- Fines y políticas educativas
- Estructura del sistema educativo
- El currículo nacional básico
- Formación y situación del personal docente
- El sistema administrativo educativo
- Financiación de la educación
- La educación superior
- Situación real de la educación nacional
- Conclusiones
- Bibliografía
Fines y políticas educativas
La Organización de Estados Iberoamericanos (OEI), señala que (1):"El sistema educativo hondureño está orientado por una serie de principios establecidos en la Constitución de la República y que determinan su organización y funcionamiento, principalmente en el capítulo VIII denominado «de la educación y cultura» En su artículo 151 enuncia: «La educación es función esencial del Estado para la conservación, el fomento y difusión de la cultura, la cual deberá proyectar sus beneficios a la sociedad sin discriminación de ningu -na naturaleza; el Estado tiene la obligación de desar- rollar la educación básica del pueblo, creando al efec to organismos administrativos y técnicos necesarios dependientes directamente de la Secretaría de Esta – do en el Despacho de Educación Pública (Secretaria de Educación)".
Misión y visión de la Secretaria de Educación Publica de Honduras. Fuente: (I)
La educación en la república de Honduras es un derecho que es reconocido en la Constitución de Honduras de 1982, emitido mediante Decreto No. 131 de la Asamblea Nacional Constituyente y publicado en el Diario oficial La Gaceta (Honduras). En el Capítulo VII sobre la Educación, establece las bases de cómo debe imple-mentarse la educación en la nación. La educación es función esencial del Estado para la conservación, el fomento y difusión de la cultura, la cual deberá proyectar sus beneficios a la sociedad sin discriminación de ninguna naturaleza. La educación nacional será laica y se funda – mentará en los principios esenciales de la democracia, inculcará y fomentará en los educandos profundos sentimientos hondureñistas y deberá vincularse directamente con el proceso de desarrollo económico y social del país. El Estado tiene la obligación de desarrollar la educación básica del pueblo, creando al efecto los organis- mos administrativos y técnicos necesarios dependientes directamente de la Secretaria de Estado en el Despacho de Educación Publica. La erradicación del analfabetismo es tarea primordial del Estado. Es deber de todos los hondureños cooperar para el logro de este fin. El Estado reconoce y protege la libertad de aprendizaje, investígación y de cátedra (2).
El estado se hace cargo de la educación pública, la cual constitucionalmente recalca que debe ser laica, gratuita y por ende obligatoria, para todos los habitantes; a cuyo caso de administrarla en 1889 se creó el Ministerio de Educación Pública adscrito al Poder Ejecutivo y con sede en la ciudad capital de Tegucigalpa, M.D.C. y con despachos en cada uno de los dieciocho departamentos de Honduras.
Previamente con la reforma educativa de 1957 del presidente Doctor Ramón Villeda Morales, se creó un nuevo sistema educacional y construcción de nuevos centros escolares y más tarde el 14 de noviembre de 1966 se emitió una Ley Orgánica de Educación, mediante Decreto No. 79 del Congreso Nacional de Honduras, la cual está en vigencia hasta hoy, aunque con algunas reformas. Cabe mencionar que al emitirse dicha ley Honduras estaba administrada por una Junta Militar de Gobierno (2).
Son fines de la educación hondureña, entre otros (2):
– Formar ciudadanos conscientes de sus deberes y derechos; responsables y respetuosos.
– Contribuir al desenvolvimiento de la personalidad humana.
– Estimular el desarrollo de los sentimientos de solidaridad y comprensión entre las naciones.
– Contribuir a la conservación de la salud, a la formación y elevación espiritual del hombre y de la sociedad.
La función educativa se desarrolla conforme al marco legal o políticas educativas siguientes (1):
– La Ley Orgánica de Educación. Regula la educación en los niveles preescolar, primario, medio y magisterial, el reglamento general de educación media y el de educación primaria. Esta ley contempla los fines y principios fundamentales del sistema educativo y describe las regulaciones de sus diferentes niveles. Opera como legislación matriz de la estructuración y funcionamiento del sistema educativo nacional.
– La Ley del Escalafón del Magisterio. Garantiza la estabilidad de los maestros en servicio y determina
los requisitos para su ingreso y ascenso en la carrera docente, la clasificación de los maestros, traslados, disposiciones disciplinarias y la escala de sus sueldos.
– Ley de Jubilaciones y Pensiones del Magisterio Nacional. Está representado por el Instituto de Previsión del Magisterio, IMPREMA, considerando necesaria y conveniente la creación de un sistema de jubilaciones y pensiones que garantice un retiro justo y digno al personal que imparte, dirige, supervisa, administra y orienta la educación y la enseñanza sistematizada en todos los niveles del sistema educativo, así como quien colabora directamente en tales funciones con sujeción a normas pedagógicas.
– La Ley Orgánica del Colegio de Profesores de Educación Media de Honduras(COPEMH). Es una institución de carácter profesional y con personalidad jurídica y patrimonio pro- pio, se rige por la ley de colegiación profesional obligatoria; su domicilio es la capital de la República.
–El Estatuto del Docente y su Reglamento. Son instrumentos legales, técnicos y administrativos cuyo propósito fundamental es dignificar el ejercicio del magisterio, garantizar al docente un nivel de vida acorde con su profesión y asegurarle al pueblo hondureño una educación de alta calidad.
Protesta del pueblo hondureño en contra de la privatización de la educación pública, en Tegucigalpa. Fuente: (I).
No obstante todo lo anterior, hoy en día existen fuertes pretensiones y acciones por parte del gobier no de turno y la empresa privada para privatizar la educación pública en todos sus niveles, situación que ha sido repelida por los sectores de resistencia popular nacional, específicamente por los docen -tes, sindicatos y el sector poblacional afectado.
Estructura del sistema educativo
Según La Ley Orgánica de Educación de Honduras (1), la educación nacional está organizada o estruc turada como un proceso integral y correlacionado en todos sus niveles. El sistema educativo nacional comprende dos aspectos fundamentales:
– La educación escolar, que se impartirá en los establecimientos de enseñanza propiamente dichos.
– La educación extraescolar, que se impartirá por medio de bibliotecas, museos, teatros y otros medi- os de difusión y formación cultural.
Así mismo, la educación escolar se adaptará al desarrollo psico-bio-social de los educando, y com- prenderá los siguientes niveles:
– Educación pre-escolar
– Educación primaria
– Educación media
– Educación magisterial.
Estructura del sistema educativo de Honduras. Fuente: (I)
A groso modo, el sistema educativo hondureño está estructurado en cuatro niveles: educación pre-básica, básica o primaria, media o secundaria y educación superior. Cada uno de ellos esta regi do por el Ministerio de Educación Pública, exceptuando el superior, el cual está regido por la Universi dad Nacional Autónoma de Honduras, UNAH; además, el sistema está respaldado por una red solida -ria conformada por cuatro importantes programas educativos: PROHECO, Educación Prebásica, EDU -CATODOS y PRALEBAH (2).
– La Educación pre-básica. Llamada también educación pre-escolar o conjuntamente nursery y kindergarten. Pretende estimular al niño en la formación de hábitos, adquisición de conocimientos y desarrollo de habilidades que favorezcan su desarrollo integral; sienta las bases de una incorporación positiva del niño a la sociedad, a partir de la satisfacción de sus necesidades e intereses.
Este tipo de educación la recibe el niño en las escuelas de párvulos y jardines de infancia con el objetivo de guiar sus primeras experiencias, estimular el desarrollo de su personalidad y facilitar su integración al medio (Cap. I,
Art.19) (2). Este tipo de educación se imparte en establecimientos públicos y privados.
Párvulos en el aula de un centro de Educación pre-básica. Fuente (II).
– La Educación básica. Conocida también como educación escolar o escuela. Tiene por objeto
ofrecer los instrumentos y contenidos básicos de cultura, y el desarrollo integral de la persona li dad (Cap. II, Art. 21). La educación básica está conformada por 3 ciclos, y cada ciclo por 3 años de estudio, así: primer ciclo (primero, segundo y tercer grado de primaria); segundo ciclo (cuarto, quinto y sexto grado de primaria); y tercer ciclo ( primero, segundo y tercer año de educación secundaria).
Niños en el aula de un Centro de Educación Básica. Fuente (III).
– La Educación media. Es la que se imparte en los colegios o institutos de educación media. Atiende la formación integral de los adolescentes, continúa el proceso formativo de la educación básica, capacita para el ejercicio de determinadas profesiones y oficios que requiere el desarrollo económico y social del país, y prepara para seguir los estudios del nivel superior (Cap. III, Art.27).
La educación media se imparte en el ciclo diversificado para continuar la orientación, intensificar sus estudios y dar formación profesional en diferentes campos de trabajo (Cap. III, Art.28). El egresado del nivel medio adquiere los conocimientos y el desarrollo de habilidades y destrezas en un campo específico de estudios que le permiten incorporarse en el mercado laboral y participar activamente en el desarrollo del país (2).
Adolescentes en el aula de un instituto de educación media. Fuente (IV).
– La Educación superior. Muy conocida como educación universitaria, la que representa la más alta aspiración del ciudadano hondureño; por medio de ella se contribuye a la formación científica, huma nística y tecnológica, a la difusión general de la cultura y al estudio de los problemas nacionales. Este tipo de educación es rectorado por la Universidad Nacional de Honduras (UNAH)
.
Jóvenes en el campus de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras. Fuente (V).
En este nivel se imparte la educación tecnológica que forma profesionales competentes para desempeñarse en los campos técnicos y tecnológicos, destinados a satisfacer necesidades del sector productivo; prioriza la formación académica e investigativa, y promueve la sistematización del conocimiento universal y del trabajo académico por áreas disciplinarias. Incluye los estudios de grado y postgrado orientados a formar profesionales capaces de difundir y producir ciencia, tecnología y cultura en la creación y aplicación de conocimientos en función de las demandas y expectativas del país (2).
El currículo nacional básico
El Currículo Nacional Básico (CNB) es el instrumento normativo que establece las capacidades, competencias, conceptos, destrezas, habilidades y actitudes que debe lograr todo sujeto del Sistema Educativo Nacional en los niveles, ciclos y/o modalidades que rectora la Secretaría de Educación. Este currículo se divide en tres secciones, una sección para cada uno de los tres ciclos que componen a la educación básica del país: CNB del primer ciclo; CNB del segundo ciclo; y CNB del tercer ciclo (3).
El CNB es un documento que representa el producto de las atenciones puestas por la Secretaría de Educación a las exigencias y decisiones de la Sociedad hondureña planteadas en el seno del Foro Nacional de Convergencia (FONAC), para el logro del anhelo de las familias por asegurar una
Educación con Calidad para sus hijos e hijas (4). El documento contiene la descripción detallada de lo
que los maestros deben enseñar (Contenidos Conceptuales); cómo deben enseñarlo (Contenidos Procedimentales) y (Contenidos Actitudinales), que manifiestan las actitudes y valores que se esperan que las y los alumnos construyan a partir de un nuevo modelo de Enseñanza- Aprendizaje.
Además están manifestadas claramente la Expectativas de Logro que se espera alcancen a través de la construcción y reconstrucción de nuevos aprendizajes (4).
Texto del Currículo Nacional Básico. Fuente: (I).
Los fines, principios, políticas y objetivos que orientan la transformación de la educación nacional de Honduras, y que dan lugar a los diferentes momentos del diseño, desarrollo y evaluación del currículo, son (2):
– Formar de manera integral al hondureño y a la hondureña, para que puedan realizar por decisión propia su proyecto de vida y contribuir a la formulación de un proyecto de país, que permita la superación de las condiciones socio-económicas, culturales, personales, regionales y nacionales.
– Contribuir al fortalecimiento de la democracia, al desarrollo sostenible del país y al mejoramiento de la calidad de vida de la población.
– Fomentar una cultura de responsabilidad, tolerancia, solidaridad, justicia, libertad y equidad social y de género, en torno a la comprensión de la diversidad de la cultura humana, y el respeto por la convivencia pacífica de y entre los pueblos.
– Fomentar, enaltecer y conservar los valores de la hondureñidad.
El CNB se hace operativo a través de los 2 instrumentos siguientes (3):
– La matriz fundamental del CNB. Es la sección que desarrolla la estructura curricular más general de niveles y ciclos; estableciendo los propósitos de cada uno de ellos, describe las áreas curriculares, los objetivos de aprendizaje, los bloques de contenido de cada área curricular y las competencias y/o es tándares educativos.
– Los planes y programas. Son documentos de estudio de cada grado o curso de educación prebásica, básica y media, y que contienen en mayor detalle las competencias de grado, curso o ciclo por área curricular, los bloques de contenido con sus correspondientes competencias y/o estándares educativos, están organizados en expectativas de logro, contenidos conceptuales, actitudinales y procedimentales.
En la estructuración del Currículo Nacional Básico se han considerado 4 elementos importantes: los niveles educativos, las áreas curriculares, los ejes transversales y los estándares educativos (5).
– Los niveles educativos. El sistema educativo hondureño comprende cuatro niveles, definidos de la siguiente manera (5):
a. La Educación Pre-básica. Con seis años de duración, para la atención de la población de una edad
comprendida entre 0 y 6 años; compuesta por dos Ciclos (0 – 3 años Primer Ciclo y 3 – 6 el Según
do Ciclo).
b. La Educación Básica. Con una duración de 9 años, para una edad promedio de 6 a 15 años, compuesta por tres Ciclos.
c. La Educación Media. De 2 a 3 años de duración, para una edad promedio de 15 a 17 ó 18 años.
d. La Educación Superior. Para alumnos y alumnas de 17 ó 18 años en adelante
Los niveles educativos de Honduras.. Fuente: (I).
– Las áreas curriculares (5). Las áreas curriculares ordenan, sistematizan y planifican la acción pedagógica; conforman el marco metodológico que facilita la interrelación de aprendizajes de carácter científico, técnico y funcional; representan una se lección pedagógica de contenidos y competencias pertinen -tes; por su pertenencia a campos científicos, sociales y naturales afines son agrupaciones de contenidos (conceptos, procedimientos y actitudes) que se organizan desdelo más global y general hasta lo más específico; vinculan los elementos cognitivos, afectivos y motrices y relacionales del proceso educa –
tivo y, en general, lo integran; facilitan por su carácter interdependiente la relación con contenidos de otras áreas; y promueven un aprendizaje integrado y útil para la comprensión de la realidad. Las áreas curriculares son un campo más amplio que la asignatura. Debe considerarse como un espacio que posibilita experiencias de aprendizaje. Plantean y analizan diversas formas de entender el mundo, de analizarlo, de explicarlo, de argumentar, de darle sentido; permiten conocer procedimientos para anticiparse a los problemas,para enfrentarlos y buscar su solución; incentivan el cultivo de las potencialidades y aptitudes humanas; facilitan la vivencia de procesos que permiten a cada uno ubicarse, comprometerse y crecer en las relaciones con el ambiente, con los demás y consigo mismo/a;
y desarrollan el criterio, el gusto por el conocimiento, la autonomía y la toma de decisiones responsables.
– Los ejes transversales del CNB (5). Los ejes transversales representan los elementos actitudinales que orientan los aprendizajes; no son áreas curriculares propiamente dichas. Estos ejes son: identidad, trabajo y democracia participativa. Estos Contribuyen a proveer y conservar la integración, la articulación y la interdisciplinariedad del currículo; responden a las necesidades y demandas reales de la sociedad y de la educación hondureña. El abordaje de los ejes transversales en cada una de las áreas curriculares se concretiza en el nivel más desconcentrado, es decir, en el aula, en el momento del aprendizaje; relacionando los contenidos conceptuales, procedimentales y actitudinales con el uso de metodologías activas que permiten una relación estrecha con las y los estudiantes. Los ejes transversales promueven la formación integral del hondureño y hondureña, repercuten en el proceso de la formación de la personalidad del alumno y la alumna (FONAC, 1998).
Cuadro de danzas folklóricas, re- flejando identidad. Fuente: (I).
En el Currículo Nacional Básico se definen como ejes transversales los siguientes:
a. Identidad. Se conforma mediante la apropiación crítica y práctica o mediante la creación de valores socioculturales que se integran y consolidan como patrimonio del comportamiento de las personas y de la sociedad; es factor de autonomía personal y colectiva de un actuar cotidiano, estable y significativo, también significa un factor de pertenencia a determinados grupos sociales.
La identidad engloba la identidad personal y familiar, tanto como la identidad nacional. La identidad nacional, por su parte, se inspira en los valores del pasado histórico y se desarrolla y fortalece en los consensos colectivos en torno a las grandes aspiraciones nacionales, las cuales están en relación con los procesos de cambio de la época, que tienden a la unión de las culturas por el efecto de la globalización. La identidad personal está asociada a la identidad de género, es decir, la forma de ser hombres y ser mujeres.
b. Trabajo. Se define como trabajo la realización, liberación y dignificación cuyo ejercicio forma al ser humano integrado, eliminando la separación artificial entre el trabajo manual e intelectual, entre la teoría y la práctica. Sostiene y promueve la vinculación del trabajo con los sectores sociales y económicos, las medidas de prevención en las prácticas del trabajo productivo remunerado y no remunerado y la transformación sostenible de la naturaleza.
El trabajo es principio educativo, objetivo y finalidad curricular y, por tanto, constituye un eje transversal de relevancia para la educación.
Trabajadora de la maquila, en Choloma, Honduras. Fuente: (VII)
c. Democracia participativa: Entendida como cultura, como expresión de la vida cotidiana, como espacio
para vivir y aprender juntos. Comprende acciones para ayudar a convivir dentro del marco de respeto a los derechos humanos, en general; y de los niños y las niñas, en particular.
Este tipo de democracia constituye el espacio de diálogo y aplicación de prácticas democráticas en la escuela y en la comunidad; ejercita las diversas formas válidas y social mente permitidas en el contex- to nacional. Además, garantiza que los y las diferentes integrantes de nuestra sociedad gocen de los mismos derechos y deberes con igualdad de oportunidades, sin discriminación ninguna (raza, etnia, se- xo, religión, estatus social, económico, etc.).
Esta democracia promueve la equidad de género y fundamentalmente amplia la participación de las mujeres en la toma de decisiones en todos los procesos que contribuyen al desarrollo político económico y social del país. En este sentido, las actividades educativas fomentan valores de justicia, igualdad, respeto, convergencia, pluralismo, diálogo, tolerancia y consenso.
Manifestantes hondureños en defensa de la de- mocracia nacional, en Tegucigalpa. Fuente: (VIII)
– Los estándares educativos (5). En educación los estándares son declaraciones claras, exigentes y consistentes sobre lo que se espera que aprendan las y los alumnos de un sistema educativo. Un estándar es tanto una meta como una medida de progreso hacia esa meta. Los estándares describen los aspectos esenciales que de cada área curricular, el estudiantado debe dominar, al final de períodos o ciclos determinados. Describen capacidades y habilidades complejas relacionadas directamente con la disciplina de la cual se deriva cada área.
Los estándares proporcionan al personal docente un cuerpo de conocimientos científicos que unifican la enseñanza profesional. Las y los docentes pueden utilizar los estándares como guía para determinar en qué área están actualizados y en qué áreas deben continuar mejorando su conocimiento y su práctica. Los estándares asumen que todos los y las estudiantes pueden aprender y desempeñar un papel activo en el proceso de aprendizaje; por lo tanto, los estándares incluyen apropiadas expectativas específicas para todos los y las estudiantes del sistema; para lo que requieren la guía profesional del personal docente.
Alumnas graduando de la Escuela Normal ENMLA, en Tela, Honduras. Fuente: (IX).
Formación y situación del personal docente
Formación.
La educación magisterial tiene como propósito la formación de maestros de educación parvularia, educación primaria, profesores de educación media y especialistas, que se requieran para el mejoramiento cualitativo de la educación nacional (1).
La formación de Maestros de Educación Primaria se realiza en 12 escuelas normales y 2 escuelas artísticas con carácter oficial, ubicadas en diferentes zonas geográficas del país. Ac- tualmente se gradúan un promedio anual de 2,300 maestros que se insertan en diferentes puestos de trabajo porque la Secretaría solamente absorbe anualmente 700 de ellos.
Logotipo de la Universidad Pedagógica Nacional (U P N)
Francisco Morazán. Fuente: (X).
La Universidad Pedagógica Nacional Francisco Morazán (UPNFM), es la responsable de la formación de profesores de educación media, bachilleres universitarios, licenciados al nivel de maestrías y diplomados, a través de dos modalidades: presencial y a distancia.
Instalaciones de la Universidad Pedagógica Nacional (UPN) en Tegucigalpa, Honduras. Fuente: (XI).
La Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), tiene a su cargo la formación de licencia- turas en Pedagogía, Letras, Lenguas, Matemáticas, Física y otras; así como maestrías en Tecnología Educativa y Evaluación (1).
Entrada principal a la Universidad Nacional Autonoma de Honduras (UNAH). Fuente: (XII).
El plan de estudios para la preparación de maestros de educación primaria tendrá la duración de tres años, y para cursar- lo será necesario haber aprobado el ciclo común de cultura general con duración de 3 años.
El plan de estudios para la preparación de maestros de educación parvularia es de dos años, y lo podrán cursar únicamente los maestros de educación primaria; el plan de estudios para la formación de profesores de educación media, en las distintas especialidades, tendrá una du -ración mínima de tres años y será necesario para hacer tales estudios estar titulado en una de las profesiones de nivel medio, de conformidad con los requisitos que establezca el reglamento correspondiente (1).
Logotipo de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras.
Fuente: (XIII).
Situación.
El profesorado hondureño está organizado en colegios magisteriales, los cuales comenza- ron a fundarse a inicios de la década de los 60, con una huelga magisterial que luchaba por mejoras salariales y sociales, gracias a la cual se crea el primer colegio magisterial denominado Colegio Superación Magisterial Hondureño "COLPROSUMAH", que es una organización gremial cuya finalidad es luchar por la superación profesional del magisterio y de los educadores. Es una organización democrá tica, laica y apolítica, a escala nacional, constituida por los maestros y profesores afiliados y por todas las personas que ostentan título profesional válido para el ejercicio de la profesión del magisterio.
Logotipo del Colegio Superación Magisterial Hondureño (COLPROSUMAH). Fuente: (XIV).
Maestros COLPROSUMAH en protesta contra el golpe de estado en Honduras. Fuente: (XIV).
El patrimonio del colegio está constituido por las cuotas mensuales de los miembros y por los bienes inmuebles y muebles que posea o adquiera, y las donaciones o legados que reciba por cualquier motivo
o cualquier título siempre que en este último caso no se comprometa la autonomía e independencia del COLPROSUMAH y del movimiento magisterial (6).
Logotipo del Primer Colegio Profesional Hondureño de Maestros
(PRICPHMA). Fuente: (XVI).
del Primer Colegio Profesional Hondureño de Maestros
(PRICPHMA). Fuente: (XV).
También en la década de los 60 se organizó el Primer Colegio Profesional Hondureño de Maestros PRICPHMA, que es una institución de carácter nacional, gremial, aca démico y ajeno a toda discrimina -ción racial, religiosa, política. Este colegio de Profesores es una insti- tución de carácter profesional con personalidad jurídica y patrimonio propio, y está integrado por los profesores de educación media o
título similar, otorgado por cualquier institución de nivel superior, nacional o extranjero, siempre que sea debidamente reconocido por el Estado; los maestros de edu- cación primaria que hayan trabajado en el nivel medio un mínimo de cinco años, y otros catedráti- cos del nivel medio que ostenten títulos o grados diferentes a los de profesores o maestros y que ha yan trabajado en la educación media un mínimo de 10 años (6).
Maestros COPEMH en protesta contra el golpe de estado en Honduras. Fuente: (XVII).
Logotipo del Colegio de Profesores de Educación Media de Honduras (COPEMH). Fuente: (XVIII).
Los maestros de educación media tamien están organiza dos bajo el Co- legio de Profe- sores de Edu cación Media de Honduras (COPEMH). Es una institución de carácter profesional dedicada a contribuir a la defensa de la soberanía protegiendo el ejercicio de la carrera del magisterio, mientras vela por la aplicación correcta de las leyes que regulan la educación y la libertad de cátedra. Lo hemos logrado luchando por 40 años por la superación y prestigio del magisterio (6).
El sistema administrativo educativo
La educación publica de Honduras se administra a través de la Secretaria de Educación Publica o Secretaria de Estado, dependiente del ministerio de educación, con sede en Tegucigalpa, capital de Honduras. Todas las operaciones se realizan desde aquí en dos niveles: nacional o central y regional.
He aquí el organigrama de tal Secretaria:
Organigrama de la Secretaria de Educación Pública de Honduras. Fuente: (XIX).
Operaciones a nivel nacional. La Secretaria de Educación tiene su sede en la 1.ª calle, entre 3.ª y 4.ª avenida Comayagüela, M.D.C., Honduras, Centroamérica; y se ocupa de lo concerniente a la formula- ción, coordinación, ejecución y evaluación de las políticas relacionadas con todos los niveles del siste- ma educativo formal, con énfasis en el nivel de educación básica, exceptuando la educación superior; lo relativo a la formación cívica de la población y el desarrollo científico, tecnológico y cultural; la alfa betización y educación de adultos, incluyendo la educación no formal y la extra escolar (1).
La Secretaría de Educación, dando cumplimiento al programa de modernización del Estado en su ám bito sectorial, ha iniciado un proceso para su propia reorganización y desconcentración, el cual tiene como propósito principal alcanzar un mejor desempeño individual y colectivo en la prestación de ser vicios de calidad a la niñez, la juventud, a los adultos, a los maestros y a la comunidad en general (1).
Operaciones a Nivel regional. Una región se le define como una administración desconcentrada, y su propósito es impulsar y fortalecer la desconcentración educati va mediante el desar -rollo, ejecución y adecuación de los procesos técnico-adminis – trativos como respuesta a las necesidades y requerímientos de tectados y/o presentados por las direcciones departamenta – les, los distritos y centros educativos de acuerdo con las políti – cas y metas de la Secretaría de Educación (1).
Sede de la Secretaria de Educación Publica de Honduras, en Tegucigal pa, D.C. Fuente(XX).
Las direcciones departamentales dirigen y proveen los servicios educativos, y, en uso de sus facultades, administran las normas y procedimientos emanados del nivel central o nacional.
Los servicios en educación y conducción de programas educativos, en recursos de desarrollo pedagógico, información, asun tos legales y apoyo logístico, tienen competencias que les permiten desarrollar, ejecutar, evaluar y hacer seguimiento de los sistemas educativos formal, no formal e informal en los diferentes niveles de estudio del departamento, como respuesta a las
necesidades y requerimientos propios de su jurisdicción, tomando en cuenta los de carácter particular que se presenten en cada distrito escolar y en las comunidades (1).
Asimismo, les compete coordinar el nivel central con las unidades que constituyen la dirección departamental y otras dependencias; impulsar el proceso de desconcentración en el departamento, promoviendo este proceso hasta los centros educativos. Además, sus facultades y competencias se extienden al campo de la investigación educativa, el currículo, la tecnología educativa, la capacitación docente, a la educación intercultural bilingüe, a programas especiales, educación de adultos, educación especial y a los procesos de reclutamiento, selección y nombramiento de personal en coordinación con el nivel central (1).
Financiación de la educación
Se afirma que el gobierno de Honduras financia en un 100 % la educación pública (¿?); no obstante diversos países y organismos internacionales brindan anualmente su apoyo económico para diversos proyectos, especialmente educativos (6).
A criterio del viceministro de la Secretaría de Planificación (Secplan), Julio Raudales, Honduras continúa siendo el país de la región latinoamericana que más gasta en Educación y Salud y el que menos resultados obtiene en ese campo; así mismo, lamentó que Honduras no obtenga grandes logros en estas dos ramas sociales que son vitales para la población hondureña. Indicó que más de 20 mil millo- nes de lempiras del Presupuesto General de la República se destinan a la Secretaría de Educación, de los cuales la mayoría se gasta en pago de sueldos y salarios y no se obtienen los resultados deseados.
Antecedentes.
Honduras ha tenido un sustancial incremento en el gasto público en educación a partir de 1998. Para los años 90`s, Honduras destinaba el 3% del Producto Interno Bruto a la educación, y como consecuencia presenta uno de los mayores niveles de priorización del sector educación en América Latina y el Caribe. En el año 2002, el gobierno de Honduras gasto en educación 7.2% del PIB y
el 27.4% del gasto total del gobierno central. Esto refleja un significativo incremento en la importancia de la educación con relación a la capacidad económica del país y con relación al resto de sectores públicos (7).
Entre los años 1990 y 1997, el gasto público real en educación pasó de US$ 195.1 millones a US$ 235 millones (una tasa anual de crecimiento del 3.1%). Entre los años 1997 y 2002, el gasto casi se dupli -có, al pasar de US$ 235.1 millones a US$ 464.7 millones (una tasa anual de crecimiento de 14.8%), lo cual se ha incrementado al 4% para el 2010 (7).
El Presupuesto diseñado por el Gobierno hondureño para 2007 ascendió a 2.375 millones de dólares (1.825,93 millones de euros), de los cuales 844 millones (648,8 millones de euros) se destinaron a los planes en materia de educación y 360 millones (276,7 millones de euros) a los de salud (7).
El presupuesto asignado a educación para el 2008 fue de 18,000 millones de lempiras; para 2009
fue de 30% del presupuesto nacional (20,500 millones de lempiras), y para el 2010 fue de 22 mil millo nes de lempiras (15); para 2010, Un 67 por ciento del presupuesto fue financiado con fondos nacionales, mientras un 23 por ciento fue con fondos internacionales, transferencias y créditos externos(8).
De los 122,000 millones de lempiras ($6,420.5 millones ) que representaron tal presupuesto, más de 22 mil millones de lempiras fueron destinados a la Secretaría de Educación (8).
El presente.
Organismos internacionales que ofrecen préstamos al país, como el FMI, han recomen -dado a Honduras invertir más fondos en infraestructura en el caso de Educación. Sin embargo, el gas– to en educación pública es insuficiente, por lo que el estado recurre al crédito y ayuda internacional de países y organismos como UPND, USAID, BID, FMI, CEPAL, UNESCO, etc. Es importante señalar que la contribución financiera externa representa un gran aporte a la educación, la cual tiene una variación promedio de 1.6% año con año. Por ello, y reconociendo la decisión del país por brindar educación de calidad a sus niños y niñas y cumplir con los objetivos del milenio, la comunidad internacional donará fondos con desembolsos sujetos al cumplimiento trianual de las metas acordadas para cada uno de los componentes antes enunciados.
Sin embargo, La Unión Europea (UE) denunció el mal manejo, entre 2008 y 2009, de 1,15 millones de dólares aportados por ese bloque para programas de educación en Honduras. Los recursos no han si- do utilizados de la mejor forma, subrayó en rueda de prensa el encargado de Negocios de la Delegación de la Unión Europea en Tegucigalpa, Peter Versteeg (6). En realidad, día a día los diarios nacionales denuncian actos de corrupción con los fondos del país, dando así credibilidad a tales denuncias internacionales.
Es observable que el gobierno nacional no transfiere fondos a los niveles sub-nacionales para que éstos efectúen el gasto en educación. Es un sistema de presupuesto por programas, con asignaciones por objetos del gasto, desagregándolos hasta llegar al nivel de actividades y proyectos, debiendo tramitarse órdenes de compra y/o de pago, según el caso, para que la Secretaría de Finanzas, por con- ducto de la Tesorería General de la República, las haga efectivas a los beneficiarios, excluidos los sueldos y salarios que se mantienen centralizados (los entrega la Pagaduría Especial del Magisterio), así como los programas de inversión. Es decir, al nivel desconcentrado se le permite hacer la gestión del sistema educativo con aproximadamente el 1% del presupuesto asignado a la Secretaría de Educación (9).
Las direcciones departamentales de educación aún no disponen de fondos propios ni de facultades para asignar recursos entre los distintos sectores y servicios, ni para el mismo servicio educativo, pero sí puede solicitar que se hagan tales asignaciones. Los centros de educación media, universitaria y técnica, si pueden captar recursos, pero todavía se mantienen bajo el control del gobierno central (9).
Las asignaciones de recursos del presupuesto público para el sector educación, se caracterizan por lo siguiente (9):
–Dominio por la inercia del gasto corriente (98%).
-Solo pueden canalizarse estímulos o incentivos ya establecidos en las leyes, por lo general para beneficio del personal docente.
-Difícilmente puede coordinarse con los presupuestos de otros niveles o sectores del gobierno.
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