- ¿Qué es Voluntariado Artístico?
- ¿Por qué un Libro?
- Código Personal y Planes de Trabajo
- Autoformación y Autoafirmación
- Convicción, Decisión y Colaboración
- Instruir con el Ejemplo
- Gestión y Movilización
- Simplicidad y Modestia
- Amor al Hombre y a la Existencia
- Espíritu Innovador y Productivo
- Voluntariado en la Madurez
- Una Familia Peruana Pionera: Charres Vargas
- Divulgación Masiva
- Mensajes a los Artistas Visuales
- ¿Por qué Leer el Libro de RCHV?
Voluntariado Artístico, Informe Memoria 1985-2010, es el título del libro didáctico que acabo de culminar, el mismo que está listo para su publicación en el año 2015, y sobre ese documento aquí os ofrezco un avance resumido, esperando que su lectura sea motivador, principalmente entre niños y jóvenes, pues se trata de un compendio aleccionador escrito con lenguaje didáctico, que pone en relieve un hecho nunca antes realizado por un ciudadano peruano, que eligió cumplir una misión de servicio no remunerado por el bien común, en el campo de las Bellas Artes Educativas y dentro un contexto difícil, como es la realidad sur andina del Perú.
Los avances que aquí conocerán, los ayudará a entender las motivaciones y los logros de un episodio interesante, y que todo ser humano podría encontrar si se propone actuar con sensibilidad altruista dentro un mundo aprisionado por el mercado consumista de bienes materiales, el mismo que se antepone a las expectativas intelectuales. El optar por caminos distintos a los conocidos, concede a cualquier actividad un sentido innovador o de ruptura a los moldes que condicionan las conductas humanas a horizontes parciales y dependientes. Acceder con libertad a los valores mentales, el conocimiento, la reflexión, el equilibrio, es aún un tema no resuelto en las realidades humanas.
No hay duda que las experiencias propias y demostrativas, los sorprenderá por el sentido positivo de los hechos logrados en un tiempo determinado, en consecuencia tienen que ser tomadas como lecciones ejemplares de vida y actuación profesional; en este caso, de una persona que han podido ejercer una servicio cultural y artístico renovado en bien de la sociedad. Pero, tal voluntariado no fue un hecho cualquiera, tuvo que ver con el pragmatismo de una postura que buscó generar una toma de conciencia sobre la inclusión de los valores, beneficios y aplicaciones de las Bellas Artes Educativas en la vida cotidiana de la población, y que fue positiva desde todo punto de vista.
El pequeño manual, estará en el mercado bibliográfico a mediados del año 2015, y espero que todos tengan la oportunidad de leerlos para emitir algún juicio, y ciertamente anhelo que tenga acogida entre la infancia y la juventud, pues las nuevas generaciones son los llamados a conocer, emular y superar los hechos. También, deseo que esta primera obra sea el comienzo de un proceso de construcción de una Nueva Era Artística que responda a las necesidades y el clamor de las mayorías. Ya es tiempo que las Bellas Artes Educativas tengan una presencia sostenida, y en tal proceso, el voluntariado jugará un rol de primer orden.
En la parte final del libro, se sugieren algunas ideas para la continuación y multiplicación del Voluntariado Artístico, y me comprometo a seguir ayudando a establecer otras señales para su institucionalización alrededor del planeta.
¿Qué es Voluntariado Artístico?
Se entiende por Voluntariado Artístico, a la acción solidaria de servicio que se da a los demás, sin esperar a cambio ninguna compensación económica o material, teniendo como campo de acción el área de la artes, entendida como parte importante del quehacer intelectual entre los seres humanos que viven en sociedad. En nuestro caso, hemos usado las herramientas propias a las Bellas Artes y su conexión con tres áreas específicas como son: cultura, comunicación educativa y entretenimiento.
En general, el Voluntariado Artístico es una misión de generosidad, con actuación pública pragmática tanto individual como grupal, y por cierto de alta auto exigencia, que va dirigida a contribuir con el desarrollo inmaterial de la sociedad, a través de la realización de un conjunto de actividades que estimulan y aumentan las capacidades mentales, sensitivas y recreativas de las personas.
A la luz de la práctica, hemos comprobado que el Voluntariado Artístico, es una forma viable de atender requerimientos y proponer soluciones frente a problemas específicos, la misma que requiere de un manejo especializado y focalizado. Su realización va orientada a extraer y compartir los valores, beneficios y aplicaciones que tienen las artes objetivas y visuales en toda su extensión.
En cualquier caso, el Voluntariado Artístico se convierte en una excelente oportunidad para ejercer decisiones contributivas a la sociedad, pues ofrece una gama de alternativas que estimulan las voluntades y aptitudes de desprendimiento y solidaridad por el bien común, además se ponen de manifiesto capacidades cerebrales y habilidades psicomotoras benévolas para ofrecer alternativas que contribuyan al bienestar de otros humanos. En suma, el voluntariado en artes convierte a hombres y mujeres en protagonistas sensibles predispuestos a dar, servir y compartir generosidad y conocimientos entre grupos de personas que son los beneficiarios o usuarios finales.
¿Por qué un Libro?
Después de haber publicado un primer folleto de resumen sobre mis primeras experiencias personales en el campo del voluntariado cultural y artístico en el año 1993, ahora y tras cumplir 26 años de servicio ad honorem, decidí escribir un texto completo que dé cuenta sobre lo realizado en un período importante de mi vida personal y profesional, que tuvo lugar entre 1985-2010. El libro tiene un contenido testimonial cuyas características corresponden a un informe-memoria que expone detalles de labores, opiniones, sentimientos, conclusiones y proyecciones, cuyo propósito es compartir públicamente los resultados de aquella decisión singular que se hizo realidad, con el esfuerzo propio, en un campo difícil e incomprendido como son las Bellas Artes Educativas.
No fue fácil, mejor dicho es excepcional, emprender un rol de esta naturaleza, porque ser Voluntario Artístico en una realidad adversa que no toma en cuenta las necesidades ni las iniciativas en el campo intelectual, se convierte en una proeza inédita, pues la estructura social y los desempeños profesionales están diseñados para obtener lucro económico y material, es decir asociado a los intereses del consumismo industrial. El sistema establecido deja atrás los bienes inmateriales o intelectuales, por eso, importa muy poco que las artes, la cultura y la educación tengan prioridad en la humanidad, y se sigue creyendo que son temas de tercera o cuarta categoría.
El aparato productivo, la economía, los medios masivos de entretenimiento, los sistemas educativos, las universidades, los mismos hogares, las instituciones públicas y privadas, y toda la modernidad de las comunicaciones y la información, se mueven dentro parámetros de sumisión y dependencia a los intereses económicos de la industrialización y el consumismo; y es la cultura de lo artificial, de lo descartable y la deshumanización, las tendencias que vienen imponiendo las reglas de la llamada prosperidad o progreso urbano de las poblaciones alrededor del planeta.
El destino y la historia, hizo que emprendiera una labor contraria al común, y con ello cambió mis expectativas de existencia, pues tomé la determinación de actuar contra corriente, y descubrir en el mismo terreno de la realidad , aquello que es posible hacer cosas nuevas y diferentes en bien de la sociedad, y ello fue suficiente para salir de la cápsula dependiente y saltar a un escenario de libertad con realizaciones personales, que he llamado Voluntariado Artístico, en donde tuvo un rol de primer orden mi propia profesión, es decir el de educador y artista plástico al mismo tiempo.
Recuerdo que desde joven tuve impulsos por asumir compromisos con el servicio a los demás y el bien común y ellas fueron las líneas maestras que me guiaron a cumplir un desafío realista a lo largo de 26 años (1985-2010). Un gran tiempo que los dediqué a encontrar sentido a mi labor profesional como promotor y realizador, imponiéndome auto aprendizajes y creencias para DAR antes que RECIBIR, y bajo esos prismas ordené mis capacidades y conocimientos. Así lo hice, teniendo un desempeño coherente, limpio y sustentado en principios que estaban escritos en un Código Personal que contenía 365 preceptos guías.
De esta forma, el Voluntariado Artístico, pasaba a ser la razón principal de mis intereses, y junto a un grupo de colaboradores desprendidos de sus propios afanes, cumplimos una misión artística y cultural con sentido social y con beneficios tangibles en la población, cuyas huellas están a la vista y es posible que sirvan para el emprendimiento de nuevas iniciativas alrededor del mundo. Y siempre hay que recordar que: "En la humanidad hay clamor y hambre por las artes, la cultura y la educación, pero pocos se atreven a emprender un proyecto voluntarista de respuestas y soluciones".
En 26 años de perseverancia con intensidad en las labores, pude comprobar no sólo beneficios y resultados visibles, sino también la validez de mi tesis y los postulados que había pregonado con fervor a lo largo del tiempo, y fue la región sur andina de mi país Perú, aquel escenario donde pude realizar más de los imaginado.
Y para cumplir un desafío desprovisto de intereses económicos, hay que tomar decisiones claves como renunciar a metas personales, elegir prioridades y asumir compromisos consigo mismo y con los demás, y en mi caso viene desde mi formación hogareña, por eso tengo que agradecer a mis padres por permitirme realizar algo diferente al común y a las tradiciones, y pasar a ser un individuo auténtico con ideas innovadoras y principios coherentes, que desde luego me otorgó las credenciales para ser un incansable animador de mensajes de cambio por encontrar aquel ansiado crecimiento intelectual en la sociedad.
Tuve en la "rebelión pacífica intelectual" una conducta de ruptura a lo establecido, que al mismo tiempo fue una fuente de inspiración para crear y hacer un arte simbólico que contenga mensajes educativos en fondo y forma. Y siendo actor nativo y autor pragmático supe convivir con la sencillez y la austeridad en sus más altos grados de realismo, y todo ello fue necesario para tener una imagen sensible a los principios naturales de la vida y a los valores humanos sensatos.
Estos conceptos de fondo, más los detalles de tareas, estrategias, planes y metas se describen con amplitud en el libro de 120 folios, titulado Voluntariado Artístico, que con especial afecto fue redactado para ponerlas en las manos y mentes de las nuevas generaciones. Su contenido, elaborado con lenguaje sencillo, ayudará a comprender la esencia de un auto mandato cumplido con fidelidad.
Un libro siempre ofrece riqueza informativa duradera, y está disponible en cualquier momento para mostrar su contenido, que generalmente es un compendio de sabiduría y verdades, que tienen aplicabilidad e influencia en la vida y existencia de las personas. Y el pequeño libro que hoy comentamos debiera ser un manual de lectura refrescante y motivadora para el emprendimiento.
Código Personal y Planes de Trabajo
En el proceso voluntarista hubieron dos instrumentos guías que nos han conducido por el camino del servicio: un "Código Personal" y los "Planes de Trabajo Anual", sin ellos hubiera sido imposible realizar una tarea organizada y de larga extensión. Disponer de instrumentos motores de ordenamiento, ayudan a autogobernarse y a convocar el apoyo de terceros para la acción y cumplir los objetivos; además facilita la optimización de los recursos disponibles. De ninguna manera se puede caminar a la deriva o con cargas inciertas, y la programación es una técnica infalible de soporte que regula los procedimientos y las acciones para acometer un servicio artístico ad honorem que de hecho tiene particularidades, por ser una misión humana sin fines lucrativos ni comerciales.
Sabiendo que el Voluntariado Artístico es una acción fascinante, con aspectos positivos y negativos, hay que tener en cuenta que es un mandato serio y formal que exige absoluta dedicación, porque con el tiempo se convierte en un modo especial de vivir y ejercer la profesión. Ser voluntario en artes engrandece al ser humano, porque se transforma en un impulso emotivo benévolo, dinámico y efectivo de aspiraciones y proyecciones, lo cual hace que sea una opción laboral distinta, opuesta a lo que hacen y buscan la mayoría de oficios y profesiones humanas. Es el caso típico de muchos artistas plásticos que se recluyen en sus estudios de arte con los ojos vendados y dedicados sólo a cultivar o satisfacer impulsos individualistas con rigor egoísta.
El compromiso social de DAR Y ACTUAR, sin recibir una compensación económica, va más allá del orden conservador establecido, pues es un camino de generosidad ilimitada en donde se pueden encontrar respuestas insospechadas de gratitud en la población beneficiaria, además se fortalecen actitudes solidarias y fraternas. También se afianzan conceptos y teorías, porque el voluntariado es una escuela de aprendizajes permanentes con búsqueda de alternativas y soluciones, en cuya acción se privilegian habilidades como: el ingenio, la creatividad, la productividad y la participación. Ellas son las herramientas que marcan la metodología y las estrategias a seguir, y finalmente permiten encontrar los motivos, razones y resultados efectivos en cada período de trabajo.
Como ya dije, el Voluntariado Artístico que llevé a cabo fue expresión de una convicción que se hizo acción concreta antes que una definición teórica; dicho de otro modo, el voluntariado me condujo a ser actor pragmático y fortalecido con el paso del tiempo. Ciertamente, en el camino hubo un sinnúmero de matices, los mismos que enriquecieron los propósitos de despertar, ofrecer y dar al prójimo contribuciones tangibles para la elevación de las actuales condiciones intelectuales. El voluntariado también me ha permitido encarar aquellos vacíos y olvidos que hay en los planes formales privados y públicos, y conocí que una razón principal de ésas desatenciones, es la falta de compromisos coherentes.
De otra parte, sabemos que muchas personas viven instintivamente, sin descubrir la genialidad que hay en sus mentes y manos, pues en la mayoría de casos están dormidas, perdidas u ofuscadas, en gran parte por la influencia perniciosa de estímulos perversos impuestos por la industria materialista y consumista que caracteriza a los sistemas de vida en las sociedades urbanas de hoy en día. En esta realidad, los individuos se vuelen fríos, dependientes, autómatas, y pierden la sensibilidad por los bienes intelectuales.
Entonces, obrar con voluntad propia por el crecimiento de los bienes intelectuales de los demás, usando las bondades que ofrecen las artes visuales y la pedagogía, bajo reglas claras y estables plasmados en códigos planes de trabajo, es y será una actuación distinguible, meritoria y beneficiosa para la sociedad., porque ayuda a tomar conciencia frente a los hechos que deshumanizan y matan capacidades creativas. Esta primera experiencia llevada a cabo en el campo de las Bellas Artes, nos muestra un conjunto de lecciones y resultados que pueden replicarse en tiempos venideros. Hay desafíos inmensos y la batalla seguirá para superar el conjunto de taras, debilidades y limitaciones que enfrentan los seres humanos en el campo inmaterial, todavía se requiere de un largo tiempo de motivación con la intervención de nuevos protagonistas.
Autoformación y Autoafirmación
Ciertamente, no fue fácil ser un primer protagonista de un largo proceso llamado Voluntariado Artístico, pues tiene un alto costo como ocurre en cualquier campo de la acción humana. Dedicar 26 largos años, para sostener que es posible ser un actor sensible a las necesidades intelectuales humanas, tiene sustento válido, porque fue un período enriquecedor con asimilación constante de respuestas y comprobaciones en el mismo terreno de la acción, y en él está la verdadera escuela donde el aprendizaje toma efectividad real.
Un voluntario no es resultado de un título o diploma, es resultado de una postura personal firme que permite un ejercicio generoso del oficio en la misma realidad, y la realidad es la primera proveedora de conocimientos y resoluciones, por eso decimos que todo candidato a ser voluntario debe tener un perfil profesional sólido, sensible y vivaz predispuesto a los autoaprendizajes. Hoy no hay escuelas ni universidades de formación para ejercer un voluntariado profesional en el campo artístico, tampoco existen modelos a seguir; yo no los tuve, por eso me propuse cumplir exigencias auto formativas en el quehacer diario, y así, cada paso y contacto con la población beneficiaria me proveía de información y fortaleza apropiada para no fallar en el desempeño.
Al tomar el camino del voluntariado, teníamos algunas carencias naturales, los mismos que fueron superados gradualmente gracias al proceso interno de asimilación. Este proceso es inevitable y valioso para que las acciones y resoluciones tengan impactos sociales, y fueron las labores sencillas de contacto directo con hombres y mujeres, especialmente con los niños participantes en los talleres de artes, los mejores maestros que pude conocer. Ahora, puedo decir que para realizar un voluntariado intelectual no se necesitan de grandes presupuestos, inmensas maquinarias ni complejas infraestructuras, en cambio si se necesitan: profesionalismo, compromiso social, voluntad de servicio, entrega total y sobre todo muchas ganas de aprender y compartir.
En este sentido, en el libro se sugiere el establecimiento de centros de formación especializada para proveer de un perfil académico base, además la dotación de medios disponibles para cumplir una misión de servicio social con mayor grado de protagonismo. En general, hoy las misiones voluntarias modernas tienen un tiempo limitado y con metas predeterminadas.
Convicción, Decisión y Colaboración
En el Voluntariado Artístico, se aplican preceptos y convicciones muy fuertes y claras, por lo mismo no hay espacios para la debilidad, las vacilaciones ni las indiferencias, mucho menos para quienes poseen un apetito exacerbado por el ego, tampoco para los adictos al consumismo materialista, ni para los mediocres que anhelan tener sólo una fama individual.
Para cumplir una misión gratuita que engrandezca el espíritu, la solidaridad humana y el bien común, mediante el ofrecimiento de servicios artísticos y actividades intelectuales, se requiere tomar decisiones firmes con valentía y supremacía de las aptitudes, sólo así se puede lograr algo importante en los propósitos. Y nosotros dedicamos muchos años de labores para encontrar validez a nuestra postura, al mismo tiempo persuadir, motivar y encontrar a otros hombres y mujeres predispuestos a ofrecer sus capacidades y medios en bien de propósitos altruistas.
La intervención de terceros, es un factor importante y necesario para realizar una acción voluntaria íntegra y comprometida con la población. Así, los llamados "colaboradores directos e indirectos", hacen posible enfrentar las demandas y solicitudes. En este sentido, es imprescindible diseñar estrategias para captar, seleccionar, incorporar y construir relaciones de amistad y cooperación con otros actores y sectores de la sociedad civil, y de esa manera conformar equipos de trabajo. El establecimiento de formas de colaboración, mancomunidad y alianzas estratégicas con beneficios recíprocos en función de tareas concretas, es un procedimiento acertado. En nuestro voluntariado han participado 79 personas entre jóvenes y mayores provenientes de diversos sectores sociales y 15 instituciones entre públicas y privadas.
Como todos sabemos un esfuerzo compartido en mucho mejor que uno individual o aislado. Además la problemática cultural es un tema complejo e inmenso que atañe a muchos, pues encierra un conjunto de vallas, incomprensiones y prejuicios que muchas veces corroen las sanas intensiones y hasta pueden producir desánimo o fracasos. Convocar la intervención de aliados y optimizar el aporte plural de ideas, sugerencias y medios, es una muy buena asociación que ayudará a salir adelante en las misiones voluntarias.
Instruir con el Ejemplo
Todo voluntario en artes, debe poseer claridad en sus expectativas y un cúmulo de conocimientos tanto especializados como generales, además deberá tener una clara aptitud por el desprendimiento personal, sumado a valores humanos sólidos, por eso es importante tener credenciales de presentación sostenidos en el propio perfil, que se adquieren en la formación familiar y académica.
Un voluntario artístico, no podría ser un sujeto improvisado ni disminuido, todo lo contrario, deber ser un ente íntegro con capacidades propias y debidamente entrenado en el manejo de responsabilidades pragmáticas; porque su desempeño exige cumplir un papel de actuación directa con los beneficiarios, y un actor tiene que ser un educador y animador guía, que instruya con el ejemplo, es decir siempre preparado para guiar, encaminar, corregir, ofrecer y transferir información y orientaciones de utilidad directa.
Y ser un personaje ejemplar, concede autoridad y maestría para ejercer un liderazgo sólido. De manera que, un voluntario de ninguna manera puede ser un individuo debilitado, al contrario su imagen debe irradiar fortaleza, confianza, veracidad, sabiduría, nobleza y ética en toda su integridad.
Gestión y Movilización
Como ya afirmé antes, una misión voluntaria en artes, por su misma naturaleza, es una labor compartida que nace con la planificación, por eso cada plan de trabajo debe contener; objetivos, metodologías, estrategias y metas, que luego se convierten en realidad con la participación y movilización de la totalidad de los elementos involucrados, es decir una acción conjunta donde intervienen varios componentes, por eso es importante gestionar y movilizar el apoyo y la colaboración de personas e instituciones.
El voluntario debe ser un gestor natural, es decir un agente movilizador de recursos y capacidades sean humanos, materiales o económicos, porque en la práctica una misión tiene costos; ello significa que hay una alta responsabilidad, como es autogenerar los medios para su realización. Y conociendo las limitaciones existentes, siempre será mejor actuar con audacia para encontrar los soportes apropiados, más aún si sabemos bien que el arte, la cultura y la comunicación educativa, son eventos que no reportan ganancias ni utilidades económicas.
Asimismo, un voluntario debe ser un audaz explorador para encontrar signos, motivos y medios en la misma realidad socioeconómica de su medio circundante, por ejemplo; la problemática existente, los recursos domésticos, las instituciones, la infraestructura, el sentimiento colectivo, las aspiraciones comunes, la recreación, las imágenes visuales, etc., conforman una cantera de valores efectivos que deben ser aprovechadas. Otras capacidades que deben aflorar son el ingenio, la creatividad y la evaluación, los mismos ayudarán a sacar provecho de lo que existe alrededor.
En mi caso y por ser una acción nueva, tuve que actuar con cautela asumiendo riesgos propios, y cubriendo la totalidad de los costos, gracias a una filantropía personal y familiar que se prolongó por varios años, y que me permitió hacer viable una obra de ciudadanía compartida. Toda ésa contribución puede considerarse como una primera inversión que deberá quedar sentada como punto de inicio para nuevas iniciativas que vendrán en el futuro.
El Voluntariado Artístico no es una aventura ficticia, ni una imaginación fantástica, es y debe ser aquella alternativa positiva y sana que la humanidad estaba esperando de sus artistas e intelectuales emprendedores, porque ellos más que otros, son los llamados a sembrar los valores y beneficios de la belleza, la perfección, la unión y el amor humano que nacen de la profundidad de los sentimientos.
Simplicidad y Modestia
Un primer Voluntariado Artístico independiente, no sería tal ni tendría mejor significado, sino no hubiera estado dirigido por un profesional maduro, que decidió emprender un camino opuesto a los moldes tradicionales, y ése emprendimiento fue posible gracias al perfil personal de un peruano cuyo primer signo es haber optado por una vida austera, con renuncias, sacrificios y limitaciones en todo orden de cosas. Esa autodisciplina fue clave para ejercer con sensibilidad, pragmatismo y generosidad una labor visible y apreciable por el bien común.
Una entrega total a los objetivos planteados, pospone cualquier otro afán, por lo mismo está alejado de deseos por acumular fortuna, fama, premios o condecoraciones. Por ese motivo, gran porcentaje de mis ingresos personales eran destinados a la realización de las diversas tareas culturales y artísticas programadas, las mismas que tuvieron efectos y beneficios concretos que quedaron insertados en la mente y corazones de miles de personas, principalmente niños.
Ser pionero del voluntariado en bellas artes educativas, eleva nuestra autoestima y suscribe el compromiso social sin egoísmos individualistas, que hemos realizado bajo los mandatos de una filosofía y doctrina de vida. Y como actores sensibles y pro activos, sabíamos el valor que tiene la razón, el equilibrio, la comprensión y el servicio en bien de los demás. Hoy al ofrecer un recuento después de lo realizado, podemos decir que nuestra misión fue una actitud humana limpia, moderna y sana, que pudo romper prejuicios y ambiciones desmedidas, como el lucro material y económico que buscan la mayoría de intelectuales y artistas de nuestro tiempo.
De otra parte, hemos dicho que no hay voluntariado sin aprendizajes, riesgos ni errores, y así lo demuestran los balances finales, igualmente ahora se sabe que un ejercicio no remunerado sobrepasa cualquier costumbre, pues nos enseña a renunciar el pesimismo y fortalecer la perseverancia. En cada paso debe triunfar el pensamiento solidario, la justicia social, la inclusión, el socorro y la fe, y todos esos valores son propios al voluntariado, y no de otro tipo de actividades rentables como son los negocios lucrativos, la burocracia o las profesiones liberales tradicionales.
Aunque la profesión artística sea un oficio no lucrativo, sin cotización ni demanda en el mercado, la realidad nos demuestra que las obras de arte y la producción artística en general, pueden marcar la diferencia, y ello me permite afirmar que aún es una de las profesiones sobrevivientes más creativas y humanas que se conocen.
Como verán en el libro, también hay explicaciones sobre la importancia de sostener una conducta particular casi extrema, aquella que eligió su autor, el cual debe ser tomado como un mensaje alentador para las próximas generaciones, porque en los relatos encontrarán explicaciones sobre la actitud férrea de un peruano que sobrepaso sus propias metas, y aunque hoy, ya vive el último episodio de su vida, fue capaz de cumplir un gran desafío no contaminado, que seguramente con el paso del tiempo, pasará a ser un referente ejemplar.
Amor al Hombre y a la Existencia
El desarrollo intelectual humano debería ser el máximo objetivo de mujeres y hombres, pero ello no ocurre, pues la mayoría prefiere saciar sus necesidades físicas y materiales. Desafortunadamente, así lo impone el sistema urbano consumista que domina el mundo de hoy. Salir de él, es casi imposible, por eso, tiene sentido saber que hay otras maneras de ser y vivir, como las formas y los modos saludables que están en el campo intelectual, donde cada quién puede alcanzar plenitud y prosperidad.
Entonces, la existencia humana tiene que sobrepasar las cosas materiales y el consumismo industrial, para que los individuos puedan llegar a ser personas de bien con capacidades cerebrales superiores, y allí está el secreto para establecer una convivencia armónica, solidaria y justa. Este pensamiento se hizo realidad en mi actuación pública, pues supe renunciar a costumbres heredadas y optar por la simplicidad y sacar provecho de los signos sencillos y breves. Es ése el ejercicio ideal para descubrir y cultivar el potencial creativo que todos tenemos, y si lo hacemos desaparecerán la codicia, el egoísmo, las adicciones y los complejos de inferioridad.
El Voluntariado Artístico devuelve a los hombres el amor a la vida y a la existencia superior, y encuentra en el servicio social fraterno, una expresión digna de enfrentar los problemas y las soluciones. La vida individual es muy breve, casi fugaz, en comparación a la existencia del universo, por eso una vida se convierte en un preciado tesoro que de ninguna manera puede ser desperdiciada ni maltratada, por eso nunca entenderemos la ocurrencia de maltratos, castigos, muertes y odios entre seres humanos.
En lo particular, amé a mi vida, a mi familia, a mi país y a sus gentes, y siento inmenso orgullo por haber nacido en los Andes, la tierra de la pureza y las energías cósmicas, allí donde se ama y rinde culto a la Madre Tierra y al Sol. Esa biología privilegiada me concede coraje para actuar con dignidad y veracidad en cualquier responsabilidad asumida, además me recarga de valor para protestar en contra de quienes atentan o succionan las riquezas naturales para obtener beneficio económico de pocos.
La libertad es un ideal, y se puede lograr cuando hay cerebros pensantes y hábiles, por eso siempre hemos aclamado el conocimiento y la sabiduría humana en todo tiempo y lugar, y hemos pregonado sin cesar sobre la falta de inversión en la mente de mis compatriotas y de toda la humanidad. En el campo intelectual, hay una tremenda deuda de los gobiernos y los sistemas económicos y políticos mundiales que manejan el planeta a su antojo.
Con la publicación del libro, deseo contribuir con una reflexión sensata sobre los altos beneficios del Voluntariado Artístico, la filantropía y la inversión pública en los cerebros humanos. Por ejemplo, en el planeta deben existir instituciones de fomento de la creación y producción artística en gran escala, ésa institucionalización puede contribuir efectivamente con el desarrollo intelectual de la humanidad. En suma, quedan muchas tareas por realizar en el campo de las Bellas Artes, especialmente educativas, por eso seguiré sosteniendo y demostrando en todos los foros, las posibilidades y oportunidades de dar un salto sin precedentes en la historia.
Espíritu Innovador y Productivo
Una misión voluntaria apegada al clamor cultural por saciar el hambre intelectual, no puede ser obra de unos cuantos entusiastas, tiene que ser una corriente de pensamiento generalizado, y ésa corriente debe tener mente, alma, sangre y corazón innovador y productivo, es decir mostrar resultados dentro un modelo pragmático de hacer siempre cosas nuevas y efectivas. Cultivar un espíritu innovador y productivo hará que la acción sea demostrativa y real, es decir con hechos, obras, bienes, estilos, medios y productos. De este modo, el servicio voluntario se hace más realista, completo y efectivo, con escasos márgenes de errores o vacíos.
En todo proceso voluntarista, que tiene que ver con las actividades intelectuales, es mejor buscar, explorar y aplicar métodos de estimulación sencillas antes que usar recursos sofisticados de compleja o cotosa implementación; además es conveniente ser proponente y descubridor ante que ser imitadores o sumisos seguidores de técnicas o modelos repetitivos que pueden conducir al fracaso, la frustración o la mediocridad. Por lo mismo, tener una conducta dependiente atado a intereses ajenos, no es un buen signo, al contrario es una señal de inferioridad con degradación de perspectivas.
Quiénes tengan aptitudes y habilidades artísticas innatas, pasarán a ser creadores natos de medios de expresión que avivarán los sentidos humanos, y esas cualidades son ventajas que deben ser aprovechadas para inventar. Entonces, los profesionales de las artes tienen en sus manos y mentes una energía natural que los impulsa a ser creativos y pueden ser más productivos si asumen compromisos mayores con las necesidades intelectuales y culturales de la sociedad. Un innovador nunca es cómplice pasivo de la dependencia, más bien es un activo emprendedor de cambios para mejorar, superar y saltar hacia niveles mayores.
En todo tiempo defendí y ejercí una postura benévola de la creatividad artística funcional y con el lema: Nuevo Arte para Educar y Crecer, puse en marcha micro programas de acción para afirmar una labor orientada a la producción de medios artísticos educativos, y gracias a ésa estrategia se pudo explorar nuevas aplicaciones que dio como resultado un invalorable patrimonio artístico de 500 prototipos de obras de arte con mensajes didácticos en fondo forma.
Otra frase motivadora que estuvo presente en todos nuestros actos y discursos fue: "No sigamos perdiendo el tiempo en imitar cosas que otros ya lo hicieron; intentemos hurgar las neuronas y las conexiones de la creatividad de los cerebros", y se sabe que la opción por el descubrimiento y la innovación, hacen grandes personas, y ése es el secreto para la realización exitosa y beneficiosa.
En diversos foros, propusimos la construcción de una nueva corriente artística bajo la denominación: Bellas Artes para el Desarrollo Humano, regido por una doctrina y ética profesional que puede impulsarse de aquí al futuro. Y anunciaba que: si todo marcha bien, muy pronto en el Perú se podría abrir un primer Centro Piloto de Arte Educativo, en donde los autores creativos de todas las edades pudieran ofrecer sus servicios en bien de la población.
Además, auspiciar el nacimiento, construcción y funcionamiento de una nueva entidad especializada significará multiplicar escenarios, productos, oportunidades, y estilos de vida donde la solidaridad, el bien común y la mancomunidad marquen la diferencia, siendo reglas maestras, en todo tiempo y lugar.
Espero que la publicación didáctica que comentamos, llegue a todos los sectores de la población local y externa, y los invito a compartir su contenido, y de esa forma habremos contribuido a sentar las bases de una nueva ola para el Voluntariado Artístico, como opción válida y efectiva en el proceso de su inclusión en la ruta del desarrollo intelectual, a que tenemos derecho desde cuando nacemos. Los contenidos del libro están descritos con lenguaje sencillo, sólo queda tomarlos, leerlos, reflexionar y emprender nuevos retos, pues así lo demanda la solución de delos grandes problemas de la humanidad.
Usemos las armas de la cultura, el arte y la educación, y ello nos devolverá la paz y el humanismo que necesitamos para convivir en un mundo con equilibrio, igualdad, justicia y con oportunidades para todos los habitantes que pueblan nuestro querido planeta Tierra.
Voluntariado en la Madurez
Mis primeras intervenciones en el servicio ad honorem , afloraron cuando cursaba los últimos años de formación académica profesional, es decir cuando tenía 20 años, tiempo en que por primera vez organicé el grupo de arte denominado "Triple Acción" con el cual realizamos intensas actividades de proyección artística por dos años; sin embargo, a partir del año 1985 cuando ya contaba con 34 años de edad, doy comienzo a un trabajo sostenido de extensión artística, que más tarde se convertiría en una gran misión de Voluntariado Artístico, que se extendió hasta fines del año 2010.
Fueron 26 años consecutivos de aprendizajes y realizaciones, y cada paso con: exigencias, conquistas, descubrimientos, relaciones multiplicadas, amistades y colaboradores, también con fracasos, errores, tropiezos, satisfacciones y alegrías, en suma una gama de hechos que dejaron una carga de resultados, entre los cuales destacan: un patrimonio artístico de 500 prototipos de obras arte, 55 mil beneficiarios y una inversión personal de US$650,000.
Ofrecer servicios gratuitos y encontrar la plenitud en el servicio a los demás, en la madurez biológica, no hay duda, que es el mejor logro que alguien puede esperar en su existencia, y de hecho es una distinción honorable de grado mayor, que concede autoridad para proponer, enseñar, orientar y vivir una profesión rodeado de valores estables.
Una Familia Peruana Pionera: Charres Vargas
He sido un afortunado, por haber sido parte de una familia modesta y noble, que cultivó valores de simplicidad, y ésa riqueza se ha impregnado en mi perfil desde la cuna y lo he cultivado en el tiempo, por eso tengo que agradecer en voz alta, la generosidad de esta hermosa existencia, como es la familia Charres Vargas, y a sus patriarcas Enrique y Manuela que tuvieron cinco hijos, y uno de ellos fue el protagonista extremo y radical de una tesis de servicio público y el bien común, que usó las bondades de su profesión artística y pedagógica para construir un modelo propio.
Tener un respaldo total, recibir un aliento moral, conceder facilidades y recursos, expresar palabras de elogio y admiración, dar un abrazo con palabras de optimismo, ofrecer inquietudes y participar de labores específicas, son las mejores herencias de amor y solidaridad que yo recibí de mis padres y hermanos. Esa invalorable energía familiar, fue clave en mi desempeño.
Imagino que otro hubiera sido mi actitud, y muy distinta mi existencia, sino hubiera tenido una familia generosa, que Dios me ha entregado como el mejor tesoro, y que cualquier ser humano puede anhelar en su vida. Reconozco que todo los que hice y soy, se lo debo a ese grupo de personas que me supieron dar, desde la infancia, los estímulos para alcanzar los ideales en un ejercicio profesional desconocido, en la cual se impuso el interés colectivo antes que el individual.
Divulgación Masiva
Como bien sabemos, un libro portadora de una carga de mensajes benévolos, debe ser un material de lectura generalizada y útil para el análisis y la reflexión de cualquier lector, y recogiendo tal proposición nuestra editora amiga Promotora de Arte para el Desarrollo (PAD-ARTE) impulsará una campaña de motivación con la finalidad de que el libro tenga divulgación masiva, a través de los distintos medios de información.
Igualmente, se harán gestiones necesarias ante entidades gubernamentales para que el libro sea incluido en la colección de libros del Plan Lector que se aplica en escuelas y colegios de la república del Perú y otras naciones. También se organizarán un ciclo de conferencias, charlas y entrevistas vinculadas a la temática del Voluntariado Artístico.
Del mismo modo, se usarán las distintas aplicaciones que tiene la tecnología digital y los equipos electrónicos, y en forma complementaría se reproducirá un libro en formato mural gigante, para facilitar su lectura en fragmentos. Además se ha previsto organizar campañas y concursos sobre Voluntariado Artístico, para la participación de escolares en el Perú como en otras naciones de Latinoamérica.
Mensajes a los Artistas Visuales
Como muchos conocen a comienzos del año 2014, hemos publicado dos documentos públicos a través del Internet y las redes sociales, tituladas: Amanecer del Nuevo Arte Educativo y el Proyecto Mancomunidad por las Bellas Artes Educativas, que anunciaban la presencia de los primeros pasos para emprender la construcción de una Era Artística de mayor compromiso con la sociedad. Dichos documentos ahora toman mayor relieve porque son reflejos del Voluntariado Artístico, ésa noble misión que debe crecer con el paso del tiempo.
Es nuestra intensión contagiar el entusiasmo por hacer crecer el Voluntariado Artístico, en todas partes del mundo, pero tal deseo sólo podrá ser una realidad, cuando haya un surgimiento de nuevas ideas y compromisos de más protagonistas. En consecuencia, queda una tarea por continuar de hoy para adelante, y en lo que nos corresponde seguiremos impulsando la esencia de nuestra tesis, siguiendo el curso de la evolución cultural contemporánea.
Aunque ya no tengo la energía de la juventud, continuaré transmitiendo optimismo entre las nuevas generaciones de autores artistas, pues son ellos los responsables de impulsar aquella corriente artística sana y saludable que responda a las demandas intelectuales de la humanidad. Reitero, que el consumismo materialista industrializado asociado a la frivolidad, no puede ser la única vía de la prosperidad, tenemos que buscar el equilibrio humano, y ello se logrará cuando los seres humanos tengan un cerebro más homogéneo en conocimientos e información.
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