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De morbosidad a entretenimiento

Enviado por Rodrigo Mansilla


Partes: 1, 2

  1. Introducción al tema
  2. Televisión nacional
  3. Televisión internacional
  4. Justificación
  5. Presentación del tema
  6. Descripción detallada del objeto de estudio
  7. Marco teórico
  8. Antecedentes históricos
  9. Análisis de programas
  10. La solución
  11. Reportajes
  12. Conclusiones
  13. Bibliografía

Introducción al tema

Hoy en día, en la televisión existen programas que presentan un alto contenido de morbosidad, programas de noticias en los que se muestra la inseguridad y la violencia con la cual constantemente mantenemos contacto, de una forma explícita y con muy pocos filtros. También encontramos reality shows y series de ficción que entretienen al público, en gran medida, utilizando escenas e imágenes que bien se pueden catalogar como morbosas.

El tema a tratar en la siguiente investigación es cómo estos contenidos agradan a una gran mayoría del público. Así, definimos morbosidad como la condición del que o de lo que se siente atraído por lo desagradable, lo cruel o lo prohibido.

Como estudiantes de producción de televisión y como televidentes, pensamos que no es necesario emitir programas de esta índole, pues sólo generan entretenimiento de bajo costo, con poca elaboración y producción que no aportan soluciones ni información de interés. Por el contrario, estamos ante la presencia de un tipo de entretenimiento enfermizo.

Existen programas que se aprovechan de recursos públicos como las cámaras de seguridad, colocadas en distintos municipios, para luego seleccionar actos morbosos e incluirlos en su contenido. Estos pueden ser un choque automovilístico, un robo, sexo en la vía pública o una violación, una persona herida, mostrar la salida de un boliche donde los adolescentes, ya sea por estar drogados o alcoholizados, comienzan peleas con insultos y las terminan con violencia física. Estos programas poseen una gran aceptación entre el público televisivo.

Por otro lado, cada vez hay más programas de noticias que, en lugar de sólo mantener al público informado, utilizan innecesariamente los recursos anteriormente mencionados para "entretenerlo". Los programas de ficción no quedan exentos de este fenómeno.

Al ver el comportamiento actual de los medios de comunicación, nos preguntamos por qué los contenidos cargados de morbosidad llaman la atención de las personas. ¿Acaso nuestra sociedad necesita de estos contenidos morbosos, bien sea en una serie, telenovela, película o en un noticiero, para entretenerse?

Además, es viable cuestionarse hasta qué punto una persona soporta todo el contenido morboso proveniente de la televisión que se introduce en su cabeza. Se debe tomar en cuenta que no sólo en programas de ficción o programas "documentales" vemos morbosidad, sino que también podemos verla en los diarios, en las revistas e, incluso, en internet. No está de más destacar que no es necesario mostrar explícitamente los accidentes, los homicidios y demás cosas que vemos en los medios informativos.

En la televisión nacional argentina, existen varios ejemplos de programación de este tipo, a continuación enumeramos algunos de los casos más llamativos.

Televisión nacional

Programas de no ficción

Calles salvajes (América TV)

Argumento del programa:

Su objetivo es realizar informes semanales de todo lo que ocurre en la calle. El conductor Martín Ciccioli aborda temáticas sociales, policiales y demás hechos "llamativos", con el supuesto fin de comprender los diferentes problemas que aquejan a nuestra sociedad. Incluso, se acentúa el hecho de que se trata de "historias de la marginalidad".

Vemos cómo el conductor del programa al momento de grabar es victima de un intento de robo. Escena probablemente buscada intencionalmente para atraer la atención del espectador. Recordemos que este programa se supone no es ficcionado.

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GPS (América TV)

Argumento del programa:

Es un programa de televisión periodístico argentino conducido por Rolando Graña una vez a la semana en el horario de las 22:15, los días domingo. El programa está estructurado sobre dos investigaciones que abarcan diversos temas como política, policiales e interés general que son presentados en el piso mediante una pantalla interactiva. También se realizan entrevistas en vivo para complementar las historias contadas en los informes.

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En la imagen que utiliza el programa para su publicidad, muestra una escena de detención, persecución automovilística y un sujeto drogándose.

Cámaras de seguridad (América TV)

Argumento del programa:

Se basa, como su nombre lo indica, en las imágenes captadas por las cámaras de seguridad que se encuentran en la ciudad, presentando los hechos más violentos o morbosos que sean grabados.

El objetivo es revelar la acción que poseen los centros de monitoreo de la provincia de Buenos Aires, a partir de la televisación de contenidos que generen interés e impacto.

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En la secuencia observamos como un hombre cruza mal la calle y explícitamente se ve cómo es arrollado por un automóvil. Las imágenes son mostradas con un tema de fondo (ver subtítulos) con el cual buscan ridiculizar la acción.

Si la realidad, que obviamente conocemos, pasa a ser televisiva transformando documentos "privados" (cámaras de seguridad) o recursos (la Policía), que deberían ser utilizados para la seguridad de la comunidad, en espectáculo y entretenimiento, o mostrando aquellos momentos no gratos en los que todos estamos incluidos, la morbosidad de la gente aumenta con estos contenidos de baja calidad, que no aportan nada positivo para la sociedad.

Noticieros

En varios canales de la televisión argentina, los noticieros también han pasado a formar parte de los programas con contenidos morbosos.

Telefe noticias (Telefe)

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La imagen muestra una noticia de Telefe Noticias en la que se puede ver unos asaltantes en acción.

América noticias (América TV)

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En la imagen vemos una fotografía del cadáver de Nora Dalmasso en el noticiero.

Más claro es el ejemplo de un canal dedicado completamente a las noticias: Crónica TV. Este canal es muy reconocido por sus placas llamativas y sus noticias con altos contenidos de morbosidad.

Crónica TV

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En la imagen vemos un notero del canal Crónica TV intentando hacerle una nota a un hombre ensangrentado tirado en el suelo.

Programas de ficción

Mujeres asesinas (Canal 13)

Argumento del programa:

Serie de ficción del género dramático y de suspenso, mezcla entre ficción y realidad, inspirada en el libro argentino del mismo nombre de Marisa Grinstein. Se reproducen casos reales de homicidios perpetrados por mujeres.

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En la primera imagen una mujer sostiene un caño con el cual golpeará a su marido. En la segunda observamos al susodicho tras recibir la golpiza.

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La esposa del hombre, que aun se encuentra vivo, lo descuartiza.

Tiempo final (Telefe)

Argumento del programa:

Serie argentina de televisión producida por BBTV y Telefe Contenidos, estrenada por Telefe el 3 de agosto de 2000. Este thriller constó de tres temporadas de 22, 21 y 26 episodios respectivamente, en la que cada historia transcurría en un solo lugar y con no más de tres o cuatro personajes.

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En la secuencia de imágenes, vemos a una mujer apuntando con un arma a un hombre (que se ve en el espejo), luego a la mujer disparando y por último, se ve al hombre tirado en el suelo con sangre.

Televisión internacional

Distraction

Argumento del programa:

Es un programa de concursos donde la gente participa para ganar dinero fácil, automóviles y demás premios. A la hora de responder unas preguntas, los participantes son sometidos a distintas distracciones.

En la imagen podemos observar una bolsa llena de serpientes colocada como un short en un hombre.

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Jackass (MTV)

Argumento del programa:

Es una serie de televisión de comedia, transmitida en sus comienzos por MTV desde el 27 de febrero de 2002. En ella, el reparto lleva a cabo divertidas actividades cuya finalidad habitualmente es infligirse dolor o buscar en estas actividades el máximo riesgo y peligro posible para divertir a los televidentes.

En la imagen vemos una pitón mordiendo el pene (cubierto con una tela blanca) de uno de los actores del programa.

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Objetivos

El objeto de la investigación es afirmar que cada vez existen más programas que poseen contenido morboso, es decir actos dañinos para la sociedad, y cómo al público cada vez le atrae más este tipo de contenidos. Durante el desarrollo se buscará responder a la pregunta ¿qué le encuentra el público televisivo de entretenido a lo morboso, a imágenes o acontecimientos desagradables y bizarros?

Se buscará demostrar que programas como los anteriormente mencionados no hacen más que arruinar o desfavorecer, por un lado, la buena televisión y, por el otro, la reputación de las localidades donde ocurren casos como robos o sexo explícito en la calle. Esto último es lo que ocurre en el programa Cámaras de Seguridad que se transmite por América TV, el cual retrata los acontecimientos ocurridos en distintas localidades.

Adicionalmente, programas como Calles Salvajes, también transmitido por América TV, suelen mostrar las salidas de los boliches bailables, donde se ve a los adolescentes peleándose a golpes, sin importar el sexo. ¿Realmente es necesario mostrar este tipo de contenidos?

Por otro lado, se supone que las imágenes mostradas en programas informativos tiene el fin de difundir y dar a conocer hechos y noticias de interés general para una sociedad, pero ¿hasta qué punto es correcto mostrar la información sin ningún tipo de filtro ni sutileza? También abordaremos cómo se muestran los contenidos morbosos en los noticieros.

Es probable que el público esté aceptando de manera gradual que profesionales de los medios informativos transgredan la barrera de la moral y lo ético. Se capturan imágenes con contenido horroroso y obsceno, como pueden ser muertes, accidentes terribles o violencia. Quizás al público cada vez le molesta o impresiona menos esto y comienza a divertirlo.

Además de mostrar la presencia de la morbosidad en la televisión, es nuestro objetivo plantear qué tipo de programación se contrapone a este tipo de contenidos que podrían tener un impacto negativo en la sociedad. Tal es el caso del canal nacional Encuentro, que apela a la educación como punto central de sus programas.

Cabe destacar que si se quiere lograr una televisión con menos morbosidad, es necesario también dejar a un lado la obsesión por los ratings a la hora de determinar qué tipo de programación se sacará al aire, ya que, como lo hemos planteado anteriormente, los contenidos de esta índole aumentan los índices de audiencia.

Justificación

El presente trabajo podrá servir para crear conciencia en los televidentes acerca de los programas que utilizan el morbo como método de captación de audiencias, para que así analicen si de verdad es productivo consumir ese tipo de programas. También será una herramienta útil para analizar la relación entre los contenidos de los programas y los índices de audiencia.

Además, queremos llegar al punto de la cualidad humana de reflexión, para determinar cómo el proceso de retroalimentación entre el televidente y el medio puede generar resultados positivos o negativos, pues si el espectador al ver contenido televisivo morboso es capaz de reflexionar sobre ello y saber que se trata de un hecho incorrecto, entonces es el resultado sería positivo, sin embargo, si esta persona toma estos hechos como algo entretenido o normal, sería realmente negativo y preocupante.

Por último, es necesario dar a conocer otros tipos de contenidos que podrían llenar las pantallas de televisión, con un impacto positivo y que pudiera cumplir la función de entretenimiento, sin necesidad de apelar al morbo.

JUSTIFICACIÓN PERSONAL

Elegimos tratar este tema, ya que notamos que gran parte de la programación de la televisión abierta argentina posee programas de bajo contenido. Con esto nos referimos a que son programas que no aportan nada útil, fomentan a la violencia y a la inseguridad, haciéndonos creer que lo que vemos sólo sirve como entretenimiento.

No entendemos cómo la morbosidad puede pasar a ser el recurso primordial a la hora de producir contendidos de entretenimiento. Mostrar la morbosidad con el fin de ganar audiencias y, por ende, beneficios económicos parece inaceptable. Sin embargo, si este tipo de entretenimiento va acompañado de una aclaración o una reflexión, como sucede en Mujeres asesinas, que lleve al público a darse cuenta de que lo ocurrido o visto en un determinado programa no es correcto y que el fin es tomar conciencia, sería distinto.

ENTREVISTADOS

-Gabriel Sáenz: Productor de América Noticias, noticiero de América TV.

-Néstor Genta: Periodista, sociólogo y educador.

-Mercedes Lazarte: Responsable de programación de Canal Encuentro, Paka Paka y Tecnópolis TV.

-Susana Appollonio: Counselor.

Presentación del tema

Conocemos por morbosidad o morbo a una enfermedad o alteración mental que produce una atracción hacia hechos y acontecimientos desagradables. Aparentemente, este término no debería tener relación con la televisión, pero sí lo tiene y no es un asunto menor, ya que la televisión influye mucho sobre la mente de los telespectadores.

Todas las personas tienen diversas características y cualidades, cada una en mayor o menor grado. Así, hay personas más morbosas que otras, así como también las hay más gentiles, generosas, egoístas, etcétera. Todo el tiempo estamos en contacto con hechos que podemos catalogar como morbosos: desde una persona cayéndose en la calle o una madre o un padre maltratando a su hijo. En lo que respecta a la televisión, hay programas que muestran violencia entre jóvenes a la salida de un boliche nocturno, programas que utilizan las cámaras de seguridad de las distintas localidades bonaerenses como entretenimiento, series y telenovelas con escenas de violencia, violación y hasta homicidios, incluso los mismos noticieros muestran imágenes de hechos desagradables explícitamente, sin dejar de mencionar un concurso de baile que aparentemente sólo trata sobre esta disciplina, pero que en realidad denigra a la mujer, mostrándola desnuda sin sentido alguno y cuyo conductor tiene un comportamiento al menos reprochable con las participantes.

También se puede encontrar este tipo de contenidos en el cine, en películas, por ejemplo, de los géneros de terror o thriller. De hecho, hay un tipo de películas llamado snuff, que consiste en grabar asesinatos y crímenes reales sin ayuda de efectos especiales y, luego, comercializarlos como entretenimiento, como una película más.

Hoy en día, con el avance de la tecnología, encontramos videojuegos casi realistas, en los que el jugador es un asesino o bien debe serlo para salvar su vida. Este tipo de juegos, como también algunas películas, están al alcance de todos, hasta de los niños. Esto puede ser perjudicial para ellos, ya que puede influenciarlos y fomentar una conducta violenta, al tomar esas actitudes como normales y cotidianas. No sólo se convirtió la violencia en parte de los juegos, sino que también se ve en la televisión y esta última tiene mucha influencia sobre las personas, tal vez no conscientemente, pero sí en el inconsciente.

Es claro que los televidentes cada vez se asombran menos con lo que ven en la televisión y hay ciertos contenidos que ya están incorporados en la psique del espectador.

No sólo en Argentina hay programas que incitan a la violencia con imágenes y escenas de morbo. También los hay, por ejemplo, en Estados Unidos. Originaria de este país, Jackass es una serie televisiva catalogada como "comedia", en la que el reparto realiza actividades cuya finalidad es infringirse dolor o poner en total riesgo su vida para "entretener" y "divertir" a los televidentes.

En Gran Bretaña se llevó a cabo un programa de concursos llamado Distraction, en el que la gente gana dinero fácil, automóviles y demás premios, contestando preguntas de bajo nivel. Esto no tiene nada de malo, hasta que nos damos cuenta de qué les hacen a los concursantes para distraerlos a la hora de responder, por ejemplo, romper una botella de vidrio en su cabeza, ponerlos junto a personas mayores de 50 años completamente desnudas o dispararles bolitas de materia fecal o huevos podridos. Puede llegar a resultar gracioso, pero no deja de ser morboso.

También puede ser considerado como morbosidad el gusto por ver peleas (ridículas) y discusiones entre famosos, como sucede en Bailando por un sueño, que se supone que es un concurso de baile entre famosos con bailarines no reconocidos, compitiendo para poder cumplir un sueño a un tercero. Aunque este formato se respeta, también se le agrega una dosis de peleas (ficcionadas) entre los miembros del jurado y los participantes o entre los mismos participantes.

En el programa Intrusos, también podemos encontrar peleas ridículas entre famosos y con el conductor Jorge Rial. El programa se encarga de desvelar "secretos" sobre la farándula argentina y, así, generar conflictos con los pertenecientes al ambiente del espectáculo. Un programa similar a éste, es el de la conductora Viviana Canosa, que trata de lo mismo. Estos programas podemos llamarlos parásitos, porque además de generar conflicto entre los famosos, viven de otros programas, como por ejemplo del anteriormente mencionado Bailando por un sueño.

En programas como Cámara en mano o Calles salvajes vemos las salidas de los boliches nocturnos, en los que los jóvenes salen borrachos o drogados y tienen peleas físicas entre ellos. ¿Qué hay de interesante en todo esto? ¿Cómo puede gustarle a la gente ver peleas o ver a otras personas bajo los efectos del alcohol o de las drogas? Igual pasa en Policías en acción, donde podemos observar cómo "solucionan" problemas domésticos, cómo levantan a un borracho de la calle o cómo atrapan a un ratero. Estos asuntos deberían ser de competencia exclusiva de las autoridades y no deberían usarse como entretenimiento ni con fines de lucro.

Lo mismo debería pasar con las grabaciones de las cámaras de seguridad de distintos partidos bonaerenses, que en vez de quedar en manos de a quien corresponde, pasan a ser parte de un show televisivo, como en el programa Cámaras de seguridad.

Descripción detallada del objeto de estudio

El objeto de estudio pertenece al medio de comunicación más masivo de todos: la televisión. De todas formas, también podemos encontrar morbo en películas, diarios, revistas e internet.

Con lo que respecta a la televisión argentina, podemos encontrar morbosidad, por ejemplo, en los programas anteriormente mencionados y otros: Cámaras de seguridad (emitido actualmente por América TV), Calles salvajes (emitido actualmente por América TV), GPS (emitido actualmente por América TV), Crónica TV, Telefe Noticias (emitido actualmente por Telefe), Noticiero Trece (emitido actualmente por El Trece), América Noticias (emitido actualmente por América TV), Mujeres asesinas (emitido por El Trece), Tiempo final (emitido por Telefe y Magazine), Policías en acción (emitido actualmente por El Trece), Intrusos en el espectáculo (emitido actualmente por América TV), Infama (emitido actualmente por América TV), Viviana Canosa (emitido actualmente por Canal 9), entre otros.

Con respecto a la televisión internacional, podemos encontrar programas como: Distraction y Jackass.

CONTENIDO DE LOS PROGRAMAS

Televisión argentina

No ficción

  • Cámaras de seguridad: Ofrece una propuesta de acción constante en la que los televidentes viven situaciones observadas por los centros de monitoreo: allanamientos, detenciones, tiroteos, accidentes automovilísticos, persecuciones, etc. El objetivo del programa es revelar la acción que poseen los centros de monitoreo de la provincia de Buenos Aires, a partir de la televisación de contenidos que generen interés e impacto.

  • Calles salvajes: Hoy las calles son violentas, calientes, imposibles de transitar. Son… calles salvajes. Martin ciccioli, las recorre para vos, mostrándote cada semana todo lo que ocurre, con los mejores informes. Porque si pasa en las calles, pasa en Calles Salvajes. Martín abordará temáticas sociales, policiales, historias de vida, que lo llevarán a entender las diferentes problemáticas de nuestra sociedad. Con un formato ágil y dinámico el programa transportará a los espectadores a cada situación que se aborde. Historias de la marginalidad contadas desde el presente. Productor general: Rolando Graña – Andrés Bombillar.

  • GPS: GPS, para saber dónde estás parado, es un programa de televisión periodístico de argentino. Es conducido por Rolando Graña y se transmite por el canal de aire América TV. El programa está estructurado sobre dos investigaciones abarcan diversos temas como política, policiales e interés general que son presentadas en el piso mediante una pantalla interactiva. También se realizan entrevistas en vivo para complementar las historias contadas en los informes. Productor general: Rolando Graña.

  • Policías en acción: El programa muestra cómo trabaja la policía argentina y una cámara sigue a un móvil policial y se muestran diferentes situaciones, que van desde peleas familiares hasta persecución de delincuentes y todos los lugares en donde la policía es llamada frente a un problema. Producción: Endemol Argentina.

Farándula

  • Intrusos en el espectáculo: También conocido simplemente como Intrusos, es un programa de televisión de espectáculos argentino. Producción: Jorge Rial y América Producciones.

  • Infama: INFAMA es el reality show de los famosos. ¿Querés saber qué hacen los famosos cuando no están frente a las cámaras? INFAMA los sigue a sol y a sombra para que conozcas como vive la farándula local. Producción: José Luis Nuñez y Gustavo Hoyle.

  • Viviana Canosa: Es un programa de televisión dedicado al espectáculo argentino. Producción: Daniel Tobal (2003-2009) – Alejandro Korol (2010-presente). Idea original: Viviana Canosa – Daniel Tobal.

Noticieros

  • Telefe Noticias: noticiero de la televisión argentina emitido por el canal Telefe. Productor ejecutivo: Rodolfo Barili.

  • Noticiero Trece: El noticiero cuenta con información en vivo y al instante, con móviles en todos los lugares de relevancia. Repasa en una hora y media, todos los temas del acontecer diario que la gente tiene que saber. Producción ejecutiva: Ruben García. Producción: Chiqui Mourelle, Marcela Davin, Valeria Tosselli, Guillermo Fernández Pagliera, Carolina Allen, Leonardo García, Agustina Muda. Dirección: Miguel Solop.

  • América Noticias: Una característica del noticiero de América TV, es el excesivo tiempo que dedican a informes intrascendentes o de escaso valor periodístico. En el afán por llenar el espacio asignado de 60 minutos, es común ver en la pantalla "informes" altamente morbosos, a veces bizarros, al igual que la repetición de "investigaciones" mediante cámaras ocultas y notas acerca de cuestiones ridículas.

Ficción

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  • Mujeres Asesinas: Serie de televisión argentina de género dramático y de suspenso, mezcla entre ficción y realidad, inspirada en el libro argentino Mujeres asesinas de Marisa Grinstein, de casos reales homicidios perpetrados por mujeres. Producción: Adrián Suar. Dirección: Daniel Barone – Jorge Nisco – Alberto Lecchi.

  • Tiempo final: Serie argentina de televisión producida por BBTV y Telefe Contenidos, estrenada por Telefe el 3 de agosto de 2000. Este thriller constó de tres temporadas de 22, 21 y 26 episodios respectivamente, en la que cada historia transcurría en un solo lugar y con no más de tres o cuatro personajes. Creado por: Alejandro y Sebastián Borensztein. Producción ejecutiva: Lilian Olivares – Marcela Calabró. Producción: Alejandro y Sebastián Borensztein. Dirección: Diego Suárez y Sebastián Borenztein.

Televisión internacional

No ficción

  • Distraction: Es un programa de concursos donde la gente participa para ganar dinero fácil, automóviles y demás premios. A la hora de responder unas preguntas, los participantes son sometidos a distintas distracciones.

  • Jackass: Es una serie de televisión de comedia, transmitida en sus comienzos por MTV desde el 27 de febrero de 2002. En ella, el reparto lleva a cabo divertidas actividades cuya finalidad habitualmente es infligirse dolor o buscar en estas actividades el máximo riesgo y peligro posible para divertir a los televidentes. Creado por: Johnny Knoxville, Spike Jonze, Jeff Tremaine.

Marco teórico

Para comenzar, debemos definir de qué se trata la morbosidad en la televisión. Gustavo Bueno (2002) habla de ella cuando define la "telebasura" como "programas de mala calidad de contenido, entendiendo por tal su chabacanería, su vulgaridad, su morbo, a veces incluso su obscenidad o su carácter pornográfico". Así pues, estamos ante un fenómeno de masas que abarca un tipo de contenidos con un impacto claramente negativo y deficiente, pero que sigue presente, tal vez cada vez en mayor medida, en la televisión argentina.

En el foro de debate Transformar la televisión que tuvo lugar en Sevilla, España, en el 2008 y que fue moderado por León Bienvenido, se refieren a la "telebasura" como una serie de "contenidos que sustentan valores dañinos para la sociedad", lo que habla un poco de las consecuencias de este tipo de programación. Sin embargo, es de destacar que la sociedad actual está acostumbrada a ver hechos y acontecimientos con gran contenido de morbosidad en la televisión. Por ejemplo, es costumbre ver fotos y videos eróticos de personajes reconocidos y la gente lo toma como algo gracioso. De hecho, es probable que el público esté aceptando de manera gradual que profesionales de los medios informativos transgredan la barrera de la moral y lo ético. Así lo señala Marshall McLuhan (1996) al escribir:

"En una cultura como la nuestra, con una larga tradición de fraccionar y dividir para controlar, puede ser un choque que le recuerden a uno que, operativa y prácticamente, el medio es el mensaje. Esto significa simplemente que las consecuencias individuales y sociales de cualquier medio, es decir, de cualquiera de nuestras extensiones, resultan de la nueva escala que introduce en nuestros asuntos cualquier extensión o tecnología nueva".

Ahora bien, también existe un proceso de retroalimentación entre la televisión y el televidente, es decir, si la televisión transmite morbosidad, el telespectador morboso lo va a comprar y así se produciría la retroalimentación, como afirma Gustavo Bueno (2002), "la audiencia en la sociedad democrática, es la que manda y la televisión basura tiene que obedecer a esta demanda", y la explicación no tiene que ver con la ética, "sino por razones de simple supervivencia democrática", culmina Bueno.

Carlos Elías Pérez (2004) también toma la definición de "telebasura" para este fenómeno de la morbosidad en la televisión y la describe "como aquella que bajo la apariencia hipócrita de preocupación y denuncia, difunde programas en los que se regodean con (…) el sufrimiento, con muestras sórdidas de la condición humana y con exhibición gratuita de sentimientos y comportamientos íntimos" y para él el fin último de este tipo de televisión es implemente "sorprender y captar al espectador".

Entonces, cabe preguntarse si es la morbosidad en la televisión la que despierta el interés por el morbo en el televidente o si es, simplemente, una respuesta al deseo natural de la audiencia que los canales explotan en su búsqueda por mejorar los ratings y, así, sus ingresos económicos.

Al respecto, Valentín Alejandro Martínez (2007) analiza la teoría de Noelle-Neumann de la espiral del silencio, que plantea que dentro de una sociedad, las minorías son capaces de aceptar una actitud adoptada por la mayoría, con el fin de encajar en dicha sociedad y de no ser alienado por la misma.

Después de pasearse por las definiciones de "telebasura", Martínez destaca que su éxito se debe no a un carácter morboso innato en el ser humano, sino a la rentabilidad de este tipo de contenidos, pues se trata de una programación con "bajos costes de producción, obtención de altas audiencias y fidelización de las mismas, fácil y barata supresión de la programación y elevados beneficios por minuto de emisión". También señala que por ello los canales de televisión defienden ese modelo y "se apoyan en argumentos tales como la libertad de expresión, la realización de experiencias sociológicas, la capacidad del telespectador para sintonizar el canal que desee" y, sobre todo, en los números, en el respaldo de la audiencia que, según ellos, responden a una adaptación del medio a la sociedad actual.

Sin embargo, para refutarlo, Valentín Alejandro Martínez recuerda la teoría de la espiral del silencio y se cuestiona si no es ese fenómeno de la búsqueda de aceptación lo que apaga las voces críticas ante un tipo de programación claramente negativo, mas productivo y rentable desde el punto de vista económico.

En cualquier caso, es un hecho que la guerra de los ratings ha aumentado la presencia de la morbosidad en los programas de televisión, pues las emisoras atribuyen el éxito de sus programas con la audiencia a la presencia del material que supuestamente quieren ver los televidentes.

La ética profesional

Según el diccionario la palabra ética proviene del griego ethikos ("carácter"). Se trata del estudio de la moral y del accionar humano para promover los comportamientos deseables. Una sentencia ética supone la elaboración de un juicio moral y una norma que señala cómo deberían actuar los integrantes de una sociedad.

Si los programas analizados anteriormente son aceptados dentro de la sociedad, quiere decir que podrían pasar a formar parte de un acto ético.

El público de los programas morbosos ya no se sorprende o cada vez cuestionan menos el contenido de los mismos. A su vez, a una gran parte del público le asombra ver que esta aceptación se vuelva cada vez más común. Pero aún cuestionando el contenido de los programas morbosos no dejan de mirarlos y disfrutar de ellos.

También hay que hablar de los individuos que proporcionan el material morboso para que luego sea difundido, es decir los profesionales de los medios, y cómo se define su sentido de ética.

La ética profesional pretende regular las actividades que se realizan en el marco de una profesión. En este sentido, se trata de una disciplina que está incluida dentro de la ética aplicada ya que hace referencia a una parte específica de la realidad.

Podría decirse, por lo tanto, que la ética profesional estudia las normas vinculantes recogidas por la deontología profesional (Se refiere a un conjunto ordenado de deberes y obligaciones morales que tienen los profesionales de una determinada materia).

La ética sugiere aquello que es deseable y condena lo que no debe hacerse, mientras que la deontología cuenta con las herramientas administrativas para garantizar que la profesión se ejerza de manera ética.

La ética y el periodismo

En ensayo de Francisco Rizzuto llamado La ética y el periodismo encontramos definiciones puntuales que hacen referencia al tipo de ética que tiene que poseer un periodista. "Comencemos a definir lo que es la ética, según el diccionario Enciclopédico Salvat: "Parte de la filosofía que trata de la moral y de las obligaciones del hombre". Hasta aquí, una definición académica".

Esa definición de ética se refiere a cualquier tipo de acción o individuo, pero luego Rizzuto agrega que es "interesante recordar el pensamiento de Juan Pablo II, precisamente sobre el tema Ética y Periodismo", basándose en la encíclica de principios de 1994, Veritas Splendor, el autor asegura que hay una vinculación entre la libertad y la verdad. Además, agrega que se basa "también en su mensaje de hace doce años, en 1984, en una reunión que mantuvo en Roma con periodistas de todo el mundo".

Así prosigue describiendo la ética que debe tener un profesional, diferenciándose de la ética en la vida cotidiana, "el Papa consideró la tarea del periodista como la de un profesional de la comunicación (…) El profesional de la comunicación (…) no tiene que ser una persona que ponga la pluma al propio uso exclusivo, sino que tiene que tener en cuenta la realidad en la cual se fundamenta". Por último afirma que Juan Pablo II "encuentra un paralelo notable entre un evangelizador y todo comunicador".

La UNESCO es el único organismo de las naciones unidas que tiene el mandato de defender la libertad de expresión y la libertad de prensa, por ello, sus miembros decidieron crear el Código Internacional de Ética Periodística, para asentar de alguna manera las bases del comportamiento adecuado de quienes tienen una responsabilidad tan grande como la de la comunicación en masa.

Uno de sus artículos habla sobre los derechos que tiene el pueblo, en el caso de la televisión sus espectadores, al momento de recibir cualquier tipo de información, tomando en cuenta la confianza que depositan en este medio tan importante, casi como una fe ciega que no debería ser traicionada. Se trata del derecho a una información verídica.

"El pueblo y las personas tienen el derecho a recibir una imagen objetiva de la realidad por medio de una información precisa y completa", reza el artículo, y se agrega que el público también tiene el derecho a "expresarse libremente a través de los diversos medios de difusión de la cultura y la comunicación".

Más adelante, se habla de la información como un bien social y no como un producto, aunque en la práctica ya hemos visto que cada vez más prima lo comercial sobre lo intelectual, lo cultural y lo educativo. Así, vemos cómo los programas de noticias o los programas que utilizan registros de las calles utilizan la información más como un producto para vender (atraer a la gente entreteniéndola con contenidos morbosos) que para el objetivo para el que en principio fueron pensados, la información.

Por ello, el periodista no sólo asume el derecho a comunicar, sino que, al tener en sus manos una herramienta tan poderosa como la presencia en televisión y toda la credibilidad que ello conlleva, queda vinculado a lo que se denomina la responsabilidad social del periodista.

Entonces, se dispone que "en el periodismo, la información se comprende como un bien social, y no como un simple producto. Esto significa que el periodista comparte la responsabilidad de la información transmitida". Por lo tanto, se debe entender que "el periodista es (…) responsable no sólo frente a los que dominan los medios de comunicación, sino, en último énfasis, frente al gran público, tomando en cuenta la diversidad de los intereses sociales".

En definitiva el periodista tiene la responsabilidad de informar, pero es necesario que el profesional encuentre un balance para que durante el proceso no transgreda las normas que establecen a algo como ético. Siempre debe cuidar la integridad de la información para no convertirla en un espectáculo.

Antecedentes históricos

Una de las características de morbo que más presenta la televisión argentina es la violencia y es ésta la que ha sido objeto de estudio en más ocasiones. Además de una fuerte presencia en los programas de ficción, los programas informativos (noticieros) muestran actualmente una fuerte predominancia del contenido violento, bien sea física, psicológica o de algún otro tipo. Según los datos de la Autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual (AFSCA), la violencia televisiva en programas de ficción se acrecienta en las emisoras que concentran el grueso de su audiencia en el prime time.

En un informe preliminar del Índice de Violencia de la Televisión Argentina (IVTV), se destacan los siguientes hechos:

a) La irrupción en pantalla de 1 acto de violencia cada 16 minutos y 23 segundos;

b) El elevado porcentaje de escenas de violencia en las que intervienen los protagonistas principales de la trama (79.4%), ya sea como víctimas o como victimarios, y

c) El bajo nivel de violencia que registra la programación televisiva estatal.

edu.red

Gráfico correspondiente a los actos de violencia en programas de ficción

Los datos recolectados confirman que en líneas generales hay niveles similares de violencia televisiva en programación de ficción y noticieros. En la televisión de aire se difunde una noticia con violencia cada 15 minutos, igual que pasa en los programas de ficción. Sin embargo, el porcentaje de violencia en el Canal 7 es mucho menor en los programas de ficción que en el noticiero. Además, el informe destaca que, como ocurre con la ficción, la tasa de noticias con violencia crece en los noticieros de mayor audiencia.

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Tabla de número y porcentajes de actos de violencia en los noticieros de televisión abierta

Como se puede apreciar en las cifras arrojadas por el estudio de la AFSCA, la violencia en la televisión está asociada a los índices de audiencia, al menos en lo que al horario se refiere. Al parecer, los canales de televisión buscan capturar a la audiencia en las horas de máxima atención aumentando la violencia en sus pantallas, sin importar de qué tipo de programa se trate, pues los noticieros y la ficción, como se pudo apreciar, muestran un comportamiento muy parecido en ese particular.

En el documental Bowling for Columbine: un país en armas (2002), el director Michael Moore entrevista a Barry Glassner, autor de La cultura del miedo, quien afirma que para ese entonces la tasa de homicidios se habían reducido en Estados Unidos en un 20 por ciento, sin embargo, la cobertura de homicidios por parte de los medios había aumentado en un 600 por ciento, una cifra que para nada reflejaba el comportamiento comparativo de este tipo de crímenes. ¿Cómo explicarse entonces que los medios muestren más violencia cuando ésta ha decrecido?

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