciar.
Mónica Berríos, Directora Regional del Ministerio para la Mujer e Igualdad de Género, reconoció que hubo omisión por parte de los organismos de seguridad ante el caso de Isabel Jiménez hecho que no piensan repetir. La asistirá una de las abogadas del Instituto Municipal de la Mujer y se le dará acompañamiento permanente hasta que se haga justicia, aseguró. Solicitó una reunión con los cuerpos de seguridad del Estado para evaluar el seguimiento que se está haciendo a la violencia doméstica. También se hará una revisión de casos anteriores, donde no ha habido respuesta. Estamos pidiendo que a los Institutos Regionales y Municipales de la Mujer se nos dé la posibilidad de ser receptoras de denuncias, pues estamos atados de manos. Tenemos un equipo multidisciplinario capacitado en el manejo de la Ley Orgánica para el derecho de la mujer a una vida libre de violencia. Esta potestad implicaría celeridad, pues actuaríamos desde el primer momento y solicitaríamos a los cuerpos de seguridad las medidas de protección.
Es necesario, asegura, reforzar la acción de los organismos estadales para proteger a las mujeres. No todos los funcionarios están capacitados, pese a que se han dictado numerosos talleres. Insistirá en la necesidad de la creación de los Institutos de la Mujer en los 11 Municipios del Estado Falcón.
En el año 2009, más de 20 mujeres fueron asesinadas por sus parejas en el Estado Falcón.
La jefa de la Brigada contra la Violencia de la Mujer del CICPC – Coro, Ysmary Zárraga, aseguró que 70% de las mujeres que denuncia a su pareja retira la acusación al día siguiente. "Ellas están enamoradas y lo que buscan es que las ayudemos a que no las sigan lastimando y para eso dictamos medidas de protección que ellos firman. Unos las cumplen, pero otros no".
En su opinión, la ley contiene medidas punitivas eficientes para contener la violencia doméstica y faculta a los Organismos de seguridad para imponer otras. Por ejemplo, en el caso de que el agresor sea policía se le quita el arma de reglamento. Ve complicado dar potestad a los Institutos de la Mujer para recibir denuncias, pues tendrían que asignarles funcionarios policiales que detengan a los agresores. Es partidaria de que estos despachos continúen la función de brindar orientación psicológica a las familias; muchos casos se resuelven con esta asistencia. Cree necesario aumentar las charlas en escuelas y consejos comunales.
Caso Emblemático para no olvidar
Ese expediente traspasó las fronteras y es comparable con los asesinatos de mujeres en la Ciudad Juárez. Linda Loaiza estuvo tres meses secuestrada y fue golpeada, violada, quemada, mordida, cortada y drogada. Durante tres años, el caso pasó por 59 jueces. La víctima se puso en huelga de hambre y finalmente una jueza suplente dictó la sentencia al agresor. Por ello es importante que, si ocurre una vez, no calles. Pide ayuda a la línea 0800-MUJERES, ve a la Unidad de Atención a la Víctima de la Fiscalía, a la Defensoría del Pueblo, al CICPC, a CECODAP. También están los jueces de paz, las policías, prefecturas y jefaturas.
Realidad en el Estado Monagas:
En el Estado Monagas funcionan, a través del Instituto Estatal de la Mujer; 120 mesas de igualdad de género distribuidas en los sectores populares de Maturín para canalizar los casos de violencia que se generan en las comunidades.
Las instancias se implementaron en la entidad hace dos años (2008) en respuesta a las denuncias de agresiones que se recibían en el organismo, así lo manifestó Carmen Martínez (Presidenta del Instituto Estatal de la Mujer del Estado Monagas) en una entrevista concedida al Diario "Últimas Noticias" en el marco del Día Internacional de la mujer.
También representan un canal para difundir los alcances de la Ley sobre el Derecho de la mujer a una Vida Libre de Violencia como parte de la campaña que se adelanta, a escala nacional, desde la promulgación de la Ley en 2007. Aunque se le confirió prioridad al Municipio Maturín (700 mil habitantes) por conglomerar la mayoría de los casos, el programa se desarrollará en las restantes 12 jurisdicciones del Estado Monagas.
"Es triste que hayan tanto casos de violencia, pero lo importante de esos reportes es que por fin las mujeres dejaron de callarse y ahora denuncian", informó Carmen Martínez. Aunque en el Estado Monagas es el Estado con el mayor porcentaje de agresiones a escala nacional –no se precisaron los totales- "Se ha podido avanzar en los mecanismos de denuncia y en el rompimiento del miedo que tienen las mujeres a denunciar gracias a las mesas de igualdad de género".
Las integrantes de las mesas se forman como delegadas en sus comunidades y reciben la orientación y capacitación necesaria para prestar ayuda a las víctimas, indicó Katiuska Micer, Defensora del Instituto.
De acuerdo con las estadísticas del organismo, 70% de las denuncias corresponden a violencia psicológica y ofensas verbales. Las agresiones por violencia física representan un 30%.
La zona con más reportes de golpes es Punta de Mata, Temblador, al sur del Estado y Caripito, En el Noroeste de la entidad, puntean en hechos de violencia sexual y en Maturín, la agresión psicológica encabeza los registros. "Cada municipio tiene sus propias características y por ende los casos deben ser tratados de forma diferente".
Cifras.
(5.383) denuncias, casos procesados en el Estado Monagas durante el 2009, 30% corresponden a violencia física y el otro 70% son denuncias de agresiones psicológicas.
(25) casos diarios, es el promedio de denuncias de los primeros dos meses de 2010, supera en 11 a los del 2009, que eran (14).
Casa de Abrigo.
Con el objetivo de que los municipios canalicen las denuncias que se generan en cada jurisdicción, el Instituto Estadal de la Mujer, abrió sedes en Maturín, Santa Bárbara, Libertador, Bolívar y Ezequiel Zamora y se propone hacerlo en las otras ocho (08) jurisdicciones de la entidad.
Para ello trabaja activamente de la mano con los alcaldes. También se logró la aprobación, por parte del Gobernador José Gregorio Briceño, del presupuesto para la construcción y equipamiento de la Casa de Abrigo que está ubicada en Maturín, refirió Carmen Martínez.
La sede recibirá a mujeres que objeto de violencia y cuyas vidas corren peligro. El equipo del Instituto abarca psicólogos, sociólogos, trabajadores sociales y abogados. "Se le brinda atención a la familia en conjunto, incluidos los hombres. No podemos ignorar las secuelas de la situación sobre los niños. Podemos decir que en estas terapias hemos podido recuperar a grupo familiares. Sólo aquellos casos de lesiones son remitidos al Ministerio Público.
Caracas – Distrito Capital
En la Parroquia La Pastora funciona la Oficina de Atención a la Víctima contra la Violencia de Género (creada por Inamujer). Allí se reciben cada mes entre 35 y 40 quejas de violencia doméstica, Según la coordinadota de la Unidad, la Oficial de la Policía Metropolitana, Darcy Méndez. Por lo general, lo que hacen en esa sede es dar apertura a la denuncia, atender a la víctima si requiere acompañamiento, brindar medidas de protección o ayuda psicológica y, si hay flagrancia, detener y poner a la orden de la Fiscalía al presunto agresor para luego remitirlo a la zona 7 de la Policía Metropolitana. Así como está escrito, la tarea resulta fácil; pero la práctica dice otra cosa, según Méndez. Dada la violencia social, la oficina está recibiendo casos de otras jurisdicciones y eso complica la cosa, pues los policías destacados en esa zona no pueden ir tras los maltratadores de Petare o El Valle, por ejemplo, así que sólo les queda la opción de abrir el expediente y guiar a la víctima hasta la Fiscalía para que allí, de nuevo, reciban su caso.
Otra traba con la cual se topan muchas veces es que, cuando la mujer requiere tratamiento psiquiátrico, la remiten a la medicatura forense, donde le dan cita en un lapso de seis meses. "A veces buscamos ayuda en el Psiquiátrico de Lídice, pero como son pacientes judiciales no los aceptan. Aquí hacemos mucho, pero las carencias de operatividad y personal son evidentes. Recientemente se abrió la Fiscalía Municipal en Propatria, con la cual esperamos que se alivie la situación aquí, pero igual no tenemos jurisdicción en ese sector".
Así que el trabajo lo dirigen entonces a la parte preventiva en las escuelas, liceos y en las mismas comunidades: "La idea es llevarles la ley y orientarlos a hacerla cumplir".
A dónde acudir
Denunciar es uno de los pasos que una mujer debe dar cuando es víctima de alguna de las formas de violencia descritas en la Ley Orgánica sobre el Derecho de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia. La denuncia es una herramienta que la víctima tiene para protegerse y exigir que se haga justicia. Sin embargo, las mujeres violentadas necesitan además otro tipo de apoyo, especialmente el psicológico. Ocurre con frecuencia que cuando decidimos denunciar, no tenemos la menor idea de cómo hacerlo ni por dónde comenzar. Los pasos requeridos para formular una denuncia en caso de haber sufrido cualquier forma de violencia contra la mujer contemplada en la Ley, deben ser conocidos por toda la población, y muy especialmente por las mujeres. En primer lugar, debemos tener en cuenta que la denuncia puede ser formulada por la mujer agredida, lógicamente, pero también –y esto es muy importante saberlo- pueden denunciar sus parientes consanguíneos o afines, o el personal de salud de instituciones públicas o privadas (Las Defensorías de la Mujer, los Consejos Comunales, las Organizaciones defensoras de los derechos de las mujeres y en general cualquier persona) que tenga conocimiento de los hechos de violencia.
Lo primero que una mujer maltratada debe tener claro es dónde puede canalizar su denuncia. Las Comisarías policiales a nivel nacional, las sedes fiscales del Instituto Nacional de la Mujer, la Fiscalía General de la República, la Defensoría del Pueblo y las Casas de la Mujer en todo el país, Ministerio Público (Fiscalía), los Juzgados de Paz, Prefecturas o Jefaturas Civiles, la División de Protección en Materia de Niños, Niñas y Adolescentes del Cuerpo de Investigación con competencia en la materia (CICPC), los Cuerpos de Policía Nacional, Estadales y Municipales y los Tribunales de Municipio en localidades donde no existan los organismos anteriormente mencionados. La denuncia se puede formular en forma oral o escrita y con o sin la asistencia de un abogado (a). Se recomienda que la víctima o la persona que conozca de los hechos formulen la denuncia en el órgano receptor más cercano del lugar donde ocurrieron los hechos con la finalidad de agilizar lo correspondiente al proceso legal y la investigación. Es muy importante saber que al momento de hacer la denuncia no es requisito indispensable presentar las pruebas para demostrar el delito, sólo se requiere el reporte de los hechos con la finalidad de que el órgano receptor abra el expediente e inicie el proceso de investigación.
Es fundamental conocer y exigir la puesta en práctica de las medidas que el órgano receptor debe tomar inmediatamente que recibe la denuncia:
1. Imponer las medidas de protección y seguridad contempladas en la Ley para la mujer agredida.
2. Ordenar la realización de los exámenes médicos y diligencias necesarias para el esclarecimiento de los hechos.
3. Dictaminar la comparecencia del presunto agresor a los fines de obtener su declaración y esclarecimiento de los hechos.
4. Armar el expediente y remitirlo al Ministerio Público.
Recuerde que cuando usted formula una denuncia está ejerciendo su derecho; los funcionarios que la atienden tienen la obligación de atenderla adecuadamente y de seguir los pasos que la Ley contempla. ¡Exija el cumplimiento de la Ley, está en su derecho!
Apoyo Psicológico.
Las mujeres violentadas necesitan apoyo psicológico y orientación jurídica. Lamentablemente, la información sobre las instituciones que ofrecen ese tipo de servicio es escasa. Por tal motivo informaremos sobre las instituciones que amparan los derechos de las mujeres en los Estados de Venezuela.
Área Metropolitana de Caracas
FISCALÍA, Unidad de Atención a la Víctima del Ministerio Público, ubicada en la Av. Urdaneta, Esq. de Ánimas. Teléfonos: (0212) 5625737 y 0-800-Fiscal-0 (3472200).
DEFENSORÍA DEL PUEBLO, Tiene un ente especial con competencia nacional de los derechos de la mujer, ubicado en el Centro Financiero Latino, Piso 26, Av. Urdaneta. Teléfono: (0212) 5033185.
CICPC, División en materia de niños, adolescentes, mujer y familia, situada en la Av. Urdaneta, Teléfono: (0212) 564.31.85
CECODAP, Avenida Orinoco con calle Baruta y Chacaíto, Quinta El Papagayo, Bello Monte, Teléfono: (0212) 951.40.79
INSTITUTO NACIONAL DE LA MUJER (Inamujer), Organización gubernamental; asesoría legal y psicosocial. Brinda atención primaria y orientación a través de la línea de ayuda 0-800-Mujeres (6853737) Teléfono: (0212) 860.82.10 – 860.82.19, Página Web: ; e-mail: [email protected].
CASA DE LA MUJER DE CATIA, Organización de la Alcaldía de Libertador; atención psicosocial y jurídica a la mujer víctima de violencia y atención al hombre agresor; Horario de trabajo: Lunes a Viernes de 08:00 a.m a 12:30 p.m y de 1:00 p.m a 4:30 p.m. Teléfonos: (0212) 435.97.40.
INSTITUTO METROPOLITANO DE LA MUJER, Instituto Autónomo de la Alcaldía Metropolitana; asesoría integral, atención a la mujer violentada y consultoría jurídica. Teléfono: (0212) 561.65.63 – 562.59.78, e.mail: [email protected].
CENTRO DE ESTUDIOS DE LA MUJER, de la Universidad Central de Venezuela (CEM – UCV); orientación psicológica y asesoría jurídica a mujeres violentadas. Teléfonos: (0212) 334.54.56 – 693.32.86; Fax: 693.32.86 Página Web: www.ucv.com/cem
ASOCIACIÓN CIVIL DE PLANIFICACIÓN FAMILIAR (PLAFAM), Asociación civil; atención y orientación psicológica en casos de violencia de pareja. Teléfonos: (0212) 693.83.23 – 693.60.32, Fax: (0212) 693.97.57, Página Web: www.plafam.org.ve
ASOCIACIÓN VENEZOLANA PARA UNA EDUCACIÓN SEXUAL ALTERNATIVA (AVESA), Asociación civil; atención y orientación psicológica en casos de violencia de pareja, violencia y abuso sexual. Teléfonos: (0212) 551.02.12 / 551.80.81 / 551.68.54 Fax: (0212) 552.54.10; Página Web: [email protected]; e-mail: www.avesa.org.ve
FUNDACIÓN PARA LA PREVENCIÓN DE LA VIOLENCIA DOMÉSTICA HACIA LA MUJER (FUNDAMUJER), Asociación civil; atención psicológica a mujeres víctimas de violencia vía e-mail. Página web: www.fundamujer.org.ve; e-mail: [email protected]
MOVIMIENTO DE MUJERES MANUELA SÁENZ (MOMUMAS), Asociación civil; asesoría jurídica y atención psicológica a mujeres violentadas. Teléfonos: (0212) 393.42.62 – 286.67.24
CRUZ ROJA VENEZOLANA, Asociación civil; atención psicológica en general. Teléfonos: (0212) 571.22.66 – 571.31.54
UNIDAD DE ATENCIÓN A LA VÍCTIMA DE LA POLICÍA MUNICIPAL DE BARUTA. Teléfonos: (0212) 944.44.11
UNIDAD DE ATENCIÓN A LA VÍCTIMA DE LA POLICÍA MUNICIPAL DE CHACAO. Teléfonos: (0212) 906.00.11
UNIDAD DE ATENCIÓN A LA VÍCTIMA DE LA POLICÍA MUNICIPAL DEL HATILLO. Teléfonos: (0212) 906.00.11
(0800) Mujeres; (0800) Fisca00; Atención los 365 días del año.
SEDES FISCALES DE INAMUJER – Caracas: En el Centro Comercial Propatria, diagonal al Saime, hay una oficina que recibe denuncias en horario de oficina. Igualmente, en La Pastora hay una exclusivamente para habitantes de esa parroquia.
Estado Carabobo:
FUNDACIÓN DE UNIDAD DE BATALLAS SOCIALES (FUNBAS) de Valencia – Estado Carabobo, Organización gubernamental; asesoría jurídica y referencia a Instituciones especializadas. Horario de trabajo: Lunes a Viernes de 08:00 a.m a 12:00 p.m y de 1:00 p.m a 4:00 p.m. Teléfonos: (0416) 738.90.21 – (0426) 542.24.22.
FUNDACIÓN PARA EL AVANCE SOCIAL (FUNDAVANSA): Organización gubernamental; asesoría jurídica y referencia a instituciones especializadas. Horario de trabajo: Lunes a Viernes de 08:00 a.m a 12:00 p.m y de 1:00 p.m a 5:00 p.m. Teléfono: (0242) 364.33.77; e-mail: [email protected].
Estado Delta Amacuro:
INSTITUTO REGIONAL DE LA MUJER (IREMUJER) – Delta Amacuro: Organización gubernamental; asesoría jurídica. Horario de trabajo: Lunes a Viernes de 08:00 a.m a 12:00 p.m y de 2:00 p.m a 5:00 p.m. Teléfono Fax: (0287) 721.61.66.
Estado Guárico:
INSTITUTO DE LA MUJER DEL ESTADO GUÁRICO, Organización gubernamental; asesoría jurídica y orientación psicológica. Horario de trabajo: Lunes a Viernes de 08:00 a.m a 05:00 p.m Teléfono: (0246) 431.54.80; e-mail: [email protected].
FUNDABASTA, asociación civil, asesoría jurídica. Horario según sean fijadas las citas. Teléfono: (0414) 465.22.87; e-mail: [email protected]
Estado Lara:
INSTITUTO REGIONAL DE LA MUJER (IREMUJER) de Lara, Organización gubernamental; asesoría jurídica, atención psicológica, medicina general y ginecológica, orientación en instituciones educativas. Horario de trabajo: Lunes a Viernes de 08:00 a.m a 12:00 p.m y de 1:00 p.m a 4:00 p.m. Teléfono Fax: (0251) 233.32.27
ASOCIACIÓN LARENSE DE PLANIFICACIÓN FAMILIAR (ALAPLAF): Organización no gubernamental; atención médica (gineco obstétrica), planificación familiar, exámenes médicos (mamografías, citologías, etc.), atención psicológica y trabajo con las comunidades. Horario de trabajo: Lunes a Viernes de 07:00 a.m a 12:00 p.m y de 1:00 p.m a 5:00 p.m. Teléfono Fax: (0251) 252.25.14; e-mail: [email protected]
Estado Mérida:
INSTITUTO MERIDEÑO DE LA MUJER Y LA FAMILIA, Organización gubernamental; asesoría jurídica y atención psicológica. Horario de trabajo: Lunes a Jueves de 08:00 a.m a 05:00 p.m, Viernes de 8:00 a.m a 12:00 p.m. Teléfono: (0274) 251.05.73 – Fax: (0274) 251.05.73; e-mail: [email protected]; página web: www.infamerida.gov.ve.
Estado Monagas:
INSTITUTO ESTADAL DE LA MUJER, Organización Gubernamental; atención jurídica. Horario de trabajo: Lunes a Viernes de 08:00 a.m a 12:00 p.m y de 2:00 p.m a 6:00 p.m. Teléfono: (0291) 643.28.23 – Fax: (0291) 643.28.23, e-mail: [email protected]
Estado Amazonas:
FUNDACIÓN MUJER DE AMAZONAS, Asociación civil: asesoría legal y atención ginecológica. Horario de trabajo: Lunes a Viernes de 08:00 a.m a 12:00 p.m y de 2:00 p.m a 5:30 p.m. Teléfono – Fax: (0248) 521.61.45.
Estado Anzoátegui:
FUNDACIÓN DE ATENCIÓN A LA FAMILIA, NIÑO, NIÑA Y ADOLESCENTE (FUNDAFANA), Asociación civil; asesoría jurídica, orientación psicológica y atención a la comunidad. Horario de trabajo: Lunes a Viernes de 08:00 a.m a 12:00 p.m y de 1:00 p.m a 4:00 p.m. Teléfono Fax: (0281) 271.74.09.
Estado Aragua:
INSTITUTO DE LA MUJER DEL ESTADO ARAGUA, Organización gubernamental; asesoría jurídica, orientación psicológica y talleres sobre equidad de género. Horario de trabajo: Lunes a Viernes de 08:00 a.m a 12:00 p.m y de 12:30 p.m a 3:30 p.m Teléfono: (0243) 889.39.15; e-mail: [email protected].
CASA DE LA MUJER JUANA RAMÍREZ (LA AVANZADORA), Asociación civil; asesoría jurídica, orientación psicológica. Horario de trabajo: Lunes a Viernes de 08:00 a.m a 12:00 p.m y de 02:00 p.m a 06:00 p.m Teléfono Fax: (0243) 246.37.96; e-mail: [email protected].
CASA MUNICIPAL DE LA MUJER DE LA VICTORIA – Josefa Palacios de Rivas-, Organización gubernamental; orientación psicológica infantil y de adultos, asesoría jurídica. Horario de trabajo: Lunes a Viernes de 08:00 a.m a 12:00 p.m y de 01:00 p.m a 05:00 p.m Teléfono: (0244) 322.59.29, Extensión: 103; e-mail: [email protected].
Estado Apure:
OFICINA DE ATENCIÓN A LA MUJER, adscrita al Inamujer, Organización gubernamental; orientación y acompañamiento jurídico. Horario de trabajo: Lunes a Viernes de 08:00 a.m a 12:00 p.m y de 02:00 p.m a 05:30 p.m Teléfono: (0426) 520.10.36 – (0416) 610.61.92.
Estado Barinas:
INSTITUTO REGIONAL DE LA MUJER DE BARINAS (Iremujer), Organización gubernamental; talleres para dar a conocer la Ley Orgánica sobre el Derecho de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, talleres de autoestima y programa de radio los miércoles. Horario de trabajo: Lunes a Viernes de 08:00 a.m a 12:00 p.m y de 02:00 p.m a 06:00 p.m Teléfono Fax: (0273) 552.48.12.
Estado Bolívar:
FUNDAMUJER, Asociación civil; atención médica, acompañamiento jurídico y charlas de prevención de la violencia hacia la mujer, Teléfono: (0416) 188.27.55; e.mail: [email protected].
MOVIMIENTO DE MUJERES MANUELA SÁENZ (Momumas), Asociación Civil; talleres de orientación e información sobre la Ley Orgánica sobre el Derecho de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia. Página Web: www.fundamomumas.net.
Estado Portuguesa:
CASA DE LA MUJER ARGELIA LAYA, Asociación civil; asesoría jurídica y orientación psicológica. Horario de trabajo: Lunes a Viernes de 08:00 a.m a 0500 p.m Teléfono: (0257) 808.01.12.
Estado Sucre:
FUNDACIÓN CASA DE LA MUJER LUISA ESTHER LARRAZÁBAL, Asociación civil; servicios jurídicos y sociales. Horario de trabajo: Lunes a Jueves de 09:00 a.m a 11:00 a.m y de 02:00 p.m a 7:00 p.m Teléfono: (0414) 799.57.53.
Estado Táchira:
INSTITUTO TACHIRENSE DE LA MUJER (Inamujer), Organización gubernamental; asesoría jurídica y orientación psicológica. Horario de trabajo: Lunes a Viernes de 08:00 a.m a 12:00 p.m y de 01:00 p.m a 5:00 p.m Teléfono: (0276) 516.56.12.
CRUZ ROJA, Asociación civil; atención médica y psicológica. Horario de trabajo: Lunes a Viernes de 08:00 a.m a 05:00 p.m y Sábados en la mañana. Teléfonos: (0276) 771.33.27- 771.75.66, Fax: (0276) 771.75.66, e-mail: [email protected]
Estado Trujillo:
CENTRO DE INVESTIGACIÓN SOCIAL, FORMACIÓN Y ESTUDIOS DE LA MUJER (CISFEM) – Trujillo, Asociación civil; asesoría jurídica y orientación psicológica. Horario de trabajo: Lunes a Viernes de 08:00 a.m a 12:00 p.m y vía Internet 24 horas, todos los días. Teléfonos: (0271) 244.26.77, Fax: (0271) 244.26.77, e-mail: [email protected]
SERVICIO DE PROTECCIÓN A LA MUJER DEL ESTADO TRUJILLO, INSTITUTO REGIONAL DE LA MUJER (SPAMUJER), Asociación civil; asesoría jurídica y orientación psicológica. Horario de trabajo: Lunes a Viernes de 08:00 a.m a 12:30 p.m y de 1:30 p.m a 5:00 p.m. Teléfonos: (0271) 415.07.27 – (0272) 236.31.36.
Estado Vargas:
INSTITUTO REGIONAL DE LA MUJER DE VARGAS (IREMUJER), Organización gubernamental; asesoría jurídica, fortalecimiento regional en género y empoderamiento socioproductivo en la comunidad. Horario de trabajo: Lunes a Viernes de 08:30 a.m a 12:30 p.m y de 1:30 p.m a 4:30 p.m. Teléfonos: (0212) 613.70.60 – 613.70.70.
Estado Yaracuy:
CASA DE LA MUJER DE YARACUY, Asociación civil; atención jurídica individual y grupal. Horario de trabajo: Lunes a Viernes de 08:00 a.m a 12:00 p.m y de 2:00 p.m a 6:00 p.m. Teléfono Fax: (0254) 231.65.96, e.mail: [email protected]
Estado Zulia:
FUNDACIÓN COMUNIDAD ORGANIZADA PARA LA DEFENSA DE LA MUJER Y LAS FAMILIAS DEL MUNDO (CORDEMUN), Asociación civil; atención jurídica y psicológica. Horario de trabajo: Lunes a Viernes de 08:30 a.m a 05:00 p.m; Teléfonos: (0261) 723.25.86 – 715.79.24 – (0414) 629.29.40 – (0426) 761.67.56; Fax: (0261) 723.25.86, e-mail: [email protected]; [email protected]
RED VENEZOLANA SOBRE LA VIOLENCIA CONTRA LA MUJER (REVIMUD), Asociación civil; atención jurídica y psicológica. Horario de trabajo: Lunes a Viernes de 08:00 a.m a 12:00 p.m y de 02:00 p.m a 6:00 p.m; Teléfonos: (0414) 625.00.88, e-mail: [email protected]; [email protected]
Estado Falcón:
CICPC, Teléfono: (0268) 252.30.12
MINISTERIO PÚBLICO, Teléfono: (0268) 253.00.09
INSTITUTO REGIONAL DE LA MUJER, Teléfono: (0268) 252.57.45
Fuente de información
AVESA, Mercedes Muñoz, e-mail: [email protected] (Articulista del Diario "Últimas Noticias")
Diferentes Artículos del Diario "Últimas Noticias", de los Meses de Marzo a Mayo 2010.
Autor:
Edgar Tovar
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