1. Proyecciones de la coyuntura politico-militar en chile 2. Inicio de la coyuntura 3. Los escenarios formales 4. Victoria y asuncion de lagos 5. Antes del desafuero en la corte de apelaciones 6. La posición de la marina 7. El concepto estratégico 8. Los vecinos y el riesgo regional 9. El nuevo orden mundial 10. El desarrollo y la seguridad de chile transitan a través del mar 11. El poder naval y la estrategia marítima de chile 12. Respeto a la institucionalidad 13. Nuevo presupuesto 14. Marketing 15. Otros actores 16. La "Familia Militar" pinochetista. 17. La derecha y sus medios de comunicación 18. Estados Unidos 19. El caso del General Prats 20. La situación internacional 21. La ofensiva gubernamental ante el pre-juicio 22. Despues del fallo de desafuero 24. Resumen
1. Proyecciones de la coyuntura politico-militar en chile
Marco teorico
No existen análisis objetivos de las coyunturas políticas. Para entender los hechos aparentemente caóticos de la realidad, el investigador tendrá que usar, necesariamente, conceptos de las teorías sociales y políticas, que lo orienten en un ordenamiento de sus datos y en una interpretación de ellos. De otro lado, su acercamiento a lo que estudia estará teñido de sus preferencias políticas. Quienes ignoran estas condicionantes, ocultan a sus destinatarios -generalmente vestidos de "científicos puros"- que están usando su bagaje ideológico y tratando de incidir en la política práctica, al corto o al largo plazo.
Por nuestra parte intentaremos, más que la objetividad aséptica, la imparcialidad en la exposición de los hechos de los cuales tuvimos conocimiento. Estimamos necesario explicitar de qué corrientes de la filosofía política y la ciencia política hemos extraído los conceptos fundamentales que intentan preceder este análisis coyuntural.
Señalamos tres fuentes principales:
- Marxismo. Nos parece necesario revisar, de la enorme producción de esta corriente, el capítulo de "El Capital", de Carlos Marx, donde realiza un análisis de la coyuntura del surgimiento del Estado capitalista y el papel de las fuerzas armadas en su consolidación y estructuración. De W.I. Lenin: "Las elecciones a la Asamblea Constituyente y la dictadura del proletariado", donde incluye incluso factores electorales en su análisis de la coyuntura que llevó al poder a los bolcheviches. De Antonio Gramsci, la nota de los "Cuadernos de la cárcel"(1), titulada: "Análisis de situaciones. Relaciones de fuerza" Seguimos de cerca al intelectual sardo, especialmente en lo que él llama el momento político-militar (del estudio), diferenciándolo del momento técnico-militar.
- Elitistas: Como es difícil encontrar a los padres Vilfredo Pareto y Gaetano Mosca, sugerimos las conclusiones del segundo tomo de Robert Michels, "Los partidos políticos"(Amorrortu editores, Buenos Aires, 1979).
Weberianos y sistémicos : la conferencia de Max Weber en la Asociación de estudiantes, el 28 de enero de 1919, "La política como profesión"(2) y alguno de los varios textos sobre el pensamiento político del autor alemán y de su discípulo más influyente, Talcott Parsons(3).
En los "Cuadernos", Gramsci se encuentra en una situación similar al académico. Sus reflexiones son hechas desde la cárcel, para ser usadas por los políticos prácticos. No puede ser ya el Secretario General del Partido Comunista que encabeza un movimiento popular. Debe resignarse a ser un intelectual "puro", sin abandonar un ápice su compromiso con las luchas revolucionarias de su país y del mundo. Sus reflexiones se aplican en una coyuntura histórica en la que el capitalismo de Europa está en auge, por lo que su problema no es el asalto al poder. En su lenguaje, le interesa mucho más la "guerra de movimientos", que la "guerra de posiciones". No es un marxista "estructural", cazado por la "infraestructura" -determinante e inmodificable- de su época, sino un científico de la política que busca en ese campo los actores y las acciones que modifican las situaciones, para descubrir las perspectivas de cambio en el conjunto de la sociedad.
En los textos de Marx – si se leen buscando su pensamiento político- se encontrará un agudo análisis del papel de la violencia armada en la instauración predominante del modo de producción capitalista, y la manera como el uso de la violencia pasa a ser monopolio estatal en las sociedades modernas de su tiempo, para administrar los "negocios de la burguesía". Es de alguna manera la misma conclusión a la que llega Weber: el Estado tiene la exclusividad de la fuerza armada para administrar la sociedad, la de los que mandan y la de los que (naturalmente) obedecen. En ambos, no es posible entender la política si no se analizan las relaciones entre Estado, Fuerzas Armadas y sociedad o formación social.. Otro tanto ocurre con el aporte sistémico, en que el "subsistema militar" entrega claves imprescindibles para entender las situaciones político-sociales.
Parece indispensable complementar el análisis de coyunturas y épocas con las concepciones de los pre-fascistas y de Robert Michels, pues efectivamente las elites político-militares son las que actuarán representando los intereses de las clases y los grupos sociales, y el entendimiento de su formación como tales y el papel de sus líderes, resulta un elemento obligado. Con o sin las correcciones de pensadores democráticos (el mismo Parsons ,su contradictor Wright Mills, Schumpeter, Dahrendorf, etc.) ,es una constante en los analistas políticos contemporáneos la disección de la "clase dirigente" y el seguimiento de su accionar político.
La coyuntura que se vive en Chile se inicia aproximadamente a mediados de 1999. En ese período, alcanza su expresión máxima la crisis del aleteo de la mariposa tailandesa, la corrida de capitales desde los tigres asiáticos y su difusión a nivel mundial. El crack financiero que cae sobre América Latina (4) golpea duramente al modelo chileno. La caída de las inversiones externas e internas y la brusca disminución de la cantidad y precio de las exportaciones, repercuten fuertemente en la sociedad, especialmente por la generación de altos índices de desempleo, disminución de los salarios reales y contracción de la demanda, provocando un período recesivo que por primera vez cuestiona la habilidad de los economistas de la Concertación de Partidos por la Democracia para sostener las cifras macroeconómicas. El Gobierno de Eduardo Frei Ruiz-Tagle responde con una ortodoxa política de austeridad fiscal, no endeudamiento externo y mantención de las trabas al capital extranjero, que ahonda la situación negativa de los pobres y trabajadores, perjudicando seriamente a la coalición de partidos que lo apoya.(5).
Dos fenómenos políticos se dan con cierta simultaneidad. Los actores constatan que el ex Comandante en Jefe del Ejército y Senador Vitalicio, Augusto Pinochet Ugarte, seguirá retenido en Londres por la Justicia inglesa, a petición del Juez Baltazar Garzón, que intenta extraditarlo a España, y que la salud del Dictador se resiente paulatinamente, entrando en franco deterioro físico y mental. No existe otra posibilidad que tener como dato de la realidad que ya no será el articulador del bloque hegemónico que sostuvo a su régimen, constituido por las transnacionales, los grandes grupos económicos chilenos, la derecha política, los mass-media y los Altos Mandos de las Fuerzas Armadas y de Orden Público. El otro, que aparece persistentemente en las encuestas de opinión pública, es el triunfo más probable del candidato socialista-pepedeísta (del Partido Socialista de Chile y del Partido por la Democracia), Ricardo Lagos Escobar. Esta creencia la reafirma su abrumador triunfo en las Primarias de la Concertación sobre el abanderado de la Democracia Cristiana y Presidente del Senado, Andrés Saldívar.
Los Altos Mandos de las FFAA ejercen una presión exitosa sobre el Gobierno para que éste cambiara su política de "defender principios, y no personas", como declararon reiteradamente el Presidente Frei y el Canciller José Miguel Insulza, y se lanzara a conseguir – con toda clase de apoyos internacionales viables- que el Gobierno del Reino Unido lo liberara por "razones de clemencia"(6). El Canciller de la época, Juan Gabriel Valdés Soublette (no confundir con su padre, el senador Gabriel Valdés Subercaseaux), encabeza esta ofensiva, con el apoyo privado del gobierno norteamericano y el Vaticano, y con fuertes enfrentamientos con los gobiernos de la Comunidad europea. Pero paralelamente, es posible advertir que las F.F.A.A. inician , con ritmos distintos en cada institución, un reacomodo para enfrentar al nuevo gobierno que se avisora.
La Derecha levanta como candidato al Alcalde de Las Condes (comuna del sector de altos ingresos de Santiago), Joaquín Lavín Infante. Recibe un masivo apoyo del empresariado nacional, de las empresas con matrices en EEUU y , con un exitoso marketing , remonta las encuestas hasta acercarse a menos de 2 % porcentuales de votantes, del candidato de la Concertación, en la primera vuelta electoral. En este período se da una clara diferencia entre los Altos Mandos, que no intervienen a favor de la derecha, y la "Familia Militar" , que levanta un verdadero movimiento de masas de apoyo a Lavín, denominado "Chile, mi Patria", que rompe la verticalidad tradicional y reúne a Oficiales Superiores, oficiales Jefes, suboficiales y clases (y sus entornos familiares).Empieza a expresarse cada vez con más fuerza una pugna al interior de los oficiales ® con juicios por detenidos desaparecidos. El otrora poderoso Auditor General del Ejército, General Fernando Torres Silva (más conocido por su persecución a los opositores al régimen militar en su calidad de Fiscal Militar), las emprende contra la judicatura castrense por no defender adecuadamente a los enjuiciados. El General Sergio Arellano Stark, inculpado en fusilamientos y desapariciones -sin juicio alguno- de numerosos partidarios del Gobierno de Allende, alega su inocencia inculpando a los Coroneles ® Sergio Arredondo y Marcelo Morén Brito, quienes replican con fuerza. Trascienden versiones encontradas entre el ex Jefe de la Central Nacional de Informaciones (CNI), General Arturo Gordon, y el jefe operativo de varias "razzias" de la policía secreta, oficial de Ejército (R), Alvaro Corbalán. Los medios se hacen cargo de la polémica, contribuyendo a difundir los crímenes por los que se inculpa a Pinochet.
El triunfo de la Concertación en el balotage – si bien fué por sólo 180 mil votos entre 8 millones de universo electoral- entregó a Lagos el enorme poder de la rama Ejecutiva del Estado. En el país y en el mundo se leyó como la llegada de un socialista a la Presidencia, treinta años después del triunfo de Salvador Allende.
Seis días antes, el ex Comandante en Jefe recibe la clemencia del Ministro del Interior del Gobierno de Tony Blair, Jack Straw, y regresó en medio de un enorme despliege de fuerzas militares, especialmente del Ejército y la Fuerza Aérea de Chile (FACh) con la presencia en el Aeropuerto de los tres Comandantes en Jefe y el Director General de Carabineros, y honores de Jefe de Estado. La repulsa internacional y la percepción en el Comando del candidato derechista de que su aparición los perjudica, a pesar de la casi nula respuesta gubernamental, lo llevaron a recluírse en una de sus casas.
Para entender las acciones políticas de mayo de 2.000, hay que tener en cuenta que los procesos de decisiones que incidían e inciden en las llamadas "Relaciones civil-militares" (que son, stricto sensu, entre la dirigencia política y los Altos Mandos) se situaban formalmente en tres escenarios:
1. La "Mesa de Diálogo": mecanismo político ideado para lograr un Acuerdo-Marco entre los extremos de la mesa (Abogados de Derechos Humanos y Ejército), que pueda dar cuenta a la vez de hechos poco compatibles : una versión de la historia compartible por los actores, satisfacción de las demandas de justicia de los familiares de detenidos desaparecidos y ajusticiados vis a vis amnistía de los militares implicados en esos crímenes; acuerdo en los caminos para encontrar los restos de los detenidos-desaparecidos, así como algunos señalamientos generales orientados a ser base de las reformas constitucionales democratizadoras (desmilitarizantes).
2. El Poder Judicial, teatro donde se juega el destino del Dictador (su desafuero y su eventual juicio como autor intelectual) y el juicio a los ejecutores directos (Oficiales (R)).Hay tres instancias legales sucesivas: el Juez que investiga (Juan Guzmán), la Corte de Apelaciones de Santiago y el tribunal supremo e inapelable, la Corte Suprema de Justicia.
3- El Parlamento, en donde en definitiva deben aprobarse las leyes sobre los temas de la Mesa de Diálogo y las Reformas constitucionales y legales necesarias para la desmilitarización, así como cualquier ley orientada a la aparición de los cuerpos de las víctimas, la reinterpretación de la amnistía o una nueva. El Senado o Cámara Alta es la instancia decisiva, porque allí, la derecha y el pinochetismo cuentan con una desproporcionada representación dada por el sistema electoral binomal y los "senadores institucionales" designados, entre los cuales hay cuatro ex Comandantes en Jefe. La discusión entre los partidos políticos y el logro en ella de la aprobación de la oposición, resultan necesarios para la aprobación de reformas constitucionales, que requieren un quorum calificado, no así para las leyes simples, que sólo necesitan mayoría de los senadores en ejercicio. Antecedente obligado para el Gobierno es el acuerdo-marco de la Mesa de diálogo, para ilustrar el debate de las iniciativas legales sobre detenidos desaparecidos.
4. Victoria y asuncion de lagos
El triunfo de Lagos y el retorno del Dictador obliga a los Altos Mandos a reiniciar el reacomodo. Es un movimiento sumiso en Carabineros, decidido en la Marina y la Fuerza Aérea y relativamente distante en el Ejército. Esta última institución empieza a presionar además para lograr detener la ola de juicios que caían sobre el ex Comandante y que podían llevarlo al desafuero como Senador Vitalicio (fórmula buscada en la Constitución negociada en 1989 para darle "intangibilidad") y para terminar con los juicios a los militares ® y activos, por violaciones a los Derechos Humanos. La "Mesa de Diálogo", instalada por el último Ministro de Defensa de Frei, Edmundo Pérez Yoma, presenta severas inestabilidades. La más grave ocurre luego que el abogado de Derechos Humanos Héctor Salazar descalificara moralmente al Comandante en Jefe Teniente General Izurieta y pidiera su renuncia al cargo, por su oposición al desafuero de Pinochet. El representante del Ejército en esa instancia, General Juan Carlos Salgado, advirtió sobre su retiro de la instancia por tales declaraciones. El Ministro de Defensa, Mario Fernández, debió reunir a ambos y lograr que el jurisconsulto diera explicaciones al representante militar(8).
Sigue la fuerte presión de la "Familia Militar" y la derecha más dura (la Unión Demócrata Independiente y Renovación Nacional, especialmente su Presidente, diputado Alberto Cardemil.) En este período se producen dos probables operaciones de inteligencia. La primera, exitosa, para defenestrar al Presidente de la Democracia Cristiana, Gutenberg Martínez, considerado demasiado obsecuente con el Presidente Electo. La segunda, rápidamente acallada, que consistió en publicar en el diario de confianza de la comunidad de inteligencia, "La Tercera" , un curriculum con datos privados del recientemente nombrado Subsecretario de Guerra (Ejército), Gabriel Gaspar, del Partido Socialista, con el obvio propósito de desligitimarlo(9). Pero su calidad de Profesor de la Academia de Guerra del Ejército y su solvencia técnica, primaron sobre la maniobra.
La ceremonia de traspaso de mando de Frei Ruiz-Tagle a Lagos Escobar da cuento del apoyo internacional con el que parte el nuevo Presidente. Todos los gobiernos latinoamericanos y los europeos socialdemócratas y España, envían delegaciones de alto nivel y saludos encomiásticos. Otro tanto, aunque en tono menor, hacen Estados Unidos y los países asiáticos. Se produce una irrupción espontánea de sectores populares y juveniles en las diversas concentraciones, de hondo contenido cultural, con las que se celebra el acontecimiento. Su nuevo Gabinete, si bien respeta los equilibrios de poder de los partidos que lo apoyan, tiene su impronta: un tercio de mujeres, políticos más jóvenes, no todos del agrado de las máquinas partidarias, junto a otros de experiencia y a personas de su absoluta confianza. El Presidente empieza haciendo lo que le ordena la Constitución: mandar, con apoyo ciudadano.
5. Antes del desafuero en la corte de apelaciones
Así como el regreso del Dictador y el triunfo de Lagos marcan un claro punto de inflexión en la relación Fuerzas Armadas y Sociedad, el "pre-juicio" o juicio de desafuero del Senador Vitalicio Augusto Pinochet Ugarte por la Corte de Apelaciones de Santiago, divide con nitidez la última etapa de la coyuntura que nos preocupa, que aún no termina. La política económica impulsada por el Gobierno de Lagos empieza a incorporar al Gran Empresariado en su proyecto. La reactivación adquiere un inusitado ritmo, que se expresa en un alza del Indice Mensual de Actividad Económica (IMACEC) de 6.4 % – el más alto desde abril de l998- con aumento de las importaciones y la producción industrial más arriba de lo esperado por los agentes económicos (el "Mercado",en el decir de los neoliberales). Subieron todos los sectores productivos, encabezados por electricidad y gas (16.3 %), pesca (11.9 %), transporte y comunicaciones (8,8 %) e industria y manufactura(8.2 %)(10). Dos medidas explican además la alegría empresarial: la liberación de la obligación de permanencia de un año en el país a los capitales ingresados y el anuncio de la supresión del impuesto a la ganancia a los financistas externos. Los economistas ligados a este grupo aplauden los planes gubernamentales, y la Sociedad de Fomento Fabril (SOFOFA) sube sus proyecciones de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) al 7 % anual. El presidente de la Confederación de la Producción y el Comercio (CPC), Walter Riesco, visitante habitual de la casa-prisión de Pinochet en Londres, aprueba con un riguroso silencio.El precio del Gobierno parece ser la constitución de una "Mesa de Diálogo Social" empresarios-gobierno- trabajadores y la aprobación de Reformas laborales negociadas (ni lo que quiere la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) ni lo que existe actualmente).
El Alto Mando del Ejército trató de compatibilizar su entendimiento a futuro con el Gobierno y la "civilidad", con su defensa de un juicio histórico no condenatorio, la ausencia de desafuero de Pinochet, el término de los juicios a los violadores "con uniforme" y unas reformas constitucionales que no les quiten todas las atribuciones actuales, especialmente aquellas que los transforman en "garantes de la Institucionalidad"(11).
La "Familia Militar" y la derecha "dura"(Unión Demócrata Independiente,UDI, y el ala derecha de Renovación Nacional, RN, presidida por el diputado Alberto Cardemil (12)), y parte del empresariado agrupado en la Confederación de la Producción y el Comercio(CPC), lo tironearon hacia la intransigencia, en tanto las voces internas que miran a futuro buscaron llevarlo hacia el entendimiento en el escenario democrático existente.
El Gobierno de Lagos creyó y cree posible lograr los acuerdos mencionados en la Mesa, constatanto en un texto único las posiciones divergentes, y presionar (retención del nombramiento del sucesor del fallecido ex Presidente de la Corte Suprema, Augusto Dávila y, según trascendidos, entrevistas con a lo menos dos jueces del Ministro de Justicia, José Antonio Gómez) para que el Poder Judicial desaforara a Pinochet, pero le pida posteriormente exámenes que lo declaren "demente senil" (exigencia del Código Penal para el indebido proceso), y por lo tanto no haya juicio. La insistencia pública del Presidente en dejar actuar a los jueces, apuntó con insistencia a ello. Uno de los problemas es que si los magistrados siguen el curso legal, vendrán inevitablemente las condenas a los ejecutores, con lo cual el juicio histórico quedaría sellado al margen de la Mesa.
La manera más directa de demostrar el manejo de la situación por el Presidente, fue a través de los claros, contundentes y públicos llamados de atención a las F.F.A.A. El primero, frente al almuerzo con enorme despliegue de publicidad que protagonizaron los tres Comandantes en Jefe y el Director General de Carabineros en un restaurante a las orillas del río Mapocho, en el barrio alto de Santiago (bautizado como el "servilletazo", en alusión al "boinazo" o movilización de las Fuerzas Especiales realizada por Pinochet para lograr "razones de Estado" del gobierno de Aylwin). El segundo, frente a una Declaración Pública del Cuerpo de Generales del Ejército, mientras Lagos realizaba una visita a Argentina. El texto adolecía de inexcusables errores. El Cuerpo trataba un asunto judicial del todo ajeno a sus prerrogativas y normas reglamentarias de funcionamiento , reafirmaba la calidad del Ejército de "garante de la institucionalidad", consagrado en la Constitución y, en el último punto, señalaba, sin especificar de qué se trataba, que se había instruído a los Generales "en relación a la forma de actuar en los escenarios futuros"(13). Para mayor abundamiento, no se había informado del texto antes de darlo a la publicidad, al Vicepresidente de la República. En ambas situaciones el Presidente pidió que se le dieran explicaciones, y las F.F.A.A y en particular el Ejército debieron retroceder, reconociendo la obediencia al Jefe de Estado. La derecha y la Familia quedaron sin bases para contratacar. Por añadidura, en sus intentos de torcer la voluntad gubernamental y llevarla hacia un acuerdo político extrajudicial, que los favoreciera, no fueron acompañados por sus aliados históricos, las FFAA y los empresarios, que se callaron. El incidente se daba paralelamente a las acciones de proyección institucional del Ejército, entre las que cabe mencionar su nuevo y creciente papel en las Misiones de Paz de la Organización de Naciones Unidas (ONU), expresado con nitidez en el Seminario Internacional organizado por el Gobierno sobre Operaciones de Mantenimiento de la Paz; la aprobación técnica final del cohete "Rayo" (de producción conjunta entre la empresa "Royald Ordinance", del Reino Unido, y la empresa Maestranzas del Ejército, FAMAE) que es parte de un ambicioso proyecto de Sistema de Armas de Cohetes de Artillería Rayo (SACAR); el anuncio de su participación en el Seminario organizado por el Ministerio de Defensa sobre el Servicio Militar, y su colaboración a través de Sanidad Militar a la solución de los problemas de la Atención Primaria de Salud, entre otros. Mención especial merece la asunción del Comandante en Jefe Teniente General Ricardo Izurieta, como Presidente de la Conferencia de Comandantes en Jefe de los Ejércitos de América, cuya sede será Chile por dos años, que se inscribe además en la política de diplomacia militar, en abierta contradicción con el Pentágono, que busca minusvalorizar el papel de la Defensa del territorio e incrementar las tareas policiales y de Contrainsurgencia de los ejércitos latinoamericanos.Un cuidado artículo, da cuenta del papel preponderande junto al Comandante en Jefe del General Javier Urbina (Secretario General de Ejército) y el General Juan Chacón (Jefe del Estado Mayor), deslizando que "por sus cabezas no pasa la idea de que hay que hacer manifestaciones de fuerza. Son partidarios de buscar una solución definitiva y de comenzar a generar, para ello, confianza dentro del mundo civil. Como dice una fuente, ambos responden a la idea de que los "duros-duros" comenzaron a ser una especie en extinción"(14).
La FACH y la Marina aparecieron proclives al acuerdo a futuro, pero en la coyuntura hicieron lo que históricamente ha sido su línea de acción: seguir al Ejército institucional. Ambas han presentado en los medios públicos sus proyectos estratégicos, y han evitado pronunciamientos institucionales sobre el desafuero al Dictador. Párrafo aparte merece la posición de la institución marítima, dado que constituye una contradicción muy abierta con la rama principal, el Ejército de Chile.
La Marina de Chile ha aprovechado el mes del mar y los conflictos en las relaciones civil-militares para plantearse ante el país y la dirigencia política, como la institución con mayor claridad estratégica, más disposición de entendimiento permanente en el Estado y con menor grado de conflictividad con el Gobierno.
La exposición más completa de la nueva estrategia naval, fue formulada por el Almirante Jorge Patricio Arancibia Reyes, con ocasión del inicio del mes de conmemoración de las Glorias Navales, en la Escuela Naval, ante todo el Cuerpo de Almirantes y el Presidente de la República. Un extracto de su intervención, de su propia autoría, fué publicado en "El Mercurio"(15).
Los fundamentos del cambio son tres:
l- La región está enfrentado un tránsito desde las amenazas territoriales a la percepción de los riesgos globales, con "un escenario internacional impredecible, conflictivo y en algunos aspectos anárquico"
2- Chile adoptó un modelo internacional basado en el "comercio internacional libre y seguro". El 90 % de él se realiza por mar.
3-Ante tamaña tarea, "se abre la posibilidad de sumar nuestras fuerzas" a las de otras naciones.
Ello lo lleva a proponer:
"una estrategia de compromiso con un esfuerzo de participación de nuestros medios navales en el escenario global, para asegurar el intercambio de mercaderías que permitan nuestro desarrollo y sirvan de instrumento de nuestra diplomacia para posicionar y fortalecer la estatura político-estratégica de Chile"
En suma, la lógica que propone es conformar las fuerzas navales para crear capacidades estratégicas que apoyen la política exterior del Estado.
8. Los vecinos y el riesgo regional
La Armada ve con meridiana claridad la disminución de las hipótesis de conflicto con Argentina, Perú y Bolivia. Luego de enumerar los avances de paz e integración, concluye: "Nosotros y nuestros vecinos estamos en posesión de los medios y las capacidades de causarnos daño político, económico o militar, pero las señales indican que no nos anima la intención de hacerlo. Al contrario, el camino elegido es el de la cooperación y la complementación y no de la confrontación".
Constatan, eso sí, las debilidades de algunos países con segmentos marginados de los benefecios del desarrollo, o porque los Estados han permitido que grupos delictuales o paraestatales le disputen el poder.
Pero no se trata de una lucha entre estados o de expansionismo de alguno de ellos, por lo que "llaman a la cooperación para la seguridad regional y no a la confrontación entre estados". Hay conflictos específicos que amenazan esta integración y nuestro propio desarrollo, como es el caso del narcotráfico, de la guerrilla y de los Estados depredadores de recursos naturales.
La bipolaridad terminó, pero no se sabe hacia dónde se camina. Nos entrentamos "a una situación de profundo cambio en las relaciones internacionales". Toca sólo dos aspectos cruciales:
1-La amenaza nuclear, que a futuro "está planteada , más que por la existencia de una equilibrada confrontación de países dotados de armas atómicas, por la posibilidad que esta tenencia se amplíe. Dado que Chile no está en la carrera nuclear y que dichas armas no son aptas para conflictos de mediana o baja intensidad, "debemos estar dispuestos a enfrentar conflictos con armamento convencional, particularmente cuando la realidad nos muestra que las guerras actuales producen enormes daños".
2- El segundo elemento que releva el Almirante es "el del cambio en la forma como el poder se ejerce, materializado por la legitimación del intervencionismo político, económico y militar". Condena taxativamente la intervención en Kosovo ("por sí y ante sí") y el deterioro del Derecho Internacional que "ha entrado en un terreno nuevo y resbaladizo". La conclusión, que no se ha visto en las otras instituciones , es clara:
"No estamos ni estaremos ajenos a los efectos de estos cambios, los que no podremos dejar de enfrentar, ya que la globalización y nuestro propio interés nacional nos obligarán a actuar"
10. El desarrollo y la seguridad de chile transitan a travës del mar
La Armada hace un acucioso recuento de los volúmenes de comercio que van a Europa, Africa, Asia, Oceanía, Centro y Sudamérica y Norteamérica. Repasa los conflictos que amenazan los mares de esas regiones (Timor, las Coreas, India y Pakistán, China y Taiwan), y las graves repercusiones que tendría para el país el corte de esas vías. Se detiene en particular sobre cualquier conflicto que afecte el funcionamiento del Canal de Panamá , por el que se mueve el 40 % del comercio y más de US$ 9.000 anuales. Se configura, pues, la nueva amenaza.
11. El poder naval y la estrategia marítima de chile
El lenguaje del Almirante se hace en este apartado muy preciso e inequívoco. Párrafos que lo fundan son:
"La Armada de Chile está en condiciones de ser instrumento de la acción política exterior del Estado, no sólo para conservar la integridad de nuestro territorio, sino para actuar en conjunto con los otros instrumentos del poder nacional, en la configuración de escenarios internacionales favorables a nuestros intereses nacionales"
"Los roles iniciales de la Armada: materializar la presencia internacional de Chile; asegurar nuestras líneas de comunicaciones marítimas comerciales, y proveer de movilidad estratégica para nuestras fuerzas militares expedicionarias, vuelven en gloria y majestad"
"Esta realidad nos pone ante la necesidad de visualizar caminos de aproximación que nos hagan avanzar en el diseño de doctrinas y en la obtención del equipamiento que permitan la interoperatividad entre nuestras fuerzas navales. Estas medidas no son un fin en sí mismas, sino acciones previas e imprescindibles para poder llegar a sumar nuestras fuerzas cuando sea necesario…"
"Estos antecedentes" (la integración regional y la globalización) llevan a que "las capacidades estratégicas navales con que contamos actualmente y aquellas que decidamos adquirir en el futuro, tienen como uno de sus marcos de empleo la operación en conjunto con aquellos países con los cuales compartimos no sólo intereses económicos sino también intereses políticos y valores que consideren la paz y la justicia como elementos fundamentales del ordenamiento institucional"
Desecha que "la acción unilateral de grandes Estados con vastos recursos " hagan irrelevante la participación chilena, pues hasta ellos requieren conformar alianzas y coaliciones que legitimen su accionar"
Apoya "el grado de compromiso con la paz y seguridad en los mares", como parte de la carga que corresponde al país ante la comunidad internacional..
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