El solitario "Cotopaxi" fue el reducto en el cual sobrevivió el ideal naval, el espíritu de una institución que se negó a desaparecer a pesar de las adversas circunstancias que la rodeaban. Es en esta época en la que se preparó la tragedia de 1941.
1935, siendo Presidente de la República el patriota e insigne ecuatoriano, doctor José María Velasco Ibarra, quien desde los primeros momentos de su gobierno, se preocupó del fortalecimiento de las Fuerzas Armadas, la Marina de Guerra adquirió un buque que sin ser de guerra, era adecuado para su transformación como tal, construido en Inglaterra como caza submarinos, al finalizar la primera guerra mundial, fue vendido al millonario americano Vandervilt, quien lo transformó en un yate de lujo y fue en esas condiciones que pasó a poder de la Armada ecuatoriana. La compra de este buque no constituyó un principio de la reconstrucción de un poder de combate de nuestra Marina, aunque si en otros aspectos, pues luego de su acondicionamiento como Buque – Escuela en Talcahuano, sirvió eficientemente en la preparación de varias generaciones de Oficiales Navales como el primer buque bautizado como "Presidente Alfaro".
La afirmación de que los gobiernos de aquella época se despreocuparon temerariamente de mantener un Poder Militar necesario a la Seguridad Externa del Estado; pero se debe aclarar que dentro de la Institución Naval y algunos jefes del Ejército como el General Thelmo Paz y Miño y el entonces Coronel Luis Larrea Alba, si existió constante preocupación por esta situación de indefensión de nuestra frontera marítima. el Coronel en reserva, don Víctor Emilio Estrada publicó un estudio sobre esta materia, así como el TNFG Manuel Alomía dictó, en el Círculo Militar de Quito, una conferencia sobre la necesidad de crear un Poder Naval, intervención que mereció favorables comentarios; pero todo fue inútil para que los gobiernos se preocupasen de remediar esta situación hasta que finalmente llegó el trágico y aciago año de 1941, en el que la Fuerza Naval no existía, pues los únicos buques de una incipiente Marina eran: "Presidente Alfaro", cañonero "Calderón" y aviso "Atahualpa".
Los acontecimientos de 1941 son ampliamente conocidos, pero referente al Combate Naval de Jambelí debo decir que fue un triunfo moral de nuestros marinos de la época, táctico también, pero que no tuvo ninguna significación estratégica, pues un triunfo táctico que no puede ser explotado después no contribuye al desenlace exitoso de una guerra y Jambelí fue el canto del cisne para la Armada, pues no se aprovecho aquella coyuntura de triunfo.
1941, se reabre la Escuela Naval en forma definitiva y permanente; primero como parte del Colegio Militar "Eloy Alfaro" en Quito (en el lugar que hoy es el Ministerio de Defensa Nacional), y posteriormente en la Base Naval de Salinas, una vez que fue desocupada por los Norteamericanos.
SEP-1941, el Presidente Carlos Arroyo del Río procedió a reorganizar el Mando Naval reincorporando al servicio activo al Capitán de Navío Juan Francisco Anda y Maldonado, a quien nombró Comandante General de Marina, cuya sede fue la ciudad de Quito; y, al Capitán de Fragata César Mogollón C, quien pasó a ocupar la Comandancia de la Marina con sede en la ciudad de Guayaquil.
Paralelamente, se emprende un plan para organizar una Fuerza Naval que garantice la integridad de nuestro mar territorial, se crean Escuelas de Formación de Oficiales y Tripulantes y se sugiere la adquisición de buques de guerra, ya que hasta esa fecha, la historia nos habla de adquisiciones de buques de transportes de bienes del Estado como era el transporte de sal que lo producía y comercializaba el Estanco; o para paseo, a los cuales se les adaptaba cañones para convertirlos en buques de guerra; incluso en algunas ocasiones con tripulaciones extranjeras.
28-ENE-1941, se emprenden los cambios, ya que en esta fecha, la Misión Naval de los Estados Unidos de Norteamérica, se establece definitivamente en el Ecuador, y lo hace con la intención de organizar una Fuerza Operativa con buques y personal entrenados para la defensa del país.
23-FEB-1942, el Comandante General de Marina CPNV Juan Francisco Anda, solicita al Ministerio de Defensa, una serie de necesidades "perentorias e indispensables para la Marina de Guerra y la defensa marítima del país; solicitud que comprendía la provisión de buques de guerra modernos y otros requerimientos.
En cuanto a los buques, éstos nunca llegaron, al menos en las condiciones que se los requería, sino únicamente algunos yates que durante la II Guerra Mundial fueron adaptados para la guerra. Se puede concluir que es a partir de esta época, el inicio del gran desarrollo Institucional.
Al amparo del Convenio firmado con los Estados Unidos, éstos entregaron a nuestro país los buques "9 de Octubre", "10 de Agosto" y "5 de Junio", que sumados a los ya existentes, determinó la creación de la Jefatura de Escuadrilla, inicio de lo que hoy es la Comandancia de la Escuadra Naval.
Desde la creación de la Comandancia de la Marina en Guayaquil, que funcionó en el edificio de la Gobernación de la Provincia del Guayas, calles Clemente Ballén y Malecón, donde además funcionó posteriormente la Primera Zona Naval y la Dirección General de la Marina Mercante y del Litoral.
Luego, la Armada creó las Zonas Navales y el Comando de la Primera Zona Naval pasó al edificio que se encuentra actualmente y que perteneció a la Escuela de Especialidades de la Armada, ubicado en las calles 5 de Junio y Cañar, junto al parque de la Armada. La Escuela de Especialidades se trasladó a la Base Naval de Salinas.
La Escuela de Grumetes
14-MAR-1933, mediante Decreto Ejecutivo No. 193, del Presidente de la República, doctor Juan de Dios Martínez Mera y bajo el Comando General de Marina de Teodoro Morán Valverde se crea la "Escuela de Grumetes", para la Formación de Tripulantes de la Armada del Ecuador.
31-AGO-1935, el Ecuador adquirió el yate "ARA", bautizándole como Buque Escuela "Presidente Alfaro", donde comenzó a funcionar la Escuela de Grumetes.
1945, se reanudan los cursos en el Buque "10 de Agosto", el mismo que posteriormente fue denominado "Manabí" donde permaneció por un año la Escuela de Grumetes, para continuar nuevamente en el Buque Escuela "Presidente Alfaro", hasta el año 1950.
02-MAR-1952, la Escuela de Grumetes pasa a funcionar en Salinas, siendo Comandante el CPFG Ramón Albán Semanate.
31-DIC-1967, por cambios en la estructura orgánica de la Armada, la Escuela de Grumetes pasa a constituirse como Centro de Reclutamiento Naval.
18-FEB-1971, se fusiona con la Escuela de Especialidades que también es trasladada a Salinas, dando origen al Centro de Instrucción Naval, constituyéndose éste en el primer Centro de Formación Técnica para el Personal de la Armada.
1979, se fusiona lo que orgánicamente constituía el "Centro de Instrucción Naval" y la "Base Naval de Salinas" (BASALI) y se conforma la "Base Naval de Entrenamiento" (BASENT).
1987, se crea el "Centro de Formación Naval" (CENFOR), mirando el proceso de transformación debido principalmente a la creación e implementación por parte de la Armada, de la Escuela de Perfeccionamiento de Tripulantes en la ciudad de Guayaquil.
1992, retoma su nombre inicial de Escuela de Grumetes (ESGRUM), nombre con el cual cumple su función hasta la presente fecha en el interior de la Base Naval de Salinas.
10-ENE-1996, se le asigna el nombre de "Contramaestre Juan Suárez", en memoria del insigne marino que por cinco décadas sirvió en forma abnegada, leal, valiosa y honrada en las cálidas cubiertas de los buques de Guerra de la Armada.
En la actualidad, la Escuela de Grumetes Contramaestre "Juan Suárez", se forman los Bachilleres, quienes durante el primer año de estudios y entrenamiento militar, obtienen el grado de Marineros. Luego de aprobar el segundo año obtienen el título de Técnico Superior. Posteriormente, pasan a formar parte del "Centro Tecnológico Naval" (CETNAV), que funciona en Guayaquil, completar el tercer año de preparación y obtener el título de Tecnólogo en las siguientes Especialidades: Electrónica, Electricidad, Mecánica, Ciencias Navales, Sanidad, Administración e Informática. Además se reclutan ciudadanos con preparación en servicios varios en diferentes especialidades de acuerdo a las necesidades de la Institución.
Factores influyentes en el desarrollo de la Armada
Presencia de los americanos en el Ecuador
DIC-1941, durante la Segunda Guerra Mundial, cuando Japón atacó la Base norteamericana de Pearl Harbor en el Pacífico, los Estados Unidos buscaron el apoyo del Ecuador para la defensa continental. Se firma un Convenio mediante el cual Ecuador cede al Gobierno norteamericano el área de la Puntilla en Salinas e islas Baltra y Seymour. Se asentaron bases aeronavales norteamericanas para la defensa, especialmente de Japón que se pensaba podría realizar un ataque por este sector del continente. Entre otras consideraciones, Ecuador recibiría a cambio, entrenamiento del personal y entrega de material para la modernización de la Marina de Guerra Ecuatoriana.
ABR-1942, se inicia la construcción de la Base de Salinas, la cual fue terminada a mediados de 1943. Se construyeron tanques para almacenar combustible, con una casa de bombeo y tuberías enterradas para el transporte de los combustibles, estación de radio, un muelle de pontones y una rampa de concreto para los hidroaviones.
SEP-1942, en la Base Aeronaval de Galápagos, en la isla Baltra comenzó la construcción de varios tanques para almacenar diesel y gasolina de aviación, aceite de petróleo para mover los aparatos eléctricos, así como otras instalaciones, estación de radio y de bombeo para los combustibles y sus respectivas cañerías.
La Base de Salinas estaba destinada a la Terminal Sur del Arco de Patrullaje del Pacífico. Sus fuerzas aumentaron desde unos 60 Marinos hasta llegar a 700, durante los dos años de trabajo. Se escogió el área de Salinas por la característica natural de sus playas, en forma semi-circular, lo que forma una bahía de aguas mansas y poco profundas, óptima para el amarizaje de sus aviones.
En la Base de Salinas, funcionaba el aeropuerto, con una torre de control y un aerofaro, para vigilar el movimiento de los aviones militares. La Armada contaba con un Oficial y siete Marineros, en una pequeña estación de radio.
MAY-1944, las actividades aéreas cesaron, dejando tan solo una unidad para reaprovisionar en caso de emergencia. Posteriormente se realizó la evacuación total.
JUN-1944, la base fue desmantelada y la maquinaria, abastecimientos, provisiones, equipos y el personal evacuados. Todo el equipo, refrigeradores y generadores dejaron en estado de preservación. Empacaron y cargaron a bordo 3.000 toneladas de equipos, maquinarias, abastecimientos que fueron retornados por los Constructores Navales "Seabees" o Abejas Marinas, legendario Escuadrón que intervino durante la Segunda Guerra Mundial.
JUL-1944, la Base de Salinas aún en poder de los norteamericanos, fue diseñada para servir como un Destacamento Aeronaval y como una Base Aérea del Ejército. Los pocos hombres que se quedaron debían realizar servicios de emergencia, estaban equipados con servicios de comunicaciones, médicos y de comedor.
FEB-1946, los Estados Unidos de América, entregaron su jurisdicción sobre la "Base Naval de Salinas", entregando todas sus instalaciones permanentes para ser usadas por la Marina de Guerra de Ecuador. Meses después fue entregada la Base Aeronaval de Baltra.
Los convenios con la Armada de los Estados Unidos, inciden determinantemente en la estructura clásica de nuestra Institución con formación inglesa. La Misión Naval Americana dotada de amplios poderes, emprende un agresivo plan de cambios, tanto en la doctrina como en la estructura física, llegándose inclusive a cambiar los uniformes. Se ejecutaron nuevos programas de estudio con toda clase de ayudas a la instrucción como películas, textos, fotografías, mapas, etc., lo que permitió muy pronto lograr el entrenamiento en las aulas y cumplir con los períodos de prácticas en la mar.
A partir de estas fechas se cambiaron los uniformes y las insignias de Oficiales y Tripulantes. Se realizaron cambios importantes en la instrucción de las Escuelas de Oficiales y Tripulantes, al aplicar su doctrina en todas las especialidades. En cuanto a los Oficiales de la Armada que antiguamente eran de dos clases: Ejecutivos e Ingenieros pasaron a ser Únicos y se cambió la denominación de algunos grados.
Necesidad de reorganizar las Fuerzas Armadas del Ecuador
27-FEB-1942, una vez restablecido el país de la invasión peruana y firmar el Protocolo de Río de Janeiro, mientras los países del mundo se encontraban en plena Segunda Guerra Mundial, se determina la necesidad de reorganizar las Fuerzas Armadas del Ecuador para evitar una nueva aventura de conquista del Perú.
La Armada hasta esas fechas había permanecido subordinada a la entonces IV Zona Militar, con sede en Guayaquil cuyo Jefe era además Comandante de la Marina (un Coronel del Ejército)
09-AGO-1944, mediante Decreto Legislativo No. 766, firmado por el doctor José María Velasco Ibarra, la Marina logró obtener su independencia administrativa y económica, funcionando como Subsecretaría de Marina.
26-JUL-1944, se organiza con su propio Comando General de Marina, cargo que lo inició el Capitán de Fragata José Alberto Sánchez López. Cabe recordar que el cargo de Comandante General de Marina, se denominó anteriormente: Director General de la Armada, (01-DIC-1927); y, Jefe del Departamento de Marina del Ministerio de Guerra y Marina, hasta el 03-SEP-1941.
El Combate Naval de Malpelo
20-MAY-1828, en circunstancias en que los nuevos Estados libres de América aún no se encontraban definitivamente estructurados, el Perú inició una serie de acciones militares en contra de Colombia (Ecuador no existía aún como República) reclamando para sí el derecho sobre las zonas australes o del sur, incluyendo la ciudad de Guayaquil. Fue así que, mientras el Mariscal La Mar avanzaba con sus tropas por el interior, hacia Cuenca, la corbeta peruana "Libertad", capitaneada por el Comandante Póstigo, inició un mal disimulado bloqueo al golfo de Guayaquil.
Advertido de la situación, el General Juan José Flores, desde Cuenca, ordenó al General Juan Illingworth, Intendente de Guayaquil, que adopte las medidas necesarias para romper el bloqueo y proteger a la ciudad. Illingworth llamó entonces al CPNV Tomás Carlos Wrigth y le encomendó salir inmediatamente al encuentro del invasor, para lo cual fueron armadas las corbetas "Guayaquileña" y "Gracia del Guayas", "Adela" y "Pichincha".
Estas naves pelearon duramente contra los bloqueadores sureños; nuestros marinos y soldados infligieron fuertes pérdidas a la Escuadra del Perú, entre estas, la muerte del Almirante Guise, Comandante en Jefe, victima de uno de nuestros cañones.
31-AGO-1828, a la altura de "Punta Malpelo", cerca de Tumbes, Wrigth avistó a la nave peruana, se acercó para exigir las explicaciones sobre su presencia en aguas de Colombia, siendo respondidos por parte de la nave peruana con el fuego de los cañones. Ante la inesperada y traicionera acción, Wrigth ordenó amarrar la "Pichincha" a la "Libertad", y desde la "Guayaquileña", a pesar de que la nave peruana tenía el doble de su calado y el triple de sus cañones, inició un intenso cañoneo al tiempo que pasaba con sus hombres al abordaje.
En medio del fragor del combate estalló en la "Guayaquileña" un gran incendio, circunstancia que fue aprovechada por los peruanos para iniciar la huida, mientras la tripulación de la nave siniestrada intentaba apagar el fuego. La "Guayaquileña" sufrió tremendas averías, y al terminar el combate, de una tripulación total de 96 hombres, tuvo 60 bajas entre muertos y heridos.
entre los sobrevivientes de esta heroica jornada estuvieron: el ALNV José María Urbina, de 18 años de edad y el joven Guardiamarina Francisco Robles, quienes posteriormente llegarían a ostentar el grado de Generales y Presidentes de la República, así como también, Luis de Tola, quien años más tarde sería Obispo Auxiliar de Guayaquil.
Sin duda se llevaron a cabo hechos heroicos propios de la fuerte resistencia en nuestra ría de Guayaquil. La fragata "Colombia" fue enviada por el Libertador Bolívar en enero-1830, por motivo del conflicto, aunque tarde, pues éste había concluido.
El Combate Naval de Jambelí
Los mares han sido siempre el escenario de las grandes transformaciones de las Naciones, por eso todos los pueblos, miran hacia la inmensidad de los mares en busca de nuevos horizontes.
El hecho de que esta acción naval, llevada a cabo entre un buque de nuestra Armada y uno de la Marina de Guerra del Perú, el día 25-JUL-1941, haya sido escogida como referencia histórica de gran trascendencia para instaurarla como el "DIA DE LA MARINA DE GUERRA DEL ECUADOR", obliga a realzar los pormenores de este Combate en base a documentos históricos como lo es el informe del propio Comandante de la Unidad Ecuatoriana.
24-JUL-1941, Guayaquil vivía emotivos momentos de patriotismo. Las notas de los himnos marciales invadían la ciudad y las estaciones de radio, sin aplicar en absoluto ninguna norma de seguridad, arengaba a los valientes hijos de Guayaquil que integrando el contingente de 500 guardias nacionales marchaban a la frontera.
La cantidad de detalles que se divulgaban, relevaba al Perú de la necesidad de conseguir información con sus propios medios, pues, el sintonizar una radio de Guayaquil les permitía conocer con lujo de detalles todo lo que se hacía en el ingenuo Ecuador, pues no existía ningún tipo de censura de prensa, vital en estos casos de conflictos bélicos.
En un ambiente intranquilo pero de mucho patriotismo, la superioridad naval dispuso que el cañonero "Calderón" escolte un convoy de embarcaciones de cabotaje hacia Puerto Bolívar, en la ya invadida provincia de El Oro, a un grupo de compatriotas que deseaban defender nuestra heredad territorial, y además trasportar las vituallas para los combatientes.
Así tenemos que el cañonero "Calderón" zarpó de Guayaquil el 242303-JUL- 1941, desde el muelle fiscal No. 7, con destino a Puerto Bolívar convoyando a tres embarcaciones de tráfico nacional:
Motonave "Olmedo"
Motonave "La Pinta"
Motonave "Deisy Edith"; y,
Cañonero "CALDERÓN", como escolta.
En las tres motonaves viajaban repartidos proporcionalmente 500 Guardias Nacionales, armados con fusiles, pero sin munición, pues se suponía que los 600.000 cartuchos que se transportaba, servirían para entregar la dotación a cada uno de los Guardias Nacionales.
Luego de una noche tensa y larga, en las primeras horas del 25, el convoy arriba a Puerto Bolívar y los Guardias Nacionales bajaban a tierra y a la vez ayudaban a desembarcar las camionetas y la munición, para luego ponerlas en el tren que esperaba en la estación, frente al muelle.
La travesía se realizó sin novedad y la unidad fondeó en Puerto Bolívar a las 250838-JUL-1941. Terminado el desembarco, el convoy emprendió el retorno a Guayaquil. A las 10:25 horas cuando los motoveleros que habían sido convoyados por el "Calderón", terminaron el desembarco, se da la alarma de incursión aérea, por lo cual, para tener campo de maniobra, el Comandante decide levar anclas y zarpar hacia el golfo a través del Canal de Jambelí. Luego el informe dice textualmente:
En procura de transmitir siempre la verdad histórica, recurriré al informe sobre el Combate Naval de Jambelí que el Comandante Rafael Morán Valverde presentó a la Superior Naval y trascrito en el Anexo "C" de este trabajo.
"A las 11:15 horas cuando nos encontrábamos navegando con rumbo Norte y a una distancia aproximadamente de 3 millas del faro de Jambelí, el vigía anunció la presencia de un buque a la cuadra del babor y que navegaba con proa hacia el buque de mi mando, como también el humo de varios buques que se presume en el resto de la Escuadra peruana. En este instante el personal se preparaba para ejercicios de artillería. El buque avistado visiblemente aumentó su andar, cambiando varias veces de rumbo y con manifiestas intenciones de cortar nuestra proa. Cuando el buque se acercó más, se le reconoció ser un destroyer de bandera peruana por lo cual ordené caer a estribor cambiando 180º el rumbo. Simultáneamente del enemigo también cayó a estribor navegando luego con rumbo paralelo al nuestro. A las 11:25 horas se ordena zafarrancho de combate y a las11:30 horas el enemigo rompe los fuegos con un cañón de proa. Al verse el fogonazo del primer disparo se ordena fuego, repeliendo al primer momento con un nutrido fuego de nuestra artillería. El combate se prolongó hasta las 11:46 horas, instante en el que nos ocultamos del enemigo tras la boca de Jambelí".
A pesar de que la contienda fue absolutamente desigual el "Calderón" no sufrió daño alguno, no así el destructor peruano" Almirante Villar" que recibió un impacto en la popa y varios en la superestructura. El Comandante del "Calderón", CPFG Rafael Morán Valverde dice en su informe: "es mi obligación hacer conocer la heroicidad con que combatió la tripulación que en todo momento supo cumplir con su deber; como también la deficiencia absoluta del material, pues de las pocas cargas que llevamos, solo respondieron el 30%. "También hago conocer a Ud., para que a su vez informe a la Superioridad, la eficiente y valerosa cooperación del personal del Grupo Antiaéreo que presta servicios en esta unidad".
La labor del "Calderón" no terminó allí, pues una vez que fondeó en Puerto Bolívar a las 13:42 la Unidad rompió fuegos contra dos aviones enemigos que trataban de atacar al buque, los mismos que huyeron después de 15 minutos de nutrido fuego de artillería antiaérea. En espera de los aviones enemigos la unidad permaneció en continuo movimiento frente a Puerto Bolívar hasta las 16:00 horas en que volvió a fondear. El día siguiente 260025-JUL la unidad zarpó, obscurecida y en zafarrancho de combate, rumbo a Guayaquil convoyando a las mismas naves, atracando a las 10:34 horas al muelle del Arsenal de Marina.
La acción heroica del "Calderón" al enfrentarse a la nave líder de la Escuadra Naval peruana, "Almirante Villar", que sufrió un vergonzoso revés, y del cual fueron testigos presenciales las tripulaciones del resto de buques peruanos: BAP "Rodríguez", BAP "Almirante Grau" y BAP "Bolognesi". Escuadra que posiblemente intentaba ejecutar una maniobra de bloqueo del golfo de Guayaquil, pero que se vieron obligados a desistir por la respuesta firme del "Calderón".
El Golfo de Guayaquil, zona de confluencia de las Líneas de Comunicaciones Marítimas del Ecuador, con el canal de Jambelí enclavado en su seno, ha sido el paso obligado de los grandes capitanes de nuestra historia. En estas aguas combatieron los capitanes aborígenes de la Isla de Puna para rechazar el intento de invasión del Incario. Por allí navegó José de Villamil a bordo de la goleta "Alcance", llevando hacia mares del Sur la buena nueva de la gesta gloriosa de 1820. Por allí pasó Tomás Charles Wright en la gloria de "La Guayaquileña" para cubrirse de gloria en Malpelo en 1828.
Analizando el Combate Naval de Jambelí a través del tiempo y aplicando los conceptos de Estrategia Naval, podemos decir que la Fuerza Naval Ecuatoriana operando en el teatro marítimo, gravitó su poder en las Aguas del Golfo de Guayaquil desde su posición Puerto Bolívar, desarrollando operaciones de ejercicio y disputa del Dominio del Mar. El ejercicio de Dominio del Mar se materializa al proteger y conducir sin novedad el convoy militar desde Guayaquil hasta Puerto Bolívar. La presencia de la Fuerza Enemiga, en aguas del Canal de Jambelí, obliga a la disputa del Dominio del Mar.
Según los tratadistas el Dominio del Mar no es absoluto: sólo es relativo, incompleto e imperfecto. De acuerdo a estos conceptos se puede apreciar que la Fuerza Naval Ecuatoriana estuvo presente el momento oportuno, para ejercer y disputar el Dominio del Mar, pese a la superioridad de la fuerza enemiga.
El Cañonero "Calderón"
El cañonero "Calderón" que reposa actualmente en el parque de la Armada, en Guayaquil, como símbolo de rebeldía, coraje y dignidad, fue construido en Inglaterra en 1884 para transporte de la compañía chilena Adón Grelinch. Ecuador lo adquirió en diciembre de 1886 por la suma de 11.500 libras esterlinas, cambiando el nombre que tenía de "Chaigüín" por el de "Cotopaxi". Como el buque era de transporte y Ecuador lo necesitaba montado en guerra, se le instalaron dos cañones de retrocarga ''Nordenfelt'' y dos ametralladoras de la misma marca; se le dotó de una buena cantidad de municiones contratándose igualmente la tripulación correspondiente.
1896, se le instalaron dos cañones "Hotchkiss de 47, a babor y estribor, de 4.000 m. de alcance. Su primer Comandante fue el TNFG Nicolás Bayona. La comisión designada para su inspección, textualmente dice: "los que suscriben, nombrados por Ud. Sr. Gobernador, para inspeccionar e informar del estado del vapor chileno "Chaigüín" anclado en este puerto, nos hemos constituido a bordo y revisado su casco, máquinas y calderas, informamos que su casco es nuevo, de fierro, con cubierta del mismo metal, muy fuerte y bien remachado; tiene de eslora 37 m.; de manga 6.50 y de puntal 2.90 m. su máquina de podes de 50 H.P. nominales de alta y baja presión; sus divisiones y mamparos todo flotante y bien remachado. Tiene todos los útiles necesarios para navegar y dos cinches que puede funcionar con su donque, aparte de la máquina".
Durante sus 76 años en que navegó tuvo numerosas reparaciones que son un homenaje a nuestros ingenieros y mecánicos.
1925, el nombre de crucero es cambiado por el más modesto de "cañonero" y definitivamente en 1937, se le da el nombre de cañonero "Calderón", con el que se inmortalizó el 25-JUL-1941 en Jambelí, al poner fuera de combate al destructor peruano "Almirante Villar", superior en tonelaje, en armamento y dotación.
Estuvo en varias acciones de guerra como la "guerra civil de Esmeraldas". Fue igualmente buque escuela en el año 1925, en donde se formó el héroe de Jambelí Rafael Morán Valverde. Se le vio navegar por última vez en el río Guayas en 1960 antes de descansar convertido en museo cerca del mar, en el hoy denominado "Parque Armada Nacional", desde 1972.
Quizá no haya en el mundo otro buque que se pueda gloriar de haber navegado durante 70 años.
Biografía del Comandante Rafael Morán Valverde
05-ABR-1904, nació en Guayaquil. Hijo del Mayor Agustín Gilberto Morán Jara, militar alfarista, y de Clotilde Valverde Cepeda, guayaquileños avecinados en la parroquia de San Francisco. Fue su padrino de Bautizo el General Eloy Alfaro.
El menor de una familia compuesta de cuatro hermanos, estudió la primaria en la escuela de los Salesianos ubicada en la Atarazana y la secundaria en el Tomás Martínez.
1924, Había cumplido 20 años cuando solicito su alta en la Escuela Naval que funcionaba a bordo del Cañonero "Cotopaxi", a pesar de que el curso estaba ya en marcha.
02-MAY-1924, fue admitido como Guardiamarina. Cabe anotar que, a bordo del "Cotopaxi" Rafael se encontró con su hermano Teodoro. Su primer trasbordo fue el cañonero "Cotopaxi".
ABR-1927, ascendió a Alférez de Fragata en dicha nave, después lo trasladarían al motovelero "Patria".
12-FEB-1934, es ascendido al grado de Alférez de Navío. 1935 y 1936, consta en comisión en la Región Oriental.
1937, como Teniente de Fragata es destinado al Buque Escuela "Presidente Alfaro" y posteriormente al cañonero "Calderón". A fines de año viajó a Chile con los Cadetes de la Escuela Naval del Ecuador para que terminaran su educación y se especialicen en las diversas unidades y repartos de la Marina de Guerra de ese país, especialmente en la de Talcahuano. En Chile efectuó prácticas y navegó en el destructor "Riquelme".
1938, retornó al Ecuador y siguió un Curso especial de Artillería, a fines de año pasó al servicio de Faros.
ENE-1939, fue designado Segundo Comandante del Buque Escuela "Presidente Alfaro" aunque por corto tiempo; pues, a poco le trasladaron al antiguo cañonero "Cotopaxi" ya por entonces llamado cañonero "Calderón" fondeado en la Base Naval de Salinas.
Posiblemente influenciado por el ejemplo de su hermano mayor Teodoro, que ya era marino y estaba casado con Carlota Villena; uno, de cuyos hijos, llamado Víctor Hugo Morán Villena, figuró como Oficial Mar. 3ª. a bordo del "Calderón", el 25 de Julio de 1941 combatiendo al lado de su tío.
21-AGO-1940, a los 30 años de edad, el TNFG Rafael Morán Valverde contrajo matrimonio con doña América Cañarte Suárez, de 17 años; unión feliz y duradera, de cuya unión procrearon cuatro hijos: Gladis, Galo, Patricia y Rebeca Morán Cañarte. Su hija mayor Gladys, murió a principios del 41, de gastroenteritis.
Entre FEB-JUN-1941, figuró como Capitán del "Aviso Atahualpa". Ese último mes fue nombrado Comandante Interino del Cañonero "Calderón" y rotas las hostilidades con el Perú, en la madrugada del 25 de Julio partió con destino a la inmortalidad de aquel gloriosos Combate Naval de Jambelí.
13-MAY-1944, es dado de baja del Servicio Activo, por solicitud voluntaria, según Decreto 3112, con un total de 18 años, 08 meses y 23 días de servicio a la Institución. Morán Valverde había solicitado la Disponibilidad debido a que su bajo sueldo no le alcanzaba para mantener una familia de tres hijos; era Capitán de Corbeta y alquilaba una pequeña villita a la familia Montalbán, ubicada en las calles Tulcán y Clemente Ballén, prácticamente en los extramuros del Guayaquil de ese tiempo, donde vivió con los suyos hasta 1956 sin gozar de pensión alguna.
Desde su salida, empezó a trabajar con Rodolfo Granja como Capitán de buques bananeros, llevando fruta a diverso puertos de los Estados Unidos.
Entre 1956 y el 57 fue Capitán del Puerto de Manta. Ya estaba enfermo de diabetes pero se cuidaba haciendo dieta y arreglándose él mismo las uñas para evitar cualquier lastimadura que pudiere producir heridas.
Estado de salud de Rafael Morán Valverde Sufre de diabetes y cuando es llamado al cañonero "Calderón" para cumplir la misión asignada, se encontraba afectado con paludismo, a un así se embarcó sin quejarse de su dolencia, lo que le da más mérito de su intervención durante el combate, el que no rehusó, pues prefirió cumplir con su deber.
Sufría de continuos dolores por la mala circulación de las piernas pero no se quejaba porque era estoico. Con sus hijos siempre cariñoso y juguetón, cuando regresaba a casa era generoso con todos y aunque no sabía tocar instrumentos musicales disfrutaba oyendo sus piezas favoritas.
1952, fue condecorado con la Cruz de Guerra.
A fines de ABR-1958, se lastimó una uña del pie y poco después, a pesar de sus cuidados, se le presentó la gangrena. Llevado de urgencia por su esposa a la Clínica Alcívar, fue internado el 02-MAY-1958, para ser sometido a una intervención quirúrgica para cortarle el dedo, pero falleció en la mesa de operaciones cuando solo le habían puesto la anestesia, posiblemente a causa de un paro cardíaco o quizá de un coma diabético, a eso de las once de la mañana. El asunto nunca llegó a dilucidarse porque los médicos guardaron mutismo y no cumplieron con el requisito de examinar previamente al paciente.
Su entierro se realizó con todos los honores militares. Posteriormente un grupo de amigos le levantó un modesto Mausoleo en el Cementerio General de Guayaquil, figurando entre los pioneros de la idea Jaime Puig Arosemena y Atahualpa Chávez González.
01-NOV-1960, fue declarado Héroe Nacional junto a los demás Oficiales y Tripulantes del "Calderón", después vendría su monumento en el malecón de Puerto Bolívar.
Modesto y sin ostentaciones, popular entre la marinería, supo hacerse querer de todos por igual. Su estatura mas bien baja, rostro canela claro, ojos azules como su madre, pelo negro y lacio. Era todo un hombre en el estricto sentido de la palabra.
En la década de los años setenta, el Contralmirante Napoleón Cabezas solicitó a la viuda algunas pertenencias del Héroe para un Museo Naval en formación, recibiendo el sable, la Cruz de Guerra y otras insignias memorables, así como un legajo manuscrito sobre la acción del 1941.
24-SEP-1958, fue ascendido post-mortem al grado de Capitán de Fragata.
Hoy descansa, el Comandante Morán Valverde, con los combatientes que han fallecido hasta la actualidad en el Parque de la Paz, en la ciudad de Guayaquil. En la tumba eterna de la gloria, pues al cerrar sus ojos para siempre aquel 2 de mayo de 1958, sabía bien que habiendo dirigido a aquel puñado de valientes, escribieron un hecho ilustre y memorable; y que nosotros, sus compatriotas, sabemos que esa acción extraordinaria es el producto de la heroicidad y el valor de aquellos que desafiaron al temor y a la muerte para vencer en la gesta que inmortalizó al ya legendario cañonero "Calderón" y a su Tripulación entera.
El Buque Aviso "Atahualpa"
24-JUL-1941, se escribió una página gloriosa para nuestra Armada, con la participación del Aviso "Atahualpa", cuya Tripulación supo repeler con ejemplar patriotismo la incursión de la aviación peruana en los cielos de Puerto Bolívar, Provincia de El Oro.
El Aviso "Atahualpa", al mando del ALFG Humberto Game Peña y Alférez de Mar Raúl Yávar Robles, en realidad cumplieron una jornada de alto patriotismo que en todo momento debe ser considerada como ejemplo para nuestra generación.
Por las relaciones que se conocen en torno a este decisivo episodio ocurrido en el fatídico año de 1941; se sabe que el 26-JUN-1941, el ALFG Víctor Naranjo Fiallo, quien prestaba sus servicios en el Cañonero "Calderón" junto al TNFG Rafael Morán Valverde, recibió la orden de relevar el Comando del Aviso "Atahualpa" al Alférez Luis Gómez Cevallos, orden que se cumplió inmediatamente.
Así pues, desde los primeros días del pavoroso año de la invasión peruana, el Atahualpa, que no era una nave de guerra, realizó las tareas de patrullaje por aguas jurisdiccionales del Golfo de Guayaquil y áreas adyacentes.
En ese lapso muchas fueron las ocasiones en que la pequeña nave tuvo que emplearse a fondo para repeler la presencia de patrulleras y aviones peruanos, como sucedió la mañana del 23-JUL-1941, cuando en plena faena de rechazo al enemigo que había logrado invadir el espacio aéreo ecuatoriano, se alcanzó derribar a uno de ellos gracias a la certera actuación del Grumete Eleuterio Chalá.
Alrededor del medio día del 24-JUL-1941, la aviación peruana volvió a incursionar sobre Puerto Bolívar. Ante lo cual el Comandante del "Atahualpa", ALFG Víctor Naranjo, ordenó abandonar el muelle y combatir en movimiento.
Los aviones enemigos dispararon nutridas ráfagas de ametralladoras y lanzaron una gran cantidad de bombas, que felizmente al cabo de 15 minutos de incesantes ataques, no lograron causar averías a nuestra embarcación.
En las primeras horas de la tarde, el "Atahualpa" retornó al muelle de Puerto Bolívar, apenas había transcurrido unas pocas horas, cuando nuevamente aparecieron las naves aéreas sureñas, esta vez volando más bajo. Nuevamente la tripulación del "Atahualpa" inició el combate, navegando en zigzag. Este ataque tampoco logro hacer daño a la embarcación y no acobardó a los marinos que lucharon impertérritos alrededor de 25 minutos.
Alrededor de las 15:30 horas, una escuadrilla de aviones peruanos retornó para realizar vuelos rasantes sobre Puerto Bolívar y atacar directamente al "Atahualpa", que ubicado en un sitio estratégico soportó estoicamente los ataques enemigos que se prolongaron por espacio de 45 minutos.
Gracias al temple heroico de la tripulación del Aviso "Atahualpa", se impidió la desaparición del muelle orense donde existía material explosivo y combustible, valiosísimo en esos cruciales momentos y se preservó a Puerto Bolívar de un infame y despiadado bombardeo.
Cuando los aviones enemigos retornaron a sus bases sin lograr el nefasto éxito, el "Atahualpa" regresó nuevamente al muelle, donde los compatriotas expectantes vivaron orgullosos a la tripulación por el repetido testimonio de amor a la patria y gallardía en defensa de la heredad territorial.
Biografía del Teniente Víctor Naranjo Fiallo
05-MAY-1916, nace en Riobamba. Sus padres: Capitán de Infantería Leonidas Naranjo Sandoval y Carmela Fiallo Fajardo. Su padre se distinguió en la campaña de Esmeraldas, su abuelo materno Víctor Fiallo Pontón, colaboró con el General Alfaro y fue Director de la Escuela Militar; esta ilustre estirpe explica el temple de héroe.
Ingresó con su hermana Rosa América a la escuela de las Monjas Oblatas y de ocho años pasó interno a la de los Hermanos Cristianos de Quito, alternando períodos de estudio y vacaciones en las haciendas familiares de Alausí, denominadas Chapsig, Yocón, El Carmen, Cascajal y Cayandeleg.
1930 inició la secundaria en el Colegio "Pedro Vicente Maldonado" de Riobamba.
1933, pasó al Colegio Nacional "Mejía" de Quito a cursar el tercero y cuarto año.
1935, sin embargo, decidió seguir la carrera de las Armas en el Colegio Militar "Eloy Alfaro" donde asistió a un curso.
1936, se cambia a la recién creada Escuela Naval en Salinas, formada con el primer contingente de Oficiales navales venidos de Chile.
En Salinas permaneció un año haciendo prácticas en el buque "Presidente Alfaro".
1937, pasaron a Guayaquil, a un local ubicado en Eloy Alfaro y Maldonado, bajo la orientación de los instructores norteamericanos Capitanes James Coe y Cari Earling.
A finales del curso partieron a Chile con otros compañeros, merced a un convenio entre las dos Armadas, bajo el mando del Capitán César Puente Godoy, fue asignado al Buque Escuela "General Baquedano" y luego al Crucero "Arturo Pratt" en la Base de la isla Quinquina, dependiente del Apostadero de Talcahuano. Finalmente ascendió a Aspirante y regresó a Guayaquil, donde obtuvo el grado de Alférez de Fragata y fue destinado a la Escuela de Salinas para dictar las materias de Trigonometría y Algebra, pero habiéndose clausurado en ENE-1939, lo enviaron en comisión al Fuerte de Punta de Piedra primero y luego en Diciembre pasó como Oficial de cargo al "Presidente Alfaro".
ENE-1940, sin embargo, fue destinado al Cañonero Calderón y en Julio le designaron Capitán del Puerto de Salinas, hasta Diciembre que volvió otra vez al Calderón.
1941, Comandante de Aviso "Atahualpa". Durante la campaña contra el Perú, estuvo a cargo de custodiar las naves de cabotaje que transportaban soldados y material de guerra hacia la frontera sur, así como también dar protección a las poblaciones del litoral de la provincia de El Oro.
Así pues, desde los primeros días del pavoroso año de la invasión peruana, el "Atahualpa", que no era una nave de guerra, realizó las tareas de patrullaje por aguas jurisdiccionales del golfo de Guayaquil y áreas adyacentes.
26-JUN-1941, el ALFG Víctor Naranjo Fiallo, quien prestaba sus servicios en el Cañonero "Calderón" junto al TNFG Rafael Morán Valverde, recibió la orden de relevar al Comandante del aviso "Atahualpa", Alférez Luis Gómez Cevallos.
JUL-1941, tras un recorrido por las islas, fue informado de la proximidad de un avión peruano, al que ordenó abrir fuego, siendo contestado con ráfagas de ametralladora. Ese fue su bautizo de fuego durante la invasión. Posteriormente se consagró al hacer frente a la Aviación peruana y lograr mantener a raya a los invasores.
AGO-1941, volvió a El Oro a bordo de la lancha "Venecia" con la finalidad de ayudar a los numerosos refugiados que pasaban una triste situación.
20-AGO-1941, entregó el mando del Aviso "Atahualpa" al Alférez César Endara Peñaherrera porque había sido designado Segundo Comandante del "Calderón".
04-OCT-1941, viajó a Alausí en goce de licencia y se dedicó a sus labores agrícolas.
181430-OCT-1941, mientras concurría a la estación del ferrocarril con la finalidad de esperar el tren y adquirir los periódicos de Guayaquil, sus amigos Jaime y Emilio Velasco y Carlos Medina le invitaron a servirse un refrigerio en una tienda, un sandwich y una cerveza, pero como no los atendieron se retiraron a otro local propiedad de José R. Moreno, donde tres hombres en estado alcohólico le hicieron burla al traje de marino que llevaba Naranjo en esos momentos.
Este, comprendiendo que las provocaciones eran producto del trago, quiso retirarse. Uno de los borrachos, llamado Porfirio Pinos, se desató en injurias. Entonces Naranjo lo castigó con sus puños y abandonó el local, sin percatarse que Pinos tenía un arma. Sus amigos le gritaron y hasta trataron de arrebatarle el arma al agresor, la víctima se volteó, perdió el equilibrio, cayó al suelo. Un primer disparo le pasó rozando el cuerpo y el segundo le impactó, Naranjo pudo alcanzara decir: "No dispares"; pero, el asesino, le hizo un tercer disparo que le entró por la tetilla y perforó los pulmones. Falleció poco después. Tenía solamente 25 años de edad.
El cadáver fue conducido a Durán en el autocarril y luego a Guayaquil a bordo del Aviso "Atahualpa". Fue velado en la Zona Militar.
20-OCT-1941, sus solemnes funerales se realizaron en Guayaquil y constituyeron una multitudinaria manifestación de gratitud por parte de la colonia orense de refugiados en el puerto principal, que concurrió masivamente.
El asesino entró a la casa de la señora Luz Cevallos de Robalino donde el Comisario Juvenal Ortiz, tras vencer alguna resistencia, logró capturarlo y entregarlo a un grupo de carabineros al mando del Cabo Mejía. A continuación fue sometido a jurado y condenado a 16 años de prisión; sin embargo, el 09- JUN-1942, fugó de la cárcel de Riobamba, en circunstancias de que el periodista guayaquileño Rodrigo Chávez González sustentaba en el Teatro León de esa ciudad, una charla sobre la actuación de Naranjo Fiallo en aguas de Jambelí.
Su heroísmo fue reconocido por la Institución y el Congreso Nacional, al declarar como héroes nacionales al Comandante y a la Tripulación del Aviso "Atahualpa".
Biografía del Comandante Rafael Andrade Lalama
30-ABR-1879, Nace en Quito. Sus padres fueron Pedro Andrade Cadena, oriundo de Riobamba y Emperatriz Lalama, nacida en Ambato. Contrajo nupcias con Amada Zavala Vivar, oriunda de Jipijapa, llegando a procrear una numerosa descendencia.
1894, ingresa de Cadete a la Escuela Naval que funcionaba a bordo del crucero "9 de Julio" 1895, ya era Guardiamarina, mas en Mayo, la Escuela cerró sus puertas, por lo tanto, debió abandonar los estudios por algunos meses hasta que se reabrió y fue reincorporado en Agosto a bordo del "Cotopaxi".
1897, ascendió a Alférez de Fragata y en 1901 a Alférez de Navío, en cuya condición fue enviado con el Capitán Benigno S. Calderón a impedir que los guerrilleros enganchados en el Perú contra el gobierno, cruzaran la frontera por la isla la Sombrera y Payana en el archipiélago de Jambelí.
1903, asignado a la guarnición en el pontón "Comandante Marcos".
1904, con motivo de los incidentes fronterizos en el Oriente, fue designado a patrullar las aguas del río Aguarico hasta Archidona bajo las órdenes de Carlos B. Rivadeneira. Condujo armamento a nuestros destacamentos militares y confeccionó varios trabajos estadísticos. En Julio viajó por el Napo y levantó un plano desde el Aguarico hasta el Tereré, también exploró los ríos Yasuní y Tiputini, hasta la población de San Antonio del Curaray.
1905, ascendió a Teniente de Navío. Le destinaron al buque-escuela "Marañón", dictó clases en la nueva Escuela Naval restaurada por el Presidente Leonidas Plaza.
1906, viajó en el "Marañón", a Valparaíso a un curso de Minas y Torpedos.
15-AGO-1906, durante la emergencia producida por un terremoto que destruyó Valparaíso, laboró bajo las órdenes del Almirante Gómez Carreño, Jefe de la plaza, apoyando humanitariamente a la población civil 1907, ascendió a Capitán de Corbeta y le designaron Segundo Comandante del "Cotopaxi".
Realizó dos viajes a Panamá como Capitán del yate "Cavaller", transformado después en el Guardacosta "Patria" y varias travesías a las islas Galápagos en veleros mercantes, por cuyo motivo fue inscrito en el registro de Capitanes de Altura de la Compañía de Seguros "Lloyd" de Londres.
1909, laboró en el Estado Mayor en Quito y en Mayo, durante la Movilización Nacional contra el Perú, pasó a prestar servicios en Punta de Piedra, organizando la defensa del golfo de Guayaquil con minas y torpedos, habilitando para el efecto el torpedero "Tarqui".
1911, ascendió a Capitán de Fragata. Fue profesor de la Escuela Naval que funcionaba en Quito. Posteriormente fue destinado al "Libertador Bolívar".
27-ENE-1912, es designado Capitán del Puerto de Guayaquil.
ABR-1912, comandó el "Cotopaxi" y en Noviembre fue Inspector General Ad- Honorem de la Armada y Director de la Escuela de Ingenieros Navales con residencia en el Litoral, sin perjuicio de continuar al frente del "Cotopaxi".
AGO-1912, se le ordenó patrullar las costas de Esmeraldas. El Comandante Rafael Andrade Lalama tuvo una destacada y valiente intervención durante el conflicto suscitado en Esmeraldas a favor del Gobierno del General Leonidas Plaza Gutiérrez y en contra del Coronel Carlos Concha Torres y sus fuerzas revolucionarias. Conflicto que duraría hasta 1916.
OCT-1914, asciende a Capitán de Navío.
JUN-1915, Concha fue sorprendido en su hacienda "San José" por una partida gobiernista y trasladado a Quito. Los rebeldes nombraron en su reemplazo al Coronel Enrique Torres Concha y siguieron en pie de lucha mientras los gobiernistas mantenían sus posiciones estáticas y Plaza designaba a Rafael Andrade Lalama, Jefe Supremo de las Fuerzas de Mar y Tierra que operaban en la costa norte.
SEP-1916, participó en la acción de desembarco en Ríoverde; pero, el nuevo Presidente de la República Dr. Alfredo Baquerizo Moreno, cansado de tanta guerra, pidió y obtuvo del Congreso la libertad de Concha y una Amnistía general para los revolucionarios obteniendo la paz tras un período de tres años de continua agitación y lucha que costó la vida a numerosos ecuatorianos sobre todo de la sierra y la destrucción de dos ejércitos nacionales.
NOV-1916, comandó el guardacostas "Patria" que pasó a Tumaco a recoger a los Comisionados Colombianos de Límites para transportarlos al Ecuador. Con tal motivo se cruzaron conceptuosos discursos y hubo fiesta en el barco.
1917, dio feliz término a un invento suyo consistente en un controlador automático de las desviaciones del rumbo que pudieran sufrir los navíos por descuido del Oficial de Guardia.
OCT-1917, con el objetivo de lograr la patente viajó a New York y consiguió que su aparato fuera adoptado por el "Shipping Board" de los Estados Unidos, con el nombre de 'Tell tale compas".
1920, presentó su invento en la Exposición Nacional de Marina realizada en el Grand Central Palace de New Cork.
1922, presentó su invento en la Exposición Nacional de Artes e Industrias realizada en Quito con motivo del Centenario de la Independencia ecuatoriana, recibiendo el Gran Premio y Medalla de Oro por dicho Compás controlador.
1922, nuevamente en la Marina de Guerra volvió a comandar el "Cotopaxi" rebautizado como "Calderón" por la mala fama contraída en el bombardeo de Esmeraldas, crimen que se recordó por mucho tiempo con características nacionales porque en 1914 había sido llevado el asunto al Congreso por el Diputado José Vicente Trujillo, que interpeló al Ministro J. Federico Intriago, quien sindicó directamente al Presidente Plaza, único culpable en fin de cuentas. En el nuevo "Calderón" funcionó algunos años la Escuela Naval a cargo de Rafael Andrade Lalama.
07-JUL-1925, después de treinta y un años de servicio, alcanzó sus Letras de Retiro con honores por haber participado en numerosos hechos de guerra. Desde entonces vivió retirado de toda actividad dando rienda suelta a sus aficiones científicas y construyendo numerosos aparatos marinos, pues era muy hábil con las manos y poseía talento y facultades creativas.
En su domicilio, ubicado en la ciudadela "Antonio Ante" de la ciudad de Quito formaba a su numerosa familia hasta que empezó a sentirse mal del corazón.
-JUN-1932, a los 53 años de edad fallece en su domicilio ubicado en las calles Luque y el Morro de la ciudad de Guayaquil, a donde fue trasladado por su hijo mayor Rafael. El sepelio fue con los honores que el Ceremonial Marítimo contempla para estos casos, y de acuerdo a su jerarquía.
Biografía del Contramaestre Juan Suárez
El Contramaestre Juan Suárez fue testigo y protagonista de los episodios navales ocurridos desde 1877 hasta 1927, año de su fallecimiento.
1877, Juan Suárez, ingresó a la Armada, cuando nuestro único buque era la goleta "Mercedes" y posiblemente fue en esta unidad en la que inició su carrera naval, con el más modesto cargo de Grumete. Era Comandante de aquel buque el CPCB Francisco Mora.
Es necesario resaltar el heroico desempeño de los Tripulantes del crucero "Cotopaxi", entre ellos el Contramaestre Juan Suárez, quienes supieron esforzarse para el cumplimiento de las operaciones que se efectuaron durante la campaña, y es el propio Comandante quien lo hizo trascendente a las autoridades respectivas.
1922, Juan Suárez aparece como Sargento de Armas del "Cotopaxi", pero el 06-ENE-1922, se efectúa el siguiente movimiento del personal de Tripulación "altas a los siguientes individuos de Tripulación: Sargento de Armas Juan Suárez a Contramaestre ". De esta manera continúa como Contramaestre hasta el 20-FEB-1922, el CPNV Rafael Andrade solicita al Coronel Comandante General de Marina su autorización para efectuar el siguiente movimiento de la Tripulación del "Cotopaxi": a desempeñarse como Cabo de Matrícula al Contramaestre Juan Suárez " 1926, habían transcurrido 48 años, desde que Juan Suárez había ingresado a la Institución. Fue muy considerado por los Oficiales que lo comandaron y apreciado por la marinería que conocía de su experiencia, capacidad y don de gente. Podríamos decir que sirvió a la Patria con honor y plena lealtad.
AGO-1926, el Presidente provisional de la República, Dr. Isidro Ayora, expidió un decreto, en el que se le otorga la condecoración Estrella "Abdón Calderón", de Tercera Clase, a solicitud de la superioridad naval.
22-NOV-1926, prestando servicios en el "Cotopaxi", cuyo Comandante era el Capitán Ibáñez, solicitó licencia para hacerse tratar una enfermedad pulmonar. 23-DIC-1926, solicita una prórroga de su licencia a fin de tratar de vencer a su maligna enfermedad.
1927, luego de sufrir varios meses la violenta y dolorosa enfermedad pulmonar, falleció en Santa Elena.
Generalidades
1936, La Armada inició una etapa nueva, que fue en realidad un renacimiento. Al estudiar el proceso de estos últimos sesenta años no se puede dejar de preguntarse cuáles han sido los factores que han impulsado el crecimiento de una institución que había sido olvidada por mucho tiempo y que disponía de tan pocas oportunidades y cómo ha llegado al nivel actual.
1934, la Marina no tenía Escuela Naval ni de Grumetes, solo podía entrenar a las dotaciones con cursos esporádicos, el último de los cuales tuvo lugar diez años antes en 1923; no disponía sino de tres modestas unidades, ninguna de las cuales era de guerra; su misión era de Auxiliar del Ejército para el transporte de tropas, el cuidado de faros y boyas y la lucha contra el contrabando. Sus presupuestos eran de miseria, ya que no se esperaba de la marina sino que supiera navegar.
Se logro romper esa camisa de fuerza y se encargó de la mayor parte del patrimonio nacional, no solo de la defensa sino de estudiarlo, desarrollarlo, integrarlo a la vida nacional, gracias a los siguientes puntos, detallados a continuación:
La presencia de hombres valiosos y clarividentes que supieron aprovechar las oportunidades que se presentaban. Hombres que sabían que la Nación había vivido de espaldas al mar y que, por lo mismo, todo dependía de su acción. Mencionemos algunos, todos los cuales volverán a aparecer en las diversas etapas: Manuel Alomía Guerra, César Endara Peñaherrera, Manuel Nieto Cadena, Gonzalo Calderón, Sergio Vázquez Pacheco, Alfredo Poveda Burbano, todos Comandantes Generales, excepto Alomía. Junto a ellos, individuos brillantes como Wilfredo Freiré, Marcelo Arcos, Vicente Miño, Gustavo Jarrín Ampudia, Raúl Jaramillo del Castillo, Santiago Coral Terán, Thomás Leroux Murillo. Todos ellos fueron hombres pensantes, de acción y de trabajo de equipo.
Supieron aprovechar las oportunidades providenciales, de las que cabe mencionar las siguientes:
Primera: Las lecciones de la guerra de 1941, una tragedia nacional, pero que para la Marina fue una ocasión de hacer algo heroico y que llevó a pensar en la necesidad del mar para la seguridad de la Nación.
Segunda: La II Guerra Mundial, uno de cuyos teatros fue el Océano Pacífico, con un sitio de máxima importancia como Galápagos, una base estratégica para la defensa del Canal de Panamá. La guerra obligó a los norteamericanos a tomarnos en cuenta, al menos en una mínima parte. Nos facilitó dos pequeños buques para patrullar la zona amenazada desde el Golfo a Panamá y nos ayudó con algunos equipos y asesoramiento básico.
Tercera: La declaración de las doscientas millas de Mar Territorial que amplió su teatro de acción y la visión de su misión, que invitaba a lanzarse a un inmenso sector del océano y a las rutas del mar libre; así como también, el equipamiento y diversificación de funciones con los intentos de creación de la Infantería de Marina, la Aviación Naval.
Cuarta: La nueva mentalidad mundial de la urgencia del desarrollo de los pueblos. Era la llamada providencial para la Armada: todo estaba por hacerse, pero era la oportunidad de pensar a lo grande y buscar caminos nuevos, en el aprovechamiento de los recursos del mar y de la posibilidad de usar las rutas y posibilidades del mar libre y todo para el servicio de la nación.
La Armada logró integrar casi todas las instalaciones y servicios destinados a la seguridad con el apoyo y contribución al desarrollo, sin salir de sus funciones específicas. Finalmente la llegada del petróleo abriría nuevas oportunidades económicas.
Las grandes decisiones de ciertos Comandantes Generales que impulsaron a la Armada hacia delante, en los momentos importantes, tales como:
CÉSAR ENDARA PEÑAHERRERA.- Fue el Segundo Comandante General, buscó afirmar la autonomía y personalidad de la Armada aún a costa de tener que enfrentarse con el Ejército; amplió la visión geopolítica de la Marina, sacándola del ambiente localista encerrado en Guayaquil, para cambiarlo a un contexto nacional. Impulsó a la Armada hacia adelante con mirada futurista a formar una Institución organizada y consciente, preparada para lo que debía venir. Organizó la Armada con regulaciones y ordenanzas que permitían saber qué se podía hacer en cada momento y en cada circunstancia.
MANUEL NIETO CADENA. Tercer Comandante General, le tocó una etapa difícil, pero, precisamente por ello, es más valioso lo que hizo: la decisión más influyente fue la de preparar al más alto nivel técnico, a varios Oficiales jóvenes, bien escogidos (varias ramas de Ingeniería, sobre todo Naval) que luego lanzaron proyectos que dinamizarían de vida y acción de la Armada, como la construcción del Varadero, que sería luego el comienzo de los Astilleros Navales, la adquisición de diques, etc. Aquellos gastos en las mejores universidades de Estados Unidos, Europa y Sudamérica, fueron una oportuna inversión que rindió su fruto. Los más notables fueron los Comandantes Marcelo Arcos y Wilfrido Freiré, que impulsaron varias obras fundamentales.
GONZALO CALDERÓN NORIEGA. Pese al período difícil que le tocó dirigir a la Armada, luego de la caída de la Junta Militar de Gobierno de 1963, supo inyectar a la Armada una mayor decisión y mística, reflejadas en la frase, "Si hemos de luchar con piedras, aprendamos usar bien las piedras". Además, fundó la Academia de Guerra que se proyectó como el "Cerebro de la Armada" y que debía convertirse en la semilla de líderes con ideas nuevas y proyectos ambiciosos para la vida de la Marina.
Posteriormente, realizó la fundación definitiva de la Aviación Naval y de la Infantería de Marina.
SERGIO VÁZQUEZ PACHECO.- Tuvo las mejores oportunidades y las supo aprovechar plenamente: Un gobierno militar de nuevo estilo, un grupo de colaboradores excelentes, la llegada del petróleo con las entradas extras que nunca había tenido antes. Las decisiones de más trascendencia, fueron:
La reorganización de la Armada según los nuevos objetivos, de Seguridad y Desarrollo.
Selección de personal calificado que se convirtió en un gran equipo de trabajo, en grandes colaboradores pensantes y ejecutores de los proyectos, principalmente en la Comandancia (Estado Mayor, Secretaría, Dirección General de Intereses Marítimos…), en la Academia de Guerra, en los Ministerios encargados a la Marina (Energía y Minas) y los órganos de ejecución (Dirección General de Desarrollo Marítimo, Zonas Navales)
ALFREDO POVEDA BURBANO.- Fue el primer Oficial General en alcanzar el grado de Almirante. Las circunstancias en las que le tocó dirigir a la Armada fueron excepcionales, al tener en sus manos casi todo el poder de decisión, pues era al mismo tiempo, Presidente del Consejo Supremo de Gobierno, Jefe del Comando Conjunto y Comandante General de Marina. Pese a las relaciones poco amistosas con sus predecesores, tuvo el acierto de proseguir y completar sus obras, como la incorporación de los submarinos, de la Fragata Guayas (Velero), la construcción de las seis corbetas en Italia, etc.
Su principal objetivo fue el desarrollo marítimo con sus principales ramas: Desarrollo Portuario, Marina Mercante, Desarrolle Pesquero.
Las decisiones más trascendentes, en este campo fueron, sin duda:
Preparar el "Marco Jurídico" para el Desarrollo Marítimo.
Impulsar la Marina Mercante y Puertos.
Completar proyectos delineados y aprobados por sus antecesores.
Una grave equivocación, en cambio fue la adquisición en los Estados Unidos del destructor "Holder" (luego "Alfaro"), supuestamente beneficiosa para el Ecuador.
Las decisiones posteriores de los Comandantes Generales fueron importantes, pero la Armada había llegado a un estado de equilibrio cercano a la plenitud y las circunstancias (gobierno militar, recursos petroleros, etc.) habían evolucionado y era difícil pensar en grandes proyectos. Sin embargo, como se dijo antes, no había perdido su vitalidad y creatividad y lanzó interesantes proyectos, como el de la Antartida y ha participado en otros importantes, dentro de la protección de los recursos naturales, las investigaciones científicas.
En una institución jerárquica como la Armada, las acciones de subalternos pueden quedar en alguna forma opacadas, aunque no siempre. Tales son los casos mencionados repetidas veces de Luis Eloy Jarrín, el de Manuel Alomía Guerra y el de Wilfrido Freiré. A ellos se podría añadir un buen número de colaboradores de primera línea, por su pensamiento, por su acción, por su liderazgo y honestidad, que hicieron posible la planificación y culminación de muchos proyectos importantes, como Gustavo Jarrín Ampudia, Vicente Miño R, Raúl Jaramillo del Castillo, Fernando Peñaherrera, Víctor Hugo Garcés Pozo, Jorge Rubén Endara Troncoso y Germán Yépez Espinosa.
Según mi modesta opinión y sin temor a equivocarme, lastimosamente para la Institución, los Oficiales que en su momento tuvieron en sus manos el poder de decisión, no dieron la talla de los anteriormente citados señores Oficiales, y pasaron por la Institución de una manera intrascendente y peor aún, ahora que se arrastra una crisis institucional desde la firma de la paz con el Perú, porque desde esa fecha las Fuerzas Armadas se han ido politizando y desintitucionalizando, son evidentes las fracturas entre los Altos Mandos y los Mandos Medios y entre Oficiales y Tropa, no me imagino cual será el puerto de recalada de esta noble y gloriosa Institución.
ANEXO "A" DECRETO DE CREACIÓN DE LA MARINA DE GUERRA ECUATORIANA El Congreso Constitucional del Estado Considerando: 1º. Que el antiguo Apostadero de Guayaquil debe variar su denominación por no depender en el día de otro Departamento Marítimo. 2º. Que conviene fijar el número de empleados que deben servir las dependencias militares de Marina: DECRETA: Artículo 1º. El establecimiento de la Marina Militar en el puerto de Guayaquil, se nombrará Departamento Marítimo del Ecuador. Artículo 2º. Su jurisdicción se entenderá desde el Río Tumbes por el Sur y por toda la costa del territorio del Estado hasta los límites que por el Norte señalan los tratados que han de celebrarse con el Estado de la Nueva Granada. Artículo 3º. El mando de este Departamento se dará a un General de Brigada de Marina o Capitán de Navío a juicio del Gobierno bajo la denominación de Comandancia General, con las prerrogativas y responsabilidades que designan las Ordenanzas Generales de la Armada. Lo. único.- Cuando el Gobierno por circunstancias particulares nombre un General o Coronel del Ejército para Comandante de Armas del Departamento reunirá este el mando de la Comandancia General de Marina. Artículo 4º. Habrá un Mayor de Departamento de la clase de Capitán de Fragata, quien se hará cargo de las oficinas de mayoría, Secretaría y sus correspondientes archivos con las atribuciones que tienen por las ordenanzas los Mayores de Departamento Marítimo Dado en Quito a 3 de noviembre de 1832.- 2º. El Vicepresidente del Congreso.- Pablo Bazcones.- El Secretario del Congreso Mariano Miño.- Palacio de Gobierno en Quito a 8 de noviembre de 1832.- 22º. Ejecútese.- Juan José Flores.- Por su Excelencia.- Antonio Martínez Pallares.- Es copia.- San Miguel. Es copia.- Córdova Es copia de su original, de que certifico. Quito a 13 de diciembre de 1832.- 22º. ANEXO "B" OFICIO SOBRE EL COMBATE DE JAMBELÍ Oficio No. 144 del 8 de julio de 1941. Solicitud del Comandante interino Rafael Morán Valverde para alistar el cañonero "Calderón".
Para solicitar a Ud.:
1.- Se digne gestionar, con carácter de urgente, el envío del dinero necesario para alistar el buque, para un caso de emergencia, y que de otra manera, el Calderón, que ha sido símbolo de la Marina Nacional en los últimos años, vería en la vergonzosa situación de no poder prestar su contingente en estos momentos de angustia nacional.
2.- El dinero necesario sería: consumos de Abril a Julio, valor de la transferencia solicitada para el viaje a Galápagos; rancho, más el 50% de aumento por la segunda quincena de Julio y cinco mil sucres, para gastos de urgencia e imprevistos.
3.- Con todo este dinero, el buque estaría en condiciones de movilizarse y hacer los ejercicios necesarios para el caso de entrar en acción; y 4.- Esta petición la formulo como un imperativo de última hora, y consciente de mi deber de ecuatoriano patriota, ansioso de defender a mi Patria de la incalificable agresión peruana.
Honor y Patria f) El Comandante Interino del Buque Rafael Moran Valverde Teniente de Fragata ANEXO "C" Oficios No. 0-160 y 0-181 del 28 de Julio y del 12 de Agosto de 1941, del Comandante Accidental del cañonero Calderón, Teniente de Fragata Rafael Moran Valverde, al Sr. Comandante General de Marina: ARMADA NACIONAL Cañonero "Abdón Calderón" Al señor Comandante de Marina Del Comandante Int. Del C/ "Abdón Calderón" Para informar a usted 1º. – "Que el 24 del presente a las 23:03 zarpamos a Puerto Bolívar, convoyando a los buques nacionales que menciona en las instrucciones enviadas a Ud. a las 17:00 horas del mismo día; 2º. – Que encontrándonos en la parte media, comprendida entre las luces de enfilación y la boya de Angostura, repentinamente, a poca distancia del buque y por babor, apareció una luz roja, la misma que se acercó rápidamente, tratando de cortar la proa del buque a mi mando; para evitar la colisión, ordené cerrar la caña a estribor y parar las máquinas; a pesar de estas precauciones, la balandra se estrelló contra la amura de babor. Dejo constancia que la luz roja fue presentada a estribor de la balandra, siendo ésta la causa de la antedicha colisión que traté de evitarlo aun poniendo en peligro mi buque; 3º. – Durante la travesía no hubo mayor novedad. A las 06:00 horas del día 25, llegamos hasta la boca de Jambelí, donde constatamos la ausencia de buques enemigos. Como el primer buque del convoy se encontraba retrasado, regresamos a convoyarlo más de cerca hasta que entre en la boca. Luego regresamos a convoyar de igual forma al motovelero "La Pinta", con el que entramos a Puerto Bolívar, fondeando a las 08:28 horas, permaneciendo allí para proteger el desembarco contra posibles incursiones aéreas. El tercer buque del convoy llegó sin novedad a las 10:00 horas.
A las 10:25 horas, cuando ya habían terminado el desembarco, se da el desembarco, se da la alarma de incursión aérea, y para tener campo de maniobra, levamos y zarpamos hacia el Golfo a las 10:25 horas.
4º. – A las 11:15 horas cuando nos encontrábamos navegando con rumbo al norte y a una distancia aproximada de tres millas del faro de Jambelí, el vigía anunció la presencia de un buque a la cuadra de babor y que navegaba con proa hacia el buque a mi mando, como también el humo de varios buques, que se presume era el resto de la escuadra peruana. En este instante se preparaba para ejercicios de artillería. El buque avistado visiblemente aumentó su andar, cambiando varías veces de rumbo y con manifiestas intenciones de cortar nuestra proa. Cuando el buque se acercó más, se le reconoció ser un destructor de bandera peruana, por lo cual ordené caer a estribor, cambiando ciento ochenta grados el rumbo. Simultáneamente también el enemigo cayó a estribor navegando luego con rumbo paralelo al nuestro. A las 11:25 horas, se ordena zafarrancho de combate y a las 11:30 horas el enemigo rompe los fuegos con un cañón de proa. Al ver el fogonazo del primer disparo, se ordena fuego, repeliendo al primer momento con un nutrido fuego de artillería. El combate se prologó hasta las 11:46 horas, instante en que nos ocultamos del enemigo tras la boca de Jambelí.
La contienda fue absolutamente desigual, pues se sostuvo la acción únicamente con un cañón de 3" y dos antiaéreos de 20 mm., ya que el cañón de popa falló después del primer disparo, que posiblemente le impactó en la popa del buque atacante. También se cree que el cañón antiaéreo de popa hizo varios impactos en la superestructura del enemigo. Nuestro buque no sufrió daño alguno a pesar de que los piques del enemigo estaban correctos en deflexión y apenas 20 metros largos y cortos.
Es mi obligación hacer conocer la heroicidad con que combatió la tripulación y en todo momento supo cumplir con su deber; como también la deficiencia del material, pues de las pocas cargas que llevábamos solo respondieron el 30 por ciento.
Terminada la acción fondeamos en Puerto Bolívar a las 12:11 horas. Para mayor comprensión acompaño un croquis de los movimientos de los buques y los lugares exactos del combate.
5º. – Encontrándonos fondeados, a las 13:42 horas se rompen los fuegos contra dos aviones enemigos que tratan de atacar al buque, obligándoles a huir después de 15 minutos de nutrido fuego de artillería antiaérea. En espera de los aviones enemigos permanecemos en continuo movimiento frente al puerto, hasta las 16:00 horas, que volvemos a fondear.
6º. – A las 00:25 horas del 26 zarpamos obscurecidos y en zafarrancho de combate rumbo a Guayaquil, convoyando a las misma naves. Sin tener novedad fondeamos en este Puerto a las 07:29 horas, atracando a las 10:34 horas al muelle del Arsenal de la Marina".
7º. – Reconociendo el valor con que combatieron el Sargento 2º. Contramaestre Gavino Portocarrera, Cabo 1º. Enrique Portocarrero y Cabo 2º. Eduardo Hidalgo, quienes se encuentran arrestados en este buque, me permito insinuar a usted interceda ante quien corresponda para obtener la libertad de los detenidos.
8º. – También hago conocer a usted para que a su vez informe a la Superioridad la eficiencia y valerosa cooperación del personal del Grupo Antiaéreo que presta servicios en esta Unidad.
9º. – Debido al forzamiento de la caldera en el momento del combate, ésta ha sufrido un grave daño del que detalladamente informaré después.
10º. – Acompaño a la presente, los partes del tiempo navegando y de consumo de combustible y lubricante.
Honor y Patria EL COMDANTE INT. DEL BUQUE f) Rafael Moran Valverde Teniente de Fragata LISTA DE OFICIALES Y TRIPULANTES DEL CAÑONERO "CALDERON" QUE COMBATIERON EL 25 DE JULIO DE 1941, EN JAMBELI OFICIALES: Teniente de Fragata, Rafael Morán Valverde (Comandante); Teniente de Fragata, Ing. Abraham Game B. (Jefe de Máquinas); Alférez de Fragata, César Endara Peñaherrera (Oficial de Detalla); Alférez de Fragata Manuel Nieto Cadena (Oficial de Cargo); Alférez de Fragata, Ing. Efraín Cornejo Sánchez (Oficial de Máquinas); Alférez de Fragata, Ing. Sergio Pazmiño Egas (Oficial de Máquinas); Alférez de Navío Sanidad, Víctor Ludeña Ontaneda (Cirujano); Alférez de Fragata – Oficial de Mar de 3ª., Alfonso Darquea Moscoso (Oficial Pagador); Alférez de Fragata – Oficial de Mar de 3ª., Víctor Morán Villena (Oficial de Cargo).
TRIPULANTES:
Sargentos Primeros: Daniel Ayora Lafebre (Contramaestre), Víctor González Yerovi (Artillero), Santiago Cantos Cordero (Maestre de Señales), José Chiguano Andagana (Mecánico), Jorge Campuzano Zea (Amanuense), Santos Avilés Maldonado (Mecánico).
Sargentos Segundos: Rosendo Quimí González (Radioperador), Gerardo Viteri Montoya (sastre), Humberto Mazón Valencia (Sanidad), Luis Falcón Villagrán (Mayordomo), José Velasteguí Romero (Cocinero).
Cabos Primeros: Gilberto Garcés Tamayo (Guardián), Oscar Gaspar Vivar (Artillero), Julio López Ortiz (Artillero), Martín Ayoví Cangá (Guardián), Tarquino Cifuentes Ruiz (Aceitero), Juan de Dios Barzola P. (Aceitero).
Cabos Segundos: Victor Alcívar Barreiro (Timonel), Juan Carrera Cabrera (Timonel), Manuel Morán Bodero (Aceitero), Rosendo Toral Zaruma (Cocinero).
Marineros Primeros: Francisco Montoya Alava ((Enfermero), Camilo Oñate Domínguez (Maniobras), César Zambrano Pérez (Maniobras), Cristóbal Cruz Suárez (Maniobras).
Marineros Segundos: Angel Arturo Salem (Artillero), Guillermo Ortiz Aguilar (Ayudante de Mayordomo), Higinio Malavé Abad (Artillero), Heriberto Albán Bosques (Maniobras), Luis V. Duque Peña (Artillero), Manuel Sánchez Bravo (Ayudante Aceitero), Olmedo Hurtado Guevara (Ayudante Aceitero), Gilberto Rodríguez.
Grumetes: Alejandro Martínez Moreira (Cocinero), José V. Jiménez Madrid (Mozo).
Prestando Servicios: Suboficial Manuel Moposa Villón (Mecánico), Sargento 2º. Gabino Portocarrero L. (Maniobras), Cabo 1º. Enrique Portocarrero L. (Maniobras), Cabo 1º. Washington Marquez Espinoza (Aceitero), Cabo 2º. Eduardo Hidalgo (Maniobras), Marinero 2º. Milton Plaza Escobar (Aceitero).
Personal de Artillería Antiaérea: Cabo 1º. Luis Muñoz, Cabo 2º. José Luis Valverde, Cabo 2º. Juan Chicaiza, Cabo 2º. Ernesto Jalón.
Conscriptos: Armando Baco Fiallos, Bolívar Pin, Aquiles Carriel, Gerardo Guncay, Carlos Carrera, Sixto Murillo.
Voluntario: Juan Nieto Sánchez Honor y Patria EL COMDANTE INT. DEL BUQUE f) Rafael Moran Valverde Teniente de Fragata ANEXO "D" LOS HÉROES DEL "CALDERÓN" La nómina de la Tripulación consta en el Decreto Ejecutivo No. 1389, del 20-JUL-1949, expedido por el señor Galo PLAZA, Presidente Constitucional de la República, por medio del cual se les concede la Condecoración "Abdón Calderón" de Primera y Tercera Clase.
Por su importancia a continuación se transcribe dicho decreto.
Autógrafo Hoy se expidió el siguiente Decreto Ejecutivo No. 1389 Galo PLAZA Presidente Constitucional de la Republica, C o n s i d e r a n d o:
Que el Combate de Jambelí constituye una acción honrosa para la Marina ecuatoriana; que todo el personal participante en dicho combate se distinguió por su serenidad y valor; y en vista de los méritos encontrados por la comisión especial investigadora, D E C R E T A: Art. 1.- Concédese la Condecoración "Abdón Calderón" de Primera Clase, a los siguientes Oficiales de la Marina de Guerra que combatieron a bordo del Cañonero "Abdón Calderón", contra el destructor peruano "Almirante Villar", el 25 de julio de 1941:
Teniente de Fragata Rafael Morán Valverde Teniente de Fragata Ing. Abraham Game Alférez de Navío Sanidad Dr. Víctor Ludeña Ontaneda Alférez de Fragata Eje. César Endara Peñaherrera Alférez de Fragata Eje. Manuel Nieto Cadena Alférez de Fragata Efraín Cornejo Sánchez Alférez de Fragata Ing. Sergio Pazmiño Egas Alférez de Fragata de Cmsto. Alfonso Darquea Moscoso Oficial de Mar de 3ª. Víctor Hugo Morán Villena Art.2.- por haber tomado parte en el mismo combate, Confiérese la Condecoración "Abdón Calderón" de Tercera Clase, al siguiente personal de Tripulantes:
Sargento 1° Víctor González Yerovi Sargento 1° Daniel Ayora Lafebre Sargento 1° Santiago Cantos Cordero Sargento 1° José Chiguano Andagama Sargento 1° José Campuzano Zea Sargento 2° Santos Avilés Maldonado Sargento 2° Rosendo Quimí González Sargento 2° Humberto Mazón Valencia Sargento 2° Gerardo Viteri Montoya Sargento 2° Luis Falconí Villagrán Sargento 2° José Velasteguí Romero Cabo 1º Gilberto Garcés Tamayo Cabo 1º Martín Ayoví Canga Cabo 1º Julio López Ortiz Cabo 1º Tarquino Cifuentes Ruiz Cabo 1º Juan de Dios Barzola Peña Cabo 2º Juan Carrera Cabrera Cabo 2º Víctor AIcívar Barreiro Cabo 2º Oscar Gaspar Vivar Cabo 2º Manuel MoIán Bodero Cabo 2º Rosendo Toral Zaruma Marinero 1º César Zambrano Pérez Marinero 1º Cristóbal Cruz Suárez Marinero 1º Camilo Oñate Domínguez Marinero 1º Francisco Montoya Alava Marinero 2º Heriberto Albán Bosques Marinero 2º Ángel Arturo Salem Marinero 2º Luis Duque Peña Marinero 2º Olmedo Hurtado Guevara Marinero 2º Manuel Sánchez Bravo Marinero 2º Iginio Malavé Marinero 2º Guillermo Ortiz Aguilar Grumete Alejandro Martínez Moreira Grumete José Jiménez Madrid PRESTANDO SERVICIOS: Suboficial Mecánico Manuel Moposa Villón Cabo 1º Aceitero Washington Márquez Sargento 2º Gavino Portocarrero L.
Marinero 2º Milton Plaza Escobar Cabo 2º Enrique Portocarrero Lastre Cabo 2º Eduardo Hidalgo SOLDADOS DEL ANTI AEREO: Cabo 1º Luis Muñoz y Luis Valverde Cabo 2º Juan Chicaiza y Ernesto Jalón Conscriptos Armando Fiallos, Bolívar Pin, Aquiles Carriel, Gerardo Cuncay, Carlos Carrera, Sixto Murillo.
Voluntario Juan Nieto Sánchez.
Art. 3.- Las preseas se entregarán en la ocasión que señalará el señor Ministro de Defensa Nacional.
Art.4.- El señor Ministro de Defensa Nacional, queda encargado de la ejecución del presente Decreto.
Dado en Quito, en el Palacio Nacional, a 20 de Julio de 1949.
30-ENE-1952, en la misma presidencia del señor Galo PLAZA, se expidió el Decreto No. 0164 por medio del cual se otorga la condecoración "Cruz de Guerra" a Jefes, Oficiales e Individuos de Tropa que han comprobado actuación destacada en la campaña internacional de 1941. La nómina contempla a personal de la Marina y del Ejército, entre los primeros se incluye a la Tripulación del cañonero "Calderón".
En la Orden General de la Armada No. 23 del 01-DIC-60, se publicó el Acuerdo del Honorable Congreso Nacional declarando Héroes Nacionales a la Tripulación del "Calderón", el mismo que por su importancia histórica se transcribe a continuación:
Art. 1ro.- "El congreso de la Republica del Ecuador.- considerando.- que el 25 de Julio de 1941, para la vida de la República constituye fecha gloriosa, y significativa, pues, el buque de la Armada Nacional "Cañonero Abdón Calderón", bajo el mando del señor Capitán de Corbeta, don Rafael MORÁN Valverde, Oficiales y Tropa, con pundonor, lealtad y dignidad, en circunstancias que se encontraban en aguas adyacentes al canal de Jambelí, en el golfo de Guayaquil, libró cruenta y esforzada batalla naval en condiciones desiguales, derrotando al destructor de la Armada peruana, "Almirante Villar".- Que la causa o motivo por las que se realizó esta contienda obedece al hecho cierto e indiscutible de que las fuerzas peruanas intentaron bloquear el puerto de Guayaquil, comprometiendo la seguridad del Estado. Que es de justicia que el parlamento ecuatoriano rinda los honores y privilegios que les corresponde a todos y cada uno de los Oficiales y Tripulantes de la citada acción naval de Jambelí, como corresponde en retribución de esta gloriosa acción.
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