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Motivación a la investigación interinstitucional en Educación Superior del Estado Barinas (Venezuela) (página 2)


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Lovera (1991) afirma que, si se quiere que la investigación sea un componente básico de la docencia y tome el papel central que debe tener en la universidad, no se puede dejar de considerar las condiciones motivacionales del trabajo. Señala, igualmente, que deben corregirse las deficiencias en cuanto a: tiempo de dedicación a la investigación, infraestructura, servicios de apoyo, recursos financieros y políticas de investigación, que permitan estimular la actividad investigadora del docente.

En este mismo sentido, Vélez (1992), refiriéndose al desarrollo y fomento de la capacidad investigadora en las instituciones universitarias, reafirma el papel protagonista que como organización tiene la universidad en el mejoramiento de la calidad de la investigación que realice el docente y la necesidad de que en ella se desarrollen estrategias que ayuden a alcanzar ese objetivo.

Michelena, Rangel, Melet y Blank, en análisis de informes presentados, califican la investigación en el país: como pobre, marginal, desarticulada e incipiente; debido al estancamiento y la baja eficacia de las universidades, al poco apoyo que reciben la docencia y la extensión, así como al divorcio existente entre el objeto de la investigación y la problemática del país. (Citados en Briceño y Chacin 1994).

Esta realidad se refleja en la productividad investigadora, de acuerdo con el análisis realizado a las nueve instituciones de educación superior de estado Barinas durante los años 1995 al año 1999, resaltando lo siguiente: fortalecimiento de los programas de postgrado, con 10 maestrías que tiene la Universidad nacional Experimental de los Llanos Ezequiel Zamora (UNELLEZ), uno la Universidad Nacional Abierta (UNA), la Universidad del Zulia (LUZ) y la Universidad Fermín Toro (UFT); escasa participación en el proceso permanente de formación para el investigador, reflejado en la participación en el Programa Promoción del Investigador (PPI) y en la Comisión Nacional para el Beneficio Académico.

Solamente de 238 profesores de la UNELLEZ participaron como candidatos al PPI: 8 (3,36%), Nivel I: 24 (10,08%), Nivel II: 16 (6,72%) y Nivel III: 30(1,26%). Ello demuestra, a nuestro entender una falta de motivación a la conformación de equipos autodirigidos, manifestado por la ausencia de trabajos presentados; una ausencia de conformación de equipos efectivos e integración dentro la comunidad investigadora, al igual que la desvinculación comunicativa entre los investigadores; la poca carga académica en beneficio de la investigación, sobre todo, a nivel de las instituciones privadas; insuficientes mecanismos para la adaptación de tecnologías y, finalmente, la escasa cooperación inter institucional: sociedad y empresa.

En cuanto a los recursos financieros para impulsar, promover, divulgar y estimular a los profesores en la actividad científica, se puede observar que de las instituciones donde se logró la información (UNELLEZ, UNA) el monto asignado, aún cuando ha ido en incremento, no es suficiente para impulsar la investigación a nivel nacional en cada una de las instituciones. No se han establecido los acuerdos con las instituciones y universidades para el intercambio de servicios de información.

También se evidencia la escasez de realización de eventos. Consecuentemente no se ha fortalecido la comunicación y los lazos científicos a través de la asistencia, programación y realización de: encuentros, talleres, conferencias, foros, simposios, jornadas y sesiones de trabajo. Ello se traduce en una falta de estímulos para la creación de espacios adecuados de integración de equipos interdisciplinarios, que permitan la presentación de avances y propuestas de investigación, a la vez que impulsen y promuevan la divulgación de los avances de los proyectos de investigación en curso o terminados en la Web.

Si se asume que la intención como facilitadores de procesos de investigación es transmitir valores fundamentales, principalmente a los estudiantes, que son el centro del proceso educativo, entonces se adquiere la responsabilidad social de su formación como ciudadanos socialmente activos. Esta referencia hacia la formación que se desea para los estudiantes, según Gervilla (1997), predispone para enfocar cualquier análisis de la práctica desde una perspectiva crítica y legitima para desarrollar propuestas de cambio mediante la investigación de la práctica docente.

En relación a la distribución por campos refleja el predominio de las ciencias medicas, biológicas y del agro (97.50), seguidas de las ciencias físicas, química y matemáticas (47.50%), ciencias sociales (43.75%), ingeniería, tecnologías y ciencia de la tierra (13.88%).

Estos aspectos, condicionan la baja motivación de la investigación en las instituciones de educación superior, según señala Nieves (1999) al afirmar que las condiciones de trabajo, tiempo de dedicación a la investigación, infraestructura y servicios de apoyo para esta actividad y recursos financieros, junto a definiciones políticas estratégicas para la investigación universitaria; son planes que se requieren impulsar para que la investigación asuma el papel central en la universidad.

Para el año 2000, según el Ministerio de Ciencia y Tecnología, el Programa incluía a 1.800 investigadores, clasificados como candidatos (17.77%), nivel I (54.44), nivel II (18.33), nivel III (9.44). Estas clasificaciones permiten visualizar un panorama de la investigación débil, no solamente porque el 72.21% no pasa del segundo nivel (lo que en muchos casos equivale a la no tenencia del titulo de doctor), sino también por la escasa producción científica.

Albornoz se refiere a baja productividad del personal académico. Ello se debe según él a que los docentes consideran la actividad investigadora como una función periférica asociada solamente con los ascensos o presentación de ponencias. Esta apreciación se evidencia al observar la baja promoción en trabajos de ascenso y producción investigadora individual presentados por los profesores de las instituciones de educación superior de la región. De los 549 profesores de las instituciones de educación superior del estado se presentan: por parte de la Universidad Nacional Experimental de los Llanos Ezequiel Zamora (UNELLEZ) 47 trabajos (8,56%), de la Universidad Pedagógica Libertador (UPEL) 3 trabajos (0,54%), de la Universidad Nacional Abierta (UNA) 12 trabajos (2,18%), del Instituto Universitario Politécnico Santiago Mariño (IUPSM) 2 trabajos (0,36%) y del Instituto Universitario Tecnológico Antonio José de Sucre (IUT Sucre) 5 trabajos (0,91%). Todo esto nos revela que la carrera universitaria no esta estimulando al docente a investigar, lo que cabria hacernos pensar en la posibilidad de sustituirlos por acciones de reconocimientos que motiven a elevar la productividad investigadora. (Citado en Flores 2000).

El bajo número de trabajos de ascenso refleja la dificultad de institucionalizar la investigación en la universidad, cuya principal preocupación sigue siendo la graduación de profesionales y la reproducción de conocimientos.

Flores (2000) señala que algunos factores motivacionales como la falta de confianza y deficiencia comunicacional, limitan la autoestima, igualmente, que la baja motivación al logro obstaculiza el proceso de investigación, limitando los cambios significativos que repercuten en el desarrollo óptimo de la misma.

Las anteriores referencias ponen en evidencia, que en forma indirecta la importancia del desarrollo personal, que necesariamente conllevaría a la definición de una visión de vida, la revisión de compromisos esenciales; el fortalecimiento del mundo exterior para manejar la complejidad externa, competencias y finalmente de ser conciente para el éxito y otros aspectos fundamentales que se traduzcan en una verdadera capacitación de auto evaluación y de negociación con actores de diversa índole. Se trata, entonces, de entender que el éxito no depende del otro, ni de lo fácil o difícil del entorno, sino de la claridad que se tenga al fijar los objetivos, de la confianza en si mismo y del manejo de necesidades.

Pérez y Rojas (2001), al referirse a estas cuestiones y al profesional, sostienen que la motivación para el trabajo es un factor fundamental para el logro de una eficiencia profesional, que será efectiva si esta construida sobre valores personales, como la responsabilidad, la iniciativa y el respeto.

Fuenmayor (2001) se manifiesta en términos similares. En primer lugar plantea la exigencia de formar en los próximos años unos 20 mil investigadores, para poder alcanzar la cifra de un investigador por cada mil habitantes, indicador recomendado para los países como Venezuela; tarea casi imposible de alcanzar debido a la exagerada duración de postgrados académicos. En segundo lugar nos indica que no todos los docentes están realmente motivados en hacer una carrera académica en la universidad, razón por la cual muchos incumplen con sus ascensos a pesar de ser profesionales de gran calidad y prestigio en su campo y en otros sectores de la vida nacional. Sostiene que los profesores con dedicación exclusiva, son quienes pueden formarse como investigadores, pues disponen del tiempo institucional para hacerlo.

En el 2002, a partir de la conmoción económica que amenaza con el colapso de la dinámica investigadora, el Programa de Promoción a la Investigación(a partir de ahora designado con las siglas PPI) pone al descubierto sus limitaciones productivas.

Si bien es cierto que los afiliados al PPI no totalizan el conjunto de investigadores, representan una muestra significativa a nivel nacional, ya que ellos son los que marcan los estándares de competencia con otras especialidades en el campo de la investigación científica. La participación en el Estado Barinas es de cinco (5) profesores.

Es razonable inferir que la productividad en investigación es muy baja, y que, si bien es cierto que se publican bastantes artículos y ensayos, la mayoría de ellos carece del rigor científico.

Sobre la base de las consideraciones anteriores, el papel que desempeña la motivación en la investigación es muy importante en el éxito de los logros planificados; sin este elemento se lograría muy poco progreso. La motivación efectiva es la esencia de la investigación. A menos que la persona se esfuerce en asegurar la motivación correcta, no obtendrá progreso en el campo investigador.

El hombre se encuentra inmerso en un universo que le resulta confuso a primera vista; sin embargo, para su supervivencia, trata de darle un sentido a fin de poder manipular, en su propio beneficio, los fenómenos que ocurren en él. La propia curiosidad del hombre es otro factor importante que le impulsa a buscar una explicación de lo que ocurre a su alrededor.

Teniendo en cuenta las consideraciones anteriores, se puede deducir que en Venezuela la investigación, si bien institucionalizada y con grandes méritos, constituye un eslabón débil dentro de las universidades. Ello se debe a que no se ha conseguido aún el desarrollo suficiente que se traduzca en factor importante de cambio para el progreso económico, social y tecnológico. Se requieren acciones que contribuyan a superar esta situación.

Se trata de que todo investigador debe conocer que su trabajo en esta dirección comienza cuando se determina qué problema o fenómeno hay que estudiar y por qué hay que hacerlo. No es suficiente saber la temática sobre la que hay que trabajar, hay que tener claro el por qué de la elección del tema (importancia, ideonidad, oportunidad). En el caso que nos ocupa, el objetivo es conformar una red académica Inter Institucional que permita la integración intra disciplinaria de equipos autodirigidos de acción que posibiliten la capacitación, integración y aumento de la productividad investigadora a través de un organismo que se forme al efecto.

Normalmente, cuando se busca algo y un tercero nos ofrece ayuda, se suele decir que "cuatro ojos ven más que dos". En investigación se podría insinuar que "varias mentes pueden pensar más que una". Transmitir las ideas y problemas propios ofrece, como feed-back, aspectos en los que no se había reparado, ideas mejor expresadas o una menor importancia en determinados aspectos que considerábamos de interés.

En esta dirección se ha trazado esta investigación formulándose y teniendo en cuenta los siguientes problemas:

Desactualización y desconocimiento de los docentes en el área de metodología de la investigación.

Aislamiento en el área de investigación de las instituciones de educación superior.

Desorientación en cuanto a las líneas de investigación y las maneras como abordarlas.

Desvinculación entre los sectores universitarios, empresariales y el oficial en cuanto a la creación e implementación de proyectos para el incremento de la calidad de vida de la región, y por ende, del país.

Surge entonces la pregunta: ¿Cómo dar respuesta a estos problemas de manera integral e institucional?

CONCLUSIONES

Entre las aspiraciones que motivaron la realización del presente estudio, esta la de contribuir a diagnosticar la situación particular que motiva a elevar la productividad investigadora de los profesores de los Institutos de Educación Superior del Estado de Barinas y en virtud de ello, analizar la posibilidad de crear el Consejo Barinés de Investigación y Desarrollo, como producto de un trabajo interinstitucional.

En función de esta idea se indagó la información entre los profesores de las distintas instituciones, así como los datos de interés registrados tanto a nivel nacional, como regional. A partir del análisis realizado al respecto se derivan algunas conclusiones importantes:

  • Un alto predominio de docentes son del sexo femenino en edades comprendidas de 31 a 40 años, lo que se puede considerar como una ventaja, en función de que es un personal joven y comprendido en una edad productiva, que pudieran aportar soluciones si se incorporan a la elaboración de proyectos multidisciplinarios.
  • Desde el punto de vista de la categoría de los profesores, en el momento de realizar esta investigación, se observa que las tres cuartas partes son contratadas, menos de la mitad tienen una dedicación de tiempo completo y la mitad en una categoría de asistente. Esta situación refleja la potencialidad que tienen los profesores para aumentar la creatividad productiva en los procesos investigativos, además del compromiso institucional que refleja la actividad de pertinencia con el Consejo. Además al ingresar en educación superior, como personal de relevo, están interesados en realizar vida académica, por lo que puede comenzar a formárseles como investigadores.

Es evidente entonces, que uno de los elementos considerados como fundamental para la productividad y satisfacción en el ámbito laboral es precisamente la estabilidad laboral, que permite conformar un nivel de pertinencia institucional.

  • La mayor proporción de profesores que conformaron la muestra dentro de cada reglón, se ubicaron entre los 6 a 10 años y de 0 a 5 años, en correspondencia con el de categoría de instructor, lo que reafirma la opinión de que es un grupo relativamente joven, capaz de incorporarse a la producción investigadora manteniéndose correspondencia entre los años de servicio con su proceso de ascenso universitario a través de una investigación continua.
  • Al lado de esto, es interesante apreciar que más de la mitad tienen maestría, incrementándose en los últimos dos años la realización de trabajos de investigación individuales y grupales. Sin embargo es también cierto que la mayoría de ellos se dirigen a satisfacer necesidades de trabajos de grado, trabajos de ascenso a nivel de maestría y doctorado. Se pone de manifiesto que muchas de las investigaciones realizadas, no tienen vinculación con la labor investigadora institucional, en la cual debe estar comprometido el desempeño académico.

De los profesores que terminaron trabajos de investigación, fueron realizados en forma individual, siendo empleados para trabajos de ascenso o como trabajos de grado, lo que evidencia la costumbre de realizar los mismos de forma individual solo con fines de obtener un grado, llámese al mismo, pre grado, post grado o doctorado

  • La distribución del tiempo de los profesores es significativo que un alto porcentaje lo dedica a la docencia, lo que permite inferir que más de la mitad de los sujetos de la muestra lo dedican a la actividad docente.
  • En la aplicación del cuestionario arrogan como resultado que más de la mitad de los profesores han realizado investigaciones, lo que evidencia la disposición a realizar investigaciones, al existir un aprendizaje previo. .
  • En el contexto de la creatividad productiva se observa una baja frecuencia con la que los profesores realizan actividades de investigación tales como la realización de ponencias y publicación de artículos. La frecuencia es mayor en la participación en asesorías de trabajos de grado, tal vez por ser considerada como una actividad inherente al quehacer académico.

Se observa claramente que en el trabajo semanal tiene mayor dedicación hacia las actividades de docencia, en comparación con las actividades dedicadas a la investigación.

Un alto porcentaje de los profesores, desarrolla los trabajos de investigación en un tiempo que oscila entre uno y tres años.

De las áreas temáticas mas investigadas se refieren a la Gerencia Educativa y Proyecto Comunitario, resultado que es congruente con el tipo de investigación que se esta desarrollando en las instituciones de educación superior, dirigido a la solución de problemas de tipo social, que le permitan vincularse con la comunidad.

  • Los profesores que culminaron su trabajo de ascenso para el año 2.000, podría pensarse en incluirlos en la conformación de grupos multidisciplinarios de investigación.
  • De acuerdo con los razonamientos que se han venido esgrimiendo se puede deducir que, si bien los profesores han venido realizando investigaciones en los últimos años, la producción investigadora no resulta elevada. Se puede inferir que no existe un compromiso de la función investigadora que lo identifique con el desarrollo institucional, que es lo que permite evaluar la productividad en cada universidad.
  • Como causas para no investigar, algunos señalan la falta de tiempo y, otros indican que las responsabilidades del cargo impiden que puedan realizar investigación. También es indicativo que señalen que la institución donde laboran no les da la facilidad para realizar investigación, por lo que se puede inferir que no todos los docentes están interesados en realizar carrera académica.
  • Por otro lado, existe la disponibilidad interna de cada uno de ellos para realizar investigación, ya que más de la mitad de los profesores tienen expectativas y deseos de realizar investigaciones, estableciendo las formas en que ellos mismos pueden incrementar la motivación que los estimule para realizar trabajos investigativos.
  • Además, el análisis de la FODA, viene a confirmar la necesidad de estructurar una organización que permita canalizar e integrar las necesidades sentidas por los profesores, facilitando un nivel de capacitación profesional y la estimulación de integración de equipos autodirigidos que permita aumentar la productividad investigadora de los profesores por un lado, y, por otro de mejores trabajos en calidad por parte de los estudiante.
  • Por otra parte es interesante observar que un alto porcentaje tienen información de lo que es el Consejo Barinés de Investigación y Desarrollo, estando dispuestos a participar en las actividades desarrolladas por el Consejo. Se da consistencia a esta opinión al considerar casi la mitad de los profesores que el objetivo de la organización es promover, fortalecer, incentivar y ampliar la investigación en los Institutos de Educación Superior de la Región y otros tantos consideran que está dirigido a la capacitación del personal docente. Se pudiera afirmar que se refleja una inquietud por la actividad investigadora, estando dispuestos a desarrollar trabajos en equipos, motivados por el funcionamiento del COBAIND.
  • Igualmente entonces, atendiendo a las opiniones emitidas en las diferentes reuniones del Consejo se evidencian, el sentir de los participantes del Consejo en la motivación para continuar desarrollando actividades proclives a la creatividad productiva de trabajos de investigación y el continuar consolidando la relaciones instituciones en beneficio del entorno socio productivo.
  • Con respecto a las opiniones emitidas en prensa, en un discurso de apoyo y aceptación por las actividades que está realizando el COBAIND, se evidencia la aceptación social e institucional que ha desarrollado el Consejo en un esfuerzo por mantener unas relaciones motivantes, creativas y productivas entre las instituciones de educación superior.
  • Las opiniones emitidas por los protagonistas del proceso en estudio y analizadas en el los registros, evidencian la conformación de un mundo significativo, que ratifica lo sustentado por Morín en cuanto a la construcción de un modelo sistémico, complejo y representativo de realidad afectada por los procesos de la dinámica social multidimensional. Estas opiniones ratifican la efectividad de la organización como modelo de estimulo a la productividad investigadora e integración inter institucional.
  • En el marco de las consideraciones anteriores, tanto en lo que respecta a la productividad investigadora e integración inter institucional de carácter nacional, visto en la primera parte del presente, como en lo que respecta condiciones exitosas que caracterizan el funcionamiento de la organización llamada COBAIND, adquiere relevancia y ratifica la creación y continuidad del mismo. Así lo confirma lo expresado por Rosa Mireya de Gugig, secretaria permanente del C.N.U. al afirmar que es un aporte importante para el desarrollo de la Educación Superior. Ello representa una vía importante hacia la superación de los problemas que en la actualidad confrontan los profesores para sentirse estimulados y motivados a realizar trabajos de investigación en equipos autodirigidos, enmarcados en el ámbito institucional.

En esta dirección se canaliza la propuesta que se presenta como producto de la investigación acción realizada.

RECOMENDACIONES

Después del análisis e interpretación de los resultados obtenidos y tomando en cuenta las conclusiones antes señaladas, surgen algunas recomendaciones de carácter general, que se estima deben ser consideradas por los dirigentes de cada institución de educación superior, en aras de propiciar mejores condiciones para el desarrollo de la investigación

Dar a conocer al personal de las instituciones participantes en el Consejo los resultados de la presente investigación, de tal manera que sea posible ofrecer una visión sobre el estado actual de la práctica investigadora por parte de los docentes de cada institución. Esto podría contribuir a un proceso de autoanálisis y autorreflexión sobre su rol de docente investigador.

Considerar la disposición del personal docente de participar en la conformación del Consejo Barinés de Investigación y Desarrollo y, en función de ello promover actividades de investigación cuyo desarrollo atienda a las motivaciones personales y a los intereses de las áreas de investigación de cada una de las instituciones participantes.

Incrementar el tiempo de dedicación a los docentes, a tiempo completo y medicación exclusiva y así proporcionar un espacio necesario para el desarrollo de sus actividades de investigación.

Generación de ambiente en donde los profesores discutan los problemas y los logros de los distintos grupos que conforman la pluralidad y diversidad de pensamientos y, al mismo tiempo, se entere y difunda, las nuevas contribuciones de las ciencias, las humanidades y las artes. En un sentido muy limitado, parte de estas labores se han enmarcado en los órganos de difusión cultural, restringiéndose a la promoción sólo ocasionalmente de la cultura, la ciencia y la técnica. Adicionalmente, estas actividades se conciben independientes del currículo y no se toma en cuenta cómo inciden en la buena formación, adquisición de valores y motivación de los profesores de educación superior.

En tal sentido, se recomienda la integración de las áreas planteadas en la propuesta al desarrollo profesional de los docentes de las instituciones de educación superior del área de metodología de la investigación. En efecto, se recomienda la formación de un educador que además de manejar los contenidos inherentes a su disciplina, sea una persona crítica, independiente, con capacidad y habilidad para la toma de decisiones de manera acertada y oportuna

Se plantea una intensa y sugerente relación entre las actividades de investigación y docencia, a fin de nutrir los procesos de creatividad productiva de trabajos, y mantener los criterios de actualización que vayan a la par con los avances científicos, tecnológicos y humanísticos.

Emprender un plan de acción en el marco del COBAIND, tendiente a propiciar la apertura de nuevas líneas de investigación, en función de procurar alcanzar niveles de excelencia en la práctica investigativa.

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Oscar Antonio Martínez Molina

Nació en San Cristóbal, Estado Táchira, Venezuela, el 12 de Octubre de 1.952. Egresó como Licenciado en Educación Mención Orientación Educativa y Profesional (ULA, Extensión Táchira). Doctor en Educación Mención Suma Cum Laude (Universidad de Málaga, España), Magíster en Ciencias de la Educación Superior, Mención Andragogía (Universidad Nacional Experimental de los Llanos Ezequiel Zamora). Fundador del Consejo Barinés de Investigación y Desarrollo (COBAIND) www.geocities.com/cobaind2001, Orientador de Educación Media y Profesional por dieciséis (16) años, Orientador en la Universidad Nacional Abierta (UNA) por seis (6) años; Coordinador de la Unidad Académica del Centro Local Barinas de la UNA por cinco (5) años; Coordinador del Centro Local Barinas de la UNA por nueve (9) años; Coordinador del Centro Local Mérida de la UNA por año y medio; Coordinador del Vicerrectorado Académico de la UNA, para la Implantación de los Ajustes Curriculares en los Centros Locales por un (1) año. Representante profesoral ante el Consejo superior de la Universidad Nacional Abierta. Miembro de la Comisión que elaboro el Proyecto de Educación Regional del Estado Barinas. Tiene varias Investigaciones sobre Investigación acción, motivación para la productividad investigativa, Educación para el Trabajo y Orientación Vocacional, y comunicación en línea. El trabajo realizado para ascender a Profesor Titular, mereció la Mención Publicación. Actual Vice Rector Académico de la Universidad Santa Inés, en Barinas.

País: VENEZUELA.

Ciudad: BARINAS.

Fecha del Trabajo: 01 de septiembre del 2004

Partes: 1, 2
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