Indice1. Sociología2. Individuo, sociedad y cultura.4. Sociabilidad y complejos sociales.5. Sociedad de consumo.
¿Qué es la sociología, de que se encarga de estudiar y que aporta al Marketing? Es un cuerpo de conocimiento sobre la sociedad. La sociología es el estudio científico de los seres humanos en sus relaciones unos con otros, de la vida social humana, de los grupos y de las sociedades. El sociólogo estudia las uniformidades constantes, es decir, aquello que se repite en todas partes de la sociedad, pero también en las variantes y los cambios que se efectúan en la sociedad (los fenómenos sociales, consecuencias, cambios). La labor de la sociología es ayudarnos a comprender el mundo y lo que puede que nos aguarde en el futuro. La sociología demuestra que es necesario utilizar un punto de vista más amplio para saber por qué somos como somos y por qué actuamos de la forma en que lo hacemos. Nos enseña que lo que consideramos natural, inevitable, bueno o verdadero, puede no serlo y que las "cosas dadas" de nuestra vida están influidas por fuerzas históricas y sociales. Los aportes al Marketing son el conocimiento de las costumbres, hábitos, estilos de vida y comportamientos de los consumidores y organizaciones, como parte de una sociedad. De esta forma el marketing toma estos conocimientos para determinar estrategias en la elaboración de productos–servicios que satisfagan las necesidades de los consumidores de la forma más conveniente.
¿Es la Sociología una ciencia? Ciencia es la utilización de métodos sistemáticos de investigación empírica (experimental), análisis de datos, elaboración teórica y valoración lógica de argumentos para desarrollar un cuerpo de conocimiento acerca de una determinada materia. Según esta definición, la sociología es una empresa científica ya que cumple con las condiciones anteriormente mencionadas. Las ciencias sociales no deben mirarse en el espejo de las ciencias físico – naturales, tomando a éstas como modelo, pues la peculiaridad de su objeto se lo impide; debido, a que el mismo investigador se encuentra dentro del objeto de estudio con la consecuente relación de su subjetividad, raciocinio y sensibilidad; y, además, que el método científico implica llevar el objeto a un ámbito de laboratorio. El hecho de que no podamos estudiar a los seres humanos exactamente igual que estudiamos los objetos de la naturaleza es, en ciertos aspectos, una ventaja para la sociología. Los sociólogos se benefician de poder plantear preguntas directamente a aquellos a los que estudian: otros seres humanos. Sin embargo, esta situación crea dificultades con las que no tropiezan los científicos de la naturaleza, porque las personas que saben que sus actividades se están estudiando muchas veces no se comportan del mismo modo en que lo hacen normalmente.
Inicio de la sociología y sus Principales fundadores. La sociología como campo del conocimiento aparece recién al promediar el Siglo XIX. El trasfondo de la primera sociología fue el de los cambios que trajo la Revolución francesa de 1789 y la Revolución Industrial en Europa. La sacudida que sufrieron las formas de vida tradicionales con estos cambios produjo una revisión de la forma de entender tanto el mundo social como el natural. Una evolución clave fue la utilización de la ciencia en vez de la religión para comprender el mundo. Fundadores: Normalmente se considera a Auguste Comte (Filósofo francés; 1798 – 1857) como el fundador de la sociología, en realidad él es, el inventor del término, pero el que ostenta el título de fundador de la sociología será Claude Henri de Saint Simon (1760 – 1825). Es de destacar que la autonomía de la sociología es lograda finalmente por Comte, quien pretende contribuir a poner orden a una situación social que él definía como caótica y anárquica, a través de una ciencia que en manos de los gobernantes, pudiera reconstruir la sociedad. Comte es objetivista, porque sostiene el principio fundamental de la eliminación de todo sentimiento y emoción para atender exclusivamente a la explicación de los hechos sociales. Comte trató de traspolar el método empírico (basado en la observación y experimentación de las leyes) a las ciencias sociales, pues estaba enrolado en la corriente positivista (esta corriente considera científico todo lo que se puede controlar). Para él la sociología debía contribuir al bienestar de la humanidad, utilizando la ciencia para comprender y, por tanto, predecir y controlar el comportamiento humano.
Etapa de madurez: Émile Durkheim (1858-1917) Sociólogo francés influido por el positivismo de Comte. Al igual que éste, Durkheim dedicó gran parte de sus esfuerzos a defender el carácter científico de la Sociología. Durkheim pensaba que era legítimo emplear el conocimiento científico de la sociedad para intervenir en ella a fin de procurar mejoras sociales. En este marco este autor tiene el objetivo de colaborar en la formación de un nuevo orden moral que otorgue a Francia la estabilidad de su antiguo régimen, pero sobre distintas bases. Para él, el orden moral es igual al orden social el cual se expresa como un sistema de normas, que se constituyen en instituciones. La sociología es entonces, el análisis de las instituciones y de la relación de los individuos con ella. En su pensamiento hay una primacía de la sociedad sobre el individuo, y lo que permite que los individuos se relacionen entre sí es la solidaridad. El objeto de la sociología está en el estudio de los hechos sociales ( es decir, aspectos de la vida social, como el estado de la economía o la influencia de la religión, que configuran nuestras acciones individuales), y su método es considerarlos como cosas. Creía que debíamos estudiar la vida social con la misma objetividad con que los científicos se ocupan de la naturaleza. Para lograr esto, parte de la objetividad, es decir, no involucrarse en el objeto de la investigación, ubicándose como un observador externo de lo social y manteniendo neutralidad valorativa (posición arduamente criticada). Un hecho social consiste en toda forma de obrar, de pensar, de sentir que ejerce sobre el individuo una presión exterior (elemento externo del individuo) que lo obliga a actuar, lo coacciona en determinada dirección. Estos hechos se expresan en normas, leyes, instituciones que aseguran la integración del individuo con la sociedad. Al igual que los demás fundadores de la sociología, a Durkheim le preocupaban los cambios que en su época estaban transformando la sociedad y creía que lo que la mantiene unida son los valores y costumbres compartidos. Su análisis del cambio social se basaba en el desarrollo de la división del trabajo (el aumento de las diferencias complejas entre las distintas ocupaciones). Para Durkheim este proceso estaba desplazando cada vez más a la religión como principal núcleo de cohesión social. A medida que se expande la división del trabajo, las personas se van haciendo más dependientes de las demás, porque cada una de ellas necesita bienes y servicios que le proporcionan los que realizan otras ocupaciones. Karl Marx (1818-1883). Sus ideas contrastan vivamente con las de Comte y Durkheim pero, como ellos, intentó explicar los cambios sociales que estaban ocurriendo durante la Revolución Industrial. Gran parte de su obra se centra en cuestiones económicas pero, tambien siempre trató de conectar los problemas económicos con las instituciones sociales. El interés de Marx por la ciencia y la filosofía social era, fundamentalmente, de carácter práctico. Sólo vio en el conocimiento un medio apropiado para promover el progreso humano. La perspectiva teórica de Marx se basa en lo que él llamó la concepción materialista de la historia. Según este enfoque (que se opone al de Durkheim), las principales causas del cambio social no son las ideas o los valores de los seres humanos. Por el contrario, el cambio social está primordialmente inducido por influencias económicas. El conflicto entre las clases – ricos frente a pobres – constituye el motor del desarrollo histórico. Para él, las transformaciones más importantes de este período están vinculadas al desarrollo del capitalismo. Los que poseen el capital – fábricas, maquinaria y grandes sumas de dinero – conforman una clase dominante. El resto de la población constituye una clase de trabajadores asalariados, o clase trabajadora, que no posee los medios para su propia supervivencia y que, por tanto, debe buscar los empleos que proporcionan los que tienen el capital. En consecuencia, el capitalismo es un sistema de clases en el que el conflicto entre éstas es constante. Para Marx, el capitalismo será reemplazado en el futuro por una sociedad sin clases, sin grandes divisiones entre ricos y pobres. Con esto no quería decir que fueran a desaparecer todas las desigualdades entre los individuos sino que la sociedad no estará dividida entre una pequeña clase que monopoliza el poder económico y político y una gran masa de personas que apenas se benefician de la riqueza que genera su trabajo. El sistema económico pasará a ser de propiedad comunal y se establecerá una sociedad más igualitaria que la actual. La obra de Marx ha tenido una influencia trascendental en el mundo del siglo XX. Hasta la reciente caída del comunismo soviético, más de un tercio de la población de la tierra vivía en sociedades cuyos gobiernos se consideraban herederos de sus ideas. Además, muchos sociólogos se han visto influidos por su concepción de las clases y de las divisiones que ocasionan. Weber, Max (1864-1920). Sociólogo alemán. Al igual que Marx, Weber no puede ser etiquetado únicamente como sociólogo, ya que sus intereses y preocupaciones se extendieron a diversas disciplinas. En sus obras abordó la economía, el derecho, la filosofía y la historia comparativa, además de la sociología, y gran parte de su trabajo se centró también en el desarrollo del capitalismo. Como otros pensadores de su tiempo, intentó comprender el cambio social. Estuvo influido por Marx pero fue muy crítico con algunas de sus principales ideas. Para Weber los factores económicos son importantes, pero el impacto de las ideas y los valores culturales sobre el cambio social es igualmente significativo (disentía en este aspecto con Marx) ayudan a que se constituya una sociedad y conforman nuestras acciones individuales. Para él, el objeto de estudio de la sociología es la acción social y el individuo como actor (línea subjetiva). La sociedad estaría formada por interacciones, acciones y relaciones sociales creadas por los hombres en su determinado ámbito. Parte del hombre relacionado (individuo) para llegar a la sociedad. El método que utiliza es el histórico comparativo, al tomar a la sociedad como unidad de análisis y al buscar los factores que expliquen las diferencias y semejanzas entre las sociedades. WEBER dedicó algunas de sus obras más influyentes al análisis de lo que diferenciaba la sociedad y la cultura occidentales de otras grandes civilizaciones. Estudió las religiones de China, la India y Oriente Medio y con estas investigaciones hizo aportaciones clave a la sociología de la religión. Tras comparar los sistemas religiosos dominantes en China y la India con los occidentales, Weber llegó a la conclusión de que ciertos aspectos de la doctrina cristiana habían tenido un papel fundamental en la aparición del capitalismo. Según Weber, el capitalismo – una forma característica de organizar la actividad económica – no es más que uno de los muchos factores importantes que constituyen el desarrollo social. El impacto de la ciencia y de la burocracia son factores que subyacen en el capitalismo y que, en cierto modo, son más importantes que él. La ciencia ha conformado la tecnología moderna y seguirá haciéndolo en el futuro, mientras que la burocracia es la única forma de organizar eficazmente a grupos numerosos de personas y, por tanto, seguirá expandiéndose inevitablemente con el desarrollo económico y político. A diferencia de Durkheim, no se observa en Weber la influencia del positivismo de Comte. Según Weber, y a diferencia de Durkheim, las ciencias humanas no pueden aspirar a descubrir leyes universales (al modo de la física o la química), pero sí pueden producir un conocimiento científico, aunque de distinta naturaleza, buscando y ofreciendo explicaciones causales de los fenómenos sociales. Los valores personales del sociólogo pueden afectar su trabajo, ciertamente, pero esto no impide, según Weber, hacer ciencia. Autores recientes: Michel Foucault y Jürgen Habermas. Al igual que los clásicos de la disciplina, estos autores no sólo han sido sociólogos sino que se han ocupado ampliamente de la filosofía y de la historia. Foucault ha sido una de las figuras más sobresalientes del pensamiento social del siglo XX. En sus obras se ocupó de materias similares a las analizadas por Weber en sus estudios de la burocracia: el desarrollo de las prisiones, hospitales, escuelas y otras organizaciones a gran escala. Sus posteriores trabajos sobre la sexualidad y el yo han sido también muy influyentes, especialmente para el pensamiento feminista. Para Foucault, la "sexualidad" no siempre ha existido, sino que ha sido creada por los procesos del desarrollo social. En la sociedad moderna, la sexualidad se convierte en algo que "tenemos", en una propiedad del yo. Para la sociología el estudio del poder – de qué manera logran los individuos y los grupos sus fines, en pugna con los de los demás – es de crucial importancia. Marx y Weber, entre los clásicos, hicieron un especial hincapié en el poder y Foucault ha seguido algunas de las líneas de pensamiento que ellos iniciaron. Por ejemplo, consideraba que la sexualidad siempre está vinculada al poder social y cuestionaba la idea de que un mayor conocimiento conduzca a una mayor libertad, porque lo concebía como una forma de "etiquetar" a las personas y de controlarlas. Hoy en día quizás sea Habermas el principal pensador con un enfoque sociológico. Sus influencias proceden especialmente de Marx y Weber pero también ha tenido la influencia de otras tradiciones intelectuales. Según este autor, las sociedades capitalistas, en las que siempre está presente el cambio, tienden a destruir el cambio moral del que dependen. En la sociedad en la que vivimos, el crecimiento económico suele ser lo más importante, pero esta situación hace que la vida cotidiana no tenga sentido. De esta manera, Habermas retoma el concepto durkheniano de anomia, aunque lo utiliza de forma novedosa.
2. Individuo, sociedad y cultura.
El individuo, sociedad y cultura El hombre como ser social. "El hombre no está totalmente condicionado y determinado; él es quien determina si ha de entregarse a las situaciones o hacer frente a ellas. El hombre no se limita a existir, sino que siempre decide cuál será su existencia y lo que será al minuto siguiente. Todo ser humano tiene la libertad de cambiar a cada instante". El hombre posee libertad y por ello es un ser determinante, o sea, que puede decidir cual será su existencia, pero esta condicionado por los límites de sus facultades y su entorno. El ser humano esa condicionado pero no determinado. Es decir, el hombre podrá estar condicionado pero siempre podrá ser determinante de su propia vida. Estas apreciaciones aparecen con mayor significancia cuando experimenta situaciones límites como la vida o la muerte, la prisión, la esclavitud. Cada hombre es un "todo", con interioridad, con libertad personal, con responsabilidad… Pero también es indigente y falible. La indigencia y la falibilidad fundan la necesidad de la vida en sociedad; y la inteligencia y la voluntad libre(operaciones propias y exclusivas del hombre, que lo diferencian de los demás seres) fundan, desde la naturaleza misma, la posibilidad de la sociedad y de alcanzar los bienes comunes. El hombre al ser social puede superar su indigencia y falibilidad; puede alcanzar bienes comunes: el familiar, el político, el Bien Común último – Dios – ; sin perjuicio de otros bienes intermedios que se puedan alcanzar a través de sociedades insertas en la sociedad política, de la que son partes. El ser humano es un ser condicionado. Está condiconado por sus particulares características intrapersonales, constitutivas, de tipo biológico y psíquico. Está condicionado por el ambiente sociopolítico, económico, cultural y familiar. Francisco Ruiz Sánchez
Instintos y necesidades biológicas La mayoría de los biólogos y sociólogos comparten la idea de que los seres humanos no tienen "instintos". Tal afirmación contradice no sólo la hipótesis de la sociobiología sino también lo que la mayoría de la gente cree. Para la biología y la sociología, un instinto es una pauta de comportamiento compleja y determinada genéticamente. Es común confundir a los actos reflejos con el instinto, que son respuestas simples, no una elaborada pauta de comportamiento, y no se consideran "instintivas" en sentido técnico. Los seres humanos nacen con una serie de reflejos básicos como la reacción de guiñar el ojo y la mayor parte de ellos parecen tener un valor de supervivencia evolutivo. Los seres humanos tienen, además, una serie de necesidades biológicas. Nuestra necesidad de alimento, bebida, sexo y abrigo tiene un fundamento orgánico, pero el modo en que estas necesidades se satisfacen o se manejan varía enormemente en cada cultura y dentro de ellas. Además, los humanos pueden anular sus necesidades biológicas con unos medios que no parecen tener paralelo entre los animales. Los místicos religiosos son capaces de ayunar durante largos períodos. Los individuos pueden optar por el celibato durante toda su vida adulta o parte de ella. Todos los animales, incluyendo a los seres humanos, tienen una tendencia hacia la autoconservación pero, a diferencia de otros animales, los humanos pueden actuar deliberadamente en contra de esa tendencia, arriesgando su vida al practicar el montañismo u otras arriesgadas actividades, e incluso suicidándose.
Sociedad Desde el punto de vista de las personas que la constituye, una sociedad es un gran número de seres humanos que obran conjuntamente para satisfacer sus necesidades sociales y que comparten una cultura común. El estudio de una sociedad se centra en los grupos más bien que en las personas. La sociedad esta formada por grandes grupos que se diferencian entre sí por su función social. Se puede decir que un grupo esta constituido por personas y que la sociedad esta constituido por grupos. Otra definición: Podemos definir sociedad como la estructura formada por grupos principales interconectados entre sí, considerados como una unidad y participando todos de una cultura común. Características de la sociedad.
- Las personas de una sociedad constituyen una unidad demográfica.
- La sociedad existe dentro de una zona geográfica común.
- La sociedad se compone de grupos de personas que tienen una cultura semejante.
- Cada sociedad es culturalmente distinta de las demás sociedades.
- La sociedad es una unidad políticamente soberana e independiente.
Funciones de la sociedad. Cuando una sociedad funciona en forma normal y adecuada, se hacen las cosas de manera más eficiente y satisfactoria de lo que harían los individuos aislados. Las funciones generales son las siguientes:
- Ahorra tiempo y energía de los individuos, desarrollando y conservando ciertas pautas comunes de comportamiento que los miembros de la sociedad comparten y practican.
- La sociedad reúne a las personas en el tiempo y en el espacio haciendo posibles las mutuas relaciones humanas.
- Les proporciona medios sistemáticos y adecuados de comunicación, como el idioma y otros símbolos comunes para entenderse.
- Proporciona un sistema de estatus y clases, de modo de que cada individuo tenga una posición relativamente estable y reconocible en la estructura social
Las funciones más específicas giran en torno a las soluciones que dan los grupos a las necesidades básicas de las personas.
Clasificación de las sociedades Las sociedades se distinguen entre sí por sus diferencias culturales, más que por su estructura o funciones. Las diferentes clasificaciones son:
- Según su escritura
- Según el grupo dominante
- Sociedades comunitarias y asociativas
Tipos de sociedades Las primeras sociedades: cazadores y recolectores. (50.000 AC hasta la actualidad) Eran sociedades de la abundancia ya que tenían todo lo necesario para subsistir, eran sociedades cooperativas no competitivas. Vivían de la caza, la pesca y de la recolección de frutos silvestres. Estas culturas aún perviven (zonas del Africa, Amazonas y Nueva Guinea). Otras han sido destruidas o absorbidas por la cultura occidental. Los frutos del esfuerzo eran compartidos por todos. No existían diferencias sociales, ni líderes, estaban formadas por pequeños grupos de personas o tribus de 30 o 40 individuos. Los ancianos tenían importancia como fuente de conocimiento. Existían divisiones de tareas entre el hombre y la mujer. En el tiempo de ocio se dedicaban a venerar sus dioses, eran politeístas y panteístas (adoraban la naturaleza). Se trasladaban detrás del alimento sobre territorios fijos (nómades, pero no erráticos). No existen diferencias en el número o el tipo de posesiones entre los distintos miembros de la sociedad, no hay clases sociales. Los bienes que poseían se limitaban a armas de caza, herramientas para cavar y construir, así como trampas y útiles de cocina. Es una sociedad del tipo participativa, todos los varones adultos se reúnen para cuando hay que tomar decisiones importantes o enfrentar una crisis. En estas sociedades no existía el guerrero especialista, por ello podemos decir que las cuestiones bélicas eran infrecuentes. Sociedades de pastores y agrarias. (20.000 AC hasta la actualidad) las sociedades de pastores son aquellas que dependen principalmente de la ganadería doméstica, ovejas, vacas, cabras, camellos. Los animales le otorgaban un medio de movilidad, alimentos y productos derivados. Recorren grandes distancias en busca de lugares para el pastoreo, según la época del año. Intercambiaban productos con otras sociedades y también comienza la competencia entre las sociedades por las tierras. Las sociedades de pastores presentan mayores desigualdades de riqueza y poder que las agrarias. Los jefes, líderes tribales y señores de la guerra a menudo ejercen considerable poder personal. Algunas sociedades de pastores agrupan a 250.000 personas. Algunas sociedades pastoriles han sido pacíficas, con el único deseo de atender su ganado y de participar de ceremonias religiosas. Otras han sido notablemente belicosas y se ganaban la vida mediante la conquista y el pillaje. Las sociedades agrarias al igual que el pastoreo, la horticultura proporciona un suministro de alimento más seguro que la caza y la recolección y permite por lo tanto abastecer comunidades más amplias. Al no ser nómadas, las culturas que viven de la agricultura pueden acumular más posesiones materiales. Establecieron comercio regular y vínculos políticos con poblados distantes. El comportamiento guerrero es común en estas sociedades, pero menos violentas que los pastores.
Civilizaciones no industriales o estados tradicionales. (6.000 AC) estas sociedades se basaban en el desarrollo urbano, presentaban desigualdades muy pronunciadas de riqueza y poder, estaban relacionadas con el dominio de reyes o emperadores. Debido a que conocieron la escritura, la ciencia y el arte se denominaron civilizaciones. Estas sociedades se fueron expandiendo en la ocupación de territorios por medio de la lucha. Existían diferencias entre las clases sociales reyes, aristócratas, sacerdotes, plebeyos y esclavos. Existía una especialización de los trabajos: mercaderes, alfareros, guerreros, herreros, etc. Un número reducido de estos estados tradicionales surgió mediante el comercio, pero la mayoría se establecieron mediante conquistas militares. Los estados tradicionales crearon los llamados ejércitos profesionales. Entre estas civilizaciones podemos nombrar a los Mayas, Egipcios, Griegos, Romanos, Incas, Persas, Chinos, etc. La monarquía fue la última que existió en esta era. En la actualidad los estados tradicionales han desaparecido de la faz de la tierra. Mundo Moderno: las sociedades industrializadas. La revolución industrial da lugar al nacimiento de las sociedades industriales y sociedades modernas. La REVOLUCIÓN INDUSTRIAL fue un proceso económico social de cambios que configuraron la sociedad industrial capitalista, producto de innovaciones técnicas en la etapa de producción, además de la aplicación de maquinarias y nuevas formas de energía motriz.
Sociedades del Primer Mundo Poseen un régimen capitalista lo que implica una economía de mercado. Existe un libre comercio, libre competencia. Son los países industrializados abierto a la actividad privada que el estado solamente controla. No existe una marcada diferencia entre las clases sociales, es decir, existe una mejor distribución de la riqueza debido a que existen políticas sociales eficientes. Son países democráticos y mutipartidarios. Poseen el poder bélico y tecnológico, dominan la información y las ciencias. Poseen políticas de estado no de gobiernos.
Segundo Mundo La caída del muro de Berlín en 1989 marcó la disgregación de estos países ejes de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas. (Europa del Este) Tenían una ideología distinta que la del primer mundo en cuanto a la propiedad, el sistema económico y la sociedad. (Régimen Socialista) El estado regula todas las actividades, no existe la iniciativa privada, ni la economía de mercado. Existe una economía de planificación centralizada. Todavía persiste el poder bélico en estos países. El régimen es autoritario, unipartidista, el estado no adopta religión alguna, en estos países no existe libertad de culto, no existen religiones oficializadas.
Tercer Mundo Somos los países colonizados, los países del sur, globalizados. Estamos alineados con el primer mundo pero no usufructuamos sus beneficios. Habría que distinguir en esta clasificación dos divisiones de países: los Países en Vías de Desarrollo y los Países Pobres. Esta división esta extraída de las consideraciones del Banco Mundial y el FMI a la hora de otorgar excepciones en el pago de la deuda externa (www.worldbank.com). De todas formas no me parece atinado englobar a la Argentina, México, China, Chile e India con Burundi, Birmania, Bangladesh y el Congo. Como denominador común entre estas dos divisiones es la existencia de una deuda externa abrumante. (esta parte es mi opinión personal sobre el tema) Ver apuntes Poco desarrollo industrial y en algunos casos economía de mercado y una ideología neoliberal. Existe una marcada ausencia del estado en todos los ámbitos (corrimiento), por ello existen políticas sociales ineficientes.
Cultura Se define a la cultura, como la suma de creencias, valores y costumbres adquiridos y transmitidos de generación en generación, que sirven para regular el comportamiento de una determinada sociedad. Es el conjunto de todos los aspectos de una sociedad: su lenguaje, conocimientos, leyes, costumbres, etc. que otorgan a esa sociedad un carácter distintivo y su personalidad. La cultura ofrece: 1) orden, direción y guía a los miembros de una sociedad en todas las fases de su resolución de problemas humanos. 2) artefactos, esto esconstrucciones artificiales que los miembros de una sociedad o grupo humano en general han ido creando a través del tiempo. La cultura es dinámica y gradual, y contínuamente se transforma para adecuarse a las necesidades de la sociedad. La cultura se aprende como parte de la experiencia social. Los elementos de la cultura se transmiten por tres instituciones: la familia, la iglesia, y la escuela. Una cuarta institución juega un rol mayor en la transmisión de la cultura, son los medios de comunicación, tanto a través de los contenidos editoriales como de la publicidad. La cultura no se dice de una persona, sino de una sociedad o grupo social. Una subcultura es un grupo cultural distinguible que existe como un sector identificable dentro de una sociedad más grande y compleja. Sus miembros poseen creencias, valores y costumbres que los apartan de otros miembros de la misma sociedad. Las principales categorías subculturales son: las nacionalidad, raza, religión, la localización geográfica, la edad, el sexo y la educación.
La cultura es el producto humano. Por lo que es obvio Herencia y ambiente. La cultura es hereditaria porque se transmite de generación en generación y el hombre la asimila en el proceso de socialización; además, es ambiental debido a que el ambiente cultural influye en el comportamiento de la vida social.
Funciones de la cultura.
- Ofrece un proyecto de vida
- Sistematiza la conducta social
- Reune, interpreta los valores de una sociedad (de modo que puedan reconocerse los valores a determinadas cosas).
- Es la base de la solidaridad social.
- Conservar las tradiciones.
- Sirve para distinguir una sociedad de otra.
- Determina la personalidad social.
Cambios de cultura. Las culturas cambian de una sociedad a otra, en períodos de tiempo a otro y también en menor grado de una institución a otra. Las culturas cambian y en el curso del tiempo pierden o asimilan ciertos elementos, pueden experimentar transformaciones completas en cuanto a los patrones culturales. Algunos factores de cambio pueden ser los procesos de difusión y de convergencia. Los primeros significan que las pautas de conductas se hallan comunicadas de una cultura a otra. la convergencia de dos o más culturas conduce a una especie de cambio profundo de dirección de una cultura nueva o diferente.
Página siguiente |