Descargar

Participación de los miembros de la comunidad local en la solución de sus problemas ambientales (página 3)


Partes: 1, 2, 3, 4, 5, 6

1.1 Caracterización general. Ubicación de la comunidad local.

Primeramente se caracteriza de manera general a la comunidad, casi siempre cada comunidad tiene algunas características esenciales que las distinguen del resto, y otras características que son comunes a otras comunidades, en este caso se deben poner las más generales, pues para adentrarse en especificidades están los pasos siguientes.

Posteriormente se debe dar la ubicación de la comunidad, lo cual consiste en decir en qué lugar de la provincia a la cual pertenezca y municipio, está situada, y cuáles son sus límites cardinales.

Los ecosistemas y los recursos naturales constituyen una de las potencialidades esenciales de las comunidades para el logro del desarrollo sustentable. Es por ello que es necesario estudiar sus potencialidades, sus restricciones, así como los problemas ambientales que actualmente se manifiestan tanto en la degradación como en el desaprovechamiento.

En este capítulo se intenta acceder al conocimiento de la dinámica de la productividad natural de los ecosistemas, abarcando por lo tanto la totalidad de las especies de cada uno de ellos y no solo las destacadas por el mercado. La aplicación de este criterio es necesario a los fines de determinar la magnitud de los procesos de deterioro de los ecosistemas relacionados con una comunidad local determinada, enfatizando en lo concerniente a los generadores de erosión, desertificación, deforestación, contaminación de suelos, pérdidas de biodiversidad, disminución de nutrientes, contaminación de aguas subterráneas y superficiales, contaminación del aire, así como los procesos que implican desaprovechamiento en el uso de los recursos naturales.

Los elementos geomorfológicos considerados en esta primera aproximación a un diagnóstico ambiental se encuentran en otras unidades del análisis(suelo, uso de la tierra, etc), pero en un segundo avance, hacia el diagnóstico integral, podría conformar una unidad de análisis diferenciado.

Este diagnóstico ambiental puede ser hecho por contratación a expertos o por elaboración de los propios miembros de la comunidad, pero se recomienda usar las dos variantes.

2.1 El suelo:

El primer recurso que se somete al análisis es el suelo. Este análisis se recomienda hacerse como lo muestra el anexo 2 tabla 1, debe aparecer la unidad territorial a que se hace referencia, tipo de suelo según capacidad de uso, uso actual del suelo, superficie bajo riego, qué fuente de agua se utiliza para el riego, y en la última columna de la derecha deben aparecer los problemas ambientales manifiestos relacionados con lo antes abordado. Si se evidenciara por ejemplo, erosión, debe entonces tabularse la unidad territorial, relieve, tipo de suelo, superficie total considerada, erosión eólica o hídrica de la superficie afectada especificando si es moderada, severa o total; en caso de aparecer otro problema ambiental, se confeccionaría otra tabla similar a esta pero en lugar de considerar la erosión, se tendría en cuenta entonces ese otro problema ambiental como se expresa en el anexo 2 tabla 2.

2.2 El clima y el aire:

Una vez tratado lo concerniente al suelo entonces se procede a los elementos relacionados con el clima y el aire en la comunidad local, para ello se analizan los elementos como se evidencia en el anexo 3 tabla 1, donde se pone la unidad territorial nuevamente, la clasificación climática especificando siempre la clasificación utilizada, la temperatura media durante las cuatro estaciones del año, e igualmente la precipitación media en grados Celsius, días en que llueve teniendo en cuenta la cantidad, la dirección predominante y velocidad media del viento en metros por segundo (M/s), y problemas ambientales si los hubiere. En caso de que existan estos últimos, entonces se procede a profundizar en esa cuestión como lo muestra el anexo 3 tabla 2, el mismo es un ejemplo de que el problema sea la contaminación en el aire y lo especifica para invierno y otoño, pero la misma puede ser confeccionada con cualquier otro problema ambiental y segregado en las estaciones del año donde este se potencie, se debe poner la causa, el parámetro y el valor.

2.3 Aguas:

Después se analiza el uso del agua tal y como se puede constatar en el anexo 4 tabla 1 donde se tiene en cuenta la cuenca, cuerpo de agua, comités de cuenca si existieran, localización espacial, contaminación y en este caso explicitar sector, extensión y ancho. En caso de que exista contaminación se procede a tabular los datos como se muestra en el anexo 4 tabla 2, que incluyan el módulo en m3/seg., el problema específico, causas, indicadores, niveles y uso o actividad afectada.

Una vez concluido el análisis de las aguas superficiales se procede al análisis de las aguas subterráneas, para lo cual se tiene en cuenta en primer lugar la localización espacial de las mismas, es decir, en qué parte de la comunidad se encuentran; una vez hecho esto se tiene en cuenta el problema ambiental que ellas presentan si es que lo presentan, causas, indicadores ya sea organolépticos, químicos, físicos o de otra característica, niveles y uso de la actividad afectada, todo ese análisis puede verse en el anexo 4 tabla 3 con el fin de explicitar la información de forma controlada y uniforme.

Por último, se debe considerar el uso del agua de manera integral o parcial. Primeramente se tiene en cuenta la cuenca de donde se utiliza el agua para lo cual se debe explicitar el tramo si es medio, alto o bajo; luego aparecerán tantas columnas (pues se trabajará con una tabla) como actividades existan en la localidad y se marcará con una equis en la columna que corresponda. En el anexo 4 tabla 4 se relacionan el consumo, el turismo, transporte, industria, pesca, entre otros solo como un ejemplo, pero eso no anula la posibilidad de que cada comunidad tenga su propia tabla.

2.4 Flora y fauna.

Una vez concluido el estudio de las aguas, comienza entonces el análisis de la flora tanto terrestre como acuática. Para ello se elabora una tabla con las características que muestra el anexo 5 tabla 1 donde se explicita la identificación fitogeográfica, la localización espacial, el tipo o tipos de flora, el porciento que ocupa cada especie así como la cantidad de ejemplares forestales por especies y después, el estado de la unidad analizada, es en esta última columna donde se haría evidente si existe o no un problema ambiental en la flora de la comunidad local.

En caso de que la unidad analizada esté en malas condiciones, entonces se confecciona otra tabla, tal como se muestra en el anexo 5 tabla 2, donde se observaría en la primera columna de izquierda a derecha la identificación de agentes disturbantes lo cual constituiría las causas, luego la existencia de biomasa aprovechable total, la tasa de crecimiento anual expresada en m3/ha/año, tipo de uso actual, extracción o existencia promedio durante los últimos 5 años y la superficie de cada unidad analizada.

Seguidamente se pasa a analizar el estado de la fauna terrestre, la tabla que se encuentra en el anexo 6 tabla 1 debe contar con una primera columna donde esté la identificación de la unidad fitogeográfica, luego la localización espacial, superficie de cada unidad analizada, tipo de fauna, y el objetivo de la caza si la hubiere.

En caso de que hubiera caza, lo cual generalmente nunca falta en las muchas regiones a las cuales muchas comunidades, fundamentalmente rurales, pertenecen, entonces se analiza la magnitud de la caza anual promedio durante los últimos 5 años, existencias por especie, cantidad de ejemplares desagregados por sexo, estado de la fauna en la unidad analizada, tasa de crecimiento anual e identificación de agentes disturbantes tal y como se muestra en el anexo 6 tabla 2 .Finalmente se relacionan flora y fauna como se puede ver con claridad en el anexo 6 tabla 3 donde se combinan cuestiones de ambos tales como las regiones fitogeográficas con la correspondiente especificación de cuál ha sido la clasificación utilizada en este caso, localización, fauna afectada, flora afectada, tipo de problema en la fauna y tipo de problema en la flora.

2.5 Energía.

Después se comienza el análisis de la energía utilizada en la comunidad local para las diferentes actividades que allí se realizan. Se elabora una tabla donde se ponga la unidad territorial, la localización de la fuente primaria y nombre ya sea petróleo, leña, entre otros, superficie afectada en la explotación del recurso, el cauce de agua utilizado en la explotación del recurso, su nombre y velocidad, esto puede realizarse como indica el anexo 7 tabla 1.

Además se confecciona otra tabla como la que se muestra en el anexo 7 tabla 2 que es continuación de la primera, donde se incluye la calidad del agua del cauce antes mencionado, el uso aguas abajo, la dirección de la velocidad media del viento, magnitud de la reserva actual de energía, extracción promedio anual en los últimos 5 años, volumen y temperatura del agua de vuelta al cauce, cuál es el tratamiento de los residuos, insumos químicos cuyos residuos son vertidos al cauce del agua, tipo de uso del agua del cauce por población aguas abajo, problemas ambientales por explotación.

Una vez confeccionada la segunda tabla a que se hace alusión en el párrafo anterior, se procede a elaborar una última tabla relacionada con la energía donde se trata primeramente el transporte de producción de fuente secundaria, problemas ambientales por el transporte, problema ambiental de construcción de infraestructura energética, en extracción de leña se debe explicitar el origen y volumen de la extracción, y desagregar por leña de bosques nativos, leña de bosque implantado y poda de frutales y otros. Por último se incluye una columna donde se recoja el impacto de la extracción de leña de infraestructura energética, es decir, si trae como consecuencia deforestación, pérdida de la biodiversidad, erosión en los suelos, entre otros. Para una visualización de lo que se está explicando, remitirse al anexo 7 tabla 3.

2.6 Minería.

Para aquellas comunidades donde la extracción de minerales sea una actividad importante, se debe confeccionar una tabla donde se especifique la unidad territorial, minerales metalíferos y rocas de aplicación, localización de extracción o recolección, superficie ocupada por la actividad, dirección y velocidad media del viento, magnitud de la reserva actual y extracción promedio anual de 5 años tal y como se puede evidenciar en el anexo 8 tabla 1. Además se confeccionará otra tabla más donde se especifiquen los insumos químicos utilizados como promedio anual de los últimos 5 años, distancia a centros urbanos, magnitud de residuos que quedan en la superficie ocupada, fuente de energía utilizada y los problemas ambientales manifiestos, para una mejor comprensión de esto, remitirse al anexo 8 tabla 2.

2.7 Ganadería.

Se debe analizar el estado del ganado en la comunidad. Este análisis se hace si procede. Para ello, se debe definir el tipo de ganado que existe, la cantidad total, la cantidad por Km.2, el aporte a la producción nacional, y los principales problemas que puedan tener. Esto puede hacerse en forma de tabla, para este fin, remitirse al anexo 9 tabla 1.

2.8 Otros recursos

Después se confecciona una última tabla para analizar los recursos geomorfológicos que pudieran haber quedado en la comunidad y que de alguna forma aún no se han analizado, para este efecto, se debe remitir al anexo 9 tabla 2 donde se brinda con nitidez qué elementos han de analizarse.

3.1 Población.

Una vez abordados los elementos citados anteriormente, se comienzan a analizar los aspectos sociales. Para ello se introducen la cantidad total de población en cada unidad territorial, el total de hogares y el total de viviendas como se muestra en el anexo 10 tabla 1. En otra tabla se incluye el crecimiento demográfico comparando entre los dos últimos censos realizados, la superficie de la unidad territorial en km2, la densidad de población, y las causas de la emigración si hubiere emigración como se relaciona en el anexo 10 tabla 2. Luego se confecciona otra tabla, remitirse al anexo 10 tabla 3 con las causas de la inmigración si existiera inmigración, tasa de desocupación sobre el total de la población económicamente activa, la tasa de subocupación, así como la ocupación en cada uno de los sectores (primario, secundario y terciario). Estas dos últimas tablas pueden resumirse en una sola si es posible dadas las características de la comunidad que sea escenario de análisis.

3.2 Distribución del ingreso.

Se debe saber igualmente cómo esta la cuestión del ingreso en la comunidad, en el anexo 11 tabla 1 se puede ver cómo se tienen en cuenta elementos tales como el salario medio percibido, la tasa de ahorro, la contribución a la seguridad social, y el precio de la canasta básica. Aunque parezca un poco fuera de lugar, es bueno investigar por este medio hasta qué punto el ingreso constituye o no un problema para los miembros de la comunidad en virtud de enfrentarse con un proyecto comunitario de tal manera que otro tipo de preocupaciones, quizás financieras, no estorben la dedicación de los comunitarios a la solución de un problema ambiental determinado.

En general, no existen estudios específicos sobre la distribución del ingreso a nivel provincial y por lo tanto aún a nivel de unidades político-administrativas menores. Inclusive, los estudios a nivel nacional posibilitan solo aproximaciones al tema.

En todo caso, para una primera aproximación, podría pedirse a la Dirección (o equivalente) de Estadística y Censos de cada provincia, municipio o comunidad local la realización de una estimación de la distribución del ingreso al nivel que se esté realizando el diagnóstico.

En algunas universidades latinoamericanas se desarrollan investigaciones al respecto, tanto en las Facultades de Ciencias Económicas (como, por ejemplo, en Tucumán) como en otras.

Una vez obtenido un cuadro sobre la distribución del ingreso, se estará en condiciones de comparar la situación de los estratos, según el nivel de ingreso, con el costo mínimo de la Canasta Mínima de Bienes en cuanto a satisfactores de las necesidades básicas expresadas en alimentos, vestidos, vivienda, salud, educación y recreación, obteniendo un valioso indicador del impacto ambiental de dicha distribución.

3.3 Requerimientos de la población.

Luego se procede a reflexionar acerca de los requerimientos de la población, cuáles son sus expectativas y necesidades, entre otras cosas. Tal y como muestra el anexo 11 tabla 2, se debe poner el requerimiento en sí, la clasificación, el carácter, la aceptación en el corto plazo y si afecta o no el medio ambiente.

Los estudios sobre oferta y demanda de diferentes bienes, incluyen solo la demanda solvente, obviando por consiguiente la determinación de los efectivos requerimientos de la población. A la vez, aquellos estudios posibilitan la construcción de balances y la emisión de señales sobre el comercio exterior. Estos estudios son insuficientes desde el punto de vista ambiental, por razones obvias.

3.4 Salud y educación.

Por la importancia tan profunda que tiene la salud y la educación en la preservación del medio ambiente, estas variables también se incluyen en este diagnóstico. Por tanto se elabora una tabla con una primera columna de izquierda a derecha donde estén todas las modalidades de prestación de servicios de salud a la comunidad, luego la cantidad por cada modalidad, cantidad de trabajadores profesionales y auxiliares y el total de trabajadores por cada modalidad. Esto puede consultarse en el anexo 12 tabla 1. Después se elabora otra tabla para ver lo relacionado con la educación, remitirse al anexo 12 tabla 2, en la misma se plasman todas las modalidades de educación existentes en la comunidad, cantidad por modalidad, cantidad de profesores y de alumnos.

3.5 Deporte y cultura.

Posteriormente se diagnostica la situación de las actividades deportivas en la comunidad, se tabulan los datos teniendo en cuenta lo que se muestra en el anexo 13 tabla 1. Se debe investigar cuáles son las manifestaciones deportivas en la comunidad, qué cantidad de profesores hay al frente de cada una de ellas, así mismo qué cantidad de estudiantes totales y por cada nivel de enseñanza, además de que es necesario conocer qué porciento del total representan cada una de las cantidades de estudiantes por cada manifestación.

Luego se analiza la cultura, remitirse al anexo 13 tabla 2. Se tienen en cuenta las manifestaciones culturales que haya en la comunidad, la cantidad, profesores implicados y estudiantes implicados, así como el impacto comunitario.

3.6 Participación de la población.

Una vez arribado a este punto se hace necesario entonces diagnosticar lo relacionado con los elementos que pertenecen a la participación de los miembros de la comunidad local justamente en la vida de su propia comunidad; este punto es importantísimo puesto que para determinar si la metodología del capítulo 3 es necesaria, no es suficiente constatar que haya problemas ambientales en la comunidad, sino que se necesita investigar en qué medida los comunitarios participan activamente y sin imposición en la solución de esos problemas. Desde luego, no se aspira a que en este momento se sepa con profundidad cómo funciona esto pues eso le compete a la metodología en cuestión, pero si se debe alcanzar una noción suficiente acerca de la situación de la participación comunitaria en la comunidad local.

Para que exista constancia de ello se confecciona una tabla, que se puede consultar en el anexo 14 tabla 1, donde se tengan en cuenta la cantidad de organizaciones políticas y de masas con que cuenta la comunidad, si estuvieren compuestas por núcleos, cuántos núcleos existen, qué cantidad real de miembros tienen, el porciento que representan del total de la comunidad, esto último ayudara a determinar cuál es la organización que más influencia ejerce en la localidad desde el punto de vista de la cantidad, y el nivel de compromiso de los miembros con su comunidad y los lineamientos específicos de la organización.

Posteriormente se procede a elaborar otra tabla como se puede ver en el anexo 14 tabla 2, donde se consideraran a los líderes de la comunidad. Esto es muy importante puesto que de esta manera se está conociendo de antemano quiénes serán potencialmente aquellas personas que pudieran ser muy útiles en la implementación de la metodología que se propone. En una primera columna se ponen los líderes, luego la cantidad por cada tipo de líder, el porciento que representan, el tipo de influencia y el nivel.

En las estimaciones sobre Desarrollo Humano, Naciones Unidas incluye como indicador relevante la participación de la población en diversas cuestiones. En el diagnóstico ambiental sería de sumo interés explicitar en qué áreas y de qué manera se manifiesta la participación de la población, cuáles son los incentivos que motiva dicha conducta y bajo qué formas organizativas se expresan, o si la misma se desarrolla individualmente.

4.1 Infraestructura y caminos

Después se elabora una tabla para determinar los aspectos relacionados con la infraestructura tal y como se muestra en el anexo 15 tabla 1. En la misma se considera el tipo de camino, la extensión por tipo de camino, tipo de problema ambiental y la población afectada. Luego se confecciona otra tabla específicamente para las carreteras que puede consultarse en el mismo anexo en la tabla 2, se analizan los caminos como se muestra en el anexo 15 tabla 3 y también las veredas, para lo cual puede consultarse el anexo 15 tabla 4.

4.2 Sistema urbano y asentamientos poblacionales.

El objetivo consiste en analizar las características del medio natural transformado por el hombre en función de los objetivos del desarrollo sustentable. Históricamente, el hombre utilizó ciertas características del medio natural para el desarrollo de su vida y para sus actividades productivas.

Para ello implementó una infraestructura que potenció su acción. La misma le permitió un importante incremento de sus actividades y generó un desarrollo urbano frecuentemente explosivo. Pero tanto el ritmo, como la forma de crecimiento adoptada y el tipo de emplazamiento de la infraestructura en general, no tuvieron en cuenta las particularidades del ecosistema que transformaba.

Las comunidades locales crecieron sin armonía con su medio natural y aceleraron procesos de contaminación cuando rebasaron su capacidad de carga. El proceso de transformación fue tan grande que hoy conforman un tecnosistema que requiere altos subsidios energéticos y grandes esfuerzos económicos. Aún así, los servicios no llegan a toda la población y el emplazamiento de la infraestructura genera problemas ambientales.

A continuación se explicitan los principales aspectos a considerar

4.2.1 Sistema de comunidades

Distribución geográfica de la población por comunidad local. Localidad urbana y rural.

4.2.2 Superficies de la comunidades locales

Superficie ocupada por la comunidad local y descripción general del ecosistema que la contiene. Caracterización ecológica del tecnosistema si lo hubiere. Principales intercambios en aspectos críticos como aguas, vientos, energía. Un análisis de este tipo permitiría comenzar a caracterizar ecológicamente el tecnosistema de la comunidad, para conocer tanto su situación degradatoria como los mecanismos para restaurar las relaciones en el nivel de equilibrio deseado.

4.2.3 Defensa de la comunidad local

En este punto es importante tratar las obras de defensa que puedan existir en la comunidad contra inundaciones por ejemplo, o de otras características que deberán señalarse. También puede tratarse de forestación para evitar los efectos de los vientos, etc.

La permanencia de catástrofes naturales y procesos de tensión ecosistémica y sus efectos sobre la comunidad, es una situación que se viene comprobando y exige la adopción de medidas de diferente tipo.

Por un lado, debe aplicarse un ordenamiento territorial que evite seguir contribuyendo a la agudización de los problemas. Por el otro, se necesita de acciones específicas que permitan mejorar la situación. Por ello se trata de recoger en este caso los déficits existentes. Se necesitará, adicionalmente, analizar cada caso y las soluciones propuestas.

En este caso se puede construir una tabla que se conformará de acuerdo a las características de la comunidad local que se diagnostique.

4.2.4 Zonificación urbana y uso del suelo en la comunidad

Planes reguladores. Zonas de amortiguamiento. Reservas comunitarias, especialmente se requiere obtener información acerca de la ubicación de las áreas industriales y de los servicios, tanto en relación con los vientos, como a la red de drenaje y la energía de relieve.

4.2.5 Edificaciones

Características de los materiales en relación con el clima, a las catástrofes naturales y a la dotación de recursos naturales de la comunidad local. Paisaje urbano. Principales problemas ambientales.

4.2.6 Agua

El manejo ambiental del agua supone disponer de ella en cantidad, calidad y la frecuencia necesaria, para el desarrollo de las diferentes actividades humanas.

Teniendo en cuenta lo mencionado respecto al agua contaminada, se puede elaborar un índice de calidad de agua en base a la posibilidad de desarrollar sus múltiples usos agrupados por tipo de exigencia:

  1. Abastecimiento público.
  2. Natación y deportes acuáticos de contacto directo con el cuerpo.
  3. Pesca, acuacultura y vida acuática.
  4. Industrial y agrícola.
  5. Navegación.
  6. Transporte de desechos.

La posibilidad de su uso para los ítems anteriores será determinada por los indicadores relevantes para cada uso del agua. Ejemplo, bacterias coliforme, demanda bioquímica, grasas y aceites, nitratos, fosfatos sólidos suspendidos, disueltos, etc.

4.2.7 Medidas de control de la contaminación del agua

Tales como el tipo de tratamiento que se realiza a las aguas contaminadas, antes de verterlas en las aguas superficiales, normas de agua potable, especificaciones de los efluentes antes de la descarga, grado de aplicación de las medidas, sistemas utilizados y posibles efectos sobre la contaminación de la napa freática.

4.2.8 Electricidad

Debe aparecer de la población rural y urbana de la comunidad la cantidad que está conectada al sistema eléctrico, la que no está, las conexiones clandestinas si las hubiere y la evaluación ambiental.

4.2.9 Espacios verdes

Debe aparecer los parques, las plazas, estos dos últimos en hectáreas, la densidad demográfica y la evaluación ambiental.

4.2.10 Arbolado

Se analiza el número de árboles y/o cuadras arboladas, las principales especies. El manejo adecuado de los árboles es uno de los problemas ambientales importantes, así como uno de los frecuentes motivos de conflictos entre vecinos.

Los efectos ambientales de los árboles son diferentes en cada comunidad respecto al resto. Gran parte de sus efectos son positivos. Existen, sin embargo, algunos aspectos que pudieran ser negativos en término de causante de enfermedades. Se requiere por ello realizar una adecuada selección de especies y de manejo de las mismas. En las comunidades, directa o indirectamente, industriales el papel de los árboles es esencial. Sin embargo, este papel no es suficientemente conocido por la población.

4.2.11 Residuos domiciliarios

Se debe diagnosticar la cantidad de residuos en toneladas, el costo por toneladas, el porcentaje total de recolección, sistema de recolección, transporte y disposición de residuos domiciliarios, tipo de disposición de residuos sólidos, tipo de residuos en porcentaje y los efectos ambientales de los residuos domiciliarios.

4.2.12 Medios de comunicación

Uno de los instrumentos de mayor incidencia en la difusión de la política ambiental lo constituye los medios de difusión. Por ello se requiere conocer los tipos de mensajes enviados a la población sobre medio ambiente, a fin de orientar las campañas tendientes a generar una actitud positiva hacia el tema.

4.2.13 Agricultura urbana

Debe analizarse la superficie agrícola que circunda la comunidad local, el tipo de producción, tipo de productor y los problemas ambientales si los hubiere.

5.1 Sector primario

Primeramente se confecciona una tabla como se muestra en el anexo 16 tabla 1 donde se analizan todos los agentes económicos de la comunidad local del sector primario.

5.2 Sector secundario

Luego se elabora otra tabla tal y como se tabula en el anexo 16 tabla 2, en la cual se relacionan los agentes económicos pertenecientes al sector secundario.

5.3 Sector terciario

Por último, se confecciona una tabla, remitirse al anexo16 tabla 3, para los agentes económicos del sector terciario, se ubica la descripción, la cantidad, el número de trabajadores y el porciento que estos representan.

Y con esto último quedará concluida la parte de construcción de tablas en el diagnóstico local-ambiental.

Evaluación ambiental de las acciones desarrolladas en la comunidad a partir de los resultados del diagnóstico local-ambiental.

Una vez concluido el diagnóstico local-ambiental se hace necesario evaluar el impacto ambiental de las acciones que están siendo llevadas a cabo en la comunidad local sobre los elementos del medio, ya sean estas acciones llevadas a realizadas por los miembros de la comunidad o por el propio medio natural. Para esta evaluación ambiental se debe consultar el anexo 17 donde se propone una vía para realizar este análisis, independientemente de que no tiene que convertirse esa vía en la única.

Ahora resulta conveniente mencionar cuáles son los problemas ambientales que generalmente una comunidad, localidad o región puede tener. Ellos son:

  • Degradación ecosistémica y de especies.
  1. Erosión de tierra.
  2. Salinización.
  3. Eutroficación.
  4. Desertificación.
  5. Deforestación. Bosque nativo e implantado.
  6. Contaminación:
  7. Aire.
  8. Suelo.
  9. Agua.

    1. Pérdida de biodiversidad.
    2. Degradación de cuencas hidrográficas.
    3. Pérdida de nutrientes.
    4. Sedimentación.
    5. Especies en peligro de extinción.
  10. Alimentos.
  • Desaprovechamiento.
  1. Por la no utilización.
  2. Por la utilización parcial de un recurso.
  3. Por la utilización de solo un recurso, cuando existe más de uno.
  4. Por la utilización parcial del recurso extraído.
  • Deterioro humano.
  1. Pobreza.
  2. Insatisfacción de necesidades básicas.
  3. Salud.
  4. Vivienda.
  5. Alimentación.

    1. Subempleo / desempleo.
  6. Insuficiencia de servicios básicos.
  • Deficiencias de la estructura institucional y legal ambiental.
  • Potenciales ambientales desaprovechados. Recursos no aprovechados o subaprovechados. Diversidad cultural. Deficiencias en la infraestructura.

Una vez que se sepa qué tipos de problemas ambientales pueden surgir del diagnóstico, y que se haya evaluado el impacto ambiental, entonces se procede a analizar la estrategia a seguir por la comunidad local.

6.1 El proceso de dirección estratégica de la comunidad local. Análisis interno y externo.

El proceso de dirección estratégica de la comunidad local es un proceso complejo que requiere la participación colectiva de los miembros de la comunidad local, este proyecta el futuro de la misma, por lo que es de gran importancia su realización. Para ello deben cumplirse una serie de pasos relacionados a continuación:

  1. Conformar un equipo para la realización de la estrategia.
  2. Preparar la estrategia general de la comunidad local con apoyo de personal capacitado para ello.
  3. Preparar las estrategias funcionales que tributen a la misión y al cumplimiento de los objetivos.

Análisis interno.

Aquí se tienen en cuenta las debilidades y fortalezas de la comunidad local.

Análisis externo.

Aquí se tienen en cuenta las amenazas y las oportunidades del entorno.

Para determinar la estrategia a seguir por la comunidad local se debe realizar un análisis DAFO, del cual se debe saber hasta qué punto la comunidad necesita actuar o no ante la problemática ambiental que posee.

En caso de que la estrategia a seguir sea defensiva, entonces se procedería a implementar la metodología que se propone en el siguiente capítulo.

2.3- El promotor de la gestión local y el acceso a la información de la comunidad local.

Los responsables de la gestión local deben ser personas provistas de un panorama integral de la situación de la localidad, que acepten diversas apreciaciones sobre un problema.

Deben ser personas centradas en los problemas, expectativas y necesidades, atentas a las quejas y reclamos, deben trabajar, con la comunidad y para ella, como agentes dinámicos y multiplicadores del cambio y sobre todo tener un elevado nivel de conocimiento de las ciencias económicas y de la administración de empresas como lo requieren las circunstancias actuales.

Además de la responsabilidad de asegurar la competitividad y la excelente gestión local debe garantizar el mejoramiento de la calidad de vida de la localidad en general.

Como que el modelo supone el control de toda su magnitud, esta se realiza a través de dos vías:

Control interno, que se encarga de la comparación permanente de lo realizado y logrado, con lo planificado, mediante informes periódicos.

Control abierto al libre acceso y examen por parte de los comunitarios, los empresarios y los órganos del gobierno.

En este proceso de control de la información generada en la localidad juega un papel fundamental las oficinas de desarrollo local (O.D.L.), llamado en Cuba los Presidentes de los Consejos Populares

Las oficinas de desarrollo local (O.D.L.). Constituyen una estructura adecuada de gestión de la administración pública local de manera que permita la integración con las demás organizaciones existentes para determinar el destino de los fondos para el financiamiento de sus actividades y proyectos básicos y obtener los resultados prácticos.

En ellas se genera y controla toda la información necesaria, resultante del proceso de administración de la actividad socioeconómica de la localidad.

La aplicación práctica de las (O.D.L.) debe desarrollar entre otras siete acciones principales:

  • Determinar los objetivos y los destinatarios.
  • Delegación de autoridad en los comunitarios.
  • Supervisión detenida de las actuaciones.
  • Contratación del personal calificado para la ejecución de los proyectos.
  • Consecución de resultados prácticos.
  • Divulgación de los resultados prácticos en el ámbito local.
  • Establecimiento de una imagen de calidad, eficacia y disponibilidad de los recursos.

En fin, estas oficinas, serán fuente de apoyo potencial para que funcione exitosamente la metodología que se explicará en breve en el capítulo siguiente.

2.4 Propuesta de implementación en el Consejo Popular Santa Lucía.

Se considera que la realización del diagnóstico expuesto anteriormente y la implementación de la metodología que se propondrá se debiera hacer en el Municipio Minas de Matahambre y específicamente en el poblado de Santa Lucía. Esta proposición proviene de la idea bien enjuiciada de que en toda la provincia de Pinar del Río, un municipio con una cierta actividad industrial seria es justamente el que se está aludiendo.

Con esto no se está queriendo indicar que en ningún otro lugar haya actividad industrial, más bien se está considerando la realidad de que históricamente este ha sido el anillo industrial pinareño y a los efectos de la realidad objetiva, habrá una contaminación ambiental más pronunciada allí donde más actividad industrial exista.

Es obvio que en la actualidad este municipio no es lo que ha sido, si se tiene en cuenta que la mina en la cabecera municipal no está funcionando. Pero se debe recordar que un impacto ambiental negativo puede seguir haciendo estragos durante un período determinado de tiempo después de desaparecer la causa que lo originó; es por ello, que teniendo en cuenta la poca actividad industrial que posee (comparado con años anteriores) y la que tuvo, se puede utilizar como escenario de acciones futuras.

El municipio en cuestión está situado al norte de la provincia de Pinar del Río, al norte limita con el Mar Caribe, al sur con los municipios de Pinar del Río y San Luis, al este con el municipio de Viñales y al oeste con el Municipio de Mantua. Su relieve es eminentemente montañoso. Ocupa una superficie de 85 789.60 hectáreas totales, de las cuales 84 851.53 hectáreas corresponden a tierra firme y 938.07 hectáreas a cayos. Esta extensión territorial representa el 8 % del área de la provincia, que lo sitúa en el quinto lugar por su extensión territorial entre los catorce municipios de la provincia (anexo 18 tabla 1).

Los suelos agrícolas, sobre los cuales forman parte del desarrollo económico del municipio están constituidos por el 31 % de suelos ferra líticos rojos lixiviados y ferra líticos cuarcíticos amarillos rojizos lixiviados, con un mediocre valor agrícola y preferencia fundamental para pastos, excepto los comprendidos en los valles intramontanos que presentan buenas características para el cultivo del tabaco y cultivos varios.

Cuenta con valiosos recursos naturales, sobre los que se ha basado en lo fundamental su desarrollo económico, siendo los más importantes los recursos mineros y los suelos agrícolas y forestales, por sus grandes potencialidades y reservas que aún atesora.

Una vez dados estos datos acerca del municipio minero, se debe reconocer que seria muy engorroso hacer un diagnóstico local-ambiental en toda esa región, y además no procedería la metodología del siguiente capítulo, pues la misma está diseñada para una comunidad. Por tanto, es necesario elegir una comunidad dentro de ese municipio, para este fin, como ya se dijo anteriormente, se propone al Consejo Popular Santa Lucía, que tiene una población de 4 896 habitantes, por las siguientes características:

  • Es el segundo asentamiento de mayor cantidad de población en el municipio.
  • Es un asentamiento donde aún hay una actividad industrial compatible con la posible existencia de problemas ambientales.
  • Posee la mayoría de los elementos naturales: mar, playa, manglares, puerto industrial, contenido de azufre y otros elementos que pudieran ser nocivos en el suelo cercano al mar, la propia comunidad, actividad industrial, campos, sembrados, ríos, el peligro que implica el trabajo con el ácido sulfúrico tanto en tierra como en el mar, actividad turística en Cayo Jutías, entre otros.
  • Cuenta con miembros comunitarios de muy buen potencial cuyas convicciones y presteza han sido evidentes a lo largo de la historia.

Es obvio que para lograr poner en práctica lo que se propone, la comunidad de Santa Lucía pudiera ser un escenario especial.

Conclusiones parciales:

  • Es necesario realizar un diagnóstico local-ambiental en la comunidad en virtud de conocer su situación y por tanto saber si es necesaria una metodología para solucionar sus problemas ambientales que implique a la totalidad de sus miembros.
  • La incorporación de la contabilidad y en general la ciencia económica a las materias ambientales viene a llenar una necesidad referida a la forma de cuantificar, registrar e informar los daños causados al medio ambiente y las acciones preventivas o correctivas necesarias para evitarlos (medidas de protección ambiental).
  • Se propone al Consejo Popular de Santa Lucía en el Municipio Minas de Matahambre, como escenario de actividades para la implementación de la metodología que se propone en el capítulo 3, pues es la comunidad Pinar del Río con una cierta actividad industrial considerable, posee la mayoría de los elementos a analizar, entre otras cosas.

Capítulo III: Metodología para la participación de los miembros de la comunidad local en la solución de sus problemas ambientales.

En este capítulo se describen y explican cada uno de los pasos que conforman la metodología que se propone para elevar los niveles de participación de la comunidad local en la solución de sus problemas ambientales.

Se debe decir que para el diseño de esta metodología son necesarias no solo herramientas económicas, sino también psicológicas, de dirección, pedagógicas, etc.

Para llevar a cabo esta metodología se tuvieron en cuenta los principios a seguir en el trabajo comunitario; elemento sin el cual es imposible utilizar el método que se propone.

3.1 Generalidades sobre la participación ambiental comunitaria.

Se dedica un tiempo en este epígrafe a lo concerniente a aquello que constituye la clave del éxito para crear un muro o cortina capaz de frenar y minimizar los impactos negativos que puede ocasionar la problemática ambiental en el marco local: la participación comunitaria.

El objetivo central del desarrollo sustentable es el de elevar la calidad de vida mediante la maximización a largo plazo del potencial productivo de los ecosistemas, a través de tecnologías adecuadas a estos fines y mediante la activa participación de la población en las decisiones fundamentales del desarrollo.

Por tanto, antes de abordar cuestiones más profundas urge decir qué significa "participar": participar es algo más que asistir o estar presente, aunque esto sea una condición necesaria para que se produzca la participación. Participar es tener o tomar parte, intervenir, implicarse, supone en consecuencia, que la presencia es activa, comprometiendo a la persona en mayor o menor medida. (38).

La participación no es un fin en sí, algo que se explica y justifica por sí misma, sino un medio. No se puede participar en abstracto, sino en algo concreto. La participación siempre hace referencia a un objeto o a un objetivo: tomar parte o intervenir en una actividad, en una tarea, en la consecución de un objetivo, en la realización de un proyecto.

Por otra parte, cuando se alude a participación en las comunidades se hace desde dos principios básicos:

  • Una asociación es un grupo de personas que se unen para trabajar colectivamente en la consecución de un solo objetivo, la participación es por tanto, un elemento sustantivo de las asociaciones. Lo esencial no es solo lo que se persigue, el objetivo o fin común, sino la forma en que se pretende conseguir: mediante la participación de quienes forman la asociación. Sin participación no hay asociacionismo, aunque haya colectivos o situaciones en las que la participación brilla por su ausencia y, sin embargo, se llaman asociaciones, pero ¿Lo son realmente? Por supuesto que no.
  • Además, la participación en las asociaciones responde a un principio de eficacia. Las empresas privadas, cuyo afán por mejorar la eficacia y la eficiencia es más que evidente, no dudan en incorporar cada día más métodos de "gestión participativa" porque han descubierto que la participación está directamente ligada al rendimiento, a la eficacia y la eficiencia. Con mayor razón las asociaciones, comunidades y organizaciones sociales deben apostar por la participación para poder alcanzar mejor sus objetivos.

Estos principios son válidos para todo tipo de comunidades, pero, muy especialmente para aquellas que pretenden contribuir a mejorar la "calidad de vida colectiva", aportar su esfuerzo al bienestar social y no solo satisfacer los intereses particulares de sus miembros. Para estas, la participación es una de las "claves" principales.

Cuando la participación es enfocada a la preservación y cuidado del medio ambiente, entonces además de ser participación comunitaria, es también ambiental. Por tanto, se puede definir la participación ambiental comunitaria como el importante proceso que ocurre en el interior de la comunidad o comunidades que consiste en la plena implicación de la mayoría o la totalidad de los miembros de la comunidad local en la solución de sus problemas ambientales, debe ser continuo y partir de la propia comunidad.

Cuando se dice "problemas ambientales" se hace referencia a los mencionados en el Capítulo II página 54. Según las líneas precedentes, todo parece indicar que la participación ambiental comunitaria es uno de los elementos clave para eliminar o contrarrestar los problemas antes citados.

3.2. Situación actual con respecto a la participación comunitaria.

El problema cardinal de la participación comunitaria podría ser definido en términos de: "cómo articular de una manera coherente los diferentes factores existentes, en función de dinamizar las potencialidades de la comunidad, encaminada al logro progresivo de su autogobierno." (39).

La respuesta práctica a este problema encuentra hoy en día múltiples obstáculos materiales, objetivos y subjetivos.

Entre ellos:

  • La existencia de una cultura centralista-verticalista-consumista manifiesta en los estilos, métodos y hábitos de trabajo de que se debe hacer estrictamente lo orientado.
  • Existe una multiplicidad de programas institucionales que actúan simultáneamente, pero sin un proceso de articulación de sus objetivos y métodos.
  • El personal encargado de ejecutar los programas en la base, no está calificado en cuanto a lo que participación comunitaria y trabajo comunitario se refiere, muy especialmente en lo concerniente a técnicas de trabajo participativas.
  • Algunas dimensiones importantes, como son parte de la actividad económica, los problemas ambientales y los habitacionales, no son objeto de atención a este nivel o resultan insuficientemente atendidos.
  • Se ha creado un marco jurídico y un sistema institucional con potencialidades para la participación comunitaria al cual es necesario darle más utilización, no obstante, hay aspectos que requieren atención, con vistas al fortalecimiento que se persigue del trabajo comunitario, en particular, lo concerniente a las facultades y atribuciones de los municipios sobre entidades económicas de subordinación provincial y nacional enclavadas en su territorio.
  • Se aprecia una tendencia a una producción teórica sin práctica y a una práctica sin el debido fundamento teórico, lo que impide sistematizar y divulgar experiencias que se lleven adelante en el país. La aplicación de enfoques, técnicas y procedimientos diferentes, adecuadamente fundamentados y articulados, permitiría conformar, primero y enriquecer permanentemente, una concepción cubana de participación comunitaria a la que se articularía lo mejor de las concepciones de trabajo en grupo de América Latina y el Mundo.

Se han iniciado proyectos con la intención de lograr coherencia e integración de los diferentes organismos e instituciones y organizaciones para la realización de la acción comunitaria. Se han obtenido logros en la instrumentación y aplicación, pero aún son insuficientes en las distintas comunidades. Además de que en lo concerniente al medio ambiente esta cuestión participativa esta muy lejos de ser lo que realmente debe ser.

El consejo popular, el eslabón más joven del sistema de gobierno cubano, ofrece posibilidades excepcionales para la interacción, coordinación e integración de los diversos actores comunitarios.

Pero estas potencialidades se ven frenadas y en peligro, por lo mismo que frena y hace peligrar las potencialidades del consejo como vehículo de participación de autogobierno social.

Frente a estas situaciones que afectan negativamente al desarrollo de la participación comunitaria, se tiene una voluntad política creciente, que puede interactuar con la voluntad popular de avance en este sentido, reforzada sobre todo por las condiciones objetivas generadas del actual Período Especial y por los cambios que están teniendo lugar en las instituciones y organizaciones.

Se cuenta también con el caudal de experiencias acumuladas durante los años de proceso revolucionario, y las estructuras organizativas y funciones creadas, tanto en los marcos estatales como de las organizaciones políticas y de masas, todo lo cual condiciona un importante grado de organización comunitaria en el país. Existen, además, proyectos comunitarios en desarrollo en distintas localidades, en todos los cuales el Estado y sus instituciones desempeñan protagonismo en diversos grados y medidas, así como importantes experiencias de trabajo intersectorial. Todo esto proporciona una base de partida importante para un desarrollo a niveles superiores cuantitativa y cualitativamente.

3.3 Metodología para la participación de los miembros de la comunidad local en la solución de sus problemas ambientales.

Después de haber definido con anterioridad lo que se entiende por participación ambiental comunitaria, así como la importancia y necesidad de la misma se tiene plena convicción, debido a la realidad que es más que cierta, que este tipo de participación no se logra si no es por medio una metodología que conlleve al incremento de la participación de la comunidad local en la solución de sus problemas ambientales. Se toman específicamente los problemas ambientales, debido a la importancia tan profunda que ellos tienen, que fue tratada en el Capítulo I, y a la seriedad que ellos implican.

Se proponen ocho pasos específicos o fases para lo planteado que son los que a continuación se plasman:

  1. Acercamiento.
  2. Diagnóstico.
  3. Selección del problema.
  4. Estudio del problema.
  5. Definición de objetivos y alternativas de solución.
  6. Elaboración del plan de acción.
  7. Ejecución.
  8. Evaluación y sistematización.

Se explicará qué hacer en cada uno de los pasos o fases. Solo que antes de hacerlo se debe señalar que se llaman fases debido a que cuando termina una, no comienza estrictamente la otra, sino que conforman un proceso, por lo cual ellas están presentes durante todo el tiempo que se ponga en práctica la metodología, pero no siempre con igual énfasis; por tanto, el orden que se le da lo que denota es el momento en que se potencian.

Se debe entender que en la práctica siempre se estará diagnosticando, evaluando, acercándose a la comunidad, etc. En fin, que el proyecto es flexible y puede sufrir cambios de manera natural adecuándolo a las nuevas informaciones, sin considerar eso un error.

3.3.1 La fase de acercamiento.

Es la fase con la cual se inicia el proceso de trabajo en las comunidades. La misma tiene como objetivos fundamentales lograr un clima de confianza, afecto y respeto entre las personas que participarán en el proyecto; establecer una comunicación dialogada que fortalezca sus relaciones interpersonales; organizar grupos de trabajo, y promover la comunicación con organizaciones e instituciones locales.

Si bien las exigencias de una comunicación dialogada, respetuosa, provocadora de reflexión y propiciadora de un clima de alegría y solidaridad, son importantes en la fase de acercamiento, constituyen condicionantes del éxito durante todo el proceso de transformación local y educativa, por lo que se conciben como principios de funcionamiento que regirán a lo largo de todo el trabajo comunitario.

La controversia para recuperar el sentido original del concepto comunicación, entraña mucho más que una simple cuestión semántica. Ello conlleva una reivindicación humana; y sobre todo, una reivindicación de los sectores dominados, hasta ahora los grandes excluidos de las grandes redes transmisoras. La polémica tiene una dimensión social y política.

Los sectores populares no quieren seguir siendo meros oyentes; quieren hablar ellos también y ser escuchados. Pasar a ser interlocutores. Junto a la "comunicación " de los grandes medios, concentradas en manos de unos pocos grupos de poder, comienza a abrirse una comunicación de base; una comunicación popular, comunitaria, democrática.

Cada vez se hace más evidente la diferencia entre comunicación e información. Así, para Ricardo Noseda comunicación "es el proceso por el cual un individuo entra en cooperación mental con otro hasta que ambos alcancen una conciencia común; e información es cualquier transmisión unilateral de mensajes de un emisor a un receptor. Por eso, rechazamos que esa irradiación de mensajes procedentes de información centralizados y sin retorno de diálogo pueda ser identificada con la comunicación humana"(40).

Para los teóricos e investigadores latinoamericanos, los medios masivos, tal como operan actualmente en casi su totalidad, no son medios de comunicación, sino medios de información o de difusión.

Así como Freire cuestionó la educación bancaria, estos investigadores han desmitificado esa falsa comunicación monólogo.

"La verdadera comunicación, dicen, no está dada por un emisor que habla y un receptor que escucha, sino por dos o más seres o comunidades humanas que intercambian y comparten experiencias, conocimientos, sentimientos (aunque sea a distancia y a través de medios artificiales). Es a través de un proceso de intercambio cómo los seres humanos establecen relaciones entre sí y pasan de la existencia individual aislada a la existencia social comunitaria"(41).

Para comenzar a acercarse a una comunidad con el objetivo de llevar acabo la solución de un problema cualquiera se debe buscar la comunicación entendiendo esta como se la ha venido describiendo anteriormente. Se ha de tener en cuenta de que ambas partes sean alternadamente emisores y receptores.

El canadiense Jean Cloutier acuñó un nuevo término que expresa mejor esta realidad: EMIREC, la unión de Emisor y Receptor.

"Todo hombre debe ser visto y reconocido como un EMIREC, propone Cloutier; todo ser humano está dotado y facultado para ambas funciones; y tiene derecho a participar en el proceso de la comunicación actuando alternadamente como emisor y receptor"(42)

Tal como Freire había dicho "no más educadores y educandos, sino, educadores / educandos y educandos / educadores" (43) se diría hoy, no más emisores y receptores sino EMIRECS; no más locutores y oyentes sino interlocutores.

Existen muchos recursos para estimular el diálogo y la participación, encontrarlos depende de la creatividad de cada equipo de comunicadores. Es preciso avanzar pacientemente , sabiendo que la participación es un proceso; por tanto, no se da de un día para otro. Ni se da tampoco por generación espontánea: hay que estimularlo.

Siempre se comienza con un pequeño equipo. Pero este debe saber ir creando desde el principio las condiciones que favorezcan el proceso. Según como él arranque, logrará poco a poco una real comunicación, dialogal y participativa, o se estrellará tal vez, con la indiferencia y el silencio de la comunidad.

Se debe partir de los comunitarios, es por ello que se considera que esta metodología va a ser completamente efectiva si los miembros del equipo que comienza son miembros de la misma comunidad que por estudios preliminares o por observación directa se han percatado de un deterioro del medio ambiente en el lugar donde viven, pues si son de otra comunidad o de otro lugar, los miembros de la comunidad local pueden interpretar el proyecto como un proyecto externo y no como algo que les pertenece.

Es muy importante a este efecto la pre-alimentación , que es la búsqueda inicial que se hace entre los destinatarios para que los mensajes que emita el equipo los representen y reflejen con exactitud. Por ahí comienza un genuino proceso de comunicación popular. Y al comenzar por ahí, se está cambiando también el modelo de comunicación. El esquema clásico "emisor-mensaje-receptor" acostumbró a poner el emisor al inicio del proceso comunicativo, como el que determina los contenidos del mismo y las ideas que quiere comunicar, en tanto, el destinatario está al final, como receptor, recibiendo el mensaje. Sin embargo, la experiencia enseña que si se desea comenzar un real proceso de comunicación en la comunidad, lo primero debe consistir en poner al destinatario, no al final del esquema solamente, sino también al principio: originando los mensajes, inspirándolos; como fuente de pre-alimentación.

Pero no solo se trata de reflejar a la comunidad como un espejo que devuelve una imagen o como un grabador que repite y reproduce mecánicamente lo que la gente dice. El equipo comunicador debe procurar devolver esos hechos y experiencias que ha recogido, de tal manera que ahora la comunidad pueda verlos con otra perspectiva crítica, analizarlos, discutirlos, reflexionarlos, emitir un juicio. Desentrañar las causas del problema que hasta ahora había estado viviendo y sufriendo como una mera contingencia, sin percibir sus raíces. La manera de presentar los hechos debe ser problematizadora, suscitar la reflexión. Es a esto lo que suele llamarse "formulación pedagógica del mensaje".

Cuando se haya llegado a este punto, la potenciación de esta primera fase habrá concluido, independientemente de que durante el resto del proceso se seguirá acercándose a la comunidad como se explicó anteriormente. Ahora comienza a potenciarse la siguiente fase.

3.3.2 La fase de diagnóstico.

La mayoría de los elementos que aquí se explicarán, serán retomados del Capítulo II, donde se explicó cómo hacer un diagnóstico local-ambiental en una comunidad local cualquiera, con el objetivo de determinar un escenario posible de implementación futura de la metodología que se propone. Solo que el diagnóstico del que aquí se habla, incluye dos rasgos esenciales que no se tuvieron en cuenta en el Capítulo II, puesto que no era ese el fin: que sea realizado con la participación activa de los miembros de la comunidad local, y que sea triple.

El diagnóstico es un método que permite analizar la realidad para conocerla profundamente en su totalidad o aspectos significativos de ella, con el fin de descubrir posibles soluciones o para tomar decisiones sobre las distintas alternativas que se presentan.

El mismo no se produce de forma espontánea, pues el conocimiento de la realidad no llega por sí solo. El conocimiento es producto de la relación que se establece con el mundo material, a partir de las condiciones de vida, y es una relación que se establece también con el resto de las personas. Diagnosticar la realidad supone hacer un esfuerzo de búsqueda de información, de ordenamiento y de análisis.

El diagnóstico debe cumplir con los siguientes requisitos:

  • Ser muy preciso: incluir aspectos necesarios y suficientes para la comprensión de los problemas.
  • Ser oportuno: la información que el diagnóstico proporcione debe utilizarse o devolverse a la comunidad, para resolver sobre los caminos de acción o informarse en el momento que sea oportuno, para que los datos y las reflexiones que se hayan hecho, no pierdan actualidad.
  • Tener un objetivo muy claro: la precisión de los objetivos debe ser estricta y clara; el para qué se necesita hacerlo, sobre qué se va a investigar o reflexionar y el tiempo que se ocupará esta tarea, es primordial, porque delimita el proceso a realizar.
  • Debe ser triple: analizar el contexto, la práctica y los valores.
Partes: 1, 2, 3, 4, 5, 6
 Página anterior Volver al principio del trabajoPágina siguiente