Desarrollo de la expresión oral en inglés en la Facultad de Derecho (página 2)
Enviado por Omar J. Nard�n Anarela
Debe tenerse en cuenta que el escenario de actuación de su futura profesión debido al desarrollo de la sociedad tiene que ver en gran medida con la apropiación de conocimientos del idioma inglés que le permita un mejor desenvolvimiento en el intercambio con especialistas de su perfil. Por tanto, se requiere de un trabajo independiente y consciente por parte del estudiante para que el mismo pueda contribuir a su formación profesional. Álvarez de Zayas define el trabajo independiente como el modo de organización del proceso docente, dirigido a la formación de la independencia, como característica de la personalidad del estudiante.
En el aprendizaje de una lengua extranjera es preciso que el estudiante esté consiente de como aplicar los conocimientos, el alumno tiene que aprender a representar la situación social en que tiene lugar el aprendizaje de ahí que requiere conocer como va aprendiendo, para reflexionar sobre ello y explorar qué procedimientos o estrategias podrían garantizar la efectividad de su aprendizaje .
Está claro que la formación de habilidades productivas como son la expresión oral y la redacción demandan de una mayor práctica y experiencia por parte del estudiante.
Los resultados obtenidos en el desarrollo de la capacidad de comunicación oral de los estudiantes de Derecho corroboran que el proceso de formación de esa habilidad es aún insuficiente.
De ahí que el problema sea que el insuficiente desarrollo de la habilidad de expresión oral en inglés no favorece la formación profesional de los estudiantes de Derecho en la Universidad de Camaguey.
De donde se infiere el siguiente objetivo: Diseñar una propuesta metodológica que favorezca la habilidad de expresión oral en inglés en los estudiantes de Derecho como vía para su formación Profesional.
Se plantearon las tareas que dieron como resultado el siguiente trabajo:
Desarrollo
Las habilidades comunicativas en Idioma Inglés
Para propiciar el desarrollo de una habilidad es importante tomar en consideración el camino que hay que transitar para obtener ese resultado. Para ello es preciso garantizar las condiciones que favorecen su asimilación consciente y reflexiva.
Se le denomina formación de habilidades a la etapa que comprende la adquisición de los modos de actuación bajo la dirección del profesor. El desarrollo de las habilidades es la etapa donde se ejercita la acción, una vez adquirida los modos de actuación (forma material).
El uso de la habilidad recién formada, la experiencia, etc., hacen cada vez más fácil su instrumentación.
Entre los requisitos para el desarrollo de las habilidades contemplados en la literatura contemporánea se encuentran:
-Claridad en el sistema operacional de la habilidad.
-Sistematicidad de las acciones y operaciones (frecuencia y periodicidad)
-Clara compresión del objetivo a alcanzar.
-Dirección del proceso de desarrollo de la habilidad de forma gradual y programada (complejidad y flexibilidad).
-Un eficiente desarrollo de la habilidad establece los pasos a alcanzar.
-Un papel activo y consciente del estudiante de manera que seleccione los métodos, procedentes y medios más adecuados para ponerlos en práctica en función de la comprensión de los objetivos trazados.
Consideraciones teóricas acerca del enfoque comunicativo en idioma inglés
El enfoque comunicativo no es un método nuevo que se considera como una solución universal para los problemas de todas las situaciones que tiene lugar en la enseñanza de las lenguas pero es indudablemente un enfoque que encierra una gran gama de compromisos.
La enseñanza del lenguaje comunicativo es flexible, ecléctico, y se basa en el hecho de que su objetivo es lograr la competencia comunicativa.
Como se conoce la competencia comunicativa no es solamente la habilidad de formar oraciones gramaticalmente correctas, sino también saber cuando y donde usar las oraciones.
Además, la competencia comunicativa es la capacidad de participar y controlar situaciones en los aspectos comunicativos específicos.
Para llevar a cabo la competencia comunicativa es necesario hacer cumplir algunas normas de la expresión oral por ejemplo:
-Saber como comenzar y terminar una conversación.
-Saber como debe ser tratado el tema en cuestión.
-Conocer el uso de los actos del habla (Funciones comunicativas) tales como pedir disculpas, agradecer, invitar, preguntar, etc. que contribuyen favorablemente en la producción oral.
-Usar la lengua lo más correctamente posible.
Teniendo en cuenta lo planteado anteriormente por los autores James Yaldén y Rodolfo Acosta con lo cual se coincide plenamente, además debe plantearse que sin la base orientadora de las funciones comunicativas, su uso y sistematización es imposible lograr una competencia comunicativa, es necesario involucrar al estudiante no en pensar acerca de la forma de la nueva lengua sino en el acto de comunicación para evitar el mayor número de interferencias que puedan producirse; esto es lo que motiva al estudiante a usar la lengua para una variedad de propósitos comunicativos.
Es importante recordar aunque de manera muy breve, la esencia fundamental de los principios del enfoque comunicativo. Según Janice Yaldén y Rodolfo Acosta en su esencia los principios son los siguientes.
Principio # 1: Conocer que estamos haciendo. El estudiante debe conocer que está haciendo con el idioma que está aprendiendo y porque lo está aprendiendo, por ejemplo al final de la clase el estudiante debe sentirse capaz de hacer algo comunicativamente útil que no era capaz de hacer al principio de la clase.
El enfoque de cada clase o parte de ella debe ser aprendiendo como hacer algo. El estudiante debe preguntarse:
-¿Por qué estoy aprendiendo esto?
-¿Que estoy aprendiendo a hacer?
Principio # 2: Un todo es más que la suma de las partes.
Hay que operar con el contexto no con elementos aislados. La comunicación no pude ser analizada dentro de sus características componentales sin destruir su naturaleza.
Principio # 3: Los procesos son tan importantes como las formas.
Encaminados mayormente hacia la reproducción de los procesos de comunicación real, la practica de las formas del objeto de la lengua debe tener lugar dentro del sistema comunicativo, tomando en consideración los procesos psicológicos comprometidos en la comunicación.
Principio #4: Aprender a hacer:
En este principio el estudiante debe aprender y poner todo inmediatamente en práctica. El profesor puede enseñar, ayudar o aconsejar, pero solo el estudiante puede aprender, por tanto el proceso de aprendizaje se transforma en responsabilidad del estudiante.
Principio # 5: Los errores no son siempre errores:
Si en el proceso quiere crear un ambiente donde los estudiantes puedan hablar libremente sin interrupciones, el profesor no tiene que prestar la mayor atención, todo el tiempo a los errores que se cometen por los estudiantes, corregir cada error constantemente destruye la confianza del estudiante en la habilidad del uso de la lengua que el posee, comienza el temor en ellos y dejan de comunicarse.
Teniendo en cuenta lo anterior, Janice Yaldén y Rodolfo Acosta definen las actividades comunicativas en clases como aquellas actividades que permitan al estudiante encontrar por si mismo las palabras y las estructuras que el necesita usar. Se coincide con dicha definición porque además se considera que de esta manera surge la creatividad espontánea e independiente del estudiante y puede ser que en algunos casos la respuesta aunque inesperada sea a la vez acertada.
El objetivo del enfoque comunicativo es pues, contribuir al desarrollo de la competencia comunicativa del estudiante que se logrará en la medida en que el mismo se convierte en un comunicador eficiente, es decir, que sea capaz de comprender lo que otros tratan de significar, entendiendo la comprensión como un acto individual, original y creativo. A su vez, adquiere una cultura lingüística literaria a través del proceso de análisis de la funcionalidad de los recursos lingüísticos empleados por el emisor en la construcción del significado y por último como parte de la competencia comunicativa construye textos de diferentes estilos según las exigencias de la situación comunicativa en que se encuentre y hace un uso efectivo de los medios lingüísticos necesarios para establecer la comunicación de acuerdo con las características de las distintas normas.
Desde que se nace, nunca cesa la necesidad de aprender a comunicarse correctamente y al mismo tiempo de cómo responder al proceso de comunicación de otra persona. Algunas personas son mejores que otras en el proceso de comunicación con sus semejantes, pero cualquier ser humano normal es capaz de comunicarse a través de la lengua o de cualquier otro sistema de señales y no se necesita mucho para efectuar el proceso de comunicación en la vida diaria, pero no se trata de eso, estamos hablando de futuros profesionales, capaces de dominar los más grandes avances de la Ciencia y Técnica moderna.
En este sentido se han ido implementando técnicas grupales con vistas a proporcionarle al estudiante un ambiente de aprendizaje más favorable en la que el grupo debe responder por el producto final, en este caso la forma de trabajo en grupo debe estar apoyada por la actividad independiente y consciente del estudiante a través de los métodos activos y colaborativos que serán motivo de análisis a continuación.
Métodos activos y colaborativos en la enseñanza de idiomas
El trabajo independiente del alumno ayuda al desarrollo de la capacidad de análisis de observación, de investigarlo todo y es determinante en la apropiación de conocimientos por parte de los estudiantes.
Por los esfuerzos de los didactas y metodólogos, en la teoría de la enseñanza se han establecido los requerimientos para realizar los trabajos independientes, los cuales se relacionan a continuación:
1- Correspondencia del contenido de los trabajos independientes con los requerimientos de los programas de estudio.
2- Asequibilidad de los trabajos independientes para los estudiantes.
3- Observancia del principio de la conscientización durante el cumplimiento del trabajo independiente.
5- Organización de los trabajos independiente en un determinado sistema.
6- Preparación de los alumnos para el cumplimiento de los trabajos independientes.
Explicar a los alumnos de forma fácil, precisa y clara los objetivos y las tareas del trabajo.
Formar en ellos los hábitos técnicos y organizativos para el cumplimiento del trabajo.
Plantearles tareas cuya solución requiera de ellos esfuerzos mentales.
Observar la dosificación del tiempo destinado al cumplimiento de las tareas independientes.
7-Observación directa del maestro del cumplimiento del trabajo independiente por parte del estudiante y prestación a ellos de la ayuda necesaria cuando surjan dificultades.
8-Chequeo obligatorio del cumplimiento de los trabajos independientes de los alumnos.
9-Desarrollo de los alumnos de hábito de autocontrol durante el trabajo.
10-Aplicación de un enfoque individual para los alumnos en el proceso de organización del trabajo.
Según Álvarez de Zayas, el método es el componente del proceso docente – educativo que expresa la configuración interna del proceso, para que transformando el contenido se alcance el objetivo, que se manifiesta a través de la vía, el camino que escoja el sujeto para desarrollarlo, es decir, el orden, la secuencia, la organización interna durante la ejecución de dicho proceso.
En la caracterización del proceso docente se precisan tres dimensiones, es decir, a la dimensión instructiva del proceso docente le corresponden los métodos de naturaleza instructiva y de la misma manera ocurre con las dimensiones educativas y desarrolladoras. Sin embargo, todos ellos se dan a la vez interactuando e influyéndose mutuamente, de un modo dialéctico, por lo que al final en la realidad de la vida constituye un sólo método, un solo proceso.
La didáctica hace énfasis en los aspectos internos y externos del método y la importancia de las mismas para el trabajo docente. Existe un condicionamiento mutuo y dinámico entre las acciones de aprendizaje y las acciones de la enseñanza. Ambas conforman un mismo sistema que interactúan sistemáticamente.
La concepción de aprendizaje desarrollador enriquece el fundamento lógico – psicológico de la enseñanza, ofreciendo al docente un conjunto de elementos teóricos metodológicos para su comprensión y para la elaboración y puesta en práctica de sus estrategias pedagógicas.
De acuerdo a la concepción asumida, las situaciones de aprendizaje desarrolladoras se caracterizan por su carácter consciente, reflexivo, problematizador, significado y contextualizado. La organización de la metodología de trabajo en torno a lo problémico, lo heurístico, lo investigativo, lo creador, deben contribuir al desarrollo de las habilidades y capacidades empleadoras en una actividad intelectual productiva, creadora, crítica y reflexiva. El empleo de procedimientos analógicos y vivenciales, el uso del error y de la interrogación como estrategias didácticas, la enseñanza multisensorial, la simulación, el apoyo en la realización de proyectos, entre muchos otros, constituyen procedimientos citados por de la Torre, que contribuyen al desarrollo de una enseñanza activa, motivadora, implicativa, dinámica, y por ende a la proyección de situaciones de aprendizaje desarrolladores.
Los métodos de enseñanza de acuerdo a la concepción de enseñanza – aprendizaje desarrolladora deben:
? Ser esencialmente productivos, aunque comprendidos en su interacción dialéctica con los métodos expositivos.
? Garantizar la participación activa de los alumnos en la búsqueda de conocimiento, su cuestionamiento, el planteamiento y la resolución de problemas, la aplicación y valoración de soluciones, potenciado su repercusión en la actividad cognoscitiva, práctica y valorativa.
? Propiciar el trabajo grupal en armonía con el individual dentro de una estrategia de atención a la diversidad, que requiere de ambas formas de trabajo para garantizar el carácter cooperativo del aprendizaje y el pleno desarrollo de la persona en el contexto grupal con el apoyo de los compañeros.
? Enseñar a los estudiantes a aprender a aprender, mediante el desarrollo de habilidades de orientación, planificación, superación o control y evaluación.
? Potenciar el desarrollo del autoconocimiento, autocontrol, la autoprepración y la autoevaluación, en correspondencia con el carácter activo y consciente del aprendizaje, en aras de la autorregulación del alumno.
Para la enseñanza de lenguas también es importante otro elemento de la enseñanza estratégica en la comunicación fluida entre los sujetos que actúan en el proceso, para ello se alienta, a través del trabajo grupal, la colaboración en las diversas actividades propuestas. La pregunta se utiliza como estrategia básica para estimular la participación y orientar la discusión. En estos grupos de trabajo se coordinan acciones para dar fluidez a las discusiones.
Los métodos colaborativos tienen sus beneficios y sus riesgos al mismo tiempo, entre los beneficios se consideran los siguientes:
? Economía del tiempo.
? Mayor nivel de elaboración y creatividad.
? Mayor saber y crecimiento social.
? Potencia la individualidad desde la pertenencia.
? Posición activa ante el aprendizaje.
? Proyecciones futuras.
? Necesidades de un espacio de contención.
Entre los riesgos aparecen los siguientes:
? Simplificación del conocimiento.
? Dependencia del grupo respecto al coordinador.
? Enfrentamiento a prejuicios, espacios viciados, etc.
? Relación con el "afuera".
? Desborde emocional, entre otros.
Existe una gran interrelación entre los métodos colaborativos y los métodos participativos, ya que unos sustentan los otros. El trabajo con técnicas participativas requiere de una forma nueva del pensamiento en alumnos y profesores.
Para el alumno esto es más fácil, si desde sus inicios se trata esta forma de trabajo en clases. Para el profesor no es tan fácil, pues tiene una experiencia acumulada (propia y de sus profesores) que los hacen rechazar en su fuero interno tales métodos.
El trabajo con los métodos participativos requiere de un mayor nivel de conocimientos en el profesor, tanto teórico como de aplicación.
Lo que caracteriza a los métodos participativos en general, puede resumirse en los siguientes aspectos:
Establecimiento de un vínculo estrecho entre los conocimientos teóricos y su aplicación práctica.
No se pude pretender la aceptación acrítica de las palabras del maestro.
Las tareas que se deben acometer tienen que estimular a la actividad cognoscitiva del estudiante.
Se socializa el conocimiento individual.
Se promueve la capacidad de reflexión.
Se rompe con los modelos paternalistas.
Es importante el papel motivador en el aprendizaje.
Ayuda a la constitución del grupo, el establecimiento de relaciones interpersonales y a un mayor conocimiento mutuo.
De modo que para lograr el desarrollo de la competencia comunicativa en el estudiante no puede obviarse la necesaria utilización de los métodos colaborativos y participativos sino también a consideración de los autores, las estrategias y estilos de aprendizaje.
Estrategias y estilos de aprendizaje
A veces se quiere lograr un resultado positivo del aprendizaje de manera homogénea y que todos los estudiantes respondan a los mandatos por igual sin tener en cuenta la personalidad, el estilo y las características individuales de los estudiantes. El estilo del aprendizaje es una predisposición del individuo para aprender de una forma específica.
El estilo de aprendizaje de un estudiante se manifiesta en todos los aspectos del aprendizaje, no solamente en relación con el aprendizaje de la lengua extranjera y se solapa con las características generales de la personalidad.
Martin Parrot sugiere cómo caracterizar los estilos y aspectos de la personalidad relacionados con el aprendizaje:
a- Tolerante a la ambigüedad e intolerante a la ambigüedad.
b- visual-auditivo- kinestético
c- Holístico – serialísta
d- Dependiente – independiente.
e- De programación libre – de programación atada.
f- Introvertido y extrovertido.
Por ejemplo, el alumno que es tolerante a la ambigüedad puede aceptar algo que comprende parcialmente, sin necesitar su esclarecimiento total. En el contexto de la enseñanza de la lengua esta tolerancia puede ejemplificarse con respecto a la comprensión de la información de los textos y también a la comprensión de aspectos específicos del idioma.
Por estudiantes que son intolerantes a la ambigüedad por el contrario, pueden sentirse frustrados hasta que sean capaces de definir y categorizar lo que están aprendiendo y relacionarlo con lo que saben en inglés y posiblemente en su propio idioma.
Asimismo un alumno sensitivo, aprende más fácilmente si le son presentados los datos a través del canal visual y auditivo, ya que aprende mejor usando todos los sentidos.
El de estilo holístico se supone que está predispuesto para aprender a través de exposiciones globales, mientras que los serialistas tienden a aprender a mediante el análisis de elementos sucesivos.
Los alumnos dependientes requieren de la presentación de la información que les brinda el profesor, mientras que los independientes pueden aprender de los elementos del contexto general del aprendizaje y fuera del contexto. Los introvertidos tienden a aprender analíticamente en forma organizada y planificada. Mientras que los extrovertidos tienen un aprendizaje más intuitivo y dependen más de la interacción con los demás.
Conocer los estilos de aprendizaje y características es tan importante para el profesor, quien puede proporcionarles además estilos alternativos, como para el propio estudiante.
Después de un breve análisis acerca de las vías de caracterización individual de los enfoques hacia el aprendizaje, se considera prudente mencionar la autonomía; pues con mucha frecuencia se debate que entre los atributos de un buen estudiante de idiomas está la habilidad y la disposición de tomar responsabilidad por el aprendizaje para iniciar y correr el riesgo dentro del proceso.
El buen estudiante es quien toma decisiones con respecto a:
? Las áreas del lenguaje donde debe centrarse.
? Las actividades para facilitar el aprendizaje.
? Las estrategias a aplicar en el aprendizaje y procurar activamente:
? Información.
? Oportunidades para practicar.
? Asistencia por parte de los nativos de dicha lengua y recursos generales como diccionarios, referencias gramaticales, etc.
Como se puede apreciar a través de los ejemplos las estrategias de aprendizaje no son más que las acciones que el estudiante utiliza ya sea consciente o inconscientemente para facilitar el aprendizaje.
Naturalmente para lograr el dominio de una lengua extranjera no solo se necesita facilitar el aprendizaje, visto como el conocimiento consciente de las normas de la lengua, sino también la adquisición del mismo. La adquisición del conocimiento tiene lugar de forma inconsciente y espontánea, conduce a la fluidez conversacional y surge del uso natural del idioma, por tanto el aprendizaje y la adquisición son parte de un rango potencialmente integrado de experiencia y ambos son necesarios para la competencia comunicativa.
Las habilidades comunicativas en la enseñanza de idioma inglés en el contexto del Licenciado en Derecho
Los avances recientes de la lingüística muestran la necesidad de un enfoque transdisciplinario para lograr una mayor aproximación a la enorme complejidad inscripta en el fenómeno del lenguaje y las lenguas, por tanto los estudios actuales dirigen su mirada hacia una unidad que integre las dos orientaciones filosófica – lingüística que a través del tiempo han dividido el estudio del lenguaje: el lenguaje como conocimiento y el lenguaje como comunicación, es decir, el énfasis en el estudio del sistema abstracto o el énfasis en el sistema en uso respectivamente.
Tanto la perspectiva pedagógica como la que corresponde a la lingüística actual, dan lugar a una proyección pedagógica relacionada con la competencia comunicativa en los estudiantes que les permite enfrentar la cultura estratégica actual.
La comunicación será más efectiva en la medida en que aumente el conocimiento compartido entre los dos participantes en la medida en que el emisor y el receptor se tengan en cuenta en el proceso de producción y de comprensión respectivamente.
El estudio del lenguaje en la actualidad se beneficia del enfoque interdisciplinario que los filósofos, sociólogos, los antropólogos, lingüistas, etc. imprimen a la investigación de su objeto de estudio en las que sin dudas, se nutren de teoría y enfoque que benefician la comprensión verbal del mismo y se enriquece la teoría de la lengua como comunicación.
Según Bakhtine, la evolución real del lenguaje está determinada porque las relaciones sociales evolucionan en función de las infraestructuras; después la comunicación y la interacción verbal evolucionan en el marco de las relaciones sociales; las formas de los actos del habla evolucionan en razón de la interacción verbal y el proceso de evolución es reflejado finalmente en el cambio de las formas de la lengua.
Los textos escritos nos ayudan como punto de partida para desarrollar la expresión oral. En las clases de inglés para licenciados en derecho, el análisis, por ejemplo, de las primeras diez enmiendas hechas a la constitución de los EE.UU., conocida como Declaración de Derecho, propicia un ambiente motivacional en que el alumno desarrolla valoraciones y debates y emite opiniones a favor o en contra de la vigencia de su contenido y su cumplimiento o violación de la sociedad norteamericana.
Otra forma de comunicarse en el aula es la puesta en práctica de estrategias instruccionales como exposiciones, resúmenes orales de fuentes autenticas, resúmenes escritos, narraciones de hechos con intercambio de preguntas y respuestas que requieran del máximo de atención del resto de aula para lograr el objetivo.
Estas actividades deben orientarse de tal manera que propicien el espacio para diálogo y la comunicación alumno – alumno y profesor – alumno.
Es bueno señalar que en la especialidad de derecho resulta muy provechosa la actividad de los juegos de roles que interpretan los estudiantes con un reflejo de su futura actividad en el ejercicio de la profesión.
La motivación se incrementa y son capaces de aportar más allá del conocimiento teórico que han recibido en las materias de la especialidad. Ahora bien, en el contexto del licenciado en Derecho se manifiestan grandes dificultades en la mayoría de los estudiantes a la hora de realizar la producción oral y esto ha sido comprobado a lo largo de las actividades docentes que tienen lugar en el aula. Las causas son diversas: carencia de material lingüístico, falta de fluidez, inhibición, falta de confianza, etc.
En sentido general los estudiantes encuestados atribuyen las siguientes causas:
Un 11,3 % de los estudiantes plantea que las clases son muy fuertes para los que no saben nada de inglés.
El 10% expone que el tiempo no les alcanza y dan prioridad las materias de la especialidad.
Otro 10% refiere que las dificultades que presentan para aprender el idioma afectan su motivación por el aprendizaje y uso del la lengua extranjera.
EL 53,15 coincide en que el nivel de exigencia en cuanto a la disciplina idioma inglés en el nivel superior los ha obligado a prepararse con mayor rigor; no obstante refieren tener muchas dificultades aún sin resolver en cuanto a la expresión oral.
Un número moderado de estudiantes refiere traer mala base de años precedentes.
Un 40% plantea tener poco aprovechamiento a pesar la calidad de los profesores. Principalmente refieren poco avance en la expresión oral
Para más del 15% el nivel de las clases actuales está por encima de sus posibilidades de su nivel de asimilación.
El 17,6% no le dedica el tiempo que requiere el estudio del idioma.
El 13,8% manifiesta falta de estudio y desinterés por el idioma.
Al reflexionar acerca de los resultados generales de la encuesta se puede inferir lo siguiente:
Los grupos son heterogéneos, puesto que los estudiantes ingresan con diferentes niveles de dominio del idioma inglés.
No siempre se corresponden los niveles de asimilación y profundización de los objetivos y contenidos con el nivel de los estudiantes, lo que obstaculiza la motivación e interés por el aprendizaje del idioma.
Los estudiantes carecen de estrategias de aprendizaje para el desarrollo de la habilidad de expresión oral.
Las necesidades, intereses y habilidades y conocimientos base del alumno no se están teniendo en cuenta en el proceso de enseñanza aprendizaje.
Debe señalarse que a raíz de la implementación del Plan C en 1990, donde se define la impartición del idioma inglés en todas las carreras, comienzan a darse los primeros pasos en la integración de los cuatro componentes de la actividad verbal y se pasa de la gramática a la intención del discurso donde el alumno debe ser capaz de leer, interpretar y comunicarse en el marco de su profesión. En la carrera de Derecho se comenzó con la impartición de las asignaturas Inglés I, II, III y IV y en la actualidad se imparten además las asignaturas Inglés V, VI, VII y VIII, al ser ésta la única carrera que recibe el idioma Inglés de forma ininterrumpida hasta cuarto año.
A juicio de los autores, para lograr habilidades prácticas del uso de la lengua en la comunicación, deben predominar los ejercicios del habla, en situaciones lo más cercanas posibles a la vida real.
Funciones profesional y académica del futuro egresado
Para determinar el nivel de desarrollo de la habilidad de expresión oral que necesita el estudiante de Derecho será necesario partir de la exigencia real del contexto social. Deben tenerse en cuenta tanto las necesidades objetivas, que están determinadas por las demandas sociales, ocupacionales y/o académicas, como las subjetivas. Se les llaman necesidades subjetivas a las que el alumno quiere o siente que necesita, por lo que están permeadas por los intereses y motivaciones de los estudiantes. Está claro que los nuevos requerimientos de la enseñanza del inglés en la universidad cubana requieren de un profesional capaz de comunicarse en inglés. Por tanto el alumno debe saber desenvolverse con efectividad en una situación dada, la cual estará en correspondencia con determinadas funciones y habilidades de su campo de acción, por tanto se debe partir del análisis de las funciones profesionales y académicas del futuro egresado.
Para poder instrumentar adecuadamente un proceso encaminado a lograr los referidos objetivos es preciso profundizar en los dos grandes campos de acción técnica del egresado de Derecho, estos son: el campo del ejercicio de la abogacía y la actuación fiscal y jurisdiccional y el campo de la asesoría jurídica.
El jurista labora en diversos campos de la compleja maquinaria que constituye el sistema de Derecho. En general puede laborar y de hecho labora en las empresas nacionales o mixtas, organismos y cooperativas como asesor legal, en los bufetes colectivos nacionales e internacionales, como representante de los intereses particulares ante la administración de justicia o ante el aparato estatal en función administrativa y labora asimismo en la fiscalía y los tribunales.
Pero esta variedad que encierra el trabajo del jurista no puede hacer que se pierda de vista los elementos comunes, las acciones y las habilidades generales y esenciales de los que debe disponer un jurista con una formación básica e integral.
Entonces, se puede decir que la necesidad de la comunicación oral en idioma inglés del futuro jurista está reflejada precisamente en los campos de acción antes mencionados. Asimismo, él requiere de funciones comunicativas a través de los cuales tendría lugar la interacción y estas funciones no deben circunscribirse al marco de las necesidades técnico laboral que necesariamente tiene que asumir el especialista, sino además a aquellas funciones comunicativas que en el orden social el mismo necesita en la vida diaria. Ahora bien para poder trazar el camino hacia lo que se aspira a lograr se hace necesario valorar qué se ha alcanzado y las vías usadas para ello.
Propuesta de metodología
Sobre la base del estudio realizado, se plantea una propuesta metodológica para el desarrollo de la habilidad de expresión oral en los estudiantes de Licenciatura en Derecho, cuyos pasos se describen a continuación:
Realizar un análisis del campo de acción de los estudiantes para determinar las necesidades de uso de la lengua atendiendo a las funciones académicas y profesionales del futuro egresado.
Por su experiencia práctica, los profesores de idioma Inglés conocen las necesidades de uso del idioma que pueden enfrentar todos los profesionales en relación con las actividades cotidianas. Así por ejemplo, es conocido que necesitan dominar las funciones comunicativas básicas y sus correspondientes exponentes lingüísticos para saludar, presentarse, solicitar y dar información, describir actividades habituales, despedirse, etc.
Sin embargo, no se pueden separar las necesidades de uso del idioma, del contexto en que se desenvuelve el estudiante y en el que se desenvolverá como futuro profesional. Por tanto, hay que tener en cuenta las necesidades que posee el alumno, tanto en el marco académico como en el futuro ejercicio de su profesión.
Si el estudiante se encuentra en una situación en la que no siente ningún interés hacia el tema o aspectos que se están abordando; y/o no tiene conocimiento o experiencia previa sobre los mismos, aún en su lengua materna, probablemente, no sienta motivación alguna, ni deseo de comentar ni emitir criterios al respecto. O lo que es peor, puede sentir temor a tratar dichos aspectos. Por supuesto que eso frena la producción oral del estudiante.
De ahí la importancia que reviste el análisis de las funciones técnicas del Licenciado en Derecho para determinar para qué necesita el idioma y en qué contexto lo va a usar.
Así se parte del siguiente esquema:
Determinación del nivel base de conocimientos y estado de desarrollo de la habilidad de expresión oral.
Una vez efectuado el análisis de lo que el estudiante necesita lograr, es decir, que se ha determinado para qué el alumno va a usar el idioma y en qué contexto, se pueden determinar las funciones comunicativas que debe dominar para poder intercambiar y expresarse en la lengua extranjera de acuerdo con sus necesidades. Sin embargo se hace necesario hacer un estudio del nivel de adquisición del idioma que tiene el estudiante. En este caso se centra la atención en las posibilidades de uso del idioma del estudiante en cuanto a comunicación oral, dado que está enfocado el estudio hacia la habilidad de hablar, aún cuando se conoce que las habilidades se desarrollan de forma integrada.
En las páginas 36 y 37 de este trabajo se detallan los resultados de los instrumentos aplicados para la para la valoración del nivel base de conocimientos de los estudiantes y sus posibilidades de uso del idioma de forma oral para las asignaturas Inglés I y II.
Asimismo en los instrumentos aplicados (entrevista y encuesta), cuyos resultados aparecen en las páginas 25 y 26, también se recoge en cierta medida, aunque a criterio de los estudiantes, el nivel de conocimientos y desarrollo de la habilidad en estudio.
Es de conocimiento general la flexibilidad de los Planes de estudios C en cuanto a contenido de los programas y su implementación en la enseñanza superior. En lo concerniente a la disciplina Idioma Inglés para la carrera de Derecho, la dinámica del trabajo metodológico, en los últimos cursos, se ha centrado mayormente en buscar procedimientos de activación del proceso, juegos de roles, rompecabezas, técnicas grupales etc. Sin embargo, el profesor centra su atención en el cumplimiento de los objetivos de un programa que fue diseñado por agentes externos, sin la participación directa del profesor y el alumno. Por tanto, no sólo no se tienen en cuenta las necesidades e intereses específicos del estudiante, sino que tampoco se diagnostica el nivel de conocimiento y habilidades que el mismo posee para enfrentar el nuevo contenido.
Es importante prestar especial atención al nivel de frustración o malestar que puede provocar en el alumno el hecho de que el nivel de asimilación y profundidad de los contenidos esté por encima de sus posibilidades; como desmotivante resulta que esté por debajo de su nivel de lengua.
Planteamiento de los objetivos.
El objetivo en su carácter rector, guía tanto al profesor como al alumno durante todo el proceso, lo cual quiere decir, que se parte del objetivo general del programa, a la unidad, a la clase, y a la actividad específica.
Para determinar los objetivos es importante conocer hasta qué peldaño se dirige el proceso de aprendizaje del estudiante, pero también de dónde parte. En el análisis de las clases impartidas que aparece en las páginas 53-58 se reflejan las deficiencias que existen actualmente con el planteamiento de los objetivos.
En los pasos anteriores de la metodología se determinaron las necesidades de uso del idioma que posee el estudiante de acuerdo con sus funciones sociales, profesionales y académicas; lo que permite determinar las funciones comunicativas que necesitaría dominar ese profesional, el ideal a lograr, pero también se ha determinado el nivel base que el alumno posee.
De ahí que se llegue al siguiente esquema:
Orientación del proceso
Del mismo modo que se ha planteado la necesaria gradación de los objetivos, desde el programa hasta la propia actividad o tarea didáctica que el alumno desarrolle dentro y fuera del aula, hay que tener en cuenta el diseño del sistema de conocimientos (funciones comunicativas, estructuras, vocabulario y pronunciación) y el desarrollo de la habilidad, como un proceso, con su correspondiente sistema operacional.
Ahora bien, como se plantea en la hipótesis de este trabajo, se está proponiendo el desarrollo de la habilidad de expresión oral centrada en la actividad independiente y consciente de los estudiantes. Por tanto se requiere del análisis de las estrategias y estilos que posee el alumno, así como de las estrategias o modelos de enseñanza.
Para poder establecer un ambiente de aprendizaje que favorezca el proceso de adquisición de los conocimientos, es necesario conocer los estilos de aprendizaje y las diferencias individuales de los estudiantes. El profesor debe crear un ambiente que estimule el desarrollo; por lo tanto, es importante saber cómo el estudiante se siente más a gusto y consiguiente más motivado para la tarea a acometer. Pero a la vez inducirlo a que desarrollo variados modelos y ambientes de aprendizaje y facilitarle las estrategias que le permitan una independencia progresiva y la capacidad para auto-evaluar sus propios avances en el idioma.
Al hablar de ambiente de aprendizaje no se hace referencia solamente a crear condiciones favorables apara la comunicación en el marco de la clase. Hay otras vías que aunque se conocen, no se emplean o se hace de forma limitada. Así por ejemplo, pueden mencionarse los conversatorios con los estudiantes extranjeros; la orientación de prácticas de estudio, donde el alumno de manera independiente escucha y ejercita un material computarizado o grabado e inclusive puede grabar sus propios patrones y autocorregirse al compararlas con las originales. Lograr que el alumno concientice y aprenda a usar estrategias que faciliten el desarrollo de su comunicación oral en la lengua extranjera, es también un reto que el profesor debe vencer.
Otro de los aspectos importantes del proceso de enseñanza-aprendizaje lo constituye la evaluación. La evaluación del proceso de enseñanza y aprendizaje debe considerarse como una actividad necesaria en tanto que le aporta al profesor un mecanismo de autocontrol que le permitirá la regulación y el conocimiento de los factores y problemas que llegan a promover o perturbar dicho proceso.
Tipos de evaluación.
Existen diversas propuestas de clasificación de la evaluación del proceso de enseñanza-aprendizaje, una de ellas es la que distingue a los tipos de evaluación por el momento en que se introducen en un determinado episodio, proceso o ciclo educativo. Estas tres clases de evaluación son las llamadas de diagnóstico, formativa y sumativa.
La evaluación diagnostica es aquella que se realiza previamente al desarrollo de un proceso educativo, cualquiera que esta sea. También se ha denominado evaluación predicativa.
En el segundo paso de la metodología que se propone en esta tesis para el desarrollo de la habilidad de expresión oral en inglés se declara la necesidad de realizar un diagnostico que debe ejecutarse en la primera semana de clases para determinar el nivel de conocimiento base del alumno sobre la habilidad de referencia para determinar a partir de donde debe comenzar el tratamiento de la habilidad.
La evaluación diagnostica puede ser a su vez de dos tipos. Inicial y puntual (Rosales 1991)
Se entiende por evaluación diagnostica inicial, la que se realiza de manera única y exclusiva antes de algún proceso o ciclo educativo amplio.
La evaluación diagnostica puntual debe entenderse como una evaluación que se realiza en distintos momentos antes de iniciar una secuencia o segmento de enseñanza perteneciente a un determinado curso.
¿Cómo hacer las evaluaciones diagnosticas?
De acuerdo con Jarba y Casellon 1998, los objetivos de la evaluación diagnostica inicial estarán determinados por un análisis lógico de los contenidos (disciplina, asignatura, modulo, etc.) del programa que se trate y un análisis psicopedagógico de cómo y cual es la mejor manera de que estos sean aprendidos. Así podrán identificarse para un determinado programa escolar (o para varios dentro de una propuesta curricular amplia) cuáles son los prerrequisitos (conocimientos y procedimientos previos, nivel de desarrollo conjuntivo, etc.) sobre los que se había de dirigir la evaluación.
Para el caso de la evaluación diagnostica puntual el análisis será mucho menos formal y correrá a cargo del docente quien tiene la ventaja de interactuar directamente con los alumnos, conociendo con cierta profundidad el programa.
Evaluación formativa:
Es la que se realiza concomitantemente con el proceso de enseñanza aprendizaje por lo que debe considerarse, mas que las otras, como una parte reguladora y consustancial de proceso. Su finalidad es estrictamente pedagógica, regular el proceso de enseñanza aprendizaje para adaptar o ajustar las condiciones pedagógicas (estrategias, aprendizaje) en servicio del aprendizaje de los alumnos.
En la evaluación formativa interesa cómo está ocurriendo el proceso de la construcción de las representaciones logradas por los alumnos. También importan los "errores" cometidos por los alumnos que lejos de ser meramente sancionados son valorados porque ponen al descubierto la calidad de las represtaciones y estrategias construidas por ella, así como lo que a estos le faltarían para refinarse o completarse en el sentido instruccional propuesto. También existe un interés por enfatizar y valorar los aciertos o lograr que los alumnos vayan conociendo en el proceso de construcción porque se considera que ello consolida el proceso de aprendizaje y le da al alumno la posibilidad de saber qué criterios se están siguiendo para valorar su aprendizaje. También se habla de una evaluación formadora, en la que se trata de promover que ya no sea solo el docente el único y exclusivo agente evaluador, sino que los alumnos participen activamente en el acto desde su lugar socioinstruccional. En este caso pueden realizarse tres tipos de evaluaciones alternativas y complementarias a la evaluación desde el docente.
La auto evaluación: Es la evaluación del alumno acerca de sus propias producciones. La autoevaluación como vía de evaluación sistemática o frecuente si se está proponiendo la actividad cada vez más independiente por parte del estudiante, la misma podría ejecutarse dándole al posibilidad de que el estudiante grabe sus propias exposiciones, se autoescuche y sea capaz de evaluarse una vez autocorregido los errores, aquí se puede evaluar el material lingüísticos con sus giros gramaticales, acentuaciones, inflexiones, ritmo, entonación, precisión y fluidez.
La coevaluación: Es un producto del alumno realizado por él mismo en conjunción con el docente. El estudiante puede solicitar al profesor que está en disposición de exponer acerca de un tema de interés personal y que requiere de la valoración del profesor, esto puede realizarse a través de una actividad independiente fuera del horario de clases. El profesor puede también sugerir temas que él considere importantes.
La evaluación mutua. Que se refiere a las evaluaciones de un alumno o un grupo de alumnos que pueden hacerse sobre las producciones de otros alumnos o grupos de alumnos. Es necesario concientizar al estudiante de la importancia que tiene esta evaluación que se puede realizar sistemáticamente en el aula; el estudiante debe conocer que de la seriedad con que se ejecute la misma dependerá el resultado exitoso de la actividad e informarle que será evaluado en la medida en que sea capaz de evaluar a los demás con justeza, para evitar el temor que pueda ocasionar el hecho de corregir todos los errores cometidos por el compañero de aula que está siendo evaluado.
También se puede evaluar la habilidad de expresión oral a través del portafolio, es decir, se le puede sugerir temas de interés para el estudiante, el mismo debe realizar una compilación de dichos textos y archivarlos para ser utilizados en las actividades evaluativos
Véase entonces de la siguiente forma:
Implementación de la actividad.
En el diseño e implementación de la actividad en sí inciden todos los aspectos que se han ido exponiendo en la metodología. En una clase se determina el objetivo enfocado al desarrollo de la expresión oral en correspondencia con los objetivos de la unidad y de ahí se desprende el contenido y los niveles de asimilación y profundidad a lograr. Luego entonces la actividad en sí responde a un objetivo y el contenido se selecciona en correspondencia con dicho objetivo. Sucede que puede que se hayan determinado el contenido y objetivos apropiados y se tengan en cuenta los aspectos señalados y sin embargo haya dificultades en la implementación de la actividad. Hay aspectos esenciales como son la gradación del contenido y los niveles de asimilación que en gran medida determina el tipo de actividad o cómo ésta se desarrolla. Según los instrumentos aplicados, ésta ha sido una de las deficiencias que ha incidido en el pobre desarrollo de la expresión oral en los estudiantes de Derecho. Por otra parte el profesor debe estar familiarizado con el material, lo que equivale a planificar los pasos de la actividad, determinar el tiempo, valorar el conocimiento previo del alumno, predecir la ayuda que puedan necesitar y los errores que puedan cometer. Decidir qué instrucciones dará y cómo lo hará.
Con frecuencia sucede que el profesor orienta la actividad y el grupo de estudiantes no sabe lo que debe hacer; lo que indica que la orientación no fue clara y precisa. En el proceso de orientación resulta importante facilitarle al alumno toda la información que necesite, para desenvolverse adecuadamente, ya sea el vocabulario, la estrategia a seguir, los materiales, etc. Los pasos de implementación de la actividad son válidos para cualquier tarea orientada.
Conclusiones
El estudio realizado en este trabajo ha permitido el planteamiento de una metodología, la cual se ha demostrado teóricamente que favorece el desarrollo de la habilidad de expresión oral en idioma inglés, al estar centrada en el trabajo independiente y consciente del alumno.
Se han tenido en cuenta las necesidades sociales, académicas y profesionales de los estudiantes, las estrategias y estilos de aprendizaje, los modelos de enseñanza, los pasos de implementación de las actividades y la evaluación y autorregulación del aprendizaje, como elementos que interactúan en el proceso de formación de la habilidad; lo que constituye los rasgos distintivos de la propuesta.
Fue establecido inequívocamente, por la caracterización y los resultados obtenidos en la investigación, que el desarrollo de la capacidad de comunicación oral de los estudiantes de Derecho y que el proceso de formación de esa habilidad es aún insuficiente para desenvolverse en el campo de su profesión en el mundo actual, por lo que el problema asumido en el presente trabajo es objetivamente, una realidad del proceso de formación de los estudiantes de Derecho de la Universidad de Camagüey, comprobándose la imperiosa necesidad de su estudio y solución. La existencia de la teoría adecuada y de experiencias prácticas, evidenciaron la viabilidad de este trabajo.
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Autor:
MSc. Sonia Gerard León
MSc. Omar J. Nardín Anarela
Departamento de inglés
Universidad de Camagüey
Cuba
DATOS DE LOS AUTORES
La Profesora Asistente Sonia Gerard León se desempeña como docente del Departamento de Inglés de la Universidad de Camaguey en Cuba. Tiene títulos de Licenciatura en Lengua Rusa (1983) y Licenciatura en Lengua Inglesa (1993) y Master en Ciencias de la Educación (2004). Ha cursado estudios de posgrado en las materias de Tecnología Educativa; Metodología de la Enseñanza de la Lengua Inglesa; Problemas Sociales de la Ciencia y la Tecnología; Metodología de la Investigación Pedagógica; Computación y las nuevas tecnologías de la información; curso de Epistemología de la Pedagogía. Intercambio de experiencias con especialistas extranjeros en Lengua Inglesa. Ha investigado en diferentes aspectos dentro de la línea del perfeccionamiento de la enseñanza del inglés. Ha publicado diferentes artículos y materiales de apoyo a la docencia relacionados con la investigación y con otros trabajos científico-metodológicos.
Sonia Gerard León
El Profesor Asistente del Departamento de Inglés de la Universidad de Camagüey en Cuba Omar Nardín Anarela tiene títulos de Licenciatura en Lengua Inglesa. (1982) y Master en Investigación Educativa. (2004). Ha cursado estudios de posgrado en las materias de Filosofía, Pedagogía, Metodología de la Enseñanza de Lenguas Extranjeras, Metodología de la Investigación Pedagógica, Computación y Nuevas Tecnologías de Información y Comunicación. Ha investigado en diferentes aspectos dentro de la línea del perfeccionamiento de la enseñanza del inglés. Ha publicado diferentes artículos y materiales de apoyo a la docencia relacionados con la investigación y con otros trabajos científico-metodológicos.
Omar Nardín Anarela
N O V
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