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Crisis y perspectivas sociopolíticas de la Salud (página 2)


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En una concepción tradicional-clásica, vemos cómo el ejercicio de la salud pública ha negado, en muchos casos, su propia  base doctrinal, filosófica y jurídico-legal cuando omite principios como la  universalidad, integralidad y jerarquización de la atención de salud, pero más especialmente cuando olvida que es un derecho ciudadano y un deber del Estado y que esta debe hacerse con la gente, con las comunidades que participan activamente en la toma de decisiones relativas a su salud.

La pobreza de un Municipio, es un fenómeno que no obedece a factores exclusivamente endógenos, sino a otras muchas causas. Dos factores nos resultan importantes en este planteamiento, el primero: una población donde el poder adquisitivo  tan bajo, marca cada vez más la línea  de la pobreza, la cual, según los investigadores sociales Mario Murúa y Oscar Aguilera, "se fundamenta en la determinación de la cantidad o monto del ingreso que permite satisfacer las necesidades básicas  alimenticias de sus miembros". Así, vemos cómo el monto del ingreso no permite, ni siquiera, una buena alimentación y mucho menos una buena salud.

El segundo factor, va unido al primero en lo que a consecuencias se refiere, y está representado por  la insuficiente red de atención de salud, lo que limita la calidad de los servicios y el deterioro de la prestación de ellos, haciendo patente el grado de indefensión real de las comunidades más desasistidas socialmente.

El financiamiento, creación, mantenimiento y calidad de los servicios básicos: vivienda, cloacas, infraestructura asistencial, acueductos de agua potable, entre otros, son indicadores que marcan el funcionamiento y el estado del sector salud, lo que expresa el logro o no de las aspiraciones de las sociedades contemporáneas, para el goce, el buen respeto,  derecho al disfrute de los máximos niveles en salud y por tanto, una mejor calidad de vida.

Otro factor importante es la dependencia tecnológica, que nos hace muchas veces inalcanzable la adquisición de alimentos básicos y medicamentos, como lo afirma Paz Galárraga cuando dice:

"La crisis de los sistemas de salud se ha hecho más insostenible con el incremento astronómico del precio de los medicamentos y de los alimentos básicos". (Paz Galárraga, 1999, pp. 1-4).

El país, nos muestra complejos y aterradores problemas de salud, que pueden ser incriminados a la poca atención que generan en la clase dirigente y su falta de voluntad política, mala administración de los recursos, la corrupción, la irresponsabilidad y poca capacidad de innovación para afrontar y solucionar  los problemas humanos, tan cruciales, a que estas comunidades están condenadas.

Ante esta preocupación, nos hemos planteado algunas interrogantes que son de gran interés para la Ciencia Política. Conscientes de estar frente a un dilema con grandes interrogantes, pero sin una solución a la vista para toda nuestra sociedad, la pobreza ha llegado a niveles extremos cuando en Venezuela más de diez millones de habitantes se encuentran en situación de pobreza crítica, como lo afirman diferentes institutos de investigación como los el CENDES, PROVEA y ONG´s establecidas en el país y fuera de este. Muchas son las preguntas que aquí se podrían formular, tales como:

·         ¿Por qué se olvida que la salud es un derecho humano fundamental y que el logro de su máximo nivel posible debe ser objetivo de todo un orden social mundial? (OMS. Declaración de Alma Atá, URRS, 1978)

·         ¿Por qué no se ha usado la estructura municipal como unidad operativa dentro de un sistema de salud?

·         ¿Por qué no se ha pensado en que la unidad más pequeña podría favorecer la viabilidad de implementación de un plan de atención de salud más factible?

Sin duda, todo esto guarda relación directa con la comunidad y con problemas micros, llevándonos a afirmar, cada vez con mayor claridad y riesgo para nuestro país, que "toda la sociedad venezolana se ha empobrecido" (España, 2000, El Universal, C/6).

La pobreza se esconde en municipios y parroquias con características tales, que las apartan de la óptica diaria del mayor número de la clase política estacionada en nuestras capitales, quienes no están conscientes de esta situación y un hecho de ubicación geográfica, como es el caso del municipio en estudio, contribuye a apartarlos de la realidad visual de la sociedad que se desarrolla a su alrededor.

En general, la pobreza ha alcanzado niveles muy altos y una estrategia factible sería elevar los niveles de asistencia socioeconómica, de manera que el Estado logre dominarlos. El "antidesarrollo" nos ubica en una esfera poco esperanzadora, donde gira todo lo atinente a los problemas sociales y los actores involucrados, que se han convertido en una "camisa de fuerza" que alimenta un ciclo empobrecedor y de atraso.

La descentralización política territorial, ha dado origen al desarrollo de administraciones locales con ensayos nada diferenciados de la administración centralista, lo cual aduce que se deben establecer nuevos parámetros que impliquen cambios tanto estructurales como funcionales en los sectores sujetos de recursos y directrices públicas.

Mejorar las condiciones de vida en Venezuela, supone detener y revertir el impresionante proceso de intensificación y extensión de la pobreza, que se gestó en los ultimas décadas. Desde el punto de vista del desarrollo humano, lo que está implícito en ésta tarea para las políticas públicas, es "una ampliación de las oportunidades y de los derechos de las personas – desde los más elementales como el derecho a la vida, a la salud, a la alimentación, al empleo y al conocimiento, hasta los vinculados a la libertad para elegir lo que se considera valioso y a participar en la toma de decisiones que contribuya a cerrar las brechas entre los pobres y los que no lo son". (Méndez.2001:13)

Una lectura rápida de las condiciones de vida y salud de las comunidades que integran el Municipio Sucre nos daría, como primera impresión, las características más extremas de un sector ahogado en el subdesarrollo, con la diferencia de gozar de estructuras políticas que datan de una modernidad institucional de democracia política y de un figurado  Estado de Derecho Social y de Justicia.

La salud pública y su estrecha relación con la pobreza, son el interés básico de esta investigación, tomando como escenario de evaluación y formulación de política pública, el Municipio Sucre del Estado Mérida. Presentando como planteamiento hipotético un ensayo de política pública, definido como política pública paralela debido a la amplia implicación de factores para la superación de los dos objetivos centrales trazados.

El análisis del escenario en estudio, nos permitirá hacer críticas desde distintas ópticas y generar planteamientos de solución, como  resultado de  esta propuesta de investigación.

PRESENTACIÓN PRELIMINAR

Municipio y gerencia municipal, son dos conceptos dentro de la teoría política relativamente nuevos, pertenecen al ámbito de los gobiernos locales y, por ende, a la gobernabilidad en sí misma. Hoy, podemos encontrar ensombrecido el desarrollo de estas dos percepciones, en gran medida por ese factor  particular y de carácter amplio que es la pobreza y, cabe preguntarse la certeza de las siguientes premisas:

·         Si la pobreza del Estado ha generado la pobreza del municipio o, 

·         La riqueza del Estado no ha sabido insertarse en la lucha contra la  pobreza del municipio.

Venezuela presenta una serie de contradicciones. Poseemos un Estado rico con una distribución municipal respaldada por instrumentos jurídicos idóneos, pero, la gerencia no logra siempre niveles de eficiencia que enfrenten los altos índices de pobreza en su interior. En este sentido, hemos escogido un municipio específico que cumple todos los requerimientos legales y jerárquicos a nivel del Poder Nacional, y un área muy particular que puede brindarnos la posibilidad de la conformación de un estudio teórico, para detectar las fallas e irregularidades que apuntan a la imposibilidad de organizar una lucha efectiva contra la pobreza.

Esta investigación busca analizar los elementos conceptuales claves que se integran en el Municipio, junto a la Salud y la Pobreza, y enmarcarlos en el pensamiento de Málaga y Manzanilla:

 "Se plantea entonces una revisión de los roles de los gestores de la salud en la comunidad y a establecer un canal de comunicación abierto y permanente, entre la sociedad civil, el equipo de salud y el nivel político social…" (Málaga y Manzanilla, 1996:24.)

La comprensión del alcance social de estos tres elementos, nos permitirá conformar una idea de los distintos "afectos" que pueden incidir en una comunidad si cada uno de ellos no presenta un desarrollo factible y coordinado; en el caso de los dos primeros -Municipio y Salud- y con el último -la Pobreza- la variedad de niveles que puedan reflejar a lo interno, que sé verá reflejada en la comunidad y el municipio.

Es de gran interés, tener en cuenta cómo al centro de estos tres factores, se ubican dos elementos políticos de vital importancia. El primero, conformado por las prácticas políticas en su sentido general y en el segundo, el tipo de administración en su sentido regional – local, pero sin perder de vista la administración nacional. Efectuar un estudio con visión sociopolítica, debe partir de éstas circunstancias y, para ello, tratamos de realizar un ejercicio de reconstrucción de sistemas donde "variables generales potenciales"" demarcan con gran influencia "variables potenciales locales."" Sin embargo, los sistemas de salud en los municipios venezolanos no logran, en su mayoría, los objetivos propuestos debido a circunstancias de manejos dolosos, gerencias no efectivas y desconocimientos de realidades municipales, es decir, el no-acatamiento a las propuestas de respuestas formales y efectivas, tendientes a superar los desequilibrios socioeconómicos de un Municipio.

Cuando tratamos el tema del Municipio y la Salud, nos referimos, estrictamente, a las instituciones de Salud Pública que allí residen, entendiendo por esta última, un sistema de acción cuya finalidad es:

"atender la demanda de servicios médico-asistenciales de la mayoría de la población, la que no dispone de ingresos suficientes para recurrir a los servicios médicos privados y que no esta adscrita al régimen del IVSS. Estas instituciones dependen de organismos como el Ministerio de Sanidad y Desarrollo Social*, la junta de beneficencia pública y las Entidades Federales. Cubre por lo menos en 70% de la población y a ella recurren en busca de asistencia la mayoría de los empleados y obreros no asegurados, los trabajadores temporales, los trabajadores independientes, los desempleados y sus familiares y el grueso de la población rural del país" (Chossudovky.1982.94 )  

La definición de Michel Chossudovki, en su libro  "Miseria en Venezuela", nos permite observar, a primera vista, el papel del Municipio, como figura garante del sistema de salud el cual se enfrenta, a un sector poblacional privado de un buen sistema local de salud que inducen a una necesaria transformación.

El Municipio, como figura política, tiene un carácter preponderante en la administración pública, puesto que es el acercamiento más efectivo del poder político con la parte ciudadana. Algunos autores consideran que:

"La gestión pública de salud, ha funcionado bajo un sistema de administración, caracterizado por procesos inadecuados de planificación, de organización, de dirección y control, situación que se constata en el conjunto de resultados insatisfactorios que hoy se observan en el área, entre los que podemos mencionar el incremento de las tasas de morbilidad y mortalidad como producto de una gama  de enfermedades infecto-contagiosas; así como también las generadas por los procesos de contaminación ambiental". (Pérez Lugo.1998.38)

Esta crítica conlleva a fijarnos una propuesta de estudio en un municipio específico, para romper las conjeturas de lo general, lo abstracto y multifactorial, partiendo, así, de un área de tipo micro y de carácter rural que pueda prestar atención a la resolución de problemas, cuyo impacto se sienta en otros ámbitos rurales-municipales, entendiendo esta propuesta como aquella que va en sentido inductivo, de lo particular a lo general:

"En tal sentido, dentro de los aspectos a evaluar para conocer la medida de efectividad de  un plan o programa de salud pública, pueden hallarse puntos que tocan  desde la evaluación de la implementación del plan o programa. (Ballart.1972.76), es decir, su cobertura y la forma en que se está administrando para la utilización de los recursos disponibles y para la distribución final del servicio, hasta la evaluación de tipo pluralista o de naturaleza política en la cual se analizan valores, opiniones e intereses de los actores  que tienen relación con el plan o programa, utilizando métodos cualitativos". (Romero Díaz, 1998,122).

Discernir sobre Municipio y Salud, implica un análisis de carácter complejo que trae implícito el tema de la pobreza. El Municipio en estudio, guarda una relación simbiótica con la pobreza, lo cual nos permitirá profundizar las líneas de comportamiento municipal y de programas de salud hacia esta área. La pregunta en cuestión es: ¿qué se ha hecho y qué se ha dejado de hacer, para superar las deficiencias de la salud y la pobreza en el Municipio Sucre?

A continuación, presentaremos algunos perfiles característicos del  Municipio Sucre en estudio, lo que nos permitirá luego, junto con las reflexiones anteriores, dar paso al primer capítulo de la investigación, esperando en lo general que sea lo más provechoso para la viabilizacion de una gerencia social.

CUADRO Nº 01

POBLACIÓN, SUPERFICIE Y DENSIDAD DEMOGRÁFICA

SEGÚN PARROQUIAS. MUNICIPIO SUCRE.

ESTADO MéRIDA, 1997.

Parroquia

Población

(Hab)

Superficie

(Hab)

 Densidad

(Hab/Km2)

Localidad Capital

Total Municipio

40.384

946

42,69

Lagunillas

Sucre

15.243

115

132,55

Lagunillas

Chiguará

1.251

141

8,87

Chiguará

Estanquez

6.054

250

24,22

Estanquez

La Trampa

2.088

114

18,32

La Trampa

Pueblo Nuevo del Sur

3.945

240

16,44

Pueblo Nuevo

San Juan

5.803

86

67,48

San Juan

Fuente: República de Venezuela. OCEI. Anuario Estadístico. 1997

CUADRO Nº 02.

INCREMENTO DE LA POBLACIÓN  CIFRAS ABSOLUTAS Y PORCENTAJES. MUNICIPIO SUCRE. ESTADO MéRIDA. 1990 – 2000.

Años

Población

Incremento interanual

 

Cifras absolutas

  

1.990

35.384

+

1.991

36.144

760

1.992

36.878

734

1.993

37.601

722

1.994

38.311

710

1.995

39.009

698

1.996

39.695

686

1.997

40.369

674

1.998

41.030

661

1.999

41.679

649

2.000

42.308

629

Fuente: República de Venezuela. OCEI. Anuario Estadístico 1997 y proyecciones.

CAPÍTULO I

PROGRAMA DE SALUD

Contradicciones de una política pública sanitaria.

Cualquier programa de salud que se pretenda implementar en determinado municipio, debe gozar o poseer, subjetivamente, una coherencia coordinada con respecto a cuatro puntos fundamentales:

A)     Una adecuación a la estructura político-administrativa.

B)     Un conocimiento objetivo de las realidades socio-sanitarias.

C)     Una apreciación particular del fenómeno de pobreza.

D)    Un presupuesto equilibrado.

1.1       Adecuación político-administrativa.

La figura política a la cual se adjudica el Municipio, se encuentra representada en las Alcaldías y en el Alcalde como máximo representante. Cada Alcaldía de Municipio, debe gozar de un departamento controlador, ejecutor y monitor de la asignación programática presupuestaria y sus alcances; de lo contrario, obligatoriamente el manejo de los recursos financieros seguirá siendo potestad del gobierno nacional o regional y, en última instancia, de instituciones centralizadas que desconocen, en gran medida los déficit demandados, como sucedía bajo la Constitución de 1961.

Para el caso de la Constitución de 1961 y su relación con los Municipios,  Brewer Carias nos comenta:

"el propio texto fundamental ha establecido competencias concurrentes del poder nacional e inclusive de los Estados, que han producido que el ejercicio  de las competencias municipales se encuentre doblemente limitado". (1984, 208)

Lo ilimitado del alcance del poder municipal se debía, en gran parte al texto de ley y costumbre del actuar centralista de la política, sin embargo, la realidad presente es otra; luego de una Asamblea Nacional Constituyente, que generó una nueva constitución, tenemos teóricamente una mayor amplitud y delimitación del Municipio, que se puede observar y ver en lo contenido en el título IV, del Poder Público, capítulo IV. Art. 168 y 178, los cuales incorporan conceptualizaciones del área de la autonomía pública y de descentralización.

Las políticas públicas como "adecuación a la estructuración político-administrativa", conforman un combinado  de factores nacionales y regionales que inciden positivamente en la estructura local-municipal que administra el sector salud y que sirve de eje conectivo entre lo que aspira el gobierno nacional y su política y la realidad presumida en ésta, de forma tal de poder ejercer un coordinado plan de acción para la superación de la crisis municipal.

1.4        Un conocimiento objetivo de las realidades socio-sanitarias.

La identificación de realidades socio-sanitarias de un sector, depende en gran medida de disciplinas como la economía, la medicina, la sociología y la politología especializadas en planificación, puesto que son ellas las que nos brindan todo un andamiaje conceptual, que nos va a permitir captar los elementos requeridos  de la zona en estudio, "La planificación determina una política de acción, señala los objetivos  y la estrategia para alcanzar los mismos, así como las acciones en el tiempo, en el espacio  y en los sectores involucrados". (Mandl Stangl, 1996:24.)

Su análisis, dependerá de los objetivos y metas pre-establecidos y del alcance buscado por determinada política pública, con referencia al área de la salud.

La argumentación la fijamos de la siguiente manera: si nos encontramos  con una estructura que desconoce determinadas realidades y que, sin embargo, por obligación de competencia administrativa, lleva a cabo determinada ejecución de un proyecto que posee una tendencia al fracaso o a una negativa en los alcances superficialmente propuestos, esto colocaría las metas no requeridas por la Comunidad Municipal, por encima de la demanda social.

1.4       Una apreciación particular del fenómeno de pobreza.

El punto acá mencionado es de vital importancia, puesto que tiene su incidencia en los factores, mas no en el concepto como tal:

"la pobreza es un concepto relativo que no es conveniente medir de una manera demasiada rígida. La pobreza y la marginalidad constituyen un proceso funcional que se desprende de la interrelación de una serie de factores económicos, sociales e institucionales" (Chossudovsky. 1982.30.) 

Con esto se afirma que, no toda política municipal debe responder a una objetividad general; cada municipio, tiene una reconstrucción particular  de los factores generadores de pobreza, que se vinculan de tal manera con el fenómeno salud, que hacen necesaria una "apreciación particular del fenómeno" y la transformación del contexto de política pública existente. Este principio, constituye un proceso funcional, lo cual obliga a considerar que no existe un concepto limitado, objetivo, preciso y determinante del significado de pobreza, sino un concepto variante en definiciones, debido al carácter implícito de la interrelación de factores que precipitan a la pobreza a asumir determinadas formas sociales de expresión.

1.4        Un presupuesto equilibrado.

Los recursos deben ubicarse dentro o por encima del déficit que se pretende superar, tanto en el planteamiento financiero como el de recursos materiales, aunado con una vinculación efectiva a la estructura político-administrativa y a las realidades socio-sanitarias del sector en cuestión, así como a la apreciación particular del fenómeno de pobreza.

El planteamiento de presupuesto equilibrado revierte, en gran medida, el escalafón Nación-Región-Municipio, puesto que obliga a repensar  el papel de asignaciones arbitrarias muy típicas de prácticas políticas centralistas, cuyo resultado ha sido la pululación de una serie de anomalías distorsionadoras, aún más, de los presuntos males que se pretendían corregir. Por tal motivo, diseñar presupuestos equilibrados, acarrearía la posibilidad del logro de políticas positivas en el medio social aplicado.

  Ahora bien, pasaremos al punto de la evaluación y contrastación de los cuatro elementos sugeridos con respecto al plan sectorial de salud, aplicado en el  Municipio Sucre en el lapso 1995-2000, de forma tal de constatar la eficacia programática de éste, como Política Pública Sanitaria.

El plan sectorial de salud del Municipio Sucre, está administrado por un Consejo Municipal de Salud, el cual se define de la siguiente manera: Es la conformación de un conjunto de servicios de salud y lo integran los departamentos coordinados en conjunto con el Director Municipal. Este Consejo Municipal es responsable de la planificación, organización y evaluación  de los proyectos y gerencia de la salud, puntos que tienen que ver su cargo.( Distrito Sanitario Lagunillas.)

Como bien observamos, nos podemos percatar de una  correlación institución-objetivo, de aproximación teórica, un ente Municipal receptivo de su competencia; el sentido de adecuación, que es nuestro interés, parte de una ínter-actuación efectiva, que depende de la estructura funcional y las metas  de dicho Consejo, las cuales presentaremos a continuación.

  ESTRUCTURA FUNCIONAL DEL CONCEJO MUNICIPAL DE SALUD

Fuente: Hospital de Lagunillas, 1998.

METAS DEL CONCEJO MUNICIPAL DE SALUD DE LA ALCALDÍA DE SUCRE

  • Determinar los problemas de salud municipal y los sistemas integrados de asistencia en las diferentes áreas.
  • Elaborar la organización, delegando funciones de los diferentes departamentos a través del Director Municipal.
  • Planificar políticas, normas generales y métodos, para la solución de los diferentes casos, en las distintas personas que están bajo la responsabilidad de este sistema de salud.
  • Identificar la evolución de diferentes programas, de acuerdo con el organigrama y su funcionamiento a través de informes.
  • Establecer, para supervisión, los diferentes planes destinados a los servicios correspondientes a toda la infraestructura de salud en el Municipio Sucre.

Los análisis sobre este punto y evaluaciones de los resultados de contrastación, arrojan la existencia real de una adecuación político-administrativa, puesto que se conjugan de muy buena manera los elementos de institución, metas y estructuración funcional, sin embargo, es notoria la ausencia de un elemento de participación ciudadana, lo cual distorsiona el alcance del programa en este aspecto en específico.

Para el análisis de política pública, la proyección teórica se ubica en el marco de diseño del campo sugerido. Sin embargo, para que pueda ser completo el análisis, debe tocar puntos fundamentales a ser contrastados, reconociendo la exclusión del ente comunitario como primer elemento de análisis.

Como propuesta en este primer punto, se comparte, dentro del plan ya existente, la figura del Consejo Municipal de Salud, más no su conformación estructural, que obvia en gran medida elementos tales como:

  • Participación ciudadana.
  • Instituciones de carácter público.
  • Instituciones de carácter privado.
  • Organizaciones comunales.
  • Organizaciones no gubernamentales.

De esta forma, encontramos jerarquizada la figura del Director Municipal, quien tiene a cargo la mayoría plena de las funciones de dicho Consejo.

En el planteamiento de los objetivos y metas del Consejo Municipal de Salud del Municipio Sucre, no se evidencian mecanismos de identificación que pudieran sugerir los programas prioritarios de que está urgido el Municipio, por lo que creemos necesaria la conformación de un Banco de Datos, que permita tener un manejo estadístico sobre la situación, igualmente, se amerita de un equipo especializado en las áreas de salud prioritarias y acorde con el nivel de atención de salud adecuado para el municipio, el cual no lo contempla y, por ende, hace imposible la determinación del problema real de salud municipal, señalado en sus objetivos.

Toda determinación de un problema, parte de una identificación, de lo contrario, concebimos que lo planteado es un acto a priori, no vinculante a una determinación planificada de política pública. El programa  de salud del Municipio Sucre, no se ajusta a las metas, debido a la inexistencia de una previa identificación de la problemática de salud realmente presente.

A partir de este segundo elemento y con la deficiencia ya identificada en el primero, nos encontramos con una imprecisión técnica de política pública, que apunta a un desgaste de política municipal con incidencias graves en la comunidad receptora, lo cual contribuye e influye de forma directa y negativa en los principios de legitimidad, gobernabilidad y de sistema político.

La primera interrogante fundamental, que recae sobre el reconocimiento de los factores propiciadores de ésta, debe estar en todo programa de salubridad pública que debiera tener un eje de acción paralelo que implique una reducción drástica de la pobreza y un conocimiento ubicativo táctico y estratégico del mismo.

Producir salud disminuyendo pobreza es algo de suma complejidad, exigencia tácitamente existente en la actualidad en la gran mayoría de los municipios venezolanos;  generar una expectativa de salud manteniendo los factores e índices de pobreza, no sería más que una incongruencia teórica y una especulación de logros de política pública, muy común en declaraciones públicas de los gobiernos locales cuando buscan presentar sus logros.

El Consejo Municipal de Salud del Municipio Sucre, herramienta que estamos utilizando para categorizar los logros de salud del gobierno local y la contratación con el perfil de política pública que presento, apunta a una no-contemplación de corresponsabilidad de la pobreza con respecto a la salud y, en cambio, lucen como factores que se encuentran conceptualmente divorciados, sin apreciar la correlatividad de éstos en el interior del escenario comunal.

Finalmente, nos encontramos con una figura institucional que no estudia los problemas de la salud como de tipo multifactorial sino de carácter asistencial, generando una percepción muy individualista de ellos, al punto que los paradigmas de prevención automáticamente quedan excluidos, por consiguiente, es de considerar la negatividad de los resultados y la inversión improductiva de dineros públicos en la acción social.

  Basándonos en la definición ya propuesta, el presupuesto aplicado en el Municipio Sucre presenta elementos que no apuntan a equilibrios con la realidad existente, tal es el caso de la falta de acondicionamiento de la planta física y la deficiencia de suministros, situaciones presentes en la zona, que bien  se expresan  en las opiniones de los pobladores locales.

El recurso asignado no responde a un previo estudio de carácter objetivo, como consecuencia del desconocimiento de los tres elementos anteriormente expuestos, es por tanto imposible concebir un presupuesto equilibrado si se  desconocen los puntos anteriores, lo uno puede ser superior a lo exigido o inferior a lo demandado, y  su aplicación siempre girará en torno a improvisaciones erráticas. El punto fundamental debe ser, entonces, crear una política pública de envergadura.

Ackermann y Steinmann (1982) colocan los recursos financieros como eje central de la política pública, pero también debemos entender como recursos, los elementos no financieros  que se encuentran insertos al problema y que serán evaluados desde otra perspectiva.

Los problemas de asignación presupuestaria al sector salud, pasan por una serie de incongruencias al momento, tanto de su asignación como de aplicación, lo cual implica un inicio desequilibrado, por ende, hablar de equilibrio presupuestario no solo implica un presupuesto que cubra las demandas, sino también las formas de asignación y la aplicación como fondo.

Dicho esto, pasaremos a profundizar en el eje de investigación que estamos realizando y a su vez, cómo quedará plasmado en el siguiente trabajo de investigación, donde se toma en cuenta uno de los temas más álgidos para esta transformadora, bulliciosa y dinámica sociedad que, tomando como base a la pobreza y la salud, palpa, demuestra y contrae su férrea voluntad de cambio ante tan delicado, pero avasallante tema.

CAPÍTULO II

SALUD Y POBREZA EN EL MUNICIPIO SUCRE

¿Un dilema de solución conjunta?

La agudización de la crisis económica mundial en los últimos años, ha incrementado la pobreza y ha hecho casi impostergable el enfrentar la realidad social en los países subdesarrollados; la pobreza, ha ocasionado el resquebrajamiento de las instituciones y junto al planteamiento jurídico-político, se ha incrementado el atraso en el manejo efectivo de políticas públicas, las cuales están vinculadas con la calidad de vida de los Estados.

Esto nos lleva a afirmar sin duda que, la mayor pobreza la tenemos y padecemos los países del tercer mundo, los denominados países del "bloque del antidesarrollo", sin exceptuar uno de los casos más trágicos del mundo: Etiopía, Mozambique y Sierra Leona, tres de los países más pobres del globo terráqueo donde sus instituciones y niveles de salud están en estado estacionario crítico.

Venezuela no escapa a este esquema, este país, con una cantidad considerable de ingresos en divisas provenientes de la industria petrolera, hoy muestra una estructura política de instituciones agotadas, indiferentes y poco preocupadas por la situación de sobrevivencia de sus habitantes.

Simultáneamente, nuestro país muestra elevados índices de pobreza, densos cinturones de miseria y como si fuera poco, todo esto se ve reflejado enormemente en el alarmante desmejoramiento de sus indicadores de salud en los niveles nacional, estatal y municipal. Agregado a lo anterior, la evaluación de los indicadores de salud a los tres niveles, muestran implicaciones bien resaltantes en el cuadro antes descrito.

En base a los argumentos de esta naturaleza, las discusiones sobre el planteamiento de la pobreza han sido objeto de estudio, con formulaciones teóricas basadas en los indicadores financieros que, presentados como "favorables", generan opiniones de poca veracidad. Paralelo a esto, está lo que se ha descrito como "la  posición privilegiada de Venezuela" (Chossudovsky, 1982:16), país que geográficamente se ubica con una amplia frontera marina, dentro del área del Caribe, del Bloque Andino y la entrada al hemisferio Sur.

No obstante, la misma clase gubernamental  ha enmascarado una cruda y verdadera realidad: el drama interno de la pobreza rural y urbana, con sus duros elementos de desnutrición infantil y el cuadro monstruoso de personas jóvenes potencialmente aptas para desarrollar su fuerza de trabajo, que están subutilizadas o sin empleo, sin dirección, ni proyectos que los guíen hacia adelante.

Así, en Venezuela se pierden las más grandes y mejores fuerzas, investigación y talento, para el trabajo que bien pudiera contribuir con el desarrollo del país y de cada una de sus regiones;  la fe se ha perdido aún donde existen los recursos e infraestructura y en las personas  capaces de cumplir funciones en cualquier arte o trabajo, que pueden luchar para contribuir con la prosperidad del país.

La salud, como derecho fundamental de todos los seres humanos, es un indicador fidedigno de la situación social que vive una determinada población. La presencia y calidad de los recursos en esta área, aunada al volumen y capacitación del personal, nos dicen mucho del interés e importancia que un Estado ha dado a este derecho, y su análisis nos indica el verdadero nivel de vida de la población.

En muchos países, la población se ha alienado -como afirma el pensamiento marxista-, se ha atomizado en ideas y sueños que nunca serán realizables y los "proyectos" solo han creado falsas expectativas sobre una realidad que no verán llegar.

En nuestro país, el derroche y el despilfarro han acompañado la tragedia del "boom" petrolero que pudo haber mejorado esta situación, y que hoy es solo un amargo recuerdo con nefastas consecuencias que seguimos arrastrando.

Como complemento, las predicciones y formalismos de los proyectos realizados por economistas liberales, y luego los situados en el neoliberalismo, llegan, con sus fórmulas consagradas, a excluir a las mayorías en nombre de la "ciencia" y de la "teoría pura", de las realidades cuyos modelos interpretativos se desentienden hasta de los postulados y preceptos constitucionales de las leyes de la República que buscan el bienestar socioeconómico de toda la población.

Se ha  olvidado la letra de leyes como  la "Ley Orgánica del Sistema Nacional de Salud", promulgada en el año 1987, que en su artículo 3 dice: "El Sistema Nacional de Salud, garantizará la protección de la salud a todos los habitantes del país sin discriminación de ninguna naturaleza".

El divorcio y la dureza de los tecnócratas de la economía "pura", que se apartan completamente de las necesidades esenciales e imponen un enorme círculo marginalista, ubicando a los indicadores monetarios y de producción como "instrumentos científicos" que están por encima del beneficio colectivo.

Estos economistas neoliberales sólo nutren sus enseñanzas y aspiraciones en el impulso al "desarrollo" y su éxito lo sustentan en el incremento de indicadores como el Producto Interno Bruto (PIB) y si éste se eleva en dos o tres puntos, aunque esto se logre a costa del sacrificio de los índices de desarrollo humano de la población.

No obstante, estas abstracciones teóricas pervertidas en la realidad, oscurecen deliberadamente las relaciones entre clases sociales y, con sus organismos institucionales, alimentan desaforadamente el proceso de incertidumbre neoliberal.

En todo caso,  la complejidad de la pobreza subyace en su concepto relativo que no es conveniente medir de una manera demasiado rígida. Además, como hemos mencionado, la pobreza y la marginalidad constituyen un proceso funcional que se desprende de la interrelación de una serie de factores económicos, sociales e institucionales.

"En otros términos, la frontera de la pobreza constituye una situación de referencia, que corresponde a un nivel de requerimiento mínimo o de "aceptabilidad" de la variable. Esto es, la pobreza y la distribución de la pobreza serán medidas con respecto a situaciones de referencia seleccionadas"  (Shossudovsky, 1982, pp. 30 y 31).

En estas condiciones,  las inequidades y la injusta ausencia en los proyectos de crecimiento social de grupos sociales mayoritarios y desprotegidos, como es la población en edad económicamente activa, nos ha llevado a ubicarlos y catalogarlos como grupos humanos en situación de riesgo.

      Como aspiración, la gran existencia y disponibilidad promedio de nutrientes alimentarios, podrían ir adecuadamente a los sectores de la población más necesitada, así se atenderían de una mejor manera  las áreas rurales, donde más del 70% de las familias venezolanas no alcanzan una dieta alimentaría mínima, (2.500 calorías/per cápita/dia) mientras que por otro lado, casi la mitad de la población se encuentra enferma ya que sufren en un 45% de "hipoalimentación".

Veamos algunos datos alarmantes:

"… casi 11 millones de Venezolanos están en pobreza extrema, de los cuales 7,2 millones son niños y niñas. Más de 4 millones de infantes y jóvenes padecen de desnutrición. Más de 480 mil jóvenes de la fuerza de trabajo están desempleados; 1,2 millones de niños y niñas con edades entre 7 y 14 años tienen déficit nutricional agudo. De cada 100 alumnos que ingresan al primer grado, sólo 38 logran culminar el ciclo diversificado". (Venezuela, país herido por la pobreza, año, 1999, Pág., 22).

Efectivamente, un análisis del comportamiento del financiamiento social en Venezuela durante el período 1988-1997 realizado por la Coordinación de Desarrollo y Planificación (CORDIPLAN), con el apoyo del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia Abandonada (UNICEF), arrojó las siguientes conclusiones:

"La priorización de lo social no jugó un papel importante para el aumento del gasto social (…) los sectores de la inversión en capital humano (salud y educación) perdieron importancia relativa en el proceso de asignación de recursos a lo interno de lo social" (Centeno, 1999, p. 2). 

Esto, por tener una ingestión de nutrientes muy por debajo de los nutrientes mínimos. Se agrega a ello una afirmación del investigador Luis Velásquez Alvaray, para que una sociedad con características de moderna deba realizar sus funciones organizadas, donde se puedan seguir las pautas que señala el Estado.

"La salud es también, como consecuencia, organizada y promovida a través de políticas que crea el Estado. Esto constituye la organización política por medio de la cual la sociedad en su conjunto se da una organización definida. Es decir, se da un cuerpopolítico en el cual se toman las decisiones fundamentales que atañen a toda la sociedad". (Velásquez Alvaray, 1978, p. 9).

Los politólogos interpretamos como "políticas" las decisiones que se toman a lo interno del Estado y, en este caso, cuando nos proponemos  el estudio de la pobreza a través de los indicadores de salud de un municipio específico: el Municipio Sucre, las denominaremos "Políticas Sanitarias", las cuales pueden considerarse como leyes instrumentadas desde las distintas instituciones de servicios de salud.

Usaremos como método para este estudio, el de la Línea de la Pobreza como indicador de análisis, tal como lo citan  Murúa y Aguilera al referirse  al ingreso real de una familia:

"El método de la línea de la pobreza, se fundamenta en la determinación de la cantidad o monto del ingreso que permite a un hogar promedio (de 5 personas) satisfacer las necesidades básicas alimentarías de sus miembros." (Murúa y Aguilera, 1999, pp. 1-11).

Tomando en cuenta estos referentes reales y de análisis alarmantes,  es cuando intervienen las ciencias sociales para estudiar, mediante análisis y tablas, la realidad planteada, así, nuestra investigación se orienta desde una óptica politológica dentro del campo investigativo de la ciencia política,  integrada dentro de las denominadas políticas municipales de salud, con lo cual se puede develar la verdadera situación sanitaria de la región en estudio.

Vamos a estudiar el nivel de salud existente en el Municipio Sucre del Estado Mérida, través de un análisis vinculante con el problema de la pobreza en Venezuela, haremos referencia a la situación mencionada en un contexto de organización comunitaria, a la realidad de los servicios sanitarios que protegen a sus comunidades de las enfermedades más frecuentes en la zona y asimismo a la calidad de vida de esta manera, identificaremos cómo funciona el bienestar socioeconómico y productivo de este Municipio.

Debemos tomar en consideración que, a pesar de los amplios avances mundiales referidos al campo de la salud, los logros no han sido uniformes con las metas, las respuestas que se han necesitado para atacar problemas críticos en salud han diezmado a sus comunidades, la falta de gerencia para la elaboración de proyectos, y la deficiente administración de los recursos no dejan de ser muy halagadoras en el campo de la salud.

Así mismo, temas tan importantes como la prevención, las estrategias seguidas para la reorganización de los recursos y los servicios de salud,  tomando en cuenta los principios fundamentales de desconcentración funcional en el área asistencial, tienen gran relación con el conocimiento de las comunidades y sus áreas de influencia, esto nos permite identificar los niveles de salud y morbilidad aceptables para la población, tomando en cuenta los datos demográficos como: población total, composición por edad, sexo, crecimiento poblacional, tablas de morbilidad, principales problemas de salud pública, infraestructura hospitalaria, recursos existentes o inexistentes y su distribución en las zonas urbanas y rurales, son al mismo tiempo puntos que nos proponemos tener presente en esta investigación.

Como lo señalamos anteriormente, es importante el análisis de la situación de la pobreza en nuestro país y cómo ella ha logrado estancar los procesos de desarrollo del  Municipio Sucre.

El "caso Venezuela", en forma general, presenta estadísticas y proyecciones de la pobreza muy singulares. Veamos algunos indicadores de esta problemática que nos muestra su realidad social:

·40,3% de los hogares venezolanos se ubican en pobreza extrema (sus ingresos no cubren el conjunto de alimentos necesarios para alcanzar una adecuada nutrición). Este porcentaje se traduce en  una cifra de 10.978.053 personas.

·28,4% de estos hogares califican como pobres (sus ingresos le permiten cubrir solamente el costo de esta canasta).

·76,1% de la población infantil, es decir, 7.293.336 niños y niñas, viven en pobreza. De este total 50,2% (4.811.110) están en pobreza moderada y 25,9% (2.482.226) en pobreza extrema

·Solamente 2.2 millones de infantes y adolescentes acceden a buenas condiciones de vivienda, educación, alimentación y salud.

·La tasa de desocupación juvenil pasó de 19,8% en el segundo semestre de 1997 a 21,9% en el primer semestre del año en curso, lo cual significa que más de 480 mil jóvenes incluidos en la fuerza de trabajo están desempleados.

·En Venezuela, medio millón de niños y niñas presentan un promedio de dos episodios de gastroenteritis al año, motivo por el cual esta enfermedad constituye la primera causa de consulta médica. Se considera la novena causa de muerte en el país, presentando mayor incidencia en niños y niñas menores de cinco años.

·40% de la población venezolana menor de 17 años, es decir, más de 4 millones de niños, niñas y jóvenes, padecen de desnutrición. Además, un millón 274 mil niños y niñas con edades entre 7 y 14 años, tienen un déficit nutricional agudo, es decir, se está levantando una generación desnutrida y disminuida intelectualmente.

·La tasa de mortalidad por desnutrición pasó de 3 a 4,6 por 100.000 habitantes entre 1989 y 1994. Este incremento se atribuye al padecimiento de enfermedades infecciosas y gastrointestinales asociadas a la desnutrición.

·Según el INAM, "la delincuencia infanto-juvenil se ha incrementado en un 30% en los últimos tres años, siendo la causa principal de ello el aumento de la pobreza crítica en todo el país. De los 2 millones 100 mil niños y niñas que se encuentran en situación de pobreza crítica, unos 26 mil son infractores de la Ley". (Centeno, J.C. País herido por la Pobreza, 1999, pp. 2 y 3).

Estas cifras repercuten directamente sobre cualquier Municipio, las políticas adoptadas en los gobiernos centrales, no logran imaginar cuanto daño han causado en el territorio nacional, el descuido, el no mirar atrás, el no observar internamente, nos ha llevado a un país apartado de la realidad en cuanto a sus indicadores de salud.

El Municipio en estudio, es territorialmente pequeño en cuanto a las dimensiones del Estado Mérida, su población no sobrepasa los 43.000 habitantes, está apartado de los grandes centros del poder nacional, y se encuentra a distantes 30 kilómetros de la capital del Estado Mérida, se  reconoce a partir del 25 de Agosto del año 1901.

Desde el punto de vista contextual, el Municipio Sucre del Estado Mérida, limita, al norte, con el Municipio Andrés Bello, partiendo desde la confluencia de los ríos Quebradón y Cacique hasta la desembocadura de la Quebrada La Osa. Por el Este, con el Municipio Campo Elías, partiendo desde el Páramo El Tambor en dirección sureste hasta el Páramo Los Colorados. Por el Sur, con el Municipio Arzobispo Chacón desde el páramo Los Colorados  hasta el sitio donde converge la quebrada San Antonio y de allí hasta el páramo La Laguna. Por el Oeste, con los Municipios  Alberto Adriani y Antonio Pinto Salinas, partiendo desde el punto de unión del Páramo El Molino con el Páramo La Laguna hasta la confluencia de los ríos Quebradón y Cacique.

La escogencia del Municipio Sucre del Estado Mérida para la realización de este estudio-investigación, nos permitirá tener una idea aproximada de las repercusiones sociopolíticas de la pobreza, como freno para el desarrollo, además de los indicadores de salud y otras muchas cosas más referidas con esta área, que repercuten en tres víctimas elementales: la comunidad, el hombre y el futuro.

En Venezuela, el modelo de desarrollo económico que se trató de implantar a lo largo del proceso democrático, condujo a inequidades, lo que se ha reflejado directamente en las condiciones de salud de los diferentes  grupos humanos, existiendo grandes diferencias en la estructura de salud, enfermedad y mortalidad con desmejoras en las condiciones de vida. Así, por ejemplo, la tasa de mortalidad infantil en Venezuela es dos veces y media más alta en las parroquias que tiene entre el 90 y 100% de las Necesidades Básicas Insatisfechas (NBI), cuando se les compara con el grupo que tiene entre el 0 y el 10%.

La tasa de mortalidad por enfermedades transmisibles en nuestro país, es tres veces superior en el grupo extremo y las tasas de mortalidad por causas perinatales es seis veces mayor. Prácticamente, todos los casos de tétano neonatal registrados en los últimos años, ocurrieron en los municipios que tiene más del 70% de población con NBI, según datos de la Organización Panamericana de la Salud (Málaga,  H, 1996).

Los estudios, como los de Méndez Castellanos, convalidan esta información al expresar que los niños de los estratos IV y V (de pobreza y pobreza extrema), tienen un retraso biológico de 20 años con relación a aquellos de los sectores I y II, estrato social alto (Méndez Castellano, H., 1992) y la diferencia entre estatura y peso de los niños urbanos, se establece desde muy temprana edad pero se reduce en la edad adulta, las mismas llegan a ser aproximadamente de 4 cms. a los siete años y 2.6 cm. en los adultos y en los jóvenes (Jiménez, M., 1993).

No obstante, la esperanza de vida al nacer ha llegado, en 1990, a 70.1 años, con un valor superior en el sexo femenino de 73.3 años sobre el masculino de 67.0 años (MSAS, 1992), cabe destacar que esta valorización no es uniforme para los diferentes estratos sociales, ya que en el estrato I y II, el promedio de edad al morir es de 70 años, en el estrato III es de 62 años, en el estrato IV es de 61 y en el estrato V es de 58 años, por lo que habría 12 años de diferencia entre los estratos sociales altos y el de extrema pobreza. (Méndez Castellano, H., 1994).

En relación con la tasa global de fecundidad, las mujeres que viven en parroquias con más de 75% de NBI, tienen cuatro veces mayor probabilidad de que las niñas menores de 15 años se embaracen que en el grupo que vive en parroquias que viven con menos de 25% de NBI, y en las mujeres entre 45-49 años, la probabilidad es 11 veces mayor. (Núñez, M., 1995), evidenciándose la más importante diferencia entre mujer y pobreza.

Además, la aplicación de la escala de inteligencia para niños, reveló una clara relación entre el rendimiento escolar y el estrato social, a mayor nivel social, mayor rendimiento  y en la sub-prueba del vocabulario se encontró, por ejemplo, que un adolescente de 13 años del estrato V muestra un rendimiento inferior a un niño de 9 años de los estratos I, II y III (Méndez Castellano, 1994), pudiéndose concluir entonces, que en Venezuela en materia de educación, según el Ministro de Educación Cultura y Deporte, existen dos categorías: el de la acumulación de la excelencia y el de la acumulación de las carencias, el primero con un 20% de la población y el segundo con el porcentaje restante (Cárdenas, A. 1994). Estas diferencias nos demuestran que no hemos conseguido la equidad entre los distintos lugares geográficos del país ni entre estratos sociales, etnias, sexo y géneros, ya que existen varias Venezuelas postergadas, a saber: la Venezuela rural, la indígena, la urbano-marginal, la obrera, la campesina y la femenina, las que estarían fundamentalmente ligadas a diferencias de condiciones económicas, sociales, culturales, más que a factores estrictamente biológicos. (Málaga.1994:17)

Presentada esta visualización de los referentes resaltantes en el conglomerado venezolano y aunado a otras áreas problemáticas, hay que mencionar que es el Municipio el que debe  rescatar la posibilidad para que el pueblo, a través de un líder auténticamente compenetrado con la concepción comunitaria, pueda desarrolla proyectos autónomos y eficaces (Rincón,  P., 1996,7).

Para Helena Restrepo los principios de la promoción de la salud, enfatizan con otras áreas del desarrollo como son la educación, la alimentación, la vivienda, el ingreso, la paz y los ecosistemas estables (1994,9). De lo contrario, lograríamos una promoción de salud asistencialista muy practicada en la teoría centralista de manejos públicos; para 1996, el Viceministro de Sanidad, Roberto Rondón Morales y en relación con lo expuesto, fijaba la siguiente posición: "esto induce un proceso de reorganización de los tres niveles concurrentes en el manejo de los servicios, siendo el nivel central el órgano político, normativo y de control; el nivel estadal estratégico y de coordinación, el nivel municipal operativo", sin embargo, nuestra propuesta consiste en disolver esta jerarquización y hacerla extensiva hacia el municipio, es decir, tanto a nivel político, fase normativa, propuesta de control, estrategia y coordinación  en una misma función operativa a lo interno del municipio, sin olvidar, que parte del éxito de una planificación pública, depende del grado de convergencia entre la interpretación del individuo como usuario y el proceso racional basado en la interpretación de experto que participa en el proceso. (Mandl, Stangl. 1996:23).

Para fines conceptuales acerca y sobre Municipio, manejaremos la planteada  por María Toba que es la siguiente:

"Un municipio es la unidad política y administrativa básica de la descentralización. Funciona en un territorio definido, con una autoridad elegida democráticamente, con legitimidad reconocida de autonomía en la toma de decisiones. Cuenta con recursos propios, y una comunidad que comparte características y problemas comunes. Todo ello representa una base ideal para lograr un desarrollo social local" (Toba.1996:51)

No debemos dejar de resaltar que los municipios son la figura política producto de un proceso de desconcentración y descentralización del poder público nacional, lo cual, a modo de ver de Rondón Morales (1996), genera una alianza gobierno- sociedad civil, que permite romper  con pensamientos y criterios endogámicos, autosuficientes y estructuras piramidales, procesos administrativos lentos y complicado que autosatisface a la organización, pero no a sus fines y cuyos resultados no tienen control, es decir, proponer nuevos modelos de gestión.

El dilema a resolver, presentado este análisis en un espectro amplio recurriremos al objetivo estudio y presentaremos las distintas vertientes que nos indican que tanto salud y pobreza en las prácticas reales, son parte de un dilema de solución conjunta, sin negar que pueden ser manejadas con resultados positivos de forma separada pero con implicaciones de carácter teórico.

A continuación, presentamos las características de alta connotación en el Municipio Sucre, que además son consideradas de enlace o elementos de engranaje de la dualidad pobreza-salud, es decir,  como áreas problemáticas:

  • Contaminación ambiental por desechos sólidos.
  • Uso inadecuado de las consultas preventivas.
  • Poca preparación de la mujer para enfrentar su autocuidado durante el embarazo y  para la atención de su hijo.
  • Pocas oportunidades para el desarrollo psico-social de los niños.
  • Ancianos con poca asistencia integral en el hogar y la comunidad.
  • Hábitos inadecuados de higiene, alimentación y actividad física.
  • Bajo consumo de productos de consumo vegetal.
  • Embarazo en adolescentes.
  • Deficiente calidad de la educación.
  • Alto índice de repetición y deserción escolar en los tres primeros grados.

·         Bajo nivel de ingreso individual y  familiar.

El Municipio Sucre, enfrenta uno de los mayores índices de pobreza en todo el Estado Mérida, con un porcentaje de necesidades básicas insatisfechas que va de 55 a 60%, medido a través de un 56% de hogares pobres, 7% de niños de 7 a 12 años que no asisten a la escuela, 18% de hacinamiento crítico, 21% de viviendas inadecuadas, 32% sin servicios básicos y un 30% con alta dependencia económica.

Tiene una población estimada de 42.308 habitantes, según fuente Oficina Central de Estadística e Informática (O.C.E.I). del censo 90 en su proyección hasta el año 2000. La población del municipio corresponde a una definición de "población rural y urbana",  lo cual implica, que toda política pública a desarrollarse debe poseer una gran flexibilidad de adaptación con respecto al entorno, debido a lo complejo de su estructuración comunal.

Estos indicadores tienen una gran repercusión en la línea de crecimiento con el objetivo salud, es por tanto la correlación de resultados estadísticos entre los niveles de pobreza y la crisis de salud existente en el municipio en estudio, para ello, el planteamiento de Planificación de Política Pública, además de obtener lo expuesto en el capítulo I, debe estar acompañado de los siguientes perfiles operativos:

·         Promoción a la formulación e implementación de políticas públicas saludables, lo cual implica una acción intersectorial y concertada con otros ámbitos importantes.

·         Dar poder a las personas y grupos para fortalecer la acción comunitaria, sin la cual no es posible avanzar en la identificación y solución de los problemas y situaciones que están afectando la producción de la salud.

·         Preocuparse por los entornos tanto físicos como sociales, para que se facilite el desarrollo humano. El mejoramiento de las condiciones ambientales y de los mecanismos de soporte social son indispensables.

·         Utilizar los instrumentos modernos de información, comunicación  y educación para que la población adquiera los conocimientos y habilidades que le permita a os individuos y a los grupos optar por conductas y comportamiento saludable.

Los elementos paralelos que una política estratégica de salud debe contener para el caso del Municipio Sucre, gira, en gran parte, en el desarrollo de estructuras socio-ecológicas y de remodelación física, aunado a tratar de disminuir las anomalías institucionales identificadas en la  educación y el bajo perfil de ciudadanía:

·         Construcción de un vertedero de desechos sólidos.

·         Un sistema de recolección de aguas servidas, tratamiento y disposición final.

·         Programa de reciclaje de desechos.

·         Recreación dirigida a niños en edad escolar

·         Promoción de buenos hábitos en escuelas y comunidad

·         Huertos familiares

·         Formación capacitación del docente con respecto al papel primordial de organización que juega un sistema de salud.

José Renan Esquivel, nos señala que,  la realidad de las comunidades actualmente nos muestra la matriz de problemas serios y vitales que necesitan transformaciones. El aceptar la enfermedad como comunicador social de las realidades de los pueblos en donde viven las familias y comunidades, nos obliga a buscar y combatir sus causas en los barrios donde proceden (1989: 269).

Es evidente la necesidad de compenetración con las áreas en conflicto, puesto que de allí resultan sus mismas soluciones, por lo que, una conclusión general es que la acumulación de crisis de salud existente, no es más que un producto históricamente de tergiversación de políticas aplicadas, siempre desde ámbitos externos no concordantes entre sí, tanto en objetivos como en procedimientos. La  asistencia médica en el Municipio Sucre, a pesar de las distintas reformas a las cuales ha sido sujetada  por parte del Ministerio de Salud y Asistencia Social aún se haya adscrito su comportamiento funcional a normas de salud tradicionales que las podemos observar en el siguiente recuadro:

NORMAS DE SALUD TRADICIONALES. –

 

NORMAS DE SALUD COMUNITARIAS PROPUESTAS.

Medicina fundamentada en la                     enfermedad (curativa por excelencia).

 

Medicina fundamentada en la salud (preventiva por excelencia).

énfasis conceptual en los mecanismos              de la enfermedad.

 

énfasis conceptual en las causas de la enfermedad.

Los factores biológicos son más importantes en la etiología de la enfermedad.

 

Los factores sociales y ambientales son los más importantes en la etiología de la enfermedad.

El servicio médico es para quien lo solicita (fundamentado en la demanda).

El servicio médico es para todos (fundamentado en la necesidad de la población).

Servicio de salud especializado, independientes de cualquier otro programa social.

 

Servicio de salud coordinado, inte grado con los otros programas de bienestar y desarrollo.

Los servicios de salud necesitan concentrarse en el hospital.

Los servicios de salud deben regionalizarse y ofrecerse lo más cerca posible a la población.

 

La atención médica es ofrecida por el Médico.

 

La atención médica es ofrecida por el equipo de salud.

El médico es de la institución hospitalaria.

 

El médico es de la familia y de la comunidad.-

La atención es fragmentaria, individual, ocasional y episódica (no planeada).

La atención médica  es sectorizada, comunitaria, continua en el tiempo y en el espacio (planificada).

 

La atención médica es autoritaria, la acción de desarrollo va sólo del médico hacia el paciente.

La atención médica se realiza con la participación de la comunidad, la acción de desarrollo es bidirecional.

Marco esquemático extraído de: José Renan Esquivel "Como enfrentar la pobreza" en, Marco conceptual de la salud integral de la comunidad, el caso de Panamá (1989, 269). 

Como ya ha sido señalado antes, la apreciación particular de la pobreza se evidencia en un conocimiento real de los factores que la generan, sin embargo, debemos incluir comportamientos institucionales que contribuyen con los mismos, tal es el caso de la forma de manejo tradicional de la salud muy típicos en espacios urbanos-rural, cuyas características arriba se mencionan.

La pregunta a la cual se aboca este capítulo, busca reflejar, en caso especifico, la relación establecida entre pobreza y salud en el municipio, presentado y expuesto los elementos de mayor connotación que refleja el Municipio  Sucre y la incidencia de enfermedades y su relación con los mismos, apuntan que no existe municipio saludable sin resolución del conflicto de pobreza, en resumen, una perspectiva de calidad de vida integral.

CAPÍTULO III

PROPUESTA ESTRATEGICA Y POLÍTICAS PARALELAS

El estudio de la Ciencia Política ha tenido, entre sus objetivos, la discusión sobre las instituciones y su funcionamiento como parte del análisis de las políticas públicas, una variante del estudio del poder y elemento primordial de la gestión pública, que permite dar solución y prestar la atención a ciertos problemas de un determinado caso en proceso de estudio y de comparación.

"En el ámbito político las respuestas gubernamentales que se obtengan frente a las demandas sociales,  afianza o debilita la estabilidad política y las medidas de apoyo hacia el aparato estatal." (Romero Díaz, 1998, pp. 115-136).

En este sentido, las sociedades deberían girar en torno  a la calidad y atención social de sus pobladores, ya que estos factores son importantes para su crecimiento y desarrollo. Así mismo, el aumento o descenso del estatus de sus habitantes naturales, se ve reflejado en las condiciones de vida y progreso.

De entrada, debemos llamar la atención sobre algunas variables relacionadas con esta problemática; tenemos que la densidad de una población es el número promedio de habitantes de un territorio (continente, país, entidad, municipio, etc.) que viven sobre una unidad de superficie en kilómetros cuadrados (Km2.) Sin embargo, hay que tener presente que los números promedio de un continente, país o entidad, no reflejan fielmente su realidad, ya que, dentro de un mismo territorio, existen normalmente grandes diferencias, situación que se repite en las estructuras municipales.

La densidad de población depende, fundamentalmente, de la capacidad económica desarrollada dentro de su territorio, la cual a su vez, viene determinada por factores naturales, culturales y socioeconómicos.

Todo esto depende del rango jurídico y la naturaleza constitucional y legal con que se asista a una comunidad para su desarrollo, visto desde la óptica del marco normativo existente, podremos obtener la proyección y respuesta en lo referente a la infraestructura y organización.

Una sociedad, requiere de instrumentos jurídicos que permitan la protección de sus ciudadanos con el carácter que responda a la doctrina antes mencionada En la pasada Constitución Nacional de 1961, este derecho contemplado en el Artículo 76, sólo expresaba la obligación del Estado para con los ciudadanos que carecieran de recursos para su atención de salud, lo que situaba a muchos venezolanos en una situación de indefensión jurídica, pues el citado Artículo 76 hacía alusión a lo siguiente:

"Todos tienen derecho a la protección de la salud. Las autoridades velarán por el mantenimiento de la salud pública y proveerán los medios de prevención y asistencia a quienes carezcan de ellos. Todos están obligados a someterse a las medidas sanitarias que establezca la Ley, dentro de los límites impuestos por el respeto a la persona humana". (Constitución Nacional de 1961, Artículo 76).

"El Estado proveerá los medios de prevención y asistencia a quienes carezcan de ellos". Esta afirmación, discriminaba la cobertura en asistencia de salud a cualquier ciudadano, primero por que en Venezuela, como dato curioso, más de diez millones de habitantes se encuentran en situación de pobreza crítica, a lo que se agrega la alta morbilidad por las denominadas "enfermedades catastróficas", por ejemplo, el SIDA, que, como problema grave de salud pública, requiere tratamientos de más de seis millones de bolívares mensuales (Bs. 6.000.000°°), entonces, surge la pregunta inmediata:  ¿quién estaría en situación de asumir estos costos con las carencias económicas que sufre un alto porcentaje de la población nuestro país?.

Esta es la diferencia entre el derecho natural a la vida y a la salud, donde una ley o artículo puede verse de manera abstracta y que aparta su aplicación con criterio de justicia y equidad.

      Este artículo de la pasada Constitución Nacional de 1961, indudablemente era discriminatorio ya que sólo protegía parcialmente a aquellos a quienes el Estado clasificaba para brindarles asistencia médica y todos sabemos las consecuencias generadas por esta situación en nuestro país. Se le agrega la imperante corrupción hospitalaria, así como otra serie de hechos que incidieron en la baja calidad de la atención de  salud en el ámbito nacional, hasta desarticular el mismo sistema en los municipios.

"A decir verdad en la última década, Venezuela ha contemplado con impotencia como todos los indicadores que miden el nivel de salud de la población se han deteriorado en forma notoria. La mortalidad infantil, desnutrición, enfermedades endémicas (dengue, cólera, malaria), mortalidad materna y muertes causadas por falta de atención oportuna o de equipos adecuados y hasta de medicinas, han aumentado en tal proporción que colocan a Venezuela entre los países con más baja asistencia sanitaria en el continente." (López Madriz, 1998, El Nacional, Opinión, pag, A5.)

Otra realidad es que el 76% de las camas disponibles pertenecen al sector público y el 24% al sector privado. Sin embargo, el 86% de la población acude a los hospitales públicos y, de este índice, sólo el 35% está asegurado por el Instituto Venezolano de los Seguros Sociales (IVSS), institución que no ha cubierto las necesidades ni los objetivos asistenciales de los miles de afiliados cotizantes tanto del sector público como del privado.

"De manera ilustrativa podemos resumir, en pocas palabras, las causas y efectos de la crisis del sistema nacional de salud: La recurrencia a las huelgas de los médicos y trabajadores de la salud, originadas en las firmas de convenios que crean compromisos económicos que luego son incumplidos; los presupuestos exiguos y generalmente mal administrados de los hospitales; los sucesivos recortes presupuestarios; las infraestructuras deterioradas y nunca reparadas; la inoperatividad de los ambulatorios; la sustracción, lesión y saboteo de los equipos; la falta de una política de salud con continuidad" (López Madriz, 1998, El Nacional, Pag, A6, Opinión).

Otro notable ejemplo de la deteriorada realidad de la salud en Venezuela, es el hecho de que, casi en ningún hospital público del país se están realizando intervenciones quirúrgicas de tipo oncológico, por las carencias de equipos y medicinas. Una consecuencia es el represamiento de gran cantidad de pacientes con cáncer en condiciones operables, pero en gran estado de peligro ante la falta de una intervención quirúrgica a tiempo. Los hospitales se están convirtiendo en hoteles de pacientes en espera.

Según López Madriz, los aspectos para comenzar a recomponer el sistema nacional de salud serían:

1.     "Dar carácter de urgencia a la aprobación de presupuestos destinados al sector, que remedien las fallas de estructuras y de nóminas en los centros asistenciales.

2.     Poner en marcha el proyecto salud para dotar a los hospitales de equipos médicos suficientes para su funcionamiento.

3.     Retomar la medicina preventiva a través de campañas intensas.

4.     Descongestionar las emergencias dando operatividad a los más de 3 mil ambulatorios existentes en el ámbito nacional.

5.     Propiciar un gran diálogo entre Fetrasalud, Federación Médica y los actores gubernamentales y legislativos de la salud." (López Madriz, 1998, Pag. A5, Opinión).

De esta manera, algunos estudiosos sobre el tema de la Salud y la  Pobreza, nos muestran cómo, a partir de muchos modelos adoptados para el funcionamiento de la salud en Venezuela, el basamento legal pero injusto, condenó a miles de venezolanos a morir, a no ser atendidos por falta de recursos y por que el "Estado" era el único encargado de determinar quién clasificaba en sus requisitos para ser atendido y quien no.

Ahora, con el nuevo ordenamiento jurídico que impera en el país desde el 30 de Diciembre de 1999 con la "Constitución de la República Bolivariana de Venezuela", la salud adquiere el estatus de universal, al ampliarse como un derecho para cualquier estrato o sector de la sociedad, según la letra de sus Artículos 83, 84 y85 del Capítulo V: De los Derechos Sociales y de las Familias,  donde queda explícito este derecho para  todos los ciudadanos sin distingo de condición social alguna.

Como hemos citado con anterioridad, las enfermedades cuyos tratamientos son de alto costo, como las denominadas enfermedades catastróficas, pueden afectar duramente la economía de un grupo familiar y hasta generar su ruptura.

Con el nuevo marco jurídico-legal creado por el Estado a partir de la Constitución Bolivariana, se establece en los Artículos 83, 84 y85 los ámbitos donde el Estado interviene para solventar esta grave situación; así vale la pena citar el contenido de cada uno de estos:

Artículo 83. "La salud es un derecho social fundamental, obligación del Estado, que lo garantizará como parte del derecho a la vida. El Estado promoverá y desarrollará políticas orientadas a elevar la calidad de vida, el bienestar colectivo y el acceso a los servicios, todas las personas tienen derecho a la protección de la salud, así como el deber de participar activamente en su promoción y defensa, el de cumplir con las medidas sanitarias y de saneamiento que establezca la Ley, de conformidad con los tratados y convenios internacionales suscritos y ratificados por la República". (Constitución Bolivariana de Venezuela año 2000).

La salud en este nuevo ordenamiento jurídico pretende, bajo su cuerpo constitucional, señalar que el proceso involucra a toda la sociedad y que,  la forma de entrar en la comprensión y participación de este nuevo sistema es tener derechos bien definidos, pero también amplias competencias en cuanto a nuestra responsabilidad para la participación. El Estado sabe que el sistema de salud debe cambiar, ya que su orientación ha empobrecido aún más a la nación.

Artículo 84: "Para garantizar el derecho a la salud, el Estado creará, ofrecerá la rectoría y gestionará un sistema público nacional de salud, de carácter intersectorial, descentralizado y participativo, integrado al sistema de seguridad social, regido por los principios de gratuidad, universalidad, integralidad, equidad, integración social y solidaridad. El sistema público de salud dará prioridad a la promoción de la salud y a la prevención de las actividades, garantizando tratamiento oportuno y rehabilitación de calidad. Los bienes y servicios públicos de salud son propiedad del Estado y no podrán ser privatizados. La comunidad organizada tiene el derecho y el deber de participar en la toma de decisiones sobre la planificación, ejecución y control de la política específica en las instituciones públicas de salud".

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