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Aborto y pensamiento progresista (página 2)


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¿Qué intereses son los que hoy se esconden detrás de esto?

Los Derechos Humanos y normativas referidas a la protección de la vida

El 10 de diciembre de 1948, una vez finalizada la II Guerra Mundial y ante el horror de la guerra, algunos países se reunieron en la Asamblea de Naciones Unidas (ONU) para proclamar "LA DECLARACION UNIVERSAL DE LOS DERECHOS HUMANOS"(DDHH), que protege a todas las personas por igual.

Este fue el comienzo de una de las mayores conquistas de la humanidad. Sin embargo y de forma paradójica, a continuación de este gran acontecimiento moral, se va a producir la gran avalancha de legalizaciones de abortos. Más de 50 millones de seres humanos mueren anualmente por este medio en todo el mundo. Es el mismo número de muertos que en la Segunda Guerra Mundial. En España el año pasado murieron 100.000 niños.

La Declaración le es de aplicación a todo individuo, y así se desprende claramente de su espíritu. Sin embargo la actual redacción del artículo primero parece no incluir al prenacido, al expresar lo siguiente:

Artº 1º "Todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos y, dotados como están de razón y conciencia, deben comportarse fraternalmente, los unos con los otros".

Es un hecho que el nacimiento no marca el inicio de la vida humana. ¿Cómo podríamos aceptar que el vientre de la madre sea la barrera que impida a un niño ser sujeto de este derecho? Hasta la persona más pro-abortista estaría de acuerdo en que a un no nacido en el 7º, 8º ó 9º mes de gestación y, por tanto antes de su nacimiento, le es de aplicación este principio de libertad e igualdad en dignidad y derechos como a cualquier persona ya nacida. La afirmación contraria sería un importante retroceso social.

Los artículos siguientes de la DDHH, no presentan ninguna dificultad para la aplicación al no nacido:

Artº 2: "Toda persona tiene todos los derechos y libertades proclamados en esta Declaración, sin distinción alguna de raza, color, sexo, idioma, religión, opinión política o de cualquier otra índole, origen nacional o social, posición económica, nacimiento o cualquier otra condición".

Artº 3: "Todo individuo tiene derecho a la vida, a la libertad y a la seguridad de su persona".

Artº 5: "Nadie estará sometido a torturas ni a penas o tratos crueles, inhumanos o degradantes" (el feto desde la 3ª semana tiene tubo neuronal y sufre antes de morir).

Artº 7: "Todos son iguales ante la ley y tienen, sin distinción, derecho a igual protección de la ley. Todos tienen derecho a igual protección contra toda discriminación que infrinja esta Declaración y contra toda provocación a tal discriminación".

Artº 8: "Toda persona tiene derecho a un recurso efectivo, ante los tribunales nacionales competentes, que le ampare contra actos que violen sus derechos fundamentales reconocidos por la constitución o la ley".

Además de la Declaración, existen otras referencias legales con incidencia para el no nacido:

La Resolución 4376 de la Asamblea del Consejo de Europa, reunida el 4 de octubre de 1982 expresa: "la ciencia y el sentido común prueban que la vida humana comienza en el acto de la concepción, y que en este mismo momento están presente todas las propiedades biológicas y genéticas del nuevo ser". Esta normativa amplía y supera la Declaración de los Derechos Humanos, añadiendo que: "el derecho a la vida es el derecho fundamental que precede y condiciona a todos los demás derechos, y debe ser protegido sin ningún límite ni discriminación".

En España el 2/12/83 se aprueba la actual ley del aborto. En este texto, el aborto continúa considerándose ilegal, si bien se despenalizan algunos supuestos. Es decir la legislación española sigue protegiendo el derecho a la vida desde el momento de la concepción, pero considera circunstancias en los que no va a penalizar abortar. En 1985 se presenta un recurso de inconstitucional frente a esta Ley. A pesar de que el Tribunal Constitucional declara que el niño no es un apéndice de la madre, termina concluyendo que la Ley no es inconstitucional.

En la Conferencia Internacional de El Cairo de 1994 sobre Población y Desarrollo, se va a producir un cambio muy importante en el espíritu de la legislación que permitirá potenciar las políticas abortistas. El aborto se va a encuadrar dentro de los programas de "Promoción de la Salud", en el apartado "Salud reproductiva de la madre". Muchas instituciones y algunas ONG, piden que se legisle para que en los distintos países el aborto sea libre, e incluso van a solicitar que la Declaración Universal lo recoja como un derecho de nueva generación.

Con todos estos datos podemos afirmar que a día de hoy existe una progresiva tendencia a legislar favoreciendo políticas abortivas, camufladas de políticas progresistas demográficas y de derechos de la mujer.

Es preciso remarcar que, en todos los casos, los derechos humanos son consustanciales a la persona y, por tanto, anteriores e independientes a posibles normativas que los reconozcan o no. Los avances en legislación recogiendo estos derechos son muy importantes, pero no tienen legitimidad para suprimir ni el más elemental de los derechos del ser humano.

Desgraciadamente a lo largo de la historia e incluso en la actualidad, tenemos constantes ejemplos de situaciones consideradas legales y que atentan contra la dignidad de la persona y sus derechos tales como: las penas de muerte, las guerras, las torturas, las lapidaciones, la esclavitud, la explotación, el comercio de armas, el trabajo de niños, los paraísos fiscales y los sexuales, la especulación, las persecuciones por razón de ideología sexo, raza o religión, los genocidios legales históricos, entre otro muchos.

Cualesquiera de las situaciones anteriores, aunque hayan sido o sean legales según los intereses de turno, no son legítimas ni justas. En las Actas de Nuremberg referidas al genocidio nazi se recoge: "Una Ley que organiza el crimen no es una ley y desobedecerla no es más que un derecho de la legítima defensa para los individuos y para los pueblos". Gandhi lo expresaba con estas palabras: "La voz de la mayoría no tiene nada que decir cuando le toca hablar a la conciencia". Es decir, ninguna ley es legítima si atenta a la dignidad de la persona.

Por todo ello, hoy más que nunca, se precisan individuos maduros y libres capaces de analizar y juzgar por sí mismos los acontecimientos sociales, políticos y religiosos que "a priori" se les presentan como justos, necesarios e incuestionables. Esta conciencia crítica del individuo no interesa a ninguna institución, ni civil ni religiosa por cuestiones obvias.

La historia está afortunadamente llena de hombres y mujeres que entendieron así sus vidas y que tuvieron el valor de impulsar profundas transformaciones sociales desde luchas no violentas. Esto les supuso, marginación, críticas y persecuciones porque se enfrentaban a intereses muy poderosos y, por tanto, no era "políticamente correcto".

¿El no nacido es humano?

La clave sobre la que se sustenta el debate del aborto es el cuestionamiento de la humanidad del no nacido, al igual que se hizo en otras épocas con otros colectivos.

En nuestras sociedades nos sentimos orgullosos de que nuestra legislación aplique el principio de "presunción de inocencia" para cualquier situación en la que una persona pueda verse perjudicada. Es decir, nunca se actuará contra un individuo hasta demostrar que realmente está probado el hecho que se le imputa.

En el caso del aborto esta pauta legal se rompe, y la legislación va a permitir ir contra el no nacido bajo una premisa no demostrada, esta es: "no es humano", a pesar de que la ciencia continua avanzando aportando datos sobre su humanidad. (Declaración de Madrid de 17 de marzo de 2009). Se adjunta anexo al final.

Los datos que nos aporta la ciencia, exigen que al menos exista "la duda" sobre el inicio de la vida humana, y son los que pretenden eliminar al no nacido los que deben demostrar con rigor, que ésta no existe y que no se está matando a un ser humano. En un tema como este no es de recibo dejar hacer "por si acaso". Ningún Estado de derecho debe legalizar actuaciones en las que exista la más mínima posibilidad de ir contra la vida de un ser humano indefenso. Es un principio elemental.

Lo que define a una especie son sus cromosomas y sus genes. En la especie humana cuando el óvulo es fecundado por el espermatozoide aparece una nueva célula formada por 46 cromosomas (23 proceden del óvulo y otras 23 del esperma). Desde ese momento posee un código genético que contiene más de cien mil caracteres y que configuran totalmente a ese individuo desde el inicio hasta el fin de sus días. Todas sus

características físicas se encuentran definidas: estatura, color de ojos y de pelo, tipo sanguíneo, sexo …. y también las psicológicas que van a configurar su personalidad junto con la influencia del medio.

Esta entidad humana es distinta a la de sus padres y a la de todos los seres humanos que existen y han existido. El nuevo ser es personal, es decir, sus características le hacen único e irrepetible.

A partir de aquí, se produce un desarrollo continuo en el nuevo individuo, pero en este desarrollo nunca experimentará un cambio cualitativo que permita afirmar que primero no existía una persona y después sí. Este cambio únicamente ocurre en la fecundación. La célula fecundada se llama zigoto; en la fase siguiente se denomina mórula y en ella comienzan a desdoblarse y multiplicarse las células, siguiendo la siguiente evolución:

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1ª semana: anida en el útero.

2ª semana: comienza a alimentarse. Se inicia el desarrollo del sistema nervioso.

3ª semana: empiezan a formarse la columna vertebral, el cerebro, el tubo neural para el sistema nervioso central, los pulmones, el estómago, el hígado, los riñones y el corazón empieza a latir.

4ª semana: comienzan a formarse los ojos.

24 días: mide 2,5 mm, pesa 1 mg. tiene encéfalo, cerebro, corazón, hipofisiario (esbozo), tiroides, hígado, células sexuales, brazos y piernas.

30 días: según Lejuene, se le puede realizar un encefalograma.

5ª semana: se va separando el tórax del abdomen, los ojos tienen retina y cristalino, comienzan a formarse los oídos.

6ª semana; empieza a moverse. La cabeza tiene su forma casi definitiva, el cerebro está muy desarrollado, comienzan a formarse las manos y pies y muy pronto aparecerán las huellas dactilares, las que tendrá toda su vida.

8ª semana: reacciona ante estímulos claros, su sistema nervioso funciona, el estómago segrega jugos gástricos, posee el substrato somático de la inteligencia, todos los órganos vitales están presentes, tiene sexo definido y huellas digitales, mide 3 cm.

9ª semana: maduración de tejidos y órganos formados anteriormente. Reacciona a los estímulos y detecta sabores (se ha comprobado que endulzando el líquido amniótico ingiere más, mientras que si se sala lo rechaza)

10ª semana: se pueden registrar los latidos del corazón en electrocardiograma.

11ª semanas: se chupa el dedo.

12ª semana: pesa 45 gramos. Todos los sistemas funcionan y están sincronizados los músculos y nervios. "Respira" con regularidad el líquido amniótico, mueve la cabeza, frunce las cejas, bizquea, aprietas los labios, sonríe, abre la boca y da volteretas.

16ª semana: empiezan a crecerle las pestañas. Pesa 200 gr. y mide 4 cm. Ya solo le queda seguir creciendo hasta salir a la luz.

Según las distintas fases que atraviesa, irá cambiando la denominación. Así se definirá embrión hasta la 7ª semana, luego feto a partir de la 8ª hasta su nacimiento, después se llamará neonato, niño, adolescente, joven, adulto, anciano.

El desarrollo de la persona dura unas 800 semanas aproximadamente (entre los 15 y 20 años), en las que las primeras 40 se encuentra en el seno materno. Es evidente que hay cambios que no se producirán hasta después de nacer, como la primera dentición y los dientes definitivos… La pubertad será una de las mayores etapas de cambio, pero todo ello forma parte de un único proceso que ha comenzado en la fecundación y no se va a detener hasta la muerte, con sus etapas evolutivas e involutivas.

Decir que un embrión o un feto no es persona hasta un determinado periodo de tiempo es una barrera totalmente arbitraria y lo demuestra la disparidad de criterios en las diferentes legislaciones según los países: en Francia se habla de 10 semanas; 12 en Italia, 16 en Nueva York, 28 en Inglaterra…¿Qué criterio objetivo es el que indica cuando el individuo empieza a ser persona? ¿En qué día y a qué hora? Si hiciéramos un ejercicio retrocediendo en el tiempo llegaríamos al absurdo. Podríamos preguntarnos si un individuo es persona a los 7 meses, y luego si lo es a los 7 meses menos 1 día o menos 2 o menos 10…. ¿Cuándo deja de ser persona? La única información objetiva que nos proporciona la ciencia es que el individuo genéticamente es el mismo ser desde el momento de la fecundación.

Hoy más que nunca la genética demuestra que el hijo no es una parte de la madre, ni siquiera la placenta, el cordón umbilical o el líquido amniótico, sino que son órganos que ha generado el hijo desde su etapa de cigoto porque le son necesarios en esta fase de desarrollo, y los abandonará al nacer. Es, por tanto, un ser completamente distinto a la mujer, que se desarrolla y reacciona por su cuenta, aunque la dependencia de su madre sea absoluta. Dependencia que continuará mucho después del nacimiento.

Defender que el recién concebido no es un ser humano porque no tiene aspecto de niño, sería como decir que un bebé no es humano porque no tiene el aspecto externo de un adulto. Un adulto no proviene de un niño, sino que antes fue niño y siempre ha sido el mismo ser humano desde el principio. De igual modo, el recién concebido es una persona con toda su dignidad.

Supuestos de despenalización del aborto: sistema de indicaciones y sistema de plazos

En "el sistema de indicaciones" la legislación considera que el hijo merece protección legal desde el inicio de su vida, pero establece circunstancias en las cuales abortar deliberadamente no debe ser penalizado.

El "sistema de plazos", consiste en despenalizar el aborto independientemente de las causas que existan hasta un determinado plazo del embarazo.

Es un cambio cualitativo, ya que supone que el hijo concebido y no nacido no merece ninguna protección legal más que a partir de determinado tiempo de vida intrauterina, que es cuando se le considera merecedor de ésta. Sin embargo, no hay ninguna razón con fundamentos biológicos o médicos para que el aborto tenga un periodo en que no sea punible y posteriormente sí lo sea.

Pronunciarse contra el aborto en nuestra sociedad es muy difícil, porque existe una amplia conciencia social que lo apoya, inicialmente basada en supuestos muy extremos que pueden darse. Estos supuestos han realizado un trabajo de campo que han preparado la mentalización y aceptación social necesaria para posteriormente legislar el aborto por el "sistema de plazos". De igual forma el "sistema de plazos" irá realizando una progresiva mentalización social que prepare el terreno a legislaciones que favorezcan la selección de nacimientos, según los intereses sociales. Sin lugar a duda, estamos ante uno de los acontecimientos de mayor complejidad y repercusión social en la historia.

Previamente a analizar los supuestos de despenalización del aborto, hemos de incidir en la urgente necesidad de un profundo cambio en la conciencia social, que en la actualidad se mueve con una doble y falsa moral. Por un lado determinados sectores que condenan el aborto se permiten enjuiciar y criticar duramente a mujeres cuyo embarazo se produce fuera del matrimonio, al tiempo que también se recela de aquellas madres que dan a su hijo en adopción.

De igual modo en algunos sectores progresistas se da una situación contradictoria cuando se produce un rechazo a la mujer que lleva a término su embarazo y entrega a su hijo para ser adoptado, interpretándolo casi como un abandono del niño; mientras por otro lado se valora las donaciones de embriones o incluso se reivindica la legalización de "madres de alquiler" (mujeres que en casi todos los casos acceden a "prestar" su útero por precariedad económica).

Es decir, hoy en día muchas mujeres que se encuentran con un embarazo no deseado, no reciben la acogida ni el acompañamiento social necesario que les permita buscar una alternativa satisfactoria a su situación. Esto hace que el embarazo se convierta en una auténtica emboscada que les lleva a ver el aborto como la solución más "viable" para intentar recuperar su normalidad; como si nada hubiera ocurrido, aunque esto será imposible.

Las alternativas al aborto pasan necesariamente por una evolución profunda de la cultura y la mentalidad social para dignificar y valorar la adopción como una alternativa válida, generosa y valiente de la mujer que por determinadas circunstancias, no puede o no desea hacerse cargo de su hijo. Esto ha de ir acompañado de las correspondientes políticas y cambios de legislaciones que favorezcan y garanticen los procesos de adopción.

Expuesta esta premisa como imprescindible, vamos a analizar los distintos supuestos en los que social y legalmente, se despenaliza el aborto en el "sistema de indicaciones".

1º Supuesto: Razones Eugenésicas (malformaciones en el niño)

En este supuesto, se permite abortar hasta los 5 meses y medio. Este plazo está en función de cuando se realizan las pruebas médicas para detectar deficiencias.

La legislación contempla el derecho a indemnizaciones económicas en los casos de niños nacidos con discapacidad o malformación y que no fueron diagnosticados a tiempo para que la madre pudiese tener la opción de abortar. Esto provoca que algunos médicos, intentando evitar estas indemnizaciones y el desprestigio profesional que conllevan, emitan sin las suficientes garantías diagnósticos de malformaciones en fetos que en muchos casos luego han nacido sanos. De esta forma se protegen de cualquier reclamación y desplazan la responsabilidad hacia la madre. Estas situaciones son muy graves y no se están denunciando. (Diario de Cádiz 31/3/09 Ana L. Cabezuelo. Prof. Derecho Civil Universidad. Sevilla).

Por otro lado, no seamos ingenuos, también hay que considerar que en función de la economía de los presupuestos del Estado, es mucho más económico "eliminar" a una persona que va a precisar desde su nacimiento el apoyo sanitario y social, que propiciar todos los recursos económicos y sociales que esta va a demandar.

Recientemente se están oyendo voces para que el aborto por razones eugenésicas sea legalizado incluso hasta una o dos semanas antes del nacimiento (El País 7/4/09 "El gobierno baraja crear comités médicos para abortos fuera de plazo"). La pregunta es obvia: ¿por qué vamos a legalizar acabar con la vida del no nacido solo cuando se encuentre en el vientre de su madre aunque tenga 38 semanas y no despenalizamos matar al bebe nacido con esas mismas semanas o muchas menos en función de su discapacidad? ¿Dónde está el límite?

Los padres que reciben la información de que su hijo puede nacer con una enfermedad o malformación, sufren una situación de profundo shock y stress. A esto se le suma el miedo a lo desconocido, la presión ejercida por algunos profesionales sanitarios y personas cercanas a la pareja para que la mujer aborte. Todo ello va a incrementar su desconcierto y con mucha probabilidad va a desencadenar la decisión de abortar.

Una mujer o una pareja a la que se les comunica que su hijo puede nacer con alguna alteración, ha de recibir ayuda especializada y en caso necesario, la información encaminada a otras alternativas como la adopción. El rechazo de algunos sectores a esta opción, es otro factor que empuja a progenitores que no se sienten preparados para afrontar estas situaciones, a optar por abortar. Es preciso tener presente que el aborto se retroalimenta con todas aquellas actitudes sociales mediante las cuales no se ofrecen alternativas a una mujer embarazada y en situación difícil.

Si la mujer o la pareja reciben la información y el apoyo que precisan, muy probablemente el embarazo se lleve a término, porque de modo natural los padres han creado un vínculo con el nuevo hijo y no desean eliminarle.

El aborto por razones eugenésicas es un paso gravísimo en el comportamiento ético y moral de la sociedad. Una sociedad que elimina a los más débiles tiene muy tocado sus pilares. La eugenesia encierra la selección de los que se consideran más fuertes y perfectos.

Si se acepta socialmente suprimir al no nacido por su discapacidad, ¿por qué no admitirlo para el niño acabado de nacer, o para el joven que queda discapacitado después de un accidente o enfermedad, o para el anciano…? El aborto es la "solución final" que consiste en eliminar al más débil. El siguiente paso puede ser decretar la muerte para los insociales o los que nos resulten incómodos. Son pasos muy peligrosos para toda la humanidad.

Existen multitud de antecedentes históricos sobre estas prácticas eugenésicas, como las que hemos mencionado de Esparta o la de los médicos nazis. Pero nunca hasta ahora en la historia de Occidente, se había expuesto como socialmente aceptable la creencia de que la enfermedad o la deformación despojan al individuo de su dignidad humana y de su derecho a vivir.

No existe más atroz muestra de insolidaridad que promover la muerte del ser humano por sus discapacidades físicas o mentales. La ideología predominante actual podríamos llamarla "ultra nazismo". Lo que prima es la idealización de lo perfecto y del intelecto humano como valor supremo.

El Estado tiene su razón de ser en la protección de los más vulnerables, y entre ellos están las personas con discapacidad. Por esto debe destinar los medios necesarios, no sólo con una ley que proporciona recursos a los ya nacidos, sino también protegiendo el derecho a vivir a los que van a nacer. Es decir promover la plena integración social de las personas con discapacidad en todas las etapas y en todas las situaciones.

No podemos decir que la actual "Ley de la Dependencia" es un logro para la integración y protección de las personas con discapacidad y luego legislar lo contrario para el mismo colectivo no nacido alegando evitarle sufrimiento, porque en iguales circunstancia se encontraría todo el colectivo de personas que protege la Ley. El Estado ha de continuar potenciando políticas sociales para ampliar el apoyo y el tejido social necesario a las familias que tienen a su cargo hijos con discapacidad.

2º: Supuesto: Riesgo para la salud física y mental de la madre.

En este supuesto se puede abortar en cualquier momento del embarazo. No existen plazos.

Vamos a hablar en primer lugar del caso en el que se alega riesgo para la salud física de la madre:

Partiendo de la base de que a nadie se le puede imponer que ponga en riesgo la propia vida para salvar a otro ser humano aunque éste sea su hijo, sí es cierto que de forma natural la inmensa mayoría de las madres, incluso en las especies animales, protegen la vida de sus hijos con la suya propia si es preciso, aunque éste sea un recién nacido. Por tanto es evidente que esta elección está en función de que la madre sea consciente de que su hijo existe y está vivo.

Pero otro aspecto a tener en cuenta en este supuesto, es el hecho de que para salvar la vida de la madre hay que proceder directamente a matar al niño, mientras que la opción de que el niño viva en ningún caso implicará actuar contra la madre. Es decir, nadie la envenenará o la troceará como habrá que hacer con el bebé para que no nazca, sino que hasta el final se luchará por salvar la vida de la madre y del hijo.

Afortunadamente en la actualidad son muy escasos los embarazos en los que el nacimiento del hijo supone un riesgo para la vida de la madre, gracias a los avances de la medicina. Pero este caso, a mi entender, es de los que exige mayor generosidad y decisión por parte de la mujer.

El segundo apartado de este supuesto es el riesgo para la salud mental de la madre. La mayoría de los abortos que se practican dentro del "sistema de indicaciones" se hacen alegando esta causa, que se convierte así en "la puerta falsa" para abortar, presentando además muchas ventajas en relación con los otros supuestos, ya que no exige plazos, basta con el peritaje de dos psicólogos que normalmente están concertados por la clínica en donde se practicará el aborto. Por otro lado es fácilmente justificable, debido a que cualquier embarazo no deseado supone un enorme estrés emocional que afectará psicológicamente a la mujer.

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En el estadio en que se encuentra actualmente la Psicología, alegar esta causa para suprimir al niño, es totalmente ridículo. En cualquier consulta, a diario, los profesionales de la psicología atienden a individuos cuya psique se ve afectada por la interrelación y conflictos con otros individuos: la madre, el padre, el hijo, el jefe, el compañero. A ningún psicólogo se le ocurre plantear como parte de la terapia suprimir al individuo que origina el conflicto aniquilándolo. Esto es absurdo pensarlo siquiera. ¿Por qué en el caso del no nacido se ve tan claro que la solución es acabar con su vida?

Es evidente que en los embarazos no deseados, como en los demás conflictos de interrelaciones humanas, se precisa de la terapia y acompañamiento de especialistas, e incluso en el periodo de entregar al niño para la adopción si es la opción elegida. Ningún terapeuta con un mínimo de profesionalidad debería tener dificultad en esto.

3º Supuesto: Violación

En este supuesto se establece un plazo hasta los tres meses.

La violación es una de las mayores agresiones que una mujer puede sufrir, y es uno de los delitos más despreciables, más crueles y más inhumanos. Ninguna mujer debería verse sometida a esto, y cualquiera que lo sufra debe recibir todo el apoyo de la sociedad, cosa que hasta ahora no ha sido así.

En muchas ocasiones, la mujer violada ha vivido con vergüenza la violación, hasta llegar a ocultarla porque la sociedad se ha atrevido a juzgarla. También aquí existe una doble moral hipócrita, que es preciso abordar de una vez para poder dar soluciones a problemas como el embarazo no deseado.

En principio, es altamente improbable el embarazo en caso de violación, entre otras causas por la enorme tensión a la que se ve sometida la mujer en estas circunstancias. Sin embargo, este supuesto es uno de los más utilizados para justificar las políticas abortistas y crear una conciencia social en favor del aborto, motivado por la enorme repugnancia que cualquier persona sana psíquicamente siente ante la idea de una violación.

En todos los casos de agresiones sexuales y violaciones es también muy importante potenciar una mayor concienciación para la atención sanitaria urgente a la mujer en los primeros momentos, ya que esta actuación es fundamental.

A pesar de todo lo anterior, es un hecho que se puede producir el embarazo. En ese caso, y a pesar de la dureza de la situación, hay que realizar una afirmación clara y decir y afirmar sin la menor duda que la criatura engendrada es una nueva persona y jamás debe ser otra víctima de la atroz conducta de su progenitor. El derecho a su vida ha de ser inviolable.

La mujer que queda embarazada en estas circunstancias, con mucha probabilidad va a sufrir inicialmente un auténtico rechazo hacia el hijo que está engendrando, ya que es consecuencia de la agresión sufrida. En cualquier embarazo no deseado, es necesario el apoyo social y psicológico, pero en el caso de embarazo por violación, la sociedad debe desarrollar una especial sensibilidad y atención para con la mujer embarazada, proporcionándole todos los recursos necesarios, así como el acompañamiento de especialistas que la atiendan física y psicológicamente. Todo ello serán instrumentos imprescindibles para integrar lo más sanamente posible lo ocurrido, sin descartar la posibilidad de dar al niño en adopción si es esta su última decisión.

4º Supuesto: Causas económicas y sociales. No se ha llegado nunca a regular como causa de despenalización, pero estos abortos se producen acogiéndose al supuesto visto anteriormente como: "Riesgo par la salud psíquica de la madre".

¿Qué se puede decir de una sociedad que elimina a sus individuos porque no es capaz de darle una solución a sus necesidades económicas? ¡Es el colmo de la insolidaridad y nos ubica en una auténtica jungla humana en donde solo sobrevive el más fuerte¡ La causa para acabar con un ser humano, o separar a los padres de sus hijos, nunca debería ser causa económica. Sin embargo, esto se está produciendo cada día.

El Estado ha de establecer los recursos adecuados y necesarios para que esto no ocurra. Un gobierno que permite esto es un gobierno cómplice de eliminar a los más débiles y desfavorecidos, por su condición social. Es otra forma de neofascismo. ¿Hasta cuando estaremos legislando ignorando a los más débiles o en contra de ellos? ¿Qué se puede esperar de una sociedad así? Quizás sea porque nos quedamos muy en evidencia, por lo que aún no se ha incluido esta causa como un supuesto legal de despenalización.

Al igual que en los casos anteriores, y mientras que nos las "gastemos" de esta manera, es preciso el acompañamiento a los padres favoreciendo la adopción. Lógico y lo humano sería que el Estado y la sociedad proporcionaran a los padres los recursos que necesitan para atender a sus hijos. Todo antes que matarlos por ser pobres.

Formas de practicar el aborto. Algunas consecuencias

Artº. 5 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos: " Nadie será sometido a torturas ni a penas o a tratos crueles inhumanos o degradantes".

Antes de cualquier operación, generalmente el paciente quiere saber exactamente lo que le van a hacer. Sin embargo ante el aborto, la mujer prefiere ignorarlo todo, cierra los ojos, no quiere ver nada y olvidarlo todo lo antes posible. Pero no se pueden cerrar los ojos que miran desde dentro, por mucho que no queramos mirar.

A pesar de la crudeza de los métodos, y de que puedan herir nuestra sensibilidad, es preciso conocer someramente como se mata al embrión, porque la ignorancia nos hace cómplices.

Los cuatro métodos básicos para eliminar a un pre-nacido no dejan lugar a duda del grave sufrimiento del feto, a quien desde su tercera semana se le ha comenzado a formar el sistema nervioso.

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1º "Dilatación y curetaje o legrado"

En este método se procede a la dilatación y se introduce en la vagina un instrumento que se llama "curette" con el que se trocea el cuerpo del niño y la placenta. Luego se procede mediante un raspado a extraer con cuidado todos los trozos.

2º "Método de succión".

Es similar al anterior, pero el troceado lo realiza una especie de aspirador potente que va absorbiendo los trozos del niño y la placenta.

3º " Envenenamiento salino"

Se utiliza en embarazos más avanzados, después de la 16ª semana, ya que por el tamaño del niño los dos métodos anteriores son más peligrosos. Consiste en introducir una larga aguja a través de la pared abdominal de la madre, inyectando en el líquido amniótico una solución salina concentrada que, al ser tragada por el niño, produce su envenenamiento. El niño envenenado, tras un período de convulsiones, muere, y a la madre se le presenta el parto en unas 24 horas, dando a luz al niño muerto. El aspecto de la piel del niño es en "carne viva", pues la piel queda corroída por la solución salina.

En Gran Bretaña hay clínicas donde antes de matar al niño le anestesian para que sufra menos, con lo cual reconocen algo que ya era evidente: que al bebé se le mata, pero evitando el dolor.

4º "Histerotomía".

Es similar a la cesárea. También se emplea cuando el embarazo está avanzado (14ª o 15ª semanas) El "inconveniente" es que los niños nacen vivos y hay que matarlos una vez extraídos, o dejarles morir. En la legislación inglesa, por la que se realizan abortos hasta las 28ª semanas, es frecuente.

Los niños abortados por este sistema suelen ser el filón de que se surten los científicos que experimentan con fetos vivos. En 1970, la Agencia UPI publicó un caso en que un niño abortado de esta forma en Nueva York, se "negó" a morir y por último fue adoptado.

Algunas premisas y consecuencias:

El aborto, indudablemente, ejerce una gran violencia contra la mujer. La presión del entorno (padres, compañeros, sanitarios y especialistas,…), el terror psicológico, la presión por las circunstancias: falta de vivienda, pobreza, paro, interrupción de la formación…., obligan a la madre a tomar una decisión, de mucho peso en un periodo de profundo cambios que no controla durante la primera fase del embarazo, a lo que se acompaña el estrés corporal y psíquico cuando el organismo infantil ya administra las hormonas de la madre.

La falta de tiempo es una de las mayores amenazas. ¡Es superior a sus fuerzas¡ Es muy difícil resistir esta presión. A todo eso se suma el desconocimiento de los hechos reales sobre el estado de desarrollo del niño y la manipulación mediática. Nadie le informará: ¿qué sucede cuando matan a mi niño? o ¿cómo lo matan?

El altísimo porcentaje de mujeres que, tras el aborto, sufren graves trastornos físicos y psicológicos es un hecho constatado. Sin embargo la mayoría de las mujeres que abortan confiesan que desconocían esto y que nadie les había informado. Existe una especie de "conspiración del silencio" por parte de médicos y otros consejeros que ocultan estas consecuencias del post-aborto. Es preciso que la mujer reciba estas informaciones antes de abortar.

Entre los trastornos diagnosticados que más frecuentemente va a sufrir la mujer que se ha sometido a un aborto se encuentran: hiperactividad como huida para no afrontar los sentimientos, conductas compulsivas (alcoholismo, drogas.), trastornos alimentarios, trastornos físicos (jaquecas, molestias del aparato digestivo, arritmias), disfunciones afectivas y sexuales, ruptura de la pareja, depresión con sentimiento de culpa, agresividad contra sí misma, contra la pareja y contra el mundo, perturbaciones permanentes de la personalidad, miedos, pensamientos de suicidio….

El aborto nunca es la mejor salida. Sin embargo, con demasiada frecuencia, es la única alternativa que se le oferta a la mujer, en un momento muy difícil para tomar una decisión.

¿A qué intereses sirve el aborto?

No es posible negar a estas alturas, que nuestra sociedad es una sociedad capitalista neoliberal donde el poder emana de la economía y los intereses son los que ésta determina. Con demasiada frecuencia, los valores morales o los derechos de los más empobrecidos son pisoteados por los intereses de los más poderosos económicamente. Ignorar esto, es estar en la inopia.

Situada esta premisa como punto de partida, hay que afirmar con contundencia que detrás de las políticas abortistas hay trayectorias planificadas y fines muy oscuros al servicio de intereses económicos y de poder.

La legalización del aborto es sólo un escalón más en un lento y progresivo proceso de la concienciación social, pero es un escalón muy importante porque se relativiza lo más fundamental: la vida humana. El objetivo último es la mentalización y la educación social en la dirección que desemboca en el control de la reproducción por los Estados y multinacionales.

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Para la sociedad este proceso no está resultando difícil, ya que son los sectores mayoritariamente progresistas (esto no tendría que ser así como luego ampliaremos), los que vienen impulsando legislaciones abortistas encuadrándolas dentro de políticas que perversamente se autodenominan de "liberación de la mujer".

Es muy evidente que el gran potencial económico de los años futuros se encuentra en la genética. Todas las grandes especulaciones que han existido a lo largo de la historia son ridículas comparadas con los inimaginables intereses de poder y económicos que moverá este tema. El control de la genética determinará en un futuro no muy lejano el remedio de muchas enfermedades incurables hoy en día, alargará la vida, e incluso llegado el momento no sabemos que podría ocurrir en relación con la muerte.

Sin lugar a ninguna duda todos estos avances de la ciencia son maravillosos, con la única condición de que el coste no sean otras vidas humanas a las que los intereses de turno les otorguen menor valor. De lo contrario seríamos unos monstruos, unos caníbales refinados en nuestra particular selección de la especie.

No está lejos el día en que los progenitores puedan seleccionar entre varios embriones fecundados, cuál es el que se considera "más adecuado". La elección se hará, lógicamente, dando la opción a continuar viviendo a uno o dos embriones y desechando al resto que han de morir o ser destinados a experimentos. En un principio la selección genética se realizará con criterios "médicos", como está ocurriendo en estos momentos, luego los requisitos podrán ir variando: sexo, características físicas…. En EEUU ya existen clínicas donde los padres pueden elegir un bebe a "la carta".

La ciencia podrá ofrecer a las parejas que deseen engendrar un hijo y que no tengan todas "las garantías genéticas adecuadas", la posibilidad de implantarles embriones "genéticamente perfectos" procedentes de donaciones o laboratorios. Los padres que a pesar de esta oferta, elijan tener sus propios hijos, se les considerará retrógrados, egoístas e irresponsables.

Sería muy grave que en un futuro la sociedad pudiera llegar a plantearse la legitimidad de soportar con sus impuestos las cargas económicas que supone el nacimiento de un individuo engendrado tan "irresponsablemente", en caso de que nazca con alguna enfermedad, disfunción física o psíquica.

Llegado a este punto, se precisará que las legislaciones establezcan con claridad a qué se considera individuos "genéticamente adecuados", con toda la implicación social que de esto se deriva. También es en EEUU donde ya se están pidiendo mapas genéticos por algunas aseguradoras, y es requisito "voluntario" para acceder en algunos puestos de trabajo; eso sí, si el interesado no aporta el mapa genético, no hay contrato. Con estos mapas se pueden valorar los riesgos que tiene el asegurado o el trabajador de contraer enfermedades. Nada nuevo: la genética al servicio de los intereses económicos.

Tampoco es inviable que en un futuro la ciencia consiga llevar a término la gestación fuera del útero materno. La intervención de los Estados y, junto con ellos, de las grandes multinacionales, está garantizada

La educación conceptual de una sociedad ha de ser progresiva y debe ser asimilada poco a poco por ésta. Es precisa la confrontación ideológica y el debate social, donde cada uno se pronuncie claramente, y la posición dominante tome la fuerza necesaria.

En el caso del aborto, para que se produzca esta educación social conceptual, es imprescindible presentar supuestos extremos para hacer una llamada a la sensibilidad social y, al menos, sembrar la duda sobre si el no nacido es o no persona, ya que salvado este "pequeño escollo", todo son "ventajas sociales".

El caldo de cultivo se ha venido preparando durante mucho tiempo. Por un lado está el acelerado ritmo marcado por la sociedad y el predominio del "tener" sobre el "ser". Por otro lado nos encontramos con un profundo hedonismo basado en la búsqueda del placer inmediato y el confort confundiéndolo con felicidad. Cualquier circunstancia que pueda convertirse en una amenaza a esta situación de "bienestar", incluso una simple molestia física, es inmediatamente combatida con potentes "analgésicos". De igual forma, cualquier situación social que pueda perturbar al individuo es tapada, arrinconada e ignorada.

En las relaciones personales se fomenta el individualismo y las relaciones superficiales. La sexualidad en este contexto es entendida por muchos como un objeto más de consumo, y si se produce un embarazo va a ser considerado como un accidente o un problema que hay que solucionar con rapidez.

Todo este sistema se sustenta en una escasísima conciencia crítica de muchos individuos, adoctrinados por medios de comunicación e ideologías, e imbuidos en la vertiginosa y estresante dinámica social que dificulta enormemente sus posibilidades e incluso capacidades de detenerse para analizar los hechos y sacar sus propias conclusiones. Es evidente que nada de esto sucede de forma casual.

El aborto en todo este proceso es una pieza muy importante del puzzle donde la vida se supedita a los intereses del poder y la economía. El Estado será quien esté legitimado para determinar qué individuos son considerados viables, así como las parejas y ambientes más adecuados, a cambio, eso sí, de garantizar "un mundo feliz". Esta será la nueva colonización que permitirá un control asombroso de los individuos por los Estados y los poderes económicos.

El aborto y las políticas de control de natalidad en los países en desarrollo

El aborto se viene imponiendo como medida política para el desarrollo de los países pobres. Sin embargo, el aborto no elimina la pobreza, elimina al pobre. Muchas de las ayudas al desarrollo, estarán condicionada a que los países apliquen políticas que legalicen el aborto.

En 1974, en Estados Unidos, se plantea por primera vez una ayuda al Tercer Mundo en términos de control de la natalidad. Las intenciones son claras: Los países ricos con su estilo de vida están bajando peligrosamente la natalidad, mientras los países en vías de desarrollo la están acrecentando. Se impone controlar este crecimiento y sostener así el predominio económico de los países más ricos.

Se manipula la solidaridad utilizando como excusa el excesivo crecimiento demográfico de los países pobres, dispuestos a mantener su primacía económica y a contener los flujos migratorios de modo eugenésico. Esta es una nueva forma de imperialismo y colonización en los países en desarrollo.

Un ejemplo de ello es el "Documento 20002", del Consejo de Seguridad Nacional de Estados Unidos, aprobado el 10 de diciembre de 1974 por el presidente Gerald Ford desclasificado en 1990, y que por la dureza de sus afirmaciones se había mantenido en secreto. Dice textualmente en algunos de sus puntos:

 Punto 19: "Los actuales factores de población en los países menos desarrollados suponen un riesgo político e incluso problemas de seguridad nacional para los Estados Unidos".

 Punto 30: "Los países con interés político y estratégico especial para los Estados Unidos son India, Bangla Desh, Pakistán, Nigeria, México, Indonesia, Brasil, Filipinas, Tailandia, Egipto, Turquía, Etiopía y Colombia (…) El presidente y el secretario de Estado deben tratar específicamente del control de la población mundial como un asunto de la máxima importancia en sus contactos regulares con jefes de otros gobiernos, particularmente de países en desarrollo".

Punto 33: "Debemos tener cuidado de que nuestras actividades no den a los países en desarrollo la apariencia de políticas de un país industrializado contra países en desarrollo. Hay que asegurar su apoyo en este terreno. Los líderes del Tercer Mundo deben figurar a la cabeza y recibir el aplauso por los programas eficaces".

 Punto 34: "Para tranquilizar a otros respecto de nuestras intenciones, debemos hacer énfasis en el derecho de los individuos y las parejas a decidir libre y responsablemente el número y el espaciamiento de sus hijos, el derecho a recibir la información, educación y nuestro continuo interés en mejorar el bienestar de todo el mundo. Debemos utilizar la autoridad del Plan Mundial de Población de las Naciones Unidas".

Posteriormente la ex-secretaria de Estado Madeleine Albrigth añadía que el control de nacimientos en el Tercer Mundo era pieza fundamental de la política de promoción de los intereses norteamericanos.

edu.red

En la Conferencia de la Población de El Cairo en 1994, los países desarrollados se negaron a ampliar sus cuotas de inmigración y a eliminar las injustas barreras económicas a la importación de productos del Tercer Mundo, tal como pedían los países pobres. Sin embargo, sí decidieron facilitar recursos encaminados a la "planificación familiar", en la que se encuentra incluido el aborto.

El Primer mundo en muchas ocasiones, ha impuesto políticas demográficas coactivamente condicionando la recepción de ayudas para el desarrollo al acatamiento de una serie de normas dictadas por países desarrollados. Estas políticas de control demográfico -normalmente conocidas por los eufemismos de "planificación familiar", "salud reproductiva" o "salud en materia de procreación", son en gran medida abortivas. Muchas de estas políticas son impulsadas por organizaciones internacionales de los países ricos e incluso por algunas ONGs. A veces estas políticas demográficas contrarias a la vida humana y a las libertades políticas se están llevando a cabo con "dinero humanitario" procedente de la Ayuda Oficial al Desarrollo de los países autodenominados "desarrollados.

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