2.- Analiza lo que significa meditación en aquella época, esta palabra significaría una reflexión sobre un problema personal de tipo religioso o espiritual, no en sentido cognoscitivo, y que se llevaba a cabo por medio de un repliegue interior. El contexto es el retiro espiritual de los jesuitas. Descartes tuvo una formación jesuita. Otro contexto es el de la reforma protestante con su repliegue hacia la integridad. Lutero era agustino y el primero que presentó una retirada hacia el interior fue san Agustín, el cual tuvo una lucha fuerte contra de escepticismo (paralelismo entre Descartes y San Agustín). En los ejercicios espirituales lo que se trata es de purificar el alma, de replegarse sobre el verdadero yo, el alma, la conciencia, y purificarla del comercio mundano para llegar a lo puramente espiritual. Ahora el yo, el alma, la mente será el órgano cognoscitivo (ver disputa con Gassendi que era materialista, para el que el sujeto del conocimiento será el cuerpo; aquí Descartes concretará lo que entiende por sujeto –> un alma entendida como mente). Se daría pues una secularización de una práctica religiosa.
3.- Las meditaciones han de seguir un orden preciso tomado de los jesuitas. Cuando se acaba una meditación se sigue con la siguiente de forma precisa después de hacer un resumen. Ese es precisamente el esquema de las meditaciones cartesiano.
Análisis de la obra .-
En la primera meditación se trata de las cosas que pueden ponerse en duda. Descartes habla y se plantea quién es el yo que habla pues cada vez es más abstracto hasta el punto que algunos lo ponen en relación con el yo trascendental de Kant. Los comienzos son declaraciones de principios. Empieza replegándose sobre sí mismo, sobre una mente con contenidos, dándose cuenta de que tenía opiniones falsas. Si estas eran los fundamentos del conocimiento todo lo demás estaría entonces equivocado. Esta es una metáfora del conocimiento entendido como edificio con pilares; para Popper el conocimiento será como un edificio con pilares sobre ciénagas.
Para Descartes el problema consiste en ver dónde se apoya o fundamenta el conocimiento.
Su modelo de conocimiento es el de un modelo absoluto más una verdad absoluta, universal y necesaria que ahora hay que fundamentar la. Lo primero es someter todos contenidos mentales, salvo la moral (se escinde entre razón teórica y razón práctica, lo cual dará lugar a uno de los grandes dualismos de la modernidad; Kant escribiría una pequeña obra sobre esta relación).
Descartes reflexiona sobre el uso práctico de la razón. Todo tiene que ser puesto en duda porque no te puedes fiar de lo que tienes por verdadero sin haberlo sometido previamente al análisis. Todo tiene que ser sometido a crítica, pero ¿qué es la crítica?.
Crítica es poner todo en duda, asimilar todo a lo dudoso y a lo erróneo. Es depuración de la mente de los contenidos cognoscitivos para evitar la contaminación del error.
¿Se trataría entonces de una duda escéptica?. No, sino de una duda metódica lo cual es lo que la diferencia de la duda escéptica; pero ambas parten de lo mismo. Es contra los escépticos contra los que va a luchar Descartes, pero no para concluir en el escepticismo sino para alcanzar certezas, desechando las dudas escépticas. La duda metódica apunta a alcanzar certezas.
¿Cómo funciona la duda metódica?. Consiste en poner todo en duda incluso lo que tenemos por cierto, desconfiar de todo contenido mental. De esta manera, al radicalizar la duda, lo que sobreviva será lo cierto y seguro a partir de lo cual se podrá fundar y será el origen del conocimiento.
Otro rasgo de la duda es que no afecta a todos y cada uno de los contenidos mentales sino que hay que ir a los fundamentos por los cuales sentimos, por los que creemos que conocemos algo con verdad. El conocimiento humano es finito extensionalmente; hay que ir a lo que nos basamos para opinar.
¿Con qué fundamento asentimos?; será el primer nivel de duda (página 18). Lo más inmediato son los sentidos, percepción, comprobando que nos engañan; como alguna vez nos engañan nunca podemos fiarnos, asimilando la duda con el error. Todo lo que provenga directa o indirectamente de los sentidos hay que rechazarlo. Con esto desaparecen de un plumazo todos los saberes que se basan en la experiencia como por ejemplo el paradigma galileano, el aristotelismo ortodoxo.
Con esto podría negarse hasta la realidad del mundo. Descartes pasa de la de negación de los canales del conocimiento a la negación del contenido de ese conocimiento. Su poca fiabilidad es un problema epistémico.
Pero otro problema sería lo que hay al otro lado de nuestros canales de conocimiento. Descartes los conecta al ser un onto-realista.
El siguiente paso es poner en duda la existencia del mundo externo. San Agustín se enfrenta a los escépticos en Milán siguiendo el mismo camino que siguió Descartes. Descartes continua cuestionando el sueño, las demostraciones matemáticas y por último el yo.
En las Meditaciones se refiere al argumento del sueño al producirse muchas ocasiones la confusión entre sueño y vigilia. No hay manera de forma clara y cierta de distinguir entre ambas. El mundo puede ser un sueño. La respuesta sería que las demostraciones matemáticas son ciertas también en sueños.
El siguiente paso consiste en ver cómo funcionan las matemáticas y la geometría. Concluye que tampoco basta pues pudiera ser que la mente (racionalidad) estuviera equivocada por su propia estructura desde su origen, que existiera un Dios engañador. Dios, al ser omnipotente me ha podido crear con una naturaleza viciada. ¿Quién asegura que todo no es más que un engaño debido a Dios?.
Finalmente aparece algo que es redundante, la figura de un genio maligno que se dedica a engañarme. Dios como fuente de verdad no podría engañarme pero no sería Dios sino un genio maligno el que me confundiese permanentemente. ¿Qué añade este genio maligno si ya existe un dios engañador?. Algunos han dicho que lo hizo por prudencia con las autoridades. Otros que fueron figuras del papa en su disputa con Galileo. Otros que tendría que ver con la técnica de las meditaciones de los jesuitas (recapitulación de la meditación). Las tres razones podría ser válidas.
La situación en que nos deja es la del escepticismo más absoluto. San Agustín también llegó hasta aquí.
PUTNAN lo recoge en la actualidad en su obra Razón, verdad e historia en el capítulo Cerebros en la cubeta.
Putnan es un neopragmatismo en unión con Rorty porque siguen como modelo el pragmatismo americano originario de James, Pierce y Duy. En el pragmatismo estaban divididos; unos apuntaban a intentar justificar el realismo tanto en lo ontológico (existencia del mundo exterior), como en lo epistémico. La otra corriente son los relativistas para los cuales nuestro conocimiento es una explicación entre otras muchas en nuestra interacción con el mundo, sin que podamos saber si dichos instrumentos reflejan dicho mundo (Rorty). No es escepticismo pero es difícil de calificar. Todo este pragmatismo tiene una influencia de Darwin al tomar la especie humana como una especie con capacidad simbólica, lo que le ha permitido crear muchas cosas, entre ellos la ciencia.
Todos son falibilistas abandonando el fundamentalismo. Los pragmatistas clásicos son los primeros falibilistas pues no podemos saber si nuestro conocimiento es verdadero; el conocimiento sólo es útil; las teorías son meros instrumentos; el conocimiento es una parte de la praxis humana. Es una teoría convergente de la verdad.
El tipo de realismo de Putnan va cambiando según las etapas de evolución. Primero empezó como analítico del lenguaje analizando la referencia en sentido de Frege. En esta primera etapa investigando la referencia ensanchó su filosofía hacia el conocimiento, hacia la ontología. Su obra Razón, verdad e historia es de tipo realista interno, muy kantiana. Las teorías científicas (conocimiento estricto) son instrumentos que tienen que ver con el mundo pues con las teorías "cazamos" el mundo. Huye del representacionismo (las ideas no representan el mundo). Fue como idealista encubierto por lo que después opta por un realismo directo. Las pruebas del realismo directo sería simplemente porque las teorías funcionan.
En el artículo Cerebros en la cubeta arranca del problema Descartes. Mantiene que la referencia se explica con la intencionalidad. Pero el problema raqdica en explicar la conexión entre en los constructos lingüísticos y su referencia aunque halla intencionalidad. Podríamos llegar al escepticismo cartesiano.
14-12-01
Putnan procede de la filosofía del lenguaje mientras que Descartes está inserto en la metafísica por lo que ambos tienen diferencias a la hora de dar una salida al escepticismo.
Putnan tiene una concepción de la ciencia físico-natural mientras que en Descartes su salida es epistémica ( se parte de sujeto como conciencia que refleja el mundo), con una teoría del conocimiento de tipo representacionista, y metafísica.
El hecho de acudir a experimentos mentales es una técnica de los filósofos de la mente. El experimento mental consiste en crear una ilusión virtual.
Los problemas que se quiere señalar sólo siguientes :
1.- resaltar el problema del escepticismo respecto a la existencia del mundo externo (problema ontológico)
2.- relación mente-mundo, (problema epistémico) consistente en el problema de los contenidos mentales y su relación con el mundo que es el punto de apoyo de la teoría de la verdad como correspondencia, del conocimiento como contenido de conciencia, como lenguaje.
Si resolvemos uno de ellos caminamos hacia la resolución del otro problema dado que ambos están interconectados.
El argumento de Putnan y Descartes es el mismo en el fondo contra de escepticismo. Es el mismo estructuralmente si bien las implicaciones son distintas. En la filosofía del lenguaje se emplea "decir"; en la filosofía de la conciencia se emplea "pensar".
Contra la duda que nos lleva al escepticismo dirán que sea autorrefuta porque si fuera verdad sería falso. El argumento se auto refutaría por sí mismo. Una tesis se auto refuta cuando al afirmarla se hace falsa. Putnan pone el mismo ejemplo que Descartes.
En Cerebros en la cubeta y en el genio maligno se dan las condiciones de posibilidad que presuponen la autorefutación :
Primer presupuesto.- lo que es posible es real, si lo pensamos puede ser real.
Segundo presupuesto.- si eso es real y somos los cerebros en la cubeta.
Lo más básico de este argumento es que se presupone que aquello que se niega existe de la forma contraria a como se niega.
En la segunda meditación se dirá que al pensar que soy, es que soy, cosa que incluso niega el escéptico. El problema del escepticismo es el de la carga de la prueba y qué tipo de prueba es preciso para probar algo.
Una posición intermedia entre realismo y escepticismo sería que si lo que me parece real es una ficción tan perfecta podemos vivir perfectamente dentro de dicha ficción.
Tanto Descartes como Putnan quieren mostrar que este argumento de duda se auto-refuta. En Descartes es el yo, el sujeto pensante y en Putnan es el sujeto lingüístico. Putnan nunca habla de un sujeto como conciencia en sentido metafísico sino lingüístico e intencional.
La razones para negar las conexiones necesarias entre los referentes y las representaciones están en las páginas 29-31. Los significados no están en la cabeza, lo que supone una negación de la teoría representacionista del conocimiento. Descartes piensa que la representaciones reflejan el mundo, todo conocimiento es del mundo gracias a un "mediador" que en su caso es Dios. Dios garantiza que nuestro conocimiento es verdadero como correspondencia en sentido realista, solucionando la relación mente cuerpo y la existencia del mundo. Estas dos funciones serán las que tenga Dios en las meditaciones.
Segunda meditación .-
Primero tiene que suspender el juicio hasta que haya algo de lo cual ni siquiera puede engañarnos el genio maligno. Llega a la conclusión que se está pensando o persuadido de algo entonces tengo que ser, en sentido realista. Para pensar que todo es ilusión tengo que pensar, auto-refutación. Esto es lo mismo, el que piensa que es el objeto de engaño al menos es.
La primera certeza sería la del acto subjetivo de la auto conciencia. Después de toda duda no quedaba nada sino que queda alguien. Esto le plantea el problema del solipsismo. Esta certeza no es deducida, es la condición de partida. El ya cartesiano, el cogito no es objeto de pensamiento, es una intuición, no una deducción a partir de algo. El hecho cartesiano, el cogito es una intuición intelectual, pero con realidad.
Por ello, el ergo no implica una deducción. La existencia se descubre directa e intuitivamente en el acto de pensar. El cogito es el principio del ser y del saber al mismo tiempo, realismo epistémico. El cogito será la fuente del ser y del conocer.
Por ello será el primer pilar del conocimiento a partir del cual podemos reconstruir todo edificio del conocimiento.
La segunda pregunta es metafísica ¿Qué es la auto conciencia?, páginas 2526. Cosa que piensa, espíritu, razón. Soy una res cogitans. Lo propio es que no puedo dejar de pensar porque dejaría de ser. Su esencia es pensar pues el cogito, la autoconciencia, es el propio ser. Por ello lo entiende en términos sustancialistas, el cogito es un acto que está presente en todo las actuaciones del cogitans. Está en todos los actos o modos de pensar, en lo político, en lo intelectual, en las sensaciones, en sentimientos. La esencia del ser humano es pensar.
Pero ¿qué realidad tiene ese yo?.
Es una sustancia cuya esencia es el pensar. Es una respuesta de corte metafísico aristotélico.
Pasa luego a los atributos del alma. En lo de consiste el cogito es el pensar, lo cual es un atributo; los atributos son accidentes de la sustancia que se predican necesariamente de la sustancia; dichos accidentes pueden ser de dos clases modos o atributos. Los modos es lo que a veces se predica y otras no, son contingentes; los atributos siempre se predican pues caso contrario la sustancia dejaría de ser. El atributo esencial del cogito es el pensar. Yo consisto en pensar. De esa intuición derivo digo que soy acto esencial de pensar, pero estoy encerrado en mí mismo; mi horizonte no lo constituye el mundo ni los otros, sino simplemente representaciones, ideas de origen desconocido. Es una autoconciencia encerrada. Las ideas están o tienen un origen desconocido y la única certeza es que pienso. Puedo suponer el origen de esas ideas pero no tengo certeza. El que conoce es esa autoconciencia.
Hasta aquí se llega al problema del solipsimo. Para recuperar el mundo externo Descartes tendrá que rechazar dicha certeza, pues tendrá que admitir que no es más que un conjunto de representaciones. Siempre que se buscan problemas del fundamento del conocimiento se llega al solipsismo.
20-12-01
Se trata de dudar incluso en la fiabilidad de la propia mente aunque se esté guiando por el método. Acude a la ficción de una mente superior que atrapa la mente humana. En Putnan será otra mente, en Descartes será Dios.
La mente cartesiana no es vacía a diferencia de los empiristas.
El concepto de lo mental en Descartes es completamente distinto.
Locke dirá que la mente carece de contenidos, crítica la existencia de las ideas innatas lo cual desbarata todo el edificio cartesiano pues las ideas innatas es el pilar para resolver el problema del solipsismo.
Tercera meditación .-
La mente es una cosa pensante, el acto de pensar. La mente produce conocimiento y eso siempre es de algo. Como larvas con gitanas siempre está en acto no podemos concebirla sin que esté inactiva y por eso siempre conoce algo. Por ello tiene cogitationes.
El cogito es el punto de partida en el proceso del conocimiento, es el primer pilar para fundamentar todo el conocimiento pero nos hemos quedado encerrados en él; nos hace falta otro fundamento. El cogito es igual a autoconciencia con cogitationes de origen desconocido. Tenemos garantizado el yo que piensa pero hay que garantizar la verdad de lo pensado y abrir el cogito al mundo externo a aquello que se refiere a las cogitationes. El problema de la verdad y el problema del mundo externo son problemas independientes pero relacionados entre sí. Descartes intentará recuperar las dos cosas dado que es un realista.
En cuanto a las referencias, cogitationes, del cogito en Descartes su respuesta será metafísica mientras que en Putnan no. ¿Cómo una entidad mental aprehende entidades extramentales? Es el problema de todos lo realistas.
Descartes, con su teoría de las ideas innatas y Dios, mantendrá una conexión intrínseca entre las cogitationes y sus referentes. Putnan niega esta conexión. Para Descartes ya está dada desde el principio; Putnan parte de la no conexión para intentar la solución por otro camino.
Con Descartes la solución pasa por un mediador mágico entre mente y mundo que garantice estas correlaciones. Ver página 33 de las meditaciones.
A partir de aquí hay que probar la existencia de Dios pues sólo si Dios existe tendremos mundo externo y nuestra referencia al mundo externo estará garantizado.
Para alcanzar la certeza, Descartes tiene que probar :
1.- que Dios existe
2.- que no me engaña al usar el método.
La prueba de la existencia de Dios esta al final de las meditaciones.
Analizando los contenidos de la mente encuentra tres tipos de ideas, (página 33) :
1.- unas le parecen nacidas con él : estas son las ideas innatas.
2.- otras le parecen nacidas fuera de él : estas son las ideas adventicias
3.- otras le parecen inventadas por el propio sujeto : estas son las ideas facticias. Las facticias se refieren al propio ejercicio de la mente como por ejemplo la idea del triángulo.
Pero si el cogito está aislado y tenemos la separación entre sustancias, en ese momento la única fuente de las segunda clase de ideas sólo puede ser la mente. Analizándose se llega a hipótesis, pero no a la certeza, que hay ideas cuyo origen es la reflexión de la mente, las facticias; otras parece que vendrían del cuerpo en contacto con él si existiese, lo cual es una hipótesis no una certeza y serían las advertencias.
Cuando exista Dios adquiriremos certezas; ahora sólo nos encontramos con meras hipótesis. Otras ideas parece que nacen de la mera naturaleza racional, las innatas, que están en la naturaleza de la mente. Lo innato es lo propio de la naturaleza racional humana. La creencia en las ideas innatas es básica pues tienen un contenido a diferencia con Kant para el cual sólo serán reglas formales, los a prioris. En Descartes tienen un contenido.
Las ideas adventicias no pueden sacar a la mente de sí misma porque lo corporal ha sido puesto en duda, el cuerpo puede ser fuente de error aunque apunte a lo externo.
Las ideas ficticias tampoco porque son creaciones de la propia mente. Sólo las ideas innatas pueden romper el solipsismo. Una de ellas puede mostrar su objeto, su contenido material.
La idea de Dios exige la existencia de su objeto pues los rasgos que definen a esa idea necesariamente tienen que existir. Esa idea innata nos mostrará la naturaleza divina. Dios es otra res cogitans que existe, es una res cogitans que también existe. Analizando la idea de Dios captamos su esencia y Descartes lo hace de forma escolástica. Establece que lo propio de la idea de Dios es poner toda las perfecciones llevadas al infinito. Por eso Dios es el ser más sumamente perfecto. Si lo es no puede ser cuerpo pues lo corporal no es perfecto, es fuente imperfecciones.
Además Dios se caracteriza por ser infinitamente actual, ya es infinito en acto. Descartes habla de la idea de Dios pero no es el dios de ninguna religión. Lo anterior significa que es creador de todo lo demás, creador del mundo desde donde se deriva su omnipotencia pues él lo es todo.
Spinoza sacará de aquí un panteísmo de lo mismo, pero Descartes separa el producto del creador; Descartes es todavía un escolástico.
Y Dios es omnipotente pues lo ha creado todo. Esto permite las figuras negativas pues lo puedo crear de cualquier modo, es decir, engañarnos. Pero en la esencia de Dios encuentra Descartes la solución a esto. Da preferencia a otra de las notas de la esencia divina, la perfección y la veracidad. Por ello no puede querer crear una mente errónea pues eso sería imperfecto. Dios primero es perfecto y después omnipotente, hay una jerarquía en cuanto sus características.
Descartes discute una cuestión metafísica pero sólo al servicio del conocimiento no teológico. La veracidad es un rasgo primordial de Dios. El error o el engaño es imperfección. ¿Cómo sabe Descartes que la idea de Dios no es errónea?, porque es i nata pero ello es asumir un dogma filosófico, aceptar la tesis de que hay ideas innatas. Nacemos con ideas innatas al haber sido creados. Descartes no llega a dudar de la existencia de las ideas innatas y por eso es dogmático. El Dios de Descartes es un dios relojero, con unas leyes, no es un dios ocasionalista. Este Dios es causa primera, pero luego se desentiende. Nos encontramos ante un mundo mecánico de causas.
El sujeto moderno es libre, con autonomía, autoconstituyente y por eso es capaz de error y del mal.
Dios tiene que ser infinito para justificar la certeza del conocimiento, fundamentar la racionalidad de la mente. Por el método alcanzamos certeza en todas las ideas.
En la segunda meditación termina con : yo soy, yo existo y con unos contenidos mentales. Pero la idea innata de Dios me permite reconstruir el mundo y tener certeza, recuperar al Dios no engañador a través del método.
Locke criticará que tengamos ideas que no son copias de ninguna percepción pues siempre están conectadas de algún modo con alguna percepción; criticará las ideas abstractas. Sus contemporáneos criticará a Descartes por dogmático pues asume que hay ideas innatas sin demostrarlo de forma cierta y segura. Con ello incurre en una circularidad. Incurre en un dogma en el sentido cartesiano.
21-12-01.
Dios por tanto está en la fundamentación de todo conocimiento incluido el del cogito. Las pruebas de su existencia las encontramos en las meditaciones tercera cuarta y quinta. Son pruebas clásicas, con un lenguaje escolástico. Las objeciones y respuestas inciden en la idea de Dios y son hechas por teólogos.
El argumento básico es el siguiente :
1.- la mente no esta vacía sino que tiene ideas.
2.- las ideas tienen que tener una causa.
3.- la causa de una idea tiene que tener tanta realidad como el efecto, no puede haber causa con menor grado de realidad que el efecto.
La argumentación es circular. Se recurre a la evidencia de la idea de Dios para justificar el cogito y para probar a Dios acude a la evidencia del cogito.
Putnan pone en cuestión que las ideas tengan una causa y no hay manera establecer la relación con su referente.
El que le discutió esto ha Descartes fue Hobbes en la objeción 9ª. Dirá que no tenemos dichas ideas ni de Dios ni de sustancia ni de alma; hay que tener en cuenta que Hobbes es nóminalista, materialista y atomista. Racionalista respecto a su teoría del conocimiento. ¿Qué es eso de tener "más realidad"?. Hobbes le dirá que eso hay que probarlo, le hace una petición de principio.
La respuesta a Hobbes es dogmática.
Hume también criticará que la existencia de Dios puede extraerse del efecto de algo. Ello es así porque sólo se podría aceptar si probamos que algo es causa de un efecto. Es el problema de la conexión necesaria entre causa efecto. La crítica de Hume es la crítica a la causa eficiente e incide en la idea de que la causalidad eficiente exige la conexión necesaria y eso es precisamente lo que hay que probar. También le acusa de circularidad pues supone lo que hay que demostrar, supone la realidad para derivar la realidad.
En la epistemología cartesiana es un problema abierto pero básico pues si el fundamento de todo el conocimiento falla se abre el camino al escepticismo.
Otro problema será la relación mente cuerpo. Existirán tres sustancias :
1.- La res cogitans finita
2.- La res cogitans infinita
3.- La res extensa
No hay nada en común entre la res cogitans finita y la res extensa pues una es indivisible, y la otra es divisible. ¿Cómo se explica entonces la unión de cuerpo y alma?. La quinta objeción tendrá como este problema polemizando con Gassendi y en la correspondencia con Isabel del Palatinado.
La solución Descartes es que debe existir un órgano en el centro de cerebro que comunicaría ambas sustancias lo cual sería apelar a otro mediador mágico.
Gassendi le criticó durísima mente hasta el punto de llegar a un tema personal.
Para Descartes mente, alma y espíritu son lo mismo y no tienen nada de material; para Gassendi el alma tiene partes más sutiles y más materiales. La mente sería una parte menos sutil del alma de tal forma que habría una continuidad.
Descartes diga que no se conoce con el cerebro sino con la res cogitans. El cogito conoce ideas incorpóreas pero el problema está en cómo se pasa de lo corpóreo a lo incorpóreo. Descartes lo soluciona fuera de la filosofía pues defiende una unidad insoslayable del ser humano que se percibe en la vida y en las conversaciones cotidianas. El problema alma cuerpo no es materia de filosofía pues la razón procede primero cualitativamente primero analítica mente dándose cuenta de que existen esas sustancias pero luego no puede unificarlas. La unión de ambas se percibe en la experiencia cuando se vive y actúa pero eso no es conocimiento en sentido estricto. Para Descartes la solución de esto no es preciso probarlo, página 312.
La teoría de la mente actual trata de determinar la relación mente-cerebro con una reflexión desde la neurología y las teorías psicológicas realizadas por herederos de la filosofía analítica.
Existen varias posturas :
1.-La postura reduccionista pero no es posible la reducción total bien porque hay algo inexplicable, bien por desconocimiento fisiológico.
La filosofía Descartes está llena de problemas, pero el que estudia filosofía investiga problemas, no busca verdades. Se han dicho cosas ridículas sobre Descartes como de hablar de un sujeto totalitario, de un sujeto manipulador, etcétera. Es cierto que el pensamiento ilustrado ha creado la tecnocracia y un sujeto falsamente universal. El pensamiento ilustrado fue una revolución. Descartes es el primero que unifica la especie humana, que tiene algo que no nos permite establecer diferencias, todos tenemos razón y cualquier persona con método puede alcanzar la verdad.
Antes existía una concepción jerárquica y organista y cada uno debía cumplir su función. Por eso es el punto de partida de las ideas políticas igualitarias.
La diferencia con el argumento ontológico de San Anselmo radica en la función que desempeña Dios. La res cogitans no es infinita porque es objeto del conocimiento y está sujeto a error, lo cual es equivalente al mal; ello plantea el problema del libre albedrío.
Putnan criticará que las notas de una idea tengan correspondencia con la realidad.
Existen dos clases de relativismos : a) el realista
b) el escéptico.
10/01/02
Tema III. 2
Bibliografía. Tema 3.2.
LOCKE, J., Ensayo sobre el entendimiento humano, Madrid, Editora Nacional, 1980, 2 vols.
HUME, D., Tratado de la naturaleza humana, Madrid, Editora Nacional, 1977, 2 vols.
HUME, D., Investigación sobre el conocimiento humano, Madrid, Alianza De., 1980. Texto de lectura necesaria.
HUME, D., Un compendio de un tratado de la naturaleza humana, Valencia, Revista Teorema, 1977.
AYER, A.J., Hume, Madrid, Alianza, 1988.
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MELLIZO, C., En tomo a D. Hume: tres estudios de aproximación, Zamora, Monte Casino, 1978.
NORTOR, D.F., D. Hume: common sense moralist, sceptical metaphisician, Princenton Univ. Press, 1982.
NOXON, J., La evolución de la filosofia de Hume, Madrid, Revista de Occidente, 1974. WRIGHT, J.D., The sceptical Realism of David Hume, Manchester Univ. Press, 1983.
REID TH., Essays on the Intellectual Powers of Mind, Cambridge, MIT Press, 1969. REID TH., Inquiry and Essays, Indianapolis, Hackett, 1983.
LEHREIT, K., Thomas Reid, London, Routledge, 1989.
ARENAS, L., MUÑOZ, J. y PERONA, A.J. (comps.), El desafío del relativismo, Madrid, Trotta, 1997.
MARRADES, J. y SÁNCHEZ DURÁ, N. (comps.), Mirar con cuidado. Filosofía y escepticismo, Valencia, Pretextos/Dpto. de Metafisica y Teoría del conocimiento de la Univ. de Valencia, 1994.
Descartes parte de asumir los argumentos escépticos utilizando la duda metódica con el fin de refutarlos. Esta teoría del conocimiento trae problemas como por ejemplo el dogmatismo.
Una posición distinta dentro de este contexto es el de empirismo inglés. Hume representa el mutismo radical.
Idea general .- No se puede identificar desde un punto de vista histórico de las ideas con el pensamiento de los escépticos los cuales opinan que no existe un conocimiento verdadero (Montaigne). Hume intenta dar cuenta del conocimiento verdadero y no le sale; el sigue pensando que el conocimiento verdadero es conocimiento. El problema es de la filosofía la cual es incapaz de justificar dicho conocimiento (es un problema filosófico más que cognitivo).
El libro de Putnan nos es útil también aquí en su primer capítulo dado que los problemas son los mismos. Putnan es una mezcla de racionalista y de empirista.
Hoy hablaremos algo de Locke (entre Descartes y Hume). Era un lector Descartes; sus críticas hacia él son el inicio de un pensamiento que acaba en el escepticismo pero que no es un escéptico de partida.
El grupo de problemas de los empiristas coincide con el Descartes: ¿Cómo es posible conocimiento del mundo externo, de la realidad físico material?.
Hay dos rasgos generales del empirismo clásico que marcan la diferencia con Descartes :
1.- son pensadores fundamentalistas pues quieren fundamentar la verdad del conocimiento a través de la filosofía. El problema es que el intento se frustra, es un intento frustrado.
2.- disuelven todos los conceptos metafísicos propios del realismo cartesiano y por supuesto también los del aristotelismo escolástico contra el que ya se dirigió el propio Descartes. En lugar de estos conceptos ( de sujeto, de sustancia, de idea) colocan imágenes noéticas, productos de una psique, de una mente entendida en sentido psicológico. Esta mente no produce ideas, sino imágenes noéticas, imágenes cargadas de información. Los factores estructurales de estas imágenes son internos. Profesan un realismo pues estas imágenes representan el mundo ( teoría representacionista). Son realistas empiristas, no metafísicos, denominado realismo psicológico.
Pero los problemas son iguales que en Descartes:.
1.- justificación del conocimiento.
2.- relación entre las imágenes noéticas y lo que representan (psique-mundo).
En el trasfondo de estos dos problemas se encuentra una cuestión que ellos muestran que es muy relevante: la causalidad. Y es relevante para solucionar los problemas (Descartes no la citó pero si los empiristas).
Es relevante porque la filosofía moderna y hasta la filosofía post-analítica de Putnan y Rorty siempre se ha intentado explicar la relación existente entre palabras y objetos de conocimiento en términos de causalidad, cómo el objeto externo causa en el sujeto del conocimiento las imágenes noéticas, las ideas.
Putnan investiga partiendo de la investigación de los empiristas, sobre todo de Hume (página 23 cerebros en la cubierta : no tienen una conexión necesaria con su referentes).
La relación cognitiva con los fenómenos del mundo externo no se puede explicar en términos de causalidad, entendida como causalidad eficiente (como en Hume) dentro del paradigma mecanicista.
Impugnar la conexión necesaria entre el lenguaje y el mundo externo afecta al problema de la relación entre lenguaje-mundo y a la articulación de las teorías científicas. Si la causalidad no es una relación justificable, todo el edificio del conocimiento es puesto en cuestión. Las proposiciones sobre el mundo externo quedan sin justificar y entonces ¿cómo sabemos que estamos hablando de acontecimientos externos a la propia teoría?.
LOCKE .-
Es el más cartesiano de los empiristas ingleses aunque explica y sitúa el origen del conocimiento apelando a la experiencia y no a la razón (aunque para Descartes era importante la experiencia sin que llegue a prescindir del todo de ella).
En Locke tanto el origen como la justificación del verdadero conocimiento queda remitido a la experiencia (diferencia decisiva con Descartes). Ni Locke ni Hume prescinden de la razón para explicar cómo se produce el conocimiento; es gracias a las funciones o leyes psíquicas de la razón, como se construyen y enlaza la información que viene de la experiencia.
Locke comienza a su obra Ensayos sobre el entendimiento humano diciendo que si pudiéramos avanzar hasta donde puede alcanzarse la certeza. Aquí se plantea:
1.- La manera de abordar el conocimiento, es decir, los límites del conocimiento que se vincula con la certeza, verdad que va acompañada de un conocimiento personal. ¿De qué cosas cabe tener certeza y de cuáles no?.
2.- Nos indica que planteamiento sobre conocimiento sigue siendo no sólo cartesiano sino además clásico, el conocimiento no coincide con la opinión (doxa) lo mismo que ocurría en el pensamiento griego sino que el conocimiento está vinculado a la verdad absoluta.
Será con Hume cuando esta distinción, que implica que lo que es propiamente conocimiento no es doxa, será rota, porque identificará conocimiento con creencia. Pero en Locke aun no ha surgido esta ruptura y los límites del conocimiento implica aquello que está justificado frente a las meras hipótesis.
La investigación del ámbito de lo que puede ser dicho con certeza presenta en Locke un enfoque empírico-genético: cuál es el origen del conocimiento situandolo en la experiencia.
La experiencia es un concepto múltivoco lo que implica que depende de la teoría en la que nos situamos.
En Locke la experiencia es entendida en términos psicologistas remitiendo a los datos de los sentidos que luego se filtran por la mente. La mente no va ser claramente una sustancia, sino algo diferente, algo que no se sabe muy bien. En Hume la mente será un flujo experiencias ordenadas según las leyes psíquicas.
¿Cuál es el origen de nuestras ideas?. Esta será la pregunta de partida.
Nosotros conocemos (igual que ocurre con Descartes) aunque ahora se tiene una distinta concepción de lo que es una idea.
Para Locke las ideas provienen de las impresiones que a su vez provienen de la experiencia. Antes de la experiencia, la mente está vacía lo cual sería una diferencia importante con Descartes pues en este autor la mente siempre tiene un contenido.
Para Locke una mente antes de la experiencia es igual a un papel en blanco. Una idea es el objeto, en el sentido de "lo que hay" de conocimiento. En Descartes una idea es el contenido de una mente entendida como conciencia y como sustancia. La mente tenía ideas innatas.
Locke crítica claramente el innatismo cartesiano que conduce la en investigación al escepticismo. En Descartes era una idea innata la que justificaba todo el edificio del conocimiento. Pero si Dios no es el garante, ¿cómo sabemos que existe un mundo externo, que nuestras ideas no nos engañan?.
Locke considera que la tesis del innatismo o :
1.- no se puede justificar, o
2.- es autocontradictoria porque si la tienes no es tan evidente que sea innata.
El origen del conocimiento se encuentra fuera de la mente sin que existan ninguna clase de ideas innatas.
Una pieza que desmonta Locke es la distinción entre las dos sustancias: la res cogitans y la res extensa.
Resumen de sus críticas a esta distinción :
1.- aplica la distinción entre ideas primarias (cuantificables) e ideas secundarias para criticar que no hay razón para calificar sólo con la extensión como única sustancia material (impugna la distinción de substancia material sólo a través de la extensión).
2.- Tampoco hay razón suficiente para afirmar que la res cogitans no requiera de la res extensa. Este dualismo extremo es impugnado por primera vez en la historia por Locke. Es una mera creencia, no una certeza. Descartes no consiguió presentar como certeza su teoría de la sustancia.
3.- Impugna la tesis de que la mente esté siempre pensando, en acto. Por tanto deshace toda la teoría de la sustancia de Descartes.
Sin embargo, en Locke no desaparece la idea de sustancia, lo cual le creará un problema ya que no lo resuelve.
Hablaremos ante el de seguir un poco del escepticismo para completar el contexto.
El escepticismo siempre ha estado presente en toda la historia de la filosofía. Todas las reflexiones sobre el conocimiento que se han hecho han tenido siempre posiciones escépticas.
Relativistas extremos (escépticos) Relativismo mitigado (centro) Realistas.
El origen del escepticismo lo encontramos en autores como Gorgias, Pirrón de Alejandría al que se denomina escepticismo extremo. En cuanto a los textos tenemos los denominados Esbozos pirrónicos de Sexto Empírico y los textos sobre Gorgias de Platón.
El ámbito del escepticismo es triple :
1.- Ambito ontológico, que haría referencia al ámbito del ser: La afirmación de Gorgias sería "no existe el mundo" lo que implica una tesis ontológica.
2.- La propiamente epistemológica : "no puede haber conocimiento verdadero del mundo".
Estos dos ámbitos será en los que se mueva Descartes, los empiristas y los escépticos como Montaigne.
3.- Ambito de la comunicación, porque la manifestación del conocimiento es pública, no como decía Descartes. El lenguaje como principal instrumento de comunicación y de conocimiento (círculo de Viena y primer Wittgenstein).
En el caso del contexto moderno, el escepticismo estará representado por Montaigne. Reavivó el escepticismo pirrónico, es decir, el escepticismo como punto de partida y el escepticismo académico el cual aparece al final de la investigación de Hume. El escepticismo académico es el procesado por Cicerón en un texto titulado De académico y el producto de la reflexión intelectual siendo agnóstico (veamos si podemos dar cuenta…).
Montaigne modernizará estos dos frentes del escepticismo.
11 de enero de 2002.
El escepticismo del siglo XVIII parte de Montaigne el cual es un escéptico filósofo-intelectual más un escéptico pirrónico; Montaigne revitalizará ambos.
El objeto de crítica es la posibilidad de que haya un conocimiento verdadero criticando :
1.-Las afirmaciones metafísicas de la escolástica.
2.- Las teorías científicos naturales.
3.- El afán de sistematizar del pensamiento moderno.
A pesar de que tanto los escépticos como Descartes van contra la escolástica, los escépticos también van contra el pensamiento moderno.
Se repite la necesidad de dar respuestas a los escépticos; el debate era vivo y estaba muy extendido.
También entre Tharsene (maestro de Descartes) y Gassendi existe esta polémica pues ambos luchan contra el escepticismo representando una respuesta distinta a la que da Locke y a la del dogmatismo cartesiano.
Estos autores son importantes por ser un punto medio entre el dogmatismo cartesiano y los empiristas (mismo camino que luego adoptada Kant). Coinciden en admitir parcialmente los argumentos escépticos, pero hay algo indemostrable: no se puede demostrar la existencia del mundo externo. Sostienen que es posible para los seres humanos un cierto conocimiento limitado y seguro; limitado porque es relativo a la apariencia, su objeto sería aquello que se nos aparece. Nuestra relación con el mundo es cognitiva, lo que tenemos es el fenómeno (tesis fenomenista que también está presente en Protágoras aunque de forma distinta). Sin embargo Tharsene y Gassendi no adoptaron una metafísica de la apariencia, no van tan alla lo que implica que solo podemos construir conocimiento a través de los fenómenos siendo un fenómenismo antirealista frente al realismo metafísico de Descartes y el empirismo genealógico de Locke.
Actualmente muchas teorías científicos naturales son antirealistas. Para Moulines las teorías científicos naturales son puros instrumentos; nos servimos de ellas pero no reflejan ni representan cómo es el mundo (para los instrumentalistas extremos no podemos decir que haya conocimiento; el conocimiento es un mito).
Descartes rechaza el escepticismo, incluso el escepticismo mitigado de Tharsene y Gassendi a través de su solución dogmática.
Locke da un concepto de experiencia práctica para liberarse tanto del escepticismo como del dogmatismo apelando a la experiencia práctica. Esta experiencia práctica no es la experiencia vital de Descartes que utiliza para dar cuenta de la relación entre las res cogitans y la res extensa que le llevó a un problema insoluble. La filosofía es analítica, debería ser sintética para poder solucionarlo.
El concepto de experiencia práctica de Locke no es este, porque la experiencia vital, cotidiana e inmediata de la vida a la que apela Descartes está fuera de la filosofía, no tiene que ver con ella. En Locke la experiencia práctica es la columna vertebral, el eje de la filosofía y de todo conocimiento.
Por tanto, la experiencia es el origen, la fuente, del conocimiento. Con ello deshace inmediatamente los argumentos escépticos sobre la existencia de un mundo externo.
En su libro primero señala nadie puede ser tan escéptico como para negar la existencia de mundo externo […] no es serio, porque lo que vemos y sentimos […] que lo demuestran.
Locke toma la experiencia entendida como el cúmulo de información que nos llega a través de los sentidos (no en la vida, ni en las charlas, como eran Descartes) y que están causadas por un mundo externo (argumento contra escepticismo típico del pensamiento inglés empirista y realista del sentido común, directo o ingenuo).
Locke, a pesar de su marcada opinión en contra del escepticismo, abre la brecha precisamente para el escepticismo académico, posición en la que acaba Hume, por su concepción de la sustancia y su difícil relación con ella.
Locke desarrolló muchísimos argumentos contra la definición escolástica y religiosa de sustancia. En estas doctrinas adopta una posición cercana al nominalismo en la que la generalidad y la universalidad no existen en las cosas, son criaturas de nuestro entendimiento para nuestro uso del conocimiento del mundo.
No hay por tanto ni esencias ni sustancias universales. Sin embargo no rechaza la noción de esencia real la cual es algo compartido por los distintos particulares; algunos particulares tienen en común un modo, una esencia real (por ejemplo la triángularidad) sin que ninguno de ellos la comprenda.
Locke también sostiene que hay "algo así como" una sustancia la cual sería aquello que explica y que recoge las propiedades particulares de las cosas. No es una esencia universal, es de otra manera, pero ¿de qué manera?. Ensayo, pag. 252 aglomerado de ideas simples …, lo que une las ideas es la sustancia.
En esta definición de sustancia hay implicados dos elementos :
1.- La sustancia representa cosas del mundo externo pero es sólo lo que mantiene unidas las cualidades (perspectiva nominalista, para nuestro uso).
2.- Pero esta sustancia se refiera cosas del mundo externo.
El problema radica en que si es sólo un nombre para nuestra comodidad, ¿qué objeto del mundo externo es?, ¿cómo es el mundo?, ¿cómo lo ve la mosca o cómo lo vemos nosotros?.
Locke se quedó ahí, no consiguió salir. Hume sale con su constructivismo escéptico. Posteriormente Kant con su constructivismo kantiano: conocemos fenómenos o noúmenos.
En el proceso de conocimiento, el sujeto capta por medio de los sentidos un número determinado de información con la que elabora las ideas (primero simples); esta articulación se repite porque estas ideas van siempre (muchas veces) juntas. A este grupo de ideas lo designamos con un solo nombre porque no se concibe que cada una de ellas persista sin las demás.
La sustancia será el sustrato en el que quedan conectadas un conjunto de ideas simples que nos llegan a la experiencia de una manera unida. Pero no tenemos la idea del sustrato, sino de que ese conjunto de ideas van siempre unidas.
Este sustrato de origen desconocido e incognoscible es la sustancia, donde inhieren las ideas simples.
Sin embargo, este sustrato es necesario; si prescindiéramos de él, no tendríamos conocimiento de objetos sino de cualidades desestructuradas.
Cassirer concluye que aunque Locke ya apuntaba algo que luego dirá Kant. Este sustrato es una condición lógica necesaria para que haya conocimiento. Lo que hará Hume es radicalizar estas cuestiones llegando a un empirismo radical en el sentido de llevar al extremo, a su raíz. Hume acentúa la perceptualización de los conceptos metafísicos.
HUME .-
lo analiza la noción de sustancia desde una posición empirista del conocimiento. hu no admite nada que no proceda de los sentidos. En su teoría del conocimiento hay algunas ideas básicas :
be
x no existen más que percepciones-impresiones en el proceso de conocimiento, de sensibilidad interna o externa.
x las percepciones carecen de fuerza lógica. Esta será una gran diferencia con lo para el que las ideas simples representan el mundo porque aquello que representan las causa. Las percepciones son causa de algo, pero no nos permiten llegar a esta causa. No hay forma lógica de dar el salto de este efecto a su causa.
[Este es el mismo problema que tiene ve{Putnam}: no hay manera de establecer una conexión necesaria entre objeto y signo.]
x la función del lenguaje consiste sólo en dar nombres a las percepciones. El lenguaje hablado es de las percepciones no del mundo, el lenguaje se refiere a funciones mentales, pero no podemos decir que describen el mundo (tesis que recoge el segundo ve{Wittgenstein}, ve{Putnam}).
ee
Conceptos fundamentales en la teoría del conocimiento de ve{Hume}:
be
x las impresiones son los datos inmediatos de la experiencia las cuales se dividen en simples y complejas.
La experiencia tiene una fase inmediata, a través de los datos de los sentidos (impresiones) que son noéticas.
2.- La segunda fase del sentido de la experiencia son las ideas las cuales podemos dividirlas en simples y complejas. Las ideas simples serán las que se correspondan con una impresión simple mientras que las ideas complejas serán aquellos que se correspondan con una impresión compleja.
Las ideas son copias o imágenes atenuada has de las impresiones, son menos vivas. La razón está servicio de la elaboración de la experiencia.
Existe una diferencia entre impresión e idea consistente en el grado de fuerza o de viveza (principio epistemológico de la copia).
El comienzo del Tratado, en la página 87 dice: todas las percepciones de la mente se reducen a…".
¿Con qué se elabora el conocimiento?, Hume dirá que con ideas. Pero el origen de todo conocimiento está en las impresiones. Pero de las impresiones no conocemos su causa (página ciento noventa del tratado).
Por tanto, en Locke el origen de nuestras ideas era el canal de nuestras ideas sensibles. Pero para Hume, a diferencia de Locke, las impresiones no podemos saber si están causadas por algo externo.
3.- Las formas humanas de pensar y de razonar son o relaciones de ideas o cuestiones de hecho siendo ambas tipos de juicios, de razonamientos. La mente construye o bien relaciones ideas o bien cuestiones de hecho. Son elaboraciones mentales efectuadas con las impresiones.
A).- Relaciones de ideas. Son elaboraciones mentales de las ideas que producen un conocimiento necesariamente verdadero. Son tipos de juicios cuya negación implica una contradicción. Estas verdades son descubiertas por percepciones del propio pensamiento, independientemente de si aquello que se afirma tiene correspondencia con el mundo externo, independencia de si hay algo en la naturaleza. Por ejemplo, en las matemáticas es un ejemplo de este tipo de razonamiento; los juicios analíticos serán otro ejemplo de este tipo de relaciones.
Sobre este tipo de conocimiento Hume se muestra oscuro pues no es el que más le interesa. El problema serán las cuestiones de hecho.
B).- Cuestiones de hecho.- Los juicios que pretenden a afirmar algo sobre el mundo, algo que pretende ser conocimiento verdadero de forma independiente a los propios juicios.
17 de enero de 2002.
A partir de la investigación de Descartes buscando un fundamento del conocimiento podemos llegar al escepticismo. Locke introduce una nueva perspectiva respecto a la génesis y construcción del conocimiento pero no llega a sacar todas las conclusiones.
Existen dos tipos de cosas sobre las que podemos pensar :
A).- cuestiones de hecho y
B).- relaciones de ideas que después se llamaran juicios y luego proposiciones.
Hume no distingue entre el juicio y el referente existiendo en él una confusión.
Los escolásticos distinguían entre la aprehensión, representación y síntesis dentro del proceso de conocimiento al pasar de los datos sensibles al juicio, que era donde se recogía el conocimiento.
Hume criticará a los escolásticos prescindiendo de aquella distinción siendo lo mismo las cosas y el juicio que emitimos. La definición de triángulo sería lo mismo que la idea de triángulo. La cuestión de hecho sería por ejemplo el afirmar que "el Sol saldrá mañana" como proposición, el hecho sería que el Sol salga mañana.
Relaciones de ideas : página 47 de la investigación. Se caracterizan por ser necesariamente verdaderas y si se niega al predicado se incurre en una contradicción. Son verdades necesarias y son descubiertas por la mente. Por ejemplo, los juicios de las ciencias demostrativas. Será la verdad formal o demostrativa.
Cuestiones de hecho : en ellas se da una contingencia de su verdad y del propio hecho. Negar el predicados no implica contradicción lógica. Por ejemplo si decimos que el sol no saldrá mañana. El pensamiento por sí solo no puede establecer la verdad de estos juicios sino que se requiere la experiencia sensible, la contrastación empírica.. Intentar encontrar un referente, una noción de verdad como correspondencia. Este conocimiento es el que le interesa a Hume pues es el que tienen los saberes que nos transmiten información sobre el mundo.
Las impresiones (percepciones) son contenidos de la mente que suponemos se refieren a un objeto externo. Serían las ideas adventicias Descartes. Las impresiones NO son objetos del mundo sino un material eidético.
Se trata de averiguar cómo se relacionan entre sí impresiones e ideas para ver cómo se forman otras nuevas que no se corresponden ya con una impresión. Por ejemplo cómo puedo sostener que mañana saldrá el sol pretendiendo que estas cuestiones de hecho son verdad, con una pretensión de verdad absoluta, no probabilística. ¿Cómo puedo justificar la predicción? dado que la ciencia de esa época es teórica-deductiva. Si no pudo explicar la conexión causal no puedo justificar el edificio del conocimiento. Hume intentara dar cuenta de la verdad de los constructos cognitivos sobre el mundo, en concreto, la necesidad de la conexión causal. ¿Es sostenible, verdadera, la predicción?, ¿dependerá la necesidad de la relación entre causa y efecto?. Es la necesidad de construir el conocimiento basado sobre la causalidad. Sobre las cuestiones sobrenaturales no habla por lo que es agnóstico más que ateo dado que de lo que no hay impresión no podemos hablar pues se entra dentro de los límites del conocimiento humano.
Todo anterior tiene que ver con las cuestiones de hecho.
El otro aspecto del problema tiene que ver con la noción de la verdad como correspondencia. ¿Podemos constatar dicha correspondencia?, ¿Existe un mundo externo que causa las impresiones?. Es el problema de la referencia pues se intenta resolver mediante la relación causal, la referencia provocaría la impresión pero ¿es una relación causal?. Putnan critica la noción de causalidad de Hume y negará que haya una conexión necesaria entre ambas.
Hume parte de que tenemos percepciones las cuales la mente las enlaza lo que supone que son impresiones del mundo, que remiten al mundo sin fuerza lógica. Aunque la mente conecta las impresiones pero en un proceso posterior del conocimiento. En el origen, las impresiones están atomizadas, es la mente la que las enlaza. A esas impresiones atomizadas las denomina sustancias rompiendo la tradición ontologista esencialista de la noción de sustancia incluida la cartesiana.
105 del Tratado, parte primera, sección sexta : toda idea de sustancia no es otra cosa que una colección de ideas simples, unidas por la mente.
El pensamiento es un atributo de la sustancia pensante en Descartes.
La sustancia no es más que un conglomerado de impresiones. La idea filosófica de sustancia es el nombre del aglomerado de impresiones construida por la imaginación la cual es una función mental (las otras son la imaginación y el razonamiento). La imaginación hace un recorte en el flujo impresiones que vemos siempre juntas. En este punto Hume sigue a Locke pero sin sus inquietudes acerca de lo que hay por debajo. En Hume no hay nada por debajo. Debajo de la idea de plomo no hay nada pues únicamente es una construcción mental válida para todos los objetos. Al conjunto de conexiones creada por la imaginación de acuerdo con unas leyes psicológicas entendidas de forma mecánica; dichas leyes serán las de constancia y coherencia de un determinado grupo de impresiones.
Se disuelve la concepción ontológica de sustancia. También ocurrirá lo mismo con la con la res cogitans finita. El sujeto de conocimiento, el yo, conciencia, el sujeto no es más que un conjunto impresiones aunadas por la imaginación, siguiendo las leyes de constancia y coherencia. La mente no es más que un escenario vacío donde se representan las impresiones. Con Descartes, el yo es un acto permanente de pensar. En Hume ni siquiera eso, no hay escenario, lo cual no es más que una forma de hablar pues no podemos hablar de otra manera.
Página 401 del Tratado, parte IV, sección sexta donde habla de la identidad personal. La identidad personal es una cuestión de la modernidad que constituye una cuestión moral, una cuestión de la filosofía práctica.
El problema de la identidad es que disuelve un yo que es el responsable moral, jurídico y político. Entonces ¿quién es el responsable del mal?. Para ello hace falta una determinada permanencia. El que mata a otra persona en un tiempo uno tiene que ser el mismo en un tiempo dos. Para que haya responsabilidad tiene que haber constancia pero ¿cómo la demostramos?. El que lo planteó ya fue Hobbes y estará en todos los otros pensadores modernos que intentan prescindir de la noción escolástica de sustancia. Tiene que ver también con el problema de la libertad.
Página 401 del Tratado. La simplicidad e identidad son los rasgos característicos de todo yo. Simple hace referencia a la coordenada sincrónica, al individuo; idéntico hace referencia a la coordenada diacrónica.
Para Hume el yo, la mente, no es nunca ni simple ni idéntica. La comparación del teatro, del escenario, no es más que un modo de hablar, únicamente tenemos percepciones e ideas.
Por tanto no tenemos ni mundo externo, ni yo. Tanto los objetos del mundo externo como el yo son creíbles, pero no demostrables. Por ello se rompe entre lo que estamos obligados a creer y lo que podemos demostrar. La razón nos conmina a demostrar esa creencia pero no podemos. Entonces nos preguntamos ¿qué nos obliga a creer?, ¿por qué mantenemos dicha creencia, que es la creencia?, ¿Cuáles son sus mecanismos?.
Creencia .- Sección quinta de la investigación, parte tercera del Tratado, sección séptima y octava: sobre la creencia.
Opinión o creencia, (ámbito de la doxa) es una idea vivaz relacionada o asociada con una impresión presente encontrando esta definición en el Tratado.
La creencia reside en el modo o manera de concebir ideas (definición de la Investigación), de experimentar o sentir la mente las ideas.
El modo percibir va asociado a un sentimiento que se distingue de las ficciones (creencia en el unicornio). El plomo si es una creencia cognitiva pero el unicornio no.
Creencia aquí es la creencia cognitiva, un modo de conocimiento. A la creencia se le asocia la idea de que existe algo distinto de la ficción.
Por tanto creencia es un modo de asociar. La diferencia entre ficción y creencia únicamente está en el sentimiento que dirigen nuestras acciones. Las creencias serán el principio de nuestras acciones.
Mecanismo de las carencias. Es la costumbre asistida por un sentimiento persuasivo en la uniformidad de naturaleza que se origina en nosotros de forma natural por repetición de experiencias pasadas. Esa repetición hace que pensemos que en el futuro ocurrirá igual.
No es un conocimiento de la naturaleza sino un sentimiento asistido por la memoria, sentimiento que la naturaleza es uniforme y que las cosas volverán a ocurrir igual creando un hábito en nosotros.
Costumbre o hábito son sinónimos sin que tenga nada que ver con el razonamiento. Sólo pretende dar un principio de funcionamiento de la mente, del origen del conocimiento. La inducción no son método lógico sino algo psicológico. El método inductivo sólo se entenderá en sentido lógico en algunos miembros del Círculo de Viena.
Por tanto, la creencia es algo más que una mera idea, es un modo de formar una idea. La creencia no se diferencia de la ficción por la manera en que están dispuestas las ideas sino por el sentimiento que la acompaña; ambas se sienten de forma diferente.
Para formar una creencia es imprescindible partir de una impresión precedente por lo que la existencia de Dios es una ficción, no una creencia.
¿Tenemos conocimiento verdadero del mundo?, ¿tiene el conocimiento verdadero del mundo una estructura hipotético-deductiva?. NO, pues la cadena de inferencias no nos dicen nada sobre el mundo. Es un ejemplo de realismo a pesar de la dificultad de la conexión entre impresión y su referente. Las ciencias demostrativas no nos dicen nada sobre el mundo. El conocimiento parte del del sentimiento de la uniformidad de la naturaleza surgido a partir de las leyes psicológicas. La inducción se entiende como algo psicológico por lo que se le criticará a Hume como psicologista.
Las tres leyes psicológicas de la asociación inductiva serán la semejanza, la contigüidad y la causalidad.
18 de enero de 2002.
Lo novedoso con Hume es definir conocimiento como creencia. Nunca se había pensado así porque el conocimiento siempre debía ir acompañado de una justificación absoluta de la verdad. Pero con Hume ya no hay una verdad absoluta respecto a cuestiones de hecho, únicamente en las ciencias demostrativas existiría ese tipo de verdad. A pesar de ello estamos inclinados a aceptar como verdaderas las cuestiones de hecho aunque no podamos demostrarlas. No es una creencia subjetiva pues son compartidas; es una carencia más allá de lo subjetivo dado que es una creencia pública.
La creencia entendida como conocimiento también se da en los animales, los cuales los adquieren por medio de la creencia comprobando esto en la posibilidad que tienen de ser educados, es decir, de tener una aprendizaje inductivo siendo la única diferencia con los humanos en su menor capacidad.
Hume también distinguía entre los seres humanos pero no por razones ontológicas sino por facultades mayores o menores, más o menos dotados.
El conocimiento como creencia es algo no subjetivo, transcurre en los sujetos empíricos. Todo los elementos que intervienen en el conocimiento (sujetos y objetos) son conexiones funcionales de impresiones que ideas las cuales se explican por medio de leyes psicológicas. No existe sustancia alguna, el yo no es más que un conjunto funcional que actúa agrupando percepciones. Una mente es aquello que al recibir percepciones las agrupa en representaciones y luego toma decisiones en función de dichas representaciones.
Esta concepción funcional del yo enlaza con la teoría de la mente que trata de investigar quién es el sujeto del conocimiento, un cerebro, una caja negra, etcétera. Esta concepción de Hume está presente en la actual teoría de la mente pues hay una parte de lo mental que no es reductible a lo cerebral. Una de las explicaciones se basa precisamente en entender la mente como una conexión funcional entendida como caja negra. Lo importante es la función, la mente es una función sin que exista una concepción esencialista. Dreske llegó a decir que dentro de la mente se hace un "click-clock"; la mente como una caja negra con entradas (inputs) y salidas (outputs) cuyas salidas serían la conducta.
Existe otra corriente neolockiana referida a un sustrato, dado que desde el punto de vista funcional no se puede explicar todo.
Para Hume la mente son conexiones funcionales que remiten a entidades ontológicas sólo creíbles, como por ejemplo la creencia de que existe el plomo. Esto deja abierto el camino hacia el escepticismo.
En la época contemporánea no ocurre esto dado que no se acepta que pueda haber un conocimiento absoluto; el conocimiento es falible aunque riguroso. Pero en aquella época esto significaba dar la razón a los escépticos aunque el propio Hume no lo sea en origen. Pero eso le hace investigar qué clases de escepticismo hay.
El escepticismo .-
La sección 12 de la Investigación la dedica al escepticismo. Aquí se plantea dos cuestiones :
1.- qué significa ser escéptico y
2.- hasta donde es posible ser escéptico, es decir, los límites del escepticismo.
A la segunda cuestión considera que los límites están marcados por las necesidades de la vida práctica y de la acción pero considerando que ambos están también dentro de la filosofía. También Descartes volvía a la vida ordinaria para explicar la relación mente cuerpo aunque en él la vida práctica quedaba fuera de la filosofía. Para los empiristas, el mundo de la vida práctica y de la acción se encuentra también dentro de la filosofía. La filosofía sirve para la vida y para la acción. Su tratado no lo concibe al margen de los temas morales, no divide el mundo en compartimentos estancos.
El escepticismo se soluciona en el ámbito de la filosofía práctica; Kant lo intentará en el campo de la razón teórica.
Hume sería un escéptico académico, es decir, moderado. No es un escéptico pirrónico, gorgiano, extremo, sin límites que afecta tanto a la reflexión filosófica como a las tres afirmaciones. El escepticismo académico afecta únicamente al ámbito de la academia en sentido platónico, es decir, en el ámbito de lo filosófico pero no en el ámbito de la vida en la cual no existe el escepticismo. Es lo que le distingue del escéptico radical, cuáles son los límites de dicho escepticismo.
Existen tres tipos de escepticismo :
1.- Escepticismo previo : página 177. Este escepticismo es previo a todo conocimiento filosófico; es el propio Descartes, el de su duda metódica aunque para Descartes dicha duda llega a ser hiperbólica. Para Hume este escepticismo no desemboca en la certeza, sino que desemboca en el escepticismo aunque con moderación es un buen campo comienzo para la filosofía, pues nos permite criticar los prejuicios y las verdades asumidas. Ello es así porque no hay cogito, pues es insostenible mantener dicha postura y si llegamos a él no podríamos salir de dicho principio, del cogito, pues Hume no acude a Dios, sino que deberíamos salir por medio de nuestras propias facultades las cuales a su vez son puestas de nuevo en duda.
2.- Escepticismo extremo: página 177 siguientes. Dicho escepticismo tiene cuatro fuentes posibles que conducen, en el ámbito de la ciencia, de la investigación. Dichas fuentes serían las siguientes :
Primera.- Los sentidos : Hume recoge aquí los argumentos clásicos del escepticismo pero con matices aceptando que los sentidos nos engañan. Respecto a desconfianza de los sentidos Hume reconoce que estos nos engañan pero, siguiendo a san Agustín, considera que ello es corregible pues basta apelar a la razón o a los otros sentidos para deshacer el engaño.
Segunda.- Problema de saber si la existencia del mundo externo es la causa de las ideas noéticas : Respecto al escepticismo sobre la existencia del mundo externo, de las cuestiones de hecho, no de la relaciones de ideas en donde no hay escepticismo debido a las ciencias demostrativas, el escepticismo en materia de cuestiones de hecho está ligado con el problema de la causalidad.
Tercera.- Existencia de las cualidades primarias : Respecto las cualidades primarias Hume dirá que es cierto que en la práctica se funciona con esta distinción y que sólo las primarias son las importantes pues son las que se pueden objetivar y las que se pueden medir. La secundarias serían relativas a cada sujeto. Pero esta distinción no está justificada según según Hume. Esta distinción la califica de absurda pues no puede concebirse una extensión (propiedad según Descartes) que no sea tangible o visible. El mundo no es nada sin cualidades secundarias, no podemos conocer o concebir un mundo sin cualidades secundarias. El conocimiento lo es de todas las cualidades. Para los racionalistas sólo hay conocimiento si hay abstracción, reconstruyendo hipotéticamente la realidad siendo prescindibles toda las cualidades secundarias.
La explicación del conocimiento es genética. Sólo con las leyes psicológicas no podemos explicarnos cómo llegamos a elaborar las leyes de Newton.
Este escepticismo, basado en dicha distinción entre cualidades primarias secundarias, dirá que no se puede conocer de esta manera el mundo pues dicha distinción carece de todo fundamento. En el origen del conocimiento conocemos ya todas las cualidades. Hasta aquí no cabe escepticismo pues esta fase es la entrada de información.
Cuarta.- Divisibilidad infinita del espacio y el tiempo : Respecto a cómo entender el espacio y el tiempo, la cuestión era si había que entenderlos en sentido físico o como algo abstracto y también si son divisibles infinitamente o no. Luego cabían todas combinaciones anteriores (materia infinitamente divisible y real …). Página 183 y siguientes de la Investigación.
Para Hume ninguna extensión finita puede ser infinitamente divisible. Para los escépticos, el espacio y el tiempo eran extensiones finitas infinitamente divisibles lo cual conduce al absurdo. Ninguna extensión es infinita ateniéndonos a las impresiones pues caben dos posibilidades :1) que se compongan de partes físicas, 2) que se compongan de puntos matemáticos. Lo normal es incurrir en las paradojas de Zenón pues racionalmente puedo dividir algo finito de forma infinita.
Para Hume esto es absurdo pues la materia llega un momento en que se acaba y deja de ser divisible. Al igual que hay un atomismo preceptivo también en la materia ahí un atomismo material que el círculo de Viena le dará la forma de atomismo lógico.
La impresión más básica será la de un punto en el espacio. Lo otro serán los absurdos de la razón. Si espacio y tiempo son puntos matemáticos entonces no son materiales. La extensión, al ser material, no puede entenderse sólo de forma matemática pues entonces tendríamos que aceptar que se forma a partir de no-entidades. El espacio y el tiempo serán extensiones materiales finitas, compuestas por un número finito de elementos. Hume disuelve así las concepciones abstractas. Es una concepción material de espacio y el tiempo.
24 de enero de 2002.
La cuarta fuente del escepticismo es precisamente donde arraigada mejor el escepticismo, es donde Hume da la razón a los escépticos. Son argumentos que se construyen a partir del conocimiento del mundo externo, sobre cuestiones de hecho, pues la verdad de la relaciones entre ideas no se produce por una relación de correspondencia. Pero es en las cuestiones de hecho donde se da este escepticismo pues su ámbito de objeto es precisamente el mundo externo, tanto el físico natural como el social.
Ese conocimiento del mundo y del propio ser humano (dentro del contexto que marcó Descartes) resulta ser una fuente de escepticismo.
Lo propio del conocimiento de cuestiones de hecho es que los razonamientos van desde impresiones presentes en la mente a unas cuestiones que NO están presentes en la mente, lo que hoy llamaríamos explicativo-predictivas. Esta estructura se encuentra basada en la relación de causalidad, en términos de causalidad eficiente, no en la causalidad final. Se va de una causa a efecto y viceversa. Para Hume sólo existe un tipo de causalidad, la eficiente.
Esta causalidad toma pie en cierto instinto del ser humano que da por supuesta la existencia de un mundo externo independiente del propio sujeto. Esta suposición nace de un instinto del ser humano que le hace creer en dicha existencia siendo una predisposición natural. Página 178 de la Investigación, muy importante. Aquí define lo que es el realismo ontológico (existen otros tipos de realismos como el onto-epistémico de Descartes, el realismo ontológico interno de Putnan). Para Hume seguiría existiendo este mundo aunque no existiera ningún ser sensible. Pero esto es asumido de una forma pre-instintiva, pre-teórica.
Hume recoge la versión realista de Locke, el realismo representacional en el que las ideas representan automáticamente su objeto externo.
Están pues dos problemas :
1.- El problema ontológico, es decir, si existe el mundo externo al margen de nosotros mismos y
2.- El problema epistemológico, es decir, cómo sabemos que las entidades noéticas, lingüísticas, se ajustan a dicho mundo externo, a los objetos. Este es el problema central de la actualidad.
Ambos problemas dependen de la noción de causalidad por lo que para Hume el mundo externo existe precisamente porque causa imágenes noéticas en nosotros y a su vez lo representan por dicha causalidad.
Rorty criticará esta noción.
Toda las teorías del conocimiento se estructura de esta manera :
1.- Los objetos causan las imágenes noéticas y luego vamos hacia las predicciones que no están en el presente.
2.- Cuando razonamos, nos preguntamos cómo las impresiones pueden representar los objetos, lo explicamos en función de la causalidad. Todo se monta en función de la causalidad.
Es por ello por lo que Hume quiere investigar dicha relación dado que la causalidad explica :
1.- La existencia del mundo
2.- La existencia de nuestras impresiones.
Las teorías explican lo que es el caso y lo que va a ser el caso en el futuro, aspecto predictivo; noción de verdad como correspondencia. Si se quiebra esta noción de causalidad entonces tiene plena razón escepticismo.
Hume mostrará que el problema surge cuando desde la filosofía se analiza esta cuestión dando la razón al escepticismo.
El salto de la imagen al objeto no hay razón para ello. Las impresiones carecen de fuerza lógica en sentido realista, para llevarnos al referente. La experiencia es que tenemos impresiones pero las causas de dichas impresiones siempre permanecen ocultas, las podemos suponer pero no justificarlas. ¿Cómo podríamos justificar que las impresiones se refieren a los objetos? Acudiendo a la experiencia pero ella no la justifica.
Respuesta de Hume.- Página 180 de la Investigación. Hume es negativo pues no puede la experiencia alcanzar la conexión, la causalidad entre imagen y objeto que la produce. Critica a Descartes por acudir a Dios para justificar el realismo tanto en lo ontológico como el lo epistémico. Dios es una mera creencia no cognoscitivaa sino de la fe.
La fuerza de Hume está en su análisis de la causalidad. El modelo de causalidad sigue siendo el de la causa eficiente para ver si los objetos producen nuestras impresiones. La causa eficiente establece una conexión necesaria entre causa-efecto y viceversa. Hume sostendrá que la conexión necesaria está puesta por el sujeto, luego ni está en lo ontológico ni tiene fuerza epistémica, sino que es fruto del propio sujeto. No podemos conocer que exista una conexión necesaria ni entre nuestras imágenes noéticas y sus objetos ni en los fenómenos naturales.
Esta idea nos surge por un mero hábito de la conjunción constante. El ejemplo más claro lo señala en su obra Compendio del tratado de la naturaleza humana en el que acude al ejemplo de las bolas de billar (páginas 11-12). En el choque de dos bolas encontramos todos los usos de la causalidad tanto de la sensación como de la reflexión. La contigüidad espacio-temporal entre causa y efecto, la prioridad en el tiempo de la causa, y la conjunción constante entre causa y efecto.
Existen pues tres elementos en la relación causal. Los dos primeros surgen de la experiencia pero el tercero es problemático pues es el que se tiene en cuenta para experiencias futuras. Como las ha habido en el pasado, se induce que en el futuro ocurrirá lo mismo, dando lugar a la idea de conexión necesaria. Los sujetos de todos estas investigaciones son los filósofos, no "el vulgo". Se pasa del hábito a la conexión necesaria pues lo único que tenemos son impresiones, es la conjunción constante pasándose de aquí a la idea de que la naturaleza es uniforme.
Para explicar este paso Hume investiga cuál es la génesis de dicho paso, sobre todo en el Tratado, el paso de la conjunción constante a la conjunción necesaria en las páginas 96 siguientes.
La explicación de este paso puede estar :
Primera posibilidad.- En la razón. En aquellos casos de los que no tenemos experiencia vemos que son semejantes a otros que ya conocemos por lo que hacemos una inferencia inductiva suponiendo que las experiencias futuras serán homogéneas con las del pasado por medio de la uniformidad de naturaleza. Hume critica esta forma de inducción dado que no hay argumentos demostrativos del método intuitivo.
El método inductivo debe justificar que la naturaleza no va a cambiar en el futuro, lo cual no es cierto, porque la naturaleza no es uniforme. La inducción se basa en dicha uniformidad de la naturaleza. Hume pondrá otro ejemplo en el mismo sentido de crítica, el ejemplo de los cisnes blancos. La verdad del método intuitivo no es una verdad concluyente. Si la noción de conocimiento es igual a conocimiento verdadero y absoluto este argumento da la razón al escepticismo pues nuestro conocimiento nunca va a ser verdadero en sentido absoluto. Nuestro conocimiento de la naturaleza será mera creencia; sólo existirá el verdadero conocimiento en las ciencias demostrativas. Por todo ello, la vía inductiva no es concluyente, es injustificable el paso de la conjunción habitual a la conjunción necesaria.
Segunda posibilidad.- Razonamiento probable. Podemos considerar que la conexión causal establece un conocimiento altamente probable. Pero esto tampoco sirve porque presupone la relación causal misma que es lo que queremos probar. La probabilidad se apoya en la semejanza entre experiencias pasadas y futuras pero esta hipótesis no puede darse deberse a la probabilidad pues presupone que el curso de naturaleza es constante y lo será en el futuro. Por ello la probabilidad tampoco puede justificar lo que presupone lo que quiere demostrar.
Tercera posibilidad .- Relaciones psicológicas de la mente humana. La mente conoce imponiendo relaciones a las impresiones; es la concepción de la mente como una estructura funcional de reglas. Estas reglas son psicológicas y son las que enlazan las impresiones de una manera determinada. La inferencia depende de la unión de ideas cuando actúa psicológicamente, no racionalmente.
Hume no niega a la noción de causalidad sino que es entendida en términos psicológicos; no es algo ontológico ni depende de leyes lógicas sino que nace de hábitos psicológicos, un funcionamiento de la mente basado en instintos humanos pasando de una impresión presente a una idea. Este puente asociativo se produce en la mente. Del resultado de las asociaciones sólo cabe creencias pero no conocimiento absoluto, no podemos demostrar que será así.
Todo esto es el motivo por lo que el conocimiento de la existencia del mundo externo es fuente de error porque no podemos sostener ninguna verdad absoluta. Esta posición del conocimiento hará que en el campo moral sea importante la tolerancia.
Por todo ello el pirronismo es coherente respecto a todas las cuestiones de hecho. El alcance del pirronismo alcanza a todo, a la res extensa y a la res cogitans pues sobre ninguna cosa podemos tener un conocimiento cierto y seguro.
Hume nos muestra los absurdos de la razón al intentar ir más allá de la propia experiencia. La metafísica dogmática carece de fundamento. Afecta a la ciencia de Newton y a la propia filosofía la cual es una reflexión sobre el hombre y el mundo, construyendo teorías sobre cosas que van más allá de la propia experiencia. La filosofía anterior carece de sentido. La metafísica dogmática va más allá de la experiencia saltandose los límites del conocimiento, que es la experiencia.
Esta será la idea que recogerá Kant. El filósofo no puede ir más allá de la experiencia pues si no construye un dogma, los dogmas metafísicos carecen de evidencia mínima. Por ello el terrorismo es una filosofía correcta, hay que ser escépticos, pero únicamente afecta a la filosofía.
Pero el pirronismo también tiene sus propios límites (página 186, sección 12 de la Investigación). ¿Cómo salimos del pirronismo?. La acción, la ocupación y la vida cotidiana es su refutación. La vida es la salida al escepticismo lo que implica que la filosofía no ofrece la última palabra sobre lo que es el conocimiento. Los seres humanos no son filósofos sino sobre todo son un tipo de seres que viven (321 del Tratado). La filosofía nos conduce al pirronismo pero la vida nos conduce a la creencia. No se pueden demostrar muchas cosas pero sabemos que existen.
El sentido común pone los límites al escepticismo, el cual sólo se puede mantener en el mundo de la academia, en la filosofía. Todo lo que no podemos demostrar funciona sin embargo en el mundo-vida pues funcionamos con esas creencias sin que podamos basar nuestra vida en la razón pues es algo muy débil.
31 de enero del 2002.
Hume no es un escéptico en sentido propio a pesar de que considere que el escepticismo es una filosofía correcta. La parcelación de la filosofía es reciente con la enseñanza; antes siempre ha sido algo práctico.
Para Hume, el escepticismo nos muestra cuales son los límites del conocimiento humano. El ser humano no puede prescindir de la experiencia. La metafísica dogmática es errada pues prescinde de ella. El escepticismo nos muestra qué no podemos conocer y dónde no puede llegar a la filosofía, más allá de los límites de la experiencia.
La filosofía no puede dar más conocimiento que el que proporciona la experiencia y por ello la teología no puede pretender más conocimiento pues su fundamento se encuentra en la fe y no en la experiencia.
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