Introducción a la Psicología Comunitaria Latinoamericana (página 2)
Enviado por Oscar Yescas Domínguez
En base a esas experiencias podría parafrasear a Allen Guinsberg en su poema Aullido, ya que puedo decir con certez: he visto a las mejores mentes de mi generación caer, ir a prisión o desaparecer por la represión del Estado mexicano.
http://paginadepoesia.com.ar/escritos_pdf/ElAullido-AllenGinsberg.pdf
Por esos motivos mucho antes de cumplir la mayoría de edad ya estaba decidido a estudiar Psicología, pero no una Psicología que mediatizara o enajenara actuando como control social, sino más bien una Psicología que ayudara a lograr el ansiado cambio social que avizoré en mis lecturas y vi en mis sueños libertarios.
Elegí esta disciplina precisamente para ayudarme a comprender lo que estaba sucediendo y para prepararme para realizar mejores intervenciones sociales que condujeran a un efectivo y real cambio social. Por supuesto que también escogí esta profesión por los motivos que se hacían en aquel entonces: "para ayudar a los demás" pero nunca por el criterio predominante en este siglo XXI en la elección de carreras que es la de ganar más dinero.
Las lecturas que realicé en mi juventud en la década de los setentas, sobre Psicología, filosofía, sociología, antropología, economía, etc., me permitieron identificar prematuramente el papel que juega la ideología en mantener el control sobre la sociedad y evitar el cambio social. Por todos los motivos anteriores escogí la especialidad en Psicología social en mis estudios de Psicología cuando estudié Psicología en la Universidad Veracruzana.
Hace poco me encontré a un amigo de aquella época de activismo estudiantil que no veía desde hace mas de 40 años, me preguntó que fue de mi vida, le expliqué que estudié Psicología social, le hable de mis artículos que tengo publicados en monografías.com y rematé diciéndole que los contenidos de mis artículos reflejaban un fuete compromiso social: su respuesta me sorprendió sinceramente, me dijo: "sí, desde tu juventud ya pintabas tu búsqueda de un cambio social"
Durante mis estudios universitarios realizados en la Universidad Veracruzana a fines de los años setenta, tuve el privilegio de contar con varios maestros extranjeros, psicólogos sociales todos ellos que estaban en México en calidad de refugiados políticos ya que venían huyendo de las dictaduras militares en sus países de origen: Argentina, Chile, Guatemala y Uruguay.
Las enseñanzas que obtuve de ellos fueron más allá de las materias que me impartieron tales como Intervención grupal, tecnología y cambio social, sociopatología, comunicación social, Ideología y cambio social, etc. Aprendí mucho más allá de lo que enseñaban en sus materias. Aprendí de ellos a reforzar un sentimiento de compromiso social con la comunidad de procedencia y a aplicar el conocimiento científico en la búsqueda del cambio social.
Estos maestros que abandonaron sus países que se encontraban bajo dictaduras militares, fueron un gran ejemplo para mí porque mostraron no solo una gran congruencia entre el discurso y la acción, sino que también exhibieron un gran valor al ejercer su profesión arriesgando sus propias vidas en regímenes militares. Esta situación no pudo prolongarse por lo que tuvieron que abandonar sus países, familias y comunidades ante el incremento de la represión militar.
La influencia del suelo que me vio nacer, Cananea, las experiencias en el movimiento estudiantil de los setentas en la Universidad de Sonora, el ejemplo de mis maestros de Psicología social y las lecturas que he realizado a lo largo de mi vida, son las fuerzas que moldearon mi personalidad psicosocial y me permitieron ser quien soy aquí y ahora. Aquí es cuando me queda más claro el planteamiento: Para entender la Psicología individual hay que "mirar hacia fuera para entender lo de adentro", que nos dice el Psicólogo español Amalio Blanco
Hoy 43 años después de tomar la decisión de estudiar Psicología me congratulo de haber hecho la elección correcta, tengo una profesión que me permite entender la compleja realidad que vivimos, el origen de los problemas individuales, grupales, organizacionales y comunitarios. Es decir, me permite comprender la interinfluencia que existe entre el individuo y la sociedad.
¿No cualquier cosa verdad?, pues bien, agradezco la paciencia de aquellos contados lectores que me han seguido hasta aquí y en este momento entramos en el análisis de la materia que más me gusta, la intervención psicosocial en comunidades, que es precisamente aquel campo donde se prueba la firmeza, convicción y compromiso social de nuestra formación como psicólogos sociales, ya que es propiamente la Psicología comunitaria, conocida también como "la ciencia del cambio social".
¿Cómo podría lograrse el cambio social utilizando el conocimiento científico?
Es innegable que en amplios sectores de nuestra sociedad mexicana, e inclusive latinoamericana, existe una gran inconformidad social con sus condiciones de vida. Poblaciones amplias de países latinoamericanos compartimos problemas sociales parecidos: amplios niveles de pobreza, incremento de la delincuencia común y delincuencia organizada, tráfico de drogas, ambientes de corrupción, desmantelamiento del Estado benefactor, incremento del narcotráfico y consumo de drogas, implementación de políticas económicas que favorecen "al mercado" y perjudican a la población, etc. Debemos reconocer que cuando se dice esto último (favorecer al mercado), en realidad quieren decir favorecer a las grandes corporaciones en detrimento de la calidad de vida de las grandes mayorías.
Todas estas problemáticas y otras sin mencionar provocan un gran sufrimiento en la población. Por estas consideraciones considero sin temor a equivocarme que un grueso de la población mexicana en particular y latinoamericana en general, desea un cambio social, un cambio social que se presenta como una necesidad urgente.
Decía líneas atrás que los científicos sociales y académicos universitarios no debemos ignorar este sufrimiento social y tenemos que generar un mayor compromiso personal con el cambio social para crear en nuestros alumnos una toma de consciencia social y enseñarles a desempeñar un rol de agentes de cambio social en el ejercicio de su profesión.
¿Cómo podría lograrse el cambio social utilizando el conocimiento científico? Bien sabemos que muchos descubrimientos y aportaciones de las ciencias sociales son ignorados por quienes están en el poder para seguir disfrutando del mismo sin molestia alguna. Un claro ejemplo de esto es la existencia del neanderthalismo administrativo que prevalece en nuestras organizaciones, sobre todo las gubernamentales.
http://www.monografias.com/trabajos104/conduccion-cientifica-nuestras-organizaciones/conduccion-cientifica-nuestras-organizaciones
Pero en el caso de las comunidades, una vez que toman consciencia de su potencial, que logran un empoderamiento y sentimiento de pertenencia y compromiso con la comunidad, no habrá político o ejército que detenga las aspiraciones de liberación social.
Hablemos entonces de "la ciencia del cambio social" que es la Psicología comunitaria.
La Psicología social nos permite identificar las variables que influyen en la relación del individuo con su sociedad y la manera de hacerlo es reconocer tres niveles de análisis en esta interacción social: el análisis del grupo utilizando la teoría de grupos como herramienta principal para lograr una efectiva intervención que produzca cambios planeados en el grupo. Para ello necesitamos dominar el análisis del grupo, es decir, la intervención psicosocial en grupos humanos, lo cual lo podemos lograr utilizando la teoría de grupos como herramienta principal. A los interesados en profundizar sobre este tema, les recomiendo la lectura de mi artículo Intervención psicológica en grupos sociales que pueden encontrar en el siguiente link:
http://www.monografias.com/trabajos93/intervencion-psicologica-grupos-sociales/intervencion-psicologica-grupos-sociales
Posteriormente elevamos nuestro nivel de estudio al pasar del análisis del grupo al análisis de la organización que permita tomar consciencia de que vivimos en una sociedad organizacional, en un momento histórico conocido como "la era de las organizaciones" y descubrir que estamos en contacto con diferentes tipos de organizaciones las 24 horas del día. De igual forma a los interesados en profundizar en el análisis de las organizaciones les recomiendo la lectura de mi artículo Introducción a la Psicología de las organizaciones que podrán encontrar en este link:
/trabajos109/introduccion-psicologia-organizaciones/introduccion-psicologia-organizaciones
Finalmente llegamos al punto que nos interesa y es precisamente el análisis de las comunidades que nos lleva a conocer un campo reciente de la Psicología contemporánea que es la Psicología comunitaria que incluye estrategias de intervención en comunidades con fines de empoderamiento social de los integrantes de la propia comunidad, para que sean ellos mismos quienes determinen el tipo de cambios sociales que desean obtener. Por ese motivo se le conoce como la ciencia del cambio social, ya que utiliza el conocimiento científico no sólo para analizar la realidad en el contexto de la sociedad desigual en que nos encontramos, sino que busca la transformación social.
Por ese motivo sentiremos que daremos en un salto cualitativo y cuantitativo para pasar de una Psicología de grupos, a una Psicología de la organización y abordar el terreno de la Psicología comunitaria, realizando un análisis de la comunidad desde la perspectiva psicosocial y estar en condiciones de definir y describir lo que es una intervención psicosocial en comunidades.
Al ingresar al nivel de discusión sobre la intervención psicosocial en comunidades, vemos de inmediato que aumenta la complejidad teórica y por ende, práctica de la función del psicólogo, ya que el profesional de la Psicología debe abandonar su rol de especialista y aceptar una desprofesionalización de su disciplina.
Es decir, el psicólogo comunitario debe abandonar su rol de experto para lograr un aceptación de la comunidad y pasar a ser un miembro más de la misma utilizando el método de la investigación-acción.
Nos encontramos en este nivel, el análisis de la comunidad, con un objeto de estudio que se encuentra inmerso en una situación de cambios sociales constantes cuya característica principal permanente es la presencia de una crisis constante de tipo económico, político y social, con problemas sociales que se agudizan cada vez más, en el contexto de una sociedad que promueve la desigualdad social.
Es el momento en que nos damos cuenta de que el arsenal teórico práctico de la Psicología, que nos posibilitó realizar intervenciones efectivas en grupos y organizaciones, nos resulta ahora insuficiente para abordar el análisis y la intervención psicosocial de las comunidades, ya que aumentó la complejidad del objeto de intervención.
Es por ello que resulta necesario antes de planear o efectuar una intervención psicosocial en alguna comunidad, realizar una discusión de tipo epistemológico sobre los fundamentos teóricos de una psicología orientada a la intervención en comunidades con fines de cambio social.
Origen de la psicología comunitaria latinoamericana
Esta tarea nos presenta la necesidad de conocer el origen y evolución de lo que hoy conocemos como intervención psicosocial en comunidades, nombre bajo el cual confluyen varias teorías.
Es indudable que las décadas de los sesentas y setentas fueron el inicio de una serie de cambios sociales que transformaron el mundo entero, ya que se produjeron una serie de movimientos sociales que difundieron ideas económicas y políticas que influyeron grandemente en los modos de hacer y de pensar en las ciencias sociales.
/trabajos105/defensa-universidad-publica-y-educacion-emancipadora/defensa-universidad-publica-y-educacion-emancipadora
En Psicología estas ideas producen un vuelco al cuestionar el enfoque de la Psicología individual y proponer la construcción de una Psicología centrada en los grupos sociales, en el contexto social donde se desenvuelven e interactúan.
En los últimos 25 años del siglo XXI y lo que va del presente siglo han surgido y se han desarrollado en el campo de la Psicología social en Latinoamérica tres formas de expresión del trabajo del psicólogo. Estas tres corrientes de la Psicología forman parte de la corriente mundial que impulsó cambios en todos los niveles de convivencia social.
Estas tres expresiones de trabajo en la Psicología social, fueron la Psicología de la liberación, la Psicología social crítica y la Psicología comunitaria. Estas tres corrientes de la Psicología social tenían varios elementos en común. Las tres surgieron en América latina en respuesta a la crisis de la Psicología en la década de los sesentas y setentas y conformaron tres corrientes de pensamiento y acción que conformaron una "psicología socialmente sensible" (Robertazzi, Margarita, 2,011).
Las tres representaron movimientos de ruptura con los modos de hacer y hacer predominantes en el mundo de la Psicología de aquel entonces. Presentaban diferencias con la Psicología vigente, pero coincidencias entre las tres acerca de la forma de abordar la producción del conocimiento y su efecto sobre el medio social. Estas tres percepciones del quehacer psicológico estaban unidas por aspectos teóricos, epistemológicos, metodológicos, éticos y políticos.
De manera particular, la Psicología Social de la Liberación y la Psicología comunitaria, se basaron en atender los problemas de las mayorías populares, las masas marginadas, oprimidas y excluidas socialmente. A diferencia de la Psicología social europea, la Psicología social de la Liberación se enfoca en los seres humanos y grupos objetos de exclusión social.
Estas tres corrientes de pensamiento instaladas en Latinoamérica, pretenden contribuir a la transformación de las sociedades, los grupos, los individuos y las relaciones que establecen entre sí.
Estas tres corrientes de pensamiento conformaron una ola neoparadigmática que irrumpió con fuerza en los años setenta y principios de los ochenta del siglo pasado y logró crear un gran impacto en el conjunto de las ciencias sociales en general y en la Psicología social en particular.
Vemos entonces que en el último cuarto del siglo XX y en lo que va del actual milenio surgieron en el campo de la Psicología social tres expresiones que reflejaban formas de quehacer, del cómo hacer y del pensar de los psicólogos. Estas tres expresiones forman parte de la corriente mundial que surgió en los setentas como un nuevo paradigma que revolucionó el quehacer en las ciencias sociales.
Las tres expresiones de la Psicología social surgen en nuestro continente americano a raíz de la crisis que presentaba la Psicología en general y la Psicología social en articular, al no articular su intervención en el medio social circundante en ese entonces.
Su surgimiento es la expresión de una ruptura con los modos de hacer, pensar y practicar la Psicología. Con esta confluencia la psicología social latinoamericana enfrentó el desafío del subdesarrollo, analizó los efectos que producía sobre las persona y sobre las relaciones que establecían, analizando de manera particular la cuestión del poder y las posibilidades de transformación de aquellas situaciones donde prevaleciera la desigualdad y la injusticia.
En este contexto social que presentaba un cuadro sociopolítico decadente, se vio como algo natural y deseable el surgimiento de una nueva Psicología. La pregunta central de la que partieron los psicólogos sociales de esa época fuer: ¿En qué medida lo que hacemos, decimos o creemos que hacemos, es consistente con nuestra labor cotidiana y con las necesidades sociales de nuestra comunidad".
En Estados Unidos fue cuando se utilizó por primera vez el término Psicología comunitaria en la década de los sesentas por psicólogos que veían que la Psicología no atendía los recientes problemas sociales que surgieron en esa época: la lucha contra el racismo, la lucha por la liberación de la mujer, las protestas en contra de la guerra de Vietnam, el surgimiento de la música de rockandroll, el movimiento hippie, etc.
En el caso de Latinoamérica debemos analizar las condiciones y antecedentes que dieron origen en la década de los setentas a una corriente de la psicología en Latinoamérica que tiende a substituir los modelos y paradigmas predominantes en psicología social, provenientes principalmente de países desarrollados.
En 1970 derivado de las condiciones de vida en Latinoamérica donde prevalecían condiciones de pobreza y amplias masas excluidas socialmente (cualquier parecido con la realidad actual no es coincidencia), además de la militarización de varios países del cono sur (Videla en Argentina, Pinochet en Chile, Stroessner en Paraguay, Anastasio Somoza en Nicaragua, etc.), se empezó a cuestionar el grado de eficacia de un modelo de psicología social importado de los países en desarrollo y aplicado sin cambios en los países subdesarrollados, tal como era el caso de Latinoamérica.
A mediados de aquella década, la Psicología Social entra en un proceso de crisis que se experimentó en Gran Bretaña, Estados Unidos y Latinoamérica. Tal crisis se originó básicamente por el cuestionamiento a tres tipos de problemas que presentaba la Psicología Social de aquel entonces:
a) por un lado, la Psicología Social no estaba produciendo un conocimiento que pudiera ser aplicado para resolver los graves problemas sociales que padecía la población en esa época. A esto se le llamó falta de relevancia social (MartinBaro, Ignacio, 1980).
En pleno siglo XXI, me atrevo a preguntar: ¿Cuáles son los conocimientos que produce la Psicología académica contemporánea que contribuyen a resolver los actuales problemas sociales?
b) por otro lado, los estudios que se realizaban en psicología social, estaban basados en poblaciones pequeñas, con escenarios artificiales, utilizando estudiantes de licenciatura principalmente en experimentos formales. Sin embargo, a los descubrimientos localistas obtenidos se les pretendía dar validez universal, afirmando que eran aplicables a cualquier ser humano en cualquier contexto, sin importar las condiciones económicas, políticas o culturales prevalecientes.
c) Se presentó e incrementó un sentimiento de insatisfacción entre los psicólogos sociales de esa época, principalmente por la falta de utilidad y función social de su quehacer profesional en un contexto social convulsionado. Los psicólogos sociales de aquella época empezaron a experimentar malestar e insatisfacción porque el bagaje teórico práctico disponible les era insuficiente para enfrentar la problemática social imperante en diversos países latinoamericanos. Algo parecido a lo que estamos sintiendo los psicólogos en este siglo XXI.
El punto de partida para cuestionar la Psicología social de aquel entonces, fue reconocer que existen diferencias en las condiciones socioeconómicas de los países del primer mundo (Estados Unidos, Francia, Gran Bretaña) y los países de nuestra realidad latinoamericana. Es decir, estamos hablando de países desarrollados con condiciones materiales de vida muy diferentes a las condiciones materiales de vida imperantes en los llamados países subdesarrollados, o como gentilmente se ha dado en llamar "en vías de desarrollo". Así se pudo distinguir diferencias en las condiciones de vida de Juan Pérez que vivía en Tepito, México y las condiciones de vida de John Smith que vivía en Detroit, Michigan
En el caso de Latinoamérica los psicólogos sociales tendían a reproducir teorías, métodos y técnicas de estudio imperantes en Estados Unidos, Inglaterra y Francia y que aplicaban indiscriminadamente en contextos como Chile, Argentina, Guatemala, El Salvador, México, etc. Sin diferenciar si había regímenes democráticos o sociedades militarizadas enfrentando una fuerte resistencia civil.
Recordemos que en las décadas de los sesentas y setentas los contextos sociopolíticos de Latinoamérica incluían la represión y la guerra civil en El Salvador, la existencia de dictaduras en Chile, Argentina, Paraguay, Uruguay, Nicaragua, Brasil. Así como la presencia de amplias comunidades marginadas o migratorias en Venezuela y México.
En consecuencia, después de cuestionar la Psicología social oficial, se comenzó a trabajar en la construcción de una psicología social que permitiera una real liberación de los pueblos latinoamericanos de los yugos económico, político y militar de aquel entonces. Sobresale en este contexto la aportación de Ignacio MartinBaro, sacerdote jesuita de origen español, psicólogo social y profesor en la Universidad Centroamericana de El Salvador.
MartinBaro planteaba la tesis de que la Psicología latinoamericana mostraba una dependencia servil a la hora de plantearse problemas y soluciones y que inclusive se mostraba al margen de los movimientos e inquietudes de los pueblos latinoamericanos. Su crítica iba más allá al afirmar que se podía aprender más de la Psicología de los pueblos latinoamericanos leyendo novelas de Gabriel García Márquez y Varga llosa que leyendo artículos técnicos de Psicología hechos por psicólogos latinoamericanos.
Cuestionaba el mimetismo cientificista de la Psicología latinoamericana de querer parecerse a la Psicología norteamericana que ya había alcanzado el reconocimiento de "ciencia" por su apego a las ciencias naturales de donde retomó el método de investigación científica y los conceptos que valieron el título de disciplina "científica".
Es algo parecido a lo que sucede actualmente con el conductismo a ultranza que permea la praxis profesional y docente de varios colegas de Psicología en pleno siglo XXI. MartinBaro cuestionó el carácter positivista, hedonista, individualista, la visión homeostática y ahistórica de la Psicología latinoamericana.
Después de lo anterior, propuso finalmente, cuestionar el bagaje teórico y práctico de la Psicología latinoamericana y replantearlo desde la perspectiva de la vida de los pueblos latinoamericanos. La premisa de la cual partía es que si se deseaba liberar a los pueblos latinoamericanos debería construirse una Psicología de la liberación, proyecto que planteaba no solo una tarea teórica, sino también una tarea práctica.
http://23118.psi.uba.ar/academica/carrerasdegrado/psicologia/informacion_adicional/obligatorias/036_psicologia_social2/baro.pdf
Afirmaba MartinBaro que la Psicología estaba contribuyendo a mantener y regenerar las estructuras ideológicas de la dominación política y económica, al considerar que el contexto social se presentaba como un precepto incuestionable, por lo cual el individuo debía buscar la resolución de sus problemas en forma individual.
Afirmaba que si se deseaba construir una Psicología de la liberación, debería partirse de una liberación de la Psicología y la forma de hacerlo era acudiendo a las masas latinoamericanas y reconocer sus condiciones actuales de vida para conocer sus necesidades y de ahí plantear estrategias de solución basada en la Psicología.
Las aportaciones de MartinBaro en los setentas, se enriquecieron con las contribuciones posteriores y actuales de Maritza Montero, investigadora de la Universidad Central de Venezuela a quien se reconoce como una figura importante en el desarrollo de este nuevo enfoque de la Psicología social latinoamericana, así como Irma Serrano-García
La Psicología latinoamericana de la Liberación surgió entonces como un proyecto amplio de teoría y práctica liberadora dirigido las poblaciones oprimidas y excluidas de América Latina, cuyas características principales son una gran identidad común y una exclusión social endémica.
Por lo tanto, la Psicología Social de la Liberación se desarrolló vinculada en forma directa con "los problemas de las masas populares, las masas oprimidas, marginadas y excluidas en América Latina" (Mark Burton, 2,004).
http://www.juridicas.unam.mx/publica/librev/rev/polis/cont/20041/art/art6.pdf
La Psicología Social de la Liberación que nació con nombre y apellido en Centroamérica, rebasó a la Psicología Social Critica que se limitaba a la denuncia, al pasar de la denuncia a la acción, al evidenciar no solo la opresión de buena parte de la sociedad latinoamericana, sino también al proponer una praxis alternativa que le permitiera modificar la realidad inmediata.
De ambas Psicología es de donde surge una Psicología comunitaria latinoamericana que se ha desarrollado progresivamente en los últimos años. Desde su surgimiento en la década de los setentas ha logrado construir un carácter e identidad propia, consolidando nuevas aportaciones teóricas y metodológicas. A manera de resumen podría decirse que los factores que contribuyeron al surgimiento de la Psicología comunitaria fueron los siguientes:
1.- El surgimiento de una crítica a las posturas teórico-metodológicas de la Psicología individual
2.- La llamada crisis de pertinencia de la Psicología social, es decir, su falta de respuesta a los grandes problemas sociales
3.- El subdesarrollo existente en los países latinoamericanos que propiciaba un bajo nivel de vida en amplias capas de la población
4.- La existencia de dictaduras militares que controlaban a varios países suramericanos
La existencia en aquellos años de dictaduras militares en varios países de Latinoamérica, se basaba en una represión militar de amplias mayorías de la población, lo cual generó un gran sufrimiento, descontento, pero también de rebeldía social.
Esta situación que generó núcleos de resistencia y de exclusión social que la Psicología social de aquel entonces debía atender sin demora, porque representaban reclamos sociales urgentes, pero no encontraban respuesta por parte de la Psicología.
Paralelamente al desarrollo de la Psicología social de la liberación, podemos hablar de la Psicología Comunitaria, término cuyo origen se suele adjudicar en Estados Unidos, en la década de los sesentas, cuando los psicólogos de aquel país experimentaron insatisfacción sobre el enfoque de psicología clínica aplicado a problemas relacionados con la salud mental, la injusticia social, la pobreza y migración.
Es decir, los nuevos problemas sociales que se presentaron en esa década (choque de generaciones, protestas contra la guerra de Vietnam, surgimiento del hipismo norteamericano que representó un movimiento juvenil de vanguardia, surgimiento de la cultura underground, la contra el racismo imperante en Estados Unidos que se manifestaba en la segregación racial, el surgimiento de una contracultura juvenil contestataria e irreverente a través de la música del rock, la música como medio de concientización social, etc.), no eran atendidos por los psicólogos sociales de la época, encerrados en sus laboratorios en las universidades.
Podemos observar entonces que en los Estados Unidos en 1960, la situación social se caracterizaba por la aparición de fuertes movimientos de defensa de los derechos cívicos y de derechos humanos, de igual forma surgió la ideología separatista de los negros, las crisis urbanas, la guerra contra la pobreza, los arrestos y demostraciones de inconformidad estudiantil, fueron temas que la Psicología social de esa época no consideraba relevantes, pero que hicieron surgir los ideales de cambio social y lucha por los derechos de los marginados como una bandera de reivindicación social comunitaria.
Fue en Estados Unidos donde se utilizó por primera vez la expresión psicología comunitaria, en mayo de 1965, en una conferencia celebrada en Swampscott, Massachussets, a iniciativa de un grupo de psicólogos del Instituto Nacional de salud Mental de los Estados Unidos.
Lo anterior nos aporta dos puntos de origen de la actual Psicología social contemporánea en América Latina, por un lado los esfuerzos realizados por psicólogos sociales de Latinoamérica que pugnaron por crear una Psicología Social realmente latinoamericana que contribuyese a un cambio social en favor de los desposeídos, y por el otro lado, las aportaciones de colegas estadunidenses que enfrentaban cambios sociales de reciente creación que reclamaban atención y eran ignorados por la Psicología vigente en esos años.
Vemos entonces que en la década de los 60´s la Psicología Social en América Latina se dedicaba a reproducir teorías, métodos y técnicas de estudio imperantes en Estados Unidos y otros países desarrollados, sin considerar las diferencias socioeconómicas, culturales y políticas imperantes en aquellos tiempos.
Pero ya en la década de los setentas, esta dependencia empezó a cambiar al surgir la interrogante.
La pregunta de la cual partieron fue la siguiente: ¿Qué tipo de psicología social es incapaz de ocuparse de los problemas psicosociales existentes que afectan a los individuos y a la sociedad?
En lo personal creo que esta pregunta mantiene su vigencia en este siglo XXI, tan solo veamos las condiciones de desigualdad social y sufrimiento de la población.
Volviendo al tema, el contexto social en el cual surgió la Psicología comunitaria se nutrió de las aportaciones de los siguientes movimientos:
a) Surgimiento del movimiento antipsiquiátrico italiano encabezado por Franco Basaglia en Italia, que cuestionaron el encierro en el hospital psiquiátrico como alternativa válida en el tratamiento de la locura, la relación médico-paciente en la psicoterapia, el rechazo a la psicoterapia individual, el rol del experto institucional de salud, así como el tratamiento dado a la enfermedad mental, considerando el origen social de este padecimiento.
b) Los movimientos políticos de liberación en el Tercer mundo, que incluyeron la participación social de amplias capas de la población, en grandes movimientos colectivos.
c) La influencia de los movimientos de emancipación, concientización, y liberación cuyos exponentes más representativos son la teología de la liberación de Paulo Freire, la Sociología de la participación de Orlando Falls Borda , la educación popular y la sociología militante, que abogaban por una identidad latinoamericana que no dependiera directamente de potencias extranjeras.
Los factores que contribuyeron a su surgimiento, desarrollo y consolidación fueron:
1.- La crítica a las posturas teórico-metodológicas de la Psicología individual
2.- La presencia de la llamada "crisis de pertinencia" de las ciencias sociales en esa época
3.- La influencia de modelos alternos que proponían una perspectiva interdisciplinaria, más integradora e incluyente
4.- El impacto psicosocial de regímenes dictatoriales militares, que exigían una praxis psicológica que fuera consistente con los problemas específicos de los países de Latinoamérica.
5.- Efectos económicos y políticos del subdesarrollo en Latinoamérica
La revolución paradigmática de la Psicología comunitaria
Las nuevas concepciones sobre el quehacer psicológico crearon una ola neoparadigmática que arrasó con los paradigmas vigentes en los cuales se fundamentaba la Psicología con enfoque en el individuo.
Se observó que el énfasis que tenía la Psicología de aquel entonces en el individuo como objeto de estudio e intervención psicológica, con una visión de un sujeto pasivo, que se limitaba a ser receptor de las acciones del investigador para dar respuestas dirigidas, predeterminadas, impedía que desde esta Psicología se diera un aporte efectivo a la solución de los problemas sociales que reclamaban de manera urgente una respuesta.
Esos movimientos afectaron al conjunto de las ciencias sociales, pero en el caso particular de la Psicología estas ideas provocaron una ruptura epistemológica que llevó a la construcción de una nueva concepción de la Psicología que rebasó la intervención individual como método central y único del quehacer psicológico, para centrar su atención en los grupos sociales y en la dinámica interna de los individuos que los conformaban.
Se empezó a construir una nueva visión del ser humano, se le percibió como un individuo miembro de varios grupos en forma simultánea y parte integrante y activa de la comunidad a la que pertenecía, lo que le daba un carácter eminentemente social, se le vio como un ser activo, constructor de la realidad y por ello, capaz de transformar su propia realidad, una realidad que se presentaba excluyente, en la cual prevalecía la injusticia y la antidemocracia, afectando a grandes capas de la población.
En consecuencia, la Psicología comunitaria surgió como un movimiento de las ciencias sociales en América latina que se dirigía fundamentalmente a los sectores sociales excluidos, a los oprimidos, a aquellos marginados dentro de una sociedad cada vez más excluyente.
La Psicología comunitaria nace como la expresión de una inconformidad hacia una Psicología social que se caracterizaba por centrarse en el individuo, era una Psicología social psicológica, que no tomaba en cuenta y por tanto no daba respuestas a los grandes problemas sociales.
Esta Psicología social psicológica estaba encerrada en un reduccionismo psicológico, el paradigma bajo el cual se regía, mantenía una distancia entre el investigador y su objeto de estudio. Un paradigma que promovía una falsa objetividad y neutralidad científica, que retomaba del positivismo imperante que planteaba que el conocimiento científico debe ser medible, observable y verificable. Quizá a algunos de mis colegas les suene esto familiar, porque en pleno siglo XXI, la enseñanza de la Psicología en el ámbito académico, sigue manteniendo estas premisas "científicas".
Al igual que en los tiempos actuales, en la década de los setentas la realidad circundante provocaba una profunda insatisfacción social, un verdadero sufrimiento colectivo.
Los psicólogos de aquel entonces en sus intervenciones veían este clima de insatisfacción social y por su lado experimentaban otro tipo de insatisfacción, el ver que su propia disciplina era incapaz de dar una respuesta a ese sufrimiento social. Aquellos psicólogos sufrían por la separación existente entre la ciencia que practicaban y la vida cotidiana de las comunidades en las que intervenían.
Veían con pesar que las formas tradicionales de hacer psicología no eran suficientes para la problemática que enfrentaban y para combatir el sufrimiento social de las comunidades en las que intervenían. Existía una necesidad urgente de dar respuestas inmediatas a los problemas que formaban parte de la realidad circundante de las comunidades.
En consecuencia, surgió en forma natural una búsqueda de nuevas intervenciones que dio como resultado el surgimiento de nuevas formas alternativas de hacer Psicología. ¿Cómo lo lograron?, rescatando líneas de pensamiento que habían sido marginadas, ignoradas o excluidas por la ideología dominante, o por la tendencia dominante en el quehacer científico.
De esta forma, los psicólogos sociales de aquella época voltearon su mirada en la fenomenología, en las corrientes marxistas, la educación popular, la filosofía, la sociología, la antropología, formas cualitativas de investigación, etc.
Es entonces que surge una nueva práctica científica, una nueva forma de pensar y hacer psicología, que exigirá un replanteamiento, una redefinición de los profesionales de la Psicología, como de su objeto de estudio.
Es el momento de la construcción de un nuevo paradigma en ciencias sociales. Recordemos que un paradigma es una manera particular de ver la realidad, el paradigma vigente hasta ese entonces, es decir, la forma de ver la realidad en aquellos tiempos mostraba grandes limitaciones, se mostraba insuficiente para responder a los grandes problemas sociales.
Los paradigmas se van construyendo en forma colectiva, no es la sola visión de un individuo, se construyen a través de la práctica social, inclusive no son percibidos en un primer momento. Al modificar sus métodos y técnicas de intervención, después de rebasar el psicologismo y adoptar un enfoque multi e interdisciplinario, los psicólogos de aquella época estaban construyendo un nuevo paradigma, que dio lugar a una nueva Psicología que abandonaba la percepción de sujetos pasivos de los miembros de las comunidades y reconceptualizarlos como actores sociales que podían transformar su realidad y encontrar soluciones por sí mismos a los grandes problemas que estaban enfrentando.
La nueva Psicología comunitaria percibe al sujeto humano como un ser activo, dinámico, constructor de su propia realidad con necesidades y expectativas propias, pero en estrecha interrelación y con gran interinfluencia con los miembros de su comunidad. Una nueva concepción psicológica del ser humano que necesariamente presentaba la necesidad de crear nuevas formas de aproximación diferentes a las del pasado que lo veían solo como sujeto de intervención de parte de un experto en Psicología. De esta forma, de una manera progresiva, la Psicología social fue perdiendo cada vez más su sesgo individualista y al acercarse a las ciencias sociales encontró nuevos enfoques teóricos y metodológicos, cuya aplicación le daban la relevancia social de la cual carecía. El desarrollo de la Psicología Social en Latinoamérica fue dándose en la medida de que buscaba un nuevo paradigma apoyándose en las premisas siguientes:
a) Una apertura metodológica
b) Reconocer el carácter histórico de los fenómenos a estudiar
c) Prioridad por estudiar contextos naturales y no de laboratorio
d) Rechazo a la hegemonía del modelo que se quería imponer desde las ciencias naturales
e) Reconociendo un carácter activo a los sujetos de investigación como productores del conocimiento que asumen un papel político y social
f) Reconocer el carácter dinámico, dialéctico y simbólico de la realidad social
En sus inicios la Psicología comunitaria presentó un crecimiento rápido que impidió identificar un marco conceptual específico que reflejara los valores, objetivos y preocupaciones que la caracterizaban.
Pero una de sus principales características era el interés en abordar el análisis del ámbito social desde la perspectiva de la Psicología, manteniendo una resistencia que rayaba en la oposición a los enfoques individualistas que prevalecían en el campo de la Psicología en ese entonces que continúan observándose en pleno siglo XXI.
Otro elemento destacado en el inicio de la Psicología comunitaria era la promoción de la autogestión en las comunidades.
Poco a poco la Psicología comunitaria adquirió un carácter propio al consolidar nuevos aportes teóricos, metodológicos y conceptos que le permitieron consolidarse como disciplina propia.
La irrupción de la Psicología comunitaria en Latinoamérica consistió en una serie de cambios en las ciencias sociales, tanto en el ámbito teórico como práctico de la intervención social. Por eso mismo se considera que el surgimiento de la Psicología comunitaria constituyó por sí mismo, una revolución paradigmática, en la medida de que modificaba el paradigma vigente en la relación sujeto-objeto de investigación social.
El concepto de paradigma puede ser concebido como una determinada manera de pensar, de ver la realidad social y de construir un conjunto de valores que orientan nuestra construcción de la realidad. Los paradigmas nos permiten ver la realidad y a veces no. http://www.psicolatina.org/Cero/horizontes.html
Algo importante que debemos considerar es que los paradigmas se van construyendo colectivamente sin que los participantes lo perciban totalmente, no son creaciones individuales.
La revolución paradigmática en el caso de la Psicología comunitaria, consistió en que se presentó un cambio en la visión de nuestro objeto de estudio, de un sujeto pasivo en la relación sujeto-investigador que predominaba la investigación psicosocial en aquel entonces (todavía, si se me permite decirlo), a la construcción de un modelo de investigación en el cual el individuo estudiado es concebido como alguien participativo, con el cual el investigador puede y debe mantener una la relación de colaboración, que beneficiará a ambos al compartir el conocimiento teórico con el conocimiento práctico.
Esta revolución paradigmática incluyó un cambio en la autoimagen del individuo que forma parte de la comunidad, el mismo que antes pensaba que la realidad era inmutable, pasa ahora a la visión de una construcción social de la realidad, en la que todos participamos de una u otra forma. Con este cambio de percepción social, se produce un empoderamiento del individuo al tomar consciencia de que puede contribuir al logro de un cambio social de su realidad circundante y esto lo puede lograr en la medida de que incremente su participación social.
La nueva praxis de la Psicología comunitaria incluía como requisito primordial la participación de los integrantes de la comunidad en todo el proceso de transformación de la misma, con lo cual se construía un vínculo de colaboración entre los participantes, incluyendo el científico social.
Metas y valores de la Psicología comunitaria latinoamericana
Decíamos líneas arriba que la Psicología comunitaria latinoamericana es considerada como la "Ciencia del cambio social", definamos el cambio social como "una mejoría en las condiciones o la calidad de vida de las personas, como un proceso de autogestión que da paso a la autodeterminación, liberación o emancipación humana. Irma Serrano-García. 1993.
http://www.papelesdelpsicologo.es/vernumero.asp?id=576
La Psicología comunitaria latinoamericana intenta facilitar el cambio social a través de la concientización y participación de las personas involucradas respetando su diversidad. En este proceso la participación comunitaria juega un papel central, ya que no se concibe la posibilidad del cambio sin que las personas involucradas participen en alguno o todos los procesos de la intervención-acción.
La Psicología comunitaria latinoamericana presenta un fuerte compromiso con los sectores menos favorecidos de la sociedad, es decir, con la población excluida que ha sido arrojada a vivir en condiciones de pobreza en la creciente desigualdad impuesta por el neoliberalismo.
Este compromiso apunta a lograr la solución de los problemas socioeconómicos y políticos que afectan a las comunidades sociales.
Parte de la creencia de que los integrantes de las comunidades tienen los recursos o potencialidades que les permiten identificar sus necesidades más apremiantes, los problemas más urgentes de solucionar, así como las alternativas de solución más adecuadas para los mismos.
El cambio social que se busca a través de la intervención psicosocial en comunidades es crear relaciones de poder horizontales y un sentido de solidaridad con los más afectados, crecimiento de un sentido de responsabilidad social que rebase el ámbito individual y sobre todo un sentimiento de pertenencia del individuo a la comunidad que le permita construir una identidad comunitaria fortaleciendo el vínculo entre el individuo y la comunidad a la que pertenece.
La intervención psicosocial bajo esta perspectiva toma como punto de partida la percepción del individuo desde una visión de totalidad, que incluye el individuo y su pertenencia simultánea a diferentes grupos formales e informales, así como su interacción e interinfluencia con un sinnúmero de organizaciones, en el contexto de una toma de consciencia de su ubicación sociohistórica, es decir, del momento histórico que se está viviendo.
Obviamente los anterior obliga a rebasar las explicaciones psicologistas de los fenómenos sociales y a retomar un enfoque muti e interdisciplinario en la intervención psicosocial.
Finalmente y no menos importante, la intervención del Psicólogo comunitario debe guiarse por el respecto y conocimiento adecuado de la cultura popular, en una relación que obliga a la desprofesionalización de la figura del psicólogo, es decir, a la necesidad de abandonar el rol de experto en el que siempre se le ha ubicado, asumiendo una actitud de sencillez y honestidad en sus relaciones con los demás. Con lo anterior se busca integrar el conocimiento científico con el conocimiento popular, para nutrirse ambos y lograr la socialización del conocimiento científico, así como ligar la teoría basada en modelos emergentes con la práctica que permitiera la aplicación de los mismos en forma congruente y pertinente con la dinámica de la comunidad y sociedad.
Todo lo anterior gira en torno a un concepto central: la participación social
Definición de Psicología comunitaria
La Psicología social respondió a estas nuevas expresiones dando lugar a lo que hoy se conoce como Psicología social comunitaria, que fue definida "como el estudio de los factores psicosociales que permiten desarrollar, fomentar y mantener el control y el poder que los individuos pueden ejercer sobre su ambiente individual y social para solucionar sus problemas y producir cambios en el ambiente y en la estructura social" (Montero, 1982).
De esta definición destacan los siguientes elementos:
1.- El poder y las relaciones de desigualdad social
2.- La presencia de una acción transformadora sobre el entorno, tanto en la sociedad en su conjunto como sobre los propios integrantes de la comunidad, quienes son los que realizan el cambio social.
3.- Surge una nueva forma de "hacer Psicología", al implementar cambios en la metodología de intervención psicosocial. Se modifica el rol del Psicólogo y del sujeto que hasta ese momento solo habían sido objetos de estudio. El surgimiento de la Psicología comunitaria cambia la relación entre ambos al considerar a los integrantes de la comunidad como protagonistas del cambio social desde el diseño de la intervención hasta su implementación misma.
Al respecto, en mi trato con mis alumnos les insisto hasta el cansancio de que eviten hablar de las personas como "los sujetos" de la intervención psicológica, les pido que tengan presente que son personas como nosotros, de las cuales no debemos marcar una falsa distancia en nombre de una pretendida objetividad científica.
4.- Surge una crítica a las relaciones vigentes hasta ese momento de la relación individuo-sociedad, de dejar de percibir al individuo como un ente pasivo y se le concibe ahora como un agente de transformación social.
La Psicología comunitaria introdujo la idea del carácter político que existe en la relación individuo-sociedad y sobre todo de cómo es posible generar una política liberadora que se oponga a la opresión social existente.
Muchos nombres recibió esta naciente disciplina, lo cierto es que la Psicología Social latinoamericana se mostró más social y crítica que las Psicologías sociales de Europa y Estados Unidos.
En este marco y con esa intención, la intervención social comunitaria aborda los procesos de cambio y transformación y básicamente consiste en procesos intencionales de cambio, que incluyen la participación de los integrantes de la comunidad en procesos que incluyen el desarrollo de recursos de la población, así como el desarrollo de organizaciones comunitarias autónomas a través de la modificación de las representaciones acerca de su rol en la sociedad y sobre el valor de sus propias acciones para ser activo en la modificación de las condiciones que las marginan.
Las características principales de la Psicología comunitaria latinoamericana es que cuestionan el paradigma imperante en la Psicología social latinoamericana, proponiendo un paradigma emergente que incluye dentro de sus postulados el carácter histórico de la psicología, reconociendo que los fenómenos psicosociales se dan en realidades específicas.
Parte de la descripción de la realidad social como orientadora fundamental de estudios psicológicos, tomando en cuenta la estructura económica y social y sus efectos en la formación del ser social.
Reconoce el papel activos de los seres humanos, considerados como actores y constructores de su realidad y enfatiza la necesidad de orientar los estudios desde la perspectiva de los "oprimidos", ya no desde la perspectiva del hombre promedio y propone la idea de trabajar para que sus sujetos de estudio, empleen sus capacidades y potencialidades en un proceso de toma de consciencia y control sobre sus vidas y circunstancias vitales.
Por lo anterior, la participación es el eje articulador de la Psicología social comunitaria, mediante la participación se busca fortalecer el capital humano de la comunidad. Incluye el fortalecimiento de las redes sociales y el desarrollo de su capacidad para interactuar con las instituciones gubernamentales responsables de los programas sociales que involucren a la comunidad.
La participación se dirige a la toma de decisiones y el control social de los compromisos asumidos. La participación incluye la toma de consciencia de los derechos ciudadano, como el derecho a ser informado, derecho a opinar y reclamar, derecho a apelar e impugnar decisiones de la autoridad, mediante la participación se busca la confrontación de ideas para llegar a consensos y a la toma de decisiones colectivas.
Mediante la participación se busca incorporar la población beneficiaria en la gestión de los programas y proyectos sociales.
A través de la participación se busca el cambio social de las condiciones de exclusión que han presentado históricamente las comunidades marginadas. Se busca que los integrantes de la comunidad sean agentes de intervención y no solo sean concebidos como actores-objetos de la misma. Se pretende lograr a través de la participación la autogestión de los sujetos sociales que integran la comunidad.
Características iniciales de la Psicología comunitaria en América latina
Este nuevo paradigma que trajo consigo la irrupción de la Psicología comunitaria en América latina, se perfiló hasta adoptar las siguientes características observadas en un movimiento social que tuvo lugar simultáneamente en varios países latinoamericanos.
1.- El inicio de la Psicología comunitaria latinoamericana se dio como parte de una práctica nueva en Psicología social. Los movimientos colectivos plantearon un nuevo escenario al cual los psicólogos intervinieron aplicando teorías, modelos, métodos y técnicas con un enfoque interdisciplinario. Con estas prácticas empezó la construcción (sin saberlo en ese momento los psicólogos) de una nueva rama de la Psicología: La Psicología comunitaria, un tipo de Psicología que surge de una práctica transformadora.
Con ello se generó una metodología basada en la acción, la investigación-acción como forma de investigación e intervención en la realidad social.
Con este tipo de metodología se avanzó en la construcción del conocimiento tomando como punto de partida las experiencias vividas y la reflexión sobre las mismas. Fue el momento en que se descubrió que la práctica genera un "saber" y este nuevo "saber" genera a su vez nuevas prácticas.
2.- A ese tipo de prácticas se sumó la búsqueda de teorías emergentes, métodos eficaces y técnicas pertinentes, lo cual permitió no sólo dar una fundamentación epistemológica a la naciente Psicología comunitaria, sino también encontrar solución los problemas urgentes que requerían soluciones inmediatas.
3.- Pero la principal característica de la Psicología comunitaria era que la distinguía una fuerte orientación hacia la transformación social. La finalidad de su surgimiento, el objetivo general que persigue la Psicología comunitaria es el cambio social.
La psicología comunitaria surgió como una Psicología de la acción para la transformación, utilizando un tipo de metodología que demandaba un vínculo de colaboración entre los investigadores y los integrantes de la comunidad.
4.- La necesidad de comprender los fenómenos sociales que se presentaban en forma emergente, llevó a la adopción de una perspectiva multidisciplinaria que fue producto de la búsqueda de modelos teóricos, metodologías y técnicas más allá de la Psicología vigente en esos tiempos.
5.- La conversión del "sujeto pasivo de investigación" en una persona con criterio propio, capaz de tomar sus propias decisiones, con un rol dinámico, activo y participativo en el proceso de cambio social. Es decir, una persona que construye su realidad al desempeñar un rol de actor social, capaz de transformar la realidad en la que está inmerso.
6.- La redefinición del rol del psicólogo ante la incapacidad de mantener una práctica de intervención social, caracterizada por una "distancia objetiva" con el objeto de estudio.
7.- La elaboración de modelos teóricos propios que respondían de mejor forma a los problemas urgentes que se presentaban en esa realidad.
En el inicio del tercer lustro del siglo XXI sería de esperarse que la humanidad recibiera sin excepción alguna los beneficios del desarrollo tecnológico que se ha logrado, sin embargo esto no es así ya que lo que se observa en nuestra realidad es un incremento de la desigualdad social, que tiene como resultado el crecimiento de la pobreza en millones de personas en el mundo entero, sobre todo en los países latinoamericanos.
Esta desigualdad social es la causa del surgimiento de diversos problemas sociales que afectan a nuestras comunidades (pobreza extrema, delincuencia común, delincuencia organizada, adicciones diversas, etc.) y causan grandes sufrimientos a nuestras poblaciones. Junto a esta desigualdad social y sus efectos nocivos para la población se observa una baja participación social de los integrantes de nuestra sociedad en la atención a los grandes problemas sociales, lo cual es sin duda alguna resultado de la implementación de estrategias de control social por parte de la élite en el poder que utilizan todos los recursos para mantenerse en el mismo, incluido el uso de la ciencia social para lograr la manipulación, el conformismo, la obediencia y la sumisión.
En este contexto social surge la necesidad de implementar cambios sociales que conduzcan al desarrollo de un bienestar de la población general mediante la atención a los grandes problemas sociales. Las universidades públicas deben jugar un papel importante en la implementación de cambios sociales planeados, mediante la formación de agentes de cambio social que realicen intervenciones en los sectores socialmente marginados con el objetivo de contribuir a elevar su calidad de vida. En eso consiste el compromiso social que tienen las instituciones de educación superior con sus comunidades.
Las Universidades deben estudiar la manera de satisfacer las necesidades populares y no centrarse en satisfacer las necesidades de las grandes organizaciones. Deben recuperar su identidad como universidades públicas con un gran compromiso social y dejar de actuar como universidades al servicio de las empresas.
El Psicólogo requiere como parte de su formación el conocimiento teórico de la intervención comunitaria que ofrezca al estudioso de la Psicología la posibilidad de desarrollar nuevos roles profesionales para intervenir no solo con individuos sino también con comunidades específicas.
La Psicología Comunitaria como una joven disciplina científica que se encuentra aún en un proceso de consolidación de sus prácticas y de definición de su rol, ha hecho su aparición recientemente. La Psicología comunitaria se enfoca en los temas sociales que demandan o exigen cambios en la estructura social. Permite facilitar el cambio social a través de la concientización y participación de las personas involucradas, desde una perspectiva interdisciplinaria, logrando la integración del conocimiento científico y el conocimiento popular.
La Psicología comunitaria a diferencia de la Psicología individual tiene un compromiso con los sectores marginados de la sociedad y con la solución justa de los problemas sociales que les aquejan. La Psicología comunitaria es la respuesta que está demandando la población social que vive en condiciones de marginación, pobreza y con gran sufrimiento. La Psicología comunitaria es la respuesta al reclamo urgente de las comunidades por un cambio social que les permita elevar su calidad de vida.
Una premisa de la cual parte la Psicología comunitaria latinoamericana es la creencia de que las comunidades tienen los recursos o potencialidades para identificar sus necesidades y problemas para resolverlos. Al concebir como un factor central del cambio social la participación, la Psicología comunitaria permite combatir el conformismo, la indiferencia, la sumisión y la obediencia social en las que descansa el control social de nuestra sociedad en beneficio de quienes están en el poder.
La Psicología comunitaria es en concreto una estrategia metodológica basada en la investigación-acción, orientada hacia el cambio social y la concientización. El objetivo fundamental de esta práctica consiste en la movilización de un grupo particular (una comunidad), para el enfrentamiento y solución de sus problemas, los cuales a través de la intervención de un agente de cambio percibirá en sus dimensiones es reales y en sus relaciones con el medio en el que se presenta.
La intervención psicológica en la comunidad implica tener un compromiso con los sectores excluidos de la sociedad y con la búsqueda de soluciones justas a los problemas sociales que aquejan a la comunidad. Se parte de la premisa de que los integrantes de las comunidades tienen la capacidad de reconocer sus necesidades y problemas y encontrar la solución a los mismos.
La intervención psicosocial desde la perspectiva de la Psicología comunitaria conduce en forma inevitable a asumir una postura política en una sociedad que promueve la desigualdad social. Nos permite utilizar el conocimiento científico para lograr la liberación social de nuestras comunidades. Nos da elementos para enfrentar la guerra psicológica a la que nos vemos sometidos sin percatarnos de ella en nuestra cotidianeidad.
La interrogante para los psicólogos contemporáneos en este punto es la siguiente: ¿Coincidimos con las metas y valores que persigue la Psicología comunitaria?
¿Compartimos el compromiso social que la intervención psicológica en comunidades requiere?
La Psicología contemporánea se encuentra en similares condiciones a las que se encontraba la Psicología en la década de los setentas, en el sentido de que no da una respuesta a los grandes problemas sociales que enfrentan nuestras comunidades. Por ello mismo se requiere seguir el camino de la Psicología comunitaria realizando una revolución paradigmática que nos permita construir una Psicología socialmente sensible que permita dar una respuesta al sufrimiento colectivo que hoy viven grandes capas de la población en Latinoamérica y en el mundo entero
1.- Intervención psicosocial
Blanco, Amalio et al: Intervención psicosocial
Pearson Prentice Hall, Madrid, España 2,007
Amalio Blanco y Sergi Valera
Camacho, Jorge Enrique: La intervención psicosocial. Universidad INCCA de Colombia
Darío Sáenz, José
Temas de reflexión en la intervención social 1
García Peña, John Jairo
ACCIÓN PSICOLÓGICA 1 (2002) 11-24
METODOLOGÍAS DE INTERVENCIÓN PSICOSOCIAL. 2009
Peláez Romero Martha Patricia1; Cañon Ortiz Oscar Enrique2; Noreña Noreña Nestor Mario3
La intervención psicosocial en un contexto investigativo: "Lecturas psico-sociales sobre jóvenes agrópolis*desde diversos actores que los intervienen"
Aletheia n.25 Canoas jun. 2007
Méndez, Ximena El Modelo Clínico de Intervención Psicosocial Revista de Servicio Social Vol 1, Nº 1, (Mayo Facultad de Ciencias Sociales Universidad de Concepción. Chile – Noviembre) 1998. http://www2.udec.cl/~ssrevi/numero1/articulos/a4/articulo4.htm
Psicologia de la intervencion psicosocial
http://www.cop.es/perfiles/contenido/is.htm
SÁNCHEZ VIDAL, ALIPIO Y J. FRANCISCO MORALES
ACCIÓN PSICOLOGICA E INTERVENCIÓN PSICOSOCIAL. Universidad de Barcelona. UNED
Valera, Sergi. (2002).
Gestión Ambiental e Intervención Psicosocial,
Intervención Psicosocial, 11(3), 289-302.
Universitat de Barcelona
Meta-análisis e Intervención Psicosocial Basada en la Evidencia Psychosocial Intervention, vol. 20, núm. 1, 2011, pp. 95-107
Colegio Oficial de Psicólogos de Madrid
Madrid, España
Psicología Política, Nº 8, 1994, 7-28
LA DIMENSIÓN POLÍTICA DE LA INTERVENCIÓN SOCIAL*
Vega Martinez, Silvia, et al
Libro Experiencias de intervencion psicosocial
Barcelona, 2,009
Ser diferente: El reto de la psicología comunitaria
Irma Serrano-García
Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras
Hacia una psicología de la liberación
Ignacio Martín-Baró. Departamento de Psicología Universidad Centroamericana "José Simeón Cañas" (UCA) San Salvador, El Salvador http://di.uca.edu.sv/deptos/psicolog/hacia.htm
La Psicología de la Liberación: Aprendiendo de América Latina.
Mark Burton
http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=72610406
Introduccion a la psicología comunitaria
Maritza Montero
http://saber.ucv.ve/jspui/bitstream/123456789/4207/1/montero-introduccion-a-la-psicologia-comunitaria.pdf
VIDAS PARALELAS:PSICOLOGIA COMUNITARIA EN LATINOAMERICA Y EN ESTADOS UNIDOS.
Maritza Montero. Universidad Central de Venezuela
http://bugs.invest.uv.mx/~cancer/epcd/antopc01.htm
LA PSICOLOGÍA COMUNITARIA EN AMÉRICA LATINA: ESTADO ACTUAL, CONTROVERSIAS Y NUEVOS DERROTEROS
IRMA SERRANO-GARCIA. RICARDO VARGAS MOLINA* * (Universidad de Puerto Rico) http://www.papelesdelpsicologo.es/vernumero.asp?id=576
NUEVAS PERSPECTIVAS EN PSICOLOGÍA COMUNITARIA Y PSICOLOGÍA SOCIAL CRÍTICA. Maritza Montero
Universidad Central de Venezuela (UCV), Venezuela
http://www.scielo.edu.uy/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1688-40942011000100006&lng=es&nrm=iso&tlng=es
Relaciones Entre Psicología Social Comunitaria Psicología Crítica y Psicología de la Liberación Una Respuesta Latinoamericana
Maritza Montero Universidad Central de Venezuela
http://www.scielo.cl/scielo.php?script=sci_arttext&pid=s0718-22282004000200002
Teoria y practica de la psicología comunitaria
Maritza Montero
http://datateca.unad.edu.co/contenidos/401525/2013-II/montero-teoria-y-practica_comunitaria_-_fortalecimiento.pdf
LA PSICOLOGÍA SOCIAL COMUNITARIA Y SUS DIFERENCIAS Y APROXIMACIONES CON OTRAS CORRIENTES DE LA PSICOLOGÍA SOCIAL / JULIA FRANCO.
http://lasilladelcoordinador.over-blog.es/article-la-psicologia-social-comunitaria-y-sus-diferencias-y-aproximaciones-con-otras-corrientes-de-la-psico-107410117.html Monday 25 june 2012
Yescas Domínguez, Oscar
Apuntes psicosociales de una huelga universitaria
/trabajos95/apuntes-psicosociales-huelga-universitaria/apuntes-psicosociales-huelga-universitaria
Yescas Domínguez, Oscar
En defensa de la universidad pública y la educación emancipadora
/trabajos105/defensa-universidad-publica-y-educacion-emancipadora/defensa-universidad-publica-y-educacion-emancipadora
Yescas Domínguez, Oscar
¿Qué es y en qué consiste la intervención psicológica?
/trabajos88/que-es-y-que-consiste-intervencion-psicosocial/que-es-y-que-consiste-intervencion-psicosocial
Yescas Domínguez, Oscar
Intervención psicológica con grupos sociales
/trabajos93/intervencion-psicologica-grupos-sociales/intervencion-psicologica-grupos-sociales
Yescas Domínguez, Oscar
Introducción a la Psicología de las organizaciones
/trabajos109/introduccion-psicologia-organizaciones/introduccion-psicologia-organizaciones
Yescas Domínguez, Oscar
La inexorable evanescencia de nuestras vidas en el capitalismo
/trabajos107/inexorable-evanescencia-nuestras-vidas-capitalismo/inexorable-evanescencia-nuestras-vidas-capitalismo
Autor:
Oscar Yescas Domínguez.
Página anterior | Volver al principio del trabajo | Página siguiente |