Descargar

Diez tesis acerca del binomio educación y comunicación


  1. Yaraví: una radio, una propuesta de comunicación
  2. Binomio periodismo-educación en el conversatorio regional
  3. Los periodistas
  4. Ojo que llora y periodistas mártires
  5. Encrucijada a los periodistas radiofónicos
  6. Bibliografía

El presente trabajo busca replantear uno de los grandes y aún vigentes temas de la problemática educativa, la misma que hace años era un problema y hoy lo sigue siendo. Ubicado en la década oprobiosa de la manipulación de la prensa por los gobiernos de la década del 90 e el Perú, muchos de los males aún se mantienen aunque con una cara nueva, vino viejo en botellas nuevas.

PRIMERA TESIS: Los debates y decisiones que busca fortalecer el proceso de descentralización educativa y que ésta se haga para una educación con equidad y de calidad en Arequipa, en realidad no es nuevo y cuenta con una producción literaria abundante. Pero lo que sí es novedoso es que estas controversias se hagan en espacios locales, con periodistas arequipeños y con docentes y estudiantes arequipeños, es decir, de cara con la realidad concreta, con un ánimo efectivo de aporte y tratar de marcar hitos en eso que se ha llamado "educación de calidad".

SEGUNDA TESIS: La primera disquisición en esta relación periodismo-educación implica deslindar qué entendemos por "educación de calidad" y eso supone evitar confundir a la "educación" con "escuela" porque lo educativo comprende una formación más integral que los muros o programas dentro o alrededor de una aula; tampoco debe confundirse la tarea formativa con tarea exclusiva de profesores, si bien la tarea profesional le corresponde al profesor, debemos tener presente que ahora hablamos de una sociedad educadora; y finalmente, librarse de la confusión que la excelencia educativa se mide por cuantos estudiantes ingresan a la universidad o los mal llamados "resultados" (premios, diplomas, trofeos, copas, medallas) porque lo educativo tiene vértices más complejos que lo material. En la escuela se forman personas y no futuros cachimbos.

TERCERA TESIS: Entonces, la educación de calidad está relacionado cuanto menos con tres aspectos: primero, la calidad de vida de los estudiantes y profesores (adecuadas condiciones de salud, por ejemplo); segundo, la satisfacción positiva de los indicadores del proceso y producto del aprendizaje dentro y fuera del aula (modelo crítico y cooperativo del aprendizaje, por ejemplo) y tercero, los recursos y herramientas instaladas en la escuela que facilita una sociedad educadora (acceso a empresas y bibliotecas virtuales, por ejemplo). Si ésta premisa es válida es fácil identificar el rol del periodismo puesto que el periodismo es parte de la sociedad educadora. Recordemos que en el «Informe Delors» de la UNESCO se enfatiza que la educación tiene como fundamento cuatro grandes pilares o aprendizajes: aprender a conocer, aprender a hacer, aprender a convivir con los demás, y aprender a ser. Todo esto significa que la calidad educativa no resulta de los logros de excelencia de una sola de sus áreas. Entonces, la calidad educativa no se mide exclusivamente con pruebas de matemáticas o comunicación al estilo europeo ni con la extrapolación fácil de categorías empresariales de "calidad total" o "reingeniería" (como confundir al estudiante con un cliente, al director con un gerente, a la escuela con una empresa, a la educación con un servicio, a los administrativos con recursos humanos), sino con indicadores que encadenen un espectro más amplio (competencias). La calidad educativa implica ver las interrelaciones entre las causales que producen los resultados, es decir, cualquier evaluación de la calidad debe tener en cuenta la línea de base del cual se parte, los niveles de productividad en esas condiciones particulares de aprendizaje y no sólo los méritos que una hoja de dos o más horas pueda evidenciar (como la que se obtiene con un examen que elaboran algunas empresas pagadas por el propio Ministerio de Educación).

CUARTA TESIS: Hablar de "educación" supone necesariamente hacer referencia a qué educación nos referimos. Si nos referimos a la "escuela", igual, a qué tipo de escuela hablamos. Sin menospreciar a ninguna de ellas, hay diferencias sustanciales entre la escuela pública y la privada, diferencias al interior de las escuelas públicas y al interior también de las escuelas privadas. No siempre la educación privada es mejor que la pública, muchas veces las escuelas privadas sólo las distingue el pago de pensiones y no hay correlato en términos de formación de capacidades en el proceso de aprendizaje. Algunas escuelas privadas han hecho de las salas de cómputo parte de su marketing más no de su verdadero valor agregado. De allí que, la educación pública debe mejorar la gestión que supone la construcción colectiva de Proyecto Educativo Institucional, donde se plasme las propuestas pedagógicas, las nuevas estructuras y que las innovaciones sean continuas y capaces de comprometer a toda la comunidad educativa, comprometer -por ejemplo- a los medios de comunicación. Con la creación de los Consejos Educativos Institucionales se permitirá potenciar mejor este rol social de la escuela y el papel de los medios como agentes socializadores. En la escuela debe ejercerse la democracia participativa que implica procesos sinceros, ágiles y creativos para que la comunidad educativa (estudiantes, docentes, directivos, padres y madres de familia, personal administrativos y de servicios) sean parte del logro de las competencias y capacidades. Y en esos planes y esos esquemas de trabajo considerar el rol de los medios de comunicación que no sólo son empresas comerciales para entretener o difundir noticias sino son educadores por excelencia, mal educadores o buen educadores, depende de sus motivaciones y sus roles que hayan asumido y se les demande. No somos consumidores, somos ciudadanos.

QUINTA TESIS: Pero todavía en Arequipa tenemos algunos medios escritos, radiales o televisivos donde sus noticieros o formatos están plagados de excesiva propaganda, de la simple lectura de diarios, de comentarios sesgados e improvisados, de la política de la "grabadora que no miente", donde a todas luces se "pelean" por coger el micrófono o hasta discrepan estando al aire en formas de mal gusto. Algunos locutores se creen dueños de la verdad, hasta "riñen" y "estropean" al entrevistado, hasta hacen interrogatorios a estilo judicial, y lo peor de todo mutilan o recortan lo dicho por las fuentes. Otros hablan groserías o "malas palabras", y se sienten por ello "directos y sinceros", otros buscan primicias aún a costa de dañar la vida privada de los personajes hecho que se refuerza por la subida del rating (que tanto los y las enloquecen). Otros periodistas se enceguecen y se entregan a intereses subalternos para buscar beneficios personales, tienen un afán desmedido de hacerse famosos o populares, y así se ponen en el papel rastrero de autoridades o empresas para a cambio canjearlo con obtener un puesto, ser docente en alguna universidad o instituto o ser contratado en alguna Oficina de Relaciones Públicas de algún municipio o colocar a un familiar en una dependencia pública o privada, obtener algún terrenito, buscar entradas libres a espectáculos o asientos preferenciales en algún desfile.

Todavía tenemos periodistas que van a las conferencias de prensa sólo a degustar. Los hay de los que cortan o niegan el acceso al comentario o la opinión contrapuesta a la que difunden. Algunos medios escritos exhiben errores y horrores de ortografía imperdonables, difunden casi perpetuamente propagandas pornográficas o de servicios de meretricio en sus páginas bajo el decorado que la ley no lo prohibe; otros medios elevan indiscriminadamente sus tarifas comerciales al cenit en época de campañas electorales generando una pésima educación porque hace ver a la política como mero negocio de los que tienen buen flujo de caja. Arequipa tiene – hay que decirlo- algunos periodistas improvisados que saltan a la política para asaltar el erario. Hoy en día se ha hecho muy fácil poner una emisora o comprar un programa, está de moda la propaganda disfrazada de noticia; el poder económico puede más que el poder educativo. Aunque duela decirlo, parte del periodismo en Arequipa no es ajeno a la mediocridad ni a la corrupción que exhibieron los medios limeños.

SEXTA TESIS: Pero también hay periodistas y medios con identidad regional, que matizan las opiniones y comentarios con pluralismo, que están interesados sinceramente en informar, que tienen ética a prueba de balas, que exhiben calidad personal y son ejemplares en su familia, su barrio y su trabajo. Hay periodistas con vocación, que toman lo educativo como enfoque de formación. Que no se dejan seducir por lo fácil ni por lo lioso. Esos son periodistas de calidad, esa es la primera exigencia para ejercer tan noble función.

SÉPTIMA TESIS: En nuestra ciudad, hay una avalancha de la cultura musical, visual, cinematográfica a través del VCD y DVD. La piratería ha resultado beneficiosa para las clases pobres que tenían prohibido acceder a esta gran información que resultaba también un espacio de formación. Pero esta cultura cinéfila supone también la creación de mecanismos de protección a la propiedad al mismo tiempo que facilite el acceso a la escuela. Ha resultado positivo el proyecto de la videoteca Bakus que se lanzó hace años en varios colegios locales. O la experiencia de algunas ONGs que ponen a disposición de la escuela sus videos educativos y culturales. Sin embargo, cuando critican la enseñanza en las escuelas algunos periodistas viven colgados a la época en que estudiaron la educación primaria o secundaria, y desde esa visión "retro" juzgan a la actual educación, pero es bueno saber que un buen número de colegios ya tienen DVD, VHS, TV, computadoras, filmadoras o no les resulta difícil prestárselo, en ese sentido la escuela pública como privada ha avanzado. Sin embargo, hay concepciones aún pesimistas o facilista de algunos docentes, que a pesar que lo tienen no lo usan o lo usan mal: felizmente son minoría.

OCTAVA TESIS: En Arequipa, hay una tendencia educativa a escuchar noticieros radiales por las mañanas, leer diarios hasta el mediodía y ver televisión por la tarde y las noches. De lo que se diga-o-no allí, se suele percibir la realidad e incluso definir varios problemas o realidades en la escuela como las famosas "suspensiones de clases". El diario escrito no tiene muchos admiradores tanto por el costo – que ha bajado- como por la cultura de "no leer". Hemos saltado de la cultura oral a la audiovisual dejando de lado la cultura escrita. Por ello, la escuela debe ayudar a promover la decodificación de mensajes, desechar la vieja fórmula de emisor-receptor por la de emisor-perceptor, porque el que escucha o ve o lee, no es pasivo, sino al mismo tiempo devuelve opiniones, pareceres, pero eso requiere una cultura distinta a la que estamos acostumbrados. Tampoco caer en los enlatados aburridos de programas seudo educativos que ni al profesor le agradan. Se trata de que las escuelas de comunicación y educación de las universidades o institutos miren más allá de formar enseñadores de cursos sino que deben formar profesionales de la educación en el completo sentido de la palabra.

NOVENA TESIS: El uso de internet y las computadoras debiera ser otro punto de encuentro entre la comunicación y la educación. Algunos estudiosos sostienen que los niños e incluso los adolescente no deben tener acceso a las computadoras o por lo menos al tipo de programas que llega a la escuela porque forma sólo en el pensamiento rígido, de dos opciones, algorítmico y que finalmente robotiza la capacidad de las personas; que limita el trabajo a lo que diseñó otro que tiene sus propios intereses y su propia lógica. Sin embargo, la computadora y las TICs son herramientas a servicio de la persona y depende el uso que le demos, lo que cuestionemos y lo que seamos capaces de crear. Pero esperamos que el programa Huascarán (uso de las TICs incluido) asuma el reto de eliminar el uso abusivo y libertino del internet en la niñez y cree en su vez una cultura crítica, reflexiva y responsable de la información y el conocimiento. También vemos con preocupación que existan docentes que no han ingresado al campo de la informática, que no tienen ni computadora en casa o peor, que no saben cómo manejarla. Menos aún tienen dirección electrónica, un blog o web, perdiéndose así el ilimitado mundo del internet. Eso debe cambiar con mucha prontitud. Ahora que la educación está en emergencia debiera tomarse decisiones prontas y efectivas para que estudiantes y docentes accedan al mundo virtual.

DÉCIMA TESIS: Finalmente, el rol del periodismo en la educación de calidad está marcado entre tres tendencias: la comercial-sensacionalista, la formalista-ingenua y la comunicativa-creativa. Veamos:

  • a. La tendencia comercial-sensacionalista es la que se lucieron en los años sombríos del fujimorismo -y que aún se mantiene- donde el periodismo está plagado de sensacionalismo, de la noticia amarilla, de la noticia digitada, de la jerga vulgar, de para difundir sólo lo negativo en educación (corrupción, paros, tomas de local, huelgas, violaciones, etc.).

  • b. La tendencia formalista-ingenua cree que los educativo es cuestión de tener un espacio o columna escolar, de "dictar clases" desde los medios, cultivan un público reducido, pesado y frustrado, algunos se complacen con tener un profesor que "diserta" temas educativos o juega con los niños al estilo "payasito de cumpleaños".

  • c. La tendencia comunicativa-creativa tiene un enfoque integral de lo educativo, que hace realidad una sociedad educadora, no lo reduce ni a lo fácil ni a lo formal, se preocupa por comparar las versiones o posiciones involucradas, no condicionan lo educativo a la propaganda ni a la denuncia barata, aquí los periodistas tienen formación y certificación profesional.

El rol del periodismo debiera tener esta tercera tendencia. Formar y fortalecer puentes entre la educación y la comunicación implica aumentar los encuentros de diálogos entre profesionales, donde la escuela -por ejemplo- vaya a los medios y estos vayan a aquellos. Cuidar la formación de los periodistas escolares. Implica rechazar la tendencia sensacionalista, cultivar las buenas noticias (ya basta de una noticia "negativista" o "de la muerte"), producir programas de los más variados pero alegres y creativos. Los dueños de los medios debieran tener más cuidado con el personal que contratan.

Los docentes debieran despercudirse del facilismo que anquilosa su trabajo, deben romper los esquemas rígidos del aula, producir o coproducir mensajes o microprogramas, librarse de ver al medio como un instrumento más sino verlo como un aliado en la tarea de formar hombres y mujeres sanos, educados y productivos. Los profesores –previa preparación profesional- debieran apoderarse de los medios para que se oriente su labor efectivamente a lo educativo. Ambos profesionales debieran reconocer las propias limitaciones para observar y aprender de las fortalezas comunes que la descentralización educativa exige.

APÉNDICE 1:

Yaraví: una radio, una propuesta de comunicación

En el dial de 930 AM y en 106.3 en FM, cada día, cada hora, los arequipeños hemos sentido que se ha abierto a nuestros oídos -desde hace 14 años- otra forma de hacer comunicación, de encarar los mensajes, de hacer campañas sociales, de promover la participación ciudadana y de generar nuevas maneras de hacer periodismo. No se trata de espacios buenos con fachada de noticiero o cargarla con música de moda, o peor, dedicada al chisme, al insulto o al exceso de propaganda.

La propuesta que hablamos se inicia un 27 de octubre de 1993, con el padre Eloy Arribas Lázaro, junto a distinguidas personalidades como Hugo Condori, Leonor Luna, Hugo Ramirez, Jaél Díaz, Yolanda Ahumada, entre otros que dieron nacimiento al Centro de Comunicación Popular Ama Kella (no seas ocioso) para revalorar la cultura andina en la segunda ciudad del Perú.

Primero fueron los altoparlantes (radio popular) persistentes y con otra magia, las bocinas que se escuchada semanalmente en las zonas altas de Miraflores. No fueron en vano esos años de formarse en el periodismo alternativo, al que Mario Kaplun desarrollará con magistral sencillez. Fueron los años de la gestación de la CNR (Coordinadora Nacional de Radio) y del influjo persistente de crecer y aprender al lado de los principales sucesos sociales, sindicales, juveniles y políticos de estas épocas. En esos años había un arte distinto con el micrófono y la inseparable grabadora, los corresponsales, los conductores, los guiones, se entrecruzaban con el surgimiento de un pueblo ubicado en la parte alta del distrito de Miraflores pero poco a poco abarcó toda la ciudad con una red de voluntarios y promotores. Como no recordar la personalidad alegre, clara y de compromiso del padre Eloy Arribas que siendo un religioso pasó de la simple prédica evangelizadora a la educación, la organización y la comunicación popular.

Luego fueron los años de tener noticieros y algunos programas en Radio Onda Sideral, del cual saldrá una emisora propia que rinde culto a una de las expresiones más típicas de nuestra blanca y heroica ciudad: el Yaraví. Decir que Radio Yaraví estuvo junto con la evolución del movimiento popular no es mentir ni ser panegírico. Una prueba de ello fue la intervención en el Arequipeñazo a raíz del intento de privatizar la empresa de generación eléctrica. La radio no sólo era un espacio de diálogo y de análisis, sino de búsqueda de una democracia centrada en la persona. También desde la radio se impulso la reflexión crítica de la vida política, censurando a la dictadura, la lucha contra la corrupción, o hasta campañas para ayudar a los desvalidos o hacerse presentes en fechas como navidad o día de la madre.

Por eso saludamos a radio Yaraví, a sus programas como el noticiero, "El trencito de mi barrio", "Mil colores", "La picantería". Esta emisora ya es parte de la identidad periodística local, nacional e internacional. Se apartó del sensacionalismo, del amarillismo, o de la cómoda pose de intelectual radial. Yaraví -en sus 14 años- ha optado por un periodismo alternativo, alternativo a los estereotipos limeños y también a los que hasta hace poco se creían dueños de la radio arequipeña. Este esfuerzo no es fácil sobretodo cuando no se sigue ingenuamente las reglas del mercado, y se busca financiar alternativas que vayan a una economía solidaria.

APÉNDICE 2:

Binomio periodismo-educación en el conversatorio regional

Recientemente el Núcleo Educativo Regional -que congrega a diferentes instituciones y personas que buscan fortalecer el proceso de descentralización educativa y que cuenta con el apoyo de Foro Educativo- ha planteado en el debate local a través de un "Conversatorio Regional" cuáles son los retos del periodismo para con la educación de calidad en Arequipa, es decir, de qué manera los periodistas y los medios de comunicación se entrelazan con una educación de calidad. El tema en realidad no es nuevo y cuenta con una producción literaria abundante pero lo que sí es novedoso es que estas controversias se hagan en espacios locales, con periodistas arequipeños y con docentes y estudiantes arequipeños, es decir de la realidad concreta, con un ánimo efectivo de aporte y tratar de marcar hitos en eso que se ha llamado "educación de calidad para todos y todas".

Malos Y BUENOS periodistas

Todavía en Arequipa tenemos algunos periodistas dedicados a leer diarios o copiar información de Internet. Todavía tenemos una masa de locutores o periodistas dedicados a opiniones sesgadas, de preferencia por tal o cual político, con sus voces somníferas o su estilo visceral que arruina el día o medio día escucharlos. También tenemos periodistas que se dedican a atacar a casi todos –salvo sus amigos- aún sin conocer bien los temas ni haber ejercido un mínimo de investigación, sueltan sus sentencias y generan escándalos del cual viven o por lo menos les causa placer. Hay semanarios locales que aprovechan sus páginas para atacar a su ex – centro de trabajo, le tienen un odio enfermizo y viven pendientes de cada paso para encontrar defectos, llegan al extremo de rebuscar y husmear la vida privada de los funcionarios públicos pero se callan cuando se trata de injusticias o delitos cometidos por empresarios privados.

Aunque hay también periodistas que hacen su labor en medios no muy conocidos, son quienes suelen ejercen un periodismo digital, que editan revistas de poco tiraje pero que se dirigen a sectores menos embobados con las trivialidades de la vida mediática, que tienen identidad regional, que matizan las opiniones y comentarios con pluralismo, que están interesados sinceramente en informar, que tienen ética a prueba de balas, que exhiben calidad personal y son ejemplares en su familia, su barrio y su trabajo, hay periodistas con vocación, que toman lo educativo como enfoque de formación. Esos son periodistas de calidad.

SINERGIA DE CALIDAD

La primera disquisición en esta relación periodismo-educación implica deslindar qué entendemos por "educación de calidad" y eso supone evitar confundir a la "educación" con "escuela", no confundir la tarea formativa con tarea exclusiva de profesores y librarse de la confusión que el profesor es el único quien enseña. Entonces, ha quedado claro que una educación de calidad debe recuperar cuanto menos tres dimensiones: la calidad de vida de los actores (estudiantes y profesores), la satisfacción positiva de los procesos de aprendizaje (se aprenda de verdad) y que posea recursos y herramientas de una sociedad educadora. Si esta premisa es válida es fácil identificar el rol del periodismo.

La educación es un proceso de comunicación, y la comunicación es un proceso de educación. Educa quien comunica y comunica quien educa. Es complejo buscar las fronteras puesto que se yuxtaponen a cada instante. Sin embargo, el periodista actual difiere mucho del profesor actual. El periodismo está marcado con el ejercicio en algún medio, si no se cuelga a un medio deja de ser tal. El profesor está absorto al aula y sometido a las cuatro paredes de una enseñanza unidireccional. En la realidad los dos profesionales no hacen sinergia, hasta a veces se ven como enemigos. Los profesores culpan a los periodistas por crear un país con baja autoestima, de la provocación por la muerte, de la pornografía en las primeras planas, por la escasa o distorsionada desinformación, por haberse vendido a los gobiernos. Mientras que el periodista se queja que el país anda tan mal porque los profesores no enseñan a leer y porque los estudiantes no tienen capacidades de razonamiento lógico matemático, porque la educación no enseña a crear tecnologías, porque no se enseña valores en la escuela. Sin embargo, estas culpas buscan explicar el problema como si estuviera fuera de uno cuando está en ambos y en otros lados.

Requerimos entonces buenos profesores aliados de los buenos periodistas porque en ambos se expresa la necesidad de regenerar paradigmas, de cambiar personas, de crear nuevas tradiciones, nutrirse de la mejor de sus aportes y empezar a caminar despacio pero firme el mundo donde puedan caber todos y todas.

APÉNDICE 3:

Los periodistas

I. VALORANDO A LOS PERIODISTAS

Cada primero de octubre se conmemora el día del periodista peruano en recuerdo a la fundación del primer diario nacional, y desde entonces tenemos una larga lista de invalorables periodistas que han creado una cultura de la información y de la crítica a pesar de las circunstancias adversas. Ya pasó la época en que el periodismo no era una profesión, o que el simple poder económico mandaba que debiera informarse. Hoy en día ser verdadero periodista supone obligaciones profesionales y morales muy elevadas. Supone además un riesgo porque hay poner el trabajo, la familia o hasta la vida en juego.

Sin embargo, debemos dejar el facilismo de tomar el micrófono o la computadora para esgrimir rápidamente seudo noticias o comentarios que sólo buscan cumplir con un empresario o con algún apetito personal. Extraer la noticia tal cual es, o por lo menos con la mayor objetividad, es muy difícil. No miramos la realidad sólo con los ojos sino con el cerebro donde se anida toda una cultura, una concepción de las cosas, una explicación (científica o vulgar) de los acontecimientos. Por eso, la labor periodística no puede entregarse al poder del dinero o de los intereses oscuros. La verdad se defiende hasta con la vida.

En este país concreto se ha descubierto un interés muy tendencioso en dominar y copar los medios, por eso no nos resulta raro que la hija de la presidenta del Congreso (Mercedes Cabanillas) haya sido nombrada miembro del directorio del Instituto de Radio y tv nacional. Este hecho mancha el homenaje al periodismo libre ya que se sigue asegurando clientelaje más allá de las conversaciones secretas (Torres Caro con Genaro Delgado de Panamericana). Esa práctica tiene vieja data, así se paga favores y sobretodo se asegura una ideología en los medios. Más allá de las competencias merecidas o no de la hija de Mercedes Cabanillas, el poder de García no radica en quien conduce los programas sino esencialmente en la línea editorial, en la forma de abordar los problemas nacionales, en el sesgo que se impregna a la realidad desde el directorio. No podemos pedir que todos "piensen como nosotros" pero por lo menos podemos pedir que "piensen".

Por eso, celebrar el día del periodista nos merece un sincero reconocimiento a quienes con vocación se preocupan por entregar noticias y comentarios cargados de información útil, de actualidad, de veracidad, de pertinencia y de mucha calidad profesional. A veces hasta en contra de quienes son sus empleadores. Hacer periodismo supone doble responsabilidad, en captar los hechos y devolverlos con el valor agregado que da la persona, el estilo, el periodista. Por eso, es bueno diferenciar al dueño del medio periodístico del periodista como persona. Algunas veces es una feliz coincidencia que ambas sean aparejadas (empresa y profesionalismo).

La época fujimorista corrompió a los medios, pero hoy algunos medios buscan salir de este oscuro pasado. Los periodistas deben cultivar el pluralismo, por ejemplo, que no radica en que se dé tribuna a todos los candidatos sino en saber acoger lo bueno en la diversidad de opciones sean o no de nuestro encanto. Plural supone reconocer que hay otros sectores y personas con enfoques diversos y que tienen el derecho a emitir sus pareceres.

Finalmente, advertimos al periodismo no dejarse seducir por el rating ni por la fama. Eso siempre ha sido temporal. Los grandes conductores de TV o radio, han sido fácilmente desplazados por otros nuevos rostros. Así no se mide sus competencias. Tampoco se debe hacer la práctica de enganchar propaganda disfrazada de noticias. El fin no justifica los medios. Las artes periodísticas deben ser más transparentes, más participación de la ciudadanía, camino hacia el cual ya tenemos algunos representantes locales. Esos valores periodísticos no deben desaparecer pase lo que pase. Aunque en realidad el periodismo es el "cuarto" poder del estado debemos honrar al periodismo que tiene una cuota de poder en la sociedad.

APÉNDICE 4:

Ojo que llora y periodistas mártires

Seguramente los nombres de Eduardo de la Piniella,  Pedro Sánchez, Willy Retto,  Jorge Mendívil, Jorge Sedano, Amador García, Félix Gavilán y Octavio Infante, puedan sonar para muchos como nombres raros o desconocidos. Seguramente estaban muy tiernos los que hoy son jóvenes y seguramente estaban muy jóvenes los que somos adultos.

Lo cierto es que se trata de la lista de los profesionales – periodistas mártires – masacrados en la comunidad de Uchuraccay en búsqueda de la verdad. Esto ocurrió a fines de enero de 1983, a inicios de los cruentos crímenes de la guerra interna. Era la época del segundo gobierno de Belaunde, cuando la guerra sucia empezaba a mostrar los costos más allá del campo y más allá de lo andino. Luego siguieron otros crímenes como la matanza en los penales en época de García y la persecución política y corrupción en la época de Fujimori-Montesinos.

El recuerdo de los periodistas asesinados nos da pie para que hoy se pueda hablar con más libertad de lo que significó la guerra interna cuyos costos y culpables aparecen descritos en los sendos informes de la Comisión de la Verdad y Reconciliación CVR. En esa época el periodismo aparecía como un oficio inocuo, en todo caso, protegido. Pero fueron las balas del fuego cruzado de terroristas (senderistas y algunos militares) que azuzaron a los campesinos pobres a confundir en su pobreza quienes eran sus amigos y quienes sus enemigos. La muerte de los periodistas puso en evidencia cómo en el país se trataba la noticia, se burlaba la realidad, se incriminaba a inocentes, se asesinaba a niños y madres embarazadas, sin menor problema, como cosa diaria, porque la "guerra sucia" era efectivamente obscena.

Los periodistas mártires pagaron con su vida la búsqueda de la verdad. Gran distancia con algunos periodistas modernos que les pagan para reproducir la mentira. Esos mártires no dudaron en acudir a la misma fuente para tomar testimonios de los primeros asesinatos en serie. Ellos no se quedaron esperando que la noticia llegue a sus manos, para manejarla o para usufructuarla. Los mártires pagaron el precio de ser recordados sólo en estas pero además enseñaron que su obra trasciende al decir la verdad, para construir una patria de verdad.

Así como fueron asesinados los periodistas, en esa guerra interna murieron miles de mujeres y hombres, unos inocentes, otros culpables, unos militares, otros campesinos, aquellos terroristas, pero todos ellos sencillamente humanos y peruanos. En ese reconociendo a la condición humana que el monumento El Ojo que llora, busca eternizar a los caídos más allá de las intolerancias, más allá de la perversidad, más allá de los fanatismos. Pero resulta que el gobierno y un tinglado de agrupaciones fujimoristas quieren que se destruya el monumento El Ojo que llora, exacerbando odios contra campesinos asesinados que la época de la barbarie trajo. Triste papel de quienes desde el gobierno usando –mal usando- el poder busca polarizar con la muerte, buscan que el Perú se retire de la Corte Interamericana de Derechos Humanos para sacar cuerpo de los crímenes de lesa humanidad cometidos en el país.

En política no hay que ser incautos. Por eso los mártires del periodismo nos enseñaron que tampoco se puede ser ingenuo, que la verdad, que la búsqueda de la verdad, que la patria de verdad se construye a veces con esos sacrificios humanos que implican ofrendar la existencia para recibirla en otros que aprenderán de la lección.

APÉNDICE 5:

Encrucijada a los periodistas radiofónicos

Ha pasado el día de los periodistas – primero de octubre- y de la fecha en que se mandan saludos a por doquier a todos los periodistas arequipeños hagan o no su labor con elevado profesionalismo. Pero del periodismo televiso y la prensa, me cabe destacar a quienes hacen periodismo radial. Allí podemos comprobar que no hay medio periodístico mejor que otro, sino periodistas mejores que otros.

La radio en nuestros días, se ha convertido en un medio para "estar informado" o muchas veces "mal informado". Pero la radio hoy se ha reducido a dos cosas: noticias y música. Es una radio de entretenimiento, no de información. Eso ha mellado otras funciones o tareas tan importantes como orientar, debatir, celebrar, informar, o sencillamente acompañar. Aún en sus tareas clásicas –noticias y música- la radio todavía no se ha elevado a estándares competitivos. El problema de la radiodifusión no es del tipo de señal, la onda de la frecuencia –amplitud modulada o frecuencia modulada-, tampoco es un problema de equipos o voces sonoras, generalmente impostadas (léase impostoras). El periodismo radial en Arequipa agoniza por falta de verdaderos periodistas. No vamos a poner en duda su sintonía o su melodiosa voz, sino su calidad profesional.

Sin duda, la ciudadanía arequipeña escucha más la radio no sólo porque es más económica sino porque es fácil de apagar la radio o cambiar de emisora, si no nos agrada; esa versatilidad la hace más acogedora, así el cliente tiene el derecho a escoger. El radioescucha puede usar el control remoto. En cambio, el periódico esconde sorpresas cuando se lo compra porque muchos de sus titulares son sólo eso, y nada o poco de contenido. Pero el mal de la prensa se transporta a la radio cuando este último sólo lee lo producido por alguna deficiente prensa. Claro y siempre hay excepciones, pero si nos damos la molestia de sintonizar una emisora por día, nos daremos con sorpresas sorprendentes. Como: unas emisoras que se enmascaran en personajes ficticios para atacar a quienes no podrían hacerlo de modo directo porque sino se ganarían una querella; otras emisoras que se encadenan a comerciales que les roba más de la mitad de su producción periodística; no faltan aquellos dedicados a la denuncia furibunda o al escándalo exacerbado, sin pruebas y sin indicios. Algunos periodistas han caído en un solipsismo peligroso. Solipsismo es  una forma radical de subjetivismo según la cual sólo existe o sólo puede ser conocido el propio yo. A los periodistas solipsistas dudo que los escuche sus propios familiares.

Pero, una cosa común a muchas radioemisoras es que los periodistas se sienten sino dueños de la verdad, bastante parecidos a ella. No hay en Arequipa todavía una emisora –excepto el centro de comunicación Ama Kella- que haya invertido en el periodismo radical, es decir, en consagrar su labor al periodismo. La mayoría de emisoras están en manos de un dueño que entrega o vende espacios a distintos equipos humanos y según la oferta y la demanda se inclina hacia uno u otro lado. Cada uno, en ese espacio, hace así lo que puede o lo que quiere.

Un periodismo con periodistas con serias limitaciones produce espectáculos como rumores y no crea conciencia ni influye en el desarrollo de las personas que se dan el lujo de sintonizarlas. Juegan al teléfono malogrado. Algunos medios han abusado del consumo de las llamadas como sinónimo de que es la verdadera opinión pública, si cabe alguna; el colmo es que incluso se dice con sin tapujo que los que opinan por teléfono dan la "voz del pueblo" que es la "voz de dios", como si todos tuvieran teléfono o podrían invertir en llamadas para opinar, sin saber si efectivamente lo harán esperar minutos sin que telefónica cobre la renta básica. Nuevamente en este caso hay dignas excepciones.

Mención aparte merece los comerciales disfrazados de noticias, y los reportajes trucados para favorecer a uno u otro grupo. Claro que no podemos pedir imparcialidad a los periodistas, porque siempre deben ser parcializados, pero con la verdad.

Como el uso de la radiodifusión es un acto público, aunque no estatal, debemos demandar una mejora de la calidad de sus profesionales, pero esta mejora no busca enfrentar a nadie ni mandar al paredón a nadie, sino simplemente dejar que nadie haga mal uso de los medios de comunicación radial.

Bibliografía

  • ALBALA, ALFONSO (1970). Introducción al periodismo, Madrid.

  • AGUILERA, J.M., (1996). Aprendiendo en la era de la información, Cefocop, La Coruña,

  • BORONAT MUNDINA, J. (1995). Medios de comunicación y educación: análisis de contenido de la prensa educativa, UNED, Palencia.

  • CAPELLA RIERA, JORGE (1987). Educación Un Enfoque Integral planteamientos para la formulación de teorías. Editorial Cultura y Desarrollo. Lima, Perú.

  • CHIROQUE CHUNGA, SIGFREDO. (2000) Desarrollo Magisterial. MED-UPROD. Lima 2000.

  • ENCINAS, JOSÉ ANTONIO. (1932) Un ensayo de escuela nueva en el Perú. Imprenta Minerva-Sagástegui 669. Lima.

  • FORO EDUCATIVO (2005) Voces de las regiones Propuestas y Experiencias en Descentralización en Cuatro Regiones del Perú. Lima, Perú.

  • GONZALES REY, FERNANDO. (1999) Comunicación Personalidad y Desarrollo. Editorial Pueblo y Educación

  • MARTÍNEZ SÁNCHEZ, E. (1994). El periódico en la educación de las personas adultas, Grupo Comunicar, Huelva,

  • NIÑO ROJAS, VÍCTOR MIGUEL (1994) Los procesos de la comunicación y del lenguaje. Colombia.

  • RAIGÓN PÉREZ DE LA CONCHA, GUILLERMO (1999): El periodismo educativo: objetivos. Revista Latina de Comunicación Social. España.

  • UNESCO (1998). La educación encierra un tesoro. Santillana, Madrid.

  • VELA QUICO, GABRIEL (2004) Generación de Periodistas Alfeñiques, revista en conmemoración de las Bodas de Plata de la Promoción 1979 del Colegio Nacional de la Independencia Americana de Arequipa

  • VELA QUICO, GABRIEL (2008) Percepción de la labor educativa de los diarios según el manejo de titulares de "correo" y "el pueblo" en docentes y estudiantes de educación de arequipa (Tesis de Segunda Especialidad en Periodismo Escolar UNSA)

 

 

Autor:

Dr. Gabriel Vela Quico