El perfil adecuado del docente universitario (página 2)
Enviado por Dr. Luis Alberto Navarrete Obando
Marco conceptual
Según el marco teórico descrito en punto precedente, podemos afirmar que gran mayoría de las investigaciones desarrolladas sobre la enseñanza superior se han realizado dentro del paradigma proceso–producto, analizando la conducta, aptitudes y actitudes; un perfil profesional adecuado y campos profesionales -en particular del Docente Universitario-, se manifiestan en función del tipo de conocimiento, destrezas, y actitudes; y que han de poseer ciertas cualidades, que las consideramos válidas, por citar[36]
1) Cognitivas; información básica, habilidad de razonamiento; capacidad de conocimiento.
2) Técnicas; destrezas físicas, manipulativas, esenciales para desarrollar la profesión.
3) Actitudinales; intereses, valores, ética, argumentos, racionalización, acción y resolución de problemas morales.
4) Psicosociales; interacciones humanas e interpersonales; comunicación entre colegas.
5) Socialización; internalización gradual de los valores de la profesión.
6) Destreza de aprendizaje; destrezas para decidir qué se necesita aprender, cómo aprenderlo y cuándo se ha aprendido.
La cognoscitiva, está dada básicamente en la capacidad de conocimiento que debe tener el docente, a efectos que el nivel de pensamiento han de ser promovidos en los alumnos, en la información básica, la habilidad de razonamiento, a efectos que aquél promueva en sus alumnos un nivel de pensamiento, crítico, analítico y dialéctico.
Las técnicas, son las características que debe poseer el docente, como son: destrezas físicas, manipulativas, esenciales para desarrollar la profesión de docente, estar capacitado y dominar la didáctica, como elemento esencial para formar adecuadamente a los nuevos profesionales que han de egresar de las instituciones de educación superior.
Las actitudinales; está constituido por intereses, valores, ética, argumentos, racionalización, acción y resolución de problemas morales. De allí que el docente no solamente debe serlo, sino también parecerlo.
Los psicosociales; están dados por las interacciones humanas e interpersonales, para con los demás que lo rodean y forman parte de su universo, esto es, su centro de labor académica, por citar, la comunicación entre sus colegas, el personal administrativo de quien depende.
La socialización; es la internalización gradual de los valores de la profesión, como docente.
La destreza de aprendizaje; constituye propiamente dicho en la habilidad para decidir qué se necesita aprender, cómo aprenderlo y cuándo se ha aprendido.
El perfil profesional adecuado de un docente, sea universitario o no, viene constituido por una confluencia entre "patrones internos", personales, formas de ser y concebir su profesión; y "patrones externos", sociales, académico que expresan el sentir de la sociedad, respecto qué se espera de él[37]
Los "patrones internos" de un docente, están dados por las cualidades personales, formas de ser y concebir su profesión como parte de su vocación, distinta pero a la vez complementaria a la vocación de la profesión que ejercen y se ha preparado.
Los "patrones externos" de un docente, están dados por factores sociales, académicos, que expresan el sentir de la sociedad, respecto qué se espera de él.
No resulta fácil afirmar que, la formación del Docente Universitario en nuestro país, ¡NO RESULTA SER EL MÁS ADECUADO![38], por lo que resulta necesario tomar como referencia lo que sucede en otros países más desarrollados, así por ejemplo:
1) Académica; asume que lo importante en la enseñanza es la transmisión de información; debiendo agregar además que el docente es consciente que su rol es más de facilitador, pero asumiendo que este nuevo rol es de mayor responsabilidad, que el ser mero transmisor de conocimientos.
2) Práctica; destaca el componente práctico de la enseñanza, artístico, de oficio y del docente como práctico.
3) Tecnológica; esta concepción se centra en que el docente ha de conocer y dominar la destreza de la enseñanza.
4) Personal; deriva de la psicología personalista, asume que prender a enseñar es un proceso construido para comprender, desarrollar y usar eficazmente en sí mismo.
5) Crítica?Social; asume una concepción del como un sujeto crítico con respecto al conocimiento.
Y para culminar, citaremos a Cecilia Rincón Berdugo, quien nos expresa en su trabajo desarrollado para la OIE "El Maestro Investigador y la Dignidad Profesional"[39], quien nos manifiesta que, un Maestro Investigador tiene vocación y compromiso con el saber; es capaz de establecer un diálogo entre los saberes universales y locales, entre los saberes de los estudiantes y los de sí mismo.
El Maestro como sujeto pedagógico. En la actualidad asumir al maestro como sujeto pedagógico significa reconocer en él su condición humana, una condición cargada de simbolismo, de representaciones, de imaginarios que se hacen evidentes gracias al lenguaje y a las diferentes formas de comunicación, que como construcciones de su espíritu y de su acción como sujeto, se vuelven herramientas de conocimiento del mundo y posibilidad de constitución de la diversidad de mundos que se presentan en la escuela.
En este sentido, el maestro como sujeto pedagógico se constituye en relación con una práctica y con un discurso educativo, donde la acción pedagógica es productora de sujetos en un proceso de mediación con otros sujetos. Esta mediación se realiza por medio de una amalgama de significaciones y sentidos que orientan y determinan las acciones y dinamizan las relaciones entre el sujeto maestro, el sujeto estudiante y el mundo.
El maestro como sujeto pedagógico incursiona, entonces, en la dimensión cultural y comunicacional como formas de constitución del mundo escolar. Es decir, el maestro reconoce la fuerza de la subjetivación como elemento fundamental del proceso de humanización que debe realizar la educación y la formación; iniciando así un camino que debe ser recorrido por él como educador y por los estudiantes –niños, niñas y jóvenes- en el que reconocen la posibilidad de recrear y crear diferentes espacios culturales y ser creadores de sí mismos y de nuevas experiencias.
En este contexto, el sujeto pedagógico tiene el deber de explicitar y argumentar la relación que se teje entre el educador, el estudiante y el conocimiento, vínculos que permiten construir las complejas situaciones educativas. Estas situaciones y circunstancias requieren de una pedagogía que haga explícitos los elementos y el orden de las acciones, y que se constituya en una estructura significante que articule los sentidos de los sujetos con los contextos culturales, que inculque una manera particular de ser y estar en el mundo en un tiempo histórico determinado.
En esta perspectiva, el maestro como profesional de la educación se constituye por excelencia en sujeto de experiencia que desarrolla no sólo una acción, sino que en un proceso reflexivo construye sentidos que le permiten entender la acción pedagógica como una acción social para la diversidad y la multiplicidad de formas de aprendizaje.
El maestro, entonces, se sitúa en una relación en la cual el sujeto materializa su experiencia en la vida cotidiana desde tres dimensiones: la cognitiva, que incluye las nociones que permiten al sujeto organizar su experiencia; la práctica, que establece las relaciones con los otros, con la naturaleza y las cosas; y la identitaria, que sitúa al sujeto en una relación de su subjetividad con la subjetividad del otro. Así, el maestro se posiciona como actor, con el poder de modificar su entorno material y social, de insertarse en unas relaciones sociales y transformarlas.
De este modo, la experiencia del maestro otorga a la escuela el sentido de vincular y rodear a los niños, a las niñas y a los jóvenes del ambiente cultural que les permita apropiarse de las herramientas fundamentales para insertarse en los diferentes grupos, enriqueciéndose en la diversidad y en la diferencia; para elegir y recorrer sus diversos caminos y dotar de sentido su relación con el mundo y con los otros.
Con el resultado del trabajo, pretendemos que los responsables de las diferentes Facultades de las Universidades del Perú, tengan los elementos necesarios y suficientes para poder seleccionar al profesional Docente, con un "perfil" adecuado para la Docencia Universitaria, dependiendo de la especialidad y del tiempo de ejercicio en la profesión para asignar al docente la materia lectiva (cursos) de su especialidad y experiencia profesional.
Como resultado de lo anteriormente expuesto, tendremos como resultado:
? Docentes Universitarios con un "Perfil" adecuado, para ejercer el ministerio de la docencia Universitaria.
? Docentes Universitarios con capacidad de investigar.
? Docentes Universitarios con actitudes y aptitudes de aplicar valores, ya sabido, desnaturalizados desde tiempo atrás.
? Docentes Universitarios con actitudes y aptitudes de saber que su rol es la de facilitador y no un mero transmisor de conocimientos.
1) BENZO, Fabián. (2003). "Propuestas sobre perfil de la carrera docente". Profesor MSc de la Facultad de Química de la Universidad de Rusia.. Disponible en: http://www.educa.ue.es.
2) CORTÉS LEAL, Fernando: "Profissão: Profesor: ¿Sábio, anjo ou demónio" (Profesión: Profesor: ¿Sabio, ángel o demonio?). Traducido del Portugués al Español por el Dr. Carlos Xavier Obando Peralta; Diplomático y Secretario General de la Embajada en New York (EE.UU.); Consultor Permanente del Embajador por el Perú ante la "Comisión de la Paz de la ONU" Instituto de Administración Escolar. Portugal. Disponible en http://www.educa.ue.es.
3) Diccionario de la Real Academia Española. 2013. Madrid, España. Ed. Larousse.
4) Diccionario de Ciencias Jurídicas, Políticas y Sociales. Osorio, Manuel. Bs.As. 1986. Ed. HELIASTA S.R.L.
5) NAVARRETE OBANDO, Luis Alberto: "Apuntes de Legislación Universitaria". 2002. Cajamarca, Perú. Ed. Área de Investigación Universitaria de la Universidad Nacional de Cajamarca.
6) NAVARRETE OBANDO, Luis Alberto: "Perfil Profesional del Docente Universitario"; (Ensayo). 2005. Cajamarca, Perú. Ed. Área de Investigaciones de la Universidad Nacional de Cajamarca.
7) Revista Iberoamericano de Educación. Organización de Estados Iberoamericanos Para la Ciencia y la Cultura (OEI): "Hacia un nuevo perfil del docente universitario". Disponible en http://www.campus-oei.org/oeivirt/profdocente.htm.
8) RINCÒN BERDUGO, Cecilia: "El Maestro Investigador y la Dignidad Profesional". 2008. RIE. OIE. Instituto para la Investigación Educativa y el Desarrollo Pedagógico.
9) SANTANDER RODRÍGUEZ, Sahily: "El Desempeño Del Profesor Universitario en los resultados del aprendizaje en Cuba". 2006. La Habana – Cuba.
10) SIERRA BRAVO, R.: "Trabajos de Investigación Científica". Tesis Doctoral. (no se consignan más datos, por falta de ellos)
11) Universidad de Xalapa?México. Facultad de Educación y Ciencias Humanísticas. Área de Investigación en Educación Superior. Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura (OEI). Revista Iberoamericana de Educación. Disponible en http://www.campus-oei.org/oeivirt/profdocente.htm.
I. BIBLIOGRAFÍA COMPLEMENTARIA.
1) BARRIOS BULLING, Tulio: "Competencias Docentes para el Siglo XXI". 2007. Cajamarca, Perú.
2) BERMÚDEZ, Raquel y ÉREZ, Lorenzo Miguel: "Aprendizaje Formativo y Crecimiento Personal". 2004. La Habana, Cuba. Ed. Pueblo y Educación.
3) HILGAR, Ernest: "Teorías del Aprendizaje". 1961. La Habana, Cuba. Ed. Pueblo y Educación.
4) HORROUITINIER, Pedro: "La Universidad cubana: El modelo de formación". 2006. La Habana, Cuba. Ed. Félix Varela.
5) IMBERNÓN, Francisco: "La Formación del Profesorado". 1998. Barcelona, España. Editorial Laia.
6) OECD/UNESCO: "Docentes para la Escuela de Mañana". 2001. Paris, Francia. Ediciones OECD.
7) PEÑA CALVO, José Vicente: "Desarrollo Profesional Del Docente Universitario". 2010. Trujillo, Perú.
8) SÁNCHEZ, Yamilé María y VALDEZ, Luís Mario: "Fundamentos Didácticos de la Nueva Universidad Cubana". 2007. La Habana, Cuba. Ed. Pueblo y Educación.
9) VENEGAS GORDILLO, Luis: "Análisis situacional Del Sistema Universitario Peruano". 2005. Cajamarca, Perú.
II. ENLACES.
1) http://www.ibe.unesco.org.
2) http://www.oecd.org/dataoecd/42/25/1842070.pdf.
3) http://www.oecd/DeSeCo/Rychen.
M A E S T R O
A mi gran amigo y hermano, V:. M:. Dr. Jaime Honorio Durand; con el aprecio más profundo y mi agradecimiento eterno por sus enseñanzas; .
Nunca hubiera creído que el ser Maestro
Comienza cuando se nace, de esencia clara.
Tú me enseñaste con tu sonrisa a ser poeta.
Y a ser estoico,
Con una sola de tus dos lágrimas.
Todo lo olvido.
De veleidades, soy muy humano.
Pero jamás el lienzo donde perfila
Tu dulce rostro.
Y cuando enseño, advierto que estás presente,
Porque deslumbra al niño lo que a mí un día
En el encanto de tu palabra.
Luis Ernesto*
Cajamarca, Ciudad del Cumbe, Cajamarca "La Hermosa"; junio 06 del 2006.
LA E S C U E L A
A mis maestros de toda la vida
Es tarde. Ya se han ido todos y he quedado sola. Me espera un largo fin de semana. Hace frío, llueve y es posible que me ponga melancólica. Pero esta noche, cuando las sombras han invadido cada sector de mi estructura, cuando ha quedado flotando en el aire el eco de las conversaciones y los gritos de una semana intensa, quiero bajar al corazón de mi misma, para recorrerme y revisar mi pasado y mi presente.
Pienso en mis orígenes, en la construcción que me permitió convertirme en una entidad real, en una presencia familiar en la comunidad. No voy a entrar en los detalles de los planos, los movimientos de tierra, la acumulación de materiales, el laborioso trabajo de los constructores y los obreros. Fue un estreno glorioso encontrarme con las paredes nuevas, los pisos brillosos, los techos seguros, los fundamentos sólidos, las aberturas aceitadas, el mobiliario reluciente…
Me resulta difícil ver en las paredes de hoy los muros de entonces: estas paredes descascaradas, manchadas, escritas, mil veces pintadas -son todavía sólidas pero necesitan cada vez más de cimientos confiables. Es cierto que en algunos sectores- comprobados ciertos riesgos hubo que rellenar grietas, agregar columnas, construir encadenados… pero en el corazón de la tierra, en un fondo oscuro y húmedo, resiste el corazón del hierro y el cemento. Las paredes protectoras no pueden arreglarse por sí mismas; no lo pudieron nunca… y menos en estos tiempos de movimientos frecuentes.
Levanto la vista. Allá está el techo: nadie discute su necesidad, porque es realmente lo que protege y cubre. Pero nada es para siempre, y es el que más ha sufrido cambios y transformaciones: no pudo aguantar tantas modificaciones producidas. ¿A cuántos especialistas tuvieron que llamar a lo largo de todos estos años para resolver su estado crítico?
Cuando aparecí en el horizonte de la ciudad era una de las construcciones más sólidas y mi fortaleza se imponía en un paisaje de casas bajas y de construcciones sencillas. A mí alrededor el escenario fue cambiando y las casitas de entonces se transformaron en las suntuosas casas de hoy, los terrenos baldíos se convirtieron en imponentes edificios de departamentos y la tranquilidad de las calles, en el infierno de la gran ciudad.
Ustedes pensarán que estoy hablando de las cosas materiales. En parte sí, en parte no. Una escuela es mucho más que una construcción. Es una de esos significantes que remiten a un significado material y a "otra cosa". La casa es la casa, el estadio es el estadio, el banco es el banco, la cárcel es la cárcel, pero la Escuela, es algo más: "la escuela festeja años", "la escuela está en crisis", "la escuela se está renovando".
Todas estas frases reflejan mucho más que lo material. Cuando me observo a mi misma y miro los pisos, los techos, ¿Sucede lo mismo con las Iglesias, los Tribunales, las Empresas? ¿Los lugares remiten a realidades que los contienen y los desbordan? ¿Sus usuarios utilizan la denominación para designar de manera indistinta a lo material y a lo institucional?
Los cimientos, las paredes y los techos, estoy pensando además en otras cosas; en quienes diariamente me habitan, en los que comprometen por años su existencia y su labor profesional, en los educandos a quienes acompaño en sus crecimientos. Y pienso también en los quehaceres, que imaginariamente ubico en mi estructura: allá en el techo, los conocimientos; aquí, en mis paredes, los contenidos procedimentales; y abajo, en los cimientos, las actitudes y los valores.
Soy la escuela. La escuela de hoy y de siempre. La escuela material que refleja la otra escuela. Una estructura exterior que permite reconocer los secretos de mi cara oculta. La noche se ha tornado más fría. Tengo ganas de volver al interior de mí misma. Recorro los rincones de este cuerpo, y veo en las aulas, en los patios, en las amplias galerías, en los huecos de las ventanas, las historias más dispares. Las de ayer, las de hoy, las de siempre. ¡Cuántos esfuerzos para llevar adelante lo imposible! ¡Qué mezquinas y lejanas las recompensas! Casi no duermo, pero ciertas noches me sobresaltan algunos sueños. Hoy es una de esas noches.
Mis pesadillas son terribles y curiosas. Me veo a mi misma como una construcción y tengo miedo de proyectar allí lo que me sucede como institución de la sociedad. Contemplo una película de escenas fugaces y sucesivas, con implacables saltos en el tiempo, y observo un proceso paulatino y devastador sobre la escuela: un deterioro progresivo, implacable, inhumano. De pronto veo que se caen los techos a pedazos, un viento huracanado arrebata las chapas, se agrietan las lozas, una lluvia intensa perfora los cielorrasos. En medio del sueño, levanto mi mirada temerosa y veo un cielo impecable, lejano, perfecto y una escuela totalmente desprotegida. El sueño va y viene: primero aparecen, silenciosas, algunas grietas, pequeñas fisuras, y luego van cayendo los históricos ladrillos en un caos destructivo.
Sobreviene una furiosa implosión o el juego de topadoras alocadas destruyendo todos los muros. Al final algo -terremoto seguramente- remueve, con sonido de película, los cimientos y deja al desnudo los grandes abismos. Parece curioso, pero nada hace prever el desenlace: los controles en orden, las planillas correctas, los registros perfectos, y hasta las previsiones de los constructores que en sus diseños me habían.
Los conocimientos (como el techo) son el paraguas protector y la razón de ser de la escuela, pero tienen una difícil tarea: proteger (hacia abajo) y afrontar (hacia arriba) todas las inclemencias del tiempo; no le podemos pedir una fortaleza y una eternidad para la que no fueron preparados; Los contenidos procedimentales exhiben una consistencia que se afianza con los años y sobre su estructura – sólida o endeble – descansa el techo. A veces se desdibujan y parecen ocultarse, como si no existieran; pero las paredes que cumplen la función de delimitar y contener, también deben brindar protección, sino, ¿qué sería de la escuela? En los cimientos moran los contenidos actitudinales: es lo que originalmente me dio origen deberían seguir allí -en la oscuridad y el silencio- dando consistencia al resto.
¿Cómo comprobarlo en el fragor de la lucha diaria y del bombardeo de problemas? Sin su acerada presencia es fácil que la pared se agriete y que los techos se desplomen. Sobran experiencias al respecto. Los hábitos y las actitudes están allí abriendo las puertas, marcando el camino, tramando las condiciones de posibilidad de todo, porque sin ellas no hay forma de construir. Esa ha sido la razón de ser de mi histórica presencia. Los hierros firmes y eternos que encadenan mi estructura en las bases, se proyectan en forma de columnas en las paredes y terminan en las vigas del techo. Hay una red (oculta) que me recorre y enlaza todo… pero yo no podría sostenerme sin los cimientos. Las actitudes claramente definidas y consolidadas se proyectan en contenidos procedimentales y se cierran en la apertura hacia los siempre dinámicos contenidos conceptuales.
El universo de los valores recorre y sostiene desde la base; los muros del saber hacer (y transferir) otorgan las estructuras, y la vastedad del conocimiento (cambiante pero sistemático, variado pero organizado, expansivo pero nucleado en torno a grandes ejes, alternante pero capaz de soportar cualquier crítica) permite constituirme definitivamente en escuela.
Entonces, despierto enloquecida, me levanto de mi letargo y voy apresurada a mirarme: toco las paredes, observo la quietud y la firmeza del piso, la aparente seguridad del techo, y respiro tranquila. Todo ha sido un sueño. Pero el sobresalto llega siempre a la mañana siguiente. Recorro la estructura material, acerco mis oídos al imperceptible murmullo de los rincones, y observo que hay otra escuela, un espejo en el que necesariamente me reflejo, otra realidad en la que yo misma estoy padeciendo mi demolición.
El proceso destructivo sigue los mismos pasos: primero me roban los conocimientos: los cambios tormentosos van desnaturalizando su presencia y terminan por hacerlos volar; las sustituciones son pasajeras e inservibles: un techo lejano e infinito se alza sobre la escuela, definitivamente desprotegida.
Luego van perdiendo valor los contenidos procedimentales, los van carcomiendo la repetición y el aburrimiento y los desploman la inutilidad y la falta de imaginación. Finalmente se produce el perjuicio mayor: se deshacen las actitudes y los valores. Un estadillo y miles de acciones me van quitando lo poco que me queda, la única, definitiva posibilidad de reiniciar el proceso de re-construcción. Y como escuela, siento que quedo vacía.
Y una escuela vacía, hueca, vieja, fría no tiene ningún atractivo. A menos que me vuelvan obligatoria, me disfracen de superficiales intereses o me sostengan con otras intenciones, manifiestas u ocultas Tal vez solamente se trate de un sueño, de una pesadilla de fin de semana o de noche de lluvia.
¡Ayúdenme a despertar por favor, ayúdenme a conocer la realidad o regálenme otro sueño: la posibilidad de llegar a ser la que era, y para siempre!
No. No estoy soñando. Una escuela nunca duerme. Hay sobresaltos y sufrimientos que uno quisiera que no fueran reales, pero a Ustedes no puedo engañarlos. Creo que mis estructuras se han ido debilitando y que muchos se han aprovechado de mi fragilidad.
Pero soplan vientos de conciencia crítica y de entusiasmos renovados, se deja oír el murmullo de un mundo que se va y de una civilización que nace, florecen caminos abiertos y nuevos heroísmos urdidos en la trama de esfuerzos cotidianos. Siento que la presencia de tantos educadores preocupados por mis padecimientos es mi mejor remedio. Y que la esperanza se instala en cada uno de ustedes para recrearme para siempre.
Luis Ernesto*
Cajamarca, Ciudad del Cumbe, Cajamarca la Hermosa,
Días de calor y frío; y de mucha alegría y jolgorio matinal; agosto del 2007.
DATOS DEL AUTOR.
* Seudónimo del Dr. Luis Alberto Navarrete Obando; Abogado de profesión; Teólogo; Ex Docente Universitario de la Universidad Nacional de Cajamarca, de la Universidad Privada Antonio Guillermo Urrelo; y, Docente Universitario Investigador; Ex Seminarista de la Orden Dominicana (Seminario de Santo Toribio Mogrovejo, Lima – Perú); Ex Asesor del Congreso de la República; Ex trabajador Público (Seguro Social del Perú, Trujillo y Cajamarca; Municipalidad Provincial de Cajamarca); Condecorado por la Municipalidad Provincial de Cajamarca, como "Hijo Predilecto de Cajamarca", con entrega de llaves de la ciudad; Magister en Educación Superior e Investigación Universitaria, por la Universidad Nacional de Trujillo; Doctor en "Teología, Filosofía y Humanidades", por la Universidad de La Salle, Barcelona – España; Doctor en "Educación Universitaria", por la Universidad de Sao Paulo – Brasil; Doctor en "Investigación Universitaria", por la Universidad de La Habana – Cuba; con estudios (inconclusos; cursé el Primer año) sobre el Doctorado en "Derecho", en la Universidad de Milano, Milán – Italia; Becado para estudiar un Doctorado sobre "Ciencias Políticas" en la Universidad de Harvard, Cambridge, Massachusetts – EE.UU. Ex Docente Principal de Escuela de Post Grado de la Universidad Nacional de Trujillo (La Libertad – Perú); Condecorado como "Doctor Honoris Causa" por la Universidad Nacional de Trujillo (La Libertad-Perú); Docente Invitado de la Universidad Nacional Autónoma de México U.N.A.M. – D.F. – México; Condecorado como "Doctor Honoris Causa" por la Universidad Nacional Autónoma de México, D.F. México; Docente Honorífico de la Universidad de La Habana – Cuba, Condecorado por el Presidente Fidel Castro como "Hijo de Cuba", nacionalizado cubano; Docente Invitado de la Universidad de los Ángeles – EE.UU.; Conferencista internacional. Consultor Permanente de la UNESCO, "ad honorem" en temas de Educación, Cultura y Desarrollo Social para América y el Caribe, condecorado como "Gran Maestro". colaborador en la elaboración del "Diccionario Histórico Jurídico" de la Suprema Corte de Justicia de la Nación de México y en el "Anuario de la Suprema Corte de Justicia de la Nación" de dicho país; Miembro Numerario de la "Sociedad Latinoamericana Iusfilosófica"; Miembro Numerario de la "Sociedad Peruana de Leyes"; Declarado como autor de la materia jurídica "Epistemología de las Ciencias Jurídicas", por la Universidad de Milano, Milán, Italia; incorporado como "Honorarium Member" por la "Federal Association of Lawyers of Los Angeles (EE.UU). Ex "Asesor Presidencial" de la Candidata Sra. Hillary Clinton a la Presidencia de los Estados Unidos, en temas sociales y económicos de América Latina y El Caribe, además de la problemática de los residentes ilegales latinos en los EE.UU., propuesto por el Sr. Bill Gates (Microsoft), quien financia la FUNDACIÓN: "FUNDEBIF" (FUNDACIÓN PARA EL DESARROLLO Y BIENESTAR FAMILIAR). Recientemente incorporado a la "Società Internazionale di Teologi e Filosofi Cattolici", lo que me da el título de "Teólogo", con el grado de Doctor. Escritor, Ensayista y Poeta. Publicación de Libros especializados en materia de Derecho; publicación de Libros de naturaleza social y Poemarios. Ganador del premio "El Poeta más Joven del Perú; (Lima – Perú); Ganador de los XII Juegos Florales Universitarios del Perú (Lima – Perú); Ganador de los XXI Juegos Florales Universitarios del Perú (Lima – Perú); y, Ganador de los I Juegos Florales Universitarios Latinoamericanos (Stgo. de Chile – Chile); En proceso de traducción y Edición (talleres) el Ensayo (Narrativa): "La Revolución Campesina del Valle Chicama", (Trujillo, La Libertad – Perú), se encuentran en la División Internacional de Investigaciones y Trabajos Teológicos del Estado Ciudad del Vaticano (Santa Sede), que será editado y publicado en 5 idiomas (Español, Inglés, Francés, Italiano y Alemán), por autorización del Santo Papa Francisco I; y, cuarenta (40) Libros de naturaleza teológica, que se encuentran, también, en la División Internacional de Investigaciones y Trabajos Teológicos del Estado Ciudad del Vaticano (Santa Sede), para su edición y publicación en 7 idiomas (Español, Inglés, Francés, Italiano, Portugués, Árabe e Hindi).
Nota.- El autor del presente trabajo es Columnista periodístico: "Derecho&Sociedad", de los Diarios "La República", http://www.larepublica.com.pe; "El Comercio", http://www.elcomercio.com.pe; Diario Oficial "El Peruano", http://www.elperuano.com.pe; Diario Oficial de Cajamarca, "Panorama Cajamarquino", de circulación Regional (Cajamarca), http://[email protected].
® Derechos reservados de Autor, registrado en INDECOPI; "Derecho&Sociedad", Código de marca registrada LANO-CPP-1420-P.
A mi esposa Mary Fca. Araujo de Navarrete y a mi hijo Luis Ernesto Navarrete Araujo; en cuyas sonrisas se inspiró Dios para crear la vida;
Autor:
Dr. Luis Alberto Navarrete Obando
ABOGADO – EX DOCENTE UNIVERSITARIO
DOCENTE UNIVERSITARIO INVESTIGADOR
ESCRITOR – ENSAYISTA Y POETA
Cajamarca – Perú
Mayo del 2016
[1] NAVARRETE OBANDO, Luis Alberto: ?Perfil Profesional del Docente Universitario?. 2005. Cajamarca?Per?. Ensayo. pp. 102. Ed. ?rea de Investigaciones de la Universidad Nacional de Cajamarca. Disponible en http://www.rie[arroba]oei.uh.cu.; y, www.monograf?as.com.es.
[2] Diccionario de la Real Academia Espa?ola. 2013. Madrid, Espa?a. Ed. Larousse.
[3] NAVARRETE OBANDO, Luis Alberto: Ob. Cit. P?g. 102.
[4] NAVARRETE OBANDO, Luis Alberto: Ob. Cit. P?g. iv. (Pr?logo Dr. Jaime Honorio Durand).
[5] REVISTA IBEROAMERICANO DE EDUCACI?N. ORGANIZACI?N DE ESTADOS IBEROAMERICANOS PARA LA CIENCIA Y LA CULTURA (OEI): ?Hacia un nuevo perfil del docente universitario?. P?g. 01. Disponible en: http://www.campus-oei.org/profdocente.htm.
[6] NAVARRETE OBANDO, Luis Alberto: Ob. Cit. P?g. 56.
[7] NAVARRETE OBANDO, Luis Alberto: Ob. Cit. P?g. 115.
[8] NAVARRETE OBANDO, Luis Alberto: Ob. Cit. P?g. 120.
[9] NAVARRETE OBANDO, Luis Alberto: Ob. Cit. P?g. 102.
[10] NAVARRETE OBANDO, Luis Alberto: Ob. Cit. P?g. 96.
[11] SANTANDER RODR?GUEZ, Sahily: ?El Desempe?o Del Profesor Universitario en los resultados del aprendizaje en Cuba?. 2006. La Habana ? Cuba.
[12] NAVARRETE OBANDO, Luis Alberto: Ob. Cit. P?g. 123.
[13] Diccionario de la Real Academia Espa?ola: Ob. Cit.
[14] Diccionario de la Real Academia Espa?ola. Ob. Cit.
[15] OSORIO, Manuel: ?Diccionario de Ciencias Jur?dicas, Pol?ticas y Sociales?. Bs.As. 1986. Ed. HELIASTA S.R.L. P?g. 797.
[16] Diccionario de la Real Academia Espa?ola. Ob. Cit.
[17] NAVARRETE OBANDO, Luis Alberto: Ob. Cit. P?g. 175.
[18] BENZO, Fabi?n: ?Propuestas sobre perfil de la Docente?. 2003. Madrid, Espa?a. P?g. 03. Disponible en http://www.educa.ue.es.
[19] BENZO, Fabi?n. Ob. Cit. P?g. 13.
[20] BENZO, Fabi?n. Ob. Cit. P?g. 98
[21] NAVARRETE OBANDO, Luis Alberto: ?Apuntes de Legislaci?n Universitaria?. 2002. Cajamarca, Per?. Ed. ?rea de Investigaci?n Universitaria de la Universidad Nacional de Cajamarca. P?g. 96.
[22] SIERRA BRAVO, R.: ?Trabajos de Investigaci?n Cient?fica?. Tesis Doctoral. pp. 31 y 32. (se desconocen m?s datos).
[23] BERRIO B., V.: ?La Nueva Ley Universitaria, Modificatorias y Anexos?. 2003. Lima, Per?. Ed. BERRIO. P?g. 5.
[24] Nueva Ley Universitaria N? 30220 del 03.07.2014.
[25] BERNALES BALLESTEROS, Enrique: ?La Constituci?n Pol?tica de 1993: An?lisis comparado?. Lima. 2002. Ed. RAO E.I.R.L. P?g. 233.
[26] BERNALES BALLESTEROS, Enrique: Ob. Cit. P?g. 233.
[27] BERNALES BALLESTEROS, Enrique: Ob. Cit. P?g. 234.
[28] BERNALES BALLESTEROS, Enrique: ?Legislaci?n y Universidad en el Per??. 1994. Lima, Per?. Ed. Universidad Peruana Cayetano Heredia. P?g. 82.
[29] Universidad de Xalapa?M?xico. Facultad de Educaci?n y Ciencias Human?sticas. ?rea de Investigaci?n en Educaci?n Superior. Organizaci?n de Estados Iberoamericanos de Educaci?n (OEI): ?La ciencia y la Cultura?. Disponible en http://www.campus-oei.org/profdocente.htm.
[30] NAVARRETE OBANDO, Luis Alberto: ?Apuntes de Legislaci?n Universitaria?. Ob. Cit. P?g. 196.
[31] NAVARRETE OBANDO, Luis Alberto: ?Perfil Profesional del Docente Universitario?. Ob. Cit. P?g. 78.
[32] NAVARRETE OBANDO, Luis Alberto: Ob. Cit. P?g. 82.
[33] NAVARRETE OBANDO, Luis Alberto: Ob. Cit. P?g. 78.
[34] NAVARRETE OBANDO, Luis Alberto: Ob. Cit. P?g. 89.
[35] CORT?S LEAL, Fernando: ?Profiss?o: Profesor: ?S?bio, anjo ou dem?nio? (Profesi?n: Profesor: ?Sabio, ?ngel o demonio?). P?g. 02. Disponible en: http://www.educa.ue.es.
[36] NAVARRETE OBANDO, Luis Alberto. Ob. Cit. pp. 135.
[37] NAVARRETE OBANDO, Luis Alberto. Ob. Cit. P?g. 93.
[38] NAVARRETE OBANDO, Luis Alberto. Ob. Cit. P?g. 103.
[39] RINC?N BERDUGO, Cecilia: ?El Maestro Investigador y la Dignidad Profesional?. 2008. RIE. OIE. Instituto para la Investigaci?n Educativa y el Desarrollo Pedag?gico.
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