4. Proyecto genoma humano
Inicio y Justificación del Proyecto Al Proyecto Genoma Humano se lo puedo definir como un esfuerzo internacional (ya que actúan países como Francia, Alemania, Japón, Reino Unido y otros miembros de la Unión Europea en forma conjunta) que reúne a los más destacados científicos genetistas, las Universidades más reconocidas y las más grandes empresas farmacéuticas y de ramas similares para lograr lo que en un principio se apreció como una misión imposible: obtener un conocimiento básico de la dotación genética humana completa (esta información genética se encuentra en todas las células del cuerpo, codificada en el ADN ); con la intención de determinar la secuencia completa (más de 3.000 millones de pares de bases) del genoma humano, localizando con exactitud (cartografía) los 100,000 genes aproximadamente y el resto del material hereditario de nuestra especie, responsables de las instrucciones genéticas de lo que somos desde el punto de vista biológico. El objetivo último de la representación y secuenciación del genoma es asociar rasgos humanos y enfermedades heredadas con genes situados en lugares precisos de los cromosomas. Realmente, lo que llamamos Proyecto Genoma es el término genérico con el que designamos una serie de diversas iniciativas para conocer al máximo detalle los genomas no sólo de humanos, sino de una serie de organismos modelo de todos los dominios de la vida, todo lo cual se espera que dé un impulso formidable en el conocimiento de los procesos biológicos (desde la escala molecular hasta la evolutiva) y de la fisiología y patología de los seres humanos, y que se traducirá en multitud de aplicaciones técnicas y comerciales en ámbitos como el diagnóstico y terapia de enfermedades, biotecnologías, instrumental, computación, etc. La informática ha sido uno de los objetivos esenciales del PGH, debido a la gigantesca cantidad de datos que hay que recoger, analizar, comparar, interpretar y distribuir. Por ello se ha desarrollado un nuevo campo de investigación llamado bioinformática para satisfacer las exigencias planteadas por el programa. Los investigadores de bioinformática han creado bases de datos públicas conectadas a Internet para poner los datos del genoma a disposición de los científicos de todo el mundo y probablemente los biólogos del siglo XXI usarán esas bases de datos como un recurso indispensable de su trabajo cotidiano.
Cartografía y secuenciación Existen dos categorías principales de técnicas de cartografía genética: ligamiento o cartografía genética, que identifica sólo el orden relativo a los genes a lo largo del cromosoma; y cartografía física, un conjunto de métodos más precisos que permite determinar las distancias entre genes dentro del cromosoma. Ambos tipos de cartografía utilizan marcadores genéticos, que son características físicas o moleculares detectables que se diferencian entre los individuos y se transmiten por herencia. La cartografía mediante ligamiento se desarrolló a principios de la década de 1900 gracias al trabajo del biólogo y genetista estadounidense Thomas Morgan quien logró elaborar un mapa aproximado que recogía el orden relativo de estos genes asociados en los cromosomas, y en 1933 recibió el Premio Nobel de Fisiología y Medicina por su obra. Los mapas de ligamiento humanos se han elaborado sobre todo siguiendo las pautas de herencia de familias extensas a lo largo de muchas generaciones. Pero actualmente hay técnicas de laboratorio que permiten crear mapas de ligamiento comparando la posición de los genes diana en relación con el orden de marcadores genéticos o de segmentos específicos y conocidos del ADN. La cartografía física determina la distancia real entre puntos diferenciados de los cromosomas. Las técnicas más precisas combinan robótica, uso de láser e informática para medir la distancia entre marcadores genéticos. En el Proyecto Genoma Humano se utiliza primordialmente un método de secuenciación donde se replican piezas específicas de ADN y se modifican de modo que terminen en una forma fluorescente de uno de los cuatro nucleótidos. En los modernos secuenciadores automáticos de ADN, el nucleótido modificado situado al extremo de una de estas cadenas se detecta con un haz de láser y se determina el número exacto de nucleótidos de la cadena. A continuación se combina esta información en un ordenador para reconstruir la secuencia de pares de bases de la molécula original de ADN.
¿Por qué cartografiar y secuenciar genomas?
- La biología pretende dar respuestas lo más completas y detalladas posibles de los fenómenos vitales. Al ser el ADN la molécula universal de la herencia, y constituir la base genética de la vida, la tendencia natural ha sido terminar buscando explicaciones al nivel de ADN.
- Ha llegado un momento en que se plantea que abordar el estudio detallado de los genomas de los organismos es mucho menos costoso, y más interesante intelectualmente, logrando el conocimiento detallado de la secuencia. Pero los Proyectos Genoma no son más que un punto de arranque para nuevos descubrimientos en las ciencias biomédicas.
- La secuenciación de genomas de plantas y animales domésticos conducirá a nuevos avances en la mejora agronómica y ganadera.
- Para comprender la evolución será cada vez más esencial el disponer de datos de secuencias. La bioinformática permite comparar genes y genomas completos, lo que junto con otros datos biológicos y paleontológicos, está dando nuevas claves de la evolución de la vida.
- La principal justificación del PGH de cara a la sociedad es la promesa de avances importantes en Medicina..Una de las consecuencias más inmediatas del PGH es la de disponer de sondas y marcadores moleculares para el diagnóstico de enfermedades genéticas, de cáncer y de enfermedades infecciosas. A plazos mayores, se espera que a su vez la investigación genómica permita diseñar nuevas generaciones de fármacos, que sean más específicos y que tiendan a tratar las causas y no sólo los síntomas. La terapia genética, aunque aún en sus inicios, puede aportar soluciones a enfermedades, no sólo hereditarias, sino cáncer y enfermedades infecciosas.
- Una de las principales justificaciones del PGH es la necesidad de impulsar poderosas infraestructuras tecnológicas que deben de proporcionar a las instituciones, empresas y países implicados un lugar de privilegio en la investigación biomédica y en multitud de aplicaciones industriales (diagnósticos, terapias, instrumental de laboratorio, robótica, hardware, software, etc.).
¿Cómo se completo el Genoma Humano? El mapa del genoma humano fue completado por Craig Venter presidente de la empresa Celera Genomics , quien sorprendió al mundo por su rapidez que dejó atrás al mayor esfuerzo coordinado mundial. Su descubrimiento fue anunciado oficialmente el 26 de Julio del 2000 por el presidente estadounidense Bill Clinton , el primer ministro británico Tony Blair y científicos de ambos países. Sin embargo Venter consiguió la descripción del genoma de una sola persona (cuya identidad se mantiene en secreto) y la idea es comparar su ADN con el de otro ser humano para averiguar en que genes este último tiene mutaciones importantes. A pesar de que Clinton y Blair coincidieron en que el organismo internacional y Venter se unan y le regalen al mundo la información del genoma, Venter declaro que no quiere patentar todos los genes en crudo, pero si algunos (ya lo hizo con 100), y ganar mucho dinero para convertir a PE Celera Genomics en una gran base de datos genómicos internacional a la cual deberán acudir los investigadores públicos o privados, las universidades y las empresas farmaceuticas . Pero hay otros investigadores- entre ellos Williams Haceltine , director de Human Genome Science- que ya registraron 700 patentes basadas en genes humanos.
Una cuestión de intereses Detrás de la conquista del genoma humano hay cuestiones científicas y económicas de una envergadura colosal, ya que es bastante probable que la medicina del mañana se base en la identificación de los genes de cada paciente y que se puedan desarrollar terapias génicas en un campo muy vasto de enfermedades hereditarias. Cuando hace pocas semanas la Celera anunció que había podido descifrar el 99 por ciento del genoma -algo cierto, pero que no alcanza, ya que hace falta conocer la secuencia-, el índice Nasdaq de las acciones tecnológicas en la jornada bursátil de Nueva York habían subido, en un solo día, nada más y nada menos que un 56 por ciento. Así, las cuestiones científicas habían trascendido su tradicional esfera de influencia para adquirir verdadera relevancia en los mercados globales. "Los valores de empresas de biotecnología, coma la Celera Corp. de Venter, cotizarán mucho mejor en el futuro que las gigantes informáticas de hoy"."Las compañías de biotecnología que logren patentar (si pueden) los genes de la vida obtendrán ganancias incalculables", sostienen. Pero lo cierto es que el negocio de los genes está desatando una verdadera batalla socioeconómica y ética. Por un lado, están los que postulan que es necesario hacer público cualquier descubrimiento. Por el otro, los que desarrollan una verdadera estrategia de negocios al respecto. Sin embargo, ambas posturas no necesariamente resultan antinómicas. Es sabido que en materia de innovación científica y tecnológica la sumatoria y alianza de los emprendimientos públicos y privados es la que generalmente logra el mejor resultado.
Las consecuencias e implicaciones del PGH para la Medicina Los expertos coinciden en señalar que los primeros resultados del PGH marcarán el inicio de una Medicina Predictiva o Genómica. Se conocerán cada vez mejor las bases genéticas de las diversas enfermedades y podrán detectarse predisposiciones a las mismas mucho antes de que aparezcan. Conocer anticipadamente esta información facilitará el desarrollo de medidas preventivas, terapéuticas o paliativas, antes de que sus efectos sean irreversibles. Pero a veces las perspectivas se presentan con un lenguaje demasiado engreído. En palabras de J. Watson, uno de los premios Nobel que con más entusiasmo ha impulsado el PGH, «cuando sean finalmente interpretados, los mensajes genéticos codificados en el ADN nos proporcionarán las últimas respuestas a los cimientos químicos de la existencia humana». Nancy Wexler, presidenta de la Fundación para Enfermedades Hereditarias y miembro destacado del equipo que descubrió el gen asociado a la corea de Huntington, opina que «en gran medida, nuestro destino está en nuestros genes». El PGH permitirá descifrar la clave bioquímica la esencia irrepetible, que identifica a un individuo como sujeto humano. Una mejor comprensión de cómo los genes originan y controlan nuestras estructuras biológicas incrementará el conocimiento de nuestro funcionamiento como seres humanos sanos, pero también la base genética de enfermedades tan diversas como el cáncer, la esquizofrenia, el SIDA, las afecciones cardiovasculares, el mal de Alzheimer, la neurofibromatosis, etc. A medida que sea posible obtener más información sobre el genotipo individual, médicos y otros profesionales de la salud prevén cambios drásticos en la relación médico-enfermo. Los avances en diagnosis y prognosis clínica proporcionarán cada vez más información sobre la predisposición de un individuo a padecer ciertas enfermedades, o bien la certeza de su aparición inevitable a los 20-30 años y las condiciones ambientales que la desencadenarían. Se habla ya de una nueva y extraña categoría de individuos en el sistema sanitario: los «enfermos sanos» o «pacientes impacientes». Conocemos su anomalía a nivel genético, pero son individuos completamente sanos mientras no manifiesten síntomas de la enfermedad. Tampoco pueden ser objeto de atención sanitaria si no existe terapia conocida al respecto ni, de momento, la necesitan. Mayor información y mejor conocimiento sobre las enfermedades hereditarias modificarán, previsiblemente, las relaciones tradicionales del enfermo con su familia. El enfermo que padece una enfermedad adquirida en algún momento de su vida ve a la familia como elemento de ayuda, compañía y consuelo insustituible. La familia, por su parte, ve al enfermo como uno de sus miembros afectado por una dolencia de la que nadie es responsable y de la que debe recuperarse cuanto antes. Pero cuando se trata de enfermedades hereditarias, las cosas son muy diferentes. El afectado por una enfermedad hereditaria valora la ayuda que le presta su familia, pero la considera también el foco de una enfermedad, a menudo incurable, que por negligencia, descuido, ignorancia o fatalidad le han transmitido. Recientemente la ingeniería genética, se unió a la medicina para desarrollar diferentes técnicas que permitirán impedir el desarrollo de este tipo de enfermedades o malformaciones, tales como la terapia genética y la posible clonación de tejidos humanos.
Localización cromosómica de algunos genes implicados en la aparición de enfermedades o malformaciones Los investigadores pueden mediante la llamada técnica del ADN complementario, concretar el lugar que ocupa un gen dentro de los 23 pares de cromosomas en los que se organiza nuestro material hereditario. Conseguido esto, no resulta difícil conseguir su función y su papel(cuando es defectuoso) en la aparición de una dolencia genética. Aquí podemos ver la localización cromosómica de algunos de estos genes.
La Terapia Genética Esta nueva terapia se basa en insertar genes dentro de la célula para lograr un nuevo paquete de instrucciones para estas, la inserción de genes podrá ser utilizado para corregir una herencia de genes defectuosos, los cuales son las causas de las enfermedades, también sirve para contener o corregir los efectos de las mutaciones genéticas y además hasta se puede programar a una célula para que trabaje en una función totalmente diferente de lo que ha venido trabajando. Como explique anteriormente los genes son compuestos de ADN y las instrucciones que dirigen el desarrollo de un individuo son los códigos de los genes, por esto las enfermedades se producen por errores en las cadenas de los genes. El uso clínico de la terapia genética comienza en 1990, en Estados Unidos , cuando una niña de solo cuatro años recibió un tratamiento de terapia genética para ADA (adenosine deaminase deficiency) una fatal enfermedad hereditaria del sistema inmune. Por este defecto ella era muy susceptible a las infecciones. por lo cual la terapia genética tuvo que utilizar una virus genéticamente modificado para implantarle un gen normal de ADA dentro de sus células inmunes. La inserción del gen ADA, es el que programa la célula para que produzca la encima del faltante ADA, el cual luego induce para que se desarrolle la función inmune normal en esas células. Este tratamiento la ayuda para que cree resistencia contra las infecciones. La terapia genética podrá traer eventualmente efectivos tratamientos para muchas enfermedades que hasta ahora no tienen cura. Esto también incluye enfermedades hereditarias como la Fibrosis Cistica, la Distrofia Muscular y la Diabetes Juvenil. En adición la terapia genética también sirve como tratamiento para muchos problemas que no son hereditarios, por el hecho de que se inserta un gen el cual programa la célula para una nueva función. Muchas otras terapias para los trastornos no genéticos están siendo evaluadas. Es así como los investigadores están tratando de utilizar este tipo de terapia para solucionar el problema del SIDA, lo que tratan es de usar la terapia genética para volver las células genéticamente resistentes a las infecciones que causan el SIDA. Se están haciendo también muchos esfuerzos para encontrar la vacuna contra el cáncer. Las células del hígado están siendo tratadas usando la terapia genética, para que ayude al cuerpo a eliminar los excesos de colesterol que puedan ocasionar un infarto. La terapia genética puede ser utilizada para prevenir y tratar muchas enfermedades. La Terapia Genética es quizá la más revolucionaria y prometedora de las combinaciones tecnológicas del ADN, pero hay muchos problemas que deben ser resueltos para poder tener la seguridad de la excelencia en la aplicación de esta. De todos modos la terapia ha sido aprobada por mas de 100 clínicas de enfermedades genéticas como una buena solución para la Fibrosis Cistica, y la distrofia muscular, los cuales hasta ahora no tienen cura. Se tiene que tener en cuenta que la terapia genética no le cambiara el óvulo o esperma de una persona o que tampoco se harán cambios que puedan ser transmitidos al hijo, porque eso no seria ético en un tiempo en el todavía hay tantas incógnitas en el tema. El futuro de la Terapia Genética ya esta en las manos de los científicos, compañías estadounidenses avanzan cada día mas en el proyecto de desciframiento del genoma humano, además que los virus están siendo probados para lograr una mayor efectividad.
Los Nuevos Fármacos
- Una nueva generación de vacunas: bacterias o virus con un gen activado extirpado, que no les impedirá provocar en el organismo humano reacciones moderadas de inmunidad. Por supuesto, de la investigación en este campo se espera una vacuna milagrosa contra el sida.
- La elaboración de fármacos convencionales mediante la manipulación genética de microorganismos, como la conocida hormona insulina, adecuada contra la diabetes, o la hormona del crecimiento, contra el enanismo.
- La producción de nuevos fármacos a partir de sustancias procedentes de sistema inmunitario humano,
- Otro campo de la ingeniería genética es el de los neuróptidos, las sustancias que transportan la información en el sistema nervioso central, y pueden ser empleadas en el tratamiento de enfermedades psíquicas. La neurobiología molecular tiene grandes esperanzas en ellos.
Ciertas sustancias obtenidas mediante la manipulación genética de microorganismos con fines terapéuticos. La medicina moderna espera mucho del conocimiento de los procesos genéticos moleculares, pues estos procesos en la célula ya pueden estudiarse adecuadamente. Sobre todo se esperan avances en la inmunología y en el estudio del origen y razones del envejecimiento. Los científicos también prometen desvelar el misterio del crecimiento.
La Bioética, una nueva disciplina científica Etimológicamente, bioética significa ética de la vida. A veces, la etimología sirve para entender no sólo el significado de las palabras, sino la relación que los conceptos tienen entre sí. Tomo como ejemplo la palabra ecología, tema importante si hablamos del hombre y su entorno. Ecología viene de oikos, que significa casa. O sea que ecología, desde el punto de vista etimológico, significa "ciencia de la casa". O sea, que el hombre está en este entorno junto a otros seres vivos de la naturaleza entre los que están los otros seres humanos, pero también están los animales, las plantas, es decir todo lo que forma parte de su entorno. El camino emprendido no tiene retorno, resulta ingenuo pretender la eliminación de la biotecnología en el mundo actual, pero resulta igualmente irresponsable cerrar los ojos ante esta realidad que nos supera, delegando en los científicos las decisiones que debe tomar toda la comunidad. El tema de la bioética puede ser visto desde dos perspectivas: Desde la llamada bioética especialmente humana, o sea el conjunto de reglas de conductas respecto a cómo la medicina se comporta con el ser humano, tanto en su nacimiento (incluso antes de él) en su desarrollo y al momento de la muerte. Pensemos por ejemplo en temas como el aborto, la eutanasia, etc. Pero, la bioética también se dirige a otros sectores donde el hombre está implicado, pero no en forma directa como en los casos señalados, sino en forma indirecta. Es decir, abordan al hombre en su entorno, en sus relaciones con los demás seres vivientes. Voy a referirme fundamentalmente a este segundo aspecto, es decir la bioética como ética de la vida, en cuanto al hombre en su entorno. Sobre esta base, vemos que no son los científicos quienes destruyen lo que la naturaleza nos ha dado. Al contrario, son algunos políticos que manipulan a los científicos quienes la destruyen. Las grandes desgracias sufridas por el mundo no se han producido por órdenes de los científicos a los que manejan el mundo, sino órdenes de éstos a los científicos. Es bueno que nosotros, la gente de derecho, nos sintamos parte de la ciencia, pero no debemos creer que somos la única ciencia ética, que tenemos el monopolio de la moralidad. Los demás científicos también investigan presididos por conceptos éticos. Y así como nosotros, a veces servimos a los que dan órdenes no éticas (piénsese cuántos abogados han servido a gobiernos de facto que torturaron) así también gente de otras áreas de la ciencia sirven a quienes dan órdenes no éticas. Pero no es un problema de la ciencia sino de los hombres que la aplican. A lo largo de este sector de la monografía , voy a hacer referencia a todos los temas tratados hasta el momento, como la manipulación genética, la clonación, el proyecto genoma humano, entre otros. Creo que estos temas fueron tocados desde un campo biológico y no debemos olvidar que el hombre es un ser emocional, social y pensante, que posee ciertos valores que deberían limitar sus actos . Por ello voy a tratar de explicar las consecuencias e inconvenientes éticos y morales que podrían surgir.
Manipulación genética: el desafío actual de la bioética También en este campo la humanidad puede verse afectada no ya por medio de la manipulación directa sobre su patrimonio genético, sino mediante la transformación genética de especies vegetales fundamentales para su supervivencia o mediante la liberación irresponsable en el medio ambiente de microorganismos mutados genéticamente. La supervivencia de la especie humana y los derechos de todo hombre a ser único e irrepetible, a poseer un patrimonio genético inviolado y a preservar la privacidad de ese patrimonio son los valores fundamentales que están en juego. Es probable que resulte correcto considerar que la sustitución de genes no es muy diferente, en principio, al trasplante de órganos, mientras sólo sean las células somáticas (es decir, células distintas a las células reproductivas) las que sean cambiadas, porque la alteración de estas células, mientras pueda prevenirse una enfermedad monogenética de su desarrollo en un paciente que ha heredado esos genes, no afectará a la descendencia de ese paciente. Sin embargo, la cuestión de si debería ser siempre lícito suplantar una célula germinal (reproductiva) es una cuestión moral diferente, y no debería dejarse a los profesionales médicos decidir solos, ya que es obligación suya explicar a las personas profanas en estos asuntos qué implicaciones pueden derivarse de tales cambios. Lo que hace el problema difícil de resolver es que la manipulación de la línea germinal afectará a futuras generaciones de personas, y aunque a primera vista pueda creerse que el efecto será benéfico, pues supone la eliminación de una enfermedad hereditaria en una familia entera para siempre, no podemos establecer qué otros efectos pueden producirse, y serán las generaciones futuras las que sufran las posibles equivocaciones. Si manipulamos las células germinales de animales, y no de humanos (por ejemplo al clonar un embrión, separando células en una etapa muy temprana desde su fertilización y permitiendo su desarrollo como un 'gemelo idéntico' independiente), podríamos crear entonces grupos de estos animales dotados de las cualidades genéticas que queremos. Pero si resulta que hay algún defecto en el grupo (causado, quizás, por la desviación de los medios de desarrollo de los embriones, o por algún error en el procedimiento), o si cambiamos de idea sobre la variedad de animales que se pretende, entonces podemos, si fuera preciso, destruir el grupo completo. Esto no se puede hacer en el caso de los humanos. El conflicto es el siguiente: estamos obligados, en atención a la moral, a tratar a los humanos como individuos de los que no se puede disponer o intercambiar de un modo gratuito. Podría ser necesario imponer este consenso moral a través de la legislación, y así levantar una barrera que ni médicos ni científicos puedan traspasar.
Con el desarrollo de esta monografía comprendí la importancia de la ciencia en nuestra sociedad, pero aquella ciencia que pretende ayudarnos y no la que tiene fines políticos o económicos, recordando la frase del colegio, "se aprende por amor a la verdad y se enseña por amor a los demás" me di cuenta el amor que deben tener los científicos a la sociedad por su ganas de aprender desmedidas y esas ansias para dejar un legado a las futuras generaciones, pero también pensé en los políticos que muchas veces ven en la ciencia la posibilidad de ganar dinero, cueste lo que cueste, imagine con esta frase como estuvieron los físicos en la década de los cuarenta cuando debían decidir si seguirían adelante con las investigaciones sobre la fisión nuclear, encima de los cadáveres de Hiroshima y de Nagasaki. En Argentina, a diferencia de los países del primer mundo, la ciencia tiende a desaparecer, provocando la llamada "fuga de cerebros" y no olvidemos los casos como el del Dr. Favaloro que a pesar de ser necesitado y proclamado por otros países, el ayudo a las personas de su patria, amando la ciencia y al ver que esta se desvanecía, como un capitán de barco se hundió con ella y se suicido; pero esto no es todo, no olvidemos a los trabajadores del Conicet que se ven olvidados por un gobierno que soluciona los problemas con la represión. Viendo un poco de historia encontramos en primer lugar a la biociencia, que hasta la segunda mitad del siglo XIX, consistió nada más que en la observación de seres vivos. Observaba, describía, anotaba, apuntaba, clasificaba seres vivos. Cuando Leclerc demostró que las especies vivas no son inmutables, y cuando Mendell descubrió en 1865 las leyes que rigen la transmisión de los caracteres hereditarios, se pasó de esa pura observación estética a la genética. ¿Qué es la genética?. Es la parte de la biología que trata de la herencia y de lo relacionado con ella. Entonces se empezó a comprender las leyes fundamentales de la herencia. Y de esto se pasó a la biotecnología, que es una forma de intervención sobre los seres vivos. La ingeniería genética de la que recién se hablaba, abarca las técnicas de manipulación del genoma. Y tomó un primer plano, como exigencia imprescindible, la bioética. Esta presenta, respecto de la actividad de quienes desarrollan la biología, algunas características singulares. Hoy en día podemos ver a la Biotecnología como una ciencia que crece a pasos agigantados y no le da tiempo a los hombres a analizar detalladamente todos las implicaciones que implican sus avances .Como toda ciencia fáctica necesita experimentar y en esas experiencias muchas veces se cometen equivocaciones, las cuales no se justifican con frases como "con los errores se aprende" o " el fin justifica los medios" pues esta ciencia manipula la vida y no se puede jugar con ella. Por otra parte la biotecnología mejora nuestra calidad de vida y trata de compensarnos con mejores productos a precios más accesibles, creando nuevas sustancias a partir de microorganismos, como alimentos, nuevos fármacos y productos para el ambiente. Antes de comenzar la monografía, solo relacionaba a la manipulación genética con la clonación, pero luego, al investigar me di cuenta de la gran cantidad de técnicas posibles que se pueden emplear para mejorar nuestra salud; una de las que más me llamo la atención fue la regeneración de células que permitirá ayudar a aquellas personas que necesitan transplantes de órganos, que tienen la piel quemada, o les falta algún miembro del cuerpo; o la posibilidad de recombinar el ADN, creando o alterando las formas de vida y desarrollando alimentos transgenéticos. Con el proyecto genoma humano me sorprendí al ver que una empresa reciente como "Celera Genomics" sea capaz de dejar atrás a un esfuerzo coordinado mundial, pero analizando todo lo que el descubrimiento del genoma implica me di cuenta de la importancia que estas empresas tienen por conocer y por sobre todo por patentar los genes descubiertos, y esa importancia radica en que la futura medicina, la medicina genómica se basa en el uso de los genes para predecir o combatir la enfermedades; por lo tanto las personas necesitarán ocupar esa información todo el tiempo y pagar un derecho de patentamiento. Retomando el tema de la medicina genómica debo aclarar que las técnicas de esta nueva ciencia, como la terapia genética permitirán combatir casi todas las enfermedades que asechan al siglo XXI como el cáncer y desarrollar fármacos que mejoren nuestras vidas en todo sentido. Lo nuevo genera angustias, cuando Copérnico, en el siglo XVI, y Galileo, en el siglo XVII, sostuvieron la teoría heliocéntrica, le señalaron al hombre que su mundo, su tierra, no era el eje del Universo, y esto causa angustias; cuando Colón le demostró al europeo que el eurocentrismo era falso, porque el mundo no continuaba más allá del Mediterráneo, Colón fue avergonzado; y fue vilipendiado Freud cuando sostuvo que el albedrío es dependiente del inconsciente y del subconsciente, es decir, que el obrar del hombre no depende sólo de la pura razón. Hoy hay mucho temor, y a veces mucha resistencia a lo nuevo, pero no podemos dejar todo en manos de los gobernante y los científicos, y es así como surge la bioética o ética de la vida que ve al hombre como algo más que un ente biológico. Lo más urgente ahora es armonizar las exigencias de la investigación científica con los valores humanos imprescindibles. El científico no puede considerar el rechazo moral de la clonación humana como una ofensa; al contrario, esta prohibición devuelve la dignidad a la investigación. La dignidad de la investigación científica consiste en ser uno de los recursos más ricos para el bien de la humanidad. Por lo demás, la investigación sobre la clonación tiene un espacio abierto en el reino vegetal y animal, siempre que sea necesaria o verdaderamente útil para el hombre o los demás seres vivos, observando las reglas de la conservación del animal mismo y la obligación de respetar la biodiversidad específica. La investigación científica en beneficio del hombre representa una esperanza para la humanidad, encomendada al genio y al trabajo de los científicos, cuando tiende a buscar remedio a las enfermedades, aliviar el sufrimiento, resolver los problemas debidos a la insuficiencia de alimentos y a la mejor utilización de los recursos de la tierra. Para hacer que la ciencia biomédica mantenga y refuerce su vínculo con el verdadero bien del hombre y de la sociedad, es necesario fomentar algo que leí en la encíclica Evangelium vitae una mirada contemplativa sobre el hombre mismo y sobre el mundo, como realidades creadas por Dios, y en el contexto de la solidaridad entre la ciencia, el bien de la persona y de la sociedad. «Es la mirada de quien ve la vida en su profundidad percibiendo sus dimensiones de gratuidad, belleza, invitación a la libertad y a la responsabilidad. Es la mirada de quien no pretende apoderarse de la realidad, sino que la acoge como un don descubriendo en cada cosa el reflejo del Creador y en cada persona su imagen viviente» (Evangelium vitae, 83). FIN
- Biotecnología, Prociencia Conicet, Programa de Perfeccionamiento Docente , Julio de 1998
- Biología de Claude A. Ville., Editorial Mc. Graw Hill, páginas 621 a 2680 y 694 a 708
- El Tecnoscopio de Tomás Buch , Editorial Aique, Julio de 1997
- Revista mensual de Ciencia y Cultura "Newton Siglo XXI", Noviembre de 1998, páginas 18 a 36.
- Revista mensual "Muy Interesante", número 138, editorial García Ferre, Abril de 1997, páginas 10 a 16
- Revista semanal "Nuestra", semana del 28 de Abril al 4 de Mayo, páginas 6 a 9
- Introducción al Conocimiento de la ingeniería genética, del Dr. Aníbal R. Márquez, Editorial Machette, Edición de Agosto de 1998
- Gráficos extraídos de Enciclopedia Microsoft Encarta 2000
Páginas Web Consultadas
- EL Tribuno Edición Digital, www.eltribuno.com.ar
- CNN en Español, www.cnnenespanol.com
- La Biotecnología y la Sociedad www.geocities.com/ResearchTriangle/Thinktank/9383/
- Biotecnología http://www.ugr.es/~eianez/
Autor:
José Luis Gutiérrez
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