Las actividades ludicas y su importancia en los niños y niñas de educacion inicial (página 2)
Enviado por dorais blanco
Debe señalarse que, la integración y adaptación del niño o niña a la escuela específicamente al Pre-escolar depende en gran medida del grado de empatía que el docente pueda trasmitir desde el mismo momento que recibe al educando, separado por primera vez del seno familiar, para enfrentar la experiencia de la vida escolar; esa relación docente – alumno que se establece en el nivel de Preescolar esta obviamente marcada por las actividades que programa el educador para "ganar" la atención del alumno.
Es importante observar también que para establecer una relación empática en el aula de clase entre el docente y el alumno en el nivel preescolar, deben darse ciertas condiciones tales como: conocimiento por parte del educador de las características psicológicas, físicas y cognitivas del niño o niña de 3 a 6 años, puesta en práctica las actividades que motiven y capten la atención del infante, además de la buena voluntad del docente para llevarlas a cabo.
En este sentido, la mejor forma de promover una adaptación efectiva del educando al preescolar lo representa la utilización de actividades lúdicas ya que a través de ellas se permite la interacción efectiva del niño o niña con sus compañeros y docentes así como el afianzamiento de normas valores y aprendizajes para fortalecer su desarrollo cognoscitivo motriz y social; es decir, su desarrollo integral.
Por ende, se plantean las actividades lúdicas dado que son inherentes a la etapa de la niñez representan una forma de diversión y un elemento capaz de motivar la adquisición de un aprendizaje tal cual lo plantea Pedagogía y Psicología Infantil (2000) al afirmar:
Los juegos en la actualidad son utilizados en las escuelas como elemento educativo, aun teniendo en cuenta que existen dentro de los programas educativos condiciones y características lúdicas que pueden aportar al alumno un desarrollo motriz, psicológico y social que les permita desarrollar a la vez habilidades que solo a través de la Educación Física se alcanza. (p. 21)
Se desprende de este planteamiento, la importancia que tiene para la conformación psicomotora y social del niño o niña la realización de actividades lúdicas y está la escuela consciente de sus características particulares llamada a proporcionarles a través de las diferentes unidades curriculares.
Específicamente, en el nivel preescolar, ha sido motivo de preocupación del Ministerio de Educación, Cultura y Deportes brindar a los niños y niñas en esta edad la oportunidad de que desde su primer contacto con la escuela, encuentre las mayores posibilidades para el desarrollo de su personalidad y para su integración al sistema escolar en manera de orientarle para intervenir inteligentemente en la dinámica social que le rodea.
Es por eso que, propone a través de sus programas, actividades para satisfacer sus necesidades e intereses propios en cuanto a salud, actividad física, afecto, compresión, participación e integración social, inquietudes, manipulación y creación tomando en cuenta las características propias de la edad preescolar, las cuales el Ministerio Popular para la Educación (2007), hace la siguiente especificación:
El niño de 3 a 6 años: es mucho más ágil, amplia su campo de relación afectiva, usa sus manos en tareas refinadas, inicia la socialización, hace preguntas y emite opiniones, tiene un vocabulario muy amplio, aplica sus conocimientos en la solución de problemas, es capaz de organizar los objetos atendiendo criterio: tamaño, color…, además de que aumenta su autoestima, autonomía y su capacidad para interactuar con los demás. (p. 32)
Es en resumen, el niño y la niña en edad preescolar un ser cargado de emociones, hiperactivo, ansioso de realizar actividades por lo que se hace necesario que el docente tenga a mano herramientas didácticas que satisfagan resultando las actividades lúdicas las más adecuadas al ubicar al educando en su ambiente natural ya que generalmente estos requieren de mucha actividad física, especialmente aquellos que se realizan al aire libre, los cuales, resultan ser sus favoritos porque involucran actividades como correr, saltar, tironear y cualquier otro ejercicio corporal que suponga gran empleo de energía.
Además, de conocer las características del niño o niña, el docente debe estar consciente cuales son las necesidades e intereses de este, de manera que al inducir las actividades lúdicas dentro de la planificación, desarrollo y evaluación de trabajo escolar con el real y claro objetivo de estimular su desarrollo integral, planteamiento que reafirma Pellicciota citada por Zielinski (2000), al señalar: "El juego es un móvil de fundamental importancia en el proceso de evolución infantil; desarrolla sus potencialidades por su ejercitación placentera, espontánea, de expresión de ideas, sentimientos, es elaboración de temores, angustias, es definitiva una actividad creadora". (p. 430)
Hechas estas consideraciones, puede suponerse entonces que el empleo de actividades lúdicas con niños o niñas en edad preescolar, puede de forma efectiva estimular su desarrollo integral, entendiendo este ultimo como el proceso a través del cual el infante supera dificultades, experimenta cambios, adopta posturas, adquiere habilidades y destrezas que van madurándose a través del tiempo por el paso a las subsiguientes etapas de la vida e involucran la interactuación de varios aspectos como lo físico, cognoscitivo, social y lo relacionado a la personalidad, tal como lo plantean Papalia y Wendkos (1999), al referir que estos aspectos: "Se superponen e interactúan a lo largo de la vida, ya que el desarrollo de uno de ellos afecta el desarrollo de los otros". (p. 48) Con lo cual, se infiere que difícilmente pueda asumirse el estudio aislado de uno de ellos sin considerar los otros, más aun cuando se trata del trabajo con niños de preescolar.
Obviamente, que la puesta en práctica de este tipo de actividades, requiera de la buena intención del docente, la adecuada preparación y el fortalecimiento de sus saberes pedagógicos, lo cual se convierte en una vía expedita hacia la consecución exitosa de los objetivos planteados, y ello contempla un real y claro conocimiento escolar para tratar en la medida de lo posible de ofrecer al alumno situaciones reales que le sean familiares y le resulten atractivas.
Del mismo modo, debe el docente tener claro conocimiento cual es el alcance la utilización de actividades lúdicas dentro de la planificación escolar, a tal efecto Woolfolk (1999), plantea:
El juego favorece el desarrollo cognoscitivo en muchas áreas. En el juego con el movimiento, el preescolar llega a conocer la velocidad, el peso, la gravedad, la dirección y el equilibrio. En el juego con objetos se da cuenta de que estos tienen usos y propiedades comunes y apropiadas. En su juego con otros practica los conceptos y roles sociales, aprendiendo además algunos aspectos de su cultura. (p. 85)
Postura con la cual, se evidencian claramente importantes ventajas que favorecen la adquisición de aprendizaje significativo en el infante, a través del juego o actividades lúdicas en el preescolar, los cuales deben ser considerados por el docente al momento de estructurar la planificación de las actividades en el aula de clases.
Es importante señalar, que aun con el conocimiento de la importancia que tiene el juego para un niño o niña en edad preescolar y los efectos positivos que este puede causar al utilizarse con fines pedagógicos en este caso particular para estimular el desarrollo integral de los mismos, no se trata de convertir el aula en una "sala de juegos" sino de aprovechar la siempre favorable disposición del niño hacia las actividades lúdicas para orientar, con base en sus necesidades e intereses individuales, el objetivo propuesto.
Para ello, se hace necesario que el docente conozca que tipo de actividades lúdicas puede desarrollar, al tiempo de también conocer cuáles son aquellas que el educando practica en su cotidianidad y cuales son propias del contexto donde se encuentra inmersa la escuela, para lo cual debe activarse el optimo funcionamiento de la triada escuela-familia–comunidad, con la finalidad de establecer un trabajo mancomunado que permita la puesta en práctica de un modelo educativo, verdaderamente contextualizado, atractivo, integrador, centrado en el niño, además de asegurar la participación de todos los factores relacionados con su formación para la vida y por ende para su desarrollo integral.
Resulta entonces, de trascendental importancia para el docente de educación preescolar asumir con verdadera responsabilidad su papel en la formación del niño o niña en este nivel, dándole la oportunidad de satisfacer sus necesidades e intereses a través de experiencias, situaciones y actividades que le permitan su desarrollo integral, lo preparen para vivir en sociedad y estimulen sus habilidades y potencialidades; cumpliendo así con uno de los principales fines de la educación preescolar establecidos en el Currículo Básico Nacional del Nivel de Educación Inicial (2005), como: "Proveer a los niños con experiencias de naturaleza cognitiva, psicomotriz, lingüística, social y emocional que enriquezcan su vida y faciliten el desarrollo pleno de sus potencialidades en las diversas áreas de su personalidad, así como en los aprendizajes posteriores". (p. 53)
En este sentido, se abre una ventana para consolidar este fin y darle mayor sentido al rol del docente a través de la utilización de las actividades lúdicas ya que como lo expresan Craig, y Woolfolk, (1999), donde el juego satisface muchas necesidades en la vida de un niño: la necesidad de ser estimulado y divertirse, de expresar su exhuberancia natural, de ensayar el cambio por el valor intrínseco de este, de satisfacer su curiosidad, de explora y experimentar en condiciones exentas de riesgo. Cumple además muchas funciones útiles en el desarrollo infantil. Favorece el crecimiento de las capacidades sensoriales y de las habilidades físicas, brindado muchísimas oportunidades de ejercitar y ampliar las capacidades intelectuales recién descubiertas.
Planteamiento con el cual, se ratifica lo expuesto anteriormente creando la expectativa de generar situaciones en las que a través de realización de actividades lúdicas se estimule el desarrollo integral de los niños o niñas del Preescolar con la participación efectiva de los padres, docentes y la comunidad en general para la adecuada contextualización de la planificación escolar que garantice el logro de los objetivos previstos.
Desde comienzos del siglo actual, se ha producido un cambio radical en las actitudes hacia fundamentación teórica. Los juegos como resultado de estudios científicos saben cómo pueden contribuir al desarrollo de un niño o niña. El juego según Montenegro (2000):
Es el medio natural de expresión que utiliza el niño. A través de él expresa sus sentimientos, ideas y su mundo interior, a la vez que establece el contacto con personas y objetos de su entorno, actividad ésta que lo ayudara a comprender e interpretar todo lo que le rodea (p. 62).
Un niño o niña en edad preescolar pasa prácticamente el día ocupado en sus juegos; pero también se encuentra en período en el que ya puede ir adquiriendo una serie de hábitos y destrezas sobre los que se apoyará, más adelante, su escolaridad.
Asimismo, a través del juego va encontrando el niño o niña muchos elementos que estimulan su actividad verbal; la misión del adulto consiste en aprovechar cualquier oportunidad para fomentarlos: invitándole a que, por ejemplo, haga hablar a sus títeres o muñecos, imite conversaciones telefónicas con su pequeño teléfono de juguete, represente la visita del doctor, organice una tienda en la que pueda nombrar los artículos y representar los papeles del vendedor y el comprador, entre otros. Estos juegos de imaginación e imitación estimulan su desarrollo intelectual y su lenguaje para el aprestamiento lector.
A partir de estas actividades coordinadas, la interacción social se desarrolla rápidamente y se vuelve mucho más compleja, de tal manera que desde edades tempranas las interacciones sirven de estructuras básicas de la distribución del tiempo rítmico y recíproco de la comunicación social, permitiendo al infante aprender las primeras reglas de la comunicación.
Al mismo tiempo Piaget, citado por Montenegro (2000), el juego "consiste en respuestas repetidas simplemente por el placer funcional" (p. 308). De igual forma Clapared (S/F), ha tratado de definir el juego a través de interpretaciones variadas a las que ha denominado "teorías sobre el juego", las cuales aportan aspectos significativos en relación a esta actividad infantil, entre las cuales se encuentran: la teoría del descanso o recreación considera el juego como actividad "anti estrees", es decir, liberadora de problemas o descanso. Algo así como recrearse luego de trabajar. La segunda teoría habla del exceso de energía, considera al juego como una actividad empleada por el niño para "quemar energías" que acumula y que no puede liberar en actividades cotidianas.
Del mismo modo, la teoría del ejercicio preparatorio, explica el juego como ejercicio de preparación que hace el niño o niña de manera de ir aislando poco a poco las acciones y actividades propias del adulto; por ejemplo, el juego simbólico con el cual imita al adulto en muchas de sus actividades.
Tipos de Actividades Lúdicas
Desde el punto de vista de esta teoría, el juego es un factor de evolución de la personalidad. La teoría de la autoexpresión encuentra en el juego un modo de manifestar necesidades que buscan ser satisfechas. El permitiría la liberación de tendencias antisociales.
Dentro de ese mismo orden de ideas, según Matos (2002), existen tres tipos de juegos entre los cuales se encuentran en primer lugar los juegos de actitudes; los cuales son todos aquellas actividades que realiza el individuo a través de ejercicios físicos, generan un desgaste de energía, este tipo de juego es común durante los primeros dos años de vida ya que son juegos libres y espontáneos, los niños o niñas los realizan cada vez que les provoca, de manera libre, sin reglas, ni reglamentos. Es considerada una etapa exploratoria y mientras dura, los niños adquieren conocimientos sobre su entorno e influyen en el desarrollo de su ingenio y su iniciativa.
También, están presentes los juegos de dramatización donde además de representar a las personas en la vida real o en los medios de comunicación, se ponen de manifiesto la capacidad de fantasía en la cual los niños adoptan papeles dramáticos, heroicas, fantásticas y alejados de la vida real. Incluso se presentan los amigos imaginarios o relativos exagerados de situaciones vividas por ellos.
Este tipo de juegos puede ser reproductivo o productivo, y se le conoce como creativo, ya que estimula su imaginación y su creatividad. La duración de esta etapa varía en cada niño, pero puede ubicarse hasta finales de su vida preescolar. Sin embargo existe otro tipo de juego el activo que puede ubicarse en esta misma etapa de crecimiento es el denominado juego constructivo, el cual no es sino alrededor de los 5 a los 6 años de edad, que él utiliza los materiales de forma específica y apropiadas para fines establecidos por él.
También estimulan la imaginación y la creatividad del niño o niña. Una de las actividades que más le gusta son aquellas relacionadas con la música, que puede ser considerada como un juego activo dependiendo de cómo se utilice. Se considera activo cuando él interviene cantando, tocando un instrumento o cuando utiliza la música como complemento de otro tipo de juego activo; también puede ser considerada reproductiva, cuando los niños cantan, bailan y repiten las palabras enseñadas y productivas, cuando inventa sus propias palabras para las canciones conocidas por él, o les crea su música o nuevos pasos de bailes.
En tercer lugar, están los juegos pasivos; se pueden definir como todas aquellas actividades consideradas diversiones, en las cuales los niños invierten un mínimo de energía y por lo general pueden realizarlas solos. El observa a otros jugar, ver la televisión, leer tiras cómicas o jugar con los equipos electrónicos modernos, pueden producir el mismo placer que aquellos en los que se invierte mayor consumo de energía, contribuyen al desarrollo intelectual al tener que concentrarse, razonar y recordar, propiciando la creatividad y la motivación.
Con referencia a los juegos estos producen contribuciones importantes para las buenas adaptaciones personales y sociales de los niños, le permite relajarse cuando están solos y fomentan la socialización en actividades grupales. A todas las edades, los niños o niñas se dedican tanto a los juegos activos como pasivos, y el tiempo que le dedican a cada uno depende de la salud de los mismos, del placer que le proporciona, del momento en el que aprenden los juegos y del interés, que en ellos despierte.
El cuarto lugar lo ocupan los juegos cooperativos y competitivos, se puede definir el juego cooperativo, cuando la naturaleza del objeto del juego, es la suma de los logros de los objetos individuales de cada integrante del juego; mientras que un juego competitivo, la naturaleza del objetivo de este, es el logro de un objetivo individual, se priva el logro de los objetivos de los demás es excluyente debido a que el éxito de uno es el fracaso de otros.
Contribuciones de las Actividades Lúdicas
Dentro de ese mismo enfoque, entre las contribuciones de las actividades lúdicas el desarrollo de los niños y niñas según Hurlock (2000), desarrollo físico: El juego es esencial para que los mismos desarrollen sus músculos y ejerciten todas las partes de sus cuerpos. También actúa como salida para la energía en exceso, que se acumula, hace que los niños estén tensos, nerviosos e irritables.
En cuanto, al fomento de las comunicaciones: el jugar adecuadamente con otros exige que los niños aprendan a comunicarse con ellos, a su vez, tienen que aprender a comprender lo que otros tratan de comunicarles. De igual forma es una salida para la energía emocional acumulada el juego les proporciona a los niños una salida para que liberen las tensiones que ejerce el ambiente sobre su conducta.
Por otra parte, el mismo autor, precisa que los juegos cooperativos coadyuvan a la expansión para las necesidades y los deseos: que no se pueden cumplir satisfactoriamente en otras formas, se satisfacen a veces en los juegos. Es una fuente de aprendizaje ya que el juego ofrece oportunidades para aprender muchas cosas; por medio de libros, la televisión o la exploración del ambiente que los niños o niñas no tendrían oportunidad de aprender en el hogar o la escuela. En este mismo orden es un estímulo para la creatividad, pues mediante la experimentación de los juegos, los mismos descubren que al crear algo nuevo y distinto puede ser satisfactorio.
Conviene anotar que, en los juegos los niños o niñas descubren cuáles son sus capacidades y cómo se comparan con los de sus compañeros de juegos mediante su desarrollo aprenden a ser sociables; al jugar con otros, los pequeños aprenden a establecer relaciones sociales y a satisfacer y resolver los problemas que causan dichas relaciones. Con respecto a las normas morales aun cuando los niños y niñas aprenden en el hogar y en la escuela lo que el grupo considera como correcto e incorrecto, la aplicación de las normas morales no es en ninguna parte tan rígida como en un grupo de juegos.
Del mismo modo, contribuyen al aprendizaje de papeles sexuales apropiados: los niños o niñas descubren, en el hogar y la escuela, cuáles son los papeles sexuales aprobados. Sin embargo, se dan cuenta muy pronto de que deben aceptarlos también para convertirse en miembros del grupo de juegos. A partir de su ejecución se desarrollan rasgos convenientes de personalidad mediante los contactos con los miembros del grupo de coetáneos en los juegos, los mismos aprenden a ser cooperativos, generosos, sinceros, a tener un buen espíritu deportivo y a mostrarse agradables para otras personas.
Dentro de este mismo enfoque, la autora precitada señala las etapas en el desarrollo de las actividades lúdicas como sigue a continuación: hasta que los bebés tienen cerca de tres meses de edad, sus juegos consisten primordialmente en mirar a las personas y los objetos y hacer intentos aleatorios para agarrar los que se les presentan. A partir de entonces, sus manos y sus brazos tienen suficiente control voluntarios para permitirles aferrar, sostener y examinar objetos pequeños. Después de que puedan arrastrarse, gatear o caminar, examinar todo lo que se encuentre a su alcance
En esta perspectiva, la etapa de los juguetes: el manejo de juguetes comienza en el primer año y llega al punto culminante entre los cinco y seis años de edad. Al principio, los niños o niñas se limitan a explorar sus juguetes. Entre los dos y tres años, se imaginan que los juguetes poseen cualidades vitales: que pueden actuar, hablar y sentir. A medida que los mismos se van desarrollando intelectualmente, ya no pueden atribuir a los objetos animados cualidades de la vida y esto hace que se reduzca su interés por los juguetes. Otro factor que contribuye a la disminución de los juegos con juguetes es que quieren compañía. Después de entrar a la escuela, la mayoría de los infantes consideran los juegos como "juegos para bebés".
Por otra parte, la etapa de los juegos. Después de que los niños o niñas entran a la escuela su repertorio de juegos aumenta considerablemente, lo que le da a esta etapa el nombre. Al principio, sigue utilizando juguetes, sobre todo cuando están solos y, a demás, se interesan en juegos, deportes, aficiones y otras formas más maduras de juegos y por último la etapa de la fantasía. Conforme ellos se acercan a pubertad, comienza a partir interés por las actividades de juegos que les agradaban anteriormente y dedicaban gran parte de su tiempo ocioso a soñar despierto. Los sueños característicos de los mismos en la pubertad son de tipo el mártir, en los que consideran que todos los maltratan y nadie los entiende.
Por eso, es importante implementar una variedad de juegos en que todos los participantes puedan ser aceptados y experimentar, al menos, un grado moderado de éxito; el miedo al fracaso junto con la angustia y la frustración asociada con el fracaso se reducen cuando los errores no son percibidos como determinantes del resultado.
Rol del Educador
Fernández y otros (2000), resume el rol del educador respecto a las actividades lúdicas en las siguientes funciones: preparar el ambiente adecuado para que los niños o niñas jueguen, es vital la creación de espacios y tiempos para jugar como una de las tareas más importantes del educador. Para que ellos se puedan concentrar en el juego necesitan tener la seguridad de que no van a ser avasallados por otros, posiblemente mayores o que están realizando juegos que requieren más movilidad. Por ello, el docente deberá preparar el espacio de forma que los juegos sedentarios, los que requieran mayor concentración en ellos, se puedan realizar sin ser interrumpidos por los que están jugando de forma turbulenta.
Igualmente, deberá dar salida a la necesidad de juegos expansivos y de movimiento de los niños y niñas, sin que ello signifique molestar o interrumpir a los otros. Lo mejor es disponer de espacio organizado y suficiente para permitir las diferentes formas de juego sin necesidad de que ellos se interfieran.
Por otra parte, el educador tiene que seleccionar materiales adecuados para el juego, saber cúales son los materiales adecuados a la edad y necesidades de los niños y niñas. Debe conseguir que su grupo tenga material suficiente tanto en cantidad como en diversidad, de que están hechos, por la actividad que promueven en los infantes, por el interés que provocan, por su atractivo, por su diseño, entre otros. Debe tener en cuenta, además, si en el grupo hay alguno con necesidades educativas especiales, de forma que tenga que incorporar algún material complementario.
En este mismo orden, enseñar determinados juegos, especialmente los tradicionales, puede ser función tanto de la familia como del centro de preescolar. Con los más pequeños, inicialmente es el educador el que inicia el juego, mientras el niño o niña participa de una forma más o menos activa. Paulatinamente y con la repetición de los juegos, será el infante el que solicite el juego al educador y el que vaya tomando una postura cada vez más activa en el juego. Igualmente, el docente enseñará las canciones que acompañan los distintos juegos tradicionales, entre otros, como el gato y el ratón, la señorita, la gallina ciega.
Resulta oportuno, hablar sobre permitir que los niños o niñas repitan sus juegos todas las veces que lo deseen, porque ellos disfrutan repitiendo los juegos que conocen bien, les da seguridad sentirse cada vez con más destreza, saber cómo tienen que responder o lo que esperan del otro. Por ello, el educador no impedirá la repetición del juego. Incluso muchas veces, antes de incorporar uno nuevo, deben repetirse los ya conocidos con el fin de que él se sienta seguro y animado en el nuevo aprendizaje.
En este sentido, se ha de enriquecer los juegos de los niños o niñas, si bien el educador puede permanecer junto a ellos mientras juegan, sin necesidad de interferir en sus juegos, una observación atenta de los mismos le puede indicar el interés de su participación para enriquecerlo, introduciendo nuevos personajes, o situaciones que hagan el juego más rico, más interesante para los infantes. No se debe olvidar, que gran parte de los juegos de los infantes están relacionados con sus experiencias. En la medida en que el educador enriquece sus experiencias favorece el enriquecimiento del juego. Por ejemplo: después de ir en autobús a un parque o a un zoológico, se puede relacionar los juegos con las actividades realizadas, para que así permanezcan nuevos personajes que han conocido en su excursión e incluso nuevas formas de expresión que han escuchado y nuevas acciones sobre objetos o animales que antes no conocían.
También, es necesario reconocer y valorar los juegos que realizan los niños o niñas, o sea, el educador estará atento a los juegos espontáneos de los escolares, apoyándoles, interesándose por ellos, animándoles en su esfuerzo y reconociendo las producciones a que pueden dar lugar. Por otro lado, evitar la competencia, el educador evitará siempre y por todos los medios la competencia. Para que ellos salten o corran no es necesario estimularlos con frases como "a ver quién llega primero". Ellos se alientan en la carrera o en la actividad en la medida en que ésta corresponde a sus intereses. De igual forma, en los juegos no habrá nunca perdedores ni ganadores, siendo éste el principio de los juegos no competitivos.
En esa misma vertiente, el docente ayudará a resolver los conflictos que surgen durante él. Es frecuente que durante los momentos de juego surjan entre los niños pequeños conflictos, normalmente porque desean jugar con el mismo material. Cuando hay escasez de materiales los conflictos son mucho más frecuentes; por ello, el docente debe procurar resolverlos enseñando a los niños o niñas a llegar a acuerdos, a negociar y a compartir.
De igual manera, respetar las preferencias de cada uno. A través del juego, cada niño o niña va a tener oportunidad de expresar sus intereses, sus necesidades y preferencias. El papel del educador será proporcionar a las mismas nuevas oportunidades y nuevos materiales que enriquezcan sus juegos, pero respetando los intereses y necesidades del niño, de forma que nunca se forzará a un infante a realizar un juego determinado o a participar en un juego colectivo.
Por otro lado, no reproducir los papeles sexistas. Los niños y niñas expresan a través de sus juegos gran parte de los usos sociales que han tenido oportunidad de conocer. El juego es, además, un medio extraordinario para la identidad y diferenciación personal; sin embargo, el docente debe ser extremadamente sensible y cuidadoso para no reproducir a través de sus valoraciones, los papeles sexistas tradicionales. En este sentido, fomentará la posibilidad de que ellos jueguen juntos, de que elijan libremente sus juegos, y evitará expresiones como "los varones no juegan a…" o "eso no es propio de una niña", estimulando y favoreciendo el crecimiento y la identidad tanto de los niños como de las niñas.
Por ello necesita observar el juego de los niños o niñas, para poder seguir la evolución de los mismos, sus nuevas adquisiciones, las relaciones con sus compañeros, con los adultos, su comportamiento. Para esto, lo mejor será que elabore una guía de observación que le facilite esta labor. Por último, fomentar en las familias de los mismos el interés por el juego, interesarse por los juegos que realicen en casa. El docente conocedor de la situación de la familia actual y de la necesidad de juego de los infantes, deberá sensibilizar a los padres sobre la importancia que este elemento tiene en el marco familiar. Jugar con sus hijos e hijas permite a las familiar establecer un medio de comunicación privilegiado. Por ello, se deben establecer los medios oportunos para esta actividad. Igualmente, podrá orientarlos sobre la adquisición de juguetes para los pequeños, a fin de que eviten caer en los usos consumistas frecuentemente opuestos a los intereses de los infantes.
Bases Legales
En nivel de Educación Preescolar o Inicial, primer eslabón en el sistema educativo venezolano, establece de manera clara los fines a lograr en esta importante etapa que recibe a los niños y niñas desde los 3 a 6 años en base previa al nivel de Educación Básica, a tales efectos La Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (1999) en el Capítulo VI de los Derechos Culturales y Educativos en su Artículo 102 expresa que " La educación es un derecho humano y un deber social fundamental, es democrática, gratuita y obligatoria. El estado le asumirá como función indeclinable y de máximo interés en todos sus niveles y modalidades" (P.44).
Artículo 103: "toda persona tiene derecho a una educación integral, de calidad permanente, en igualdad de condiciones, sin más limitaciones que las derivadas de sus aptitudes, vocaciones y aspiraciones" (P. 44).
Del mismo modo, la Ley Orgánica de Educación (2009), en el Capítulo I de las competencias del estado docente, el artículo 06 indica que: "El derecho pleno a una educación integral, permanente, continúa y de calidad para todos y todas con equidad de género en igualdad de condiciones y oportunidades, derechos y deberes". (P. 5). Por otro lado, en cuanto a deporte y recreación el artículo 16 acota que el estado tiene la potestad de estimular e impulsar estas dos áreas, sin desligarse de la concordancia con lo previsto en las legislaciones especiales.
Mientras que, la Ley Orgánica de Protección al Niño y al Adolescente (1998), en el capítulo II, derechos garantías y deberes, los artículos 63 y 64, hacen referencia al derecho de descanso, recreación, esparcimiento, deporte y juego, y que el estado debe garantizar la creación y conservación de espacios e instalaciones públicas dirigidas a ese fin.
Razones que dejan en evidencia la responsabilidad de tomar por quienes tienen a su cargo orientar el desarrollar en este nivel de manera más determinante la que debe asumir el docente en esta etapa en cuanto a poner en práctica actividades y estrategias capaces de garantizar el logro de estos objetivos.
De la misma manera, la Ley Orgánica para la Protección del Niño y del Adolescente (1998), en su Artículo N° 63 establece que todos los niños y adolescentes tienen derecho al descanso, recreación y esparcimiento deporte y juego. Donde en el Parágrafo Segundo, menciona que, el estado con la activa participación de la sociedad debe garantizar programas de recreación, esparcimiento y juegos deportivos dirigidos a todos los niños y adolescentes. Estos programas deben satisfacer las diferentes necesidades e intereses de los niños y adolescentes, y fomentar especialmente los juguetes y juegos tradicionales vinculados con la cultura nacional, así como otros que sean creativos o pedagógicos.
De allí que, la planificación y ejecución de actividades que promuevan el desarrollo integral del niño de preescolar están respaldadas por toda una estructura jurídica que considera la atención especial de este aspecto desde la escuela.
Le corresponde entonces al docente tener la mejor voluntad, poner su mayor esfuerzo, prepararse permanente de manera de poder ofrecer a los infantes el ambiente y las experiencias necesarias para alcanzar una sólida formación para la vida, desde temprana edad, y a través de las actividades lúdicas tiene ante si, una oportunidad atractiva, favorecedora y cargada de contenidos pedagógicos, capaz de consolidar aprendizajes trascendentales, perdurables y significativos.
TERMINOS BÁSICOS
Acicate: espuela con solo una punta de hierro. Estimulo, incentivo. Incitar, estimular.
Antítesis: Oposición entre dos palabras o expresiones que manifiestan ideas contrarias. Persona o cosa opuesta a la otra.
Apertura: Acción de abrir. Acto de dar o volver a dar principio a las funciones de una asamblea, teatro, escuela, entre otros. Tendencia favorable a la aceptación o comprensión de ideas o actitudes más avanzadas que las vigentes. En ciertos juegos, principio de una partida.
Apetencia: Gana de comer. Ansia o gana de algo, anhelo.
Autosuficiencia: Calidad de autosuficiente. Suficiencia presunción.
Autosuficiente: Dícese de la persona o entidad que se basta a sí misma. Suficiente, que habla o actúa con suficiencia o presunción.
Cardinal: Principal, fundamental. Numero que expresa cantidad, como uno, dos, tres, cuatro, entre otros; número que expresa la potencia de un conjunto. Los cuatro puntos de referencia que permiten orientarse: norte, sur, este, oeste. La prudencia, justicia, fortaleza y templanza.
Cardiovascular: es el movimiento de la sangre por arterias y venas causado por las pulsaciones del corazón, donde no hay buen funcionamiento de las venas.
Catártico: Palabra con la que Aristóteles designa el efecto de purificación producido en los espectadores por una representación dramática. Método psicoterapéutico que se basa en la descarga emotiva, ligada a la exteriorización del recuerdo de acontecimientos traumatizantes y reprimidos.
Congénita: Conjunto de caracteres con el que los que nace un individuo, ya sean normales o patológicos. Se aplica tanto a los genéticamente determinados (caracteres hereditarios), como a los adquiridos durante su desarrollo en el útero. En este sentido, el término congénito se considera como sinónimo de innato.
Exuberante: Abundante, desbordante, desarrollado en exceso. Vegetación exuberante.
Fisiológico: Relativo a la fisiología. Ciencia que trata de las funciones orgánicas por medio de las cuales se manifiesta la vida y que aseguran el mantenimiento de la vida individual.
Flácido: Blando, flojo y carente de tersura.
Globalización: Es uno de los posibles caminos que permitirá construir el aprendizaje, y se traduce en un aprendizaje que no se lleva a cabo por una simple adición o acumulación de nuevos elementos a la estructura cognitiva del alumno. Supone la búsqueda y profundización de las relaciones que es posible establecer alrededor de un tema o las áreas curriculares
Hipersecreción: Secreción superior a la normal.
Instinto: Impulso natural, intuición, sentimiento espontáneo. Determinante hereditario del comportamiento de la especie: instinto reproductor. Por instinto, por impulso o propensión maquinal e indeliberada.
Ludoteca: Lugar en el que se pueden obtener juguetes y otros materiales en régimen de préstamo y en donde se puede jugar por mediación directa del jugote y con la posibilidad de ayuda de un ludotecario u animador especializado. Las ludotecas infantiles son instituciones recreativo-culturales especialmente pensadas para los niños y adolescentes que tiene como primera misión desarrollar la personalidad a través del juego y del juguete
Motriz: Movimiento como consecuencia de la capacidad de acostarse y alargarse que poseen las estructuras histológicas especializadas llamadas fibras musculares.
Neuromuscular: Lo referente al nervio y al músculo. El uso ha consagrado este término para adjetivar la placa motora (región del sarcolema donde se establece la sinapsis con la fibra nerviosa) como unión neuromuscular.
Nocivo: dañoso, perjudicial. Influencia nociva de algo malo.
Parangón: Comparación, expresión de la semejanza o de la igualdad entre dos cosas. Figura retórica que consiste en comparar dos términos de diferente categoría y naturaleza que guardan entre sí una semejanza metafórica.
Percepción: Una configuración de carácter organizativo, por el que se constituye una representación de una forma, ya sea visual, acústica, otras. Esto diferencia la percepción de otros procesos cognitivos, como el pensamiento, que tiene más bien un carácter simbólico.
Placentero: Estado satisfactorio derivado de la consecución de un deseo, la eliminación/reducción de una necesidad o el logro de un objetivo. El placer suele ir unido al alivio de la tensión y a la tendencia a conservar ese estado.
Potencialidades: energía que posee un cuerpo, fuerza, potencia de la que se pude disponer. Cantidad de energía liberable que tiene almacenado un cuerpo.
Proezas: Hazaña, acción valerosa o heroica.
Tedioso: Que produce tedio. Aburrimiento, fastidio, estado de ánimo en que se siente hastío.
Trascendental: De gran importancia por sus probables consecuencias. Que se refiere a las condiciones a priori del conocimiento, fuera de toda determinación empírica.
Cuadro 1 Sistema de Variables
Objetivo General Establecer la importancia de las actividades lúdicas en los niños y niñas de Educación Inicial.
Fuente: Blanco Dorais, Escalante Anyeli. (2010)
CAPITULO III
Marco metodológico
Tipo y Diseño de la Investigación
La investigación sobre las actividades lúdicas en los niños y niñas de educación inicial, se ubica en un estudio de campo de naturaleza descriptiva y ejecutada dentro de un enfoque cuantitativo. Es una investigación de campo según la Universidad Pedagógica Experimental Libertador (2003):
El análisis sistemático de problemas en la realidad, con el propósito bien sea de describirlos, interpretarlos, entender su naturaleza y factores constituyentes, explicar sus causas y efectos, o predecir su ocurrencia, haciendo usos de métodos característicos de cualquiera de los paradigmas y enfoques de investigación conocidos o en desarrollo. (p. 5).
Asimismo, es de tipo descriptivo, tal como lo señala Hernández, Fernández y Baptista (2003), al establecer: "Los estudios de tipo descriptivo buscan especificar propiedades importantes de las personas, grupos, comunidades o cualquier otro fenómeno que sea sometido a análisis". (p. 60). Estos autores permiten interferir para este caso particular, que se busca establecer la importancia de las actividades lúdicas en los niños y niñas de educación inicial. De igual modo, es cuantitativa porque los datos serán tratados de forma numérica.
Población y Muestra
La población, es considerada como el conjunto de individuos o elementos a investigar. En tal sentido, Bussot (1999), define a la población como: "un conjunto de elementos o eventos afines con una o con más características tomadas como una totalidad y sobre la cual se generalizan las conclusiones de la población…" (p. 114). En virtud de obtener el mayor grado de confiabilidad se toma toda la población por ser finita, es decir, muy reducida.
En cuanto a la muestra que es la cantidad de elementos a participar en la investigación según Ary (1999), la define como: "…una parte de la población, donde se hacen observaciones sobre un pequeño grupo y luego los resultados se generalizan a la población total…". (p. 135). Para el conocimiento y el posterior análisis de los resultados, se tomó como muestra los ocho (8) docentes que laboran en un preescolar del municipio San Cristóbal, con las siguientes características, género femenino, edades comprendidas entre 20 y 45 años y con diferentes grados de instrucción universitaria.
Técnicas e Instrumentos de Recolección de Datos
La técnica que se utilizó para la recolección de los datos, fue el cuestionario elegido por considerarse el más apropiado, según los objetivos de la investigación y definido según Trujillo (2000), como: "un formato que contiene un conjunto de preguntas, referentes a los aspectos y hechos que desean investigar para su contestación escrita por los correspondientes seleccionados". (p. 77). También se puede decir, que es un instrumento de recolección de datos que contiene una lista de preguntas, para ser respondidas en forma escrita y destinado a ser llenada por el informante, sin la presencia de un entrevistador.
En su construcción, se usó la escala de tipo Likert, la cual consiste, según Hernández y otros (2003), en "Un conjunto de ítems presentados en forma de afirmación o juicios, ante los cuales se pide reacción de los sujetos, es decir, se presenta cada afirmación y se pide al sujeto que externe su reacción eligiendo uno de los puntos de escala". (p. 256).
De igual forma el instrumento realizado se construyó con un total de veinte y cinco (25) ítemes con tres (3) opciones de respuesta: casi siempre, algunas veces y casi nunca, ofreciendo de esta forma diferentes alternativas, mediante las cuales se estableció la importancia de las actividades lúdicas en los niños y niñas de educación inicial; el instrumento contenía instrucciones precisas para su contestación y se consideró invalidado a quien marcó dos o más opciones ya que cada una de ellas tenía asignado un valor numérico.
Para administrar el instrumento elaborado se solicitó la colaboración a los docentes de preescolar tomados como muestra, proporcionándoles de manera clara el objetivo de la investigación. Al aplicar el cuestionario se comprobó con anterioridad que las instrucciones y los ítemes presentados fueron bien comprendidos y posteriormente se recogieron para ser analizados. (Anexo 1).
Validación y Confiabilidad
Toda medición o instrumento de recolección de datos debe reunir dos requisitos esenciales: Confiabilidad y Validez. Definida la confiabilidad de un instrumento de medición según los autores Hernández, Fernández y Baptista (2003), como "el grado en que su aplicación repetida al mismo sujeto u objeto, produce iguales resultados" (p.242). Porque la confiabilidad de un instrumento de medición se determina mediante diferentes técnicas. Mientras que la validez, en términos generales de acuerdo a los autores precitados "se refiere al grado en que un instrumento realmente mide la variable que pretende medir" (p.243).
Tabulación de Datos
Una vez recolectados los datos mediante el instrumento, se llevó a cabo el análisis e interpretación de las respuestas obtenidas, las cuales fueron vaciadas en una matriz de doble entrada, donde en su eje horizontal se registran los porcentajes de respuestas a las alternativas casi siempre, algunas veces y casi nunca y en el vertical los veinte y cinco (25) ítemes correspondientes al cuestionario aplicado, con el fin de especificar para cada docente el porcentaje de opciones marcadas como respuestas según su propio criterio.
Luego se totalizan las respuestas de los sujetos en estudio para cada uno de los ítems la formula:
Donde F es la frecuencia con que se marca cada opción de respuesta multiplicada por 100 y dividida entre el número de los sujetos en estudio. Con base a los resultados se procedió a elaborar un cuadro descriptivo de la variable, en forma porcentual, para posteriormente realizar el análisis e interpretación de los resultados.
CAPÍTULO IV
Análisis de los resultados
Procesamiento y Análisis de los Datos
En este punto se reflejan los datos obtenidos después de aplicar el instrumento de recolección de información, cuyo fin esencial fue determinar la importancia de las actividades lúdicas en niños y niñas de educación inicial. El presente análisis e interpretación de resultados se realizo con el propósito de ofrecer una información cuantitativa, clara y precisa con respecto a las dos variables que constituyen la investigación.
Para ello se ofrecen tres (3) cuadros con relación a tres (3) dimensiones y sus correspondientes indicadores, donde se muestran en forma conceptual, las respuestas que dadas al cuestionario de la muestra de estudio, para enriquecer el capítulo se elaboró un total de tres (3) gráficos de barras que reflejan la suma de las alternativas presentadas. Con relación a cada cuadro se elaboro el análisis e interpretación de la información recopilada de allí se originaron las conclusiones y recomendaciones pertinentes.
Análisis de la Variable Actividades Lúdicas
Dimensión Tipos de Actividades Lúdicas
Siguiendo con el análisis, se presenta la primera dimensión tipos de actividades lúdicas con sus cuatro (4) indicadores evaluando a través de ocho (8) ítemes como lo muestra el siguiente cuadro.
Cuadro N° 2
Distribución de frecuencia de los ítemes relacionados con la primera dimensión tipos de actividades lúdicas y sus correspondientes indicadores.
Fuente: Cuestionario aplicado a docentes
Nota: D: docentes, CS: casi siempre, AV: algunas veces, CN: casi nunca.
Con respecto a la variable actividades lúdicas y su dimensión tipos, se observa que un 5% casi nunca le ofrece la oportunidad a sus escolares de realizar actividades lúdicas mediante ejercicios, mientras que un 37,5% algunas veces emplea ejercicios de actividades y el restante 12,5% casi siempre brinda la oportunidad a sus escolares de realizar actividades lúdicas.
Sin embargo, un 62,5% casi nunca ejecutan actividades lúdicas de actividades sin reglas, un 25% casi siempre acotó realizarlo de la misma forma y un 12,5% algunas veces indica realizar actividades lúdicas sin reglas. Dentro de este mismo orden de ideas, según Matos (2002), los juegos de actividades son todas aquellas actividades que realiza el individuo a través de ejercicios físicos generan un desgaste de energía.
Entre tanto, para el indicador de la dramatización el 75% de los docentes señalan casi nunca practican sus educandos actividades lúdicas donde además de representar personas ponen de manifiesto su fantasía, otro 12,5% algunas veces manifestó emplear representaciones y otro 12,5% casi siempre realizan dramatizaciones como herramientas lúdicas en niños y niñas de edad preescolar.
Con respecto, al ítem número 16 el 100% casi nunca propicia oportunidades a sus alumnos para presentar mediante actividades lúdicas situaciones vividas por ellos, 0% algunas veces y el 0% casi siempre. Según el autor citado, la dramatización, no solamente es representar e imitar a las personas en la vida real, allí se ponen de manifiesto la fantasía e incluso se presentan amigos imaginarios.
De acuerdo, con la información recopilada para las actividades lúdicas de expresión plástica, con el fin de fomentar el razonamiento en el niño y niña de edad preescolar, así mismo un 25% indica algunas veces y un 25% restante casi siempre emplea actividades lúdicas como herramienta de enseñanza.
Por el otro lado el indicador pasivo señala un 37,5% casi siempre estimula a sus alumnos mediante la lectura de cuentos cortos como actividades lúdicas pasiva y un 37,5% casi nunca estimula a sus educandos mientras que un 25% algunas veces realiza lecturas pasivas-cortas.
Según el autor Matos (2002), las actividades lúdicas pasivas son todas aquellas actividades consideradas diversiones en los cuales los niños y niñas invierten un mínimo de energía y por lo general pueden realizarlas solos, las mismas contribuyen al desarrollo intelectual al concentrarse, razonar y recordar propiciando la creatividad y la motivación.
El indicador juego cooperativo, señala que un 50% casi nunca es relevante el uso de actividades lúdicas donde prevalece la cooperación, otro 50% piensa que algunas veces es necesario realizar actividades cooperativas y un 0% casi siempre utiliza este indicador.
Al examinar el ítem número 20, se puede observar un 62,5% casi nunca piensa que el acontecimiento de los niños con la naturaleza es un recurso lúdico cooperativo, un 37,5% señaló algunas veces, es fundamental el acercamiento con la naturaleza y un 0% señaló casi siempre. Entre tanto el autor señala las actividades lúdicas cooperativas cuando la naturaleza del objeto es la suma de los logros de los objetos individuales de cada integrante.
Gráfico 1
Distribución de Frecuencia para la variable actividades lúdicas su dimensión tipos de las mismas y sus indicadores.
Nota: CS: casi siempre, AV: algunas veces, CN: casi nunca.
Fuente: Cuestionario aplicado a Docentes
Correspondiendo a los resultados del gráfico expuesto, es importante recalcar, que una gran mayoría de las respuestas dadas por la muestra, se ubica en la alternativa casi nunca, situación que evidencia la falta de utilización de las actividades lúdicas como herramienta, puesto que no se realizan las mismas para fomentar en el niño o niña sus actitudes espontáneas, dramatizaciones, cooperación y la implementación de juegos pasivos.
Dimensión Contribución de las Actividades Lúdicas
Esta variable generó dos dimensiones, la primera hace referencia a la contribución de las actividades lúdicas desarrollándose mediante la misma un total de seis (6) indicadores. El cuadro número tres (3) refleja los resultados de las contribuciones de las actividades lúdicas y sus indicadores.
Cuadro Nº 3
Distribución de frecuencia de los ítemes relacionados con la contribución de las actividades lúdicas y los correspondientes indicadores.
Fuente: Cuestionario aplicado a docentes
Nota: D: docentes, CS: casi siempre, AV: algunas veces, CN: casi nunca.
Para el indicador desarrollo corporal, se observa en su primer ítem que los docentes encuestados el 75% algunas veces considera esencial las actividades lúdicas en el desarrollo físico para los niños y niñas en edad preescolar, aunque el 12% respondió que casi nunca considera esencial las actividades lúdicas en el desarrollo corporal y otro 12,5% de los encuestados respondieron casi siempre le da valor a las actividades lúdicas en el desarrollo corporal.
En el segundo ítem, se observa que 75% respondió algunas veces, utiliza actividades lúdicas donde los niños ejercitan el desarrollo físico, un 12,5 % casi nunca y un 12,5% casi siempre utiliza actividades lúdicas como medio para el desarrollo corporal, es decir la mitad de la muestra no considera de vital importancia este tipo de juegos para que los niños y niñas ejerciten todas las partes de su cuerpo y en cierta medida den salida a su exceso de energía, según Hurlock (2000), expresa en primer lugar las actividades lúdicas como todas aquellas actividades que realiza el individuo a través de ejercicio físico, generando un desgaste de energía favorable para el niño y niña en edad de preescolar.
De igual forma, para el indicador fomento de comunicación el 50% algunas veces cree que las actividades lúdicas sirven para fomentar la comunicación, entre tanto el 25% casi nunca utiliza las actividades lúdicas como una estrategia para fomentar la comunicación en el ámbito escolar, mientras que un 25% se ubico en la alternativa casi siempre utiliza actividades lúdicas para fortalecer la comunicación entre los pequeños.
En el ítems siguiente, brinda a los educandos mediante las actividades lúdicas la oportunidad de dialogar entre ellos un 75 % respondió casi nunca, brinda la oportunidad de comunicarse, un 12,5% algunas veces y un 12,5% casi siempre, según el autor antes citado aclara que las actividades lúdicas contribuyen a fomentar las comunicaciones entre los niños y niñas en edad preescolar, de igual forma es una salida para la energía emocional acumulada, ayuda para que libere las tensiones que ejerce el ambiente sobre la conducta.
Por otro lado, para el indicador de expansión de necesidades y deseos el 62,5% de los sujetos de estudio, casi nunca piensan que las actividades lúdicas contribuyen a expandir las necesidades del niño y niña en edad preescolar, así mismo un 25% algunas veces cree que este tipo de herramienta lúdica ofrece oportunidades en la expansión de las necesidades del escolar y el 12,5% restante opino casi siempre es satisfactorio contribuir a expandir las necesidades.
Con respecto al ítem número 6, un 87,5 % contesto casi nunca permite a sus educandos mediante actividades lúdicas expresar sus deseos, un 12,5 % cree algunas veces es necesario darle la oportunidad de dialogar y un 0% casi siempre, contribuyen las actividades lúdicas a expandir deseos y necesidades. Por otra parte, el mismo autor precisa que las actividades lúdicas coadyuvan a la expansión para las necesidades y los deseos que no se pueden cumplir satisfactoriamente en otras formas.
También para el indicador fuente de aprendizaje se observa que el 62,5% de los docentes casi nunca las actividades lúdicas son fuente de aprendizaje. De igual manera, un 50% casi nunca ofrece un ambiente adecuado donde se utilizan las actividades lúdicas para adquirir competencias, entre tanto un 37,5% de los mismos opinó algunas veces y el restante 12,5% expreso casi siempre brindan un ambiente adecuado para adquirir competencias.
Dentro de esta misma idea, la autora Hurlock (2000), expresa que las actividades lúdicas son una fuente de aprendizaje ya que ofrece oportunidades para aprender muchas cosas por medio de libros, la televisión o la exploración de los ambientes de aprendizajes en el hogar y en la escuela.
Por otra parte, en lo que respecta al indicador estímulo para la creatividad, el 62,5% se ubico entre las alternativas, casi nunca considera las actividades lúdicas como un recurso para estimular la creatividad en los niños y niñas en su aula, mientras que 25% ratifico algunas veces las actividades lúdicas estimula la creatividad y el 12,5 % restante indico casi siempre utiliza las actividades lúdicas para estimular la creatividad.
Con respecto al ítem número 10 se observa que un 87,5% de docentes encuestados, casi nunca proponen actividades lúdicas par que los niños y niñas creen cosas nuevas, mediante el uso de herramientas lúdicas y un 12,5% algunas veces proponen actividades lúdicas para crear cosas nuevas y un 0% casi siempre, esto no solo limita a creatividad, es una herramienta de enseñanza en niños y niñas en edad preescolar. Según Hurlock (2000), el juego como herramienta lúdica es un estimulo para la creatividad, pues al experimentar las mismas, los niños y niñas descubren crear algo nuevo y distinto que puede ser satisfactorio.
Igualmente con respecto al indicador socialización el 62,5% indico que casi nunca las actividades lúdicas son importantes para el niño socializarse, un 25% algunas veces refuerza las relaciones sociales y un 12,5% casi siempre refuerzan la socialización en los niños y niñas en edad preescolar.
De igual forma el ítemes número 12 refleja que un 75% casi nunca en el nivel preescolar se utilizan actividades lúdicas con la finalidad que los niños y niñas establezcan relaciones, un 12,5% algunas veces y el otro 12,5% casi siempre emplean actividades lúdicas como entes socializadores. Según el autor antes mencionado, mediante herramientas lúdicas los niños descubren sus capacidades y como se comparan con los de sus compañeros de juego mediante su desarrollo aprenden a ser sociales.
Estos estudios conducen a señalar que los docentes en estudio restan importancia las contribuciones de las actividades lúdicas como herramienta de enseñanza en niños y niñas de edad preescolar, ellos conduce a no utilizarlos, como estrategias para el desarrollo corporal, comunicación, expansión de necesidades, creatividad y algo vital como los aprendizajes y la socialización.
Gráfico 2
Distribución de Frecuencia para la variable actividades lúdicas su dimensión contribuciones de las mismas y sus indicadores.
Nota: CS: casi siempre, AV: algunas veces, CN: casi nunca.
Fuente: Cuestionario aplicado a Docentes
El anterior gráfico refleja, que más de la mitad de la muestra seleccionada, opinó que casi nunca las actividades lúdicas contribuyen a la comunicación, la socialización, las relaciones interpersonales, y por ende, sean fuente de aprendizaje.
Dimensión Rol del Educador
En la presente dimensión, se establecieron un total de cinco (5) indicadores: preparar el ambiente, selección de materiales adecuados, enseñar determinados juegos, enriquecer los mismos y respetar las diferencias, evaluados a través de cinco (5) ítemes, como se muestra en el cuadro 3.
Cuadro 4
Distribución de frecuencia de los ítemes relacionados con la dimensión rol del educador y sus correspondientes indicadores.
Fuente: Cuestionario aplicado a docentes
Nota: D: docentes, CS: casi siempre, AV: algunas veces, CN: casi nunca.
Esta dimensión, en cuanto al indicador ambiente adecuado, de acuerdo a los resultados obtenidos en el cuadro anterior se observa que el 50% de las respuestas indica que algunas veces crean los educadores un ambiente adecuado cuando realizan actividades lúdicas, el 25% restante opinó que casi siempre lo hacen, esto puede ser debido a falta de recursos o espacios físicos acordes.
En cuanto al indicador selección de materiales, el 37.5% de los encuestados consideró que casi siempre es importante la selección de materiales por parte del docente cuando el niño va a jugar, mientras que el otro 62.5% opinó que algunas veces se realiza la selección de ese material y el 0% de la muestra objetó que casi nunca se elige material para el juego del niño lo que limita la utilización de material adecuado para cada tipo de juego en particular.
En tanto, para el indicador de enseñanza de juego, un 37.5% de los educadores considera que algunas veces es necesario la recuperación de los juegos tradicionales y el otro 50% acotó que casi siempre es importante la enseñanza de los juegos tradicionales como un factor que va a coadyuvar en el rescate de nuestra cultura, el 12.5% restante se ubicó en la alternativa casi nunca.
Igualmente, al hacer referencia al indicador enriquecer los juegos un porcentaje muy alto de los docentes, el 25% expresó que casi siempre motiva a los alumnos a introducir nuevos personajes para realizar los juegos más variados, mientras que un 25% de los docentes encuestados casi nunca enriquece los juegos de los niños con elementos que puedan desmotivar y no fomentar el gusto por las actividades lúdicas; y un 50% sólo algunas veces.
De acuerdo con el indicador respetar las diferencias de los niños, los resultados reflejan que un 75% de la muestra algunas veces alienta a los escolares a jugar en función de sus intereses, el otro 12.5% expresó que casi siempre estimula a sus niños a favor que realicen actividades lúdicas que le gusten verdaderamente y el 12.5% restante respondió que casi nunca, razón ésta que lleva a pensar que este tipo de docentes impone su propio punto de vista.
Gráfico 3
Distribución de frecuencia de los ítemes relacionados con la dimensión rol del educador y sus correspondientes indicadores
Fuente: Cuestionario aplicado a docentes
Nota: CS: casi siempre, AV: algunas veces, CN: casi nunca.
De acuerdo al gráfico anterior, se evidencia que sólo algunas veces los maestros de la Educación Inicial, ejercen efectivamente su rol con respecto a preparar el ambiente, selección de materiales, juegos tradiciones y respeto hacia los niños y niñas por sus preferencias en cuanto a los juegos.
Conclusiones
De los resultados obtenidos mediante la aplicación del instrumento se llego a las siguientes conclusiones
Una gran mayoría de los docentes encuestados cree que las actividades lúdicas solo algunas veces son importantes para el desarrollo físico.
Por otra parte el porcentaje más elevado de las respuestas refleja que algunas veces los docentes utilizan actividades lúdicas para que los niños y niñas ejerciten el desarrollo físico.
Un número apreciable de docentes recalco que las actividades lúdicas sirven para fomentar la comunicación entre los niños y niñas de edad preescolar
Así mismo una gran mayoría respondió que casi nunca brinda oportunidades a los niños y niñas para comunicarse
Por otro lado un porcentaje de los encuestados piensan que casi nunca las actividades lúdicas contribuyen a la expansión de necesidades
Con respecto al as actividades lúdicas para crear cosas nuevas un gran porcentaje de docentes expresaron que casi nunca proponen dichas actividades
De la misma manera los docentes señalan que casi nunca realizan actividades de dramatización para poner en manifiesto la fantasía de cada uno de ellos
En la misma vertiente en su totalidad los docentes expresan que casi nunca propician actividades a sus alumnos para representar mediante actividades lúdicas sus experiencias vividas
Por otra parte, dentro de la función del educador, se determina que no ofrecen un ambiente adecuado y una buena selección de materiales para realizar las actividades lúdicas, probablemente por falta de espacios físicos amplios y escasos conocimientos de una relación estrecha entre lo que se juega y con qué se realizan los juegos.
Recomendaciones
Con base a las conclusiones elaboradas a las conclusiones elaboradas es factible realizar las siguientes recomendaciones dirigidas a docentes
Utilizar las actividades lúdicas con el fin de lograr el desarrollo físico en el niño y niña en edad preescolar
Así mismo las actividades lúdicas sonde vital importancia pues contribuye a facilitar la comunicación entre los niños, niñas y adultos
Se deben ofrecer oportunidades para comunicarse a través de actividades lúdicas
Las actividades lúdicas son una herramienta útil para la adquisición de competencias ya que actúa como una experiencia importante de aprendizaje y no como un juego no significativo
Por otro lado las actividades lúdicas favorece la expansión de necesidades y deseos que los niños reprimen dentro de su entorno familiar
Incentivar a los niños y niñas a crear cosas nuevas a través de actividades lúdicas
Se invita al docente a respetar las producciones de los niños y niñas en situaciones espontáneas tanto individuales como grupales y emplear las actividades lúdicas como una herramienta.
Se invita al docente a respetar las producciones de los niños y niñas en situaciones espontáneas tanto individuales como grupales y emplear las actividades lúdicas como una herramienta.
Igualmente las actividades lúdicas, dan al niño la oportunidad de obtener conocimientos y desarrollar el poder de observación.
Referencias
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Anexos
Anexo 1
INSTRUCCIONES PARA RESPONDER EL CUESTIONARIO
1. No necesita escribir su nombre.
2. Téngase la bondad de leer bien cada pregunta y sus diferentes alternativas, correspondientes a una escala de Likert con 3 alternativas de respuesta: Casi siempre, Algunas veces y Casi nunca.
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