El totalitarismo es un fenómeno de reciente incursión en la formación de la geografía política contemporánea del siglo XX. Su aplicación atiende primordialmente a la creación de una ideología de supremacía racial y étnica, que permite al líder proyectar metas personales sustentadas en la sociedad general, lo cual le otorga legitimidad por medio de la fuerza y la intolerancia. Sus orígenes ideológicos se encuentran en la Revolución Francesa ya que Rousseau postuló que la voluntad general es un enemigo peligroso para la estabilidad de la República. ¿Cómo controlar esta voluntad, si fue la que dio origen y cause a la Revolución?
El concepto de soberanía en una invención genial para legitimar el dominio sobre las masas, limitando así la voluntad de los muchos mediante la manipulación de los mismos muchos. El bien común del pueblo era algo que la Revolución proponía pero el nuevo Estado francés no podía cumplir. Esta meta que implicaba la desaparición de las organizaciones políticas llevaba en sí misma la complejidad que origina toda libertad recién adquirida. Pero aquí entra el problema de toda nación que ha pasado por un movimiento revolucionario, ¿cómo controlar la libertad?
No todos comprendían que era esa nueva libertad, mucho menos como podían ejercerla, lo único que estaba claro era el deseo de una masa de gobernarse por nuevos métodos y personas que no representaran la imposición feudal. Lamentablemente y ante la inexperiencia política, el terror de Robespierre impone una justicia intransigente e inmediata como medida de apremio para garantizar la democracia lograda con la revolución.
Sin embargo, la Revolución no unificó ideologías y las aportaciones que sus líderes hicieron que al pensamiento social tan variado, coinciden tan solo en el pensamiento en torno a la aceptación del régimen feudal como causa de los males del pueblo.
Esta falta de consenso propuso incluso destruir las instituciones puesto que eran estas las que encadenaban al hombre al pasado, ya que el dominio ejercido por sus titulares era similar al dominio del señor feudal.
Por lo tanto, la existencia y permanencia de un líder omnipotente que dirigiera los destinos de la educación la libertad y el pensamiento se volvió un asunto de vital importancia para la permanencia del régimen. Tenemos entonces que la aparición del totalitarismo se encuentra en pleno proyecto. Queda demostrado que cuando se pretende salvar a los movimientos revolucionarios, lo peor que se puede hacer es aplicar un régimen totalitario con métodos de terror para controlar la libertad y aplicar la justicia, como lo hizo Robespierre.
El totalitarismo se caracteriza por ser un régimen antidemocrático, donde el poder se unifica en una sola persona o un grupo reducido que sobreponen la razón de Estado sobre la razón humana. Pretende destruir las instituciones puesto que representan la opresión.
Así mismo controla completamente el sistema educativo y a la prensa, reduciendo sus facultades a la mera contemplación de los avances científicos y tecnológicos ya que estos únicamente se utilizan para bien del sistema y sus miembros. Está por demás hablar de la economía.
Los rasgos básicos de todo régimen totalitario son:
- El Estado tiende a regimentar la totalidad de las relaciones sociales.
- Es el Estado quien controla la mayoría posible todos los aspectos de la vida individual.
- El Estado ostenta rango preeminente, tanto en el plano axiológico y en la efectiva organización de la vida en sociedad, sobre todo cuanto concierne a la existencia de cada individuo.
Importante es aclarar que las dos primeras características no pueden ser sino tendenciales, aunque lo sean muy fuertemente.
Es obvio que ningún Estado está en condiciones de poder interferir en todos los detalles de la vida de sus ciudadanos, pero se entiende que al Estado totalitario le importa regimentar muchos más de esos aspectos –y más a fondo– que lo habitual en cualquier otro régimen.
Al servicio de esta estructura totalitaria básica, se ha hecho notar que el Estado maneja una serie de medios típicos. Pueden clasificarse en dos rubros:
- Libertades de conciencia, expresión, información y educación.
- Libertades políticas, de asociación y en general de participación independiente –individual y grupal– en la formación de la voluntad estatal.
- Libertades económicas, de propiedad individual, producción o comercio.
- Medios negativos, aquello que a los individuos se les prohíbe específicamente. Consisten en grados extremos de falta de libertad en los siguientes rubros principales:
- Partido único en cuyo frente hay un jefe con poderes prácticamente ilimitados o en todo caso, formidablemente amplios y él mismo constituye también la máxima autoridad.
- Economía centralizada.
- Una ideología oficial con alcance de cosmovisión social global y globalizadora (Weltanschauung), impuesta de manera incondicional y coercitiva para la totalidad de la población en el territorio sometido a la soberanía estatal.
- Medios positivos, lo que el régimen hace específicamente para imponerse como tal. Los principales medios positivos son:
- Organización policial aterrorizante, con el objeto de asegurar la efectividad de todos los restantes medios tanto los negativos como los positivos.
Paralelamente al totalitarismo, el autoritarismo se rige por el mando y el poder vertical personificado en un líder que resta valor a sus propias instituciones, procurando concentrar en un reducido grupo la dirección del gobierno, siempre supeditado al líder y con ello eliminar la libertad, igualdad y fraternidad reclamada en la Revolución Francesa.
"Para algunos, la palabra libertad puede significar que cada hombre haga lo que quiere de sí mismo y del producto de su trabajo; mientras que para otros, la misma palabra puede significar que algunos hombres hagan lo que les dé la gana con otros hombres y con el producto del trabajo de éstos. […] El pastor arranca de la boca del lobo a la oveja que iba a ser victimada y, naturalmente, la oveja le agradece como su libertador; pero el lobo lo maldice por el mismo acto, acusándolo de destruir la libertad…" (Abraham Lincoln).
El nazismo y el fascismo sustentan su ideología en el concepto nacionalista y su explotación como factor de identificación, unión y participación. Ambos formaron con disciplina militar a sus miembros, logrando aún más el control mediante la unificación de vestiduras, cantos, hábitos y sobre todo pensamiento. De esta manera, el autosacrificio por el bien del líder y después del partido se consideraba un acto altruista de la más alta dignificación.
¿Cómo es un estado fascista?
Si bien es un régimen totalitario de gobierno, el fascismo tiene numerosas características propias. El fascismo se dio en Italia desde 1919 hasta 1943. Fue creado por Benito Mussolini y en 1921 se constituyó como un partido. A diferencia de las dictaduras militares, para llegar al poder se utilizó el medio social establecido sin violar las leyes ni imponerse por la fuerza. Su fuerza se basa en el apoyo de las masas principalmente de la clase media, la cual se ve perjudicada por los movimientos obreros y sindicales así como por los bloques de poder del gran capital. Una vez en el poder, se acerca a los mencionados bloques de poder del gran capital y aplasta a los movimientos obreros y sindicales (y a los obreros y sindicalistas que se le opongan). El fascismo propugna que las diferencias sociales son naturales y necesarias y se opone así al movimiento democrático surgido desde la revolución francesa. Se opone también consecuentemente, al socialismo y al comunismo. Se presenta una lista única de gobierno y, si bien se busca el apoyo de las masas por las buenas, se destruye toda oposición expresa al fascismo. Se motiva y anima al pueblo a ser racista y a discriminar a quienes piensan de una forma distinta. La vida es controlada por el Estado, las libertades se mantienen únicamente cuando no interfieran con la voluntad de los gobernantes y se aplican también las demás características de un gobierno totalitario.
Ejemplos de Estados Fascistas
La Italia fascista de Mussolini (el exponente fundamental de este régimen) y la Alemania nacionalsocialista o nazi de Hitler (a continuación se verá más sobre esto).
Otros movimientos fascistas: el salazarismo portugués, el falangismo español, la Ustasa de Croacia, la Legión del Arcángel Miguel en Rumania, las Cruces Flechadas de Hungría, la Unión Británica de Fascistas, el Nasjonal Samling de Noruega, el rexismo de Bélgica, las Cruces de Fuego de Francia, etc.
¿Por qué cae un estado fascista?
Por las mismas razones por las que cae cualquier régimen totalitario. En el caso del fascismo italiano, Mussolini comenzó a aplicar demasiado el terror y la fuerza en su gobierno, no previó programas de acción social y no pudo hacer nada para impedir una fuerte crisis económica. Todo eso sumado a las derrotas militares que sufrieron Alemania e Italia en la 2ª Guerra Mundial, terminó definitivamente con el fascismo italiano.
¿Cómo es un estado nacionalsocialista?
La palabra fascista se refiere a un gobierno totalitario que posee una serie de características propias, similares a las que aplicó el duce Mussolini en Italia entre 1919 y 1943. Por el contrario, al referirnos al nacionalsocialismo o nazismo nos referimos exclusivamente a un gobierno fascista (y por lo tanto totalitario) que se aplicó en Alemania en 1925-1945, bajo la dirección de Adolf Hitler. El filósofo Nietzsche había dicho que la raza aria era superior a todas las demás razas de seres humanos.
Al principio esta doctrina no tuvo muchos adeptos. Luego de la 1ª Guerra Mundial, Alemania cayó en una profunda crisis económica, social y política. El desempleo y la pobreza se extendieron, Alemania perdió vastas extensiones de territorio y fue acusada de muchos de los problemas ocasionados por la guerra. En esta situación de crisis, Adolf Hitler, copiando la ideología fascista e introduciendo elementos propios, creó la doctrina nacionalsocialista. En la misma establecía como verdadera la doctrina de Nietzsche, echaba la culpa de la crisis financiera de Alemania a los comunistas y a los judíos y exaltaba el nacionalismo, el culto a la violencia, a la guerra y el odio al liberalismo (capitalismo).
Al principio intentó imponerse por la fuerza, pero fracasó. Luego se impuso por una toma legal del poder, dando propaganda a sus ideas y consiguiendo el apoyo popular. ¿Cómo lo consiguió? Prometiendo acabar con el desempleo y consolidar una economía fuerte en Alemania. Cuando Hitler subió al poder, efectivamente acabó con el desempleo y mejoró la situación económica de su país. Consiguió el apoyo de cada vez una cantidad mayor de ciudadanos y creó un fuerte sistema de difusión del nazismo y destrucción de la oposición.
Durante su gobierno se asesinó a millones de judíos, se esterilizó a personas provenientes de otros grupos étnicos prohibiéndoles ocupar cargos de gobierno y se esterilizó también a los tarados, es decir, a los deficientes mentales. Sin embargo, debido al férreo control de los medios de comunicación, la población en general no se enteró de todo esto. Al mismo tiempo, se animaba el antisemitismo y la xenofobia y odio a los judíos, llegando incluso a enseñar esto a los niños en las escuela. ¿Qué tenía de particular el nazismo? Que no se dedicó a aterrorizar a la población en general, como por ejemplo el fascismo italiano, sino a ayudar a la población en general y a conseguir su apoyo, destruir a la oposición y a las razas consideradas inferiores.
¿Por qué cayó el nazismo?
Principalmente, por la derrota militar que sufrió Alemania en la 2ª Guerra Mundial. Cuando los Aliados consiguieron el control de Alemania, se dedicaron a dar a conocer a la población las terribles crueldades a las que sometió el gobierno de Hitler a muchas personas. Se fomentó la forma de gobierno democrática y la aceptación de todas las personas. Desde entonces, salvo unos pocos movimientos neonazis de baja difusión, no ha vuelto a aparecer.
¿Qué es el comunismo?
Es una doctrina filosófica, política y social que propugna la abolición de la propiedad privada (capitalismo) por lo tanto los bienes se poseen en común entre el Estado y las clases sociales. Su lema es cada cual según su capacidad, a cada cual según sus necesidades. En principio la doctrina estaba bien, es justa y no perjudica al pueblo (quizás si a los grandes empresarios y a quienes se hallan en posiciones de privilegio, pero no es mala la idea de igualdad), sin embargo, en la práctica los dirigentes de este movimiento acapararon el poder pasando ellos a ser los privilegiados y obligaron a todos los habitantes de sus naciones a aceptar y sostener este sistema.
Los ideales del comunismo tienen un largo tiempo de existir, ya Platón y los sofistas griegos de los siglos V-VI a. C. habían propuesto la abolición de la sociedad privada y la tenencia de bienes en común, pero en la realidad fue aplicada por primera vez en 1917 en Rusia donde teóricamente se siguió aplicando hasta finales del siglo XX y luego en China a partir de 1947 hasta el presente; en Vietnam y Cuba cuyas tendencias comunistas han hecho que los países capitalistas los aislasen; así mismo Etiopía, Benin, Mozambique, Angola, Yugoslavia, y muchas naciones que en un tiempo formaron la URSS pero que dejaron el comunismo por la crisis en la Unión Soviética.
¿Cuáles son las fallas de este sistema?
Al igual que con muchos otros sistemas políticos, si las aplicaciones de sus ideales fueran reales y la organización perfecta, sería un buen sistema. Sin embargo, al imponerlo por la fuerza y dejar de respetar los derechos propios de quienes se oponen al comunismo, pasa a convertirse en un sistema que atenta contra la libertad y el desarrollo humano.
En todos los países donde se aplicó ha recibido el apoyo de gran parte de la población y al mismo tiempo se ha obligado a sus opositores, a aceptar esta ideología o sufrir las consecuencias. Sin embargo, es claro que no podemos identificar a este régimen como malo desde un principio, sino solamente podemos decir que en ningún caso hasta ahora ha dado resultados satisfactorios a largo plazo. La tendencia mundial es de aceptar la democracia como forma de gobierno y dejar de lado el comunismo y los Estados totalitarios.
¿Qué es una dictadura?
Es un gobierno que invocando el interés público, ejerce su gestión sin tener en cuenta las leyes constitucionales de un país; no representa la voluntad general y no permite ninguna oposición ni control a su línea política.
Se diferencia de los regímenes totalitarios de gobierno porque la dictadura:
- No tiene una ideología elaborada
- No busca el apoyo de las masas.
- No trata de cambiar la sociedad.
Se denomina gobierno de facto (de hecho) en contraposición al gobierno de iure (de derecho). En general un gobierno de facto se instituye por un golpe militar y se sostiene en tanto y cuanto las fuerzas armadas puedan defenderlo e imponerlo. No respeta los derechos de las personas ni les brinda libertad: todos deben hacer lo que se les permite y nada más. No se opone a un grupo político, étnico, económico, etc. en particular, sino que reprime automáticamente toda oposición.
Se dio numerosas veces en las décadas del ´70 y del ´80 en Latinoamérica. Un golpe de Estado es una violación y vulneración de la legalidad institucional vigente en un Estado por parte de un grupo de personas que pretenden, mediante la fuerza, sustituir o derrocar el régimen existente, sustituyéndole por otro propicio y generalmente configurado por las propias fuerzas golpistas. Este ataque contra la soberanía implica que la mayoría de los golpes de Estado supongan la retención de los organismos depositarios de aquélla (cámaras parlamentarias, gobierno) o de sus miembros.
Los participantes suelen tener control sobre elementos estratégicos de las fuerzas armadas y de la policía y, para asegurar el triunfo de su acción, intentan hacerse con el de los medios de comunicación. Durante muchos años el golpe de Estado ha sido un instrumento habitual para el derrocamiento de gobiernos en el Tercer Mundo. La pobreza, la insuficiente madurez política, económica y social así como una larga tradición de liderazgo militar, han hecho que muchos países sean especialmente propensos a derrocar a los gobiernos de este modo.
Es una realidad que ha ido espaciándose en el tiempo tras la virulenta década de los años setenta, cuya máxima fue el derrocamiento de Salvador Allende en Chile en 1973. Acto al que siguieron Uruguay, Bolivia, El Salvador, Argentina, uniéndose a los golpes de décadas anteriores de Haití, Brasil y Paraguay.
El retorno de los gobiernos civiles en los años ochenta pareció dar respiro a esta constante. Además el fin de la guerra fría era una circunstancia nueva que desanimaba intentonas golpistas, la justificación anticomunista ya no podía ser argumentada. Hoy sólo el caso de Venezuela rompe la dinámica. Pero ya vemos el resultado. La sociedad venezolana salió en defensa de su gobierno legítimo y a escala internacional no hubo espacio para avalar esta acción de sedición y ruptura del orden democrático. Tiene raíces profundas y ello no debe desconocerse.
¿Gobiernos inestables? La estabilidad depende del grado de legitimidad de los gobiernos en sus actos y en su compromiso adquirido electoralmente. La falta de democracia provoca miedo. Se teme practicar la diferencia y expresar la crítica. Los resultados son contraproducentes. Una sociedad que se fundamenta en el miedo no puede ser democrática. Además, el miedo es seguido de una acción social conformista donde deliberadamente se opta por la cobardía como comportamiento social inhibitorio de la conciencia y la voluntad democrática. Los espacios de democracia se reducen en beneficio de un poder cada vez más totalitario y represivo.
Los Golpes de Estado en América Latina han sido:
1) BOLIVIA. Acumuló 189 golpes militares en su historia. En 1971 fue derrocado el general progresista Juan José Torres por un cruento golpe de Estado encabezado por el general Hugo Banzer Suárez, ex alumno del Colegio Militar argentino. Se sucedieron varios gobiernos militares y algunos civiles hasta que en 1980, para impedir la asunción de Hernán Siles Suazo, el general García Meza comandó el más cruento golpe de la historia boliviana, con apoyo de asesores militares argentinos. Fueron asesinadas 1.500 personas. Recién en 1982 Bolivia recuperaría la normalidad constitucional.
2) CHILE. El 11 de septiembre de 1973 fue derrocado Salvador Allende, con apoyo norteamericano al golpe desde el mismo día de la asunción presidencial.
3) URUGUAY. El 27 de junio de 1973 un golpe cívico militar tomó el gobierno y disolvió el congreso. En 1976 las fuerzas armadas tomaron el poder total hasta 1985.
4) PARAGUAY. Estuvo bajo poder dictatorial encubierto desde 1954 y bajo el general Alfredo Stroessner tuvieron refugio en ese país toda clase de nazis y dictadores perseguidos. Su fanática persecución de "comunistas" y opositores mereció la calificación de "democracia viable" por los EEUU.
5) BRASIL. En 1954 se suicidó el presidente Getulio Vargas. En su testamento acusó al imperialismo y a sus aliados internos de no permitirle gobernar con determinadas aspiraciones populares y nacionales. Fue una alerta para otras naciones ya que Brasil, bajo Vargas, había enviado un contingente de tropas a Europa para la invasión de Italia junto a los norteamericanos, durante la segunda guerra mundial. Años después, en 1961, asumió la presidencia Joao Goulart, heredero político de Getulio Vargas y su asunción creó un conflicto con sectores militares que se solucionó con un plebiscito que lo confirmó en el cargo. Pero su política de reforma agraria y reglamentación de dividendos de empresas al exterior llevó a su derrocamiento el 1° de abril de 1964, en un golpe militar apoyado por EE.UU. La legalidad volvería hasta en 1985.
6) ARGENTINA. El 24 de marzo de 1976 fue derrocado el gobierno justicialista que alcanzó el poder el 25 de mayo de 1973. La más criminal dictadura de la Argentina llegaría hasta el 10 de diciembre de 1983.
JULIO CÉSAR GARCÍA RAMÍREZ
UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO
FACULTAD DE CIENCIAS POLÍTICAS Y SOCIALES
SISTEMA DE UNIVERSIDAD ABIERTA
FILOSOFÍA Y TEORÍA POLÍTICA CONTEMPORÁNEA