Algunas consideraciones acerca de la labor del tutor en la sede universitaria (página 2)
Enviado por Miury O. Matilla Ramos
La nueva figura del tutor precisa para el éxito de su trabajo de reciprocidades constantes con todos aquellos que conforman el entorno del estudiante, para de esta forma guiarlo y orientarlo adecuadamente, ayudándolo en la solución de sus problemas.
Es necesario tener en cuenta cada uno de los momentos en que el tutor está presente en el quehacer diario como profesores, en el trabajo docente que en sus formas organizativas constituye una de las representaciones que nos permite ejecutar el proceso docente educativo con mayor efectividad, en la elaboración del proyecto educativo, con las actividades individuales de cada tutorado que constituirá su proyecto de vida, y en las actividades grupales que revelarán las necesidades propias del grupo
En el colectivo de año se irá materializando cada una de ellas y la investigación como proceso sustantivo de la universidad y forma organizativa del trabajo científico estudiantil nos permitirá influir como tutores en la conducción de los estudiantes al logro del desarrollo de habilidades que tributará a un mejor desempeño en la universidad y su futura vida profesional.
Los tutores en la Sede Universitaria Municipal tienen dificultades para desempeñar su labor por el desconocimiento que poseen acerca de este trabajo, la imperiosa necesidad de profundizar en los procesos sustantivos (docencia, investigación y extensionismo),pues se ha observado que los estudiantes no se sienten identificados con sus tutores y peligra la formación de una Cultura General Integral. .
Es por ello, que con este trabajo se pretende adentrarnos en la figura del tutor con el objetivo de:
Valorar la figura del tutor en los procesos sustantivos de la nueva universidad cubana, abordando la experiencia acumulada en esta actividad en los años transcurridos en la creación de las SUM.
Desarrollo
En todas las épocas se ha trabajado con los estudiantes de forma individualizada, este vocablo se ha implantado desde el siglo pasado pues a principios del siglo XX se establece el término de tutor en el trabajo educativo de la escuela (Davis, 1992).
Otro autor, evidencia la complejidad del mismo y señala:"el trabajo tutoral es el proceso integrador en la formación de los estudiantes con carácter personalizado, sistémico de apropiación social y personal de un sistema de saberes y valores, que determinan la posición vital, activa y creativa del estudiante en su desempeño profesional y se expresa en las relaciones que establece el estudiante en los espacios sociales de formación" (Valera, 1995).
La creación de las Sedes Universitarias Municipales, ha conllevado, entre otras experiencias novedosas, a la creación de la figura del tutor, extendida esta a la atención personalizada e integral que los profesores deben garantizar a los estudiantes que les son asignados en tutoría (MES, 2005).
Otras definiciones de este concepto plantean: Tutor o Tutora. Persona que ejerce la tutela. Persona encargada de orientar a los alumnos de un curso o asignatura. (Diccionario Encarta, 2006).
Como parte del modelo pedagógico aplicado en las sedes universitarias, surge en la educación superior cubana la figura del tutor y gradualmente va extendiéndose a otras modalidades, incluidos los cursos regulares diurnos. El tutor es un profesor universitario cuya misión fundamental es atender a los estudiantes bajo su cargo. Generalmente un tutor atiende a unos cinco o seis estudiantes, no más, y la tendencia es mantenerlo a lo largo de toda la carrera, desde el inicio de sus estudios hasta su conclusión, con independencia de si además, les imparte o no clases (Horruitiner, 2006)
Se puede apreciar cómo estas definiciones han ido incorporando según sus autores y el desarrollo alcanzado por las ciencias de la educación nuevos elementos que enriquecen y precisan el trabajo del tutor a través del tiempo, se asume que esta labor se propone la guía y orientación del estudiante, donde predomina el trabajo educativo en el proceso de formación de estos, pero en la Nueva Universidad Cubana este abarca un sentido más amplio, ya que esta figura conducirá al estudiante durante toda su carrera y además de guiarlo y orientarlo ofrecerá una atención personalizada que comprenda todas las esferas de su vida tanto estudiantil, familiar, laboral, como social, siendo el hilo conductor de su desempeño en su vida universitaria, concibiéndose de esta forma por la variedad de estudiantes procedentes de variadas fuentes de ingreso como son: maestros emergentes, trabajadores sociales, curso de superación integral, cuadros dirigentes del municipio, etc.
Además la atención del grupo al que pertenece fomentará la realización de actividades que contribuyan a reforzar los valores que deseamos formar, siendo el currículo una vía idónea para esta labor que requiere del liderazgo del profesor, su creatividad, ejemplo personal y habilidades comunicativas que permitan llevar a cabo una eficiente tutoría, materializada además en el proyecto educativo, la extensión universitaria y la investigación.
Martín (1999), considera que el proyecto educativo es el ideado para la vida del colectivo de la brigada (PEB). Este cristaliza en la brigada como fruto de una labor educativa armónica y coherente del colectivo de profesores con los estudiantes y permite direccionar y gestionar el proceso de formación integral teniendo como rector el encargo social del futuro profesional. En él se plasma la concertación construida desde el sentir, el pensar y el actuar dialogado, razonable y basado en el respeto de los valores esenciales, las expectativas, las aspiraciones, las metas y el programa de acción de los diferentes colectivos estudiantiles (brigadas), siendo una expresión de las coincidencias básicas en las necesidades y aspiraciones de los estudiantes.
Alegret (2001) expresó:
"que la labor educativa no se hace de manera espontánea, sino que se aborda de manera científica, con dinamismo y flexibilidad, estructurada, pensada, concebida y materializada en cada año académico a través del proyecto educativo, el cual abarca un conjunto de actividades y acciones que tienen como singularidad el elevado protagonismo de los estudiantes desde el diagnóstico grupal de cada año, que de manera conjunta con el profesor determinan las necesidades, los intereses y las carencias de la formación y se proyecta hacia el logro de sus aspiraciones y expectativas".
En los documentos rectores del trabajo del tutor, el libro "El tutor en las Sedes Universitarias Municipales se plantea:
"la elaboración de actividades educativas grupales sirve de base para elaborar las acciones educativas individuales o proyecto de vida por parte del tutor en estrecha relación con el estudiante. Este método contribuye favorablemente al fortalecimiento del sentido de colectividad, solidaridad trabajo grupal de los estudiantes y al mismo tiempo cada estudiante establece un compromiso con el grupo que será oportunamente evaluado a partir del cumplimiento de de sus acciones educativas individuales".
La educación superior cubana asume la labor educativa tanto desde el currículo, a través de las diferentes asignaturas que lo conforman, como extracurricularmente. Los proyectos educativos constituyen el elemento integrador de todas las acciones, con un enfoque en sistema de influencias educativas dadas durante el desarrollo del proceso mismo de formación en la carrera (Horruitiner, 2006).
Otros razonamientos nos conducen a precisar la importancia del trabajo educativo como es el de González et al., (2006) este se efectúa de forma constante, sistemática y creadora, no es posible dar recetas de cómo educar; esta labor requiere de iniciativas, de ahí que resulta incorrecto orientarse por formas y métodos de trabajo únicos y obligatorios para todos los casos.
Una reflexión más actual nos propone Lamazares (2009) al plantear que es un método de trabajo dirigido a la formación cultural integral del estudiante mediante la articulación de las dimensiones: curricular, extensión universitaria y vida sociopolítica de la brigada. Es un diagnóstico para revelar las necesidades educativas propias del grupo y las prioridades de la Facultad, de la universidad y del territorio. Se elabora de conjunto con los estudiantes del grupo.
Se considera importante destacar como Horruitiner (2006) realiza profundas reflexiones que se deben tomar en cuenta y expresa: El análisis en torno al proyecto educativo debe atender, en primer lugar, la actividad curricular, precisando las acciones que garantizan el cumplimiento de los objetivos previstos para el año, y analizando con cada estudiante las reales posibilidades de cada uno de ellos para cumplir con éxito esas acciones. Un grupo de estudiantes no puede estar desinformado de los propósitos perseguidos en cada año académico con el desarrollo de las actividades lectivas.
Las acciones educativas individuales en el proyecto educativo contienen las principales adaptaciones del currículo en lo personal, académico y social; orientadas al proceso de transformación de su personalidad en aras de alcanzar una cultura general integral. Las mismas deben ser evaluadas de manera sistemática, para las sedes universitarias se puede realizar una evaluación semestral. (Benítez y Sánchez, 2006).
Pero el proyecto educativo es incompleto si se limita a lo curricular. Su contenido también abarca aquellas actividades extracurriculares requeridas para lograr la necesaria integralidad en el proceso de formación del estudiante. Ambas conforman el sistema de acciones a desarrollar en el año, para cada una de las cuales resulta conveniente precisar los criterios de medida que han de posibilitar la evaluación de los resultados alcanzados.
El punto de partida para la diseño de los proyectos educativos ha de ser, por supuesto, el sistema de documentos que caracterizan el diseño de la carrera.
Unido a ello, un aspecto esencial es la participación y el protagonismo de los estudiantes en su elaboración diagnostico del grupo. (Horruitiner, 2006)
En la elaboración del proyecto educativo se significan tres elementos esenciales.
Objetivos del proyecto. Acciones para lograrlos. Criterios de medida.
(Horruitiner, 2006)
Caracterización de la labor educativa
Los diferentes proyectos educativos de una carrera deben constituir un todo armónico, de modo que cada cual garantice el segmento o tramo del proceso de formación propio de ese periodo académico. Resulta necesario elaborar estrategias educativas en cada carrera, y en correspondencia con los objetivos generales previstos en el modelo del profesional y con las características particulares de cada colectivo. De ese modo se constituye en la práctica un equipo de trabajo para la labor de formación, incluida la labor educativa, formado por el jefe del colectivo de año y por los profesores y los tutores de ese año, quienes de conjunto evalúan la marcha y resultados, y toman las medidas individuales y grupales para corregir a tiempo las dificultades que se van presentando. (Horruitinier, 2006).
Una práctica educativa bien orientada ha de estar sustentada en el principio del
"carácter educativo de la enseñanza", cuya principal manifestación se da a través
de la unidad de la instrucción y la educación, concebida en el sentido de saber
utilizar al máximo las posibilidades educativas que brinda cualquier situación de
instrucción. Para lograr este resultado se hace necesario vincular la situación instructiva con la vida social y con la profesión en particular, sin dejar de tener en cuenta el contexto socio-histórico en que se desenvuelve la vida del estudiante (Batista, et al; 1998).
Constituye una labor que requiere la observación aguzada de los profesores, del colectivo del año ya que las manifestaciones de los estudiantes arraigados en su personalidad nos conducen a reafirmar la individualidad del ser humano y estas características como fuerzas sicológicas al desempeñarse el individuo dentro del ambiente del grupo, encuentran múltiples y variadas formas y posibilidades de manifestarse e interrelacionarse, consciente o inconscientemente.
Es por ello, que la unión de los profesores, su intercambio constante, sus apreciaciones, se deben tener en cuenta por el profesor guía al momento de elaborar el proyecto educativo en la brigada, y en la ejecución del mismo, deben primar sus intereses y motivaciones, ya que cada uno expresará su forma de autorrealización y es aquí donde los profesores deben tomar partido y conducir el debate a un consenso para lograr la unidad del grupo. La comunicación juega un papel importante ya que el saber escuchar, identificar los sentimientos expresados, tener paciencia, ponerse en el lugar de los estudiantes, no discutir mentalmente al escuchar, no asumir posiciones de antemano, constituirán algunas de las posibilidades de que el proyecto responda realmente a los intereses de los estudiantes.
El proyecto constituye la materialización del enfoque integral de manera individual y agrupando a los estudiantes por fuentes de ingresos -elaboración los resultados de la caracterización elaborada por el tutor, en la que se identifican las principales necesidades educativas y potencialidades del estudiante. Las acciones se elaboran con la participación protagónica del estudiante. De esta forma, las acciones comprometidas, además de reflejar los objetivos educativos e instructivos, los valores y modos de actuación que se deben alcanzar a lo largo de la carrera, expresan las aspiraciones, motivaciones y las necesidades educativas de cada estudiante (Benítez y Sánchez, 2006).
Horruitiner (2006) al referirse a la labor educativa plantea que la formación integral del estudiante es el objetivo central de la educación superior cubana. Ello supone no sólo garantizar determinados conocimientos y habilidades. Conjuntamente con ello, y de manera esencial, es necesario incorporar a este proceso la formación de convicciones en los estudiantes, a partir de la determinación de un sistema de valores dirigido a asegurar su pleno desempeño como profesional en la sociedad. La formación de valores requiere para su realización un enfoque sistémico y ese tratamiento supone comprender su propia dinámica, ya que los procedimientos por medio de los cuales se logra el dominio de determinados conocimientos.
Y continúa expresando:
"se trata de incorporar coherente y orgánicamente la formación de valores a los procesos fundamentales desarrollados en la educación superior. Por su complejidad, el mismo supone atender no sólo aquellos aspectos –esenciales, por cierto- directamente vinculados a la actividad curricular, sino también integrar a esa labor, con un enfoque de sistema, el conjunto de acciones extracurriculares que con el mismo fin se desarrollan".
En el proceso de formación de la personalidad que se desarrolla en el contexto educativo, el proyecto de vida posibilita conjugar la identidad personal y social de la personalidad en las perspectivas de su dinámica temporal y de sus posibilidades de desarrollo futuro, luego se comprende, que este sea un sistema principal de la persona que representa según Vigostky (2000); un "modelo ideal" sobre lo que el individuo espera, quiere ser y hacer el que toma forma concreta en la disposición real y en las posibilidades internas y externas, que el mismo tiene para lograrlo, definiendo la relación del individuo hacia el mundo y hacia sí mismo, que es su razón de ser, en el contexto y tipo de sociedad en que vive.
Sin embargo Patiño (2004) realiza una reflexión donde expresa la importancia del proyecto de vida y los colectivos estos cuando no se configuran desde sólidos fundamentos éticos, sociales, ideo-políticos y científicos, denotan falta de coherencia y solidez en su expresión perspectiva, tanto en el plano de los individuos, como de los grupos sociales o en el de la sociedad misma de manera genera.
Coincidiendo con lo expresado por estos autores, se tiene en cuenta que este tema es abordado por Vargas (2005) el cual expresa:
"que la estrategia para el trabajo educativo personalizado tiene en el proyecto de vida universitaria, un instrumento pedagógico y metodológico para formar al individuo como un ser social, multifacético e integral, dispuesto para el aprendizaje continuo, la convivencia y armonía con todos los seres humanos y con la naturaleza, que es la razón de ser de la universidad en el presente siglo XXI y ha sido un llamado realizado en los principales foros internacionales de educación superior".
Por otra parte, se ha comprobado, al revisar los documentos que norman el trabajo en las SUM, que son escasos los relacionados con las responsabilidades del tutor bajo estas condiciones, y por tanto es limitada la orientación que tienen los profesores al respecto. MES (2005) ha establecido como las funciones principales del tutor las siguientes:
Trazar una estrategia individual para el desempeño de cada estudiante.
Asesorarlo en relación con los aspectos académicos generales.
Apoyarlo en el estudio independiente, enseñándole métodos adecuados para un aprovechamiento óptimo del tiempo disponible.
Conocer de la asistencia a las actividades presenciales y analizar, con el estudiante, las causas de las ausencias.
Ayudarlo en la selección de las asignaturas que matriculará, en dependencia de sus reales posibilidades de éxito, garantizando que se logre una matrícula responsable.
Estar al tanto de sus problemas personales, aconsejarlo y apoyarlo para enfrentarlos y resolverlos.
Motivarlo en relación con su carrera, significando su utilidad para el desempeño de la función social que cumple como trabajador.
Intercambiar con los empleadores y con los familiares sus valoraciones sobre el aprovechamiento mostrado en los estudios y otros aspectos propios de su labor educativa.
Participar activamente en todos los análisis del proceso que se realiza en las sedes.
Hernández (2005) en su libro "Algunas consideraciones sobre el modelo de continuidad de estudios" plasma una reflexión muy adecuada al aspecto que estamos analizando:
"el propósito de la formación integral del sujeto no debe desconocer que las estructuras cognoscitivas de cada individuo son únicas, en tanto las experiencias y formas de interpretar la realidad tienen un carácter singular, que depende de numerosos factores: sociales, institucionales y personales, entre otros. Estas estructuras no son estáticas, se enriquecen, modifican, reorganizan a partir de lo ya conocido y de la significación que tiene para el sujeto lo nuevo por conocer".
En la actualidad, como ha quedado establecido en diferentes documentos rectores de la nueva universidad, nuestro objetivo primordial es la formación de profesionales revolucionarios, comprometidos con nuestro proceso y para ello es necesario dirigir nuestra labor a este fin. Por ello es imprescindible convencer a los estudiantes de la importancia del proyecto, comprometiéndolo con el cumplimiento de las actividades fundamentales que quedarán creadas en el control o expediente que se confeccionará al efecto.
El tutor debe elaborar un documento para monitorear el tránsito del estudiante por el curso escolar. Tendrá en cuenta en primera instancia los valores que debe modificar si fuese necesario. Ahora bien Fernández (2007)señala que los contenidos más importantes, que se erigen en sustento para la formación y desarrollo de lo valores en los educandos, vistos en su carácter multilateral e interdisciplinario, son los siguientes: la manifestación de los valores en la personalidad su relación con los procesos emocionales-afectivos; con el conocimiento y la práctica social; y con las normas sociales, la libertad y la creación la clasificación de los valores .Los criterios para su jerarquización.
Constituye una tarea ardua para el tutor modificar la conducta de sus estudiantes, la utilización de la persuasión, y la participación activa y consciente en su propia formación, donde la realización de cualquier actividad lleve aparejada la satisfacción de necesidades e intereses, tanto personales como colectivos. Una comunicación que se caracterice por el diálogo donde se compartan experiencias y conocimientos de cada uno de los que entran en comunicación tratando de comprender la posición del otro.
Es la confianza y el respeto hacia el otro, tomando en consideración que el otro es parte de nosotros mismos, de la sociedad, que es donde se realizan los valores, cobrando significado único y pleno.
Reflexionando sobre este tema en el contexto donde se realiza este trabajo existen 53 tutores en la SUM de Caimito los que deben ser actualizados con las nuevas concepciones acerca de la labor educativa con los estudiantes, la educación en valores, en las resoluciones vigentes que norman el trabajo de las universidades, ya que existen serias dificultades pues aunque el estudiante conoce a su tutor generalmente, en intercambios con ellos se ha podido constatar que ellos no sienten el apoyo de este; lo ven como una persona distante que solo le hace exigencias cuando tiene que rendir cuenta de su labor al coordinador de la carrera o cuando se le solicita una información del tutelado.
No sucede así en todos los casos, se ha observado y cotejado que algunos tutores poseen el diagnóstico de sus estudiantes y actúan en consecuencia con este. Los directivos de la sede realizan chequeos periódicos de esta actividad pero no se consideran suficientes ya que el no poseer local también atenta contra el buen desenvolvimiento del trabajo.
Los tutores en la SUM poseen un conocimiento general de sus tutorados, pero la falta de tiempo real no les permite cumplir cabalmente su labor, su contratación es a tiempo parcial y aunque esta actividad está dentro de las horas por las que se contrata, la dispersión geográfica del municipio y los problemas reales de transportación hacen que esta labor no sea sistemática, además de que estos tienen que cumplir un horario laboral y hay funciones que se deben efectuar en ese mismo horario. Por ello cada tutor debe implementar su propia estrategia de trabajo, debe prepararse y tener clara su misión, participar con los tutorados en cada una de las actividades programadas por la FEU, asesorarlo, ayudarlo y apoyarlo constituyen las palabras claves para el éxito.
Es necesario continuar perfeccionando los métodos de control del trabajo del tutor, programar contactos semanales para el chequeo de la actividad, exigir el registro de cada una de las actividades que se realizan con los tutorados, lo que nos permitirá conocer el avance de cada uno en el semestre o año escolar y así poder valorar en la práctica los resultados obtenidos.
El trabajo metodológico del colectivo de año
Los Colectivos de Año direccionan el cumplimiento de los objetivos de este nivel curricular y garantizan el papel rector de la asignatura integradora dentro de la Disciplina Principal Integradora. A este colectivo se le añade la integración del trabajo de los profesores guías que debe tributar directamente a garantizar que la formación personal del estudiante se enmarque en un proyecto profesional y específicamente en el proyecto educativo sustentado en el proyecto de vida. En este colectivo se insertará además el equipo de Trabajo Educativo del año formado por los tutores (Díaz 2006).
La gestión pedagógica del colectivo de año, expresan Rodríguez y Díaz (2006) garantiza la coordinación, regulación y evaluación de las acciones didácticas y de carácter socio- psico-pedagógicas que realiza el colectivo de año mediante el trabajo metodológico y el trabajo educativo personalizado. Continúan expresando que esta relación manifiesta la dialéctica que determina el carácter consciente, sistémico e integrador de este proceso en la formación integral de los estudiantes, en las esferas profesional y personal.
Dada la importancia del trabajo educativo personalizado con los estudiantes y el papel cada vez más creciente del tutor el Departamento trabajará con un nuevo colectivo (si este es carrera) el de Trabajo Educativo que estará conformado por los tutores de la carrera en ambas modalidades y que funcionará para trazar estrategias de la labor educativa en relación con los objetivos del profesional intercambiará experiencias acerca de las potencialidades de las dos modalidades. El colectivo de trabajo educativo de la carrera se reunirá al menos tres veces en el año y desarrollará en estos encuentros distintas formas de trabajo metodológico en el Departamento carrera (Díaz ,2006)
La caracterización del colectivo de año se halla bien definida en la Resolución No. 210/2007 donde se plantea en su artículo 39: El colectivo de año es el encargado de llevar a cabo el trabajo metodológico en este nivel organizativo. Agrupa a los profesores que desarrollan las asignaturas del año, a los profesores guías de cada grupo, a los tutores y a los representantes de las organizaciones estudiantiles. Este colectivo tiene como propósito lograr el cumplimiento con calidad de los objetivos del año, propiciando la integración de los aspectos educativos e instructivos con un enfoque interdisciplinario. La conducción de este colectivo metodológico corresponde al jefe de colectivo de año. En las sedes universitarias podrán constituirse colectivos de grupo, adecuándolos a las características del proceso docente educativo que allí se desarrolla.
Por la gran importancia que tiene el colectivo de año, los tutores deben asumir con responsabiidad la participación en las actividades que convoque el jefe de este, ello propiciará el diálogo abierto en este marco donde debe predominar el análisis exhaustivo de los estudiantes y constituirá una herramienta de trabajo valiosa, arribando a consensos que redundarán en el beneficio de los estudiantes donde se podrán tomar acuerdos, se evaluará el proyecto de vida individual y colectivo y su ejecución.
El profesor guía podrá rendir cuentas de su gestión y los representantes de las organizaciones estatales podrán influir en la marcha del todo el proceso con sus opiniones y sus propuestas. Esto constituiría lo ideal, pero la práctica ha demostrado que hay serias deficiencias, es un trabajo que requiere tiempo y dedicación, y los análisis que se efectúan son superficiales sin llegar a la esencia del problema, se hacen evaluaciones incorrectas de los tutorados porque no contamos con todos los elementos que nos permitirían actuar sin cometer injusticias, en ocasiones nos falta receptividad y esto atenta contra la opinión del estudiante acerca de nosotros y lo más importante no estamos contribuyendo a su formación integral.
Sin embargo, también se ha sido protagonistas del crecimiento personal de muchos estudiantes, su madurez, responsabilidad, como han logrado su autoaprendizaje y han ido adquiriendo una cultura general y aunque nos queda mucho por hacer en el tiempo trascurrido, sentimos la satisfacción de lo que hemos logrado.
La extensión universitaria como función
La extensión se convierte en una de las funciones principales de la educación superior y analizándolo desde este punto de vista la universidad es la institución fundamental para promover, preservar y desarrollar la cultura (Gonzáles y González 2008)
La práctica universitaria no siempre ha permitido dejar claro el papel que le pertenece a cada una de las funciones en el cumplimiento de dicho encargo, considerándose por lo general que corresponde únicamente a la extensión universitaria articular el vínculo con la sociedad.
Este aspecto queda resuelto en los trabajos de González (1996) al señalar que el cumplimiento de este encargo social no corresponde a una función específica de la universidad, sino a la institución en su conjunto, ya que su satisfacción se concreta en la preservación, desarrollo y promoción de la cultura, que en su interrelación dialéctica son expresión de la integración docencia-investigación-extensión. Tal planteamiento coincide con el de Alarcón Ortiz (1994) al señalar que la extensión universitaria puede considerarse como función rectora en el vínculo entre universidad y sociedad, al ser el elemento integrador y dinamizador que facilita el flujo cultural continuo entre la universidad y la sociedad en el que las enriquece mutuamente.
La universidad es la institución fundamental para promover y desarrollar la cultura, ha de serlo tambien para promover el desarrollo cultural de la sociedad; y en consecuencia, su función de extensión cuya esencia esta en ese proposito, se convierte en una de las funciones principales de la educación superior. (González y González, 2008).
Estas características de la extensión como función permiten proponer la siguiente definición, dada por los autores anteriores losl que expresan:
"extensión universitaria es el Sistema de interacciones de la Universidad y la Sociedad, mediante la actividad y la comunicación, que se realizan dentro y fuera del centro de educación superior, con el propósito de promover la cultura en la comunidad universitaria y extrauniversitaria, para contribuir a su desarrollo cultural".
Continúan señalando estos autores:
"la definición de qué modelo emplear para la aplicación de la dirección estratégica a la gestión de la extensión universitaria, estará en dependencia de los intereses de los implicados, pues cualquiera de los modelos que pueden servir para este fin. De lo que se trata es de buscar las regularidades esenciales, del deber al que aspiramos, caracterizar de manera adecuada la situación de partida y establecer las líneas programáticas que nos permitan plantearnos las vías para alcanzar lo que queremos".
Por tanto forman parte de esta definición:
-difusión, acción social y servicios.
-su carácter histórico la función primigenia ue la extensión universitaria.
-esta mas identificada con la comunicación en doble sentido y como una tarea de elaboración cultural conjunta.
Como proceso.
La extensión como proceso de interacción humana redimensiona su consideración como resultado de la actividad y la comunicación. La extensión es actividad en tanto persigue como objetivo la transformación consciente del medio; de tal manera no solo contribuye a la transformación de los procesos en que interviene en la universidad, y de la universidad en sí misma, sino también a la transformación de la sociedad mediante su accionar en el desarrollo cultural. (González 2002)
Este proceso sustantivo de la universidad cubana interrelacionado con la docencia y la investigación, está determinado por la manera en que los miembros logran asumir sus funciones al respecto Batista (2001) plantea:
"como proceso responde al cumplimiento de sus leyes y la interrelación de sus componentes, tiene su propio objetivo, contenido y método. Esta inmerso en los procesos de docencia e investigación, pero no se identifica con ellos, tiene personalidad propia en la promoción cultural de esos procesos. A su vez se expresa como función sustantiva de la universidad, en su movimiento y en sus relaciones con el medio social".
González y González (2008.) señalan que lo que distingue a la extensión de la docencia o la investigación, no es que cumple con mayor o menor grado una función social, sino cómo la cumple y con qué objetivo lo hace. La extensión es más ágil, más libre, más oportuna, más hecha a la medida de las necesidades sociales, por cuanto se asienta en la metodología del trabajo social, en la promoción cultural y parte de las necesidades sentidas de las comunidades que traducidas en problemas transitan desde su metodología al logro del objetivo: promover cultura a partir del desarrollo de acciones que se dirigen a potenciar la creación de valores culturales, la conservación de dichos valores, la difusión y el disfrute.
Al hacer un análisis más profundo de este concepto González(2002), plantea que el proceso extensionista es aquel, por tanto, que como resultado de las relaciones sociales que se dan entre los sujetos que en él participan está dirigido de un modo sistémico y eficiente, a la promoción de cultura para la comunidad intra y extrauniversitaria (objetivo),con vistas a la solución del (problema) social: necesidad de contribuir al desarrollo cultural de la comunidad, mediante la apropiación de la cultura que ha acumulado la sociedad en su desarrollo (contenido); a través de la participación activa de la comunidad universitaria y extrauniversitaria (método); planificada en el tiempo y observando ciertas estructuras organizativas (forma);con ayuda de ciertos objetos (medio); instrumentando indicadores que permitan medir la calidad (evaluación) y cuyo movimiento está determinado por las relaciones causales entre sus componentes y de ellos con la sociedad (leyes) que constituyen su esencia.
Relación dialéctica función-proceso
En las reflexiones realizadas por González y González (2008), proponen un modelo donde se observa esta relación y señalan:
"lo fundamental consiste en ver la relación dialéctica que, con carácter de ley, se expresa entre ambas definiciones; función-proceso. La extensión universitaria como función expresa las características externas fenoménicas, como proceso, explica sus propiedades esenciales y determina las leyes de su comportamiento".
Luego de diversas reflexiones acerca de la bibliografía consultada se coincide con las definiciones dadas por los diferentes autores y además se entiende que la extensión universitaria contribuye a enriquecer el acerbo cultural de nuestros estudiantes, se proyecta hacia la comunidad, permitiendo profundizar y divulgar las raíces de la cultura de las localidades.esta debe ser planificada y evaluada, previo a una rigurosa investigación que permita el rescate, revitalización y conservación de los valores culturales.
Se considera que en el contexto de nuestra SUM necesitamos realizar talleres con todos los tutores para instruirlos en este proceso sustantivo que debemos trabajar tanto dentro de la universidad como fuera de ella pues este trabajo revela serias dificultades asociadas a su definición conceptual, la determinación de su esencia y el desco nocimiento metodológico, lo que unido a la falta de reconocimiento la coloca en situación desventajosa con los restantes procesos. Si a esto añadimos la falta de modelos de gestión que se ajuste a los requerimientos de nuestro municipio, es esta la problemática esencial que afrontan los directivos de esta área en nuestra sede.
Por tanto, este trabajo necesita ser planificado, organizado, controlado y evaluado, mediante despachos, consultas, en las reuniones del colectivo de año, resaltar el trabajo extensionista de otras carreras, recepcionar las experiencias de tutores y profesores guías de otros años académicos, es primordial que el docente se inserte como promotor cultural y agente activo de la extensión, genere proyectos y sentirse parte importante de este proceso.
En "Formación e Investigaciones"(Mondeja y Zumalacarregui, 2007) señalan que la investigación científica es un proceso que tiene como propósito encontrar respuesta de manera sistemática a los importantes problemas que el hombre se plantea y alcanzar logros significativos que aumenten su caudal de conocimientos
Profundizando en esta definición otro autor (González, 2007) plantea:
"la actividad científico- técnica contribuye a la elevación de la calidad en la universidad en dos sentidos, cuando sus resultados se revierten hacia el interior del proceso docente- educativo por una parte y hacia la satisfacción de los clientes de servicios científico-técnicos o proyectos de investigación, por otra. El mantenimiento de una investigación científica de calidad es vital para el desarrollo del país y de la universidad.
Trabajo científico estudiantil.
La investigación forma científicamente al estudiante y por otro lado el estudiante representa una extensión del trabajo científico del profesor. Una adecuada utilización del estudiante permite multiplicar el trabajo del profesor, por lo que constituyen una considerable reserva dentro del potencial científico de las universidades .El uso amplio de estudiantes en el trabajo científico garantiza una continuidad en el desarrollo de las investigaciones y de su impacto en el país, siendo esta una característica de la fortaleza científica de las instituciones universitarias. Ellos representan una parte importante del potencial científico de las universidades, cuyos costos son bajos y su efectividad puede llegar a ser alta. (Jiménez, 1992).
La vinculación de estudiantes al trabajo científico-técnico puede realizarse de forma curricular y/o extracurricular.
González, (2007) señala que el trabajo científico curricular está relacionado con todas aquellas actividades investigativas que deben ser desarrolladas por los estudiantes vinculados a las asignaturas o disciplinas que cursan y que constituyen un requisito para aprobar las mismas. Estas pueden adoptar la forma de: trabajo de curso, proyectos de curso, trabajos de diplomas, tareas extra clase. etc.
En todas estas formas organizativas del trabajo investigativo de los estudiantes el tutor juega un papel fundamental ya que puede asesorarlos, orientarlos, facilitarles bibliografías, comprometerlos, observar el grado de avance en la investigación, si esta se corresponde con los conocimientos adquiridos, y además si alcanza los problemas del territorio para que de esta forma contribuya a la solución de estos, tanto en la producción como en los servicios.
Al referirse al trabajo científico extracurricular González (2007) contempla las actividades investigativas desarrolladas de forma individual o colectiva por los estudiantes de manera adicional a su plan de estudio y de forma totalmente voluntaria. El trabajo extracurricular se organiza mediante la creación de grupos estudiantiles de trabajo científico y del movimiento de estudiantes de alto aprovechamiento.Los grupos estudiantiles de trabajo científico se organizan con estudiantes de diferentes años y/o carreras y sus tareas de investigación deben responder a las líneas principales de investigación de la universidad.
Continúa destacando este autor, que el sistema de estimulación desempeña un papel muy importante, es necesario lograr un alto nivel de motivación en los grupos de trabajo científico estudiantil. Para ello, además de garantizar la adecuada observancia en el cumplimiento de los principios anteriormente mencionados, es necesario utilizar todas las vías posibles para divulgar y reconocer ante el colectivo de estudiantes y profesores los resultados tanto individuales como colectivos más relevantes
Entre las vías que se pueden utilizar para estimular una mayor participación de estudiantes, se encuentran:
Remuneración en el índice académico del estudiante .MES. Resolución 287/2007.
Presentación en eventos científicos estudiantiles desde la universidad hasta el nivel nacional.
Presentación en el Forum de Ciencia y Técnica desde el nivel de base hasta el nacional.
Premio nacional del CITMA a estudiantes investigadores.
Premios de las BTJ. (Sello, concurso y exposición).
Selección del estudiante más destacado en investigación al concluir cada año.
Selección del estudiante más destacado en investigación de su graduación; entre otras.
En la SUM los tutores juegan un papel muy importante en el proceso de investigación que realizan los estudiantes deben contribuir a crear una mentalidad científica en los futuros profesionales, orientándolos en cuanto a la actitud de constate vínculo con la realidad y sus problemas, facilitándoles el banco de problemas del municipio, lo que les permitirá hacer una selección de aquel que más lo motive, o en su centro laboral estar actualizado de las situaciones que pudieran constituir objeto de una investigación. La acción orientadora del tutor contribuirá a que el tutelado se sienta comprometido con esta actividad.
Por ello, la identificación personal y relación continúa con el objeto de investigación permitirá conocer hacia dónde dirigirá el trabajo y cada día se realizará un esquema de los posibles resultados. En el primer año de la carrera los estudiantes se van apropiando de las herramientas científicas para la investigación pues en el tronco común reciben Metodología de la Investigación, pero en cada año académico ellos irán desarrollando sus habilidades. Por esta razón, al tutor le corresponde mediar en la formación de estas características para desarrollar en ellos habilidades investigativas, capaces de pensar para buscar el mejor modo de actuación posible en cada contexto histórico.
Se considera que en nuestra sede hemos logrado incorporar un grupo de estudiantes a la participación en diferentes eventos, pero eso es aún insuficiente, se necesita una mayor divulgación del mismo, el tutor debe con anticipación comprometer al estudiante que tutorea para implicarlo en esta actividad, si es posible en el contacto con todos los que atiende y motivarlos, e instruirlos en todo lo establecido al respecto, ya que esto también formará parte de su evaluación integral.
Las valoraciones respecto a la figura del tutor que se han realizado en el desarrollo de este trabajo aun son insuficientes para continuar el desempeño de la tutoría.
Los conocimientos que se poseen acerca del tutor deben ampliarse en correspondencia con la necesidad que implica el trabajo de la tutoría en los procesos sustantivos de la universidad, profundizando en cada uno y adecuándolos a las características propias del municipio, a las individualidades de nuestros tutorados, ya que la heterogeneidad de los mismos conlleva a la profundización del trabajo personalizado, razón que justifica la nueva concepción del tutor
El esmerado esfuerzo que realiza el tutor en los procesos sustantivos es merecedor de un reconocimiento extracurricular teniendo en cuenta que sus funciones como profesor lo hacen extender sus unciones a una labor dedicada y comprometedora ante una masa estudiantil cuyo compromiso fundamental es concluir sus estudios universitarios.
Tanto el tutor como el estudiante deben estar conscientes de que la tutoría lleva implícito un compromiso en el que el primero está atento al desarrollo de su alumno, mientras que este debe desempeñar un papel más activo como autor de su propio aprendizaje, todo en el marco de una relación mas estrecha que la establecida en un aula durante un curso académico.
Para la buena marcha de los procesos sustantivos en la SUM y teniendo en cuenta las dificultades que retrasan el desarrollo de los mismos, siendo un obstáculo para la formación integral de los estudiantes, se recomienda:
Programar en los planes de trabajo mensuales un sistema de capacitación con los tutores.
Establecer horarios de consulta semanales para controlar el trabajo de tutoría.
Propiciar intercambios con los profesores de otras sedes universitarias
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Autor:
Lic. Miury O. Matilla Ramos
Prof. Instructor.
UNIVERSIDAD AGRARIA DE LA HABANA.
FRUCTUOSO RODRIGUEZ PÉREZ.
CENTRO DE ESTUDIOS DE LA EDUCACION SUPERIOR AGRARIA.
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